Cronicas de una cafetería |(SasuNaru & ItaDei) [R-18] Rape +Mpreg ¡CAPÍTULO 15!

« Older   Newer »
 
  Share  
.
  1. Nat
        +1   -1
     
    .
    Avatar

    Yaoizando

    Group
    Escritor intermedio
    Posts
    106
    Location
    México

    Status
    Offline
    YamíSora: :'D gracías que linda que te declares fan del fic TTuTT me haces feliz
    Suzume: Hola, gracias por comentar :'D espero que te guste la entrada del teme >w<


    Gracias por las que se animan a comentar y a quienes lo leen xDD pues en este cap ya aparece nuestro querido teme, espero que les guste en mi opinion es muy divertido este capítulo, me divertí mucho cuando lo escribi. Que lo disfruten >w<









    Capitulo 5 “El Cliente frecuente y el Músico novato”

    “18 de noviembre:
    Diario, ya casi es fin de semana y pronto cumpliré una semana en el <<shinra>>, ya casi no me han echado de la cocina, ¡aprendo rápido! , Me siento muy bien ahí y mis compañeros, pues todo bien, Gaara, se ve interesante, escuche que el viernes tocara su grupo en la sala de música ya que el jueves lo ocupo otro grupo… y aunque el día que nos conocimos no hablamos mucho y casi no se parece por ahí… ese día me dio la impresión que el y Yahiko no se llevan bien”



    ~~
    Le habían encargado cosas simples y aburridas toda la mañana, Shikamaru lo corrió de la cocina ya que por su culpa casi se quemaba uno de los guisos, observo la forma en que trabajan sus compañeros para así poder hacer lo mismo, todos se tomaban muy enserio su trabajo eso lo animo a hacerlo con el mismo entusiasmo que los demás.

    Nuevamente la campanilla sonó, él estaba recogiendo una de las mesas que recién habían desocupado, cuando miro hacia la puerta justo cuando entro un chico de apariencia seria, inmediatamente capto su atención por su cabellera pelirroja de un tono intenso y sus ojos contrastaban perfectamente eran un tono azul verdoso y que decir de su vestimenta, prendas negras y rojas todo un punk, lo dedujo por el símbolo de “Anarquía” que se repetía varias veces en sus accesorios.

    —Tu— su tono de voz era grueso y bien entonado— ¿Quién eres?, nunca te había visto

    — Soy un nuevo empleado, apenas empecé hoy, me llamo Naruto, espero nos llevemos bien— dijo seguro de si y extendió su mano, el otro dudoso la estrecho completando el saludo.

    —Mi nombre es Gaara, digo lo mismo— En ese momento terminaron las presentaciones pues fueron interrumpidos por el jefe del local.

    — ¿Nunca dejaras de ser un malcriado Gaara? —Su rostro era impasible se veía realmente molesto, eso asusto al rubio— Te lo dije antes, no por que Sasori sea mi socio puedes llegar a la hora que quieras, es la última advertencia ya no diré más.

    —Llegue tarde por su culpa, no hubo tiempo de avisar, me disculpo…— se escuchaba tan poco convincente que hasta Naruto hizo un gesto de desaprobación.

    —No me vengas con excusas tontas, solo ponte a trabajar— camino de nuevo hacía su oficina pero antes se giró de nuevo hacia atrás— Por cierto Naruto, evita a este vago, no te traerá nada bueno— el aludido solo se quedó parado en su lugar con un gesto de incomodidad en el rostro.

    — ¿Él puede elegir solo no crees? — contesto de inmediato de manera hostil pero no recibió respuesta.

    Naruto estaba sorprendido de la tensión que había entre esos dos, lo único que podía hacer era mantenerse al margen, pero no tenía la intención de hacerle caso a Yahiko, él no era un chico precisamente influenciable.

    — ¿Piensas hacerle caso a ese tipo? — Realmente no le importaba la opinión de rubio pero quiso saber con que tipo de persona estaba tratando.

    —Puedo elegir por mí mismo—sonrió

    —Hun…eres… interesante. —Lo miro extrañado, a los demás empleados les había dicho lo mismo Pain, y esta era la primera vez que alguien lo contradecía por así decirlo.



    ~~
    “Es muy misterioso y se ve genial, después de eso ya no lo eh visto ahora que recuerdo Shikamaru me dijo que algo emocionante pasaba los viernes… me pregunto si será eso… bien mañana sabré más de eso, ese lugar tiene magia siempre pasa algo.”


    ~0~





    Ya llevaba casi una semana trabajando en el <>, poco a poco se iba acostumbrando, sobre todo a llegar temprano, no quería defraudar a Pain, a espaldas de todos le llamaba así, pero cuando iban juntos a casa lo llamaba por su nombre.

    Recién entraba y era atacado por el olor de pan recién horneado, definitivamente Shikamaru y Chouji sabían mucho de cocina después les preguntaría que hacían ellos en ese lugar estaba curiosos por saberlo.

