‘:•Encuentro del Destino•:’ - Endou x Kazemaru - Shindou x Kirino - Otras parejas.

Una tragedia sucedió hace 14 años, Kazemaru Ichirouta perdió a su hijo poco después de saber que lo tendría, y un impacto del destino lo cambiará todo...

« Older   Newer »
 
  Share  
.
  1. takuran
        +1   -1
     
    .

    User deleted


    onegai
    conty
    :=WORKIN:
     
    Top
    .
  2. Utatagi Odori
        +1   -1
     
    .

    User deleted


    Hola, jovenes fans~
    Por las musas, ¡Estoy hecha mierda, lo juro! Estuve enferma por... una semana más o menos, ¡Entonces vengo y me encuentro con que el interneth es está podri'o! Joder...



    Pero bueno, una cosa más:

    1: voy a cambiar el color, por que me di cuenta(ya hace mucho) que el azul cielo como que... marea tratando de leerlo... xD

    2: No me maten por lo que va a pasar hoy, por fa... les prometo que lo que pasa más adelante lo compensará, lo prometo.


    Pilar Martinez: Oh, cool. Nueva lectora. Ya lo sé, Shindou se está poniendo medio fresah... xDD pero weee... Y aquí está la Conty~

    takuran: Taku-chan, mi vida, mi cielo, ¡¡Mi todoooh~!! Ay sí, ¡Yo sé que mis lectoras son las mas bellas! >w< Es que ellos dos son como que... él se declara primero, no, él primero, y así... xD Ya Ichirouta-sama despertó, pero de aquí en más le aguardan puras pesadillas(Utatagi Odori, spoilereando desde tiempos inmemorable. ( 9e-e9)) Y sobre Tenma y Tsurugi... No me mates... Onegai... Q.Q

    ~Luichi98~: ajá, y yo con tu nick y tu coment quedé como que "W... T... F?! .____.", ok no, mentira... xD Oh, nueva lectora~ Jajajaja, sí, ellos son muy monos xD Bueno con el Kyouten... no me odies, pliz... QwQ Espero me sigas leyendo~

    lytaly: Oh, wueno, wueno, mi chikis trikis Miku de nieve~ ¡Yo sé que fue bello! Pero esa es la compensación por este capítulo... sigo insistiendo, no me mutiles, pliz... Q-Q Porfi, no dejes de leerme~

    Noriko Oumi: ¡Sí, yo sé, coño! ¡Y cada vez más difícil de ajustar también! Osea... ¿Llenaste el teclado de arcoiris?... Deh... Yo sé que te preocupa Kirino, pero yo sé que te dará risa este capi, por que tiene que ver con el café(y todos quedaron como que... "¿Café? ._." xD) Y lo de que se besaron... estuve en ese momento pensando en tí y Taku-chan... :3 ¡Y casi te caes, LOL! Y calma, que lo que pasa hoy te va a hacer que te olvides de esa declaración, te lo aseguro. ¬w¬ Ah y tú, que siempre quieres darle amor al mundo, pero nadie a ti. Esita, si yo estuviera en Acarigua, te viviría apapachando... :3, pero no tanto por Chi-chan~ xD Y sobre que no te de más tristeza... pues... no, no lo prometo... :c

    Charlene2001: Aquí está la conty, nueva lectora. ¡Bienevenida Encuentro del destino! Espero que disfrutes tu estancia con nostras y este "Dorama".


    En el capítulo anterior de Encuentro del Destino:

    Ichirouta estaba en el hospital, y con él Kirino. Shindou estuvo tratando de hacer lo posible por ayudar. Habían faltado a clases todo el día. Esa tarde, Kirino se lastimó la pierna, y Shindou lo llevó a su hogar, allí pasó algo que ninguno de los dos se esperaba. Descubran qué sucede entre nuestros amigos, hoy.


    ···


    *Cap. 5: "Descubrimientos y Confesiones" (Parte 1)


    Hoy en el Raimon, estaban caminando por los pasillos Sangoku. Al llegar al club de futból esa mañana, con los ojos cerrados, oyó unos fuertes gritos de insultos, como "Muérete" o "Te odio", cosas así. Cuando abrió los ojos, vio que Tenma era sujetado por Kuramada y Tsurugi por Amagi, ambos tratando de patearse y gritándose cosas.

    -No otra vez.- Dijo bajando la cara.

    -¡Sangoku, ayuda! ¡Ellos te escuchan!- Gritó Amagi. Ya casi no resistía a Tsurugi. Él enojado sí que tenía fuerza.

    Sangoku al ver eso respiró profundo con el ceño fruncido. Ya era la cuarta vez esa semana que peleaban así, y apenas era miercoles...

    -Y ahora... ¿Por qué pelean?- Preguntó manteniendo la compostura.

    -¡Pregúntale al señor desastre total!- Gritó Tenma.

    -¡Más bien al niño berrinches!- Gritó Tsurugi. Tenma le sacó la lengua altanero, y Tsurugi anojado trató de soltarse de Amagi para caerle a golpearlo.

    Sangoku intentaba calmarse masajeándose el puente de la naríz. Bajó lentamente las escaleras, ante las atentas vistas de todos, incluso Tenma y Tsurugi se detuvieron. Cuando llegó junto a ellos, agarró por la cabeza a ambos y las golpeó entre sí. Todo con los ojos cerrado.

    -¡Au!/¡Ay!- Gritaron Tsurugi y Tenma a la vez, agarrándose las cabezas por el golpe.

    -Más les vale que no vuelvan a pelear, porque un dolor de cabeza no será lo peor que les pasará.- Dijo Sangoku con una voz aterradora abriendo los ojos, mirándolos con furia. Ellos dos pasaron saliva nerviosos. -Ahora, dense la mano y vuelvan a ser amigos.- Dijo calmándose un poco. Tsurugi y Tenma se miraron un momento, para luego voltera hacia lados contrarios ignorándose. Sangoku gruño ligeramente mientra una venita se hinchaba en su frente.

    En ese momento las puertas se abrieron, cuando voltearon a ver, eran los entrenadores Endou y Kidou, Haruna, y también estaba con ellos Ichirouta.

    Al ver la escena, los cuantro se sorprendieron de ver ahí en el suelo a Tenma y Tsurugi, mientras los demás estaban alrededor algo inseguros.

    -Eh... ¿Me perdí de algo? ¿Qué sucede aquí?- Preguntó Ichirouta sin entender.

    -Tenma y Tsurugi están peleados. Eso pasa.- Dijo Midori algo irritada. No es que le gustara verlos pelear todos los días.

    -¿Por?- Preguntó nuevamente Ichirouta. Ella negó encogiéndose de hombros. Miró a Kidou, Haruna y Endou, y los tres negaron, ya que no sabían nada del asunto. -¿Y los demás?- Preguntó mirando a los del club. Todos, exceptuando a Tenma, Tsurugi y Sangoku negaron también. Ichirouta notó que Sangoku no hizo nada para asentir o negar, por lo que supuso que algo sabía. bajó las escaleras junto con los otros tres adultos, quedando frente a Sangoku. -¿Tú sabes algo, Sangoku-kun?- Preguntó. Sangoku miraba al suelo pensativo. Luego asintió ligeramente. -Dime luego, ¿Sí? Me encantaría ayudar en esto, tampoco me gusta verlos pelear.- Dijo miando al frente suyo. Cuando Sangoku volteó, vio que, nuevamente, Tenma y Tsurugi intentaban golpearse, esta vez sugetos por Endou y Kidou.

    -Ha-...- Emitió pegándose la mano en la frente. Respiró profundo una vez más, luegon volvió a mirar a Ichirouta. -Le diré todo con detalles luego de que el entrenador Kidou nos diga qué tiene pensado para hoy.- Dijo finalmente yendo a sentarse, ignorando la pelea. Ichirouta estaba algo preocupado de Sangoku al suponer que llevaba una gran carga encima, y así era.

    Luego de detener la pelea y que Kidou les dijera qué iban a hacer hoy, todos salieron del club hacia la cancha, manteniendo lo más alejados posible a Tenma y Tsurugi. Al llegar allá Ichirouta observaba todo; Tenma hablaba tranquilamente con Kariya, Kageyama y Shinsuke, los tres calentando. Tsurugi estaba al otro lado de la cancha con Kurama y Nishiki, igualmente calentando. Los demás sólo estaban igual pero por lados distintos. Él notó que todo era muy diferente que le primera vez cuando llegó al Raimon; Que todo estaba muy animado, muy unidos todos, y ahora... ni siquiera parecían un equipo. Y ahora que lo notaba, faltaban Shindou y Kirino. Ahí miró atrás, y vio a Sangoku sentado en las bancas. Se le acercó.

    -¿Ya me dirás qué pasó?- Le preguntó. Sangoku levantó la mirada, lucía algo triste. asintió, e Ichirouta se sentó junto a él.

    -Es que... el que me lo contó fue Tsurugi, pero me dijo que no le dijera a nadie. Por eso nadie más lo sabe.- Le dijo Sangoku. Aun tenía un hilo triste o pensativo en su voz.

    -Pero ¿No crees que ayudarlos a arreglar esto es más importante?-

    -Sí, pero como no sé cómo arreglarlo, tampoco he hecho nada.-

    -Entonces dime; tal vez yo sepa qué hacer.- Le pidió Ichirouta. Sangoku pensó unos segundos, para luego hablar.

    -Bueno, pasó que hace ya más de una semana atrás, Tenma regresó al club a buscar algo y...-


    -Recuerdo de lo que pasó ese día.-


    Tenma entró en el club, estaba sólo ya que todos se habían ido, entonces cuando bajó a buscar en los casilleros sus zapatos que había dejado por accidente, vio en el sillón recostado a Tsurugi.

    -Oh... Tsurugi, ¿Qué haces aquí?- Le preguntó. Él tenía los ojos cerrados.

    -Descanso.- Dijo simplemente sin cambiar nada. Tenma, después de tomar sus zapatos y cerrar su casillero, se le acercó y se sentó a su lado, guardándolos en su bolso. -¿No te ibas?- Preguntó Tsurugi frunciendo un poco el ceño.

    -Bueno, sí. Pero... quería acompañarte un rato.- Dijo algo tímido. Tsurugi abrió un poco el ojo mirándolo de reojo.

    -Hum...- Emitió ligeramente Tsurugi, lo cual Tenma interpretó como que se quedara ahí, por lo que sonrió más. Un poco después, se acercó discimuladamente más a Tsurugi. Él tenía una sonrisita pícara pensando en un plan que se le ocurrió en un zantiamen, ahí se le acercó más, algo que Tsurugi, aun con los ojos cerrados notó. Tenma se acercó a su mejilla. -Hey, ¿Qué-...?- Decía Tsurugi antes de que Tenma besara sus labios. Tenma se apartó de él rápidamente, muy sonrojado. Mirando el rostro sorprendido de Tsurugi, también muy sonrojado. -¿Qué... Qué fue lo que...? ¿Por qué hiciste eso?-

    -Eh... E-Eso... ¡E-Eso fue tu culpa!- Gritó Tenma nervioso levantándose.

    -¡¿Qué?! ¡¿Por qué fue mi culpa?!- Gritó también Tsurugi levantándose.

    -¡Por... porque te giraste! ¡Ese no era el plan!-

    -¡¿Y cuál era tu maldito plan?!-

    -¡Tú no mereces saberlo!- Gritó Tenma para salir corriendo. -¡Me largo!-

    -¡Pues lárgate!- Girtó también Tsurugi cuando Tenma se fue. Ahí calló nuevamente al sillón, respiró prufundo un rato. Acercó sus dedos de la mano derecha a sus labios, tocándolos ligeramente, para luego gruñir y pasarse la mano por la cara. -Ese Matsukaze... está loco.- Susurró levantándose otra vez para irse.


    -De vuelta al presente.-



    -Ah... ya veo.- Dijo Ichirouta recostándose a la banca. -Así de grave quedó el problema. -Decía sorprendido. Sangoku seguía con la misma expresión preocupada.

    -Sí. No puedo evitar sentirme mal por ellos; ya que yo soy el mayor entre todos, y alguna vez fui capitán, siento la responsabilidad de estar al pendiente de todos.- Dijo Sangoku poniéndose derecho. -El ver a dos personas que les costó tanto llevarse bien, y que de un momento a otro se odien hasta el punto de golpearse apenas al miarse a la cara... Me hace sentir con una carga muy grande. Y no sabe lo mal que me siento de no poder hacer nada por ayudarles.- Decía entristeciéndose.

    -Está bien. Entiendo.- Dijo Ichirouta levantándose. -Y ya sé qué hacer. Y tú me ayudarás.-

    -¿Qué? Valla, qué rápido.- Dijo Sangoku sorprendido.

    -Verás, Sangoku-kun; Mamoru era el capitán del equipo cuando éramos niños, y yo siempre vi cuanto se esforzaba por ver felices a todos. Entiendo que como el ex-capitán, quieras aun cumplir con tu antiguo cargo.- Le dijo Ichirouta poniendo una mano en su hombro.

    -Gracias, Ichirouta-sama.- Dijo Sangoku sonriendo un poco.

