Ingranazhe (Varias parejas)

El joven de cabellos grises siguio al de rastas hasta el helipuerto, donde subieron en silencio a un helicopero color negro, no le sorprendió tanto que un chico de cuna de oro tuviera a su alcance aquel objeto para transportarse, eran caros e incluso extraños de ver por la ciudad. Comenzaron su viaje al distrito 14, donde el joven tenía su lugar de trabajo, se comenzaba a preparar para ver el lugar lujoso en el cual ese crecido estuviera trabajando, no lo dejaba de ver, tal vez estaba mal pre juzgarlo por su primera impresión pero simplemente ya lo odiaba.
Kido por su parte no le prestaba tanta atención a su nueva compañía no deseada, estaba monitoreando unas cosas desde una pantalla táctil que se proyectaba desde una muñequera, aun así podía notar esa mirada sobre él, no era algo nuevo, que alguien le viera mal descaradamente, sin embargo por lo mismo era fácil dejarlo pasar, no sería ni la primera ni la última persona a la que no le iba a agradar, él no era una moneda de oro, era un creador de monedas. Tomaron su tiempo para llegar al edificio, agradeció a su “chofer” y bajó rápidamente, seguido por el otro, entraron a un ascensor, donde ya estaba un chico de pie esperándolo con un café y una agenda.


-Buenos días jefe- habló un chico de cabello gris cercano al lila, con un parche en su ojo derecho, piel oscura y el otro ojo color ámbar - Su café- Kido no se molestó en contestar el saludo, tomó el vaso.


-Haizaki Ryuhei, necesitará accesos de seguridad, hazte cargo, no quiero tener que abrirle las puertas- dijo mientras tomaba de el líquido caliente un trago - ¿Que tenemos hoy? -



-El día está despejado de juntas, Kageyama dejó un mensaje, que cuando tuviera tiempo fuera a verlo a su taller - Kido hizo algunas muecas que no quedaron desapercibidas por los dos de cabello largo - Me haré cargo de las tarjetas de Haizaki-kun - Observó al chico con media sonrisa en son de saludo, el otro hizo una reverencia- Oh! y Genda trajó las piezas que pidió-Kido levantó el rostro automáticamente, su rostro cambió por completo, creando una primera sonrisa para Haizaki, le regresó a su asistente la agenda. Las puertas se abrieron y pasó casi corriendo, los otros le siguieron por el lugar. -Mucho Gusto Haizaki-kun, Soy Sakuma Jirou, te mostraré las instalaciones despues- dijo mientras ambos seguían al castaño.


-Mucho gusto Sakuma-san-


-GENDA- Kido saludo a un castaño más alto, con cabello largo algo revuelto, tenía un aspecto salvaje- Eres el mejor, Eres el mejor, Eres el mejor - El que parecía un león sonrió y recibió al jefe con los brazos abiertos mientras casi se le tiraba encima, aunque duró apenas unos segundos-¿Donde están? ¿Dónde están? -Haizaki no sabía qué pensar, hace unos momentos era un ogro y ahora parecía un niño exigiendo un juguete nuevo.


-Ya están abajo- aseguró el más alto presente - oh, persona nueva.-


-Si si, él es Haizaki, Shuuya me lo mando para el problema de robos- Kido los rodeo mientras avanzaba por el pasillo, ahora los tres le seguían.


-Genda Koujiro, un gusto- saludo el otro castaño, pasaron por unos pasillos, a diferencia de las instalaciones de seguridad, ese lugar era muy limpio y blanco, o lo fue hasta que Kido abrió una puerta, fue una experiencia verlo abrirla, una tarjeta, una clave, su mano en una placa , reconocimiento de voz, y añadir a 3 personas más. Bajaron por algunas escaleras siguiendo al de rastas.


El nuevo lugar era el “laboratorio” ahora Ryuhei sabía que no debía pensarlo así, eso era un taller, uno gigante, las escaleras fueron largas, pero entendía porque no había un elevador directo a ese lugar, era algo más oscuro, pero aun así con suficiente luz, dentro pudo encontrar donde se hacía “la magia” había cientos de aparatos, herramientas, cosas construidas, algunos libros, notas, en fin, en comparación con la parte superior era un caos. Kido corrió hacía una mesa donde estaban dejando cajas, en cuanto llegó comenzó a abrir una por una.


-Bienvenido al taller - dijo Sakuma al nuevo, Kido abría las cajas con una mano mientras terminaba su café- Señor, se va a quemar…-


Kido ignoró el hecho e incluso terminó el café, pasando al asistente el contenedor, el cual tuvo que casi atrapar en el aire, Yuuto sacó de una caja una pieza en especifico y salió corriendo por otro lado.


-¿Es así siempre?- Preguntó el nuevo, siguiendo con la mirada a su jefe


-Si- respondieron los otros dos.


-Como yo lo veo, no tendrás que lidiar tanto con él, si tu trabajo es proteger sus inventos- comentó Genda, también siguiendo a Kido con la mirada- No esperes que te preste tanta atención cuando está aquí dentro, ni Kageyama puede sacarlo de aquí cuando empieza algún proyecto. El único ser humano capaz de sacar a Yuuto de aquí además de Sakuma es su hermana y rara vez viene.- Informó, tomando asiento en una de las sillas de por ahí - siéntate, se tardará en darte alguna orden. - Los tres se sentaron, aunque Sakuma se levantó un momento después a responder llamadas, terminó saliendo de ahí.


Kido no reparó en siquiera cambiarse de ropa cuando ya estaba entre una de sus máquinas poniendo piezas, Haizaki y Genda comenzaron a hablar, de cosas triviales como su edad, en que departamento estaba, entre esas cosas que la gente normal habla.


