¿Qué soy? (harco)

Draco fue despojado de todo lo que tenia, sus padres fueron asesinados ante sus ojos. Harto de que lo discriminen se decide irse al mundo muggle para tener una vida como ellos.

« Older   Newer »
 
  Share  
.
  1. Killer_Cookie
        +1   -1
     
    .

    User deleted


    Wow, me encanta, el como poco a poco se van conociendo y acercando. Todo a su tiempo y, no rápido y a lo loco como en otros que he leído. Espero con ansias el siguiente. :=DANCIND:
     
    Top
    .
  2. Mari_yaoi
        +1   -1
     
    .

    User deleted


    Hola lectoras, me extrañaron yo sí lo hice y como todos los capítulos les digo desfruten y comenten.
    _________________________


    Hogsmeade





    [Narradora]

    El fin de semana nuestro trio dorado se encontraba en la sala común de Gryffindor sentados en el sofá frente a la chimenea apagada, estudiando para los exámenes que se avecinaban antes de Halloween.

    Ron–¡Agg! Mi cerebro se quemara con tanto estudio–gruño.

    Harry–Yo siento que el mío explotara–masajeando su sien.

    Hermione–Son unos exagerados no han repasado lo suficiente para que se quejen, además aún nos hace falta los últimos temas de pociones–dijo enfadada.

    Harry y Ron–aaaaahhhhh–suspiraron irritados.

    Ron–Podemos tener un receso, de todas maneras son en 2 semanas no sé porque las prisas.

    Hermione–Por qué siempre que lo dejan al último vienen a molestarme para que se los explique o les ayude–se cruzó de brazos.

    Harry–Ron tiene razón, tomemos un descanso sólo por hoy–se levantó estirando las piernas–Que tal si vamos a Hogsmeade y pasamos a las tres escobas por unas buenas cervezas de mantequilla.

    Ron–Me leíste la mente amigo–se levantó brío–Vamos Hermione.

    La chica al ver que no podría hacerlos cambiar de opinión decidió dejarlos relajarse por esta ves, asintió afirmando su participación cerrando su libro y dejándolo un la mesita para luego salir juntos con los chicos totalmente felices. Caminaban por las calles de Hogsmeade hacia la taberna de la señora Rosmerta. Al entrar se sentaron en una mesa de la esquina esperando ser atendidos.

    Una chica pelirroja se acercó con un cuadernillo y una pluma flotando a su lado.

    –¿Que se les ofrece a los caballeros y a la dama?–pregunto con una sonrisa corta.

    Harry–Tres cervezas de mantequilla por favor.

    –Enseguida se los traeré–se retiro.

    Ron–Cuanto opuestas a que te pondrá una nota de admiradora debajo del tarro.

    Harry–Si quieres te pago ahora–dijo divertido–Con tantas que me han mandado necesito un baúl enorme.

    Hermione–Si siguen así necesitaras más que un baúl. Deberías de darles una oportunidad a algunas de ellas, pueda y que te guste.

    Ron–Si amigo, ya pasó tiempo desde que terminaron tú y Ginny, es hora de buscar una nueva pareja.

    Harry–No estoy seguro de querer una pareja por el momento, aún sigo afectado por lo que hizo Ginny–dijo sinsabor.

    Ron–Se que lo que te hizo fue de lo más bajo, engañarte de esa manera debió ser horrible–recargo sus brazos en la mesa–La perdonaste después de todo pero eso no significa que no puedas ser feliz con alguien.

    Hermione–No tienes que seguir torturándote.

    Harry–Trato de superarlo, es sólo que quiero tomarme mi tiempo.

    Ron–Lo entendemos y tú dinos cuando estés listo. Pero hazlo rápido, te estás volviendo un anciano–lo último lo dijo con humor sacándole una carcajada.

    Su cervezas llegaron y como dijo Ron había una nota en la base del tarro que decía: “soy tu más gran admiradora Harry Potter y me gustaría poder conversar contigo algún día y conocernos, nada me haría más feliz que estar con el niño que vivió y venció. De parte de tu gran fan Zoe Hudson”.

    Harry suspiro y metió el papel en su bolsillo delantero de su pantalón y continuaron conversando un buen rato siendo la tercera ronda de cerveza. Relajados y charlando Harry noto a tres chicos y una chica entrar a la taberna, eran Theodore, Blaise y Pansy acompañados de un chico con lentes oscuros y un gorro gris ocultando su cabello, Harry supo de inmediato de quién se trataba.


    [Draco Malfoy]

    Estaba en la torre de Slytherin leyendo un libro muggle que traje en mi equipaje llamado “Sherlock Holmes”, pase la hoja muy entretenido en la lectura cuando oí el llamado de la puerta sonando, deben de ser los chicos con Pansy, escondí el libro en un cajón y me levante de la cama para abrirles y volver a la cama todo perezoso.

    Pansy–Aun sigues recostado ya son las 12 y tú ahí aplastado–dijo autoritaria poniendo sus manos en su cadera.

    Draco–No quiero salir–musite.

    Theodore–Estar aquí encerrados no es bueno para ti–desprendió las cobijas tirándolas al suelo–Levántate, vamos a salir.

    Draco–No quiero–coloque la almohada arriba de mi cabeza presionándolo con mi brazo.

    No dijeron nada y eso me extrañó sólo escuché unos pasos moviéndose por la habitación, Theodore conjuro un hechizo que hizo que saliera disparado de la cama siendo atrapado por Blaise sin ningún esfuerzo. Malditos sabía que no se quedarían sin hacer nada.

    Blaise–Así que te bañaras o también tenemos que bañarte–dijo jocoso.

    Draco–Los odio–los fulmine con la mirada.

    Pansy–También te queremos, ahora te vas bañar y te esperaremos abajo en 10 minutos ¿entendido?–ordeno.

    Gruñí y me metí al baño arrastrando los pies azotando la puerta, abrí la llave de la regadera y me desvestí entrando al agua tibia. Unos minutos después salí y me vestí colocándome en gorro gris y tome unas gafas negras y las puse en mi polera yendo a la sala donde estaban esperándome.

    Pansy–Es necesario la gorra y las gafas.

    Draco–Si voy a salir, saldré a mi manera.

    No quería discutir y ellos tampoco así que sin decir nada salimos del colegio hacia Hogsmeade, me puse las gafas ocultando mis ojos para que no me reconocieran pasando por la multitud.

    Theodore–¿Quieren ir a las tres escobas por unos tragos?.

    Pansy–Por supuesto.

    Blaise–Es lo que más deseo–sonriendo.

    Theodore–Draco ¿qué opinas?–me pregunto.

    Draco–No tengo dinero–dije apenado.

    Blaise–No te preocupes por eso, nosotros te invitamos, nosotros pagamos.

    Draco–No chicos, no puedo pedirles eso.

    Pansy–No te estamos preguntando o pidiendo permiso, nosotros pagamos y no quiero una queja mas–me agarro del brazo y me metió a la taberna a rastras. Nos sentamos en una mesa a lado de la pared decidiendo que bebida elegir.

    –Que les traigo–dijo una chica rubia y delgada. Desvíe la cara a la pared poniendo mi mano en el cuello disimuladamente.

    Theodore y Blaise pidieron cerveza de mantequilla, Pansy ordeno un hidromiel caliente con especias y yo un jarabe de cerveza.

    Blaise–Extrañaba las bebidas de la señora Rosmerta–dijo mientras bebía cerveza apareciendo un bigote de espuma.

    Draco–Jajaja Blaise tienes…–hice una señal con mi dedo indicando la parte de arriba de los labios. Blaise entendió y se quitó con una servilleta la espuma.

    Blaise–Ya me tocaba rasurarme–dijo mientras quitaba los restos de espuma divertido.

    Pansy–Al fin sonríes, ya hasta estaba creyendo que eras un ogro amargado.–me dijo.

    Draco–Lo ogro lo tienes tú por fea–le dije irónico sacándole una carcajada a los chicos y a Pansy una mueca de disgustó.

    Pansy–¡Oye–me dio un golpe en el hombro haciendo puchero.

    Theodore–Jaja debes… de admitir… que fue gracioso–jadea sin dejar de reír.

    Pansy aún tenía su berrinche ignorándonos, me acerque y la abracé propinando mi amor en un cálido abrazo apapachable, ella se fue calmando respondiendo lentamente rodeando mi cuello y yo su cintura quedándonos un rato en esa posición para luego alejarnos con una sonrisa prosiguiendo con los chistes que Blaise tenía para nosotros.

    Me la estaba pasando bien era como volver a esos tiempos inigualables donde la pasábamos haciendo bromas o charlando de tonterías sacandome una carcajada. El único problema era que no podía mostrarme como en realidad soy, un chico afectado al igual que todos y tener que esconderme bajo una máscara para no ser señalado como un asesino a sangre fría sin sentimientos.

