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  1. •Shena
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    Le escuché hablar, al parecer le había costado comprender tanto mi forma de actuar, como mis sentimientos y sobre lo que le estaba hablando pero, teniendo en cuenta el perfil psicológico y el nivel de reacción del cerebro de un psicópata, pues obviamente no fue algo a tenerle en cuenta -Pero yo no quiero que lo hagas ni quiero que hagas nada más por mí y mucho menos algo que empeore tu condena, no quiero que vuelvas a matar, la muerte sería algo fácil para él, él debe sufrir su castigo en la cárcel... No quiero que nosotros suframos más por su culpa... por eso tenemos que capturarle, no matarle-Traté de convencerle, aunque sabía que mis palabras serían inútiles y que el que matase a Joe acabaría siendo inevitable y más aun si mi muerte algún día llegaba a ser llevada a cabo por el anteriormente mencionado. Con sus siguientes palabras me dejó frío, aunque en el fondo sabía bien que aquello era cierto... pero por muy cierto que fuese, no dejaba de ser doloroso ni desagradable al oído el saber que al lado del hombre que tenía enfrente no era una más que una marioneta, una marioneta más que trataba de llevarle de vuelta a un buen camino que él no quería pisar y de la que algún día se cansaría y acabaría con ella cuando menos se lo esperase. -Lo sé, claro que lo sé... Pero aunque tú ahora puedas ser más fuerte que ellos, llegará el día en que sea al revés, y entonces no dudarán en matarte... Si eso llega a pasar ¿Qué cojones haré yo Ramsay? Aunque sean hipótesis, yo no puedo soportar más de lo que he soportado hasta ahora-Torpemente correspondió a mi abrazo, produciéndo un terrible ardor en toda aquella zona que tocaban tanto sus brazos como su pecho... La ropa y las vendas raspaban mi piel como una lija y sus brazos la presionaban como apisonadoras, pero aguanté, vaya si aguanté. Correspondió a mi beso con ganas como nunca antes y eso en parte ayudó a aliviar mi sufrimiento, tomó mi rostro entre mis manos y, tras separarse a penas unos centímetros, volvió a hablarme -Lo siento... pero en este caso, debo ser egoista...-Bajé un poco la cabeza, pasando saliva con dificultad y escuchando mi propio corazón bombear con fuerza al punto en que confundía mi cabeza.

    Después volvió a abrazarme, atrayéndome lentamente hacia su cuerpo con sumo cuidado y tratando de hacerme el menor daño posible aunque era inevitable que acabase doliéndome, y, una vez me tuvo abrazado, apoyó su barbilla sobre mi cabeza, como si fuésemos una pareja normal y corriente. Entonces se percató de la crema en el bolsillo de mi abrigo, agarrándola con total descaro y tomando la decisión que este era el momento indicado para aplicármela -E-espera, ahora no-Me quejé, no quería que me viese desnudo y mucho menos en tal estado, no sabía que reacción podría provocarle y si era mala yo no tendría la fuerza necesaria para retenerle. Me senté en la misma silla en la que antes él había estado atado y entonces comenzó a desvestirme. Primero quitó el chaquetón y después desabrochó uno a uno los botones de la camisa del uniforme, dejando a la luz las numerosas vendas que rodeaban la mayor parte de mi cuerpo. Le miré fijamente, temeroso por su reaccion y, por un momento al ver su gesto de enfado llegué a pensar que se descontrolaría, sin embargo pudo controlarse y al final hizo como si nada, forzando una sonrisa -Está bien...-Fue desatando las vendas y dejando mis quemaduras al aire libre, aliviándome un poco... Aquello me iba a dejar unas marcas terribles en la piel, pero eso no era lo más importante ahora. Se untó las manos con la crema y comenzó a esparcirla por las heridas, produciéndome un dolor aun peor por muy suavemente que tratara de hacerlo. Aguanté gritos, gemidos y quejidos como mejor pude, mordiéndome el labio y cerrando los ojos con fuerza, me dolía muchísimo. Después se arrodilló y me descalzó para después poder quitarme los pantalones. Mis muslos y la mayor parte de mis piernas no estaban tan mal, pero mi trasero y mis pies habían salido bastante mal parados. Tras escucharle no oude evitar sonreír, ¿Quién en su sano jucio sentiría atracción por un cuerpo hecho un desastre como el mío en aquellos momentos? Claro que él no estaba en su sano jucio... Correspondí su beso aunque sin demasiadas ganas de pasar a más, por mucho que ya me hubiese acostado con él (Y varias veces no por voluntad propia) mis traumas no se habían esfumado de la noche a la mañana y tampoco estaba en buenas condiciones para hacer aquel tipo de... 'ejercicio'. Al final, volvió a cubrirme con las vendas como a una jodida momia, me vistió, y se abrazó a mi cintura; gesto que correpondí encantado. Me gustaba mucho más así.

