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•Alice Miu•+1
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Los personajes no me pertenecen, le pertenecen a la creadora de Junjou Romantica Nakamura-Sensei
- Resumen-
—Escuchen atentamente— Susurro la mujer de forma fría, sus movimientos al caminar eran rectos y firmes, sin ningún error— Esto no es un colegio común y corriente, tal vez sus estúpidos padres los enviaron aquí, sin saber la verdad; cualquiera que sea tan débil como para irse, es libre— Su sonrisa se convirtió en una atemorizante, la cara de los pequeños niños y niñas se convertía en una de miedo, terror y algunas… de curiosidad, esa curiosidad que le da a los niños de saber, de aprender y de comprender lo que le decían; era solo uno, pero para Madeleine, era suficiente— Pero, los que quieran estar aquí, no duden en dar un paso al frente, Avez-vous compris? —Pronuncio en un perfecto francés
Misaki avanzo mientras que miraba a un chico en la fila — ¿No vienes? —Todos miraron al chico confundidos, sus ojos eran completamente negros, esto no intimido a él castaño, ni a los otros —Según Misaki—haciendo que se le formara una sonrisa mientras que avanzaba detrás de Madeleine, dejando a los otros niños confundidos y atemorizados
Ya en otra sala, la mujer se detuvo y miro al niño que la seguía, sonrió mientras que sacaba un labial rojo, y se retocaba sus labios— ¿Qué tenemos aquí? Preséntate por favor jovencito
—Mi nombre es…Emerald— Susurro el niño a un lado de él, Misaki miro confundido a la mujer de cabellos anaranjados ¿Por qué no miraba a él niño? —Mi nombre es…Takahashi Misaki— Se atrevió a decir mientras sonreía hacia el chico que tenía a un lado de él, Madeleine arqueo una ceja, para después reír ruidosamente— ¡Qué carácter niño! Me agradas, veremos si sigue siendo así más adelante…
-Capitulo 1: La carta-
Él clima completamente frío, anunciando la navidad, época de alegría para muchas personas; los anuncios y adornos sobre ella alegraban hasta la persona más amarga, el olor a café y chocolate caliente que tranquilizaba el frío, las parejas aprovechando el frío para envolverse en un dulce abrazo; así eran los días en esa época del año
Y ese día, un viernes cinco de diciembre, una pareja que vivía en un lujoso pent-house, tenían una tarde totalmente normal; la televisión había sido encendida un poco después de haber terminado su comida. Él de cabellos plateados, con nombre de Akihiko, pasó un brazo por la espalda del menor, con nombre de Misaki, quedando así, en un tierno abrazo
—En otras noticias—Hablaba la mujer en el televisor— En esta mañana, la Escuela de Artes Marciales Mixtas de Tokio fue cerrada, y, su directora Madeleine Durand, también ex directora de diversos colegios privados en Francia, fue detenida tras el descubrimiento por parte de las autoridades de que, en la academia, la directora enseñaba el uso de armas de fuego y armas blancas de forma mortal y fomentaba la agresión…
Misaki abrió los ojos sorprendido, por la sorpresa deshizo el abrazo inconscientemente, llamando la atención de Akihiko — ¿Pasa algo? — Pregunto Akihiko mientras que lo miraba con sus ojos violetas
Misaki dudo en responder, por lo que simplemente respondió— Yo fui a esa academia cuando tenía diez años…— Akihiko miro sus ojos verdes, intentando descifrar alguna mentira en aquellas palabras, se sorprendió a sí mismo cuando miro en los ojos de Misaki algo que nunca había visto ¿Qué era eso que se reflejaba?
Akihiko, intentando ignorar el suceso que le acababa de pasar, suspiro y exclamo— Sí tú lo dices, está bien…— Su voz sonaba convencida, pero por dentro Akihiko no confiaba nada en aquellas palabras hechas por el menor
Se escucho el sonido del timbre, por lo que Misaki fue y recibió dos cartas, una a nombre de él y otra a nombre de Akihiko, Misaki con gran sigilo escondió su carta en su bolsillo y le entrego la carta a Akihiko.
Misaki utilizo el pretexto de bañarse para poder leer la carta a su nombre, como respuesta recibió la misma mirada que el escritor le había hecho, Misaki miro la carta de nuevo y se dio cuenta que, no tenía el nombre de quien lo enviaba
Cerró la puerta con seguro y abrió la llave, para que se llenase la tina, abrió la carta, intentando que no se escuchara el ruido del papel rompiéndose, su mirada verdosa era muy anormal, era una mirada que casi nadie había visto, pareciese que fuese la mirada de otra persona, una sonrisa muy tretica se puso en el rostro del menor mientras que leía el contenido de la carta
—
Le meurtrier d'émeraude…
Si esto te ha sido enviado, significa que me han descubierto, también significa, que te he elegido para esta misión…
También que me enviaran a una cárcel, todavía no sé si será en Japón, o si los franceses me pedirán
Tu misión es seguir mis próximas órdenes, las cuales te llevaran a descubrir a quien me traiciono, ya tengo la persona que me sacara de la cárcel, de paso, te dirá la información de la persona que me traiciono
Y por favor, has sufrir a la persona que me traciano, tortúralo, sabes que confió en ti
Atte. Madeleine
—
Suspiro fuertemente mientras que dejaba la carta en el piso, se desvistió y entro a la tina de forma lenta, sentía como lo caliente del agua tranquilizaba sus pensamientos, ayudándolo a pensar firmemente sobre el escrito que había leído, tenía tiempo que esa persona no lo encargaba algo, desde sus dieciséis años si su memoria no le fallaba, ya estaba en su tercer año de universidad, tenía una pareja a quien amaba y la familia de su hermano cada vez crecía mas y mas… ¿Por qué tenía que aparecer en ese momento? ¿Qué tenía que hacer? Explicárselo a Akihiko no era una opción ¿Cómo explicar el contenido de la carta? Pero… no cumplir tampoco era una opción, sabía que eso significaba traicionar a Madeleine y, eso es lo que más temía, temía ver su furia hacía él…
Sin poder evitarlo, empezó a recordar aquellos sucesos, risas desquiciadas venían frescas en su memoria, todo estaba demasiado fresco en su mente, insultos, sufrimiento, recordaba las palabras de su ahora líder, recordaba con aun mas perfección la respuesta que dio, sí, todo había empezado a sus Díez años, cuando los niños todavía son inocentes y no saben nada, cuando uno puede moldear las ideas, sí, en esa edad había empezado
Se agarro la cabeza desesperado, abriendo la boca como si gritando sin ningún sonido, solamente los ojos fuertemente cerrados y su boca completamente abierta, intentando sacar algún grito de dolor, nada, simplemente no podía sacar nada, la primera lágrima fue derramada, por supuesto, fue rápidamente limpiada, no quería verse tan débil. Recordó aquella canción, esa canción que a muchos atemorizaba, intentaba seguir esa canción que siempre les obligaban a cantar y, en un intento de no caer en el llanto, canto mientras que se limpiaba su delgado cuerpo en el agua tan tibia…
—We… are boys…— Comenzó en tono bajo y tímido, seguido de un pequeño tarareo, un triste y tarareo —The boys… don’t cry…— Intentaba seguir pero, las palabras simplemente no salían de sus labios, los cuales, temblaban asustados, con rapidez salió de la tina y se vistió con otra ropa, intentando no ponerse a recordar todo, justo cuando iba a salir del baño, escucho un grito proveniente del escritor— ¡Misaki, ven un momento! — A lo que recibió como respuesta un ‘’Voy’’ del menor
Antes de salir del baño, Misaki miro que el agua del baño se convirtió en un tono carmesí, volteo hacia los azulejos, encontrándose con múltiples rayones y dibujos que, parecían de algún niño pequeño. Una mano verde y escamosa le toco el hombro, haciendo que Misaki volteara un poco asustado y se encontrara a un joven de su estatura, con los ojos completamente negros, como si nunca hubieran visto la vida a colores, también, la piel de la criatura estaba llena de escamas
— ¿Acaso eres tonto Misaki? ¡Es una trampa! —Hablo por primera vez la criatura, Misaki suspiro de alivio al ver quién era, el era nada más ni nada menos que un compañero de su infancia — ¿Imaginario? Quien sabe ¿Real? Tampoco se sabe—
—No es una trampa, Emerald— Susurro mientras que se agarraba la cabeza, por el repentino dolor que le daba a Misaki con solo ver esos ojos completamente negros— ¿Podrías irte? Me duele la cabeza— La habitación se lleno de un humo completamente negro, nublando la vista de Misaki, El cual había cerrado los ojos, cuando los abrió, se encontró el baño completamente normal, sin el color anormal en el agua, sin los múltiples rayones en las paredes y, sin Emerald, la criatura que lo había visitado hace unos minutos. Misaki con rapidez bajo hasta la sala, donde Akihiko estaba sentado con su habitual semblante serio, Misaki se sentó a un lado de él y pregunto— ¿Qué pasa Usagi-san?
