Amame como la primera vez... NaruSasu N-17

La relacion entre naruto y sasuke deja de ser solo de maestro y alumno tras una noche de copas, sin embargo ninguno de los dos tiene claro lo que siente el uno por el otro

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  1. tzusuky
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    wiii, aqui de nuevo trayendoles actualizacion, oooooooooo por favor no me maten!!! se que me tarde mucho esta semana que paso pero ya saben tengo 1000 cosas que hacer... XD jajajaja.... gracias por sus comentarios!!! y bueno ya basta de palabras y lo que sigue A LEER!!



    ********Capitulo 4********
    Tzunade quiso hablarle pero no sabía cómo darle la noticia, algunos minutos en silencio y la mujer tomo valor, respiro hondo y mirándole a los ojos le dijo lo que le sucedía –Estas embarazado…

    Un silencio sepulcral se apodero del consultorio en el que se encontraba Sasuke, para después ser interrumpido por una carcajada del moreno

    –¿Saben lo loco que eso se escucha? jajaja ya enserio –No paraba de reírse mientras los doctores se miraban entre si con cara seria, Sasuke al ver que no reaccionaban de la misma forma empezó a preocuparse y paro de reírse -¿Es cáncer?

    –Sasuke mira… -Kakashi intentaba abordar de la mejor manera el tema, antes de que tzunade lo interrumpiera

    –¡Se que es muy difícil creerlo, pero yo con la vida de un ser humano no juego! –Contestaba enojada la rubia mujer –Si aun así no crees que este pueda ser un milagro, ¡mira por ti mismo! –Le dio un folder con las tomas del ultrasonido al moreno –Eso que miras es un Útero… así es, tienes la posibilidad de dar vida, jamás pensé que en toda mi carrera podría mirar algo parecido, pero… tu eres un caso especial y ahora estas embarazado, se que por fuera puedes ser un hombre completo, esto no significa que dejes de ser un hombre, simplemente eres un milagro, te explicare…

    -¡No! , esto es imposible, no puedo estar esperando un hijo de… -el azabache guardo silencio pensando en todo lo que había sucedido hace algún tiempo con su sensei –Esto no me puede estar pasando…-Susurro mientras se colocaba las manos en la cabeza.

    – Se que ahora estas muy confundido, pero por favor, piensa bien si deseas tener a esa criatura o no, recuerda que el no tiene la culpa de los errores de sus padres…¿Él se ha dado cuenta de que tu salud no es buena?- Pregunto más calmada la mujer

    –Él no… de todos eso es algo que no le importa… yo...¿cuantos meses tengo? –Sasuke trato de desviar el tema

    –Ah es verdad, no termine de explicarte, escucha con atención, tu sistema reproductor esta completo, eres un hombre como tal, sin embargo parece que tu esperma no es fértil según las pruebas que te hicimos hace unos momentos, sin embargo tienes un útero como te lo mencionaba, ¿que como puedes estar embarazado?, Pues parece que la cavidad vaginal llega justo por encima de tu punto G que por obvias razones sabes en donde esta, sin embrago alcanzar ese lugar es todo un reto créeme, según estas radiografías, por lo tanto, el hombre responsable de que ahora estés preñado debe ser todo un maestro en la cama ¡felicítamelo! –comento la mujer haciendo que el pelinegro se sonrojara –como sea, no habías tenido ningún síntoma porque al parecer esa parte de tu cuerpo estaba dormido y recubierto por una capa delgada de piel, que fue rota, como un himen, sabes que desempeñándote como todo un hombre no serias capaz de tener descendencia, pero la naturaleza te dio una segunda oportunidad, ahora puede ser la única vez que seas capaz de tener hijos, ya que si decides desacerté de él…también tendremos que remover tu útero, pues otro embarazo seria demasiado riesgoso…por cierto tienes 2 meses y medio –La mujer jamás dejo de ser seria con lo que le decía a Sasuke

    –Porque no te vas a casa y te tomas esta semana para pensar en lo que quieres hacer, te esperamos el día viernes para que nos dejes saber lo que decidiste y entonces proceder –Comento kakashi que le extendió una receta con un par de cosas para evitar que pudiera darle anemia

    Sasuke salió muy confundido del hospital, no sabía que hacer, tenía miedo y a la vez resentimiento, todas las emociones se arremolinaban a su alrededor, se fue directo a casa a pensar lo que le habían dicho los médicos. Había llegado la tarde sin salir de su habitación, su madre se preocupo un poco y subió hasta el cuarto del menor.