    -Aproposito, ¿Donde están Kirino y Shindou? No los he visto hoy.-

    -Ah, sí. Recibí un mensaje de la abuela de Kirino, me dijo que está de reposo porque se torció el tobillo. Hoy no vendrá a clases, pero creo que mañana sí.- Dijo comenzando a caminar hacia la cancha.- Y sobre Shindou... no lo sé, me preocupa que aun no haya llegado; usualmente es uno de los primeros en llegar.- Dijo para finalmente irse a la cancha a calentar con los demás. Ichirouta se le quedó mirando un momento con una sonrisa.

    -"No era mentira que siempre está al tanto de todos."- Pensó.

    En ese momento llegó Shindou corriendo a la cancha.

    -Shindou-kun, ¿Por qué llegas tan tarde?- Preguntó Haruna acercándose a él.

    -Shindou, al fin llegas.- Se le acercó también Sangoku.

    -Lo siento, me levanté muy tarde, vine corriendo lo más rápido que pude. Disculpenme.- Dijo haciendo una reverencia.

    -No pasa nada Shindou. Cambiate y ve a calentar con los demás.- Dijo Endou.

    -Comenzaremos con el entrenamiento en un momento.- Le avisó Kidou. Shindou asintió y se cambió para ir a entrenar.

    El entrenamiento estuvo muy complicado; Tenma y Tsurugi a cada rato que se cruzaban, se miraban mal. Shindou estaba corriendo más lento de lo que él acostumbraba, y en un momento le lanzaron el balón, pero estaba distraido, algo muy extraño en él. Todos hacían su mejor esfuerzo por entrenar bien, pero sin la cooperación de Tenma, Tsurugi y Shindou, los tres mejores del equipo, era muy difícil hacer algo bien. Por ende, al ver a todos tan mal, Sangoku también estaba fuera de sincronización. Ese día el entenamiento fue todo un fracazo.

    Ichirouta estaba mirando a todos con mucha atención. Realmente, sin ninguna duda, todo era muy diferente del primer día.

    En el descanso, Ichirouta se acercó a Shindou, y le dio una toalla para cercase la cara. Shindou levantó la mirada y lo vio. Tomó la toalla y se cecó.

    -¿Todo está bien, Shindou-kun?- Preguntó Ichirouta sentándose a su lado.

    -Sí, sí. Todo bien.- Dijo mirando hacia la cancha.

    -¿Seguro? Y ¿Por qué tan distraído?- Le preguntó. Shindou se quedó unos segundos callado.

    -Ok, me atrapó.- Dijo rindiéndose. Ichirouta rió ligeramente. -Es que... Eh...- Decía con dificultad. -Es que es algo muy... penoso.- Dijo sonrojándose un poco.

    -Jeje... entonces ven. - Dijo Ichirouta levantándose y tomando de la muñeca a Shindou. Cuando se alejaron lo suficiente, Ichirouta lo miró frente a frente. -¿Y bien? Cuéntame.- Le dijo sonriendo. Esa sonrisa tan serena del mayor le daba un poco más de seguadad a Shindou para hablar, y así fue.

    -Eh... Verá; ayer ¿Recuerda que el entrenador nos dejó a Kirino y a mí aquí en Raimon?-

    -Aja.-

    -Bueno, Kirino fue a ducharse, pero se calló en las duchas y se golpeó muy fuerte.

    -Oh, no. ¿Él está bien?- Preguntó Ichirouta preocupado.

    -Sí, está bien. Tiene reposo por una semana, luego podrá volver como nuevo.

    -Y ¿Es por eso que estás distraido? ¿Piensas en Kirino?-

    -No. Bueno... en realidad sí, pero no por su herida... es que...- volvió a ponerse la dificultad para hablar.- Ayer cuando lo llevé a su casa para que fuera atendido, su abuela nos dejó solos en su cuarto, y... ¡Ay, ya sabe!- Dijo pegando su cara en el pecho del mayor. Ichirouta se sorprendió ante eso. Pensó unos sengundos, y luego entendió.

    -Ahh... Se besaron.- Dijo. Shindou asintió aun contra su pecho.

    -Y ahora no sé que piensa Kirino. Cuando pasó, su abuela entró al cuarto, pero no nos vio. Yo salí rápido, y no sé que piensa él de eso.- Decía aun igual.

    -Ya, ya.- Le consolaba Ichirouta abrazándolo y acariciándole su espalda. -Dime, ¿El beso fue a la fuerza?-

    -¿Qué? No, jamás haría algo con Kirino sin que él lo quisiera.- Dijo subiendo la mirada así como indignado.

    -Entonces fue mutuo.-

    -Eh... sí, eso creo.-

    -Algo más, Esto ya lo sabía desde que llegué, pero ¿Te gusta Kirino?- Le preguntó. Shindou enrojeció ante tal preguntó, y volvió a ocultar su cara en el pecho de Ichirouta.

    -Sí... mucho, mucho. Lo amo demaciado.- Abrazando a Ichirouta con más fuerza. -¿Tan obvio soy?-

    -Pues... sólo un poco.- Shindou lo miró con un puchero. -Jeje... es mejor que vuelvas al entrenamiento.- Le dijo. Shindou asintió y volvió con los demás. -Bueno, ya son dos cosas qué arreglar.- Dijo, para luego ir de vuelta con los otros tres adultos.


    ···


    Esa tarde, Tenma y Sangoku se quedaron en el club de futból luego de que los demás se fueran. Sangoku le dijo a Tenma que quería platicar un poco sobre el entrenamiento de ese día. Tenma se disculpó por haberse distrido tanto, pero culpó a Tsurugi de su distracción.

    -Tenma, ya vasta, ¿Por qué ahora odias tanto a Tsurugi?- Le preguntó Sangoku. Tenma frunció el ceño.

    -Es que... él me asusutó cuando me gritó así, y más que el resto de los días me ha estado molestando.- Dijo Tenma.

    -Pero fuiste tú quien lo besó, no él a ti.- Dijo Sagoku razonablemente.

    -No me ayuda, Sangoku-sempai.- Dijo mirándolo con el ceño fruncido.

    En eso la puerta del club se abrió.

    -Sí, creo que debí consentrarme más, no prestarle atención.- Tenma oyó esa voz que a sus oidos eran como un zumbido de abispas. Gruñó ligeramente. Quienes entraron al club fueron Ichirouta al lado de Tsurugi. Él al ver a Tenma ahí sentado con Sangoku, se detuvo de inmediato. -Ah, no. Yo me voy de aquí, antes de que el nene berrinches comience a llorar.- Dijo dándose la vuelta, pero Ichirouta le sugetó la muñeca. -¿Eh?-

    -Oh, no, Tsurugi-kun. Tú y Tenma tienen mucho de qué hablar.- Dijo mirandolo con una sonrisa que a Tsurugi le pareció medio macabra.

    -¡No! ¡Suélteme, no quiero estar aquí!- Gritó tratando de soltarse, pero Ichirouta lo agarró con más fuerza.

    -¡No, Tsurugi! ¡Tú y Tenma deben dejar su rivalidad!- Gritó Sangoku yendo a ayudarle a Ichirouta. Tenma se levantó del sillón serio.

    -No importa, Tsurugi. Si estás aquí, yo me voy.- Dijo Tenma caminando con los ojos entrecerrados evitando mirarlo o dirigirle la atención.

    -Y ¿A donde crees que vas, Matsuaze?- Preguntó una voz desde la puerta. Cuando miraron, estaban ahí parados como paredes Amagi y Kuramada, y frente a ellos Endou.

    -Escuchen. Ustedes dos se van a quedar aquí a hablar como personas civilizadas, sin pelear, ni insultarse. Y si no hacen las pases, o intentan huir antes de terminar, tengo el permiso de quetarles puntos en cualquiera de sus materias.- Dijo Endou muy seguro.

    -¡¿Qué?!/¡No es justo!- Gritaron Tsurugi y Tenma.

    -Ustedes deciden.- Dijo Ichirouta. Ya había soltado a Tsurugi. Tenma sin mirar a nadie, volvió al sillón y se sentó. Tsurugi miró eso, luego a Endou otra vez. Endou asintió mirándolo serio. Tsurugi suspiró y fue donde Tenma, pero no se sentó, ni se acercó mucho. -Por favor, hagan las pases. No saben cuanto nos preocupan.- Dijo Ichirouta antes de salir con todos los demás, dejando solos a Tenma y Tsurugi.

    -¿Cree que funcione?- Preguntó inseguro Sangoku a Ichirouta.

    -Tiene qué. No imagino cómo se mataran estando los dos ahí dentro si no hablan tranquilos.- Repondió Ichirouta mirando hacia la puerta cerrada.

    Dentro de la sala, los dos seguían igual. Tenma estaba sentado en el medio del sillón jugando con sus dedos, con una expresión algo triste en el rostro. Tsurugi estaba de pie mirando hacia el suelo serio, con las manos en los bolsillos de la chaqueta. Ninguno de los dos se dirigía la palabra; era mejor a estar discutiendo, pensaban.

    Tenma quería decirle a Tsurugi que sentía, y sabía, que era su culpa, pero no quería que él le gritara; Le daba miedo cuando le gritaba, pero había sacado valentía de donde no tenía para discutir y pelear con él sin miedo ni restricciones. En ese sintió un ligero penso de un lado del sillón, cuando miró, Tsurugi se había sentado quieto en un lado, no tan cerca de él. Hubo silencio por unos minutos, hasta que al fin dijeron algo.

    -Tsurugi, yo-...-

    -¿Por qué me besaste, Matsuaze?- Preguntó Tsurugi serio interrumpiendo a Tenma.

    -¿Tú crees que era mi intención besarte en los labios? Como te dije ese día; Ese no era el plan.-

    -Y ¿Se puede saber cuál era tu tonto plan?-

    -¡Mi plan no era tonto!- Gritó Tenma. Ahí al darse cuenta que estaban subiendo la voz; Que estaban cerca de otra pelea más, se detuvo un segundo, y volvio a sentar derecho. -Ah... Mira, Tsurugi. Para mí no es fácil discutir contigo, lo he hecho porque de verdad me asusta cuando me gritas, pero por impulso me defiendo en lugar de irme como un miedoso.- Decía sin mirarlo. Tsurugi seguía igual de serio.

    -Aun no me dices por qué lo hiciste.- Le dijo. Tenma le miró de reojo, para luego suspirar pesado y tomar mucho aire.

    -Voy a tener que decir esto, que para mí no es fácil, pero es lo mejor. Yo quería besar tu mejilla, no tus labios.

    -Y ¿Por qué queríais besarme la puta mej-...?- Preguntaba aun mas irritado, pero Tenma lo interrumpió.

    -¡Porque me gustas!- Gritó de pronto, sorprendiendo a Tsurugi. -Me gustas, ¿Ok? Ya los dije. Ya no tengo nada más qué ocultar.- Dijo quitándose un enorme peso de encima. -Creo que es más facil decirlo después de una vez... me gustas... mucho.- Decía sonriendo un poco, ante la confusa vista de Tsurugi. -No, espera... no me gustas... ¡Te amo!- Dijo de pronto, sorprendiéndolo más. -Pero... dudo que después de todo esto tú sientas lo mismo.-

    -Ah... yo... No comprendo.- Decía más que confundido; ¿Primero le decía que lo odiaba con todo y luego le grita que lo ama? ¿Cómo es eso?

    -Mi plan se basaba en ver cómo reaccionarías si te besaba en la mejilla; si te asustabas, y si lo ignorabas, o... si te gustaba. Pero en eso volteaste y... ya sabes.- Dijo Tenma un poco sonrojado, por lo que decía y por lo que dijo hace un momento.

    -Entonces...- Decía Tsurugi comenzando a entender. -Pero, ¿Por qué me gritaste de repente?-

    -Ah, pues... Es que me asusté al ver tu cara sorprendido, y... reaccioné mal, supongo.-

    -Jah, ¿Supones?- Se burló Tsurugi.

    -Oye, yo nunca hago esas cosas, es la primera vez que lo hago.- Dijo Tenma defendiéndose. Tsurugi se volvió a recostar en el sillón con los brazos cruzados y los ojos cerrados. Tenma también se recostó. Hubo silencio unos segundos. Después Tenma miró raro a Tsurugi, como esperando algo. -Oye, y... ¿Tú que dices?-

    -¿Qué digo de qué?- Preguntó igual.

    -¿Cómo de qué? Ya te dije todo lo que siento; Me gustas, Tsurugi. No me has dicho qué respondes.- Dijo Tenma indignádo.

    -Ah... sí, me da igual.- Dijo indiferente, mirando al lado contrario de donde estaba Tenma.

    -Ah-... ¿Eh?- Emitió Tenma sorprendido- Es decir que... ¿Yo no te gusto?-

    -Hum... No de esa forma.- Dijo Tsurugi sin cambiar de expresión. Tenma estuvo en silencio sorprendido por unos segundos.-

    -Ah... Ya veo... Entiendo. Bueno... al menos ya me quité un enorme peso de encima.- Dijo Tenma al menos satisfecho por ese lado. Tsurugi lo miró de reojo cuando él se levantó del sillón. -Eh, supongo que ya terminamos. Podemos irnos, ¿No?-

    -Hum...- Emitió Tsurugi levantándose también. Antes de llagar a la puerta, se dio cuenta de algo. -Espera, Matsukaze.- Dijo tomando a Tenma del hombro. -Olvidé decirte... algo importante.- Dijo con una voz demaciado sexy. Tenma Lo miró entre sorprendido y confundido cuando él le hizo una señal de silencio con el dedo índice. Se acercó al lado de la puerta moviendo con él a Tenma. Ahí presionó el botón que la abre. Todos los del club de futból, menos Kidou y Haruna, calleron al suelo uno encima del otro, incluso Ichirouta y Endou estaban en ese montón. Tsurugi y Tenma rieron ligeramente ante eso. Tsurugi se acercó a Ichirouta y le tendió la mano. -Gracias por ayudar, Ichirouta-sama.- Le agradeció mientras él aceptaba su mano.

