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si todo sale mal... mátalos cuando estén durmiendo ~
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Woooooolaaaas ¿me extrañaron? porque yo a ustedes no, okya xDDD wow hacía la tira que no subia una historia aquí y ahora hasta me da algo de vergüenza DDDD: PERO HE VUELTO, A LIARLA PARDA XD aunque... no sean malos conmigo eh xDDD bueno, espero que les guste esta nueva historia y pos el resumen no me cabe entero PERO NO PASA NOTHING XD well... a delante C:
Capitulo 1: Naruto Uchiha.
Me llamo Naruto Uchiha y soy el juguete sexual de mi hermano mayor, Sasuke. Todo empezó un día cualquiera, yo tenía 5 años y hacía poco que mis padres habían muerto. Los servicios sociales al enterarse quisieron llevarme a un orfanato, pero yo me negué, como solo tenía 5 años mi opinión no la tomaron en cuenta, así que... con solo cinco años de vida, decidí escaparme. Ese mismo día, nuestro padre, Fugaku, me tendió la mano y me preguntó que donde estaban mis padres, a lo que yo contesté que ya no estaban conmigo, me miró un poco extrañado pero luego me ofreció el irme a vivir con él, no sé como ni porqué acepté, pero fue uno de los mayores errores de mi vida.
Al principio él me mantenía escondido, decía que hasta el día acordado no saldría de mi escondite, como yo era un niño bastante inocente le hacía caso pensando que jugábamos al escondite. Que tonto era.
El día que por fin pude salir fue el día en el que mi hermano mayor cumplía años, doce exactamente. Todos se quedaron extrañados al verme, excepto él... él me miraba con una mirada un tanto extraña que por mi edad no conseguía saber cual era, era tan, pero tan tonto. Fugaku me presentó a todos como el nuevo, y primer, juguete sexual de Uchiha Sasuke. Como él era un niño rico, lo tenía todo, por esa razón y con la edad que tenía él comenzaba a descubrir el tema de la sexualidad, de ahí el porqué de que me nombrara lo que llevaba siendo durante toda mi vida, hasta hace un par de años, donde dejé de ser su ''juguete sexual'' para ser una de sus simples putas.
Los meses pasaban y la familia Uchiha me había cogido un cariño incondicional, sobretodo Mikoto. Ella me cogió un cariño inmenso, era tan grande que no se podía describir, porque a fin de cuentas el amor no se describe, se demuestra. Pero bueno... Llegó a ser tanto su amor por mi, que terminó adoptandome y yo dejé de llamarme Naruto Namikaze Uzumaki a simplemente llamarme Naruto Uchiha, cosa que le agradecí eternamente a esa mujer a la que llamaba ''mamá''
Los años seguían transcurriendo y las cosas cambiaban, más bien la gente. Sasuke había caído en una depresión, ya que nuestros padres habían muerto en un accidente de tráfico. Aún teniendo el apoyo de Itachi, nuestros hermano mayor, y él mio, él siguió por su camino, un camino incorrecto. Comenzó a juntarse con malas influencias, empezó a beber, fumar, drogarse, traer señoritas a casa, llegar a las tantas de la mañana y hacer lo que a él se le antojara, con tan solo 15 años había destruido su vida, y la mía también, porqué yo quería que mi Onii-chan regresara, aquel del que me había enamorado, porque sí, estaba enamorado de mi hermano mayor y ese fue mi segundo gran error.
La vida continuaba y tanto él como yo íbamos creciendo, cuando yo cumplí los 10 años, mis amigos de la escuela, decidieron hacerme una fiesta, cosa que Sasu en su momento no aprobó ya que a él no le gustara que saliera con chicos, decía que yo solo era suyo, día tras día me lo recordaba y él no tenía ni idea del efecto tan grande que tenía en mi. Pero, aunque él me lo recordara y no me dejara salir, yo me escapé, sin hacerle caso y me fui con mis amigos, porqué yo también tenía derecho a vivir mi vida. Tercer gran error que cometí.
Mis amigos, decidieron llevarme al centro de la ciudad, donde habían tiendas de todo tipo, se suponía que nos pasaríamos el día allí y que luego al terminar, me llevarían a comer ramen, me encanta el ramen. Lo que yo no contaba era encontrármelo allí, había salido con sus amigos de escuela. Sabía que él me había visto, también sabía que ahora no me quitaría la vista de encima y que cuando llegáramos a casa, porque me obligaría a marcharme con él, me reprendería y luego me diría que quiere hacerlo, así hasta que me la haya metido varias veces, se le haya ido el enfado y esté satisfecho. Siempre igual, pero aún así, a mi me gusta.
Aunque, no ocurrió así, claro que no, ocurrió como nunca me lo hubiera esperado. Estábamos en la plaza, yo estaba sentado con mi mejor amigo, Kiba, él no paraba de mirar al suelo y de mover sus pulgares. Sin embargo a mi eso no era lo que me ponía nervioso, si no, su mirada. Sasuke me miraba, y sin necesidad de palabras sabía que me estaba advirtiendo. Pero en cierto modo, me daba igual, era mi día.
Kiba levantó la mirada y me miró fijamente.
-Naru-chan...- Me llamó. Yo lo miré atentamente, vi como tragaba saliva y volvía a mirar al suelo.- Tú... me gustas mucho, por favor sé mi pareja.- soltó en un susurró y yo me puse nervioso, demasiado nervioso.
