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hikaru tamilla
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Capitulo 9- el error de koga.
Los ojos de koga mostraban una rabia feroz. Tenia un gran dolor en el corazón, que no lo mostro con lagrimas sino con dientes. Sus ojos se hicieron pequeños al ver aquella caja que inuyasha abrazaba con mucho amor. Mientras la mirada de inuyasha comenzaba a tornarse asustada. Lentamente inuyasha se dirigió a tessaiga. lo agarro y lo empuño. Koga estaba hecho una fiera. Y al parecer no quería escuchar absolutamente nada. Sin mas agarro a inuyasha, y lo hizo soltar la caja y a tessaiga. le beso casi sin reacción que inuyasha no podía safarse de un demonio completo como lo era el. Koga estaba intentando hacer que se relajara. Inuyasha no pudo poner resistencia. Es cuando koga lo agarra y se lo lleva lejos de la casa.
En una cueva oscura y sin ninguna presencia demoniaca, koga no paraba de hacer una tortura sumamente exquisita para el cachorro que ahora estaba convertido en un humano. Los gemidos de inuyasha eran tan altos que no tardaba en revolcarse como un perro. Arqueaba la espalda al sentir aquellos dientes en su glande. Masajeándolo y apretándolo exquisitamente. Su respiración era rápida. Y entre cortada. Koga no dejaba de observarlo. Desde hace mucho que quería tener a inuyasha a su merced en esa forma. No podía creer que estaba con el cachorro siendo un humano.
Le beso ducemente los pezones. Los mordía delicadamente mientras inuyasha gemia a todo lo que daba. Lo raro de esto, es que el eco de la cueva eran puros gemidos de inuyasha, por lo que koga se exitaba en ese sentido cada vez mas.
-inuyasha… por favor… quiero que tu también me ayudes un poco. – koga, sento a inuyasha y lo recargo en las rocas. Inuyasha estaba sumamente exitado. Se sentía muy bien, que no le importo el miembro de koga, rosaba con sus morenos labios. Koga los movio un poco para que tocaran los labios del cachorro. Inuyasha sintió la nesesidad de lamerlos. Y asi fue. Inuyasha lameo cada sentimetro de aquella carne que mas tarde entraría a su entrada estrecha. Koga veía a su cachorro humano lamer su propia carne. Finalmente gimio un poco al sentir que entraba a una boca ajena. Que subia y bajaba pausadamente al ritmo en que se movían. Koga arqueo la espalda un poco. Inuyasha se veía como un sumiso animal inofencivo. Hacia todo lo que el youkai le decía sin valcilar o chistar. En verdad parecía que lo estaba disfrutando mucho.
Finalmente después de un pequeño rato de 5 minutos. Koga se vino en la boca del cachorro humano que no tardo en sacar su boca de aquella carne para vomitar el semen de koga. Koga se inclino para besar a inuyasha, mientras el semen que recogió comenzaba a ponérselo al miembro de inuyasha. Este comenzó a gemir. Y mas al tener una mano masturbándolo pausadamente, de arriba hacia abajo. Después, otro poco para la entrada. Metió un dedo para lubricarla y sentir aquel espasmo de placer en aquella cara que le facinaba. Se sentía muy bien. Era la hora. La entrada de inuyaha recibió con un poco de dolor a un pedazo de carne deliciosamente grande y grueso. Inuyasha comenzó a gemir de placer, que no podía incluso sostenerse.
-BASTA…… PORFAVOR…… QUE ,,,,,,,… QUIERES…???? AAAAAAAAH!!! –decia una y otra vez, mientras gemia de placer al sentir aquel miembro tocar su punto maestro. No podía creerlo. Se sentía tan bien que no paraba de gemir como animal erido. O en este caso, una gata teniendo apareamiento con un gato.