    –Sonido de golpes en la puerta -¿Sasuke estas bien?, te traje algo de comer, no has querido bajar y me tienes preocupada, por favor hijo abre –dacia la madre desde afuera

    Hubo un gran silencio y justo cuando la mujer estaba a punto de retirarse escucho como quitaban el seguro de la puerta y esta se abría.

    –Pasa madre –el azabache se hizo a un lado para darle el paso a la mujer, ella entro y dejo la charola en el escritorio del joven Uchiha, después dio media vuelta para retirarse hasta que el moreno la interrumpió –Mamá… ¿Qué hiciste cuando te enteraste de que estabas embarazada de mi hermano?

    –La mujer se quedo perpleja al escuchar las palabras del menor imaginando lo peor –¡No me digas que tu novia!...

    –No madre, ni siquiera tengo novia, solo es pura curiosidad –Cuando la mujer vio desanimado al muchacho, se tranquilizo y tomo asiento en la cama del joven, le hizo una señal con la mano invitándolo a sentarse con ella

    –Pues te diré –Comenzó a hablar con una sonrisa en la cara –Tu padre y yo nos conocimos en la universidad, ambos aun estábamos estudiando, faltaba solo un año para poder graduarnos, ambos teníamos muchos planes en mente, pero, pronto me di cuenta de que estaba esperando a Itachi, al inicio tuve mucho miedo, ya que un hijo a esa edad era algo aterrador, pero me di cuenta de que el no tenia la culpa de los errores de tu padre y los míos, él no había pedido venir al mundo, supe que todas las emociones que sentía la tristeza, la preocupación, el miedo, el enojo todo eso podía sentirlo mi bebé y fue cuando decidí tranquilizarme, tome el valor suficiente y le dije a tu padre, después de hablarlo por mucho tiempo llegamos a la conclusión de que quería tenerlo, deje la universidad para dedicarme por completo al cuidado de tu hermano, me case con tu padre que si termino su carrera universitaria, algunos años después estaba embarazada de ti, ¿pero sabes algo? hasta el día de hoy no me arrepiento de nada, pues tengo un par de hijos maravillosos –La mujer termino de hablar, paso una de sus manos por el cabello del moreno y salió de la habitación cerrando la puerta tras de sí

    El azabache se quedo aun sentado en la cama sin saber que hacer, pronto un par de lagrimas se escaparon de sus ojos, pues lo que su madre le había dicho tenia mucho sentido, su mente trataba de negarlo aun pero sabia que lo que los doctores le habían dicho era cierto pues después de lo que había pasado esa noche su cuerpo había empezado a cambiar y el podía notarlo, su abdomen había aumentado ligeramente su volumen, para cualquier persona ese detalle era imperceptible pero no para él, los ascos, los mareos todo eso no podía ser mentira, se miro en el espejo toco un poco su vientre con algo de miedo y al ver la comida que su madre le había dejado fue hasta ella y la termino toda, aun no estaba seguro de lo que debía hacer.

    –Supongo que ahora solo estamos nosotros dos, estoy confundido y no quiero hacerte daño, así que estate tranquilo necesito pensarlo mejor, pero tampoco quiero arruinar mi vida y no quiero lastimarte, tengo 17 años!!! –decía mientras se encontraba recostado en su cama mirando al techo blanco.

