*~Todo por un chicle~* SasuNaru [One-Shot]

Siempre era mejor correr siendo perseguido por tu novio furioso que por una bola de fans desquiciadas ¿verdad? -Nota: no volver a quitarle un chicle a Naruto.

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  1. Vicky-chan
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    Hola minna-san =====>(hace poco descubrí lo que significaba u///u lo sé, soy un desastre x//D) pdjapjdaop Acá llegue con un nuevo One-shot!! pdjapkfsasj Hace bastante que no publico nada u_u, bien, les diré que esto salió cuando vi a una amiga enojarse por el ruido del chicle, por demás esta decir que ODIA este. dpjoapsodj jejeje en fin, espero que lo disfruten n_n

    Género: Humor.
    Clasificación: K+
    Advertencia: Ninguna.

    Todo por un chicle


    Paciencia.

    Hoy, esa mortífera y calurosa mañana de verano, sentado bajo la sombra de un árbol y con la suave brisa moviendo algunos de sus rebeldes mechones azabaches, esa palabra le resultaba terriblemente cómica.

    Porque él era paciente. O se suponía que lo era. Se suponía.

    Sasuke era un hombre paciente -incluso, a veces, demasiado.- No perdía el control por cualquier pequeñez. Se consideraba, así mismo, una persona perfectamente equilibrada, educada y agradable -aunque su maestro fuera Kakashi y se dudara de la moral del tipo.- Sí, él no era esa clase de persona temperamental que pierde los estribos por cualquier cosilla sin importancia y monta un gran revuelo -como cierto rubio que él conocía.-

    Sin embargo, en ese instante, no estaba demostrando tener, ni una mísera gota, de esa dosis sagrada, de la autodenominada, paciencia. En su defensa tenía que añadir que ese maldito sonido era desquiciante. ¡Oh, por favor! ¿Había un ruido más enloquecedor que el que producía la goma de mascar?

    Y ahora la gran pregunta del millón: ¿Todo por un poco de chicle? Sí, así es. Él estaba perdiendo la paciencia -esa gran paciencia que todo el mundo decía que tenía y que él, extrañamente, no encontraba- porque su acompañante estaba masticando un jodido chicle.

    Miró de reojo al chico sentado en la hierba a lo indio, con la cabeza echada hacia detrás en señal de regocijo y jugando, distraídamente, con un kunai. Su mandíbula se movía desenfrenada, masticando la goma de mascar, absorbiendo su sabor, y observó, impotente, como formaba una perfecta "O" con sus labios y, de ellos, se asomaba una burbuja que, a los pocos segundos, explotó en un sonoro pop.

    – ¿Te ocurre algo, Sasuke?

    Los ojos azules de Naruto se encontraron con los suyos y entonces comprendió que se había quedado mirándolo fijamente -por cuánto tiempo, era un misterio-.

    –No, nada. –se obligó a sonreír, para tranquilizar la aguda curiosidad del chico. Cosa que no logró -venga, era el. Estábamos hablando de Naruto Uzumaki, el no era cualquiera.-

    Pop. Otra pompa.

    – ¿Seguro?

    –Sí, Naruto–contestó en tono forzado.

    ¿Por qué le desquiciaba tan terriblemente ese maldito sonido?

    Pop.

    –Pues yo diría que no, Sasu. Tienes la misma cara de estreñido de Ibiki, ¡de verás! –se burló el rubio.

    Sasuke permaneció, sabiamente, en silencio, mientras Naruto se carcajeaba por su propio chiste, doblándose por el estómago. Suspiró, imperceptible, resignado, aunque una sonrisa curvó sus labios.

    – ¿Y bien? –inquirió Naruto.

    Pop. Y otra vez ese ruidito infernal, sólo, que esta vez, provocó una mueca de desagrado en su rostro impasible. Su estoicismo se fue a la mierda. Definitivamente. No lo soportaba más.

    –Deja de hacer eso, Naruto.

