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LenkaUtatane27
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-¡Sii! ¡Hoy es navidad!- exclamo feliz la pequeña Gakuko- ¡Regalos, regalos, regalos!- repitió dando vueltas por todo el lugar.
Su hermano suspiro- tienes que esperar a que sea medianoche- dijo Gakupo amablemente.
La menor bufo molesta esta bien...- dijo sin gana alguna- espero que me traiga los guantes de boxeo que pedi- dijo con brillitos en sus ojos.
Gakupo sonrió, su hermanita de verdad era ruda- de seguro que si- le animo.
Gakupo, de 18 años, mantiene a su hermanita Gakuko, de 10 años.
Sus padres murieron hace 3 años, y gracias a la gran herencia que les dejaron, pudieron vivir cómodamente.
Ambos hermanos estaban durmiendo comodamente, cada uno en su habitacion-¡Nee! ¡Gakupo-nii! ¡Gakupo-nii!- susurraba Gakuko zarandeando de un lado a otro a su dormido hermano- ¡Despierta!- agarro una almohada y empezo a golpearlo.
El mayor lentamente abrió sus ojos y se sentó en la cama ¿Que sucede Gakuko? ¿otra vez pesadillas?- pregunto somnoliento.
La niña negó -¡No! ¡Hay alguien en la casa!- dijo bajito.
Gakupo se despertó del todo -¿¡Que!?contestó sorprendido.
Gakuko suspiro cansada- se parece a Santa, pero...- se quedo callada.
-¿Pero que?- dijo su hermano incitandola a seguir.
-Ve a ver tu mismo- dijo la niña.
Silenciosamente, Gakupo bajo las escaleras, y quedo sorprendido al ver lo que habia, sonrió pícaramente y subió las escaleras -Gakuko, a pesar de lo que escuches ahí abajo, por ningún motivo salgas de la habitación ¿Entendido?- advirtió.
La niña asintió y prendió la televisión.
Gakupo cerro la puerta tras el y se dirigió hacia el lugar donde estaba antes.
El desconocido estaba bajo el árbol de navidad, una gran capa roja lo cubría -Gakuko Kamui... Gakuko Kamui...- susurro como buscando algo.
El pelivioleta lo diviso, pero antes de dar un paso, el desconocido lo apunto con un arma- ¿Quien eres?- pregunto la figura, amenazante.
Era un chico, de cabello color plata y piel nívea, suave al tacto. Ojos de diferente color, uno celeste y el otro verde manzana. La capa que lo cubría se abrochaba, dejando ver solo una parte de sus botas.
Gakupo sonrio- eso debería preguntar yo- dijo burlón y sin inmutarse.
El peliplata suspiro- soy el hijo de Santa Claus, Piko- dijo e hizo una reverencia -mi padre se enfrmo, y lo tuve que cubrir en su trabajo- dijo, el pelimorado se le acerco y le apunto el arma en el pecho- ahora... ¿Quien eres tu?-
El mayor sonrio y bajo el arma con su dedo- Gakupo Kamui, gusto conocerte- dijo amablemente y tomo al menor de la cintura, apegandolo hacia su cuerpo- Te comeré pequeño- susurro acercándose a la boca del menor.
El peliplata suspiro- estoy insatisfecho sexualmente. No tengo nadie allí con quien fornificar, así que acepto tu prupuesta- dijo y paso sus manos por el cuello del mayor- solo hazlo rápido, tengo regalos que entregar- sonrió y lo beso apasionadamente.
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*Lee de nuevo el fic y después mira un santa claus* ... ¿Debería traumarme?
Okno, pero en serio... ¡Waaa! ¡Es genial! Nunca he leído un PikoXGakupo D: ¿o si?
Bueno, eso no es lo importante, me gusta, me gusta mucho cx ¡Lemmon! \(*A*)/
Ese Piko es un loquillo eue ¡Conty conty! (Por algún motivo me acorde de la canción
"Merry Sex-mas" de Len xD)
Saludos~. -
LenkaUtatane27 .
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Debí ponerla para antes o un poco después de navidad... Pero igual (?
Piko beso con mas pasión al mayor, claramente correspondido.
Entre besos y caricias, el menor hizo que Gakupo se sentara en el sofá y el arriba.
Ambos respiraban agitadamente- Esto se pondrá divertido...- susurro sensualmente Piko en el oído del otro, y de paso le mordisqueo el lóbulo.
Gakupo tomo de las nalgas al menor y lo apego aún más a él, y le quitó la capa que tanto incomodaba.
El albino llevaba una camiseta roja, apegado a su cuerpo de color rojo con algunos pompones blancos pegados en los bordes, corta hasta las costillas.
