El Colegio Mixto (varias parejas)

¿Yo? ¿Por qué? -preguntó Yoichi Nishinosora también rubio aunque con el cabello más corto con una sonrisa divertida.

-Te quitaste el pantalón de deporte y te quedaste en short para presumir tus piernas. -aseguró en sus usuales murmullos Chet.

-¿A que son lindas? -sonrió orgulloso de sus piernas, Yoichi era el chico más rápido del equipo.

Yuchi Evans y Amagi Daichi entraron a la cancha al fin, acercándose a los omegas para saludarlos, sin poder evitar echarles un buen vistazo a esas lindas piernas y no eran los únicos, varios chicos sobre todo Minamisawa tenían los ojos fijos en los dos omegas en la cancha.

Que malo eres conmigo, Mako –se quejo Mahoro. Eso era sólo un día normal más con Mahoro. Mahoro no era el típico omega y no solo él, entre los omegas del club de tenis había muchos que salían de las ideas preconcebidas y estereotipadas de lo que debía ser un omega. Los chicos sentían pena por el alfa que se enamorara algún día de Mahoro. Aunque con el carácter que se gastaba Mahoro lo más probable era que se buscara un día un beta al que dominar en lugar de un alfa que tratara de dominarlo a él.

¿Son novios? -preguntó Yamato serio con el entrecejo fruncido sin notarlo antes de poder detenerse a pensar lo que estaba preguntando.

¡Ran! -gritó Tenma corriendo donde Kirino y escondiéndose detrás de él.

-¿Tenma, que te sucede? -le pregunto Fey pacientemente sabiendo como era su jugador.

-Es él -señalo a Ryuzaki-. El chico de mi manga tiene garras venenosas, yo lo leí en mi manga, me va a comer, Fey sensei -se abrasó a su entrenador de la cintura.

-Ya, ya, Tenma, no te va a comer -le aseguró acariciándole el cabello con una sonrisa tierna- ¿Quieres seguir jugando? -le preguntó con suavidad, eran partidos sin importancia no obligaría a jugar a Tenma si este no quería.

-No -negó Tenma-, tengo miedo, de sus garras -aseguró.

-Vale, Tenma, entonces no tienes que jugar con él -le sonrió a Saru-, disculpe a mi jugador, Tenma se retira.

-Ehh Ten-chan espera -dijo Ryuzaki y se tapó la boca cuando noto con la confianza que le había hablado al chiquillo que se escondido detrás de Fey asomando un poquito la cabeza de lado para mirarle-. No son garras -le aseguro extendiendo su mano vendada, pero Tenma gritó escondiéndose de nuevo detrás de Fey. Fey le sonrió a Ryuzaki.

-Teniendo en cuenta como jugaste en realidad creo que le llegaras a gustar y si le gustas tanto como Kirino prepárate para ser acosado -sonrió divertido Fey, mientras Tsurugi miraba toda la escena con curiosidad e interés y un poco de molestia.

-Eres un gran jugador-le sonrio Kita amablemente tendiéndole su mano-… tienes mi respeto -le dijo de forma seria, logrando una sonrisa suave del pequeño omega.

A mí también después de ver el de los tuyos. -asintió Saru- ¿Qué tal si nos reunimos un día a tomar un café mientras hablamos de las posibles combinaciones para llevar a cabo en el comienzo de clases y también de los entrenamientos? -le preguntó Saru al peliverde que asintió con entusiasmo mientras los chicos alfas miraban a su entrenador alucinados, jamás imaginaron que llegaría el día donde verían a su serio entrenador coquetearle a alguien.

Los omegas también estaban alucinados, Fey siempre pasaba de los alfas, pero a ese peliblanco… el entrenador Rune le estaba haciendo ojitos.

Este año ganaremos las nacionales, Ran -gritó Tenma saltando haciendo reír a todos.

Oh sí, este año el Raimon sería imparable, los jóvenes alfas querían ver a los pobres diablos que subestimaran a sus nuevos compañeros, como lo habían hecho ellos. La combinación alfa-omega, aplastaría a todos sus rivales.