Revolución del Amor en la Revolución Industrial (cap 25) (FIC FINALIZADO)

parejas: YxC y GxS, IxY, KxH, MxK, NxM, TxK, HxS, IxA...

« Older   Newer »
 
  Share  
.
  1. Tem-chan
        +1   -1
     
    .
    Avatar

    Diosa del amor yaoi!
    Image and video hosting by TinyPic

    Group
    Member
    Posts
    1,358
    Location
    En un mundo perfecto con mucho yaoi y gente buena :) <3

    Status
    Offline
    Hola, hola, hola!!! Sé que tardo mucho pero he estado con mucho lio por la uni y todo eso… y bueno, que… ok, no es excusa, porque en parte no escribo porque soy una vaga, pero bueno, hoy actualizo, espero que eso les haga felices, no pierdan la esperanza juro, repito, juro, que acabaré todos los fics que empecé aunque vaya lenta, ténganme confianza, por fiiiiis!! Muchas gracias!
    ----------------------------

    Capítulo 14
    En una fábrica cerca de la ciudad había un grupo de chicos que ya se había despertado y se habían reunido de nuevo para jugar o charlar, lo que más les apeteciera. Al final habían decidido jugar un poco a la pelota pero estaban aún cansados y medio dormidos por haber llegado tan tarde a la fábrica y no habían jugado demasiado bien. Más bien, lo habían hecho bastante mal todos, pero unos se quejaban más que otros por ese mal partido que habían hecho.
    ―¿Por qué no pillaste ese pase, mocoso? ―gritaba un Kariya bastante enojado al pobre de Hikaru quien bajó la cabeza.
    ―Perdón, es que no me di cuenta ―dijo con un puchero haciendo que Kariya sintiera algo de culpa por haberle gritado.
    ―Debes estar más atento.
    ―Lo siento…
    ―Bueno, ya no importa mocoso, para la próxima.
    ―S-sí ―dijo con una pequeña sonrisa mientras afirmaba infantilmente con la cabeza.
    Kariya tragó saliva ante esto y miró hacia otro lado bastante nervioso por la escena que daba el pequeño corderito ante sus ojos. Suspiró para calmarse antes de escuchar como alguien hablaba con él.
    ―Kariya no puedes hablar que tu fallaste ese chute delante de la portería sin portero, eso es de ser inútiles ―le molestó un poco Sousuke.
    ―No jodas, que tu intentaste hacer un regate y te caíste al suelo ―contraatacó Kariya indignado por ese ataque.
    ―Hoy hemos jugado muy mal todos ―dijo Hayami muy deprimido por ello.
    ―No pasa nada ―respondió Hamano― no es el fin del mundo, otro día será.
    ―Supongo, pero quizás es que ya no somos buenos en esto…
    ―Este tipo de cosas no se olvidan de un día para otro ―se quejó Kurama por las palabras de su amigo― estamos cansados es por eso ―añadió dando un bostezo a mitad frase.
    ―Tienes razón Nori-chan, pero así cansadito estás muy lindo ―respondió Minamisawa con una de sus sonrisas haciendo sonrojar a este antes de recibir un golpe de codo en el estómago― auch, esto duele.
    ―No me llames Nori-chan idiota.
    Y así seguía la conversación de los chicos esa tarde, por lo que se veía salir de fiesta no les hacía ningún bien, más bien al contrario, les ponía de mal humor o tristes.

