-
susyttoh02
.User deleted
gracias XD
y lo estaré esperando :3
. -
Lulubella .
User deleted
Que lindo!!!, 
Esta super interesante la historia!!!!.....quiero la continuación pronto!!!, te ha quedado muy bien!! 
....ellos dos son tan lindos!!!!! 
Nos vemos!!. -
.
muchaaaas gracias :3 
La conty estará el finde o quizas antes, pero lo mas probable el finde ^^. -
EERIOL .
User deleted
Holi, me gusta mucho esta historia me enganché a ella desde el primer capítulo, espero que actualices pronto.
Cuídate, bye.. -
.
Holaaaaaaaaaa!!! :3
Bueno, primero decir que siento la tardanza, pero estaba de vacaciones y no podía escribir, pero ya he vuelto xD asi que vamos con el capitulo :3Capitulo 3
Midorikawa corría en mitad de la noche en dirección a su casa, tras unos minutos corriendo llegó a su apartamento y delante de la puerta apoyó sus manos en las rodillas agitado por el cansancio, abrió la puerta y se tranquilizó al ver que no había nadie, todo estaba completamente oscuro.
Se metió en la ducha, era lo que necesitaba después de un dia de trabajo, pero no podía sacarse de la cabeza todo lo que había pasado con Hiroto. Fue una noche bastante larga, durmiendo apenas unas horas pensando en la conversación que tuvo con él.
A la mañana siguiente era sábado por lo que no tenía que ir a trabajar, se levantó y desayunó tranquilamente pues seguía estando solo, cuando acabó se dispuso a ir a casa de su amigo Kazemaru.
Midorikawa caminaba tranquilamente por la calle cuando escuchó que alguien llamaba su nombre. –Midorikawa.- El peli-verde se giró y vio que su jefe pelirrojo era el que estaba llamando su atención. –Hola, Hiroto.- dijo de forma simpática.
-El único día que no estamos juntos también te encuentro, eso tiene que significar algo. – Dijo en tono burlón el pelirrojo.
-Si, seguro que es eso. –Soltó una pequeña carcajada.
-Y bien, ¿Dónde vas?
-Voy a ver a Kazemaru, con el trabajo no tengo mucho tiempo y hace varias semanas que no hablamos.
-Oh, Kazemaru, hace mucho que no lo veo, espero que este bien.
-Si todo esta muy bien, tengo que irme… nos veremos en la oficina. –En un intento de esquivarlo para evitar cualquier situación.
-Midorikawa, ¿Te apetece que nos veamos esta noche?, vamos a cenar, yo invito! –El pelirrojo estaba algo entusiasmado y con cara suplicante.
El peli-verde no sabía que decir, quería aceptar pero no estaba seguro de si era lo correcto, pero después de unos segundos de silencio y viendo las ganas con las que el chico se lo propuso, aceptó. –Esta bien…
-Estupendo! Pasaré a recogerte a las 7. Nos vemos – Con una sonrisa se despidió del chico y se fué.
En casa de Kazemaru.
-Que malo eres Kaze, llevas semanas sin llamarme siquiera… -Dijo mientras hacía un pequeño puchero simulando enfado.
_Lo siento Mido, es que últimamente Endou no tiene tanto trabajo y lo estamos aprovechando. –Dijo ahora el peliazul con una sonrisita.
-Pues si que te van bien las cosas, te envidio. –Suspiró el chico
-¿ Y a ti, como te va todo con Hiroto? –El peliazul se sentó al lado del chico mirándolo intrigado.
-Pues… supongo que bien –Un pequeño sonrojo invadió las mejillas del peliverde.
-¿Supongo?, ¿Acaso ha pasado algo que deba saber? –Se acercó aun más.
-Bueno… hemos hablado y aclarado algunas cosas… pero nada que recalcar, enserio, solo hemos quedado esta noche para cenar.
-Enserio?, bueno tu sabrás lo que haces, si es lo que quieres.
-Ah, ya se ¡! Kaze, porque no venís Endou y tú a cenar también?
-Eh?...-El peliazul puso una cara burlona – Asi que quieres una cena de parejitas eh?, si que vas a saco Midorikawa…
El sonrojo del peliverde aumentó rapidamente-Que dices?, no es eso baka baka –le tiró un cojin que tenía a mano en el sillón donde se encontraban.
Entre carcajadas – Vale, vale. Se lo diré a Endou, hace poco me comentó que hacía mucho que no veía a Hiroto, supongo que estará de acuerdo… pero mas importante, ¿no le importará a él? Quizás quiere que estéis solos.
-Bueno… no creo que le moleste, a las 7 en el parque cerca de mi casa, pasará a recogernos, ahora me tengo que ir. Nos vemos.
-Esta bien, hasta luego.
