Posts written by Misagi_ryuk

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    Hola cómo están?...yo bien , estoy en mis mini-vacaciones, en las que tengo que hacer bastante trabajo -.- , y pues pasando de eso estoy bastante feliz xD, muchas gracias por leer y comentar, me pone bastante contenta que les guste como va mi fic, hoy les traigo la conty un poquito más rápido por que como ya le sabia dicho, tenía algunos capítulos adelantados o bastante bien planeados :P...asi que aquí se los dejo... Gracias a todos los que leen, besos de cereza para ustedes. Agradamientos chocolatosos :P especiales para: melyoan, Anne onodera takano y esmerald :3...gracias por comentar...

    Espero les guste la conty

    Misagi * *






    Capítulo 28: “Un bebé...por la esperanza”




    -¡Keiichi!...¡espera!...-gritaba Haruhiko tratando de alcanzar a tropezones a su amor.

    El oji-miel ,por su parte, estaba destrozado y cansado de tanto correr, le dolía el pecho ...y no estaba seguro por qué...sin embargo no paró hasta encerrarse en su habitación...no quería ver a Haruhiko...no por ahora...que dolía tanto su pequeño e ingenuo corazoncito...

    -¡Keiichi, ábreme!- demandó el oji-gris golpeando suavemente la puerta, el menor se enroscó en su cama, sentándose con la cabeza entre las piernas, abrazándose, tratando de consolarse...por que quisiera o no...Él ya estaba perdida e idiotamente enamorado de Haruhiko...y eso le dolía más...

    -¡no!... ¡vete con tu novio, no quiero verte!- le gritó con desconsuelo Keiichi, sin siquiera levantar la mirada.

    -...¿no-novio...?...-murmuró extrañado Haruhiko...¡Keiihi estaba confundiendo todo! -¡no sé de qué hablas Keiichi!...pero te aseguro que podemos hablarlo...déjame verte...por fav...-

    -¡que no!...he dicho...no quiero escuchar de tu boca que...vas a alejarte de aquí...vas a alejarte de mí...- murmuró tan despacio...que era imposible que alguien le hubiera escuchado...pero Haruhiko si lo hizo- ¡solo vete!...¡ya no te quiero ver nunca!...-

    Haruhiko frunció el ceño, sintiendo que todo lo que había hecho para recuperar a su niño se deshacía en mil pedazos...y él no quería...se negaba a aceptarlo...se limpió las lágrimas que caían de sus ojos grisáceos...

    -...perdón Keiichi...pero voy a entrar, ¡quieras o no!, necesito hablar contigo...- exclamó y de una patada zafó el seguro de la puerta...Keiichi dio un pequeño gritillo y miró atentamente al oji-gris que casi igual de destrozado que él se acercaba tambaleante hasta donde estaba.

    -t-te...te dije que no entraras...- exclamó lloroso el menor, haciendo un puchero enojado y dolido, se tapó lo ojos y las palabras que estaban en su corazón salieron....-¡te odio...maldita sea Haruhiko!...¡te odio tanto!...quisiera no haberte conocido nunca...-exclamó serio y con su rostro sonrojado...Haruhiko se quedó perplejo ante las palabras de su niño...y sintió que lo que quedaba de su lastimado corazón se deshizo...-te odio...porque eres un maldito egoísta...-exclamó apretando los dientes-...si estabas “reservado”...para alguien...¡¿por qué viniste aquí?!...¡¿Por qué maldita sea viniste a sonreírme de manera tan tierna y hermosa?!...¡¡¡¿Por qué me enamoraste?!!!-

    “Me enamoraste”...los ojos grises de Haruhiko se habían llevado de lágrimas...y sonrió casi imperceptiblemente...Observó con ternura como el más pequeño se deshacía en temblores penosos mientras tenía su rostro sumamente sonrojado...y sin pensárselo más veces se lanzó a abrazarlo...este sintió estremecerse...

    -¿q-que... haces estúpido?...¡suel....suelta...me!- exigió avergonzado de haberse declarado tan torpemente, sin embargo escuchó la pequeña risita del oji-gris...y eso lo enojó...- ¡¿es que acaso...te estas burlando de mi ...idiota?!- exclamó con tristeza...

    -claro que no...Solo, estoy muy feliz...- exclamó apretándolo muy fuerte contra su cuerpo, Keiichi sintió marearse con el calor corporal y el olor natural del varón frente a él...tenerlo tan cerca hacía que le doliera el pecho...sin embargo sentía que si se separaba ahora mismo de él...moriría...y en poco tiempo respondió el abrazo tan fuerte que le ofrecía el muchacho.

    -eres un tonto...ya vete...-exclamó el menor en un claro intento de orden fallido, pues aun no le soltaba...

    -no, yo...voy a contarte sobre “mi novio”...-exclamó de forma casi divertida, separándose al fin de Keiichi, quien se quedó anhelando esa calidez como un pececillo al agua. Sin embargo frunció el ceño molesto, “celoso” y herido de que el oji-gris quisiera contarle aquello justo ahora...

    -¡eres de verdad tan cruel...después de lo que te he dicho!...- empezaba a hipear de poco a poco. Haruhiko tomó sus manos entre las suyas...haciendo que el muchachito le mirara...tranquilizándose de poco a poco.
    -sé que esto no le gustará a Asuka-sama ni al médico...pero considero que si no lo hago...todo terminará aquí Keiichi...y no quiero eso...- empezó el mayor, ganándose toda a la atención del oji-miel lloroso-yo...conocí a este hermoso doncel hace 6 años...él tenía 16 y yo 19, él era tan diferente a todos los que había conocido que me fue imposible no enamorarme de él de inmediato...lo busqué por mucho tiempo...y cuando al fin lo encontré...fui muy feliz...con esfuerzo logré agradarle a su familia...muy prontamente consideramos dar el siguiente paso...y cuando él aceptó casarse conmigo...yo fui el hombre más feliz de la tierra- Keiici desvió la mirada...no quería escuchar más...- Sin embargo surgieron problemas muy graves en mi familia...y las terribles noticias de que tendría que comprometerme con un primo lejano vinieron a desmoronar nuestras ilusiones...y tuve que alejarme de él...por órdenes de nuestros padres...-

    Keiichi se encontraba sollozando con mucha fuerza...la historia era triste...bastante y el sufrimiento de Haruhiko parecía sentirlo...sin embargo lo que a él le dolía más era el hecho de que el que pensaba que era solo SU Haruhiko...estaba enamorado de alguien más...y él no le hacía ni sombra al amor que sentía por aquel doncel...y el tener que ceder algo que el atesoraba con tanto cariño...le dolía en el corazón...

    -...¿y...tu aun le amas?...-exclamó entre hipos el menor, mirando con sus ojos esperanzados al oji-gris, quien le sonrió tiernamente y asintió...

    -mucho...jamás le dejaré de amar...pase lo que pase...me prometí volver a recordarle cuanto le amo- exclamó con sinceridad...Keiichi bajó la cabeza...ya no había esperanza para él...

    -yo...Haruhiko...-“vete”...trato de decirle...pero sintió como el mayor le levantaba el rostro...y le dedicaba otra linda sonrisa...y no pudo negarse a hacerle caso...haría cuanto pudiera para hacerle feliz...aunque se deshiciera por completo su corazón...

    -déjame contarte el resto de la historia...Keiichi- pidió el mayor, observando como el menor negaba fervientemente.

    -no...no por favor...-pidió intentando que el mayor soltara sus manos. Haruhiko sabía que estaba haciendo sufrir mucho a su niño...pero consideraba que era la mejor manera...por eso no se rindió. Se paró de donde estaba sentado en la cama de Keiichi y se sentó atrás de él...haciendo que este muy sonrojado, se recargara en su pecho.

    -Ha...Haruhiko...¿qué haces...?- exclamó con vergüenza.

    -terminaré de contarte...-exclamó seguro, Keiichi, no tanto, asintió....sintiendo que sus lágrimas no pararían de salir en un buen tiempo.

    -No le vi por mucho tiempo, ignorando totalmente que el sufría tanto, o más que yo...Hasta que un día me enteré, tardíamente, primero, de que él se había hecho amigo de quien sería mi prometido- exclamaba señalando las cosas con sus dedos. Keiichi había abierto la boca con bastante sorpresa...ese doncel debía ser demasiado bondadoso, valiente e increíble...- y segundo, que ellos dos, entre otras personas...habían buscado acabar por su cuenta con los “problemas” que aquejaban a mi familia; yo en cambio fui un cobarde todo ese tiempo...no había hecho nada por recuperarlo...en cambio él...él...luchó tanto...- exclamaba casi derrumbándose y eso lo notó Keiichi, quien con un sonrisa triste apretó los brazos del oji-gris...dándole las fuerzas que necesitaba...no quería verle llorar...

    -no digas eso...tu debiste luchar contra tus propios problemas...- consolaba el menor...

    -no es nada comparado con lo que él hizo...-

    -¿hizo?... ¿por qué hablas en pasado?... acaso...- exclamaba asustado y sorprendido el menor.

    -no- sonrió el mayor- gracias a Kami...no...él está perfectamente bien...pero gracias a mi estupidez le he hecho sufrir y llorar de nuevo-...exclamó con una mirada significativa a la menor...quien sentía un nudo en la garganta...Haruhiko ya se había puesto de nuevo frente a él...

    -... ¿por qué dices...eso?- preguntó casi nervioso el menor...mirando fijamente los orbes grisáceos...

    -un día...-continuó con su relato el mayor -...me enteré de lo que sucedía y sentí que algo malo le pasaba...con algo de ayuda...pude llegar a éste él...pero...-

    -pero... ¿qué pasaba?-...exclamó casi desesperado Keiichi...su corazón estaba latiendo con mucha fuerza...y no sabía la razón.

    -lo encontré en muy malas condiciones...lo llevé a un lugar seguro...lo cuidé tanto como pude...arrepentido por haber sido tan estúpido...soñando solo con ver sus hermosos ojos abrirse y pedirle perdón hasta mi muerte- exclamaba dolido...Keiichi había empezado a llorar de nueva cuenta junto al mayor-...pero la vida me cobró todo el daño que le había hecho...y me castigó lo suficientemente cruel...-

    -... ¿por qué...?- logró preguntar este sollozos el menor....

    -por qué...por qué...él...perdió la memoria...y me olvidó...- exclamó totalmente devastado...Keiichi había escuchado todo hasta el final con sus ojos desbordantes de lágrimas... y sin decir nada más se aventó hacia su amor...y lo envolvió entre su brazos...consolándole...sintiéndose también estúpido...casi ríe tontamente...¡maldita sea estaba celoso de él mismo!...

    -perdóname...perdóname Keiichi...te amo tanto...-susurraba el mayor con tristeza. Keiichi puso sus manos en las mejillas llenas de lágrimas de Haruhiko y besó su frente tiernamente...con sus mejillas sonrojadas...

    -no hay nada que perdonar...yo también te amo...-exclamó con unas sonrisa...Haruhiko observó como el menor recargaba su cabeza en su hombro...intentando abrazarlo...pero pudo darse cuenta que tenía sus ojos fuertemente cerrados...

    -Keiichi....- le llamó preocupado....pero el menor no reaccionaba y había empezado a temblar entre sus brazos...-¡KEIICHI!- gritó desesperado al sentir que el muchachito se había desmayado en sus brazos...-¡ayuda!...¡MANAMI!...-gritaba a diestra y siniestra....tratando de acomodar el menor en la cama...-¡MANAMI MALDITA SEA!- gritaba loco de preocupación...

    -¡¿nii-san?!...¡¿Qué pasó?...- llegaba corriendo la muchachita de cabellos castaños, observando a Keiichi laxo en la cama con una cara de dolor....-¡KEIICHI!-

    -¡¡Manami ve por tía Asuka...dile que vayan por el médico!!....-exclamaba el menor tirándose a los pies de la cama de su amor... una vez más, la castaña había salido corriendo de la habitación. Haruhiko se hincó besando una de las manos de su amor...

    -...no me dejes...perdóname por hacerte sufrir tanto...no te merezco, pero...ya no soy capaz de alejarme de ti-...murmuraba con pena, mientras escuchaba como pasos apresurados corrían hacia la habitación de su Keiichi...

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    Los ojos avellana se abrieron con lentitud, recordando que estaba acostado sobre el verde pasto que crecía cerca de la cascada en el río, bajo la cual estaba Ayami. Así es, estaban en la superficie. Hiroki cerró por unos segundos más los ojos sintiendo esa preciada paz que hace tanto que no saboreaba y que tanto necesitaba. Suspiro el aire que traía el tenue aroma de las florecillas que crecían en esa zona y su piel sintió la tibia caricia del sol y la fresca brisa del viento de media tarde. Si, ya extrañaba aquello.

    -Hiro...san, se hace tarde, ¿aún no tienes hambre?- preguntó con un gesto cariñoso. Hiroki abrió sus ojos encontrándose con los azules de Nowaki mirando casi con devoción mientras acariciaba suavemente una de sus mejillas, ahora recordaba que se había quedado dormido en las piernas de su tifón.

    Aquella mañana había amanecido con unas tremendas ganas de volverá pisar la tierra firme...y dado que el hechizo que los mantenía en el agua ya no estaba no era impedimento alguno ir a dar un “paseo”...obviamente el oji-azul estaría más que dispuesto a cumplí su pequeño “capricho”...no contaban con que el pequeño Suki se les pegara como calcomanía...y los 3 salieron a recorrer esos paisajes tan añorados por el castaño...ambos azabaches miraban con alegría todo...y el menor...que prácticamente no recordaba haber tocado tierra nunca, pues desde que era un bebé había vivido como tritón , brincaba y corría por todos lados probando las “nuevas extremidades” que le había dado Nowaki...Hiroki miraba con gracias como el niño con sus nuevas “piernas” recorría eufórico todo. Habían pasado la hora del almuerzo ahí comiendo solo algunas frutas que encontraron en los arboles...y después de tanta conmoción ambos donceles se habían quedado dormidos...el mayor recargando su cabeza en sus piernas y el pequeño Suki sobre el hombro del oji-azul...

    -espera...solo un poco- murmuró el castaño disfrutando un poco más el paisaje-ok ...vamos...Suki ha de estar agotado- sonrió casi sin darse cuenta al ver la niño aun durmiendo sobre Nowaki. Escuchó la risa del oji-azul.

    -¿de qué te ríes?- preguntó algo enfurruñado Hiroki, poniéndose de pie con los brazos cruzados.

    -de nada Hiroki-san...- exclamó aun con una sonrisa graciosa en su rostro, mientras tomaba al niño en sus brazos y se ponía de pie- es solo que has estado mas “tierno” que de costumbre...Suki también ha notado que lo sobreproteges demasiado...- le miró con gracias. Hiroki enrojeció de inmediato dibujando un puchero en su rostro.

    -¡n-no es cierto!- exclamó el castaño- son tonterías de ustedes...- exclamó Hiroki tratando de negar lo innegable...porque sabía que era cierto...¡pero no podía evitarlo!...pensó avergonzado...

    -jejeje, no te enojes Hiro-san...supongo que es normal...¿no?- exclamó dando una leve mirada al vientre del castaño, que no pudo evitar posar una mano allí, sintiendo la tranquilizante calidez que de ahí emanaba-...te amo...los amo...-susurró el tritón al oído del castaño, causándole un no-desagradable escalofrió...seguido de un pequeño beso en el cuello...

    -juumm...idiota- murmuró Hiroki sonrojado tallándose con suavidad donde le otro había dejado el beso. Mirando como Nowaki se adelantaba un poco con Suki en brazos hacia el río para poder regresar a Ayami-...yo también...-sonrió...mientras recordaba el terriblemente incomodo, asfixiante y vergonzoso dialogo que tuvieron con Hisa-sama esa mañana...pues fuera como fuera...era la madre de Nowaki...y pues sería...abuela

    //Flash-Back//

    Aquella noche Nowaki se había negado a irse y para “desgracia” del castaño este se había quedado con él toda la noche, velando sus sueños. A la mañana siguiente habían decidido, algo nerviosos, que como primer tarea tenían que dar la noticia a la “futura abuela”...Hiroki recordaba como en aquello momentos en los que estaba justo enfrente de la monarca de gran sonrisa y cabello azulados temblaba como una gelatina por los nervios...

    -buenos días cariño, Hiro-chan... ¿sucede algo, chicos?- había preguntado la hermosa mujer con una curiosa sonrisa. Mirando a uno intercaladamente, notando el ligero nerviosismo y euforia en uno, y el casi pavor y ligera emoción en el otro.

    -buen día madre- exclamó el azabache dando una ligera reverencia.

    -b-buenos días Hisa-san- saludó de igual manera Hiroki. La reina dirigió su vista al doncel quien tenía sus manos cruzadas hacía enfrente.

    -¿hay algo que quieran decirme?- preguntó extrañada por el silencio tan largo en la extraña conversación.

    -bueno...si...Hiro-san y yo queríamos hablarte de algo muy importante- exclamo el menor con una sonrisa....recalcando el “muy”...y eso le había dado mas curiosidad a la monarca.

    -pues los escuchó chicos...esto, ¿les importa si hablamos mientras damos el recorrido de la mañana al reino?- preguntó suavemente, los otros dos negaron- ok... ¿qué es eso tan importante que tenían que decirme?- preguntaba ella mientras los 3 nadaban recorriendo los caminos en el colorido reino. Ambos chicos tomados de la mano, captando las miradas tiernas de quien les miraba y se detenían saludar a “la nobleza”...

    -pues...-había empezado Hiroki, Nowaki le miró y le sonrió mientras apretaba ligeramente la mano que seguía sujetada... ¡rayos!...-esto...-

    -bueno, madre, lo que Hiro-san quería decirte es que...-Nowaki al ver que su castaño iba a explotar muy pronto por lo rojo que estaba decidió hablar el, pero no se esperó que fuera el castaño quien le interrumpiera...

    -será abuela...-

    Hisa había volteado a ver al castaño casi de inmediato y fijamente con los ojos bien abiertos... Hiroki se atrevió a mirarla al fin observando como una sonrisa aparecía de poco a poco en su rostro...

    -¡¿en serio...Nowaki , cielo...Hiro-chan?!...¡¿estás embarazado?!-preguntó emocionada, tomando las manos del castaño, zarandeándolo un poco.

    -s-si...es verdad...mire- exclamó todo avergonzado Hiroki mostrando un poco la estrella que adornaba su vientre, a la mujer casi se le asomaban por los ojos las lágrimas de la felicidad...

    -¡seré abuela!- gritó la mujer dando una revoloteó rápido para después lanzarse a los dos para abrazarle- ¡mucha felicidades chicos!...estoy muy feliz por ustedes....¿solo eso les preocupaba decirme?...¡vamos es una maravilla!- Hiroki sonrió algo apenado y Nowaki le miró con una sonrisa de “te lo dije”...

    -esto...gracias...¿esto no le parece algo..umm...apresurado?- preguntó con un sonrojo en sus mejillas el oji-avellana.

    -¡por supuesto que no cariño! ¡Un bebé nunca llega en mal momento!- exclamó la mujer irradiando felicidad por los poros. Los 3 ya regresaba al palacio- aun así...-volteó a ver a su hijo- Nowaki... ¿de cuánto tiempo crees que esté?...si fue de la primera vez...pues ¡ho por Kami!, ¡mi hijo tiene muy buenos genes!- exclamó quitada de la pena gritando todo en los pasillos del castillo.

    -¡mamá!, ¡Hisa-san!- exclamaban ambos enamorados visiblemente avergonzados, Hiroki colorado hasta las orejas.

