No hay receta, ni regla para el amor. Capítulo 43: La historia de las bestias

¿Quién dice que no te puedes volver a enamorar? resumen a dentro, escenas para +18 (Sasunaru, Narusasu, ItaDei, KakaIru)

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  1. Mar-chan
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    QUOTE
    ¿Quién dice que no te puedes volver a enamorar?

    La vida te puede llevar por diferentes caminos, pero el problema no es elegirlos, sino tener el valor de andar en ellos y disfrutar lo que te da cada uno.

    Naruto en un adolescente que siempre le ha gustado hacer todo tipo de actividades, desde el mundo deportivo hasta el artístico, a pesar de parecer alguien alegre tiene un pasado oculto al mundo, que solo sus personas más allegaras saben. Esto le ha imperio volverse a enamorar o eso llegaba a creer.

    Sasuke Uchiha es el nuevo de la escuela y el país, antes disfrutaba una vida de lujos en China junto a su familia. Siendo el primero de su clase, popular con las chicas y amigo de los varones, algo que podríamos llamar perfecto, reconocido por ganar varios torneos de las artes marciales Bōjutsu.

    Pero como dije antes de los caminos de la vida son insertos y cambian, al llegar una terrible crisis en la empresa de su padre, las inversiones cayeron terminando como resultado a la prestigioso familia Uchiha llena grandes deudas. Obligados a “mudarse” a un país como Japón, Sasuke tendrá que empezar de cero.

    ¿Sera que el destino decidió jugar sus cartas en estos dos chicos? ¿Qué cosas pasaran a lo largo de sus días?

    Capítulo 1
    El comienzo



    La mañana de invierno traía un hermoso cielo celeste, con un poco de viento fresco pero dejaba que el sol saludara a las personas madrugadoras haciéndoles sentir su calor confortable, igual que la caricia de una madre, diciéndoles que hoy será un bien día.

    En la escuela de Konoha los alumnos se dirigían a sus respectivos salones, mientras pasan los saludos con otros compañeros o amigos, escuchándose relatos de lo ocurrido en el fin de semana. Mientras en la oficina del director se encontraba en su escritorio Hiruzen Sarutobi, enfrente a él un padre y su hijo esperando a que terminara de leer el expediente del joven.

    -Bien – paso un poco más las páginas de la carpeta – Todo está en orden, ninguna falta, notas excelentes y un buen deportista- Bajo los papeles para poder observar al hombre.

    -Esperamos, no tener problemas por la época-

    -En absoluto, no creo que sea ningún desafío el poder adaptarse y conllevar con sus compañeros. Le dedico un pequeña sonrisa a su futuro alumno, a pesar de que el mismo lo miro con indiferencia.

    - Bueno entonces yo me tengo que marchar al trabajo- el Padre se levantó de la silla para dirigirse a la puerta, deteniéndose un instante con la mano en el picaporte – Un coche te vendrá a buscar ¿si hijo?-

    -Si padre- respondió el adolescente con respeto

    El hombre se dio la vuelta realizando una leve reverencia al director – Señor Sarutobi dejo a mi hijo a su cuidado- así salió después de la habitación.

    Con la retirada del padre solo quedaron el joven y el dueño de la oficina en silencio, este se levantó también de su silla siguiendo el camino que tomo la última persona que salió siendo asechado por la mirada oscura del chico.

    -Entonces no me queda más que decirte bienvenido- se dirigió al menor tomando el picaporte y abriendo la puerta –Acompáñeme lo llevare a su clase-

    Caminaron por un pasillo angosto sin dirigirse la palabra, cuando se cruzaron con tres cuadros colgados en la pared, el adolescente se quedo observándolos con detalle en el primero se encontraba un hombre joven de pelo color azabache largo, su piel era morena y tenía una pegajosa sonrisa.

    -El fundador de la escuela de Konoha y director Hashirama Senju- Señalo Sarutobi al ver su interés y poder sacar algo a conversación – El segundo es su hermano también director y fundador de la policía de Konoha Tobirama Senju – Mostró en cuadro alado del primero.

    El segundo director era muy diferente a su hermano, tenía el pelo corto de color blanco, su piel pálida y llevaba tres líneas rojas en la cara una en la pera y dos en las mejillas su mirada era severa y cortante, el joven se sintió identificado con este cuadro.

    -Y por último Hiruzen Sarutobi, tercer director de la escuela Konoha- termino de presentar las imágenes colocándose alado de su retrato con orgullo.

    No había mucha diferencia solo el paso del tiempo, del pelo castaño y la piel lisa más dos marcas debajo de los ojos.

    Salieron del edificio donde se ubicaba la administración y la dirección, caminando por el patio donde se pasaban los recesos, en esa época de invierno era menos apreciado por el frió y los cerezos se encontraban secos tampoco las flores querían levantarse para poner color a ese jardín, los pájaros habían volado y no volverían hasta pasado esos tres meses también algunas mañanas bajaba una neblina espesa era el perfecto escenario de terror. En el siguiente edificio las paredes eran Blancas y las ventanas más grandes dejando entrar una buena cantidad de luz.

    Hace solo unos minutos habían comenzaron la clase en el salón 126 la profesora Temari estaba pasando lista a las chicas cuando tocaron la puerta, la persona en entrar fue el director Sarutobi todos los jóvenes se levantaron y saludaron con respeto en una reverencia.

    -Buenos días director, estaba tomando lista a los alumnos- Se dirigió la profesora.

    Era una mujer joven no más mayo que a quienes enseñaba se contarían unos 25 años, su pelo recogido por dos coletas, rubia y de ojos verdes musgo.

    -Buenos días profesora Temari- saludo el hombre –Tengo un anuncio para sus alumnos- sin esperar respuesta siguió – Chicos hoy van a recibir un nuevo compañero de clases- Izo señas con la mano para que el anunciado entrada al salón- Les presento a Sasuke Uchiha, espero que representen su uniformes y se lleven bien con el-

    Las chicas estaban asombraras por el nuevo, con pelo azabache medio largo pero en punta, la mirada perdida con esos ojos oscuros tal carbón, tenía desabotonada la parte de arriba de la camisa dejando relucir su piel blanca como la leche y la mochila sostenida de una sola hombrera lo hacía parecer todo un rebelde. Cuando el director se retiró Temari tomo devuelta el control de la clase ya alborotada.

    -Bueno chicos silencio por favor- Miro al chico nuevo – Sasuke puedes sentarte alado de…- Busco por el salón -¿Y Naruto Uzumaki?-

    -A un no llega profesora- Se levantó una joven de pelo rosa respondiendo a la pregunta.

    La profesora lanzo un suspiro de frustración por la ausencia de su alumno –Ese es el asiento de Uzumaki- Señalo un banco doble vacío –Toma asiento por favor para empezar con la clase-

    El azabache obedeció y dejo su mochila del lado de la ventana.

    -Seguiré tomando lista- Anuncio la rubia mientras la paz volvía como al principio. Cuando de repente.

    _______________________________________________________________________________


    La mañana de invierno traía consigo un viento frio del sur, a pesar del cielo despejado y el sol intentando calentar débilmente el día, dentro del gimnasio de “artes marciales Ninja” no se sentía esa molestia, aun no había abierto y el lugar estaba casi desierto a excepción de unos gritos y golpes que hacían eco por la sala de natación, de las bicicletas y cintas.

    Un joven rubio golpeaba con bastante fuerza las woonden dumy* su agilidad era de admiración como conseguía el constante movimiento de un lado al otro mientras sus piernas coordinaban de una forma que parecía danzar a una música invisible, las patadas que daban al aire marcaban el equilibrio mientras se sostenía con solo la punta de los dedos del pie apoyados sobre el suelo, terminaba de combinar junto a sus manos que agarraban un palo largo de madera.

    En los ojos celestes del chico había un brillo particular que aparecía en cada grito extraído de su garganta aumentando así la fuerza del golpe y concentración. Sin saber que era observado por un hombre joven de piel morena y una cicatriz en el medio del rostro.

    -Cuando me despedí de ti ayer, se suponía que te irías a tu casa- la vos proveniente de la segunda presencia hizo que la primera volteara a verla y mostrara una sonrisa zorruna.

    -Si ya se- hablo el rubio dejando a un lado su tarea –Pero no podía dejar el entrenamiento- Se justificó.

    Comenzó a caminar para su derecha donde se encontraba una estantería con una gran cantidad de bastones distintos, lo deposito en su respectivo lugar para tomar otro del extremo y manejar lo como una katana.

    El moreno tenía el pelo atado con una cola de caballo notándose que era largo, suspiro y se dirigió al mismo lugar al que a hora estaba alejándose el menor. Tomo otra de las armas y choco contra la que sostenía el rubio en forma de desafío.

    -Pero se supone que debías ir a descansar- comenzó a atacar mientras su oponente se defendía.

    -Dormí aquí adentro, una hora- lo interrumpió el ojos celestes mientras daba una vuelta haciendo vibrar el palo al contacto de su contrincante.

    -Sabes que refiero a eso- se expresó con frustración en su siguiente golpe.

    Devuelta estaban las dos armas chocando, el moreno empujo para adelante con la intención de tirar a su oponente al suelo pero no contó que el rubio antes de caer realizara unas verticales tomando distancia para volver así a su posición inicial. Con un fuerte grito de poder se lanzó a atacar al joven danzarín que esquivaba y sonreía por los intentos fallidos de su sensei.

    El rubio disfrutaba aquellas peleas junto al mayor igual que con otros amigos suyos, eran momentos en que podía liberar cualquier tensión quitar esos pensamientos los cuales atormentaban su mente. En el momento que daba un salto esquivando uno de los ataques de costado del mayor este elevo el bastón para arriba pareciendo cortarlo por la mitad, en seguida aprovechando la ausencia de calzado el rubio agarro la madera sosteniéndose encima, sintiendo como era impulsado mas alto de lo planeado fue hacia adelante pasando por encima del moreno que miraba desconcertado. El hombre en el momento que había creído atrapara a su alumno al no tener un soporte fue sorprendido en cuestión de segundos sintiendo por ultimo algo empujaba su espalda obligan dolo a caer al suelo.

    El sensei sin dar el brazo a torcer a pesar de escuchar la constante riza el menor que burlaba sobre su caida se puso de pie, chocando mirada de marrón con celeste este ultimo sonrió de costado colocándose en guardia, aguardando el ataque de su oponente. La adrenalina recorría sus cuerpos cada vez que peleaban, cuando tomaban uno de los bastones, tan solamente el estar hay presente sentían el toque de excitación y energía atrayendo los siempre al mismo lugar.

    Al pasar los minutos sus respiraciones se fueron acelerando llegando a un punto que no podían expulsar mas energía, decidieron entonces terminar la práctica mientras devolvían las armas del combate a sus respectivos lugares de descanso, el moreno observo que el rubio estaba completamente sudado también parecía que con cada inhalación y expulsión de aire llevaba consigo un gran peso, se encontraba con el dorso desnudo y solo unos pantalones azules largos con el escudo de su Institución “Konoha”.

    El chico de ojos celestes tomo una de las botellas que había en un banco para refrescar su garganta, una vez terminado empezó a tirarse del resto del líquido en el pelo para sacar la somnolencia, pues era verdad que solo no había dormido no más de una hora.

    -¿Sabes que hay duchas para que no ensucies el dojo?- le preguntó retórica mente para regañar su falta, tomando así una toalla y lanzarla a su dirección.

    Al verse tapado los ojos por el proyector echo una leve risa –No lo ensucie todavía- dejando la botella, tomo con sus dos manos la toalla para secarse el rostro encantador y los pectorales bien marcados –Además traje ropa para bañarme estaré aquí hasta mañana, mi madre confirmo no tener problemas- Atajando así los reproches de su sensei

    El mayor lo miro con expresión de duda mientras analizaba las palabras de su alumno – ¿Estás seguro que ella te dejara faltar a clases? Mas acercándose la época de los exámenes-

    -¿Qué dices Iruka sensei?- Dejo la toalla sobre sus hombros pero sin soltarla de los extremos –Si hoy es sábado, ella me dejo todo el fin de semana para entrenar-

    Era imposible llevarle la contra cuando mostraba esa sonrisa de felicidad e inocencia pero el moreno en cambio que ya tenía vario tiempo conociéndolo podía ser la excepción al caer en esas jugarretas.

    -Naruto, hoy no es sábado- Espero a ver la reacción pero él seguía con su rostro tranquilo –Ayer fue jueves y hoy es viernes eso significa que tiene clases- Fue diciendo las palabras despacio para que se terminara entendiendo.

    El ambiente se tornaba pesado con el rubio cayendo de su nube de fantasía a el duro suelo de la realidad, giro desesperado en busca del almanaque donde remarcaba perfectamente el día en fecha viernes.

    Esta vez no fue un canto lo que salió de su garganta, sino un grito de agonía, terror dejando por un instante sordo al moreno que reacciono tapándose los oíros.

    -¡¡¡¡¡¡AAAAAAAHHHHHHHHH!!!!!!! LEGARE TARDE- Como un jaguar en plena estepa al verse en peligro fue corriendo a por su mochila mientras la mismo tiempo se andaba colocando la remera y anudaba la corbata- Datebayo mi profesora Temari me matara si llego tarde-

    Iruka suspiro negando con la cabeza al ver lo increíblemente distraído que podía llegar a ser su alumno, ignorando la escena del joven metió sus manos en los bolsillos y camino en dirección a la salida. Al llegar dio una media vuelta viendo a su alumno a un corriendo de un lado a otro arreglándose y guardando sus cosas, increíblemente para la vista comunes a no ser que lo conocieras de mucho tiempo.

    Bajo la cabeza ocultando su risa ante el comportamiento –Vamos que te llevo en mi auto-

    Una oleada de felicidad se presentó en los ojos cual cielo -¿Deberás? Kiaaah Iruka sensei eres mi ángel guardián- Saltaba eufórico abrazándolo.

    -No es para tanto- intentaba soltarse del menor desviando así el rostro levemente sonrojado por el excesivo elogio.

    Naruto de apoco aflojo su agarre hasta dejar completamente libre a su salvador –Ya está te invitare a comer Ramen ¡Datebayo!- Tomo su mochila y fueron rumbo al estacionamiento

    -Naruto siempre dices eso pero al final no quieres ir o compramos para llevar y termino pagando yo- Dijo el moreno con una evidente cara de fastidio por las supuestas “invitaciones”

    -Pero esas veces no tenía plata- Se rascaba la cabeza.

    -Bueno basta entra de una vez- abrió la puerta del conductor mientras el otro se subía al asiento del copiloto –Te aviso que aunque vaya lo más rápido ya llevas diez minutos de retraso- Coloco la llave y cambio la palanca de cambio

    -¿Pero llegare antes del receso no?- Pregunto el rubio mientras se colocaba el cinturón pues sabía muy bien lo “animal” que era sus sensei al conducir cuando se regalo así mismo el Honda NsX* rojo.

    -En eso no te preocupes- se colocó sus anteojos de sol y piso el acelerador dejando solo una nube de humo.



    QUOTE
    Bueno chicas, este recién como dijo el título es “el comienzo” de un largo y primer Fanfic que eh realizado. Estoy súper emocionada por este día, no teman al ser críticas porque sé que no puede ser perfecto.
    No tengo nada más que decir, gracias por haberme aceptado soy una gran fan de cada una de ustedes.

    Aviso: Todos los personajes de Naruto no me pertenecen son del gran Masashi Kishimoto.

    Esta historia me ha tomado un año realizarla, así que por haberme tomado tanto trabajo no permito que haya una copia en otro foro o que solo le cambien los nombres a los personajes.

    Espero que disfruten este capítulo

    Casi también me olvidaba :=ummse: Bōjutsu es un arte marcial de bastones en Japón, me gusta mucho pero no sé muy bien como describir los combates así que me salió como pude, si alguno de los lectores practica este deporte le pido disculpas si no tomo en cuenta las reglas que no sé.

    woonden dumy: (https://image.forumfree.it/1/0/7/6/9/1/5/4/1435156678.jpg)
    Honda NsX: (https://image.forumfree.it/1/0/7/6/9/1/5/4/1435156729.jpg)


    Nueva nota: Bien algunas nuevas lectoras tal vez no sepan que esta historia la estoy modificando solo algunos puntos claves para que entiendan la trama y no tarde tanto en leer todo lo importante.