    -También gracias a usted, Sangoku-sempai, y a todos los que ayudaron.- Les agradeció Tenma feliz. Ahí él y Tsurugi se despidieron y se fueron, dejando a todos con una gran interrogatoria.

    -¿Se quedarán juntos o no?- Preguntó Midori sorprendida al verlos caminar tan tranquilos pero sin nada de... de pasión o algo así.

    Ya saliendo del Raimon, Tenma recordó también algo que de verdad no podía dejar sin respuesta.

    -Tsurugi.- Llamó al otro que iba junto a él, quien lo miró. -Seguimos siendo amigos... ¿Verdad?- Preguntó inseguro. Tsurugi rió ligeramente, para luego desordenar el pelo de Tenma con su mano, lo cual se vio muy gracioso por sus estaturas.

    -Claro que sí, Matsukaze.- Dijo mirándolo con una bella sonrisa. Tenma se sonrojó ligeramente al verlo, pero luego sonrió. Ahí chocaron sus manos como buenos amigos, y siguieron su camino. -"Realmente es mejor que permanezcamos como amigos nada más, Matsukaze. No quiero que siendo algo más que amigos te lastime, eo nunca me lo perdonaría."- Pensó mirando a Tenma de reojo.

    -"No importa lo que pase. Yo... aun amo a Tsurugi, y mis sentimientos hacia él no cambiarán."- Pensó Tenma con una linda sonrisa en su rostro.


    ···


    Esa tarde, Ichirouta le pidió a Shindou que lo llevara a casa de Kirino; quería visitarlo para ver cómo estaba. Shindou estaba algo inseguro por la misma razón que le contó a Ichirouta esa mañana, pero igual aceptó; debía enfrentar ese pánico. Ya habiendo llegado a la residencia, ambos llamaron a la puerta. Una mujer mayor la abrió.

    -Shindou-kun. Buenas tardes. ¿Qué se te ofrece?-

    -Hola, Yui-sama. Venimos a ver a Kirino.- Dijo Shindou. La señora les dio paso.

    -Shindou-kun, aun no me dices quién es tu amigo.- Dijo la señora al cerrar la puerta.

    -¿Eh? Ah, sí.- Dijo Shindou. Estaba algo distraido pensando en qué haría al ver a Kirino otra vez. Estaba nervioso. -Ichirouta-sama, ella es Kirino Yui, la abuela de Kirino. Yui-sama, él es Endou Ichirouta, ha estado ayudándonos mucho últimamente en el club de futból.-

    -Es un placer, Kirino-sama.- Dijo Ichirouta haciendo una reverencia.

    -Ah, así que tú eres el famoso Ichirouta-kun. Ranmaru ha hablado mucho de tí; el más amable y tierno de los asistentes del equipo.- Ichirouta miró a Shindou raro, y él se encojió de hombros. -Bueno, pueden subir a ver a Ranmaru, yo prepararé un poco de té.- Los dos asintieron y subieron las escaleras.

    -El más amable y tierno, ¿Eh?- Preguntó Ichirouta.

    -Tiene que admintir que es muy amable y tierno, Ichirouta-sama.- Le dijo Shindou.

    -Ah, bueno.- Dijo Ichirouta medio riendo. Al llegar al segundo piso, Shindou tocó una puerta con el nombre de Kirino.

    -Pase.- Se oyó desde adentro. Cuando abrieron la puerta, vieron a Kirino acostado en su cama jugando unos vodeojuegos. -¡Shindou, Ichirouta-sama! Que alegría verlos.- Dijo Kirino feliz.

    -Hola, Kirino.- Dijeron lo dos a la vez.

    -¿Cómo te sientes?- Le preguntó Shindou.

    -Muy bien. Esos medicamentos sí que son rápido. Creo que con esta semana de reposo estará más que en forma para robarle el balón incluso a Tsurugi.- Dijo Kirino con una gran sonrisa.

    -Me alegra que estés con tantos ánimos, Kirino,- Dijo Ichirouta caminando hacia él. -porque te traje algo.- Dijo sacando de su bolsillo de la chaqueta una barra de chocolate.

    -¡Chocolate!- Gritó recibiéndola -¡Gracias, Ichirouta-sama!- Saltó a abrazarlo, halándolo caer sobre él.

    -Jaja, Kirino, calma.-

    -Oye, ¿Cuánto café tomaste hoy?- Le preguntó Shindou.

    -Dos tazas, bien cargadas, ¿Por?- Preguntó con una gran sonrisa.

    -No, por nada.- Dijo mirando hacia otro lado. -"Tendré que decirle a su abuela que deje de darle café."- Pensó. Hablaron de cosas normales por unos minutos, preguntaron si se encontraba bien, y eso.

    -Chicos, el té ya está.- Dijo la señora desde abajo. Ichirouta y Shindou ayudaron a Kirino a bajar las escaleras. Por lo hiperactivo que estaba, casi se lanzó por el pasamanos, si no es por que Shindou se lo evitó.

    Se sentaron en los sillones de la sala. Shindou se quedó hablando con Kirino, e Ichirouta con la abuela.

    -¿Entonces él se porta bien?- Preguntó Ichirouta.

    -No sabe cuanto. Es el niño más amable que hay.- Decía la señora. -Hace unos días salió con un plato lleno de comida, y se la dio a un pobre joven que estaba en la calle, y ¿Sabe qué me dijo?... Dijo que lo hacía feliz ver felices a los demás. Realmente eso me hace ver que es un gran chico.- Dijo. Ichirouta miró a Kirino, quien hablaba y reía con Shindou, lo cual le causó ternura. Ahí vio sobre la mesa una foto de Kirino cuando era un niño pequeño; En sus grandes ojos azules se reflejaba una alegría como ninguna.

    -Su madre ha de estar orgullosa.- Dijo mirando la foto con una tierna sonrisa.

    -¿Eh? No, él no tiene padres.-

    -¿Qué? ¿A qué se refiere?- Preguntó Ichirouta ante lo que dijo la señora.

    -Ranmaru... él es adoptivo.- Dijo ella. -Yo lo adopté cuando tenía dos años.- Ichirouta se sorprendió ante eso.

    -¿Qué? Pero... ¿Él lo sabe?- Preguntó bajo. La señora asintió.

    -Se lo dije hace mucho. Cuando se lo dije pareció no importarle, aunque, claro, todos sabemos que eso a cualquiera lo hiere, incluso si no lo dice.- Dijo ella igual.

    -Valla...- Dijo Ichirouta impactado. -Eso... no me lo esperaba.-

    -¿Y usted? ¿Tiene hijos?- Preguntó la señora. Ichirouta pensó unos segundos. Sus ánimos se bajaron un poco.

    -No... no tengo. Perdí a mi único hijo apenas con seis y medio meses en mi vientre.- Dijo bajo.

    -Oh. Perdone, lo siento.-

    -No se preocupe.-

    -Pero, qué coinsidencia, si Ranmaru es sietemesino.- Dijo ella.

    -¿Ah, sí? Pero, si se ve tan saludable.- Dijo mirando a Kirino reir, realmente no parecía nada débil.

    -Eso mismo me sorprende a mí.- Dijo ella, pero Ichirouta no la miraba, si no que se quedó pensando aun mirando a Kirino, luego a la foto, luego a la señora. "Es adoptivo", "Es sietemesino", resonaba en su mente. Entonces algo llegó a su mente de pronto. Pasó saliva antes de hablar.

    -Digame algo... ¿En qué mes comple años Kirino?... Y ¿En donde lo adoptó?- Preguntó con la voz algo ronca.

    -¿Hum? Él comple años en Agosto, y lo adopté... en el Orfanato SunGarden.- dijo la Señora. Ichirouta al escuchar "Agosto", pensó algo que no se podía creer. Sus manos se debilitaron, por lo que derramó un poco de té en el suelo.

    -¡Ah! Lo siento.- Dijo él dejando la taza en la mesa. -Yo... yo lo limpio.-

    -No, no. No te preocupes. Yo lo haré.- Dijo la señora Yui levantándose. Él estaba muy pensativo. No podía escuchar nada más.

    -No puede ser posible...- Susurró. Se levantó del sillón y fue hacia los jóvenes. -Shindou, debo irme; hay algo que debo hacer. Kirino, cuidate mucho.- Le dijo mirándolo. -Ojalá te mejores pronto.- Dijo para luego alborotarles el cabello a los dos. -Nos vemos mañana en el Raimon.-

    -Ichirouta-kun, ¿Ya te vas?- Preguntó la señora volviendo a la sala con un trapo.

    -Sí, señora. Lo siento, pero tengo que hacer algo. Prometo volver otro día a visitarlos. Adios.- Dijo Ichirouta yéndose rápidamente por la puerta, ante las vistas confusas de los tres presentes.

    Afuera, Ichirouta subió a su auto. En ese momento, apenas lo encendió, su teléfono sonó. Era Endou.

    -¿Qué pasa, Mamoru?-

    -¿Ya vienes?- Preguntó Endou al otro lado.

    -No. Hay algo muy importante que debo hacer. No me esperes hasta tarde.- Le dijo serio.

    -Ah... está bien. Ten cuidado.-

    -Gracias, Mamoru. Te amo.-

    -Yo también te amo.- Dijo Endou para cortar la llamada. Ichirouta partió inmediatamente en su auto, con una mirada seria y desidida. Lo que había deducido en casa de Kirino realmente no lo podía dejar para otro día, debía saberlo esa misma noche, lo más pronto posible.


    ···


    ·Continuará...·

    En el siguiente capítulo:

    ¿Shindou le revelará sus sentimientos a Kirino? ¿Qué pasará de ahora en más con Tenma y Tsurugi? ¿Qué va a hacer Ichirouta?

    Los misterios comienzan a desatarse en los capítulo finales de Encuentro del Destino: “Descubrimientos y Confesiones (parte 2)"


    Nota:
    Sietemesino: Un niño nacido con sólo siete meses en el vientre de la madre, no nueve.


    By: Utatagi.
    To: My Fans~



    Edited by Utatagi Odori - 23/12/2014, 21:32
     
    Top
    .
  3.     +1   -1
     
    .
    Avatar

    mariposa azul
    Image and video hosting by TinyPic

    Group
    Member
    Posts
    69
    Location
    donde la alegria irradia el corazon

    Status
    Offline
    QUE EMOCION !!!!!
    ESTO ESTA MUY INTERESANTE.
    ya se descubrira la verdad.




    Lamento si te preciono mucho es solo q siempre la dejas en la mejor parte.
     
    Top
    .
  4. takuran
        +1   -1
     
    .

    User deleted


    OMG estuvo ..... asombroso
    shindou si o si tiene que confesarse le a kirino
    me alegra que se hayan amistado
    ya se lo que hara Ichirouta quiere ir a el Orfanato SunGarden para comprobar que kirino es su hijo haaaaaa ojala que sea su hijo
    por fi conty lo mas pronto posible
    sayo
    :=WORKIN:
     
    Top
    .
  5. glay-zaid
        +1   -1
     
    .

    User deleted


    te dare el consejo cliche, revisa siempre por segunda vez los capitulos, asi te ahorras los errores ortograficos, o busca un beta xd por lo demas esta bastnante bien, mi pregunta es, quien se llevo al niños al sun garden? .o.
     
    Top
    .
  6.     +1   -1
     
    .
    Avatar

    He regresado!!!!
    Image and video hosting by TinyPic

    Group
    Member
    Posts
    2,840
    Location
    Algo llamado mundo de los "adultos"

    Status
    Offline
    gomen! yo sin comentar ya lo lei en mi celular pero no pude comentar
    a y hola soy "nueva" :=MUSEEN:
     
    Top
    .
  7. Andrea Estefania Bermeo
        +1   -1
     
    .

    User deleted


    KIERO CONTY TERMINE LOS MAS PRONTO POSIBLE KYAA >///< ME GUSTO :=yeahyie:
    KIERO VER MAS
     
    Top
    .
  8.     +1   -1
     
    .
    Avatar

    ⚡ Wild Orange! ⚡ gif maker
    Image and video hosting by TinyPic

    Group
    Member
    Posts
    1,038
    Location
    Inazuma Town

    Status
    Offline
    ¡Daajajaja! Esa pelea de Tenma y Tsurugi fue tan tú... xD yo sabía que algo loco les tenías preparado a esos dos... :3

    Ay, esto se enrrolla y se desembuelbe cada vez más, y al mismo tiempo, ¡Por Aphrody! Me duele la puta cabeza de tanto sacá' conclusiones que no creo que sean las correctas.

    Sangoku, tan tierno; al pen diente de todos siempre. Él me encanta cada vez más. :=DFSDFSD:

    Wn, y cuando dijiste que no me prometías menos tristezas... ¿Vienes y me dejas con esto? *Snif* ¡¿QUE A TSURUGI NO LE GUSTA TENMA?! ¡¿Qué tendrá pensado el mardito...?! #¬¬

    Y Kazemaru... por Deus, Kazemaru es más listo de lo que aparenta, por lo que veo... No creo que valla a SunGarden ahora mismo. No. Yo creo que va a saltar cuentas con el que le haya hecho ese "favor" hace 14 años de mierda.