—Misaki…— Dijo Akihiko mientras que le sonreía— Ya que estas de vacaciones… estaba pensando sí…
— ¿Sí qué, Usagi-san? — Pregunto Misaki
Akihiko con un semblante serio, mientras que sacaba un cigarro —Nos vamos a Francia en cinco días…— Exclamo Akihiko mientras que encendía el cigarro
Misaki sintió una opresión en el pecho, su semblante, intentando no parecer sospechoso, se hizo como debería ser siempre, sorprendido — ¡¿Eeeeh?! ... — Misaki miro los ojos del escritor, intentando mirar si se había dado cuenta, al notar que no, siguió — ¿Por qué?
—Pues, ya que estas de vacaciones, me imagine que sería buena idea pasar un tiempo contigo
Misaki se ruborizo, ¿Entonces tenía una idea equivocada? Se sintió estúpido al desconfiar de esa forma ‘’Sin duda los nervios me hacen sospechar hasta en mi pareja’’ pensó Misaki — ¿Qué dices, Misaki? — Dijo Akihiko mientras que apagaba el cigarro a punto de terminar
‘’ ¿No te suena sospechoso Misaki?’’ Resonó una voz en su cabeza, la cual fue ignorada por Misaki —Pues, estaba pensando en conseguir un trabajo mientras que estaba de vacaciones pero…— Su mirada se fue hacia el piso, mientras que sus manos jugaban con nerviosismo
—Asunto resuelto, llamare para apartar el vuelo—Dijo el de ojos violetas mientras que subía las escaleras, dirigiéndose a su estudio
— ¿Eh? ¡Usagi-san, todavía no he…!— Fue muy tarde, Akihiko ya se había encerrado en su estudio— dado mi respuesta…
Su mirada verdosa se poso en ningún punto en especial, sabía que el comportamiento de su pareja siembre había sido así, por lo que no le dio mucha importancia y subió hacia su habitación, una vez ahí su mirada cambio radicalmente, poniendo seguro a la habitación, saco su teléfono y marco a un numero el cual conocía demasiado bien. Sabía que lo mejor era encontrar sé en algún lugar donde no llamaran la atención, primero verificaría si ya estaba enterado
— [… ¿Diga?] — Se escucho al otro lado de la línea, Misaki suspiro y contesto seriamente
— ¿Te han informado?
— [Por supuesto, ¿Dónde quieres que nos veamos?]
—Mañana, nos vemos en el café de siempre ¿Está bien?
— [Claro qué sí]
Misaki colgó para después suspirar, sabía que era un crimen delicado, por lo que tenía que ser muy cuidadoso, tenía que actuar como siempre hasta tener la información necesaria, se dirigió hasta la puerta y le quito el seguro, tenía que preparar la cena, así que se miro en el espejo mientras que sonreía tímidamente, como se suponía que debía ser…
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Naooki .
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Me encanto! Actualiza pronto! Me encanto Misaki con ese pasado, me re enganche con la historia xD . -
nekomimi fujoshi (*) .
User deleted
wou esta super conti plz!!!! me encanto la historia y mas misaki con ese pasado tetrico y su vercion yandere Owo actualiza pronto xfis!!!! ya me dejaste con ganas de mas 
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Onodera-tsu .
User deleted
me gusto espero ansiosa la conty yey !
me intriga mucho misaki (que tramas, joder xD )
nos vemos
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BRe Kou :3 .
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Me gusto mucho espero que lo continúes pronto :3 . -
•Alice Miu• .
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Hay me encantaron sus comentarios <3 muchas gracias gente <3
Aquí el capitulo 2 (Cada viernes/Jueves sera publicado un nuevo capitulo ¿Les parece?)
—Capitulo 2: Misaki, Terrorista y la rata traicionera
Misaki salió hoy en la mañana, le he llamado más de siete veces —Las cuales son pocas, para mí— ninguna me ha contestado—Hoy he fumado más de lo normal, por la preocupación, tendré que ver televisión para intentar quitarla ¿Donde estarás y con quién? Misaki nunca sale sin dejarme una nota diciéndome dónde y con quien; si él sabe que soy demasiado celoso ¿Para qué no me deja una nota? ¿Y si esta en problemas? Misaki es mi todo, haría cualquier cosa para protegerlo, cualquier cosa…
— [Madeleine Durand, después de unos movidos juicios será llevada a una cárcel de máxima seguridad en París, Francia…]
—Mira Suzuki, tenía razón— Le señale a mi fiel amigo de felpa; volviendo con lo de Misaki, sabía perfectamente que tenía que protegerlo en el viaje, sabía también que con lo de Madeleine estarían con mayor peligro mi amado —Suzuki me ayudara a proteger a Misaki ¿Verdad? — Susurre mientras que cambiaba el listón de Suzuki, el tenía que estar presentable para cuando Misaki llegara, no puede mirar a Suzuki con un color tan aburrido como el blanco
—A mí me gusta el carmesí…— Reí despacio, me causaba gracia las diferentes formas que tenían mis palabras.