    -¡¿Qué?!...¡si es cierto!...y pues si no lo es...¡Hiro-chan...es bastante fértil, muy pronto tendré muchos nietos que consentir!-

    -¡MAMÁ!¡HISA-SAN!...-

    -¡¿qué?!-

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    //Fin Flash-Back//

    Hiroki regresó a ver levemente hacia atrás, al escuchar unos pasos acercarse. Hace unos minutos Nowaki había venido a dejarle y después se fue con Suki aun en brazos para ir a acostarle.

    -¿se ha despertado en el camino?- preguntó con simpleza Hiroki sin ponerse mucha atención, obviamente refiriéndose al pequeño. El menor rio un poco, y muy pronto tuvo a su castaño abrazándole por detrás.

    -para nada, le he dejado tan dormido como la vista por última vez- le susurró con un poco de gracia al oído. Hiroki se sonrojó un poco, descubriéndose demasiado preocupado por su pequeño “cuñado”.

    -jumm- solo murmuró algo como un afirmativo. Nowaki depositó un pequeño beso en el cuello del menor rozando su nariz en el proceso, sonriendo casi de forma traviesa al sentir casi de inmediato como su castaño se estremecía en sus brazos. Hiroki había dejado de hacer lo que estaba haciendo y solo permanecía ahí de pie, sintiendo los brazos de su tifón a su alrededor.

    -gracias por preocuparte por mi familia...Hiro-san- murmuró el menor contento recargando su frente en el la espalda del oji-ovellana ; este sonrió de lado...y después sus mejillas adoptaron un adorable carmín.

    -¡hey!- se quejó fingiendo molestia- ...que dentro de poco será mi familia también...-exclamó lo último en casi un murmullo. Nowaki se sorprendió un poco sonriendo y después lo volteó hacia el para poder ver su rostro regalándole un corto pero apasionado beso en los labios.

    -es verdad...-exclamo Nowaki pegando más el cuerpo de su amado al suyo, empezando a besar con avidez a su castaño acariciando la cintura y a espalda de este, quien no había hecho nada por deshacer el contacto recargando ambas manos en el pecho del más alto y cerrando sus ojos...

    -espera...Nowaki- pidió el mayor al sentir como el otro lo había tirado a la cama, poniéndose sobre el repartiendo besitos tiernos por todo su rostro, mientras su manos hacia tanto que viajaban por debajo de su camisa...acariciándole.

    -hoy no...Hiro-san- exclamó con voz tenue Nowaki haciendo caso omiso de la “petición”...sus labios acariciaban con premura los del castaño y de vez en cuando encontrándose con su húmeda lengua. Muy pronto la boca del menor se concentró en el blanquecino cuello de Hiroki besándolo y lamiéndolo...escuchando al fin los tímidos suspiros de su amor. Sonrió.

    -Hiro-san...te amo...- Hiroki había escuchado bastantes veces esa frase por parte de su tifón, sin embargo por alguna razón seguían teniendo el mismo efecto...y su corazón se aceleraba, mandando bastante sangre a su rostro para que se coloreara una vez más de rojo...- te amo...-

    Nowaki supo que Hiroki había dado su “aprobación” cuando sintió los delgados dedos de sus manos enredarse en su cabello...

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    Aquella feliz pareja se encontraba ahora en el balcón de la habitación del mayor. Ambos admiraban los altos árboles que adornaban las afueras de la bien parecida mansión. Al juzgar por la oscuridad del cielo sería poco más de media noche, por lo que solo se escuchaba el crujir de los árboles secos y el viento helado...El oji- turquesa estaba seguro que en muy poco tiempo nevaría...

    -¿estás seguro?- preocupado preguntó casi por quinta vez Tsumori, mientras abrazaba por detrás el esbelto cuerpo de su hermoso doncel. Este no despegó sus hermosos ojos del cielo oscuro ni perdía la calma, respiró un par de veces más antes de responder...

    -ya te dije que si...-murmuró con vos suave, regresando a ver a su novio hacia atrás- ahora más que nunca...es lo mejor para todos-

    -Mason, no quiere que te arriesgues... ¡no quiero que se arriesguen!- exclamaba el mayor apretando inconscientemente el cuerpo del otro, quien cerró un poco los ojos...el frío empezaba a entrar a su cuerpo, pues tenía su bata de magia completamente abierta dejando ver parte de su pecho y estomago...

    -estaremos bien, es algo que tenemos que hacer...tarde o temprano va a suceder, mejor que sea ahora...no quiero que salga lastimado nadie...- exclamó con voz segura- además...no sucederá nada malo...estarás allí...¿no?- susurró con una sonrisa. Tsumori asintió, aun no tan seguro, volteó el cuerpo de su amado y le regaló un beso.

    -los protegeré, es seguro; entiendo eso... lo que no comprendo es...¡¿por qué tiene que ser justo en la guerra contra Aikawa?!- expresó estresado.

    -tiene que ser así, aun soy el líder de la magia, por si no lo recordabas, tengo que mantener el orden...y hacer que no se pierda el respeto que me tienen todos, sin embargo es importante también para mí, saber que tanta aceptación tienen conmigo...por eso necesito continuar con todo esto de la manera correcta...o en su defecto dejar esto hasta aquí, buscar a alguien que me remplace e irnos...pero no quiero dejar todo a medias- expresó Mason con un rostro sereno pero bastante decidido. Tsumori fijo sus ojos mieles en su doncel y asintió rendido- ahora más que nunca...quiero garantizar su seguridad...- finalizó, ambos con mirada cómplice dirigieron su vista hasta el estómago “aun” blanco y plano del azabache...

    -yo solo quiero que estén a salvo...-murmuró el rubio abrazando contra su pecho al menor, este correspondió el abrazo- tú...y el bebé...-

    -lo sé...-exclamó Mason con sus mejillas levemente sonrojadas- ¡yo también!, por eso...tenemos que hacer esto...yo quiero demostrarte que puedo cambiar...y que lo voy a hacer por los dos...- murmuró el menor. Tsumori asintió y lo besó apasionadamente tomándolo por la cintura.

    -estaré ahí para ustedes...- exclamo con media sonrisa. El azabache sonrió y observó con gracia como su novio se agachaba hasta quedar a la altura de su vientre, acariciándolo y repartiendo uno que otro besito. Puso una sonrisa boba al recordar lo feliz que se puso al enterarse hace algunos días sobre su embarazo...y recordó también como el...Masón, el mago más fuerte, más...etc., etc., etc., se había desmayado nada mas haber visto la pequeña estrellita adornar su vientre. Después de recordar con lujo de detalle todo el supuesto “castigo” de Tsumori los porqués le habían salido sobrando...ahora solo quedaba algo por resolver...

    -¿entonces qué se hará primero?- preguntó Tsumori interrumpiendo sus pensamientos y poniéndose de nuevamente frente a él, sin dejar de abrazarlo.

    -mañana habrá nuevas reglas...ya verás...cambiarán bastantes cosas aquí...- exclamó con una sonrisilla traviesa...Tsumori se la regresó...

    -¿ha sí?... ¿cómo cuáles?- preguntó siguiéndole el juego...

    -bastantes...cariño- dijo el otro besándolo suavemente- he cogido frio...vamos adentró...-murmuró contra le oído del mayor, quien esbozó una perfecta sonrisa de lado.

    -como digas...- susurró el rubio tomándolo de las caderas, haciendo que el oji- turquesa enredara su piernas en la cintura...

    ........

    Y Mason estaba en lo correcto, pues “las cosas cambiarían”...y no tan solo para el mundo mágico...sino para todos...los humanos avaros entrarían en guerra por dinero, poder y territorios...y faltaba tan solo un día para la guerra más esperada entre usuarios de la magia diera comienzo...

    .
    .
    .

    Continuará...
  2. .
    waa¡¡¡¡¡ no , no¡¡¡¡ Mely...MELY¡¡¡, por que le haces esto a mi débil corazón?¡¡¡ xDD
    ya se me hacia extraño que Haruhiko no hubiera aparecido antes¡¡¡
    pero que nervios, que tendrá planeado hacer ese con mi Hiroki?¡¡¡

    Por otra parte me alegra bastante que ya hayan podido aclarar las cosas con Tsumori
    eso está bien :), necesito saber que va a pasar Mely¡...el drama me encanta...pero
    soy bastante nerviosa como para esperar pacientemente xD....

    Espero conty¡

    Besos de Mango¡¡ :D

    Misagi * *
  3. .
    oye que buen capitulo¡¡
    me ha encantado¡, que bien que Chris se haya decidido al fin por borrar
    todo el recuerdo de esa mujer. Que lindo que se porto con Castiel¡¡¡ <3
    Me encanta¡...
    Espero paciente la continuación¡

    Salu2
  4. .
    Hola ,¿cómo están?, yo acá empezando con lo que serán mi semana de “vacaciones” si es que se puede decir así...<.<...tengo chorromil ensayos que escribir para el de dentro de 8 días...peeero en fin...:P, dejo de contarles mi drama y les dejo este cap...y pues bueno veremos bastante sentimentalismo aquí...y también un poco de drama...pues bien....muchas gracias por seguir mi fic...mi les quiere muuucho¡¡ :3, respondo sus comentarios abajito :P...


    Romantica_1: hola!, gracias por comentar...me alegra bastante que te vaya gustando como va mi historia.. jajaja...si mira que el embarazo de hiroki lo tengo casi soñado jajaja...ya verás lo que se avecina con el caso de su casamiento¡, ummm...pues lo de la guerra traerá consecuencias¡¡¡....pero ya las sabrás después xD...espero te guste la conty...besos de mandarina¡¡¡

    Melyoan: hola Mely :D, me alegra haberte hecho feliz tu día xD, sii, ya planeaba algo más de drama...ya vez que al parecer yo no puedo escribir un fic corto u.uU....xD, si la guerra traerá bastantes consecuencias...al igual que algo que pasa en Sumi en este capítulo¡, el embarazo de Hiroki será algo complejo también...espero que el nivel de drama que viene sea “bueno” xD, gracias por comentar, espero te guste la conty, besos de fresas con crema :P¡¡...

    FerNia-Chan: hola¡, cómo estás?, gracias por tomarte el tiempo de leer y comentar mi fic, espero te guste, te dejo la conty, besos de fresa¡

    Anne onodera takano: holita¡¡¡, gracias por comentar, me alegra que te haya encantado el capítulo, si el apoyo de los padres de Haruhiko será bastante importante...porque se viene una etapa difícil para la mayoría de los personajes, espero te guste la nueva conty, besos de manzana¡¡


    Misagi * *







    Capítulo 27:”Él está enamorado...”





    Ya había perdido la noción del tiempo. Y no recordaba con exactitud cuánto hace que se había despegado al fin del espejo en el que se miraba y se había metido a la cama, sentándose en pose de meditar, con la sábana cubriéndole completamente...lo cual le daba un aspecto por demás tierno. La verdad era que ya no tenía mente para pensar que le diría a su peli azul...o más bien...”cómo” le contaría la noticia...

    Abrió los ojos, encontrándose con el peli-azul frente de él...mirándole curiosamente.

    -¿sucede algo Hiro-san?...- escuchó la voz como un eco. Hiroki se desesperó un poco, sintiendo como su corazón latía desenfrenado y sus lágrimas no le permitían ver bien.

    -yo...tengo que decirte algo muy importante...-exclamó tratando de verse tan orgulloso e implacable como siempre...sin embargo su aspecto no logró el cometido.

    -pues dime...te escuchó- exclamó con una sonrisa el peliazul tomando sus manos, lo cual logró calmar los nervios del mayor.

    -de cuerdo...yo...yo...estoy...¡estoy embarazado!...-exclamó con sus mejillas sonrojadas, mientras cerraba sus ojos con mucha fuerza. Sin embargo sus ojos se abrieron cuando sintió como las manos del oji-azul abandonaron las suyas, alejándose de él de inmediato.

    -¡¿qué?!- exclamó el menor levantándose de la cama, donde hace un rato estaba sentado. El oji-azul se había llevado las manos a la cabeza- ¡¿Qué dijiste?!- exclamó con el ceño fruncido...un gesto que Hiroki no había visto en él...y eso lo asustó por lo que llevó sus manos a su vientre por puro instinto.

    -e-estoy embarazado Nowaki...tendremos un bebé, yo pensé que...- exclamó lloroso, sintiendo como las esperanzas de su amor “eterno” se desvanecían ante sus ojos.

    -¡¿tendremos?!...ho no cariño...¡tendrás!...¿acaso crees que yo necesito un bebé ahora?...¡claro que no!- exclamaba con desdén. El castaño negaba con la cabeza totalmente sorprendido y exaltado por la actitud de su amoroso tritón...él no podría estar hablando en serio...¿verdad?...-¡maldita sea!...¡¿qué dirá mi madre?!...¿te has puesto a pensar?...soy el responsable de este reino...¡yo no puedo estar atado a ESTO!- exclamó frustrado. Hiroki aun con los ojos llorosos y su corazón destrozado se levantó de la cama en la que había estado y frunciendo el ceño se paró a la altura del tritón.

    -veo que tu supuesto amor era puro engaño...pero no importa...créeme que te superaré pronto- exclamó con lágrimas en los ojos - seré fuerte por MI hijo...¡y entérate que no necesito nada de ti!...¡ahora es más...sácame a la superficie!...¡ he salvado tu maldito reino ya, no me necesitas para nada más!...¡ me largo he dicho!...¡jamás nos volverás ver!...eso tenlo por seguro- exclama con rabia...

    -¡haz lo que quieras!...como si me importará- exclamó el azabache chasqueando la lengua...

    Sin embargo Hiroki había empezado a hiperventilar demás...y sus hipos eran bastante sonoros...sus lágrimas opacaron casi toda su vista...sintiendo que se desmayaría allí mismo...

    -san...-

    -iro...-

    -¡HIRO-SAN!...-

    Hiroki abrió los ojos totalmente alterado y con temblores en todo su cuerpo. Se cubrió sus ojos totalmente humedecido de lágrimas...sintiéndose parcialmente aliviado...todo aquello había sido un sueño...uno bastante cruel...fue hasta entonces que recordó la voz que le hablaba hace unos segundos...y se destapó el rostro solamente para verle con la cara de preocupación más dolorosa que había visto en su vida...tanto que observó cómo los brillantes ojos azules casi derramaban lágrimas.

    -¡Hiro-san!..¿Qué sucede?, dime por favor... ¡¿te sientes mal?!- cuestionaba con preocupación tratando de esconder su miedo en un tono tierno. Hiroki sonrió...esta paranoia lo estaba llevando a pensar-soñar cosas muy raras...el idiota que estaba frente a él lo amaba tanto como él...claro que no siempre lo admitiría tan fácilmente.

    -estoy bien ¡baka!...no hagas escándalo por nada...-exclamó con un puchero y un sonrojo murmurando con la cabeza gacha...el menor ya se encontraba frente a él...ambos sentados con las piernas dobladas en la cama...- solo...por ahora...¿podría pedirte un abrazo?...- exclamó casi como un murmullo. Nowaki abrió los ojos sorprendido...¿que había pasado con su pequeño “demonio”?...estaba seguro que de poder haber visto el rostro del mayor estaría muy rojo; sin embargo no se lo negó y lo estrechó en su pecho...tan fuerte...que pudo sentir la calidez de su castaño recorrer todo su cuerpo...se quedaron por bastante tiempo así...

    -Hiro-san...te amo demasiado...-hablaba así el menor, cuando tomando desprevenido al otro lo terminó de recostar en la cama y el colocó sobre el castaño, que apenas y pudo notar el movimiento, sin embargo un gemido involuntario salió de su labios al sentir la mano del otro recorrer su pecho...Nowaki ladeó su cabeza...sonriendo ante el “ruidito” que emanó de su oji-avellano...-¿Qué fue eso...?- preguntó pícaro a su novio...Hiroki se sonrojó fuertemente.

    -c-cállate...- exclamó enfurruñado, escuchando las cortas suaves risas del tritón, quien se había lanzado por sus labios y apresando sus mejillas entre sus manos. Hiroki no negó para nada el beso...¡y lo odiaba!...porque desde hace un tiempo se le había hecho ¡imposible! Negar las “atenciones” de su tritón...- Hiro-san...-murmuró contra los labios contrario...

    -Nowaki...- murmuraba como gemido Hiroki al sentir una de las traviesas manos de su tifón levantar un poco el camisón que estaba vistiendo...y entonces sus ojos se abrieron en su totalidad...-¡ESPERA!...- casi lo grita...lo que dejó bastante sorprendió al menor, quien se detuvo de inmediato...mirando curioso a su amor- solo...un poco- exclamó sonrojado el castaño desviando levemente la mirada...-

    Nowaki cada vez entendía menos...


    -¿qué sucede?, ¿Hiro-san...?- preguntó comenzando a preocuparse...había dejado lo anterior por la paz...pensando que era una simple “pesadilla”...¿acaso era algo...más grande?...-¿tiene que ver con tu sueño?-...preguntó curioso... Hiroki bajó la mirada un poco, tomó una gran bocanada de aire y se volvió a sentar en la cama para explicar mejor aquello...

    -yo...-

    -si...-animó el azabache poniendo atención a lo que diría su amor.

    -yo...yo ,Nowaki...hoy me di cuenta de algo muy importante...algo que vendría a hacer bastantes cambios por aquí...-exclamaba Hiroki algo ansioso y nervioso...sin saber bien que decir, sus mejillas empezaban a tornarse coloradas- algo que si estás dispuesto a compartir conmigo nos sacarán bastantes preocupaciones, atenciones...tal vez enojos...pero la mayoría del tiempo bastantes alegrías, emociones y risas. Algo a lo que personalmente, yo no me imaginaba ni en sueños...y algo que en estas circunstancias es algo...esto...¿presuroso, espontaneo...?- exclamaba cada vez más nervioso y sonrojado. Nowaki entendía menos...pero su sonrisa apareció cuando al fin empezaba a enlazar toda esas ideas...-...algo que ocupará bastante atención de nosotros... y que tendrás que cuidar más que a tu vida misma...algo...que proteger y que amar...y ...y...-

    El oji-azul había interrumpido el incesante hipeo que no dejaba hablar al lloroso castaño, y abrazándole con mucha fuerza lo atrajo hacia él recorriendo todo su rostro con tierno besitos...secando las lágrimas del castaño...

    -Hiro-san...tú...-exclamó todo emocionado el azabache sin soltar aun tembloroso castaño, quien miraba con la más pura sinceridad al tritón que estaba más que sonriente...

    -estoy embarazado...-murmuró contra el cuello del menor. Este le levantó el rostro como para comprobar la respuesta en los ojos avellano...y la encontró...

    -¡por Kami...Hiro-san!...¡soy el ser más feliz del planeta en este momento!- exclamó con alegría...que sorprendió un poco a Hiroki, pero correspondió el abrazo y el beso que le entregaba su amor, dejándose envolver por esa algarabía- te amo Hiro-san...¡gracias por este hermoso regalo!...-si...Hiroki sonrió...¿cómo podría haber pensado que su azabache no le agradara la idea?...

    -te hizo feliz la noticia...-murmuró Hiroki contra los labios del otro, sintiendo su rostro sonrojado...

    -¡bastante!...estoy muy feliz...¿sabes?...desde que murió papá había sentido a mi familia...algo incompleta...¡ahora me siento más feliz y lleno que nunca- exclamaba feliz...Hiroki sonrió...no lo admitirá jamás...pero el encantaba ver a ese idiota sonreír...sin embargo esa sonrisa se opacó un poco.

    -aunque aún queda un pendiente por resolver...-exclamó Hiroki , Nowaki adivinó que sería el asunto de “quien se quedaría en que reino”...sin embargo el tritón sonrió...y esa sonrisa calmó bastante al castaño.