-Kiba yo...- pero no me dio tiempo a responder. Él me había agarrado del brazo y me tiró hacía él dándome un beso y yo en ese momento palidecí. Rodé mis orbes azules hacía donde él se encontraba y pude ver como se acercaba con paso fuerte hacía nosotros.
Después de eso él simplemente nos apartó, tiró a Kiba dentro de la fuente y a mi me sacó a rastras de aquel lugar mientras yo gritaba y la gente nos miraba. De mis ojos solo salían lágrimas de desesperación, no tenía ni idea de lo que me pasaría, no sabía si Kiba se encontraba bien. Tenía miedo de lo que pasara ahora.
Llegamos a casa y me tiró al suelo poniéndose encima mio.
-¿¡Qué te crees que estabas haciendo besándote con otro!?- me agarró del cuello de la camisa mientras me chillaba. Me volvió a tirar al suelo sin ningún cuidado, me había dañado la cabeza, sentía el dolor y sentía sangre. Él estaba loco y no había manera de detenerlo.- ¡Eres de mi propiedad! ¡Solo mio! ¿¡Entiendes!?- Yo lloraba, tenía mucho miedo, mis berridos cada vez eran más audibles, pero él no se inmuto. Y allí, lo hizo, me violó sin piedad alguna, pero no una, ni dos veces... estuvo toda la noche sin parar, gritándome y dañándome, con sangre seca, mezclada con su semen,cayendo por mis piernas, mi cuerpo lleno de heridas, había sido tan bestia. Pero lo peor fue cuando cogió una navaja y en mi vientre escribió ''propiedad de Sasuke''. Me pasaba las noches llorando después de aquel suceso, odiaba cuando tenía que cambiarme o ducharme, porque siempre veía esta maldita cicatriz. Y yo... hoy en día sigo sin entender porqué le sigo amando.
Y bueno... ahora llegamos hasta el presente, el día a día que vivo. Como Sasuke ya tenía 20 años se independizó. Itachi le había comprado una casa para que viviera él solo, pero Sasuke, le imploró para que yo me fuera a vivir con él, cosa que Itachi no dudó en aceptar, puesto que él trabajaba mucho y no tenía tiempo para mi, aparte de que la casa de Sasuke estaba mucho más cerca de donde yo estudiaba y pues bueno... aquí estamos ahora, viviendo en la casa de mi hermano o como yo la llamo, la casa de las putas. La llamaba así porqué la casa se caracterizaba por que todos los días, entraban y salían putas de todo tipo. Por esa razón no me gustaba traer a mis amigos/as a casa, tenía miedo de que al entrar estuviera Sasuke sentado en el sofá con una chica entre las piernas.
En fin... Me levanté, como cada mañana y me pareció extraño no ver nada raro en el salón, ya que estaba recogido. Entré a la cocina y pude ver el porque de que el salón estuviera impecable. Sakura Haruno.
Sakura Haruno era una de las otras putillas de mi hermano, sin embargo ellos dos son amigos desde la primaria, por eso aparte de que mantienen relaciones, a diferencia de las otras, Sakura se queda a dormir y mantiene a ralla a mi hermano.
-Ohayo, Naru-chan.- Me saludo mientras terminaba de comerse su tostada.
-Buenos días Sakura-chan.- Y me tenía que poner la careta de buena persona, aunque ella no me caía tan mal después de todo.
Justamente entraba Sasuke solamente con un boxer negro.
-Podrías taparte ¿no?- le sugerí a lo que él solo me mató con la mirada.
-Nee, Naru-chan ¿Ya encontraste algún chico lindo?- me preguntó Sakura. Sabía que solo lo hacía para molestar a mi hermano, ella sabía lo poco que él aguantaba que yo me juntara con chicos.
-No.- le contesté secamente.- no me interesan los chicos.- abrí la nevera para coger lo que necesitaba y prepararme mi desayuno.
-Siempre fuiste un doncel un tanto raro...- dijo ella apenada. ¿Qué siempre he sido un doncel raro? ¿Y de quien es la culpa?- Bueno... espero que algún día encuentres a alguien que te haga cambiar de opinión.- me sonrió.- yo ya quiero ser tía.-Cierto, Sakura siempre dice que soy el hermanito pequeño que nunca tuvo.
-Sakura-chan, tengo catorce años ¿no crees que es muy pronto?- Dije mientras me sentaba al lado de ella y me servia mi desayuno. Habíamos dejado a Sasuke de lado y eso le estaba molestando, lo veía en su mirada.
-Cierto... pero dentro de un par de años...- Habló mientras apartaba varios platos para que yo tuviera espacio.-Bueno... tengo que irme a trabajar, nos vemos.- Se levantó de su asiento y me revolvió los pelos.-Adiós, Naru-chan, Sasuke-kun.- y se marchó.
Después de que Sakura se machara, nos quedamos en silencio. Sabía que él me estaba mirando, aunque yo mantuviera mi mirada fija en el tazón lleno de leche que estaba en frente mio. Cuando terminé mi desayuno lo dejé todo en el lavamanos, la verdad, no tenía ganas de fregar los cacharros ahora, por que sí, era yo quien hacía las tareas de la casa y Sasuke no movía ni un dedo.
-Bueno... voy a vestirme o llegaré tarde a clase.- me disponía marcharme cuando me llamó.
-¿Y mi beso de despedida?- Ah claro... el beso.
Me acerqué a él y me elevé un poco ya que al estar sentado me costaba menos llegar. Nos besamos, un beso que yo pretendía que durara poco pero él siempre lo intensificaba, haciendo que siempre cayera y correspondiera.
