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itziritha
.User deleted
oh por dios
nunca crei que shikamaru pudiera reaccionar asi
espero muy pronto la conty
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Alex-kun .
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INCREÍBLE! Me encanto ,estaba bastante preocupado por ti pero me alegra que estés bien aunque muy ocupada jejeje me fascina la manera en que Sasuke comienza a tratar a Naruto es realmente tierna espero que todo empiece a ser mucho mejor para esos 2. Quedé absolutamente sorprendido por la manera en que Shikamaru trató a Naru me sentí muy mal por como lo llamó. En resumen me encanto el capítulo no puedo esperar la continuación, eres verdaderamente buena escribiendo.
Feliz año nuevo (atrasado)
un gran abrazo
Alex-kun
pd: entiendo que estes ocupada pero porfavor no tardes mucho en actualiza. -
mikouchimaki .
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Ohayoooooooooo, ¿Qué tal llevan este año? ¿Yo? Muerta de examenes.
*Mikoto y Shikamaru hacen aparición*
Shikamaru: Hola venimos aquí para decir que esto es muy problematico, por culpa de mikouchimaki. ¬¬
Mikoto: Vamos a ver, yo soy una mujer amable y buena, pero esta chica me esta dejando como la peor, con lo adorable que es mi Naru-chaaaaaan *w* Es tan kawaiiii...
Shikamaru: En fin, pues eso, que no nos odien, odien a la escritora por ponernos con estos papeles.
Mikoto: *En su mundo* Me encantaría grabarlos en la cama *¬*Cita bajo la nieve, ttebayo
Shikamaru aún no puede olvidar la cara de terror que mostró el doncel cuando se fue corriendo de la clase. Y nunca lo olvidaría. Esa noche, fue con su moto a un prostíbulo a las afueras, y se folló a una chica y a un doncel, ambos rubios con ojos azules.
A la mañana siguiente, Naruto se había levantado temprano para ir al aeropuerto a despedir a Ino, allí se había encontrado con todos menos con Shikamaru. Lo agradecía, apenas durmió toda la noche entre lágrimas. Sasuke no había despegado la vista de su persona desde que llegó, posiblemente no conociera del todo al doncel, pero sabía que la sonrisa que ahora mostraba no era una sonrisa verdadera.
¿Qué te pasa?- Preguntó el Uchiha mientras escondía levemente su rostro en su bufanda roja.
Sasuke…- Su nombre en los labios de Naruto le pareció una delicia.- ¿Puedo preguntarte algo, ttebayo?
Si digo que no, ¿No preguntarías?- La boba pregunta retumbó en los oídos de Naruto que lo fulmino deprisa con la mirada, mientras Sasuke sólo esbozaba una media sonrisa.- Sabes que eres impulsivo y curioso, pregunta de una vez.
Cuando te gusta alguien, y esa persona te gusta mucho, está bien ocultar tus sentimientos ¿Verdad?- Antes de que el rubio acabara de vocalizar la última palabra, Sasuke lo interrumpió.
Ocultar es lo mismo que ignorar.- Y yo lo sé bien, he intentado ignorar lo que siento por ti Naruto, pero eso es imposible… Aunque por lo que veo, amas a otro.- Si el mundo acabara mañana, ¿No te morirías arrepentido?
Sasuke…- La cara de Naruto se lleno de un leve carmín, ciertamente no pensaba que Sasuke fuera tan profundo.- Quizás, después de todo, no eres un completo idiota.
Preferiría arrepentirme por hacer algo que no hacerlo.- Comentó Sasuke desviando la vista hacia Sai y Suigetsu que lo miraba con una sonrisa diabólica, este sólo enarco una ceja.- Shikamaru no va a venir ¿No?
Naruto agachó la mirada y guardó silencio. Al momento, llegó Ino con una gran maleta lila llena de sus pertenencias más preciadas, además llevaba un billete de avión en su mano.
Espero que estén bien, no se metan en problemas.- Dijo la chica como toda una madre regañando a sus hijos.
Ino se acercó a Sai y lo abrazó con fuerza. Recordaba cuando era pequeña y estaba enamorada de él, imagino tantas veces como sería su hijo.
Que tengas un buen viaje, te visitaré.- Afirmó Sai con un de sus tantas sonrisas falsas. Ino sabía que este mentía, pero aun así le sonrió cordialmente.
También monta una exposición, mujeriego.- Ino negó con la cabeza acercándose ahora a Suigetsu.
Este la jaló hacia él y la abrazó con fuerza.
Cuida tu salud.- Fue el típico comentario de las películas, acompañado de su típica risilla. Ino se rió con fuerza.
Eres demasiado adorable para ser un casanova. – Ahora fue el turno de Suigetsu de reírse.
Ahora se acerco a Sasuke, pero a este no lo abrazó. Sasuke sólo la miró fijamente.
Prima, ¿De verdad tienes que irte?- La palabra “prima” sorprendió a Naruto, no se imaginaba que Yamanaka Ino fuera prima de Sasuke. Aunque ahora que la miraba bien, le recordaba a cierta rubia tetuda que presento la subasta.- Por eso prefiero a los donceles, no entenderé nunca a las mujeres.