    Me acomode los lentes y observe a mi alrededor a las personas que entraban y salían apresurados, bebí el último sorbo mirando a las mesas llenas en su mayoría, al pasar a la mesa de la esquina lo que quedaba de líquido en mi boca casi lo escupo de la impresión al ver quiénes estaban. Donde quiera que vaya, él está ahí como una sanguijuela sin despegar. Harry y sus amigos se hallaban sentados a cinco mesas de la mía, platicando y bebiendo cerveza. Se notaba que todavía no habían detectado que soy yo, me calme por un segundo respirando con dificultad, no duró mucho mi tranquilidad cuando Harry rota sus ojos en mi, guiñándome un ojo con una sonrisa larga, volviendo la atención a los presentes que lo acompañan. Sentí un pequeño ardor en mis mejillas de tal acto de su parte, Theodore se me quedó viendo preocupado por mí resiente actitud.

    Theodore–Draco–susurro mi nombre–te sientes bien estás algo rojo, tienes fiebre–toco mi frente tomando mi temperatura–No tienes calentura.

    Draco–Es–Estoy bien, debe ser el calor del ambiente–disimule muy bien.

    Pansy–¿Quieres salir un momento para tomar aire?–me pregunto.

    Draco–Si creo que si–retrocedí la silla levantándome.

    Pansy–Te acompaño–dijo.

    Draco–La verdad quiero estar solo ¿si no les molesta?

    Blaise–Pero si te siente mal es mejor que unos de nosotros te acompañe.

    Draco–Sólo necesito aire y caminar un poco–acomode la silla en su lugar–Por favor será unos minutos nada mas.

    Pansy–De acuerdo, pero si te tardas iremos a buscarte–advirtió.

    Draco–No tardaré–revolví sus cabellos y salí metiendo mis manos en los bolsillos caminando lento.

    Era obvio que iba saber de mi presencia, quizás los otros dos también lo notaron, espero y no molesten a mis amigos en mi ausencia no merecen que los traten de la misma manera que a mi. Harry no sería así, pero no puedo confirmar a Weasley o la sangre… digo Granger hagan algo. Puede que ellos disfruten de mis desgracias, no voy a culparlos de algo que inicie desde primero. Me detuve en una banca cerca de la entrada del bosque prohibido. Me senté y en frente estaba la casa de los gritos a lo lejos. Reconocí este lugar, es donde Granger y Weasley se encontraban cuando yo, crabbe y Goyle los molestamos para después ser atacados con bolas de nieve de unas personas ocultas o lo que sea que nos estuviera lanzando.

    Mi teléfono comenzó a vibrar dándome un salto de susto, lo saqué y era una llamada de Dylan, presione aceptar y lo lleve a mi oído escuchando su voz.

    Dylan–Hola Draco–escuche su voz alegré.

    Draco–Hola Dylan, está todo bien.

    Dylan–Si totalmente, sólo quería hablarte porque extrañaba escuchar tu voz.

    Draco–Olvidaba que ya han pasado 4 meses desde la última ves que hablamos, omitiendo el chat claro–dije.

    Dylan–Si a pasado tiempo, por eso decidí marcarte. No he dejado de pensar en otra cosa que en tu regreso, he tenido problemas en el restaurante por eso–se oía agotado y animado a la ves.

    Draco–No quiero que estés descuidando tu negocio y a tus empleados, recuerda nuestros trató y si destruyes mi futuro empleo no sé qué haré–lo último lo dije en broma.

    Dylan–Por cierto Draco, hay algo muy importante que quiero decirte cuando vuelvas–dijo serio.

    Draco–En la forma en que me lo dices debe ser serio.

    Dylan–Así es.

    Draco–Bueno puedes decírmelo en 3 semanas.

    Dylan–¿De que hablas?–no entendía.

    Draco–Iré en las vacaciones de Navidad tonto. No creíste que me quedaría aquí todo el año o si.

    Dylan–¡En serio! Es grandioso ¿porque no me lo dijiste antes?–sonó disque enojado.

    Draco–Uuppss–me hice el tonto.

    Dylan–Como sea me alegra que vengas por unos días–se estaba cortando la llamada–Draco ¿me escuchas?. Te… lla-mare después–cada ves la línea se iba.

    Draco–Dylan, Dylan no te escucho–no oía nada–¿Hola?–revise la pantalla y decía fuera de servicio. Le marqué y sólo me decía sin de servicio.

    Apague el teléfono preguntándome que era lo importante que me quiere decir Dylan, ¿se habrá arrepentido de su oferta? No, no podría ser eso. Sea lo que sea me ha puesto inquieto su forma de hablar tan neutra y firme sacándome un escalofrío de repente. Desde que lo conozco nunca ha usado ese tono conmigo, claro no lo conozco demasiado como para saber todo de él pero siento como si lo considera desde siempre, es extrovertido, divertido, caballeroso, decisivo, bueno tiene tantas cualidades que es difícil saber todas, sonreí poniendo mi palma en mi mejilla derecha sintiendo caliente en el área, estaba sonrojado de tan sólo pensar en él. ¡Por Merlín! Estoy actuando como una chica enamorada, relaje mis músculos recargando mi espalda en el respaldo del banco todo confundido. Jamás he sentido atracción o amor hacia un hombre en mis años de vida, pero Dylan hace que mis neuronas se descontrolen ferozmente sin poder evitarlo, es que a caso, por alguna razón pueda tener sentimientos encontrados… por el. DRACO POR DIOS QUE ESTÁS DICIENDO, ESTAS HABLANDO DE DYLAN TU MEJOR AMIGO, SACA ESOS TONTOS PENSAMIENTOS DE TU CABEZA. Sacudí bruscamente la cabeza sintiendo más estrés que nunca.

    –¿Por qué tan frustrado?–pregunto alguien atrás de mi haciéndome caer del banco por el susto, levante la mirada y vi a Harry con una expresión divertida.

    Draco–POTTER–me queje.

    Harry–Lo siento, no pude evitarlo–dijo carcajeándose.

    Draco–Da lo mismo–me levante sosteniéndome del banco.–Supongo que ya no necesito preguntarte cómo me reconociste.

    Harry–¿Entendiste mi mensaje?–se sentó a mi lado.

    Draco–Si.–cruce las piernas–¿Y tus amigos?

    Harry–Fueron a Honeydukes por unos caramelos, les dije que los vería en la oficina de correos en 10 minutos–contesto.

    Draco–Ya veo–nos mantuvimos callados un momento.–¿Por que no vino Ginny con ustedes? Supe que salían desde sexto –él cerró los ojos cabreado parecía que mi pregunta le molestó–Dije algo malo que te incómodo.

    Harry–No, es sólo que… Ginny y yo terminamos 2 meses después de la guerra.

    Draco–oohh, lo lamento no debí preguntar–me sentía estúpido.

    Harry–No tienes porque, tú no sabias–me dijo relajado.

    Draco–Pero porque terminaron no eran felices juntos.

    Harry–Lo éramos–dijo–Al menos en ese tiempo, luego se fue distanciando poco a poco sin razón–mostraba desasosiego–Hasta que un día...–pauso–La encontré revolcándose con otro en nuestra casa–sus palabras sacaban veneno expulsándolo como una serpiente.

    Me quedé extasiado sin poder decir nada, seguro que me hablaba de la misma Ginny, la misma que se desgarro cuando vio a Harry tendido en las brazos de Hagrid cuando Voldemort lo atacó, simplemente no ponía ser. Harry debe de estar devastado, ver a la mujer que amas con otro no se lo espero a nadie.

    Draco–Como lo siento–dije seco–Nunca imagine a Ginny hacer eso.

    Harry–Ya todo es pasado no hay que tomarle importancia.–se reconfortó–Y qué tal tu ¿Tienes pareja?

    Draco–Ehh n-no.

    Harry–Es un lástima eres encantador–dijo divertido–Cualquiera mataría por salir contigo.

    Draco–No tengo tiempo para andar de noviero, me mantengo 100% en mi trabajo.

    Harry–Interesante y dime en qué trabajas que te mantiene tan ocupado–mostro interés, empotrando su brazo en el respaldo.

    Draco–En un restaurante.

    Harry–wow y eres él mesero o él lavaplatos–Se estaba burlando.

    Draco–Soy él chef–dije presuntuoso dejándolo con la boca abierta.

    Harry–Estas jugando–levanto la ceja no muy convencido. Al ver que decía la verdad sus ojos se abrieron a tope–Oh Merlín, es enserio, pero tu bueno… ¿sabes cocinar?

    Draco–Claro que se, al principio si era un mesero pero el anterior chef Thomas me enseñó todo y me hizo un cocinero.

    Harry–Entonces eras su aprendiz–asentí–Pensé que odiabas cocinar, antes te servían tus elfos domésticos.

    Draco–Bueno cuando ya no tienes magia haces lo que sea para sobrevivir, me acople rápido al modo muggle y seguí mi vida. Al paso me fui dando cuenta que ellos no necesitan magia para hacer las cosas, si tienen un sueño harán lo que sea para lograrlo y si tiene obstáculos quitarán uno por uno sin detenerse. Lo aprendí a la mala pero no cambiaria nada porque sino no hubiera conocido a Thomas y mis amigos–Harry se quedó escuchando todo sin despegar sus ojos de los míos.

    Harry–Caramba, has madurado más de lo que creí–dijo.

    Draco–Si no lo hacía estaría muerto.

    Harry se mantuvo en silencio y se levantó aún con la vista en el horizonte.

    Harry–¿Quieres ir por un caramelo?–me pregunto desviando el tema.

    Draco–Tengo que regresar con los chicos.

