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karuUsagui
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Hola…
Feliz año nuevo…
¿Cómo se la pasaron?
¿Disfrutaron de estas fiestas?
Lamento mucho la tardanza pero ya estoy de regreso con este capítulo como regalo de reyes.Cap. XXIX You are just another me
by karuUsagui
El rubio al llegar a su hogar, entro encontrándose a sus padres preparando la mesa para cenar.
-¡Naruto! - Exclamo la peli-roja.- Creí que te quedarías a dormir con tus abuelos.- Minato fijo la mirada en el rubio.
-Decidí regresar...- El menor observo a sus padres quienes no le quitaban la mirada, como si se tratara de alguien a quien tiene mucho tiempo que no veían.- ¿Qué les pasa? - Pregunto extrañado, sus padres no hacían ningún movimiento pareciera que se quedaron congelados.
-No es nada.- Minato reacciono no podía darse en lujo de actuar de una manera diferente ante su hijo.- Llegaste justo en el momento preciso para la cena.- Sonrió con gentileza.
El rubio pasó por alto el extraño comportamiento de sus padres y les sonrió.
-No tengo hambre, iré a mi habitación.- Dijo, salió del comedor, algo no estaba bien, lo presentía pero decidió no prestar atención.- [Seguramente es por pensar en…] - Bajo la mirada y subió las escaleras arrastrando los pies.- Sasuke... solo faltan un par de días para… decir… adiós….- Susurro para sí mismo, odiaba la idea de dejar a Sasuke pero estaba seguro que la felicidad del azabache se encontraba al lado de la rubia.
Se tumbo en la cama boca abajo, tomo una almohada donde enterró el rostro tratando de contener el llanto que no podía seguir reteniendo, ¿Cuánto más tenía que seguir con aquella incertidumbre? Medito un poco decidiendo que lo mejor sería tomar un baño para despejarse.
-¿Cómo que Naruto regreso a casa? – Reclamo la rubia más baja.
-No quiso escuchar y decidió que lo mejor era dormir con sus padres.
-Baa-chan te das cuenta que Naruto no puede estar cerca de los Namikaze, los acabo de convertir, ellos todavía no tienen control sobre sus instintos.- La rubia caminaba de un lado a otro en la sala, mirando desaprobatoriamente a la rubia mayor que estaba sentada en un sofá individual.- No debiste dejarlo, ¿por qué no lo evitaste?
-Naruto es terco igual que tú.- Respondió molesta.- Si tanto te desagrada la idea ve y evita que los “nuevos vampiros” ataquen a mi nieto.- Enfatizo sus palabras.
-Baa-chan…
-Naruko.- La interrumpió.- Entiendo tu posición pero no olvides con quien estás hablando.- La rubia tomo una pose superior desde su asiento, la menor quedo callada ante la autoritaria voz de la mayor.- Si ya no tienes nada más que decir haz el favor de retirarte.- La menor la vio con molestia antes de desaparecer en una espiral de humo.
La rubia al reaparecer en el hogar Uzumaki suspiro aliviada al encontrarse con los mayores sentados en la sala conversando animadamente.
-¿Dónde está Naruto? – Pregunto con voz dulce.
-Está en su habitación durmiendo.- Respondió la peli-roja.
-No lo molestes, estaba llorando.- Minato miro con enfado a la menor, esta frunció el ceño.
-No lo molestare, solo iré a ver como se encuentra.- Los mayores asintieron y reanudaron su conversación mientras la rubia subía las escaleras.
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La rubia entro a la habitación con cuidado de no despertar al rubio, se acerco sigilosamente, una vez cerca acaricio el cabello ligeramente húmedo del menor, se sentó en la orilla de la cama a contemplarlo.
-[Aun tienes el cabello húmedo, te puedes resfriar Naru] – Paso su mano sobre la cabeza del menor y en un instante su cabello se encontraba completamente seco.- [Así está mejor] – Tomo uno de los mechones dorados entre sus dedos, sintiendo la suavidad de aquellas hebras doradas.- [Poco a poco todo regresara a la normalidad; ya lo veras] – Se levanto y de la misma manera que entro salió de la habitación.
-¡Sasuke! – Exclamo con sorpresa.- Bájame.- Le ordeno
-No quiero.- Le susurro al oído
-Sasuke… esto es vergonzoso
-Nadie está mirando.- Dejo de forcejear
-Me sorprendiste.- Realizo un puchero y se cruzo de brazos.
-Esa era la idea.- Sonrió de medio lado depositando un casto beso.- El baile comenzara en unas cuantos minutos, tu madre me pidió que te buscara.
De un momento a otro el escenario cambio, se encontraba a si mismo corriendo en un inmenso bosque obscuro.