Cuando llegué a la escuela vi a mi mejor amiga, Hinata, esperándome con una resplandeciente sonrisa que cambió a una cara de sorpresa.
-Que raro que lleves las gafas puestas.- me dijo a modo de saludo.
-Si bueno... - Caminamos hacía dentro del recinto mientras charlábamos de cosas triviales
-Oh por cierto.- interrumpió ella de repente.- Neji-niisan me dijo que ya habían anunciado al ganador del concurso de relatos.- me contó emocionada.- ¿Adivina quién ganó?
-¿Yo?-
-¡Exacto! Siempre ganas porque eres un magnifico escritor.- me dijo.- me das un poco de celos.- me confesó inflando los mofletes.
-Ya ganaras algún día Hina-chan.- le dije sobando su cabeza.
-Cielos Naruto, no hagas eso. Es muy vergonzoso.- Me apartó la mano de su cabeza mientras un rojo tintaba su cara.
Creo que no os había contado esto ¿no? ella es mi mejor amiga Hinata Hyuuga y gracias a ella descubrí lo maravilloso que era escribir. Sí, escribo, también participo en concursos escolares por petición del profesorado y normalmente gano. Es algo que me apasiona desde el momento en el que la vi a ella, esta chica que hoy en día es mi mejor amiga, escribiendo sobre un mundo de fantasías donde era una guerrera y salvaba a un príncipe de ser devorado de un dragón. Esto me pareció bastante interesante ya que, casi todas las chicas, dicen ser las princesas que buscan a un príncipe azul que las salve, pero ella no era así, ella era diferente, especial y eso es una de las tantas cosas que me gustan de ella. Hinata, conoce mi historia, es más, ella siempre me ha ayudado ha superarla, me cuida y me quiere, eso me gusta. Pero... ¿sabéis lo que más adoro de ella? Su actitud, su actitud tan impulsiva de hacer las cosas, me gusta como se queja de la falda del instituto y de como se queja de los peinados que su madre le obliga a llevar, de como se mete en líos y de como molesta a su primo 3 años mayor que nosotros, me gusta como aveces se pone a decir que sus ojos blancos tienen poderes y que ella es la más bonita entre todas las chicas, eso me hace reír como nunca. Si no fuera un doncel querría que fuera la persona con la que compartir mi vida por que Hinata es una chica asombrosa.
-Hinata llamando a planeta Naruto ¿me recibes?- Eso me sacó de mis pensamientos.
-Si Hina-chan, estoy aquí.- le contesté
-Sugoii, pensé que te habías ido a tu mundo ''yupi'' y no me habías invitado.- ¿Mundo Yupi? menudas cosas se inventa.
-No Hinata, no me fui a ningún mundo ''yupi''.- intenté aguantarme la risa.- ¿Qué querías?-
-Qué despertaras porqué ya tocó el timbre y tenemos que entrar a clase.- Me cogió de la mano y me llevó hacía nuestra aula. Allí nos sentamos y por suerte la sensei Anko, las que nos tocaba hoy a primera hora, aún no había llegado. Suspiramos aliviados y nos sentamos en nuestro sitio.
-Naruto.- me llamó alguien a mi espalda, yo me giré ya que esa voz la conocía perfectamente.
-¡Gaa-chan!- abrí mis ojos al verle.- ¿Te recuperaste ya?- le pregunté con alegría.
-Si.- tosió.- bueno... más o menos.- contestó con la voz ronca
-No hables mucho Gaara, todavía tu garganta no está bien.- él asintió y me sonrió
Gaara es otro doncel con el que me suelo juntar, el problema es que normalmente está enfermo y casi nunca viene a clase o queda con nosotros. Su aspecto da miedo, sin embargo, es una persona encantadora aunque es bastante tímido cuando está con alguien que no conoce.
-Naruto.- me volvió a llamar.- me enteré de que ganaste el concurso de escritura nuevamente, está colgado en el tablón de anuncios es precioso.- me alabó.- me gustaría saber a quien van dedicados, lo mataría.- En fin... si pudieras matarlo realmente Gaara estaría tan agradecido... el problema radica en que yo daría mi vida por salvar a ese bastardo.
-No van dedicadas a nadie, solo es ficción.- le mentí. Si iban dedicadas a alguien, iban dedicadas a mi hermano, todas y cada una de las hojas que he escrito van única y exclusivamente para él. Por que escribiendo... es la única manera con la que me puedo desquitar, la única manera en la que puedo plasmar mis emociones y sentimientos, La única manera... en la que puedo contar mi historia con un seudónimo diferente y quitarme un gran peso de encima. Por que escribir, realmente, es lo que me mantiene cuerdo, la fina linea entre la cordura y la locura.
Por que creerme... si yo estuviera loco, y no consciente de mis actos... muchas cosas pasarían, de eso estoy seguro. Pero, supongo, que la historia de como me volví loco... la dejaré para otro momento. Porque... ¿Qué es un autor si no deja expectación en su obra?
Las clases siguieron cor normalidad, un tanto aburridas, pero con normalidad. Era la hora del recreo y yo no tenía ganas de salir, pero en clase no nos podíamos quedar así que obligatoriamente tuve que salir.
-Nee, Naru-chan...- Me llamó Hinata señalando a alguien.
-Kiba...- ¿Qué hacía Kiba inuzuka viniendo hacía aquí? hacía 4 años exactamente que no nos hablábamos, después... después de aquel accidente con Sasuke.
-Oye Uchiha.- Gritó mi apellido llamando la atención de más de una persona que estaba allí.