Pasando desapercibido por las calles, con una mirada totalmente indiferente reviso su celular por tercera vez en su camino, sus manos temblaban mostrando nerviosismo, suspiro para guardarlo, Misaki intentando ocultar su nerviosismo, detuvo su mano temblorosa izquierda con la derecha, sin ningún resultado
— ¿Quieres apurarte? ¡Imbécil! — Grito desde la otra esquina de la calle, sus ojos completamente negros miraban a Misaki con fastidio
—Todavía hay tiempo…— Exclamo Misaki, ganándose algunas miradas confundidas de la gente, avergonzando a Misaki un poco. Miro un café a lo lejos, un café el cual estaba lleno de jóvenes adolescentes, en la parte cerca del letrero —El cual era Rock Café— se divisaba un joven de cabellera rubia sentado, su mano jugaba con la cucharilla de su café. Misaki suspirando se fue acercando al joven, hasta sentarse a un lado de él y preguntar directamente en un susurro— ¿Y bien, que tienes? — Susurro Misaki, mirando la fría e irritada mirada grisácea de su acompañante
—No seas tan directo ¿Quieres? — Aquel jovencito de cabello rubio era nada más ni nada menos que Shinobu Takatsuki, conocido como el Terrorista en los barrios negros de Tokio. Shinobu empezó a trabajar para Madeleine un año después que Misaki, convirtiéndose así, en uno de los mejores colegas de trabajo de Takahashi— No tengo mucho, al parecer la rata traicionera se sabe esconder…
— ¿Rata traicionera? —Pregunto tomando un sorbo de su café
—Sabes que Madeleine tiene un sentido del humor muy raro— No había mentira en las palabras de Shinobu, Madeleine llegaba a tener ese sentido del humor
—Ya…— Exclamo con una pequeña sonrisa al recordarlo— ¿Qué mas crees saber de la rata?
—Lo que creo saber es que tiene montones de dinero
— ¿De cuantos montones estamos hablando? Shinobu
—Los suficientes como para competir con tal mujer, también debe ser demasiado inteligente
—Eso no ayuda, Shinobu
— ¡Apenas ha pasado un maldito día! — Contesto irritado— La enviaran a una cárcel de máxima seguridad en Francia, al parecer los franceses quieren presumir que la agarraron y que ahora ‘’El mundo es más seguro’’
—Tonto gobierno— Dijo Misaki mientras que se paraba de la silla, saco su billetera y dejo dinero— Mi parte, hasta luego— Exclamo para irse y perderse entre la gente
Vamos a ver, tengo que tener demasiado cuidado con Madeleine, ella suele ser una mujer muy explosiva cuando no se hacen rápido las cosas —Temo que vaya a explotar esta vez, ya saben, por estar en una cárcel— Dios, ¿Qué le diré a Usagi-san? Iremos a Paris en cinco días, sería raro si no estoy de turista con el ¿Saldré con un amigo? ¿Quisiera ver yo solo Francia? ¡Mierda! Tengo que pensar en una buena excusa para él, el siempre ha detectado mis mentiras y, eso me asusta demasiado
— ¿Te asusta demasiado? ¡Menudo cobarde saliste! —Exclamo Emerald caminando atrás de Misaki, mirando mal a las personas que observaban de reojo a Misaki —Podría decirse que, actuaba como un hombre celoso—
—Cállate, no estoy de humor— Contesto ganándose las miradas confundidas, a las cuales, ya estaba demasiado acostumbrado; por lo que simplemente bajo la mirada avergonzado
—Oye tonto, se te ha olvidado la despensa (1) — Exclamo el de ojos negros mientras señalaba un súper-mercado que se encontraba a unas manzanas
‘’Dios, este no me deja solo ni un momento’’ pensó irritado Misaki
Akihiko había ido a dormir justo después de cambiarle el listón a Suzuki, su habitación se encontraba llena de juguetes y recuerdos de viajes, a los cuales — La mayoría— Fue obligada por su ruidosa editora y su jefe. La habitación se encontraba limpia gracias a Misaki, el cual limpiaba todos los días, Akihiko se sentía a veces impresionado por los casi súper-poderes de limpieza y organización que tenía su amado, Misaki podía con la universidad, su trabajo, la limpieza y el deseo de estar con su pareja en la intimidad.
— ¡Estoy en casa!
Misaki, Misaki… ¡Misaki! Se sentía ahogado, como si alguien estuviera oprimiendo su pecho lentamente, le faltaba la respiración, por lo que fue cayendo lentamente en su sueño, se sentía ahogarse en el fondo de un espeso liquido…
‘’ ¡Despierta!’’ Gritaba su mente desde el sueño, intentando salir de aquella pesadilla…
Una gran inhalación fue escuchada por Misaki, el cual alarmado subió rápidamente hacia la habitación de Akihiko, encontrándose con el escritor respirando agitadamente
— ¡¿Qué te paso?! — Pregunto aun alarmado el de ojos verdes, Akihiko hiso señas con la mano en forma negativa, dándole a entender a Misaki, que había sido una pesadilla— Idiota, me has matado del susto, tonto Usagi— Exclamo suspirando aliviado, Misaki suspiro y con las mejillas ruborizadas se sentó en una esquina de la cama, esperando a que Akihiko recuperara la respiración de aquella pesadilla. Lo miro con un falso enojo, escondiendo su preocupación.
— ¿Por qué me miras así, Misaki? — Pregunto Akihiko
—Por qué no me has dicho que soñaste, tonto— Contesto inflando sus mejillas por la vergüenza, ganándose una sonrisa coqueta del escritor
— ¿Estas insinuando que te preocupas por mi? — Cuestiono mientras que se acercaba al rostro de Misaki, el cual adivinando las intenciones de su pareja, se separo rápidamente de la cama y exclamo totalmente nervioso— ¡Ja! ¿Yo preocuparme por ti? ¡Ya quisieras! — Sus mejillas delataban su gran nerviosismo, Akihiko sonrió mientras que se paraba y revolvía los cabellos de su pareja, ganándose una mirada confusa escondida con un falso enojo
— ¡No me despeines!
— ¿Despeinarte? Tú vives despeinado, Misaki— Se burlo Akihiko
— ¡Tonto, tonto Usagi! — Contesto cerrando la puerta de un portazo, Akihiko se sentó en la cama de nuevo y espero cinco minutos como si fuera un niño castigado y, justamente a los cinco minutos, Misaki abrió la puerta despacio
— ¿Qué quisieras cenar? — Susurro Misaki completamente rojo, ganándose una sonrisa del escritor, ese era su Misaki
—Lo que Misaki prepare.. -
BRe Kou :3 .
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Si fuera por mi quisiera que subieras un capítulo todos los días xD pero "El mundo no es una máquina de conceder deseos" :/ En fin esta re esperando la continuación 
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•Alice Miu• .
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Hola! Mil disculpas por no actualizar, no tenia internet en mi colonia :c
—El terrorista y los románticos—
Misaki frunció el ceño y dijo — Si que eres un idiota— mientras que se dirigía a la cocina, saco los ingredientes necesarios y empezó a cocinar, cortaba con el afilado cuchillo los vegetales necesarios para la cena, amaba cocinar, por lo que se cuestiono ¿Por qué no decidió ser chef? le encantaba cocinar desde pequeño, cocinaba cuando su hermano estaba trabajando, Takahiro solo dos veces lo descubrió cocinando, todo porque los ingredientes de la alacena empezaron a faltar, se podría decir que era uno de sus pequeños secretos, otro era uno muy preciado, era que Misaki, desde que Akihiko empezó a utilizarlo para sus novelas, las ha leído, todos los volúmenes — Hasta se podría decir que se sabía la historia de memoria—
— ¡Usagi-san, la cena esta lista! — Grito Misaki desde la cocina mientras que preparaba la mesa, el celular de Misaki sonó, sus ojos verdes miraron confundidos aquel aparato, por lo que contesto
— ¿Hola? — Únicamente se escucharon gritos desgarradores de una mujer, ella imploraba y gritaba cosas que Misaki no entendía, al parecer era otro idioma, escucho un vidrio romperse… la voz se cayó —Misaki, soy Shinobu— Susurro el terrorista unos minutos después de la voz callada
— ¿Qué pasa?
