Amenaza de Muerte (Capi 11) (FIC FINALIZADO)

Parejas: YamatoxTaichi y DaisukexTakeru

« Older   Newer »
 
  Share  
.
  1. Tem-chan
        +1   -1
     
    .
    Avatar

    Diosa del amor yaoi!
    Image and video hosting by TinyPic

    Group
    Member
    Posts
    1,358
    Location
    En un mundo perfecto con mucho yaoi y gente buena :) <3

    Status
    Offline
    Buuueeeeno!!! Aquí vengo con el último capítulo, el desenlace final de esta historia de amor espero que les guste y que lo disfruten si es que alguien lo lee.
    -------------------------

    Capítulo 11
    Habían pasado unas semanas, y la familia se había reunido, esta vez también estaba Daisuke y por algún motivo el padre de Taichi estaba presente en esos momentos. Takeru al final, después de dos semanas de espera había decidido que ya era suficiente y que no iba a esperar más, aunque la verdad era que Daisuke estaba más impaciente que Takeru por decirle a todo el mundo que ese hermoso rubio era suyo. En su caso entendía bien su posición por eso no lo había demostrado pero hacía bastante que quería decirle a toda la familia que tenía una relación con el hijo menor. Y ese era el momento.
    ―Takeru, hijo, ¿a qué vienen tantas prisas para reunirnos a todos? ―preguntó su madre un poco preocupada por la insistencia de su hijo por hablar.
    ―Bueno, es que… yo quería deciros una cosa, muy importante.
    ―¿Una cosa muy importante? ―preguntó ahora Yamato intrigado con todo eso.
    ―Sí, desde… antes de la muerte de papa, yo… bueno Daisuke y yo… ―suspiró y se dio un poco de valor― somos novios.
    Ante esas palabras hubo un momento de shock por parte de todos las personas que se encontraban en la sala. La madre no podía creerlo, su hijo era el novio de uno de los sirvientes de la casa… eso era extraño. Ambos eran hombres, si dejábamos de lado que el otro solo era un niño que había vivido en esa casa siempre entre la servidumbre. Entonces su hijo menor era gay… miró a Yamato unos momentos pensando en si él al menos sería normal, esperaba que sí.
    ―Entonces, ¿Vais en serio? ¿Sois pareja de verdad? ¿Os amáis? ―preguntó sin saber exactamente qué decir.
    ―Sí, vamos muy en serio y yo lo amo más que a nada ―le respondió su hijo con esa mirada decidida.
    ―Yo también amo a su hijo señora Natsuko ―le respondió el otro chico con una pequeña reverencia.
    ―Yo… quisiera que lo aceptarais ―dijo mirándolos ahora con una mirada más suave.
    De nuevo se hizo un pequeño silencio, era extraño que de repente el menor dijera eso, pero ¿que podían decir? Sí la cosa iba seriamente no tenían mucho que decir sobre el tema. Si se oponían era seguro que Takeru se enfadaría y la cosa no acabaría de manera feliz, y de todos modos si lo aceptaban y no iba tan en serio la cosa se acabaría cuando se cansaran del juego.
    ―Está bien, supongo que si es lo mejor para ti estará bien ―le dijo su madre con el último pensamiento en la cabeza.
    ―Gracias madre ―dijo con una sonrisa feliz antes de mirar a su hermano― ¿Y tu Yama?
    Yamato estaba pensando en lo que había dicho su hermano, era novio de Daisuke y lo aceptaba así sin más, él no tenía prejuicios por ello y aunque sentía inseguridad por eso había demostrado valor. Él también debería hacer un pensamiento e intentar aceptar lo que sentía por Taichi, se merecía una respuesta después de todo. Cuando escuchó esa llamada de su hermano levantó la cabeza.
    ―¿Eh? ―dijo recordando que tenía que decir si aceptaba o no la relación― por mi está bien mientras seas feliz Takeru ―le dijo tranquilamente antes de ver como su hermano sonreía feliz y miraba a su novio.
    ―¿Has visto que bien? Ya no tendremos que escondernos más ―dijo con una sonrisa feliz el menor, a lo que el otro chico asintió.