    Harry–No te quitaré mucho tiempo, anda–me tomo del brazo jalándome.

    Draco–Sólo si son ranas de chocolate.

    Harry–Hecho.

    Fuimos a Honeydukes y ahí estaban aún Weasley y Granger discutiendo en el mostrador. Harry se acercó y les pregunto qué pasaba yo no pude oír nada ya que estaba en el escaparate a un metro de ellos. Fui a explorar la tienda viendo la tonelada de dulces un las repisas, me distraje mirando la altura los estantes llegando hasta el techo que tropecé con una chica tirándola de sopetón.

    Draco–Perdona, no me fijé por donde iba–le ofrecí ayuda para levantarse.

    –ERES IDIOTA PORQUE NO PRESTAS ATENCIÓN–grito enfurecida, lo que causó que los que pasaban por ahí nos mirarán. Un chico fornido y grande se acercó pisando firme hacia mi.

    –QUE LE HICISTE A MI NOVIA ENANO–me agarro de la polera fuertemente haciendo ponerme de puntillas.

    Draco–Y-yo sólo me tropecé s-sin querer y ella se calló–me paralice.

    –LO QUE TU QUERIAS ERA MANOSEARLA NO ES CIERTO–cada ves ya no sentía el suelo.

    Draco–N-No te e-equivocas.

    –NO ES CIERTO MI AMOR YO VI COMO SE REGOCIJO Y ME TOCO–dijo la chica. Su voz era chillona como el sonido de un megáfono.

    –CON QUE SI, AHORA TE ENSEÑARE A NO METERTE CON MI NOVIA–sostuvo con una mano mi polera y con la otra me dio un golpe en el estómago sacándome el aire.

    Me trataba de recomponer pero el dolor era tan intenso que me retorcía sin quitar los brazos del estómago. El sujeto me dio otro en el rostro cayendo de boca y rompiendo los lentes. Me levante con dificultad encarando al tipo revelando mis ojos platinos. El labio me dolía y sabía que estaba sangrado, si las cosas iban hacer así que así sea.

    Draco–MIRA MALNACIDO SI CONTROLARAS MAS A LA PERRA QUE TIENES COMO NOVIA, NO LE ESTARIAN AGARRANDO EL CULO–Sacaba al viejo Malfoy de mi, ya no me importaba si me golpeaba sólo quería terminar con esto.

    –QUE DIJISTE HIJO DE PUTA–se acercó–TE VOY A…–se detuvo y comenzó a reír–Miren, miren a quien tenemos aquí–llamo a todos–El maldito mortifago Draco Malfoy–recalco mi nombre echando el bullicio en toda la tienda.

    Ya no tenía que esconderme arranque el gorro mostrando mi cabello todo desordenado y aplastado.

    –EL ASESINO DE VOLDEMORT ESTA AQUÍ CON NOSOTROS. TU DEBERIAS DE ESTAR PUDRIENDOTE EN UNA CELDA CON LAS RATAS–me señaló con el dedo índice–ME ENCANTARA ROMPERLE LA CARA AL HIJO DE LUCIOS MALFOY.

    Me tomo del cuello y me lanzo a una repisa haciendo una avalancha de dulces en mi, venia hacía a mi y lo roció con un dulce picoso en los ojos retrocediendo y lloriqueando por el ardor. Me aleje a gatas pero me tomo del tobillo jalándome hacia el, le pataleaba sin éxito. Sus ojos estaban rojos e hinchados. Empuño su mano y me golpeó en la cara una y otra ves, las fuerzas para defenderme se agotaban tenía que hacer algo o este tipo terminaría matándome.

    De pronto ya no sentía ese peso aplastándome, ¿se habrá cansado? Aturdido subí la cabeza y vi a Harry golpeando al chico sin esfuerzo, me quedé inmóvil Harry actuaba como una bestia sin control. Algunos trataban de separarlo por qué lo estaba dejando demacrado pero se zafaba y continuaba destrozándolo. Me incorpore y arrastras me acerque tomando a Harry del hombro para calmarlo, el se detuvo y me miró relajándose, sus puños estaban rojos y sangrado. Granger y Weasley llegaron ayudándolo a pararse y curando sus heridas. Harry se agachó y toco mi barbilla analizado todos mis moretones, mi nariz sangrada y mis labios.

    Harry–Hermione puedes curarle los moretones y los lugares que sangran–le dijo.

    Granger se me quedó viendo preocupada y asintió conjurando un hechizo desapareciendo el color violáceo de mi piel, conjuro otro y la sangre dejo de salir.

    Draco–Gracias Granger–dije áspero, ella me miró sorprendida regresando con Weasley.

    La multitud se fue dispersando dejando al trio, el vendedor y otros que ayudaron al fornido. Aún me mantenía en el piso ya que no podía moverme por el dolor en el abdomen y la espalda, sujetándome de una repisa me paraba muy lentamente retando a la gravedad, ya estaba casi de pie cuando un tronido sonó en mis costillas izquierdas haciéndome retorcer de dolor arrodillándome, Harry y los demás notaron esto preguntándose qué tenia. El vendedor llamo a un medimago notando mi situación, me sentaron en una silla esperando a la ayuda. En una escala de 1 a 10 el dolor era el doble de 10.

    Mire por la ventana a algunas personas mirar para acá y otras pasando de largo, en una de esas vi a Blaise pasar rápido sin mirar a la tienda, creo que buscándome, si pudiera hacer señas de que estoy aquí.

    Draco–Blaise–dije débil.

    Harry–¿Que dijiste Draco?–se agachó a mi altura.

    Draco–Necesito que busques a Blaise, Pansy o Theodore y decirles que estoy aquí.

    Harry–Claro–fue con su amiga diciéndole algo que no pude oír. Ella se acercó a mí y Harry salió de la tienda.

    Hermione–Malfoy ¿Cómo te sientes?

    Draco–Como si tuviera un cuerno de unicornio encajado–dije sarcástico.

    Ron–Pues debiste caerle mal al unicornio–dijo escupiendo las palabras.

    Hermione–Ron, por favor cállate.

    6 minutos después mis amigos entraron corriendo al notar mi estado.

    Pansy–Sabia que no debíamos dejarte sólo, mírate como estas–comenzó a llorar.

    Draco–No es tan malo–trate de calmarla.

    Pansy–¡NO ES TAN MALO! ESTAS HERIDO Y SUFRIENDO TODO POR TERCO.

    Pansy sollozo dejando salir todas las lágrimas acumuladas. Hice calmarlos un poco hasta que llegarán los medimagos comenzando a marearme y ver borroso. Otros 6 o 8 minutos llegaron dos medimagos con una camilla, revisando el área afectada.

    –Tienes una costilla rota clavándose en tu pulmón, hay que llevarte a San mungo–dijo ayudándome a levantar y ponerme en la camilla–¿Alguno es pariente?–pregunto a los presentes.

    Pansy–Somos sus amigos, el perdió a su familia y somos los únicos que le queda–dijo.

    –Bien sólo uno puede acompañarlo–anuncio.

    Theodore se ofreció seguido de la réplicas de Pansy para que fuera ella, al final ganó Theodore posándose a mi lado todo preocupado. El medimago nos hizo desaparecer apareciendo en los pasillos del hospital, me pasaron a una habitación y me sedaron quedando profundamente dormido.


    Al despertar ya no sentía ese dolor intenso en mi costilla, toque la zona y había un vendaje rodeando mi pecho hasta la cintura sellando la herida. Voltee mis ojos a mi derecha encontrando a Theodore durmiendo en una incomoda silla. Revise la habitación donde me encontraba siendo una individual, me recargue en la cabecera totalmente agobiado y ansioso.

    Theodore se removió y fue despertando estirando los músculos, me observo y se levantó de un brinco acercándose a mi.

    Theodore–Que bueno que estás bien Draco, nos tenías preocupados–me tomo de la mano.

    Draco–Siento haber arruinado tu fin de semana–sonreí de lado.

    Theodore–No digas tonterías agradece que llegamos a tiempo, tu pulmón casi se perfora.

    Draco–Eso es lo que pasa cuando enfrentas a un gorila–dije optimistas.

    Theodore–Si dices otra cosa como esa te perforare el otro pulmón–me amenazó–Suerte que llegue temprano para verte despertar.

    Draco–Espera, no estuviste aquí toda la noche–dije incrédulo.

    Theodore–Nop–dijo–Pensaba hacerlo pero Potter dijo que él lo haría.

    Draco–H-Harry se quedó toda la noche cuidándome–no podía creerlo, mi corazón latía más rápido bobeando a topé mi flujo sanguíneo. Saber que él estuvo observándome y checando toda la noche me ponía la piel de gallina.

    #################
    Muchas gracias por sus comentarios y opoyo, me ha servido mucho para mejorar.

    Y sé que much@s les pudo haber aburrido el capítulo no tenía mucha inspiración y concentración al escribirlo.

    Otra cosa es que estoy a unos capítulo de poner frente a frente a Harry y Dylan sólo esperen, yo igual aguardo ese momento con entusiasmo. :=NOIP: :=NOIP: :=DFSDFSD:
     
    Top
    .
  3. aLMOST.fIRE
        +1   -1
     
    .

    User deleted


    Estoy segurísima que Harry se morirá de celos por Dylan.