-El ladrón, ¿viene por la noche? - Preguntó el oficial, el castaño se hundio de hombros


-Aveces, aveces no, es como si pudiera traspasar las paredes, Yuuto ya intentó de todo para contenerlo, por eso no hay ventanas aquí-


-Entiendo-


-Ese hijo de perra no tiene consideración por mi trabajo- Habló Kido, haciendo saber a Haizaki que si los escuchaba- No me molestaría si no lo vendiera a alguien más, pero lo hace, es muy molesto saber que alguien consigue mis cosas de esa forma.-


-¿Por qué no hay más gente trabajando aquí?- pregunto al ver que el de rastas hacía prácticamente solo, siquiera alguien le pasaba sus herramientas,y en el piso de arriba había mucha gente


-Kido no deja a nadie meterse aquí, solo Saku y yo, bueno y ahora tu, pero no podemos acercarnos tanto-


Sakuma volvió una hora después, ofreciendo a Haizaki conocer el lugar, otorgándole una tarjeta, le pidió una impresión de su mano para el código de entrada, le dio los números entre otra información de seguridad, salieron de ahí dejando a Genda y Kido.
Era un edificio grande, pero la mejor parte estaba en el sótano claramente. Sakuma explicó que el taller se conformaba en 4 pisos, el que recien conocio, que era donde Kido trabajaba en las cosas de primer construcción, lo que le pedían hiciera, ahí se creaba lo mas comercial o las últimas piezas, en el 2do piso de sótano estaba la energía, el de rastas hacía los motores y conductores ahí, por eso estaba más cerca de la salida por si algo salía mal, el 3er piso tenía almacén de objetos, como errores y piezas que no encajaban, el 4to piso era desconocido por todos además de, aparentemente, ser el único donde el ladrón no había entrado. Eso por el sótano, en la superficie estaba la recepción y los talleres de los demás mecánicos que debía replicar los inventos para la comercialización, los pisos 2 al 5 eran oficinas, donde se veían las partes de negocios, el 6to piso era la oficina de Genda, que se dedicaba a conseguir todo lo que Kido le pidiera, era como un segundo almacén, 7mo a 9no eran más oficinas, de contadores y secretarias, después el 10mo piso era una cafetería para todos, 11vo y 12vo una enorme biblioteca y área de descanso, el 13vo no tenía absolutamente nada, solo era un piso sin paredes ni muros: SOLO ellos 3 tendrían acceso, era el área donde Kido se ponía a pensar y por último el 14vo piso era la oficina de Kido, aunque aparentemente no estaba ahí muy seguido. El edificio no era recto, como la mayoría de los edificios de la ciudad tenían un estilo asimétrico, contaba con azotea y helipuerto. Jirou le mostró cada lugar al que pudiera acceder, así como las formas de poder entrar, le presentó a algunas personas alrededor, volvieron a la cafetería, donde consiguieron comida para volver a bajar con los otros dos castaños.

Al volver Kido ya estaba sentado con Genda, aunque Kido estaba sobre la mesa antes llena de cajas, las cuales ya no estaban, habían demorado unas 3 horas en recorrer el edificio, Kido había terminado de vaciar las cajas.

-Dime que tienes café- dijo Kido mirando a Sakuma tras sus googles.


-No señor, le traje una botella de agua, té helado y una malteada de fresa.- Puso la cazuela en la mesa, Haizaki puso otra - Tambien traje comida, es un panino de carnes frias, tambien algo de fruta.- Kido dejó caer su cabeza en una clara decepción- ya tomó café hoy.-


Haizaki le ofreció a Genda otro panino igual al del jefe y comenzaron a comer, al menos ellos, Kido tomó la malteada y se puso de pie de nuevo, observando su creación desde un ángulo alejado.

-Debes comer- dijo Genda dando una mordida.


-Lo haré lo haré- aseguró Kido acercándose a su objeto - lo voy a encender- Informó mientras entraba a lo que aparentemente era una especie de nave, Haizaki lo catalogo como un coche muy fancy. Genda y Haizaki tuvieron que sacar a Kido cuando falló, el de rastas estaba lleno de Humo pero se reía ligeramente - Era a la izquierda…-


-Come antes de repararlo- pidió Sakuma



-Lo haré lo haré- Rápido para volver a meterse bajó el objeto, corrigiendo el error.


-¿No lo hará verdad?- Genda negó a Haizaki


-Llamaré a Kageyama si no comes- Amenazó Sakuma, lo que obligó a Kido a ir y darle una mordida al emparedado, bocado que comió con rapidez para volver a lo que hacía- bueno, de eso a nada…-


Haizaki no pudo evitar reír un poco, realmente había tenido una muy diferente primera impresión de Kido a lo que era en su lugar de trabajo, porque Sakuma parecía el jefe ahí abajo, pero en la superficie el de rastas era intimidante. Yuuto seguía lleno de hollín, pero al final lo logró, pudo hacer levitar el objeto, el cual Genda tuvo que subir por un elevador especial. Kido se acercó a terminar su comida, amenazado por Sakuma.


-Te dije que lo haría- respondió el de googles, levantandolos de sus ojos, acomodandolos en su cabeza.


Haizaki antes había visto ese color, él mismo lo tenía, pero no así, tragó grueso y miro a otro lado, no quería pensar que eran lindos, eran lindos, sus ojos, eran grandes , de un rojo brillante; escarlata, volvió a su comida para pensar en otra cosa, pero al final tuvo que volver la vista. Kido le miraba ahora, tuvo que decir ¿Que?


-Había olvidado que estabas aquí- admitió Kido, tomando una toalla de las manos de Sakuma, limpiando la suciedad de su rostro - ¿Debo ponerte un horario? o tu lo sabes?-


-Goenji-san me dijo que cuidara, así que seran turnos de más de 24 horas.-


-Que bien, porque Sakuma dice que no tengo juntas hasta dentro de 3 días, por lo que estaremos aquí 36 horas.- informó terminado de limpiarse, para volver a sentarse en la mesa, ahora si a comer. - Esto sabe horrible.-


-No sabe horrible, tu debes tener humo en la boca- se quejó en voz alta Haizaki, cuando noto lo que dijo miro a otro lado. Sakuma no pudo evitar reir bajito.


-No quita que me sabe mal- se quejó de vuelta Kido, dejando la comida en la bandeja, ahora solo tomando el té.



-Que desconsiderado de tu parte dejar comida, oh los placeres de tener dinero, desperdiciar algo tan sagrado como la comida- La voz desconocida resonó por la habitación, alertando a los presentes- Oh, ¿quién es él? ¿es nuevo?- Kido se puso de pie en la mesa buscando la proveniencia de la voz, Haizaki no tuvo que ser un genio para saber de quién se trataba, sacó su arma rápidamente- debes ser uno de los chicos de Goenji. No puedes disparar eso aquí, harás que todo haga Booooom- el “booom” hizo eco por la habitación, acompañado de una risa - Tan típico de los oficiales, todo se resuelve con grandes booom. ¿Dónde está Clario? Me encanta que él me persiga.-


-Lo que tengas en las manos suéltalo- exige Kido mirando por todos lados- Negociemos.-


-Quiero ese sándwich- dijo la voz, escucharon un ruido, y entonces estuvo a su vista, sobre una de las máquinas. Haizaki no podía creer que lo que había causado tantos problemas era una persona tan pequeña. Frente a él había un chico, algo más bajo que el mismo Kido, su cara estaba tapada de nariz para abajo, usaba ropa color café oscuro, se veía cómoda, probablemente para poder correr, pero solo sus ojos estaban descubiertos, su frente era cubierta por una banda naranja, era castaño, con un peinado peculiar - pero de todos modos me llevare esto- en su mano había una esfera color azul- Brilla, seguro me darán algo bueno por ella.-


-No te atrevas- Kido bajó de la mesa, Haizaki ya le señalaba con el arma, y con la otra oprimió un aparato que Clario le dio, para llamarlos.


