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naru_naru
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SPOILER (click to view)¿Qué hay de nuevo, viejo? xD Bueno, ya volví con el capítulo 7 que, por segunda vez, me queda súper extenso, pfff, estoy muerta xD antes de volver a subir me tomaré un respiro. ¡Gracias por la paciencia y disculpen la tardanza!
En este capítulo Naruto va entrando en un estado de depresión, no una en su totalidad pero algo así. Tranquil@s Sasuke le ayudara :3
Sus comentarios son energía para mi, por eso he de agradecer en especial a: Usura99, Ferb-chan y Bloody_Kat. Encantada les dejó esto.
*La escritura de esta manera indica que Naruto está hablando en su mente con el espíritu/demonio/ fantasma. Como quieran llamarle xD.
Disclaimer: Los personajes de Naruto no me pertenecen, estos son de Masashi Kishimoto. Más el drama de la historia si es mía.Amor del Inframundo. Por Naru_Naru.
Rompiendo los límites.
"Tengo miedo que la oscuridad se apoderé de ti"
Un nuevo día en la sagrada iglesia católica; ya era de mañana y algunos jóvenes hacían planes para sus vortas vacaciones, y unas muy bien merecidad ya que después de largos meses de estudios y exámenes le habían otorgado una semana y media de descanso, no es mucho ¿verdad? pero algo es algo.
La mayoría de ellos habían decidido visitar a su familia, mucho tiempo sin verles no era bueno. En la habitación del Uchiha y el Uzumaki también era un nuevo día pero no tan agradable como siempre solía serlo.
-Espera dobe, dentro de la poceta; dentro. -Animaba Sasuke en el recorrido con Naruto desde su cama hasta al baño. El menor caminaba descornido y muy recostado del hombro de su novio quien le llevaba con toda la velocidad que podía al cuarto de baño.
-No puedo... aguantar. -Susurró como pudo entre arcadas y sin más echó todo lo que había consumido el día anterior en parte de la ropa del pelinegro y en la poceta. Se arrodillo frente de ella dejando salir todo eso que llevaba dentro de su estómago.
-Mierda. -Se quejó el Uchiha mirando su camisa llena de fluídos de Naruto. Se la quito de inmediato y la dejó olvidada en alguna parte del baño; recogió el cabello de su compañero evitando que le estorbara en su labor; o se llenara de vomito.- Eso es, debes de botar todo eso. -Lo único que se oía en la habitación eran las arcadas del menor junto a sus jadeos desesperados.
Cuando por fin dió por terminada su ebacuación, Sasuke le ayudó a levantarse y le colocó frente al lavamano.- Lávate un poco la cara y tal vez te quieras quitar ese desagradable sabor de tu boca.
-Eso puedo hacerlo yo solo... Gracias. -Contestó apenas y con un intento de sonrisa. Su aspecto era tan deplorable que el mismo se asustó al verse en el espejo. Terribles ojeras, ojos levemente rojos y una cara de muerto viviente que lograba espantar cualquier persona.- Estoy hecho mierda. -Dijo mientras tomaba una buena porción de agua entre sus manos y humedecía el rostro con ella. Sasuke le miraba recargado de la pared en una pose chulesca supervisando todo lo que el menor hacía.
-Y cuéntame... ¿Qué tal tu primera resaca? se ve maravillosa. -Dijo con sarcasmo mientras que el rubio negaba a su pregunta. Su cabeza estaba dando pinchazos de dolor consecutivos, sin mencionar el mareo que llegaba en su estado de lucidez. Sasuke torció su boca en una mueca de disgusto dejando escapar un suspiro.- Eso te enseñará a parar cuando te digan.
-Tú también has tomado de más. -Contrataco el rubio sin muchas energías; tomó dentifrico y se dispuso a cepillar sus dientes para dejar un agradable sabor a menta en su boca y no el que llevaba en ese momento.