    Draquito hermoso, si ese gorila te vuelve a golpear yo te ayudo.

    Y no me aburrió.

    Espero conty.
     
    Top
    .
  4. Killer_Cookie
        +1   -1
     
    .

    User deleted


    <3 me encorazona, vas genial sigue por fa :D
     
    Top
    .
  5. Mari_yaoi
        +1   +1   -1
     
    .

    User deleted


    Pesadilla





    [Harry Potter]

    Cuando Ron y Hermione fueron por caramelos decidí buscar a Draco por las calles, al verlo salir de la taberna quería salir y alcanzarlo sin dar explicaciones pero lo pensé y decidí dejarlo tranquilo sino levantaría sospechas lo que menos quería en estos momentos. Lo halle cerca de la entrada del bosque prohibido y luego de hablar un rato lo convencí de ir a la tienda de Honeydukes. Entramos y vi a mis amigos en el mostrador discutiendo como en otras ocasiones, le dije a Draco que no tardaría y este asintió sin prisa, me acerque a la pareja para descubrir por qué tanto relajo armaban y la razón... bueno para que les digo.

    Hermione–Solo compra uno, ya sabes que no debes exceder–lo reprendió.

    Ron–Olvidas que George se come todos, mejor compro los cuatro.

    Harry–Oigan ¿Por qué no se han ido?–les pregunté.

    Ron–No nos hemos ido porque Hermione no quiere que compre cuatro cajas de diablillos de pimienta sabiendo que George se los come todos–replico.

    Hermione–Pero si ya compraste media tienda–señalo el mostrador repleto de dulces.

    Harry–Creí que sólo comprarían dos o tres paquetes–me sorprendí de tal acumulación.

    Hermione–Así sería pero ya sabes cómo es Ron, en cuanto lo ven lo quieren–entrelazo los brazos enojada.

    Ron–No es cierto–miro el mostrador–Bueno, tal ves un poco–sacudió los ojos.

    Harry sonreí de lado al comportamiento de Ron tan infantil.

    Harry–Tan tu como siempre. Bueno los veo después–me gire para irme.

    Hermione–Espera, ¿a donde vas?

    Harry–Acompaño a alguien y… –no termine mi respuesta porque escuchamos un fuerte ruido proveniente del fondo de la tienda, se oía el clamor de algunos acercándose al espectáculo hasta el fondo.

    El vendedor dejo de cobrar y fue corriendo a la horca de personas desesperadas al perderse del entrenamiento, voltee al lugar donde estaba Draco y me altere al no verlo en ningún lado. Una sensación de aviso me decía que tenía que ir a la multitud rápidamente, avance seguido de Ron y Hermione hasta el circulo de personas. Por el sonido debía de ser una pelea, la sensación se hizo más fuerte y moviendo a todos visualizando la escena.

    Draco estaba siendo atacado por un mastodonte robusto golpeando su cara una y otra ves, el tipo estaba arriba de él dejándolo sin poder defenderse. La rabia me consumía recorriendo cada centímetro de mis venas. Corrí a su dirección y lo tome de su chaqueta lanzándolo lejos de Draco, al ver los moretones en su pálido rostro yo sentía una opresión un mi pecho que no puedo describir, sólo sabía que ya no era yo mismo remplazando mi alma por un demonio sin corazón.

    Me abalance hacia él fortachón y comencé a darle golpes hasta que me sangraran los nudillos soportando el maldito dolor. El intento quitarme con su brazo forzando para quitarme de arriba, estampe su cráneo en el azulejo con una mano y la otra tome su brazo torciéndolo hacía atrás tronando de sopetón los huesos. Los presentes al ver como lo lastimaba trataron de detenerme alejándome pero me zafaba de su agarre agresivamente siguiendo con lo mío. Quería deformar su cara hasta que no puedan volver a regenerarla, tras golpes sin cesar sentí que alguien pasaba su mano de mi espalda hasta el hombro suavemente, gire la mirada y vi a Draco con desesperación y tristeza rogando que parará, deje de golpearlo y trate de calmarme normalizando mi pulso y respiración al mismo tiempo, me levanté sintiendo el ardor en mis nudillos que no paraban de sangra. Hermione se acercó y me lanzo un hechizo que hizo desaparecer los desgarros de mis nudillos. Me incliné tomando la barbilla de Draco observando los moretones y le pedí a Hermione que le quitará las heridas lo cual está asintió removiendo sus moretones.

    ~°°°~

    Ahora me encontraba en San mungo a lado de una cama donde se hallaba Draco profundamente dormido con una costilla rota, él medimago me dijo que por un golpe recibido en el estómago pudo darle a una costilla quebrándola en dos, y el impacto con el estante hizo que se encajara en su pulmón sin perforarlo. Todo era mi culpa si hubiera estado con el en eso momento no estaría postrado en esa cama, me maldije mil veces por ser tan idiota por dejarlo solo.

    Recargue mis brazos en el colchón mirando sus ojos cerrados mostrando una tranquilidad tan pasiva que nunca había visto, podría verlo todo la noche si quisiera, nunca me vi en la oportunidad de verlo tan de cerca como ahora, sus pestañas eran rubias y delgadas, sus mejillas estaban rosadas al igual que sus labios, su cabello estaba desordenado con mechones pegados en la frente por el sudor. No sé si fue por instituto o compulsión cuando mi mano se fue acercando a sus labios tocando su labio inferior con mi pulgar, sentí su sequedad pero igual estaban suaves, deslice mi dedo al otro extremo y luego me detuve en el centro abriendo unos milímetros su boca. Me pare y me acerque a unos centímetros de su rostro, llegue al punto donde no sabía lo que hacía, una parte de mi me decía que me detuviera y la otra decía que siguiera importando un carajo las consecuencias. La adrenalina se apoderaba de mi cuerpo impulsándome a sus labios estando a dos centímetros de ser tocados, entre cerré los ojos y roce nuestro labios sintiendo la suavidad carnosa de sus labios, mi mente se desconectaba de mi cuerpo por completo como si nuestros labios tuvieran una especie de magnetismo, estaba por acercarme más pero el sonido de la puerta abriéndose hizo que me alejará rápido del rubio. Era una enfermera y venía para revisar el estado de Draco, tal parece que no vio nada ya que no mostraba asombro o asco, decidí salir para dejarlos solos y también porque tenía que ir a tomar aire fresco enseguida.

    Salí por la puerta de atrás llegando a un callejón iluminado de pequeños faroles colgados. Recargue mi espalda en la sucia pared pensando en la estupidez que estaba a punto de cometer. Estaba así de cerca de BESAR a Draco, que rayos me sucede, desde cuándo soy un puto homosexual al que le gusta aprovecharse de un chico inconsciente. Todo esta mal mi corazón sigue latiendo muy fuerte como si en cualquier momento se saliera de mi pecho, tengo que tranquilizarme sacar esos pensamientos incoherentes de mi cabeza.

    Las únicas personas que he besado fueron Cho y Ginny ambas siendo mujeres, pero al sentir los labios de Draco, no se fue diferente, fue una experiencia que no tuve con Cho o Ginny y la verdad creo que me gusto incluso siendo sólo un roce. Nunca me a atraído un hombre en mi corta vida siempre me han gustado las mujeres con sus cuerpos delicados y sus pechos de tamaño promedio. No puede simplemente gustarme Draco, no puedo sentir nada por él. Draco Malfoy y yo sólo somos AMIGOS. Métetelo bien en tu retorcida cabeza Harry.

    Empecé a tener frío y entre regresando a la habitación, la cual ya se había ido la enfermera, me senté en la silla observando una ves mas su rostro dormido hasta cerrar los ojos durmiendo un rato hasta que cambiará de turno con Theodore.


    [Draco Malfoy]

    Me encontraba en una habitación oscura completamente desorientado, lo último que recuerdo es que estaba en San mungo con Theodore a mi lado y luego… ahhh no puedo recordarlo, todo lo veo borroso. La única iluminación era reflejada por una pequeña ventana vieja y rota, no sabía dónde estaba y como había llegado ahí, con la poca luz visualice una puerta de madera algo descuidada y medio rota, me acerque con temor y gire el picaporte muy lentamente sacando un crujido al intentar abrirla. Del otro lado de la puerta había un corredor con varias puertas iguales a la anterior llevando a diferentes habitaciones, con pasos lentos avance hasta la última puerta pero esta no era igual a las demás, esta era de color blanco y sin ningún rasguño o desperfecto, la abrí y una luz intensa me segó cerrando de golpe mis ojos, los abría tratando de acostumbrarme y distinguir que era ese lugar. Las paredes se tornaban de piedra rocosa y grisácea, el ambiente era lúgubre y frío, reconocí donde me encontraba, estaba en el departamento de ministerios en un pasillo que dirigía al salón de profecías, no entendía porque estaba en ese lugar. Caminé despacio por los corredores tratando de encontrar una salida sin una pizca de éxito, entre mas caminaba más sentía lejos la salida, me detuve en un crucé conectando cuatro corredores, no sabía cuál elegir me empezaba a desesperar y las ganas de gritar para pedir ayuda era mi única alternativa.