-Aunque sepa mal, debes comer tus alimentos Kido Yuuto, niño privilegiado con ese beneficio de poder rechazar la comida- Haizaki noto que el chico cargaba con una mochila tipo bolso, se veía abultada, por lo que podía deducir tenía más cosas ahí. -¿Tu nombre? Oficial nuevo.


-Haizaki Ryuhei.


-Bienvenido a las industrias Kido, donde todo se trata de hacer enojar al jefe- El chico lanzó una bomba de humo- NOS VEMOS- Haizaki corrió entre los ruidos, ignorando el humo lo más que podia- oh, que desesperado- siguio su voz hasta que choco con un muro. -



Kido tocó las alarmas para informar a todo el edificio.



“Haizaki, estamos afuera, lo perseguiremos desde aquí”- Haizaki reconoció la voz de Clario desde su radio


-OH! ¡ES CLARIO! DILE QUE ACEPTO EL RETO-


Fuera del edificio la unidad de Clario esperaba por encontrar a su roedor menos favorito, Haizaki no tardó en aparecer para informar, pero al parecer no había salido, Kido se había puesto a ver que más le habían robado, y claramente no estaba feliz.

-¿NO VAS A ALCANZARME CLARIO?- El oficial giró la cabeza, sobre un edificio vecino estaba el chico, en cuanto notó fue visto comenzó a correr, y Clario tras él. Haizaki comenzó a seguirlos también. - NO ES DIVERTIDA UNA CITA CON 2 PERSONAS, CREÍ QUE SOLO SERIAMOS TU Y YO-


-HACES MUY DIFICIL SOLO HACER LAS COSAS LOS DOS- Respondió Clario persiguiendolo


-No sé si podré resistir a dos personas- Haizaki esperaba equivocarse, pero el ladrón parecía estar haciendo referencias un poco más sexuales que reales, y Clario estaba cayendo en todas.


Fueron las dos horas de persecución más divertidas para Haizaki, pero claramente sería complicado, le perdieron en el distrito 6 en el cruce del ferrocarril, cuando creyeron que el tren le había atropellado, pero terminó sobre este, y ahí todo fue mal.


Volvieron con Kido, Goenji ya estaba ahí, siendo regañado por el dueño del edificio una vez más, llegaron justo a tiempo para ver al de rastas atentar contra la paciencia de su jefe, llamándole “inepto” “inutil” “lento” “inservible” entre otros adjetivos. Kido vio a Haizaki y siguió con él “estaba frente a ti y no hiciste nada” el de googles estaba entrado en cólera, Sakuma tuvo que intervenir y hacerlo entrar al edificio, el de rastas parecía irradiar humo por cada poro de pie, al final entró.


-Ryuhei- llamó Goenji al chico- Sakuma te dará un arma que puedas usar dentro de las instalaciones, tienes permiso de atacar al chico, no es un civil normal. -


-Claramente no lo es- explico Haizaki - no encuentro explicación para su capadicad.-


-¿Me lo dices a mi?- se quejó Clario


-No, en serio, el chico no debería poder evadirnos- explicó, tomando la atención de todos- Es más bajo que Kido -


-¿Comó sabes eso?- pregunto Goenji


-Tengo una extraña habilidad para medir personas- además de eso, su estructura no era de alguien veloz, eso más el hecho de que ese lugar parece impenetrable ¿como entra?-


-Atraviesa las paredes- Dijo Genda llegando- Vi uno de los detectores de cuerpos, y en serio, él traspasó el muro.-


-Imposible- se quejó Goenji


-No tanto- agregó Clario- ¿No creó Kageyama hace años un aparato para la densidad molecular y él la robó?-


Genda, Clario y Goenji fueron a registrar la nueva información, Sakuma y Haizaki fueron a buscar a Kido, quien estaba en el piso 13. Entonces tuvo sentido para Haizaki el lugar, el de rastas estaba sentado en el suelo en el medio del lugar blanco, claramente calmandose, no sabía si entendía bien la molestia, él mismo estaba enojado, era obvio que el magnate lo estaba más.


-Lo odio- declaró Kido mirando el suelo.


-¿Puedes hacer otro?- preguntó Sakuma, acercándose más.


-Si… pero no es el punto - se quejó- Su risa me da pesadillas ya, arg, en serio que son unos inútiles- siguió quejándose - somos, somos unos inútiles- se dejó caer de espalda- bien, mueve mis juntas porque debo volver a hacerla. Clario no lo atrapará…-



-Harás otro, y será mejor- Alentó Sakuma a su jefe


-Era azul-



-El panino no sabía mal-


-¡Dale el estupido sandwich, no lo quiero, quiero mi reactor!-


Bien Haizaki estaba intentando conectar una estructura real para Kido, porque ahora pensaba muy seriamente que tenía problemas de personalidad, era a veces un ogro, después muy apacionado, otras un niño, después un adolecente con problemas de alimentación, un trabajador exigente y por último: un caprichoso

Perdona a Endo, le gusta jugar con Clario. y shi, poco a poco Haizaki caera. Kageyama saldrá despues...

En efecto, Kido ya esta harto de él.
Endo es un loquillo, espera mucho más de esos juegos con Clario
Kido esta a nada de saltar del 14 piso.
Es el futuro xD o no... quien sabe, pero si, es una de las razones por las que Endo es escurridizo

Cuando subió al tren les vio quedarse atrás, no se quedó con las ganas y les dijo adiós con su mano, además de gritarle a Haizaki que no era bienvenido a sus citas con Clario. Se sentó un rato sobre el vagón, esperando que pasara el tren contrario para volver, porque claramente le iban a esperar del otro lado. Bajó antes de llegar, para tomar un atajo a el distrito 1 por las alcantarillas, donde tenía lista ya una caja con la ropa que debía usar ahí en una mochila de espalda, metió el botín ahí mismo al igual que lo que había estado usando, al subir a la superficie se veía completamente diferente, ahora vestía negro, quitó su banda y camino por el lugar como si perteneciera a él, hasta llegar a un bar, uno que conociá a la perfección, las luces neon iluminaban cada rincon de vez en vez pese a la oscuridad, se aproximo a la barra al centro, que brillaba en tonos celestes y rosas, se sentó con cuidado esperando, entonces frente a él se acentó un plato con algo de comida, una hamburguesa para ser precisos y un vaso de limonada. Levantó la mirada agradecido, encontró sus ojos chocolate con los añil del cantinero de cabello castaño en un mohicano que dejaba ver un tatuaje en su lado derecho del cráneo.