    Realmente me disculpo con las que me han seguido a lo largo de estos meses, porque debería haber hecho esto antes de empezar a subir pero me picaron las ansias al ser una novata en escribir, que no leí bien todo, por eso estoy enmendando mi error editando los antiguos capítulos.


    Edited by Mar-chan - 15/9/2016, 01:02
     
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  2. Adry_black
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    excelente!

    Esta trama promete mucho

    te felicito por animarte a Publicar tu primer fic. la primera vez que lo haces los nervios te comen y dudas sobre que tan aceptada pueda ser tu historia, pero que crees: a mi si me gustó.

    no dejaré de decir que me gustan las historias con capítulos largos, muy largos. Tanto así que cuando comento en otras historias ya me han dicho que soy impaciente y que pido demasiado jeje, pero no está de más pedirte que hagas mas largos los capis.

    me intriga saber el pasado oscuro de mi Naru y también cómo será la relación entre Sasu y él.

    espero que no te tardes mucho en Actualizar esta historia pues realmente quiero saber cuál será la primera impresión que le de Naru a Sasu y viceversa.

    te seguiré leyendo

    Matta ne

    :)
     
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  3. Mar-chan
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    QUOTE
    Aviso: Todos los personajes de Naruto no me pertenecen son del gran Masashi Kishimoto.

    Esta historia me ha tomado un año realizarla, así que por haberme tomado tanto trabajo no permito que haya una copia en otro foro o que solo le cambien los nombres a los personajes.

    Espero que disfruten este capítulo nos veremos.

    Capitulo 3
    Primer encuentro




    De golpe la puerta se abrió con un gran estruendo en el aula 126 mostrando a un joven rubio completamente agitado, la camisa se le había desacomodado y la corbata estaba por caerse.


    -Llegas tarde Uzumaki- la vos de la profesora dejo callado a la mayoría de los alumnos que habían empezado a reírse y cotillear, pues cuando Temari se enojaba daba miedo, parecía que te golpearía sin importar quien seas.

    -Lo siento profesora- se disculpó el joven con una reverencia –Es que creí que hoy era sábado-


    La explosión de risas fue tan grande que llego al pasillo y hasta aflojo el rostro de la rubia por la actitud de su alumno en ser distraído y despistado. Luego de unos minutos que algunos alumnos habían caído de las sillas o lloraban, la enfermera tendria que trabajar tiempo doble por los dolores de panza.

    -¡¡¡¡Silencio!!!!!- haciendo en segundos su aparición a la invocación de Temari –No me importa tu justificativo Uzumaki- busco en su escritorio entre los papeles –Llegaste tarde y por eso recibirás un castigo- sentencio tomando la lapicera azul y el cuaderno.

    -Si profesora- no discutió más y espero a que le entregara la hoja del castigo.

    -A hora ve a sentarte, habíamos comenzado en la página 240 del libro- Le entrego la nota –También se entrega hoy el trabajo de la clase pasada ¿Lo tienes no?- Lo miro esperando la negativa a su pregunta.

    -Sí, lo tengo en la mochila ya se lo doy- Respondió con una sonrisa orgulloso de haberse desvelado para hacer la tarea.


    Camino hasta su banco, siendo interrumpido por saludos de todos los que estaban sentados antes que él. Mostrando ser el mas social y popular entre sus compañeros, siendo por su simpatía, que siempre estaba para ayudar a los demás o tal vez que llevaba en las venas el ser un buen líder trasmitiendo, confianza, alegría a quienes le siguieran.

    -Basta de alboroto Uzumaki o ¿Quieres tener un doble castigo?- Lo amenazo Temari.

    Para la satisfacción de la rubia este apresuro la marcha, arrojo por costumbre la mochila en el asiento vacío del lado de la ventana, sentándose junto al pasillo. Un leve dolor de cabeza llego de pronto junto a sus útiles volando por todas partes, se sobo el golpe cuando miro para el lado donde le había lanzado el objeto. Un joven de su misma edad con el pelo azabache y piel blanca como la nieve con el ceño fruncido.


    -¿Qué no ves que yo estoy sentado aquí?- le reprocho con enojo.

    El rubio también se enfureció –Y tu ¿Quién mierda eres para sentarte hay y golpearme con mi mochila?-

    -Él es Sasuke Uchiha, Naruto- Le freno su compañera de pelo rosa, colocando una mano en su hombro –Es nuevo en la escuela y se quedara en este salón-

    -¿Pero porque tiene que estar junto a mí?- pregunto con capricho haciendo un puchero para ser mimado por la de ojos color verde.

    -Yo le asigne ese asiento- Esa vos no era la de su mejor amiga, dejándolo con el rostro sin sangre ya que la profesora deba demasiado miedo enojada –Haruno ayuda a tu compañero a recoger sus cosas-

    -Si sensei- Respondió la joven y junto su amigo más otros chicos que se sumaron a colaborar para poner todo en orden.

    La clase había terminado y una cantidad de chicos esperaban en la puerta la salida del rubio distraído.

    -Baya Naruto esta vez sí que hiciste enojar a Temari sensei- Dijo una chica con corbata violeta y pelo rubio largo.

    -No, eso no es nada Ino tendrías que haber visto la cara del nuevo cuando le tiro su mochila encima- Se reía el “Cara de perro” como lo habían apodaron sus compañeros –Parecía echar humo-

    -Si pero es que no estoy acostumbrado a tener que compartir el banco, saben que no es mi intención Datebayo!- Se alegraba por las charlas de sus amigos.


    Es cierto que desde que llego a esa escuela eran todos muy cordiales y respetuosos, pero ellos lo habían aceptado en su grupo sin importarles quien era o de dónde provenía, solo con su sonrisa y su determinación por defenderlos a un que también ellos a él. Eran el tipo de personas a las que se podía confiar, ellos y también…

    -Para mí deberías disculparte enseguida con él, no sabes cómo reaccionada- Le aconsejo su mejor amiga de la infancia poniéndose se a su lado derecho con los brazos cruzados –Además piensen que recién llego encima en la mitad del periodo escolar, es muy difícil hacer amigos o tan sólo adaptarse a estas alturas-

    -Si tienes razón Sakura- Pensó seriamente en las palabras de la chica –Me disculpare en la próxima clase-


    Naruto usualmente seguía los consejos que Sakura le daba ya que entendía nunca eran malas intenciones y siempre le acompañaba, además sabía perfectamente como era ser nuevo en un lugar completamente desconocido mas un lugar como Konoha, donde todos se conocían y trataban como familia.



    Debajo de un cerezo seco en el patio se encontraba un azabache refunfuñón comiendo el almuerzo.

    -Estúpido, haber actuado como si yo no existiera ¿Quién se cree que es?- Daba una bocanada a su sándwich de atún y mayonesa mientras se recostaba en el árbol.

    Había mucho silencio afuera por ser invierno nadie quería congelarse y almorzaban adentro, al haber avanzado un poco la mañana el cielo se tornó nublado y amenazaba con tormenta pero eso a Sasuke le restaba importancia, se encontraba rodeado de paz sin personas que lo atosiguen o quieran ser sociables.

    De repente una música particular invadió al silencio del lugar, metió su mano en el bolsillo trasero de su pantalón sacando así un celular de color negro con el símbolo Uchiha en la tapa.


    -Hola ¿Quién habla?- No se había fijado en el identificador de llamadas pero ya sospechaba quien podría ser.

    (La cursiva es otro idioma)

    -Hola ¿Sasuke-kun?- Sonaba muy débil la voz del otro lado del parlante, pero accesible para los oídos del azabache.

    -Hola Hinata, si soy yo- No era en realidad muy comunicativo.

    -Ah, Sasuke-kun… ¿Cómo estás? ¿Qué tal el viaje?- Hablaba con nerviosismo.

    -Bien, no me quejo- Mintió –Un poco de turbulencia- Sintió que debía preguntarle a pesar de no querer - ¿Y tu? ¿Cómo están las cosas en China?-

    -Bien- Se sorprendió la chica por la pregunta –No hay muchas cosas nuevas, tu primo Tobi no deja de llorar por que no estas-

    -Que fastidio- Se quejó de los caprichos de su primo -Él sabe que puede venir a visitarme-

    -Si pero él es…-

    -Un melodramático, molesto y cobarde- Le interrumpió Sasuke.

    -Si algo así- Comenzó a reír la chica por el teléfono.

    El sonido de la campana marco el fin del receso y la entrada a los salones, también el final de la conversación por teléfono.

    -Bueno me tengo que ir- Se disponía a colgar pero fue interrumpido al escucharse un pero del otro lado -¿Qué?-

    -Etto…- Parecía arrepentirse -Sasuke nos veremos buena suerte y dale una oportunidad a la nueva escuela-

    -Si claro- Respondió con fastidio -Chau Hinata dile a Tobi que no dramatice que nos veremos los fines de semana-

    -Si le diré, Sasuke-kun yo te qui- Le colgó, dejándola con la mitad de la oración.



    Cuando Sasuke llego a su salón había un montón de gente alrededor de su banco, usando la campera del instituto se cubrió la cabeza con la capucha y entre empujones logro sentarse en su lugar. Mirando hacia la ventana escuchando chistes y risas provenientes de los que invadían su espacio, descubriendo que toda la atención estaba en una sola persona su compañero más ruidoso.

    -Entonces nos juntaremos todos este sábado que viene- coordinaba Kiba a sus amigos -¿Aceptas Naruto?- Todas las caras se giraron al mencionado.

    Poniendo una rostro triste a los presentes contesto –Lo siento cara de perro, pero tengo cosas que hacer-

    -Naruto siempre estas ocupado ¿No es un poco fastidioso?- Le pregunto Shikamaru con un bostezo.

    -Si es verdad Naruto, debes empezar a divertirte- Jugueteaba coquetamente la chica rubia con su pelo.

    -Bueno chicos, ya saben que Naru tiene dentro de dos semanas el torneo- Lo defendía su mejor amiga cuando la situación requería.

    -Cierto se me había olvidado- Se golpeó la cabeza el joven de corte de pelo como casco.

    -Entonces cuando finalice, iremos a festejar todos a la casa de Naruto- Salto Kiba aplazando el plan emocionado.

    -Espera cara de…- se sobresaltó el rubio ante lo dicho.

    -Genial así podré ser el DJ y mostrar mis habilidades en la música- lo interrumpió una de las chicas castaña haciendo señas como girando algo con la mano y tapándose la oreja.

    -Ten ten no tengo cabina es…-

    -También podemos invitar a los que pierdan, son todos muy lindos y talvez conozca a ese príncipe- Soñaba Ino

    -¿A todos los del torneo?- Pregunto sorprendido y asustado Naruto- No creo poder…-

    -Y habrá mucha comida- se hacía agua a la boca el más gordito del grupo, masticando un paquete de galletitas.

    -Son demasiados gastos- sacaba la pobre billetera vacía.

    Sakura veía a su amigo en graves aprietos, además que sus compañeros ya estaban en otro mundo y él no tenía el pase de entrada solo por querer pincharles el globo. Con una sonrisa dulce le tomo el hombro captando así su atención, demostrándole una vez más que confiara en ella.

    Se dirigió a los alborotados adolecentes –Pero ya con tanta gente y comida no habrá espacio en la casa de Naruto, mucho menos en su barrio- Sintiéndose satisfecha de apagar el murmullo, imito de su mejor amigo la sonrisa radiante – ¿Qué tal si lo hacemos en la misma semana que el torneo? Sería más o menos el sábado- Recordaba un almanaque en su cabeza -Para preparar el salón que me dará mi tío, además después de los pre exámenes- Les hiso recordar lo más pesado de ser estudiante –También podemos hacerla temática-

    -Me gusta una fiesta a lo grande- Afirmo Kiba levantando y bajando la cabeza con las los brazos cruzados

    -Podría ser de disfraces- Sugirió Ino

    -Con espectáculos de luces- Hablo Ten ten

    -Y habitaciones para lo que se encuentran cansados- Serraba los ojos Shikamaru.

    -Eso si me agrada más Dattebayo- Se levantó de repente el rubio de su asiento -¿Todos a favor?- Pregunto mirando a todos los presentes, más feliz que nunca además de no tener que enfrentarse a sus padres y tal vez abuelos.

    -¡¡¡Sí!!!- gritaron todos levantando el brazo.

    -El profesor- alerto un alumno que vigilaba la entrada.

    Se escucharon los pasos resonado por el pasillo, hasta que entro al aula un hombre de pelo parado y color blanco al igual que su piel, “el profesor lobo”. Siempre tenía algo que le tapaba la boca en este caso llevaba una bufanda, uno de los rumores que abundaba en la escuela es que, en su infancia se juntaba con una banda de delincuentes y en una de sus peleas le había hecho perder el ojo por ello lo tenía tapado con un parche.

    -Hola chicos perdonen la tardanza pero una señora me pidió que la ayudara en llevar sus mandaros a la casa- Decía mientras se rasco la cabeza esperando que le creyeran.

    -Siempre dice lo mismo Kakashi Sensei- Resonó por el salón la vos de cierto rubio, se había casi recostado en la silla con los pies arriba del pupitre.

    -Primero en principal, deberías saber cómo sentarse correctamente señor Uzumaki- Reprocho el profesor con la cara ruborizada de la intromisión de su alumno.

    -Nah, si el usted llega tarde es por quedarse leyendo las novelas de mi Abuelo- Siguió mal sentado hamacándose en la silla –Eso ya no es mi culpa-

    Kakashi colorado como un tomate y humillado miro al desafiante joven. -Uzumaki, Se va a la direc…- Levantaba el brazo dispuesto a señalar la puerta.

    -Ah, por cierto- Le interrumpió sin importarle lo que estaba a punto de decir el hombre, acordándose de algo empezó a buscar en su mochila –Tome es el nuevo ejemplar- Le lanzo un paquete rectangular pesado.

    El lobo se quedó mirando maravillado cuando solo abrir un poco la envoltura descubrió el tesoro que yacía en sus manos, cuando volvió a la realidad de la clase y el cómo profesor se aclaró la garganta, guardando disimuladamente el regalo en el bolso.

    Se giró para ver el pizarrón –Bien continuemos con la clase- comenzó a escribir en él.

    Mientras un supuesto héroe era felicitado en susurros, por la osadía de enfrentarse al profesor y salir libre, a excepción del azabache junto a él que aún no se había sacado la capucha. No podía creer sea tan problemático y encima se salga con la suya.

    -Estas son las tareas que deben hacer hoy hasta que termine la clase- anuncio Kakashi mientras repartía unas fotocopias.

    -Bien echo Naruto hora libre- Le susurro Kiba por la espalda con el puño para que le correspondiera el choque.

    El rubio goleo los nudillos con el eh iba a contestarle pero un chasquido de lengua que vino de su lado izquierdo llamo su atención, era el chico nuevo quien parecía enojado de lo que dijo cara de perro. En ese momento el rubio se acordó del consejo de su mejor amiga y recibiendo la tarea de la clase preparo una perfecta excusa para hablar con él.

    -La consigna de aquí dice que se debe hacer de a dos- señalo lo escrito para que el azabache lo viera.

    -No te preocupes voy a decir que me ayudaste- le comento sacándole la fotocopia de las manos y empezando a escribir en una hoja en blanco.

    -Espera- volvió a recuperar la tarea –No voy a dejar que la hagas solo es injusto- fue lo más sincero no le gustaba la gente aprovechada.

    -No es necesario solo me retrasadas- volvió a repetir su acción y con el libro buscaba las consignas.

    -Sé que empezamos mal pero…- tomo del extremo el papel que tenía en la mano el azabache –Podemos empezar de nuevo-

    -Primero que nada- empezó a poner resistencia para que no le sacaran el objeto –Odio a las personas como tú-

    -Bueno talvez yo no te llegue a odiar- tironeaba la fotocopia –aunque me irrita tu mala actitud-

    -Soy sincero y si no me gusta algo lo digo, dobe- agarrando con fuerza y alejándose más de él.

    -¿A quién le dijiste eso?- se alejaba a la dirección contraria.

    -Además de Dobe sordo- lo siguió insultando.

    -Pues tu eres un teme- era impresionante la elasticidad de la pobre fotocopia –Ya suéltalo-

    -Suéltalo tu dobe-

    Los demás alumnos que esperaban el sonar de la campana, se quedaron entretenidos viendo a los dos chicos escandalosos actuando como niños de jardín no queriendo compartir un juguete, pero como cualquiera de estas pelas siempre terminan por romper el objeto en discusión y era de suponer pues se escuchó la rajadura que amenazo a separar ambos extremos.