    Los corredores estaban penetrados por el silenció, pegue mi cuerpo a la fría pared deslizándome hacia abajo quedando sentado sujetando mis rodillas. El frío aumentaba y abrace más mis rodillas manteniendo un poco de calor. De pronto las paredes comenzaban a hacerse de hielo cristalino haciendo que me alejara de un brincó.
    La temperatura bajaba tanto que al respirar salía humo caliente de mi nariz y boca, era como si un dementor estuviera aquí, listo para alimentarse de la poca felicidad que me quedaba.–“Draco”–una voz me sobresalto aunque fuera algo débil, era una mujer llamándome y se oía en el corredor de mi derecha. Caminé a pasos lentos buscando a la autora de la voz–“Draco”–entre más avanzaba más fuerte se hacía, empecé a correr hasta llegar a otra puerta, la abrí de golpe y aparecí en otra parte, ya no estaba en el departamento sino ahora en la mansión Malfoy justo en la entrada.

    Me concentre en agudizar mis oídos para saber dónde se hallaba la mujer pero todo estaba en completo silencio–“Draco”–se oía en la planta de arriba, corrí tropezándome en las escaleras y llegue a la habitación al fondo, la de mis padres, completamente nervioso tome la perilla y abrí la puerta de un jalón.

    Deseaba no haberla abierto, la escena que vi me desgarro las entrañas dejando salir las lágrimas y jadeos de lo que mis ojos presenciaban.
    Mi cuerpo se desplomó en el suelo sin detener la catarata de agua que salía de mis ojos, mis padres estaban tendidos en la cama muertos con la sangre regada por todas partes, ¿Cómo era posible? Ellos murieron por el beso de dementor, miles de emociones se dispararon irá, confusión, tristeza, miedo. Pero más que nada… dolor, un dolor peor que recibir el hechizo más poderoso.
    Mire a mamá, tenía los ojos abiertos y su rostro ya no expresaba absolutamente nada, nada más había un cuerpo sin alma, note que en sus manos sostenía una especie de esfera protegiéndola entre ellas, era una profecía pero esta no era azul sino de una llama color escarlata, me levanté y me acerque al cuerpo tomando la esfera analizando su aspecto.

    De pronto algo me tomo del hombro y al girarme me estrangularon soltando la profecía rompiéndola en mil pedazos. Había cientos de mortifagos rodeándome sin dejarme escapatoria. El que me sostenía me tumbo en la pared estrangulándome más fuerte. La llama de la esfera se empezó a expandir formando un figura de un cuerpo, los latidos de mi corazón aumentaron al ver al ser quien arruinó mi vida y la de mi familia, él que fue destruido por el-niño-que-vivió.

    Draco–V-Voldemort–mi respiración se agotaba por la fuerza del agarre.

    Voldemort–Es hora de volver–musito mostrando una sonrisa siniestra.

    No comprendí sus palabras, mire una última ves su espantosa cara cuando sentí que me encajaban un objeto contundente en el pecho perforando mi corazón, abrí los ojos en shock, gritaba aún con el poco aire que me quedaba pidiendo a Merlín que se detuviera y acabará está tortura, las risas de todos se oía en ecos retumbando en mis oídos, mi cuerpo dejo de luchar y ya no sentía absolutamente nada, mis párpados se cerraban sin poder abrirlos de nuevo.


    Desperté sentándome en la cama todo sudoroso y aterrorizado, todo fue sólo una pesadilla, a mi alrededor y estaba en la habitación de San mungo completamente solo, exhale entrecortado y note algo bajar por mis mejillas, pase mi mano sintiendo agua fría recorrer hasta la barbilla, estaba llorando. Aun tenia las espantosas escenas de mis padres muertos en mi memoria, mis padres arrancados de sus vidas de esa manera tan atroz era demasiado, sin embargo cientos de preguntas me rotaban en la cabeza ¿por qué Voldemort apareció? ¿por qué dijo esas palabras? ¿A qué se refería de volver? ¿Qué era esa profecía escarlata que sostenía mi madre? Esas y muchas mas me venían.

    No volví a dormir, afligí que si lo hacía volvería a soñar lo mismo o otra cosa peor.

    El sonido de la puerta abriéndose me intranquilizo activando mis sentidos, al ver que era Blaise me alivie bastante dejado de tener pánico.

    Blaise–Ya despertaste creí que dormirías todo el día–dijo mientras bebía jugo de calabaza.

    Mire por la ventana y efectivamente ya había amanecido eran como las 8 de la mañana, tanto así me pegue a mis pensamientos sin sentido de la realidad.

    Draco–No tenía mucho sueño.

    Blaise–Bueno cambiando de tema él medimago dijo que hoy te dará de alta y saldrás esta tarde–se sentó en la silla.

    Draco–Bien ya me cansé de estar en esta cama–me queje.

    Blaise–Oye ¿estás bien?–dijo preocupado.

    Draco–¿Qué?

    Blaise–Te ves inquieto, ¿aún sientes dolor?

    Draco–No, es sólo… que ya quiero salir de aquí–dije nervioso.

    Blaise–Bueno ten paciencia–se inclino recogiendo algo–Por cierto toma–me entrego una bolsa mediana de compras de la tienda Honeydukes.

    Draco–¿Y esto?–pregunte mientras lo tomaba.

    Blaise–Te lo manda Potter, dijo que te lo debía–dijo desentendido.

    Abrí la bolsa y saque el contenido sorprendiéndome de lo que era, una caja grande de ranas de chocolate con una nota pegada diciendo: “Lo prometido es deuda y también es una disculpa por no haber estado contigo en ese instante, asumo la responsabilidad de todo. Espero y los disfrutes de parte de tu amigo compulsivo Harry”
    Me salió una pequeña risita pasando mi palma de la sien hasta la quijada, después de todo cumplió con lo prometido. Guarde el detalle en la bolsa, aún con una enorme sonrisa.

    Mas tarde me dieron de alta dándome una poción para el dolor en la herida. Mis amigos me esperaban afuera y se notaba lo alegres que estaban de mi recuperación, llegamos al colegio a la hora del almuerzo lo que significa que los pasillos se hallaban desértico lo cual me aliviaba bastante. McGonagall se enteró de lo sucedido y me dio el honor de justificar mis faltas de los dos días de clases, y también que el chico que me atacó pagaría las consecuencias de sus actos. No le di importancia total es una rutina para mi los golpes desde el inicio del año.

    Los días pasaron normal para todos pero no para mí. Desde ese día en San mungo he tenido la misma pesadilla todas las noches, llegando al punto en no poder dormir quedando mirando el techo hasta el amanecer. Tanto así que un día la desesperación me mataba que tuve que robar unas pastillas para dormir de la enfermería, ocultándolas debajo de una tabla de madera del piso para que nadie las encontrará. Sabía que si las pesadillas continuaban me volvería loco tarde o temprano, sólo quería saber qué significaba, ¿por qué así de la nada lo soñé?, ¿por qué no se detiene? Es todo lo que pido.

    Con todo el revoltijo en mi cabeza, no tomaba tan encuentra a la gente que me rodeaba, evitaba a la mayoría contando a mis amigos y más que nada a Potter, no quiero que se preocupe y me vea con estas ojeras horribles. Pero él era como un chicle pegado en el cabello, después de clases me esperaba cerca de la sala de Slytherin y me llevaba al salón de astronomía para estar solos . No me incomodaba que este conmigo sólo que aún no me doy a la idea de estar con Potter sin terminar castigados, es gracioso, tal ves entre a una dimensión paralela donde Potter y yo nos caemos bien que irónico. Sin embargo, hay algo extraño en él desde ese día en Hogsmeade, se ha comportado de cierta manera sobreprotector conmigo y no como Blaise y Theodore lo son, sino como… no sé, una chica. Como cuando estamos juntos y alguien intenta molestarme, él se pone en medio confrontándolo en mi lugar. No es malo, entiendo que quiera defenderme, después de todo se debe de sentir culpable por lo de Honeydukes, pero lo que no me gusta es que piense que no puedo defenderme solo, como si fuera una de las tantas chicas que ahí en Hogwarts. Odio que me vean de esa forma, primero Dylan y ahora Potter. Ya verán algún día me veré cómo ellos y cuando ese día llegué verán quién es la chica, sólo tengo que crecer unos 15 centímetros y listo.

    ¡Dios! Estoy saliéndome del tema. En fin pasamos a estar a un día de Halloween y todos los alumnos estaban entusiasmados por la fiesta en el gran comedor. Yo quizás me quedaría en mi cuarto leyendo o tal ves saldría algún lugar, sólo sabia que no iría a esa fiesta, en primera porque nadie quiere verme ahí y en segunda no tengo ánimos para soportar tanta gente.

    Pansy ha estado con sus rabietas de que fuera con ellos pero siempre le decía que no. Ella no se rendía ante nada, entre mas le decía no, más insistía como una niña berrinchuda. Harto de ella y sus berrinches decidí irme afuera del castillo hacía el lago negro, por fin sentía paz y tranquilidad lejos de toda esa tensión. Suspiré calmado.

    Me senté en la tierra rodeando mis rodillas con mis brazos, observando el bello atardecer destellando el paisaje de amarillo y rojo. Muy hermoso para pintar en un cuaderno.

    Esto me recuerda una ves que Thomas me llevo de vacaciones a una isla llamada Hawái. Igual como estoy ahora me senté en la orilla y dejé que mis pies se mojaran con la corriente de agua, fue la mejor experiencia de mi vida.