    — ¡Buenos días! — Inhalo fuerte— huele muy bien— ya se empezaba acostumbras al olor especial del Shinra por las mañanas— ¿esta vez si me dejaras tomar uno Shikamaru?

    —Sabes que no, es una de las cosas que más ordenan, deja de molestar y coloca las cosas en su lugar— señalo los platos.
    —Que humor…— se resignó a comenzar su trabajo— Por cierto… que lo interesante que pasa los viernes — pregunto curioso y con una extraña sonrisa en el rostro— ¿ese tal Gaara toca bien o que es? — insistió.

    —No se trata de Gaara, veras—lo abrazo por el cuello— hace varios meses, empezó a venir un cliente, pero hasta ahora nadie sabe su nombre, las chicas se ponen como locas cuando vienen.

    — ¿Y eso que tiene de interesante? — enarco una ceja

    —El tipo siempre pide lo mismo, llega a la misma hora, se va cuando pasan 30 minutos, parece un obsesionado con la puntualidad y además… esta vez Sakura le preguntara su nombre, esta… algo loca por ese tipo hasta da miedo— miro su reloj— Bien ya casi es hora siempre llega a las 8:15

    —A de ser un engreído, no le presten tanta atención— decepcionado volvió a su trabajo— ¿no te hace muy bien trabajar con mujeres no? Digo nunca pensé que serias de los que se interesen en esas cosas de chismes y esas cosas

    —Es imposible no caer en eso con ellas, pero ya verás que después resulta entretenido—rio bajito— Yo decía eso en un principio y ve como acabe.

    —Si tu dices…— en eso sonó la campanilla de la entrada, Shikamaru se asomó por una rendija para ver si será el dichoso cliente.

    —Mira, mira, ahí está el tipo— arrastro al rubio justo a un lado de él, a fin de cuentas la curiosidad era muy poderosa

    — ¿Donde? No veo nada—se acomodaban entre el poco espacio que les brindaba la ventanilla circular de la puerta de la cocina, observo con cuidado a la persona que acababa de arribar al local, un joven de entre 18 o 19 años, alto, piel nívea y cabello oscuro, muy típico en un joven, entonces se preguntó ¿Qué rayos le veían al tipo ese?, o acaso sería ese aura misterioso que emitía, lo que fuera que las chicas veían en él, Naruto no lo encontraba nada especial.

    —Solo observa, ¡Sakura entrara en acción! —sin duda alguna Naruto pensó que el castaño necesitaba una vida propia, se veía muy emocionado.

    Nadie sabía nada de ese joven, mucho menos su nombre, pese a que ya era un cliente que frecuentaba por lo menos una vez a la semana el local, así que las chicas estaban impacientes por saber algo de él.

    —Hola, ¿Cuál será tu orden?...tenemos —preguntó tímida y algo sorprendida pues ni siquiera termino de hablar

    —Solo tráeme Café Americano y pan tostado—no la miro a los ojos, su vista estaba fija en el libro entre sus manos.

    — ¿No se te ofrece algo más? — Respondió nerviosa, tratando de entablar cualquier tipo de conversación con el joven, no quería parecer obvia pero el tono “amable” que usaba la delataba— Hoy tenemos un especial de postres son muy buenos ¿sabes?, en especial…
    —No—hizo una pausa— gracias pero solo quiero lo que te pedí

    —Ah, está bien, mi nombre es Sakura un gusto

    — ¿Acaso tu trabajo es coquetear con los clientes? — respondió con evidente molestia, ante ese comentario la joven se disculpó y se retiró lo más rápido que pudo.

    —Vaya parece que no le fue muy bien—No tenían idea de lo que había pasado ahí pero el rostro de la joven no presagiaba nada bueno.

    —Ese tipo es un bastardo, ¿cómo se le ocurre tratar así a las personas?— El rubio estaba molesto, aun no trataba lo suficiente a Sakura, pero esa no era una manera de tratarla, odiaba a las personas engreídas y arrogantes. Se movieron de lugar cuando vieron que se aproximaba la chica de cabello rosa.

    —Tengan esta es la orden, oye Naruto ¿podrías llevar la orden? Ya no puedo ver a ese chico a la cara— no se veía triste, solo muy avergonzada — ahora vengo iré a pagarle la apuesta a Ten Ten.

    —Te advertimos que eso pasaría, con Ten Ten paso lo mismo, ¿qué dijo esta vez?

    — Dijo: ¿Tu trabajo es coquetear con los clientes? —Los chicos no creían lo que oían eso había sido algo muy cruel, más para el ego de una mujer— tenía que intentarlo Shikamaru, tal vez después lo haga de nuevo, pero ahora no—negó con la cabeza—moriría de pena

    —No sé qué le ven a ese tipo, desde aquí puedo ver su enorme ego, que tipo tan pesado— miro de nuevo por la ventana

    —Son cosas de chicas Naruto, no creo que entiendas, ahora lleva la orden ¿sí?, ah y recuerda no ponerle mucha azúcar, una vez se molestó cuando se lo llevaron así.