-Yo paré cuando ya estaba empezando marearme; no como tú que paraste cuando ya ni tenías la noción del tiempo. -Aclaró el Uchiha mirando a Naruto directamente a los ojos por medio del espejo que se encontraba delante del lavamano;- No me ves en el mismo estado que tú, ¿cierto?
-Ya, ya. Ya entendí. -Mojó por última vez su rostro al momento de coger una toalla y secarse con ella.- Nunca había tomado algo tan poderoso como lo de ayer. -Se apoyo de Sasuke mientras caminaba por el pasillo que daba con las camas, al verla se recosto en ella y se sobó las cienes con una expresión de incomodidad.- Por casualidad ¿tendrás...? -Calló al sentir la pastilla que Sasuke le lanzaba.- Gracias... eres un experto en esto, ¿no? -La tomó directamente y sin agua.
-Experto no, pero si sé que hay que hacer. Lo más básico. -Caminó al armario hasta sacar una nueva remera y usarla. Fue al lado de su novio y se sento en la cama junto a su costado.
-Lamento lo de tu camisa, Sasuke. -Susurró algo apenado. El Uchiha hizó un gesto con las manos restándole importancia.
-Ya da igual. -Espetó sereno y Naruto sonrió aún algo avergonzado por aquello.- ¿Qué piensas hacer en esta semana? algún plan en específico. -Preguntó esperando un si como respuesta ya que el rubio era muy calculador y determinado, siempre conseguía un tiempo para tener alguna salida para los dos. Efectivamente, asintió con la cabeza.- ¿De que va?
-Pensé en que ambos podríamos ir a mi casa, para que conozcas a mis padres y yo deseo verlos, les extraño mucho. -Admitió con un toque de nostalgia. Si que había deseado independizarse de ellos pero por más estrictos que hayan sido con él no podía tenerles tanto tiempo sin verles. Sasuke quedó pensativo un poco sin alguna expresión específica.- ¿Qué te parece? será divertido estar en mi casa ambos.
-Solo una semana. No más. -Dijo serio y el menor rió en su cara.- ¿De que te ríes?
-Ese es el único tiempo que tenemos, tonto. Una semana. Al parecer tienes memoria a corto plazo. -Le picó un poco riendo mucha más al ver la expresión de Sasuke, quedó en silencio al oír el retumbar de sus carcajadas. El dolor de cabeza aún no pasaba.
-Será mejor que te calles para que el dolor disminuya. -Naruto contestó un si y cerró los ojos relajándose desde su posición; pasaban minutos de silencios entre los dos, donde aveces chocaban algunas miradas.- ¿Por qué iniciaste la pelea de ayer? -Preguntó Sasuke repentinamente y Naruto abrió más los ojos. La verdad ni él mismo recordaba lo que el rubio le había dicho.
-No lo recuerdo, pero ha sido algo muy profundo para que haya reaccionado así. Sabes que no me gusta la violencia. -Susurró triste lo último sintiendo una inmensa culpa en él.
Después de dieciocho años de vida sin emplear esos métodos tan hostiles y desagradables; había roto muchos límites estando al lado de Sasuke: golpeó a Deidara por la ira que había sentido al escuchar sus palabras. Comenzó a faltar a las misas en ocasiones que Sasuke se lo pedía. Tomó hasta llegar a la ebriedad. Cualquiera diría que el Uchiha era una mala influencia, el no lo veía así, tal vez todo eso había estado dentro de su ser pero nunca lo habí dejado libre por las estrictas normas de sus padres. Una de las normas que no había incumplido era el ser casto, o por lo menos Sasuke aún no llegaba a tal extremo, por supuesto que sabía que no le obligaría pero... si en ese momento ¿él llegara a desearlo? rompería todas sus reglas y la verdad que esa en específico le daba igual, era algo que deseaba... intimar con la persona que realmente ame.
-¿En que piensas tanto? -Le interrumpió Sasuke en su análisis mental. Sacudió su cabeza alejando cualquier culpa que tuviera, no debía sentirla, lo que hacía era por una buena razón, era todo por Sasuke.