Midorikawa volvió a casa, y esta seguía vacía… ¿Dónde se habrá metido…? ¿Volverá? ¿Ha terminado?, eran los pensamientos que pasaban por la cabeza del chico en ese momento. –Bueno, no pensemos en eso ahora, veamos que me pondré.- Le costaba admitirlo, pero estaba realmente ilusionado con verse con Hiroto fuera del trabajo.
Rápidamente llegaron las 7 de la tarde y Midorikawa estaba en el parque cerca de su casa esperando a sus amigos.
-Mido, ya estamos aquí –Saludó sonriente el peliazul.
-Hola Midorikawa, ¿todavía no ha llegado Hiroto?, tengo ganas de verlo. –Decía ahora Endou.
-Estará a punto de llegar. –Dijo el peliverde.
El sonido de un coche frenando cerca de ellos los alertó y se giraron en la dirección de la que provenía el sonido, y allí estaba Hiroto, en un lujoso coche al que todas la personas que estaban alrededor no podían quitarle el ojo de encima, tanto al coche como al chico que estaba dentro, eran realmente llamativos, digamos que era el complemento perfecto para el chico perfecto, o eso fue lo que inconscientemente pensó Midorikawa.
-WOOW HIROTO!, no podía esperar menos del gran empresario. –Decía con su gran peculiar sonrisa Endou acercándose al coche por el lado del conductor.
El pelirrojo se bajo del coche. –Endou, cuanto tiempo, veo que no has cambiado en nada. –Los chicos se abrazaron amistosamente. – Kazemaru, tu tampoco has cambiado demasiado. –Con una sonrisa.
-Bueno, en realidad tu también sigues igual, exceptuando algunos detalles. –Dijo mirando el coche pero con una sonrisa.
-Venga, vámonos, el sitio está un poco lejos. –Dijo el pelirrojo mientras se subía en el coche.
Tras un trayecto un poco largo en el coche llegaron a un restaurante situado en un mirador en lo alto de la montaña con unas vistas impresionantes.
-Que sitio tan bonito, es impresionante. –Decían Midorikawa y Kazemaru mientras se asomaban al mirador admirando la vista de toda la ciudad iluminada.
Dentro del restaurante todo era lujo, algo a lo que el pelirrojo estaba acostumbrado pero los demás no, tras horas hablando, poniéndose al día de sus vidas y rememorando viejos momentos, buenos y malos, con el viejo equipo definitivamente una de las mejores épocas para todos, terminaron de comer y estaban con los licores que sirven después de la cena. A Endou se le fue un poco la mano, y estaba demasiado borracho, diciendo tonterías mientras que Kaze a su lado intentaba controlarlo un poco. Midorikawa e Hiroto solo reían ante la situación.
-Oye Midorikawa, ¿quieres que vayamos fuera a ver las vistas y hablar un poco?, está claro que aquí no podemos estar tranquilos. –soltó un pequeña carcajada.
-Esta bien, vayamos fuera. –El peliverde ya estaba levantándose del asiento para dirigirse a la salida hacía el mirador.
Casi pasaron unos 40 minutos y la pareja no volvía, Kazemaru estaba un poco desesperado pues Endou no paraba de beber y aparte de las tontería que soltaba, ya estaba subiéndose un poco de tono teniendo a Kazemaru a su lado.
-Kaze, vamos al baño rápido. –Decía tomando al peliazul del mentón.
-Cállate ya Endou, te van a escuchar los clientes. –Decía apartándolo totalmente sonrojado por las palabras del contrario. –Quédate aquí, iré a buscarlos.
Kazemaru se levanto de la mesa y fue en la dirección en la que los chicos se fueron anteriormente, iba a un paso un poco ligero pues tampoco confiaba en dejar al chico borracho solo demasiado tiempo.
Al mismo tiempo en el mirador los dos chicos estaban hablando tranquilamente, poco a poco el ambiente iba mejorando, Midorikawa estaba muy nervioso, pero poco a poco se fue relajando, echaba de menos poder estar así con el pelirrojo, solos, hablando, riendo, recortando la distancia entre ellos y con esa espectacular vista de fondo.
-Mira Midorikawa, una estrella fugaz, pide un deseo. –Dijo el pelirrojo rápidamente.
-Ah sí, tu también Hiroto cierra los ojos.
Midorikawa cerró los ojos riendo y se disponía a pedir su deseo, pero rápidamente notó como sus labios eran apresados por los del pelirrojo, su reacción fue de sorpresa, pero a los pocos segundos decidió corresponder, al principio era un beso tímido, un simple roce que rápidamente se volvió en un beso atrevido, delicioso, desesperado de volver a sentirse uno al otro de ese modo, un excitante baile de lenguas comenzó, saboreándose mutuamente aprovechando cada segundo antes de que necesitaran separarse solo por la falta de aire. Las manos del pelirrojo bajaron hasta la espalda del chico, mientras que este pasaba los brazos por el cuello del contrario.