    Con tanta fuerza ejercida para separarse el romperse la hoja termino haciendo caer a los dos jóvenes de sus sillas. Naruto dio una vuelta carnero y quedo con los pies para arriba en el banco a su lado pasando el pacillo, Sasuke no tuvo muy buen aterrizaje su cabeza se estampo contra el vidrio dejándole un agudo dolor.

    En menos del canto de un gallo ambos estaban rodeados por las personas presentes, el rubio era atendido por la chica de pelo rosa que lo tomo del brazo para ponerlo de pie no se había hecho gran daño solo que estaba mareado por la sangre a la cabeza. El azabache era ayudado por el profesor que dejo el libro en el escritorio, tenía un leve huevo en la cabeza pero igual era necesario llevarlo a la enfermería.
    Las clases llegaron a su fin y casi todos comenzaron el regreso a sus casas para disfrutar del fin de semana, todos menos Naruto quien no había ido a la enfermería pero si a la dirección por el castigo de la profesora Temari.

    -Maldición llegare tarde y Mito me regañara- Refunfuño mirando el reloj de la paded hasta que le hicieron pasar a la habitación.

    El rostro serio del director dejaba de piedra a su joven alumno, no era la primera vez que se metía en problemas pero le daba más pena porque desperdiciaba todos sus talentos con ese comportamiento dejándolo todo en su expediente para perjudicar más su futuro, la última vez que estuvo en esa oficina había peleado contra unos chicos de otra escuela que según ellos “Naruto había empezado” pero según el “No puedo dejar que pisoteen a mis compañeros, mucho menos si son unos cobardes y atacan a los de primero”. Eso le hiso pensar que talvez el héroe de la escuela lo había hecho otra vez o no.

    Flashback Sarutobi:

    Después de haber guiado al nuevo alumno a su salón se encontraba devuelta en su escritorio firmando papeles hasta que sonó el timbre del receso, lanzo un suspiro sacándose un peso de sus hombros. Fue a la sala de profesores para almorzar el ungüento que le había hecho su esposa.

    En la habitación ya se encontraban los profesores y secretarias hablando de las cosas comunes de la vida o revisando “exámenes” en el caso de Kakashi. Al pasar el umbral percibió el aroma a café de la maquina donde se encontraban hablando Azuma y Kurenai, en la mesa sentado estaba Gaí contando historias para que las incautas secretarias caigan a sus pies mientras otro profesores intentaban almorzar a pesar de la molestia. En el otro extremo había un sofá en forma de L donde en una punta Kakashi llevaba los pres exámenes y Sasori cambiaba los canales de televisor colgado en la pared. Sarutobi camino hasta la heladera y saco la comida que le había hecho su esposa, para sentarse junto a la profesora Temari quien coloco algunos almohadones en la alfombra.

    -Ah director buenos días- Le saludo la rubia cuando se sentó a su lado.

    -Buenos días- le respondió cordialmente mientras se acomodaba –Aunque ya nos vimos hoy-

    La joven se rio por su distracción –Sí, es cierto-

    -Y dime Temari- Comenzó a sacar un tema depositando los palillos para comer -¿Qué tal el chicos nuevo?- Engullo unos fideos.

    -¿Uchiha?- Pregunto para no equivocarse otra vez –Bien no habla mucho, fue su primer día a un no le dado algún trabajo para ver su desempeño- Desvió la cabeza al televisor para ver si había algo interesante- Eso me recuerda, Uzumaki tendrá que ir a verlo a su oficina-

    -¿Naruto? ¿Qué otra vez se metió en líos?- Se preocupó el viejo canoso por si se había involucrado en algo más grave que solo enfrentarse solo a tres chicos mayores.

    -Sí, ya no sé qué hacer con el- Respondió con pesadez en la vos.

    -Bueno pero no eres la única- siguió comiendo su almuerzo.

    Temari se frustro por no ser tomada más seriamente en las actitudes del chico, demostrándose ser el preferido del directo.

    El hombre noto el repentino enojo de la rubia y hablo antes que ella –La verdad es que Naruto se meta en problemas en parte de su rutina semanal- Tratando de relajar las cosas con ese chiste sin conseguirlo –Pero bueno, ¿A quien defendió esta vez?-

    Entonces la profesora se dio cuenta de porque estaba a favor de ese alumno revoltoso, las veces que este se metía en problemas era por haber protegido alguna persona, sea esto con una pelea o inculpándose a sí mismo. A pesar de también ser castigado por sus bromas las llegaras tarde era menos de la mitad de una hoja para ocupar espacio en ese expediente.

    -A nadie Director- bajo la cabeza un poco afligida por su acción, el viejo la miro con incredulidad –Uzumaki está castigado por llegar tarde a mi clase- no sabía porque pero se sentía más avergonzada que al principio por su sentencia a ese que se lo asían llamar el Héroe de la escuela.

    Sarutobi termino lo que había a en su tupper y se levantó siendo observado por la joven, tenía el ceño fruncido y sus manos habían ocultado los dedos.

    -No te preocupes Temari hiciste bien en castigarlo- Camino erguido sin mírala a la puerta y salió con un golpe fuerte.

    ¿Qué le esperaba a Naruto? Pensó la rubia.


    Edited by Mar-chan - 25/6/2015, 02:00
     
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  4. Adry_black
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    wow wow wow

    Naru es muy despistado, pobre Sasu lo que le toca.

    parece que los comienzos entre Sasu y Naru serán siempre algo... ¿violentos?


    me gusta mucho tu historia
    el capi estuvo muy bueno

    qué le habrá querido decir Hinata a Sasu?

    me gustaría ver a mis dos chicos en un combate :) aunque no sea precisamente con bastones jeje


    espero que continúes pronto


    te Leo luego


    Matta ne


    :)
     
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  5. Adry_black
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    Oh pero qué le espera a Naru?

    estuvo muy buena la conty

    te Leo luego

    Matta ne

    :)
     
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  6. kagakuro-love
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    Me gusto mucho tu fic y tu manera de escribir. Se ve bueno y la trama se ve prometedora. Cuidate y esperó la conty pronto :)
     
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  7. bley death deymons
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    esta super kawai la actitud de sasuke muchas veces es asi oye coty porfa de verdad rs muy buena estoy anciosa por los de mas encuentros y momentos de esos dos son tan gracioso y se complementan perfectamente
    hay pobr naru q es lo q le espera siguela arigato por crear esta historia
     
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  8. Mar-chan
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    QUOTE
    Aviso: Todos los personajes de Naruto no me pertenecen son del gran Masashi Kishimoto.

    Esta historia me ha tomado un año realizarla, así que por haberme tomado tanto trabajo no permito que haya una copia en otro foro o que solo le cambien los nombres a los personajes.

    Espero que disfruten este capítulo nos veremos.

    Capítulo 5
    Todo lleva a una consecuencia



    Y aquí estamos en la oficina del director, con nuestro protagonista denominada “Héroe”, “imperativo” castigado por su tardanza a la primera clase. En el instituto Konoha las llegadas tarde era una falta total de respeto tanto hacia el profesor, directivos como el mismo alumno que parecía no tenerle importancia a su educación y todo el esfuerzo por sus padres. Si muy melodramático hasta aquí, veamos cómo se escapara de esto nuestro rubio.

    -Bueno Naruto ¿algo que decirme antes de que escriba esto en tu expedienté?- Apoyo los codos sobre su escritorio con los dedos entrecruzados.

    -La verdad viejo es que me olvide que día era hoy- fue sincero otra vez pero esto hiso que el ceño ya fruncido se agrandara más.

    -Explícate mejor- Le dio una última oportunidad.

    -Bueno digamos que ayer después de la escuela fui a entrenar y me quede hasta el otro día- comenzó a explicarse con su típica sonrisa zorruna –Creí que me encontraba en el día sábado-

    -Y ¿para qué te quedaste tanto tiempo en el gimnasio?- Ya resignado por la distracción del rubio.

    -Eso es porque tengo el torneo de Bōjutsu dentro de dos semanas- empezó aumentar su entusiasmo.

    Sarutobi se unió a la sonrisa –Ya entiendo, pero igualmente no creo que te salve del castigo- Estando más calmado podía acordar algo mejor con el rubio.

    -¡¡¡Es que hoy tengo ensayo de comedia musical!!!- grito desesperado, por un camino fácil.

    El hombre cambio su seriedad a sorpresa por la nueva escusa -¿Comedia musical?-

    Naruto giro los ojos con disgusto –Si voy a teatro, canto y baile- las mejillas se tornaban rosadas por la afirmación –Mi tía Mikoto es la profesora y me “pidió”- realizo la seña de comillas con los dedos –Que participara en sus obras por la falta de chicos-

    -Entonces, solo por hoy no tendrás castigo- Comenzó a escribir el comprobante del castigo mientras le temblaba la mano.

    -¿Enserio?- Empezó a iluminarse los ojos como un niño a quien le dan una golosina.

    El mayor intentaba tranquilizar su mini parquin son en la mano y le afirmo con la cabeza.

    -¡¡¡Kiiiiaaaa!!!, es increíble viejo el mejor de todos- Un escalofrió le recorrió por la espalda y se abrazó a sí mismo –Yo, yo creí que iba a tener que enfrentarme a la furia de mi tía por llegar tarde a la clase-

    -No eres el único- Certifico Sarutobi entregándole el comprobante de castigo –Pero que no se vuelva a repetir-

    -Por supuesto Director- Se levantó para hacer una reverencia –No volveré a llegar tarde Datebayo- prometió con su sonrisa.

    Salió corriendo por la puerta al lugar donde podría ser su ejecución. El tercero después que el rubio se retirada pudo recostarse en el respaldo de la silla y respirar con tranquilidad.

    -A una mujer Uzumaki, no hay que hacerla enojar- Susurro para sí mismo. Serrando despacio sus ojos, ya estaba viejo para esas cosas.

    A hora que sabemos que nuestro protagonista no morirá, podemos ir unos minutos antes a la enfermería donde se encuentra nuestro querido azabache. Después de recibir el golpe contra el vidrio el profesor lobo lo llevo a hasta la enfermería, hay lo atendió enseguida una mujer joven de su mismo color de pelo.

    -Buenos días Shizune- La saluda Kakashi al entrar.

    -Buenos días Lobo ¿Qué paso?- correspondió cordialmente pero de inmediato corrió hasta el joven que llevaban casi arrastras.

    -A hora te lo explico- Entro a la sala para dejar a su alumno en la camilla y apartarse para que la profesional hiciera su trabajo.

    -¿Cómo te llamas querido? no te eh visto antes- Pregunto la enfermera mientras le revisaba los signos vitales.

    -Se llama Sasuke Uchiha es nuevo en la escuela- Le respondió Kakashi al ver que no podía hablar bien –Se dio un golpe en la cabeza contra el vidrio del salón, no se rompió nada- se atajó con la cara de horror de la joven.

    -Por lo que puedo ver no es tan grave, solo un simple Chichón- le examino el golpe con cuidado y se dirigió al frízer sacando un hielo -Póntelo sobre el golpe por media hora para que se baje la hinchazón y podrás irte a casa- Envolvió el paquete en un trapo para que no se congelaran los dedos.

    -¿No me dará algo contra el dolor de cabeza?- Pregunto el herido quejándose por la molestia.

    -Si podría darte un mikesan pero primero es bajar la hinchazón- se dirigió a su escrito y escribió un par de cosas en su cuaderno –Ya puedes marcharte Lobo yo me haré cargo- se dirigió al hombre que se quedó esperando.

    -Gracias Shizune, nos vemos Sasuke mejórate- se retiró dejando a las dos personas solas.

    Había llegado a su casa más tarde de lo esperado, en el coche que le mando su padre por ser el primer día. Seguía teniendo una leve molestia en la cabeza pero no tan fuerte de antes tomar la pastilla, se fue derecho a su habitación recordando los sucesos del día. Las clases habían sido aburridas primero geografía con esa tonta rubia y enzima lo trataron como perchero de mochilas, por ese imbécil del dobe que no conforme con eso termina siendo el culpable de su actual dolor.

    -¿Por qué lo creen la maravilla del mundo? Si se nota que es un descerebrado, tal vez tenía un promedio no mayor a siete- se rió por imaginárselo en el rincón con orejas de burro –Y ese tal torneo es para el mejor Baka de la historia, todos lo ven tan increíble, que ilusos-

    Se detuvo a la mitad de la escalera reaccionando –¡¡¡¡Y PORQUE COÑO ESTOY PENSANDO TANTO EN EL!!!!- grito a todo pulmón agarrándose los pelos oscuros para obligarse a ver el techo.

    Termino de subir los pocos escalones que le quedaban para meterse en su habitación cerrando con cerrojo, dejo la mochila en la cama y prendió la laptop.

    -De seguro tengo mil mensajes de Tobi y Hinata- decía para sus adentros, tecleando y abriendo la ventana del correo –Como pensé-

    En la bandeja de entrada tenía más de 10.000 mensajes de su primo y del lado izquierdo un logo que pedía eliminar algunos ya que estaba la bandeja llena y había más, abrió ala zar algunos mensajes de el mismo.

    “Hola Sasu, ¿Cómo estás? ¿Qué tal la escuela? Subí fotos para que la conozca nos vemos. Pd Tobi buen chico”

    Borro ese mensaje para darle paso al siguiente.

    “Sasu ¿porque no me contestas? Sé qué hace horas deberías haber llegado del vuelo respóndeme, Pd Tobi triste”

    -Que fastidio- realizo la misma acción que la anterior.

    “Sasu en que no me respondas y llamo a tu casa para decirle a mi tía que me estas ignorando, Pd Tobi enojado”

    Elimino todos los mensajes de su primo para poderle escribir tranquilo.

    “Tobi ya deja de ser melodramático ni quiera Hinata que era mi novia” subrayo la palabra para que lo entendiera- “ere tan fastidioso cuando estaba en China, así que deja de mandar estúpidos mensajes a cada segundo y te veré este fin de semana”

    Envió el mensaje ya muy cabreado, cerro su email y apago la laptop no quería ver nada más, coloco la almohada sobre sus ojos echándose a dormir una leve siesta.

    Habían pasado dos horas desde que serró los ojos, aparto lo que le tapaba la vista pensó que podría hacer tareas a pesar de no tener ganas ¿Esto es lo que haría en el resto de sus días en la escuela? De ahí a la casa, tareas, cenar, dormir y volver a empezar la rutina no era algo divertido. Con fastidio se levantó de la cama para buscar en su armario ropa para salir, tomo el reloj que le había dado su tío Madara y salió por la puerta de enfrente. No sabía que rumbo tomaba tampoco le preocupaba pero era mejor que estar encerrado en esa habitación, unos golpes le llamaron su atención provenientes de un callejos, esforzó más la vista para saber qué era lo que se movía en la oscuridad.

    -¡¡¡Kiiiiaaaa!!!- gritaba una vos joven, tenía un palo entre las manos y lo elevo para pegarle en la cabeza a su contrincante.

    -Buen golpe- Le felicito la segunda vos –Lastima que no suficiente- engreídamente le esquivo agachándose girando y darle en los pies haciéndole caer.

    -Maldición- Intento levantarse pero tenía un peso extra en el pecho.

    -Ríndete, te di una paliza- se reía presionando con más fuerza.

    -Bien me rindo- Se sentía enojado a pesar de aceptar la mano del otro para levantarse, fue en ese momento que se percataron de la presencia del Azabache.

    -¿Quién eres tú?- Pregunto el ganador con el pelo plateado, colocando su arma en defensa del desconocido.

    Chasqueo la lengua – ¿Y qué te interesa? Se nota que no puedes dejar de temblar- Se burló provocándolo.

    -Tu idiota- Se dispuso avanzar por la rabia. En los mismos momentos que ejecutaba su acción su compañero de alado extendió sus brazos frente a él formando una pared –Jugo sal del medio, este necesita una lección-

    El mencionado no hiso caso solo se quero viendo a los ojos al azabache que empezó a sentirse incómodo.

    -¿Tu que me ves?- No le gustaba que alguien se le quedará mirando fijo.

    -Solo a dos niños a punto de empezar un capricho- Le respondió Jugo con seriedad.

    -¿A quién dices niño?- Saltaron ambos jóvenes.

    -Que importa, creí que sería algo interesante me voy- Fastidiado se dio la vuelta para seguir con su caminata.

    -Así que tienes miedo- le desafío el de ojos violetas apartando al de pelo naranja.