    Espero Conty, este Dorama se ve cada vez más Dorama. Sólo falta que haya un engaño random... xD


    Noriko O.
     
    Top
    .
  9. Utatagi Odori
        +1   -1
     
    .

    User deleted


    ¡Buen día, mi querido público, refinadísimo y con buenísimos gustos! xD ¡CASI FELIZ NAVIDAD! Por que es mañana, no hoy... xD

    Bueno, de una les digo: Hoy casi todo se va a revelar, y en el próximo Todo, se revela. TODO.

    ¡Aquí la sexy y casi violable (Si no es por que está en un apararto... xD) Conty!


    lytaly YukiMiku-chan~ Así es, la verdad está muuuy cerca. Y no es molestia, sé que lo dejo en lo intrigante, pero créeme, hay quienes hacen unas mierdas más intrigantes que novela americana... xD

    takuran¡TAKU-CHAN~! Belleza pura~ Te he extrañado... :3 Eso de la confesión... ewe Y lo de que Ichirouta va a SunGarden a la de ya, pues, sí, pero antes no era sí, fue después que lo pensé con calma. Y no te me emplomes(?), que en este capi toidas me van a caer encioma, y no a golpes... ewe

    glay-zaid, Hum... bueno, gracias por la nota, mi amor. Pero, ¿Me dices cuáles fueron los errores? Es que yo escribo en la lap de una amiga aveces, y ese "Editor", es puro como de notas, porque no tiene autocorrector, ni corrector. Pero hago lo que puedo, porque yo pa' corregir soy muy Raz... :/ Pero igual, gracias. Ah, sí. Tu duda. Hoy lo voy a decir, o mejor dicho, lo va a contar Ichirouta. Hoy todo se revela, como dice arriba.

    daku._enjer "Bienvnida" a mi fic, amorsh~ xD Bueno, no importa, espero que me sigas leyendo. :)

    Andrea Estefania Bermeo Sí, tranqui, ya traje conty... xD Por sierto; no es por nada... pero tu foto es tan... sencilla. Con tu forma de comentar te luciría más una con más color. Tu puedes decirle a Noriko Oumi que te haga alguna, es muy buena

    Noriko Oumi ¡ORANGE-KUUUN~! ¿Qué te me hiciste? te trato de llamar, pero nada me cae... T-T Yo sabía que te iba a gustar esa rara discuciuón... :3 Y déjalo así, qué bah. Y por sierto, también me encanta el ex capitán. >w< Y Tenma y Tsurugi... Puies, ya verás... En eso, la pegaste, n y sí. No en lo de que va primero a vengrse, pero sí en... bueno, ya verás.



    En el capítulo anterior de Encuentro del Destino:

    Tsurugi y Tenma hicieron las paces, pero Tsurugi prefirió quedar sólo como amigos. Ichirouta fue visitar a Kirino junto con Shindou a su casa, y hablaron de cosas normales, hasta que la abuela de Kirino le contó cosas que le hicieron algunas ideas en la mente. Descubran más misterios ocultos y sentimientos revelados, hoy


    ···


    *Cap. 6: "Descubrimientos y Confesiones" (Parte 2)


    Esa tarde, luego de llegar del colegio, Tenma iba entrando a la posada donde se quedaba. Se veía cansado, con los ojos caídos, y muy quieto.

    -Hola, Sasuke.- Saludó al perro, que hizo un sonido extraño y siguió durmiendo. Tenma rió ligeramente ante eso, siguió su camino a la entrada y pasó. -Hola, Aki-nee. Ya llegué.- Su voz se oía muy tranquila para ser él.

    -Hola, Tenma. ¿Cómo te fue hoy?- Preguntó Aki desde la cocina haciendo la cena.

    -Bien.- Dijo él simplemente, Aki lo miró extraño. Subió las escaleras, abrió la puerta de su habitación y se echó en la cama, cayendo su cara sobre la almohada. Respiró por unos segundos mirando a un lado, hacia el balón con la marca del relámpago que le regaló Ichido Shuuji para ser más exactos. De un momento a otro unas ligeras lágrimas salieron de sus ojos sin previo aviso, su rostro cambió de pronto, dolido, triste. Rompió a llorar con más fuerza, pegó la cara a la almohada y comenzó a llorar.- ¿Por qué...?- Decía entre sollozos.

    -Tenma, ¿Está bien?- Preguntó Aki desde atrás de la puerta. -Voy a pasar.- Avisó para entrar a la habitación. Vio a Tenma allí tendido sobre su cama, llorando contra la almohada. -Tenma, ¿Qué te pasó? ¿Por qué lloras?- Le preguntó preocupada acercándose.

    -*Snif* Tsurugi...- Dijo con dificultad aun en la almohada.

    -¿Tsurugi qué?-

    -Tsurugi... ¡Él no me quiere!- Gritó llorando más fuerte, gimiendo entre los sollozos.

    -Ay, Tenma...- Dijo ella triste; Aki ya sabía que Tenma estaba enamorado de Tsurugi, con todo su gran corazón, y el ver así al chico, habiendo sido rechazado por Tsurugi, le rompía el alma. -Lo siento mucho, Tenma.- Dijo ella sobándole la espalda, no sabía qué decirle; era complicado algo como eso.

    Tenma se desahogó llorando toda esa noche. Pasó un poco la tristeza para ir a cenar y no preocupar a nadie más. El resto de la noche no lloró más, sino que aceptó que Tsurugi lo hubiese rechazado y pensó que si seguía intentándolo, lograría gustarle; El esfuerzo jamás lo ha traicionado, pensaba.


    ···


    Era de noche en las calles de la ciudad. Había nubes en el cielo nocturno, que indicaban que pronto llovería. Ichirouta iba en su auto a alta velocidad, con lo que pensaba hacer no tenía tiempo de pensar en las leyes de tránsito.

    Llegó rápidamente a un hogar grade, de tres pisos de altura, muy extenso. Afuera había un letrero que decía Orfanato SunGarden. El lugar lucía algo desgastado desde afuera. Se bajó de su auto y caminó rápido a la entrada. En eso comenzaron a oírse las gotas de lluvia caer. Tocó la puerta del lugar y unos segundos después abrió una dama; una mujer de cabello largo y negro verdoso. Usaba lentes.

    -Caballero, ¿Tiene idea de la hora que es? Ya no atendemos a estas horas.- Dijo la mujer.

    -Lo siento, pero debo preguntarle algo muy importante. Es sobre un niño que fue adoptado aquí hace mucho.- Le dijo Ichirouta. Lucía apresurado.

    -Lo lamento, es mejor que venga mañana.- Le dijo ella algo apenada de no poder atenderlo. Iba a cerrar la puerta.

    -¡Por favor! Es demasiado importante.- Le dijo Ichirouta deteniendo la puerta. La mujer lo miró un segundo; sus ojos lucían muy preocupados, estaba pálido, y temblaba un poco. Además, estaba lloviendo, sería peligroso andar así en las calles.

    -Ah... adelante, pase.- Le dijo. Ichirouta obedeció y entró. Se sentaron en una amplia sala donde ella recibía a las personas que buscaban adoptar. -Bueno, ¿En qué puedo ayudarle?-

    -Quiero rectificar algo. ¿Aquí había hace mucho un niño llamando Ranmaru? ¿Kirino Ranmaru?- Preguntó él. Le mujer acercó su mano a su boca pensando.

    -Ahm... Sí, hace como nueve años; un pequeño de pelo rosado y ojos azules, muy dulce. Lo adoptó una dama de edad avanzada.- Le dijo Ichirouta asintió.

    -Dígame, ¿Cómo fueron sus antecedentes?-

    -Él... Se supone que ese niño fue un sobreviviente. En el hospital de ciudad Inazuma, una vez alguien casi lo pierde, pero lograron salvarlo, aunque sus padres nunca lo fueron a buscar.- Ichirouta estaba sorprendido ante lo que le contaba la mujer. -Por eso mi hermano lo trajo aquí.-

    -¿Su hermano?- Preguntó.

    -Sí, él es amigo de uno de los doctores del hospital, el que le dijo sobre el niño. Creo que se llamaba... Gunji... Genji... No lo recuerdo bien.- Decía mirando hacia arriba. Ichirouta estaba perplejo.

    -¿Go... Gouenji?- Preguntó un poco después.

    -¡Sí! Ese mismo. Él fue el que le había dicho a mi hermano para que lo trajera aquí, y claro que acepté. El pequeño creció muy sano, a pesar de que no alcanzó ni los siete meses completos en el vientre.-

    -Ah... ¿Más o menos cuánto tenía cuando se lo dieron?- Preguntó con un hilo de voz entrecortado.

    -Ahm... sólo dos meses.- Dijo ella. Entonces vio el rostro del Ichirouta; Estaba petrificado, mirando al suelo con una expresión extraña, era una mezcla de varias a la vez; Esperanza, terror, y también un poco de alegría algo ilegible. -¿Ah? ¿Se encuentra bien?-

    -Sí... E... Estoy bien.- Dijo un poco después de reaccionar.

    -Oiga, Y ¿Por qué quiere saber sobre ese niño?- Preguntó ella curiosa.

    -No estoy muy seguro de lo que sucede, pero... creo que se trata de mi hijo.- Dijo en una voz tan baja que casi susurraba, pero ella lo oyó. Ella se levantó del sillón estupefacta. Trataba de decir algo, pero no podía hablar. En ese momento se oyeron unos pasos en las escaleras. Ella reaccionó y miró. Se trataba de un chico del equipo del Raimon; Kariya Masaki.

    -Hitomiko-san, ¿Puedo comer algo más? Me quedó hambre.- Dijo él con una cara algo cansada; parece que se despertó por un bocadillo nocturno.

    -Ah, claro. Adelante.- Dijo ella sin pensarlo mucho. -Pero no comas mucho, o te darán pesadillas.- Le advirtió. En eso Kariya terminó de bajar para ir a la cocina, pero miró al sillón de la sala, y vio a Ichirouta.

    -¿Ichirouta-sama?- Peguntó mirando al hombre. Al oír su voz y cómo lo llamó, Ichirouta volteó.

    -Kariya-kun.- Dijo ichirouta. Se calmó un poco de lo que había pasado; las piezas del rompecabezas que trataba de armar lo sorprendía aun más. Si seguía pasando por sorpresas como esa, le daría un infarto.

    -¿Qué está haciendo aquí?- Le preguntó llegando a la cocina, que estaba a un lado de la sala.

    -Eh... vine a preguntarle a algo a... Hitomiko-san.- Dijo algo entrecortado, ni siquiera podía pensar con claridad.

    -Oh, ¿Sobre qué?- Preguntó cortando un trozo de pan y poniéndole queso.

    -Kirino.- Dijo Ichirouta simplemente. Kariya se detuvo de pronto sorprendido.

    -¿Cómo, qué hay con Kirino-sempai?- Preguntó Kariya.

    -Que él estuvo aquí antes de que tu llegaras, Masaki.- Le respondió esta vez Hitomiko. Ya había asimilado todo lo que hablaron ella e Ichirouta, ya entendía la gravedad del caso. Se volvió a sentar. -No puedo creer esto. Y ¿Cómo se enteró de que él estuvo aquí?- Ichirouta le contó que conoció a la señora Yui, su abuela, y que ella le contó algunas cosas que lo sorprendieron, y que hicieron que pensara más a fondo.

    -Yo sabía que mi hijo no podía morir... lo sentía en mi corazón.- Decía él mirando a un lado. Kariya estaba parado en un lado de la entrada a la cocina mirándolo; él ya sabía que Kirino estuvo allí hace mucho tiempo, antes que él, pero ¿Que podía ser el legítimo hijo de Ichirouta? Eso sí que tenía que verlo.

    -Pero espere, no saque conclusiones antes del desarrollo; ¿Qué tal si se trata de otro niño al que le haya pasado lo mismo?- Le detuvo Hitomiko. -Mejor debería informarse más a fondo antes de hacerse ideas incorrectas en la mente, esto que hace es realmente delicado. Mejor tenga paciencia.- Le recomendó. Ichirouta miraba al suelo aun sin moverse; era verdad, no podía asegurar que fuera el mismo, pero algo dentro de él le gritaba que sí era Kirino, y otra parte le decía que era imposible. ¿Instinto o Razón? Luego de pensar unos segundos, se levantó del sillón, ante la vista de la mujer.

    -Ya sé qué puedo hacer.- Le dijo caminando a la puerta. -Voy a hablar con Gouenji, pero esto es algo que quiero consultar con alguien más antes que todo. Le agradezco mucho su atención Hitomiko-san. Buenas noches.- Dijo haciéndole una reverencia. -Y duerme bien, Kariya-kun.- Le dijo a Kariya antes de irse. Cuando se fue, Hitomiko miró a Kariya.

    -¿Hiciste tu tarea de mañana?- Le preguntó. Kariya, aun masticando su comida, la miró, para luego poner una sonrisa de inocente e irse lentamente por las escaleras a su habitación. -Masaki...- Susurró cansada.


    ···


    En casa de Kirino, él, Shindou y la señora Yui se quedaron mirando cómo se fue Ichirouta tan repentinamente. Ese momento fue algo extraño. En eso Shindou miró al reloj de la sala; las 8:20pm.