—Ocupo que vengas mañana en la mañana… Madeleine tiene un trabajo para ti
Misaki se quedo confundido ¿Qué ocupaba Madeleine? Miro hacia la habitación de Akihiko, no había salido— ¿Qué…?
— No preguntes, mañana te explicare
— ¡Espera…Shinobu! — Misaki frunció el ceño mientras que los sonidos en el teléfono le decían que había terminado la llamada
— ¿Quién era, Misaki? — Pregunto el escritor mientras que bajaba las escaleras junto a Suzuki, Misaki lo miro y simplemente dijo— Era Todou, al parecer quiere que vaya a su casa mañana
Akihiko soltó un gruñido, odiaba que los compañeros de Misaki lo llamaran en plenas vacaciones— ¿Para qué te quiere?
Misaki se encamino a la cocina mientras que decía— Para decidirse en que comprar mañana, va a tener una fiesta o algo así
— ¿Y tú que sabes de moda? — Se burlo el de cabellos plateados mientras que se sentaba en la mesa
—Dios, eres un idiota— Exclamo con el ceño fruncido, sentándose para comer
Una vez acabada la cena, Misaki y Akihiko… bueno, mejor dicho Misaki se puso a lavar los platos, mientras que Akihiko lo abrazaba posesivamente
— ¡Usagi, me estas irritando! — Exclamo el menor mientras que trataba de liberarse del agarre
— ¿En serio? Genial— Rió divertido
Misaki insulto mentalmente una y otra vez a su pareja, con un poco mas de fuerza por fin quito el agarre y dejo todo listo, sentándose en el sillón, seguido — Por supuesto— de Akihiko, el cual lo abrazo
— ¿Qué tienes hoy Usagi-san? Estas muy… empalagoso (1) — Se quejo Misaki
—Tengo ganas de abrazar a Misaki— Susurro Akihiko mientras que le daba pequeños besos en la mejilla a Misaki, el menor simplemente se acomodo en el pecho de Akihiko, quedándose a los minutos dormido.
En otro lugar de Tokio, se encontraba un rubio limpiando un sótano mientras que tarareaba una tranquila canción, con tranquilidad quito las manchas rojas de la espesa sangre
— Lástima que tú no fuiste…— Susurro Shinobu mientras que metía el cuerpo en una especie de habitación, la dejo en el suelo, agarro un teléfono y marco
— ¿Alo?
—Oye cuervo, tengo ‘’jamón’’ en buen estado, ya sabes donde venir— Con esto, colgó y dejo a la mujer tirada y cerró la puerta de la habitación
Con pasos lentos se encamino a una pequeña repisa, saco una gruesa libreta y la abrió en la página número cuatro
—Vamos a ver… después de ti sigue la letra… C…— Susurro mientras que tachaba un nombre.
A la mañana siguiente, Misaki abrió los ojos y despertó junto Akihiko en el sillón, con un gran bostezo se paro y empezó a mover al escritor
—Despierta… tonto Usagi— Susurro adormilado sin poder poner su tono de voz regañón, Akihiko se movió molesto
—Cinco horas más…
Misaki gruño molesto, se acerco lo suficiente al oído del escritor y susurro— Oye Usagi-san—Después grito— ¡Despierta maldito escritor!
— ¿Qué es lo que te pasa? — Pregunto Akihiko mientras que se sobaba su oído— ¿Por qué no me despiertas con un beso?
Misaki se sonrojo, su mirada de enojo se hizo más grande y, con un gran suspiro simplemente exclamo— Idiota… gran idiota— Después de esto, se fue hacia su habitación
— ¡Yo también te amo! — Grito Akihiko divertido, recibiendo como respuesta un gruñido mucho más fuerte, junto a otro grito
— ¡Eres un idiota! — Grito Misaki, pero entonces, el celular de Misaki sonó
— ¿Hola? — Susurro
—Oye adivina quién soy…— Exclamo una voz completamente distorsionada, Misaki abrió sus ojos sorprendido ¿Acaso era quien creía que era…? — ¿Cuervo? — Pregunto haciendo una mueca de fastidio, si en verdad era quien creía, el trabajo que le había dejado Shinobu no le iba a gustar para nada
— ¡Adivinaste! — Grito la voz mientras que se reía más fuerte, de forma desquiciada, una vez que la risa fue bajando hasta ser puros suspiros volvió a hablar— Shinobu me llamo ayer ¡Hay estoy tan emocionada de trabajar contigo!
—No me jodas— Dijo Misaki a secas, sus ojos denotaban fastidio— Yo no trabajare contigo
—Lo siento mucho cariño, son las reglas de Madeleine ¿O acaso quieres hacerla enojar?— Exclamo la voz la cual, había dejado de ser distorsionada, mostrando una voz femenina— Te espero en ese sótano ¡Por favor trae un desodorante, como apesta esto! — Su voz sonaba rara, ya que se la había tapado con su mano
—Si aja…— Contesto de mala gana Misaki para después colgar
Con gran fastidio miro la hora — tres de la tarde— marcaba el reloj de su celular, con fastidio saco su mochila y metió un cambio de ropa, junto a una máscara de gas la cual tenía muy estratégicamente escondida pues —¿Qué sucedería sí el escritor se enterara?
Emerald apareció acostado en la cama de la habitación — ¿Hora de trabajar? — Pregunto mientras que sonreía
—Por desgracia…— Respondió, salió con la mochila puesta y ya cambiado de ropa, volteo hacia abajo y no encontró a Akihiko, por lo que supuso que estaría haciendo su manuscrito atrasado, suspiro con cansancio y se dirigió al estudio del escritor. La puerta estaba abierta, por lo que simplemente entro y dijo —Oye Usagi-san, ya me voy con Todou— Dijo Misaki mientras que sonreía convincentemente, cierto era que muy rara vez Misaki mentía bien — Pero, si se trataba de Madeleine no tenía otra alternativa—
Akihiko dejo de escribir y se dirigió con el menor— ¿A qué horas llegaras? — Pregunto
—Como a las seis de la tarde— Respondió Misaki, sus ojos verdosos miraron a Akihiko, verde con violeta se miraron, para que después esmeralda se despidiera.
Misaki se dirigió al metro de la ciudad, donde tomo una ruta la cual le llevara hacia la zona oeste de Tokio, la cual, era demasiado conocida por los crímenes hechos ahí, desde simples asaltantes hasta vendedores de cosas ilegales. Misaki suspiro con fastidio, odiaba trabajar con el Cuervo, el cuervo era una excéntrica mujer, la cual tenía una personalidad sínica, ella era una de las favoritas piezas de Madeleine cuando de órganos se trataba
Misaki bajo en la estación correspondiente, con lentitud se dirigió a la salida y se encamino hacia un gran edificio de tatuajes, Misaki saco su máscara de gas y se la coloco
—Buenas tardes…— Respondió el de los tatuajes — ¿Un día feo? — Pregunto mientras que miraba a Misaki
—Un día tan feo como la vida…— Contesto Misaki, el muchacho sonrió y dijo— Ya sabes por dónde pasar… por favor… no ensucie el sótano tanto
Takahashi ignoro las palabras del joven y fue hacia un pasillo lleno de rayones y diferentes habitaciones y, al final, un elevador. Misaki miro una habitación, se encontraba una mujer tatuando a un cliente, en la otra habitación se encontraba unas mujeres maquillándose y fumando.