Hace diez años que no me dices prima.- Los ojos de Ino destilaban tristeza y amor a partes iguales.
Deberías sentirte alagada, saluda a esa vieja borracha, Tsunade, por mi.- Ino rió ahora acercándose a Naruto, este la miraba con una gran sonrisa, transmitiéndole una gran alegría.
Ino al segundo lo abrazó, con fuerza.
Naru-chan, eres demasiado kawaii. – Afirmó la rubio apretándolo todo lo que podía contra ella.- Recuerda lo que te pedí.- Dijo susurrándole al oído.
Espero verte antes de la próxima vida, ttebayo.- Ino asintió, alejándose ahora del doncel y poniéndose frente a todos.
Ino miró por última vez uno a uno todos los rostros de sus amigos, y se dio la vuelta. Dolía. Cada paso que daba hacia el avión dolía más. Shikamaru no se había dignado en ir a despedirse. Al parecer, hacerle el amor fue la despedida del Nara. Con lágrimas en los ojos, entró por la pasarela de embarque. Sin mirar atrás. Nunca más miraría atrás.
A partir de ahora dejaría atrás su pasado, para siempre.
Suigetsu negaba con la cabeza viendo la escena, sabía que su amigo se había equivoca de sobremanera, y sabía que se arrepentiría mucho.
Luego dicen que yo tengo un corazón de piedra.- Murmuró Sasuke sarcástico.
Es terrible cuando Shikamaru se enfada.- Comentó Sai, Naruto le hubiera dado la razón pero estaba más atento mirando la puerta por donde Ino ya había desaparecido.
¿No creen que están hablando mucho de mí a mis espaldas?- Pregunto una voz tras ellos.
¿Desde cuando estás aquí?- Pregunto Suigetsu con el ceño fruncido.
Desde hace tres horas.- Shikamaru busco con su mirada la de Naruto pero apenas la encontró. El doncel lo miraba serio, con una mirada vacía, nunca había visto tanta falta de vida en los ojos de Naruto.
Si llegaste antes, ¿Por qué no te despediste?- Bufó de nuevo en de los pelos blancos, su amigo lo estaba poniendo de los nervios.
Entonces, antes de que Shikamaru pudiera hablar, una voz le interrumpió.
¿Qué haces? ¿Es todo lo que vas a hacer?- La voz fría y desafiante del doncel sorprendió a los cuatro.- ¡Ve tras ella! Si ella no puede quedarse, ve tras ella, ¿No dijiste que la amabas, ttebayo?- Shikamaru se puso serio al instante, Sasuke se puso al lado del doncel, sabía bien que a Shikamaru se le nublaba la vista cuando se cabreaba.- Espiando desde lejos, ¿Es tu manera de amar?
Namikaze Naruto…- Shikamaru comenzó a reírse mostrando toda su perfecta dentadura, Naruto apretó los puños, lo que le decía no era no broma para él. Shikamaru abrió su mochila y sacó algo. Un billete de avión.- Me voy en el siguiente vuelo, mi equipaje ya fue documentado, problemático.
Bastardo, tú sí que sabes cómo asustarnos.- Rió Suigetsu quitándole hierro al asunto.
¿Y ese cambio de opinión?- Preguntó Sai interesado, mirando de reojo al rubio.
Todo…- Antes de que continuara, agarró por los hombros a Naruto y lo atrajo a él abrazándolo.- es gracias a ti, Naruto.
Naruto se sorprendió, pero se dejó abrazar y disfrutar del abrazo. Puede que fuera el último abrazo que Shikamaru le diera. Su despedida.
Sin duda, estoy orgulloso de ti.- Dijo Sasuke, rompiendo el abrazo, jalando de la mano a Naruto para que lo soltara. Shikamaru rió ante el ataque de celos del azabache. Él había decidido. Ino era su verdadero amor, y siempre lo será.
Todos los Akatsuki lo abrazaron, incluso Sasuke. Todos se despidieron de él con bromas y risas. Tras acabar agarró con fuerza su mochila, y se puso frente a todos, como hace poco hizo Ino.
Naruto, fuiste el que me hizo darme cuenta de que tengo que ser honesto conmigo mismo.- La sonrisa tan enorme que tenía Shikamaru en la cara hizo que Naruto se diera cuenta de que había cumplido la promesa de Ino. Shikamaru sería feliz. Pero con ella, a su lado.- Me enseñaste a tener valor para rogar algunas veces.- Naruto se quedó en blanco sin saber decir o sentir. Ayer era un perro, pero hoy le había ayudado. No entendía la manera de pensar del Nara.- Agradezco el haber conocido a un doncel como tú.
Antes de irse, le besó la frente con cariño, en señal de perdón. Y Naruto lo aceptó. Posiblemente, fuera la última vez que lo viera.
Tras eso se dio la vuelta y se fue, por la puerta donde Ino acababa de embarcar. Antes de montarse murmuró algo, algo que para ninguno de los Akatsuki tenía significado. Pero si para Naruto.
Hasta siempre, problemático.
Eso pudo leer en sus labios. Y con la sonrisa más radiante que pudo, levantó su mano y se despidió de su primer amor. De una vez, para siempre.…_-_-_-_-_ooO0Ooo_-_-_-_-_...