    -Oh, Miren la hora. Es mejor que me valla.- Dijo Shindou. Se levantó del sillón y tomó su bolso. Kirino tomó sus muletas y se levantó también.

    -Te acompaño afuera.- Le dijo Kirino. Mientras salían, Shindou lo miró de reojo.

    -Adiós, Shindou-kun. Buenas noches.- Le dijo la señora despidiéndose. Él se despidió y salieron de la casa.

    Afuera, Shindou estuvo unos segundos pensando en si se declararía a Kirino o no. No sabía qué hacer, qué decir, siquiera qué pensar. Se despidió de Kirino sin mirarle, lo cual él miró muy raro.

    -Shindou, ¿Estás bien? Actúas muy distraído.- Le preguntó Kirino. Se le llegó a la mente que tal vez estaba pesando en lo que pasó hace dos días en su habitación. Un diminuto sonrojo apareció en sus mejillas ante ese pensamiento.

    -Estoy bien.- Dijo Shindou simplemente. Aun no quería mirar a Kirino. Pues sí, aun pensaba en aquello; Quería decírselo, quería gritárselo, que no olvidara ni el tono de voz que el que le confesó el gran amor que sentía hacia él. Pero no podía, no tenía palabras para eso, no tenía el valor suficiente para hacérselo saber. Siguió su camino dando lentos y cortos pasos. Bajó sólo dos de los cuatro escalones que daban desde la casa a la acera.

    -Shindou...- Susurró Kirino mirándolo con tristeza, le preocupaba verlo así; tan distraído; tan diferente a como es él de concentrado.

    A Shindou le restaba sólo un escalón para llegar a la acera e irse, sin decirle a Kirino sus sentimientos. No aguantaba aquella idea, era horrible; pensar que nunca le confesaría con valor lo que sentía; que quedaran sólo como amigos para siempre, que alguien más le dijera que lo quería y que ya no tuviera más oportunidades. No quiso eso. En ese momento cerró con fuerza los ojos y se dio la vuelta, subió rápidamente los escalones de vuelta y abrazó a Kirino por los hombros, para darle un profundo beso, uno que a él lo dejó más que estupefacto. Fue muy rápido, muy repentino.

    Shindou se separó de él al momento. Se dio la vuelta lo más pronto que pudo, pero Kirino soltó una de sus muletas y le agarró la muñeca, atrapándolo. Hizo que se diera la vuelta y volviera hacia él. Soltó la otra muleta y lo abrazó por el cuello, volviendo a unir sus labios en la muestra de afecto. Shindou se sorprendió, pero sin hacerse esperar, la correspondió, abrazando a Kirino por el pecho y sujetando sus hombros.

    Compartieron ese hermoso beso durante un largo rato, un beso apasionado y dulce, sintiendo el calor que le brindaba el otro. Una cristalina lágrima calló por la mejilla de Shindou, muy brillante para una noche tan oscura. La señora Yui los miraba recostada en el marco de la puerta con una sonrisa de satisfacción; cuánto esperaba a que llegara ese ansiado día, día en que su pequeño sería aun más feliz. Se separaron lentamente abriendo un poco los ojos, aun sin dejar de abrazarse.

    -Shindou, yo...- Trató de decir Kirino, pero Shindou lo interrumpió, con algo muy repentino.

    -Te amo.- Dijo inmediatamente sonriendo un poco. Kirino se le quedó un segundo mirando sorprendido. -Ya no temo a decirlo; Te amo, Kirino, ¡Te amo con todo mi corazón!- Gritó de pronto. Siguió diciéndolo y gritándolo una y otra vez mientras lo abrazaba con fuerza y pasión, de muchas formas distintas.

    -Shindou, ¡Shindou!- Le llamó Kirino para hacer que se detuviera. Él calló y lo miró; se notaba una gran alegría en sus ojos.

    -Tú sientes lo mismo que yo, ¿No es así?- Le preguntó impaciente. -Me correspondiste, quiere decir que sí me quieres. ¡Te amo demasiado!- Decía Shindou aun con mucha felicidad.

    -¡Shindou, ya! Calma...- Le detuvo Kirino. -Ah, Sí. Sí, yo también te amo, muchísimo.- Decía enrojeciendo un poco. -Realmente... pensé que nunca me lo dirías.- Dijo con una voz muy suave. Shindou sonrió, se acercó a su oído y le susurró algo.

    -Realmente... Realmente me gustas, mucho.- Le susurró. Kirino enrojeció un poco más. Ahí se alejó un poco. -Y si tú sentías lo mismo, ¿Por qué no te confesaste primero?- Le preguntó. Kirino alzó una ceja.

    -¿Tú quieres ser el Seme?-

    -¿Hum? Eh... claro, pero...-

    -Pues entonces tenías que declararte primero.-

    -Pero... Eso es de...- Decía recordando en qué se usaba el término Seme.

    -Shindou, me caeré sin mis muletas.- Dijo para distraerlo.

    -Ah, claro.- Recordó Shindou. Como pudo sostuvo a Kirino y agarró las muletas del suelo, se las dio y él se acomodó.

    -Gracias. Buenas noches. Te amo.- Dijo Kirino para acercarse y darle un beso suave en los labios. Se dio la vuelta y entró a la casa.

    -Ah, C-Claro, Adiós. ¡Ah, yo también te amo!- Dijo justo antes de que la puerta se cerrara. Se quedó ahí con la mano alzada al aire unos minutos, tratando de asimilar todo lo que pasó allí. Fue tan rápido, realmente era difícil de creer; Le había dicho, le había gritado y le había confesado por completo a Kirino que lo amaba. Una gran sonrisa fue apareciendo en su cara, al lado de un sonrojo en sus mejillas. Ahí se dio la vuelta y se fue a su casa.

    Dentro de la casa de Kirino, él entró con una pequeña sonrisa en los labios, aunque, claro, por dentro celebraba salvajemente lo que pasó. En eso miró a la sala, y vio a su abuela mirándolo con una pícara sonrisa. Kirino se sonrojó; su abuela era la mejor para espiar en algunos casos.

    -¿Y bien?- Preguntó ella.

    -No, abuela, por favor... Esto me da pena.- Dijo él mirando a otro lado. -No me lo preguntes.-

    -¡Vamos, Ranmaru! No puedo evitarlo. ¡Dime! ¿Te gustó?- Le pidió. Él miró a un lado sonrojado.

    -Aish... ¡Sí! Sí, está muy claro que me gustó.- Confesó mirándola de frente aun sonrojado. -No, espera... No me gustó... me encantó, ¡Lo amé! Fue tan mágico, realmente me sorprendió a la primera.-

    -Jeje... Pareció una escena de telenovela...- Dijo ella medio riendo. -Pero, en serio, Ranmaru. Estoy muy feliz por ti.- Le dijo ella. Él sonrió ante eso; eran bellas palabras.

    -Gracias, abuela.- Le dijo él dulcemente.

    -Ah, por cierto;- Dijo ella levantándose. Su rostro estaba serio, algo extraño en ella. Se puso frente a él y le puso las manos sobre los hombros.- Ranmaru... ¡Espero que pronto me des bisnietos!- Dijo alegrándose de pronto. A Kirino se le subieron los colores.

    -¡ABUELA!- Se oyó desde afuera de la casa.


    ···


    Ichirouta iba en las calles, ya un poco más calmado; su rompecabezas comenzaba a tener sentido. ¿Realmente su hijo estaba vivo? ¿Y era un chico tan increíble y sano como Kirino? Quería creer que así era. Por dentro, comenzaba a ser una interminable batalla de sentimientos: Estaba feliz, de que faltaba poco para descubrir si eso era verdad. Estaba triste, porque no pudo estar con él durante todos estos años. Estaba molesto, porque esos doctores lo retiraron de su cuerpo y le dieron un susto haciéndolo pensar que había muerto. Estaba confundido, sentía en su corazón un presentimiento extraño; algo malo pasaría pronto, pero, ¿Qué?

    Condujo hasta llegar a su casa. Bajó del auto y no lo cerró, ya que inmediatamente se volvería a ir en un momento. Llegó casa a buscar a Endou para decirle lo que pasó, y lo que tenía planeado hacer ahora mismo. Abrió la puerta de la casa y entró rápidamente.

    -¡Mamoru, despierta!- Gritó hacia la escalera al segundo piso. -Vamos a...- Decía, cuando entonces miró a la sala: En el sillón estaba sentado Endou, pero lo que dejó en Shock fue que, sentado encima de él... había una mujer. Endou tenía algo rojas las mejillas, había unas latas de cerveza en el piso, y no traía camisa. La mujer tenía los cabellos castaños rojizos, ondulados, más abajo de los hombros. Ella también estaba un poco roja, y las mangas de su corta blusa bajadas. Nadie hacía el más mínimo movimiento, hasta que Ichirouta sacudió un poco la cabeza. -Ah, ¡Mamoru,- Decía caminando hacia ellos, tomando la camisa de Endou del suelo y tirándosela a la cara. -ponte la ropa y muévete! Esto es importante.- Dijo empujando al suelo a la mujer, y tomando la muñeca de Endou. Caminaron hacia la entrada. -Y tú,- Apuntando a la mujer. -cuando te acomodes, toma esas latas y lárgate de mi casa.- Dijo justo antes de salir y azotar la puerta, ante la vista confundida de ella.

    Al salir, Ichirouta volvió a abrir las puertas del auto.

    -I... Ichirouta, ¿Qué pasa?- Decía Endou con una voz algo cansada, se veía confundido.

    -Aish, Mamoru. ¡Sólo sube al auto y abróchate el cinturón!- Le gritó empujándolo adentro y haciendo que cayera al asiento. Luego subió él. Ahí arrancó. Endou se puso la camisa como pudo, pero Ichirouta iba muy rápido. En un cruce, Endou pegó la cara con el vidrio de la puerta.

    -Ay...- Emitió Endou con el golpe. Se sujetó del agarradero que está sobre la puerta y miró con pánico al frente. Los efectos del alcohol comenzaban a pasar. -¡I-Ichirouta, ve más despacio!-

    -¡Cierra la boca, Mamoru! Tenemos que llegar al hospital Inazuma pronto.- Dijo sin apartar su vista de las calles, esquivando autos, mientras Endou rezaba mentalmente para no chocar. Pensaba que su esposo había perdido la razón.

    Poco después llegaron al Hospital, y en una maniobra Ichirouta se estacionó en un espacio libre.

    -¿Qué...? ¿Qué hacemos en el hospital?- Preguntó Endou, pero Ichirouta no le respondió, sino que sólo bajó y desde afuera le gritó que se bajara y caminara. Él obedeció, y fue detrás de Ichirouta.

    Lo miraba desde atrás pensando en qué estaría pensando él al encontrarlo... así, como lo encontró.

    Entraron al hospital e Ichirouta se acercó a la recepción. No había mucha gente, sólo unas cuantas personas.

    -Necesitamos ver al doctor Gouenji Shuuya.- Dijo él. Endou lo miró extraño.

    -El doctor Gouenji está atendiendo a un paciente con asma. Puede esperarlo en la sala de espera si lo desea.- Le dijo la dama del mostrador. Ichirouta no dijo nada y se fue a sentar.

    -Eh, gracias.- Dijo Endou por los dos y fue tras él. Ichirouta se sentó en una de las sillas y se quedó allí con los brazos cruzados mirando a un lado serio.

    -Ahm... Ichirouta...- Le trató de llamar Endou sentándose a su lado. -¿Por qué...? ¿Por qué querías venir aquí?- Le preguntó algo inseguro; no parece que le haya dado mucha importancia a lo que vio en la casa, pero... nunca sabía qué esperar de su esposo.

    -Descubrí un par de cosas esta tarde, Mamoru, cosas que me dejaron impactado.- Decía mirando al reloj de la pared; las 12:25am. El tiempo voló.

    -¿Como qué?- Preguntó Endou. Ichirouta lo miró de reojo.

    -¿Tú sabes algo sobre Kirino?- Le preguntó él. Endou pensó un poco.

    -Sólo que él es adoptivo, pero no conozco los detalles.- Ichirouta seguía igual de serio, mirando al suelo de lado.

    -Kirino tiene 14 años, ¿No? Los mismos años que cuando perdimos a nuestro hijo. Descubrí que él es nacido de menos de 7 meses, que cumple años en agosto, que se supone que creyeron estaba muerto en el vientre y lo sacaron, pero lograron salvarlo.- Decía. Endou no cabía en su sorpresa; era mucha coincidencia. -Fui al Orfanato SunGarden, y me dijeron todo eso. Y adivina... fue Gouenji el que le salvó la vida al niño.... y fue Hiroto el que lo llevó allá.- Finalizó. Endou no podía creerlo, todo encajaba perfectamente. Fue ahí que entendió por qué Ichirouta estaba tan apresurado; Creía que Kirino era el hijo que perdió aquel día.

    -Pero... eso significa que...- Decía Endou casi sin aliento. -¿Kirino podría ser... nuestro hijo?-

    -Por eso vine aquí; quiero que Gouenji me diga exactamente qué pasó ese día, y sin ocultarme nada más; ya fueron suficientes secretos.- Dijo Ichirouta aun igual. Quedaron un poco en silencio; a él no se le quitaba aquello de la cabeza; era lo único que ocupaba su mente. En eso pensó un poco en Endou, él también era padre de aquel niño, pero entonces recordó eso que vio al entrar en su casa; ver a su esposo allí con esa mujer sobre él, ambos embriagados. Por un momento sintió repulsión, pero entonces comenzó a maquinar. -Endou... ¿Quién era esa mujer que estaba contigo?- Preguntó con ligero pánico. Endou se sobresaltó ligeramente; rezaba para que él no lo recordara, aunque siendo Ichirouta eso era imposible.