    —Claro, no te preocupes, cumpliré los caprichitos de nuestro cliente— mostro una sonrisa que tenía dos intenciones, su mente ideaba un plan que no tenía por qué fallar.

    Shikamaru, se encargaba de la segunda orden, mientras Naruto ajustaba la cafetera y en un descuido agrego mucho más café del necesario, sonreía maliciosamente justo como un chiquillo antes de hacer una travesura, sabía que arriesgaba mucho pero después vería que hacer, así era él.

    — ¿Ya tienes listo lo que falta? —le hablo al castaño que terminaba de servir aquel sencillo desayuno.

    —Aquí tienes, esta lista la orden— le entrego un bandeja — y recuerda no intentar hablar con el cliente— Aquello sería lo último que intentaría hacer el rubio pues de inmediato hizo una mueca de fastidio.

    — ¡Ja!, muy gracioso, eso nunca “Ya quiero ver la cara del tipo cuando pruebe mi café especial” — Salió con la bandeja en la mano y la puso en su lugar, el ultimo comentario del rubio no presagió nada bueno según Shikamaru

    —Aquí tiene lo que pidió, provecho— le molesto el hecho que el moreno engreído ni se inmuto a mirarlo. El rubio no pudo mirar su cara pues caía un elegante fleco por su frente y un poco por sus mejillas, se veía muy serio.

    — ¿Quiere que agregue un poco más de azúcar? —Dijo amablemente y con una amplia sonrisa, cualquiera que lo viera no pensaría había un plan detrás ese lindo gesto.

    —Odio el sabor dulce— se apresuró en hablar— el café es mejor así… amargo— elevó la vista parecía que aún estaba molesto. El rubio se preguntaba qué demonios pasaba con ese amargado, bien podía aparentar 18 años pero tenía un carácter de un amargado hombre de 40 años.

    —Bien—sonrió de medio lado— entonces aquí tiene, disfrute su pedido

    —Gracias…—respondió seco y mirándolo disimuladamente por el rabillo del ojo. En todo el tiempo que acudía a ese lugar nunca lo había visto.
    Naruto bufó molesto, miro a un lado y vio como un nuevo cliente tomaba lugar en una de las mesas, decido atenderlo, por nada del mundo se perdería el resultado de su travesura.

    —Buen día, en que le puedo servir…— saco una pequeña libretita
    —Solo dame, un café Irlandés y algún pan dulce que tengas, por favor— el hombre se veía distraído y pensativo esto llamó la atención de menor.

    — ¡Enseguida señor! — hablo con euforia

    Un raro y fuerte ruido justo al lado llamo la atención de los que estaban alrededor, el rubio se contuvo de milagro la risa, vio claramente cuando el azabache escupió el gran sorbo que había dado.

    — ¡TU! —Grito enfurecido— ¿¡qué demonios era ese café!? — Se levantó de su lugar aproximándose para quedar justo en frente de él.

    —A-acaso algo está mal con su pedido— el rubio era listo fingió titubear

    —Sabe horrible, está demasiado cargado— respondió molesto y poco a poco recuperando la compostura.

    —Yo le pregunte que si le agregaba algo más— la gente de alrededor ahora veía al chico moreno como un ogro regañando a un pobre inocente. Parecía un gatito con las orejas bajas

    —Se lo que pedí, pero por dios soy humano y eso es demasiado amargo. — Hizo un gesto de asco, el sabor amargo aun calaba en su garganta

    —Usted dijo que ese era el mejor sabor— Puntualizo Naruto. El azabache entendió todo cuando vio aquella disimulada sonrisa triunfal en el rostro del rubio

    — ¿Acaso lo hiciste a propósito? —enarco la ceja, ahora todo ese asunto comenzaba a llamar la atención del lugar. Naruto se quedó callado intentado contener la risa

    —Discúlpelo por favor, él es nuevo y aún está aprendiendo a manejar ciertas cosas—Shikamaru acudió a su ayuda.

    —Así que este payaso es nuevo aquí—lo miro pensativo por unos segundos, tenía que hacer algo para desquitarse de ese mocoso que se atrevió a dejarlo en ridículo frente a todos

    — ¿¡A quien le dices payaso!? Amargado — le saco la lengua en un intento de insultarlo sin que el castaño chef se diera cuenta
    —Como sea solo tráeme un nuevo café— volvió a su lugar en la mesa.

    Shikamaru respiro pesadamente mientras volvía a la cocina acompañado del rubio revoltoso quien caminaba graciosamente aquel incidente le había hecho el día. Se alejaron rápido y ya estando de nuevo en la cocina hablaron

    —La armaste en grande Naruto— le propino un ligero golpe en la cabeza— ¿Qué hubiera pasado si esto llega a oídos de Pain? — se acercó a la cafetera a resolver el problema que Naruto causo.