Desde la puerta estaba Kazemaru que llegó en ese preciso momento y una pequeña sonrisa se apoderó de él al contemplar aquella escena y decidió volver a la mesa para dejarles un poco más de tiempo.
Ellos dos seguían esa batalla húmeda dentro de sus bocas, pero volvieron a separarse jadeantes, mirándose a los ojos. –Hiroto... será mejor que volvamos ya.. –Intentaba decir el peliverde con la respiración entrecortada.
-Esta bien, llevamos mucho tiempo haciéndolos esperar… -Y los dos volvieron dentro.
Todos volvieron a casa cogiendo el mismo trayecto que antes, dejaron a Endou y Kazemaru en la puerta de su casa, pues el chico seguía bastante borracho y Kazemaru muy enfadado por su comportamiento, ya estaban en la calle del peliverde.
-Puedes dejarme aquí, vivo ahí enfrente. –Dijo Midorikawa intentando que no parase justo delante de su puerta.
Hiroto paró el coche dispuesto a dejarlo ahí tal y como quería.
-Me lo he pasado muy bien esta noche Hiroto, gracias por todo. –Seguía diciendo el peliverde.
-Yo también Midorikawa, podemos repetir cuando quieras, pero esta vez nosotros solos. –Susurró ahora el pelirrojo esto último acercándose lentamente al oído del chico.
Mirándolo fijamente a los ojos, a escasos centímetros de su rostro Midorikawa sentía como su pecho ardía intensamente e inconscientemente de sus labios se escapó lo que le pasaba por la cabeza en ese momento. –Hiroto, bésame.
Un solo segundo tardó en reaccionar el contrario apresando de nuevo sus labios poniendo en el movimiento todas las ganas que se estaba conteniendo cada vez que lo tenía delante, aún así era un beso tierno, lleno de cariño, realmente quería demostrarle todo lo que seguía sintiendo por él, y que no cambiaría nunca. Cuándo falto el aire se separaron y con las mejillas sonrojadas el peliverde se disponía a irse.
-Gracias Hiroto, nos vemos en la oficina. –Se despidió con una sonrisa que no podía ocultar en su rostro.
Al llegar a la puerta de su apartamento sus pensamientos se despejaron al oír la fuerte música y el jaleo que provenía desde dentro de la vivienda. Pero su sorpresa fue mayor cuando abrió la puerta y se lo encontró todo lleno de chicos con no muy buena apariencia, borrachos, gritando, tirándose cosas.
-¡Que estais haciendo!, ¡Fuera de aquí todo el mundo! –Gritó ante la escena.
-Oye, Osamu, aquí está tu puta, haz algo con ella que está molestando. –Decía ahora un chico que estaba tirado en el sofá completamente borracho, pero aun así con otra bebida en la mano.
-Vaya has llegado muy pronto, ¿no tienes trabajo que hacer? –Decía Osamu saliendo de la cocina con una chica abrazada a él.
-Hoy es sábado. –No estaba dispuesto a irse de ahí en ese momento.
-Bueno pues aquí molestas, vete. – Dijo ahora sin mirarle.
-No pienso ir a ningún sitio Osamu, esta es mi casa, tienes que irte tú. –Levantó la voz alterado.
-¿Cómo dices?. Ven conmigo. –Lo cogió del cuello de la camisa que llevaba puesta arrastrándolo hacia la puerta de la entrada,saliendo fuera del apartamento y lo empujó contra la pared. –Atrévete a decirme algo parecido de nuevo. –Con sus brazos lo arrinconó completamente entre la pared y su cuerpo.
-Te odio, vete de mi casa de una vez y olvídate de mí. –El peliverde estaba temblando, al borde las lagrimas, pero lo único que consiguió fue que le diera una paliza, una a las que ya estaba acostumbrado y que vivía a menudo gracias a ese chico. Tras un gran número de golpes lo dejó tirado en el suelo y se dirigió de nuevo al hogar.
-Ahora vete de aquí y vuelve mañana por la noche, búscate la vida. –Dijo antes de cerrar la puerta dejándolo allí.
El chico solo pudo encogerse y llorar en el suelo.
Bueno, ¿Les gustó?
¿Quieren lemon ya?
Espero que sigan leyendo esto jeje
Byeeeeee !!
. -
Lulubella .
User deleted
Que le pasa a ese Osamu?!!!!!!!! > 
....no golpees a Midorikawa!!!!,....aww!!,que hermoso!!!ya se besaron!!!!!...me ha encantado este capítulo!!!!....y si me preguntas a mi ..no me importaría un poco de lemon!!! 
...esta muy linda esta historia!!! 
Nos vemos!!,. -
susyttoh02 .