    -no te preocupes por algo así...Hiro-san...No me importa nada más que estar a tu lado...tú...y este bebé...el fruto de nuestro amor...-hablaba así el azabache, tocando por primera vez el vientre de un sonrojado Hiroki...-¿puedo?...-preguntó señalando la prenda que cubría su abdomen...el castaño asintió...

    -hazlo...es tuyo también- sonrió...Nowaki lo miró a los ojos por unos segundos robándole un besito de los labios...y después su pupilas azules se concentraron en la estrellita que adornaba el vientre de su Hiro-san...era hermosa...y sin poder evitarlo bajó su rostro hacía allí depositando un besitos en el azulado tatuaje...sintiendo al mismo tiempo como la piel blanca de su castaño se estremecía...sonrió coqueto...claro...”la sensibilidad”

    -Hiro-san...yo ya había pensado un poco sobre la solución- Decía Nowaki con una sonrisa...recargando levemente su cabeza en el estómago de su amor...quien le prestaba atención...- pero ahora más que nunca...creo que es lo correcto...- pausó un poco y siguió hablando-...después de la guerra con Aikawa...que será en dos días...volveremos a Ayami, descansaremos algunos días y partiremos a tu reino...-

    -¡¿qué?!- exclamó Hiroki sorprendido...pero no se permitió sorprenderse por lo último- espera un momento dijiste “partiremos”...ósea...¿los dos?- exclamó sonrojado...eso se lo veía venir...y no le desagradaba para nada...

    -por su puesto...- hablaba el mago, al fin despegándose del lugar en donde “reposaba” su bebito...-después de todo...necesito hablar con tus padres...y pedir formalmente tu mano- exclamó con una sonrisa besando las manos de su oji-avelleno...este se había quedado sorprendido, mirando la seguridad de Nowaki...

    -Nowaki...tú...-

    -si...ahora más que nunca.. Hiro-san...¡cásate con migo!...- El castaño observaba la suplicante mirada y la coqueta sonrisa de su tritón...pensando que si no amara demasiado ya a ese tonto seguro que lo terminaría de amar en ese momento...

    ****************************************************************

    Después de aquél momento a lado del lago, en el que ambos trataban de catalogar como “incorrecto”, todo aquello había vuelto a la absoluta normalidad. Shinobu había recurrido a velar a la luna toda la noche...quizás mirándola con recelo...como reprochándole algo que sabía bien la esfera luminosa no tenía la culpa...ya no había vuelto a dormir...mucho menos en brazos del azabache. Miyagi había regresado a los monótonos y casi molestos silencios, que Shinobu bien podría odiar...o al menos tratar de ignorar...pero aquello se estaba volviendo cada día más incómodo e insoportable...tanta era la treta aquella que un día el mayor pidió al rubio que cubriera su cuerpo...cuestionándole si no tenía pudor de estar “medio desnudo” frente a él...

    Los ojos grises del niño buscaban los oscuros del guerrero...cuidándose de que no le fuera a descubrir...y cuando este le regresaba a ver se hacía el tonto y miraba hacia otro lado. Miyagi miraba también al rubio a escondidas...adoraba ver a ese muchachito de piel tan blanca admirando y contemplando la blanca luna...e inconscientemente se perdía en la bella figura de Shinobu...admirando todos su encantos...todo de él...hasta su sombra le parecía bella...estaba delirando...

    Habían pasado varios días ya, y tan solo faltaban 2 escasos días para la guerra con Aikawa. Shinobu cada vez parecía más deprimido, lo extraño era que Miyagi lo notaba cada vez más sonriente...y eso destrozaba el corazón del mayor...por qué significaba que el chiquillo estaba esforzándose por no causarle pesar...por fingir que estaba feliz cuando en verdad se desmoronaba poco a poquito desde adentro...Él se daba cuenta por que observaba como el rubio le profesaba un cariño “diferente” y como se desvivía por sonreírle y tranquilizarle mientras sabía que en cualquier momento podría ponerse a llorar como un bebé por su desgracia, desgracia que era nada más su culpa...

    Aquella tarde, el menor había permanecido caminando sin aparente rumbo por todo el pastizal que estaba enfrente de la cueva...quizás pensando...quizás consolándose a sí mismo...Miyagi no quería que Shinobu permaneciera como dragón por tanto tiempo...solo...triste. Cuando la tarde al fin se ocultó en el manto oscuro de estrellas brillantes...había tomado una decisión...le haría Miyagi una pequeña proposición...y aunque la sola idea le despertaba bastante temor, vergüenza y bastante pudor también...y en si no conocía sobre esos temas no pensaba echarse para atrás ahora...y con pasos tambaleantes...cual alcohólico en plena fiesta, se levantó de la roca en donde descansaba y entró a la cueva a paso lento hasta donde se encontraba el mayor...con la mirada perdida...sus ojos grises captaron la atención inmediata del hombre, quien le miró casi con añoranza...

    -¿s-sucede algo...Shinobu?-escuchó que Miyagi le preguntó así, pronunciando su nombre con tanta suavidad que le enojaba...pues quizás inconscientemente, o eso pensaba él, el mayor alimentaba más su amor por él. Miyagi, mientras tanto permanecía atento al niño, que hace un buen tiempo por cierto que no le hablaba demasiado, escudriñando la mirada clara...tratando de encontrar el porqué de aquel acercamiento.

    -...faltan solo dos días para la guerra...uno y medio si recuerdas que tengo que “volar” hasta allá...- empezó el menor plantado ante al mayor, jugando nervioso con los dedos de sus manos y bajando el rostro...aquello le había parecido bastante sospechoso de su parte...

    -si...no lo he olvidado...Shinobu-chin... ¿pasa algo?- exclamó todavía extrañado...y por si acaso volvió a repetir la pregunta. Y sin embargo verlo tan indefenso y tembloroso le daban unas tremendas ganar de protegerlo para siempre...pero...él y su estúpido...

    -quiero...pedirte un favor antes de todo esto pase...solo esto y si aceptas...no tendrás que venir nunca más acá... ¿sí?...- casi rogó con lágrimas en los ojos. Miyagi estaba sorprendido... ¿que podría ser tan importante para el chico como para que estuviera dispuesto a no verle para siempre...arriesgando a perder la compañía de alguien...

    -claro...si está en mis manos créeme que si...- respondió todavía tartamudeando, mirando hacia arriba al chiquillo, aun, pues él seguía sentado en el suelo...-pero no es necesario que renuncie a...-el azabache estaba por decirle que seguiría viéndole sin problemas...pero el rubio lo interrumpió...

    -...no creo que quieras hacerlo, si aceptas mi favor...-murmuró el niño bajando su rostro sonrojado. Ho ¡si, Shinobu sí que conocía el pudor, a pesar de las pocas vivencias que había tenido, sabía lo que era sentirse avergonzado por algo...y sabía discernir lo bueno de lo malo...tanto personalmente como para la sociedad...y lo que él quería iba contra algunas cuantas normas...pero su corazoncito...allí dentro de su pecho...no entendía razones y su cerebro ya no mandaba ideas congruentes para llevar a cabo su empresa...

    -pues... ¿qué quieres pedirme...?- preguntó extrañado el azabache asombradísimo.

    -solo...un poquito de cariño de tu parte...-murmuró el rubio...el caballero había abierto mucho los ojos impresionadísimo- quiero que al menos por esta noche...me dediques una sonrisa, una palabra...un beso...una caricia...yo no sé de esto...posiblemente me conozcas ya- siguió hablando con una sonrisa triste, lágrimas en los ojos y un bello sonrojo en sus rostro -...no tuve mamá ni nadie que me explicara este tipo de cosas cuando las necesitaba...alguna vez Risako intentó explicarme lo que es el amor...pero era un crío...y no sabía que cosas eran esas...ni me importaban...quizás piensas que son confusiones de un niño que no sabe de la vida...al cual se les has metido como un capricho en la cabeza...- suspiró largamente, al fin sentándose frente al pelinegro- ¡pero no es así!...aun no tengo claro ni lo que quiero pedirte...no sé sobre estas cosas...pero...mamá un día me dijo que solo se hacía con aquella persona con la cual estás dispuesto a recorrer cualquier camino sin importar dificultades...sintiendo que nada importa más...yo sé que no te quedarás aquí...no puedes...¡creme que lo sé!...por eso te pido este favor...h-hazme el amor...-murmuró todo rojo, Miyagi casi se mure en ese lugar por la sorpresa y no pudo evitarse sonrojar un poco también-...por favor...y te juro que ni mi hechizo eterno, ni estar convertido para toda la vida en un monstruo me importará...solo...por favor...-

    -Shinobu...esto...-tartamudeaba el mayor tratando de asimilar todo...sin embargo veía y sentí el dolor del rubio que lloraba a mares sin poder controlarse y hipear con su rostro sonrojado.

    -por favor...- rogó el rubio e manera lastimera...Miyagi tomaba de los hombros para evitar que el chiquillo se le encimara...tratando de abrazarlo...

    -Shinobu...no...-

    -¡por favor!... ¡¿por qué no quieres hacerlo?!....solo tienes que hacerlo y ya... ¡no te pediré más...joder!...- exclamó hipando el rubio...y eso destrozó al mayor...lo miró con tristeza...al ver cómo había desistido de abrazarle...él sonrió un poco...eso había sido una confesión....y él niño ni siquiera se había dado cuanta...había sido más valiente que él...sin embargo...todo eso no estaba bien...

    -Shinobu escucha...- trató de calmarlo, pero el otro simplemente renegó su toque...hundiendo su rostro entre sus piernas...abrazándose...había sido tan vergonzoso, había pensado tanto como decirle...y solo había pasado vergüenzas...

    -.,,soy un estúpido...-murmuró el rubio entre su llanto...ni si quiera para mendigar amor servía...Miyagi se sintió peor...no quería hacer llorar al muchacho...

    -no, no lo eres...-animaba el mayor...- Shinobu mírame...-

    -...-el niño negó la cabeza en su lugar....no le haría caso...

    -solo estás enamorado...y...yo siento que haya sido así...- exclamó el mayor resentido...

    -yo no...- escuchó de inmediato la respuesta del rubio. Sonrió.

    -esto no está bien...-

    -no me importa...yo te quiero...-exclamó emberrinchado...interrumpiendo al mayor, quien suspiró contento...ya veía venir eso...

    -lo sé...y yo también tengo que decirte algo, me temo...-exclamó serio mirando si había un cambio el menor- pero no te lo diré si no me miras y me pones atención...-exclamó con una sonrisa, al ver como el rubio con los ojos hinchados de llorar le miraba con atención- así es...-exclamó Miyagi acercando una de sus manos a los ojos del menor para limpiar sus lágrimas- ...así está mejor...sonríe para mí...-murmuró...lo que hizo que el niño se sonrojara sin remedio, avergonzado sacudiendo su cabeza en un gesto graciosos que hizo reír al mayor...

    -que es lo que vas a decirme...-preguntó con un puchero mirando hacia otro lado...

    -Shinobu...no voy a aceptar cumplir tu favor...-exclamó con un poco de seriedad, el menor lagrimeó de nuevo...se enteró que Miyagi seguía hablando- ...por qué no quiero que sea una obligación...yo no necesito un tiempo determinado, ni un lugar ni una fecha para demostrarte que...yo también te quiero...-exclamó con una sonrisa, la cual se le antojó perfecta al niño, quien sonreía incrédulo...

    -¿es verdad...?- preguntaba dudoso mirando los ojos negros de Miyagi.

    -claro que si ,no jugaría con eso...ha sido muy complicado para mi desprenderme de la idea de que aunque no dejas de ser un niño, eres un doncel de edad adolecente, que siente y necesita amor...eres un doncel muy hermoso...¿cómo no lograrías cautivarme?...- alagó...sonrojando al rubio-...perdón por hacerte esperar tanto...Shinobu...no me merezco tus lágrimas....deja de llorar...¿sí?- le habló con suavidad...Shinobu lloraba pero ahora de alegría...

    -Miyagi...-murmuraba con dicha limpiándose las lágrimas.

    -ven acá...-le habló el mayor con una sonrisa... y el rubio ni tardado se tiró a los brazos de su amado. Volviendo a sentir esa calidez que lo envolvía, esa tranquilidad y el masculino olor del azabache. Ambos se abrazaban y se miraban a los ojos...con sus rostros muy juntos...como esperando el momento...y al fin pasó...el mayor terminó por acortar la distancia entre sus bocas y un beso suave y sonoro resonó en aquella cueva...

    -Shinobu...quiero que entiendas que “hacer el amor”...es algo importante...y es algo que no se puede tomar a la ligera...para eso...habrá que esperar-el mayor hablaba al más pequeño...Quien se había sonrojado.

    -pero...pero...yo quiero...-murmuró muy bajito...Miyagi todavía podía notar la desesperación en su joven amor...y sonrió.

    -pero...Shinobu-chin, no sabes de esto...eres muy joven...y nuestra relación está comenzando- explicaba el mayor...Shinobu se había quedado divagando con felicidad en la palabra “relación”...

    -¡pero si ya nos conocemos!...además...tu puedes enseñarme...-murmuró con una sonrisa y sus mejillas rojas. Miyagi suspiró y tomó a su amor por la cintura...aprovechando que este se encontraba sentado en sus piernas...y le regaló otro beso en los labios.

    -¿estás seguro?...-exclamó hundiendo su rostro en el cuello del menor que suspiró un poco, al sentir la respiración cálida en ese lugar...

    -s-si...Miyagi...- murmuró el rubio cerrando sus ojitos con fuerza cuando sintió un besito del mayor en su cuello.

    -de acuerdo...te haré sentir bien...mi hermoso príncipe...si quieres que me detenga...dime y lo haré...- aseguró el mayor, Shinobu asintió contento, emocionado y avergonzado... ¡¿en serio Miyagi lo haría?!...

    -s-si...-

    El mayor se separó un poco de Shinobu admirando la belleza del niño que seguía sentado sobre sus piernas...le sonrió y acarició con ternura una de sus mejillas sonrojadas. Volvió a acercarse a él tomando de cuanta nueva esos rosados y suaves labios, y apretando sus cintura tratando de acercarle más a su cuerpo...

    -h-hay...- exclamó el rubio con un “terrible” estremecimiento cuando sintió las manos grandes y cálidas de su azabache acariciando su cintura y abdomen por debajo de la holgada camiseta dorada que vestía. Miyagi sonrió por la reacción del niño...más cuando recostó entre algunas mantas de pieles que estaban en el suelo...quedó prendado de inmediato de la carita sonrojada del rubio mirándolo con ternura y excitación...una extraña combinación...

    -... ¿qué pasa...Miyagi?...-cuestionó todo nervioso el menor, observado como los ojos negros de su amor lo recorría enterito...sintiendo vergüenza por la atención que le ponía...

    -nada...solo que eres bellísimo...-exclamó con una sonrisa...

    -baka... ¡no digas cosas vergonzosas!...-exclamaba el rubio, el mayor solo rio como respuesta y siguió con su labor...poco a poco se deshizo de la camiseta del niño...teniendo oportunidad para admirar una vez más ese blanco pecho adornado por los dos pedacitos de carne rosados...los acarició con las yemas de sus dedos sacando dulces jadeos de su niño...

    -ummm...Mi-mi..yagi...-gemía quedito el niño, sintiendo por primera vez lo que era el placer, como unas extrañas cosquillitas se acumulaban en su bajo vientre. Sintió como el mayor estaba de nueva cuenta su cuello , succionando trocitos de piel en ocasiones...sus dientes rozándole de vez en cuando...todo aquello le había hecho abrir su boca por los gimoteos y entrecerrar los ojos...sin embargo le daban vergüenza esos extraños sonidos que salían de su boca y por eso la cubrió con su mano...

    -no lo hagas, Shinobu-chin...quiero escucharte...- pidió el mayor, logrando que el menor, con bastante pena siguiera soltando esos “ruiditos”. Los besos de Miyagi pasaron a su hombros...después a su pecho...poniendo extrema atención en los rosaditos pezones que empezaban a ponerse erectos por la nueva experiencia de su cuerpo...

    -ha...Miyagi...que..¡haaa!...-gemía sin poder evitarlo al sentir la tibia y húmeda caricia que hacia la lengua de Miyagi sobre sus pequeños botoncitos...las manos del pelinegro tampoco estaban quietas, pues acariciaban todo lo que estaba su alcance recorriendo las blancas y largas piernas del muchachito quien se estremecía entre sus brazos. Los ojitos grises se abrieron con alarma y una gran vergüenza cuando sintió como la mano de su azabache intentaba adentrarse dentro de sus pequeños shorts...- espera...Miyagi...¿que...?...-

    -tranquilo...lo sé...-tranquilizó el mayor al rubio besándole cortamente los labios, lo tomó de la cintura de nuevo y lo sentó en sus piernas- tranquilo...mi lindo dragón...aun no estás listo para dar el siguiente paso- Shinobu se sonrojó y asintió algo decepcionado...se había dado cuenta de eso...no se desanimó...pues tenían bastante tiempo por delante y asintió con sus mejillas sonrojadas...-por ahora...solo te haré sentir, bien...¿sí?...-

    -b-bien...-tartamudeó el menor...con sus nervios hechos una maraña sintió como la mano de su amor se internó en sus shorts cortos que apenas y escondían bien su intimidad...-- ¡haaa!...ha...Mi...ha...-gemía el rubio sintiendo que todo el mundo le daba vueltas, cuando la mano de azabache se cerró en torno a su miembro , prontamente tomando un ritmo bastante enloquecedor...sintió como su pene “crecía” y se endurecía...nunca había sentido esas cosas...pero debía admitir que no le desagradaban...-Miyagi...no...Creo...que algo...algo saldrá...- exclamó con sus ojitos llorosos por el pacer y su cara roja, recargándose hacia enfrente deteniéndose a duras penas de Miyagi quien no dejaba de mover la mano de arriba hacia abajo entorno a su miembro...

    -déjalo...vamos... dragoncito...vente para mí- le susurró al oído...Shinobu estaba lo suficiente avergonzado, pero emitió un gemido mayor al sentir como un tironcito eléctrico recorría su estómago y la longitud de su pene...

    -ha...¡haaaa...!- gritó agitado...al mismo tiempo que se corría. Observó avergonzado como la sustancia blanquecina cubría la mano del mayor...y como este la acercaba a su boca dándole un lametón...sonrojándolo más...

    -¡no hagas eso!...-exclamó avergonzado...

    -...sabe a ti...- rio burlón el otro

    -cállate...-murmuró contra el pecho del mayor. Miyafi lo abrazó con mucha fuerza, besando una y otra vez el hermoso rostro del niño, acariciando sus cabellos, su espalda ,logrando que el menor empezara a dormitar aun sobre el...acomodó la poca ropa del menor y se acurrucó con el chiquillo encima de él...admirándole...

    -te amo... Miyagi...-susurró Shinobu antes de dormirse plácidamente en brazos de su amor. Miyagi lo miró con una sonrisa y besó suavemente una de sus mejillas...

    -lo sé...yo también...estoy perdidamente enamorado de ti....-habló el azabache cerrando sus ojos mientras respiraba el olor del cuello de su adorado niño- ...pensé que podría dejarte aquí después de mi misión...y olvidarte...pero...no, te amo demasiado...no importa que tengo que hacer...te llevaré conmigo...quiero estar para siempre a tu lado...sin importar que...-
    .
    .
    .

    Esa noche...nadie escuchó el pequeño “CRACK” que hizo el seguro de un grillete al abrirse...