    -Eh... yo...- No sabía qué decir; lo que había pasado era una serie de sucesos muy complicada para explicarlo, y sabía lo sobresaltado que podía ser su esposo a veces. -Ella... veras; hace unas horas, cuando te llamé, era para saber si venías pronto, porque no estaba en casa; unos amigos me invitaron a tomar algo para pasar el rato, pero entonces creo que me pasé un poco de cervezas... Yendo de vuelta a casa varios iban conmigo, y entre ellos, esa mujer; ¿Te acuerdas de Raimon Natsumi?- Le preguntó. Ichirouta bufó bajo; claro que la recordaba; la maldita mal encarada que incontables veces trató de quitarle a Endou en su juventud. Asintió molesto mirando a un lado. -Bueno, era ella. Cuando llegamos a casa, los demás se fueron, pero ella se quedó detrás de mí. Yo estaba ebrio, así que no podía saber lo que hacía. Lo que pasó después lo tengo algo borroso.- Finalizó. Ichirouta sólo miraba hacia el frente; él era alguien que siempre trataba de mantener la compostura; le importaba estar tranquilo, pero aquello lo tenía temblando de la furia. Apretaba con fuerza los puños, se sentía devastado. -Lamento mucho lo que hice...- Dijo Endou nervioso.

    -No lo sientas...- Dijo bajo Ichirouta, mirando para un lado. Endou lo miró raro. -Porque... ¡Eso no tiene perdón!- Le gritó gruñendo de pronto. Endou se asustó. Ichirouta se levantó del asiento. -¡No tengo tiempo para estos tontos juegos, Mamoru! ¡Depende de Gouenji decirme la verdad sobre mi hijo, y ¿Tú sales con que me engañas con esa maldita puta?! ¡No voy a soportarlo! A mí me importa lo que pase de aquí en adelante, porque hoy voy a saber la verdad. Si estas o no de mi lado para saber sobre mi hijo, ¡No me importa!- Le gritó, se dio la vuelta y se sentó en otro asintió, lo más lejos que pudiera de Endou. Él no podía estar más impactado; todo eso le llegó al alma; fue hiriente que Ichirouta pensara que no le importa saber sobre su hijo. Si supiera que fue por ahí que comenzó el problema.


    ···


    •Continuará...•

    En el siguiente capítulo:

    ¿Kirino es realmente el legítimo hijo de Ichirouta? ¿Qué hará Tenma para conseguir el amor de Tsurugi? ¿Qué va a pasar entre Ichirouta y Endou?

    Impactantes secretos se revelarán en el próximo capítulo de Encuentro del Destino: "Secretos y Misterios (parte 1)"



    By: Utatagi.
    To: My Fans~

     
    Top
    .
  10.     +1   -1
     
    .
    Avatar

    mariposa azul
    Image and video hosting by TinyPic

    Group
    Member
    Posts
    69
    Location
    donde la alegria irradia el corazon

    Status
    Offline
    esto sta super interesante
    COMO Q GOENGI LO DEJO EN EL ORFANATO????
    realmente las coincidencias q relacionan a kirino con el parto de kazemaru son muchas.
    yo creo q es su hijo realmente.
    encerio quiero enterarme q paso despues del parto ??????
    CONTINUALA PORF !!!!!!!
     
    Top
    .
  11. takuran
        +1   -1
     
    .

    User deleted


    ¿Kirino es realmente el legítimo hijo de Ichirouta?
    pues si mis cálculos y mis suposiciones son correctas kirino si es el hijo de Ichirouta
    ¿Qué hará Tenma para conseguir el amor de Tsurugi?
    que haga de todo para que de una vez por todas sean pareja
    ¿Qué va a pasar entre Ichirouta y Endou?
    la verdad no lo se pero ojala se arregle entre ellos
    Gomen'nasai por no comentar es que estaba un poco ocupada pero el fanfic esta cada vez mas interesante
    onegai ponty pronto que quiero saber la verdad
    sayo
    :=WORKIN:
     
    Top
    .
  12. Utatagi Odori
        +1   -1
     
    .

    User deleted


    ¡Feliz año nuevo 2015!



    Y ¿Qué mejor forma de comenzarlo que con un capítulo que está más caliente que pan de jamón recién hecho? ¿Eh? ewe

    lytaly: Mi amorchotototóte~ ¡Feliz año nuevo! Fuiste la primera y casi que la única, te quello~ >w< Aquí tá' la conty, y ya te vas a enterar, esta capi es MUY importante. Nos leemos~

    takuran: ¡Taku-chaaaaan~! ¡¡Que pases un súper, súper, súper feliz año nuevo!! Y... qué loco, fueiste la única que contestó las preguntas... creí que todos las ignoraban apropósito... ah, bueno. xD Y no te preocupes por nada, que mientras me comentes, o tan siquiera un likesito ahí, me alegra la vida entera. Te amito~

    ¡¡Y Oranje-kun no me comentó!! Dijo que se le olvidó, pero... Grr... Hice el final de esta capítulo especialmente para ella...


    En el capítulo anterior de Encuentro del Destino:

    Shindou finalmente le confesó sus sentimientos a Kirino, y él alegre correspondió. Ichirouta descubrió más a fondo cosas sobre Kirino, quien posiblemente pueda ser su hijo, pero al llegar a casa a buscar a su esposo, se encuentra con una desagradable y peli-roja sorpresa. Entérense de los misterios más impactantes revelados, hoy.


    ···


    *Cap. 7: "Secretos y Misterios" (Parte 1)

    QUOTE
    Advertencia: Este capítulo contiene escenas de sexo clase A y lenguaje para mayores de 18 años (Ni tanto.). (Y sé que no harán caso a la advertencia, pero lo digo porque las reglas del foro dicen que si tiene al menos señales de lemon, debo hacer una advertencia antes de empezar. Qué bah... xD)

    Esa noche en el Hospital Inazuma, Ichirouta estaba sentado en un asiento de la sala de espera, y lejos de él, Endou lo observaba. Esa noche Ichirouta lo encontró con una mujer en su casa, lo cual lo hizo estallar, y Endou quería disculparse, pero no sabía cómo.

    Pensó por mucho rato, no sabía qué iba a decir, pero se disculparía y conseguiría el perdón de su esposo. Aunque, claro, quería también decirle otra cosa muy importante.

    Se levantó de su asiento y fue a donde él estaba. Ichirouta tenía los ojos cerrados, muy serio, pensando en qué ocurriría después.

    -Ichirouta.- Oyó que alguien lo llamó, con una voz que en ese momento le causaba repugnancia.

    -Lárgate, Mamoru.- Le dijo sin abrir los ojos, frunciendo más el ceño. Quería llorar, quería soltar todo aquel líquido amargo, luego de golpear a Endou y a su perra en donde les cayeran sus puños. Endou acercó su dedo al entrecejo de Ichirouta, lo cual lo irritó.

    -Te saldrán arrugas si haces eso.- Le dijo Endou para calmar su tención, pero sólo lo hizo rabiar más. Ichirouta le golpeó la mano y se volvió a poner derecho.

    -¡Basta! Ya déjame solo.- Le regañó. Pero entonces Endou se arrodilló en el suelo.

    -Por favor... ¡PERDÓNAME!- Gritó tan fuerte que se oyó un eco dentro del hospital.

    -Shh~- Emitió la dama de la recepción haciendo que guardaran silencio.

    -Mamoru, basta.- Le regañó Ichirouta en voz baja. Endou levantó un poco la cara.

    -No, hasta que me perdones. ¡De verdad no lo hice apropósito! Jamás te engañaría, y menos con alguien que sé perfectamente que odias con todo.- Le dijo con un rostro de sufrimiento, y así era; estaba sufriendo de remordimiento por aquello. Ichirouta miró a los lados, la gente los estaba mirando.

    -Ya cállate, la gente nos está viendo.-

    -Y ¿Crees que con esto me importa el resto de la gente? Me importas tú.- Le dijo seriamente, pero aun dolido.

    -Ya te dije que pares con esto, lo que hiciste no te lo voy a perdonar.- Dijo Ichirouta mirando a otro lado.

    -Pero, acaso...- Decía Endou levantándose.- ¿Crees que yo no te quiero de verdad? Si no te quisiera, ya hace mucho que hubiese buscado a alguien que sí me dé un hijo real.- Le dijo molesto. Ichirouta reaccionó ante eso. Miró a Endou sorprendido. -Realmente te amo, pero me ha lastimado que los últimos 14 años no hemos intentado tener otro hijo sólo porque temes perderlo otra vez. Pero aun así permanecí en silencio, porque no quería lastimarte.- Dijo sentándose a su lado. -Lo peor es que, no importa lo que hiciera, con esta estupidez que hice hoy, lo arruiné todo. Me avergüenzo de mí mismo.- Dijo cerrando los ojos triste.

    -Mamoru...- Dijo Ichirouta sorprendido, mirando con algo de lástima el rostro triste de su esposo. -Pero, si tanto querías ser padre, ¿Por qué no lo dijiste?- Endou lo miró raro.

    -No creo que algo así fuera necesario. Desde siempre, desde que nos hicimos novios, recuerdo que siempre te decía 'Sería lindo ser padre, espero el día en que nos casemos y tengamos un hijo'. Fue cuando teníamos 15. Lo decía tan realmente que no sé cuándo fue la última vez que hablé tan en serio.-

    -Pero sólo me pediste que tuviéramos otro un par de veces después, y luego desististe.-

    -No lo hice. Siempre lo quise, y hubiese sido más fácil adoptar a un niño sano y feliz, pero pensaba que te lastimaría que llegara a casa y te dijera, '¡Ichirouta, tenemos un hijo!' Así como así.-

    Ichirouta pensó un poco, tal vez fuera verdad que fue muy serio con lo de no volver a intentar tener otro hijo, y no pensó en los sentimientos de Endou.

    -"Bueno... sé que él siempre estuvo de mi lado, y aun lo amo... mucho."- Pensó mirando a un lado pensativo. -¿De... verdad te arrepientes de... lo de Natsumi?- Le preguntó.

    -Nunca me había arrepentido tanto de algo en toda mi vida, te lo juro. Me arrepiento de casi haberte engañado, y de no decirte que iba a beber con mis amigos, y de no haberte dicho nunca más que quería otro hijo, y...-

    -¡Mamoru, ya entendí!- Le detuvo medio riendo por lo rápido que hablaba. -Está bien... te perdono.- Le dijo finalmente. Endou se sorprendió y lo miró. La gente alrededor, incluso la dama de la recepción, los miraban enternecidos. Endou puso una sonrisa muy alegre y se lanzó a abrazarlo.

    -¡Gracias, Ichirouta! ¡Te amo! ¡Te amo!- Gritaba halándolo hacia él abrazándolo con fuerza.

    -¡Mamoru, calma! Jaja...- Decía Ichirouta riendo por lo loco que podía ser su marido.

    -Ehem...- Emitió alguien desde atrás, cuando los dos miraron, se trataba de un hombre alto, moreno, de cabellos color crema y largos en una coleta baja y ojos negros. -¿Me buscaban?-

    -Gouenji.- Dijeron los dos. Ichirouta se le acercó y lo miró serio.

    -Vine... perdón, venimos.- Dijo mirando de reojo a Endou.- Venimos a preguntarte algo, pero... es mejor en privado.- Le dijo.

    -Pues, vamos a mi oficina.- Les dijo. Ellos lo siguieron. Los guió hasta una oficina que tenía su nombre en la puerta. Entraron y Gouenji se sentó en su escritorio. -Bien, ¿Qué querían preguntarme?-

    -Gouenji, respóndeme con claridad.- Le pidió Ichirouta. -¿Qué pasó, exactamente, con nuestro hijo hace 14 años?- Le preguntó serio. Gouenji se sorprendió ante la pregunta.


    ···


    En casa de Shindou, él estaba en su habitación, acostado en su cama. En la noche cuando llegó, pasó algo, que hasta esa hora, aun no había podido dormir, sólo mirando hacia el techo pensativo.


    Flashback - PV Shindou Takuto.


    Llegué a casa muy alegre por lo que pasó esta tarde. Estaba tan feliz, que no podía evitar sonreír mientras cenaba con mis padres. Ellos me miraban extrañados, preguntándose por qué estaba tan feliz.

    -Takuto, ¿Pasó algo hoy en la escuela? Te vez muy animado.- Me preguntó mi madre; una dama hermosa y dulce, su cabello muy igual al mío pero más largo, y ojos negros.

    -No en la escuela, fue esta tarde, en casa de Kirino.- Le dijo alegre luego de pasar la comida. Mi padrastro puso una expresión seria al oír ese nombre.

    -Ah... Kirino.- Dijo igual de serio. Él está conmigo desde que tengo memoria, pero nunca fue un verdadero padre para mí, así que no lo trato como tal, sino de respeto por los mayores, como "Señor". -Ese niño de verdad no me trae buena espina.- Dijo. Yo me enojé, no quiero que ese viejo hable mal de Kirino.