-La casa invita- Aseguro con media sonrisa- Está ocupado, así que debes esperar un poco. -


-Está bien- aseguró con una enorme sonrisa- mientras valga la pena-


-Oh dulzura, él siempre vale la pena- afirmó para ir a atender a otros.


Se puso a comer su hamburguesa, quería devorarla pero se supone que debía portarse como si pudiera estar ahí, así que mejor la disfruto, era deliciosa, cada maldito bocado era un deleite, antes de beber el contenido en su vaso lo olió con cuidado como una costumbre sólida y complicada de quitar, la música alrededor empeñaba cualquier otro sonido, la multitud quitaba la posibilidad de ser encontrado, cuando terminó lo que sirvieron frente a él se quedó mirando la muerte del segundo piso, esperando, tuvo que bajar la vista cuando la puerta se abrió, no quería más problemas, así que simplemente esperaría mientras masticaba los hielos que quedaban en su vaso. Una mano se acomodo por su cintura, lo que le hizo girar molesto.


-¿Masticar los hielos amigos? ¿No es demasiado? - La voz conocida le quito la molestia- ven, te esperan arriba-


Siguió al otro por el lugar, subiendo al segundo piso, a cualquier otra persona la habría golpeado por tocarlo, pero no a Osamu, Osamu era benigno en su opinión, por eso le perdonaría el atrevimiento. Le abrió la puerta de forma caballerosa e incluso elegante, dejándolo entrar primero y cerrarlo tras él.
Había varias personas ahí, era la primera vez que estaba con todos en una habitación, por lo general solo veía a uno o a dos a lo mucho, siempre los mismos.


-Buenas noches Endo- saludo el más conocido por su persona, hizo un gesto en forma de saludo - Verás, estamos todos aquí porque queremos verlo. No te preocupes, tu conexión seguire siendo yo, este es un evento de un día- Le tranqulizaba escuchar a su usual comprador tan tranquilo, las otras personas no eran de su confianza, las conocía, debía ser demasiado idiota para no hacerlo.

Natsumi Raimon, la mujer sentada al centro con una copa de vino en su mano, que se movía con gracia, si le preguntaban ella era la definición de una mujer hermosa, tenía la elegancia, el porte, como se sentaba, como vestía, simplemente era imposible no verla, tuvieras la orientación sexual que tuvieras, era inevitable admirar la belleza que se creaba en su piel blanca, la estructura ideal de su rostro, la forma en que sus pestañas bailaban sobre sus hermosos ojos color cobrizo, se sentía halagado de tenerla tan cerca. No se preguntó porque ella estaba ahí, ya lo sabía, era probablemente el pilar de todo ese desastre llamado “contrabando”. La hija del presidente del distrito dos era conocida por el pueblo por ser hermosa como era brillante, era una mujer de 25 años que administraba las empresas de su padre previas a su puesto político, ella tenía varios museos por la ciudad, galerías de arte, muchos proyectos humanitarios, la fachada perfecta para esa orquesta, ¡oh! y un detalle más; Ella era el rumor amoroso de Kido Yuuto, pues era la única mujer con la que le habían visto salir a comer demasiadas veces. Que una amiga esté detrás del robo de sus preciados inventos volvería loco a kido.

Hiroto Kira, a la izquierda de Natsumi, sentado con esa arrogancia que identificaba a su familia, el hijo menor del clan encargado de la peor basura de la ciudad por la noche, pero que por el día movían su sucio dinero en las finanzas, eran una gran empresa de financiamiento, eran las personas detrás del éxito monetario de la mayoría en la ciudad, excluyendo a los kidos cabe mencionar, el chico de cabello crespo color gris con detalles blancos le miraba divertido con sus inusuales ojos rosados con esa figura gatuna, Endo no pudo evitar prestar atención a aquella marca en su ojo izquierdo en forma de rayo, sacado de un libro de fantasía escrito por J.K Rowling en el siglo 20 , resaltaba con su piel pálida, vestía, en opinión de Endo, demasiado cargado, se esforzaba por sobresalir, incluso con su bebida. En fin, si algo era turbio, seguro un Kira estaba de por medio.

Nozaya Yuma, ¿porque no le sorprendía? era la cereza del pastel claramente, Yuma, el chico de cabello rosa salmón y ojos grises que seguro era mayor dolor de trasero que él mismo para Kido, un inventor de primera, o eso le gustaba decir a la sociedad, el que rivalizaba con el mismo Kido, ¿por qué no lo pensó antes? Ahora tenía sentido que Yuma sacara tantos inventos antes que Kido en los últimos dos años, Nozaka le estaba usando para subir sobre los hombros del de rastas sin esforzarse demasiado. Bueno, Nozaka como el perjudicado, era un inventor de primera, era brillante según decían, no le constaba, aunque era una buena táctica robarle las ideas a su competencia. Aunque, también le había robado a él alguna vez.

Tras cada uno de ellos estaban sus asistentes o guarda espaldas, a ellos no los conocía, pero tampoco tenía muchas ganas de hacerlo, tras Natsumi había una chica de cabello verdoso que le miraba con una sonrisa amigable, tras el Kira estaba Osamu, que era un pelinegro de largo cabello, alto, pálido de ojos rojizos , y por último tras Nozaka, su sombra: Nishikage, alto, grande, cabello castaño muy claro y ojos grises, ellos no eran importantes en su opinión.

Por último estaba su mediador, normalmente a él le daba las cosas y entonces él se pondría en contacto con los compradores, pero por alguna razón, esa vez fue diferente.


-¿Podemos ver la esfera?- Se quejó Hiroto con una voz demandante- rápido.-


Endo giro los ojos y sacó la esfera de su mochila, moviendola en su mano, los tres la miraron con interés, su semblante cambió ¿tan importante era? ¿era valiosa? ¿cuánto le darían por ella?