-¿Qué quieres Kiba?-
-¿No es obvio? Hablar contigo ¿qué más sino?- Odiaba cuando se envolvía en sus aires de grandeza.
-¿Y a que se debe esto? Pensé que tu y yo ya no eramos amigos. O eso dejaste tú bastante claro aquel día.- Él miró hacía otro lado, pude notar que al recordarselo se sintió culpable.
-Nada, solamente quería decirte que me gustó eso que escribiste, muy... profundo.- dijo con cara raro, creo que es porque no sabe ni lo que está diciendo.
-Muchas gracias Kiba.- solté simplemente, no tenía mucho más que decirle.
-De nada... por cierto...- Sonrió picaramente. No entendí el porque hasta que un balón, el que él llevaba entre sus manos, impacto en mi cara.
-¿¡Qué haces animal!?- gritó Hinata participando por primera vez en la ''conversación'' él solo se reía, mientras yo estaba tumbado en el suelo
-Ven aquí Inuzuka, voy a meter ese balón por donde no sale el sol.- Amenazó Hinata remangándose las mangas de la camisa. Kiba al escuchar eso y al ver que la amenaza iba en serio salió corriendo y es que, no entendía el porque me hacía eso... yo... yo no tengo culpa de los celos que Sasuke sintió.
Hinata regresó sin cumplir su objetivo y me ayudó a levantarme.
-¿Estás bien?- yo asentí.- ¿Vamos a la enfermería a que te pongan hielo?-
-No Hinata, estoy bien, no necesito hielo.- Me limpié el uniforme y me senté en la sombra de un árbol cercano.
-Antes eráis tan amigos...-se sentó a mi lado.- no sé que tiene ese idiota metido en la cabeza para tratarte así ahora.-cruzó sus brazos.- Pero en fin... Kiba es un chico estúpido así que tampoco hay que hacerle mucho caso.-
Suspiré y luego sonreí.- cierto... pero la gente cambia y bueno... hay personas que no son amigas por toda la vida.- Ella me miró y acercó su cara a la mía, mirándome con esos ojos tan blancos.
-Pero nosotros seguiremos siendo amigos para siempre ¿verdad?- Yo asentí y ella sonrió.- Uff... menos mal. Pensé que nuestra amistad terminaría.- dijo poniendo cara de horror.-Y eso no lo podemos permitir, hagamos una promesa de saliva.- se escupió la mano y me la tendió.
-No pienso coger esa mano.- le advertí, ella infló los mofletes.
-Naruto, eres un tiquismiquis.- Me empecé a reír.- ¡Hey! ¿Dé que te ríes?- Seguimos con nuestra ''conversación'' hasta que sonó el timbre, avisando que debíamos volver a nuestras respectivas aulas. Las siguientes clases pasaron al igual que las primeras con normalidad.
Ya había terminado la jornada escolar del día y todos los alumnos nos disponíamos a marcharnos a nuestras casas. Cuando Hinata, Gaara y yo salimos, pudimos notar que había un gran revuelo en la entrada, como somos muy curiosos fuimos a ver el porque de aquel escándalo. Vimos a Haku, un doncel mayor que nosotros con el que solemos hablar a veces.
-Haku ¿Que sucede? ¿Por qué tanto escándalo?- Le pregunté a lo que el me miró con cara de confusión que rápidamente cambió por una de enamorado.
-Es que veras... ¡Hay un chico buenísimo en la entrada! incluso más que mi novio- nos contó. Los tres nos miramos... ¿Tanto revuelo por un chico que estaba ''bueno''? Malditas locas pubertas llenas de hormonas.
Seguimos con nuestros caminos, de alguna manera se podría pasar por aquel lugar. Cuando lo conseguimos me quedé de piedra al ver quien era. Se acercó a mi teniendo la mirada de toda la multitud sobre su ser.
-Te tardaste mucho ¿Qué estabas haciendo?- Yo no le contesté y seguí por mi camino recibiendo un ''oh, como puedo hacerle eso'' o ''¿de que va?'' de parte de todas aquellas locas que miraban a mi hermano como queriéndole arrancar la ropa.-Eh ¿a dónde te crees que vas?- empezó a seguirme
-A casa ¿No lo ves?- le contesté como si él fuera tonto.
-Naruto, si estoy aquí es evidente que vine a buscarte.- Me paré en seco.
-Creo que no lo había notado.- le dije irónicamente.- La cosa es... ¿Por qué?-
-¿Qué pasa? ¿no puedo venir a recoger a mi hermano?- Ah claro... seguro que quiere algo, maldito bastardo, ojalá pidiera deshacerme de ti... pero no puedo... y lo sabes.
-Con que... ¿ahora soy tu hermano no?- Me miró con mala cara por el tono que había usado con él.
-Te pido que no montes una escenita aquí. Está claro que eres mi hermano.- Es verdad... en la calle soy su ''hermano''- Vamonos a casa.- me tendió la mano y yo como un idiota se la cogí. Sin saber porqué, entrelacé sus dedos con los míos a lo que el me miró enfadado.
-Quita, tus dedos.- me dijo en tono frío y a modo de orden. Yo como siempre lo hice, no quería que me hiciera nada malo.
Cuando llegamos a casa él se sentó en el sofá, me miró y pronunció: ''Creo que voy ha castigarte por montar aquel númerito'' Yo tragué saliva, no sabía a que se refería pero... si se había sentando en aquel lugar... Tenía una cierta idea de lo que iba a pedirme.
-No querrás que...- no podía decirlo, era denigrante... era algo que jamás había hecho y jamás haré.