    -No simplemente no quiero perder más mí tiempo con ustedes- aparentando mayor inteligencia que ellos.

    -Ya verás- Se lanzó a atacarlo sin pensar que lo esquivaría.

    Sasuke a una velocidad casi imposible de ver, se dio la vuelta agachándose para esquivar el golpe con la mano derecha estirada, agarro el palo tirando de inmediato asía abajo mientras su contrincante volaba por el impulso hasta el suelo.

    -Es por eso que eres aburrido- Le tiro el arma a un costado.

    -Maldito- Intento levantarse del suelo cuando llego Jugo y lo detuvo.

    -Basta Suigetsu, no es necesario tanta violencia- trato de calmarlo –Por cierto mi nombre es Jugo y este de aquí se llama Suigetsu- Se presentó formalmente ante el azabache como una forma de paz.

    -Yo soy Sasuke Uchiha- respondió sin importancia.

    -Claro, que soy ciego- Expreso emocionado el chico de ojos violetas levantándose –Tu eres Uchiha el mejor luchador de Bōjutsu en China-

    -¿Él es el dos veces campeón en China?- Pregunto asombrado el más alto –Eres una leyenda en nuestro domo-

    -No es para tanto- Una cálida sensación de ego y orgullo le picaba la espalda.

    -Lamentamos mucho nuestro comportamiento- Se reverenciaba Jugo forzando con su otra mano a su compañero a imitarlo –Quisiéramos que nos acompañe a nuestro lugar de entrenamiento para que conozca a nuestro Sensei-

    -Jugo- Le reprocho el menor aun con rencor con el azabache por su anterior humillación.

    -Acepto, no tengo nada más que hacer- confirmo Sasuke disfrutando de la mirada de odio que le proporciono el chico de pelo blanco.

    Así los tres comenzaron la marcha hasta el instituto Heie, mientras charlaban de los torneos y peleas ganadas por Sasuke mas algunas técnicas que le destacaban, siendo también su historia de ser un novato a ganar dos veces seguidas los torneos de su país.

    En la entrada los chicos dejaron sus mochilas y le dieron un tur al azabache por todo el lugar sin lograr ninguna sorpresa o interés. Al llegar al domo se pudo percibir un leve brillo en sus ojos ya que no había podido creer volver a ver uno, después de que su padre le dijera sobre la mudanza a otro país por problemas financieros, teniendo que despedirse de sus amigos, novia, primo llorón y de su más grande sueño en ser el mejor Bōjutsu de la historia en el mundo dando finalizado en su país.

    Ahora el destino le volvía a dar una oportunidad de llegar a esa meta, ya no dejaría que su familia ni nadie se interpusieran en su camino.

    -¿Dónde está su sensei?- Pregunto volviendo a su falta de sentimientos.

    -Está por acá- Señalo a la izquierda el mediano, hacia una puerta con ventana.

    Al entrar en el cuarto se encontraron un escritorio con un montón de papeles dispersos, tenía atrás dos ventanales, del lado izquierdo había una biblioteca con un bonsái y del lado derecho estanterías repleta de trofeos diplomas colgados y marcos de fotos debajo de ello un armario pequeño con cristales en las puestas.

    -¿Qué necesitan a hora chicos?- Pregunto un hombre fornido que miraba asía afuera dándoles la espalda a los recién llegados.

    -Queríamos presentarle a una persona sensei- Respondió Jugo con respeto al mayor.

    -Y ¿quién es?- Se dio la vuelta curioso, tenía tapándole el pelo un pañuelo y algunas cicatrices en la cara.

    -Él es Sasuke Uchiha- Presento el joven al que acababa de entrar –Es dos veces campeón en los torneos de China de Bōjutsu-

    -¿A sí que tengo el gran honor de estar enfrente a un alumno ejemplar estudiante de Shikaku Nara?- Se alegró de verlo hay presente.

    -Es mío el honor de conocerlo señor Morino- Se reverencio Sasuke –Mi sensei me ha contado muchas cosas de usted y sus victorias-

    -Estas bien informado- Sonrió con orgullo por el elogio –Pero dígame ¿A que le debo la visita?-

    -Eh venido a vivir en Japón por ciertas circunstancias- Que no iba a mencionar –Quisiera pedirle que me acepte en su escuela para seguir con mis entrenamientos y cumplir mi sueño de ser mundial mente reconocido en las artes del Bōjutsu-

    Los dos jóvenes que se encontraban detrás del azabache casi arrodillado por la petición, quedaron en shock por las repentinas palabras del mismo y esperaron la reacción de su sensei.

    -Me impresionas Sasuke- rió el mayor –Pero aquí no hace falta palabras para ser aceptado- paso por su lado hasta la puerta –Tienes que ganarte tu puesto en el campo- atravesó el hueco entre sus dos alumnos deteniéndose en el umbral -¿Podrás hacerlo?-

    -Si sensei- Confirmo el azabache a pesar de la estúpida rebaja que debí hacerle a una persona de tan bajo nivel.

    -Bien, empezaras mañana después de tus horarios de escuela ¿Vas de mañana no?-

    -Si voy a la mañana y tengo la tarde libre- Se levantó para ver su espalda sin bajar el tono respetuoso.

    -Bien, Jugo- Miro a su lado derecho – Prestarle algún uniforme y Suigetsu- de giro para su costado izquierdo –Busca algún arma en el armario- le termino de ordenar a los dos jóvenes.

    -Con respeto sensei yo ya poseo mi arma- Hablo Sasuke antes que el de pelo plateado se moviera.

    -Eso es mejor, nos veremos mañana para tu primer entrenamiento- Volvió a emprender su marchar hasta quedar fuera de vista.

    Jugo no tardó mucho en reaccionar y guió al azabache fuera de la habitación a un armario con todo tipo de uniformes, buscando entre ellos encontró uno más o menos su talla y se lo lanzo.

    -Este te servirá- Le sonrió extendiendo su brazo derecho –Sera un placer ser tu compañero Sasuke Uchiha-

    -Lo mismo digo- se unió Suigetsu un poco emocionado por el nuevo y sin tanto rencor.

    -Da igual- Se dio la vuelta dejando las manos colgadas a uno confundido y el otro irritado por su cambio de actitud.


    QUOTE
    Gomenasai , sepan disculpar lo de ayer estuve todo el día ocupada y si tenía tiempo de sentarme no podía editarlo sin que me interrumpieran.
    Feliz navidad a todos y gracias por leer mi fanfic.
     
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  9. kagakuro-love
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    Me gusto mucho este capitulo y sasuke pensando en naruto. Me dio risa su reaccion , bueno espero que hayas tenido una feliz navidad y espero la conty.
     
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  10. caro14
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    soy nueva lectora me encanto espero conti y feliz año nuevo
     
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  11. Mar-chan
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    QUOTE
    Hola buenas noches, lamento la tardanza pero es difícil en esta época del año con vacaciones y los amigos de mis hermanos quedándose a dormir :=SHOROO:

    Este es el nuevo capítulo, disfrútenlo

    Aviso: Todos los personajes de Naruto no me pertenecen son del gran Masashi Kishimoto.

    Esta historia me ha tomado un año realizarla, así que por haberme tomado tanto trabajo no permito que haya una copia en otro foro o que solo le cambien los nombres a los personajes.

    Capítulo 7
    Anuncios importantes, difíciles de contar.




    En la academia de la señorita Uzumaki, donde ya habían empezado las clases del turno tarde, se podía oír la música clásica por todo el lugar envolviendo a los estudiantes que ya asían parados al lado de un espejo gigante pegado a la pared, sosteniéndose de una barra de madera. Hacía unas pocas horas habían finalizado con las lecciones de canto, a hora estaría baile y por ultimo el teatro.

    -Muy bien chicas es 1, 2, 3, 4 y 1, 2, 3, 4- Dirigía el ritmo de los pasos una mujer de pelo rojo sostenido por un rodete –Y 1, 2, 3, 4 Demi-plié- Flexiono las rodillas asía afuera para luego estirar como una flor al llegar la primavera y querer tocar el sol –Otra ves 1, 2, 3, 4… Naruto concéntrate- Le remarco al joven rubio que perdió la sincronizacion – Y a hora- detuvo a los bailarines para que prestaran atención a lo que seguía – Es 1, 2, 3, 4 De coté et tournant- extendió sus brazos y flexionaba marcando el paso para después con el pie estirado en punta deslizándolo para un costado, con rapidez y fuerza llevo todo su cuerpo a donde estaba el pie de base para impulsarse con el otro y dar una vuelta terminando con gracias y delicadeza.

    Los alumnos imitaron los movimientos de su profesora extendiendo y flexionando los brazos como si sostuvieran una vasija, extirando el pie asía sus costados dieron el impulsó para sostenerse con solo la punta de sus dedos y girar, terminando una danza con perfección o eso creían. Naruto realizo todo el ejercicio espléndidamente pero al volver a la posición principal se pisó el talón y cayó al suelo.

    -Maldición- se quejó por lo ocurrido.

    -Basta chicas vuelvan a sus posiciones- Le restaba importancia la profesora evitando el cotillo innecesario –Konan pon devuelta la música- le indico a una joven de pelo color violeta que estaba más cerca de la casetera.

    -Si sensei- Respondió apretando un botón para volver a rebobinar y luego colocarse en posición.

    El único hombre de la clase se levantó, tomándose de la barra preparado para continuar mientras recibía la mirada asesina de la mujer de pelo rojo un poco ya levantado, habían empezado a repetir todos los pasos hasta llegar a la vuelta en un solo pie, cuando se escucho un golpe y gritos que dieron por interrumpida la clase. El chico de ojos celestes se volvió a caer y encima de otra joven.

    -Bien, tómense un descanso de cinco minutos- Se resignó la mujer por las continuas interrupciones –Naruto ven- lo llamo al piano alado del reproductor de música apretando el botón de pausa.

    -Lo siento profesora- se disculpó apenado de sus descuidos –La próxima vez lo haré mejor, deberás- Comenzó con sus promesas sabiendo que sería perdonado.

    -No habrá próxima ves Naruto- Sentencio, dándose la vuelta y comprobar en el rostro asustado de su sobrino lo dicho que había dicho –Hoy te iras temprano…-

    -Pero ¿Por qué?- Le interrumpió más asustado de que lo sacara de los ensayos a que ella estuviera enojada.

    -Porque no te concentras- Le respondió más como un reproche –En la clase anterior de canto terminaste siendo un desastre- Le recordó –No te acordabas la canción o desafinabas en los bajos-

    El rubio iba a protestas pero en seguida un dedo con la uña larga se posó en sus labios para callarlo.

    -Y no fue por el piano “desafinado”. Yo misma me aseguro que este siempre en orden antes de empezar cualquiera de mis clases- quito su dedo de sus rostro –A hora te acabas de caer encima de una de tus compañeras- Extendió el brazo a la pared donde habia ocurrido el incidente –Es la quinta ves hoy-

    -En realidad la primera- Corrigió el menor.

    -Me refiero a caerte- hablo más irritada la profesora por la tomada de pelo –Primero las escaleras, luego tres veces en la barra y esta última- Señalo con los brazos todos los alrededores agrandando así las cosas.

    Naruto no sabía que contestas o como justificarse de su usual distraído comportamiento, a él le gustaba bailar también cantar y actuar aunque no lo admitiera, usualmente actuaba así cuando estaba nervioso pero ¿de qué?. Los exámenes se acercaban a un que a él no le picaba la piel como a otros chicos, no había otra cosa además del torneo. El torneo esa era la palabra, se acercaba sus batallas de Bōjutsu.

    -Lo siento- Repetía con sinceridad.

    -No me vengas con tus típicas disculpas- le interrumpió la pelirroja –Tu cabeza y corazón están en otra parte, muy lejos de aquí- Se expresó tocando los puntos mencionados de su cuerpo –Además que…-

    -Tienes razón- Realizo una leve reverencia dejando a la mujer sin comprender esa reacción –No estoy concentrado porque mi corazón está en otra parte- Repitió las palabras anterior mente dichas por su profesora mientras se reincorporaba –Y están el gimnasio de artes marciales ninjas- Sonrió al darse cuenta del porque sus fracasos.

    Mito seguía sin entender a su sobrino ¿Porque esas coas de vital importancia se encontrarían hay? Intento recordad las charlas que tenía con su hermana menor de las cosas que hacia el pequeño rubio, su comportamiento tanto en el barrio como en la escuela, las ayudas comunitarias, los deportes y actividades como el futbol, básquet, natación, hockey, patín carrera, atletismo, también aprendió a tocar muchos instrumentos como el piano, guitarra, contrabajo, flauta, violín, saxo y un mes de batería. En todas esas cosas ¿En qué encajaba el gimnasio?

    -¿Cuál es el motivo que esté hay?- Pregunto rendida al no encontrar algo satisfactorio en sus recuerdos.

    -Este pues…- Balbuceaba con las mejillas más coloradas que cuando le había confesado al director que hacia comedia música- Es porque practico Bōjutsu- Admitió serrando los ojos preparan doce para la reacción de su tía.

    -¡¡¡¿¿Cómo?!!!!- Grito a los cuatro vientos ganándole en competencia de cambiar color a Naruto -¿Qué no te había dicho antes de empezar esto que no hagas ese tipo de actividades?- pregunto más severa pero controlando su tono de voz ya que había algunas alumnas espiando por el alboroto –Te prohíbo que sigas ejerciendo cosas bruscas como ese tal butjacu o como se llame-

    -Bōjutsu- corrigió el rubio – Ya sé que me lo dijiste pero lo estaba haciendo mucho antes que me pidieras ayudarte con tus clases- cobraba su confianza al creer que le quitarían algo que apreciaba –Además soy muy bueno- Levanto el mentón orgulloso de sus habilidades.

    -No es el hecho de cuándo o si eres bueno- Le bajo los zumos a su prepotencia –Comprende que si te lastimas no podrás seguir con los ensayos- se masajeaba las cienes con los dedos para no asesinar al joven enfrente suyo –Además estamos a tres semanas de las audiciones y te he contado lo importante que es para el instituto la llegada de este coreógrafo para hacer una obra aquí- Izo su cara de súplica para convencerlo.

    -Lo sé- se sintió mal al ser atacado por la misma técnica que ponía el cuándo pedía algo –Pero dentro de dos semanas es el torneo y estado entrenando muy duro para dejarlo ahora- No quería pensar que todos sus esfuerzos no rindieran frutos.

    Mito podría ser dura con el muchacho a diferencia de su sobrina Karin ella sabía que Naruto podría llegar mucho más lejos, pero en todos sus años nunca pudo negarse a ese rostro afligido que acababa de imitar hace unos segundos. Miro para el lado de la puerta donde las cabezas que asomaban se esfumaron en seguida, cerró los ojos y suspiro cansada como si todos sus años de vida le hubieran caído encima.

    -Está bien podemos llegar a un arreglo-

    -¿En serio?- Los ojos celestes del rubio se iluminaron con un brillo particular de emoción.

    -Si- Antes que siguiera con el escándalo le dio una pausa mostrando la palma de la mano –Con la condición de que sea solo hasta el final del torneo- bajo el brazo dejando de mirarlo a los ojos –Podrás ausentarte las clases de comería musical-

    Sin contener la felicidad salto y dio piruetas por todo el lugar presumiendo como siempre sus habilidades ya que a su tía se le había olvidado que hizo gimnasia artística por dos años.

    -Pero- Elevo la voz para detener al imperativo Rubio –Cuando termines el torneo estarás totalmente concentrado para las audiciones y si lo consigues también para la obra ¿Entendido?-

    -Si- Corrió abrazar a su tía dejándola sorprendida por la rapidez y fuerza del joven –Gracias Mitoti- Le susurró al oído.

    Mito sonrió y correspondió el abrazo, pues ese nombre se lo había dado su marido y Naruto se parecía mucho a él, se decía que había heredado su misma voluntad de fuego.

    -Sensei- Llamo la atención aclarándose la garganta una estudiante de ojos violeta.

    -Ah si- se soltó de los brazos de su sobrino –Bien continuemos con la clase- se desarrugo la ropa y acomodo el rodete mientras las alumnas volvían a sus lugares –Naruto ve por tus cosas – Apretó el botón de rebobinar para que saliera devuelta la música.

    El rubio se despidió de la clase para marcharse, por un tiempo no pisaría ese lugar no hasta que su corazón volviera por sí solo, pues él se había dedicado a muchas cosa y siempre dejaba algo para su recuerdo.