Sai y Suigetsu se quedaron charlando con unas azafatas de vuelo. En cambio, Sasuke y Naruto se fueron hacia una carretera cercana cerca de la pista de vuelo. Al ser poco transitada, Sasuke se permitió aparcar en uno de los rellanos que sobresalían por los lados. Ambos salieron del coche, y miraron en silencio como el avión donde estaban Shikamaru e Ino comenzaba a despegar.
Sasuke no podía evitar mirar la cara de pena que tenía el rubio, apoyado en su coche, mirando el avión. Algo nervioso, cosa extraña en él, se dejó de apoyar en el vehículo y se puso en frente del rubio, cerca. Muy cerca.
*Bump, bump*
Se acercó al rubio lentamente, este lo miraba serio, y tranquilo. Pronto, el olor a café que emanaba el Uchiha llegó al olfato del rubio, y el olor a batido de fresa que emanaba del rubio llegó a la nariz del azabache. Poco a poco se fueron acercando, ambos. Muy lentamente.
También sus miradas se perdían muy lentamente, en la contraria. Sus labios comenzaron a rozarse suavemente, Naruto impulsivamente juntó sus labios pero tan pronto que los juntó los separó sonrojado.
Sasuke frunció un poco el ceño, apenas pudo saborear el beso, pero sonrió levemente. Era un paso. Naruto le había dado un pico sin estar borracho, ni coaccionado por las circunstancias, ni obligado.
El varón no se alejó. Permaneció quieto, posando cada mano a cada lado del rubio, en su coche.
Naruto Namikaze Uzumaki.- Dijo su nombre entero Sasuke mientras se lamía los labios.
¿Qué quieres ttebayo?- Preguntó Naruto desviando la vista sonrojado.
Escúchame con atención, dobe.- Ordenó el Uchiha.- Sólo lo diré una vez.- Naruto asintió levemente. No entendía los rodeos que estaba dando el azabache, y eso le ponía nervioso.- Tú y yo deberíamos empezar a salir.- Pero las palabras que salieron de la boca de Sasuke apenas se pudieron escuchar.
El avión donde iban Ino y Shikamaru, acababa de volar y un fuerte estruendo se hizo presente. Los oídos de Naruto apenas pudieron escuchar una palabra, pero Sasuke no se dio cuenta de eso, sin más se apartaron, Sasuke le depositó un suave beso en la mejilla y se montó de nuevo en su coche. Todo con una gran sonrisa. Jamás había sonreído tanto. Pero el amor es así. Aunque Naruto lo miraba todo confuso, mientras se subía en el asiento del copiloto.…_-_-_-_-_ooO0Ooo_-_-_-_-_...
El fin de semana pasó deprisa, de nuevo era lunes. Y como todos los lunes a esa hora, Naruto se encontraba engullendo su plato de Ramen, Hinata frente a él tomaba una ensalada y un poco de Coca-Cola. Naruto bromeaba con Hinata del trío de brujas, como las habían denominado. Hacía tiempo que Naruto sentía que tenía a Hinata algo abandonada, así que ahora se centraría en ella, y solamente ella.
Bueno, y en Gaara.
Pronto un escándalo sonó, para variar. Por la puerta entraba Sasuke, con unos pantalones vaqueros negros rasgados, con cadenas, una sudadera gris, con un chaleco negro, y además llevaba un gorro gris que dejaba expuestos algunos mechones azabaches. Sin duda, hoy todas las mujeres y donceles mojaban sus respectivas ropas interiores por él. Sasuke entró deprisa, buscando a alguien con la mirada. Y cuando la halló, fue directo hacia él.
El sábado a las cinco de la tarde, frente a la Torre Namsan, dobe.- En vez de una petición, sonó como una orden. Naruto con la boca llena de Ramen, lo miró sin entender.
Hinata se quedó con la boca abierta, más blanca de lo normal.
¿Nani?- Preguntó Naruto daleando el rostro dándole aire de niño pequeño.
Sasuke bufó, se agachó y beso con rapidez la boca del blondo, dejando a todos, incluido este, anonadados. Naruto agradeció que fuera el final del almuerzo y no había casi nadie.
Si llegas un minuto tarde, estás muerto.- Tras decir eso se dio la vuelta y se fue por donde se había ido.
Naruto agachó la cara sonrojado por el espectáculo que acababan de dar. Podía sentir como muchas mirada se posaban sobre su cabeza con odio, unas más cercanas que otras.…_-_-_-_-_ooO0Ooo_-_-_-_-_...
El sábado pronto llegó, apenas se encontró de nuevo con Sasuke en toda la semana, y el recuerdo de lo sucedido el lunes apenas perdura en su mente, aunque si en la de los demás.
Kushina le había pedido que le dedicara todo el sábado a ella, debido a que pronto serían las rebajas en uno de los supermercados de ropa más baratos de la corporación Senju. Y Naruto lo acepto. Necesitaba ropa al fin y al cabo.
Vamos a ver, abre a las 5 en punto. Toma todo lo que creas que te quede bien.- Ordenaba la mujer en la cola, esperando que el supermercado abriera sus puertas. Naruto sólo asentía nervioso.
