POSDATA: TE AMO (USAGUIXMISAKI) AVISO 14/ABRIL/2014

Lecciones da la vida, te dicen. Que todo ocurre por una razón, ¿Qué razón podría tener tu partida? "El tiempo curará tus heridas” Es tan fácil decirlo, ellos no perdieron al amor de su vida.

« Older   Newer »
 
  Share  
.
  1. Lady Trifecta
        +1   +1   -1
     
    .
    Avatar

    You're born this way baby You are beautiful in your way cause god makes no mistakes ♥♪Lady Gaga♪♥

    Group
    Escritor intermedio
    Posts
    885
    Location
    en mis nubes, escuchando Rock y escribiendo historias de amor trágicas...

    Status
    Anonymous





    Acá conti...!!! espero no me odien y no me abandonen los que ya empezaron a leer :( :( :( :(


    les prometo traer conti lo más pronto posible.... de veras que los amooooo!!!!! ♥ ♥ ♥







    CAPITULO 2: FRÁGIL






    La vida es tan frágil y corta, cuando menos lo pensamos e imaginamos,

    En un parpadeo se nos va.





    ~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~






    - Vamos levántate, Misaki, ya es hora de despertar – hacía esto cada mañana desde hace un mes, desde… que pasó aquello…. Cuando se enteró, ninguna fue su reacción, en ese mismo instante se desmayó. Lo habíamos llevado al médico, físicamente estaba bien, aparentemente, pero había quedado en estado de shock, catatónico. Al principio no reaccionaba a nada, fue… tan devastador verlo en ese estado. Le hablabas, no respondía, intentabas hacerlo reaccionar, nada. Y hoy hace un mes con exactitud que no habla, no pronuncia palabra alguna, según los médicos y psiquiatras que lo han tratado no es una cuestión física, sino más bien psicológica. Lo realmente extraño es que ahora y desde hace quince días respondía normalmente a ciertos actos, aunque no hablaba, nunca lo hacía. Ahora comía por si solo, se bañaba por si solo, parecía que te entendía cuando le hablabas, asentía o negaba con la cabeza, cosas pequeñas pero de gran significado que no hizo durante dos largas e infernales semanas, permaneciendo inmóvil. Desde un principio y hasta ahora Takahiro se había opuesto rotunda y firmemente a que lo enviaran a un “Centro de Ayuda”, vale decir, un psiquiátrico o como común y vulgarmente conocemos como manicomio, puesto que era esto lo que más le habían recomendado todos los especialistas que habían atendido a Misaki. No se lo llevaron con la esperanza de que se recupere pronto y pueda volver a su vida normal de antes, con el trabajo de medio tiempo que había conseguido con tanto esfuerzo en la Editorial Marukawa y además con los días contados para graduarse de la Universidad. De alguna u otra manera, todos contribuimos en ayudarlo y en convencer a Takahiro de que no se lleve a Misaki de Tokio. Hiroki y Miyagui, e incluso mi padre, el Director de la Universidad donde estudiábamos habían hablado con él y le habían convencido de que la mejor de opción de todas, por el bienestar de Misaki, era que éste no se mudara a otra ciudad y siguiera frecuentado de sus amistades y de las personas que ya conoce, pues sería muy dramático tantos cambios de un momento a otro, después de que todo lo vivido haya dejado esas secuelas en él.



    Finalmente, luego de mucho pensarlo y discutirlo, pero no por dudarlo, sino para estar seguros de que todo lo estábamos haciendo bien y con los mayores cuidados posibles, Takahiro había terminado por otorgar su permiso para que Misaki se mude conmigo y con Miyagui (desde hacía un tiempo vivíamos juntos, y ya todos sabían de nuestra relación… es un tema…. Bueno muy complicado, pero por alguna especie de milagro, ahora nos encontrábamos bien, y juntos, sin escondernos de nadie) a nuestro departamento, y Takahiro junto con su esposa e hijo regresaron a Osaka, diciendo que llamarían todos los días y vendría todos los fines de semana para ver a Misaki.



    Suspiré.