-Es hermoso- Dijo Nozaka poniéndose de pie, acercándose -¿Puedo?- Endo la alejó de él- Claro, si, ammm , necesito comprobar, en serio te pagaremos.- Mamoru volvió a ver a su mediador que solo asintió, entonces lo entregó. El pelirrosa la tomó con cuidado y sonrió - Es perfecto, salvo por el distintivo toque Azul de Kido, pero se puede arreglar- Kira se levantó para verla de cerca, Raimon no, ella solo esperó.


-¿y qué hace?- Ahora la tomo Kira - Solo parece una esfera que brilla.-


-Es lo que es- dijo Natsumi, la giraron a ver- Kido la creó para alimentar la corriente de un edificio entero, logró hacer funcionar todo su taller con esa cosa por 3 días, se supone lo pondrá en una nave para explorar. Qué es lo que estamos evitando ¿cierto?-


-Cierto- respondieron los dos.


-Bien, ya vieron que mi chico cumple, ahora ¿cuál de los tres pagará?-


-Los tres- respondieron ahora los invitados, volviendo a su asiento, tras darle al mediador la esfera.


-Les daremos 5.3 mil - dijo Natsumi, Endo creyó era demasiado.


-10.- propuso el mediador


-5.7- alegó Nozaka


-¿escuche 13?-


-7 - contra puso Nozaka


-9 y tenemos trato-


-10 esta bien - Kira trono los dedos para Osamu, que puso sobre la mesa un maletín- Yo pagaré esta vez.-


-Un placer hacer negocios con ustedes- Fue el mediador quien tomó el dinero y entregó el objeto a Nozaka, que lo puso en una pequeña caja. - Nos vemos.-


Endo salió de ahí siguiendo al mediador no sin una reverencia a los demás presentes y despedir con su mano a Osamu. Persiguió al que tenía el dinero, preguntando lo obvio:


-¿Cuánto será para mí?-


-¿Cómo te fue con Clario?-


-Kido tiene un nuevo guarda espaldas, todos unos idiotas, me perdieron en el tren. ¿Cuánto será para mí?-



-Tenemos que pagarle a Akio por dejarnos vernos ahí- Endo asintió- Le daremos mil a él- volvió a asentir- Hay que recargar tu brazalete ¿cuantas veces lo usaste?-


-4.-


-Es demasiado ¿estás bien? -


-Akio me alimentó , Kido tiene demasiadas puertas, use 2 para entrar y 2 para salir. ¿La recargadas?-


-Si-


-¿Cuánto nos costará eso?-


-Como unos 3.-


-Maldita sea-


-Lo sé, eso nos deja con 6, hay que alimentar a nuestro otro ratón, así que ¿te parece si le doy 500?-


-¿le será suficiente? él siempre te quita mucho-


-bien, demosle 1.-


-¿Nos iremos 2 a 2?-


-Ja-


-Bien, tu 3 y yo 1.-


-Perfecto, vayamos a mi tienda y repartimos.-


Endo no podía evitar quedar con menos del botín, pero entendía que por sí mismo no podría lograr todo eso, requería del sujeto a su lado para los compradores, compradores que le ponían en muchos problemas, seguro terminaría muerto primero el que caminaba a su derecha que él si eso terminaba mal, porque él iría a la cárcel, pero su amigo no iba a acabar vivo de eso si algo salía mal.

Repartieron el dinero en aquel lugar que conocía bien, le encantaba mirar entre las cosas que había en esa tapadera de negocio en el distrito 4. Se detuvo frente a un juguete en una vitrina.


-Endo- la voz del otro le sacó de su trance, alejándose del balón que miraba, para atender al más alto - Hiciste un buen trabajo- Esa era la mayor parte, cuando aquella mano se posaba sobre su cabeza a acariciar su cabello, diciendolo que hizo algo bien - eres el mejor.-


-Gracias...-

Hay maldad en Nat y en Nosaka. Y pues si, la necesidad obliga a Endo a aceptar. y Akio es un bonus en todo jaja. te va a volar la cabeza cuando se descubra quien es el mediador.

Es que no tiene mucho que la subí jeje.
Que bueno que te han gustado los caps. El medidador por ahora es un misterio.
Solo Kido tendría los huevos, y Kudo tal vez.
Pronto se hablara mas de Kags, si no es que aparece. Si, algunos protas son Spelers, y Haizaki no tiene un super poder de medir a las personas, es algo que adquirió con la experiencia, como cuando sabes que eres mas bajito que otro solo por verlo, es mas un complejo de persona alta que un super poder. Y la fuerza igual.

Nat es maldad pura
definitivamente van a llover putazos si Kido se entera.
Hiroto saldrá más, es la persona de los negocios

Ya se, da coraje que le den tan poco a Endo cuando se arriesga el pellejo, pero ta pendejo. Poco a poco se ira deduciendo lo de Endo, como tal no lo puedo poner tal cual.

Sakuma envío a Haizaki ha hacer un reporte de daños junto al demás personal de la corporación, eso no tomo tanto tiempo como el que el jefe se tomó en aquel lugar, el mismo Jirou Sakuma tuvo que dejarle solo para continuar su trabajo, así poco a poco el lugar se fue vaciando, pues el horario de oficina terminaba. A las 21 horas del día Yuuto Kido salió del 13vo piso y llegó a su taller, solo Genda y Haizaki seguían ahí, el primero por su amigo mientras el segundo por trabajo.
Ninguno de los dos dijo nada, Kido fue directamente al ascensor que daba a sus otros pisos, le siguieron a un segundo piso del sótano, donde el de rastas comenzó a trabajar en un plano que ya estaba ahí, probablemente de lo que se habían robado, definitivamente iba a ser una noche larga.

Cambiaron de piso varias veces, Genda incluso fue por café y algunas cosas que comer, mientras Haizaki miraba entretenido como el de googles manipulaba piezas pequeñas de forma muy precisa, movía una perilla en sus anteojos de vista exacta para poder tener más control de lo que estaba moviendo, Ryohei tenía tantas preguntas sobre, cómo una persona con tan poco control de sus emociones podía ser tan bueno para esas cosas. pasaron unas tazas de café sobre los que solo hacían guardía, mientras el otro apenas había dado algunos tragos al primero por prestar atención, en cierto momento el oficial tuvo que ponerse a hacer rondas a la antigua, porque sus piernas le mataban de estar sentado, se puso a mirar los enormes objetos al igual que los pequeños, en algun momento que no notó porque estaban bajo tierra, ya era el día siguiente, lo supo porque la puerta se abrió dejando entrar a un reluciente Sakuma, que vestía un traje, que en opinion de Haizaki le quedaba muy bien, era color verde oliva con pequeños detalles negros, botas tambien negras, y su cabello estaba atado en una coleta alta, en su mano derecha tenía una charola con 4 cafés, bajó con velocidad las algo largas escaleras, entonces detecto al nuevo.