-Nada, simplemente en el dolor de mi hombro. -Lo movío en forma de círculo mientras se quejaba. Sasuke le miro expectante hasta que le dió vuelta dejándolo boca abajo. Naruto se quejó un poco, algo alterado por la repentina acción del pelinegro que se había colocado a horcajadas un poco más arriba de sus glúteos pero sin llegar a su espalda.- ¿S-Sasuke...? ¿qué h-haces? -Tartamudeó algo sonrojado intentado levantarse de aquella posicion tan comprometedora.
-Pienso ayudarte con ese dolor. No te muevas. -Mandó desde arriba y Naruto asintió respirando profundamente por la nariz confiando en el moreno. Comenzó haciendo unos movimientos cerca de sus hombros, masajeándolos suavemente y relajando los tensos músculos de Naruto, quien de a poco iba quedando más suelto y respiraba más lento, sintiendo muy bien las jodidas manos de Sasuke. Luego la pasó directamente a los hombros donde continúo con los apretones sonriendo al ver que su novio estaba totalmente pacífico en la cama.- Estabas muy tenso; No era solo dolor, ¿cierto?
-Eres muy bueno en esto. -Ronroneó con los ojos cerrados, el Uchiha sonrió de medio lado dando, entre los hombros y el cuello volvió a apretujar y esta vez escucho el gemido de satisfacción de Naruto, que parecía estar flotando en una nube sin escuchar las preguntas de Sasuke.- Ahí, de nuevo.
-Naruto, ¿seguro que es solo dolor? -Repitió por enésima vez y el rubio negó con la cabeza.- ¿Entonces?
-Creo que... me estoy estresando mucho. -Cerró los ojos y luego sonrió.- Pero con estos masajes todo se va. Ummh. -El Uchiha quedó en un silencio pensativo, continuando con los masajes en los lugares indicados. Tenía algo que hablar con él. Algo importante.
-Naruto, te diré algo muy importante y cuando lo haga no quiero que te vuelvas una fiera.
-Si, si. Lo q-que digas. -Continuaba sumiso en su mundo de relax y mimos por parte de Sasuke. Nada de nada le sacaría de allí.
-Cuando mi maldición haya terminado, nos separaremos. -Abrió los ojos abruptamente y se tensó nuevamente bajó el cuerpo de su compañero. ¿Terminar? ¿que quería decir con eso?- Será lo mejor para ambos, bueno para ti. -Dijo y dió por finalizado el masaje. ¡Que equivocado estaba! tan rápido como llegó el momento de paz se fué.
-¿T-terminar? ¡¿que quieres decir con eso?! -Se movió debajo de él intentando alejarse y buscar algo de espacio. Se sentía como un idiota, ¿Sasuke le usaba? ya no sabía ni que creer. Si que fue ingenuo. El mayor se alejo un poco intentando hablar pero Naruto se había parado de la cama sin miramientos.- Vuelvo luego, quiero respirar.
-¿Adónde vas? -Preguntó al ver como el rubio se vestía rápido. Le dirigió una mirada fugaz donde el mayor pudo entender que algo no andaba bien con él.- ¿Qué está sucediendo contigo? No me has dejado terminar.
-No es necesario que me lo termines de explicar. Solamente necesito ir a la iglesia. -Explicó atándose las trenzas apresurado. Sasuke frunció el entrecejo molesto y se levantó de la cama colocándose en defensa. - ¿Por qué me ves así?
-Te he molestado. -Preguntó o mejor dicho, confirmo, aún con la cara fruncida; el rubio negó de inmediato pero sin mirarle directo al rostro.- Entonces ¿por qué de un momento a otro te levantas tan bruscamente?
-Ya te dije, necesito ir a la iglesia. ¡Puedes dejarme respirar! -Explotó ya más estresado que antes por el tormento que le producía Sasuke. Caminó a la puerta tomando aire dificultosamente, ya que las enormes ganas de derramar lágrimas hacían que un fuerte nudo se instalara en su garganta. Dándole la espalda al pelinegro se despidió antes de salir pero logró escuchar claramente la frase que este le había soltado al final.