-quiero…. Que te ….. olvides de ella…. –decia koga, quien le lamia las orejas, y se las mordía, mientras inuyasha seguía gimiendo. Se separo de inuyasha un poco. A este le sorprendió. Que koga se separa de el. De pronto koga puso la pierna izquierda en su hombro mientras la derecha estaba en el suelo. Inuyasha quedo de lado y pudo sentir nuevamente que era penetrado. Suave, pausadamente. Inuyasha no podía dejar de gemir. Agarraba la tierra y la apretaba en sus manos para que no saliera. Inuyasha se vino dejando un poco de semen regado en su abdomen. No siendo suficiente. Koga agarro ese poco de semen y lo puso en el miembro de inuyasha. Siguio gimiendo al sentir nuevamente un poderoso estimulo en su miembro. Gemia. Gemia con desesperación. Y también sintió ganas de agarrar las rocas del lugar. Y al ultimo koga lo sento. Le agarro el miembro. Se sento en una roca y nuevamente comenzó a envestirlo. Inuyasha jadeaba con la boca abierta, tan abierta, que koga no tardo en ponerle un dedo en su boca. Al terminar de lubricarlo se dirigió a sus pezones para nuevamente ser pelliscados y masajeados. Inuyasha estaba gritando de placer.
KOGA….. YA PARA….. O …. ME…. ME VENGO……
VENTE CON MIGO…. HAAAA
El grito de espasmo se escucho al mimo tiempo cuando koga e inuyasha se vinieron. Ambos gritaron de placer al sentir sus cuerpos en una especie de extasis. Inuyasha agarraba los oscuros cabellos de su lobo mientras gritaba en espasmo y subia la mirada al cielo. Mientras arqueaba la cadera en un enfermo placer que le encanto mucho experimentar como un humano.
Koga por otro lado, arqueo la espalda de frente al sentir el semen de su cachorro tocando su abdomen y sintió un impresionante placer cuando lo vio venirse. Ambos calleron al piso. Inuyasha respiraba rápidamente mientras koga le besaba la boca. Despacio y profundo.
-te amo… te deceo… te adoro… -decia koga una y otra vez con forme se separaba del cachorro. Finalmente se dieron un delicioso beso. Inuyasha acepto sin ninguna duda ese sentimiento. Mientras se preparaba para dormir.
Esa noche. Ya dentro de la casa… inuyasha dormía profundamente. Le canso haber estado en una deliciosa noche de pasión que no había despertado, incluso mientras koga le cargo hacia la casa. Sin embargo, koga si estaba despierto. Y tenia en sus manos aquella cajita de zapatos que kagome le regalo para guardar los dulces de shippo.
A la mañana siguiente, inuyasha despertó. Se sintió un poco contento en la mañana que se levanto aun sabiendo que es lo que había pasado en aquella deliciosa noche. Decidio que amaría a koga, y que se olvidaría de kagome por un tiempo. Finalmente había decidido quedarse con el lobo por siempre. O tal vez mas… pero…
Inuyasha estaba levantado. Y vio una pequeña fogata en las afueras se acerco a ella y vio a koga en la fogata. -¿Qué haces koga?- le dijo mientras se le acerco. Quería oler su delicado aroma, pero algo… algo famiiar le sorprendió, un ligero aroma familiar…
-mmmm huele bien, vamos a comer?- le decía a koga, que no paraba de mirar la fogata. El olor se le hizo tan familiar que asustado decidió buscar aquella sopa que guardaba… abrió su pasadizo secreto y se dio cuenta de que la caja de zapato no estaba… comenzó a asustarse… que era…
-QUE ESTAS QUEMANDO- decía inuyasha saliendo de la casa. Se acerco a la fogata, y con asombro, pudo ver aquella caja ya consumiéndose en cenizas, el asombro de inuyasha fue mayor. Intento agarrar la caja pero koga se lo impidió
- TRANQUILIZATE INUYASHA
NOOOOOOOOOOOOOOOO NO COMO PUDISTEEEE!!!!- Decia una y otra vez el cachorro, al ver todos sus recuerdos siendo consumidos por las llamas, gritaba una y otra vez, mencionando un solo nombre: kagome…
Miroku, y seshomaru , al escuchar los gritos se asomaron para ver lo que susedia. Miroku observo con asombro como inuyasha intentaba ir ante las llamas mientras koga se lo impedía, miroku salió rápidamente. –koga…¿Qué has hecho? Decía asombrado. Sango y shippo aparecieron para darse cuenta de lo que koga había hecho. Inuyasha se había incado. Ya no podía hacer nada… aquellos recuerdos que había conservado se habían perdido, tal vez para siempre. La única esperanza que lo mantenía con vida, se había perdido en las cenizas de aquella fogata.