    Y he aquí, el primer día de regreso a la Universidad, tanto de Misaki como el mío, pues desde lo que ocurrió…. También a mi me habían concedido permiso para quedarme con él y faltar a clases todo el tiempo que fuese necesario, al fin de cuentas nunca fue un gran problema para mí, por lo que seguí estudiando ese tiempo en casa y al mismo tiempo podía vigilar y cuidar de Misaki.




    Un mes.



    Todo un mes entero.





    Un mes… desde la muerte del gran escritor Usami Akihiko.





    - Shinobu-chin… ¿Ya están listos? –



    - Si…. Misaki… toma este jugo…. – le puse el vaso entre sus manos, y de inmediato lo tomó, sin decir nada, solo acatando.



    - ¿Seguro que estarán bien? – me preguntó Miyagui con un sabor entre amargura y tristeza en su mirada, mirada que yo hacía todo lo posible por mantenerla lejos de Misaki, por eso hasta me esforzaba a mi mismo por demostrarle que todo está y estará bien.



    - Si… no te preocupes Miyagui, anda, vámonos que se nos hace tarde –





    ~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~





    Malditos imbéciles. Como era lo esperado, todos se quedaban viendo a Misaki como bicho raro, pero por suerte nadie se atrevió a acercársele debido a las “advertencias” de oni no Kamijou. Bueno nadie a excepción de dos personas.



    ~Durante el almuerzo~



    - ¡Shinobu! ¡Misaki! ¡Cuanto tiempo! –

    - Hola, Toudou… eh… pero si nos veíamos todos los días, tú nos visitabas… ¿Recuerdas? Ah, no me digas que ya te afectó el alzhéimer… o solo es tu idiotez rutinaria…-

    - Hey, hey, hey… me parece que hoy alguien desayunó cereal de amargura…. –apunto sentándose en frente mio y de Misaki con su almuerzo, y con una sonrisa estúpidamente descarada pero sincera, amable y sin malas intenciones

    - Discúlpame… es que estoy con los nervios de punta, te juro no soporto a tanto imbécil merodeando cerca –

    - ¿Lo dices por los que se quedan viendo como curiosos verdad? Es perfectamente comprensible, también quisiera romperles cara…. –

    - ¿En serio? –

    - Pues claro… detesto que lo hagan, están chismentando y husmeando por sobre el dolor ajeno, es asqueroso de verdad… ¿No te parece, Misaki?-

    - Toudou… - mi voz no sonó amenazante, pero si en tono regañador…. Aunque, Misaki dejó su almuerzo y levantó la mirada hacia al rubio de ojos verdes que estaba sentado delante nuestro, con…. Esa misma expresión de todo el mes…. Una mirada mucho más que triste, apagada, vacía… sin vida…

    - ¿Quieres ir por el último tomo de “The Khan”? vamos, yo te la compro, y luego podemos ir a tomar un helado… - Misaki no afirmó ni negó como solía hacerlo normalmente para preguntas simples y necesarias, solo bajó nuevamente la mirada, de manera automática. Dios mío, que es de verdad sumamente desesperante y doloroso…. En mi pecho…. Duele…. Y nadie se puede imaginar en verdad cuanto duele, porque no han pasado por lo mismo. Ver a tu mejor amigo de esta manera… como un cadáver viviente…. Era una pesadilla en la realidad que nos tocaba vivir, y peor aun, fingir que no existía para “intentar” ayudarlo.





    ~A la tarde~




    Ya las clases culminaban en el día de clases más largo de toda la historia de la humanidad, por un lado estaba feliz de que Misaki estuviese encerrado en su propio mundo, porque difícilmente creo que hoy podría haberlo soportado. Tanta hipocresía y falsedad por parte de las personas regodeándose en la morbosidad de sentirse felices y contentos al poder admirar la desgracia ajena por no tener nada más útil que hacer con sus patéticas e insignificantes vidas. Pero por otro lado, sabía que esto era mucho peor para Misaki… ¿Y si no se recuperaba nunca? Y si… ¿Algún día despertaba de su letargo y el sufrimiento acumulado en su interior se desborda tal cual tempestad y no sea capaz de soportarlo? Es lo que todos tememos…. Pero bueno… no podíamos hacer más nada que vivir este presente que nos tocaba…. Era tan frustrante y te llenaba de tanta impotencia pero al mismo tiempo querías que todo permaneciera en este estado de quietud, mientras nada empeorara, era lo que mejor nos podía pasar….