    —Tranquilo, yo tengo las de ganar. ¿Viste como todos los demás me veían como víctima ?— comenzó a reír— ¿no viste todo? Fue épica la cara de idiota— asomo su rostro por la pequeña ventana circular de la puerta.

    —Te arriesgas demasiado—aseveró mientras hacia el pedido de nuevo.

    —Tengo la excusa perfecta, soy el chico nuevo que aun sabe manejar la cafetera, es normal que pasen esos i-n-c-i-d-e-n-t-e-s

    —Toma, aquí están las dos órdenes— le entrego una nueva bandeja—y esta vez nada de incidentes— Se apresuró a decir antes que se le ocurriera alguna otra brillante idea.

    —Que aburrido eres… —hizo un gesto infantil con los labios

    Salió con las dos bandejas, se le ocurrían miles de cosas que hacer para molestar a ese chico pero desistió de ellas, podía tener problemas después y ahora más que nunca necesitaba conservar su empleo.

    —Disculpe lo de hace rato, aun no se usar bien las cosas de la cocina— mintió— Aquí tiene de nuevo su pedido. — Dejo la taza de café sobre la mesa

    El otro joven esta vez lo miraba a la cara poniéndole total atención, no le creyó ni por un segundo, la sonrisa que había visto en él hacía rato lo delataba por completo, pero ahora entraba su venganza.

    —Descuida, solo que tendré que decirle a Yahiko que tenga más cuidado en los empleados que contrata— dio un ligero sorbo a su taza, el otro palideció de solo oír el nombre de su jefe, definitivamente el hecho de que ese sujeto conociera Yahiko nunca paso por su cabeza— Así está mucho mejor, ahora sí parece un digno café americano— esto último casi lo dijo para sí mismo.

    — ¿Conoce a mi jefe?...— trago saliva con dificultad. Aquella palidez en el rostro no pasó desapercibida por el moreno, sonrío internamente, era cierto que conocía al dueño del local, pero no se llevaban muy bien, así que le jugaría de la misma manera a ese rubio tonto.

    —Así es— asintió con arrogancia y mostro una sonrisa plena de satisfacción, el otro lo miro con frustración
    —No lo haga… — fue lo único que atino a decir

    — Si no quieres que lo haga, discúlpate apropiadamente o ¿No me vas a pedir perdón enserio? Acaso crees que fui tan estúpido para creerme esa tontería de que no sabes usar bien las cosas, Sé que lo hiciste apropósito— Lo miro tan seriamente que llego a intimidarlo
    Odiaba a ese tipo, se creía tan listo pero debía admitir que no era nada tonto logro ponerlo entre la espada y la pared, trago nuevamente saliva mientras hallaba que responder.

    —No sé de qué habla, y lo dije enserio— no podía mirarlo a los ojos

    —Bien creo que Yahiko encontrara interesante este incidente, ¿No crees?

    —Tengo que dejar este pedido, lo siento me retiro, ¡provecho!— Su única salida fue aquel viejo que lo miraba impaciente desde la mesa de al lado, el joven moreno amplio la sonrisa cuando vio huir de ese modo tan desesperado al chico rubio, pero aun no terminaba solo le daría un descanso momentáneo.

    —Disculpe el retraso— el pobre aún estaba inquieto.

    —Ah, descuida, déjalo ahí por favor—Hablo aquel viejo mientras sus manos temblorosas sostenía un artículo del periódico, Naruto miro esto curioso pues parecía que al viejo le daría un ataque o algo así.

    —Se siente bien, ¿Le puedo ayudar en algo más? —el hombre se veía ansioso.

    Ante esta pregunta el moreno que tenían de vecino escucho atento lo que se hablaba ahí.

    —Si no es mucha molestia, ¿Puede decirme que opina de este artículo? — le ofreció con cuidado el pedazo de papel, el otro asintió y comenzó a leer. El artículo se trataba de una reseña de un reciente evento en la cuidad muy importante por lo que alcanzaba a leer, cuando termino devolvió el periódico a su dueño según la nota el nombre del editor era Ebisu.

    —Y bien ¿qué le parece? — respondió ansioso

    —Pues, bien supongo… ¿usted lo escribió, verdad? — se sentó frente a él, el hombre no dijo nada ante esa muestra de confianza al contrario, sintió que ese joven era fiar

    —Así es, mire este artículo es importante de él depende mi estancia en la editorial, ¿quería saber si está bien? Sabe es un gran favor que me pidió el alcalde de la ciudad y mi trabajo depende de esto…

    —Me pareció bien, verá yo no sé mucho de esas cosas pero me pareció bien pero tal vez si hubiera agregado una imagen de evento hubiera estado mejor, digo la gente entiende mejor cuando hay alguna imagen de por medio ¿no cree? — El hombre escuchaba atento la crítica del joven aunque no le había sido de mucha ayuda.