El de ojos esmeraldas se dirigió hacia el elevador y entro, el espejo del elevador se encontraba roto y con algunas manchas de sangre y otras sustancias que Misaki no quería saber que eran. Apretó el botón del sótano
Una vez abiertas las puertas del elevador, Misaki fue y abrió la puerta de madera
— ¡Por fin has llegado! — Se escucho una voz femenina, el Cuervo se encontraba cepillando su cabello rojizo— Bien el terrorista fue muy amable en dejarme elegir el asistente que yo quisiera para esto ¿Acaso no es genial? — Pregunto mientras que se retocaba su maquillaje
—Para nada— Dijo Misaki quitándose su máscara de gas, aunque se arrepintió pues, un olor desagradable se encontraba impregnado en la habitación, se tapo la boca para no vomitar
—Lose, es asqueroso el olor, mejor ponte la máscara— Misaki obedeció y se puso otra vez la máscara de gas, la cual ocultaba su rostro
La mujer de buen cuerpo se acerco y le dejo unas botas militares— Las ocuparas para mentir sobre tu estatura
— ¿Qué vamos a hacer exactamente? — Pregunto Misaki mientras que se ponía las botas
La mujer rio coquetamente mientras que se sacaba la blusa blanca— ¡Vamos a entrevistar algunas personitas! — Ella se volteo y con su pecho desnudo se puso una venda, Misaki quito la vista avergonzado, cuando por fin puso la vista, ella tenía el busto comprimido por la venda
— ¿Te vestirás de hombre? — Pregunto Misaki
—Algo así…— Susurro poniéndose una máscara que cubrió su rostro— Bien, vamos
Se encaminaron a una especie de habitación que estaba en el otro lado, al entrar Misaki miro a dos hombres sentados y atados en una de las sillas, el cuervo sonrió— ¡Estos guapísimos chicos serán nuestros entrevistados! — Su risa se volvió desquiciada, despertando a los hombres los cuales, se encontraban espantados
—Mi amado compañero les dirán si sus preguntas son correctas— El cuervo le dio un arma a Misaki, el cual simplemente asintió y le quito la cinta de la boca a los dos
—Bien, mi nombre es Cuervo ¡Encantada! Ahora les preguntare— Su mirada aterradora no se miraba por la máscara, por lo cual le dio una gran bofetada a uno — ¿Se podría saber por qué nos robaron?
—¡No hemos hecho nada! — Misaki dio el primer tiro en la cabeza al hombre que había dicho eso, sus sesos se esparcieron un poco en la cara del otro
—Ahora a ti preciosura ¿Por qué nos robaron? — Pregunto ella
—¡F-f-fueron orde-enes! — Contesto aterrorizado
—¿De quién? — Pregunto ella mientras que le hacia una seña a Misaki, el cual con cierto temblor en su cuerpo se acerco al hombre y le apunto en la cabeza
—¡D-d-e…no puedo decírselos!
—Sabes…— Misaki hablo— Tenemos demasiada información sobre ti ¿Acaso no quieres proteger a quienes amas? — Pregunto Misaki mientras que sentía una opresión en el pecho por las palabras
—¡Fue Hotaru-sama! — Respondió al fin mientras que derramaba lágrimas— No le hagan nada a ella… por favor… a ella no
—¿Ella? — Se pregunto a sí mismo Misaki, el Cuervo simplemente rio mientras que le hacía una señal a Misaki— Diviértete, igualmente va a morir— Después de esto salió y cerro la habitación. Los ojos cafés del hombre delataban terror— ¡Te suplico, no me mates!
Misaki simplemente ignoro las preguntas y se quito la máscara, mostrando sus grandes y verdosos ojos— Sabes… me has agradado, por lo que simplemente te matare de forma que no te duela— Exclamo mientras que sonreía de forma sádica—¡No… esper..! — El disparo fue tan fuerte que el cuerpo inmóvil cayó junto a la silla, Misaki miro tristemente el cuerpo inmóvil y dijo—Descanse en paz—Su trabajo había terminado por ese día.
Misaki salió y se cambio de ropa, ya que la que tenía estaba llena de sangre salpicada, salió de aquel lugar y emprendió camino hacia el apartamento que compartía con su pareja…
— ‘’Proteger a quien amas’’— Pensó Misaki imaginándose a Akihiko, una punzada en el pecho le ataco— ‘’Usagi-san’’— Otra más seguidas de otras punzadas de dolor, sus pasos se volvían rápidos hasta casi correr, bajo las escaleras del metro con desesperación… sentía una opresión en el pecho, sentía culpa por haber terminado con la vida de aquella persona, se dio un gran golpe con la pared
— ¡Auch… Duele! — Susurro Misaki sobándose la cabeza, sus ojos se humedecieron un poco por el dolor, se encamino hacia la compra de boletos y compro uno.
—¡Eso te pasa por imbécil! — Se burlo Emerald, el joven ignoro lo dicho y se encamino para llegar a su hogar
Al menos llegaría más temprano…. -
nekomimi fujoshi (*) .
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OMK (oh my Kami xD)
hermosho(hay que ver que soy medio cruel uwu ewe)
conti esta taaaaaaaaaaaaaaaaan genial!!!!
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•Alice Miu• .
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Disculpas por la tardanza, estoy en tiempo de exámenes y por ende, en trabajos finales. Tardare en las próximas actualizaciones. El estudio primero <3
La cuenta regresiva.
Al menos llegaría más temprano…
El metro lo llevaba de estación en estación, personas subían y bajaban, algunas se colocaban cerca de un asiento, esperando que la otra persona se bajara. Los vagones llenos de parejas que salían de alguna cita y trabajadores los cuales terminaban su jornada de día a día. Hizo una mueca al sentir como se le revolvía el estomago con sus pensamientos, por lo que, con un gran suspiro se dirigió a la puerta en la que bajaría
Próxima estación…
Esa era su estación, por lo que se bajo y se encamino a las escaleras, donde podría salir e ir a su hogar. Las personas que se encontraban afuera de la estación lucían más extravagantes y formales, siempre era así por esos lugares, personas con demasiado dinero teniendo cenas en lugares donde podrían gastar un poco de ese dinero
Siempre era así por allí…
Esto le recordó a su pareja, con la cual compartía el lujoso apartamento. Akihiko por ser escritor, siempre se encontraba rodeado de personas con mucho dinero y lujo, aunque desde que empezó a vivir con él, Misaki se dio cuenta que el escritor odiaba esas cosas tan extravagantes a las cuales era invitado
Así era Usagi…
‘Ese infantil y caprichoso hombre sí que lo tenía loco, siempre se la pasaba desordenando todo lo que Misaki limpiaba diariamente, recogiendo los peluches y cada juguete de colección que se encontraban en cada habitación. Amaba a ese hombre tanto que lo quería proteger de cualquier forma…
—Proteger ¿Eh?... — Susurro amargamente Misaki, sentía que su estomago se revolvía con tan solo pensar lo sucedido hace unas horas, se sentía demasiado culpable por lo sucedido. No era como si nunca hubiera trabajado para personas tan extrañas y desquiciadas como el Cuervo, pero había algo en ese hombre que le había llegado, ese hombre estaba decidido a morir por aquella chica que no sabía su nombre ¿Quién era ella, porque era tan importante para él?