-parate y dame eso- le decía koga con un semblante enojado. Sujentando tal vez el tesoro mas valioso para el… su rosario
NO ME TOQUES MALDITOOOO- decía inuyasha agarrando su rosario y alejándose de el lo mas lejos posible.
Koga lo agarro. Y comenzaron a pelearse. Miroku y sango intentaron detenerlos, seshomaru miraba a koga con un profundo odio. Comenzó a caminar directamente. Pero en ese momento en que koga se safo de miroku… koga agarro el rosario rompiéndolo y haciendo que todas las perlas… calleran al suelo. Mientras inuyasha vio como se separaba el recuerdo mas preciado que tenia.
-koga parecía estar satisfecho. Pero sin previo a un golpe lo tiro impresionantemente contra el suelo. Al tocarse en la mandibula en donde había recibido el golpe miro para ver quien era… seshomaru lo miraba con un odio feroz, no queriendo dejar las cosas como están
-COMO PUDISTEEE!!! Decía seshomaru balanceandose contra koga quien salto rápidamente. Pero seshomaru es mas rápido y le dio otro golpe que lo tiro hacia el suelo.
Sango mientras miraba a inuyasha perdido en sus pensamientos. Se dirigió a el para saber como estaba
-inuyasha, como estas? – pero inuyasha no respondia, solo mencionaba un nombre…kagome…
ALTOOOOOO- decía miroku, mientras seshomaru y koga se separaban. – miroku miro a koga de repente… y asi como pudo… un golpe en la mejilla marco a koga por siempre.
-ya lárgate koga..- decía miroku muy enojado. Tal vez, mas enojado que seshomaru.
-sehsomaru, puedes llevar a inuyasha a la casa? –sehomaru no respondió lo único que hizo fue cargar a inuyasha y llevarlo. Aun estaba en shock por lo sucedido. Koga estaba muy impreciondo y reacciono de inmediato.
-por tu propio bien koga, mas te vale que te largues de aquí.- decía
-yo, no quería…-decia koga reaccionando finalmente.
-tu no querías? LE HAZ DESTROZADO EL RECUERDO QUE MAS QUERIA DE LA SEÑORITA KAGOME, KOGA, ¿CREES QUE UNA SIMPLE DISCULPA SOLUCIONE LO QUE ACABAS DE HACER?- koga miro a inuyasha. Este, mostraba un semblante de tristeza. Algo que nunca antes había visto.
- YO QUERIA QUE SALVARAS A INUYASHA, HACIENDO OLVIDAR UN POCO A KAGOME, DECIRLE QUE NO ESTABA SOLO… NO QUE LO MATARAS MAS CON TUS MALDITOS CELOS KOGAA.-decia miroku sumamente enojado. Finalmente se fue. Dándole la espalda a koga. Quien se sorprendió por lo que acababa de hacer.
Koga había hecho algo sumamente cruel. Algo que no podía dejar de pensar… tomo los fragmentos de rosario y comenzó a juntarlo. Lin al verlo buscar las esferas, se le acerco sin saber lo ocurrido.
-se te perdió algo joven koga?- decía. Mientras koga la miraba.
-si, he perdido algo de inuyasha, y quisiera recuperarlo- decía koga, incado con la mirada baja y por raro que paresca, con la voz comenzando a distorsionarse.
-yo te ayudo.- decía lin, y juntos comenzaron a buscar aquellas pierdras que simbolizaban la unión de kagome con inuyasha. Una vez juntas todas las piezas, lin se las dio a koga.
- espero que sean todas. – y justo cuado se las dio en la mano, una gota de agua mojo la inocente mano de la pequeña lin, al mirarlo, noto la gran tristeza que sus ojos mostraban koga estaba llorando
-SOY UN ESTUPIDOO, UN GRAN ESTUPIDOOO-
De pronto, comenzó a llover… y un grito espanto a koga… era sango quien buscaba por todos lados y al llegar miroku…
-miroku… inuyasha no esta…
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la fidelidad de un hanyo (Nc-17)-cuando te enamoras... nada te detiene, pero... ¿y si no eres correspondido?... |