    _____________



    La noche ya había hecho su aparición en la casa de cierto azabache. El padre estaba en su oficina leyendo ciertos papeles, que no diré de que pero son los causantes de su reciente mudanza, la calculadora parecía echar humos igual que el horno de la cocina donde Mikoto preparaba la cena un TONKATSU con dos ensaladas de arroz y atún.

    -¡¡Ya está la cena!!- Anuncio la mujer contenta de su comida oriental, se asomó por el marco de la puerta -Cariño ven a comer- Fue hasta la escalera mirando al segundo piso–Niños bajen-

    -Ya bajo mama- Se escuchó desde arriba una voz más grave que salía del cuarto a la derecha.

    Era un chico alto de pelo negro largo atado con una colita de tés un poco más morena que su hermanito y madre, con unos surcos por debajo de los ojos como ojeras.

    Golpeo la puerta frente a su habitación –Sasuke, madre nos llamó para comer- al no recibir respuesta del otro lado decidió entrar repitiendo la frase anterior mente dicha por si las duras de no ser escuchado.

    Frente a él se encontraba un joven adolecente, recostado en la cama con muchos papeles enzima no tenía tanta diferencia de tamaño al suyo ya que el menor había pegado varios estirones, tenía los ojos cerrados y los auriculares puestos. Itachi algunas veces, bueno siempre que podía le gustaba molestarlo así que con una cara maliciosa se acercó a la cama, vio que estaba profundamente dormido le aparto algunos papeles dejándolos en el suelo y con delicadeza los auriculares para después…

    -¡¡¡¡Dedo mojado!!!!- Grito a todo pulmón mientras introducía su índice previamente ensalivado adentro de la oreja del bello durmiente.

    -¡¡¡AAAHHH!!!!- Salto el azabache del colchón por la usual forma de despertarlo y como reflejo se froto la oreja para quitar la molestia, viendo al responsable –Itachi estás muerto- Le aviso.

    El mayor sin pensarlo dos veces salió corriendo de la habitación, siendo perseguido por Sasuke bajaron rápido las escaleras o mejor dicho Itachi lo hiso ya que el azabache pego un salto cayendo encima del bromistas que no paraba de sonreír más cuando sintió el golpe.

    -Admite que fue buena broma- Se reía mientras luchaba con su pobre víctima de toda la vida.

    -No lo fue- Dijo más enfurecido consiguiendo colocarse encima de su hermano para devolverle la broma.

    -Oh, no Sasu- Miraba la devolución de su hermanito acercarse a su oído –No-

    -¡¡¡Ustedes dos dejar de pelear ya!!!- Gritaron los dos adultos desde la puerta del comedor.

    En menos de segundo se separaron y fueron a sentarse a sus lugares dando comienzo a la cena.

    -Esta delicioso, mama- La elogio su hijo mayor mientras se servía más ensalada.

    -Gracias Itachi- Se le sonrojaron las mejillas a Mikoto por el cumplido, se sentía muy feliz de poder contentan a su familia –Y dime Sasu ¿cómo te fue en tu primer día?- se dirigió al azabache que estaba muy callado como de costumbre.

    -Bien, los profesores tomaran pre-exámenes la semana que viene- Respondió sin mencionar el incidente por el que llego más tarde.

    -Espero que seas el primero de la clase- le presiono su padre con una mirada de advertencia.

    -No creo tener problemas, la mayoría de mis compañeros no saben ni de qué habla el profesor- se burló como si no hubiera desafío en realidad.

    -A hora que me acuerdo- Hablo la única mujer de la mesa –Llamo Tobi ¿no le estarás ignorando hijo? Recuerda que es parte de la familia y…-

    -Mama mi primo es un dramaturgo peor que Óbito- Reclamo interrumpiéndola por las molestia de su pariente.

    -La familia es lo primero- Remarco su padre viéndolo a través de su baso.

    -¿No le veremos el fin de semana?- Pregunto Itachi sacando de los apuros a su hermano.

    -Si es cierto- le respondió el azabache –Además vendrá todos los demás fines de semana- Marco aprovechando la ayuda del mayor.

    -Bueno entonces lo de Tobi ya está- se limpió con una servilleta Mikoto –Pero también vendrá Hinata ¿No?- Cambio de tema al verse vencida contra sus dos hijos.

    Sasuke bajo la cabeza pensando en que decir le sudaba las manos, no le había contado a nadie sus nuevos sentimientos por su casi ex novia o lo que ya no sentía por esa persona y la distancia le hizo reflexionar más las cosas.

    Trago saliva –Eh no creo, también le están por tomarle exámenes-

    -Tal vez se vean cuando termine los exámenes- Insistió Mikoto pues le caía muy bien la joven.

    -Si tal vez- Confirmo con desanimo.

    No le gustaba mentirle a su madre, pero tampoco quería decepcionarla. Cuando Vivian en China él y Hinata estaban siempre juntos a sol y sombra, hasta hubo un tiempo en que las madres alardeaban de un compromiso o niños a por venir. A pesar de haber cumplido cuatro años de novios, el encanto de cuentos con finales felices o siempre juntos para Sasuke se le fue esfumando y empezó a salir con ella solo por el gran prestigio y poder que tenía su familia. Una noche se decidió por confesarle toda la verdad para luego informar a todo el mundo sobre su rompimiento pero a la mañana su padre anuncio la pronta mudanza, ocultando otra vez sus sentimientos por temor a decepcionar a su familia.
    La charla de cómo habían pasado el día siguió hasta terminar la cena y como de costumbres para hacer una buena digestión tomar un té.

    -Por cierto Sasuke a donde fuiste después de la escuela- Le interrogo Fugaku.

    Con un frio recorriéndole la espalda por ser descubierto en su tardanza al ir a la enfermería –Vine a casa- dijo en parte lo que era cierto.

    -Pero cuando llegue no estabas Sasu- Le acuso su madre.

    -Es porque después me fui a caminar- Tomo un sorbo de su te, cuando vio que los tres miembros de su familia esperaban una respuesta más específica –Me encontré con unos chicos practicando Bōjutsu y me llevaron a su academia Heie, el profesor me propuso empezar mañana después de la escuela y decidí aceptar-

    -Muy bien con eso tendrás devuelta la oportunidad de ser el mejor del mundo- Le conto Fugaku, una idea que su hijo ya se lo había pensado.

    Ni Mikoto podía interferir en hacer cambiar de opinión a sus hijo cuando era algo que el eligiera, en realidad nunca estuvo a favor de las peleas y violencias.


    Flashback de Mikoto

    Acababa de terminar de lavar la cocina cuando escucho que alguien entraba, viendo la ora del microondas adivino quien sería con su sonrisa de bienvenida fue a recibir a su hijo, pero se percató de que no estaba solo había otras voces y se dirigían a la sala, ella enseguida los reconoció eran su sobrino y nuera.

    Se dirigió a la heladera agarrando la jarra de jugo y los vasos, así le serviría a sus invitados, ya desde la cocina llegaban las quejas de su hijo menor y lo alterado que se encontraba Tobi. Coloco el paquete de galletitas en la bandeja y camino hasta el living.

    -Quédate quieto Tobi te vuelves insoportable- se quejaba el azabache sentado en el sofá.

    -¿Cómo quieres que me calme? Mírate- Daba pasos por todos lados señalando a su primo –Sabía que era mala idea, lo sabía- Se golpeaba la cabeza con las manos en negación.

    -Sasuke kun- Hablo en vos débil la joven de ojos color claro –Talvez deberíamos-

    -Por ultima ves Hinata- La interrumpió el ojos negros –No es necesario, solo debo descansar y tomar un baño- Se dio vuelta para tomar el mentón de su novia obligándola a mirarse sintiendo su aliento cálido –Quizás quieras ayudarme en esa tarea- Hablo en forma seductora.

    -Etto… Sasu- Su cara torno a un amanecer, sin poder mirar aquellos vacíos negros que absorbían todo lo que se acercara.
    Sasuke sonrió de costado le gustaba los sonrojos súbitos de ella, parecía tan indefensa e inocente, aproximo más el mentón de su novia a su rostro le gustaba saborear esos suaves y delicados labios rosados.

    -No es momento para lingotes o esas cosas primo- Corto la aproximación con sus brazos colocándolos a un metro de distancia.

    Ya Sasuke iba a matar a su insoportable primo, porque además al hacer ese movimiento precipitado le había tocado en el pecho donde estaba uno de los moretones, haciendo que la camisa blanca y roja se desabrochada los dos primeros botones dejando ver su pecho descubierto.

    -Maldición Tobi- Se quejó mirándolo con unos ojos asesinos.

    -Tobi es buen chico- No supo que más decir en su defensa y termino echo piedra por la mirada acecina del azabache.

    -Hola chicos- Entro en el living Mikoto, con su sonrisa para calmar las aguas de su hijo –Les traje…- Se quero estática no pensaba porque el alboroto pero nunca se imaginó ver esa escena.

    Su hijo estaba totalmente golpeado, con heridas sangrantes medio secas que se habían mezclado con sus ropas, en su pecho parecía haber recibido una piña que dejo la marca de los nudillos, los pantalón tenía cortes en las rodillas. Por culpa de su sobrino su posición cambio a recostarse en el sofá pareciendo que le dolía levantarse.

    -¡¡Sasuke!!- Dio su segunda reacción con un grito dejando la bandeja en la mesita parta auxiliar a su pequeño –Por Kami ¿Qué te paso? ¿Quién te hiso esto? ¿Acaso los asaltaron?- Sus ojos se ponían vidriosos girando la cabeza asía los tres chicos –Hinata tráeme el botiquín de primeros auxilios pronto- Se dirigió a la que estaba más capacitada.

    -Enseguida Mikoto-sama- Corrió la peli azul en busca de lo pedido.

    -Mama no es para tanto- Comenzó a tranquilizar a su madre, ya que no le gustaba verla llorar.

    -¡¡Como puedes decir eso!!- Se alteró más por su comentario irresponsable -¿Quién fue?- le miro pero el azabache aparto el rostro.

    -Aquí esta- Dijo Hinata con la caja blanca y cruz roja adelante.

    -Bien dame la pomada, vendas, algodones, aguja e hilo y cinta de papel- Comenzó a mandar a su nuera mientras le quietaba la camisa a su hijo y tomaba las cosas.

    Limpio, cosió, vendo y esparció en los moretones la pomada, se cercioró si había alguna costilla o hueso roto, su calma y paciencia volvía conforme cubría las heridas. Volvió a observarlo a los ojos para preguntar sobre el responsable pero su hijo seguía sin querer verla.

    Cuando hubo terminado mando a su sobrino un poco más estable después de ya no haber sangre a ayudar a su primo en vestirse en su habitación. Quedando sola con la joven metió la camisa a lavar y le sirvió jugo a Hinata, se sentaron en silencio en el sofá algo más relajadas pero la adolecente sabía lo que vendría después.

    -Dime Hinata- Hablo con seriedad a su nuera –Quienes fueron los que dejaron así a Sasu- Sabia que ella no podría negarle la respuesta.

    -Pues…- Le costaba hablar pero Mikoto le tomo la mano para que siguiera –Estábamos volviendo de la escuela cuando unos chicos se nos aparecieron, estaban enojados porque Sasuke-kun los elimino de la competencia de Bōjutsu y se enfrentaron- Tomo un sorbo de jugo para continuar mientras la mujer la escuchaba con la mayor atención –Al principio estaba ganando pero…- se comenzó a angustiar –Uno de los chicos saco un cuchillo y me tomo del cuello amenazando a Sasuke que me lastimarían –No podía contener las lágrimas saladas cayendo en el vaso recordando la situación traumática –Lo siento yo fui la culpable-

    Mikoto gritaba en su interior al enterase de todo, pero como toda mujer Uchiha la compostura y el no mostrar tantos sentimientos eran lo primero. Con una sonrisa de compasión y comprensión acaricio la mano de la joven.

    -No tienes que disculparte sabes que Sasuke actuaria así con cualquiera- Hinata levanto la mirada tenía razón, su novio siempre defendía a quien pidiera ayuda y por eso lo quería.

    Cuando bajaron los chicos se pusieron hablar y tomar el jugo, mientras Tobi se guardaba las galletitas y Sasuke lo golpeaba cuando lo descubrió. Era una escena típica de esa familia, justo lo que más deseaba Mikoto era la felicidad de su hijo y a pesar de no gustarle ese deporte al azabache le hacía sonreír. Eso no significo que se allá quedado de brazos cruzados con los responsables de lastimar a Sasuke.

    Fin Flashback Mikoto


    Al terminar el momento familiar, los dos hermanos se despidieron de sus padres eh irse a sus habitaciones. Itachi se puso a leer antes de dormir y Sasuke siguió escuchando música cuando recibió un mensaje. “Buenas noches Sasuke-kun que descanses” Era de Hinata, se sentía culpable pero con o sin el viaje él no quería seguir esa relación que comenzó a ser un deber. No le respondió y se acostó a dormir.


    QUOTE
    Una última cosa, realice una mini historia de la pareja Iruka e Kakashi. Se llama ¿Por qué te tapas la cara Kakashi? Espero que también lo disfruten (advierto que tiene lemon)


    Edited by Mar-chan - 25/6/2015, 02:06
     
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  12. Mar-chan
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    Aviso: Todos los personajes de Naruto no me pertenecen son del gran Masashi Kishimoto.

    Esta historia me ha tomado un año realizarla, así que por haberme tomado tanto trabajo no permito que haya una copia en otro foro o que solo le cambien los nombres a los personajes.

    Capítulo 8
    La determinación ara la fuerza




    En el gimnasio Ninja los estudiantes y profesores se fueron retirando a sus casas, algunos se detenían en los baños a tomar duchas calientes para relajar los músculos después de el arduo trabajo. Aunque en la sala de entrenamiento había alguien que no seguía lo llamado normal.
    Pego un grito de energía levantando el palo con ambas manos usándolo de barrera, cuando en el mismo instante se arrodillo rodando por debajo de las piernas de su oponente, quedándose acostado en el suelo sin soltar el arma aunque esta no había atravesado el puente humano y con una sonrisa flexiono los brazos chocando el palo con los pies asiendo caer al mayor.

    El moreno se estampo contra el suelo de madera, intento darse vuelta pero ya tenía otra vez el basculo oprimiéndole el pecho.

    -Bien echo a un que…- Tomo el extremo del mismo empujándola como una palanca hacia abajo deslizándose, pegando un salto de inverso con una vuelta completa frente al joven atontado con déficit de equilibrio.

    El combate continuaba entre saltos, volteretas estocadas y gritos pero llegando a un final cuando el mayor hablo.

    -Listo por hoy es suficiente- Respiraba pesadamente.

    -Pero tenemos mucho tiempo ¡Datebayo!- protestaba el rubio, también con jadeos.

    -Yo me tengo que ir Naruto, a descansar y sería bueno que hicieras lo mismo- Camino hasta su bolso tomando la botella con agua –Hay ciertas prioridades en la vida una de ella es el descanso- Al terminar de refrescarse le lanzo otra botella para que lo imitara.

    -Ya se, por eso traje mis cosas- tomo un poco de agua y la vacío tirándosela en todo el cuerpo –Creo que me iré a luchar- Tomo su toalla, el champo y el jabón de su mochila.

    Dirigiéndose a las duchas se quitó la remera dejando ver sus abdominales bien marcados y mojado con el agua y sudor, todo esto siendo observado por el moreno. Naruto giro encontrándose con su sensei abierta la boca, contento por esa reacción decidió fastidiarlo un poco más.

    -¿Que pasa Iruka sensei? ¿Tengo algo en el pecho?- Comenzó a pasar sus manos en todo su torso de una forma lenta y provocativa- O es que acaso –Su vos se tornó ronca -¿Le resulto atractivo?- termino saliendo su dedo índice dejando caer unos gotas de saliva.

    -Ve a bañarte de una vez- Intento sonar determinado pero su cara le traicionaba con su enrojecimiento.

    Se rio tomándose la cabeza y señalándolo con el dedo –Iruka sensei tomate- De inmediato salió corriendo a las duchas.

    -Zorro tonto- Camino en dirección contraria.

    Cuando ya estaba lo suficiente lejos comenzó a razonar en su forma de actuar, si es cierto que Naruto tenía una forma encantadora y cariñosa con la gente, además de su físico es el más deseado por las chicas para su novio. Inclino la cabeza hacia adelante chocando su frente contra la pared ¿Es que acaso se volvió un pedófilo?