¿No es mejor que vayamos juntos?- Preguntó Naruto con angustia, odiaba ir de compra en rebajas. Siempre le acababan tirando de los pelos, y cuando llegaba a casa descubría varios moratones en su piel.
Tengo que ir a la oferta del repollo.- Negó estricta Kushina mientras se agarraba sus rojizos cabellos en un moño alto y desenfadado.- Si te parece complicado la sección de ropa, la de la comida es como la segunda guerra mundial, Naruto.- Naruto lo miró incrédulo, sabía la manera tan exagerada que tenía su madre de hablar.- Una señora junto a mi perdió sus dientes el otro día.- Reafirmo la mujer.- Nuestro presupuesto de tres meses depende de lo que hagamos hoy, ¿Entiendes?…_-_-_-_-_ooO0Ooo_-_-_-_-_...
Sin duda, las compras habían sido una batalla campal. Donceles y mujeres, de diferentes edades, le habían pegado, arañado, empujado, zarandeado y echo de todo durante… ¡Tres horas! Además mirando por la ventana notó como poco a poco comenzaba a nevar, cada vez más fuerte. Ningún loco saldría con ese frío.
Una vez reunido con su madre, cargaron todas las bolsas y comenzaron a andar deprisa.
Debemos apresurarnos, Oto-chan debe estar esperándonos.- Sugirió la mujer agarrando como podía 6 bolsas.- Qué frío, para hacer eso, vayan a un hotel.- Murmuró la mujer.
Frente a ellos una parejita se besaba. Un joven al parecer extranjero, de pelos oscuros y ojos azules besaba a una chica rubia de ojos negros.
Entonces fue cuando su cerebro reacciono.
Sasuke.
¡Había quedado a las 5 con Sasuke, y eran las 8 y media! Lo iba a matar. Pero no podía ser, Sasuke no lo estaría esperando todavía. No, claro que no.
¿Te pasa algo?- Preguntó su madre abriendo un paraguas liliáceo.
Oka-san, ¿Existe alguien que espere casi cuatro horas bajo la nieve, por una promesa que no fue del todo hecha?- Kushina se sorprendió por la tan extraña pregunta realizada por su hijo.
No creo, a no ser que sea un testarudo.- Comentó Kushina encogiéndose de hombros.
Ese teme es un testarudo sin duda…- Murmuró el rubio.- Oka-san, vuelve antes a casa, tengo que comprobar algo.
Y soltando las bolsas, Naruto echó a correr bajo la fría nieve, sintiendo como cada copo caía en su piel, empapándolo. De fondo escuchaba a su madre quejándose sobre qué haría con tantas bolsas.
Por el camino se encontró con un paraguas tirado en medio de la calle. Lo abrió y estaba intacto. Era azul claro. Caminó deprisa, menos mal la Torre no estaba lejos. Nada más llegar miró a todos lados nervioso, expectante.
Al segundo lo vio. En un banco, completamente helado. Uchiha Sasuke lo seguía esperando, durante 4 horas.
*Bump, bump*
Con paso nervioso caminó hacia él. En silencio, se permitió disfrutar del rostro pacífico y algo aniñado que mostraba el Uchiha en esos momentos, con los ojos cerrados. Pronto, le puso el paraguas encima, sin importarle que él mismo se mojara.
¿Sabes qué hora es, dobe?- La voz de Sasuke sonó débil, y algo congestionada.
Eso debería preguntar yo, teme.- Bufó Naruto mientras apretaba contra su pelo el gorro rojo de lana que le hizo antes de ayer Kushina y que estrenaba hoy.- ¿De verdad no tienes nada mejor que hacer?
¿No te dije que estarías muerto si llegabas un minuto tarde?- Rechistó Sasuke levantándose poco a poco del banco mientras temblaba.
¿Cuándo prometí que vendría?- Bufó Naruto desafiante. Odiaba esa parte autoritaria del Uchiha.
Estás aquí ahora.- Quiso sonreír de medio lado, pero apenas le salió una mueca.
Bueno… Eso es... Porque…- Naruto se mordió la lengua, acercándose un poco a él inconscientemente.- Vine a comprobar si estabas aquí, pero, ¿Qué hubieras hecho si yo no hubiera venido?
De todos modos, viniste, ¿No?- Argumentó el Uchiha también acercándose al rubio. Las antiguas gárgolas añejas miraban la estúpida pelea de estúpidos amantes, sonriendo con sus puntiagudos dientes de piedra.- Además es tu culpa, así que deja de hablar como si hubieras hecho algo bueno.
Naruto lo examino de cerca de nuevo. La chaqueta del Uchiha estaba completamente cubierta de nieve, y al ser negra, destacaba de sobremanera. Además, sus cabellos azabaches estaban mojados de los copos de nieve que se fundían contra ellos. Sasuke temblaba levemente, Naruto sabía que el varón lo hacía para no preocuparle.
Vamos.- Naruto agarró deprisa la mano del Uchiha y lo jaló hacia la Torre.- Te compraré una bebida caliente, ttebayo.- Decía mientras intentaba no sonrojarse por tener la mano de Sasuke agarrada. Aunque en sí no se tocaban, ambos llevaban guantes de lana.- Vamos, deprisa, o enfermarás.