    “Flashback”

    Estaba sentado en la arena mirando a los surfistas arrasar con las olas pareciendo tan fácil que cualquiera lo haría. La vista era tan majestuosa dando ganas de no irte nunca.

    El viaje hacia aquí no fue muy reconfortante que digamos, siendo la primera vez en un avión para un mago puede ser un poco incómodo. En serio me tomo de imprevisto Thomas con estas vacaciones, dijo que eran para celebrar mi cumpleaños número 18. Fue un detalle increíble, tal ves el único que atesorare siempre.

    Thomas–Linda vista–me extendió una paleta de hielo de mango mientras se sentaba.

    Draco–Si que la es–la tome y le di un mordisco saboreando su sabor.

    Thomas–Te digo algo–lo mire–Yo estuve aquí una ves con mi padre en el mismo lugar donde estamos–lo mire sorprendido–Nos sentamos mirando el atardecer comiendo un helado como tú y yo. Nunca olvide ese día…–se detuvo sin despegar la vista del mar–Y me dije un día, que haría lo mismo cuando tuviera un hijo o una hija. Pero... mi esposa murió y…me quede solo–dijo con una tranquilidad absoluta.

    Draco–Si así fue entonces, ¿por qué me trajiste si te recordaba a tu familia?–dije interrogante.

    Thomas–Por que yo te veo como un hijo–giro mirándome fausto.

    Estaba escéptico por esas simples palabras, fijé la mira en las olas y volví la vista en Thomas muy inseguro de que decir. Un “wow yo te veo como padre, quieres adoptarme”, seria muy ridículo. El silencio nos inundó sin poder sacar un verso o una simple frase.

    Draco–aaah–respire despacio–No… no entiendo.

    Thomas–No es para que lo entiendas. Cuando apareciste y me contaste tu historia, yo no podía dejarte sin una oportunidad y te deje trabajar para mí. Pensé que eras como todos los jóvenes, sencillo, con capacidades ineficientes, sin poder acatar órdenes. No tenía muchas esperanzas en ti–mordió su paleta antes de continuar–Pero lograste que me tragara todo eso, te esforzarte tratando de no tener un error y llevándote bien con todos. Comprendí que no debí juzgarte y decidí en darte la oportunidad de ser mi aprendiz. Poco a poco comencé a encariñarme contigo viéndote como un hijo, incluso si no seamos la mismo sangre te veo como tal Draco–termino mordiendo el cacho restante de hielo jugando con el palito.

    Draco–Thomas–dije sosegado, él miró con una expresión de indiferencia. No voltee a verlo quedando observando hacia enfrente–Gracias–dije seco, él alzó la ceja–Tuviste tus prejuicios sobre mi, lo comprendo perfectamente, pero igual confiaste en mi y me diste un techo que por primera vez en tanto tiempo pude llamar hogar. Por eso te doy las gracias–lo mire sonriendo–Papá–dije liberando ese vacío que estaba matándome.

    Thomas abrió los ojos impactado colocando una sonrisa entre dientes en sus grueso labios. Palmeo mi espalda acercándome más a él abrazándome por el cuello, quedándonos mirando el sol desaparecer entre el mar cristalino terminando un día más.

    Fin del flashback

    Bostece cansado sintiendo una horrible irritación en los ojos por el sol intenso, maldito insomnio, malditas pesadillas, maldito mundo mágico. Talle mis ojos humedecido mis corneas una por una, dejando de sentir ardor unos segundos.
    La noche se acercaba y los chicos deben de estar buscándome por todas partes. Me levanté y camine lento para poder distraerme y pensar más tiempo antes de entrar al colegio. Iba llegando a la entrada arrastrando los pies cuando unas voces provenientes por las escaleras se acercaban, me oculte en una pared para que no me descubrieran, quedando estático al oír la voz de Hermione hablando con alguien, si ella estaba aquí significa que Weasley y Harry también.

    Hermione–Luna ya tiene todo para mañana sólo falta unas cosas más y ya–se oía acercándose.

    Ron–Esta será la mejor fiesta de Halloween–dijo alborotado.

    Harry–De lo mejor te lo aseguro–igual que Ron.

    Hermione–No lo olvidén veremos a Neville a las 6 para organizarnos–ellos asintieron.

    Ron–¡Oigan chicos! Lo estaba olvidando por completo–se detuvieron a la mitad del camino. Saque un poco la cabeza para ver porque se detuvieron y vi a Weasley sacar una bolsa negra del bolso de la túnica–George me dio esto para la fiesta–saco de la bolsa unos cuetes de varios tamaños y colores, también había bombas de humo del tamaño de una pelota de tenis–Le pedí algunos para divertirnos un rato–los metió de nuevo.

    Hermione–Pero McGonagall no nos dejara usarlos–le informo.

    Ron–Nunca dije que los usaría en la fiesta o si–río sarcástico.

    Hermione–Entonces ¿para que los quieres?

    Ron–Bueno pensé en darles una visita a las serpientitas rastreras y dejarles un poco de chispa–sus palabras estaban llenas de ironía.

    Harry–Un momento Ron, ¿de que diablos hablas?–su alteró.

    Ron–Hablo de divertirnos con ellos un rato, por todas las que nos hicieron.

    Harry–No vamos a hacerles nada–dijo serio.

    Ron–Por favor, vas a decirme que no quieres hacerlo. Tu más que nada, quien odio, desprecio y aborreció a esa casa por lo de Voldemort–dijo enojado.

    Harry–Eso no significa que quiera hacerles daño Ron. Por que es tan difícil para ti dejar el pasado–elevo la voz.

    Ron no hablo y avanzó unos pasos a hacía delante y prosiguió.

    Ron–¿Sabes porque?, ¡Porque esos cabrones merecían pudrirse en una puta celda!–expulso toda su ira–¡Ellos tienen la culpa de que Fred este muerto!

    Harry–¡Los culpables fueron sus padres Ron, ellos ni siquiera estaban en la pelea!–dijo lo más neutro produciéndome un escalofrío.

    Ron–¡Ahh, perdón se me olvidaba que ya eres su amigo. Ahora has estado muy ocupado con tu nuevo amigo verdad.

    Hermione–Chicos ya basta–trato de ponerse enfrente pero Ron la movía de lado encarando a Harry.

    Ron–Creíste que no me había dado cuenta, me crees tan idiota–dijo furioso.

    Harry–No se de que hablas–sonó desentendido.

    Ron–¡Eres un maldito mentiroso, crees que no he notado que te la has pasado con Malfoy después de clases¡–eso me alarmó, Harry no les ha dicho.

    Hermione–¿Tu y Malfoy son amigos ahora Harry?–dijo preocupada.

    Saque más la cabeza para ver lo que pasaba y vi a Harry con una seriedad tan atemorizante nunca vista.

    Harry–Si Hermione–dijo neutro–Somos amigos desde inicio del año.

    Hermione–¿Por qué no nos dijiste?

    Harry–No encontraba el momento adecuado para decirles.

    Ron–¡Me estás jodiendo, él hijo de puta nos hizo la vida imposible desde el primer grado y tú simplemente aceptas ser su amigo!

    Harry–Si le dieras una oportunidad sabrías que ha cambiado, no es el mismo de antes–recalco.

    Ron–¡Cambiar! Cambiar dices, él nunca va a cambiar, siempre será el lambe huevos de Voldemort, una escoria más que debe de estar pudriéndose en azkaban con las ratas–ya no quería escucharlo, mordí mi labio para no sacar algún jadeo de dolor, por no llorar. Quería irme, salir oyendo.

    Harry no dijo nada pero se veía furioso apretando sus manos fuertemente. Se quedo viendo a Weasley un segundo aproximándose para después darle un golpe en la cara dejándolo con una marca en la mejilla. Ron se tocó en el área aguantando de el dolor mirando a Harry con odio. Harry no cambio su expresión en ningún momento, parecía otro.

    Harry–¡Escúchame bien, vuelves a decir otra estupidez como esa y te juro que no seré gentil la próxima, has entendido–dijo frío avanzando a la entrada.

    Hermione estaba sorprendida por la reacción de su amigo, ayudó al pelirrojo revisando el golpe que muy pronto se convertiría un gran moretón.

    Ron–Maldito bastardo.

    Hermione–Debo decir qué hora si te pasaste Ron–replico.

    Ron–¿Por qué? Porque le dije las verdades de ese imbécil–sermoneo.

    Hermione–Pueda que Harry tenga razón y Malfoy cambió a un modo bueno. Lo has visto, ya no nos insulta o nos gasta una de sus bromas, sólo se concentra en las clases y de ahí no hay más.

    Ron–¿Estas de su lado?–pregunto molesto.

    Hermione–No estoy de lado de nadie, veo las evidencias cuando las veo–dijo seria.

    Ron sólo gruñó y entraron pisando firme desapareciendo de mi visita. Salí de mi escondite sintiendo una fea sensación de culpabilidad, sabía que esto pasaría teniendo varias circunstancias, no quería que se odiarán por mi culpa esa no era mi idea al empezar una amistad con Harry.

    Tengo que arreglar las cosas, si tengo que dejar de hablarle a Harry para que este con sus amigos, lo haré.

