Lo que nos une (SasuNaru) +16 - ¡CAPITULO FINAL!

Tras volver a Japón, Sasuke de ahora 15 años se reencuentra con el antiguo amor de su niñez, Naruto, quien desata antiguos sentimientos en él y así comienza el camino de descubrir su propia sexualidad

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  1. Celestica~
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    Sasuke se levantó temprano por la mañana, a pesar de haber dormido menos de cuatro horas se sentía feliz y pensaba en Naruto, en todo lo que había pasado el día anterior, en que se sintió feliz, porque Dios, él le daba alegría aunque sólo estuviese inmóvil junto a él. No pudo evitar sonreír un poco. (porque si hubiese podido evitarlo, lo habría hecho).


    –Veo que te hizo bien estar con Naruto, no soy ningún idiota, Sasuke. -dijo Itachi mientras se acercaba y agarraba su rostro bruscamente-



    CAPITULO CINCO:

    "Qué pasará ahora"







    –¡Sueltame! -dijo Sasuke quitándo la mano de Itachi-
    –¡Deja de comportarte como un idiota!, ¿por qué no maduras de una vez Sasuke?
    –¡No entiendo cual es el maldito problema Itachi!
    –Es él, eres tú Sasuke, eso no es lo que nuestro padre que...
    –¡Cierra la boca Itachi! Tú padre ya no existe, ¡Sólo es un jodido recuerdo!
    –¡Calla! -Itachi golpea en la cara a Sasuke- (algo bastante extraño ya que Itachi es partidario de la paz, pero sabe que Sasuke no sería capaz de devolverle el golpe). No hables de nuestro padre Sasuke.
    –No vuelvas a tocarme Itachi, no eres nadie para decirme que estoy haciendo mal las cosas. -Sasuke camina hacia su cuato y su hermano lo sigue-
    –Es justo lo que estás haciendo hermano, créeme.
    –Yo jamás me metería en tu vida ni decidiría si está bien o mal lo que haces, estás celoso, porque yo me siento mucho mejor que tú, ¡Sólo eres un amargado a quien nadie soporta!
    –Hermano... -Itachi no encuentra la manera de expresarse-
    –Eres tú el que debería salir con sus amigos, no yo, ¿O acaso no tienes?. Entonces puedes ir a un bar a ver si encuentras a alguien que te ame un poco, aunque no creo que encuentres a nadie, te quedarás sólo y seguirás siendo miserable.
    –¡Detente ya Sasuke! Es por tu bien. -Itachi se lamenta-
    –Entonces di las cosas por su nombre, ¡Confiesa que te mueres de vergüenza por lo que la gente pensará al saber que tienes un maldito hermano homosexual! -dijo Sasuke, fuera de sí-
    –Hay algo que tú no sa...
    –¡Maldición!. Merezco un poco de respeto de mi propio hermano, soy humano al igual que todos los demás, ¡No soy un maldito anormal! -Sasuke cerró la puerta-


    Quedó impresionado de decir todo lo que pensaba y siempre callaba, estaba inmóvil tras la puerta, sus ojos estaban enormes y miraban a la nada, fijos. Se sentía sofocado. No fue a la escuela y era viernes, tendría que regresar el lunes. Tampoco pudo dormir, estuvo todo el día recostado, mirando el techo y pensando, no entendía el repudio de Itachi, deseó estar muerto o dejar de pensar de alguna forma, pensó en escapar, pero definitivamente no era una buena opción, Sasuke odiaba escapar de sus problemas, pero, ¿acaso el rubio era un problema? Deseó ser normal, salir con chicas, follar con chicas y que su hermano fuese el primero en saberlo y se callara. Al fin pudo quedarse dormido.

    Despertó con el ruido de Itachi golpeando la puerta.