-Tu haces algo mal... y yo te castigo.- sonrió con prepotencia.- oh vamos... nos va a gustar a los dos.-
-Jamás.- pronuncié débilmente. Hay cosas que nunca haría incluso aunque lo amara con todo mi corazón... y esto es una de las cosas que nunca haría.
-Naruto, no me hagas obligarte.- me amenazó. Yo volví a negar.-Naruto.- volvió a repetir.
-No, lo siento pero no.- Se levantó cabreado lo podía ver en su expresión, me agarró del suéter que llevaba y me tiró hacía arriba quedando su cara en mi oído.
-¿Qué es lo que acabas de decir? ¿Quién te crees que soy Naruto?- me susurró, el agarre se hizo más fuerte y me empezó a doler.
-S... suéltame.- le pedí como pude. Me ''hizo caso'' y me tiró al suelo. Me miró con mala cara y me cogió de los pelos arrastrándome. Se volvió a sentar en el sofá y se bajó la cremallera del pantalón y luego se la sacó delante mio.
-¡Hazlo!- me gritó acercando mi cara a su miembro. Yo no quería hacerlo y no tenía ni idea de como salir de allí. Comencé a llorar pero a él poco le importó, volvió a tirarme de los pelos.
-¡Te estoy diciendo que me la chupes!- Siguió chillándome pero yo no lo haría, claro que no lo haría. Pensé que todo estaba perdido cuando oí el sonido de la puerta.
-¡Sueltalo Sasuke!- Estaba salvado.
Continuará...
muajajajaja :''D hola de nuevo!! y que tal? les gustó e3é espero que si o si no haran llorar a una loli ¿y quieren eso?
PD: si quieren cambiar algo o decirme alguna sugerencia adelante
PD2: Nunca lo he dicho pero soy NekoKyu 7u7
Byeee by ~
Edited by PandaHero - 29/4/2015, 19:40
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Humpnie Humbert+2 .
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Me quede con la boca abierta... debes continuarla...
Estuvo espectacular
Matta nee. -
+2 .
OMG oh my gash pobre de mi Naru chan sasuke maldito bruto eres un pinche sádico así como quieres que llegue a amarte si lo tienes traumado lo obligas a hacer Cosa que solo debes hacer si el te da permiso asi como queres que llegue a complacerte
espero la conty ok 👌 onegai ≥3≤ヾ(≧▽≦*)o＼（○＾ω＾○）／( • ̀ω•́ ). -
+2 .
Facil es hablar de mi, Dificil que sean como Yo
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Wau... esta historia... no se realmente como va a terminar xDD jajaja en serio, pero vamos a ver
Sasuke que sádico eres y que bruto... espero que Naruto se revele y te deje mientras te ahogas con tu propia saliva... pero buaaano
Por favor continualo pronto, me encanto jajajjaja,
Bueno espero la conty con ansias ^^. -
Malenita Adita Basilio+1 .
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Esta lindo tu fic 😍 me gusta mucho,sigue asi ... Espero pronto nos traigas la conti de esta historia por que quiero saber que pasara con el pervertido del Teme y con Naruto... Y si se puede que en uno de los próximos capítulos pongas Lemon └（★ｏ★）┐
Sigue esforzándote
Te leo luego mattane
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+1 .
wua esta muy buena la historia espero conti . -
Marina Suazes+1 .
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Por favor continualo estava hermoso
Porsierto me gusto que pusieras ala hinata de road to ninja
Maldito sasuke-kun te amo pero no puedes hacerle eso ah mi naruto-kun yo lo amo contoda mi alma y no te permitire que le hagas nada
En fin adoro tu fic continualo porfis
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kaiko shion .
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Sugoiiii¡¡¡ me encanta este fic es tan adsafdfadssa Espero conty pronto BYE
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+2 .
si todo sale mal... mátalos cuando estén durmiendo ~
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Uuuua chumachos xDD aquí les traigo el capitulo dooos c: ajajajaja saben que HOY ES MI CUMPLEAÑOS <-< felicitenme :c okya pero bueno quería decirlo xDDD me merezco rws por que es mi día (?) lalalalalala lean :'D
Capitulo 2: Mi salvador.
-Itachi...- susurré levemente mientras impactaba contra el suelo. Sasuke me había tirado al verlo a él, sus ojos negro estaban abiertos mientras Itachi solo lo miraba con desagrado. Sí, él era nuestro hermano mayor, Itachi Uchiha, y mi salvador en varías ocasiones. Él fue el único, a parte de Mikoto, en no aprobar que un niño de tan solo cinco años fuera el juguete sexual de un niño de doce y, al igual que ella, me tenía un cariño incondicional.
-¿Qué estabas pensando Sasuke?- soltó él con desprecio. Me miró y me ayudó a levantarme, cuando estuve en pie se puso a mi altura y comenzó a secarme las lágrimas con sus manos.- Naru-chan, vete a tu cuarto, por favor.- Asentí y me fui de allí. Sabía que ahora comenzaría una pelea. Yo siempre, por petición de Itachi, abandonaba el salón para marcharme a mi cuarto, cuando lo hacía ellos comenzaban a gritarse y a decirse cosas horribles que yo podía escuchar, así horas y horas... Horas infernales donde yo lloraba todo lo que podía, porque me dolía, me dolía que él me tratara así.