—Por que la amaba ¿Acaso no es obvio… M-i-s-a-k-i? — Exclamo y deletreo burlonamente Emerald, el cual divertido, al ver una persona que se encontraba cerca de chocar con Misaki, exclamo— ¡Idiota, vas a chocar! — Y así fue, Misaki choco con una persona muy alta — Al menos para la estatura de Misaki— el universitario con lentitud dirigió su mirada hacia arriba. Enrojeció al ver quien era — ¡¿Usagi-san?! — Pregunto hecho nervios por haber chocado con tal persona— ¿Qq-q-ue estas haciendo por aquí? — Pregunto completamente ruborizado. Akihiko arqueo una ceja— Pues aquí vivimos… ¿No es obvio? — Misaki se ruborizo mas al darse cuenta que, en efecto, el enorme edificio donde vivían se encontraba ahí
El escritor con una sonrisa burlona exclamo— Vamos— Mientras que lo jalaba del brazo y lo llevaba hacia el apartamento, Misaki simplemente estaba tan avergonzado que no replico nada en el camino hacia el pent-house.
Una vez allí, Misaki suspiro con cansancio y se recostó en el sillón— Estoy muy cansado— Dijo mientras que bostezaba, y no era mentira, se encontraba sumamente cansado por todo lo ocurrido — Mentalmente, claro— El escritor miro con burla a Misaki — ¿Cansado de elegir un color de traje? Si que no tienes condición mental— Se burlo Akihiko mientras que se sentaba en un espacio que había dejado el menor
—Cállate…— Susurro en un medio bostezo— Igualmente tengo que hacer la cena…— Dijo con cansancio
—Podemos pedir a domicilio— Exclamo Akihiko mientras acariciaba cariñosamente el cabello castaño de Misaki
Misaki se levanto y dijo — No, será más rápido si la hago— Una pequeña sonrisa apareció en el rostro de Takahashi, mientras que se dirigía hacia la cocina y sacaba los ingredientes necesarios.
Akihiko miraba a Misaki mientras cocinaba, sus cabellos castaños agarrados por una pequeña liga, sus ojos verdes concentrados en preparar una deliciosa cena. Inconscientemente, el escritor sonrió
— ¿Pasa algo? — Pregunto Misaki con una sonrisa mientras que cortaba algunas verduras
— ¿Por qué preguntas?— Pregunto el de ojos violetas’
—Tienes una cara de bobo desde que empecé a cocinar— Contesto el de ojos verdes mientras que rodaba sus ojos. Akihiko se paro y se fue acercando a la cocina, abrazo dulcemente a Misaki mientras notaba como el otro se tensaba— Usagi-san, déjame cocinar…— Contesto totalmente sonrojado por la tierna muestra de afecto que le dedicaba su pareja
—No quiero— Contesto simplemente mientras que intentaba una de sus cosas favoritas — Molestar al menor—
Misaki frunció el ceño mientras que se removía entre los brazos de Akihiko— Qué idiota, vas a provocar un accidente— El escritor simplemente se rio, ocasionando que Misaki se enojara mas — ¡Usagi, hablo en serio!
— ¡Usagi, hablo en serio! — Arremedo las palabras de su amado con una aguda voz, sintió como el menor empezaba a temblar, en efecto, había logrado que Misaki se enojara
— ¡Idiota Usagi! — Exclamo totalmente molesto el universitario mientras que apagaba el fuego— ¡Ve y siéntate, ya vamos a comer!
—Sí, sí, eres una dulzura— Dijo burlonamente mientras que se dirigía a la mesa, los platos con la cena fueron puestos y los dos empezaron a degustar de la comida.
En medio de la cena, Emerald apareció y se sentó a un lado de Misaki, con una mirada de fastidio toco la lujosa mesa y exclamo— ¿Y... eso es todo? —Misaki simplemente se quedo viendo mientras que esperaba una explicación, por lo que Emerald rodo los ojos— ¿No vas a divertirte más? No sé, tal vez deberías salir y hacer algo ¡Esto es aburrido!
—Misaki — Interrumpió los pensamientos del menor— ¿Qué miras? — Pregunto intrigado por la mirada fija hacia una silla vacía que se encontraba a un lado de su pareja
—Nada…— Susurro el menor mientras que seguía con la degustación de la cena, miro el reloj y marcaban exactamente las siete de la tarde. Al terminar su comida se levanto y dejo su plato en el lavaplatos.
Al terminar de cenar, la pareja se dispuso a mirar la televisión, de canal en canal, desde una película familiar hasta un canal de crítica de moda. No había nada interesante para los dos, hasta que apareció el canal de noticias
—En otras noticias, mi compañero me informa que se encontraron dos cuerpos en la zona oeste de Tokio, aun no hay ningún rastro del asesino y no se sabe con exactitud la hora de la muerte de las víctimas, les mantendremos informados sobre el caso.
‘’ No le hagan nada a ella… por favor… a ella no’’— Un vuelco en su corazón se dio al recordar las desesperadas palabras de aquel hombre para proteger a aquella mujer, su mirada cambio a una de angustia, llamando la atención del escritor— ¿Pasa algo?
—No nada, simplemente me quede pensando— Mintió Misaki, Akihiko simplemente lo dejo pasar y apago la televisión— ¿Vamos a dormir?