    -Vasta, Amor.- Le regañó mi madre. Hasta para regañar era le persona más dulce. -Y ¿Qué pasó con Kirino-kun?- Me preguntó, miré al señor un momento, para luego sonreír algo malicioso.

    -Le declaré mis sentimientos hoy.- Dije directamente, mirándolo a él de reojo. Él escupió un poco de comida, ahogándose con ella. Se sobresaltó al oírme decir eso. Sé de sobra que es muy homofóbico. Mi madre le ayudó a pasar la comida con la que se ahogó. Me sonrió

    -Mi amor...- Dijo mi madre dulcemente. Ella ya sabía que yo amaba con todo el corazón a Kirino, y lo aceptaba bien.- Estoy tan-...-

    -¡Decepcionado! De ti.- Respondió mi padrastro interrumpiéndola a ella. -Esto es lo más decepcionante que nos has dicho, Takuto. ¿Por qué te interesan los hombres? ¡Y más ese crío travesti!-

    -¡CÁLLATE!- Le interrumpí levantándome de la mesa. -¡No quiero que hables así de MI novio!- Le dije para que se molestara más, verlo molesto me gusta, aunque sea peligroso a veces.

    -No puedo creerlo...- Decía él gruñendo. -Esperaba grandes cosas de ti, Takuto. ¿Y ahora me sales con que...? ¡¿Con que eres Gay?!- gritó molesto también levantándose de la mesa.

    -Ya fue suficiente, los dos.- Nos interrumpió mi madre. -Es la hora de cenar, ¿Podrían comportarse, por favor?-

    -Lo siento, mamá. No planeaba decírtelo hoy, ni mucho menos frente a... él.- Dijo mirando con repugnancia al viejo. -Yo quería decírtelo a ti, mañana, cuando él no estuviera, y traer conmigo a Kirino para que te dijéramos juntos.-

    -No puede ser.- Dijo él gruñendo más por lo bajo.

    -No te metas, esto no te incumbe.- Le dije serio.

    -Deberías tratarme con más respeto, Takuto. Yo soy quien te ha dado todo.-

    -¡Porque te lo pide mi madre! ¡No sé qué haces pretendiendo ser mi padre cuando ni siquiera me quieres!- Le grité, lo cual los sorprendió a ambos. -Ya terminé. Gracias por la comida.- Dije para luego irme de allí. Qué suerte que terminé mi comida antes de ponerme a discutir, sentía que me darían nauseas.

    Poco después mi madre fue a mi cuarto. Yo estaba llorando por las cosas malas que él dijo sobre Kirino, no quería que nadie hablara de él así, y menos frente a mí. Ella me encontró llorando y me abrazó. Nos sentamos en mi cama y charlamos. Dejé de llorar para contarle todo lo que pasó.

    -Aw~... Pareció una telenovela.- Dijo ella algo sonrojada y enternecida. -Y ¿Qué crees que piensa Kirino-kun?-

    -Creo... No lo sé, él es muy impredecible, puede pensar cualquier cosa.- Dije pensando en él, en lo mucho que lo quiero. No evité sonreír o sonrojarme.

    -Yo espero que sean muy felices juntos, amor.- Me dijo ella acariciándome en cabello.

    -Gracias, mamá.- Le dije abrazándola. -Mamá... ¿Por qué te casaste con ese tipo?- Le pregunté de pronto. Realmente a ella no le gusta mucho hablar de eso.

    -Bueno... Es lo obvio, Takuto. Lo amaba. Tu padre biológico, como sabes, murió cuando naciste. Y me dijo que no me quedara a cuidarte sola, por lo que me dijo que Suisenji me iba a cuidar. Fui enamorándome de él, y cuando cumpliste un año, nos casamos.- Me contó. -Takuto, sé que parece que no te quiere, pero él te quiere proteger, y quiere lo mejor para ti. Sólo que no sabe demostrarlo.-

    -Si de verdad me quisiera, me apoyaría en algo que me importa tanto como Kirino, como lo haces tú. Pero no...- Decía molesto.- Sólo piensa en lo que él cree que es correcto.-

    -Lo sé.- Dijo ella levantándose de mi cama. -Bueno, cariño. Es mejor que te duermas, mañana vas a la escuela.-

    -Ah, cierto. Mañana Kirino podrá ir a clases, y al menos a ver la práctica.- Dije sonriendo.

    -Jujum... Mándale mis saludos, y mis bendiciones para los dos.- Me dijo. Ahí se acercó a mi cara. -Buenas noches. Te quiero.- Dándome un beso en la frente.

    -Buenas noches, yo también te quiero.- Dije arropándome. Ella salió del cuarto, pero me quedé despierto mirando al techo.



    End Flashback.


    Pensando en aquello, Shindou consiguió algo de sueño, pero no lograba apartar de su mente que su padrastro no lo aceptara. Quería que lo apoyara, aunque no lo dijera, le importaba su opinión. Logró quedarse dormido poco después, a las 12:43am.


    ···


    Esa noche, en las calles, caminaba una persona con una chaqueta con capucha, con la cara cubierta. Éste caminaba con las manos en los bolsillos. Caminó frente a una residencia que él conocía muy bien.

    En una ventana del segundo piso, estaba recostado Tsurugi Kyousuke, mirando al cielo pensativo. No tenía sueño, sólo pensaba en lo que pasó ese día, deseaba no haberle dicho a Tenma que no le gustaba, si era todo lo contrario. En ese momento vio pasar en la otra acera al frente de su casa a ese encapuchado. Por un segundo pensó que se parecía a Tenma, por su media estatura.

    -No puedo creerlo, ya estoy alucinando con Matsukaze.- Dijo bajo, estregándose los ojos. Ahí volvió a mirar, y vio que ese encapuchado miraba hacia su ventana de reojo. Cuando él notó la mirada de Tsurugi, volteó rápidamente. -"¡No puede ser!"- Tsurugi se sorprendió, para luego alejarse corriendo de la ventana. Tomó una chaqueta, ya que estaba sólo en pantalones y sin camisa, y salió de la casa rápido, pero sin hacer ruido. Vio que el encapuchado trató de seguir su camino, pero no quiso eso. -¡Espera, no te vayas!- Le llamó corriendo hacia él. Esa persona trató de correr al oír el grito de Tsurugi, pero Tsurugi logró tomarlo por la muñeca. -Espera.- Le ordenó. El chico se quedó quieto un momento, pero mirando hacia al frente, no a él. -¿Qué haces afuera tan tarde,- Decía acercando su mano a la capucha y quitándola lentamente. -Matsukaze?- Preguntó, mirando los cabellos castaños del chico. Él volteó lentamente, mirándolo a él de reojo.

    -Yo... salí a dar un paseo de noche.- Dijo bajo, mirando hacia el suelo. Tsurugi lo soltó. Quedaron en silencio un momento. Tenma tenía una expresión algo decaída.

    -Ya, di la verdad, Tenma. ¿Qué haces en la calle a estas horas? Es más de media noche.- Le dijo algo preocupado, algo no muy típico de él. Pero no había nadie, así que...

    Tenma quedó un momento en silencio, sentía la mirada de Tsurugi sobre él, lo cual lo ponía un poco nervioso.

    -Tsurugi...- Le habló de pronto. -¿Por qué... por qué no te gusto?- Le preguntó un poco triste. Tsurugi lo miró un momento.

    -No respondiste mi pregunta.-

    -Responderé la tuya si respondes la mía.-

    -Ah-...- Iba a hablar, pero mejor le seguía la corriente.- Hum... de acuerdo. Escucha, no me gustas y ya, Matsukaze. Me agradas, sí, pero... no de ese modo.- No sabía por qué decía esas cosas, más a él, si sabía que más que quererlo, lo amaba, más de lo que él mismo pensaba. Tenma bajó la mirada aun más triste, lo cual le molestó a Tsurugi.

    -No te creo.- Le dijo Tenma igual.

    -¿Ha?- Emitió Tsurugi sorprendido.

    -Sé que yo te gusto, lo sé.- Decía Tenma muy seguro, mirándolo de frente. -Porque he visto que haces cosas conmigo que no haces con los demás, como seguir mis temas de conversación, aunque para ti sean aburridos, para no lastimarme. Y ¿Sabes qué? Yo creo que me dices esto para no herirme en algún momento siendo... siendo novios.- Decía sonrojándose un poco por esa palabra. Tsurugi quedó sorprendido de que Tenma adivinara sus intenciones tan pronto, eso sí que lo asustaba.

    -¿Cómo...?- Decía Tsurugi sorprendido de que él supiera tanto.

    -Si es eso, no debes preocuparte de lastimarme. Todas las parejas pasan por problemas, y si así es, pues peleemos, no le veo problema. Tarde o temprano estaremos juntos otra vez.- Dijo mirándolo muy tranquilo, algo que hacía sentir raro a Tsurugi... era como si hubiesen cambiado de papeles; Tenma le podía intimidar, pensaba. Pensó un poco sobre eso, tal vez sí podría darle una oportunidad de ser algo más, y ver qué tal les va. Miró a Tenma a los ojos.

    -Pues... supongo que... es verdad, también me... gustas...- Decía con algo de dificultad. -Pero no sé si sea lo correcto.

    -Claro que es correcto.- Dijo Tenma sonriendo un poco. -Porque si me gustas, y yo te gusto, entonces está bien.- Dijo muy seguro.

    -Hum...- Emitió inseguro, miró a los ojos de Tenma, adoraba esos hermosos ojos grises azulados. Él sonrió, lo cual lo hizo estar un poco más seguro. -Bueno... creo que está bien.- Aceptó finalmente, sonriendo un poco. Tenma sonrió más, acercándose a él y abrazándolo. Tsurugi correspondió el abrazo de inmediato. -Te amo, Matsukaze.- Le susurró. Tenma al oírlo se sorprendió ligeramente. Se sonrojó un poco, pero lo abrazó más fuerte por lo feliz que se puso.

    Pasando el rato, Tenma le dijo a Tsurugi que mejor se iba a casa, ya que podía ser peligroso seguir allí. Tsurugi pensó un poco; A pesar de saber lo suficiente, a Tenma le podían hacer algo malo en la calle tan tarde.

    -Bueno, Adiós.- Dijo él.

    -Espera.- Le dijo Tsurugi. Tenma volteó hacia él. -Creo que es muy tarde para que estés en la calle sólo.-

    -Tsurugi... ¿Me estás pidiendo que...?-

    -Ahm... ¿Quieres quedarte por esta noche en mi casa?- Le preguntó mirando a un lado. Tenma sonrió ante eso.

    -Pues...- Iba a decir, pero entonces su teléfono sonó. -¿Hola?-

    -¡Tenma! ¡¿Dónde estás?! ¡¿Por qué no estás en tu cuarto?!- Se oía a Aki preocupada del otro lado.

    -Ah, Aki-nee... Lo siento, no quería preocuparte. Salí un momento porque tenía algo qué hacer.-

    -Pero Tenma, ¿Tienes una idea de la hora que es? No debes estar en la calle tan tarde.-

    -Jujum...- Rió ligeramente, porque eso mismo le había dicho Tsurugi. -No te preocupes. Tsurugi me dijo que me puedo quedar en su casa hoy. ¿Está bien?- Dijo mirando a Tsurugi, lo cual indicaba que aceptó.-

    -¿Ah? ¿Tsurugi? ¿Acaso él no...?-

    -No, ya todo está bien.-

    -Bueno. Ten mucho cuidado, pero mañana tienes clases, ¿Cómo harás con tu uniforme?-

    -Puedo levantarme temprano y lo voy a buscar.-

    -De acuerdo. Está bien. Que tengas buena noche, y ten mucho cuidado.-

    -Claro. Adiós.- Dijo Tenma finalmente para colgar.

    -Entonces, te quedas.- Comprendió Tsurugi. Tenma asintió.

    Ahí fueron hasta la casa de Tsurugi. Llegaron, y como no había nadie despierto, entraron tranquilamente. Fueron hasta el cuarto de Tsurugi y él cerró la puerta. Tenma vio cuando él se quitó su chaqueta, quedando con el cuerpo descubierto. Ver el perfecto cuerpo de Tsurugi lo hizo sonrojar un poco. Tsurugi se sentó en su cama y lo miró.

    -Tendrás que dormir conmigo.- Le dijo. Tenma pasó saliva nervioso, ¿Tendría que dormir al lado de ese perfecto abdomen? No resistiría. Miró para otro lado.

    -E... Está bien.- Dijo. Ahí se quitó la chaqueta que él traía, quedando en una camiseta blanca. Fue al lado de Tsurugi y se sentó junto a él. Miraba al suelo algo nervioso con la chaqueta en sus manos.

    -Oye...- Le llamó. -Al final, no me respondiste qué hacías en la calle a esta hora.-

    -Hum...- Pensó un poco, lo que iba a hacer no era algo que cualquiera haría.- Iba a tener un "Accidente".- Dijo, lo cual Tsurugi sobrentendió de inmediato.

    -Matsukaze, ¿Estás loco? ¿Por qué?- Preguntó Tsurugi preocupado.

    -Porque...- Decía pensando.- Ya tú lo sabes...- Dijo bajo.

    -Matsukaze...- Susurró. Eso se debía al rechazo, estaba claro. Qué débil emocionalmente era Tenma. -Por Dios, Matsukaze. ¿De verdad te ibas a suicidar por... un rechazo?- Tenma se encogió de hombros, no es que lo haya pensado mucho. Ahí buscó en el bolsillo de la chaqueta, y sacó una carta.