-Buenos días Haizaki-kun - saludo con una sonrisa mientras le entregaba un café, el de cabello igual largo respondió al saludo y le guió a donde estaban los castaños.


Genda estaba dormido en un sofá cerca de Kido, el de rastas seguía armando la esfera como un niño un rompecabezas, el asistente no saludo a su jefe, solo remplazó el café frió por uno caliente, para despues ir a despertas a Genda informando que ya eran las 7 am, haciendole ponerse de pie con calma, despedirse, robar el café e irse de ahí, no sin antes advertir que volvería. Volvió el que sería el nuevo pasatiempo, ver que hace Kido. Fueron largas horas, hasta que el magnate se detuvo, claramente no había terminado.


-Sakuma- llamó, el asistente se puso de pie algo aburrido- Necesito descansar…- Entonces fue que el que llegó se aproximo casi corriendo, moviendo la silla de Kido lejos de su invento, pero aún en la misma mesa - Gracias…- dejó caer su cabeza en la mesa, sus brazos quedaron colgados, Jirou tuvo que quitarle las herramientas para que no se cayeran. -¿Media hora? ¿puedo?-


-Si Kido.- Jirou sacó un reloj de su bolsillo, y marcó 30 minutos, lo dejó a un lado de su jefe- 30 minutos señor a partir de ahora. - Le ayudó a quitarse los googles, Haizaki entonces notó que kido cerró los ojos ¿iba a dormir media hora?- Haizaki-kun, si quieres ir a tu casa a dormir o tomar un baño, esta bien.-


-No tengo sueño, pero tomar un baño sería buena idea-


-Hay regaderas en el 5to piso- le invitó con una sonrisa, el de largos cabellos aceptó la invitación.




En el mundo hay muchas formas de perturbar a la sociedad, no sólo robos, y era por cosas como esas que a Goenji Shuuya le tenía un poco sin cuidado lo que sucedía con Kido, porque en su percepción de lo que estaba bien o mal, la pérdida de objetos era algo absurdo frente a las vidas que tenía que salvar diariamente, o al menos que sus oficiales tenían que hacer.
Se encontraba sentado en su escritorio haciendo algunos reportes y leyendo otros informes un poco molesto, había atrapado a un asesino esa noche, pero en su cabeza solo sonaban las cosas que Yuuto le gritó a la cara, conocía al de rastas de hace años, le conocía suficientemente bien. Sabía lo bipolar que podía ser su comportamiento en ocasiones, sabía que era alérgico a los camarones, sabía porque la habitación vacía en su trabajo y en su propia casa era tan necesaria, y era por esa razón que se encontraba molesto en ese momento, porque Goenji Shuuya podía atrapar asesinos cada maldita noche, detener un secuestro en proceso, encontrar a una persona desaparecida, apreciar a un violador, detener una pelea, pero por no poder detener a un simple ladrón iba a seguir poniendo a las personas que rodeaban a Yuuto Kido en peligro, por que él sabía que rayos significan las habitaciones vacías, su utilidad, necesitaba encontrar al motivo de las jaquecas del de rastas, porque si no lo hacía, iba necesitar que Kudo le diera un permiso especial.

-Señor- Una voz le sacó de sus pensamientos- se ve molesto- el rubio solo se quedo observando a la oficial frente de él. - Perdone, es que, ya es de día, el oficial Fubuki me informó que no fue a casa, así que, le traje té y un emparedado…- dejó el tributo en el escritorio, el cual fue seguido por los ojos oscuros, como si se preguntara si comerlo o no- Es té verde…-


-Necesito que Clario atrape a esa rata o me volveré vegano.-


-¿Rata?-


-El chico que roba a Kido-


-Oh, ¿No está Haizaki asignado también? seguro que lo lograran sin que usted intervenga.-


-Umihara-kun tu tienes demasiada fé en todos.-


-Bueno, puede igual detenerse algún día el chico, todo puede pasar- La chica alargó su sonrisa, Shuuya la volvió a mirar algo aburrido, la de tez pálida y cabello turquesa cambió su expresión a una de duda por el rostro de su superior. -¿Dije algo malo?-


-Ese sujeto tiene 4 años robando ¿Porque se detendría?-


-Tal vez ya consiguió lo suficiente, si los informes son ciertos, él no roba cosas especificas todo el tiempo, le ha robado a Yuuto Kido, a Yuma Nosaka, a Kageyama Reiji, a Fidio Aldena y a Hikaru Ichihoshi según los reportes de Clario, tiene un patrón de comportamiento, mi lógica me lleva a pensar, que roba para revender- se detuvo ahí.



-Bien, vende lo que roba, que novedad.-


-Entonces alguien lo compra, si alguien compra, significa que hay negocio, y si hay negocio entonces tiene una necesidad, quizá simplemente necesita el dinero.-


-Oh, tienes razón.-


-¿La tengo?-


-Alguien está comprando tecnología robada, podría empezar por ahí en lugar que perseguir a Robin Hood-


-No era a lo que me refería señor…-


-Lo sé, también sé que te equivocaste de carrera. Gracias por el té ¿Puedes llamar a Someoka?-


-No ha llegado-


-Entonces a Kozoumaru, lo necesito para algo.-


-Si señor- la chica salió de ahí.


Shuuya tomó su té con cuidado mientras esperaba, comenzando a pensar dónde iba a comenzar con su nueva rama de investigación, o bueno, donde le diría a Clario donde buscar, estaba tan absorto en su pensamiento que no escucho la puerta abrirse, ni que le llamaron algunas veces, no se dió cuenta de nada hasta que unas manos se colocaron en sus hombros.


-Dice Norika que me llamaste.-


-Si- Dejó la bebida en el escritorio, el otro comenzó a masajear sus hombros con cuidado - Norika me dio una idea para buscar al ratón, dejar de perseguirlo y comenzar a preguntar.-


-Me parece bien, o al menos hasta que nos lleve a donde siempre nos llevan las preguntas que se envuelven en demasiado movimiento de algo.-


-Los Kira…- Ladeo su cuello, dejando al otro acercarse, para que los labios del más moreno se pegaran a su piel primero con besos y poco a poco con pequeñas mordidas, dejando un camino de ligera saliva - quiero vacaciones…-


-Me encantaría llevarte a 16 a ver el atardecer mientras estamos desnudos en ese mar, o a 18 en una cabaña entre los bosques- mordió más fuerte y siguió apretando sus dientes hasta tener su recompensa; un jadeo.