Misaki asintió y con pesadez se levanto del sillón, una vez entrando en la habitación llena de juguetes y con las piyamas puestas, se acomodaron en la cama y cerraron los ojos— Buenas noches— Dijeron al miso tiempo, para después, apagar las luces e intentar irse al mundo de los sueños. Misaki se removió y quedo a espaldas de Akihiko, abrió sus ojos y simplemente miro las oscuras siluetas que había por la oscuridad de la noche. Sus labios empezaron a temblar, su ceño fue fruncido mientras que su mano se dirigía a su boca, en un sobre esfuerzo de no llorar cerró los ojos fuertemente…
La primera lágrima silenciosa fue derramada, intentando no sollozar, Misaki tapo con más fuerza su boca y empezó a derramar más y más lagrimas. El silencio en la habitación combinaban con las silenciosas lagrimas que salían de sus verdosos ojos su mirada estaba borrosa, por lo que no se dio cuenta cuando Emerald apareció
—Misaki, deja de ser débil— Exclamo fríamente Emerald— Misaki, deja de ser débil— Una y otra vez las mismas palabras se repetían fríamente, atravesando más el corazón angustiado de Misaki
Abrió sus ojos e inmediatamente sintió una punzada de dolor en la cabeza, entonces recordó la debilidad de anoche, las lágrimas y la insistente voz de Emerald. Con cansancio miro la hora en el inusual reloj de oso que le había regalado a Akihiko hace mucho
Las nueve de la mañana, ocho de diciembre
Eso significaban dos cosas: Akihiko seguía dormido, ya que sentía la calidez y la sensación de otro cuerpo al lado de la cama —No era como si el escritor se levantara temprano—. Dos, faltaban dos días para el tan esperado viaje a Paris. Con un suspiro se volteo y miro el rostro dormido de su pareja, lo movió un poco, despertándolo
— ¿Qué quieres de desayunar, Usagi-san? — Pregunto el menor
—Quiero a Misaki durmiendo conmigo— Respondió el adormilado escritor, mientras que pasaba un brazo por la cintura del menor, formando un inocente abrazo. Misaki sintió demasiada comodidad y sumada con su sueño, se quedo dormido de nuevo
Despertó en un vano intento de tomar aire con la nariz, abrió sus ojos y sintió una adolorida y seca garganta, con un suspiro seco por la garganta se libero del abrazo de Akihiko y se levanto. Se miro en el espejo de cuerpo completo que se encontraba ahí, miro la gran camiseta —La cual le pertenecía al mayor— y sus bóxers, miro más hacia abajo y encontró la culpable de su dolor de garganta, Misaki se encontraba descalzo
— ¿Misaki? — Pregunto con una adormilada voz el escritor, el cual tocaba el lado donde su pareja había dormido
—Buenos días…— Contesto roncamente Misaki, llamando la atención de Akihiko
— ¿Enfermo? — Misaki simplemente asintió y roncamente contesto— Tomare algo y se me pasara— Y antes de que Akihiko pudiera replicar, Misaki bajo rápidamente y se dirigió a su habitación, con el malestar en su garganta, empezó a buscar alguna pastilla que le aliviara el dolor, sin ningún resultado, suspiro derrotado y se puso algo con que salir hacia una farmacia. Salió de la habitación y encontró al escritor leyendo en la sala
—Voy a una farmacia y de ahí al supermercado, si tienes hambre hay cereal ¿Entendido? — Exclamo Misaki. El de ojos violetas cerro su libro y se acerco a Misaki, con le agarro de la barbilla y le planto un dulce beso en la frente, muy dulce a decir verdad
—Te cuidas — Dijo Akihiko mientras que le regalaba una sonrisa, la cual ocasiono que el menor se sonrojara
—S-sí…— Titubeo para irse del apartamento.
Salió de la farmacia y sintió el gran viento combinado del frio, el cual hacia incapaz a una persona de estar sin bufanda y guantes, suspiro mientras que veía como un pequeño como humo salía de su boca, haciéndolo sonreír— Bien, supongo que ahora al supermercado— Exclamo con decisión mientras que visualizaba la entrada subterránea del metro, pasaba entre las multitudes de gente, las cuales simplemente tenían algo que hacer, ya sea algún trabajo, estudio o simplemente una cita. Sus ojos verdosos se posaron en las escaleras para bajar, estaban húmedas y por ende, resbalosas, con cierto cuidado el bajo, intentando no caerse en las partes donde el agua se había convertido una fina capa de hielo resbaloso. Miro la fila para comprar los boletos, era una cosa demasiado inmensa, con un gran y cansado suspiro se puso a esperar en aquella larga fila
— ¿Por qué hacer estas estúpidas filas? — Se quejo Emerald—Por que ocupo un boleto, idiota— Contesto Misaki en voz baja, intentando no ser escuchado por la gente y armar otro de esos numeritos. Emerald simplemente volteo la mirada y desapareció, al igual que las personas que ya compraban sus boletos, para suerte de Misaki, la fila avanzaba con mucha rapidez, permitiéndole comprar su boleto rápidamente y encaminarse a la estación donde quería ir.
Sentía una aliviador calor al entrar más a fondo, el vapor del metro era demasiado placentero en esas épocas donde apenas y un suéter muy grueso te podía quitar solo un poco de aquel horripilante frío, a él le gustaba más el verano, siempre había adorado el sol en su cara y aquel calor que te llega, sí, amaba eso.
Subió de nuevo las escaleras, sintiendo como la temperatura bajaba de nuevo, asiéndolo acurrucarse más en su bufanda de color crema, camino derecho, pasando en cuadra en cuadra, visualizando por fin entre tantos anuncios coloridos el del tan esperado supermercado, camino más rápido en un deseo de llegar a un lugar caliente en donde acogerse del fuerte invierno en Tokio, sonrió al verse en frente de la entrada, donde se sentía el agradable calor de la calefacción, entro y saco una pequeña lista de su bolsillo, eran muy pocas cosas, en su mayoría cosas de uso personal para el viaje el cual tendría con el mayor en dos días
— ¿Tan importante es ese tonto viaje? — Pregunto irritado Emerald al leer el contenido de la pequeña lista. Misaki suspiro— Simplemente quiero estar preparado, tú y yo sabemos que Usagi-san no tomara en cuenta estas pequeñas cosas
Emerald bufo fuertemente, intentando llamar la atención de Misaki, sin resultado alguno. Emerald miro a una señorita, la cual no le quitaba la vista al de ojos verdes, con el ceño fruncido le dijo a Misaki— Oye, creo que lo que buscas esta en el pasillo seis— Takahashi simplemente asintió y se encamino a aquel pasillo, haciendo que la joven perdiera contacto visual con Misaki. Asiéndolo sonreír triunfante
—Emerald— Exclamo Takahashi mientras que tomaba algo de la lista— ¿Qué? — Pregunto totalmente descortés
— ¿Acaso estabas celoso de aquella joven? — Pregunto divertido sin quitar la vista de los productos
Emerald abrió los ojos— Eres un imbécil, solo te estás imaginando estupideces. Deja de perder el tiempo ¿Quieres? — Contesto fríamente, sacándole una pequeña risa a Misaki
Miro de reojo a Misaki y empezó a dar unas vueltas por el supermercado, obviamente nadie se daba cuenta de su presencia, miraba de pasillo en pasillo, hasta que algo lo hizo gruñir. Ahí se encontraba una de las cosas que más odiaba, Ijuuin Kyo, el gran acosador de Misaki Takahashi ¿Lo peor? A Misaki le encantaban sus mangas. Lo único que faltaba para arruinar el día era que se vieran
— ¡Takahashi-kun!
—A la mierda. — Exclamo Emerald
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nekomimi fujoshi (*) .
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jajajajaja que mono ♥ Emerald celoso x'D que ternura >u< 
jaja me encanto espero con ancias la conti
PD:no te preocupes yo ando en las mismas xD comprendo perfectamente primero los estudios n.n7
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•Alice Miu• .
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Los sentimientos de Emerald- Parte Final
Miro de reojo a Misaki y empezó a dar unas vueltas por el supermercado, obviamente nadie se daba cuenta de su presencia, miraba de pasillo en pasillo, hasta que algo lo hizo gruñir. Ahí se encontraba una de las cosas que más odiaba, Ijuuin Kyo, el gran acosador de Misaki Takahashi ¿Lo peor? A Misaki le encantaban sus mangas. Lo único que faltaba para arruinar el día era que se vieran
— ¡Takahashi-kun!
—A la mierda. — Exclamo Emerald
Su mirada veía con gran molestia a ese hombre, con gran enojo le miraba de reojo hablar con Misaki, mientras que el universitario simplemente se dedicaba a tartamudear y estar sonrojado. Apareció a un lado de Misaki, mirando como este lo ignoraba por hablar con su ídolo…
Dolor
Sintió un fuerte dolor al verlos conversar y reír, pareciera que él no estaba en ese lugar. Emerald sabía perfectamente que Ijuuin no podía verlo, no, culpaba a Misaki por ignorarlo simplemente por aquel idiota, si, ese mangaka necesitaba una lección. Sonrió de lado al tener una idea.
