-
pato359
.
Tengo muchas cosas en mis manos y no me da miedo usarlas
- Group
- Member
- Posts
- 4,235
- Location
- En cualquier parte del mundo (Colombia) leyendo yaoi desde el celular, computador o tablet.
- Status
- Offline
~Imitatia~: Gracias por el comentario.
Fubu~chan ~.~: Te agradezco mucho que te guste. Gracias por comentar.
__________________________
En un callejón de una calle poco concurrida fue donde los tres se detuvieron. No ingresé mucho puesto que estaba oscuro y algún objeto que no vea puedo tumbarlo, hacer ruido y me pillarían.
-Habla ahora, Kurama-sempai. ¡¿Qué demonios te pasa??! -Kariya alzó la voz, gritándole a Norihito.
-No me pasa nada, idiota -le contestó.
-¿Ah, sí? Entonces explícame lo de... -Kariya se calló y solo se escucharon sus aullidos tapados.
-Cállate, Kariya-kun. Ahora no es momento para re-negarle algo a Kurama-kun -dijo firme una tercera voz. Ese era el tipo peli-verde.
-¿Qué me calme? Maldita sea, todos mis esfuerzos fueron enviados al carajo por culpa de este idiota. No te metas, Ren -Kariya estaba histérico. Me dio incluso lastima por el pobre chico al que le esta gritando.
-¡Nunca te pedí que lo hicieras! -le gritó Nohirito.
-Sí, aja. Pero estás contento, ¿no? ¡Admítelo, Kurama-sempai! Te gustó lo que hice.
Nohirito bufó y unos pasos se escucharon. Me escondí en una tienda de caramelos al lado del callejón, cogí una revista que había ahí tirada y fingí leer mientras veía como Nohirito salia furigo del lugar. Deje la revista quieta y le compré unos dulces al tendero en compensación a solo haberme quedado ahí por un buen rato. Después de eso me fui a mi casa. Extrañamente, al llegar, me encontré con el mismo chico peli-verde de antes sentado en el escalón que daba a mi puerta.
-Minamisawa-san -el chico se paró y me miró serio.
-Disculpa, debo entrar. Necesito hacer unas cosas -caminé con paso firme hacía la entrada. Saque mis llaves y las inserté en la cerradura.
-Debo hablarle. Es algo... importante sobre Kurama-kun -me detuve después de abrir la puerta. Guardé las llaves, me quite mi maletín y lo colgué en un perchero que tenía a la entrada.
-Pasa -le dije. El chico me siguió dentro de la sala y nos fuimos al sofá. No le ofrecí nada puesto que presentía la visita sería rápida.
-Minamisawa-san, el padre de Kurama-kun es dueño de una gran cadena hotelera distribuida alrededor del mundo -habló Ren a penas se sentó-, es demasiado exitosa y cada día van llegando millones y millones de cheques a la familia Kurama por las ganancias diarias.
-Perdona pero yo conozco la profesión del padre de Nohirito. La pregunta es, ¿qué tiene que ver todo esto con...?
-Mucho. A Kurama-kun le gusta alguien y no puede estar con esa persona porque su padre es un hombre egocéntrico y adinerado que no tolera que su hijo sea gay.
-¿Qué tiene que ver eso conmigo?
-Más de lo que cree. Se que a usted le gusta Kurama-kun, él me contó su declaración en la fiesta, pero quiero que sepa que también me dijo que se arrepiente de haberlo rechazado.
Me quedé de piedra por unos instantes. Escalofríos me recorrían la espalda una y otra vez. Era horrible.
-Mire -me pasó una tarjeta- vaya mañana en la noche a este restaurante. Espero que puedan arreglar las cosas ahí -se puso de pie, dio una reverencia y salió sin decir otra palabra.
Yo estuve sentado en el sofá casi por media hora, luego me recosté y observe e techo blanco de mi casa con cuatro bombillas blancas que no estaban encendidas. Me perdí en una especie de pensamiento que no podía abandonar mi cabeza, y yo no quería que lo hiciera. Esto estaba convirtiéndose en un misterio, en una historia que no parecía solo involucrarme a mí y a Nohirito sino también a más de un tercero.
____________________________
Espero les haya gustado.
Matta ne
.
Besos usados (Minamisawa x Kurama) Capítulo 8Minamisawa, sentado en la sala de su casa, empieza a escuchar música. Encuentra la canción de Andrés Cepeda y nos cuenta su historia. |
Contacts
Web