-¡Sasuke! - Pensó con desesperación.
-Corre Naruto, rápido… - Se decía a sí mismo, veía el camino interminable hasta que capto el sonido de espadas chochar entre sí.
Al llegar pudo contemplar dos figuras, una de ellas pertenecía a Sasuke de eso estaba seguro, la otra envuelta en la obscuridad apenas y la podía distinguir, logro distinguir solamente unos ojos rojos que destellaban fuego.
-¡NO…! – Grito con todas sus fuerzas al ver que aquella figura blandía la espada en contra del azabache, el menor corrió interponiéndose en medio de la batalla.- ¡Nooo…! – Sus padres abrieron la puerta estrepitosamente mientras se acercaban al menor a abrazarlo.
-Tranquilo Naruto fue una pesadilla.- Una vez más su padre lo envolvió entre sus brazos en un abrazo protector.
-Todo va a estar bien dattebane.- Su madre removió algunos mechones de cabello detrás de su oreja, su rostro estaba perlado por el sudor y las lagrimas no dejaban de fluir.
La peli-rubia salió de su habitación al escuchar el sonoro grito del rubio. Se asomo al cuarto donde observo a la familia Uzumaki, aquella unidad que una vez tuvo la veía a través del peli-rubio menor. Se recargo a un lado de la pared suspirando ligeramente.
-[Pronto todo acabara] – Recargo la cabeza en la pared, una solitaria lagrima descendió por su mejilla derecha perdiéndose en su cuello.- [Perdóname Naruto] – Cerro los ojos pero los abrió al instante al sentir los cálidos brazos de la peli-roja.
-Tambien tuviste una pesadilla, ¿verdad? – Kushina le sonrió conciliadoramente, con su mano realizo el mismo acto que con el menor, la frente de la rubia al igual que la de Naruto estaba perlada por el sudor. Las lagrimas no tardaron en descender de sus ojos azules, se abrazo a la mayor dejando que el dolor que sentía en su pecho se liberara… por lo menos se podía permitir un momento de debilidad.
-Lo siento.- Musito
-Lo haces por su bien.- Le acaricio la cabeza.- Ambos están conectados, es normal que vea tus sueños.
-No debería de ser así…
-Están más unidos que antes.- Le tomo la barbilla para que la mirara a los ojos.- Ambos son uno mismo, recuerdas.- La menor asintió.
-Mi otro yo…- Susurro, ambas se separaron.
Naruko se limpio las lagrimas que aun quedaban para entrar a la habitación del menor, este al verla abandono los brazos de su padre, dio un salto corriendo hacia la menor que le dedicaba una pequeña sonrisa. Naruto abrazo con todas sus fuerzas a la oji-azul que encantada acepto el gesto.
-¿Dormirás conmigo verdad? – Pregunto esperanzado, Naruko asintió y ambos se recostaron en la cama bajo la atenta mirada de los mayores que los cobijaron antes de salir de la habitación.
-¿Tuviste una pesadilla? – Pregunto ingenuamente.
-Mhn…
-Yo también.- Susurro
-¿Que fue?
-¿El qué?
-La pesadilla
-Soñé que perdía a alguien especial.- El rubio quedo callado.
-Yo también… ttebayo…
-Tú no perdiste a nadie.- Parecía que la rubia le reprochaba. Naruto sintió remordimiento, una extraña sensación se alojo en su pecho. No podía explicarse que era, pero estaba presente.- Lo siento.- Dijo al ver el rostro desconcertado del menor.- Es solo que me dolió esa pérdida… no era un sueño… dattebayo…- Ambos se quedaron callados, Naruto trato de asimilar las palabras de la rubia, pero le era difícil entender y no se atrevía a preguntar. Naruko abrazo a Naruto de esa manera la tención que se estaba formando desapareció, después de unos momentos ambos se perdieron en el mundo de los sueños.
-Mi señora, me alegra informarle que he confirmado en paradero de Naruto.
-¿En verdad es Naruto? – El hombre inclinado asintió con la cabeza.- Perfecto, ¿y que hay de Uchiha Sasuke?
-Según la información se encuentra fuera del país.
-Los Namikaze, ¿qué hay de ellos?
-Al parecer están viviendo como simples humanos
-Querrás decir que aparentan ser humanos.- El hombre asintió.- Terminemos lo que iniciamos hace cien años, [Esta vez mis planes no se verán abajo], ¿nuestro espía te ha informado bien?