    De repente la poca paz que había tenido ese endemoniado día se vio perturbada por Jack, que acababa de entrar por la puerta y no tardó en ponerse en lo peor, sacando el arma y apuntando a Ramsay. Yo me mantuve muy quieto y con los ojos abiertos como platos, era la primera vez que se nos encontraba así... Aunque el muy idiota lo interpretó como si Ramsay se hubiese soltado por sus propios medios y estuviera forzándome a hacer lo que él quisiera (como por ejemplo abrazarnos). Gracias a Dios Ramsay obedeció y se apartó tranquilamente y con calma, obedeciendo a las ordenes de Jack, que me agarró por el brazo sin ninguna delicadeza y tiró de mi -¡Ngh!-El quejido fue inevitable, me había hecho daño... Al parecer el muy idiota estaba más preocupado porque Ram se me acercara que por hacerme daño, pero bueno. La siguiente acción fue de lo más estúpida e innecesaria: Jack le ordenó tirarse al suelo y, según se estaba arrodillando, le metió tal patada en el estómago que escupió bilis, seguida de una segunda por mancharle sin querer. -Basta Jack-Exigí, mirándole con frialdad y hablando en el mismo tono. Me tapé la cara con una mano al ver como Jack retrocedía al levantarse mi vecino, completamente acobardado y tirándole unas esposas para que se autoesposase. Miré a Ramsay, desesperado porque obedeciera y así no hubiese más problemas; aunque lo más penoso fue el ver como este último le restregaba a mi compañero de oficio que le había tirado las llaves junto a las esposas.

    Todos ya más tranquilitos, Jack explicó a qué había venido. Al parecer habían encontrado un supuesto escondrijo de Joe, que seguramente no sería más que otra jodida trampa, pero como todo debía ser investigado pues le tocaba ir al tonto de turno, es decir, a mí. Acababa de salir del borde de la muerte (Otra vez y no por mi propia mano) y ahora querían meterme de nuevo a otra emboscada para meterme en una muerte segura. Suspiré, agotado y sin otra opción más que aceptar... Había venido a trabajar, no de vacaciones. Asenti con la cabeza y, cuando iba a prepararme para irme otra vez, Ramsay intervino, pidiéndome por favor que no fuese y agarrándome fuertemente la muñeca, sacándome otro pequeño quejido, parecía que se creían que era de goma o algo así. -Lo siento, pero debo ir Ramsay-Desvié la mirada, incómodo y evadiendo su mirada; me estaba haciendo daño pero no podía quejarme... Claro que me encantaría no ir y quedarme tumbado toda la noche en la cama con él, abrazados y recibiendo un merecido descando y un buen masaje; pero no podía ser. Entonces le pidió a Jack que si me podía acompañar, sorprendiéndome al punto en que me dejó la boca abierta... ¿De verdad significaba tanto para él como para aceptar colaborar por su propia voluntad sin que se lo pidiese? Lo más sorprendente fue que Jack aceptó sin rechistar y, para acabar de sorprendernos también le pidió a Jack que le atase las dos manos (Aunque supongo que se las habría puesto igualmente).

    Una vez todo explicado, Ramsay fue trasladado en un furgón policial y Jack y yo fuimos delante en un coche patrulla hasta la caseta, situada a las afueras de la ciudad. Bajé del coche con dificultad, inseguro, sabía bien que allí no me esperaba nada bueno y sabía que probablemente lo más fácil era que no saliese vivo de aquella; aun así fui. Caminé con recelo hasta la vieja caseta de madera, temeroso de trampas en el exterior, pero no parecía haber ninguna, así que por esa parte pude reljarme al menos un poco. Pase saliva cuando abrieron la puerta, escuchando la advertencia de Ramsay, que al segundo fue apartado de mí como si tuviese la lepra y tratado de forma agresiva sin causa alguna; los muy bestias después de darle una patada le estaban apuntando con sus armas sin poder alegar nada para su defensa. Yo por mi parte le miré sin poder hacer otra cosa ni entrometerme en el modo de actuar de mis compañeros, tratando de expresarle que estaría bien, aunque eso no convencía a nadie. Al entrar empalidecí al ver las paredes, llenas de mi nombre pintado con sangre que más tarde se descubriría si era de animal o de persona.

    London Bridge is falling down,
    Falling down, falling down.
    London Bridge is falling down,
    My fair lady.

