Amar al ser que mas odie. [SesshoumaruXInuyasha]

Inuyasha Fanfiction.

« Older   Newer »
 
  Share  
.
  1. Mitzume Naye
        +4   +1   -1
     
    .

    User deleted


    Amar al ser que mas odie.



    Capítulo 1.- Descubriendo

    Odio como me hablas
    Y tú forma de conducir.
    Odio tu corte de cabello
    Y lo que llegue a sentir.
    Odio tus espantosas botas
    Y que me conozcas bien.
    Te odio hasta vomitar
    Que bien va a rimar
    Odio que sepas pensar
    Y que me hagas reír.
    Odio que me hagas sufrir
    Y odio que me hagas llorar.
    Odio tanto estar solo
    Que no hayas llamado aun,
    Pero más odio que no te pueda odiar
    Aunque estés tan loco,
    Ni siquiera un poco
    Lo he de intentar.



    ¿Cuánto tiempo ha pasado? No mucho, eso creo, pero aun lo recuerdo bien.
    Desde que conozco a ese ser siempre le odie: su sangre, esencia, su mirada, su raza… ¡todo lo odio en él!

    Pero lo que más detesto es como se estremece ante mis caricias. No soporto el sabor de sus labios, su suave piel. Lo que más me atormenta y me llena de rabia es que logró cautivarme, enamorarme.

    Pero sobre todas las cosas; ¡Odio que no lo pueda odiar!

    Todo comenzó no mucho tiempo atrás. Tras la muerte de Naraku, al instante de esta, rompió aquella valiosa perla, haciendo que, Inuyasha, mi medio hermano emprendiera su búsqueda para recolectar todos los fragmentos.

    Yo, por mi parte aun buscaba su muerte.
    -
    -
    -
    El día seguía su curso, Inuyasha y yo habíamos peleado hace unas cuantas horas, como de costumbre, mi necedad y las ganas de no dejarle vivo hicieron que lo buscara de nuevo. Tras un largo caminar lo encontré; solo, recargado en un árbol curándose las heridas que le había hecho; la más afectada el pecho, su torso desnudo y su aroma cambiaron la expresión de mi rostro, quedando confundido. El fiel sable estaba lejos de su alcance, dejándolo completamente desprotegido. Avancé por inercia, y este fue mi error, ya que delató mi posición; nos miramos en silencio, al principio por sus ojos miel atravesó el miedo el cual muy hábilmente cubrió para decir:


    - ¿Qué es lo que quieres Sesshoumaru?- reclamó mientras cambiaba su expresión por una violenta, pero ¿en realidad era así? No lo creo, tal vez intentaba engañarme, pero en esos instantes mostraba más temor que furia.

    No contesté, no tenía por qué, más bien no sabía que quería. Una extraña fuerza se apoderó de mí y sin darme cuenta me encontré hincado ante él, coloqué mi mano sobre la herida de su pecho, acariciado su suave y blanca piel; que era como la misma seda.

    Al instante intento alejarse de mí y una vez más ese extraño impulso me hizo retenerlo; deteniéndolo por la muñeca, con una de mis manos, y tomando con fuerza su barbilla con la otra.

    Sigo preguntándome ¿qué pasó por mi mente en ese momento? Y sigo sin tener la respuesta; lo único que entendía era como me cautivaba su despreciable esencia. De un momento a otro me acerqué lentamente a su rostro, y me vi disfrutando aquellos labios cereza que parecían un manjar divino.

    La inicial disputa por zafarse de mi agarre se transformó en una impasible quietud; la cual revelaba su sorpresa ante mi proceder, aprovechándome de esto profundicé el beso; haciendo una atrevida entrada a su boca, acariciándola, buscando con mi lengua la suya.

    Estaba seguro que él estaba igual de confundido que yo; no entendía mi comportamiento.

    Un nuevo olor en el ambiente me alertó, alguien se acercaba, no quería que me vieran, no así humillado ante mis extraños deseos…no comportamientos. ¿Cómo pude rebajarme tanto?

    Me separe un poco de él y mire sus ojos los cuales denotaban incertidumbre. Por un acto reflejo acaricie sus labios suavemente con mi dedo para después levantarme y de nuevo mirarle con indiferencia, di media vuelta para emprender la, aunque me cueste decirlo, huída. No había avanzado mucho cuando la voz de Inuyasha me detuvo.

    -¿Pero qué demonios fue eso Sesshoumaru?-no respondí, ni yo sabía-¿por qué lo hiciste?-su voz sonaba enojada, pero confusa-, prefiero que me mates antes de que repitas algo así-me reclamaba furioso pero ni aun así hizo el menor intento para levantarse y atacar.

