Yaoizando
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Capítulo Extra I.- El Traje
Solo faltaban 4 días para la famosa fiesta de la universidad, pero no estaba tan emocionado como en un principio, ¿la razón?, en una reciente platica con Chouji y Shikamaru logro razonar que le faltaba algo muy importante e indispensable: El traje que vestiría.
Había tomado la tarde libre, Yahiko tardo mucho en aceptar su petición pero termino cediendo.
Busco por tantas tiendas le fue posible y en todas era lo mismo: demasiado caro. Últimamente esa era su única limitación y comenzaba a hartarse. Estaba por darse por vencido; un traje nuevo costaba por lo menos cuatro de sus salarios y la fiesta era en cuatro días. Considero la opción de rentar uno, pero no había disponibles o eran tallas exageradamente grandes. Camino a lo largo de la calle principal de la zona comercial de la cuidad. Estaba harto, el ruido y la muchedumbre empezaban a provocarle un considerable dolor de cabeza. Siguió su camino unas calles más arriba. Miro sorprendido un edificio enorme parecía un recinto escolar pero sin tantas formalidades. Fue hasta que leyó el letrero principal que supo que era una universidad y no era cualquiera sino que era La Universidad y Escuela de Artes. El lugar era un sitio hermoso, no poseía un grandioso espacio pero era ideal.
Observo como poco a poco salían personas, miró su reloj; eran 5:45 pm. Se dio cuenta que perdió toda la tarde en vano, se sintió frustrado, suspiro y comenzó andar de nuevo, el cielo se veía extraño tal vez no tardaría en caer otra fuerte nevada como en días anteriores.
— ¿Qué haces por este lugar?— Una voz ajena le llamo fuertemente la atención, giro rápidamente a donde lo llamaban, solo para toparse con una cabellera pelirroja, no era otra persona que Gaara quien cargaba en su espalda el estuche de su inseparable guitarra acústica Gibson — ¿Vienes a buscar a Sasuke? — se acercó a él. Este de inmediato negó con la cabeza.
— Hola Gaara—Saludo frenéticamente — No vine por él… no sabía que aquí estudiabas Venía del centro comercial— dijo sonriente
—Pensé que estarías en el Shinra, ¿cerraron temprano? —ahí estaba igual de inexpresivo como de costumbre con ese tono de voz tan neutral y penetrante. Naruto ya se había acostumbrado a ello.
—No, le pedí un favor a Pain, tarde mucho en que me diera permiso…—explicó
— ¡Dobe! —Giraron hacia donde provenía ese sonido. Naruto se vio sorprendido y Gaara se vio molesto, definitivamente la presencia de Sasuke no le hacia nada de gracia y el rubio noto eso.
—Teme, deja de decirme así—dijo el rubio con falsa ira. Sasuke se acercó hacia donde estaban
— ¿Qué haces por aquí? —Pregunto el moreno
—Vino por mi, ¿no vez?—Dijo Gaara en tono hostil. Naruto volvió a sentir esa tensión en el aire, era algo sofocante. Decidió omitir sus razones a Sasuke, si llegaba a saber que un no tenía traje
—Venía del centro comercial—señalo tras él con el pulgar
—Te veré después—Miró con fastidio al pelirrojo— Alguien por aquí no esta de humor Recuerda que pasaremos por ti, ten todo listo ese día— con un movimiento de mano e despidió del blondo y se retiro de ahí.
—Si… todo listo — dijo murmuro nervioso mientras lo veía alejarse
—¿Vas a casa? —dijo Gaara señalando hacia adelante incitándolo a caminar. Naruto asintió— Te acompaño…
Recorrieron un largo trayecto platicando de trivialidades. Pero el frio empezó a molestarlos, el cielo ya estaba peligrosamente gris a pesar de aun no era de noche.
—Creo que nevara de nuevo hoy— Dijo Gaara— ¿Quieres ir a mi casa? Llamaremos a un taxi, aun falta mucho para que llegues a casa.