    ------------------------------------

    Después de un poco más de conversación todos se habían separado, Takeru y Daisuke por su cuenta, Yamato se fue a su cuarto y los dos adultos se habían quedado solos en la sala. Natsuko aún no se había recuperado de esa conversación, estaba bastante intranquila en esos momentos intentando comprender por qué había pasado eso. Su hijo menor era gay, eso tenía que ser porque habían hecho algo mal como padres, estaba segura de ello, suspiró pesadamente.
    ―Natsuko, no debes sentirte decepcionada por eso, no es nada malo ―le dijo Susumu intentando animarla un poco― recuerda que lo más importante para un padre es que sus hijos sean felices, y si ellos lo son estando juntos, ¿hay algo malo en ello?
    ―No es que sea malo, es que no es normal ―dijo esta como respuesta― quiero que sean felices, pero una relación como esta no será bien vista por la gente.
    ―La mentalidad de las personas va cambiando, yo creo que acabarán siendo aceptados.
    ―¿Tú crees? ―preguntó está un poco preocupada― ¿Y si no funciona?
    ―Eso es cosa suya ―le dijo como respuesta― ya no son unos niños, Takeru ya es mayor de edad, tiene que cometer sus propios errores y aprender a solucionarlos, si siempre los proteges nunca maduraran.
    ―Tienes razón, supongo que está bien entonces dejarles un tiempo para ver si están cometiendo un error o no.
    ―Sí, es lo mejor. Y que ambos sean hombres no significa que esto vaya a ser un error.
    ―Supongo… eso espero.
    Susumu acarició la mejilla de la mujer que había sido su amiga des de hacía mucho y le sonrió consiguiendo que esta le respondiera con otra sonrisa que le hizo sentir mejor.
    ―A parte siempre me queda Yamato ―dijo la mujer esperanzada.
    ―Yo de ti no confiaría mucho en ello ―le respondió el hombre un poco nervioso.
    ―¿Por qué dices eso?
    ―Porque… bueno, supongo que ya lo sabrás más adelante ―le dijo el otro intentando cambiar de tema.
    ―No puedes decir solo eso, habla ―le ordenó la mujer recuperando su comportamiento habitual.
    ―Se está haciendo tarde ¿no crees?
    ―Si te vas ahora no es necesario que vuelvas nunca más, cobarde.
    ―Lo siento, creo que las noticias es mejor tenerlas con un tiempo entre ellas, nos vemos.
    Dicho esto el padre de Taichi prácticamente huyó de ese comedor donde un poco más y firma su propia sentencia de muerte.