    Debo reconocer que en verdad estaba enojado el híbrido, eso no me importaba, aunque esas palabras sólo me hicieron enfadar, gire la cabeza un poco para poder mirarle.

    -¡Calla Inuyasha!- cerré los ojos para terminar lo que le diría-¿matarte?-me gire de nuevo para no verlo, para no desearle de nuevo. Y dándole la espalda le dije-sería un desperdicio.

    Reanude mi camino, con el firme propósito de alejarme de ahí, no recibí más reclamos de Inuyasha sólo se quedo ahí, sin hablar, a mi parecer no sabia que decirme ni que hacer.

    Mientras tomaba mi camino para encontrarme con mis acompañantes una duda cruzo por mi mente una duda que me lleno de confusión... ¿qué había hecho?.

    Capitulo 2.- ¡Maldita confusión!

    A ti que habitas
    en los confines de mi ilusión
    deja que la luz de mi corazón
    sea tu guía
    Anímate y hallaras....
    La dulce palabra que te seduzca
    El suave éxtasis de la más pura pasión
    El abrazo fuerte de fuertes brazos
    Ese beso que estremece y enamora
    La caricia que empieza en tu rostro
    y rueda asta el alma


    Mi mente era un escenario confuso; yo el gran Sesshumaru ¿rebajándose a ese grado? ¿Me…gustó? ¡No!-me dije-eso jamás, él es…débil, fastidioso y ¡yo lo odio! ¿O no? Suspiré exasperadamente, y apresuré mi andar. ¿Qué siento?-me repetía incansablemente-lo cual me llevaba a otra pregunta no muy alentadora ¿se puede sentir algo por el ser qué más odias?

    ¿Cuánto tiempo llevaba en mi letargo? No lo sé, pero no planeaba salir de él en un buen tiempo. Ni siquiera las, comunes, peleas de Rin y Jaken me distraían y eso que no estaban muy lejos de mí, ellos se encontraban pescando junto al rio y yo sentado bajo un gran árbol. La suave brisa de la tarde mecía mi pelo, más no mis pensamientos, esos estaban firmes hacia un punto; el beso, la calidez de su ser, su piel tan… ¡No, no, no!-me repetía una y otra vez-esos pensamientos nos estaban bien.

    Escuché como se aproximaban Jaken y Rin, pasaron de largo, tan solo dedicándome una mirada de reojo; para ellos, seguía siendo el mismo, de presencia fuerte, mirada atemorizante, de carácter impasible…pero yo, ya no estaba seguro.

    ¿Yo, confundido? ¿Cautivado por un ser tan…bajo? Esa maldita duda me atormentaba. Yo el gran Sesshoumaru no podía sucumbir a emociones tan humanas. Una idea atravesó mi cabeza, cual rayo atraviesa las nubes. ¡Mataría a Inuyasha! Sí, eso haría, destrozaría su cuerpo, y lo mandaría al otro mundo, lejos donde no me perturbara-me dije tratando de convencerme a mí mismo, pero algo, muy dentro de mí se negaba a aceptarlo; algo en mí sólo quería tenerlo, su cuerpo, su alma, a él, todo doblegado a mi voluntad.
    -
    -
    -
    Dos días han pasado desde lo ocurrido, he seguido el olor que desprende su ser, no sé por qué, no lo puedo evitar sólo quiero verle de nuevo.

    Pero hoy, esta noche de luna nueva, he perdido su esencia y no lo he podido encontrar…al intentar descansar Jaken, que me ha visto algo extraño estos dos días, como era de suponerse comenzó a preocuparse, me ha hecho varias preguntas y lo peor de todo es que esta noche comenzó de nuevo con su interrogatorio:

    -Señor Sesshoumaru ¿puedo preguntarle algo?- me hablaba con temor e indeciso.

    - ¿Qué quieres?- aun sin mirarle le conteste.

    -¿Puedo saber que le pasa amo bonito? Lo he notado confundido y muy distraído-y con un poco de recelo agregó-en sus ojos ya no se muestra esa frialdad ¿Qué le ha pasado amo Sesshoumaru? ¿Es que acaso gusta de alguna joven?

    No iba a responder a sus dudas y con mirada atemorizarte para dejarle todo claro lo amenacé-Jaken, qué tonterías dices ¿yo, enamorarme?-si, ¿qué demonios es eso? Me pregunté- No me hagas enojar, no tengo nada y si no quieres morir será mejor que dejes en paz.