    El chico arrugó el ceño, confundido. – ¿Dejar de hacer qué?

    Pop.

    –Exactamente eso: burbujas con el chicle.

    Trató de sonar calmo, sereno, pero se notaba cierto grado de irritación en su voz al nombrar al objeto de su discordia.

    Naruto, por unos incontables segundos, lo miró sin entender, hasta que en su cerebro algo hizo click y vio la luz -inspiración divina.- Una sonrisa traviesa se dibujó en su rostro y sus azules ojos llamearon chispeantes -modo niño travieso on-. Se inclinó hacía él, apoyando sus manos en la hierba, quedando sus caras a breves y cortos centímetros.

    – ¿Esto, Sasu?

    Pop.

    Sin más hizo explotar otra burbuja de chicle. Sasuke se hartó. Tocó la línea y la sobrepasó, por eso realizó el siguiente movimiento del juego: lo besó.

    A lo mejor fue ese calor sofocador, o quizás fuese, el detonante, el mismo Naruto, no estaba muy seguro. Solo sabía que hoy había perdido la bendita paciencia por culpa del continuo masticar de goma de mascar de su novio y que, ahora, lo estaba besando, como si no tuviera un mañana -mintiéndole la lengua hasta la campanilla, más específicamente- para quitarle el jodido chicle y recuperar algo de su cordura. Hmp.

    Tomó por la cintura a Naruto, acercándolo más a él, notando como el otro pasaba las manos por sus hombros, alcanzando su cabello y despeinándolo por el camino. Giró su rostro en un ángulo diferente, entrelazando, a la vez, su lengua con la de Naruto, bailando la danza del diablo, queriendo ambos ganar el premio. Sin embargo, esta vez, Sasuke fue más hábil -y ciertamente, el factor sorpresa le ayudó con la victoria.-

    Al separarse, sus respiraciones eran entrecortadas, jadeantes. El azabache pudo distinguir el sabor a mora del chicle en la boca -y no sólo por el beso, sino porque estaba allí, sobre su lengua-. Naruto abrió los ojos lentamente, mirándolo aturdido, aunque recuperó la compostura -si es que a maldecir por lo bajo se le puede llamar así- al comprobar, con horror, que su adorada goma de mascar no estaba.

    – ¡Tú! ¡Miserable ladrón! ¿Cómo te atreves a quitarme mi chicle? ¡De verás!

    Sasuke se encogió de hombros, de forma inocente. –Me molestaba.

    – ¿Te molestaba? –Bajó el tono de voz, casi de manera escalofriante -y él se hubiera asustado si no conociera ya ese tono.-

    La cabeza del Uzumaki se agachó y su flequillo cayó hacia delante, cubriendo sus azules ojos llameantes. Sasuke tragó pesado, preparándose para saltar en cualquier momento, y cuando observó, como nueve colas rojas de chakra, flotaban en el aire, de manera fantasmal, supo que debía correr por su vida.

    – ¡No corras, cobarde! Regrésame mi chicle, Sasuke Uchiha ¡de verás!

    Bueno, veámosle el lado bueno a toda esta situación, el beso con su novio, fue bueno, -demasiado bueno.- había conseguido que Naruto dejara de hacer pompas con ese desquiciante chicle -aunque lo cambiara por los gritos de éste- y siempre era mejor correr siendo perseguido por tu novio furioso que por una bola de fans desquiciadas -¿verdad? Nota: no volver a quitarle un chicle a Naruto.-

    Y todo por un miserable y azucarado chicle. Pop.

    Fin.


    ¿Y? ¿Qué les pareció? ¿Les gustó? odnaspja A mi me gustó como quedo, pero me gustaría saber que les pareció a ustedes, espero que lo hayan disfrutado!! psajdpj Nos leemos!! Cuídense!! n,n

    Besos!!


    Edited by Vicky-chan - 27/2/2013, 17:59
     
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15 replies since 26/2/2013, 14:57   1618 views
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