-No sé ni cuentas veces te he dicho que no lo trates como si fuera una de tus putas.- Le oí decir a Itachi.- Es tu hermano Sasuke, Tu hermano.-
-¿Mi hermano? já, es solo un regalo de papá, nada más.- Mi corazón se apretó y lo escuché: una cachetada de mi hermano mayor a Sasuke. Me asomé un poco para ver que era lo que estaba pasando, un enorme silencio se había formado y me estaba preocupando, cuando me situé en un sitio donde viera con claridad... Sasuke con la mano en la mejilla, mientras sus ojos estaban aguados y su cuerpo temblaba, estaba sentado en el sofá con Itachi mirándole con ira.
-¡Qué solo es un regalo de papá!- se pronunció con enfado, pero luego se calmó.- Te lo advierto, como vuelva a venir a casa o como alguien me avise de algo...- paró para poner una mirada seria.- Me llevaré a Naruto conmigo.- Los ojos de Sasuke se abrieron mucho más, se levantó del sofá y se acercó a la cara de Itachi, veía el odio que se formaba en sus ojos.
-No te atreverías.- Itachi solo sonrió como cualquier Uchiha haría.
-¿Estás seguro?- Le preguntó haciendo que Sasuke volviera a temblar, había conseguido romper su barrera de seguridad como solía hacer siempre que tenían una pelea así. Aunque, en cierto modo, esta pelea era diferente y no solo por la nueva amenaza sino... lo era, así de simple. Vi como Sasuke apretaba los puños, noté como no paraba de temblar y de como las lágrimas habían empezado a caer, porque Sasuke, únicamente, lloraba delante de Itachi, solamente, se desarmaba delante de Itachi, él, solamente él podía hacer que Sasuke cayera.
-Él... él... ¡ÉL ES MIO!- Le chilló.- No me lo puedes quitar... ¡No puedes!- cayó al suelo, aún llorando.- Te mataré como lo hagas.- Lo... lo había... ¡Lo había amenazado! Itachi lo miró con repugnancia y un tanto enfadado.
-Eres penoso Sasuke.- pronunció antes de girarse y empezar a caminar hacía las habitaciones, pero luego paró y volvió a voltearse.- Has caído tan bajo...- y retomó su camino. Yo me asusté y fui corriendo a mi habitación, me tiré encima de la cama y me hice el dormido. Oí la puerta abrirse y se acercó a mi.
-Naru-chan... ¿estás dormido?- hice como si me despertara. Pestañee para que diera la sensación de que me comenzaba a despertar.- Gomene... pero... ¿Quieres venir a mi casa esta noche o prefieres quedarte aquí?.- Me dijo con una sonrisa. Yo... no sabía que hacer, no quería quedarme en esta casa por si acaso que Sasuke pagara su frustración conmigo, pero tampoco quería abandonarlo... Aunque...
-M... me iré contigo.- solté inseguro. Ahora me sentía mal... no quería dejarlo pero si quería... en mi cabeza habían muchas cosas en ese momento, mucha confusión y no podía pensar con claridad. Él se acercó a mi armario y cogió un par de ropa y unos pijamas. Luego agarró mi mochila del colegió, me la extendió y me dijo que preparara todo para mañana. Cuando estuvo todo preparado, cogí todo el aire que pude con mis pulmones y salí de mi cuarto, detrás de Itachi, con un miedo increíble. Llegamos a la sala y Sasuke no estaba pero de repente pareció de la cocina con un vaso de agua que dejó caer al verme a mi y a Itachi con las maletas.
- Naruto no me digas...- Yo no le contesté solamente le miré y tragué saliva.
-Se viene conmigo.- Habló Itachi.- me da igual lo que digas o hagas.- sentenció.
Sasuke empezó a mover la cabeza de un lado a otro como si no lo entendiera, yo simplemente miré al suelo, no quería verlo. Antes de darme cuenta el estaba delante mio, se había agachado para quedar a mi altura y me había agarrado la cara con las dos manos.
-¿De verdad te vas a ir con él?- me preguntó, intenté escapar de su agarré pero fue imposible.-Contéstame.- Lo miré a los ojos y estaba asustado. ¿¡Por qué ahora se pone así!? ¿no ve el daño que me está haciendo? Intento no llorar pero mis ojos se humedecen, ''Sí'' consigo decir. Él me suelta la cara sin poder creérselo.- No me hagas esto, por favor... no me hagas esto.- Mi corazón se estruja cada vez más y yo no puedo detener las lágrimas que no paran de caer de mis ojos. Sigo sin entender el porque, sigo sin saber para que hace esto ahora... quizás sea por el dicho ese de ''No sabes lo que tienes hasta que lo pierdes'' pero no... no puede ser eso.
-Déjalo ya Sasuke.- habló Itachi después de un rato callado. Me agarró de la mano y me jaló fuera de la casa. Cuando salimos él estaba en la puerta.
-Todo esto es tu culpa Itachi.- gritó pero él tan siquiera le hizo caso.- Le metes ideas en la cabeza.- Itachi tenia una paciencia infinita no se inmutaba por todas aquellas cosas que Sasuke le decía. Llegamos a su coche y me abrió la puerta, yo entré y miré para detrás. Él todavía estaba en la puerta, mirándome, porqué sabía que esa mirada era para mi. Oí como Itachi arrancaba y como el coche empezó a moverse.
A la mañana siguiente me levanté en mi habitación, la habitación que tenía antes de irme a vivir con Sasuke. No recordaba mucho después de aquello así que me supongo que me dejaría dormir en el coche de Itachi-nii. Salí de la cama y de mi habitación, fui a la cocina y allí estaba él, silbando una canción mientras preparaba el desayuno.