    No pude evitar mirarle con rabia y enojo, su comentario no me había gustado para nada pero tenía razón en algo; estos días había estado confundido y muy distraído tenía que poner mi mente e ideas en orden o esto me traería consecuencias.

    Jaken se alejo, dejándome solo y yendo con Rin a jugar…No tenía mucho que habían empezado a hablar de cosas tontas, pero sólo me interesé en ella cuando mencionaron mi nombre, no necesité mucho esfuerzo (mi sentido auditivo estaba muy desarrollado) para saber lo que Jaken decía de mi:

    -Me preocupa el amo Sesshoumaru-dijo consternado- se ve muy…hm como decirlo-pensó la palabra- diferente ¿o no Rin?- cuestionó a la pequeña, la cual respondió rápida y fácilmente a las dudas de Jaken.

    -Señor Jaken abra los ojos el señor Sesshoumaru, lo más seguro es que, se ha enamorado-dijo como si fuera lo más normal- se nota mucho. Creo que viajamos mucho para encontrar a su ser amado.

    Jaken la miró dubitativo, no convencido y siguió insistiendo.

    -Rin, no crees que eso sería muy extraño- pero Rin no se rindió y siguió con la misma idea, convenciendo a Jaken y a mí.

    -Es que se le nota mucho.-

    Jaken se había quedado callado no creo que haya sospechado de quien. Y yo me pensaba en lo dicho por Rin, ¿cómo lo logro saber/intuir algo? Aun no lo sé, lo que sí era que no podía amar y menos a él; no por ser hombre, no por ser débil, sólo no, por ser mi medio hermano, mi rival.
    No siento nada por él y si la única forma de convencerme es matándolo lo haré.
    Lo único seguro en este momento y que, sin duda, repetiré es que esto es ¡una maldita confusión!

    Capitulo 3.- Luna llena

    A instancias de una respuesta cálida,
    una fantasía concebida en la perfección;
    sueño devenido en una realidad mágica,
    hoy tienes una cita con tu emoción:

    Un camino de pétalos de rosas,
    tenue luz de velas perfumadas,
    palabras dulcemente susurradas,
    ecos de una canción hermosa.

    Un listón rojo de tu corazón a mi lecho,
    cataclismo de emociones en el pecho;
    una escalera luminosa a la antesala del cielo,
    apasionado rincón donde perder los miedos.

    Una rosa suave que acaricie tus formas,
    cuerpos iluminados a la luz del deseo...
    Se satura el aire con sensuales aromas,
    la pasión que explota en el primer beso...

    ¡Dos hogueras y un sólo calor,
    dos corazones y un sólo latido,
    morir en un instante de amor
    para renacer en cada suspiro!

    Noche sin besos prohibidos,
    éxtasis de labios mordidos,
    y el amor prevaleciendo al deseo
    en un amanecer de abrazo eterno...

    Una invitación al Amor Sublime,
    de sueño perfecto a evento sagrado;
    un encuentro humanamente irrepetible,
    lacrado con tu sello sensual y mágico.




    He perdido la cuenta de los días que han pasado desde aquél encuentro. Lo que sí sé, es que hace poco volví a encontrar su esencia, al parecer no se ha dado cuenta de que ando siguiéndolo o simplemente me está ignorando. Y esto me enfurece y lo peor es que no sé por qué.

    La noche nos ha alcanzado demasiado rápido, apenas unos cuantos minutos antes el sol estaba brillando en el firmamento. Estoy impaciente, ansioso, confundido, ¡quiero verle! Por lo que, no resistiendo más, he decidido buscarlo y encontrarlo a como diera lugar esa misma noche. Me lo propuse-y como todo lo que me propongo, lo cumplo…

    Me dirigí hacía donde Jaken.

    -No quiero que ni tu ni Rin me sigan, ¿entendido?-le dije claro y concisamente.

    Jaken no entendía lo que pasaba y con su clásica preocupación hacía mi persona:

    -¡Pero señor Sesshoumaru, espere no!-gritaba desesperado, pero fue retenido por la pequeña mano de Rin.

    -¡Déjalo, Jaken! Al fin se decidió.

    Logré escuchar en un susurro el comentario de Rin pero no le hice ningún caso; sólo me dirigí hacía donde mi olfato me llevaba, a donde extrañamente quería estar. Tras caminar un rato, lo encontré, solo, como la vez pasada. Estaba sentado en un claro, viendo la luna, los rayos de la misma chocaban con su pelo dando la sensación de estar frente a un ser etéreo.