    **********************************************************************

    La noche ya había caído en el reino Usami. Keiichi había estado algo inquieto los dos días que Haruhiko estuvo fuera...quienes le vieron seguramente habrían pensado que intuía algo bastante peligroso para ellos. Ese día el príncipe oji-gris había llegado de su reino, Nakamura, con un rostro bastante alterado, sin embargo había pasado a ver a su hermoso Keiichi...trayéndole de su reino un hermoso obsequio mandado por sus madres...un pequeño y precioso caballito tallado en la madera más fina del lugar; además de las acostumbradas rosas que el oji-miel adoraba recibir de Haruhiko. Pero para su mala suerte, no pudo estar toda la tarde con él debido a que tenía una revisión médica, por lo que se habían separado prometiéndose verse al otro día...

    Las primeras horas de esa noche Keiichi había tenido un extraño sueño. Un sueño extraño y bastante aterrador. Las imágenes habían pasado uno tras otro...su familia...las personas que “recién había conocido en Usami”...sangré...armas...clara señal de una guerra y eso lo había dejado derrumbado. Se despertó muy alterado respirando con dificultad...se levantó de su cama, aun medio adormilado y asustado se acercó al enorme ventanal.

    -...es solo una pesadilla...-murmuró tratando de convencerse de ello...suspiró varias veces...pensando en que no podría dormir el resto de la noche. Se quedó observando por mucho tiempo los árboles que rodeaban al imponente castillo, como el viento frío y fuerte los movía de un lado a otro. Los insectos eran los únicos que se escuchaban...cerró sus ojos tratando de respirar esa extraña tranquilidad...hasta que escuchó un ruido...parecían murmullos... ¿alguien hablaba en los pasillos a estas horas de la noche?...se preguntó el muchacho...y poniendo más atención y con la curiosidad que lo caracteriza se dispuso a descubrir aquello...

    Con los pies descalzos, para evitar hacer ruido, giró con mucho cuidado la perilla de la puerta para poder salir...sin hacer el mínimo de ruido salió de su habitación y caminó de puntillas más o menos dos pasillos del inmenso castillo...

    ...

    -lo sé, me preocupa...y créeme que cada día me preguntó si esto va a cambiar...o tendré que seguir así...-

    Keiichi se había sorprendido al escuchar la voz de Haruhiko, tratando de no gritar demasiado...prontamente se enteró de que la persona con la que hablaba era su hermana...Manami-san.

    -... ¿pero lo amas...verdad?...por eso sigues aquí...- fue lo que escuchó que dijo la mujer. Y sin querer Keiichi había entrado en pánico...y estaba comprendiendo todo mal. A caso...¿Haruhiko estaba enamorado de alguien...y por su culpa este no podía irse con su amado...otro doncel...quizás?...pensó con los ojos llorosos.

    -si...desde la primera vez que lo vi...Manami...juro que pensé que había visto a un ángel...el más bello que residía seguramente en el cielo. Tú lo sabes...por qué te lo dije- continuaba Haruhiko- él es tan...diferente a los demás...e hizo que mi vida cambiara por completo...cuando el aceptó salir conmigo fui...tan dichoso- exclamaba con voz triste...Keiichi pensó que lloraba...como él. Haruhiko parecía amar mucho a ese doncel...seguramente era mejor que él...pensó acongojado...-y pensar que estuvimos tan cerca de casarnos...-exclamó con tristeza. Keiichi puso sus manos en la boca totalmente sorprendido...Haruhiko había estado comprometido...y el amaba a ese chico...sus lágrimas bajaban por sus ojos...tratando de no hacer ruidos siguió escuchando la plática.

    -yo sé que papá hizo mal en apoyar aquello. Y no creas que estoy en contra de nada con Usami...pero simplemente podrían haber comprometido a alguien más con Hiroki... ¡hay hermanito....que no daría yo para volver a verlos a ambos felices!...tú llorando por él...y el....sin poder recordarte...- exclamó frustrada...

    Keiichi había resbalado poco a poco al suelo...entonces.... ¿Haruhiko deshizo su compromiso con “ese” alguien importante para él y lo comprometieron con alguien más?... su cabeza que estaba ya suficientemente confundida y maquinó otra idea cruel...¿y si lo comprometieron con él...y por eso Haruhiko pasaba todo ese tiempo con él?...el oji-miel había entrado en pánico...y sus lágrimas no habían dejado de caer...había divagado tanto que no escuchó varios diálogos de la conversación...si no que puso atención a uno en especial...

    -...y entonces... ¿qué vas a hacer con Keiichi?...-

    El corazón del Sumi se detuvo en el acto...con los ojos muy abiertos...esa pregunta la había hecho Manami...y a su maltrecho ingenio se le había antojado bastante frío el comentario...e inconscientemente, también, esperaba la respuesta de “su” no tanto “amor”...

    -...necesito decirle la verdad...antes de que sea tarde-

    El oji-miel no pudo reprimir el sollozo que soltó al escuchar esas palabras, aun totalmente confundido salió de su escondite, sin importar que los otro dos le hubieran visto, bastante sorprendidos...

    -¡¿K-Keiichi?!....-exclamó casi gritando Haruhiko, mirando al muchachito y después a su hermana...quien estaba totalmente sorprendida...

    -¡corre tras él, nii-saan!- exclamó Manami preocupada. Haruhiko solo asintió medio ido, gritando el nombre de su amor...¿qué es lo que había escuchado exactamente Keiichi? se preguntó para verlo tan devastado...Corrió como si su vida dependiera de ello, siguiendo a Keiichi hasta su habitación...por alguna razón sintió que si no lo alcanzaba lo perdería para siempre....¡y él no quería eso!...Ese día Haruhiko comprendería la importancia de los “malentendidos”...
    .
    .
    .

    Continuará...
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    umm. hola :=deeaaah:
    perdón, no había podido comentar...pero me he puesto al
    corriente con tu fic, ha estado de maravilla¡¡
    me ha gustado como llevas toda la historia¡¡
    wii Castiel ya esta embarazado¡¡...

    espero con ansias la conty¡
    saludos¡¡¡

    Misagi * *
  6. .
    Hola, cómo están?, yo muy bien :3, pues bien con la noticia de que tengo ya adelantados 2 capítulos más xD, les traigo uno nuevo...bueno un poquito más de drama a petición de los que les encanta este género xD, y pues bueno les tengo varias sorpresas de aquí en adelante...espero les guste tanto como yo lo disfruté escribiendo...gracias por leer y comentar¡¡¡ les mandó....Besitos de limón con azúcar :P para :Melyoan , Anne onodera takano y romantica_1




    Capítulo 26:”Inminente Guerra”




    La tarde estaba por acabar, para dar paso a la oscuridad brillante de la noche, ocultando los últimos rayos rojizos del atardecer bajo la negra manta. El reloj marcaría aproximadamente las 7 de la noche cuando se escucharon cascos de caballos resonar en la entrada principal del reino Nakamura. Los porteros habían dado el paso sin chistar al ver al jinete y los sirvientes que se encontraban en el patio acudieron rápidamente hasta donde el joven desmontaba a su fiel corcel.

    -¡Haruhiko-san!- exclamó uno de los sirvientes poniéndose al frente del príncipe, este les dirigió una sonrisa amable.

    -buenas noches, hace tiempo que no nos vemos, les encargo a Turu por favor- se expresó el príncipe dejando las riendas de su caballo al muchacho. Y se dirigió a paso lento y casi cansado hacia el interior del castillo...a pesar de que había pensado seriamente no volver ahí desde que había discutido aquel día con su padre.

    Subió las escaleras que daban hasta la entrada principal del castillo y caminó con relativa rapidez hasta la sala principal, encontrándose a su madre con un gesto entre alegría y preocupación, quien se acaba de levantar se su trono para ir a su encuentro.

    -¡Haruhiko, cariño, ya llegaste!- exclamó la mujer corriendo a abrazar a su hijo, este correspondió el abrazo con mucha fuerza...sintiendo como en ese momento se desmoronaba, y comprobó cuanto necesitaba ese abrazo; levantó su mirada buscando a una persona...y la encontró a algunos pasos de ellos...mirándolos con una media sonrisa...aunque su rostro parecía melancólico...casi arrepentido...y eso lo sorprendió.

    -padre...-pronunció casi en un murmullo. El aludido caminó hacia ellos hasta quedar frente a Haruhiko. La única mujer allí, observó la escena con un puchero en sus labios y lágrimas contenidas...observando como ambos hombres solo estaban uno frente al otro...

    -¡maldición Toshio, abraza a tu hijo!- exclamó la mujer de nombre Kyoko, lo suficientemente fuerte, para que el mozuelo oji-gris riera un poco entre lágrimas y el mayor enfurruñado obedeciera a su mujer y estrechara en su brazos a su hijo mayor.

    -padre...siento no ser lo que el reino necesita...yo...-empezaba Haruhiko, pero fue detenido por el hombre de cabellos tan negros como la noche.

    -no Haruhiko...yo lo siento- exclamó sorprendiendo al muchacho- tu madre me hizo entender que no estoy en posición de mandar sobre tu vida. Siempre hiciste lo que el resto del mundo consideró bueno...y no lo que tú querías...o necesitabas...yo...-

    -¡lo sé!, no digas más...esto...- exclamaba ente avergonzado, sorprendido y feliz el príncipe heredero, mirando a su dos padres- ya estamos todo bien...¿cierto?- sonrió a ambos.

    -siempre, mi amor- dijo Kai. Su padre solo asintió.

    -me alegra que todo se haya solucionado entre nosotros...ahora necesitamos hablar sobre asuntos importantes que no podríamos comunicarte en un carta, cariño- exclamó a mujer con voz acongojada y una mueca en el rostro de preocupación- pero...antes...me gustaría saber que ha pasado con Keiichi...¡cuéntanos por favor!- rogó la mujer, tomando las manos de su hijo.

    -como sabrás...-siguió su padre con la petición de su mujer- mandamos a traer a Manami para que te apoyara...no sabíamos la situación, pero supongo que ella fue capaz de reconfortante lo suficiente- comentó el hombre con media sonrisa- y desde entonces no hemos sabido nada... ¿qué pasó?...-

    Haruhiko vaciló un momento pasando de su sonrisa a un gesto bastante lastimero, emitió un suspiro que preocupó a sus padres, y al fin respondió...

    -el día que salí de aquí me encontré con Kaoruko-san- los reyes lo miraron sorprendidos...¿la maga del amor?...ello sabían que esa mujer ayudaba a los enamorados en sus más desesperados problemas...y jamás se equivocaba...-me puso a prueba, y gané el deseo de que me guiara hasta Keiichi...al bosque de Towika- murmuró lo último, como reviviendo aquella desesperación.

    -¡¿Towika?!, ¡¿Haruhiko, el bosque maldito?!, ¿pero qué hacía ese muchacho ahí?- preguntó con preocupación la mujer, alterada igual que su marido, conocían lo que se hablaba de ese bosque...y la leyendas sobre Aikawa y su maestro.

    -¿y cómo está el muchacho?- se apresuró a preguntar Toshio, de alguna manera sintiéndose culpable por ocultar la carta tanto tiempo...si él no se hubiera opuesto a que la recibiera...el muchacho...quizás...

    -ahora está bien- exclamó Haruhiko forzando una sonrisa, para tranquilizar a su familia, y se dignó a contestar su pregunta su madre- no se con exactitud, madre, que hacía Keiichi en ese lugar...pues lo considero lo suficiente sensato como para no entrar allí si no tiene una buena razón...lo único que se me ocurre es que sea parte de alguna prueba en su camino, o una emboscada- exclamó algo preocupado.

    -cariño...-expresó con voz conciliadora la mujer castaña, Haruhiko apreció el gesto y se giró hacia su padre, para contestarle a él- ...cuando lo encontré estaba demasiado herido, apenas pudo verlo consiente...de desvaneció frente a mi- declaró, poniendo los pelos de punta su interlocutores- en ese entonces... yo no sabía a quién recurrir, si volvía tu seguramente no querrías socorrerlo- exclamó con gesto lastimero, Toshio lo miró pidiendo disculpas y poniendo un brazo en su hombro- y si iba a Sumi, su medre sufriría demasiado al verlo como le encontré...puede que Yura me hubiera matado a golpes sin si quiera dejar explicarle- exclamó con una risilla nerviosa. Su madre entendía aquello...sabía que el hermano de Keiichi era un joven bastante celoso...por eso decidí llevarlo a Usami. Velé por su bienestar día y noche...incluso descuidando el mío- exclamó algo decaído, sus padre compartía su dolor- ...hasta que un día despertó...-hizo una enorme pausa...sus padres pensaron que ya no hablaría más...

    -cariño...¿qué pasó entonces?- exclamó preocupada, viendo que su hijo había empezado a temblar con la cabeza gacha...

    -mamá...-levantó su mirada, observando con sus ojos llorosos a su progenitora especialmente-...él no me recuerda...-La mujer abrazó de nueva cuenta a su hijo, contagiada del dolor que sentía en ese momento su “pequeño”. Haruhiko platicó con ellos todo lo que había pasado en cuanto a Keiichi, él y su familia...lo que sabían acerca de su pérdida de memoria...

    -cariño...todo estará bien- reconfortó la mujer – mi hijo, con tantos problemas que resolver...y yo vengo a causarte más penas- exclamó. Harruhiko la miró curioso, ya repuestos los 3 de su llanto.

    -¿a qué te refieres madre?- preguntó.

    -tenemos que hablarte sobre las razones que no podíamos escribir en esa carta...para lo que te mandamos a traer- exclamó Toshio.

    -¿de qué se trata?- preguntó a su padre-

    -es sobre algo que tu seguro ya sabes...- empezó el rey, al fin tomando asiento en su trono y pasarse las manos por su rostro cansado, Haruhiko lo miraba ansioso- es sobre las intenciones del concejo detrás del adelanto de tu boda con Hiroki- exclamó le rey.

    -¿Qué?-

    -Haruhiko, cariño, tu padre y yo hemos estado tras las intenciones de estos hombres...no creerías que te dejaríamos solo en todo esto ¿no?- exclamó con una sonrisa conciliadora y vio la afirmación de aquello en el rostro de sus progenitores, sorprendido- sabes que el reino Kamijuo es uno de los más ricos en todo el continente, debido a que posee varias minas tanto de oro y plata como de otros minerales preciosos-

    -si...-afirmó el más joven sin entender de qué iba todo aquello.

    -sabes que los progenitores tanto de Asuka como de Hitomi se hicieron en su tiempo de todos estos territorios. La familia Usami y la familia Takano. Después de su muerte las dejaron a sus hijos. A Mitsuki Usami...la madre de Hiroki le tocó su propiedad y después de su casamiento con Neji Kamijou se fijó el nombre del reino. Es bien conocido que Kamijou es uno de los reinos que ha sido blanco de diversos intentos de invasiones; sin embargo debido a su capitán del ejército y a Hiroki...no les ha sido posible hacer nada-respondió la mujer.

    -cuando Akihiko desapareció vieron como su campo de posibilidad de quedarse con alguno de los reinos más ricos revivía (Usami, Kamijou)- siguió Toshio- y todo fue mejor para ellos cuando fijaron el compromiso entre Hiroki y tu- explicó el hombre- claro que nosotros no sabíamos eso en ese entonces...de ser así- el hombre apretó su puño, demostrando su furia, de tranquilizó un poco para seguir hablando- así atacarían a la familia Usami desde dos puntos diferentes...y a pesar de conocer sobre la profecía pensaron que no daría resultado después de tantos fracasos y de gente que iba a Usami a intentar estafar a Asuka de ser los “elegidos”-

    -sin embargo- siguió Kai- ahora empiezan a creer que realmente pueden lograrlo, y eso quizás, les pone más ansiosos...y por eso adelantaron su boda- agregó con un gesto lastimero- seguro se enteraron de lo que pasa con Keiichi...y creerán que estás demasiado susceptible a cualquier cosa- se desesperó la reina mirando a Haruhiko quien estaba sorprendido por eso- además decirte las cosas tan crudas...y sin que esté Hiroki...el cual seguro saben que los pondría en su lugar, ¡por Kami, saben que de estar Hiroki aquí no se atreverían a hacer nada!. Ellos saben que en este momento las potencias más grandes: los reinos pertenecientes a la familia Usami y Takano están débiles, ¡son un blanco fácil!- exclamó preocupada.

    -si la mayoría de los jóvenes...se fueron a la “misión profética de Usami”...los reinos quedan desprotegidos- exclamó Toshio , mirando significativamente a su hijo, quien al fin entendía todo- Kamijou está sin Hiroki...su estratega de batalla; Marukawa está sin Masamune...el príncipe heredero y capitán del ejército; Usami está sin Miyagi...su capitán del ejército y consejero general de seguridad; Sumi está sin Keiichi...su única pieza para un “arreglo matrimonial” y el segundo al mando en batallas después de Yura...y...nuestro reino, Nakamura, está sin ti...su príncipe heredero y capitán del ejército- exclamó el rey mirando los ojos grises de su hijo preocupados...

    -no puede ser...-exclamó el más joven dando una vuelta completa con las manos en el rostro... ¡cómo no lo había pensado antes!- si yo me caso con Hiroki...-

    -Kamijou queda sin heredero al trono, y por lo tanto pasa a manos del concejo...-finalizó Toshio.

    -¡esto no puede ser!... ¡PADRE ESTO ES MUCHO MAS GRANDE DE LO QUE PODEMOS HACER!- gritó desesperado.

    -¡pero que pasa Haruhiko!...es caso de retrasarlos y cuando llegue Hiroki...-

    -¡no, ustedes no entienden!- exclamó el oji-plata.

    -¡¿pues dinos qué pasa, hijo?!- Kai

    -¡Sousuke acaba de ser desterrado de Sumi que está al borde de la quiebra...y a Usami se le ha declarado la guerra!...- exclamó preocupado y con la mirada perdida.

    -¿q-qué?...-

    *******************************************************

    Aproximadamente a la misma hora, pero algunos kilómetros más al este, precisamente en el reino de Sumi, un príncipe de cabellos castaños y ojos grises llegaba a su hogar. Bajó algo cansado de su caballo, lo encargó en el establo y se encaminó con premura al interior del castillo. Yura había decidido volver solo a Sumi, para ver que nada hubiera cambiado en su audiencia, mientras que su madre se quedó junto a Kioshi en Usami, todavía cuidando de Keiichi, pues ahora más que nunca que se había ido Haruhiko necesitaría de toda la gente que pudiera “entretenerlo”.

    -¡Yura!- escuchó su nombre ser mencionado con bastante urgencia, levantó su rostro encontrándose con un muchacho bastante hermoso de facciones finas y unos claros esmeraldas. Rápidamente corrió a su encuentro y lo estrechó entre sus brazos.

    -Yuki, ¿cómo has estado mi príncipe?, perdón por haberte hecho viajar tan de repente- exclamó el varón abrazando por la cintura a su pareja y besando delicadamente sus labios- ¿ha pasado algo en nuestra ausencia?- preguntó caminando con el hacia la sala principal.

    -estoy bien, no te preocupes demasiado...es un placer para mi poderte ayudar en estos momentos Yura...¿pero dime ...que ha pasado?...¡¿se trata de Keiichi, cierto?!...casi puedo estar seguro- exclamó preocupado con sus manos entrelazadas a la altura de su pecho.

    -si...verás, pasaron bastantes cosas...Haruhiko encontró a Keiichi muy mal herido en Towika- exclamó en un gesto lastimero, que fue contagiado al hermoso doncel rubio- su cuerpo ha sanado...pero...perdió la memoria...parcialmente...los médicos piensan que es un bloqueo a todo su sufrimiento- exclamó preocupado.

    -¡no puede ser!...entonces...-

    -se podría decir que no recuerda nada después de Sousuke...y tampoco nada acerca de Haruhiko...-exclamó cruzándose de brazos, mientras cerraba los ojos... Ambos platicaron un poco más sobre lo que había propuesto a Haruhiko y cómo había vuelto a ver la sonrisa en el rostro de su hermano...sin embargo había cosas pendiente...