User deleted
geniaaaaaaaaaal XD me enamoro este capitulo
aaaaaaaah hiroto te lo hubieras violado ahí al aire libre XD
donde todo el mundo sepa de quien pertenece
o no osamu por que eres así y yo que te quería XD pero tendré que hacer una revuelta de ti por tocar a mido-chan DX
así que me voy a japón wuiiiiiii XD (mentira XD) pero bueno me encanta y el pobre de endo todo borracho no me imagino como viola a kazemaru cuando esta así.
bueno creo que es todo y como me despido
(VIVA TAIYO Y YUKIMURA) ADIOOOOOOOOOOOOOOOOOS XD. -
Kira suzuno .
User deleted
Hola espero conti
¿Les gustó?no.....me encantó menos cuando el p**o de osamu golpeo a el lindo de mido-chan
¿Quieren lemon ya?sii pero de hiroxmido no una violación de p**o osamuxmido-chan bueno sin mas me despido
Matta ne~. -
.
OSAMU HIJO DE FRUTA!!!
COMO TRATAS ASI A MIDO-CHAN P*TO DE M*ERDA!!!
YA QUIERO QUE HIROTO TE PARTA LA &@%€#!!!!
Ò0Ó
...
En fin...espero conty ÓuÒ. -
.
Sí, ha pasado mucho tiempo, y no tengo excusa, simplemente no me encontraba a gusto para escribir, lo siento… Espero que después de todo este tiempo alguien siga interesado en leer esta historia. Lo siento y saluditos.
- - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - -- - - - - - - - - - - - - - - - - -- - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - -Capitulo 4
Tirado en el suelo Midorikawa lloraba sin parar, por el dolor de los golpes recibidos, pero más por la desesperación de que eso no terminara nunca y por la rabia de no poder hacer nada para remediarlo. Llevaba años sufriendo el acoso de Osamu, justo cuando Hiroto se fue con esa chica llamada Ulvida, estos se mudaron de ciudad para más tarde comprometerse y casarse.*Flash Back*
-Mido, lo siento mucho, te juro que te amo más que a mi vida, pero mi padre me está obligando y aunque me niegue me va a sacar de esta ciudad, no puedo hacer nada. –Decía el pelirrojo frente a este agarrándole de la cara. Junto su frente a la del menor y cerró los ojos.- Midorikawa te amo, y siempre te voy a amar, prométeme que al menos me dejaras ser tu amigo y cuando todo esto termine volveré a buscarte. Te llamaré todos los días. –Soltando el agarre dejó ir al chico.-
El peli-verde no dijo nada, el llanto le impedían decir nada, quería gritar, quejarse, pedir explicaciones serías, pero solo pudo taparse la cara y seguir llorando como nunca antes lo había hecho.
-Adiós Midorikawa, espérame por favor. – Fue la última frase de Hiroto antes de marcharse dejándolo atrás.
Unos días más tarde el chico seguía igual de afectado, no quería hablar con nadie, iba al instituto y al salir volvía a casa para llorar. Su amigo Kazemaru estaba desesperado por ayudarlo, pero siempre conseguía el rechazo del peli-verde.
-Mido por favor, ¿porque no me cuentas que te pasa?, es imposible que sigas así, ni siquiera comes, ¡No te puedo ayudar si no me lo dices! –Levantó el tono de voz, pero no podía verlo así.
-¡No quiero tu ayuda, déjame en paz, no ves que no puedes hacer nada, para ya y déjame tranquilo! –Ahora sí, grito el peli-verde para seguir en dirección a su casa, dejando al chico allí parado antes las miradas de todos lo que pasaban por ahí.
Midorikawa recordaba que Hiroto no quería contarle a nadie sobre su relación y por ese motivo no quería decirle nada a Kazemaru, aunque entendía muy bien el interés de su amigo.
Camino a casa, pasaba por un barrio peligroso por el cual normalmente no pasaba, pero en ese momento solo quería llegar a casa y no pensar en nada, cuándo al pasar por un callejón una voz lo alertó.
-¡¿Midorikawa?! – La figura de un joven se acercaba a él, alto, pelo largo negro y una sonrisa un poco sospechosa pero de alguna manera amable.
-¿Cómo tu por aquí?, ¿qué pasa que hace tanto que no hablamos que ya no te acuerdas de mí? –Dijo Osamu en tono burlón.
-Osamu, lo siento pero tengo prisa, hablaremos en otro momento. –Dijo sin mirarle a la cara reanudando el paso.
-Desde que Hiroto se fue pareces otro, ¿tanto te molestó que te abandonara?
La cara del menor cambió por completo. –¿De qué estás hablando?, Hiroto era mi amigo, claro que me da pena que se haya ido. –Dijo en un tono serio y frio, casi cortante.
-Wow chico, no te pongas así, y no te hagas el tonto, ¿quién no se daría cuenta de la clase de relación que teníais? -Soltando una carcajada. Le paso el brazo por encima del hombro. – ¿Sabes que es lo mejor para estas situaciones?, cuanto antes lo olvides, antes se te quitará esa cara que tienes, total, él se fue con una chica. Ven conmigo, te voy a ayudar, porque me das pena.