    ---------------------------------

    De mientras en la ciudad estaba llegando ya la gente para la fiesta, el rubio también había llegado ya a casa de Ichiban y este se sentía como si tuviera que sufrir un infarto. Ese rubio había ido más que hermoso ese día, al parecer la carta le había motivado. Le gustaba eso, verle tan guapo, pero le hacía pensar en cosas que no se podían en ese momento. Suspiró unos momentos para calmarse y después miró de nuevo al rubio con una sonrisa calmada, o lo más calmada que podía ser.
    ―Entonces, ¿Qué tal estás?
    ―Bien, aunque esa carta ―le dijo mirándolo un poco raro― ¿porque fue?
    ―Bueno, por qué hubo un malentendido el otro día… y…
    ―¿Y?
    ―No quería que siguieras enfadado conmigo.
    ―¿Solo fue por eso? ―preguntó ahora un poco más inquisitivo.
    Ichiban desvió la mirada, obviamente no iba a admitir que eso era algún tipo de confesión ni nada por el estilo, ya que en teoría para él no lo era, pero no iba a serlo nunca ya que él no quería ser solo un instrumento para la reproducción. Yoichi ante ese silencio empezó a molestarse un poco así que sonrió de ese modo tan suyo.
    ―Así que no es porque me amas ―le preguntó haciendo que Ichiban carraspeara―. Entonces no pasará nada si jugueteo con otros y me gusta alguien más.
    Dicho esto se fue hacia otro lado de la fiesta dispuesto a bailar con otros cuando de repente un peli-gris llegó a él corriendo hacia él feliz y emocionado. Suspiró porque se paró delante de él con unos ojos brillantes de la ilusión.
    ―¡Hola sempai! ―le dijo el chico feliz― estoy muy feliz, hoy mismo fui a buscar esos zapatos que había pedido para hoy. Ese zapatero que tanto me gusta, del que te he hablado, resulta que abrió la tienda solo para mí y me hizo estos hermosos zapatos que pegan mucho con mi traje, y dijo que estaba hermoso.
    ―Que bien que estés tan feliz ―le respondió algo cortante― ¿Entonces, tú crees que siendo un noble podrás casarte con él? Sé realista, sabes que eso no puede ser. Tu padre nunca la permitiría.
    Estaba frustrado y simplemente se estaba descargando con él, aunque era cierto que el padre del peli-gris no aceptaría eso fácilmente. Él no tenía porque meterse en eso, no era cosa suya, y se suponía que como amigo tenía que animarlo pero no podía, no en esos momentos en los que él estaba de ese humor por culpa de Ichiban. ¿Cómo podía ser tan idiota? Debería de valorarlo más y amarle como él lo amaba, y él sabía que lo hacía pero se negaba siempre. Eso realmente le estaba molestando mucho, ¿quién era él para rechazarlo de ese modo? No podía, pero lo hacía.
    ―¿Por qué me dices esto? ―preguntó el pobre peli-gris algo triste de repente―. Entre Kirino y tú, no alegráis mucho la fiesta que se diga…
    ―¿Qué le pasa a la pantera rosa?
    ―Creo que Shindo no le corresponde a su amor.
    ―¿De dónde sacaste esto? ¿Te lo ha dicho él?
    ―No, pero es algo obvio.
    ―Maldita pantera negra que no sabe comportarse ni guardar nada… ―dijo enojado porque su amigo no era más cuidadoso.

    -------------------------------

    Ichiban seguía con sus pensamientos, ya había saludado a todo el mundo y en esos momentos se encontraba de nuevo con Shindo, se llevaba bien con el sirviente de Kirino, aunque no había hablado mucho con el peli-rosa sabía que era muy amigo de su rubio. Él lo consideraba suyo a pesar de lo que dijera, y realmente esas palabras por parte de Yoichi le habían dolido en el alma.
    ―No entiendo a Yoichi, él me ve como un banco de semen, pero de todos modos está obsesionado conmigo ―le decía al pobre castaño que estaba en su mundo.
    ―¿Obsesionado? ―preguntó― yo más bien creo que te ama… pero que lo dice a su manera.
    ―No creo, a él solo le interesa tener hijos.
    ―Él quiere tener hijos contigo ―especificó Shindo― al menos eso parece ya que siempre va a por ti, nunca lo he visto fijarse en nadie más.
    ―Hoy me dijo que irá a juguetear con otros chicos…
    ―¿Y eso? ¿Peleasteis?
    ―Él se molestó porque pensó que había votado a Miyabino, le envié una carta dedicada a él como invitación y disculpa, pero cuando me preguntó porque se la envié, solo pensé en los espermatozoides y no pude decirle que es porque él me gusta, aunque no debería de gustarme ese chico manipulador.
    ―Pero te gusta ―inquirió el castaño mientras veía a Ichiban― al menos os gustáis mutuamente, a diferencia de la persona que yo amo.
    ―Kirino te quiere.
    ―¿Cómo lo sabes? ―preguntó sobresaltado―. Nunca te dije que me gustara Kirino…
    ―Pero ambos sois muy obvios.
    ―¿En serio? ―dijo algo incrédulo― pero es un amor imposible, él es un señorito y yo solo su sirviente.
    ―Pero siempre estás con él y lo conoces mejor que nadie a la vez que le amas.
    ―Sí, y su padre nunca nos bendecirá.
    ―Eso es verdad… ¿Y qué harás?
    ―No lo sé, pero al menos me gustaría decirle que le amo.
    ―¿Aunque no puedas estar con él?
    ―Sí, incluso así.
    ―Esto me parece muy admirable, yo no podría.
    Dicho esto, ambos se quedaron en silencio sin saber muy bien que decir, ya ambos se habían contado sus problemas amorosos y ya estaban más tranquilos por ese hecho así que simplemente se quedaron unos momentos callados, metidos en sus pensamientos. Ambos suspiraron y más tarde se separaron. Shindo para ir a ver que Kirino no necesitara nada y el otro para ver que la fiesta fuera bien.