    Me acerqué con paso lento temiendo acercarme mucho y hacer que desapareciera, pero mi esfuerzo fue en vano ya que pisé una rama seca; logrando sacarlo de su ensoñación y que me mirara. Pensé que su agresión sería inmediata más no fue así, y debo de reconocer que me extrañó.

    -¿Qué quieres?-su pregunta me sacó de balance ¿qué quería? Ni yo sabía.

    -Matarte-eso fue inesperado de mi parte, pero no pensaba hacerle ver mi confusión, no podía.

    -¿Matarme?-se burló-pensé que sería un desperdició-me dijo citando mis palabras.

    Me molestó, sí y mucho, aunque no estaba seguro el qué; el no saber qué decir, hacer, pensar e incluso sentir o que me estuviera retando de manera tan directa.

    -No tientes tu suerte Inuyasha-le dije desafiante.

    -¿Acaso me estas retando?-el brillo de sed de sangre se prendió en su mirada junto con algo que no supe descifrar.

    -No, por hoy estas perdonado-dicho eso me retiré, al no saber que más decir.

    -No te irás así-grito para ponerse delante de mí con colmillo en mi cuello.

    Lo miré intrigado ¿qué no me iría? ¿Quién se creía para darme órdenes? Estaba a punto de atacarlo cuando, de nuevo, su presencia me perturbó, no había reparado en lo cerca que estaba de mi, podía sentir su respirar en mi cara, su aliento acariciaba mi rostro. Incitándome a besarlo de nuevo.

    -Ve como lo hago-aparté el arma de mi cuello, tratando de controlar mis malditos impulsos; que me decían que lo besara.
    -No, Sesshoumaru, no te irás, primero me explicarás ¿por qué nos estas siguiendo?-me desafió de nuevo con la espada.

    -No te sigo-mentiroso, me dije.

    -¿A, no?-me miró burlón, con un brillo juguetón el cual me hizo ponerme nervioso.

    -No-retiré de un manotazo el peligro de mi cuello, el cual salió volando, dejando, una vez más, expuesto a Inuyasha ante mí. Sin controlarme, de nuevo, me acerqué a él, aprisionándolo contra el árbol.

    -¿Q…qué quieres?-tartamudeó.

    -¡Vaya!-reí-. Se ha muerto lo valiente en ti-estaba muy cerca de mí, su peculiar aroma inundaba mis sentidos, turbándome.

    Y de nuevo, cedí ante mis deseos o debo decir impulsos; lo besé, no pude evitar la tentación de probar sus labios una vez más. Al igual que el anterior encuentro quedó sorprendido ante esto. No me importó, seguí con mi tarea de satisfacer estas ridículas ganas de él.

    De un momento a otro, me sorprendió participando en el beso, abriendo su boca para que yo entrara; no lo desaproveché, exploré, saboree y finalmente jugué con su lengua, todavía estaba tenso, lo podía sentir.

    Cuando estaba listo para dar otro paso, el cual ni siquiera sé cómo llegó a mi cabeza, el sonido de hojas rompiéndose me desconcentró, rompiendo el beso, y con esto ser consciente de lo que pasaba; Inuyasha estaba con los ojos cerrado recargado en el árbol, mi mano estaba en su cuello, en un gesto muy posesivo. El sonido se escuchaba más cerca de nosotros, por lo cual el abrió los ojos, la confusión y sorpresa, de nuevo, se asomaban por sus orbes doradas.

    Sin decir más lo solté y me alejé de ahí sin nada que decir; no sabía qué hacer, Inuyasha no dijo nada me dejó ir tranquilo. Llegué ya entrada la madrugada a donde Rin y Jaken, la luna llena estaba casi en el horizonte, me recosté en el árbol más cercano y con mis aturdidores pensamientos me dispuse a descansar.

    Capitulo 4.- Deseo

    Deja caer ese orgullo en el olvido
    Libera la emoción en sensual entrega,
    Y en el místico roce de la piel nueva,
    Hechizare suavemente sus sentidos

    Entrégate, mas no me des nada....
    Envenéname de ilusión controlada,
    Inúndame de la necesidad infinita
    De sentirme tuyo, de sentirte mió
    ¡Deja el deseo libre inflamando la piel
    y el amor salvaje se rinda a tus pies!

    Acércate, pero hazlo muy lentamente
    Dame un instante que dure por siempre
    ¡Brilla con ese brillo de lo inalcanzable,
    Deja de fluir de tu esencia lo más deseable,
    Ponle tu mágico e inconfundible sello
    Y mátame de pasión en un eterno beso!




    Tres días han pasado desde esa noche pero aun puedo sentir sus labios contra los míos, su lengua bailando a mi son.