Obviamente el peli-verde no quería ir con él, por otro lado en ocasiones Hiroto le había advertido sobre él, y que no se acercara a este, pues el pelirrojo sabía las intenciones que realmente tenía hacía Mido. En ese momento cuando se acordó de las palabras del pelirrojo traidor su cuerpo se llenó de rabia y por llevarle la contraría aceptó ir con Osamu.
El mayor se adentró por el callejón con este del brazo, Midorikawa no estaba nada seguro después de todo pero siguió su camino, entraron a una especie de local cerrado donde había un grupo de jóvenes sentados bebiendo y fumando.
-Osamu, como has tardado, dijiste que salías un momento. –Dijo uno de los jóvenes ofreciéndole la botella que tenía en la mano.
-Jaja , lo siento tenía algo que hacer pero ya estoy aquí. –Dijo ahora el mayor aceptando la botella que el otro le ofrecía. – Ven, siéntate, esto te ayudará a pasar página. –Miró al menor sonriendo.
-Wow, pero quién es este? –Decía otro de los jóvenes. –Parece una chica, ¿es para divertirnos?- Todos empezaron a reírse.
-Claro que no, no te preocupes Midorikawa, no te van a hacer nada, ahora toma. –Le ofrecía la botella.
El menor estaba un poco asustado, nunca había estado en ese tipo de ambiente, pero en ese momento no le importaba nada, cuando pensaba en el pelirrojo se llenaba de ira y rabia mezclado con tristeza. Agarró la botella y de un solo sorbo bebió gran cantidad de alcohol.
-Y parecía tonto. –Dijo el joven impresionado.
Pasaron horas allí dentro bebiendo y fumando, cosa a la que el peli-verde no estaba nada acostumbrado, ya no conocía nada, y mucho menos sabía lo que hacía, todos estaban de la misma manera, pero más conscientes de sí mismo. Osamu era el que mejor estaba, casi como si no hubiera tomado nada, se acercaba a Midorikawa y lo abrazaba de forma protectora.
–Pequeño Mido, puedes contármelo todo, puedes llorar conmigo, sabes que te voy a ayudar y cuidar, ese Hiroto es una idiota dejándote aquí por esa chica, no sabe lo que está dejando atrás, después de todo eres perfecto por fuera y por dentro. –Susurraba en el oído del menor.
Midorikawa sorprendido se rompió a llorar y aceptó el abrazo, aferrándose a este con fuerza. -¿Por qué me hace esto?, Yo se lo di todo, confiaba en él, creía que lo tenía todo con él, estaba dispuesto a todo por él, realmente lo amo.
-Mido ven conmigo, yo te voy a dar todo lo que él no te ha dado, después de todo es mala persona haciéndote todo esto, ¿No lo crees? –Intentaba convencer el mayor. -Levántate, ahora necesitas olvidarlo del todo.
El chico llevó al menor hasta un hotel, cutre, de esos menos románticos que puedes encontrar. Entró llevando consigo al otro, que casi no sabía donde se encontraban, fueron a una habitación y lo tiró a la cama.
-¿Osamu?, ¿qué estás haciendo?, ¿qué hacemos aquí? –Casi de golpe, se le pasó toda la borrachera que llevaba encima. Creo que te estás confundiendo, después de todo yo amo a Hiroto, te agradezco lo que has hecho por mí, pero... –Casi no puedo terminar la frase cuando el mayor se posó sobre él.
-¿De verdad te has creído todo eso? –Lo agarro de las muñecas y lo ató a la cama, para que no pudiera moverse. –Ahora estate quieto, vamos a divertirnos. – Decía mientras le quitaba la ropa.
El menor peleaba por intentar evitar aquello, pero todo era inútil, con una venda le tapaba la boca para que los gritos no se escucharan tanto, solo podía llorar y agitarse, pero el agarre del mayor sobre su cuerpo era demasiado eficaz.
Cansado del rechazo del peli-verde, lo agarró de golpe y sin preparación ninguna lo embistió. –Agh…, deja de llorar y relájate, así no funciona nada, el mayor le propinó un fuerte golpe, te he dicho que pares, tu querido Hiroto no va a venir a ayudarte, te dejó, ¿Lo recuerdas?.
El menor ahogó un grito de dolor y desesperación, mientras la sangre brotaba de su parte trasera, y las lágrimas salían más rápidamente. Ahora si se acordaba de las palabras del pelirrojo y se arrepentía de no hacerle caso.
Fue una larga noche para el menor, hasta que cayó inconsciente. Cuando despertó estaba solo, en aquella mugrienta habitación, todo lleno de golpes y marcas de todo tipo. No podía incorporarse, el dolor era demasiado intenso, pero por otra parte, quería salir de allí lo más rápido posible, como pudo se vistió y salió en dirección a su casa.