    El día del colegio comenzaba de nuevo, tendría que ver a Naruto una vez más, estaba asustado por todo, dos meses ya eran demasiado, había pensado bien las cosas y si esa era la única oportunidad de tener hijos no la desperdiciaría, alguna vez había escuchado a su madre decir que quería nietos y bueno quien fuera el padre no era importante, él no tenia porque enterarse, sabia que no podía ocultarlo por siempre, pero no quería que el rubio tuviera un pretexto para estar más cerca de él.

    Al día siguiente salió del colegio y se dirigió al hospital, se presento en el consultorio de kakashi que se quedo sorprendido al mirar al moreno frente a él mucho tiempo antes de su cita.

    –Sasuke!!, pero tu cita es hasta el viernes –Decía el hombre que había dejado de escribir el reporte que estaba haciendo

    –Quiero tenerlo!! –soltó de inmediato el moreno dejando boquiabierto al peliplateado

    –Sasuke, deberías pensarlo mejor... –comento confundido kakashi

    –Dije que lo quiero –insistió el azabache

    Kakashi tomo el teléfono e hizo una llamada –Por favor siéntate un segundo –hizo una seña con la mano y cerró la puerta – Tzunade?, necesito que vengas ahora mismo

    Después de unos minutos en espera y completo silencio llego la encargada de maternidad al consultorio de kakashi.

    –Sasuke?!!, pero...se supone que tu cita es hasta el viernes –decía la mujer sorprendida temiendo lo peor

    –Lo sé, pero he tomado una decisión...Quiero tenerlo –dijo seguro el moreno

    -¿Cómo?, esto es, es increíble, pensé que te desharías de él –dijo la mujer entre emocionada y desconcertada

    –Si es la única oportunidad de tener hijos, entonces no la voy a desperdiciar –contesto Sasuke

    –Pues entonces no habrá problema alguno –dijo la mujer emocionada

    –De hecho si habrá uno –interrumpió Kakashi –Sasuke aun es menor de edad, y para poder ser atendido en este hospital deberá tener el consentimiento de sus padres –dijo preocupado el peliplata

    –Pero pronto cumpliré 18 – contesto de inmediato Sasuke un poco asustado

    –¿Que dices? –dijeron ambos doctores al mismo tiempo mientras lo miraban detenidamente

    –En julio –dijo un poco más tímido

    –Para eso aún falta mucho lo sabes, y un embarazo no se puede ocultar por mucho tiempo –le hablo seria la mujer

    –¡Los se pero!...mis padres no se pueden enterar de esto –dijo Sasuke muy angustiado –Por favor, lo mantendrán en secreto ¿cierto?

    Ambos doctores se miraron y aceptaron con un movimiento de cabeza, después dieron instrucciones sobre la dieta y lo que debía hacer Sasuke para evitar algún problema de salud hasta su siguiente cita, cuando el moreno salió del hospital fue directo al centro comercial a comprar algunas cosas que necesitaba, regreso a su casa y comenzó a alistar sus pertenencias para el siguiente día de clases, todo debía ser como era antes, tomo algo de ropa y se dirigió al baño, quería tomar una ducha para poder descansar mejor, el día había sido pesado y quería relajarse un poco, estuvo bajo el agua caliente por un buen rato, sin querer paso la esponja por su abdomen, algo le hacía reaccionar de una manera diferente, ¿podía ser que empezaba a sentir cariño por esa criatura que estaba formándose en su interior?

    –Sonido de golpes en la puerta –¡Sasuke! ¿Puedo pasar? –Preguntaba una voz masculina del otro lado de la puerta, lo que hizo que el azabache reaccionara y decidiera salir de la ducha.

    –¡De ninguna manera hermano backa! –respondió enfadado Sasuke

    -¡Que! ¿Porque?, ¿es que acaso ya te da pena que te vea desnudo?, por dios hermano somos hombres y tenemos lo mismo –contestaba itachi

    –¡y que si somos hombres, he dicho que no! –Sasuke secaba su cuerpo mientras su hermano aun insistía en la puerta

    –Vamos hermanito, ¡necesito entrar al baño!, por cierto, esas pastillas saben a dulces, ¿Estás enfermo o algo? –preguntaba consternado el Uchiha mayor

    -¡Entraste a mi habitación! –el menor abrió la puerta del baño y salió de inmediato -¡Te he dicho mil veces que no entres a mi habitación si no te he dado permiso!