    -Naruto voy a cerrar- Anuncio el moreno mientras su alumno se cambiaba.

    -Está bien que duerma bien Iruka sensei- Colocaba una bolsa de dormir en el suelo con la almohada.

    -En serio, para mí lo tuyo ya no es sano- Cerro la puerta de golpe, dejando al joven solo.

    -Que frio- Se quejó el rubio por la actitud del castaño, se puso el despertador alado de su improvisada cama.

    Ni el salón de boxeo o los muñecos de prueba tuvieron un descanso esa noche, cada golpe era más certero y con el combinaba el eco que se hacían por los impactos con los gritos de descarga del menor. Una hora después de entrenar se acomodó adentro de la bolsa y dejo que Morfeo lo cubra en su sueño.

    La mañana llego como todos los domingos pesados, era el único descanso de la mayoría de los ciudadanos prefiriendo apagar los despertadores o ponerlos unas horas más tarde, los ricos desayunos que preparan las madres o en otros claros los padres, dejando abiertas las ventanas para que el aroma a café, té o tostadas se expandan por el barrio. Una familia promedio de Japón, una mañana dominguera normal, sin gente trabajando dedicándose solo ese día para pasarlo con sus hijos o salir a caminar aunque alguien no respetaba esa tradición.

    Volvemos al gimnasio Ninja donde el despertar de un nuevo día es el levantarse para seguir entrenando, de nuestro rubio protagonista era la segunda noche que pasaba en ese lugar, se exigía cada vez el doble de las cosas y se enojaba consigo mismo por no hacerlo bien. Cuando estaba colocando mayor peso en el saco de pelea su pierna izquierda le fallo haciéndole caer al suelo, se giró mirando el techo sin saber que hacer estaba cansado no se había detenido en ningún momento solo unas tres horas para dormir, esperaba que la solución fuera a llegar de un momento a otro, cerro de nuevo sus ojos rendido por el abatimiento.

    -Hey Naruto- Comenzó a zarandearlo el moreno –Naruto despierta-

    Con pesadez sus ojos se fueron abriendo – ¿Eh? ¿Iruka sensei?-

    -Desde cuándo llevas dormido hay te vas a resfriar- Le ayudo a levantarse del suelo –Cuando te dije que hacer esto no era sano no estaba bromeando-

    -¿Qué hora es?- Pregunto el rubio a un adormilado.

    -Son las cinco de la tarde, es domingo- Respondió con detalle –Creo que sería buena idea que vayas a tu casa, el torneo es dentro de una semana-

    -Creo que si- Se tambaleaba exhausto a buscar sus cosas.

    Iruka viéndolo así dio un suspiro de verdad su alumno era un tozudo orgulloso.

    -Vamos que te llevo- Le ayudo a guardar todas sus pertenencias.

    Siendo guiado por el mayor hasta el auto donde le abrió la puerta del copiloto y le coloco el cinturón, solo coloco su cabeza para atrás mientras el morenos se acomodaba en el lugar del piloto y le bajaba el asiento pareciendo una cama, había sacado una sábana del baúl así taparlo terminado de poner el techo descapotable. Decidió que lo llevaría por el camino más largo y de una forma lenta que a pesar de no alegrarle mucho, coloco la llave y antes de mover la palanca de cambio vio al joven cansado parecía un ángel rubio dormido.

    Pero no crean que este chico imperativo era el único en sacar todo de sí para entrenar, a unas cuadras se encontraba el gimnasio Heie donde un azabache seguía un ritmo acelerado y duro en golpear o desplazarse por el lugar, él no se había quedado a dormir en el lugar pero si llego bien temprano y a pesar de estar cerrado se desafío a escalar el lugar hasta una ventana que se encontraba medio abierta.

    El pobre muñeco de prueba que sonaba cada vez que era golpeado en los lugares fijos era completamente maltratado, que hasta la asociación en defensa a los muñecos de pruebas estaban esperando en la puerta para castigar severamente al agresor.
    Sasuke daba con más fuerza, no para mejorar sino que quería sacarse esa maldita frustración, se sentía confundido ¿Cómo las cosas que tanto le gustaban se volvían una carga? No quería decir o afirmar que hacer Bōjutsu se había vuelto una obligación, como el salir o amar a su exnovia. Todas esas cosas tenían una sola raíz, su padre quien veía las cosas que hacía y si le salían bien lo exprimía como un limón hasta sacarle todo el jugo para saciar su sed, nada le satisfacía siempre quería más y si había algún error lo decepcionaba.

    Siempre lo comparaba con su hermano mayor quien era un súper dotado en todo lo que así, cuando era chico creía que superarlo le haría feliz pero nunca llego a sentir esa felicidad y por culpa de eso crecía el rencor y odio. Un día Itachi se le acercó a hablarle, diciéndole que debía encontrar su propio camino y no ir detrás de los demás, que no se sintiera frustrado que él podría hacer mejores cosas, a partir de ahí el lazo de hermanos volvió a unirse.

    El azabache siguiendo el consejo de su hermano se enamoró por primera vez con una hermosa chica, sencilla, tímida, que le invadió el corazón con su dulce vos. Se encontró un hobbies en las artes marciales con solo tomar un palo, empezó a sentir la adrenalina pero todo eso comenzó a derrumbarse, la cantidad de veces que debía defender a Hinata mas las charlas incansables de su padre sobre las importantes cosas que poseía la familia de su novia termino cambiándole la forma de mirarla, ya no era esa chica a la que amaba se había convertido en otro objeto que le servía para alegrar a su padre.

    -¡No!- grito dando un mayor impacto y partiendo el Sanshaku Bo –No voy a dejar que me quite esto-

    Morino llego un tiempo después y al ver a su nuevo alumno esforzándose tanto decidió no molestarlo y fue a su oficina para observarlo desde la ventana, cuando rompió el arma no pudo negar el sentirse feliz, asía mucho que no había chicos como él.


    QUOTE
    Hola chicas buena semana, como verán de que ambos chicos tengan las mismas metas no significa que al obtenerlas les dará el mismo significado.
    Naruto es muy provocativo con la gente (eso lo aprendió de sus abuelos ajaja) y el pobre Iruka debe estar con abstinencia.
    A hora que leo devuelta este capítulo me da mucha pena mi Sasu, al igual que Hinata sin saberlo empezó a convertirse en una carga para su novio.
    Bueno a hora a la noche subo el siguiente capítulo, gracias por leer y tengo otro fanfic de la pareja Kakashi con Iruka es “¿Por qué te tapas la cara Kakashi?” ya se no me mate con el título aunque es tierno y tiene lemon.


    Edited by Mar-chan - 4/3/2015, 13:58
     
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  13. Mar-chan
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    Aviso: Todos los personajes de Naruto no me pertenecen son del gran Masashi Kishimoto.

    Esta historia me ha tomado un año realizarla, así que por haberme tomado tanto trabajo no permito que haya una copia en otro foro o que solo le cambien los nombres a los personajes.

    Capítulo 9
    Los pre-exámenes, Orgullo de llevar semejantes honores




    Con un rubio cansado y necio más un Sasuke resentido pero determinado llegamos a lunes donde estos dos protagonistas se volverían a enfrentar, a pesar que el tiempo no jugara a su favor porque como todo trimestre en la escuela Konoha las últimas semanas son pesadillas para los alumnos ya que estaban los exámenes o mejor dicho pre exámenes.

    Los profesores pasaban constantemente entre los pupitres cerciorándose que nadie se copiada o haga algún tipo de trampa, la primera semana se entregan estas notas previas mostrando el desempeño para los verdaderos, se toma en cuenta ambas notas que se sumaban a los finales para cerrar el trimestre.

    Algunos alumnos estaban pálidos, temblando, con picazones o con constante tos, exceptuando a dos jóvenes en el aula 126. Tanto el azabache como el rubio respondían el cuestionario sin vacilación, cada tanto sus ojos se desviaban a si compañero de banco, para acelerar el movimiento de sus lápices se veía como una carrera de inteligencia.

    En la primera hora Sasuke entrego primero, sintiéndose orgulloso de la capacidad de su cerebro teniendo una mejor vista de su contrincante quien parecía estar perdido. En parte no le preocupaba, que se las arreglará solo acomodándose para ver por la ventana un fuerte estruendo en su banco lo alerto para levantarse.

    -Sensei aquí la respuesta n°40 está mal- Salto el rubio parado llamando la atención de todo el mundo.

    -Se supone que debes encontrar la respuesta correcta- Se burló el profesor del alumnos despistado mientras el Uchiha se volvía a sentar.

    -Eso ya lo sé- Respondió fastidiado –Pero aquí no hay respuesta correcta-

    -Bien veamos lo para que dejes continuar a los demás- Comenzó a caminar al pupitre del menor.

    -Aquí ve- señalo la pregunta planteada en la hoja –Ninguna de estas opciones son correctas- Dejo que el hombre tomara su pre examen –Se supone que en el crecimiento de un sapo las larvas se alimentan de algas microscópicas y material vegetal pasado dos semanas de su nacimiento- Mostro su inteligencia.

    El sensei miraba la pregunta con cada una de las opciones “a) Cuatro días, b) Siete días, c) Cuatro semanas” las releía unas veces más.

    -Tienes razón Naruto, a hora lo cambio- Le devolvió la hoja y llamo la atención de sus alumnos –Escuchen, en la pregunta 40 coloquen opción d) dos semanas- Volvió a su escritorio para tomar el pre examen –Uchiha, usted debería hacer lo mismo – Llevándole el examen al azabache.

    -Ya me había dado cuenta profesor- Dijo con total superioridad.

    -Y ¿porque no dijiste nada?- Dijo enojado su compañero de banco.

    -Pues porque no me interesa las notas que se saquen mis compañeros- Respondió con sinceridad e indiferencia.

    -ERES UN TEME, TE VOY A…- Alzó el puño el rubio el doble de enfurecido los malos compañeros eran cosas que no toleraba.

    -Basta Naruto- Coloco su mano en el brazo de su alumno –Distraes a tus compañero- Deteniendo así la pelea.

    Naruto a pesar de estar con esa rabio decidió no perjudicar a los demás y termino su examen. Aunque todos los alumnos del aula 126 ya sabían en quien jamás ayudar o confiar, un azabache frio como el hielo.

    A la salida de la escuela comenzaron a juntarse los grupos de amigos que no se veían por estar en el recesó repasando para el siguiente pre examen. Como era costumbre el rubio estaba rodeado por la mayoría de sus compañeros.

    -Naruto ¿crees que está bien la respuesta 5 b de matemáticas?- Pedía ayuda la castaña.

    -Espera Ten ten- Le interrumpió el cara de perro –Naruto me dices cual es verdadero o falso- Mostrando su cuaderno de actividades.

    -Chicos tranquilos, ¿qué les parece si vamos a mi casa a estudiar?- Soluciono la peli rosa el alboroto, viendo a su mejor amigo devuelta en apuros.

    -Si Naruto- Sensei- se rieron y afirmaron todos empezando a dirigirse a la casa de Sakura.

    -Gracias Sakura-chan- Le sonrió Naruto a su confiable salvadora.

    -¿Para qué están los amigos?- Le respondió también con una sonrisa –A hora me dices que poner en la pregunta 20 de química- Le presento el papel poniéndose seria y causando más risa en el rubio.

    Cuando toda la pandilla de amigos se disolvió contra el muro quedo nuestro corazón de hielo esperando el auto que lo llevaría al gimnasio, había estado todo el fin de semana entrenando más o menos desde las 6:00 am hasta las 20:00 pm más las pruebas difíciles y peleas con los mejores del lugar, demostrando y mejorando su agilidad, rapidez y fuerza echas por Morino sensei.

    -Hola Sasu ¿Cómo estas hoy? ¿Te duele algo después del otro día? ¿Quieres que te cure?- Saludaba y acosaba una chica pelirroja con lentes ni bien entro al edificio.

    -Karin deja que deposite sus cosas antes de seguir molestándolo- Intento frenar a su acelerada compañera un chico de pelo blanco.

    -Tu cállate Suite- Le respondió enojada por la interrupción.

    -¿A quién llamas suite? Bruja loca- Le devolvió el insulto ofendido.

    -¿Cómo se te ocurre ponerme ese sobrenombre delante de Sasu?- Salto encima del pobre adolescente llevando a cabo una pelea.

    Sasuke se fue caminando con ignorando todo lo ocurrido a los vestuarios donde estaba Jugo guardando sus cosas.

    -Hola Sasuke, ¿Listo para el entrenamiento?- Pregunto al percatarse de la llegada del azabache.

    -Hmm- Respondió sin ser claro.

    -Jugo, Sasuke el sensei nos llama urgente- Venia corriendo Suigetsu con el traje desarreglado y rasguños en la cara.

    Los tres compañeros se dirigieron a la oficina de Morino inmediatamente, Karin ya estaba ahí pero apoyada contra la pared alado de la puerta cruzada de brazos (Intentaba impresionar a Sasuke). Entraron sin siquiera percatarse de que estaba hay dejándola completamente irritara, cuando se volvió abrir la puerta y asomo Suigetsu buscando algo.

    -Ah, Karin ya vamos a empezar ¿Entras?- Se dirigió notando recién que estaba hay.

    La pelirroja completamente enfadara y desilusionada de que no fuera el azabache al irla a buscar o verla le propino un rasguño en el rostro de este dejándolo gritar mientras se adentraba a la habitación.

    Ibiki no se mostraba muy feliz, ignorando a sus alumnos fastidiosos miró fijamente al nuevo quien se quedo firme en el centro esperando a que hablara.

    -Como la mayoría de aquí saben dentro de menos de una semana y media se realizara el torneo de artes Bōjutsu- Hablo con seriedad y frialdad –Sasuke, a pesar de que estas con nosotros solo hace unos días quiero que formes parte del equipo, no- Se corrigió –Quiero que seas el capitán-

    -Pero yo eh sido capitán estos últimos dos años- Protesto el anunciado ex líder con la cara rasguñara –Y creo que…-

    -Tu cállate Baka flácida, estoy de acuerdo en que Sasu sea nuestro capitán- Interrumpió la pelirroja.

    -Mejor no hables cuatro ojos que tu voto no vales ni mierda- Le devolvió el insulto.

    -¿A quién le dijiste cuatro ojos?- No duro en pegarle una piña.

    -A la única tonta que no sabe golpear con un simple palo- Le agarro los pelos a tirones a pesar de aumentar las heridas en su cuerpo.

    Un golpe seco retumbo en la habitación deteniendo a ambos jóvenes.

    -¡¡Basta ya!!- Les grito el sensei –Si esa misma energía la tuvieran para pelar habríamos ganado más trofeos- señalo a su lado derecho –Suigetsu tu liderazgo estos últimos dos años demuestra tu falta de madures-

    -Te lo dije- Resalto triunfante la pelirroja.

    -Tu Karin no te quedas atrás- Le reprocho Morino –Desde que viniste te expulsaron tres veces en la competencia por casi matar a tu oponente- Bajo la cabeza avergonzada por su falta de control –Es por eso que decidí que Sasuke sea el capitán- Cambio su atención al mencionado –Espero que no me decepciones-

    -No lo hare- Se reverencio con respeto.


    ______________________




    Así fue pasando el tiempo y el torneo se Bōjutsu se fue acercando, igual que los resultados de los pre exámenes, además de los asustados alumnos y ansiosos por la fiesta después de disfraces.

    Un lunes de mañana invernal llegando a su fin porque dentro de poco empezaría la primavera una fecha esperada por todos, donde el sol daba agradables calores a la tarde y los recesos en el patio floreado con aromas nuevos, el canto de los pájaros. En el aula 126 los jóvenes se encontraban inquietos por saber sus notas.

    -El profesor- Anuncio el que vigilaba los pasillos.

    -Naruto se te cayeron los útiles- Le avisó su mejor amiga mientras se sentaba en su asiento.

    -Gracias Sakura- se dispuso a recogerlos.

    Ingresando al salón el profesor Kakashi lobo con una camisa blanca y corbata azul, venia leyendo una interesantísima revista de física hasta llegar a su pupitre.

    -Bien, como los veo- mintió –Afuera en el pasillo están las listas con las notas de los pre exámenes-

    Solo basto con el final de esa oración para que la mayoría de los alumnos salieran corriendo atropelladamente por la puerta al pasillo, dejando una onda de humo esparcida por todo el salón.