De repente, Sasuke trastabilló. Naruto al segundo sintió el peso del varón sobre él. Como pudo lo agarró. Pesaba demasiado, pero al tocar su frente con su mejilla comprobó que el Uchiha estaba ardiendo, y no de pasión exactamente.
Pausadamente, consiguió llegar a la Torre. Sasuke abrió levemente los ojos, y comenzó a andar levemente. Pero aun agarrando la mano del blondo.
Al entrar, Sasuke se sacudió toda la nieve que tenía encima como pudo. Mientras, Naruto fue ligero hacia unas máquinas dispersoras. Abrió su cartera en forma de rana y sacó algunas monedas. Sacó seis monedas de 500 Yenes y lo metió en la máquina.
Yo no bebo esas cosas.- Murmuró Sasuke acercándose poco a poco a él. Y era cierto, en su vida como multimillonario había probado un café que no fuera hecho por uno de los mejores chefs del país, ni que contar de beber un café de máquina.
Sólo calla y bebe, ttebayo.- La voz de Naruto sonó autoritaria y despectiva, nunca lo había oído así.- Es delicioso.
Tras decir eso, una lata de café caliente salió despedido de la máquina. Sasuke, dudoso lo tomó, y abrió. No olía como los que había tomado, pero no olía mal. Además, no podía quedar mal enfrente de Naruto. No quería parecerle un niño remilgado.
Naruto repitió el proceso, sacando otro para él.
Ven, quiero mostrarte algo.- Dijo de repente el rubio, olvidando un poco el estado de salud del Uchiha.
Sasuke lo siguió en silencio. Le dio el primer sorbo al café. Amargo, como a él le gusta. Muy amargo, pero con algo excitante. Pronto le dio otro sorbo.
Entraron en un ascensor que los llevó a la planta más alta de la torre, que él supiera a esas horas estaba prohibido pero no le dijo nada. Pronto llegaron, y la vista lo dejo asombrado. Todo Tokio se veía desde la torre, las luces de la gran ciudad iluminaban el horizonte dándole un aire mágico.
Dobe esto es…- Pronto una ráfaga de aire le hizo estornudar. Aunque ahora no nevara, estaban al aire libre, y las ráfagas de viento azotaban la torre con fuerza.
Hermoso, ¿Verdad?- Preguntó Naruto sentándose en un bordillo al lado de una cabina eléctrica, que al parecer descendía hacia la mitad de Tokio.- Tomarse un café aquí, es como tomárselo en el hotel más caro del mundo, ¿No crees?
Sasuke, lo imitó y se sentó, intentando obviar el frío que le estaba calando a los huesos. Le dio otro sorbo al café.
Al parecer la contaminación lumínica no afecta aquí.- Comentó el Uchiha mirando el cielo serio. Le encantaba las estrellas, siempre quiso estudiar astronomía pero su madre nunca le dejó.
Se ven muy bien desde aquí las estrellas, ttebayo.- Chilló Naruto riendo un poco.
Bueno, en verdad, son satélites, dobe.- Rió un poco contagiado el Uchiha, mientras Naruto se giró a mirarlo con un puchero adorable.
¿Eres tan teme? ¿De verdad piensas que hay tantos satélites?- Preguntó el rubio sin quitar puchero y cruzándose de brazos.
Soy más inteligente que tú, son satélites.- Dijo el azabache condescendiente.
¡Estrellas!- Chilló el rubio cabreado ya por la necedad del contrario.
¡Dobe!- Gritó ya harto.
¡Teme!- Y así una fila de insultos se escaparon de ambas bocas, fueron tales que las gárgolas de piedra que adornaban la Torre quisieron haberse tapado los oídos.
Pero, si en vez de pelear, hubieran estado más atentos a, por ejemplo, la hora en que cerraban la Torre, se habrían dado cuenta, que un vigilante, al no ver a nadie a primera vista y con prisas por que su familia le esperaba en un restaurante. Cerró todas las puertas y apagó todas las luces del reciento.
Volviendo con nuestra pareja protagonista, Sasuke y Naruto seguían peleando sobre las luces que observaban en el cielo, hasta que de repente, las luces de la Torre se apagaron.
Horrorizado, Naruto se levantó de un salto y camino hacia el ascensor por el que subieron. No funcionaba. Sasuke que lo seguía buscó la escalera. La puerta de la escalera también estaba cerrada.
¿Hola? ¡¿Hay alguien, ttebayo?!- Los gritos de rubio le delataron al mayor el miedo de ese.- ¡Hay gente aquí arriba!
Tranquilo, dobe.- Sasuke se acercó por su espalda y le paso un brazo por la cintura atrayéndole a él.- Llamaré a alguien para que nos saque de aquí.
No lo entiendes, no eres doncel.- Rugió el blondo recordando la bronca que se llevó el día de la subasta cuando llegó a casa.- Mi Oto-san me va a matar.