—Esa es una buena idea— su rostro estaba muy helado e innumerables escalofríos recorrían su espalda— Sasuke me conto que el día primero de diciembre siempre nieva aquí, me sorprendí mucho cuando vi que era cierto.
—Ese tonto poeta— se llevo la mano a la frente — nunca lo había notado. — Naruto se arrepintió de nombrarlo, parecía molesto.
— ¿Por qué se odian? — Dijo curioso. Gaara sonrió y negó con la cabeza
— Digamos que simplemente… no soportamos nuestras existencias, nunca seríamos los mejores amigos.
—Una vez que lo conoces siquiera un poco, te das cuenta que no es tan malo… solo un poco diferente de tratar— rio bobamente
—No te ofendas pero Sasuke no es un buen tema de conversación para mi— Naruto se encogió de hombros y empezó un tema de conversación nuevo.
Gaara siempre parecía divertirse al lado de Naruto. Él no era de tener muchos amigos, era reservado, y creía que solo bastaba con tener a un lado a las personas necesarias. Tenía una fuerte personalidad difícil de soportar, por ello mismo a pesar de tener un fuerte atractivo físico no le interesaba una relación, detestaba la frivolidad de las mujeres, nunca había estado enamorado ni nada parecido, él no conocía ese sentimiento y no le emocionaba sentirlo, como él decía, solo se amaba así mismo.
Su grupo era lo más valioso que tenía, no le importaba nada más. Su ambición era triunfar costara lo que costara. Al lado de Kiba y Neji, quienes eran sus únicos y verdaderos amigos un había hallado una especie de familia. Sus padres nunca estaban y su único hermano lo tenía abandonado. Ahora sentía que Naruto podía encajar en esa familia. Admiraba como se relacionaba con los demás, como podía demostrar su verdadero ser aun frente a un desconocido. Para él Naruto como un libro abierto, podía adivinar fácilmente lo que pensaba, pero a la vez tenía ciertas páginas codificadas que lo sorprendían al momento de traducirlas, y eso le parecía fascinante. Quería conocerlo más y entender que clase de dependencia estaba desarrollando hacía él.
Se detuvieron frente a una casa. Gaara, con saco sus llaves y abrió la puerta dejando que el blondo entrara primero. Afuera ya estaba empezando nevar.
—Ponte cómodo— con cuidado, el pelirrojo dejo sobre un sofá el estuche con la guitarra— ¿Quieres quedarte a cenar? — le ofreció amablemente Gaara mientras se encaminaba a la cocina.
—Eh, Claro ¿Por qué no?— Dijo cuando salió de su transe, quedó sorprendido cuando vio el interior de la casa. Poseía un estilo hogareño pero moderno, todo era en color blanco y un rojo opaco. Parecía que allí solo había espacio para dos personas. Se veía muy confortable el lugar pero se podía percibir algo solitario y frio
Con la mirada recorrió cada rincón, sonrió cuando miró las escasas fotografías que pendían de la pared; podía observar la cara aniñada de Gaara, en la imagen parecía que tenía unos 7 años, era adorable, a su lado estaba otro pelirrojo se veía adolescente tal vez no más de 14 años, tenía un rostro afilado y semblante serio.
—No veas eso…— dijo Gaara apenado— de pequeño todos decían que parecía un tomate cherry—Naruto se doblego de risa.
—No había pensado en eso—Dijo cuando recobro el aliento
Después de unos minutos Gaara lo llamo desde la cocina. Naruto fue enseguida.
—Siento que no haya otra cosa, pero mi hermano no fue de compras esta semana— sobre la mesa había dos recipientes humeantes de ramen instantáneo.
—Por mi esta bien, estoy acostumbrado a comer esto, de hecho son mis favoritos. Además hace frio
— ¿Quieres ir a mi habitación? — Ofreció
— ¡Si! —Respondió emocionado imaginando que tipo de cosas fantásticas vería allí.
