MI BUEN AMIGO BAAL, MI BUEN AMO SATÁN (SXN)(IXN)(IXD)(R+18) Cap. XI Act. (19/02/17)

Que harías si te encuentras con un ser de otro mundo y ese ser te quiere a ti?... Esta historia contiene incesto, lemon fuerte y Shota suave... tal vez no sea apta para mayores de edad tampoco XD

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    Wow!
    Vaya que comentaron, me alegra eso.
    Gracias a todos los que comentaron, sin más, he aquí la continuación.

    Cap. XI








    Un año más, miles de encuentros furtivos extra; Su cuerpo permanecía lleno de marcas ¿Cuáles eran de quién? ¡Oh! Para su lástima emocional, todas eran de su esposo, las marcas que Sasuke dejaba solo podían ser visibles en su corazón, aunque sonara cursi.




    A lo largo de esos 365 días, su hijo se había encargado de hipnotizarlo con su cuerpo, de mostrarle lo hermoso que era, de hacerle sentir vivo, mientras Itachi, él se encontraba sumido en una obsesión insana, le destrozaba de forma literal, cada vez que le poseía el dolor era atroz aun estando atiborrado de afrodisiaco, algunas veces la sed del emperador llegaba a tal punto de arrancarle las extremidades y beber de las heridas o alargaba su pene de tal forma que le destruía por dentro, muchas veces se demoraba demasiado en sanar, más lo peor de todo es que comenzaba a disfrutarlo, el dolor se había vuelto una adicción difícil de controlar, en un tiempo reciente, poco menos de medio año dejó de usar afrodisiacos permitiéndose sentir el dolor en toda potencia, permitiéndose caer aún más en la perversión.




    Un ejemplo, es que ese momento estaba siendo penetrado sin mayor miramiento, por un pene tan grueso como los muslos de Itachi, las sabanas estaban empapadas de sangre, sentía el desgarre de sus músculos y aun así gemía con ganas arañando la espalda contraria, mordiendo el blanquecino cuello, rogando por más, mientras su esposo, complacido, arremetía con más fuerza, le deleitaba con gemidos roncos y le llenaba con gusto en un beso profundo; ese día estaba cariñoso, le abrazó con fuerza, le besó con ganas para recorrer con vehemencia ese cuerpo sinónimo de locura, recorrió esa piel con su lengua, las risitas de su reina le devolvían la vida cada día, salió de su interior y reemplazó su miembro, el sabor de Naruto cada vez era más dulce, más sabroso, más parecido a la ambrosia.




    Su lengua se encargó se sanar los desgarres, de hacer los gemidos más suaves, más sensuales, no lo podía evitar, le volvió a besar, le volvió a tomar, a marcar, Naruto era suyo, solo suyo, de eso no tenía duda o al menos, eso es lo que creía.




    La puerta se cerró dejándole solo, suspiró de alivio viendo el desastre en el cuarto, su abdomen estaba tan hinchado que en cualquier momento estallaría, se levantó con piernas temblorosas, era difícil mantener todo ese semen adentro antes de llegar al baño, al salir, no pudo evitar sonreír al verle, su –no tan pequeño – hijo le esperaba en una cama ya limpia, le recibió con un abrazo, le tumbó de un apasionado beso, se encargó de despertarle en todos los sentidos y disfrutó –de nuevo –de ser penetrado con fuerza, había encontrado el mejor de los pasatiempos en el infierno y se sentía en la gloria siendo sodomizado.




    -Sasuke –ronroneó en el oído contrario, aun con los muslos húmedos, le dedicó besos mariposa, hasta llegar al soldadito de su hijo, le sonrió como solo él sabia y comenzó el trabajo; al principio era un desastre, más agradecía a Itachi por amaestrarlo, ahora hacia que tanto padre como hijo se volvieran gelatina entre sus dedos o ¿debería decir entre sus labios? Lamer esos pedazos de carne le causaba un placer extraño, aún más en los últimos meses en donde su lujuria se veía aumentada sin razón aparente, el gemido del mayor le alertó del pronto final, succionó con más fuerza recibiendo su recompensa, el sabor de Baal era único, no tenía comparación con algo que haya comido con anterioridad, contuvo la esencia en la boca, devolviéndola en un ardiente beso, restregándose en el recién flácido pene, irguiéndolo al instante –hazlo fuerte –ordenó separándose, poniendo el pecho en la cama, alzando la cadera y separando las nalgas, no se tardó en ser embutido, un gemido ronco salió con ganas de su boca, se corrió sin más estimulo, estaba tan mojado, tan sediento de más ¿Cómo sería si su esposo se uniera? ¿Si entre ambos lo partieran en dos? Gimió más fuerte de tan solo pensarlo –u-un clon –le costó formular las palabras.




    -¿Qué?




    -¡Oh Dios! –gritó ante una brutal embestida -¡Haz un clon! ¡Que me jodan los dos! –gimió agarrando con fuerza las sabanas, abriendo más las piernas, los hilos de saliva que salían de él eran excesivos, no hizo caso a la risa de Sasuke.



    -Como su majestad desee –el tono cínico no pasó desapercibido, después le castigaría, por ahora disfrutaría de un nuevo intruso en su interior-.



    -Itachi –Sasuke paró al oírlo –conviértelo en él -.



    -No –la voz se volvió fría, pudo sentir la excitación contraria desaparecer, arrugó el ceño, volteándose –no lo haré, ahora estás conmigo, no con él –estaba enfadado, el menor quiso suspirar, más sabia que hacer para convencerlo, una buena sesión de besos, caricias y sus ojitos de cachorro y ¡Voilá! Ya tenía lo que quería, gimió como perra ante las dos imágenes que lo poseían, más una extra –venganza de Sasuke –que ocupaba su boca, sintió con gusto sus entrañas y garganta llenarse, aún más los besos apasionados ¡Dios! Quería tanto de eso, deseaba tanto ser sometido, violado, maltratado… pero a la vez quería ser amado y eso, solo su hijo se lo daba, solo él se atrevía a entregarle su corazón, solo con él, era feliz en el infierno.