    –¡Sasuke!...
    –Déjame en paz Itachi, si es porque no he comido, pues no tengo hambre.
    –Jugo está aquí. Es... sólo eso.
    –¿Jugo? -Sasuke bajó corriendo hacia el primer piso- pero se encontró con un pequeño detalle.
    –¿Ka...Karin? -Sasuke frunció el ceño-
    –¡Sasuke! Ho... Hola... Sasuke... Yo... Vine aquí.... Pues porque...
    –No me interesa. -dijo Sasuke indiferente- ¿Cómo estás Jugo? Veo que el baka de Suigetsu no vino, que alegría.
    –¡¿A quien llamas baka inepto?! -Suigetsu tenía la boca llena de pollo frito- ¡No comía hace días gracias a ti! Y gracias al rarito de Jugo... Que te sigue a todos lados, que fastidio...
    –Suigetsu, sabes que Sasuke me tranquiliza. Sin él, sufro de un estado bipolar en el que todo lo que deseo es golpear tu rostro... Es un gran dilema...
    –Hm, ni lo digas, sólo por eso te acompañé -Suigetsu se lamenta-
    –Bien, adiós, tengo algo de sueño. -Sasuke se da la vuelta y comienza a caminar-
    –Ehhh, ja já, olvidé decirlo -Suigetsu se toca la cabeza- Pues... No tenemos donde quedarnos.
    –Dios.
    –Tu hermano dijo que estaba bien je je. Será sólo por unos días.
    –Está bien, no entren a mi cuarto. -Sasuke se va-



    El lunes Sasuke se dirige a clases, al salir, de camino a su casa, ve a Naruto parado en una esquina.


    –Te estaba esperando -el rubio sonrió-
    –No puedo salir ahora, mi hermano me matará.
    –¡Vaaaamos Sasuke! -lo miró casi suplicándole-
    –Hm, está bien, pero sólo un rato, ¿Qué quieres hacer?
    –Vamos al cine -su sonrisa se amplió-
    –Pero no tengo dinero -Sasuke se lamentó-
    –¿Y crees que yo si?


    Cuando llegaron al cine, faltaba hora y media hora para que comenzara la próxima película.


    –Dicen que esa película es grandiosa, ttebayo!
    –Suena asquerosa.
    –¿Estás loco Sasuke? ¡Es el regreso de los Aliens! Estás loco, ttebayo...
    –Dios. -Sasuke miró al suelo- Ni siquiera tenemos dinero.
    –Se donde conseguir, acompañame al local de en frente je je.
    –¿Hm?


    Los dos se dirigieron a un local con varios juegos para niños, en un pasillo que estaba mas apartado había una máquina saca-peluches (la de la garra). Naruto metió su mano en ella.


    –Los científicos lo confirman Naruto. Eres realmente un idiota. -Sasuke miraba a todos lados-
    –Ehhh Sasuke, tranquilo, siempre funciona. Sólo que ahora... Está un poco difícil... esta maldita... máquina...


    De pronto oyen un ruido.


    –¡Alguien se acerca Naruto! Dios, ¡Apresúrate!


    Naruto cogió un fierro que había en el suelo y golpeó la máquina con fuerza, cayeron muchas monedas (y peluches) Naruto tomó todas las que pudo y un peluche que calló a sus pies. Un guardia los vio y comenzó a perseguirlos.


    –¡Corre Sasuke! je je


    Ambos corrieron por el pasillo, Naruto reía y corría sin parar, Sasuke miraba hacia atrás, el guardia corría hacia ellos, los dos cogieron el ascensor que justamente se abrió (para su suerte) cuando corrían y llegaron a la azotea del edificio.


    –Jajaja, ¡Esa fue la huida más asombrosa de todos los tiempos!, ¡Dattebayo!
    –Quisiera que te hubiesen atrapado -Sasuke sonrió- Al menos tenemos dinero.
    –Toma. -Naruto le extiende la mano-
    –¿Y este peluche? Dios, es horrible, es lo más feo jamás creado.
    –¿No te gusta Hello Kitty? Jajaja, eres un lindo gatito Sasuke jajaja -Naruto tenía la mano en su abdomen de tanto reír-
    –No. -Sasuke hizo una mueca- Eres un idiota, un completo idiota Naruto, si vinieses de un planeta sería de idiotalandia, en serio, no pienso volver a salir contigo a ningú...
    –Te quiero -Naruto lo interrumpió-

    Sasuke calló por cinco segundos. De pronto oyó un ruido.

    –Deberíamos irnos -dijo el pelinegro- Creo que... alguien se acerca.