    -¿Vamos Naruto?- Le pregunto la pelirrosa ofreciéndole la mano al rubio que había sido atropellado por los demás.

    -Si claro- se rascaba la cabeza mientras aceptaba la mano de su amiga –Sasuke ¿no quieres venir?- Se dirigió a su compañero de banco sentado de lado a la ventana.

    El azabache miro los ojos celestes del rubio llenos de alegría e inocencia, quien se había vuelto una molestia, todas las clases se peleaban y su torpeza le perjudicaba, pero este parecía no tener rencor y saber que le había pateado el culo en la entrega de notas se podía decir que le hacía sonreír.

    -Bueno si insistes, quiero ver cómo te deje sentado- se levantó arrogante.

    -Eso es pensar positivo- Le sonrió inocentemente. Irritando al pálido por ver que no le afecto lo dicho.

    La joven que había entendido la frase del azabache comenzó a observarlo con mala espina. Saliendo del salón del lado derecho donde se encontraba la cartelera para los de su clase y otras más cercanas, se amontonaba un montón de estudiante medio empujándose para ir adelante. Cuando hubo un pequeño espacio para ver las hojas colgadas en la pared Naruto tomo de la mano a sus dos acompañantes y los guio hasta la cartelera correspondiente.

    Sakura después de haber sido impulsara hacia delante de la muchedumbre, coloco el dedo índice en el papel, llevándolo hacia abajo buscando así su apellido y luego girándolo de lado a ver los números.

    -Bien, ¡¡son buenas notas!!!- Salto contenta al encontrarse con la mayoría aprobadas –Naruto necesitare tu ayuda en física- Se giró para mirar al rubio.

    -No te preocupes, un poco más de estudio y aprobaras segura- Le desordenaba el pelo como una niña pequeña.

    Sasuke resoplo fastidiado por las acciones de sus dos compañeros, queriendo terminar rápido con todo eso realizo la misma acción que la pelirrosa, encontrándose con notas de nueve y diez.

    -Wau, teme sacaste muy buenas notas- Lo medio elogió el rubio, con su rostro respirándole en la oreja.

    -Solo eran de prueba- Sonrió de costado a pesar de las leves cosquillas relajantes que le daba su nombrado rival haciendo crecer su ego.

    -Haber yo- Se disponía hacer la misma acción que sus compañeros pero envés de eso decidió las termino encontrando sin ayuda –Listo- Se dirigió a la pelirrosa – ¿Vamos a almorzar Sakura chan?- Quien le miraba con cierto fastidio igual que los de alrededor -¿Qué?- Pregunto sin comprender.

    -¡¡¡¡YA DI TUS NOTAS BAKA!!!!- Le gritaron todos los presentes hasta el azabache.

    -Ah eso, son las mismas de siempre- le restó importancia.

    Con más enojo Sakura aparto a un chico que miraba el papel de la cartelera, sacándolo de la pared para leer lo que su mejor amigo no le decía.

    -Naruto Uzumaki, biología 10, química 10, gimnasia 10, literatura 10- Miro impresionada al rubio –Todas son 10- Le sonrió orgullosa.

    -Ya te dije, son las mismas notar de toda la vida- Se le tornaron los cachetes medios atardecer avergonzado.

    Todos comenzaron a felicitarle con choques de la palma de la mano, alguna que otra palmada en la espalda o puño en el hombro por su increíble cerebro, retirándose todos los pertenecientes del salón 126 a almorzar hasta la siguiente hora. Dejando otra vez a uno atrás, Sasuke no se había movido desde que escucho las notas de este llamado rival, le había superado, lo había dejado en segundo lugar cuando siempre fue el primero de la clase, nadie podía ganarle ¿Cómo un idiota como él lo había conseguido?

    Con los alumnos respirando tranquilos luego de saber en que debían mejorar y superando la primera etapa de los finales que igual faltaban tres semanas, podían comenzar a planear los últimos preparativos para la fiesta del sábado. Todos exceptuando cierto sabelotodo que tenía la cabeza en otro mundo.

    -Buenos días alumnos- Retumbo una vos por el salón –Necesito que Naruto Uzumaki venga a la dirección- Solicito el parlante de la esquina de donde venía la voz.

    El rostro del rubio cambio de felicidad a miedo, saliendo del salón lleno de susurros y risas detrás de él, pensaba en las cosas que había hecho para que el director lo llamara. El poner chicles en las sillas al profesor Sasori, no ya había recibido su castigo también el mesclar polvos de picante al ungüento de Gai sensei, fue levantando sus dedos enumerado las cosas y como si una idea le callera en la cabeza comprendió.

    -Los baños- Golpe sus dos manos matando a un mosquito.

    En la dirección Sarutobi contemplaba el exterior de la ciudad por la ventana, recordando los cambios que habían pasado desde que era un niño y su director era Tobirama quien recibía algunas veces las visitas de su imperativo hermano mayor Hahiruma, sus pensamientos fueron interrumpidos por los golpes en la puerta.

    -Adelante- Asomo por el umbral un rubio preocupado de caer en una guillotina –Naruto pasa siéntate- Le ofreció la silla de enfrente a su escritorio mientras él ocupaba su usual asiento.

    -Viejo antes que me castigue en mi defensa ese baño estaba andando mal y solo lo repare- Decía nervioso sudando.

    -¡¡¡ ¿Qué hiciste con los baños?!!!- Pregunto alterado y preocupado el pobre director.

    -Nada- Se quedó estático sentado cambiando la dirección de sus ojos.

    El hombre de canas expulso un suspiro para calmar su corazón, luego sabría lo ocurrido.

    -Bueno después me esterare, no te llame para castigarte o llamarte la atención –Hiso una pausa dejando al su joven alumno confundido –Sé que hoy es la ceremonia de comienzo del torneo Bōjutsu-

    -Sí, hoy serán presentados los equipos y habrá muestras de cada uno- sonrió emocionado el joven de ojos celestes al no verse en problemas.

    -¿Y la competencia de lucha?- Pregunto sin entender.

    -Ah, esa es mañana a la mañana por eso voy a faltar ya que este año hay muchos equipos- Se justificó por adelantado –Pero igual las finales serán para después de la escuela-

    -Bueno, yo sé que será algo duro y a pesar de no haberte visto prepararte- se fue levantando de su asiento –Pero quiero que representes no solo a tu equipo, también quiero que sea a la escuela de Konoha- Se detuvo frente a un armario con cristales, giro la llave.

    -¿En serio? Sería un gran honor viejo Sarutobi- Se ponía feliz de poder representar a sus compañeros y escuela que hacía años que estaba.

    El tercero ignorando la falta de respeto, abrió el armario sacando un palo cubierto con una manta. Mirándolo con nostalgia se dirigió a sus alumnos.

    -Este es mi Yonshaku Bo de Bōjutsu, con ella gane dos veces el torneo- Lo elevo a la vista del joven con los ojos iluminados de asombro, sonrió satisfecho por el resultado –Y quiero que tú lo uses para este torneo-

    Le entrego al rubio el bastón, quien acepto con las dos manos como si fuera lo más frágil que le encomendaron. Con cuidado empezó a desenvolverla, era perfecto de unos 1,30 cm de largo y 8 cm de grueso, tenía unos detalles marcados en el extremo del agarre también algunas ralladuras de golpes que había recibido en sus años de uso, con un color madera oscura notaba un buen cuidado.

    Sarutobi se sentó otra vez en su silla y espero que el joven terminara su inspección, quien se levantó para lanzar unos centímetros el objeto hacia arriba y abajo con cuatro dedos dos en cada mano midiendo el peso, lo lanzo por el aire haciéndolo girar como una hélice de helicóptero y volviéndolo a tomar con una sola mano para moverlo entre sus dedos y frenándola midiendo el equilibrio.

    -Es perfecta- Termino de admitir dirigiéndose al mayor.

    Tomo devuelta el palo con las dos manos y se arrodillo dejando sus brazos extendidos hacia arriba y la cabeza abajo.

    -Le agradezco mucho esta encomienda y prometo no decepcionarlo- Dijo controlando su felicidad.

    -Sé que lo harás- Le sonrió el tercero el joven volvió a ponerse de pie –Después de todo eres Naruto Namikase Uzumaki-

    Ese momento de felicidad nunca le seria arrebatado al rubio, ni siquiera a Sarutobi ya que le hacía recordar la primera vez que entro al torneo y solo su sensei Tobirama le apoyaba.

    -Bien retírate Naruto, tienes que prepararte y yo terminar el papelerío- Le dio permiso de partir.

    -Si director Sarutobi- Volvió hacer una reverencia para disponerse a salir de la habitación con el bastón en mano, cuando la puesta se abrió de golpe.

    Del otro lado se encontraba Kakashi Hatake con la ropa desprolija, los pelos más parados que de costumbre, completamente mojado y papel higiénico pegado en algunas partes de su cuerpo. El directo miro con asombro al profesor, para luego dirigirle una mirada de enojo a su alumno estrella, que no había aguantado las ganas de reír por cómo estaba él cada de lobo.

    -Naruto ¿Qué era eso de los baños?- Pregunto con irritación al darse cuenta como Sherlock Home quien era el culpable del porque Hatake estaba en ese estado.

    -Etto…- Empezó a ponerse nervioso por la broma –Tal vez cuando fui al baño deje un papel de broma en uno de los toilette-

    -Pues parece que no te iras tan temprano hoy- Cercioró resignado el tercero –Kakashi-san puede irse a casa y si quiere cambiarse tiene la enfermería- Se dirigió al enojado profesor víctima de las bromas del rubio.



    QUOTE
    La verdad me rió mucho con este capitulo, ese Naruto siempre se mete en conflictos a pesar de su inteligencia. Como ya saben el Bojutsu es el arte marcial de los bastones largos, este es el que le dio Sarutobi a Naruto https://lh6.googleusercontent.com/-2RrKBFa...k/s1600/bo1.jpg


    Edited by Mar-chan - 25/6/2015, 03:13
     
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  14. Mar-chan
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    SPOILER (click to view)
    Hola chicas aquí hay un nuevo capítulo, hoy diré que estoy muy feliz porque al fin después de tano trascribir de mi manuscrito la computadora eh llegado a las partes más románticas, lindas de pareja. No sé si alguna que venga leyendo desde el principio esto se divide en tres partes:
    1° El torneo de artes marciales y los pre exámenes
    2° La gran fiesta (y lo que ocurre por su culpa)
    3° Los exámenes finales y la obra de teatro de la academia Mito Uzumaki.


    QUOTE
    Aviso: Todos los personajes de Naruto no me pertenecen son del gran Masashi Kishimoto.

    Esta historia me ha tomado un año realizarla, así que por haberme tomado tanto trabajo no permito que haya una copia en otro foro o que solo le cambien los nombres a los personajes.

    Capítulo 11
    Ceremonia de presentación



    El rumor de que Naruto había ocasionado la gran explosión en el baño que los salones cercanos pensaron en un mini terremoto y en este tomo como víctima al profesor Kakashi Hatake se esparció por toda la escuela, consiguiendo así descartar el hecho que no sea para otra cosa la llamara del director al problemático.

    El final de las clases llego para todas las personas de la escuela Konoha, aunque en el aula 126 hubo un alumno que no tenía ese beneficio, su mano comenzaba a doler de tanto escribir lo del el pizarrón:

    “Escribir 150 oraciones, no debo jugarle bromas a Kakashi Hatake”



    El rubio estaba cansado hacía ya veinte minutos que había empezado, además que luego debía limpiar el desastre ocasionado en el baño. Una leve molestia en la pierna llamo su atención para seguirle un tono musical, atendió la llamada sin ver el identificador.

    -Hola Naruto Uzu-

    -¡¡¡¿¿¿DONDE ESTAS???!!!- No le dejo hablar, el sonido del parlante aturdió por unos momentos el oído derecho del menor.

    -Etto…- No sabía que responder.

    -La ceremonia de apertura y presentación de equipos está por comenzar- Le reprocho la vos del otro lado.

    -Lo siento Iruka- sensei estoy castigado y tardare más de media hora en llegar- Se disculpaba sin nada más que hacer.

    -¿¿¿Cómo puedes estar castigado???- El aliento se le salía de los pulmones.

    -Gomene, prometo que hare lo posible por llegar- Ya del otro lado de la línea no había sonido –Iruka-sensei ¿Esta bien?-

    -Hola ¿Naruto?- hablo una joven del otro lado.

    -Si Fu, aquí estoy- Respondió a un con preocupación.

    -Escucha Iruka-san a hora no puede contestar, trata de llegar antes de la presentación de nuestro equipo- Le pidió.

    Ambos sabían lo importante que era esa etapa, en la ceremonia no solo había un espectáculo y alguien cantaba también era la presentación de equipos, donde se mostraba su agilidad y enseñanza de las academias como señales de respeto a todos. En ese si o si debían estar todos los participantes que eran mínimo cuatro, el que no apareciera no podía competir al siguiente día.

    -Si llegare, además por lista estamos casi al final- Corto la llamada, dispuesto a escribir lo más rápido posible.

    ________________________________________________________________________


    En el gimnasio de artes marciales ninja, las banderas de distintos colores y símbolos hondeaban con el viento, se escucha una orquesta en sus interiores. Más de mil personas llegan a ver tan esperados momento realizado una vez cada cuatro años.

    El torneo se dividía en dos partes, la primera era la ceremonia y presentación de equipos quienes recibirían una puntación por mostrar las habilidades y talentos, esta les dejaría como primeros o últimos, en donde harían pasar a la segunda parte en el que solo habría luchas. Así cada equipo ganador subiría en posiciones pasando a los cuartos, semifinales y finales este último dejaría de ser en grupos para obtener un solo ganador.

    Los equipos se ubicaban en fila por orden alfabético ya habían recitado el himno de Japón, frente a ellos se encontraba el escenario que presentaba a una exótica bailarina con su particular danza.

    -¿Dónde está? Si no se presenta antes de nuestra presentación terminaremos con la peor puntuación- Se mordía las uñas desesperado por la ausencia de su alumno –O peor eliminados, se imaginan un grupo anfitrión eliminado en tan solo las presentaciones seremos el hazme reír-

    -Sensei tranquilo, llegara- Le intentaba calmar el ataque de pánico una joven de pelo verde.

    -Si ya sabe cómo es Naruto nunca es puntual- También trato de apaciguar las aguas pero solo consiguió turbarlas más.

    -Yagura será mejor que no hables- Le regaño Fu –Naruto no nos decepcionara-

    Mientras un joven de ojos color rojo tenía la mirada en las dos escenas –Naruto, ¿Qué estás haciendo?-

    La danza de la chica estaba por terminar y el maestro de ceremonias se preparaba para subir al escenario.

    ___________________________________________________________________________


    En la academia Konoha el agua salida del baño había inundado el pasillo, un rubio intentaba limpiar el desastre con los trapos y haragán. Hacía poco termino de levantar todos los papeles mojados.

    -Diablos, ¿Por qué tenía que ser Kakashi la victima de mis bromas? Esta es la… quinta vez en esta semana- Dejo un momento sus quehaceres –Primero en las chinches en el asiento del comedor que iban para Asuma sensei, luego el postre súper agrio de chocolate en la heladera de la sala de maestros, tercero el borrador cayendo de la puerta y el cuarto… Etto- Se quedó enumerando con sus dedos –¡¡Ah!!- Levanto el cuarto dedo de su mano- La liberación de las ratas del laboratorio de química en el pasillo-

    Cerro los ojos recordando entre risas cuando en un aburrido día en la clase de química, el profesor Yamato le entrego la jaula con las ratas para que repartiera a los demás estudiantes pero lo que hiso fue abrir la ventana que daba al pasillo saco el perillo y dejo que los 15 roedores salieran, para escuchar después un grito de auxilio.

    -¿Pero porque será que estaba solo en el pasillo? Incluso comiendo un sándwich de queso- siguió con su labor sin comprender las circunstancias.

    Ese día el pobre profesor Kakashi se estaba escondiendo Maito Gaí maestro de gimnasia, que siempre le pedía comida más si era un sándwich de queso, pero no se esperó terminar en el hospital con tantas mordeduras y casi de sangrentado.

    -Bueno creo que ya está- Dijo satisfecho de lo reluciente que quedo el baño y el pasillo –Sera mejor que corra si no quiero ser acecinado por Iruka- Tomo sus cosas para empezar a correr a la salida.