-Maldita sea; me esfuerzo tanto por ti y así me tratas tú. ¡Solamente deseo tu bien! -Rugió en voz alta atrás de la habitación. Naruto pudo atinar a huír de la Universidad, por las calles que le dirigirían a la iglesia; ni siquiera dejó que se explicara, es que... no había nada más que oír. Había sido muy claro.
Su cabeza estaba en otro lado escuchando esa diminuta voz que le hacía recordar lo mierda que había sido con Sasuke, salir así sin una explicación convincente.
*Pero él también ha sido mierda contigo por utilizarte de esa manera, Naruto... Se giró buscando a alguien que le hablara pero nada, todo el mundo estaba en lo suyo sin prestarle un ápice de atención.
Tenía que hacerlo, era momento de confesarse; todas esas presiones que tenía guardadas y que no podía confiar en Sasuke las debía liberar de una buena vez por todas, pero no con cualquiera, necesitaba oír de nuevo la voz de Dios como antes, cuando era pequeño y se sentía solo él podía escucharla. Todo lo que estaba haciendo era por alguien que amaba, lo podía entender y aceptar, pero ese amor estaba rompiendo muchas reglas, entre ellas, los diez mandamientos a los que había aprendido a cumplir.
¿Qué era más importante? estaba muy claro para él, Sasuke. Pero la sociedad no lo verían con lo mismos ojos, los curas, los cardinales, sus amigos y sobretodo, sus padres, ellos si que no aceptarían nada de eso, tal vez si se enteraban lo mandaran de patadas al vaticano para borrar esos pensamientos impuros. Y lo que más lamentaba es que Sasuke también le negaba ese amor al cual se estaba acostumbrado, era una estaca en el alma.
No se había fijado cuando en el cielo nubes oscuras hicieron su aparición trayendo como regalo muchas gotas de agua, empapándole desde la raíz. Su paso por eso no acelero, le daba igual. Después de una hora allí estaba, parado a la entrada de la iglesia. Miró una escultura donde representaba la crucificción de Jesús y eso le trajo el recuerdo de su niñez.~Flash Back~
-Naruto, tú no puedes querer a ese niño que pasa todos los días por aquí. ¡No lo puedes querer de esa manera! -Exclamo Kushina delante de su niño, quien se encojió en si mismo por la horrible reacción de su madre. Faceta que nunca antes había visto.
-Pero yo lo quiero mamá, lo quiero como tú y papá se quieren. -Respondió seguro de si mismo, estaba molesto por las condiciones que su madre le ponía, ¿por qué no podía?
-No naruto. Tú a tus catorce años aún no sabes que quieres. -Le tomó de los hombros e hizo que sus miradas chocaran. No sabía como controlar ese momento, como demostrarle a su hijo que eso era "malo".- A Dios no le gusta que tú quieras a otro niño, tienes que querer una niña. -Naruto frunció el ceño con los brazos cruzados, ¿por qué su mamá insistía tanto?
-Dios es amor mamá, él ama y desea que amemos. ¿A quien le importa el cuerpo en que esté? al final somos almas que merecen amor. ¿Cómo respondes eso...? -Kushina frunció el entrecejo y le mostro un crucifijo a Naruto quien lo miró sin entender.
-Jesús fué avergonzado, maltratado, lastimado y crucificado por nosotros, los pecadores. ¿Sabes que lo que sientes es pecado? ¡él es de tu mismo sexo! no puedes quererlo. -Gritó ya con lágrimas en los ojos, Naruto abrió los suyos sintiéndose mal por hacer sentir a su madre. Aún no le daba una verdadera razón para eso pero asintió un poco dando a entender que ya comprendía su punto de vista.
-Entiendo mamá... Lo siento. Por favor no te pongas así.