    -----------------------

    ―A ver pantera rosa, ¿por qué no te cuidas y vigilas un poco más? ―le preguntaba un rubio a su amigo a gritos.
    ―¿Cuidar de qué? Y no me llames pantera rosa, rubia.
    ―De tu secreto. ¿Cómo puedes dejar que los demás sepan que amas a Shindo? Si se entera tu padre lo separará de ti.
    ―Yo no se lo dije a nadie…
    ―Pero tu comportamiento te delata idiota.
    ―¡No me llames idiota!
    ―¿Y cómo debo llamarte entonces?
    Kirino bajó la mirada sintiéndose un poco mal, pero no dijo nada más. En esos momentos no tenía ganas de pelear, solo quería llorar. Bajó el rostro entero para que no se viera y se puso a llorar. Yoichi se quedó un poco sorprendido ante eso, el peli-rosa no solía llorar por cosas así, eso le sorprendió.
    ―¿Qué te pasa? ―le preguntó mientras lo abrazaba.
    ―Shindo no me ama, él solo está conmigo porque es su trabajo.
    ―¿De dónde sacaste esta idea?
    ―Él me lo dijo ―le explicó entre sollozos sintiéndose triste.
    ―Eso no es cierto, no puede ser… ―susurró el rubio pensando en que el chico debía estar confundido, él estaba seguro de que se amaban aunque nunca podrían estar juntos por los diferentes rangos familiares― verás que solo es un malentendido ―Kirino negó con la cabeza pero no dijo nada más.

    ----------------------

    Estaban tranquilos dos chicos, en el bar, esta vez estaban en el del peli-blanco, el cual estaba sentado al lado del chico de mecha azul. Más que estar sentado estaba acosando un poco a Hayato, aunque como respuesta solo consiguió un golpe bien fuerte en las costillas por parte del menor. Por eso le gustaba más ir al bar de Manabe aunque este era más pobre y o podía darles tanto de comer como Ibuki, aunque era cierto que el peli-blanco cocinaba como el culo. A veces se tenía que escoger entre comer mucho o comer algo comestible. Lo bueno era que ese día había sobras que nadie quería y eso significaba que tenían comida gratis. Ibuki los había llamado para que comieran de esa comida y para ver al castaño aunque más bien, parecía que lo había hecho ir para acosarlo. Lo que quería en verdad era conquistarlo, aunque no fuera comida hecha por él, al menos le podía alimentar bien algunas veces. Le gustaría que fuera más a menudo pero al parecer eso no era posible así que al menos lo hacía cuando podía.
    ―¿Está bueno? ―le preguntó al mecha azul después de recuperarse de ese golpe.
    ―Sí, se nota que no lo cocinaste tu ―respondió el chico con la boca llena, comiendo con hambre, haciendo reír al peli-blanco.
    ―Es normal, fue mi madre quien cocinó estos platos, a ella se le da bien la cocina.
    ―Deberías aprender de ella.
    ―Sí, pero no es tan fácil, a mi no me gusta cocinar.
    ―Pero tienes que alimentarme ―respondió el otro.
    ―¿Y qué me darás a cambio? ―preguntó Ibuki con tranquilidad y picardía.
    ―No tengo dinero…
    ―No pensaba en eso, yo pensaba en ti.
    ―¿En mi? ―preguntó Hayato sorprendido― ¿Qué es lo que quieres de mi?
    ―Muchas cosas.
    ―¿Mi cuerpo? ―preguntó ahora con una mirada algo sombría.
    ―Entre otras.
    ―¿Quieres tener sexo conmigo a cambio de comida? Eso es como prostituirse ―le gritó un poco avergonzado y molesto.
    ―No es tener sexo se le llama hacer el amor.
    ―Para eso tienen que estar ambos enamorados y yo no te amo ―fue la seca respuesta que recibió el pobre peli-blanco.
    ―Yo a ti sí te amo.
    ―No diga burradas soy un chico.
    ―Y yo también ¿Y qué?
    ―Que no puedes amarme porque soy un chico al igual que tu.
    ―Eso no me importa.
    ―Pero a mí sí.
    Después de esta gran respuesta, tajante para acabar la conversación, Hayato se puso a comer de nuevo ignorando al peli-blanco que siempre lo acosaba y miró unos momentos a Minaho quien no decía nada, y solo se dedicaba a comer en silencio, supuso que pensaba en su amigo peli-lila.