    _______________________________________________________________________________

    Mientras tanto en el torneo de artes Bōjutsu ya se habían presentado formalmente por nombre a todos los equipos, ya iban por la letra “G” en el espectáculo de cada uno, este equipó mostraba una hermosa coreografía combinando los colores amarillo y verde en sus vestimentas, se trataba de una pelea de bandas no había música pero si gritos de descarga y golpes. Al finalizar se despidieron del jurado con reverencias y bajaron del escenario dejando que Aoba Yamashiro hablara.

    -Excelente presentación del equipo Gurasu (Hierva)- Alago con exageración –Y a hora es el momento de presentar a los Heie- Bajo devuelta las escaleras dejando el micrófono.

    Los cuatro participantes subieron al escenario, llevaban unas remeras de color azul con pantalones blancos, Karin tenía la misma combinación de colores solo que envés de pantalón largo era una pollera corta, se habían colocado sobre el rostro mascaras de forma de gato.

    Realizaron una reverencia a los jueces, la única chica del grupo se colocó enfrente dándole la espalda a los varones, estos flexionaron separaron sus piernas y las flexionaban colocando sus brazos extendidos para adelante, como si un silbato hubiera avisado a la pelirroja en moverse lanzó tres patadas al aire gritando lo más fuerte que dieron sus pulmones y corrió a enfrentar al joven de pelo naranja.

    Salto hacia adelante posándose en los brazos extendidos de su compañero y Jugo como una palanca la lanzo para arriba, esquivando y recibiendo los golpes que daba la chica sin querer tocar el suelo, en seguida fue ayudado por Sasuke que se encontraba a su lado. El público estaba pasmado al notar la poca gravedad que había en esa lucha.

    Karin dio su último golpe para impulsarse otra vez y caer en su posición inicial. La gente iba aplaudir pero en ese mismo momento que parecía finalizar el tercer combatiente se lanzó hacia adelante contra la pelirroja siguiendo con una pelea sin terminar donde Sasuke se unió otra vez, cuando Karin parecía que perdería Jugo apareció en el aire para separarlos golpeando con su puño el suelo fingiendo una onda expansiva en sus compañeros, quienes saltaron para atrás dejando la forma de un cuadrado y dando por finalizada su actuación.

    Aoba tardo unos minutos en reaccionar al igual que el público que inmediatamente aplaudieron y silbaron por tan increíble presentación.

    -¡¡¡Que formidable destreza, coordinación y velocidad!!!- Los alabo con sinceridad –Damas y caballeros el quipo Heie, ellos viene de aquí Japón- le volvió a presentar hasta que se marcharon –A hora seguirá el equipo Kiri (Neblina)-

    Cuando el equipo de Sasuke volvió a su sector comenzaron a quitarse las máscaras y quedar más cómodos en la ropa mientras seguía las demás presentaciones.

    -¿Qué tal estuvo eso sensei?- Le pregunto contento el joven de pelo blanco al ver a Morino –Dejamos al público maravillado y sin hacer mucho esfuerzo-

    -Si claro, eso fue porque la mayoría de las cosas las hice yo- Le bajo los sumos la pelirroja respirando agitada –Por lo menos lo hubieras echo más fácil en no atacar antes de la señal- Se ponía su chaqueta de color lavanda.

    -Pero se supone que era ni bien tocabas el suelo, niña loca- Se defendió.

    -¿A quién llamas loca?- Poso sus manos alrededor del flácido cuello de Suigetsu.

    -Karin no creo que acuoso- Comenzó a detenerla Jugo.

    -Tú no te metas- Le grito la loca lanzando veneno como una serpiente.

    Ibiki se había cansado de la tonta pelea de sus alumnos y empezó a ver a los demás equipos, ya no faltaba mucho para terminar las muestras y presentaciones. En este mismo lugar se realizaría el combate final, su mente lo dejo vagar por los recuerdos de su joven vida como luchador.


    QUOTE
    Una cosa más si leen esto yo solo tome el nombre y las armar de Bōjutsu realmente no tengo ni idea de las reglas o torneos, solo lo utilice porque apareció en la serie de Naruto (Sarutobi la usaba) y me sirvió para varias cosas de la historia.
    Gracia por leer mi historia.
     
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  15. Mar-chan
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    QUOTE
    Aviso: Todos los personajes de Naruto no me pertenecen son del gran Masashi Kishimoto.

    Esta historia me ha tomado un año realizarla, así que por haberme tomado tanto trabajo no permito que haya una copia en otro foro o que solo le cambien los nombres a los personajes.

    Capítulo 12
    Antiguos rivales




    Comienzo del Fanblack de Ibiki Morino


    Era ya hace varios años que habían celebrado el primer torneo internacional de Bōjutsu, con el propósito de unión entre las diferentes academias en una competencia amistosa y así los alumnos tenían un motivo de esforzarse en mejorar.

    Ya hacía varias horas que se habían terminado las presentaciones y la mayoría de los equipos se fueron a sus casas, solo quedaban cuatro participantes representando a sus grupos. Eran del equipo Ne (Raíz) Hiruzen Sarutobi y Danzo Shimura, del equipo Torishiraba Ibiki Morino y por último de los Faiatenpuru (Templo del fuego) quedaba Chūkaku.

    Por sorteo se determinaron las peleas y esto daría paso la final, el público estaba expectante los cuatro luchadores habían dado increíbles espectáculos de fuerza, agilidad y talentos, entre la gente se encontraba el actual director de la escuela de Konoha y entrenador de Sarutobi y Danzo. Sabía que sus dos discípulos no se detendrían, tenía la esperanza de saber quién ganaría ya que mostraba un gran afán de líder y sabiduría. No es que desconfiara de su otro discípulo pero este había demostrado la ambición del poder y no aceptaría tan fácil compartir la victoria.

    El juez o presentador de ese momento era Ibushi este coloco su mano en la urna cubierta y saco un pedazo de papel.

    -Bien damas y caballeros la primera persona en pelear en la semifinal es Danzo Shamura- Anuncio señalando al joven sentado a su derecha.

    El nombrado se levantó de la silla aspirando todos los aplausos que le eran recibidos.

    -Y a hora veremos quién será su contrincante- Menciono el hombre de cola de caballo, repitiendo la misma acción –Hiruzen Sarutobi, ¿Quién lo diría? La pelea entre dos equipos será en este instante- Gritaba eufórico.

    Sarutobi que en ese momento tenía el pelo marrón y estaba en la flor de su juventud prefirió no levantarse, así que saludo con la mano y miro por unos instantes a su sensei.

    Morino se preparó para su pelea con Chūkaku, era un joven con muchas ambiciones siendo el más chico de todos los participantes sus anteriores peleas habían sido una grandiosas muestras de su potencial y se ganó el respeto de haber llegado hasta esta instancia.

    Cuando termino el primer combate de inmediato los siguientes se colocaron en posición ya que se demoraron mucho en llegar a un final, Ibiki pensaba en ganar esta pelea y a su próximo rival Sarutobi.

    -Listos- Elevo el brazo Ibushi –Combatan- Lo bajo como si quisiera cortar un leño.

    En ese mismo instante Chūkaku fue el primero en lanzar un golpe aunque Morino lo esquivo sin dificultar, en modo de burla realizo la misma acción que su rival pero no se esperó que este detuviera el ataque con el palo bien firme entre dos manos y usara sus pies para golpearlo y hacerlo perder el equilibrio. En ese instante Chūkaku desapareció de su vista, se guio enseguida por su instinto y coloco el Sanshaku Bo
    para arribar deteniendo también el ataque de su rival.

    El atacante volvió al suelo y sin esperar un revote se echó a correr, esta vez Ibiki estaba preparado le devolvió tantos golpes como ataques recibía, la velocidad y fuerza de estos no le dejaba tiempo para contratacar. Ambos se separan cansados con el corazón acelerado la adrenalina fluyendo por todas sus venas, realizar esta actividad le daba vida no estaba dispuesto a perder y se dispuso a atacar, a hora su rival mostraba más cansancio entre las esquivadas encontró un hueco y apoyo la punta del palo en el suelo para soportar su peso pegando un salto que le dio con el pie en el pecho, Chūkaku cayo tendido al suelo eh Ibiki con toda agilidad como si diera una reverencia y el Nihiri Bo de forma lateral.

    -8… 9… 10, termino Morino Ibiki es el ganador de este segundo combate de semifinal- Anuncio Ibashi –Tomaremos una pequeña pausa y realizaremos la final-

    El moreno se dirigió hasta su antiguo contrincante que seguía en el suelo para ofrecerle su mano.

    -Buen combate Chūkaku, no me la ibas a dejar fácil- Le sonrió pues era un buen ganador.

    El mayor le miro desde abajo –Si tienes razón- acepto sin problemas la mano de su excombatiente –La verdad me deje vencer- Dijo en broma.

    -Si claro y yo nací ayer- Hablo arrastrando las palabras dando vuelta los ojos.

    -¿Es que acaso no lo hiciste? Como eres tan chico- Lo tomo de la cabeza para frotarle sus nudillos en el pelo.

    -A quien llamas niño tú…- Forcejeo el agarre hasta conseguir soltarse –Por lo menos me muestro más maduro- Le saco la lengua.

    Chūkaku le estaba a punto de reprochar pero fue interrumpido por la vos del presentador.

    -Bien vamos a dar inicio este tan esperado final- Los gritos del público se fueron elevando –Contrincantes vayan a sus lugares-

    -Espero que ganes- Coloco su mano en el hombro sonriéndole de costado al menor.

    El moreno le devolvió el gesto bajando y subiendo la cabeza, subió al domo colocándose en su posición.

    -Saluden- les ordeno Ibushi.

    Se tomaron las manos, seguido de una reverencia. Morino bien sabía que era el más chico de edad pero había llegado a la final, no iba a perder no se iría sin el trofeo de primer lugar.

    -Sera mejor que te rindas viejo no voy a dejarte ganar- Puso su Nihiri Bo frente a él en defensa.

    Sarutobi giro su Yonshaku Bo teniéndola como un sable con las dos manos, dejando su cuerpo en modo lateral recto.

    -Me alegro que tengan confianza, aunque necesitas más que eso al enfrentar a otra persona- Le gustaba ese entusiasmó y tampoco pensaba en perder.

    -¿Listos?- Ibushi levanto la mano para dar la señal –Pelen- La bajo como una navaja.

    Esta vez Morino fue el primero en atacar, su bastón choco contra el de su contrincante con tanta fuerza que amenazaba partirse en dos Sarutobi no se quedó atrás impulso su peso a favor consiguiendo tirarlo al suelo, para pegarle con el extremo de su arma Ibiki al encontrarse indefenso ya que su palo se le había soltado de las manos rodo como un tronco para la derecha esquivando el golpe.

    Devuelta con su Nihiri Bo en mano siguió luchando contra el castaño, cada golpe o esquivada que realizaba era devuelta en una forma imitada por Hiruzen. Media hora paso y ninguno de los dos parecían tan cansados para dar el brazo a torcer, Ibiki se le ocurrió una táctica para llegar a un final pero era deshonesto “Hay muchas veces que se dice cuando uno está desesperado por ganar hace lo que sea”, se repito esas palabras en la cabeza tomando su decisión.

    Sostuvo su Nihiri Bo de los dos extremos en forma lateral yendo hacia adelante atrapando el Yonshaku Bo de su oponente, este intentando zafarse del agarre no se daba cuenta lo cerca que estaba del final del ring, al moreno solo le hacía falta patear sus pies y tirarlo. Cuando entre el público se oyó la vos de un niño

    -Mama ¿Ese chico lo hará caer?- Era un niño moreno no más de cuatro a seis años.

    Ante advertencia Sarutobi descubrió la trapa de Morino, soltó su arma agachándose apoyando sus nudillos en el suelo como un gorila y aprovechando la tardanza en reacción de Ibiki que recuperaba el equilibrio elevo sus pies dando una vertical invertida pegándole en el pecho para que callera, al volver tocar el suelo salto tomando el bastón de su contrincante y antes que el mismo tocara el piso dio su golpe final en el estómago como una puñalada.

    -Ya tenemos un ganador de torneo Internacional de Bōjutsu- Grito el presentador subiendo al ring y señalando al campeón -¡¡¡Hiruzen Sarutobi!!!!-

    El público aclamo emocionado, la mayoría de ellos pensaban que iba a ganar igual que su sensei, tenía un gran espíritu, tenacidad, liderazgo, además que podía ser el siguiente director del Instituto Konoha.

    Morino no se podía levantar le dolía el estómago había perdido por culpa de un soplón, un niño un… Sus pensamientos fueron interrumpiros cuando una sombra le cubrió la cara, era el niño moreno.

    -Tu perdiste por ser deshonesto- Le señalo el chico quien estaba ya teniéndole mucho odio conteniéndose de no pegarle –Por eso seré tu contrincante cuando cumpla 12 años-

    Ibiki no pudo contener su riza a pesar de toda la frustración, pensar que un niño le vencería absurdo pero por un instante su misma mente le dio un golpe para reaccionar a lo dicho. Un menor intentando ganarle a un adolecente su sueño y pesadilla presentes en un solo instante.

    -¿Cuál es tu nombre?- Le pregunto levantándose.

    El pequeño le miro con desconfianza y miedo desde cerca parecía mucho más intimidante y alto.

    -Umino… Iruka- trago saliva asustado.

    Ibiki le sonrió ante ver tan diminuta criatura.

    -Bien, entonces aceptare tu oferta- Extendió la mano al menor esperando una respuesta.

    Iruka se sintió más tranquilo cuando comprobó que no le pegaría y acepto con gusto el apretón de manos.

    -A hora tú serás mi rival en todos los futuros combates- Confirmo el moreno mayor.

    -Si- respondió con una sangriza de oreja a oreja.

    Fin del Fanblack Ibiki.


    En ese torneo, no solo fue su primera competencia sino el comienzo de un desafío que siguió por varios años hasta la actualidad, donde a pesar de ya no competir en el domo lo hacían gracias a los alumnos que les representaban.

    -Increíbles equipos ya solo nos faltan dos que pasen los siguientes participantes los Omen- Hablo Yamashiro por el micrófono.

    -¡¡¡Iruka!!!- Grito una chica –Tranquilo ¡¡traigan agua!!- le pido a las personas a su alrededor.

    Comenzó a buscar entre los puestos donde ocurría tal conmoción, descubriendo a uno de sus alumnos se disponía a marcharse.

    -¿A dónde vas Sasuke?- Le pregunto es que estaba cerca haciendo más evidente su intención.

    -Tsk- chasqueo la lengua –No es algo que te importe- Le contesto al de pelo blanco.

    Su sexto sentido se puso alerta soltando la mochila que llevaba en el hombro para esquivar el puñetazo dándose la vuelta tomando así el brazo extendido y aplicándole al final una palanca. El joven grito de dolor a pesar de intentar bajarlo el tono, no quería demostrarle a su agresor que le había lastimado.

    -Maldición- Masculló cuando sintió un nuevo tirón en su humero.

    -Sasuke suéltalo- Ordeno el sensei –No se puede participar con los tres integrantes- Le explico cuando su primera orden no fue escuchada.

    El azabache aflojo el agarre hasta dejarlo totalmente libre, Suigetsu callo de rodillas tomando su brazo por el dolor levanto la cabeza encontrándose con unos ojos negros cual carbón que lo miraban con indiferencia y superioridad avivó su furia. Se disponía a seguir peleando pero una mano en su hombro le detuvo.

    -Suéltame Jugo- Apartando con brusquedad su toque.

    Ibiki no aparto la vista de su alumno, habían pasado varias semanas conociéndolo y a pesar de no llevarse bien con los miembros del grupo a él nunca se le atrevió desafiarle.

    -Me aburre esto y no creo que sea necesario que me quede- Cedió en justificarse a su sensei –Ya estamos adentro y no me interesa los demás participantes sé que les ganare-

    -No te confíes solo de tu habilidad, hay otras personas que pueden representar un gran desafío- Le aconsejo Morino.

    -Si como no- Se burló por lo bajo, tomo otra vez su mochila y se giró para retomar la marcha.

    -Sasu espera- Lo llamó Karin pero ya el chico no la escuchaba.


    QUOTE

    Gomene se que es corto y a mi me aburrio pero hoy apesar de eso estoy mucho mas feliz que la semana pasada.
    SPOILER (click to view)
    (En secreto) Ya trascribi del manuscrito el primer lemon de la historia :=omgdf:
     
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