Ambos tomaron su improvisada cena. Naruto siguió a Gaara quien se dirigía hacia el sótano, de pronto se sintió un poco nervioso pero desconocía la causa.
Se quedo asombrado cuando vio que toda la planta baja era solo de Gaara, y que tenía muy buen gusto para decorar su habitación. En las paredes había posters de bandas que jamás en la vida había visto y con nombres que no supo ni leer. La cama estaba en una esquina, había alfombra en el suelo y como lo había supuesto, tenía muchos instrumentos y una repisa completa llena de discos de diferentes géneros y claro no podía faltar un muy buen equipo de sonido.
—Siéntate donde quieras— Naruto obedeció. Se acomodó sobre un sofá con forma rara y empezó a devorar el ramen.
— ¿Quieres escuchar lo que tocaremos para el festival de invierno? —Dijo Gaara
— ¡Si, si, si! — respondió eufórico saltando una y otra vez de su lugar.
Gaara tomo una guitarra del uno de los estantes. Afino un poco el instrumento y poco a poco sus dedos fueron produciendo un hermoso sonido. Era suave y relajado, muy diferente a lo que escuchaba cuando tocaban en el Shinra. Naruto entendió porque Gaara había elegido el sótano como habitación, ningún ruido externo lo distraía, ese era su pequeño mundo. Después de varios acordes comenzó con la letra de la canción, era algo depresiva pero a la vez romántica. Naruto no se movió de su lugar hasta que Gaara dio por terminada la canción.
— ¿Qué te pareció? —Se mostro orgulloso
— ¡Fue fantástico! Es algo diferente a lo que había oído de ti antes pero estuvo muy bien, les aseguro que les ganaran en ese festival. — Afirmó el blondo.
—Gracias, nos hemos esforzado mucho para esto— admitió— ¿quieres ir al festival? Aun no hay fecha pero ya no tardan en anunciar que día será.
— ¡Claro que iré! — dijo enérgicamente sacudiendo el brazo que tenía libre.
—Por cierto, ¿Qué compraste? — El pelirrojo se posiciono sobre uno de los sofás, terminando lentamente su porción de ramen.
— ¿Eh? — Naruto parecía tener una incógnita en el rostro
— ¿Dijiste que fuiste de compras no?
— ¡Es cierto! Lo olvide por un segundo—lo invadió nuevamente un sentimiento de frustración. Suspiro pesadamente y se mostró pensativo.
— ¿Qué pasa? —Cuestiono su compañero
—Tengo que encontrar un maldito traje formal para la fiesta de este sábado —Dijo fastidiado.
—Se supone que es lo primero que debiste de haber conseguido
—No me regañes — resoplo —me di cuenta de eso hace dos días, nunca he ido a ese tipo de eventos.
— ¿Cuál fue el problema? —Dijo Gaara con interés
— ¿Haz visto cuando cuestan? — Hecho la cabeza hacía atrás apoyándose sobre el respaldo del sofá—me tomaría meses comprar uno… y en uno rentado caben dos yo.
Gaara se levanto de sofá y camino hasta el armario que estaba hasta el fondo de la habitación junto a una lámpara estilo vintage. Empezó a hurgar dentro, Naruto miraba curioso los movimientos del pelirrojo; lentamente se fue acercando.
— ¿Qué haces? —pregunto una vez que estuvo tras él
—Puedo jurar que por aquí había uno, lo use hace un año; creo que somos de la misma talla así que no habrá problema si lo usas. —El blondo se sintió incomodo, últimamente necesitaba la ayuda de los demás, lejos de sentirse bien se sentía un completo inútil. Definitivamente tenía que hacer algo al respecto, él era una persona que sabía ganarse las cosas.
—Aquí esta—exclamo el pelirrojo. Del interior del armario saco una bolsa perfectamente sellada—Si quieres puedes medírtelo ahora— saco las prendas de la bolsa y las tendió sobre la cama. Era un elegante traje negro, de corte ingles incluía una corbata rojo carmín, definitivamente a Naruto le quedaría perfecto.