    -Iba a dejarte esto,- Dijo con la carta en la mano. -quería que fueras el que lo supiera, y si acaso se lo decías a los demás. Pero, supongo que ya no hace falta.- Dijo más tranquilo. Iba a romperla a la mitad y en pedazos, pero entonces Tsurugi se la quitó. -¡Hey!- Tsurugi la abrió y la leyó.

    -A ver...- Comenzó a leer, y a cada palabra se sorprendía más. Quería reírse, de esas cosas que puso Tenma en ese Testamento.

    -¡Tsurugi, dámela!- Le gritó tratando de tomarla, pero Tsurugi la alejó de él y siguió leyendo. Estaba entre reír y llorar, por la forma como él escribía esas cosas.

    -Woa...- Dijo él sonriendo sorprendido. -¿Esto es en serio?-

    -Eh... algo así. Lo que hice ahí fue desahogarme.-

    -Aquí me dijiste a mí unas 6 veces "Te amo". Escribes como poeta.- Le dijo Tsurugi mirándolo sorprendido. Tenma sólo se volvió a sentar y miró a otro lado avergonzado.

    -No puedo creer que lo hayas leído... qué vergüenza.- Susurró cerrando con fuerza los ojos. En ese momento sintió a Tsurugi agarrarlo y darle la vuelta para abrazarlo. -Tsurugi...-

    -No quiero tener que responderlo tantas veces como tú lo dijiste en ese Testamento, pero supongo que esto lo compensa.- Le dijo soltándolo y agarrándole la cara. -Yo también te amo... Tenma.- Le dijo dulcemente, antes de unir sus labios en un beso.

    Tenma se sorprendió, y se sonrojó furiosamente por eso, y por que, al fin, lo llamó por su nombre. Pero a los segundos, lo correspondió. Ahora que lo pensaba, ese era su primer beso; su primer beso fue con la persona que más amaba en el mundo. Se separaron al momento. Tsurugi miró el rostro sonrojado de Tenma, sus ojos brillantes, su piel tan tersa, su expresión tan inocente. No pudo evitar besarlo una vez más, esta vez metinedo un poco su lengua. Tenma lo correspondió igual, se sentía tan raro, su primer beso fue muy intenso para ser él, y eso que apenas comenzaba...

    Tsurugi poco a poco fue intensificando el beso. Tomó los hombros de Tenma y lo empujó lentamente a la cama. Al separarse otra vez, Tsurugi estaba encima de Tenma, mirándolo fijamente.

    -Tsurugi, yo no...-

    -Es tu primera vez, lo sé... Pero de verdad no lo puedo resistir.- Dijo acercándose a su cuello. Lo besó y le hizo una ligera marca roja. Tenma soltó un suave gemido. -De verdad te amo... Me gustas tanto...- Decía siguiendo con su labor, escuchando esos ligeros sonidos que provenían de los labios de Tenma. -Quiero que seas mío totalmente.-

    -Ahh... Pero...- Decía Tenma apenas. Logró tomar los hombros de Tsurugi y lo apartó un poco. -De verdad no me siento listo. No creo que sea el momento.- Tsurugi lo miró un momento; no quería obligarlo a nada, pero no podía aguantarlo, pero... Era una gran guerra de decisiones inconclusas.

    -Yo... no quiero presionarte.- Dejo alejándose un poco. Quedaron un momento en silencio. Tsurugi sabía perfectamente que lo que iban a hacer era muy serio, pero en serio quería a Tenma totalmente, que sintiera física y emocionalmente cuanto lo amaba. Pero esa no parecía le mejor forma de demostrarlo.

    Tenma miró a la entrepierna de Tsurugi un segundo; había un pequeño bulto allí. Qué rápido se había excitado. Pensó por un momento que tal vez... sólo tal vez, no sería tan malo. Miró un momento a Tsurugi a los ojos.

    -Creo que... podríamos hacerlo... por esta vez.- Dijo mirando a otro lado sonrojado. Tsurugi sonrió un poco, de que Tenma le permitiera tenerlo por esa noche. Se le acercó y lo besó, así como estaba sentado. Tenma se comenzó a quitar su camiseta, apartándose un segundo de él y volviendo a unirse. Cayeron en la cama. -Sé gentíl conmigo, por favor.- Le pidió.

    -No tienes que decírmelo.- Dijo antes de continuar.-

    Sólo Dios y la luna saben lo que ocurrió dentro de esa habitación esa noche.


    ···


    En el hospital, Gouenji aun estaba sorprendido por la pregunta que le hizo Ichirouta, mientras Endou tenía una mirada seria, pero preocupada a la vez.

    -¿Y bien?- Preguntó Ichirouta mirándolo fijamente. Gouenji pensó un poco.

    -¿Por qué preguntas eso tan de repente, Kazemaru?- Le preguntó.

    -Estuve toda esta noche investigando, y sólo falta que tú me digas lo que te pregunté para estar seguro. ¿Qué pasó con mi hijo exactamente, Gouenji Shuuya?- Dijo muy serio Ichirouta. Gouenji lo miró sorprendido un momento; hace muchos años que no lo veía tan serio.

    -Bueno, escucha, Kazemaru. Ese día, tú estabas inconsciente, y Endou no estaba aquí.- Comenzó a relatar. -Cuando lo sacamos de tu vientre, lo dejamos en observación para ver por qué había muerto. Cuando te dieron de alta, pasaron algunos días, y los doctores y las enfermeras, ninguno conseguíamos las razón de que hubiera muerto. En eso la máquina de nivel cardíaco comenzó a sonar. Todos quedamos impactados. Fue tan extraño. Lo entubamos para darle oxigeno y sueros, y poco a poco recuperó la salud. Le dimos vitaminas para que mejorara. Pasó un año y se había mejorado por completo, a pesar de que no alcanzó ni los 7 meses en tu vientre.- Relató. A pesar de ya haber tenido una idea, Ichirouta estaba estupefacto, ni siquiera conseguía respirar bien.

    -Y...- Comenzó a decir con la voz entrecortada. -¿Tú sabes dónde está ese niño ahora, y quién es?- Gouenji asintió. -Y... ¿Por... por qué no... me lo dijiste antes?- Preguntó tembloroso, con tanta furia contenida que estaba a punto de golpear a Gouenji, si no es porque aun tenía que preguntarle más cosas.

    -Lo siento, es que... no sabía cómo decirles.- Decía Gouenji algo nervioso, pero lo ocultaba bien. -Adremás, estando recién atendido psicológicamente, eso habría sido un poderoso impacto a tu corazón.-

    Ichirouta comenzó a soltar lágrimas; ahora sí que lo había logrado, estaba volviéndose un tornado de sentimientos. Felicidad, tristeza, rabia, furia, alegría, confusión, locura, todo a la vez.

    -Y... ¿Quién lo llevó a SunGarden?- Preguntó para estar completamente seguro.

    -Fue... ¿Espera, cómo sabes eso?-

    -Te dije que estuve investigando. Fue Hiroto, ¿No es así?- Preguntó. Endou lo miraba todo sin decir nada, no quería opinar nada que no supiera, sólo escuchar.

    -Ahm... sí.-

    -Y tú fuiste el que se lo dijo... ¿No? Que había un niño aquí sin padres... ¿Verdad?- Le preguntó aun llorando, y ahora con más esperanzas.

    -Sí.- Gouenji hablaba bajo, tenía algo de pánico, pero se intentaba calmar.

    -Algo más... ¿Cómo se... llama?-

    -Eh... creo que aquí sólo le pusieron nombre y no apellido. Se llamaba Ranmaru, su cabello era rosado y los ojos azules. Era un hermoso varón cuando fue sanando.- Le contó Gouenji. Ichirouta estaba inmóvil. Miró a Endou, quien sonreía un poco. Para luego los dos sonreír más y abrazarse.

    -Mamoru... ¡Mamoru, Kirino sí es nuestro hijo!- Decía Ichirouta llorando de alegría.

    -¡Lo sé, no puedo creerlo!- Decía Endou también alegre, soltando algunas lágrimas.

    -Jujum...- Reía ligeramente Gouenji, mirando a los dos alegres.

    Poco después de esa gran noticia, ellos decidieron ir a casa. 'Es bastante tarde.', les dijo Gouenji. En el camino de vuelta, Ichirouta fue en el asiento de copiloto y Endou conducía, a un paso lento, para calmar las cosas. Endou no había visto a Ichirouta tan feliz desde hace años. Hablaron durante todo el camino de las cosas que harían de ahora en adelante con Kirino, y también de cómo harían para decírselo. La verdad no es tan común llegar y decirle a alguien 'Oye, tú eres mi hijo'. Decidieron sentarse a hablar con él con calma, aunque no sería tan sencillo. Llegaron a casa y entraron. La mujer de cabello castaño rojizo y las latas ya no estaban. Ichirouta sonrió ligeramente, y Endou por ende también.

    Fueron a ducharse cada uno y fueron a su cama, se acostaron y se quedaron mirándose un rato.

    -¿Estás feliz?- Le preguntó Endou.

    -Esa es una pregunta muy estúpida, Mamoru. Está claro que no...- Endou lo miró raro. -¡Estoy más que feliz, me siento increíble!- Dijo feliz levantándose un poco apoyándose en sus codos. Endou rió un poco, entonces vio los ojos de Ichirouta; se veían brillantes y alegres, algo que hace tanto no veía. Ichirouta lo miró un momento con una pequeña sonrisa, algo diferente a la anterior.

    -¿Qué?-

    -Hum...- Emitió acercándose a él. Se posó sobre Endou y los besó apasionadamente. Se levantó de encima de Endou y se quitó la camisa. Ahí se acercó a su oído. -¿Qué te parece si lo hacemos hoy, Mamoru?- Le preguntó susurrando. Lo besó y le mordió la oreja.-

    -Hum~... Hace mucho que no cambiábamos de papeles...- Dijo Endou haciendo ligeros sonidos de placer. Se levantó un poco y se quitó la camisa él también. Ichirouta lo volvió a besar, haciendo que cayera nuevamente a la cama. Tocaba su abdomen, acariciándolo y haciéndole sentir mucho placer.

    Esa noche, fue pasional para varios, y mejor sería el día siguiente... o al menos eso esperaban.


    ···


    ·Continuará...·

    En el siguiente capítulo:

    Ichirouta y Endou tienen que decirle la verdad a Kirino, pero ¿Cómo? ¿Tenma de verdad quería decirle adiós a la vida? ¿Cómo le irá a Kirino cuando descubra la verdad?

    La verdad se descubrirá en los capítulos finales de Encuentro del Destino: “Secretos y Misterios (Parte 2)"



    By: Utatagi.
    To: My Fans~

     
    Top
    .
  13.     +1   -1
     
    .
    Avatar

    mariposa azul
    Image and video hosting by TinyPic

    Group
    Member
    Posts
    69
    Location
    donde la alegria irradia el corazon

    Status
    Offline
    Que alegria kirino si es hijo de kazemaru
    me dieron ganas de matar a endo por lo q le hizo pero fue tanta mi alegria q ya se me paso el enojo
    ME PREGUNTO COMO SE LO DIRAN A KIRINO????








    FELIZ AÑO NUEVO PARA TI TAMBIEN NO TENGO AMIGOS AQUI PERO TE CONSIDERO COMO MI PRIMER AMIGA


    CLARO SOLO SI TU ME ACEPTAS COMO AMIGA. :)
     
    Top
    .
  14. Utatagi Odori
        +1   -1
     
    .

    User deleted


    QUOTE (lytaly @ 1/1/2015, 20:38) 
    Que alegria kirino si es hijo de kazemaru
    me dieron ganas de matar a endo por lo q le hizo pero fue tanta mi alegria q ya se me paso el enojo
    ME PREGUNTO COMO SE LO DIRAN A KIRINO????








    FELIZ AÑO NUEVO PARA TI TAMBIEN NO TENGO AMIGOS AQUI PERO TE CONSIDERO COMO MI PRIMER AMIGA


    CLARO SOLO SI TU ME ACEPTAS COMO AMIGA. :)

    ¡OMG! Mi vida, ¡claro que te quiero como amiga! Sólo debes decirlo y ya, es simple... xD
    Y yo sabía que se les iba a pasar el enojo con eso, pero de verdad, es que Endou estaba medio curdo y... como es un dorama quería darle ese toque "picante". Y de hecho, iba a ser un lemos de él y la puta, pero LA ODIO TANTO que no le iba a dar el gusto, y no sabía cómo hacer que ichi llegara al cuarto y los viera tirando como si nada... wn.
     
    Top
    .
  15. takuran
        +1   -1
     
    .

    User deleted


    me alegra que por finalmente kirino de verdad sea el hijo de Ichirouta y Endou
    Ichirouta y Endou tienen que decirle la verdad a Kirino, pero ¿Cómo?
    pero ahi viene la par mas complicada espero que todo salga bien
    ¿Tenma de verdad quería decirle adiós a la vida?
    okay eso ya es una locura solo por ser rechazado pero en cierto modo me alegra que hayan acabo juntos
    ¿Cómo le irá a Kirino cuando descubra la verdad?
    bueno como ya dije ahi viene lo mas dificil ojala salga todo bien
    poe eso pon conty pronto onegai
    sayo
    :=WORKIN:
     
    Top
    .
63 replies since 11/8/2014, 17:35   4024 views
  Share  
.