-Naruto, quiero que tengas este crucifijo y cada vez que lo veas, cada vez que veas a jesús en la cruz, recuerda esta conversación. Recuerda que eso es un pecado y se un chico normal. -Abrazó a su hijo y el asintió en automático y serio.~End Flash Back~
-Lo siento mamá... -Susurró para si mismo mientras se disponía a entrar. Pasó y notó que no había casi nadie allí, muy pocas personas. Mejor así. Pensó dando los pasos para llegar al lugar de oración, donde se arrodilló y comenzó a rezar, ¿sobre qué? sobre todo lo que estaba haciendo, las cosas de las cuales se había abstenido con mucho éxito, ahora las rompía sin algún problema. Su memoria le traicionaba, inconscientemente le traían de vuelta las duras palabras de Sasuke.
Una mala sensación se comenzaba a apoderar de él cuando pensó en todo el daño que ha hecho y hará, en lo egoísta que estaba siendo, en los deseos maquiavélicos que había tenido con anterioridad y sobretodo cuando recordo la maldita frase "cuando mi maldición haya terminado, nos separaremos."
*¿Qué solamente soy utilizado?
*si, si lo eres... Escuchó alguien contestarle y comprendió que era desde su cabeza.
Todo ese cumulos de emociones eran desbordantes y le hacían enloquecer, pensar en cosas terribles y llenarse de odio por ser él quien haya tenido que pasar por todo eso. Por primera vez en su vida sintió ira hacia su destino y hacia quien se lo haya mandado. ¿Por qué yo? ¿qué he hecho para merecer esto? ¿que acaso Dios no me cuidaría? esas preguntas rondaban por su cabeza, algo extraño de ello era el hecho que una voz siniestra fuera quien susurraba esas preguntas. La misma voz que le había contestado antes. Al final no le importaba, de todos modos tenía toda la razón.
Su respiración se acelero y en un momento epezó a hiperventilar. Dejó de horar mientras se mordía el labio inferior, un hilo de sangre bajo por su comisura y el simplemente le ignoró ¿dolor? en ese momento no había un dolor tan fuerte que superara el de su corazón. Las cicatrices del pasado afloraban en el momento menos oportuno hundiéndolo más aún en ese extraño trance.
-Naruto, necesito hablar contigo. -Escucho a su lado y levantó su cabeza en un brinco, ¿qué había sido eso? le pareció haber estado en un sueño, una ilusión. Miró al dueño de la voz y frunció el entrecejo con enfado al ver quien era.
-No tengo una mierda que hablar contigo. -Respondió molesto a Deidara que le miró sin entender su personalidad tan diferente a la habitual. Está bien que estuviera molesto, pero nunca lo había visto mirar así.
-De acuerdo, entonces, ¿puedo orar junto a ti? -Preguntó amablemente queriendo tomar un poco de tiempo con él. Naruto negó con la cabeza levantándose de ahí.
-Estaba por marcharme. -Soltó y Deidara le tomó del brazo en un movimiento rápido.- Suéltame.
-De verdad que quiero hablar contigo. Por favor. -Pidió con un tono realmente desesperado. Naruto miró su ojo algo hinchado, tal vez por uno de los golpes que le dió ayer. En su interior recapacitó sintiéndose culpable por la paliza propinada ayer, aunque el también recibió algo de eso.
*Se lo merecía... No tienes nada porque pedir perdón. Nuevamente la voz en su cabeza. Solamente sal de allí.
-Tienes diez minutos. -Contestó bruscamente y se sentó a su lado. Deidara suspiró pesadamente y luego se preparó a hablar.
-Quería disculparme contigo. -Naruto abrió más los ojos al escucharlo decir eso. ¿De verdad se disculpaba? bueno, no podía haber oído tan mal.- Cuando te conocí, simplemente me agradaste... demaciado. -Dijo en un susurro lo último y sus mejillas se calentaron, Naruto abrió la boca para querer decir algo pero fue interrumpido por el otro rubio.- No pude evitar acercarme más a ti, como amigo. Pero siempre deseando algo más... algo realmente prohibido. -Se dió una pausa- Pero entonces noté tu entusiasmo e interés por Sasuke. Aunque no te dieras cuenta, esa emoción iba más allá de la amistad
-Tú no tienes...