    —Esa es una tontería…— se oyó a espaldas del rubio, este giro su cabeza de inmediato.

    —Jovencito, usted no tiene por qué meterse—replicó el educado hombre

    —Lo siento, pero si usted es un buen redactor, tiene que llevar el mensaje sin necesidad de imágenes, ese es su trabajo, ya lo leí y pudo haber estado mejor.

    — ¡Tú que vas a saber de esas cosas! — Habló molesto Naruto, ahora se atrevía a decir que sus críticas eran tontas y además meterse en cosas a las que nunca fue llamado.

    —Soy estudiante de Letras y se de lo que hablo— dijo con toda calma. Lo que faltaba, ese bastardo era un total patán y aun peor uno culto. Ante el comentario del joven el mayor se retiró mostrándose abatido ya no dijo ni una palabra termino su pedido y retiro a pagar su consumo todo con la rapidez de unos segundos.

    —Ahora eres un sabelotodo, ¿Qué genial no? — hablo sarcástico mientras se ponía frente a él encarándolo

    —Solo dije la verdad y no creas que se me olvido lo de antes— el muy desgraciado continuaba con la misma pose podría jurar que era un señorito de sociedad. El rubio se sintió incomodo ante la muestra de confianza pero de inmediato reacciono al recordar a lo que se refería, nunca aceptaría que él fue el que provoco el incidente por más obvio que se viera.

    —No sé de qué habla, yo ya pedí disculpas, así que si no le molesta, me retiro— empezó su andar hacia la cocina
    —Si me molesta, primero tienes que disculparte— habló tajante

    — ¿Disculpa? — se giró al instante, nunca en su corta vida había aborrecido tanto a alguien a minutos de conocerlo

    — ¡Demonios!— Miro su reloj— Ahora por culpa de tus tonterías llegare tarde

    — ¿Mi culpa?, yo no tengo la culpa de nada ¡estúpido amargado!— Aquello había sido la gota que derramo el vaso.

    — ¿Cómo me acabas de llamar Payaso? — Consideraba que tenía auto control pero ese revoltoso de sonrisa tonta lo hacía enojar

    — ¡Estúpido amargado!, solo a un viejo le puede gustar el sabor amargo— Aquel insulto era el más tonto que había escuchado en su vida, y lo peor es que estaba pensado como devolvérselo

    — ¡Pues tal vez no me gusta el azúcar para no quedar tan estúpido como tú!

    — ¡Intenta repetir eso imbécil!

    — ¡Perdedor!

    — ¡Bastardo!

    De sus miradas saltaban chispas, cada vez se decían insultos sin sentido y no que otro en otro idioma los cuales ofendían más al rubio, la gente alrededor lejos de preocuparse de que eso terminara a golpes, lo veían de modo divertido, aunque dentro de la cocina Shikamaru veía todo como una verdadera molestia perturbando sus tranquilos días y claro suplicando que no llegara su jefe o por lo menos no en ese momento.

    — ¿Qué esta pasado aquí? — una voz grave interrumpió la infantil discusión. Ninguno de los dos se había dado cuenta en que momento entro al lugar, por suerte no era Pain

    —Ah, Lo siento Gaara, ¡pero este tipo me saca de quicio! — lo señalaba frenéticamente con el dedo

    —Yo me largo— tomo sus cosas, y dejo unos billetes en la mesa, el gesto del moreno no pasó desapercibido por Naruto

    El ambiente se puso tenso en cuanto esos dos se cruzaron, incluso el rostro apacible del pelirrojo mostro una mueca de desprecio

    —Oye tonto— Naruto lo miro instintivamente por lo cual se maldijo internamente— aun no terminamos — no contesto nada solo no lo perdió de vista hasta que salió del lugar, nada fue ignorado por el pelirrojo que miraba todo curioso.

    — ¿Tienes asuntos pendientes con ese tipo? — Naruto no vio raro que preguntara, después de todo presencio aquella patética pelea

    —Ah, claro que no, el tipo quiere armar un escándalo de una tontería—Habló un poco más relajado

    —No me sorprende siempre ha sido así— lo que había pensó hacia unos momentos era verdad, esos dos se conocían y muy bien para llegar a mostrar tal despreció mutuo, lo que más le intrigaba era saber el porqué de esas miradas tan hostiles

    —Así que lo conoces— Naruto miro a Gaara

    —Vamos a la misma universidad— respondió sin tener ningún problema.
    — ¿Eran amigos?

    Ellos se conocían desde pequeños, al ser hermanos de la misma edad de Sasori y de Itachi crearon una rivalidad al conocerse, ambos poseían dotes de artistas, Gaara por su parte tenía el don de la música y Sasuke el don de las letras, poesía era muy inteligente, sus personalidades chocaban de tal modo que competían por ver quién era el mejor, eso les causo un conflicto mucho mayor cuando intentaron meterse en el campo de otro, Sasuke intento tocar instrumentos para sorpresa de Gaara estos se le dieron bien al tal grado de ganarle en una competencia en la escuela. Gaara hizo lo mismo y logro quitarle el premio de Literatura a nivel Preparatoria.