    No de nuevo-me recriminé-no me puedo rebajar a querer disfrutar de alguien tan inferior a mi, lo odio, pero aun así quiero verlo, sentirlo de nuevo.

    Esa tarde me encontraba descansando cerca del río cuando note un aroma muy conocido, se acercaba, aun así no me moví ni decidí abrir los ojos hasta que escuche su voz:

    -¿De qué se trata todo esto, Sesshoumaru?-me veía con furia pero a la vez con cierta duda. Ni siquiera por esto hablé - ¡te estoy hablando!- gritó.

    - No tengo nada que responderte-me levante y al pasar por donde estaba le susurré con el mayor desprecio que puede-¡eres repúgnate!

    ¿Por qué dije eso? Ni yo lo entendía solo quería hacer de esa mi verdad. Seguí caminando, pero su comentarios mi hizo detenerme abruptamente, a pesar de ser un susurro, uno burlón.

    -Si yo soy repugnante... ¿qué eres tú?

    No me dejaría humillar por alguien así, simplemente ¡No por él!

    -¡Ja! Yo soy Sesshoumaru, y tú… tú sólo eres una simple basura.

    Me dispuse a continuar con mi camino, pero una vez más fui detenido por su proceder.
    Desenfundó a Colmillo de Acero, cegado por la ira comenzó a atacarme sin control. No tenía planeado dañarlo, por ahora, sólo esquivaba sus ataques.

    -¡Maldito, ya me hartaste morirás!-me gritaba entre ataque y ataque.

    -No lograrás vencerme, Inuyasha, entiende, un ser tan inferior a mi como lo eres tú, ¡no logrará hacerme daño!

    Siguió atacándome con desesperación, moviendo de una manera un tanto torpe a Colmillo.

    -¡Eso crees tú! ¡Maldito, deja de escapar!-me gritaba ante mi reticencia a pelear.

    Por un momento su aroma cambio; era tan parecido al de mi padre y al mío, soltó a colmillo de acero y su mirada se volvió desconocida para mí; sus ojos se tornaron rojos y comenzó a atacarme con sus garras que intentaban llegar a mí cuerpo, y matarme.

    Pero, por más que se esforzara y por fuerte que tratara ser; jamás me vencería.

    -¿Qué no entiendes?- le decía mientras mi paciencia iba muriendo ante cada embate de su espada-¡Jamás me vencerás!

    Lo golpee; tan fuerte que cayó inconsciente al suelo. Pensé en dejarlo ahí y marcharme pero no pude una vez más mis no-entendidos-deseos-impulsos me hicieron quedarme a su lado; lo observaba a distancia, admito que me sentía tonto, es como si custodiara su sueño.

    Empezó a moverse y lentamente abrió los ojos; me miro sentando a tres árboles de él, intercambiamos miradas por un segundo y me levanté rápidamente.

    -Ya que has despertado me voy-le informé.

    Estaba por irme pero me retuvo con su voz.

    - Sesshoumaru, explícame ¿porqué no me matas? ¿Porque no me atacas? Por qué…-me gritaba exasperado y enojado-… ¿por qué todo esto?-hizo una pausa-¿qué es lo que tramas?

    Por un momento me quede en silencio pensando.

    -Matarte en un principio-dije simplemente-, eso era lo que quería pero ahora he cambiado de parecer…- el silencio se hacía incomodo así que lo rompí-Ya que como te he dicho matarte seria un desperdicio.

    Me quede callado y le di la espalda mirando a ningún lado.

    -Lo del otro día, fue sólo porque…-empecé a explicar, cosa que me fastidió nunca lo había hecho-¿por qué Sesshoumaru?- Me preguntaba a mí mismo, y como siempre que formulaba la pregunta no encontraba la respuesta.

    -¡Habla de una maldita vez!- me exigía.

    ¿Cómo responder a algo que ni tú mismo entiendes?-No tengo porque responderte-fue mi pobre argumento.

    Y como era de esperarse no te diste por vencido.

    -No me importa lo que hagas-se detuvo-¡sólo deja de meterte conmigo!

    ¿Meterme con él? ¿Dejarlo en paz? Tantas cosas surgían con estas preguntas: ¿por qué seguirlo? ¿Qué me pasaba? ¿Qué sentía? Yo, el gran Sesshoumaru, ¿podía sentir?

    -Me das lástima Inuyasha-¿por qué le decía eso? No lo sé, no sabía nada, ni siquiera me reconocía.

    -Lastima, ¿eh?-lo escuché repetir.