Sasuke lo miró preocupado, entendía al padre de Naruto. Cuando este tuviera un hijo doncel o una hija, no le dejaría dormir en casa de extraños, él entendía su preocupación y su regaño. Tiró la lata vacía en un contenedor que había, mientras con su otra mano se hundía en los bolsillos de su chaquetón en busca del móvil.
Pero nada.
Por más que buscó y buscó no lo encontró.
¿Dónde demonios está mi móvil?- Esa pregunta exasperó más al rubio que nervioso, caminaba de un lugar a otro en busca de una salida viable.- ¿Y el tuyo?
No tengo, ttebayo.- Esa respuesta sorprendió al azabache. Todo el mundo en este siglo tenía móvil, y para todos era como su vida.
¡Esto es el colmo, joder!- Bufó el Uchiha cabreado, ¿Cómo no iba a tener Naruto uno? ¿Y si quería ponerse en contacto con él? ¿Le tendría que mandar una carta como en la antigüedad?- Es tu culpa, usuratonkashi.
¡¿Cómo te atreves?!- Naruto paró su caminata enfrente del Uchiha cabreado.- ¿Quién fue el baka que esperó por horas debajo de la nieve?
No me gusta rendirme.- Fue la escueta respuesta del mayor mientras se encogía de hombros. Una respuesta para él más que valida, pero no para ese doncel.- Además, para tu información es la primera vez que hago esto.- Naruto no llegó a comprender del todo esa frase.
¿La primera vez que espera bajo la nieve? O… ¿Su primera cita? ¿Por qué esto es una cita? ¿O es una quedada de amigos, ttebayo? ¡Joder, Naruto sal de aquí o dormirás con este teme!
Yo…- Naruto se sintió algo idiota al no saber bien que decir, Sasuke suspiró mientras llevaba una de sus manos a masajearse las sienes.
¿Qué vamos a hacer?- Preguntó de nuevo el Uchiha.
Sólo nos queda esperar.- Murmuró el doncel cerrando pesadamente sus ojos.
De repente los abrió y comenzó a caminar apresurado. Sasuke lo siguió. Naruto comprobó las puertas de la cabina eléctrica.
¡Bingo!
Estaban abiertas. Entró deprisa, junto a Sasuke y cerró las puertas. La cabina apenas eran 3 ó cuatro metros. Pero estaba cubierto, y tenía unos asientos verdes para poder sentarse. Todo era mejor que el frío y húmedo suelo.
Sasuke se sentó en uno de los asientos.
Naruto prefirió no sentarse junto a él. No se fiaba mucho aún del Uchiha. Cada vez que estaban solos siempre pasaba algo. La tos fuerte del Uchiha lo sacó de sus pensamientos. Un fuerte sentimiento se puso en su pecho, si hubiera sido puntual ambos no estarían ahí ahora. Y Sasuke no estuviese tosiendo como estaba ahora.
Al final, cedió y se sentó junto a él en el pequeño asiento.
Lo siento.- Murmuró Naruto agachando el rostro.
¿Qué?- Sasuke lo había escuchado perfectamente pero deseaba oírlo de nuevo. Naruto era demasiado tozudo algunas veces, y las pocas que se arrepentía era mejor saborearlas.
Lo siento mucho.- Repitió. Sasuke se giró a mirarlo, pero la mirada del rubio era tapada por su flequillo rubio.- Es mi culpa que pasemos por esto.
Bueno, por lo menos te has dado cuenta.- Intentó sonar sarcástico el mayor, pero su voz sonó más débil y seria de lo que quería.
Pero… es tan raro… que me hayas esperado por tantas horas.- Negaba Naruto convencido de que nadie en su sano juicio haría lo mismo que ese tozudo azabache.- ¿Nadie se preocupó por ti? ¿Dónde está Iruka, o tus guardas espaldas?
Los mande a casa.- Sasuke poco a poco cerró sus ojos. No se sentía bien. Sentía frío y calor. Un frío helador, y un calor sofocante. Todo a la vez.- Quise hacer esto como una persona normal.
No entiendo porque te complicas tanto, teme.- Bufó Naruto, ojalá él tuviera tanta gente que se preocupara por él. Seguro sus padres estaría ahora fantásticamente viendo la tele mientras se calentaban en la mesa camilla, mientras Menma jugaba a algo con su móvil.
O eso pensaba el blondo.
Naruto… ¿Puedo ser sincero contigo?- La voz del Uchiha sonó tan inofensiva que Naruto se extrañó, lentamente se acercó a él.
Sasuke se acercó al rubio, con los ojos entrecerrados, acorralándolo entre el sillón y su cuerpo, echado literalmente casi encima de él.
Naruto…- Cada vez que hablaba Sasuke notaba su boca más pastosa.- Creo que estoy en…- Pero no pudo continuar debido a que las fuerzas le fallaron cayendo todo su peso sobre el doncel bajo a él.
¿Sasuke?- Lo llamó el rubio, intentando como podía, zarandearlo.- Siempre buscas la manera de acercarte tanto a mí, ttebayo.- Intentó molestarlo el rubio para ver si así reaccionaba, pero ni aun así. Sasuke no respondía ni se movía.- Eres un aprovechado, no lograrás nada con esto.- Lo intentó de nuevo, pero nada. Sólo notaba la respiración del Uchiha sobre su cuello.- Pero, ¿Qué le pasa a este teme?