    -¿Qué pasó con el asunto de Sousuke?- preguntó Yura, Yuki hizo un mohín extraño y miró con sus ojos preocupados a su oji-plata.

    -pues, sabes que ya se le ha considerado desterrado del territorio y los ancianos del reino quieren condenarlo a muerte; sin embargo hay un problema...- exclamó con una mueca.

    -¿problema?...¿cuál?- preguntó apresurado.

    -pues han venido mensajeros y representantes de varios países e incluso algunos de otros continentes, ellos piden su dinero que les fue robado por Sousuke...o en su defecto...quieren el derecho sobre la sentencia de él- exclamó. Yura frunció el ceño...ese hombre...hasta después de muerto les causaría problemas...

    -y ...¿haz hablado de algo serio con alguno de ellos?- preguntó.

    -¡claro que no!...ellos saben tan bien como yo que no tengo derecho sobre esos asuntos...pero he podido postergar las citas para que tu o Kaede-san puedan hablar con ellos- exclamó el muchachito.

    -bien...gracias Yuki...- exclamó dando un fuerte suspiro, mientras se recargaba en el respaldo del sillón en donde estaba sentado a un lado de Yuki...desde hace algún tiempo que habían decidido ir a la habitación del mayor- te juro que estoy agotado...ya no tengo tiempo ni para pensar...- exclamó el muchacho cerrando sus ojos y frotándose el puente de su nariz...Yuki en un gesto conciliador hizo al mayor recostarse en sus piernas y pasar su delgados dedos por el cabello suave de su príncipe...

    -tranquilo...Yura...ya verás que todo saldrá bien- trató de tranquilizarle, se sorprendió cuando este tomó una de sus manos que acariciaban su cabello y la llevó hasta sus labios...regalándole un beso en el dorso de la mano...sonrojándolo de in mediato

    -quisiera estar así contigo...para siempre Yuki, no tienes una idea de cuánto te amo...si no te volviera a ver...¡Kami sabe cuánto te extrañaría!- exclamó como un suspiro...a Yuki se le formó un nudo en el estómago...y sintió como los ojos se le empezaron a llenar de lágrimas...

    -¡Yura!...no hables así...me asustas...-exclamó el muchachito inclinándose y besando los labios del mayor...-si pasa algo...sabes que puedes decírmelo...¿verdad?- exclamó preocupado...el mayor asintió y suspiro...

    -sé...que me costaría más caro no decírtelo- asintió, aun sin desacomodarse de las piernas de su doncel- Yuki, tengo que volver pronto a Usami...-dijo sin más.

    -¡¿Por qué?!...se supone que todo está bien, ¿no?...-

    -no Yuki...hay bastantes problemas ahora...- Yuki no comprendió de todo y siguió escuchando- ...a Usami le han declarado la guerra...y...- el rubio abrió los ojos sobresaltado...ya sabía para donde iba aquello...

    -¡NO YURA!...-exclamó, casi como una súplica...al fin ambos se levantaron de aquel sillón mirándose de frente- ¡no es asunto tuyo!- dijo lloroso, dándose cuenta al fin de que había dicho algo sumamente egoísta...se abrazó a su pareja con fuerza...como si con aquello pudiera evitar que se fuera...

    -Yuki...los chicos que protegen siempre a Usami no están...el capitán del ejército tampoco. Debemos ayudarle...por todo lo que han hecho por nosotros...por el reino...-exclamó Yura apretando más entre sus brazos a su rubio que se deshacía en lágrimas- ...Haruhiko y yo iremos al frente...-

    *********************************************************

    Toc Toc...

    Los sonidos de la puerta lo alarmaron y levantó su mirada miel hacia la puerta.

    -pasa...-exclamó con una sonrisa. Observando como un muchacho de complexión delgada, alto, cabellos castaños y ojos negros, entraba a su habitación con una charola de comida en la mano.

    -buenas noches...Keiichi-san- exclamó el recién llegado, dejando la charola de comida en una mesita a alado de la cama – mi nombre es Takahiro...y al arecer yo le estaré trayendo toda la comida en estos días- suprimió muy bien el “hasta que llegue Haruhiko-san”...pensó Keiichi con un puchero.

    -nee...¡¿crees que pueda salir algún día siquiera a desayunar al comedor, Takahiro-kun?!- preguntó algo decepcionado el príncipe, pues se aburría con facilidad, teniendo el carácter que tiene y ahora sin Haruhiko ni su niiisan a su lado.

    -etto...- Takahiro estaba por intentar excusarse cuando una mujer entró casi corriendo por la puerta adelantándose al muchachito.

    -¡Keiichi, cariño, ¿Cómo has estado?!- preguntó con energía y felicidad de más y con su enorme sonrisa. A los dos chicos casi les sale una gota en la cabeza por aquella reacción.

    -¿Manami-san...que hace aquí tan de tarde?- preguntó el doncel con curiosidad...hace algunos días se la habían presentado, pues había sido imperativo que se conocieran en alguno de los pasillos del castillo cuando el castaño había intentado escapar de su habitación; sin embargo solo sabía que era una princesa “amiga de Asuka”...pero nada más. Y aun se seguía preguntando sinceramente ¡cómo rayos habían logrado congeniar tan bien!...

    -¡nee acaso me estás corriendo, Keiichi...eso es mal educación de tu parte!- expresó con un puchero gracioso la mujer invitándose a si misma a sentar en la cama del muchacho- Keiichi, he venido a platicar un poco contigo...yo...y Takahiro-kun- expresó con una sonrisa sincera. El único que no era de la realeza ahí se puso nervioso acaso la muchacha tenía planeado hablar de más...

    -platicar...¿los dos?...conmigo- expresó sin entender demasiado.

    -mira...empezó Manami, yo no creo que decirte una parte de la verdad te afecte de manera negativa...antes bien podría unirnos un poco más ¿no lo crees?- exclamó con una mirada bastante seria para su forma de ser. Takahiro miró casi mal a la castaña y Keiichi con curiosidad.

    -Manami-san...pero...-trataba de detenerle Takahiro.

    -cariño...no hay por qué temer...Keiichi tiene derecho a un poco de “ayuda”- exclamó la mujer poniendo su mano sobre la del castaño. El oji-miel miró curioso aquello.

    -Manami-san...¿ acaso tú y Takahiro-kun...?-preguntó casi pícaro al ver la relación tan cercana...

    -pues...algo así...- exclamó el mayor rascándose graciosamente la mejilla algo avergonzado.

    -jejeje, ya casi lo convenzo- bromeó un poco Manami guiñándole un ojo al menor. Keiichi rio contento por la reacción de esos dos- pero bueno...a lo que importa...te decía que te iba a decir algo muy interesante-

    -¿ha si?... ¡¿qué es?!- preguntó el chiquillo poniendo atención.

    -es sobre la relación que tengo con Haruhiko- exclamó la muchacha quitada la pena. Mostrando una sonrisa graciosa y bastante inocente cuando vio a Keiichi fruncir el ceño...claramente celoso.

    -¿relación?... ¿qué tipo de relación?-preguntó tan rápido que ocasionó la risa de los dos mayores frente a él.

    -no te enojes Keiichi, jejeje- tranquilizaba la mujer- ...Haruhiko es mi hermano...mi hermano mayor- aclaró con una gran sonrisa. Keiichi abrió los ojos muy impresionado y avergonzado por haber “casi” hecho un drama sin razón allí...

    -hooo...-

    *************************************************************

    Habían pasado ya dos días desde que habían librado a Ayami de su maldición. Hiroki y Nowki se habían mantenido muy juntos desde ese momento, y sinceramente era una escena bastante extraña para cualquiera que hubiera conocido a Hiroki algunos meses antes. Y no es precisamente por la razón de pasar todo el tiempo juntos como “nueva pareja, reconocida” que eran, sino porque era Hiroki el que buscaba al tritón muy a pesar de las discusiones metales con si mismo, sonreía a cuanto se cruzaba en su camino e incluso había estado algo más “holgazán” no queriendo madrugar y disfrutar en demasía las largas siestas...claro todo junto a su oji-azul. Hiroki lo había dejado pasar por un tiempo...sin embargo las respuestas le cayeron como balde de agua fría aquella mañana.

    El castaño se había levantado tarde esa mañana, estaba seguro que de estar en “el exterior” lo hubiera despertado el sol de mediodía; sin embargo ese día despertó con un puchero algo gracioso y sentía una extraña nostalgia especialmente por su familia...tanta fue su divagación que incluso llegó a llorar por los rosales que estaban en el jardín de su madre y que no había visto hace tanto...y eso ya le parecía ridículo...

    -maldita sea...estoy bastante sensible...- murmuró algo enojado con su cuerpo, mientras se disponía a cambiarse de ropa después de un reparador baño. El castaño cerró sus ojos por un momento pasando ocasionalmente su mano por su estómago...y entonces lo sintió...abrió muy grandes su ojos. Posando su mano con firmeza exactamente sobre su vientre- rayos...Hiroki...cálmate....joder... ¡cálmate!- se decía a sí mismo, mientras había empezado a hiperventilar...sus manos habían sentido un leve cosquilleo, como una energía...muy pequeña...justo en su vientre. Sus manos temblaban...muy pronto se enteró que no solo eran sus manos si todo su cuerpo...se recargó un rato en la pared...tratando de tranquilizarse...y cuando al menos ya estuvo vestido de la cintura hacia bajo decidió asegurarse del todo su teoría...caminó tambaleante hacia el cristal enorme que le servía de espejo y se paró de frente...sus ojos viajaron demasiado rápido hacia su vientre...y allí le encontró...

    -¡hoo...Kami!...-murmuró entre lágrimas el castaño, tapándose con una mano la boca para evitar sollozar demasiado fuerte y la otra mano bajaba un poco su pantalón dejando ver en todo su esplendor la hermosa y pequeña estrella de cinco picos en tonos azules muy claros que adornaba una pequeña parte su vientre...y que lo acompañaría por 9 largos meses...

    .
    .
    .

    Continuará...


    Edited by Misagi_ryuk - 31/1/2016, 21:39
  7. .
    Hola Mely¡¡

    Me ha encantado esta segunda parte¡¡¡, jajaja no tienes idea de cuanto me hizo reir¡¡
    y yo reprimiéndome las carcajadas por leerlo justo cuando todo mundo dormía xDDD
    Waaaaaa¡¡¡¡, me encanta, me encanta¡¡¡¡ Usagi-san ya empezando sus cosas con mi
    adorado Misaki¡¡¡ :P

    Wiii ya quiero saber lo que pasará en la playa¡¡ xD

    Muy buena conty Melyoan, me ha fascinado¡¡, espero con ansias la actu...

    Besos de cereza :)

    Misagi * *
  8. .
    Hola, hola¡, cómo están?...:P, pues yo muy bien...algo relajada por el puente que tendré en al escuela wii¡¡ :P... y pues vengo con la conty un poquito más temprano...verán que de verdad ya quería llegar a este lapso en la historia...me ha costado un montón xD, pues hace alguito que ya no escribía tan descriptivo el shonen jejeje...espero que le guste. Avanzamos un poquito más con algunas relaciones dentro del fic, explicamos cosas del pasado...y estamos cada vez más cerca de la guerra¡...espero les guste la conty...besitos de limón a TODOS mis lectores¡¡¡¡ y especiales de chocobabana XD, para: Melyoan, Anne onodera takano y romantica_1...respondo comentarios



    Melyoan: Hola Mely, como estas?, me alegra que te vaya gustando como ba todo, jeje pues si, la verdad que le fabriqué una vida bastante complicada...pero por eso estará Tsumori para sanar tooodas sus heridas xD, verás como finaliza todo esto con Hiroki y Nowaki en este capitulo....y pues como verás...la prueba de Kisa era la ultima...Hatori es un apoyo y el que los acompañará con Aikawa...y pues eso es todo Mely, espero te guste la conty..besos...

    Anne onodera takano: hola¡, como estás?, me alegra que te haya gustado el capítulo, veremos que pasa en Ayamo con la prueba y Hiroki....y pues la prueba de Kisa era la última....recordarás que eran 5...Hatori solo está para ayudarlos el día de la guerra , guiarlos y explicarles lo que sigue...espero te guste la contu sayoo¡

    romantica_1: hola, cómo estás?, gracias por comentar, no te preocupes por la tardanza, comprendo eso de la escual que nos quita valiso tiempo xD, me lagra que t ehaya gustado...jejeje si¡¡¡ yo tmabien había pensado a un hermoso Mason siendo consolado :P y pues el bebé de Tori es un amor... ami me fascina XD....espero te guste la conty, besos de cereza¡¡...




    Capítulo 25: “La libertad de Ayami”


    -Hiro-san, trata de descubrir que más hay en el círculo...trataré de distraerlos...- exclamó nowaki extendiendo su mano hacia el frente. Hiroki asintió algo nervioso- bien... ¡ahora!...- Hiroki había corrido hasta el circulo y en el trayecto esquivó una flecha de Haranu, derrapándose en el suelo, mientras tanto Nowaki se encontraba peleando con los 3 chicos...


    “¡Kami, ayúdanos!”...pensó el castaño empuñando su espada mientras miraba a la peli-violeta apuntando una nueva flecha hacia él...
    .
    .
    .

    -¡tsk!...-chasqueó la lengua Hiroki al observar como los vacíos ojos de la mujer arquera frente a él no le quitaba los ojos de encima...lentamente se fue poniendo de pie atento a cualquier movimiento de la mujer. Frunció el ceño al darse cuenta que la maga estaba tensando de más la flecha de su arco...la cual iba dirigida “exclusivamente” a él...no era difícil saber por qué...sabía demasiado sobre armas para no entender que esta vez...la flecha iría más rápido. Los ojos avellano se concentraron en los dedos de la mujer...-1-...pronto la soltaria-2- y sería su oportunidad para llegar al fin al círculo...-¡3!-

    ZIIUUU....

    Un sonido silbante se escuchó en la habitación. Hiroki se volvió a tirar al piso...milésimas de segundo después la flecha le pasó apenas moviendo uno de sus cabellos...se levantó de inmediato...poniendo esta vez uno de sus pies en el piso al igual que una rodilla...con ambas manos al suelo...listo para emprender otra carrera, y no se equivocó... – CRACK¡¡- Hiroki escuchó el sonido que hizo una nueva flecha al destrozarse sobre una de las paredes de piedra cuando la esquivó...-ya casi...- murmuró...y levantándose mucho más rápido, llegó de un saltó al círculo.

    -no lograrás detenerme- aseguró Hiroki, vio como Haranu fruncía el ceño, mientras esta vez caminaba , al parecer furiosa hasta donde estaban él. Hiroki se acuclilló en el suelo, para observar un poco las inscripciones en el suelo, mientras de reojo miraba también como Haranu se acercaba cada vez más y más a él – “demonios...rápido, ¡rápido Hiroki!”- se apuraba el mismo...entonces leyó la inscripción tratando de traducir rápidamente –un...una única manera hay...para acabar la prueba- bien...pensó Hiroki, levantando su rostro para ver que la peli-violeta ya estaba frente a él, levantando el arco hacia él, pero con la intención de golpearlo no de lanzarle una flecha – ZAAZZZ¡¡¡- Hiroki no esquivó el golpe...si no que interpuso su espada...-prepárate Haranu sensei...por qué te pienso dar batalla- exclamó sonriente Hiroki, cuando al fin despegó su espada del arco de su contrincante alejándose rápidamente hasta correr a una de las paredes...de allí descolgó con toda la rapidez que la pesada arma le permita...una ballesta.

    El castaño preparó la peligrosa arma, aunque no le había usado más que dos veces...en entrenamiento, sabía cómo utilizarla. Apuntó a la mujer sin mucho esfuerzo y tiró del gatillo de madera con fuerza...la flecha salió disparada sin más....

    -¡¡¡UUGGH!!!- todos en la habitación escucharon el gemido agudo que hizo la maga al verse atravesada por la gruesa flecha, la cual además de haberle atravesado por completo el cuerpo la había empotrado contra la pared también...haciéndole difícil su escape. Hiroki observó con algo de alivió como la mujer hacía gestos de dolor y empezaba a hacer esfuerzos por liberarse...le costaría un poco...mientras tanto ganaba tiempo para leer ese círculo...

    -bien hecho Hiro-san- festejaba también Nowaki por su parte, viendo de reojo, como Hiroki podía apañárselas perfectamente con Haranu. Por lo pronto el seguiría esquivando los golpes de Au, tratando de inmovilizar a Gin y peleando con gran dificultad y técnicas mágicas con Akihiro.

    Hiroki corrió al círculo azul, con sus manos temblando y el cuerpo con respiración agitada. Se tiró en el suelo y pasó sus dedos por las inscripciones y sin demora continuó con la lectura no sin antes echarle un vistazo de nuevo a la arquera, la cual seguía luchando por saca de su cuerpo la flecha- a la arquera de su flecha debes separar...- Hiroki trataba de memorizar todo, mientras seguía con la lectura- El verde y el plata juntos están mejor y ...al príncipe brillante invita un paseo nevado...- susurró al último con el ceño fruncido- ¿paseo nevado?...¡¿Qué carajos significa esto?!...-

    Se levantó fijándose rápidamente en la mujer que había dejado atravesada con la flecha y la vio furiosa caminando con la flecha en mano hacia él, mientras le preparaba para ponerla en su arco...Hiroki aun necesitaba pensar en lo que había leído en el cirulo...necesitaba tiempo...retrocedió lentamente hasta armarse con un nuevo artefacto...

    -pues bien, vamos a lo primero...- exclamó el oji-avellana, mientras empuñaba entre sus manos un hacha. El primer paso....era “a la arquera de su flecha debes separar”...lo intentaría...

    Corrió de frente directamente hacia la bruja con el afilado arma en mano...justo cuando se encontró frente a ella se agachó evitando el golpe que la mujer había dirigido hacia él. En un abrir y cerrar de ojos Hiroki se encontró tras la peli-violeta y empuñando el hacha con fuerza se impulsó hacia atrás para tomar fuerza y esforzándose por no cerrar los ojos movió el hacha hacia delante...

    **************************************************

    -ven acá cachorro- exclamó con una sonrisa el recién llegado, capturando en los brazos al pequeño quien caminaba con dificultad en la nieve hacia él. Seguido miró a Misaki y a Masamune- siento las tardanzas...a Chiaki se le da mejor esto...- rio algo nervioso con el pequeño en brazos. La cara de los dos humanos era un poema...él era...él...-me alegra que ya hayan llegado...al parecer se tomaron muy enserio lo del tiempo- exclamó con una leve risa- Pues al parecer, esta es la última parada antes de ir con Aikawa...un placer, mi nombre es Hatori, el guardián de las montaña nevadas...-

    .
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    -tu eres...Hatori-san...el novio de Yoshino-san- exclamó Misaki sin poder recuperarse del asombro. Solamente miraba con bastante curiosidad al pequeño que se movía inquieto en brazos del oji-plata, con esos ojos azules grisáceos y el cabello castaño...-el... ¿él es su hijo? – preguntó con un rostro indescifrable señalando al pequeño. Mune estaba en las mismas condiciones.

    Tori soltó una leve carcajada antes de responder.