    –vaya, ¿estrenando pijamas nuevas?, sabes hermanito, como que has subido de peso ¿no? – Itachi hablaba solo sin pensar para hacer rabiar un poco a Sasuke

    El Uchiha menor se sorprendió al escuchar el comentario de su hermano pues jamás pensó que alguien más se daría cuenta de su situación, lo que decía itachi era cierto, su abdomen había crecido muy ligeramente, sin embargo algunas de sus ropas comenzaban a quedarle ajustadas, por eso había decidido cambiar algunas cosas no todas, tras escuchar eso, permaneció callado y termino con la pelea que había iniciado con su hermano

    –Esos...no eran dulces, son vitaminas...idiota –y se fue rumbo a su habitación sin mirar a su hermano

    –Ese Sasuke esta raro, jamás se había rendido tan fácil, en fin tal vez lo rechazaron –comentaba para si itachi y entro al baño.

    Sasuke cerró con seguro la puerta de su habitación, miro los frascos con vitaminas que los doctores le habían dado, algunos eran suplementos alimenticios y uno de ellos estaba abierto, fue hasta donde se encontraban y los guardo en uno de sus cajones, nadie más debía verlos de nuevo, además tarde o temprano a itachi se le olvidaría el asunto.

    Por la mañana estaban por empezar las clases, la primera era inglés con el profesor Uzumaky, Sasuke estaba nervioso, escuchar su voz hacia que la piel se le crispara y que el corazón le latiera a mil por hora, pensaba que probablemente se trataba de un síntoma más de su actual situación, quedaba totalmente hipnotizado por el movimiento de sus labios al pronunciar las palabras en inglés, era fascinante a su vista cada uno de los movimientos del rubio, entonces, se le vino a la mente lo que la doctora Tzunade le había dicho “debe ser todo un maestro en la cama, ¡felicitamelo!” y se sonrojo como tomate, tomo sus cosas de prisa y salió del salón a media clase y ante la admiración de sus compañeros y el propio profesor, Sasuke trataba de convencerse a sí mismo de que no sentía nada por Naruto y que el hijo que esperaba lo tendría solo por responsabilidad y comenzó a pasar el tiempo.

    Un mes después de aquel incidente comenzaban a sonar rumores sobre la relación que podían mantener el profesor de inglés y la sensei de literatura Hinata, sonaban por todas partes, el azabache hacia oídos sordos a aquellos rumores, mientras el se sintiera bien en su clase que importaba lo que los demás dijeran, además lo que hiciera el rubio no tenía la mínima importancia en su vida, en el salón de clases el joven sensei Gaara no se presentaría, pero los alumnos debían permanecer en la escuela hasta que la lluvia que caía afuera cesara un poco, mientras, Sasuke leía un libro de poesía, el favorito de Naruto de Edgar Alan Poe, y un par de chicas y algunos de sus compañeros interrumpieron su lectura al armar un alboroto por algo que sucedía afuera, así que decidió mirar también.

    –¡Ya vieron!, ¡es Hinata y Naruto sensei! –comentaba una de las chicas

    –¡Siiii son tan geniales! –contestaba la otra

    –¡Escucharon que ambos están saliendo juntos! –comentaba un joven.

    - ¡¿Eso es verdad?! –decían todos mientras miraban a la pareja de profesores en el pasillo platicando muy cerca el uno del otro con alegría, en ese momento una punzada en el corazón del moreno le hizo reaccionar.

    –¡Se les ve bien! –decían las dos chicas

    –¡De ninguna manera! –Contesto el Uchiha haciendo que todos voltearan para mirarlo – Ella es demasiado falsa para él, una relación entre ellos no duraría –dijo finalmente, Sasuke tomo sus cosas y salió de inmediato del aula dejando a todos sus compañeros sorprendidos por el comentario del joven.