Naruto le dio un fuerte empujón alejándolo de él, pero aun así Sasuke no reaccionaba, como pudo el rubio se incorporó y agarró al Uchiha que se caía del asiento. Al parecer, inconsciente.
Naruto no entendió lo que sucedía hasta que le tocó la frente. Hervía de temperatura.
*Bump, bump*
Sintió como el cuerpo del otro comenzó a tiritar. Notaba como el muchacho estaba helado. Él también tenía frío. Nervioso, Naruto se levantó de un salto buscando en la cabina algo con lo que calentarse. Pero nada, por más que buscaba sólo escuchaba la tos del chico, cada vez más ahogada.
Entonces, recordó que en su mochila llevaba una manta que compró en rebajas. Era muy pequeña, pero serviría para tapar al Uchiha casi en su totalidad. Una vez colocada se sentó a su vera, y con cuidado, puso la cabeza del mayor en su regazo. Los sillones eran incómodos, y con la salud del Uchiha en ese estado, quería que se sintiera lo más cómodo posible.
Estuvo un rato despierto, controlándole la temperatura y que no se moviera mucho en sueños, pero pronto, el sueño le ganó.
Sobre las cuatro de la mañana, abrió Sasuke los ojos lentamente. No sabía bien donde estaba, pero la almohada era blandita. Poco a poco fue reconociendo el lugar, y a la persona que estaba a su vera. No podía creer que Naruto le hubiera cedido la única manta a él, sin que este se tapara con el frío que hacía. Además, este lo había dejado estirarse por todo el sillón y se había ofrecido como almohada, y quedándose dormido en una postura tan incómoda.
Se reincorporó poco a poco, pero su cabeza daba vueltas, así que nada más reincorporarse, se volvió a tumbar. Cayendo sus llaves al suelo.
Espero un poco, se reincorporó, se quitó la manta, y se la puso a Naruto por encima.
Este dobe, es adorable incluso durmiendo. Pensó Sasuke acercándose a su rostro para dejar un suave beso sobre su boca.
Una idea cruzó su mente.
Cogió sus llaves y comenzó a rayar sobre el hierro que estaba al lado del sillón.…_-_-_-_-_ooO0Ooo_-_-_-_-_...
Un hombre, entraba feliz a trabajar hoy. Anoche llevó a su esposo doncel, a comer a un buen restaurante junto a sus hijos, fue una velada inolvidable en familia. Y más, cuando se acostaron los niños y su esposo le dio su regalo de reyes por anticipado.
Dicho hombre caminó feliz, abriendo todas las puertas de la Torre como cada mañana. Justo cuando acciono el ascensor, este subió a la última planta. Como si alguien le hubiese dado al botón después de apagarlo. Curioso subió.
Cuál fue su sorpresa al encontrar una pareja de amantes en la cabina.
Al principio se molestó, pero se quedó prendado por tan tierna imagen.
Le sabía mal, pero pronto comenzaría a llegar gente, y todo se llenaría y pensarían mal de la pareja, así que lentamente despertó al varón. Mejor siempre primero despertar al varón y luego al doncel.…_-_-_-_-_ooO0Ooo_-_-_-_-_...
Sasuke estaba parado al lado de su coche, mirando divertido como Naruto seguía sonrojado. Desde que ese hombre le despertó, y él, respectivamente a su dobe, este había estado sonrojado y pidiendo disculpas al hombre durante todo el rato. Además, de varias maldiciones que también escapaban por su boca.
Venga te llevo, monta.- Ordenó el Uchiha, cansado, sin querer escuchar réplica, pero sabía que con Naruto era imposible.
No, necesito caminar, de todas formas, debo pensar en la excusa que le daré a mi Oto-san, ttebayo.- La voz del doncel salió apenada y triste, Sasuke se sintió culpable se acercó y le depositó un beso en la frente.
Tengo una idea, ya que pasamos la noche juntos, yo debería hacerme cargo de este asunto.- Murmuró el Uchiha agachándose para intentar depositar un beso en los labios contrarios, pero no pudo.
Naruto le dio una patada en la espinilla haciendo que este se alejara por el dolor. Sería un doncel, pero pegaba como un varón. Una cámara captó el momento. Pero no sólo ese, sino varios. El beso en la frente, incluida.
El rubio echó a correr despidiéndose con la mano. Las ideas del Uchiha nunca eran buenas, prefería decirle la verdad a Minato, aunque este lo matara.
Una vez en la puerta de su casa, dudó si entrar, pero se llenó de toda la confianza que pudo y entró.
Nada más entrar, cerró los ojos avergonzado y se arrodillo dramáticamente juntando sus manos.
Gomen.- Repitió varias veces.- Fue mi culpa.
¿Cómo que fue tu culpa?- De repente Kushina se tiró encima de él dándole un fuerte abrazo que lo dejo sorprendido. Minato lo miraba de una forma orgullosa, al igual que Menma. Naruto se quedó congelado sin saber bien que pasaba.- ¿Sabes a quién salvaste el día de ayer?
¡Al heredero del grupo Senju! ¡Uchiha Sasuke!- Gritó Menma también tirándose a abrazarlo.