    -pues tal parece que si- exclamó divertido- Asaki, es hijo mío y de Yoshino...-aseguró- chicos, realmente me gustaría resolver todas sus dudas, pero no creo que este lugar sea precisamente el correcto- exclamó con media sonrisa. Misaki y Mune asintieron avergonzados- bien, por suerte mi casa queda muy cerca de aquí...por lo pronto...-exclamó mientras hacía aparecer con la otra mano, con la que no cargaba a tu su hijo, un cetro plateado con cristalizado...el cual fascinó a Misaki pues se quedó con la boca levemente abierta-...bien...mejoraremos un poco el clima de aquí a camino a casa- vieron el cetro brillar y de inmediato el viento y la nevada cesó. Ninguno habló hasta que se encontraron frente a la entrada de la casa del guardián.

    -bien, pasen por favor...- exclamó Hatori, invitando a Takano y Misaki a pasar a su casa una vez llegaron. Los dos obedecieron y pasaron rápidamente. Misaki esbozó un gran suspiro de alivio acompañado de una linda sonrisa, pues el lugar era bastante cálido, la casa parecía estar hecha de rocas y madera por igual, había varios libreros, una pequeña cocina, en la sala habían 3 sillones, una alfombra grisácea y bastante acolchonada y enfrente una grandiosa chimenea- Pueden sentarse a donde gusten...por favor, ahora vengo- exclamó Tori, mientras dejaba suavemente a Asaki en la alfombra – espera aquí, cachorro- le sonrió al niño. Mune miraba con una sonrisa entrañable lo cariñoso que era el guardián con su hijo.

    -gracias, Harori-san- agradeció Misaki con una sonrisa. El oji-verde miraba realmente a gusto toda la decoración de la casa, y tomó asintió justo enfrente de la chimenea acercando un poco sus manos al fuego...¡vaya que extrañaba dormir bajo un techo!...-Masamune...al fin hemos llegado hasta este punto...ya falta poco...-exclamó con un gesto extraño el oji-verde.

    -sí, pero no debes preocuparte Misaki...ya verás que todo resultará bien...-tranquilizó Mune, con una sonrisa, mirando como el pequeñito de ojos azules se acercaba a Misaki con claro gesto de atención- hey...Misaki...mira...tal parece que quiere que lo cargues...- exclamó con una leve risa Mune. Misaki observó como el pequeño caminaba hacia el con pasitos torpes extendiendo sus manos.

    -¡waa... no no lo hagas Asaki-chan!...no he cargado a un bebé nunca...- exclamó sonrojado- oi¡- exclamó cuando sintió al bebé aventarse en sus brazos. Mune siguió riendo- oye...Masamune, ¡no te rías!...cárgalo tú- exclamó avergonzado y nervioso de que fuera a lastimar al pequeño.

    -jajaja...no ha venido hacia mí, Misaki – debatió el príncipe riéndose del oji-verde. Su conversación fue interrumpida por el ruido de una puerta cerrarse, ambos voltearon a ver a Hatori, que salía de una habitación con algunas cosas en la mano, y sonrió a Misaki al verlo intentar cargar a su hijo.

    -vamos Misaki, puedes cargarlo si quieres...es bastante tranquilo- animó el mago.

    -no, ¡no!... ¿cómo cree Hatori-san?...yo nunca he cargado a uno – exclamó avergonzado.

    -jejeje...tranquilo, solo deja que él se acomode en tus brazos- exclamó el oji-gris...Misaki asintió, viendo como el pequeñín daba más pacitos falsos hasta abrazarse al pecho del oji-verde, Misaki pasó sus brazos suavemente por la espalda del bebé...hasta que sintió que este se quedó quitecito- ¿lo ves?, no era tan difícil- Misaki hizo un puchero. Mune siguió riendo- en fin...el dormirá por un buen tiempo. Quizás quieran conversar sobre las misiones- exclamó con un rostro un poco serio. Misaki asintió.

    -bueno...hace un tiempo, me perturbaba la idea de que algo anduviera mal con algunos de nuestros amigos...-exclamó Misaki suavemente. Tori sonrió de lado...ese doncel se preocupaba demasiado por todos...

    -sabes que no puedo saber a ciencia cierta de quien se trata o que es lo que sucede con cada uno...pero puedo decirte que todo estará bien, ellos enfrentan sus propios retos en donde se encuentran, pero son cosas que ellos tienen que hacer, es cierto que tienen algunas complicaciones...pero terminará bien, ya lo verás...y seguramente podrás encontrarte con algunos de ellos el día de la guerra- tranquilizó Hatori. Misaki le sonrió.

    -gracias...-

    -no hay por qué...-

    -Hatori-san, yo quisiera saber lo que pasará el día de la guerra- preguntó Masamune, Hatori asintió.

    -lo sé... ¿les parece si les cuento desde el principio?- pregunto el oji-gris. Ambos sonrieron asintiendo.

    -bien...-

    “Cuando el asunto del rapto de Akihiko llegó a los oídos del liderato de la magia aún estaba en el poder Gin, el cual, para desgracia de todo el que estaba en contra de ese rapto, favoreció a Aikawa, la cual se hizo de más poder y súbditos. En eso entonces yo todavía era un aprendiz...mi maestro fue Ijuuin-san. El se había mantenido indiferente a todos los asuntos correspondientes al liderato dela magia, sin embargo esta vez se presentó al lugar, junto a mí, con dos intensiones. Saber sobre el asunto de Akihiko y reconocerme ante todos como un mago “completo” y servirle de “mensajero”. Durante los primeros años solo pidió que le llevara información, después dejo de pedirme que fuera...supuse planeaba algo desde eso entonces. Durante ese tiempo estuvieron también muy atentos a lo que pasaba 2 personajes. Mino, que en eso entonces era un joven bastante despierto y hábil con la magia...el cual se había ganado el respeto y reconocimiento de varios...claro que también que el odio de los brujos y del mismo Gin. El otro era Misato-san, el que era entonces el rey en Ayami y el más poderoso de los magos tritones.

    Deben saber que estos dos personajes representaban bastantes dificultades para Aikawa, por lo que con ayuda de Gin se “deshicieron” de Misato-san, tiempo después esa bruja pudo completar su maldición y encerrar bajo el agua a los magos tritones...supongo sabían eso, verdad?”

    -si, por puesto...esa fue la segunda prueba- exclamó Hatori recordando.

    -¡esa era la maldición que tenía que romper Hiroki!- recordó Misaki , interrumpiéndose al final, pues recordó que tenía aun al bebé en brazos –hou...-

    -Es correcto...-exclamó Tori- lo que no pensó Aikawa fue en lo que sucedería después...-siguió con su narración.

    “Hubiera sido más sencillo haber vencido a Mino en eso entonces...por que supuestamente era más “débil”, porque en lo que el tiempo siguió transcurriendo Mino entrenó a otros dos discípulos los cuales fueron otros participantes claves para la “guerra” contra Aikawa...desde esos momentos Mino se propuso públicamente ir en contra de los ideales de la pelirroja. Yo me uní a ellos algún tiempo después...debido a que pasaba bastante tiempo planeando estrategias con Mino fue que conocí a Chiaki...”-exclamó con media sonrisa. Los que lo escuchaban sonrieron maravillados por “la otra” parte de la historia.

    -y bueno, supongo Yuu ya les dijo lo que pasó después...la organización que hicimos entre los 4 para este viaje, los objetos que obtuvieron de las hadas lili y de Ijuuin-sensei y que este es el último lugar antes de ir con Aikawa- exclamó con un rostro serio. Misaki asintió- ...su ultimo reto fue con el guardián del puente...y debo felicitarlos por llegar hasta acá...- medio sonrió – sin embargo tengo que decirles que a comparación con lo que viene....esto apenas es menos de la mitad del camino...-exclamó en un tono preocupado...

    -...-

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    Corrió de frente directamente hacia la bruja con el afilado arma en mano...justo cuando se encontró frente a ella se agachó evitando el golpe que la mujer había dirigido hacia él. En un abrir y cerrar de ojos Hiroki se encontró tras la peli-violeta y empuñando el hacha con fuerza se impulsó hacia atrás para tomar fuerza y esforzándose por no cerrar los ojos movió el hacha hacia delante...
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    El ruido metálico inundó toda la habitación. Hiroki levantó la mirada, todavía cansado y tratando de recuperar su respiración tirando en el suelo, con el hacha en las manos...sus ojos se fijaron en lo que tenía enfrente.

    El arco había caído al suelo...al igual que la flecha...la cual todavía era sujeta por la mano “desprendida” de la mujer...Hiroki frunció la nariz con asco...que fuera un guerrero no quería decir que le gustara precisamente ver “personas” mutiladas...se levantó de inmediato del suelo y tapándose la boca retrocedió a la escena...

    Observó cómo los ojos de Haranu volvían a un color verde oscuro y como la figura de la maga se iba desapareciendo poco a poco como si estuviera hecha de vapor...

    -bien...una menos...-sonrió con orgullo...

    Su vista se fijó a donde estaba Nowaki todavía peleando con los otros tres.

    -¡Hiro-san!, bien hecho!- felicitó el oji-azul- ¿has averiguado sobre los demás?...-exclamó esquivando un golpe y alejándose para darse un respiro. Mirando momentáneamente al castaño.

    -¡si!...escucha...” El verde y el plata juntos están mejor y ...al príncipe brillante invita un paseo nevado”- recitó Hiroki. Nowaki levantó una ceja curioso...-¡lo sé!...yo tampoco comprendí del todo el ultimo...como sea...déjame encargarme de lo los otros dos, creo que tengo una idea- expuso con media sonrisa.

    -está bien, ¡pero ten cuidado!...-

    Hiroki tomó de nueva cuenta un arco y apuntó su flecha directamente al cuello del hombre “Plata”...la flecha salió disparada clavándose limpiamente en su objetivo , haciendo tambalear un poco al muerto viviente. Hiroki tragó saliva al ver como “Gin” se volteaba hacia él con el rostro colérico y sacándose de un jalón le flecha de su cuello...dirigiéndose hacia él.

    -bien, al parecer ya tengo su atención...ahora el otro...-exclamó aun retrocediendo lentamente expectante para ver qué haría el plateado...preparó igual otra flecha y esta la disparó hacia el tal Au, el de cabello verde, el cual solo se giró hacia Hiroki con evidente molestia...el castaño observó con poco asombro que la flecha no había penetrado su cuerpo- lo suponía...este hombre es extremadamente fuerte y resistente...-frunció el ceño...los dos hombres de tamaños considerables y bastante enojados se dirigían ahora hacia él...

    -bien ahora a comprobar mi teoría...-se dijo el oji-avellana. Mientras tiraba a un lado el arco y sacaba su espada...

    Ambos magos habían corrido hacia él, sin embargo no pudo anticipar cuando Gin lanzó con su cetro un poder hacia el lanzándolo contra una de las paredes llenas de armas.

    -haa¡..- gritó con algo de dolor, poniendo sus manos en su cabeza, pues algunas armas le habían caído encima- maldito...-refunfuñó poniéndose de pie. Se volvió a encaminar hacia ellos, tomando un poco de velocidad, y esta vez serpenteando para evitar ser un blanco fácil. Con una sonrisa, notó que al parecer su idea iba a funcionar, pues admiró como Gin pretendía enfrentar su ataque de frente...confiado de que no le haría nada...al convertir su cuerpo en una especie de cristal resistente que regresaba el ataque de su oponente ;y Au, siendo algo más agresivo buscó “cambiar” su acuerpo...tomando un color metálico...como si se hubiera hecho de hierro o algo así...dirigió su enorme puño hacia Hiroki...pero este fue a pararse justo en medio de los dos magos...


    Nowaki se sobresaltó al escuchar como Hiroki fue aventado contra la pared y herido con algunas armas que le cayeron encima...pero su sorpresa había reflejado una sonrisa la ver la acertada teoría de Hiroki, aun in saber del todo los poderes de esos magos. Pues justo cuando ambos estaban justo por atacarlo al mismo tiempo se tiró al suelo logrando que Au estrellara su fuerte golpe contra Gin, el cual prácticamente se “quebró” deshaciendo en miles de pedazos...sin embargo el “primer mago” admiró con curiosidad su manos...las cuales comenzaban a agrietarse...miró con odio mal disimulado a Hiroki, quien mostró una sonrisa ...entonces comprendió todo...Gin le había regresado el poder...y sin quitar su mirada vacía del castaño, perdió su forma “metálica” y se desvaneció al igual que su compañero.

    -bien...al parecer si funcionó...- exclamó Hiroki prácticamente tirándose al piso totalmente agotado de todas las maneras...observó con dicha como los “fragmentos” de los magos se esfumaban tal y como lo había hecho Haranu. Su mirada se fijó en Nowaki quien se había separado a una distancia aceptable del pequeño mago bribón.

    -¡hey Nowaki...te toca Akihiro...te he ayudado bastante!- exclamó burlón. El oji-azul el regresó la sonrisa pícara, observando el cansancio evidente de su castaño.

    -por su puesto Hiro-san...es bueno que no hayas perdido la condición, debes agradecer al nuevo cambio de tu “entrenamiento”- sonrió guiñándole un ojo. Hiroki se había sonrojado hasta el último de sus cabellos.

    -¡Cállate bastardo!- exclamó con un puchero bastante avergonzado, apretando sus puños cansado... solo escuchó la risa de su tritón.

    -jajaja, no te exaltes demasiado Hiro-san, yo también ya tengo la solución...- exclamó con media sonrisa Nowaki. Extendiendo su mano hacia arriba.

    -jumm...eso quiero verlo- sonrió Hiroki sentándose mejor en el suelo, como si estuviera viendo una obra de teatro. A los pocos segundos el castaño frunció el ceño y volteó a ver hacia todos los lados...en un abrir y cerrar de ojos había comenzado a bajar la temperatura...con asombro pudo observar como salía vaho de su boca por el clima frío...- esto...- apeas murmuró cuando recordó...” al príncipe brillante invita un paseo nevado”...-ho, era eso...- exclamó con una sonrisa, observando como prontamente empezaron a caer copos de nieve y después nieve...muy rápido aquella habitación había quedado completamente en blanco...

    -Akihiro-san...permítame decirle que le he vencido...-exclamó Nowaki bajando al fin su mano que mantenía emitiendo el poder “congelante”. Hiroki miró con curiosidad aquella escena...observó como el muchachito miraba las palmas de su mano...entrecerrando los ojos el castaño pudo observar que Akihiro perdía movimiento en sus manos...-Akihiro se crío en el desierto...por lo tanto su naturaleza es “calorífica”...sus poderes son reducidos en lugares extremamente fríos...-

    -..-los ojos de Akihiro se colorearon del azul natural que poseía cuando estaba vivo. Tanto Nowaki como Hiroki observaron el cambio con fascinación y la sorpresa creció en ellos cuando observaron como el niño de 10 años les sonreía.

    -gracias...-escucharon que hablaba el niño. Hiroki abrió la boca con bastante sorpresa...

    -puedes... hablarnos...-tartamudeó Hiroki, el niño rubio soltó una pequeña risa.

    -así es...gracias por vencerme...- exclamó viendo sus manos desvanecerse con una sonrisa y después miró a Nowaki – Aikawa debe pagar por haber usado nuestros cuerpos...el mío especialmente- refunfuñó egoísta, haciendo sonreír a los otros dos- aunque no haya podido revivirnos con toda nuestra fuerza...se los encargo- finalizó guiñándoles un ojo...después desapareció...

    Nowaki y Hiroki quedaron mirándose con una sonrisa por bastante tiempo hasta que empezaron a escuchar como la habitación en la que estaban, y en general toda la estructura se estaba cayendo... ¡tenían que salir rápido de allí!...

    -¡dame la mano Hiro-san!- pidió Nowaki jalando fuera de esa lugar en ruinas a su amor...más en medio camino optó por llevarlo en brazos ya que el cansancio y las heridas no dejaban moverse tan rápido al castaño...

    **************************************************

    Mientras tanto, en Usami se encontraban dos chicos bastante conocidos dentro de una habitación. El menor se encontraba sentado en la cama con las piernas cruzadas, mientras jugaba con las flores del ramo que tenía entre sus manos, en su cara tenia marcada un clarito y graciosos pucherito...inconforme por lo que contaba su interlocutor.

    -¡no es justo Haruhiko...Yura también se va, no quiero que te vayas!- exclamó el oji-miel, luego se sonrojó pensando bien lo que había dicho -¡etto...digo...es que sería todo aburrido!...si eso...-exclamó corrigiéndose avergonzado, apachurrando entre sus pecho inconscientemente las flores que hace poco le había regalado el oji-gris, este rio ante la cómica escena y se arrodillo a la altura de su amor.

    -lo sé, entiendo, pero debes saber que es importante que yo vaya, mi madre de verdad necesita verme...y hace tanto que no he ido a mi casa...volveré tan pronto pueda- explicó tomando las manos de keiichi y dándoles un beso. Este se sonrojó mirando hacia un lado.

    -juumm...haz lo que quieras no me interesa- exclamó con un pucherito avergonzado. Haruhiko sonrió poniéndose de pie, sin soltar las manos de su peli-castaño.

    -jejeje...nos veremos pronto Keiichi...espérame- susurró lo último acercándose rápidamente al menor y estamparle un sonoro beso en la mejilla, y salió de la sala con premura. El menor reinventó un nuevo color de rojo, mientras se tocaba su mejilla son una linda sonrisa.

    -te estaré esperando...-murmuró viéndose solo en la habitación y se abrazó muy fuerte a si mismo...ya estaba extrañándolo...

    .......................................................................

    Por lo pronto algunos pasos más alejados de la habitación de Keiichi caminaba Haruhiko de camino a la salida de Usami, de cualquier forma no le había mentido del todo a su amor... si tenía que volver a su reino...su rostro se tornó preocupado...

    -hey...-escuchó que alguien le detenía, levantó sus rostro encontrándose con Yura- ¿así que ya te vas?-

    -si...tú también, ¿no?- exclamó Haruhiko recargándose en una pared cercana, Yura le imitó.

    -si...¿te has despedido de él?- preguntó Yura con media sonrisa.

    -si...estaba bastante inconforme con la idea...-medio sonrió también el otro- ¿y tú te has despedido de él?-

    -si...aunque, al parecer sentirá más tu ausencia que la mía- exclamó divertido Yura, haciendo reír al otro también- pero dime...te he visto algo inquieto últimamente...¿paso algo?- exclamó preocupado. Haruhiko se puso serió y vaciló un poco antes de responder...

    -mis padres me han mandado a traer...presiento que algo pasará en mi reino- exclamó preocupado...-además...ayer los ancianos del concejo y del templo se reunieron...-miró con sus ojos grises preocupados y tristes a Yura, quien esperaba expectante la respuesta –quieren adelantar cuanto antes mi casamiento con Hiroki apenas llegue...dicen que no están dispuestos a esperar falsas esperanzas- exclamó enojado. Yura frunció el ceño.

    -¡es una estupidez!...no es justo que adelanten un compromiso que tenía fecha y condiciones ya planteadas...Haruhiko...eso no puede ser- habló Yura cruzándose de brazos...luego bajó la voz mirando con tristeza a su casi “cuñado” -...sabes que volver a repetir esa triste noticia...matará a Keiichi enserio esta vez...debemos hacer todo lo posible por evitarlo...-

    Haruhiko asintió – entonces...¿te veré después?-

    -claro...yo también partiré a Sumi en unos minutos más- exclamó Yura pensativo mientras veía irse al oji-gris... ¿por qué tendría tanta prisa en adelantar el concejo ese casamiento...?

    ****************************************************

    La habitación de paredes de piedra se llenó finalmente de agua, sin poder soportar mas la presión de esta...Nowaki pudo convertir a Hiroki y así mismo en tritones de nuevo. Aun en esa forma tenía sujeto de la cintura a su castaño ayudándolo a cruzar el alarmante peligro...recorrieron todas las habitaciones de vuelta, persiguiéndole los muros y columnas que caían con gran estruendo...