    **

    Los próximos días fueron parecidos (más de un mes para ser exacto), Sasuke y Naruto salieron la mayoría de ellos, muchas veces se reunían en aquel árbol frente al río, pero nunca salían a lugares públicos, excepto cuando el rubio quería salir. No era que el Uchiha no quisiese, sólo que no quería tomar riesgos innecesarios.
    Un martes Sasuke se encontró a Naruto fuera de la escuela (estaba algo escondido para que no lo viesen, pero muy mal)


    —Hola -Naruto le muestra una gran sonrisa-
    —¿Por qué viniste aquí?, Hinata podría verte -Sasuke mira hacia todos lados-
    —Tranquilo, el auto está un poco más allá, quiero que vayamos a un lugar je je
    —No lo sé -Sasuke continúa observando hacia todos lados-
    —¡Vaaaamos Sasuke, no seas malo, vamos!, ¿Di que si? -Naruto hace un puchero-
    —Está bien, pero rápido -los dos caminan al auto-


    Llegaron a un tipo de mirador, donde se podía observar el mar, era un lugar algo desolado ya que no había ni un alma ahí, en ese momento, pero aún así era hermoso, aunque estaba nublado en ese momento. A Sasuke le gustaban ese tipo de lugares, le gustaba el mar, le recordaba a su infancia cuando su padre Fugaku los llevaba a pescar con su hermano Itachi, cuando se iban de vacaciones, pero no se lo diría a Naruto obviamente, el debía ocultar cualquier tipo de cosa que delatase algún sentimiento hacia el rubio u otra cosa. (Dios, Sasuke, eres un baka)


    —Sabes que me gusta el mar y no quería venir solo Sasuke, por eso te invité je je
    —Claro. -Sasuke sonríe-


    De pronto el cielo se tornó más gris de lo que ya estaba, y sintieron como el agua caía por sobre sus cabezas, por suerte tenían la protección del automóvil del abuelo Jiraiya.


    —Hm, está comenzando a hacer frío -dijo Naruto haciendo una mueca-
    —Eso creo. -Sasuke mira hacia fuera-
    —Sería bueno que fuéramos a casa, tu hermano se volverá loco... -Naruto pone su mano en las llaves para encender el auto-
    —¡No! E...Espera. -dijo Sasuke- (A quien se le hacía difícil parecer interesado en algún tipo de situación, creía que parecía un idiota)


    Se miraron, y Sasuke a diferencia de otras veces, con desespero tomó el rostro de Naruto, y lo besó, luego su cuello... Sintió el sabor de su cuello, de su piel, Sasuke lo sentía suyo, aunque lo fuera sólo por un rato, así que lo abrazó con toda su alma. Sasuke sabía que nada duraba para siempre, nada. Sólo quería tener un recuerdo, sentirlo real.

    Estaban tan cerca que Sasuke podía sentir el corazón de Naruto latiendo tan fuerte como un trueno, y con rapidez le saco su chaqueta y observó su torso desnudo que tanto le excitaba, pero ¿por qué? Naruto era el único que le causaba tales sensaciones, verlo desnudo lo excitaba completamente y sentía unas ganas increíbles de hacerlo suyo tan pronto como pudiese, no podía evitarlo, quizás eran las hormonas, quizás estaba...¿Enamorado? Así que empezó a lamer su cuerpo, y con una mirada de querer más, bajó como pudo los pantalones del rubio.


    —Sasuke -Naruto abrió sus grandes ojos, impresionado-
    —Shhhh...


    Sasuke se dirigió a la hombría de Naruto y comenzó a lamerla lentamente, primero la cabeza y luego de abajo hacia arriba. El rubio bajó todo lo que pudo su asiento para que no fuese tan incómodo, y se inclinó hacia atrás de este al sentir tanto placer. Sasuke se detuvo.


    —Vamos a atrás. -dijo seguro el pelinegro-


    Los dos pasaron por encima de los asientos delanteros para llegar a aquel lugar, que era mucho más amplio, aunque ni tanto, el auto de Jiraiya era un Opel Ascona de los años 70, a pesar de no ser muy grande, era acogedor, en especial si eran solo Sasuke y Naruto quienes estaban ahí dentro.

    Esta vez Naruto le quitó la chaqueta de la escuela a Sasuke, luego su camisa y corbata (Sasuke se veía hermoso con su uniforme escolar) después sus zapatos y pantalones. Masajeó por encima de los boxers el pene de Sasuke, quien se ruborizó al sentir el contacto con las manos del rubio. Después quitó la prenda y comenzó a masturbarlo con un buen ritmo, sin dejar de estar atento a las reacciones del pelinegro, que con los ojos cerrados daba pequeños gemidos como no queriendo ser escuchado, lo que incitaba más a Naruto a darle placer y escucharlo gemir. Para esto le practicó sexo oral, metió todo el pene del Uchiha en su boca y sin compasión bajó y subió rápidamente brindándole un gran placer a Sasuke, que no paraba de gemir tocando los cabellos rubios de Naruto.