    ------------------------------

    Y al final llegó el momento en el que Taichi llegó de nuevo a su ciudad, dejó las cosas en su casa, se duchó y después de arreglarse se fue rápidamente a la casa de los Ishida para ir a visitar a su amado rubio, el cual tenía que darle una respuesta a sus palabras. Había pasado muy lento ese mes que había estado fuera de casa, más que nada porque estaba ansioso por saber la respuesta y también por ver al chico que ocupaba su pensamiento en todos los momentos del día o en casi todos. Se le había hecho un poco difícil resolver el caso porque su mente solo pensaba en cierto rubio, pero justamente porque quería verle había acabado resolviendo el caso tan rápido como había podido, era algo contradictorio pero suponía que el amor ya tenía esas cosas.
    Al llegar a la casa le dieron la entrada a la casa y se fue directamente a la habitación del rubio mayor para verlo. Llamó a esta y una voz cansada le dio la entrada pensando que sería su hermano o quizás su madre. Pero al ver quien era no pudo evitar sobresaltarse un poco y levantarse rápidamente de la cama donde estaba descansando después de un ajetreado día de trabajo.
    ―Hola, que suerte que no estabas durmiendo, aún, me habría sabido mal despertarte ―dijo feliz mientras entraba en la habitación de Yamato― ¿Cómo has estado?
    ―Ho-hola Taichi, ¿Cuándo regresaste? ―preguntó muy sorprendido el propietario de la habitación.
    ―Hoy mismo, pero no pude evitar venir a verte en cuanto llegué, aunque sé que es tarde.
    ―Está bien, no es tan tarde ―fue le respuesta del rubio.
    Estaba feliz de verlo, quizás no lo estaba demostrando mucho pero lo había echado de menos y había tenido tiempo para pensar en la respuesta que tenía darle. Creía que estaba preparado para dársela aunque se sentía un poco nervioso al pensar en que tendría que decir esas palabras. El valor no era su principal característica a diferencia del otro chico.
    ―¿Y bien? ¿Me echaste de menos? ―preguntó el chico de cabello castaño― Yo si a ti, quería resolver el caso rápidamente para poder regresar contigo, pero mi mente solo pensaba en ti y no me podía concentrar.
    Que el otro chico dijera eso de repente y de ese modo le sorprendía pero no por eso dejaba de gustarle, tenía que responder a eso así que lo miró e intentó conseguir un poco del valor que poseía la persona que tenía delante de él.
    ―Sí te eché de menos, y yo también pensé mucho en ti ―acabó diciendo aparentando estar calmado― en ti y en la respuesta que tendría que darte ―en esos momentos hizo un silencio y formuló la frase en su mente antes de decirla― me di cuenta de que yo puedo corresponder tus sentimientos, ya que yo también te quiero.
    Cuando el castaño escuchó esa respuesta lo miró unos momentos con sus ojos brillantes antes de acercarse más a él y abrazarlo fuertemente entre sus brazos. Después de eso y sin separarse mucho del chico, lo cogió por el mentón e hizo que lo mirara para poder besarlo en los labios sellando así ese amor que se tenían.

    -----------------------------------

    Y unos meses más tardes de nuevo se encontraban en la misma situación que anteriormente, todos estaban reunidos en ese salón aunque a diferencia de la vez anterior había una persona más en la sala y quien los había reunido era el hermano mayor. Y así cogiendo ejemplo de su hermano pequeño, aunque normalmente sea al revés inspiró antes de decir lo que tenía que decir.
    ―Bueno, esto parecerá un poco precipitado pero quería deciros que Taichi y yo estamos saliendo juntos.
    El silencio se hizo presente y Natsuko miró al padre del castaño con cara de malas pulgas, él lo sabía, estaba segura de que él lo sabía y que era por ese motivo que le había dicho eso antes de huir.
    ―Tú lo sabías, ¿verdad? ―le gritó al pobre hombre.
    ―No exactamente… pero… lo intuía… ―dijo un poco nervioso― vamos no te enfades.
    ―Como quieres que no me enfade si tu hijo se dedica a corromper al mío ―le dijo antes de golpear la mesa.
    ―No creo que… haya sido así ―dijo el otro chico defendiéndose― ¿Verdad chicos?
    ―Es verdad madre, a mí de verdad me gusta Taichi, él no me forzó ni nada.
    ―¿Por qué hijo? ¿Por qué tu también…? ―se preguntaba la mujer casi a punto de llorar.
    ―Lo siento.
    ―Bueno, ¿vais en serio? ―preguntó mientras intentaba hacerse la idea.
    ―Sí, vamos muy enserio.
    ―Entonces, al igual que a tu hermano y a Daisuke, os deseo lo mejor.
    FIN

    -----------------------------------------
    Y aquí se acaba este fic que se hizo muy largo, mucho, demasiado, cuanto tarde? Dos? Tres años? Bueno los que sean pero al fin se acabó, espero que les haya gustado y que me perdonen por tardar tanto en colgar las continuaciones.

    Hasta otra!
     
    Top
    .
68 replies since 11/9/2012, 17:30   2477 views
  Share  
.