    Y sin previo aviso me volvió a atacar, esta vez más fuerte, como si demostrara algo.

    Empezamos una de nuestras tantas peleas, sólo que esta vez me negaba a dañarte más de la cuenta.

    -Me has ocasionado varios problemas-me dijo de repente-Miroku nos ha visto.

    Así que el aroma que siempre interrumpía era del tal Miroku. Este pensamiento me distrajo y en un abrir y cerrar de ojos me encontré que Inuyasha estaba encima de mí con el sable en mi garganta.

    -Pagaras todo lo que me has hecho, hermanito.

    ¿Hermanito? Eso fue suficiente para que la ira se manifestara en mí; me deshice de su agarre intercambiando posiciones, una de mis manos apresaba sus muñecas y la otra se cerraba en su cuello.

    -No lo vuelvas a repetir-hice presión en su cuello-. Tú y yo no somos hermanos.

    Intentaba liberarse, se movía bajo mi cuerpo, haciendo que la furia se apagara, haciéndome notar de nuevo su presencia. Lo miré detenidamente sus ojos estaban cubiertos por el velo del odio, su rostro se distorsionaba en una mueca de desprecio. Estudié cada rasgo en el, sus ojos, su nariz y…sus labios, los cuales odiaba, sí, ¡odiaba! Ejercían una extraña fuerza sobre mis deseos y sin darme cuenta me vi tentado una vez más a hacerlos míos.

    Esta vez forcejeaste, intentabas a toda costa detenerme; pero como la vez pasada sólo al principio, después te hiciste activo en él, permitiendo adentrarme. No sé como una cosa llevó a la otra, no sé ¿qué demonio de apoderó de mi ser? No lo sé, lo único de lo que fui consiente fue del contacto de nuestras pieles al desnudo, de nuestros cuerpos guiándose por un mismo camino: El Deseo.

    Desperté ya entrada la madrugada, turbado, desorientado, no reconocía el lugar lo único que sí era ese olor, el mismo que me era tan desagradable pero que ahora estaba impregnando en mí, miré alrededor y te vi recostado en el pasto. Te odie en ese momento, te odie por el simple hecho de haber despertado mis deseos. Con el sentimiento de repugnancia hacia mí; por caer tan bajo y a ti; por ser mi medio hermano, enemigo…tantas cosas que detesto, me vestí y me alejé.

    Yo, el gran Sesshoumaru había perdido la razón, y qué vulgar competidor había ganado: mi deseo hacía ti.

    Capitulo.- 5 Enterrando

    Si todo pensamiento me sabe a tu presencia
    Como hago dímelo para no extrañarte
    Ya es imposible disimular tu ausencia
    Si de esta agonía nada puede consolarme
    A donde están la magia y la fantasía
    A donde el poderoso anillo con la escritura
    “esto también pasara”
    Nadie en esta tierra libera mi alma
    De la inquietud que la aprisiona
    Cuando me faltas, cuando no estas.



    Los días habían sido algo indescriptible en mi, no entendía qué me pasaba, pero había descubierto lo que sentía; estaba extrañamente enamorado de ese ser híbrido. Me volvía loco, su olor, su sabor ¡todo!

    Ni Jaken ni Rin se acercaban a mí, permanecían en la distancia mirándome con recelo; mi humor de por sí no era el mejor y últimamente dejaba mucho que desear entendía sus ganas de vivir.

    Necesitaba poner en claro las cosas, hallar una razón al por qué de esto y sobre todo quería verlo de nuevo. Estuve pensando por varias horas qué haría y tras tomar una resolución salí a su encuentro.

    Está ves, a pesar de estar siguiéndolo, me resultó difícil encontrarlo, pero por fin lo hice; estaba sentado en un árbol mirando el ocaso. Estuve un tiempo mirándolo.

    -¿Te esconderás por siempre?-su pregunta me sobresaltó.

    -No me escondo.

    -No lo parece-bajó del árbol para ponerse delante de mí.

    Nos miramos retadoramente, alguien tenía que ceder.

    -¿Qué quieres?-por fin cedió él.

    -De ti, nada-por más que quisiera no podía decir nada que no fuera agresión.

    -No me digas-su voz sonaba incrédula.

    Volvimos a quedar en silencio, caminó hasta la orilla del rio, y me vi siguiéndolo.

    -Yo…-empecé.

    -No me interesa-cortó de tajo-no sé qué rayos pasa contigo, qué rayos te pasa conmigo, sólo te diré que no soy un ser estúpido del que te puedas aprovechar.

    -¿A no?

    Me miró furibundo.