    —Uhhh, mmm, sí, así, sigue, más rápido. -decía el pelinegro-


    Naruto le hizo caso a Sasuke y aceleró el ritmo. Con esto Sasuke se corrió en la boca del rubio, que bebió toda su semilla. Subió al cielo y bajó, abrió sus ojos y vio el bello rostro de Naruto, quien medio-sonreía para él.

    Para Naruto nada era inmoral o sucio cuando estaba con Sasuke. Para Sasuke, Naruto era sinónimo de felicidad, y la felicidad no podía traer consigo algo malo o pecaminoso, aunque lo que tenían no tenía nombre, ellos sabían lo que era.

    Los dos se recostaron en el asiento trasero, Naruto tenía su cabeza apoyada en el pecho de Sasuke. Sentían la fuerte lluvia caer sobre el techo del auto, los vidrios estaban empañados, quizás por la lluvia, quizás por hacer el amor en aquel lugar. A pesar de estar desnudos, sentían el calor del cuerpo del otro, se sentían como en casa estando juntos, como si uno fuese el hogar del otro, donde siempre quisieran estar.


    —Quisiera que todo fuera diferente, ttebayo.-dijo el rubio-
    —Lo sé. -Sasuke sonrió pero Naruto no lo vió- Pero es imposible, mi hermano me odia, y Hinata...
    —Hinata... Ella me invitó al parque mañana. -Naruto frunció el ceño-
    —Ve. -dijo con indiferencia el Uchiha-
    —Quiero que vayamos juntos Sasuke. -Naruto sonrió- Otro día puedo ir con ella je je.



    ***


    —No creo que sea buena idea estar aquí Naruto.
    —¡Tranquilo! No seas paranoico... Dattebayo -Naruto sonrie-
    —¿Y si alguien nos ve?, tu abuelo, o peor aún... Mi hermano.
    —¡Y qué! Je je, no es como si tuviéramos una cita o algo jaja, ¿Quieres un helado?, ¡Vamos!


    Caminaron por el parque comiendo helado, tal como una cita (aunque no lo aceptaran) era como si estuviesen "saliendo". El día estaba hermosamente soleado, los pájaros revoloteaban cantando, tenían suerte de que no hubiese mucha gente en aquel lugar.


    —Espero que Hinata no sospeche nada. -dijo Sasuke- Aunque no hay nada entre los dos, igualmente... Yo... Bueno, tú entiendes...
    —No, imposible, ttebayo. Le dije que estoy enfermo de un riñón, que por eso no podía salir con ella -Naruto sonríe-
    —¿Es broma? -Sasuke pone una pokerface-
    —La verdad no me dan ganas de salir con ella, pero no puedo decirle que no, mi abuelo arregló nuestro noviazgo, no puedo arruinarlo, además, ella me cae bien, aunque es algo extraña. -Naruto pasa la lengua por su helado que parecía derretirse-
    —Ella tiene mucho dinero.
    —No hablemos de Hinata. -los dos llegan bajo un puente-


    Sasuke sonríe. Quizás se sintió feliz al corroborar que Naruto no estaba enamorado de la Hyuga.


    —Sé por qué estás sonriendo Sasuke -Naruto sonríe de igual forma-
    —No lo estaba haciendo.
    —No. Claro que no. -Naruto besa a Sasuke-


    Nunca se habían besado en un lugar tan público, pero lo hicieron, sólo tenían ganas de hacerlo y ya. Sasuke cerró sus ojos, pero temía que alguien los viese, alguien que los conociera y expandiera un rumor así, ¿Qué diría su hermano? O peor aún, ¿Qué diría el abuelo de Naruto? Nervioso, Sasuke abrió sus ojos y vió a la peor persona que se podría haberse cruzado en sus caminos, quien venía caminando en dirección hacia el puente con otra persona. (Maldita coincidencia):






    Hinata Hyuga.









    CONTINUARÁ...



    ________________________________________________________________________________________


    que hará Hinata Hyuga al ver a su amado besándose con su compañero de escuela? veanlo en el próximo capítulo jsjasa :=NEKKIN:
    muchas gracias por los comentarios y las muchas visitas, me ayudan mucho a continuar esta historia :=WORKIN:
    acepto toda clase de sugerencias!!! nos vemos :=WIJIS:
     
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79 replies since 13/12/2014, 01:14   4827 views
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