    _________

    Bien llegamos al punto donde las cosas se ponen intensas. Le esperan desgracias, felicidad, amor y más a nuestro Draco. Ustedes que opinan, será una nueva aventura para nuestro trio dorado y él rubio. Digan sus expectativas.
     
    Top
    .
  6. Killer_Cookie
        +1   -1
     
    .

    User deleted


    Opino que me gusta mucho y, que no te tardes tanto en proseguir. Como dice Bob Esponja: "¡LO NECESITO!" :v
     
    Top
    .
  7. aLMOST.fIRE
        +1   -1
     
    .

    User deleted


    Pinche mastodonte que nos golpeo al Draco, espero más caps.
     
    Top
    .
  8. AmDeYa
        +1   -1
     
    .

    User deleted


    Me gusta mucho tu fic. Espero lo continúes pronto.
     
    Top
    .
  9. Miku Mike
        +1   -1
     
    .

    User deleted


    Pobre de mi Draco :'c
     
    Top
    .
  10.     +1   -1
     
    .
    Avatar

    EL YAOI ES LO MAXIMO 100%­
    Image and video hosting by TinyPic

    Group
    Member
    Posts
    274
    Location
    ARGENTINA, MENDOZA.

    Status
    Offline
    muy buena continua la historia esta muy buena saludos desde Argentina
     
    Top
    .
  11. Mari_yaoi
        +1   -1
     
    .

    User deleted


    Halloween parte 1



    _______________________
    [Hermione Granger]

    No sé qué decir estaba en un colapso de estupefacción procesando todo lo que pasó halla afuera, nunca he visto a Harry comportándose de esa manera por alguien más, en especial si esa persona es Draco Malfoy. Si estoy algo molesta por no habernos dicho de su lado amistoso pero comprendo sus razones, él sabía que Ron se comportaría así después de tenerle tanto odio y resentimiento al terminar la guerra ,era normal que reaccionara inadecuadamente lanzando todo el veneno sobre él rubio.

    Después de que Harry nos dejara Ron y yo nos fuimos a la enfermería para curarle el moretón de su rostro, en el camino no dejaba de hacer sus rabietas en contra de Harry y Malfoy. Yo me limitaba a oírlo solamente llegando a la enfermería sentándolo en una cama yendo por un botiquín al armario y dejarlo a lado del pelirrojo sacando una crema y algodones.

    Ron.– Auch –se quejo al colocar el algodón en la zona.

    Hermione.–Lo siento, pero tengo que hacerlo–frote poco a poco tratando de no lastimarlo–Debo de admitir que no esperaba esa reacción por parte de Harry.

    Ron.–A ese traidor ni me lo menciones –dijo molesto.

    Hermione.–Te ha venido a la cabeza de porque tuvo que escondernos sobre lo de Malfoy –unte la crema en el algodón y pase lentamente en el moretón.

    Ron.–Porque es un cobarde miserable que prefiere a una serpiente asquerosa que a sus amigos–apretó los puños volteando hacia la ventana.

    Hermione.–Quieres dejar de tener ese estúpido carácter que no te favorece en nada –dije fastidiada–Harry está en todo se derecho hablar con quien quiera . Aunque a ti no te guste el escogió a Malfoy –avente el algodón a la basura regresando las cosas al armario.

    Estaba cansada de escucharlo hablar de es manera, entiendo que se sienta decepcionado más que nada por lo de Fred, su muerte fue un golpe duro para la familia Weasley y Ron desde eso momento desprecio a los de Slytherin con todo su ser. Pero algo se que si es verdad... de que Malfoy no es más el chico ególatra que solía ser y entiendo por que, su familia está muerta dejando solo a su único hijo y sobre qué todo el mundo siente aversión tan solo de pronunciar el apellido Malfoy. Es comprensible, si estuviera en su lugar yo igual cambiaria mi forma de pensar.

    Me gire mirando a Ron quien se mantenía aún sentado observando por la ventana ignorándome completamente, me acerque sentándome a su lado entrelazado nuestra manos delicadamente. Él volteó mirándome molesto.

    Hermione.– Se que... desprecias a Malfoy por todo lo que nos hizo pero las personas cambian Ron, y hay que dejar ir el pasado junto con nuestro rencor. Ya no llenes tu mente de venganza y resentimiento–Ron relajo el rostro pensado en lo que dije sin decir nada.

    Ron.–¿Y que quieres que te diga? Que olvide todo y me exprese bonito de Malfoy mientras tomamos una taza de té–hablo con sorna.

    Suspiré cansada en no verle forma de hablar con él parándome de la cama alejándome de Ron llegando a la puerta, la abrí y antes de salir le dije:

    Hermione.–Piensa en lo que te dije y hazlo antes de que cometas una locura–termine de decir dejándolo solo avanzando a mi habitación preocupada por el día de mañana.

    [Harry Potter]

    Al dejar a Ron y Hermione me dispuse ir a la torre de astronomía para tratar de calmarme o en serio explotaría por el coraje. Al llegar me recargue en el barandal mirando la oscuridad de la noche y el brillo de la luna alumbrando todo Hogwarts como si fuera una gran vela encendida de color blanca sobre nosotros. Exhale pretendiendo en dejar de pensar en lo ocurrido viendo la manera para solucionarlo antes de que pase algo trágico, tenía que hablar con Ron y Hermione como es debido pero con Ron es como hablarle a una mandrágora resiente salida de la maseta, es insoportable queriendo enterrarlo en la tierra como ellas.

    Sentía una migraña horrible por el enojo sobándome las sien con las yemas de los dedos, mi mente divagaba en un mar de argumentos que no hallaba tales respuesta sobre los hechos. Quiero entender a Ron y en verdad lo hago esforzándome todo lo que puedo, pero tan sólo de creer que su amigo se transformo en un cuerpo sin alma lo intranquiliza bastante, ese no es Ron que conocí en primero y voy hacer lo que sea para que se de cuenta de que Draco no es más el chico narcisista de antes.

    Mañana no hay clases pueda hablar con Draco de lo sucedido tal ves así me ayude a entrar en razón a mi amigo. Di una última mirada a la noche quedándome grabado la hermosa imagen y me retiré abandonando el salón rumbo a la torre de Gryffindor. Entre y me recosté en el sofá de la sala, no pensaba ir a mi cuarto ya que ahí estaría Ron y por ahora no quería verlo y él tampoco a mí así que me acomode cerrando los ojos desvaneciéndome en mis sueños hasta el día de mañana.

    •••

    – Harry, Harry –alguien me llamaba moviéndome para despertarme– Harry despierta –la voz era femenina de inmediato supe quien era, abrí lentamentelos ojos sintiendo todos mis huesos adoloridos por la posición incomoda comenzando a estirarme tronando todos mis huesos hasta no sentir incomodidad, parpadeando una veces mire a Hermione que estaba parada observándome con esa cara de "Eres un idiota" por todas partes. Bufé y me levanté preguntándome que hora era. Hermione me extendió una toalla y mi cepillo de dientes para irme directo a las duchar, sin decir nada. Debo de pensar que aún sigue molesta pero no tanto o sino no me hubiera despertado.

    Harry.– ¿No dirás nada? –le pregunté entrando en detalles.

    Hermione.–¿Ahora si te importa mi opinión? ¿Creí que no te interesaba? –No sonaba molesta sino decepcionada. Esto hizo que me sintiera mal bajando la cabeza unos segundos antes de hablar.

    Harry. – Lo lamento, yo no quería que se salieran las cosas de control. Intenté decírtelo pero... Creía que no lo aceptarías reaccionando igual que Ron –pretendía justificar mis razones mirando fijamente a Hermione.

    Hermione.–Entiendo tus razones Harry y yo no soy nadie para juzgarte por defender a Malfoy, pero si me molesta que no hallas confiado en mí en algo muy delicado, sabes que puedes decirme todo -dice sosegada.

    Harry.–Si y nunca debí de dudar de ti, en verdad lo siento –dije cohibido mostrando una cara de pena.

    Hermione me miró un tiempo con una mueca pensando en perdonarme o mandarme a la mierda, espero que sea la primera.

    Hermione.– Bueno eso es lo de menos por ahora, lo que quiero saber es que te hizo reaccionar de esa forma ayer. Se que Ron se pasó pero no para que lo golpearas –se sentó en el sillón imitándola.

    Harry.–Me hizo enfadar Hermione, y no voy a dejar que siga comportándose como un idiota. Ya me harte de que insulte a Draco enfrente de mí –estaba irritado volteando de ves en cuando a la chimenea.

    Hermione.–¿Ahora es Draco? –pregunto.

    Harry.– Si, es su nombre –dije mordaz haciendo que ella frunciera el ceño.

    Hermione.–No tienes que ser tan maleducado sólo fue una pregunta –puchereo– Además te conozco lo suficiente cómo para saber que tú nunca reaccionas así por lo que diga Ron ¿Dime hay algo que no me estás diciendo?

    No respondí porque no sabía que decir, no sabía si decirle lo de el día en San mungo cuando casi beso a Draco estando inconsciente, no se la razón de mi comportamiento irracional para que halla hecho lo que hice, pero no puedo dejar de pensar un sus labios, en sus ojos plateados, o en su cuerpo tan... dios no lo entiendo, que me está pasando.