    Sasuke al salir se encontró con Naruto quien a un platicaba con Hinata, el moreno paso por un lado sin mirarlo ni un segundo, afuera aun llovía, tomo el paraguas que llevaba consigo y salió de la escuela.

    –¡Pareces una sopa hermanito! –Comento itachi al abrir la puerta de su casa y encontrarse con Sasuke.

    -¡Quítate de mi camino! –contesto enojado el azabache

    –Uuuuu, parece como si te hubieran quitado a tu novia -dijo el Uchiha mayor algo burlón.

    -¡Callate! –respondió Sasuke y entro a la casa, subió a su habitación y empezó a cambiarse de ropa.

    – No sabía que estabas preñado... –La voz de itachi sonaba dentro de la misma habitación en donde Sasuke se encontraba

    –¿de qué demonios estás hablando? –dijo Sasuke exaltado –¿de dónde sacaste esa estupidez?

    –Encontré esto –itachi mostro el folder en donde el Uchiha menor guardaba los estudios del hospital

    –¿Que...que hacías en mi habitación?–contesto nervioso el moreno

    –Los encontré mientras buscaba esas vitaminas que saben a dulces de fruta, la verdad es que me gustaron mucho –dijo itachi – eres malo guardando cosas importantes, sabía que estabas subiendo de peso muy rápido, pero nunca me imagine que esta sería la razón
    Sasuke se sentó sobre la cama, estaba desconcertado, no tenía idea de cómo contestarle a su hermano – ¿le has dicho a alguien más? –pregunto inseguro el chico

    –No –dijo el Uchiha mayor acercándose al menor - ¿Quién es el padre?, ¿El...lo sabe?

    –¡No necesita saberlo!, ¡además solo voy a tenerlo por asumir mi responsabilidad! –dijo Sasuke un poco alterado

    – ¿y porque no?, es el padre del hijo que esperas o ¿es que solo fue una aventura? –pregunto itachi.

    –No fue así –contesto Sasuke un poco melancólico –pero tal vez el no quiera saber nada de mí.

    – ¿O es porque ya está con alguien más? –el Uchiha mayor se dio cuenta de la situación de su hermano, tal vez no se llevaban muy bien, pero se preocupaba por él – te has puesto a pensar que muy en el fondo lo quieres pero aun no lo aceptas, vamos hermano, date cuenta de lo que sientes y empieza a quitarte el resentimiento –una de sus manos se posiciono en el abdomen de Sasuke – este bebé no tiene la culpa.

    –Itachi –fueron las palabras que salieron de la boca del menor – por cierto ¿porque estas en casa tan temprano? –pregunto el azabache

    – Ah!, eso... amm bueno –dijo el muchacho mientras se rascaba la cabeza –bueno pues, me despidieron del restaurante por golpear a un cliente –dijo el Uchiha mayor, mientras se dirigía a la puerta –no te preocupes guardare tu secreto, por cierto esos pastelitos con fresa de Antique son deliciosos deberías comprar más la próxima vez que vayas –y salió de la habitación.

    Sasuke se quedo pensando en lo que itachi le había dicho, ¿lo que de verdad sentía por Naruto era amor?, recordó lo que había visto esa tarde en el pasillo, al hacerlo le hervía la sangre, pensar en que Hinata podría sentir los besos de Naruto tal como aquella noche él los probó lo ponía mal, sin pensarlo demasiado se cambio de nuevo de ropa, tomo algo abrigador, los papeles con los estudios y salió de su casa sin avisarle a nadie.

    Minutos después...

    Sonido de timbre – ¡Voy enseguida! – Un rubio que acababa de colgar su abrigo en el perchero se dirigió a la puerta, al abrirla se quedo sorprendido –¡Sasuke!...¿Qué haces aquí a esta hora?

    –Necesito hablar contigo, es muy importante –dijo el moreno muy serio.
     
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