    La musiquita comenzó a sonar desde detrás de un armario, era la misma jodida canción de la primera vez que había tenido un encontronazo con Ramsay, oh Dios, cuanto odiaba y apreciaba ese día al mismo tiempo. Salí de mis recuerdos para obedecer a las órdenes de un superior presente, dispuesto a abrir del armario en sí y sabiendo que no iba a salir nada bueno. Abrí la puerta, dispuesto a tirarme al suelo pasase lo que pasase; pero ese plan nunca fue llevado a cabo, pues el mismísimo Ramsay se encargó de empujarme a un lado antes de que los afilados cuchillos saliesen disparados, clavándose uno en su hombro -¡No!-Recuerdo que grité, observando la sangre manchar sus ropas. Los siguientes recuerdos aun están confusos en mi mente, pero recuerdo perfectamente lo que ponía en aquella nota que colgaba de uno de los cuchillos: «El gigante, el gigante más alto va a llorar y sus lágrimas de oro de rojo se teñirán cuando la hormiga salte del columpio y se balancee de arriba abajo antes de irse a acostar». Recuerdo los gritos de Ramsay diciendo que saliésemos duera y también recuerdo como tironeo de mí para salvarme a pesar de mi estádo de confusión y, por qué no, de miedo... Y no miedo por mí, sino por el que ya era mi héroe oficial. Cuando la bomba explotó nosotros aun no estábamos fuera de su perímetro de alcance, aasí que era inevitable que saliésemos mal de aquella... Sin embargo, cuando ya lo veía todo perdido, Ramsay me protegió con su cuerpo y la explosión le dio de lleno en la espalda. Tras los efectos secundarios de la explosión y aun estando sordo en aquel momento grité como un loco por una ambulancia, desesperado por el estado de Ramsay, que tenía toda la zona del impacto chamuscada. Con la excusa de mi sordera temporal y de que mis quemaduras podrían haber empeorado conseguí que me llevasen en la ambulancia junto a él, al que llevaron todo el tiempo atado de pies y manos con correas de cuero que yo mismo me encargué de aflojar en cuanto se despistaron solo 'Por si acaso'.

    No me separé en ningún momento de él exceptuando cuando llegamos al hospital, que nos separaron a él para curarle en la medida de lo posible y a mí para hacerme una revisión y comprobar que no me había reventado ningún tímpano. Después me pasé las horas muertas sentado a un lado de la camilla del hospital donde le tenían, esperando a que despertase, pero la tranquilidad (por llamarlo de alguna forma) fue interrumpida por Jack, que venía con una nueva nota del hijo de puta de Joe (Al que a cada hora que pasaba me parecía mejor idea matar) y salí, pues sinceramente necesitaba tomar el aire e ir a por algo de comer. Lo que no me esperaba yo era que al volver me encontrara a Ramsay saliendo por la puerta y con un uniforme de policía puesto que seguramente era el de Jack -¿Qué estás haciendo? Tienes que descansar-Si, fue lo primero que se me ocurrió decir. Y lo segundo... -¿Qué has hecho con Jack? ¿Y por qué llevas su uniforme?-Eso ya me asustó un poco más, pero al ser tironeado hacia dentro de la habitación y ver al susodicho tirado en el suelo con una hostia en la cara me di cuenta de que solo estaba inconsciente... aunque en paños menores. -¿Qué? Ni hablar, no puedes ir tú solo... Ramsay, ¡Ramsay!-El muy capullo me ató a la pata de la cama con mis propias esposas y besándome para evitar que siguiese gritando, dejándome rojo como un tomate -¡JODER!-Grité, desesperado, con el traje de Jack puesto los incompetentes de mis compañeros no se darían cuenta de nada. Y ahí me pasé un buen rato, atado hasta que Jack se despertó, enrojeciemdo al verse semi desnudo delante de mí y desatándome rápidamente tras un momento incómodo para sacar las llaves de uno de mis bolsillos, y no diré cual. Esa tarde se molieron los sesos tratando de buscar a Ramsay y olvidándose del tema de Joe, porque supuestamente Ramsay era más peligroso. Yo, cansado de ellos y del mundo, me fui a casa y, tirado en el sofá, vi las noticias de última hora. Una joven blanca estaba a punto de ser ahogada en el arbol más alto de Central Park, pero antes de que muriese la cuerda fue cortada y un montón de hojas la salvó de otra posible muerte contra el suelo. Poco después dos encapuchados comenzadon a pelearse entre sí, aunque acabaron por huir. Para cuando acabaron de retrasmitirlo yo ya estaba con la cara pegada al televisor y justo entonces llamaron a la puerta. "Ramsay"Me levanté casi corriendo, con el corazón en la mano y completamente desbocado al oír su voz. No tardé ni un segundo en abrir la puerta y al ver el estado en que se encontraba me quedé quieto como una estarua -Dios mío, ¿¡Cómo se te ocurre ir solo!?-Le hice apoyarse en mí cuerpo para entrar dentro, cerrando la puerta tras nosotros y corriendo a por varias toallas pues encima venía calado de pies a cabeza. Le hice sentarse en el sofá, desvistiéndole sin pudor alguno por aquella vez y envolviéndole en mantas para que entrase en calor-Maldita sea, no vuelvas a hacerlo, por favor no vuelvas a hacerlo-Le abracé contra mí como si fuese su madre, besándole con sumo cuidado por miedo a hacerle más daño. "Que hago..."Fui a por el botiquín, encargándome yo mismo de desinfectar y curar la mayor parte de las heridas como mejor pude, deteniendo las hemorragias. No podía llamar a ningún médico, lo denunciarían rápidamente pues se supone que había hecho un intento de huida -Qué coño hago yo ahora contigo-Me cubrí el rostro, acelerado y medio histérico, no hacía más que salir herido por mi incompetencia.
     
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67 replies since 19/6/2014, 18:06   1048 views
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