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alvarexter
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Bueno, pues aquí va la continuación, esta tarde espero poder ponerme y no tardar tanto en subir la próxima.
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Ya estábamos en la escuela y estaba a punto de comenzar la primera clase, de modo que rápidamente tomamos asiento, cada uno en nuestro pupitre. Tocaba clase de lengua, una de las que más odiaba de modo que apenas prestaba atención a lo que decía el profesor. Aprender kanjis y analizar oraciones me parecía demasiado aburrido. Irremediablemente mi mente abandonó la clase y se puso a funcionar por su cuenta.
“que suerte tengo de tener un amigo como Matt, me he portado como un imbécil, pero aún así está a mi lado. Hemos tenido nuestras diferencias, pero siempre las hemos terminado por arreglar y fue el único capaz de sacarme del abismo en el que me hallaba inmerson. Sora no merece estar con él.” Mientras los pensamientos inundaban mi cabeza de forma involuntaria mis ojos enfocaron a Matt y sin poder remediarlo esbocé una sonrisa en mi rostro; parece ser que el profesor justo en ese momento me vió.
- ¿Qué le hace tanta gracia señorito Yagami? – dijo en tono burlón
- ¿Eh? No, nada… que me he acordado de algo gracioso que me contaron ayer.
- Pues ya que parece que te sabes la lección, ¿Por qué no sales a la pizarra y nos lo demuestras?
- Va… vale, ya voy – no tenía ni idea de cómo se hacía el análisis, pero debía salir, no sabía qué hacer.
Cogí la tiza y comencé a escribir las funciones de los elementos de la frase, pero como apenas sabía qué había que hacer cometí muchos errores.
- Mal, muy mal Taichi, no has dado ni una. No deberías estar tan distraído si no te sabes la lección. ¿Puede alguien ayudar a Taichi a completar el análisis?
- Yo le ayudaré – Dijo el rubio mientras se levantaba y cogía la tiza de mi mano. – Sujeto…. Predicado… complemento… - iba diciendo en voz baja mientras analizaba cada parte de la oración – Ya está.
- Muy bien Yamato, veo que has estudiado mucho y ya sabes Taichi, la próxima vez presta atención; podéis sentaros.
Al ir a sentarnos pasé al lado de Matt y le dí las gracias por su ayuda, me sacó de un aprieto. La clase continuó con total normalidad, por fin tomé el control sobre mi mente y presté atención, no quería llevarme dos broncas en una misma clase. Al terminar el profesor se acercó y se colocó justo en frente de mi mesa y detrás de la de Matt.
- Oye chicos, esperadme a la salida clase que tengo que hablar con vosotros un segundo.
- Va…vale – contesté, he de reconocer que estaba un poco asustado, después del espectáculo que he montado por no tener ni idea qué me querrá decir el profesor, lo que no entiendo es que también llame a Matt.
- Bien, le esperaremos – también respondió Matt, pero de una forma más tranquila y serena.
Nos levantamos y fuimos al pasillo para hablar con el profesor, durante el corto recorrido las miradas del resto de compañeros estaban fijas sobre nosotros. Allí fuera nos detuvimos uno junto al otro y el profesor se situó en frente de ambos.
- Taichi, no puedes estar tan distraído en clase si no sabes la lección
- Es que no entiendo mucho este tema y me pierdo con facilidad – contesté
- Me lo suponía, por eso os he sacado a los dos – nos miramos desconcertados – Yamato, si no es mucha molestia me gustaría que le ayudases con la lección, sé que os lleváis bien y te sabes muy bien el tema ¿Qué me decís?
- Por mí bien – dijo el rubio – tengo un rato libre por las tardes
- Por mí también, que necesito ponerme al día, no quiero suspender – me repateaba el hecho de pasar la tarde estudiando lengua, pero estar con Matt haría más llevadero el estudio.
- Vale, pues os organizáis como queráis, pero espero no volver a verte despistado en clase – dijo mientras me miraba fijamente – ale, ahora entrar a clase
Como la siguiente clase (matemáticas) ya había comenzado, entramos sin dirigirnos la palabra para evitar una bronca de la profesora. Nos volvimos a sentar cada uno en nuestro sitio y, por extraño que parezca, en esta clase sí que atendí. Las clases continuaron del mismo modo hasta que sonó el timbre que anunciaba el inicio del descanso a media mañana. De modo que nos dirigimos al patio. Sora como no, siempre acompañando a Matt, parecía una lapa. Como no nos apetecía jugar a fútbol nos sentamos en un banco al borde del campo, para al menos entretenernos un poco mientras charlábamos.
- Tai, entonces como quedamos esta tarde para las clases
- ¿Qué clases? – preguntó Sora extrañada
- Es que el profesor me ha pedido que ayude a Tai con la lección de lengua
- Ah, vale, pero no me irás a dejar sola todas las tardes
- Solo las que Tai necesite
- Está bien – aceptó Sora con resignación
- Espero no quitarte mucho tiempo Matt, que ya sé que esto no es lo que más te apetece. Si te parece esta misma tarde podemos empezar, cuanto antes acabemos mejor para los dos. – contesté.