    -¡No!

    Me gustaba provocarlo hasta cegarlo de furia.

    -No lo parece-sé que ese golpe fue bajo, pero no me importó.

    ¿Cómo terminó todo? El y yo en una pelea a muerte, la cual de un momento a otro empezó a tener matices de una enigmática seducción, atrayendo nuestros cuerpos, incitando a celebrar la danza de nuestros primitivos instintos.

    La batalla nadie la ganó, ni él ni yo; los dos perdimos.

    Me sentía sucio, asqueado, una vez más había cedido ante mis instintos, una vez más caía en las redes de la lujuria. Me retiré del lugar con mi orgullos pisoteado.

    -
    -
    -

    Esta noche lo he visto de nuevo, a lo lejos, con sus compañeros de viaje. He tomado mi decisión, después de mucho pensarlo.

    Caminé corriente abajo, yendo contra el aire, para así desplegar mi aroma y él viniera.

    Me senté en una enorme piedra, esperando la llegada y el inminente final. No pasó mucho tiempo, cuando arribaste; miré y estabas unos metros delante de mí, alerta, expectante.

    -Sé que estas aquí, ¡sal!-me ordenabas.

    Me puse de pie y di unos cuantos pasos saliendo del árbol que me tapaba.

    -¿Qué demonios quieres?-me exigías.

    Lo miré burlón, con deseo. Me acerqué, haciéndolo retroceder ante cada paso mío, era el juego del gato y el ratón; él era el ratón.

    No dije nada, esta vez tomé la iniciativa; después de todo había tomado una resolución. Caí por voluntad propia a un abismo de placer, no me arrepentía. Tras una explosión de inmensas sensaciones, cuando estaba satisfecho decidí hablar.

    -¿Por qué lo has permitido?-quise saber.

    -¡Ja!-fue su simple respuesta.

    Antes de actuar necesitaba su razón.

    -Explícate-ordené.

    -No sé por qué hago esto-se levantó-¡No lo entiendo!-explotó-¡Yo te odio! ¡Tú me odias!

    -Eso es verdad-concedí.

    -¡Claro que lo es!, desde que recuerdo hemos sido enemigos.

    -Sólo puede decir que esto es confuso para mí-confesé mientras me acercaba a él.

    Se quedó inmóvil en su lugar, había estado trazando círculos por el lugar, extrañado, aprovechándome de esto lo acorralé en un árbol. Lo besé, me di ese lujo. Me empujó.

    -¡¿Qué quieres?!-me preguntabas desconcertado.

    -A ti-sonreí ante tu perplejidad y aprovechándome de esto lo acorralé de nuevo, miré las orbes, mar de confusión. Te besé de nuevo. Temblaste bajo mi caricia, sonreí en tus labios, estaba listo.

    -¿Qué…?-fue lo que pudiste decir al sentir mi espada atravesar tu ser, me miraste más confuso que nunca-¡N..no entiendo!

    Empuje un poco más el arma dentro de ti, provocando que sangre saliera de tu boca.

    -No es necesario que lo hagas-atravesé por completo tu cuerpo, escuché tus últimos suspiros de vida, tu agonía en la oscuridad. Vi como se enterraba tu alma en la penumbra de la noche.
    -
    -
    -

    Hace años que sucedió esto, es la primea vez que estoy aquí desde esa vez, una sencilla lápida resguarda tu mortal cuerpo, sepultado descansas. Acabé con tu vida, sí, lo hice pero esto no me funcionó del todo, aun sigo experimentando ese extraño sentimiento hacía tu despreciable ser. No entendiste en ese momento y no creo que lo hicieras nunca; simplemente no podías vivir, no mientras fueras mi debilidad, y simplemente no porque eras el ser que me hacía sentir dos cosas a la vez; odio y amor. Odio por ser mi eterno rival, por haberme quitado lo que por derecho me pertenecía y amor, puede resultar extraño pero mi afán de acabar contigo derivó en tan humano sentimiento, pero nadie lo sabe ni sabrá. Pagaste caro tu crimen.

    Tras mirar la tumba me dispongo a continuar después de todo contigo se ha sepultado; vergüenza, odio, traición e incluso, espero, el amor.

    Sólo me queda continuar con mi vida, tratando de olvidar lo sucedido y cuidando no volver a repetirlo.

    Fin.



    Muchas gracias por tomarse la molestia y el tiempo para leerlo ^ ^

     
    Top
    .
  2. Kuromi-xan
        +1   -1
     
    .