Al llegar se fue a la ducha, queria limpiarse cuanto antes, quitarse todo rastro de ese sucio personaje que lo engaño para luego hacerle todo eso. Tenía la mirada perdida, sin vida, no sabñia que estaba pasando con él, de repente su vida se había vuelto un caos, un infierno como él la llamaba ahora, solo podía recordar al pelirrojo en ese momento y avergonzarse de lo que le había pasado, se sentía miserable, ya que Hiroto le advertía sobre él y por su rencor pasó todo, de nuevo rompió a llorar bajo el agua de la ducha, era lo único que sabía hacer bien en ese momento.
Se pasó todo el día en la cama, llorando, sin comer hasta que manecío otro día, y el sonido de la puerta lo sacó de su trance, pensó que sería Kazemaru, por lo que no se molestó en levantarse, pero la insistencia del sonido le hizo enfadar, saldría y le dejaría las cosas claras de nuevo, y mucho peor después de lo que le había pasado.
Salió y de la cama y como una fiera fue hacía la puerta, abrió, y su cara cambió por completo, quedándose blanco, con una expresión de pánico que no podía controlar.
-Hola Mido, he venido a ver como estabas, déjame pasar, que a partir de ahora yo cuidaré de ti. –Dijo Osamu adentrándose en la casa, con una sonrisa mucho más tenebrosa de lo que lo fue anteriormente.*Fin del Flash Back*
Midorikawa recordó todo eso en unos pocos segundos, le dolía el pecho, ¿Qué podía hacer?, no podía plantarle cara, y tampoco podía involucrar a nadie para que saliese herido. No podía pensar, y empezaba a recordar los besos y caricias que le daba el pelirrojo, ¿Se merecía el amor de Hiroto, o realmente le tocaba vivir lo que tenía con Osamu? Se dejó llevar y sacó su teléfono móvil.
-Hiroto… por favor ven a recogerme a mi apartamento, te necesito, a ti, ahora… no me abandones otra vez por favor…
-¿Mido?, ¿estás llorando?, ¿Qué te pasa?...-La preocupación se notaba en su tono de voz.- Voy para allá en un segundo, espérame. En pocos minutos llegó el mayor, bajando del coche tan deprisa que ni cerraba las puertas salió corriendo encontrándose al menor sentado en el suelo con la cara entre sus rodillas.
-¡¿MIDO?! –El mayor se tiró al suelo frente al peli-verde agarrándolo para que levantara la cabeza.- ¡¿Que te ha pasado? ¡¿Qué es todo esto…?! ¡¿Porque estas lleno de golpes?! ¡Mírame a la cara joder!
El menor en un solo movimiento se abrazó al mayor apretando su cara fuertemente contra él, roto del dolor y llanto, -Hiroto, sácame de aquí por favor… -No podía ni hablar en ese momento.
El mayor lo levantó del suelo y lo llevó hasta el coche, -Vayamos a mi casa…
Bueno, si alguien lee esto, quiero que me digáis si los cap son muy largos, o se os hacen pesados, para intentar cambiarlo y mejorar.
Y por supuesto si queréis más caps o no xD
Sin más espero que os haya gustado. Besis de fresiiiiiiiiii!!!!!!
. -
igaray1998 .
User deleted
El capítulo esta genial. El alto calibre de este último no me lo esperaba. Por mi parte, yo no veo que necesites cambiar algo de este. Quisiera otro capitulo, por su puesto. . -
.
Wow muchas gracias, es genial que pienses eso, en serio 
, realmente pensaba que nadie seguiría con esto, gracias por responderme.
Probablemente el finde traiga nueva continuación.. -
susyttoh02 .
User deleted
middoooooooooo nooooooo....
bien a hacer revuelta ...chicas y chicos fanáticos de midorikawa ATAQUEEEEEN
te quedo genial muy intenso a cada momento quería matar tanto a hiroto como osamu al primero por dejarlo y el segundo por maltrato espero otro conty y como me despido
(viva taiyo y yukimura) ADIIIOOOOOOOOS. -
+1 .
Bueno… este capítulo es prácticamente lemon asi que… 
ADVERTENCIA: LEMON, LEMON, LEMON, LEMON Lo señalaré con (****) por si alguien no quiere leerlo. xD (No sabeis lo que os perdeis)Capitulo 5
Hiroto lo llevó hasta su casa, en silencio todo el trayecto en el coche, mientras Midorikawa lo miraba de reojo en el asiento del copiloto aun con lágrimas saliendo de sus ojos, la expresión del pelirrojo era realmente seria. Llegaron al apartamento y el menor se sorprendió.
Era realmente grande y lujoso, tal y como podía esperarse del chico, todo estaba muy limpio y ordenado, mirando todo a su alrededor con la boca abierta escuchó por fin las primeras palabras que su acompañante le dedicó en ese tiempo.