-Calla, que debo terminar. Cuando se volvieron la mejor amistad de la Universidad yo me vi desplazado a un segundo lugar y estuve obtuso a aceptarlo, no podía o mejor dicho no quería aceptar lo que yo sentía por ti. No podía creer que yo fuera gay. Lo que hice en la biblioteca fué por miedo e inseguridad. -Tragó grueso.- Lo hice porque me odiaba a mi mismo y como tú sentías algo parecido por mi, descargué mi odio en ti. No fue lo más sensato pero si lo más fácil. -Acomdó su largo cabello rubio en un movimiento mientras Naruto continuaba sin poder creerse la declaración que le hacía Deidara.
*¿Cómo debería tomármelo?
*Mal, él es un maldito que no merece perdón. ¿Cuánto no te ha hecho sufrir?
-En la fiesta, con el alcohol trabajando por mi recuerdo que intentaba demostrarte que me gustabas y pronto te diría que te quería, o más bien. Que te quiero. Y utilice muy malas palabras, trajó como consecuencia la gran pelea de ayer. Yo vine aquí para decirte todo esto pero más que nada, para pedir tu disculpa. Para rogar tu misericordia.
-Deidara... -Miró como el chico bajaba la cabeza en una reverencia. Le estaba rogando por su perdón y de verdad se le veía muy arrepentido, tanto que las palabras que soltaba le llegaban al alma. No eran solo frases vacías, era más que eso.
*No vale la pena que le perdones, ¿qué hay de todo tu dolor? eso el no lo repondrá jamás.
*Pero se lo merece... -Respondió por primera vez a la voz de su interior.
*Merece lo mismo que tu has sufrido, solamente así lo podrás perdonar y él será digno de tu disculpa.
*Creo que tienes razón pero...
-No tienes porque rogar nada... Tú siempre has estado perdonado. -Sonrió algo tímido notando los ojos acuosos de su amigo, quien le abrazó efusivamente con la cabeza hundida entre su cuello. La voz que había escuchado antes se debía silenciar en ese momento, no le incumbía en esos asuntos. Era cierto que Deidara le había causado algunos problemas, pero estaba arrepentido y solamente fue presa del rencor y el odio. ¡Él no quería serlo! por eso lo perdono, no le guardaría ningún.
-Gracias, Naruto. Mereces ser feliz con Sasuke. -Sonrió momentaneamente hasta ver que el rubio descomponía su linda expresión de alegría en una de tristeza.- ¿Quieres... hablar de algo?
-Sasuke y yo tenemos una relación fingida... -Contestó bajando su mirada y recordó la discusión de hace unas horas ya, porque el tiempo había pasado volando. Deidara le miró con ojos detallista. No le creía.- No me ama...
-Ja, tienes que estar muy confundido. -El menor le miró expectante, ¿cómo va a hablar de algo que no sabe?- Sasuke te ama, y eso lo puede ver hasta un ciego.
-Tú que sabras...
-Mucho... ¿sabes? antes te espiaba, y se puede notar el amor que transmiten, él a su manera por supuesto. Pero se ve que te ama. -Naruto aún no entendía.- Es una persona fría y algo tosca, sin contar que es muy reservado, bueno ese es su lado más utilizado. Lo demustra con todo el mundo a escepción de una persona...
-Pero, él me ha dicho que terminaría conmigo cuando... -Calló pensando que en eso no se lo podría contar.- Que terminaría conmigo muy pronto.
-Debe haber otra razón oculta. No soy un experto en temas del amor, -Se rascó un poco la cabeza con una sonrisa.- Pero sé reconocer cuando hay amor en una relación; tal vez tanto te has dicho que es una relación fingida que te lo has llegado a creer.