    El camino les pareció a ambos mucho más largo de lo que realmente era...aunque un regocijo sin igual invadía sus corazones, pues eso significaba que habían roto al fin la prueba de Ayami...el agua revuelta al fin se acabó...y dio paso a la calmada y cristalina azul...ya habían salido del “castillo metálico”...

    Ambos voltearon a ver hacia atrás como las ruinas de lo que fue la maldición de Ayami comenzaban a desaparecer poco a poco. Sus ojos se encontraron y sonrieron como jamás lo habían hecho. Nowaki mantenía sujeta entre sus brazos la cintura de Hiroki, y este subió lentamente sus brazos al cuello de su tritón...y entonces fundieron sus labios, cerrando sus ojos...solamente demostrándose su amor y su desesperación, la preocupación que habían sentido al verse el uno sin el otro...de demostrar cual importante era el uno para el otro...

    Se separaron al fin, cuando gritos y festejos interrumpieron su “intima” caricia...Hiroki regresó a ver hacia un lado observando como algunos curiosos tritones y sirenas habían acudido al lugar del estruendo , dándose cuenta que ya todo había terminado...por eso festejaban la buena nueva...y al parecer también la “nueva” pareja de su príncipe...Hiroki se sonrojó de inmediato...lamentándose de haberse perdido...una vez más...en los labios de su tritón...sin embargo no negó un segundo beso de este...cuando respondió con este acto a la algarabía de su pueblo...volvió abrazarse con fuerza a su oji-azul....que más daba....ahora era completamente feliz...después podría echarle la culpa a Nowaki...

    .

    .

    .

    Continuará...
  9. .
    Hola Mely¡¡¡

    Me alegra que estés bien y gracias por decir que te gusta
    mi fic :3, yo también adoooro en tuyo¡¡¡...OYE, y si es cierto,
    cada vez hay menos fics en este foro...y los que hay tardan muchisiiimo
    en actualizarse :(, una pena. Por lo pronto yo hago lo mío tratando de
    escribir rápido por que no me gusta que me dejen tampoco con la duda
    ajajajaja. En fin. Me alegra que te hayan servido todos los ánimos y la
    inspiración que te deseamos tus lectores, ¡el lemon si que te ha quedado
    muy genial! *.* , pensé que Hiroki sentiría "algo" por Akihiko aun, pero
    me alegra que nuestro hermoso tifón hay logrado enamorarlo por
    completo¡¡¡

    Tus descripciones son simplemente geniales...me encantó cada paso que
    describiste en el lemon¡....ya quiero saber sobre las demás parejas Mely
    no me dejes con esta intrigaa¡¡¡ xDDD¡¡¡

    Espero ansiosa la conty, de tus dos fics¡¡¡, Besitos de Sandía para tu¡¡¡

    Misagi * *
  10. .
    Hola, hola , cómo están?, yo bien, jejej si¡¡¡ , pude terminar la conty a tiempo jajaja. Pues verán yo estoy terminando de escribir el cap , mientras el patio de mi casa está a reventar de invitados jajaja, es fiesta de mi abuela xD, y pues bueno, yo les dejo esto por acá y me voy corriendo para ir a comer¡¡ :P. Espero les guste le nuevo cap, les debo las respuestas de sus comentarios, lo haré para la próxima¡¡...Gracias a todo por leer y comentar, besos de pastel de chocolate¡¡ :P para ustedes, especiales para: Melyoan, Anne onodera takano y romantica_1 

    Misagi * *









    Capítulo 24: “Encuentro con el guardián de las montañas nevadas”


    Después de aquella extraña escena en la que tanto Hiroki como Suki habían terminado llorando (uno por que le recordaba la importante decisión que tenía que tomar acerca de su reino y otro porque había hecho llorar a su Hiro-niisan sin saber por qué), Nowaki había tratado de calmar a sus dos donceles favoritos, teniendo como respuesta...una plática pendiente con su Hiro-san sobre eso, pues a pesar de haber aceptado “bien” su amor , no se podían “obligar mutuamente” a abandonar su hogar y quedarse con el otro. Y Nowaki sabía perfectamente que ese era un tema que dominaba dolorosamente en la mente del castaño.

    Regresando al presente. En ese momento Hiroki y Nowaki se encontraban una vez más enfrente de esa horrorosa estructura donde tenían que terminar las pruebas para salvar a Ayami. Hace unos momentos habían ido a ver a Hisa-sama para recordarle que hoy irían a “terminar lo que habían empezado”; la reina les había deseado suerte y prontamente se dirigieron hacia allí...

    -¿lo intentamos una vez más?- exclamó el oji-azul con media sonrisa, mientras extendía una mano a su castaño. Ambos se encontraban ya en la entrada al castillo mal improvisado hecho de puro metal.

    -vamos...-exclamó Hiroki tomando la mano del tritón entrando nuevamente a ese lugar.

    El tiempo se fue rápido en la primera prueba, dado que ya sabían que era lo que tenían que hacer. Hiroki contestó la respuesta correcta, salieron sus “dobles” hechos de una bruma rojiza y prontamente acabaron con ellos. Al llegar a la segunda prueba, Hiroki repitió otra vez la escena aquella de adivinar la letra para completar una inscripción en el pozo de agua, y tan pronto lo hizo Nowaki lo acercó a su cuerpo “claro, solo para evitar lo que pasó la última vez allí”. La conocida y maldita cadena que había salido aquella vez del pozo, emergió de nuevo, sujetándolo esta vez a Hiroki de uno de sus brazos, t tirando de él de inmediato hacia el fondo. Segundos antes el tritón ya había juntado sus labios al otro...para pasarle aire. La transformación de tritón a humano se dio en el castaño al fin. Sin embargo en ningún momento se había separado, pues Nowaki no lo había separado de él...ni del “beso”. Mientras se zambullían más y más profundo en el agua...ambos solo se miraban a los ojos...avellano y azul, mientras mantenían sus manos entrelazadas.

    Cuando finalmente el tiempo del reloj...en la habitación se acabó, la prueba también...y la cadena que tiraba de Hiroki desapareció. Tan pronto se vieron en una habitación hecha, al parecer de pura piedra...aunque aún bajo el agua...Nowaki se dispuso a regresar a su forma de tritón al castaño.

    -haa...que alivio...gracias- exclamó Hiroki agarrándose la garganta, mientras miraba a Nowaki con sus mejillas rojas.

    -no hay por qué...cuando quieras...-exclamó el tritón coqueto sujetando al oji-avellano por la cintura...intentando darle un beso. El otro se quedó viéndolo por unos segundos...

    -¡aléjate de mí, déjate de tus cosas!..¡Nowaki!- exclamaba enfurruñado y sonrojado Hiroki tratando de quitar de su cuerpo las traviesas manos de su tifón.

    -jejeje...tranquilo Hiro-san...-

    -jumm...es tu culpa...ya hay que ver que hay aquí- exclamó Hiroki regresando a su seriedad, mientras ambos nadaban juntos para explorar la habitación en donde se encontraban...

    La habitación era mucho más grande que las otras dos anteriores juntas, parecía estar construida de varios bloques de piedra de tamaño mediano apilados ordenadamente, en el centro de la habitación había un circulo dibujado en color azul el cual sobresalía como una pequeña tarima...apenas unos 10 centímetro más alto que el piso.

    -vamos allá- indicó Hiroki cuando ubicó el círculo. Nowaki le siguió. Los ojos avellano recorrían con cuidado cada línea trazada dentro y en los márgenes del círculo, enterándose no con poca sorpresa que había inscripciones diminutas talladas en la lengua más antigua que había podido estudiar en las bibliotecas de Ayami – esto será complicado...dice...aquí...¿acaso?...¿”resurrección de Merlin...un...-murmuró el castaño inclinándose un poco más para ver mejor. Sin embargo un ruido sordo alertó a su oídos y regresó a ver de inmediato hacia atrás buscando a Nowaki con alarma...-¡¿Qué pas...?!-

    -¡CUIDADO HIRO-SAN, ABAJO!-

    -¡¿qué?!- apenas alcanzó a gritar Hiroki cuando le pasó por un lado de su cabeza una flecha...Regresó a ver hacia Nowaki quien sujetaba del cuello a un... ¡¿mago?!....o al menos eso pensó Hiroki al ver los atuendos de los 4 hombres que estaban allí. Uno con su cetro, otro con una varita mágica, una maga con un arco de flechas brillantes y un niño que parecía también ser un mago, quizás no pasaba de 10 años...este solo estaba allí...sin ningún arma.

    -¡¿Qué demonios pasa aquí Nowaki?!- exclamó el castaño con una cara de desesperación y su ceño fruncido al ver a esos personajes allí...seguido de ver como la habitación de piedra se iba quedando sin agua...Nowaki actuó rápido y alejándose de un salto del mago que tenía sujeto hace unos segundos se puso a un lado de Hiroki. Extendió una de sus manos hacia el castaño y hacia el mismo convirtiéndolos en humanos justo antes de que el agua se acabara en la habitación. Los 4 sujetos enfrente de ellos hicieron lo mismo...

    -¿Quienes...que son ellos...Nowaki?-preguntó Hiroki observándolos detenidamente, los 4 parecían estar más en estado “zombi”, pues tenían los ojos completamente vacíos y de color negro...sin embargo sus movimientos parecían demasiado agiles. Hiroki dedujo también que no hablaban, solo estaban interesados en acabar con ellos.

    -Hiro-san, mantente lejos de esto por favor...- pidió Nowaki preocupado, mientras trataba de ponerse al frente del castaño y extendía una de sus manos hacia los 4 hechiceros allí. Hiroki retrocedió un poco, no había visto a Nowaki tan temeroso- esto debo arreglarlo yo- mencionó.

    -¿Quiénes son esos magos?...porque son todos usuarios de la magia, ¿cierto?... ¿son fuertes? ¡Dime!- pidió explicaciones Hiroki, regresando a ver hacia un lado, como las paredes de piedra se habrían para mostrar un gran arsenal de armas de todo tipo. Hiroki tragó saliva mientras corría por una espada y regresaba al lado de Nowaki -¿Nowaki...quiénes son?-

    -no quienes son Hiro-san...sino...quienes eran- exclamó preocupado el tritón.

    Hiroki abrió muchos los ojos por la impresión....un momento...Nowaki le estaba diciendo...que esos magos estaban...¡¡¡ ¿muertos?!!!

    -¿q-qué...que dijiste?...-exclamó

    -esos 4...fueron los más grandes usuarios de la magia de su tiempo... fueron los anteriores líderes de la hechicería...los antepasados de Mason- explicó...dejando momentáneamente en shock a Hiroki...

    -...-

    ****************************************************************

    La noche ya había caído, y los pasillos de la mansión se encontraban a oscuras, ya casi nadie se encontraba deambulando, más que los chicos que les tocaba hacer la guardia y dos o tres encargados de mantenerse trabajando en el aula de las esferas de cristal. Las cortinas permanecían cerradas y solamente los pequeños insectos se escuchaban en la calmada noche.

    En la habitación más adornada de la mansión se encontraba su dueño plácidamente tendido ya sobre la cama, acostado de lado, con los ojos cerrados y con una ligera sabana cubriendo la mitad de su cuerpo. Este chico abrió inmediatamente sus ojos al escuchar como la puerta principal de su habitación era abierta, escuchó los suaves pasos acercarse hacia donde él estaba...cerró los ojos de nuevo...mientras sus labios mostraban una tenue sonrisa.

    -¿acaso no puedes dormir...Tsumori-kun?- exclamó con su voz suave el azabache...mostrando una sonrisa burlona. Escuchó una pequeña risita, después sintió como el lado vacío de su cama se hundió por el peso de otro persona.

    -¿puedo dormir contigo?- preguntó el rubio con un voz aniñada que causó gracias en Mason. Sintió como su espalda se pegaba al pecho del otro, como los brazos fuertes de su aprendiz lo apretaban por la cintura y un estremecimiento lo recorrió cuando sintió el aliento tibio del otro en su nuca.

    -...solo si no te portas mal- respondió en tono sugerente el oji- turquesa, seguido dejó escapar unas risitas que fueron imitadas por Tsumori.

    -mal... ¿en qué sentido?...amo- preguntó suavemente le rubio el oído del otro, mordiendo levemente el lóbulo de su oreja.

    -n-no juegues conmigo...baka...-exclamó el azabache reprimiendo un profundo suspiro, cuando sintió la mano de su novio meterse entre su camiseta y tocar directamente el suave abdomen del menor...y después más arriba...acariciando con calma los suave botoncitos, sintiendo como se endurecían al contacto...

    -no pretendo jugar sensei...esto va muy enserio...-respondió con voz ronca el rubio, mientras hacía que el menor se volteara y ambos quedaran de frente...Tsumori sin soltar de la cintura a su azabache.

    -...e-espera...- exclamó pausadamente. Tsumori había dejado de acariciarlo y solo lo miró a los ojos tan profundamente que sus mejillas se colorearon de un tierno carmín al sentirse tan atentamente observado. Ambos despertaron de la ensoñación “turquesa y miel” cuando el mayor juntó sus labios con Mason, y se hundieron en otra donde solamente existían los dulces y suaves labios del contrario...

    ............

    El futuro exitoso de Mason con la magia había sido asegurado incluso desde antes que hubiera sido concebido...no había duda...sería un usuario de la magia excepcional. Su madre una maga, su padre un brujo. Los tiempos para los usuarios de la magia en esa época eran difíciles, pocos eran capaces de no perder la cabeza. Por esas eras gobernaba entre todos los usuarios de la magia Gin, conocido también con el nombre de “Plata”, por la singular cabellera grisácea que lucía...Gin era un hombre sencillamente aterrador, aunque mantuvo el orden de manera estricta en todo el mundo trató a todos los magos y hechiceros con el desdén más grande que tiene alguien en su cuerpo. Entre tanta represión, un día pasó lo que se había venido avecinado...y que aunque muchos lo negaran...temían. Una nueva guerra entre magos, hechiceros, guardianes y brujos.

    Entre tanta locura y excitación de saber quién tendría el poder y de demostrar quien repudiaba más a quien empezó a rechazarse terminantemente la mezcla de estas dos, la descendencia en esa época fue nula...y si algún “bastardo” lograba “ver la luz” era cruelmente asesinado. Siendo así...Mason hubiera ocurrido con la misma suerte...solo que su cruel padre no contó con la valentía de su mujer. Por qué esa noche...cuando el brujo estaba frente a su hijo...mirando esos ojos tan turquesa y el cabello tan negro como el suyo no titubeó para lanzarle directamente un hechizo que acabaría con el pequeño desdichado...sin embargo la sangre que salpicó su rostro esa noche no era la del niño balbuceante, sino la de su mujer, la maga “de la suerte”...la cual emitió su último suspiro mirándolo con sus ojos decepcionados en un suave color turquesa...

    ..........................

    -T-Tsu..mori...espera por favor...-jadeaba el azabache sonrojado , mientras sentía como su hermoso rubio se entretenía lamiendo y succionado sus pezones, ya sobre él-...dame un respi...ro..¡ha!- emitió un gritilla cuando la mano traviesa de su ojimiel empezó a recorrer con suavidad la longitud de su miembro...

    -no puedo más...amor, ¿puedo...?...-exclamó levantando su rostro del pecho del menor, mirando con sus ojos miles y suplicantes los avergonzados ojos turquesa. Y es que desde que se “formalizó” su relación, no habían vuelto a repetir “aquello”...era un paso muy grande para Mason...ya que su cuerpo era un asunto traumático para él...mostrarlo...era algo que lo... avergonzaba y asustaba por igual...

    -yo...-

    ...........................

    A los 8 años Mason podría presumir de ser enteramente independiente, podía sobrevivir con la magia que el mismo había descubierto que sabía manipular. Si, su padre no pudo matarle, después de todo...ese mocoso era el vivo retrato de su mujer. Y eso le trajo problemas a Mason...problemas que acarraría por mucho tiempo; apenas bien entrados sus ocho años el cuerpo de Mason comenzó a madurar demostrando para pena del mismo que era un doncel...un perfecto y hermoso doncel, tal descubrimiento marcó la sentencia del oji-azul...por qué un mal día aquél hombre al que con tanta añoranza amó y veneró llamándole padre fue capaz de traspasar “esas” barreras con él. Su cabecita en aquellos momentos no entendían que es lo que sucedía...por qué su padre le miraba de aquella forma, le tocaba de aquella forma...solo sentía dolor...mucho dolor...y cómo cuando “esa” parte del mayor vibraba con ahínco dentro de su pequeño cuerpo su padre pronunciaba el nombre de su mamá...

    Tuvieron que pasar algunos años, para que el azabache comprendiera que es lo que pasaba. Cumplió al fin, sus dulces 12, su mirada cambió. Se volvió frío. Y una noche de invierno, hizo sin inmutar un solo musculo de su cara lo que cualquiera hubiera temblado con tan solo pensarlo. Mató a su padre. Apuñalándolo una y otra vez sin compasión. Una noche antes, el hombre totalmente ebrio le había confesado con descaro que él había matado a su madre...la oportunidad no se hizo esperar...y frunciendo el ceño, con el odio en su corazón, y sus ojos turquesas ocultos por su tupido fleco azabache terminó su trabajo allí...

    Vagó casi un año por territorios desconocidos para él...hasta que llegó a las temibles arenas del desierto donde sus inexpresivos ojos miraron con asombro el majestuoso castillo que se levantaba allí...si tan solo alguien se hubiera apiadado de él y le hubiera dicho que corriera tanto como pudiera lejos de allí...Por qué ese día en el que tocó las puertas del cantón y fue llevado ante un sonriente hombre de cabellera plateada cavó su segunda tumba...Su historia se había vuelto a repetir...solo que con un hombre de nombre Gin...y 100 veces peor...

    .............................

    -¿puedo...?-

    -...- la mirada turquesa miró con serenidad la miel. Mason emitió una pequeña sonrisa y dio un solo asentimiento- hazlo...despacio...- susurró, mientras entrecerraba sus ojos, y sus rostro estaba sonrojado de nuevo.

    Tsumori en un igual de emociones, entre sorprendido, agradecido, conmovido y amado se dispuso a reanudar su caricias para tratar de relajarlo, y poco a poco fue desprendiéndose de la ropa de su hermoso koi. Primero se deshizo de la estorbosa camiseta, lazándola hacia algún lugar, bajo la mirada azulina se deshizo también del holgado pantalón para dormir...el rubio se permitió acariciar con la yema de los dedos la suavidad de esas blancas piernas...

    -eres hermoso...Mason – exclamó depositando un beso en uno de los pies del menor, quien sonrojado quiso desviar la mirada- no lo dudes por favor...-

    -no digas eso...has puesto demasiado valor sobre mi...no valgo tanto como tú crees- exclamó con una tiste mirada apunto de surcar las lágrimas.

    -shhh- le calló Tsumori limpiando con sus besos las saladas gotitas que salían de sus ojos- eres importante para mí...tu pasado no me importa...quiero que seas mi presente y mi futuro...Mason...te amo- susurró robándole un beso tan profundo que ambos temieron por su respiración...sin embargo ninguno se atrevió a romperlo. Tsumori se abrió paso entre las piernas del menor y se recostó sin dejar todo su peso sobre el doncel, besándolo con tanta suavidad como si temiera se fuera a desvanecer en cualquier momento...

    .............................