    User deleted


    O_O me saco el sombrero ante ti~~ muy buen fic, esta muy bien desarrollado y ni hablar de los sentimientos, te llegan muy bien, y el final... bueno, no es el mas feliz, pero no por eso es malo, al contrario, le queda muy bien. Felicitaciones, espero que escribas más de la pareja *3*
     
    Top
    .
  3. LuZFanFics
        +1   -1
     
    .

    User deleted


    Esta realmente bueeeeeeeeeeeeeno!!! triste el final, la mayoria de los fics qu lei terminan con un mal final!! realmente me gusta los fics de ellos dos asi que espero el proximo, pero com un final feliz!!!
     
    Top
    .
  4. Atolotl
        +1   -1
     
    .

    User deleted


    (La audiencia se levanta ya aplaude)
    Una hermosa tragedia que despertaria la envidia del mismisimo Shakespeare.
     
    Top
    .
  5. marimo_chuan
        +1   -1
     
    .

    User deleted


    No tengo palabras para describir lo mucho que me ha gustado este relato, cosa que me avergüenza, porque te mereces todos los elogios posibles por haber escrito una historia tan bella. Felicitaciones, tienes un vocabulario exquisito y una forma de narrar maravillosa.
     
    Top
    .
  6. umiko-x-chan
        +1   -1
     
    .

    User deleted


    Demonios o.o!!! Estuvo genial!! El primer fic yaoi que leo de inuyasha, y no me arrepiento de haberlo leído!! *-*!, ademas que como soy una masoquista, amo los finales tristes, por que? por que son mas realistas, me encanto la historia! espero mas fics tuyos!
     
    Top
    .
  7. 691396
        +1   -1
     
    .

    User deleted


    O.O ohhhhhhhh
    estuvo gfenial, me encantan las historias en la que alguno de los personajes principales mueren
    estuvo excelente, realmente me gusto
     
    Top
    .
  8. yuki_skarlet
        +1   -1
     
    .

    User deleted


    realmente me conmovi con tu historia :=BUABUA:
    esta serie fue el primer anime que vi
    me encantaria leer otro de tus fic
     
    Top
    .
  9. Yaoi love
        +1   -1
     
    .

    User deleted


    Woao!!! Esta excelente!
    La manera como vas describiendos los sentimientos de Sesshomaru es genial
    El final fue desconcertante, pero aun asi espectacular
    Es sencillamente sublime, sigue escribiendo mas fic me encantaria leerlos. :)
     
    Top
    .
  10.     +1   -1
     
    .
    Avatar

    Adict@ al Yaoi

    Group
    Clan Vampiro
    Posts
    2,329
    Location
    Alemania

    Status
    Anonymous
    Dios que buen fic y expresaste los sentimientos muy bien.
    Sesshomaru es un idiota por no entender el amor que tenía por Inuyasha y además le mató. Snif snif snif. idiota
    Me encanto.
    Mata ne.
     
    Top
    .
  11. acere
        +1   -1
     
    .

    User deleted


    excelente, pero un final triste
     
    Top
    .
  12. Rei_zero
        +1   +1   -1
     
    .

    User deleted


    Wow!!! Me encanto. Me fascina la manera en que describes todo me encanta, me encanta wiiii!!.
    Rei_zero.
     
    Top
    .
  13.     +1   -1
     
    .
    Avatar

    La oscuridad es mi camino...las tinieblas mi trono y tu agonia mi aliento

    Group
    Escritor intermedio
    Posts
    460
    Location
    Mexico

    Status
    Offline
    Me ha gustado la historia, ademas de que esta bien redactada, cosa que pocos logran.

    Te felicito.

    Pobre Inuyasha, no me gusto su muerte. quiero llorar.
     
    Top
    .
  14.     +1   -1
     
    .
    Avatar

    The Ineffable Plan

    Group
    100% Uke
    Posts
    1,393
    Location
    Chile

    Status
    Offline
    ...veamos.... e-es increible comoescribes, me encanta es como, si, estubiera leyendo algun libro de los escritores famosos, pero no es una escritora, y es yaoi.

    ademas; la pareja me encanta, son medio ermans, se odian, son....son...son...implemente ermosos.

    tambien es el primer finc yaoi de inuyasha que leo, me da gusto que alla sido tan maraviloso fnc el que me alla abierto las puertas a el yaoi en Inuyasha.

    gracias


    sayoooooooooooooooooooooo
     
    Top
    .
  15. Kaito Scarlet ~ ©
        +1   -1
     
    .

    User deleted


    Muy buen fic, estuvo genial.
     
    Top
    .
21 replies since 27/7/2011, 18:27   3045 views
  Share  
.