Usaba un short del mismo estilo, corto. Medias blancas con unos tirantes que conectaban con el short, ademá s de una liga en la parte de los tirantes en donde guardaba su pistola, unas botas negras estilo militar hasta las rodillas y una pequeña gargantilla roja adornaba su níveo cuello.
El mayor lo miro- te ves demasiado violable- dijo con su voz aterciopelada y mordió el descubierto hombro del menor, dejando una marca y sacando un sonoro gemido.
-Ah...- suspiraba el albino al sentir la por ahora pequeña erección del mayor palpitar en su trasero- mírame- dijo y agarró su rostro, obligando a que ambas miradas se conecten. Sonrió y lo beso apasionadamente, con necesidad.
Ambos estaban descubriendo el calor del otro, explorando sus bocas.
Las lenguas se chocaban y enredaban, danzando frenéticamente.
Los dos chicos se separaron por la falta de aire, dejando uniéndolos un fino hilo de saliva.
-Quien diría... Que el hijo de Santa puede ser todo un pervertido...- dijo Gakupo empezando a remover las medias del menor, las botas ya se las había sacado tiempo antes.
Piko sonrió malicioso- ¿Sabes? Mi padre no es como todos creen, no es gordo ni anda por ahí diciendo "Jo jo jo" con mejillas rosas. Solo los niños se creen eso. Mi padre es todo lo contrario a eso...- dijo y se relamió los labios. Gakupo se imagino a un hombre barbudo, de músculos formados y con traje militar en rojo, con una ametralladora en la mano y un cigarrillo en su boca. Tragó saliva sonoramente- Como dicen por ahí, Santa Claus lo ve todo...- intimidó al mayor.
Gakupo carcajeó y mordisqueo el cuello del menor, arrancando de una mordida la gargantilla- Correré el riesgo por ti- le susurro y fue marcando la piel del otro hasta llegar a su hombro.
Deslizo la cinta que estaba atada en la espalda del menor, sosteniendo la minúscula prenda que vestía segundos antes.
Piko solo suspiraba y se aferraba más al sillón, cerrando sus ojos entregándose al placer. En un movimiento rápido, él quedó bajo Gakupo, que devoraba sus pezones con gula, y las manos del otro se aproximaban a su miembro ya despierto- ¡Agh! ¡N-No muerdas t-tan fuerte!- gimió al sentir los dientes del mayor en su hombría, mordiéndole aun a través de la tela.
-¡Tu no estas desnudo!- exclamó el menor al ver que Gakupo estaba vestido totalmente, mientras que el estaba completamente desnudo.
- Entonces, desvisteme-
Piko chasqueo la lengua. Tomo la camisa y de un solo tirón la arrancó. Se elevó un poco y marcó toda la piel que estaba a su paso, dejando marcas rojizas que a los segundos, se volvían ligeramente moradas.
Gakupo se retiró de arriba del menor- volteate- dijo con autoridad.
El peliplata le hizo caso y se volteo, elevando su cadera. Tembló un poco al sentir la cálida lengua introducirse lentamente en su entrada, soltó un ronco suspiro.
El mayor tomó las nalgas que tenía enfrente y las separó, haciendo aún más espacio a su lengua- estas listo- dio y posó la punta de su miembro, tratando de hacerle el menos daño posible al menor.
Piko gimió un poco- Siempre estuve listo- susurró con una sonrisa. Empujó su cadera hacia atrás, haciendo que el miembro de Gakupo entrará en una sola estocada- No seas cariñoso conmigo, no soy un niño- dijo moviendo su cadera, causándole más placer al mayor.
El peli morado sonrió de lado- Como digas, después no te arrepientas- dio una salvaje estocada, tocando ese punto que hizo que Piko soltara un pequeño grito. Se inclinó hacia delante y saboreo la dulce y blanca piel que le servía, mientras disfrutaba la estrecha entrada del peliplata contraerse a cada estocada.
Se cansó de la posición; y sin salir del menor, hizo que se sentara sobre su miembro- ¡Ah! ¡Ah! ¡Más!- gemía Piko aferrándose al cuello del mayor, mientras este daba salvajes toques al punto que le hacía llegar al máximo placer.
Unas pocas estocadas más y los dos sabían que no aguantarían mucho.
-Piko, me correré...- suspiro Gakupo llegando al éxtasis.
-¡Que sea fuera de mi! Todavía tengo que entregar regalos- dijo con un hilo de voz, cegado por el placer.
El mayor río, pero no salio del menor. Se corrió ahí mismo.
Piko al sentir la escéncia del mayor llenarlo, no pudo evitar correrse en el abdomen de ambos.
-¡Miserable! ¡Dije que no!- se quejaba pero a la vez en un tono divertido. Piko beso a Gakupo por última vez y se levantó.Chasqueo los dedos y estaba limpio y con su ropa puesta.