-Cada detalle
-Perfecto, solo hay que esperar… cambio de planes, aun no traigas a Naruto.- La mujer de kimono verde jade se sentó en un sillón de piel negro.- Esperemos a que los Namikaze terminen con sus planes, después…- Sonrió de medio lado.- No sabrán lo que ocurrió…
-Como usted ordene, su majestad.- Los ojos carmín de ambos brillaron en la obscuridad.
-Por que tengo que ir con baa-chan a esta hora.- El rubio se quejaba, al levantarse se encontró solo en la cama, la rubia lo había dejado y no lo había despertado. Su madre le pidió que fuera a ver a Tsunade para recoger algunas especias.- ¿Que no puede ir ka-chan al supermercado? ¿Por qué tengo que ir yo? – Continúo pedaleando; cuando por fin llego a la mansión de su baa-chan entro, pero no se encontró con nadie, ni la camioneta de su abuela estaba aparcado en la entrada.- Seguro no está.- Resignado entro a la mansión.
www.youtube.com/watch?v=u2Q0nlrarBk broove – You are just another me
Al momento de entrar sus oídos fueron invadidos por una armoniosa melodía que le provoco nostalgia, sus pies se movieron solos guiándolo a la fuente de tan precioso sonido. Al llegar al estudio, observo a Naruko que le daba la espalda, ella se encontraba sentada frente al piano negro moviendo sus manos de manera delicada y suave en el teclado, la vista era preciosa, ella siendo iluminada por los rayos de sol que se filtraban a través del ventanal de blancas cortinas que daban al jardín; “parece un ángel” pensó el rubio recargándose en la pared. Cerró sus ojos perdiéndose en la melodía que lo tranquilizaba.
-Amo a Sasuke.
-Lo sé...
-¿Estaremos juntos por siempre verdad...?
-Te lo prometo…
La rubia tenía los ojos cerrados, sus dedos se movían con gracia en el teclado. Sus sentimientos eran transmitidos a través de la música que fluía a través de sus delicadas manos, envolviendo todo a su alrededor.
-Tenemos que huir…
-Tus padres han sido asesinados…
-Mi deber es protegerte.
-No me puedo ir sin él
-Olvídalo, él ya debe de estar a salvo.
-No me iré sin él…
Movió ligeramente la cabeza frunciendo el ceño ante aquel recuerdo.
-No hagas promesas que no puedes cumplir…- Sollozaba
-¿Por qué tenias que interponerte…? – Le reclamo aun con lágrimas cayendo de sus ojos.
-Por que te amo… lo siento…
Lagrimas comenzaron a asomarse de sus ojos.
-Por qué me mentiste… tienes que resistir… no me dejes…
-Te prometo que volveremos a estar juntos…
-No olvides todas tus promesas…
Naruko está a punto de terminar la melodía, las lagrimas caían cual cascadas, la impotencia que sintió hace mucho tiempo volvía a hacerse presente, la música, en especial esa, le recordaba el sacrificio que había hecho. Al terminar la melodía Naruto sin percatarse estaba llorando de igual manera que la rubia, inconscientemente el sentimiento de tristeza que transmitía la música lo envolvió, al darse cuenta se limpio el rostro con el dorso se la mano.
La menor dejo de tocar, contemplo el teclado y se llevo el dorso de la mano al rostro para limpiarse aquellas lágrimas traicioneras que osaron salir de su interior. Dio un pequeño brinco en su asiento al escuchar aplausos detrás de ella. Se giro encontrándose con Naruto que le aplaudía con una sonrisa plantada en su rostro.
-Tocas hermoso.- Se acerco a ella
-En verdad lo crees.- Dijo aun sentada.
-Por supuesto.- Observo el teclado
-¿Sabes tocar?
El rubio asintió.- Baa-chan me enseño, ¿cómo se llama esa melodía?
-Tú eres solo otro yo
-Mi otro yo…- Susurro el menor. Naruko asintió con una sonrisa.
-¿Quieres que te enseñe a tocarla?
-Me encantaría.
Detrás de ellos Tsunade se encontraba sonriendo con tranquilidad, le agradaba la armonía que formaba ese par.
La noche se hizo presente, Naruto salió del trabajo, llevaba una bolsa en la mano con su preciado ramen instantáneo, se había divertido con Naruko que le enseño algunas notas de la melodía que había tocado, la melodía extrañamente le parecía familiar, pero no recordaba de donde. Luego el nombre de la canción, le parecía por ridículo que sonase perfecta.
-Mi otro yo…- Susurro mirando al cielo nocturno carente de estrellas.- [¿Donde estas Sasuke?] – El menor le llamo pero el Uchiha en ningún momento le respondió a sus llamadas, intento marcarle en varias ocasiones y momentos del día y siempre fue la misma tonada “El numero que usted marco esta fuera de servicio”, ¿Cómo era eso posible?
