la fidelidad de un hanyo (Nc-17)

-cuando te enamoras... nada te detiene, pero... ¿y si no eres correspondido?...

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  1. hikaru tamilla
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    Capitulo 4- sentimientos encontrados.


    Inuyasha seguía en el pozo aun mirando el vacio de las rocas. Aquella oscuridad que tal vez se le hacia infinita. La tristeza había una vez mas, tocado su triste alma solo para darse cuenta de que alguien le faltaba… su querida kagome.
    -me pregunto…¿Qué estaras haciendo ahora?. Decía inuyasha muy triste. Recogiendo a tessaiga decide nuevamente a irse.
    Mientras sus pensamientos vagan en el interior de su mente. Una gran bola rosa aparece de improviso… -INUYASHAAAAA- decía aquella voz… inuyasha al voltear logra ver a la gran bola rosa: ¡Era el pequeño shippo!
    Shippo comenzó a caminar a lado de inuyasha. El hanyo no quería mostrar tristeza hacia su amigo. Asi que trato de tener toda la cara serena mientras shippo le preguntaba el como esta, el que hacia y en donde estaban los demás.
    De pronto inuyasha al llegar a su casa, su rabia aparece cuando descubre a hakaku y a ginta comiéndose sus reservas de comida
    -MALDITO RABIOSOOOO EN DONDE ESTAS KOGAAAA!- decía eufórico inuyasha mientras de un lado a otro corria sin parar totalmente hecho una fiera.
    Koga había llegado a la aldea. Su mirada y su cabeza estaban observando el suelo. Mientras se quedaba pensativo, en lo que aquel anciano, le comento…
    Resulta que el sabio junji es un gran profeta. Uno de los demonios mas poderosos del mundo. Había llamado a koga por un gran peligro.
    -koga, el ser que mas amaras en el mundo, no será el que tú crees, porque aquel ser que cruzo a este tiempo… regresara…
    Y también…
    Hay un gran peligro entre los espejos…
    Tienes que tener cuidado…
    Koga no paraba de observar el suelo. La tristeza en su corazón estaba sumamente mal. De pronto unos gritos familiares lo sacuden por completo…
    MALDITO KOGA, OYE MI CASA NO ES UNA MALDITA POSADA PARA QUE TUS SIRVIENTES SE COMAN MIS COSAS…
    Koga se enojo mucho con ginta y hakaku por lo que inuyasha les conto. Apenados le pidieron una disculpa a inuyasha. Que este enojado la acepto. Finalmente la tarde estaba a punto de desaparecer, y aquellos guerreros estaban a punto de irse, no sin antes de despedirse de su jefe.
    -que le decimos a áyame-
    Descuida, estare bien. Asi que no deben de preocuparse. Dile a áyame que volveré, en cuanto mis deberes terminen. Y en cuanto al maldito ese, NO PERMITAN QUE EL SE ACERQUE A MI CUEVA.
    Los chicos aceptaron y se fueron tranquilos. Corriendo junto con los demás lobos.
    Koga al entrar a la casa, inuyasha lo miro muy enojado.
    -MAÑANA TE BUSCARAS TODO LO QUE TUS PULGAS TRAGARON HE?
    -si.
    De pronto lin aparece –señor inuyasha ya regreso el monje miroku!. – koga e inuyasha llegaron a la casa de sango. Y mientras se encontrado con seshomaru.
    -seshomaru, cuando llegaron? – decía inuyasha muy imprecionado
    -llegamos ayer idiota. Que acaso no nos estas mirando?
    -NO ME DIGAS IDIOTA – decía inuyasha con un tono muy enojado. Koga intento calmarlo un poco. – cállate inuyasha, no digas tonterías- finalmente el sake comenzó a inundar el ambiente. Miroku andaba muy feliz… mas feliz que hasta la borrachera se le empezó a acomodar. Incluso sango no aguantaba al pesado de su marido quien se tambaleaba una y otra vez…
    -sangoo….de…todas…las…mujeres que…(hig)he visto…. Tu me gustaaaaaaaaaasssssss-
    -si miroku, si…-
    Todos comían y se comenzaban a emborrachar, a ecepcion de seshomaru , quien al mirar todo el alboroto se salió, sin jaken, ya que también andaba muuuuuuy ….
    Koga también decidió salir un rato. El olor a sake le molestaba mucho y también le estaba dando un poco de nauseas. Sin embargo, una mirada de tristeza comenzó a inundarle su corazón. Mientras se quedaba pensando en su futuro. Que era aquello. Dentro de poco se iria y tal vez ya no regresara… pero también… dentro de poco kagome podría volver. Miraba la luna y las estrellas, ya estaba poniendo en claro sus sentimientos. Sentía un gran cariño por inuyasha. Y al parecer era extraño. No sentía un vinculo de amistad, sino de algo mas. Aquel sentimiento que sentía por kagome se estaba desvaneciendo. Y le daba paso a aquel cachorro con quien había compartido dos semanas. Pensando, recordando aquellas noches en donde dormía, en donde sonrreia, y en donde lloraba.