    — ¿De ese tipo? ¡Jamás! — A Naruto le intrigaba cada vez más que se traían esos dos

    La mirada azulina se conectó con el de ojos negros mientras pasaba de largo por el ventanal de aun lado, Naruto fijo en su mirada ahora en el pelirrojo que seguía cargada de despreció.

    —Por cierto, ¿Puedes limpiar la sala de música?, revisaremos los instrumentos— le arrojo las llaves antes de que este dijera Si
    Aquello había sonado tan imperativo pues ni le permitió ni quiera le dio tiempo de contestar, solo asintió con pesar, una vez que le aviso a Shikamaru que ayudaría a Gaara a un rato entro a la sala, el lugar estaba casi limpio el mismo había hecho gran parte eso la noche anterior, solo faltaba limpiar el corto escenario, no sería problema pero le daba pereza hacerlo. Una vez que tuvo sus herramientas comenzó hacer su trabajo, le era incomodo moverse pues el lugar era algo reducido y con tantas mesas y sillas le complicaban las cosas.

    La puerta se abrió para dejar pasar la silueta de Gaara junto con sus compañeros de grupo, uno tenía el cabello liso y castaño un poco largo sus ojos le recordaban a Hinata, el otro tenía una expresión divertida en el rostro, cabello castaño y un poco ondulado pero el que más resaltaba era Gaara definitivamente.

    — ¿Te importa si entramos de una vez?, tenemos prisa

    —Adelante, no falta mucho para que termine. — Si tenía suerte tal vez tocaran algo mientras estaban ahí, Naruto tenía muchos deseos de escucharlos le tenía gran fascinación a los músicos sobre todo los admiraba mucho, una parte de él quería intentar tocar pero la torpeza de sus dedos nunca lo ayudo.

    — ¿Y tú quién eres?, mi nombre es Kiba y él es Neji, Gaara había dicho algo de uno nuevo pero no menciono tu nombre— hablo el animado castaño de cabello corto

    —Mi nombre es Naruto— al decir esto el chico castaño río como loco

    —¿Estas bromeando?, ¿te llamas como ese ingrediente del Ramen?, eso sí que da risa

    — ¡No tiene nada de malo! Es un lindo nombre— portaba con orgullo ese nombre que le había dado su padre, que según recordaba tenía cierta fascinación con ese platillo y ahora era el favorito de Naruto.

    —Kiba déjalo en paz— le reprendió el otro, él se veía que era más serio o maduro que los otros integrantes de la banda— mejor sigue afinando la guitarra la vez pasada se oyó horrible cuando tocaste el solo

    — ¡Ah no molestes! Se escuchó genial y por cierto tu don la batería está bajando, la velocidad de tus manos ya no es como antes Neji

    — ¿Sigues con eso? La velocidad de mis brazos esta perfecta

    —Paren de discutir, siempre es lo mismo con ustedes— Hablaba Gaara revisando su bajo

    Naruto miraba a esos tres sorprendido, realmente se llevaban bien, parecían hermanos, el tal Kiba no era precisamente amigable pero le agrado, era de esos tipos que se pasan de sinceros pero nunca tenían la intención de ofender a nadie, Neji era como el hermano mayor del grupo a la vista muy responsable y Gaara se veía claramente que amaba lo que hacía y con la apariencia de líder tal vez ese grupo podría llegar a ser conocido algún día.

    — ¿Cómo se llama su grupo? —pregunto animado pues ya había terminado su trabajo, ahora se acercaba a ellos. Los tres chicos se quedaron viendo y se rieron por un momento, ni ellos sabían cómo llamar a su grupo habían intentado buscar nombres pero siempre quedan con ridículas sugerencias.

    —Aún no tenemos nombre— Gaara fue el que hablo— ¿quieres escuchar una canción? Aún no sabemos si tocarla esta noche, nos vendría bien una opinión

    —Claro… pero no pueden hacer mucho ruido, hay muchos clientes haya afuera.

    — No te preocupes chico Ramen, el salón aísla ruidos nadie escuchara nada— Nada contento con el apodo de Kiba, el rubio tomo asiento mientras los demás se acodaban en sus lugares.

    —Bien aquí vamos…— comenzaron a tocar.

    Naruto no se equivocó tocaban punk y muy bueno para su gusto. Disfruto del ritmo, su pie se movía al ritmo de la batería y vaya que le fascino al voz de Gaara, la canción duro aproximadamente 2:30 minutos y una vez que terminaron aplaudió como loco.

    — ¡Tocan genial! — fue lo único que atino a decir, los demás pusieron cara de fastidio, Naruto se percató de esto y miro hacia atrás y de inmediato lo invadieron los nervios.