    Pero era pedir demasiado.




    Misaki, a quien yo llevaba de la mano y junto con Toudou nos dirigíamos a mi casa, luego de la Heladería a la cual fuimos para leer el último tomo del grandioso sensei Kyo Ijuin, imperceptible e imperturbable Misaki seguía sin demostrar expresión alguna, sólo se limitó a seguirnos, y a tomarse su helado, nada más, todas acciones robotizadas.



    Cuando la desgracia cayó ese día, ya todo estaba saliendo demasiado “bien” que parecía mentira hasta que nos lo confirmó la reciente aparición de la última persona en todo el mundo que deseábamos o nos imaginábamos ver.




    - ¡¡¡Heeeey chicos!!! ¡¿Qué no escuchan?! Hace un buen de rato que los llamo a gritos - apestaba a alcohol… y problemas…



    - ¿Que quieres Sumi? – le preguntó serio Toudou… era raro ver esa expresión en él….



    - Tenemos prisa Sumi, por favor salte del camino – agregué



    - Jajajaja… ¡¿Qué tenemos por aquí?! – se me colgó del hombro rodeándome el cuello con sus brazos, y tambaleando peligrosamente – El típico niño rico hijo de papi, todo arrogante y presumido ufanándose se sus aires de grandeza… el payaso de la clase… - refiriéndose a Toudou – y… - acarició la mejilla de Misaki fugazmente – el lindo Takahashi Misaki… ¡¿Qué pasó lindura?! Tú eras de mis afectos, y ahora juntándote con estos idiotas…. –


    - ¡Aléjate de él…! - solté la mano de Misaki por un momento. Y en un acto “reflejo” , en realidad más por la rabia acumulada del día la cual me jugaría una muy mala pasada al dejarme llevar por mis impulsos, empujé a Sumi haciéndolo caer al suelo –


    - Pero… ¡¿Qué carajos…?! – refunfuñó levantándose apenas


    - Es mejor que te apartes… - le advirtió Toudou


    - O sino… ¡¿Qué?! ¡¿Qué me va a pasar?! Jajaja… no me hagan reír…. ¡¿Me golpearan?! Uy sí, que miedo… no ya sé… Takatsuki me acusará con su papi el Director… ah no… algo mucho mejor…. – y de pronto sus risas de burla y sorna se mezclaron con inesperadas lágrimas que pronto empezaron a caer por su rostro de manera absurda y bizarra… - …. Misaki me matará tal cual como lo hizo con Akihiko…. – no pude hacer más que abrir grandes mis ojos debido a la incredulidad del momento, para cuando reaccioné ya Toudou había lanzado su puño contra Sumi y éste caía de nuevo al suelo, esta vez con hilos de sangre cayendo por las comisuras de su boca…. Pero pronto lo olvidamos ya que Misaki había captado nuestra atención más que nada en ese momento….




    - ¡NOOOOOOO! – gritó con todas las fuerzas de su voz, sorprendiéndonos por demás, y desgarrándose la voz en el proceso. Era la primera vez que emitía palabra alguna… desde lo ocurrido hacía un mes…



    - Misaki… tranquilo… - lo abracé, pero éste se sacudió con fuerza y me apartó, lo mismo pasó cuando Toudou intentó acercársele, estaba al borde de un… no estaba en medio de un colapso nervioso como nunca antes lo había visto, y claro que me asusté, si ni siquiera entre Toudou y yo podíamos sujetarlo, vaya que si tiene fuerza a pesar del cuerpo pequeño que posee.



    - ¡Es tu culpa Misaki…! ¡Todo es tu culpa….! ¡Su muerte lo fue! ¡¡¡ESTÁ MUERTO POR TU MALDITA CULPA!!! – gritó Sumi con todas su fuerzas, al menos las que le quedaban.