    De pronto, se escucho que las tinajas se calleran. Al voltear koga, logra ver a inuyasha tambaleándose por tener todas las tinajas de sake en la cabeza. Intentándose poner de pie aunque no puede. Koga logra ayudarlo a ponerlo de pie. Sujetándole de la cadera mientras el brazo izquierdo rodeaba su cuello. Sango salió al escuchar el escándalo de las tinajas.
    -me llevo al perro pulgoso sango, mañana nos veremos-
    Si, yo creo que miroku también dormirá muy bien aca.
    Koga salió del patio de sango. Arrastrando a un inuyasha muy ebrio. Sin imaginar que seshomaru los miraba sin mostrar ninguna exprecion.
    -no estoy …borrachooo…- decía inuyasha destorcionando su voz, mientras koga lo acostaba en aquella cama que el cachorro hizo: Eno envuelto en una manta. Cuando koga lo acuesta… inuyasha no se suelta de el haciendo que koga cayera con inuyasha.
    Koga se levanto un poco para observar a aquel hanyo perdido, sus ojos pesados mostraban confucion. Y su respiración olia a alcohol. Pero a koga no le importo nuevamente comparo ese sentimiento con el de kagome… no eran iguales, inuyasha estaba por encima de ella. Inuyasha a diferencia… observaba a koga tranquilamente. Le comenzó a tocar la cara. Aquello labios carnosos. Y mientras inuyasha tocaba aquellos labios, koga cerro los ojos por un momento. Quería sentir las manos blancas del cachorro mas aya de su boca. Comenzó. Koga no lo pensó dos veces… y le panto un profundo beso.
    Inuyasha sintió aquella saliva ajenta juntarse con la suya. Sabia bien. La calentura del sake hacia que inuyasha no pensara en lo que hacia… mientras koga seguía saboreando el sake de la boca del cachorro. No supo aguantarlo mas. Lo levanto de la cama y comezo a desvestirlo. Besarle el cuello. Lamerle aquel pecho que se estaba descubriendo. Inuyasha comenzó a gemir. Sentía una gran descarga eléctrica que se esparcía por todo su cuerpo. Pero koga lo sentía en su entrepierna. No podía aguantar mas lo desvistió completamente dejando expuesto su delicado pecho. Koga lo observo. Las mejillas del cachorro se mostraban muy rojas. Un hermoso color escarlata en aquellas dulces mejillas. Hizo que koga le besara con suavidad aquellas mejillas aquel mentón y aquel exquisito cuello. Aquellos hombros y aquellos pezones. Que comenzaban a exitarlo. Lamia aquellos pezones y los mordía suavemente. Inuyasha gemia un poco. Sentía mucho calor. Koga estaba exitado de pronto sintió un pequeño bulto en la entrepierna del cachorro. La toco y comenzó a masajearla… inuyasha comenzó a gemir, sus gritos se escuchaban tanto que a koga e empezó a besarle la boca para que se callara. La lengua choco contra la otra. Masajeándose ambas al no poder. Se sentía sumamente exelente. Estaba jugando mucho, mientras koga hacia lo posible para callarlo un poco. Mientras masajeaba aquel pedazo de carne en la ropa. Armado de valor decidió meter su mano al pantalón del cachorro. Gemia mas y mas. Agarraba la sabana fuertemente y se retorcía . la respiración era tanta que sin esperarlo mas… inuyasha se vino en la mano del lobezno.
    Koga sintió aquella sustancia blanca en su mano. La probo y al parecer le gusto. Puesto que empezó a inclinarse para meterse todo dentro de su boca.
    Inuyasha arqueo la espalda al sentír aquella boca que le invadió en su entrepierna. Mientras koga observaba aquellos espasmos que estaba dando. Parecía que hacia bien su trabajo. Koga no lo podía soportarlo mas. Se quito el taparrabo, levanto las piernas del cachorro y lentamente introdujo aquel miembro caliente en aquella pequeña y deliciosa entrada, estaba sumamente exitado, suavemente comenzó a moverlo. Lento, pausado, exquisito. Sentía la necesidad de hacerlo rápido. Pues inuyasha no paraba de gemir poco a poco empezo a aumentar el ritmo… hasta que finalmente ambos se vinieron. Koga hecho un gran gemido al sentirse finalmente tranquilo, después de que su semilla se regara en el interior del cachorro.
    Koga se recargo en el pecho del cachorro. Este no paraba de respirar. Se sentía sumamente cansado por aquella calentura que le había dado el lobezno. Finalmente y sin energias, inuyasha se quedo dormido.
    Esa noche koga no dejo de observarlo. De tocarlo. Aquel cuerpo de piel blanca y hermoso cabello plateado descansaba en aquella cama en donde por primer vez sintió el cuerpo de dos almas en uno. Finalmente koga lo había comprendido. Lo había visto, lo había sentido…

    Koga se había enamorado de inuyasha.
     
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31 replies since 10/8/2011, 05:29   6256 views
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