    —Pues espero que han terminado, porque saben que no deben entrar aquí a estas horas y menos tocar— ese no era otro que Pain, Gaara en ningún momento se sintió intimidado pero el resto si, podían meterse en problemas o peor un que les quitara el permiso para tocar por las noches. — Y tu Naruto ¿qué tienes que decir sobre esto?— el rubio sintió como un escalofrío recorría su espalada cuando se topó con la gélida mirada.

    —Yo… lo siento, no sabía que no se debía entrar aquí a estas horas— acepto un poco avergonzado.

    —Te dije que no te vieras con Gaara, es una manzana podrida y tu aun tienes salvación— aquello había sonado demasiado cruel, Naruto sintió un poco de ira, él no era nadie para determinar eso.

    —Fue mi culpa, no le dije que estaba prohibido entrar aquí y ellos — señalo a su grupo— tampoco lo sabían, los convencí para que vinieran queríamos afinar algunas cosas, la canción fue de improviso

    —Pueden esperar cuando les toque su turno, Gaara si sigues cuestionando mi autoridad te retirare el permiso para que toquen aquí, ahora salgan de aquí, lleguen puntuales por la noche y ensayen todo lo que quieran pero ¡ahora no! Y Naruto vuelve con los demás… — asintió despacio y se fue tras el siguiéndolo.

    — ¡Naruto!, ¿quieres venir a vernos tocar hoy? — grito el pelirrojo antes de que cruzara la puerta

    —Claro que vendré a verlos— respondió emocionado, ignorando la molestia que eso le causo a se jefe acto seguido: salieron del lugar.

    —Es raro que lo invites, es agradable el chico pero ¿algo planeas Gaara? — le habló Neji, empezando a guardar los instrumentos, conocía muy bien al chico y no era precisamente de los del tipo amable

    —Conoce a Sasuke— fue lo único que dijo, los demás no necesitaron más explicaciones

    — ¿Qué?... Para con eso Gaara, esto no va acabar bien— Tanto Kiba como Neji estaban hartos de esa rivalidad entre esos dos, nunca traía cosas buenas y ahora con Naruto entre todo, no presagiaba nada bueno.


    ~0~

    Ya casi eran las 7 de la tarde y eso anunciaba solo una cosa, su hora de salida, al ser viernes tenían mucha clientela tanto por las mañanas como en las tardes y una hora de descanso no era suficiente estaba realmente exhausto, ansiaba que pasaran esos 20 minutos que lo alejaban de su libertad, además tenía ir a su casa hoy era día de lavandería y a las 9:00 tenía que regresar para ver tocar a Gaara.
    Sonó la campanilla un nuevo cliente había entrado, el rubio se dispuso a ir a tenderlo pero se detuvo al ver la expresión de Shikamaru que se asomaba por la ventanilla de la puerta.

    —Esto nunca había pasado esto antes…

    — ¿Qué pasa? — se paró junto a él, puso la misma cara del castaño, ¡de nuevo estaba ahí! Ese chico odioso de la mañana

    — ¿Oye que no dijiste que solo venia los viernes por la mañana?

    —Se supone que así era, esto nunca había pasado, ¿oye seguro que lo le dijiste algo más? tal vez regreso para contárselo a Pain— el rubio había omitido detalles como el hecho que ese bastardo conocía a Yahiko

    — Ve y atiéndelo Naruto, Ten Ten y Sakura ya se fueron y Hinata está muy ocupada— esta vez hablo Chouji el otro cocinero acompañante del castaño

    — ¡Esta bien! Yo iré — iba nervioso, pero decidió hacer como si nada hubiera pasado, tomo aire y se relajó.

    — ¿Que desea ordenar? — fingió una pequeña sonrisa, saco su libreta esperando a que dijera algo,

    —Solo tráeme una limonada mineral sin azúcar— hizo énfasis en la última frase

    —En un momento se la traigo—termino de tomar sus notas, no noto que el chico sigilosamente metió algo dentro de una de las bolsas del delantal de trabajo

    —Tienes hasta que termine para pedirme disculpas — en realidad no le interesaban las disculpas, pero molestarlo y ver sus raras expresiones eran suficientes para alegrarle el día esa sería su venganza.

    — ¿Sigues con lo mismo? Ya pedí disculpas así que no lo haré de nuevo.

    —Ya veremos, pero creo que a esta hora si no mal recuerdo ya está aquí Yahiko— ya no recibió respuesta el rubio salió huyendo en cuanto escucho el nombre de su jefe.

    Entro a la cocina y le dio a Shikamaru la nota para que empezaran a preparar le pedido, no sabía qué hacer, si no pedía disculpas el bastardo ese iría de chismoso con Yahiko y su empleo estaría en peligro de nuevo, lo que había paso con Gaara por suerte lo le dio importancia pero con esto tal vez no pasaría lo mismo, tenía que dejar su orgullo y disculparse apropiadamente, pero enfurecía de solo imaginar la sonrisa triunfante del ese tipo, no, ¡no podía darle ese gusto! Ya vería como zafarse de ese problema.