Salvar al futuro presidente del grupo Senju, es como salvar la economía de nuestro país.- Chilló Kushina ayudándolo a levantar.- ¿Por qué deberías avergonzarte? ¡Te mereces un premio y te lo daremos!
Tachan.- Gritó Minato mostrando a Naruto montones de ropas por todo el salón.
Y no ropas baratas como las que ellos vestían, sino de grandes calidades. Kimonos, chalecos, vaqueros, pantalones, zapatillas… Mucha ropa adornaba el salón, toda era ropa podía valer más que el edificio que alquilaban.
¿Qué pasa?, no lo entiendo.- Preguntaba Naruto sorprendido.
Nos lo ha dicho, cómo se llamaba…- Kushina comenzó a golpearse la frente con su dedo anular, en un intento de recordar.
Uchiha Sasuke.- Le recordó su hijo menor.
El joven Sasuke nos envió todo esto en agradecimiento.- Le explicó la mujer. Naruto abrió la boca de la sorpresa. Había tardado media hora en llegar a su casa, y en esa media hora Sasuke había comprado una docena de ropa y la había mandado a su casa.- Nos dijo que estuviste con él toda la noche, y que no te regañáramos, sólo le estabas cuidando de la fiebre.
Además nos envió ropa a nosotros también.- Murmuró Minato probándose una chaqueta de un traje gris que le quedaba de infarto.- Debe ser la forma de disculparse de los ricos. Además, prometió visitarnos.
Kushina se acercó a su marido, estaba tan hermoso con esa chaqueta. No lo veía con chaqueta de traje desde su boda. Con pasión lo beso, dejando a sus dos hijos asqueados ante la imagen.
Naruto caminó hacia su cuarto. Se sentía mal aprovechar los regalos del Uchiha, pero si les dijese a sus padres que lo quería devolver, estos le matarían lentamente.
Al llegar se miró al espejo. Estaba espelucado pero gracias a su gorro rojo apenas se notaba, su rostro estaba blanco, comparado con su color natural de piel, pero había algo extraño en él.
Una gran sonrisa que no podía quitar de su rostro aunque quisiera.
Ino: Oh, ya no apareceré más, espero que me echen mucho de menos... T.T
Naru: Ya te echo de menos Ino-chan ToT *Se abrazan*
Sasu: ¬¬
Naru e Ino: ToT
Mikouchimaki: En fin, Sasuke no te mueras de celos, a saber si vuelves a ver a Ino o a Shikamaru... xD Otra cosa mariposa, el cap siguiente es muy... Diferente. Digamos que se titula...
Ino: Lo digo yo antes de irme. ¿De verdad perdí mi virginidad, ttebayo?
Naru: O/////O
Sasu: Por fin Lemon *^*
Mikouchimaki: ¿Quién dijo que fuera contigo? n.n
Ino: Antes de que Sasuke mate a Mikouchimaki, me despido. Dejen comentarios que animen a nuestra escritora. ¡Matta nee!! Echenme de menos <3. -
Mg Ca .
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Ame el capitulo, pobre Sasuke, mira que esperar en la nieve por horas. . -
DaraFan ^^ .
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jo jo jo me encanto!!!!!!!!!!!!!!! me lo lei todo !!!!!!!
me facino!me encanto,me enamore !!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
conti por favor !
eres genial :3. -
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Espero la continuacion ansioso, me gusta mucho tu fic 
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monochibi .
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pobre teme esperar tanto jajaja espero conti
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itziritha .
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ame el cap espero muy pronto la conty . -
Adry_black .
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hola
muy bueno el capítulo
me alegra que por fin haya conty
te espero
nos leemos luego
Matta ne
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Alex-kun .
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Hola! El capitulo estuvo genial simplemente fantastico ,me preocupe mucho por ti como siempre espero ansioso la actualizacion ,sigue siendo tan buen escritora
Un abrazo
Alex-kun. -
Marina Suazes .
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Hola me encanta tu trabajo me gustaría ver mas capítulos contó por favor sino me muero 
bueno me encanta tu trabajo adiós. 
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Elizabeth Luna Fujoshi .
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Waaaaa fue fantastico ase tre o cuatro dias lo empecé a leer y me encanta lo copiare y lo guardare en mi compu para recordarlo por siempre y también pondre quien lo iso (para que no seme olvide XD) y lo recomendare y compartiré todos tienen que conocer tu fin (bueno no todos solo los que conosco XD) esperare la conty... . -
mari narufan .
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hola sempai me encanta tu trabajo y porfavor podrias continuarlo esque me muero de emosion quisiera saber quien pierde la virginidad por fa as otro capitulo por fa por fapor fa 
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Cof cof... no es que sea insistente pero ya la continuacion???? ya hace falta 
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mari narufan .
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Esperando mil años por la conti .
¡Lo siento, Teme, pero el dinero no puede comprarme, ttebayo! SasuNaru Prólogo+Cap10 (26/01/15)¿Qué harías si un día cualquiera mientras trabajas en la lavandería de tu padre te manda llevar un uniforme a la escuela más cara del país?¿Que harías si encuentras a tu cliente apunto de suicidarse? |