- Por mí bien, ¿A las 5 en tu casa te parece bien? – preguntó el rubio
- Sí, ya tendré todo preparado para cuando llegues, y a ver si mamá nos puede dejar algo para merendar. Unas madalenas o algo… que ya sabes, como se ponga a cocinar la hemos hecho buena.
- Jajajaja, que tampoco cocina tan mal
- Eso lo dices porque no tienes que comer su comida casi a diario – reí.
El resto del descanso lo pasamos viendo el partido de los compañeros de clase mientras comentábamos las jugadas clave, aunque siendo tan malos como eran, tampoco había mucho que comentar. El timbre sonó a los pocos minutos, por lo que debíamos volver a clase. El resto de las clases fueron como de costumbre, aburridas, pero no sabría explicar el porqué de mi alegría, estaba contento sin apenas tener motivos para ello, o al menos eso pensaba por aquel entonces. Por fin las clases terminaron y ya era hora de volver. Matt y Sora se iban juntos a comer a la hamburguesería ya que por la tarde no podrían estar juntos, de modo que me fui solo a casa, cosa que tampoco me desagradaba ya que el camino era corto y llevaba música. En poco más de 10 minutos ya estaba entrando en casa; Kari ya había llegado, por lo visto habían terminado las clases algo antes que nosotros (es extraño, pero creía que se habría ido con TK a dar una vuelta) y mamá no había vuelto todavía del súper.
- Hola Kari, que pronto has vuelto hoy – saludé
- Buenas, sí, la verdad es que hoy no me apetecía dar un paseo y me he vuelto pronto a casa – me daba la sensación de que mentía, pero no estaba seguro.
- ¿Todavía no ha llegado papá?
- No, le he llamado hace un ratito y dice se quedará a comer en la oficina. Se ha caído una línea de alta tensión y no habrá trenes hasta la tarde, cuando arreglen la avería.
- Bien, yo me voy a dejar las cosas a mi cuarto, avísame cuando llegue mamá para comer
- Bien
Entré en mi cuarto, menudo desorden, las zapatillas de andar por casa tiradas por el suelo, la cama sin hacer, la mesa llena de papeles arrugados, los lápices tirados… no podía dejar todo así para cuando llegase Matt, de modo que aproveché para adecentar la habitación antes de comer. Cuando ya casi había terminado:
- ¡Tai, a comer! – era la voz de mamá
- Voooy, un minuto que acabe de hacer la cama – respondí
Una vez hice la cama salí de mi habitación y me senté en la mesa de la cocina, mamá estaba de espaldas con el delantal puesto. “Que no haya cocinado ella, por favor”. Para mi alivio, al darse la vuelta vi que nos había preparado comida precocinada del súper, no era el tipo de comida que me gusta, pero es mejor que tener que probar los platos de mamá.
- Esta tarde vendrá Matt a casa porque me va a ayudar con las lecciones de lengua – le comenté a mamá.
- Seguro que es por eso… – dijo Kari en tono irónico, cada vez me tocaba más la moral con esas extrañas insinuaciones
- Me parece muy bien, a ver si por fin ese Matt te mete en vereda, que últimamente andas despistado; no quiero que hagas el vago.
- Tranquila mamá, que yo creo que las clases particulares me van a venir muy bien; por cierto, ¿Hay algo para merendar?
- Sí, he comprado bizcocho en la pastelería, si queréis os podéis hacer un chocolate, que también hay.
- ¡Gracias! – Buff de la que me libré.
Cuando terminamos de comer Kari recogió los cacharros y a mí me tocaba fregarlos, es lo que tiene el reparto de tareas; pero como solo estábamos los tres tampoco nos costó mucho recoger y en seguida ya podía hacer lo que quisiera. Terminé de recoger lo poco que quedaba; todavía faltaban dos horas para que llegase Yamato así que me fui a ver un rato la tele al salón, afortunadamente Kari estaba en su cuarto, no me apetecía tener que pelear con ella para ver algo decente en vez de la basura que le gusta a ella. Me tumbé en el sofá y me fuse a ver la NTV ya que emitían el anime “Monster” al que estaba enganchado. Emitían varios capítulos seguidos y luego pasaban al noticiario, que también lo estuve viendo ya que no había nada mejor.
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lilynee .
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No actualizas desde octubre D;
ay ay ay TTwTT ya quiero conti!!!!
Me encanta tú fic <33333
pero por favor sube la conti pronto que ya quiero saber que pasará. -
Samanta_Boop .
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Ohh pero que zooo... Sora. No es justo que haga sufrir así a Tai (y saludó a Matt con un profundo beso en la boca.
“Encima de que sabe que me gustaba me monta estos numeritos con Yamato”) Eso fue suficiente para mí, en este fic no me cae Sora, que malosaaa. Aun no sé como ambos se darán cuenta de su amor, y cuando esten juntos espero que Sora sufra por ser tan mala. Siiiiiiii.
Ahhh y por supuesto, me gusta mucho tu fic, hace honor al título, espero lo continues prontito.
Besos
Samanta.
¿Por qué el amor es tan doloroso? Tai X MattCuando el desamor te alcanza salir del pozo parece complicado, pero siempre hay esperanza. |