Gakupo también estaba vestido, se levantó de y abrazo al menor, que correspondió su abrazo gustoso- ¿Cuando volverás?- le pregunto mientras lo alzaba en sus brazos y lo elevaba hacia el cielo.
Piko río tiernamente, su debilidad era que lo trataran de esa forma- Solo espérame, volveré el año entrante- contesto y acarició las mejillas del mayor. Se fijó la hora y suspiro- Me tengo que ir Gakupo- le besó la mejilla y sonrió- te extrañare- dijo y se posó en medio de la sala, su cuerpo brillaba y desaparecía.
-¡Espera!- exclamó Gakupo intentando abrazar al menor, pero cayó al suelo. Suspiro y se levantó. Se fijó en su mano,tenía la gargantilla de Piko, se fijo y esta tenía unas pequeñas incrustaciones de diamantes. Sonrió.
Se escucho un estruendo arriba de la casa. Gakupo subió rápidamente.
-¡Gakupo-nii! ¡Voy a tu rescate!- Gakuko derribó la puerta de una patada; en su cabeza llevaba un casco de moto y dos pistolas en sus dos manos.
-¿Porque pateaste la puerta? Estaba sin llave- dijo Gakupo apoyándose en la pared.
-Ya sabia, solo quería darle más estilo- dijo la pequeña mientras bajaba despreocupadamente las escaleras- ¡Los regalos ya están!- gritó y directamente se fue al arbol.
"¿Regalos?" se preguntó el mayor confundido "Piko debió dejarlos antes de irse..." bajo las escaleras para ver a su hermanita.
Gakuko tenía en sus manos unos guantes con motivos de calaveras violetas y celestes- ¡Wow! ¡Esto es genial!- exclamó maravillada.
Se adentró de nuevo al árbol y sacó otro paquete, más grande que el anterior. Arriba tenia una nota, la arranco y la leyó en voz alta- "Para mi pequeña cuñada Gakuko Kamui, espero que te guste pequeña. De Piko Utatane"- finalizó de leer y miro a su hermano- ¿Quien es Piko Utatane?-
Gakupo se sonrojo- creo que mi pareja...- dijo con algo de confusión.
La menor levanto sus hombros- un cuñado esta bien- dijo y volvió su vista al regalo.
"¿¡Como sabe que Piko es hombre!? No lo mencionó en ningún momento en la carta"
Gakuko abrió el paquete y quedó sumamente maravillada. Sacó el contenido del regalo; una Maverick M4A1 Carbine*- ¡Una Maverick M4A1 Carbine! ¡Como la de Counter Strike!- exclamó sumamente emocionada. Se arrimo a la caja y había algunas municiones, un paquete que decía: "Municiones Infinitas".
Gakupo se asustó- ¡Gakuko! ¡No puedes usar eso!- dijo quitándole el arma de las manos.
Gakuko casi le pega la nota que dejó Piko en la cara- Pd: Si dices "Gran Sesamo-dono", el arma se convertirá en una de juguete, además de su contenido- leyó.
El mayor suspiro y le entrego el arma- solo ten cuidado, no lo uses en nada que tenga vida o que sea demasiado valioso... Y que los vecinos no se enteren- le advirtió autoritario- Vete a dormir ahora, es muy tarde para que estés despierta jovencita-
La menor chasqueo la lengua- ¡No! Quiero jugar con la pistola- dijo en tono de berrinche, pero no tuvo otra que aceptar al ver la mirada que le enviaba su hermano mayor- Ok, ok... Hasta mañana Gakupo-nii- se despidió y se fue a su cuarto a descansar.
Gakupo suspiro, tenia confianza en que su hermana no tocaría el rifle hasta que el le dijera.
Suspiro y estaba por irse a su habitación para dormir, pero una fuerte sensación le decía que vaya al árbol de navidad.
Bajo el árbol, se encontraba un largo paquete que tenía una nota.
"Querido Gakupo-san:
¡Gracias por todo! Y no me retrase, osea... ¡Soy el gran Piko Utatane!
Volviendo a lo otro... Te entrego este paquete para que uses su contenido cuando este contigo, y solo puedes usarlo conmigo ¿Entendido?
Con mucho amor: Piko Utatane"
El peli morado sonrió y desató el moño que tenía y destapo la caja.
En un estuche, había un látigo doblado, lubricante y unas cadenas.
Sonrió de lado- Con mucho gusto los usare...-
OwO
*= Un arma, un rifle de asalto muy popular en el juego Counter Strike por su precisión.. -
Rosalya Elizabeth .
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Ahdhaq ajsjsnndjs *!!!!* *muere de derrame* genial!!! Kyaaa
Ese Piko 7u7 me encantó!.
El sustituto de Santa Claus -Twoshot--¡Nee! ¡Gakupo-nii! ¡Hay alguien vestido de Santa en la sala! pero tiene ropa diferente...- |