Las palabras fueron puestas a un lado en algún momento, Shuuya se levantó de su lugar, solo para que el otro fuera quien estuviera sentado ahora en la silla del jefe, con el mismo sentado sobre suyo, sin embargo el que estaba ofreciendo caricias seguía siendo Kozoumaru, le sacó la ropa superior con cuidado, Sasuke era adicto a ver el torso desnudo de Goenji Shuuya, su piel bronceada era tan perfecta, con esas cicatrices que contaban tantas historias interesantes, esas que poco a poco iba descubriendo como relieves que saben textura a la tierra que era la extensión de su cuerpo, contaba en su mente cada vez, aunque seguro para el rubio solo era “otra vez” , para él no, para él era encantador, cada pequeño sonido que salía del dueño de sus deseos, la persona que le quitaba el aliento, el sueño, la fuente de su locura y su perversión.


-Norika dijo que preguntaste por…- la voz de Someoka sacó a Kozoumaru de su mundo, dejándolo helado contra el pecho de Shuuya - mi. ¿Vuelvo luego?-


-No, quédate- pidió el de cabellos cenizo, controlando poco a poco su respiración - Norika tiene una idea para encontrar al ladrón, Someoka se aproximo, sentándose en el lugar frente al escritorio, aunque Shuuya le daba la espalda, el de cabello rosa podía mirar su espalda desnuda.- ¿Puedes continuar Sasuke?-Kozoumaru entró en estado de shock- ¿Puedes?-


-Yo…-


-Vete entonces niño- recomendó Someoka- deja que un hombre termine tu trabajo entonces- la idea molesto al de cabello semi morado, lo que lo obligó a morder uno de los pezones de Shuuya, haciéndolo respirar de forma pesada- bien… me decías, Norika.-



-Ella cree que…- Shuuya hacía pequeñas pausas a causa de las caricias y mordidas del otro, pero no dejaba salir un gemido - Vende las cosas en algún tipo de mercado, hay … que averiguar quién compra… entonces lo tendremos. -


-oh, quién diría que Norika lo pensaría.-Someoka se estaba divirtiendo de lo lindo con su paisaje, era una buena forma de iniciar el día, ver como Shuuya hacía al presumido de Kozoumaru entrar en pánico por ser observado. - Entonces voy con los chicos del periodico para buscar información ¿verdad?-


-Primero iremos con Kazemaru, si él no tiene algo que decir, entonces toma...toma...toma- otro suspiro largo- tomaremos esa salida para encontrar información.


-No tardes mucho en penetrarlo o te va a dejar con las ganas- recomendó Someoka, Shuuya dejó salir un sonido de protesta - No dije ninguna mentira, bueno, entonces mandó a Clario con Kazemaru.-


-Quiero ir - advirtió el oficial al mando, mientras se levantaba, para ahora darle la espalda a Kozoumaru, dejando su torso sobre el escritorio, ahora viendo de frente a Someoka- quiero ir, quiero ir , quiero ir.-


-Te escuche- Someoka sonrió de lado, Kozoumaru bajó lentamente la ropa inferior de Shuuya, solo lo suficiente, y se arrodillo para ahora morder sus muslos y glúteos, obligando al que recibía a morder sus labios - ¿quién tiene mejores dientes Shuuya?-


-no contestaré eso- el que estaba abajo comenzó a lamer alrededor de la entrada de su capitán de recinto, poco a poco produjo suficiente saliva para meter su lengua por aquel lugar que ya conocía- ngh.-


-¿eso fue un gemido Shuuya?- se burló Someoka, el rubio negó varias veces- estoy seguro que si, Sasuke, hazlo de nuevo o mejor, seguro que gime. El morado perdió la vergüenza entonces, al notar que no era Someoka contra suyo, eran ellos dos contra Shuuya Goenji.


No malentiendan a Goenji Shuuya, era un oficial responsable, y generalmente era quien ponía de rodillas a los demás, de hecho era así casi todo el tiempo, él nunca permitía que le faltaran al respeto a menos que los nombres fueran: Yuuto Kido, Kudo Michiya o Natsumi Raimon. Pero era persona, y vivía del maldito estrés, por eso tenía sus juguetes para calmar ciertas necesidades, no tenía problemas en que esos juguetes supieran de la pluralidad de los mismos, así ninguno se sentiría más especial que otro, y jamás buscarían algo formal, sabrían su lugar siempre, además, ninguno iba a quejarse o a exponerle, eso les podría costar seguir con vida, lo malo de estar con él era eso, podría matarlos y nadie podría pararlo, la parte buena pues, la parte buena era él.

Kozoumaru sabía que su jefe era deseado por muchos, dentro y fuera del recinto, pero en efecto se pensó el único hasta ese momento, no estaba seguro si iba a estar contento mucho tiempo de compartirlo con Someoka o alguien más , ya tendrían tiempo para hablar de eso, mientras tanto estaba disfrutando mucho el entrar en él, y le subió el ego aun más llegar en él mientras Someoka les miraba.

-Olvide decirle a Haizaki que Kido es peligroso.- les informó Goenji, dejando al más joven limpiarle.


-¿No le dijiste que es un Speler?- el de rosa negó algunas veces, observando a su jefe volver a su compostura, al igual que a su ropa - Ire a buscar los registros, porque no estoy seguro de que es lo que Kido puede hacer.- se retiró de ahí.


-Goenji -san- Kozoumaro jalo al otro del brazo para ponerlo contra la pared cuando el superior se fue. - ¿qué significó eso?-


-Me gusta el sexo por la mañana, sobre todo cuando estoy de malas.-


-¿Y Someoka?-


-Debía decirle lo que me dijo Nori.-


-Me refiero-

-Se a lo que re refieres, me gusta que mis chicos se conozcan, sirve que sabes que no eres el unico- Goenji le empujó a un lado- No vuelvas a ponerme contra la pared así, o no podras tener sexo con nadie -

-lo siento-



Cuando Haizaki volvió al taller, ya todos los trabajadores estaban por los pisos, fue directo al taller a continuar lo que debía hacer, bajó con cuidado, solo Kido estaba ahí, en el 1er sótano, estaba sobre una máquina más fuerte, se aproximó a mirar y preguntar.