    ---------------------

    Yoichi estaba en la fiesta, aún, ya había hablado con su futuro seme, con su kohai y con su mejor amigo y en esos momentos se preparaba para cumplir lo que le había dicho al primero. Tenía ganas de molestar al peli-naranja, al igual que él lo molestaba negando que le amaba. ¿Por qué se resistía tanto si realmente sentía eso por él? No lo sabía pero de todos modos le molestaba y por eso mismo se iba a vengar del chico. Se fue a la zona de baile para empezar a bailar con un chico que le había parecido algo guapo, no tanto como Ichiban, pero es que nadie podía compararse con el mayor, al menos para él. El chico enseguida respondió a sus artes de flirteo y se puso a bailar con él pensando que había ligado. Yoichi sonrió y sin más se puso a mover su esqueleto junto al chico, con lo cual se quiere decir que se cogieron de las manos y empezaron con su pequeño baile, yendo cogidos de estas dando vueltas por la pista.
    ―Hola ―le saludó el chico con una leve sonrisa― ¿Cómo te llamas, hermosura?
    ―Yoichi ―respondió este por cortesía― ¿Y tú?
    ―Mi nombre no tiene importancia, princesa.
    ―Yo te dije el mío, ¿no es algo descortés no decirme el tuyo? ―preguntó intentando que no le molestara que le llamara de ese modo.
    ―Tal vez lo sea, pero no creo que mi nombre sea importante estando delante de una hermosura como tú.
    Yoichi no dijo nada, realmente no le importaba el nombre de ese chico así que simplemente le sonrió un poco y siguió con el baile como si nada pasara. Estaban bastante juntos en esos momentos, y el rubio estaba un poco incomodo con eso pero no tenía más remedio que hacerlo si quería conseguir que Ichiban respondiera ante él.
    Por otro lado el peli-naranja estaba observando la escena, como Yoichi fue donde ese chico y también como habían empezado a hablar y la sonrisa del rubio dirigida hacia ese ser, realmente los celos le estaban matando ante esa escena. Apretó un poco los puños pero se dijo a si mismo que no tenía nada que ver con él, aunque estuvieran prometidos. No iba con él pero no podía dejar de mirarlos, Yoichi se veía tan coqueto como siempre y debía admitir que odiaba ver como coqueteaba con otros. Este amor insano lo iba a llevar a la perdición. Suspiró y se quedó observando los movimientos del rubio hasta que se acabó la fiesta.
    Después de eso Ichiban despidió a todas las personas que habían asistido a su fiesta, primero de todos a Kirino y Shindo que al parecer no estaban para muchas fiestas. Después se fue Miyabino que parecía un poco molesto por algo aunque no sabía porque, y por último se fueron Yoichi y ese chico. Se fueron juntos los dos, y mientras se despedían pudo ver como el rubio lo miraba fijamente un poco antes de sonreír e irse con ese chico de nombre desconocido. Sabía que era de una familia importante y que era un noble que debía de invitar pero no tenía muy claro quién era. Justamente Yoichi había escogido a un chico que no conocía, y que solo estaba allí porque sus padres eran amigos de los del chico, o tenían algún negocio con ellos, no sabía muy bien la relación entre los padres.
    Se molestó por esa fuga tan descarada de su rubio con el chico, pero no podía montar una escena delante de la gente, y quedaban algunos invitados de sus padres por la casa. Aunque se estaba mostrando muy cortés con ellos en su interior estaba descuartizando al chico que se estaba yendo con SU rubio, aunque no quisiera admitirlo delante de este, era suyo, ya que era su prometido y lo amaba. Bueno pensando en eso tenía todo el derecho del mundo de montar esa escena, pero no quería delante de tanta gente, debía comportarse.
    ―Pasa una buena noche, querido ―le dijo a Yoichi para la sorpresa de ambos.
    ―¿Querido? ―preguntó el chico sin nombre.
    ―Sí, él es mi prometido ―afirmó Ichiban marcando algo de territorio delante del menor.

    Continuará…

    ------------------------------
    Aunque me quedó cortito, lo siento, por esta vez, esto es todo en este fic, prometo escribir lo más pronto posible ahora que al fin estoy de vacaciones.

    Hasta pronto, y perdón por tardar tanto…
     
    Top
    .
57 replies since 7/8/2013, 15:55   2379 views
  Share  
.