    Harry.–No.

    Ella no estuvo muy convencida a mi respuesta, sin embargo no dijo nada considerando la posibilidad de sacarme aunque sea información válida. La conozco y cuando algo se le mete a la cabeza es un dilema.

    Hermione.– De acuerdo. De todas maneras tienes todo mi apoyo y si necesitas ayuda aquí estoy para lo que sea –adoraba eso de ella su modo de comprender las cosas con tal sensatez. Sin duda una de las mejores amigas que no cambiaria.

    Sonreí dando a entender que estaba agradecido por su apoyo. Ella igual reveló sus dientes perfectos en una confortante sonrisa extendida.

    Hermione.– Bueno basta de habladurías y vete a duchar, estas hecho un asco –hizo una mueca de desagrado tapándose la nariz al no soportar mi hedor. Una carcajada salió de mis labios al ver que tenía razón, ni yo me soportaba, me levanté y fui a las duchas más brío.

    En el gran comedor estuve sentado a lado de Neville, a unos dos metros separado de Ron. Él comedor estaba siendo decorado para la fiesta moviendo a algunos alumnos por los pasillos por las prisas algunos apresurados, otros tranquilos poniendo todo en su lugar, era un total revuelo.

    Miré a la dirección de la mesa de Slytherin viendo a Draco platicar con Pansy mientras engullía la comida. No despegaba mi ojos de su rostro capturando cada facción y gesto que hacía, me hipnotizaba esa sonrisa floreciente detallado con eso labios rosados y dientes perfectos, sus ojos brillaban rotundamente figurando dos piedras preciosas embonadas en ese hermoso rostro, debo de admitirlo, muchos envidiarían a Draco por tener un rostro de porcelana.

    Él rubio al notar que lo observaba plantó sus ojos en los míos dejando de sonreír cambiándola por una neutra, me miro una milésima de segundo regresando a su platica como si no me hubiera visto. Quede confundido, le molestó algo, no lo entiendo.

    Neville.–¡Hey! ¡Harry! –me sacudían saliendo del transe volteando a ver a Neville quien tenía su mano sobre mi hombro.– Te he estado llamando por 5 minutos, parecías petrificado.

    Harry.– Perdón ¿Qué me estabas diciendo?

    Neville.–Te pregunte si había pasado algo entre tú y Ron –especificó.

    Harry.– Solo discutimos por cosas sin sentido.

    Neville.–¿Puedo saber que tipo de cosas? –justamente hoy se le ocurre hacerme un interrogatorio. Suspire instantáneamente cabreado.

    Harry.–No es nada importante sólo peleamos. Y si no te molesta no me gustaría hablar más sobre el tema–hable firmemente dando a entender mi mal genio. Neville quedo callado volviendo a su plato dejándome con mi ahora frustración al nombramiento de Ron.

    Al terminar de desayunar fui a ver a Hagrid al saber que se iría por unos días. Los alrededores se encontraban escaseados siendo él único en el lugar. Caminé hasta su casa y golpe la puerta dos veces abriéndose repentinamente revelando a Hagrid con su típica vestimenta y la barba sin peinar, me dio un corto abrazo y me invitó a pasar moviendo algunas cosas acumuladas.

    Hagrid.– ¿Te pase algo Harry? Te ves desanimado -cuestiono preocupado.

    Harry.– Han pasado tantas cosas –aclare– Pero no vine para hablar de mi. Oí que mañana irás a una reunión con McGonagall junto con los del ministerio.

    Hagrid.–Ah, si. McGonagall me selecciono por algunos asuntos que están pasando en el bosque y como conozco a la perfección la zona me pidió que la acompañara –explico sonando reticente. La forma en que lo dijo me inquietaba de cierta manera.

    Harry.–¿Qué pasa en el bosque? –objete fomentando mi pregunta discretamente.

    Hagrid encorvo la columna a mi pregunta poniéndose más nervioso pisando los cosas que estaban regadas en el suelo. Había sudor en su frente y se veía que tenía problemas para respirar inhalando por la nariz y exhalando por la boca cortamente.

    Hagrid.– ¿Quieres una taza de café? –evadió el tema dándome la espalda.

    Harry.–Hagrid –aumente el nivel de voz. ¿Qué lo tiene tan alterado?

    Hagrid.–De acuerdo, siéntate –indico la silla de la mesa. Me senté recargando mis brazos en la demacrada mesa.– McGonagall me llamo porque... Están buscando a la joven desaparecida Katherine Norwood.

    Harry.–¿La chica de Slytherin de mi edad?–dije inquieto.

    Hagrid.– Si, la razón por la que la buscan es que ella es uno de los mortifagos que huyó en la guerra –abrí grande los ojos escéptico– Descubrieron que Katherine tenía información sobre un sujeto llamado Lawrence Ormuz, líder de los mortifagos de gran Rango y mano derecha de Voldemort. Él fue uno de los cuales no pudieron encontrar junto con otros quince, es muy escurridizo y difícil de rastrear, sin duda todo un experto en el combate y magia oscura.

    Harry.–Nunca escuché de él. ¿Pero que tiene que ver con que tu estés involucrado?

    Hagrid.– Katherine estaba dispuesta a decirnos sobre si paradero, pero el día en que la interrogarían desapareció, la buscaron por todas partes pero parecía que la tierra se la trago, no había ni un rastro de ella –movió sus dedos sanando los golpeteos en la madera– Sin embargo, a dos días después de su desaparición se reportaron a otras cuatro personas desaparecidas ese mismo día, dos hombres y dos mujeres entre 20 y 30 años. No me dijeron sobre ellos, lo único que sé es que esos cuatro conocían a Katherine, de hay en más no lo sé. Por eso me mandaron a guiar a los aurores para investigar si se están ahí –sentía un mal presentimiento por toda esa revelación expuesta, tenía muchas preguntas pero Hagrid se sentiría agobiado en este momento así que me límite a no preguntar más.

    Un sabor amargo me invadió comenzando a ansiarme deliberadamente en todo el cuerpo, acelerando mi corazón a todo lo que daba. No me gusta nada este presentimiento chocando en mi cabeza provocándome un dolor insoportable.

    Hablamos un rato más dando las dos y me retiré dándole una frase de despedida y que si había problemas me mandará una carta inmediatamente. Salí aún preocupado caminando entre los corredores arrasado de personas yendo de diferentes sentidos. Necesitaba estar en un lugar tranquilo lejos del escándalo y las chicas que se pegan a mi para invitarme cómo su pareja en la fiesta. Rápidamente me zafe de sus garras dirigiéndome al único lugar donde nadie pondría un pie este día, si, fui a la biblioteca, el lugar que todo alumno aborrece... claro excepto Hermione...

    Al cerrar la puerta al entrar recargue mi espalda cerrando los ojos y aclame el majestuoso silencio retumbando en mis tímpanos. Abrí de golpe los ojos al escuchar un ruido de un libro cayendo sanando en toda la biblioteca, avance lentamente pasando de repisa en repisa y en el momento de estar del otro lado de donde vino el ruido, cogí mi varita precavido y gire rápido para pillar al culpable. Pero antes de dar la vuelta completa un cuerpo pequeño chocó contra mi cayendo los dos al frío piso derrumbando los libros que traía en manos.

    Aturdido miré enfrente viendo una cabellera rubia reposada en mi pecho. Él chico gruñó apoyando sus manos en el piso levantó su cabeza ocultando su rostro en caballo.

    Harry.–Oye lo siento no te... –me quede callado al ver al príncipe de las serpientes mirándome totalmente colorado del rostro.– Draco, perdóname no sabía que eras tú –apareció una sonrisa graciosa.

    Draco se paro desviando la mirada recogiendo los libros tirados y alejándose sin decir nada. Es la misma mirada que me mandó en el comedor, una expresión neutra cómo si fuéramos enemigos nuevamente. Lo vi salir apresurado dejándome con una gran duda, yo diría varias. No entiendo que le pasa, por qué actúa cómo si me tuviera rencor, volviendo a las viejas miradas y odio que nos teníamos desde el primer día en que nos conocimos. No, eso no puede ser, no dejaré que Draco vuelva a las andadas conmigo. Pero por el momento debo de arreglarme con alguien más.

    Salí de la biblioteca llegando a la sala de Gryffindor y al entrar a mi cuarto vi a Ron metiendo unas cosas a una mochila pequeña ignorándome, vi que en la parte de debajo de su ojos estaba amoratado. Resople acercándome a él lentamente sintiendo miedo y enojo mezclándose hasta producir decepción, decepción por el y por mi por no hablarlo. Tomé valor y comencé a hablar sonando mi voz firme.

    Harry.–Ron –lo llamé pero él no acotó a mi llamado siguiendo con lo suyo.– ¡Ron! –subí el tono.–Tenemos que hablar.

    Ron volteo sus ojos a los míos mostrando resentimiento y furia acumulada soltando la mochila y esperando a que dijera lo que tenía que decir.

    Ron.–Habla.

     
    Top
    .
  12. aLMOST.fIRE
        +1   -1
     
    .

    User deleted


    Hay god, que drama, espero que no le hayan metido nada en la cabeza a Draquilin.
     
    Top
    .
26 replies since 5/1/2017, 06:46   2197 views
  Share  
.