    — ¡Naruto! El pedido está listo desde hace 5 minutos llévalo ahora— lo hicieron reaccionar las réplicas de su compañero y salió apurado a entregar el pedido.

    —Aquí tiene…— entrego el pedido, nervioso de que insistiera con lo mismo

    — ¿Y Tienes algo más que decirme? Algo como… no sé, una disculpa tal vez — iba a explotar ese tipo se burlaba de él y lo trataba como si fuera un tarado.

    —Que disfrute su pedido, con permiso

    — ¿Ese que va saliendo no es Yahiko? — al rubio se le erizo la piel, en efecto Yahiko iba saliendo de su oficina parecía que iba saliendo así que era inevitable que pasara justo donde estaban ellos y si ese tipo hablaba podía ser despedido, apretó sus puños y dejo atrás su orgullo.

    — ¡Lo siento!, si lo hice apropósito pero no le digas nada a Pain — admito con la cabeza baja, aun temiendo que se acercara más Yahiko, tenía que hacerlo demasiado real para que el chico no dijera ni una sola palabra de lo de paso en la mañana.

    — ¿Ves? No te costaba nada decirlo, pero no se oye muy convincente que digamos— Cada vez venía más y más cerca

    —Está bien, lo siento, si lo hice apropósito, por favor no le digas nada Pain, también siendo haberte dicho todas esas cosas— Tenía un gesto muy tierno Tsundere en el rostro y sonaba muy sincero así que no tuvo más remedio que aceptar sus disculpas.

    —Estate tranquilo no le diré nada— sonrío triunfante cosa que odio Naruto, se había salido con la suya pero por su bien y el de su empleo no se buscaría más problemas

    — ¿Tu aquí?, ¿Cuántas veces tengo que decirte que no me gusta que vengas por aquí? Y además distrayendo a mis empleados, eres igual que Gaara— Hablo el mayor una vez que los tuvo enfrente, el rubio miro todo confundido, ¿No se suponía que se llevaban bien?

    —No tienes derecho de admisión y no me compares con él — dio un sorbo a su bebida. Sasuke y Yahiko nunca se habían llevado bien al igual que con Gaara estos de conocían desde mucho antes a causa de que Yahiko era uno de los compañeros de Itachi.

    —Pensare seriamente en usarlo, solo termina rápido y deja de venir por estos lugares— en ese instante se giró para ver de cerca al rubio— Puedes volver a la cocina, esta vez no podré acompañarte a casa, ¿Estarás bien solo? — lo tomo por los hombros

    —Eh, Si, como sea vendré en más noche a ver el grupo de Gaara tocar ya no tienes que preocuparte por mí ya se llegar solo así que todo está bien— Naruto se sintió muy incómodo por esa acción de su jefe. Por su parte Sasuke vio todo eso muy extraño, Yahiko no era una persona que presamente se preocupara por el resto era rara la persona que le hablara tal cual por su nombre ¿Qué significaba ese rubio tonto para él?

    —Me parece perfecto, él se encargara de cerrar así que ayúdalo en lo que puedas, es capaz de dejar alguna puerta abierta— froto sus cabellos — Te veo después, disfruta el fin de semana— y salió del establecimiento.

    —Oye que acaba de pasar aquí no se suponía que conocías a Pain, prácticamente te corrió de aquí

    —Lo conozco, pero nunca te dije que me llevaba bien con él. —Odio con todo su ser a ese tipo si tan solo supiera su nombre podría maldecirlo como se debe.

    Una vez que termino su turno fue a toda prisa a su departamento, era día de ir a la lavandería y no tenía mucho tiempo que perder y demás aun iría a su compromiso con Gaara y los demás.

    Ya en la tintorería reviso su ropa antes de ponerla dentro del aparato, fue muy grande su sorpresa ver una nota dentro de su “uniforme” que decía: “Mi nombre es Sasuke Uchiha, ¿Cuál es el tuyo? …” ¿Cómo se las había arreglado para meterle eso en el bolsillo? Bufó molesto, pero al menos ya sabía a quién maldecir, hizo bolita el papel y lo guardo en su bolsa trasera.

    El resto de la noche fue muy divertida para él, el grupo estuvo bastante bien y la gente los recibió perfectamente, ayudo a cerrar a Gaara y después de eso fue a su casa tomo su diario antes de quedarse dormido, había sido un día agotador así que solo escribió.


    19 De noviembre

    “Hoy conocía al tipo más insoportable que esas señoras que me estrujaban en la casa hogar, ¿Su nombre? Sasuke Uchiha… “


    C o n t i n u a r a…






    ESPERO SUS COMENTARIOS nwn
     
    Top
    .
112 replies since 1/7/2013, 09:26   7775 views
  Share  
.