-Buenos días, nii-san.- saludé. Él me miró y me respondió con una sonrisa, me senté en la mesa y esperé a que el desayuno estuviera listo. Cuando lo estuvo, lo comí, como si no hubiera comido en días, cosa que me extrañó bastante pues no suelo comer demasiado.
-Vaya Naru-chan, tenías hambre.- me dijo Itachi mientras recogía el plato de la mesa.- ve a prepararte en diez minutos nos vamos.- Me levanté de mi sitio, caminé hacía mi habitación, busque lo que tenía que ponerme y me preparé. Cuando salí, Itachi estaba buscando las llaves que enseguida encontró. Cuando estuvimos en la mitad de camino él me miró, aunque yo no lo estuviera viendo, sabía que me miraba, lo podía ver por el espejo.
-Tranquilo, esta tarde podrás volver con él.- soltó después de estar un rato viéndome.- Esto solo era un aviso.- continuó.- pero créeme... si Sasuke hace algo más, te vendrás a vivir conmigo de inmediato.- Suspiré, no tenía nada que decir.
Al llegar, vi, como siempre, a Hinata esperándome en la entrada. Se la veía extrañada, creo que por el echo de que no llego a la hora que suelo aparecer.
-Hina-chan.- la llamé sin alzar la voz, ella me miró y vino corriendo hacía mi.
-¡Naruto!- gritó saltando encima mio.- Maldita sea... pensé que te había pasado algo.- yo negué con la cabeza.- Entonces... ¿Por que llegas tarde?- Exigió saber, yo tragué saliva
-Me trajo Itachi.- Hinata abrió los ojos, sabía lo que pasaría ahora.
-¿¡Qué te hizo ese desgraciado!?- Gritó haciendo que un par de personas nos miraran.- Por eso vino ayer a recogerte ¿no?.- empezó a examinarme de arriba a bajo.
-No Hina-chan, no me hizo nada.- Ella me miró sin creérselo.- Itachi llegó a tiempo.- Suspiró aliviada.
Después de esos me hecho una bronca por no haberla avisado y por dejar que Sasuke me hiciera lo que quisiera... pero que iba ha hacer... Mi cabeza me decía que no lo obedeciera y que me fuera de su lado, pero el corazón me decía otra cosa muy distinta y estaba claro quien ganaba en esta batalla.
No os voy a contar como transcurrieron las clases, ni que hicimos, porque realmente eso no interesa ni es necesario.
Cuando salimos del colegio, nos despedimos como habitualmente lo hacíamos, cada uno se fue por su camino. En el momento que llegué a casa, los nervios se apoderaron de mi. La mano con la que sostenía la llave comenzó a temblar y no sabía que hacer. Me senté un rato en el bordillo de la puerta hasta que me tranquilicé. Me levanté y cogiendo aire, volví a sacar la llave y abrí la puerta encontrándome botellas de alcohol tiradas por el suelo, algo blanco, me supongo que droga y... acabo de pisar algo... Miré al suelo y allí lo vi: Una sustancia blanca y pegajosa... era... ¡Era semen!
-Joder.- grité a lo que al darme cuenta me tapé la boca, pero fue tarde por que él me había visto.
-Naruto.- pronunció para luego venir hacía mi y sin previo aviso besarme, no fue uno de esos besos lentos y suaves, fue un beso desesperado donde, a la primera de cambio, metió su lengua en mi boca. Me quitó la mochila y me fue tendiendo en el suelo. Comenzó quitándome el suéter y abriéndome los botones de la camisa.
-Te extrañé.- Mi corazón latió con fuerza. ¿Había oído bien?
Cuando terminó de desabotonar la camisa atacó mis pezones lamiéndolos a su antojo, esto a mi me producía leves orgasmos. Cuando terminó con ellos, bajó mi pantalón, junto con mi boxer y comenzó a lamer mi miembro como si fuera una paleta de helado. Yo por inercia entrelace mis manos con su cabello pero...
-Suelta.- me ordenó.- ¿Cuántas veces te he dicho que no me puedes tocar?.- Cierto... las reglas.
''No puedo besarle, no puedo tocarle y tengo que hacer todo lo que él quiera sin rechistar.'' tres sencillas reglas que debía respetar. Si no, un castigo será impuesto. Dejó su trabajo con mi pene para y sin avisarme la metió haciendo que yo gritara, pero no de dolor, si no de placer. Por que ya estaba acostumbrado a que hiciera eso.
Mis gemidos inundaban todo el salón, tenía que reconocer que Sasuke era muy bueno en el sexo.
-Extrañaba tanto... tu estrechez.- y entonces lo comprendí, por eso estaba así, por eso había dicho que me ''extrañaba'' no me extrañaba a mi si no... extrañaba metermela, ese día tendría planeado hacerlo pero como Itachi apareció... Mis ojos se aguaron y desconecté de mi. Sé que él seguía pero yo no estaba, porque todo a mi alrededor se estaba nublando y ya no sabía ni donde me encontraba. Sentí como llegaba a su orgasmo y como gracias al condón que llevaba no se corrió dentro de mi. Salió, sé quitó el condón y lo tiró al suelo.
-Quiero esto recogido.- me dijo mientras se levantaba.- va a venir gente y no quiero que vean esto.- continuó.- así que date prisa y limpia.- sentenció marchándose del salón y dejándome tirado en el suelo. Mi corazón me dolía y sin darme cuenta, aquellas lágrimas que había intentado retener salieron de mis ojos, escurriendo por mi cara.
