El perderte UxM original

Hola, espero que estén bien…etto, como sabran las vacaciones se aproximan y es por eso que estoy adelantando (trato) algunos capitulos de mis fanfics porque cuando lleguen las vacaciones mis primos de otros estados vendrán a visitarme a la ciudad y mi madre no va a trabajar así que será imposible entrar en el foro. Les escribo desde la lenta papelería de la escuela (y eso que mis clases hoy comienzan en tres horas) no sé cuándo publicaré este capítulo pero si desaparezco o me ven conectada por largos periodos sin hacer nada es por eso.

Misaki pasaba por su sobrino a la escuela.

- ¡Mahiro! - lo llamó al verlo jugando tan feliz con otro niño - ¡Mahiro ven!

- ¡Tío Mitakiii! - corrió hacia él después de despedirse de su amigo quien le dio un tierno beso en la mejilla antes de separarse.

Era el tercer día que el pequeño Mahiro se quedaba con ellos, muchos de sus otros parientes habían querido llevarlo a vivir con ellos pero el pequeño niño de cuatro años se negaba a abandonar a su tío Misaki.

- U... do... tes... sata salta sata - cantaba jugando solo en la planta baja - ¡los malos! salben ala pinsesa.

Corría de un lado a otro y en un movimiento descuidado rozó su codo con un mueble que encima tenía una lámpara roja, el movimiento brusco del golpe hizo que la lámpara cayera al suelo.

- ¡Mahiro! - gritó Misaki desde el segundo piso asustado - ¿E-estás bien?

- Huuuuug - lloraba con una herida superficial en la palma de su manita izquierda - quielo a mi mama - su mano sangraba poco a poco - Ma-mami.

Al poco rato llega Usagi al penthouse.

- Ya arreglé todo para que ambas tengan un lugar en el nuevo cementerio - dijo entrando a la estancia - ... ¿Misaki que tienes?

- Encontré cicatrices en el cuerpo de Mahiro.

- ¡¿Qué?!

- Hoy se cortó después de que cayera la lámpara roja cerca de él. Estaba asustado y corrí a apoyarlo pero el comenzó a llorar por su mamá, creí que era normal y decidí bañarlo. Habían varias cicatrices, la mayoría eran cortadas en sus pies, cuando le pregunté que pasó lloró más fuerte.

- ¿Hay alguien a quien llamar para saber sobre qué le pasó?

- No lo creo. Mi hermano siempre estuvo a su lado a excepción de estos últimos días.

- La escuela - afirmó seguro - Si las cicatrices son así de antiguas ez el único lugar donde se me ocurre que pudieron hacerle algo así.

- Mañana iré a ver eso. Pero por si acaso debemos buscar una nueva escuela para él.

- Yo me encargaré de eso.

- Gracias.


Finalmente la noche llegó. Misaki preparaba a su sobrino para dormir.



- ¿Hay algo que quieras contarme Mahiro?

- Peldon - sus ojitos se cristalizaron - no quelia dompello.

- No es eso. ¿Alguien te hacía daño en la escuela? - el niño niega con la cabeza - ¿Tus compañeros y maestros te tratan bien?

- Ti - repentinamente se formó una sonrisa en su rostro y sus ojitos se iluminaron - tengo a mi mejol amigo Akila, me gusta mucho esta con él.

- ¿Te gusta?

- ¡Si! yo quielo que el sea mi emanito.

- ¿Y quién te hizo todas esas heridas?

- ... - el silencio era incómodo, Misaki quedó petrificado al escuchar la confesión de Mahiro - Mi papá.

- ... No - no lo podía creer - ¿Estás... seguro?

- Mi papi gita mucho y dompe cosas.

- ... Creo que es hora de dormir - el niño se recuesta no sin antes dar un pequeño salto y besar los labios de su tío Misaki - ... Mahiro... ¿tu?

- Te amo mucho tío Mitaki.

- ... - El castaño quedó petrificado al instante.





En la actualidad

Mahiro pasaba a buscar algo interesante en la librería, sin que él lo notara era el tema de conversación de un grupo de chicos que admiraban su apariencia sería pero no conocían lo que había hecho que un adorable y sonriente niño se transformara en básicamente un adulto.