    - ¡Misaki! ¡No lo escuches! ¡No es tu culpa! Shhh… ¡CLARO QUE NO ES TU CULPA! -


    - ¡LÁRGATE IMBÉCIL! – lo amenazó Toudou pero sin abalanzarse sobre él, pues no podíamos soltar a Misaki, en lo que llegaron dos policías debido al tremendo escándalo que se había convertido todo esto a mitad de la vía pública. Y junto con los dos policías venía un sujeto que se me hacía conocido… pero no estaba como para ponerme a recordar o ponerle atención en esos momentos, mientras Misaki seguía gritando, pataleando y retorciéndose entre nosotros, hundido en su desesperación.


    - Chicos, sujétenlo –


    - ¿Eh? ¿Qué pasa? ¿Qué piensa hacer? –


    - Sólo lo sedaré, confíen en mí, soy médico… -


    - Es-está bien… - al parecer los policías se habían llevado a Sumi, por haber notado un silencio repentino inmediatamente en cuanto el sujeto recién llegado le había inyectado algo a Misaki en el cuello.


    - Vamos… debemos ir a un Hospital… - dijo cargando fácilmente a Misaki en sus brazos, inconsciente por efecto de la droga.


    - No, por favor, un hospital no, Misaki los odia… pondrá el grito en el cielo y el infierno al mismo tiempo si se despierta allí, solo llévenos a nuestra casa.


    - Pero… -


    - Por favor –


    - Está bien. Por esta vez les haré caso –


    - Gracias. –


    - Por cierto. Mi nombre es Kusama Nowaki –




    ~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~.~




    Me encontraba en el departamento de Akihiko.


    Ese idiota sin remedio.




    No puedo creer que no vaya volver a verlo.



    La vida es tan traicionera y el momento que menos te lo esperas te arranca lo que más amas de tus brazos, sin previo aviso, sin lección alguna de como sobrevivir a eso, de como recuperarte, de como sobreponerte, de como superarlo. Es tan cruel.





    Mi mejor amigo.

    Mi primer amor.



    Una lágrima traicionera resbaló por mi mejilla.




    - ¡Sweet honey...! ya recogí lo que quedaba de la ropa de Takahashi ¿Cómo va usted? Se dirigió a mi desde el piso de arriba – me sequé rápidamente la lágrima, no podía permitirme el ser débil o mostrar fragilidad, no, no podía ni tenía derecho, ¿Cómo iba a tener ese derecho? Cuando hay otros sufriendo mil veces peor que yo, no debo ser egoísta…



    - Sí, profesor… sigo buscando los libros de Takahashi – di media vuelta para esconder mi rostro afligido – Asegúrese de no olvidar nada esta vez – cada cierto tiempo veníamos para cuidar del departamento y arreglar las cosas, el departamento por cuestiones legales, ahora pertenecía a Takahashi, pero por obvias razones él no podía hacerse cargo de momento… y quien sabe hasta cuando. Así que cada que podíamos le llevábamos sus cosas.


    - Hmmmm… como digas… - en cuanto se fue, yo seguí con mi labor…. Recogí algunas cuantas novelas y las iba colocando una por una en una caja de cartón para ir apartando y guardando las cosas de Akihiko.



    Cuando encontré uno en particular que me llamo muchísimo la atención.


    Qué raro, este no es de Akihiko. Me he leído cada libro de su biblioteca diez veces cada uno. El titulo de la tapa rezaba:




    “La sirenita”




    Abrí el libro en donde llevaba marcado, y cuando lo hice de allí se cayó un sobre.

    Lo recogí, pero primero leí el pasaje señalado en el libro.




    “…La sirenita lanzó el cuchillo al mar tan lejos como pudo. Miró por última vez a su príncipe a quien aun quería y a quien aun veía tan guapo... y se lanzó ella misma al océano mientras se iba convirtiendo en espuma de mar….”





    Estas líneas estaban marcadas con resaltador y además subrayadas.



    ¿Qué significado tendrá?


    Mientras lo pensaba.

    Vi el sobre, y el destinatario de ella, el cual su nombre estaba escrito en la parte de atrás.




    Misaki Takahashi.











    Continuará…







    espero les guste!!! y me dejen un lindo comentario de amor u odio, igual me hacen felices n____n matta nee!!! :=deeaaah:







    Edited by Nathalia Rosmary - 25/10/2012, 02:46
     
    Top
    .
47 replies since 23/10/2012, 02:09   2000 views
  Share  
.