-Siéntate ahí, voy a curarte esas heridas. –El menor obedeció y se sentó en el sillón que tenía más cerca, el pelirrojo se arrodilló frente a él y comenzó a curar esas heridas y golpes ante la atenta mirada de Midorikawa, quien lo miraba fijamente a los ojos.
-No me mires así si no quieres tener problemas. –le dijo ahora con un tono juguetón. –El peli-verde se sonrojó ligeramente, pues fue algo inconsciente y no sabía que lo miraba de esa forma. Al terminar separó frente al menor y su expresión se volvió seria de nuevo. -¿Quién te ha hecho esto?, cuéntamelo todo.
Sin mirarlo a cara, Midorikawa lo contó todo, con toda clase de detalles, sin saltarse un solo día de todo ese tiempo.
-¡¿Por qué hiciste eso!?, te avisé joder, te lo estaba diciendo en serio… sabía que algo así podía pasar con él… no me lo puedo creer. –El pelirrojo estaba muy alterado agarrando a Midorikawa y agitándolo mientras el otro lloraba aguantando los zarandeos del contrario.
-Lo siento… me arrepiento… mucho, pero tú te fuiste y me dejaste solo, no…no podía pensar en nada.
-No se lo voy a perdonar nunca joder, ¿donde está ahora?.. Voy a buscarlo. –La cara de Hiroto daba miedo, la rabia se apoderó de él, si iba a buscarlo en ese momento no sería responsable de lo que pasara.
El menor se abalanzó por la espalda. –Para Hiroto por favor, no le hagas nada… te meterás en problemas, quédate conmigo pro favor.
De un empujón apartó al chico tirándolo al suelo, esto le hizo volver a la realidad girándose y levantando al menor del suelo. –Perdóname… lo único que estoy haciendo es empeorarlo… pero no te creas que esto va a quedar así…
Midorikawa volvió a abrazarlo apretando su cara contra el pecho del contrario, abrazo que el mayor correspondió sin dudarlo. –Mírame Midorikawa. –El chico levantó la cara mirándolo fijamente a los ojos. –No voy a permitir que esto pase de nuevo, puedes estar tranquilo… yo voy a cuidar de ti.
El pelirrojo paso su mano por la frente del contrario, apartando su flequillo de la cara y lentamente se fue acercando al rostro del menor tan cerca que incluso sus alientos chocaban. –Te amo Midorikawa Ryuuji. –Y ambos se fundieron en un profundo beso.
******
Se encontraban en esa batalla dentro de sus bocas, chocando uno con otro, saboreándose lentamente, cuándo el mayor coló su mano bajo la camisa del contrario y la acarició lentamente, provocando que el peli-verde soltara un casi inaudible gemido, acto que el pelirrojo aprovechó para morder su labio inferior y seguidamente darle una excitante lamida.
Lo alzó y el menor enganchó sus piernas para no caerse, y se encaminó dirección al dormitorio mientras devoraba el cuello del contrario, al llegar a la habitación lo tiró sobre la cama y se dejándolo bajo él.
Lentamente desabotonaba la camisa, bajando lentamente, repartiendo besos y lamidas por cada uno de los golpes que tenía en su torso.
El peli-verde se retorcía de placer bajo este, echaba de menos esa sensación con Hiroto, al único que amaba y había amado en toda su vida. –A-ah… Hiroto… más…
Una disimulada sonrisa se mostró en el rostro del mayor, le encantaba verlo de esa manera debajo suya. Bajo la atenta mirada del chico comenzó a quitarse su propia camisa dejando a la vista su bien formado torso. El peli-verde alzó sus brazos y tímidamente, sonrojado a más no poder comenzó a acariciar el pecho de este. –Puedes tocar todo lo que quieras… -Dijo sensualmente el pelirrojo.
Besándole de nuevo, con una mano comenzó a desabrochar los pantalones del contrario y comenzó a masajear su entrepierna sobre la ropa interior. –N-nhm….Hiroto… A- ah. Bajó su rostro hasta su pecho, ahora jugando con sus pezones mientras su mano pasaba dentro de la ropa interior del chico y con movimientos lentos comenzó a masturbarle… poco a poco aumentaba de velocidad bajo los excitantes gemidos de su querido peli-verde que sentía que en poco tiempo terminaría, pues llevaba mucho tiempo sin sentir verdadero placer. En seguida llegó al climax. –A.Ah... H-Hiroto… yaa… Aa-aah. Manchando la mano del pelirrojo este paró de jugar con su pecho para mirarlo sensualmente a los ojos mientras lamia su mano limpiando todo resto del peli-verde. Estaba realmente excitado solo de la vista que tenía de su querido peli-verde, y en su parte delantera ya era bastante notable, tanto que su pantalón comenzaba a molestar, el menor se dio cuenta de esto y reaccionó.