—Esta genial…—dijo asombrado, su vista no se despagaba de las prendas. —Gracias Gaara, juro que te lo pagare
—No hace falta, solo lo use una vez y no pienso volver a usarlo
—Por favor, no me hagas sentir un inútil… déjame pagarlo— intentó persuadirlo
—De acuerdo— suspiro— si así estas más tranquilo esta bien. Solo págame lo que costaba que rentaras el traje. Naruto saco un par de billetes de su cartera y se los entrego.
—Si no te molesta me lo mediré aquí— hablo emocionado. Gaara solo asintió en silencio viendo como poco a poco el blondo se deshacía de su ropa. En su rostro se formo una disimulada sonrisa cuando notó que le expresión de felicidad no se alejaba del rostro del rubio y finalmente quedo sorprendido, Naruto se veía muy bien no le gustaba fijarse en detalles pero le quedaba perfecto. Se acercó a él, notó que no podía hacer el nudo de la corbata.
—Eres un desastre para eso, yo te ayudo…— Gaara fue hábil con las manos y en unos segundos quedo anudada.
—Perdón, perdón… — dijo apenado— nunca había usado una —Oye… ¿a tu hermano no le molestará que este aquí? —En el rostro de Gaara apareció una amarga sonrisa
— ¿Sasori? Él ni se acuerda que estoy vivo. Solo viene a verme una que otra vez al mes deja dinero y algunas compras luego se va. No lo culpo sé que soy una molestia para él—Dijo como si no le importara algo que inquietaba al rubio.
—y ¿Tus papas?
—Solo tengo a mi padre, se la pasa en viajes de negocios, pero la mayoría del tiempo esta en el país del hierro.
—Yo también sé lo que es estar solo… Pero estoy seguro que a tu padre y tu hermano les importas
— ¿Por qué lo dices con tanta seguridad? —lo miro incrédulo
—Por que a ti no te abandonaron— En el rostro del rubio había una amarga sonrisa y en sus ojos se reflejaba una profunda tristeza. Gaara sintió que algo atravesaba su pecho una vez que notó ese dolor en su mirada.
— ¿Qué paso con tus padres? ¿Te abandonaron? — dejo a un lado su egoísmo y mostro algo de interés
— Se le puede llamar así. Una noche se suicidaron juntos y después fui separado de mi hermano; nos llevaron a diferentes orfanatos y hasta la fecha lo sigo buscando…—Las palabras de Naruto salieron por si solas, no pensó mucho lo que decía pero en él había una enorme necesidad de expresar un poco de ese dolor.
—Lo siento
—No hay problema… con el tiempo creo que ya lo asimile. No puedo cambiar mi realidad—Suspiro y se encogió de hombros
—Eres más fuerte de lo que te vez— Aseguró Gaara mostrando la sonrisa más sincera que pudo expresar.
—Tal vez… —dijo apenado. Se llevo la mano a la nuca y de nuevo sonrió como solía hacerlo.
Una vez que terminaron de comer, Naruto llamó a un taxi pues afuera seguía nevando. Gaara despidió al blondo desde la puerta de su casa.
— ¡Gracias por todo Gaara! — Dijo antes de irse. El pelirrojo solo lo observo hasta que el pequeño auto se perdió en el paisaje urbano.
Esa noche Gaara comprendió algo en medio de sus meditaciones nocturnas. No entendía que tipo de sentimiento era ese, nunca antes lo había sentido y hasta cierto punto le incomodaba sentir dependencia de alguien más, pero así eran las cosas; quería ver siempre esa cálida sonrisa en Naruto y sobretodo, no estaba dispuesto a compartirla.
Originalmente esto lo quería omitir de la historia pero ya de ultimo me gusto nwn espeo que les haya gustado y por cierto gracias por sus comentarios nwn
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