-¿Qué es eso?-


-Una idea. Tuve una idea mientras dormía. El ladrón robo el modificador de moleculas de Kageyama, y me puse a pensar, que sería genial poder usar el invento de mi mentor como base de algo mejor, imagina Ryohei, - Kido dejó lo que hacía, para hablar con él con una gran sonrisa, suficiente para captar la atención completa del otro- No tener que tardar horas para ver a tu familia del distrito 4 hasta el 19, solo atravesar una puerta y estar ahí, sería genial-


-Oh, quieres teletransportar personas-


-El reino cuantico se mueve de formas extrañas, pero si, basicamente sería eso.-


-Eso es absurdo, es tonto- Kido borró sus sonrisa- Piensa mejor tu, en todo el dinero que se mueve por los transportes, y el tiempo que uno gasta en viajes se llama inversión, es como el primer trago de cerveza, no es muy bueno, pero despues todo lo vale, eso es un viaje ¿tu no viajas y ves los paisajes por la ventana?-


-No… yo veo papeles mientras viajo-


-Oh...Bueno, para la gente como tu quiza si sea bueno, pero, vivir con prisa no es sano.-


-Si no tardará 5 horas en llegar a mi casa desde aquí, iría a dormir allá más seguido- confesó- usaría esas 5 horas en otras cosas.- bajó de lo que hacía- bueno seguro tienes razón, eres más consumidor que yo- pateo lo que hacía, que cayó al suelo haciendo un sonido sordo, mientras Kido andaba por el lugar, para ir a ver otra cosa.


-¿No deberías estar haciendo la esfera?-

-Tarde 8 meses la primera vez, no tengo tanta prisa y tengo otras cosas que hacer. Debo terminar todo lo que tengo a medias, Nozaka hará una presentación en un mes, y según mi padre, debo tener algo listo para el mercado cuando él suba a un peldaño o las finanzas saldran perjudicadas. -


-Entiendo- Haizaki se colocó bajo Kido, que ya estaba sobre otra cosa- ¿no te da miedo caer?-


-Yo no caigo al suelo- dijo muy seguro, comenzando a soldar cables.


Ahí estuvo Kido por horas, Sakuma les llevó comida, aunque el inventor no quiso comerla de nuevo, los de cabello gris comieron juntos, mientras se entretenían viendo a Kido correr de aquí para allá con piezas y herramientas, herramientas que minutos despues Sakuma se puso a ordenar, y despues Ryohei apoyo en eso, estaban abajó de un tipo de camión alcanzando un mar de tornillos, mientras charlaban sobre lo que recien comieron. Entonces sucedio. Un pequeño ruido alertó a Haizaki, y aunque por un segundo pensó que era el ladrón, al alzar la vista supo que no era así.
Su reacción instantanea fue abrazar a Sakuma, como si eso fuera a hacer una diferencia, el sonido de las cadenas al romper fue inconfundible, aquel transporte los iba a aplastar, y no había mucho tiempo de correr, ambos se hicieron bolita abajo, esperando todo terminara, pero no, no terminó, abrieron los ojos con cuidado alzando el rostró, estaba justo ahí, tragó fuerte, y sin preguntarse dos veces jaló a Sakuma lejós de ahí.


-KIDO ESA CO…- Haizaki guardó Silencio, porque Yuuto Kido estaba mirando fijamente el aparato, sus ojos rojos ya no estaban siendo tapados por sus googles, miraba directamente lo que antes les iba a aplastar, cuando movió la mirada el aparato a medias cayó contra el suelo- iba a caer…- Sakuma se toco a si mismo para verificar que estaba bien, y suspiro con calma


-Que suerte ¿no crees?- Sakuma alargó una sonrisa y continuo con su recorrido por herramientas- llamaré a Genda para que ajuste esas cadenas, no esta bien que eso caiga, podría aplastar a Kido jeje- Haizaki no sabía si Jirou estaba fingiendo demensia o no se dio cuenta. el oficial paso del chico de parche, y fue directamente a kido.


-No soy idiota, sé lo que vi- le regaño - Detuviste esa cosa- Kido hizo algunos gestos y alcanzó sus googles- No, en serio dime- subió a la escalera de maquinas para estar al nivel de Kido y evitar se pusiera los anteojos.


-Haizaki, dejalo- advirtió Sakuma aun con media sonrisa- acompañame por Genda.


-No, necesito la información, no puedo trabajar si no me dicen que es un-


-NO LO SOY- le gritó Kido, frunciendo el ceño, el que tenía un arma pudo apreciar como los ojos escarlata brillaban ligeramente - Solo dejalo pasar y estaremos bien -


-Haizaki…- La voz de Sakuma comenzaba a molestarle- Baja de ahí, lentamente-


-Porque?- se giro y encontró un destornillador señalando directamente, si ponía atención muchos objetos estaban levitando - Okay… bajaré- comenzó a bajar con cuidado, pero las cosas le seguían levemente.-


-NO TIENE NADA DE MALO QUE DETENGA LA CAÍDA DE LAS COSAS QUE VAN A APLASTARTE, ESO NO ME HACE UN MONSTRUO- Haizaki bajo por completo, alejándose lo suficiente, los objetos se detuvieron. - ¡SAKUMA!-


-Yuuto, Haizaki-kun y yo iremos por Genda, él arreglara las cadenas, mientras, continuaras ese lo que sea-


-NO ME ESTAS ESCUCHANDO-


-Genda reparara las cadenas, es una suerte que no nos haya aplastado ¿no crees?-


-ÉL NO LO ENTIENDE-


-Haré que lo entienda- Sakuma alcanzó a Haizaki, tomó su mano y comenzaron a caminar con cuidado a las escaleras, el más pequeño estaba tratando de entender, los objetos que flotaban cayeron al suelo de golpe - Bien, ahora, solo iremos por Genda.-


-¿Te he asustado?-


-No Yuuto- Haizaki sabía que Sakuma mentía, lo sabía porque el moreno estaba sudando, temblaba ligeramente y apretaba muy fuerte- iremos por Genda, él arreglará las cadenas.-


-Ya lo dijiste demasiado- susurro Haizaki


-Solo salgamos de aquí- susurro ahora Sakuma, jalandolo por las escaleras corriendo


-¡NO HUYAS DE MI!- no voltearon a verlo, pero al cerrar la puerta escucharon como algo se golpeaba contra ella.


-él salvó nuestras vidas, pero casi nos mata de nuevo- informó Haizaki.


-Si no te hubieras metido con él, esto no hubiera pasado en primer lugar.-



-Kido Yuuto es un Speler…-


-Uno que se sale de control muy fácilmente-