Lo recogí todo como me ordenó, luego me duche y me quedé en mi cuarto. Escribiría un poco, quizás eso me haga bien y me quite la angustia que llevo encima en estos momentos. Estuve un buen rato escribiendo, tenía como 10 hojas ya escritas cuando escuché la puerta y oí la risa de los amigos de Sasuke. Seguí escribiendo ignorando el griterío por parte de los invitados. Pasó el rato y de repente Sasuke abrió la puerta.
-Naruto ven.- me ordenó sin más. Yo le hice caso y fui con él. Llegamos a la sala y allí estaban sus invitados, un chico de pelo naranja y complexión fuerte, otro chico de ojos violetas, dientes a lo tiburón, pelo blanco con las puntas azules y luego una chica que conocía perfectamente, ya que no era la primera vez que estaba en casa, tenía el pelo rojo y llevaba gafas.
-Así que tu eres el hermanito de Sasuke.- habló el de pelo blanco.- me gusta.- se dirigió a Sasuke.
-Tienes un buen cuerpo, pequeño.- se pronunció la chica de pelo rojo.
Empezaron a ''halagarme'' y yo me ponía rojo de la vergüenza; Sin saber como, ni porqué Sasuke me abrazó por detrás mordiéndome la oreja y gemí.
-Vete a mi habitación y ponte lo que está encima de la cama.- me susurró contra el oído mientras se restregaba contra mi y sus visitantes me miraba con mirada lasciva. Obedecí y fui a su cuarto donde encontré la cosa más horrible del mundo. Un... un disfraz de gatito, más o menos. El disfraz costataba únicamente de: Un chaleco de cuero a juego con una braga hecha del mismo material, orejas de gato negras y para finalizar, guantes y zapatos del mismo color simulando que eran patas. Me puse pálido, pero al final me lo puse. Salí sonrojado a más no poder y allí estaban ellos otra vez con con esa mirada.
-Y... ya está.- dije como pude, la vergüenza me ganaba.
-Uhmm...- escuché pronunciar al pelinaranja mientras el peliblanco se relamía los labios.
-Ven aquí pequeño.- me ordenó el chico dientes-tiburón. Miré a Sasuke y el asintió, yo me acerqué a él.- sabes... me gustan tus ojos.- Se acercó a mi, con intención de besarme pero...
-No lo beses.- él paró en secó y sonrió mirando a Sasuke. Me volvió a mirar, se acercó a mi abdomen y lo lamió, sentí repugnancia pero tenía que callarme. Siguió con su lengua hasta mis pezones y los lamió, quería vomitar, estaba asqueado. De repente paró y abrió sus piernas indicándome que me sentara. Cuando lo hice metió su mano dentro de la braga de cuero y comenzó a tocar mi miembro. Todos miraban incluido Sasuke, este lo mataba con la mirada. Yo no podía retenerme y gemía.
-Suigetsu, basta.- Habló enfadado. el chico de ojos lilas quitó su mano de allí.-Si lo quieres ver gemir...- sonrió.- que se toque él mismo.- finalizó ampliando la sonrisa.
¿¡Qué me qué!? ¿Tocarme delante de esta gente? Tragué saliva... ¿Qué haría? le haría caso a él o me sometería a el castigo de después...
Continuará...
Pasó las horas sin comer.... *para de cantar al darse cuenta que la miran* mehehehehehehe ¿qué tal? les gustó?? espero que sí y si no... tomad, 50€ *son de mentira 7u7*
Bueno pues eso que adiosiiito C: oooooh y gracias a los que comentarooon anterior mente C:
byee. -
Marina Suazes+1 .
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esta muy padre me encanto , por sierto feliz comple años espero la conty.
nos leemos luego. -
I <3 Sasunaru+1 .
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hola.. porfa continualo, a mi me gusto mucho jejeje espero que Naru no lo haga... NARU!!!!!!!!!!!
. -
+1 .
whhaaaaa! SASUKE ESTÚPIDO COMO ME GUSTA QUE ITACHI LLEGUE Y LOS ENCUENTRE EN "SEMEGANTE SITUACIÓN " Y QUE SE LO LLEVE PORQUE YA TE LO ADVIRTIÓ LA NOCHE AYER
como te atreves a poner a naruchan en semejante situación y casi casi tratarlo como casi un actor porno
para que les de un "espectáculo" a ustedes malditas putas depravados se ve que les falta ser amados Son unos 4ever alone, búsquense amor o una novia o puta para que los complazca
espero que Naru-chan te deje y solo así lo valores
me gustó el capitulo
Zayo~♡
゜*☆○o｡..:*･(*´-ω)(ω-`*)･*:..｡o○☆*ﾟ
Edited by KASAYA CHITATSU - 25/4/2015, 10:16. -
kaiko shion+1 .
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Sasuke es un maldito, Itachi que se lo lleve y Sasuke que aprenda a cuidar sus cosas je bueno espero conty y que sasuke aprenda alguna leccion bueno pido demasiado . -
Marina Suazes+1 .
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amiga no quisiera apurarte pero...
SUBE YA LA CONTY POR FAVOR.......!!!!!!. -
+1 .
pobre Naru noo le agan nada que se lo lleve itachi odio a sasuke es un #%&$/&$&% no se merese a naru .
Así que soy tu juguete sexual... ¿Estás seguro? -CONGELADO~¿Qué pasa cuando tu padre te compra un doncel para que se convierta en tu juguete sexual? ¿Y qué pasa cuando tu madre le coge tanto cariño que lo convierte en tu nuevo ''hermano''? No |
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