Misaki conversaba con el Mangaka, cuando de pronto, sintió como un escalofrió cubría su espalda, nervioso empezó a llamar en pensamientos a Emerald, sin respuesta alguna, ahí se dio cuenta que tenía que actuar rápido o sino su ídolo sufriría, sufriría el enojo de Emerald
—Ijuuin- Sensei, me encanto conversar con usted pero temo que…— Miro con temor como las luces del supermercado empezaban a parpadear— ¡M-m-e tengo que retirar! — Sintió como Ijuuin tomaba su brazo — ¿Takahashi- kun? — Pregunto antes el Mangaka, con una de sus sonrisas coquetas
— ¿S-sí? — Misaki sentía como Emerald se estaba controlando, sentía una gran presión en su cabeza, junto a demasiadas palabras distorsionadas, provenientes del ya inestable de ojos negros
—Quisiera saber si irías conmigo a una si…— Las palabras de Ijuuin se cortaron, ya que una lata de sardinas golpeo fuertemente la cabeza de este— ¿Pero qué…?— Se pregunto desconcertado el Mangaka, pero antes de formular su pregunta, dos latas mas atacaron el cuerpo de Kyo
Misaki abrió los ojos al ver como la persona que tenia al frente era golpeada, llamando la atención de otras personas al ver como un objeto tras otro era lanzado, sin algún proveniente. Misaki miro como tras otro golpe en la cabeza, Kyo caía inconsciente al piso, Misaki sin saber qué hacer, abrazo al Mangaka, recibiendo los golpes
La gente estaba cubriéndose de los grandes y peligrosos objetos que venían de algo desconocido, solo se escuchaban los vidrios rotos y el intento de llamar a emergencias de algunos. Emerald, en su furia, volvió a ver el lugar donde estaban llegando todos los objetos, su sorpresa fue demasiado grande al notar que estaba golpeando a otra persona, miro como Misaki recibía los golpes, su gran enojo desapareció mientras que los objetos se detenían, al igual que los gritos de algunas personas
Miro como Misaki yacía inconsciente, al igual que su acompañante, escucho el sonido de las ambulancias y patrullas, volteo a ver todo el supermercado, los vidrio rotos y todos los víveres se encontraban destrozados, miro otras personas con heridas y trago saliva al darse cuenta que, él había sido el culpable de aquel desastre
Miro con terror como se llevaban las ambulancias a las dos personas las cuales había atacado violentamente, se tapo la cara con sus manos mientras que lentamente desaparecía más y mas.
Dos horas más tarde, un escritor al borde del colapso nervioso conducía hacia el hospital, hace quince minutos le habían llamado de aquel lugar, comunicando el hecho de que su amado había sido herido en el atentado que había pasado en el supermercado, hace dos horas ¡Dos horas, eso era demasiado tiempo!
Al llegar al hospital, fue llevado por una de las enfermeras a la habitación donde se encontraba su amado, el doctor le había informado que no había nada en que preocuparse, simplemente tendría que esperar a que despertara para otro chequeo mas. Al recibir las noticias, sintió como el aire volvía a sus pulmones.
Miro detenidamente a Misaki, tenía algunas cortadas en todo el cuerpo, junto a un moretón en el ojo derecho, volteo la mirada hacia otro lado, simplemente no quería ver a su amado en aquella condición. Agarro aire y lo soltó mientras que agarraba la mano de su pareja, levantándola hasta llevarla a sus labios y besarla
—Idiota, me has dado un gran susto— Susurro Akihiko mientras que acariciaba la mano de Misaki, haciendo que este susurrara algo— Emerald…
— ¿Ah? — Pregunto Akihiko al escuchar algo ¿Emerald? Confundido dejo la mano de Misaki y salió a fumar.
— ¡Emerald! — Grito Misaki mientras que despertaba, sintió unas fuertes punzadas de dolor en todo el cuerpo, abrió sus ojos mientras que sentía el aroma del hospital, miro de a un lado a otro y miro que a un lado de su mano se encontraba el reloj del escritor, cerró los ojos mientras que susurraba
—Emerald…— Este apareció, su semblante era indiferente, sus ojos reflejaban arrepentimiento, el universitario abrió sus verdosos ojos mientras que miraba a Emerald
— ¿Y bien? — Pregunto Misaki mientras que fruncía el ceño, miro como a quien le hablaba se encogía de hombros— ¿Estas feliz? — Volvió a preguntar, teniendo el mismo resultado del otro
—Yo, lo siento— Se disculpo Emerald mientras que miraba a Misaki a los ojos, el universitario iba a hablar pero el doctor entro, junto a unos policías
—Buenas tardes, quisiéramos hacerle algunas preguntas, después de que el doctor le haga su respectivo chequeo— Hablo uno de los policías, esperando alguna respuesta del menor, este asintió, asiendo que los policías se retiraran de la sala, dejando libre al doctor de revisarlo.
Minutos más tarde, los policías se encontraban haciéndole preguntas al menor
—Bien ¿Vio quien fue el causante del ataque? — Pregunto uno de los policías. Misaki miro hacia la ventana
—Yo simplemente mire las cosas volar— Susurro con dolor, Emerald escuchaba cada respuesta de Misaki, sintiendo como su pecho dolía con cada respuesta seca que daba, se sentía culpable, culpable de no poderse controlar, culpable de haber lastimado a aquella persona. Si tan solo no hubiese estallado en aquellos celos…
— ¿Volar? — Preguntaron los policías desconcertados
—Sí… ya saben, como levitando— Aclaro el menor, haciendo que los policías se miraran entre sí— ¿Se encuentra bien? — Preguntaron al no encontrarle sentido a la respuesta
—Claro, yo simplemente estoy diciendo lo que mire— Contesto el menor, mirando con molestia a los policías, estos, sin encontrarle coherencia alguna a las palabras del universitario, se retiraron sin respuestas, ya que todos los heridos recitaban las mismas palabras ‘’Como si los objetos volaran’’, no le hallaban el mínimo sentido
Aunque, las palabras tenían más que sentido para ellos, habían visto como los objetos atacaban a esas dos personas inconscientes, una gran incógnita para los noticieros de Japón
—‘’Hoy hubo un extraño atentado en el supermercado de la zona norte de Tokio, dejando a diecinueve heridos, ningún muerto. Las victimas recitaron que no vieron quien lanzo los objetos, ni quien fue el que destruyo los víveres…’’
Aquella noticia, se quedo con el gran nombre de ‘’El ataque fantasma’’
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nekomimi fujoshi (*) .
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Hermosho me encanto ♥
perdonar tarde un poco en leerla u.u
la cosa se pone buena *-* conti (si puedes claro x'DU)
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Kajika Sama .
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•Alice Miu•
Acabo de leer este bello fick tuyo y espero que lo continúes, no puedo creer que misaki tenga una doble personalidad y que sea un asesino, que esta bajo las ordenes de una desquiciada mujer, espero que pronto pueda salir de este oscuro negocio.
Algo me dice que akihiko tiene algo que ver con el encarcelamiento de esa mujer que misaki conoce, y eso resultaría que misaki tendría que matar a usagi-san, espero ver que mas va a pasar.
Nos leemos
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kim~. .
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Sigueloo, por favor 
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Emerald MeurtrierAkihiko x Misaki - Romance, Misterio -Resumen adentro- |