*No le hagas caso; si que es una relación tramada para su beneficio. Nunca te amó y todo era mentira...
*¡Cállate! no te quiero oír... Dijo frustrado. Esa voz le estaba volviendo loco.
*No me quieres oír porque es la puta verdad, niñato. Yo conozco a Sasuke y solamente quiere su beneficio.
*No es cierto... ¡No lo conoces!
-¿Naruto? -Preguntó Deidara notando como el menor parecía distante y algo ofuscado.- ¿Quieres que te acompañe hasta la Uni?
-De verdad crees... Que me ame. -Aún seguía dudando, era Deidara contra la voz de su cabeza.
-Si, él te ama y al parecer... eres lo único que tiene. -Dijo lo último algo tímido y alejado. El menor sonrió sabiendo que eso era verdad, Sasuke se lo había dicho tantas veces. No necesitaba esa tonta voz de su cabeza, el también conocía a Sasuke y podía estar seguro de él.
*Entonces, ¿por qué te dijo que quería terminar? ¡Oh!, y no sólo eso, justo después que terminará su maldición.
*Seguro tiene una buena explicación, algo que no le dejé decirme.
*Otra cosa... si te ama, ¿por qué no ha venido en tu busqueda después de salir tan abruptamente?
-¡Naruto! -El mencionado se levanto del asiento algo confundido, le pareció oír a...- ¡Naruto! -Le vió correr a su dirección junto a la de Deidara. ¡Era Sasuke! que venía totalmente mojado por la lluvia que ahora parecía cesar; como si supiera que ya no tenía motivo para seguir cayendo.
-¡Sasuke! -Gritó más fuerte aún yendo con él para abrazarle emocionado, con esa sonrisa tan característica de él. El pelinegro también correspondió besándole en la boca sin importarle una mierda que estuviera Deidara. ¡Hasta podría estar Juan Pablo II! pero el no pararía por nada, ahora más que nunca quería demostrarle a su novio cuanto lo amaba.- Lo siento...
-No, no lo sientas. Creo que fue un error mío en como decirtelo. -Contestó.- No quiero alejarme de ti, pero si debo hacerlo para que estés protegido juro que lo haré. Tengo miedo que la oscuridad se apodere de ti, como lo hizo conmigo antes. Tú no puedes caer en lo que yo sufri.
-El dolor se hace nulo cuando estás conmigo... Si tú te fueras, yo no podría controlarlo y caería en lo que temes. -Deiara miraba todo desde su lugar con una sonrisa de medio lado, viendo el lindo momento de ambos. Suspiró pensando que había hecho bien con venir acá justo ese día.-Yo lo soportaré todo por ti
-Yo te protegeré de todo porque... Te amo. -Le tomó de los hombros y clavó su mirada con la azul del rubio.- Lamento tardarme tanto para poder decírtelo es que... -Era complicado explicar sus sentimientos tan abiertamente como lo hizo alguna vez.
-Tranquilo, yo comprendo. -Sonrió inspirándole confianza.- Y también te amo. -Estuvieron unos segundos más así hasta que se soltaron. Naruto miró a Deidara con una sonrisa.- Gracias por todo, amigo.
-No hay de que. Gracias a ti. -Respondió con una sonrisa. Sasuke tomó fuertemente la mano del rubio menor, apretujándola y Naruto realizo el mismo gesto pensando que con Sasuke, le podría a todo. No hay razón por la cual dudar
*Su amor no perdurará por siempre y te lo demostrare, cuando menos lo esperes caeras en el odio, porque tu novio se habrá marchado de la faz de la tierra.
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Amor del Inframundo. (SasuNaru) (Lemon)Sasuke y Naruto, 2 chicos muy diferentes. El primero es un alma maldita y el segundo es un religioso. Por cosas del destino se cruzan y consiguen la respuesta a lo que ambos buscan. El amor. |