    Otra sesión de sexo salvaje con su esposo, aunque le había dicho que se sentía mal, a Itachi no le importó, ahora se sentía peor, agradeció que el mayor quisiera tomar un baño.




    Naruto temblaba, tenía tanto frio que creería si le dijeran que sus huesos estaban congelados, sumando la vista borrosa, se levantó despacio, al rey no le molestaría para nada tener compañía en esa deliciosa bañera llena de agua caliente, no dio más de tres pasos para caer como peso muerto, a pesar del frio sudaba de forma copiosa, su rostro estaba rojo y para su poca gracia, su cuerpo empezó a moverse por sí solo, convulsionando.




    En su casi inconciencia sintió brazos conocidos a su alrededor, al igual que un nombre ser exclamado con ahínco, casi con desesperación.




    Konan apareció de inmediato al ser llamada, su rey mantenía al rubio como de si un gran tesoro se tratara, algo se revolvió en su interior, más comenzó con el trabajo, su energía recorrió el cuerpo del menor, no pudo evitar asombrarse –no, no ¡No! –su mente creo un torbellino de rabia -¡No podía ser cierto! –se contuvo de hacer algún sonido, de formar alguna expresión que delatara como se sentía, respiró profundo -¡Zetsu! –su voz salió ronca, casi pastosa, en un momento un ser –que si Naruto estuviera más consiente podía jurar era una planta – apareciera.




    -Konan –Saludó con el usual tono burlón –para luego hacer una reverencia ante su Rey.




    -Necesito esa planta –extendió la mano sin más, la criatura la miró incrédulo ¡Al fin! ¡Los cinco mil humanos que comió servían para algo! Se concentró para hacerlo, una luz verde brillante se formó en su pecho y sin más reparó sacó su corazón amasándolo, transformándolo en una flor y luego en polvo, dándole forma de una bola con su sangre y entregándoselo a la mujer, para con una reverencia, desaparecer.




    Algo pasó por su garganta sin dificultad, agradeció a quien sea que se la diera, se sentía mejor, mucho mejor, su cuerpo descansó por completo, al fin pudo desmayarse.




    -Su majestad –la mujer le habló dulce –es mejor que le deje descansar, está delicado, el cuerpo de la reina trata de expulsar lo que considera un parasito, la medicina que le di ayuda a aceptarlo, pero necesita reposo-.



    -¡¿Un Hijo?! –El brillo en los ojos de Itachi en esos momentos… ni una supernova podía rivalizar.



    -Así es señor, tiene cuatro meses, se está desarrollando bien, pero como ya dije, el cuerpo trata de expulsarlo, no debe estresarse, por lo tanto –dudó en decirlo –es recomendable que le retire la cadena –sudó como cerdo ante lo último, por menos cosas el rey había desatado su ira, un asentimiento fue su respuesta, jamás había visto tal rostro de felicidad en el mayor, comprendió que debía dejarlos solos, después de todo, Itachi ya había tenido hijos –y bastantes –sabía qué hacer, sin más, desapareció.



    -¿Qué haré? –se preguntó luego de dejar a un limpio Naruto en una cama impecable -¿Cómo anunciaré a mi nuevo pequeño? –La emoción era palpable - ¿Qué nombre le pondré? ¿Qué ropa usará? ¿Qué poder tendrá? ¡Por mí! ¡Me voy a volver loco! –gritó sin poder desaparecer la sonrisa -¡Debo preparar todo! –se dirigió a la puerta -¡No! –se devolvió a la cama –hoy estaré con mi reina, hoy su cuidado es mi prioridad –se habló a sí mismo para capturar al menor entre sus brazos, cuando despertara ¡Oh! Cuando despertará no se salvaría de la lluvia de besos.




    Se sentía sofocado, abrió los ojos con pesadez, tenía una sed insoportable y le resultaba en extremo incomodo el peso sobre su cuerpo.




    -Itachi –la voz era rasposa, le dolía la garganta, estaba de mal humor y le importaba un pepino si su esposo se molestaba por no usar honoríficos, se sentía pegajoso y un hombre de ese tamaño abrazándolo por la cintura, pegado a su vientre no ayudaba, espero a que el mayor lo mirara -¿Qué haces? –para su sorpresa, la respuesta fue una sonrisa.




    -Hago que mi hijo sienta mi presencia.



    El tono fue tan risueño que tardo en comprender las palabras pronunciadas.




    -¿Hijo?




    -Así es mi reina –le beso el vientre –mi amado esposo, se acurrucó -¡¿No es genial?! –se quedó callado por un momento ¿Qué decir?




    -si… -sonrió lo más natural que pudo –es una gran noticia –su voz se empañó, sin quererlo las lágrimas rodaron, Itachi sonrió ante el hecho, que sensible era su rubio, le abrazo arrullándolo en dulces palabras, más Naruto no lloraba de emoción, menos de alegría, lloraba porque había un 50% de posibilidad de que el niño no fuera de su esposo y si ese era el caso ¡Que Dios los ampare! La furia del diablo haría más que destruirlos.


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    Jajajajaja!
    Soy muy malo con ustedes, soy malisimo!
    Ahora si, toca actualizar tu nombre, luego disparame y...¿Cúal otro? ustedes dirán.
     
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45 replies since 13/10/2012, 19:46   3532 views
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