Hiroto… tu también…- Dijo con la respiración agitada y se levantó dejando ahora al pelirrojo tumbado en la cama y se agachó frente a su entrepierna, desabrocho su pantalón y agarró su ya excitado miembro y tímidamente le dio una lamida a la punta, perdiendo la vergüenza poco a poco no era la primera vez que hacía todo eso con él, paso a dar lamidas más agresivas sobre todo el miembro hasta que lo metió entero en su boca, subiendo y bajando con unos movimientos demasiado placenteros para el pelirrojo que agarró la cabeza del chico y acompañó el movimiento de este, con los ojos cerrados extasiado de placer. –Mido… a-ah…para… ya-ya casi…
Sacó el miembro de su boca, dejando un rastro de saliva y pre-semen saliendo de su boca, el pelirrojo no pudo evitarlo y lo lamió de una sola vez para a continuación besarse apasionadamente compartiendo los sabores de ambos. Volvió a tumbarlo debajo suya, ambos completamente desnudos llevó su mano a la parte trasera del peli-verde para insertar sus dedos cuidadosamente. –N-nhm…
-¿Te duele?- preguntó el mayor.
-N-no… estaré bien Hiroto… hazlo ya…te deseo ahora… -Suplicaba el peli-verde.
-La cordura del pelirrojo desaparecía con cada gesto y palabra de este, estaba en su límite y quería tratarlo cuidadosamente, aunque realmente lo excitaba verlo, no podía pasar de largo esos golpes que las marcas de sus besos no podían tapar.
Agarró su miembro y lo acerco a la entrada del menor y muy despacio comenzó a adentrarse en el peli-verde. –A-ah... –n-nhmm…estas bien?...
-Sí…a-ah… muévete…r-rápido.
El pelirrojo comenzó a embestir apasionadamente mientras el menor acompañaba el movimiento bajo mirada del pelirrojo, este agarró el miembro del peli-verde y comenzó a masturbarlo a la vez que sus embestidas aumentaban de velocidad. –A-ahh… Mido…
-m-mas fuerte H-Hiroto… A-aah… más…- El peli-verde se aferraba a las sabanas con los ojos cerrados, abrió los ojos y sus miradas se encontraron. El pelirrojo lo agarró y lo levantó dejándolo sentado sobre su miembro, lo que hizo que el menor se aferrara a la espalda de este echando su cabeza para atrás ahogando un gemido placentero.
Mientras el peli-verde arañaba la espalda del mayor galopando sobre su miembro, el pelirrojo llenaba de besos y marcas su cuello y pecho. Bajo esa lluvia de placer ambos llegaron a su límite, corriéndose a la vez, el pelirrojo dentro de Midorikawa y este entre ambos. Mirándose uno a otro, con la respiración entrecortada.
-Midorikawa… te amo, eres perfecto.
-Yo también Hiroto… te amo y siempre te he amado.
Se dejaron caer sobre la cama, el pelirrojo lo abrazó protectoramente y con un suave beso en la frente el menor se quedó dormido bajo las caricias de su amado pelirrojo.
******
A la mañana siguiente solo con unos pantalones puestos y una taza de café Hiroto estaba mirando por el ventanal de su apartamento hablando por teléfono.
-Sí… tengo un trabajo para vosotros dos, venid a verme a mi oficina esta tarde, es un asunto serio, como siempre que no os vea nadie. Nos vemos luego.
El peli-verde apareció por la puerta. –Hiroto… es muy temprano.
Acercándose a él, el pelirrojo le dio un suave beso. –Tengo que ir a la oficina, hoy es tu día libre, descansa un poco más yo volveré a medio día, no vayas a salir… aún tenemos cosas de las que hablar.
-Está bien… el menor solo con la camisa del pelirrojo puesta volvió a dirigirse al dormitorio, pues realmente no tenía energía para pensar en ese momento.Mientras tanto, en el pequeño apartamento de Midorikawa.
Ese idiota… pensaba que se quedaría en la puerta llorando hasta que lo dejara entrar como siempre… donde se habrá metido ese inútil…
-Osamu, ven que te tengo una sorpresa…. –Decía una chica semidesnuda saliendo del dormitorio del peli-verde.
-Qué más da. –Pensó.- No tiene donde ir… cuando vuelva le haré saber su lugar.- Dirigiéndose al dormitorio.
¿Que les pareció?
¿Quieren más capitulos? Ahora aparecen nuevos personajes jeje
Espero sus comentarios
. -
Claribel Gazano .
User deleted
Me parecio genial el lemon me encanto pobresito mi mido espero q hiroto haga q le rompan tofod los huesos al idiota de osamu
Me pregunto kienes seran los nuevos personajes.....y obvio q kiero conty x favor estare esperandola.
Mi amigo, mi amante, mi jefe. (HirotoxMidorikawa) (ACT 03/03)Un día como otro cualquiera Midorikawa se encuentra con su amigo y compañero después de 10 años, pero sus reacciones son completamente diferentes. (lemon) |
Contacts