Resignado regreso, solo como lo había hecho durante la ausencia del moreno. Se encontraba perdido en sus pasamientos cuando abruptamente regreso a la realidad al chocar con algo o más bien con alguien.
-Lo siento ttebayo.- Dijo realizando una ligera reverencia sin ver al afectado.
-No te preocupes.- La gruesa voz de aquella persona lo estremeció, sus ojos se abrieron como platos, despacio subió la mirada encontrándose con una obscura.- ¿Te encuentras bien? – Cada vello de su cuerpo se erizo, no se explicaba la razón.
Naruko se encontraba cerca del súper mercado de su abuelo, iba acompañada de Kakashi.
-¿Que sucede Naruko? – Pregunto al ver que se detuvo repentinamente.
-Esta presencia…- Dijo en un hilo de voz.- Este olor es de…- Aspiro el aire, sus ojos se volvieron rojos al instante.
Kakashi sin comprender olfateo el aire a su alrededor corroborando las sospechas de la rubia, en cuanto se dio cuenta ella había salido disparada. Corrió tras ella, no debía dejar que hiciera alguna estupidez.
La rubia corrió y se detuvo al visualizar a Naruto frente a un sujeto, ella lo reconoció y estaba dispuesta a enfrentarlo.
-Espera, ¿qué crees que estás haciendo?
-Déjame, ese desgraciado esta con Naruto
-No seas impulsiva
-Suéltame Kakashi, él tiene que pagar por todo lo que me ha hecho, a mí y a mi familia…- La menor forcejeaba con el peli-plata por liberarse.- Que no entidades, ¿está al lado de Naruto? Le puede hacer daño…- La chica gruñía.
-Es peligroso si lo enfrentas, no estás en condiciones de pelear, está en público, no le puede hacer daño a Naruto en medio de tanta gente.
-Es un malnacido, a él no le importa, hará lo que sea para dañarlo… suelta…- La peli-rubia callo inconsciente en los brazos de Kakashi, quien le dio un golpe en la nuca dejándola fuera de combate.
-Lo siento princesa pero es lo mejor, después puedes gritarme todo lo que quieras.- Cargo a la rubia estilo nupcial, antes de marcharse dio un último vistazo al rubio que retomaba su camino con tranquilidad. Sus ojos por breves segundos chocaron con la negra mirada de aquel sujeto. Este le sonrió.- [Pareces divertido por el espectáculo] – La seriedad que aparentaba Kakashi se esfumo dando lugar a una sonrisa, se quito el cubre bocas para acercar sus labios a los de la menor.
La sonrisa de aquel sujeto se esfumo pasando a una seria, lo que veían sus ojos le parecía extraño, volvió a sonreír como si se tratara de un chiste. El peli-plata observo su reacción, acomodo a la chica entre sus brazos y se marcho dándole la espalda con tranquilidad.
-[Naru, Naru, Naru… no has cambiado en nada] – Aquel sujeto había escuchado la conversación de la menor, incluso se había percatado de su presencia al sentirla cerca.- [Mi señora estará complacida] – Su rostro se encontraba imperturbable, que era difícil descifrar lo que pasaba por su mente exactamente.
Naruto se encontraba confundido que era lo que había pasado exactamente hace unos momentos-[Ese hombre se parecía mucho a…]
-Naruto.- Escucho tras su espalda, lentamente volteo encontrándose con la persona que anhelaba ver desde varios días atrás, la dueña de sus pensamientos.
-¿Sasuke? – Abrió los ojos como platos por la sorpresa, sin pensarlo soltó la bolsa y corrió a los brazos del azabache.- ¿En verdad eres tú? – El Uchiha lo alzo entre sus brazos dándole vueltas.
-Si soy yo, te extrañe Naruto.- El rubio que seguía en el aire al sentir que se detenía el moreno entrelazo sus brazos alrededor de su cuello y este lo apretó de la cintura para sentirlo más cerca. Sin poder resistirlo unieron sus labios en un desesperado beso donde mostraban cuanto se habían extrañado.
-Te extrañe teme.- Susurro cerca de sus labios para volver a unirlos, aquella sensación de tenerlo cerca era lo mejor que había sentido después de mucho tiempo.Cont. *OOoo*ooOO*
Espero hayan disfrutado del capítulo el próximo será el ultimo de esta segunda temporada.
Las y los quiero, nos estamos leyendo…
Hasta la próxima.
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Vampire of the Dream Forever Lover’s (Cap. XXXIV)Tercera temporada: ¿Cuántas pruebas tenía que pasar un vampiro para estar cerca de la persona que hace latir su corazón? SasuNaru |