    Mason lloró solamente durante los primeros 3 meses en su estancia en ese castillo, el resto de su dolor...se lo había tragado su orgullo. Comprobó en carne propia la crueldad de la vida, que nada es gratis y sobre todo que todo lo que quieres tiene un precio. A él le costó caro aprender...le costó caro ser un buen hechicero...porque por cada hechizo que ejecutaba mal...era una “noche” llena de golpes, por que por cada paso que daba de manera incorrecta le costaba ese dolor tan inmenso entre sus piernas el cual a penas y lo dejaba levantarse...porque por cada vez que hubiera insinuado tan siquiera un poco de “piedad” su castigo se había triplicado. Y se dio cuenta que Gin era un hombre malvado, peligroso y desalmado... Muchas veces Mason se quedaba despierto toda la noche mirando la blanca luna, que le sonreía tan macabramente...fruncía el ceño y se quedaba un tipo de trance cada vez que pensaba en su madre...porque la única “suerte” que él podría tener...murió con ella.

    A costa de burlas, humillaciones de todo tipo, de mucho dolor y de su dignidad misma Mason terminó su preparación como hechicero, 3 años después. Algunos meses después...la tremenda guerra que se había formado alrededor de la problemática acerca del líder de hechicería había crecido...pero esta vez se unieron por su propia cuenta al fin, para algo útil. Quitar del poder a Gin.

    Mason que se había mantenido informado de todo lo que pasaba supuso que sería una buena oportunidad para hacerse notar en el mundo de la hechicería. Pero aun había un pequeño problema. Los donceles no podían ser líderes de hechicería...

    .................................................

    El azabache dio un respingo agitado al sentir como un dedo comenzaba dilatar su pequeña entrada. Mientras tanto la otra mano seguí moviéndose a lo largo de su falo. Subiendo y bajando...acrecentado su excitación y deseo. Tsumori en cambio repasa con la mirada y de vez en cuando sus labios, las cicatrices y marcas en el cuerpo del menor.

    -no..no lo hagas...son horribles...-murmuró avergonzado Mason...esas eran marcas que quedaron en su cuerpo después de aquellas tantas noches de golpes y desmanes.

    -tal vez lo sean, pero tenemos diferentes ideas hacia ellas...yo las veo como marca de tu valentía...-exclamó continuando con su labor. El azabache ya no sabía en dónde meterse por la vergüenza, su cuerpo entero temblaba por todo lo que estaba pasando...

    -haaa¡¡....-gimió agudamente cuando sintió los 3 dedos dilatar su entrada- hay...ya...ya no aguanto...creo que...-

    -espera cariño...-pidió Tsumori al ver como su amor estaba a punto de llegar al orgasmo, escuchando sus propios jadeos...pues realmente le ponía demasiado ver a su amor retorcerse bajo su cuerpo...- quiero que terminemos juntos...-

    Mason asintió todo colorado, aunque no estuviera seguro de poder aguantar más...

    Sintió como el rubio abría aún más, si fuera posible, sus piernas colocándolas arriba de sus hombros, masajeó un poco su miembro, para nada mal dotado y comenzaba a hacer fuerza por entrar en él.

    -¡e-espera!...así no- murmuró con sus mejillas sonrojadas y la boca entre abierta... Tsumori apenas se enteró, cuando se encontró debajo del muchachito de ojos turquesas...este le sonreía con superioridad y coquetería galante...-dijiste...que querrías ver cómo había sido todo “aquel día” , no?...- exclamó aun con vergüenza pero con cierto toque de picardía al referirse al día en que mantuvo durante toda la “sesión” a Tsumori amarrado a la cama. Tsumori sonrió, prestando atención como el menor empezaba a acomodarse para sentarse sobre él.

    -¡hugg!- gimió el azabache, cuando al fin el glande penetró su entrada. El rubio gimió ahogado haciendo el mayor esfuerzo por no parpadear para ver TODO lo que tenía para el su doncelito-¡HAA!- ambos gimieron fuertemente cuando el oji- turquesa se vio completamente invadido por el miembro del otro...

    -huu...Mason...esto se siente tan...haa¡- el menor comenzó a moverse arrancando gemidos de éxtasis de ambos. El azabache puso sus manos sobre los hombros del mayor, y este sonrió coquetamente, parcialmente inmovilizado-¿te encanta dominarme no es así...cielo?- agregó con picardía. Mason como única respuesta sonrió de lado mordiéndose un labio avergonzado...

    -b-baka...-murmuró segundos después, para permitir que el mayor le tocara...

    .......................

    Ser un varón. Esa era la mejor idea...porque después de todo, ¿Quién podría descubrirlo?...

    Algunos meses después de que Gin renunciara, no por buena voluntad ,a su puesto, se decidió por elegirse a otro líder. Pocos habían fijado su vista en él...pero suponían que era fuerte...sus padres lo eran... y su desgraciado maestro también...tendría que ser un prodigio... ¿no?

    Con la desconfianza de ser aprendiz del bastardo, se decidió que fuera el líder, era joven, era fuerte....y era un “varón”...cumplía con todas las cualidades... ¿no?

    Con 16 años Mason asumió el cargo de líder de los usuarios de la magia. Ya era alguien, ya era reconocido, ya nadie pasaría por encima de él, todos tendrían que verlo hacia arriba...ya no había venganzas que cumplir, ni gente que matar, ni bueno, ni malo, ni magia oscura ni blanca...era imparcial...sin tacto, sin temor, sin remordimiento, sin piedad...

    Un día en el que un mago de edad avanzada acudió a sus ya reconocidas reuniones traía consigo a un muchacho que le llamó demasiado la atención...quizás era unos 4 años mayor que él...pero no era mucho. Y haciéndose el desinteresado se acercó a admirarle más de cerca...

    -hey...Miras...-habló al mago anciano, este lo reverenció -¿Quién es este muchacho...que yo sepa has terminado tus permisos de entrenamiento...-

    -Mason-sama, mis disculpas, pero me ha pedido que le enseñara magia, no pude negarme...sin embargo siento que soy demasiado viejo, mi hora está cercana...y temo sinceramente por mi nuevo discípulo. Está solo en el mundo...¡y que maravilla que es!...¡es extraordinario!- exclamaba el viejo, Mason que no había despegado la vista del nervioso muchacho, sonrió de lado.

    -entonces déjame quitarte la carga de encima...Miras...puedes irte- exclamó neutral. Los dos mayores se miraron mutuamente sin entender nada.

    -¿perdón, mi señor?- exclamó el viejo.

    -ya te lo he dicho, vete, yo me haré cargo del muchacho-

    -bueno...está bien, muchas gracias Mason-sama, ¡Tsumori-kun, agradece como es debido!¡te entrenará el líder de la magia negra y blanca, muchacho!- exclamó el anciano, el rubio, que hasta entonces había levantado su mirada miel al menor lo miró con agradecimiento sincero... dando un pronunciada reverencia. Mientras tanto Mason había permanecido con los brazos cruzados y la pose de chulería típica de quien se cree superior.

    -¡muchas gracias, Mason-sama, sensei!- escuchó la voz varonil del rubio que lo hizo estremecerse, Mason le miró un poco más y sonrió.

    -amo, dirígete así hacía mi...-demandó. El rubio asintió algo aturdido, pero sonrió y respondió...

    -por su puesto amo...-

    ................................

    -¡¡haa!!!... haaaa..haa...más..¡Tsu..mori..!..haaa...- el menor se retorcía éntrelas sabanas de seda de su elegante cama, la cual rechinaba por tanto movimiento sobre ella. Sus brazos acariciaban todo lo que podía del bronceado cuerpo de su rubio, mientras este, recostado sobre el embestía una y otra vez su cuerpo, haciéndolo vibrar de excitación. Sus piernas sobre sus hombros, y la boca de su oji-miel...a veces en su pecho, a veces en sus cuelo...a veces en sus labios...

    -Mason...te amo...te amo tanto...-exclamaba el rubio hundido en el cuello de su azabache suspirando el embriagante olor acaramelado...

    -yo también...yo también...te amo...mucho...tanto...no me dejes nunca- murmuraba el menor con real congoja, mientras se abrazaba mas fuerte a su pareja, este le regresó el abrazo , besando tiernamente todo su rostro, mientras seguía moviéndose dentro de él.

    -nunca....aunque me lo pidieras...- exclamó el mayor tomando a su sensei de la cintura para levantarlo y sentarlo, aun dentro de él, en sus piernas. Mason correspondió la acción y siguió deslizándose por ese cálido miembro...arriba...abajo...una y otra vez...

    -gr-gracias...ha...haa¡¡...ya..¡ya no puedo más!...- exclamó le azabache al borde de la locura y el orgasmo, sintiendo todo su cuerpo vibrar armoniosamente en temblores deliciosos que le recorrían todo el cuerpo.

    -¡haaa!- Tsumori gimió cuando sintió como su miembro era apretado deliciosamente por la cavidad de su azabache- ¡juntos mi amor!- pidió en su agitación. El menor tembló bastante , abrazándose a su cuerpo con fuerza, mientras el rubio dio una embestida tan fuerte que provocó un tremendo grito de placer en su oji-turquesa...Tsumori se dejó caer en la cama totalmente exhausto, mientras atrajo sobre su cuerpo a Mason, quien intentaba regular su respiración desesperadamente y con su rostro sonrojado...

    -te amo...-susurró con la respiración todavía entrecortada Tsumori, abrazando por la cintura a su azabache y buscando sus labios rositas...ahora rojos e hinchados por tanta “atención”. El menor no se los negó y respondió suavemente y cansado el beso...

    -yo también...gracias...-exclamó quedito a punto de quedarse dormido en el pecho cálido de su amor...este le miró curioso...¿gracias?...enseguida el azabache siguió hablando- ...gracias por hacerme olvidar...-

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    -esos 4...fueron los más grandes usuarios de la magia de su tiempo... fueron los anteriores líderes de la hechicería...los antepasados de Mason- explicó...dejando momentáneamente en shock a Hiroki...

    -...-

    Los ojos del castaño se abrieron de par en par, queriendo no creer lo que Nowaki le decía...esos...3 eras...peligrosos...¡muy peligrosos!...¡Nowaki no podría pelar solo con todos a la vez!

    -Nowaki....esto no...no creo que....¡es peligroso!-exclamó preocupado , sujetando uno de los brazos del oji-azul...este le regresó al mirada sonriéndole un poco.

    -no te preocupes Hiro-san, esto es otra prueba más, necesitamos terminarlas para salvar a mi pueblo...ya hiciste mucho por nosotros...ahora me toca a mí... además – exclamó dándole un vistazo a los 4 sujetos allí- dudo que Aikawa haya podido despertarlos con todas sus fuerzas....ella no podría...-

    El corazón de Hiroki logró tranquilizarse un poco...pero no del todo. ¡por kami, ¡querían que lo dijera?...pues si ¡no quería que le pasara nada malo a SU Nowaki!....

    -pero...-el castaño se quedó callado cuando Nowaki le dio un suave beso en los labios...

    -tranquilízate por favor, no pasará nada malo...- tranquilizó- ahora tenemos que terminar esto, ¿si?- el mayor asintió.

    -de acuerdo...cuéntame sobre ellos- pidió Hiroki, si no podría detenerlo, al menos o ayudaría...Nowaki sonrió, sin quitarle la vista a los 4 sujetos allí...no quería sufrir ningún descuido...

    -el primero que vez allí- exclamó señalándole a un hombre de estatura alta , cuerpo voluminoso y cabellos cortos en color verde -es Au, es uno de los más viejos magos de la historia...al menos el que reinó prisionero de esos 4, durante su estadía en el poder él fue el que logró hacer que se reunieran todos los usuarios de la magia...puso un orden increíble en el planeta...y estuvo en el poder cerca de 20 años, no era un hombre de guerras, pero se cuenta que tiene una fuerza descomunal- Hiroki asintió algo nervioso por la descripción.

    -Quien reinó después de su muerte en el liderato de la magia, fue Akihiro...es ese niño que vez allí- Hiroki miró sorprendido al muchachito de mirada perdida y cabellos rubios, ataviado en un traje de magia azul bastante elegante- verás...su nombre se traduce como “príncipe brillante”...y valla que lo era. Hiro-san debes saber que todos los usuarios de la magia necesitamos de nuestro instrumentos para canalizar la energía mágica...ya sea una varita, un bastón, una esfera, un cetro o un anillo- explicó mostrándole su anillo al castaño- Akihiro, fue el primero en aprender a analizar su magia sin necesidad de algún instrumento- Hiroki abrió muchos los ojos por la impresión- se podría decir que hasta ahora...los más fuertes magos que han existido en el liderato...son él y Mason-

    -eso es... aterrador...- expuso Hiroki. Nowaki continuó.

    -La tercera que estuvo a cargo, después del complot en contra de Akihito, debido a que era muy temido por sus habilidades, fue Haranu- Hiroki deslizó su mirada en la mujer de vestidos cortos en color negro y su cabello violáceo...con un arco de oro macizo en sus manos, este irradiaba una luz tenebrosa- su nombre se traduce como “lejana”, algo que queda muy bien para su habilidad....dicen que difícilmente fallaba una flecha...¡Hiro-san por favor aléjate de ella!....si una de esas flechas te llega a tocar...te paralizará de inmediato, Haranu, era maga, pero ante todo cazadora...fue la mejor en pociones durante toda su época...conocía todos los venenos existentes...-

    Hiroki tragó saliva preocupado...al ver como la maga preparaba su flecha con una sonrisa siniestra...

    -cuando ella renunció a su cargo por razones desconocidas, el puesto lo ocupó Gin...el...simplemente fue aterrador, convirtió durante su liderato a todo el mundo mágico prácticamente en su esclavo, cuentan que favorecía secretamente a los brujos...fue un hombre bastante cruel e injusto, nunca nadie conoció su verdaderos poderes... porque siempre tenía a alguien que peleara su guerras...cuando los usuarios de la magia no quisieron aguantar más sus humillaciones lo hicieron renunciar a su puesto...y en su lugar se quedó su aprendiz...Mason, es lo único que sé...-

    Hiroki escuchaba la historia bastante sorprendido, atemorizado y preocupado por igual. Miraba los rostro de esos fantásticos guerreros...y no quería creerlo...esta prueba era prácticamente imposible y Aikawa sabía eso...su vista se fijó en el círculo donde estaban las inscripciones...tal vez podría hacer algo con eso...pensó. Nowaki adivinó lo que pensaba Hiroki, pues miraba constantemente aquel cirulo extraño, que al parecer con leerlo habían aparecido esos 4...

    -Hiro-san, trata de descubrir que más hay en el círculo...trataré de distraerlos...- exclamó nowaki extendiendo su mano hacia el frente. Hiroki asintió algo nervioso- bien... ¡ahora!...- Hiroki había corrido hasta el circulo y en el trayecto esquivó una flecha de Haranu, derrapándose en el suelo, mientras tanto Nowaki se encontraba peleando con los 3 chicos...

    “¡Kami, ayúdanos!”...pensó el castaño empuñando su espada mientras miraba a la peli-violeta apuntando una nueva flecha hacia él...

    ********************************************************************

    Misaki y Masamune caminaron quizás otros 3 días, observó uno con asombro otro con desgracia, como el paisaje se iba tornando cada vez ms blanco y frío. La nieve ya estaba casi en su totalidad en todo su recorrido y había sido realmente complicado encontrar refugio esas noches...pues temían de los animales salvajes como osos en las cuevas y de insectos y otro animales más pequeños en los árboles. El frio se había vuelto cada mas insoportable y la comida escaseaba mas...Mune temía que fueran a perderse en alguna tormenta...pero al parecer aun iban en el camino correcto.

    Aquél día, para sombro de los dos, no nevaba cuando continuaron con su viaje, el sol salía ttpimido de entre las nubes frías...Misaki agradeció mucho ese gesto, porque el ya no sentía sus pobres pies, enterrados entre tanta nieve, un poco de calor no le hacía daño a nadie. Caminaron con el agradable clima al menor por unos 3 horas más, hasta que llegaron a un lugar en donde podían divisarse las montañas...ambos sonrieron...estaban ya muy cerca.

    -ya casi Misaki, no pierdas las fuerzas ahora- exclamaba une al ver al muchachito respirar algo agitado, mientras se recargaba en el tronco de un árbol seco; a pesar de todo, no había podido evitar que el oji-verde pescara un resfriado...y es que era muy normal...era en extremo difícil siquiera poder crear fuego...

    -lo siento Mune...estoy retrasándonos- exclamó el oji- verde sobando el puente su nariz...

    Takano iba a decirle algo, cuando un ruido los alertó a ambos y regresaron a ver hacia tras del tronco...

    -arww...-escucharon un sonido parecido a un rugido débil. Misaki mostró una sonrisa al observar al pequeño animalito allí...parecía una pequeña bolita de pelos blanca. Mune parpadeó un poco, mostrando también una sonrisa de lado...

    -es un...¿osezno?...-preguntó el mayor hincándose para ver al animalito, el cual ya se movía frenéticamente en brazos de Misaki quien no se había aguantado las ganas de cargar al peludo animalito.

    -¡un bebé oso!- exclamó con alegría Misaki mientras acariciaba la orejita del osito.

    -Misaki, creo que sería buena idea, dejarlo aquí y continuar con nuestro camino, si un osezno anda por aquí quiere decir que están sus padres cerca, ¿no lo crees?- exclamó Takano algo preocupado. Misaki hizo un puchero y dejó al final osito en la nieve.

    -umm- exclamó Misaki al ver como el osito se sentaba cómodamente en la nieve, quería llevarlo consigo...era tan tierno. Pero no pudo formular otro comentario, debido a que el pequeño oso comenzó a irradiar una lucecita blanca , Misaki abrió los ojos impresionado, Mune no se quedó atrás. Y cuando pudieron al fin verlo de nuevo....ya no era un oso...si no un cachorrito...si uno pero de...

    -¿un lobo?...- exclamó Takano impresionado mirando como el “nuevo” animalito rascaba detrpas de su oreja con una de su patitas.

    -es un bebé lobo...-exclamó Misaki impresionado, ¿Qué significaba eso?... Los dos se quedaron callados mirándose entre ellos y seguido al...¿lobezno?...

    -Asaki...deja eso ya, ven acá- escucharon la varonil voz de un nuevo personaje. Tanto Misaki como Masamune buscaron con la mirada al dueño de esa voz, hasta que dieron con “él”. Caminando hacia ellos con paso lento se acercaba un hombre de algunos 26 años, de complexión fuerte y alta. Cabellos cortos y castaños, y ojos plateados. Vestía nada más unos pantalones de lana blanca, unas botas grises y una bufanda con esos dos colores. El primer pensamiento de Misaki fue...”¡¿Qué acaso no tiene frío?!” con el rostro sonrojado , pues el muchacho iba con el pecho casi desnudo. Después reparó en las palabras dichas por este...¿¡Asaki!?, ¿acaso le hablaba al oso-lobito?...Al aparecer habían pensado lo mismo, porque Mune también regresó a ver hacia donde estaba el cachorro. ¡YA NO ERA NI OSO NI LOBO!....En su lugar había aparecido un niño, un bebé de aproximadamente 2 años, de cabellos castaños y ojos entre azules y grises, quien feliz de la vida reía extendiendo su brazos hacia el hombre oji-gris.

    -ven acá cachorro- exclamó con una sonrisa el recién llegado, capturando en los brazos al pequeño quien caminaba con dificultad en la nieve hacia él. Seguido miró a Misaki y a Masamune- siento las tardanzas...a Chiaki se le da mejor esto...- rio algo nervioso con el pequeño en brazos. La cara de los dos humanos era un poema...él era...él...-me alegra que ya hayan llegado...al parecer se tomaron muy enserio lo del tiempo- exclamó con una leve risa- Pues al parecer, esta es la última parada antes de ir con Aikawa...un placer, mi nombre es Hatori, el guardián de las montaña nevadas...-

    .
    .
    .

    Continuará...
  11. .
    Hola hola, ¿Cómo están?...etto...espero que bien n.ñ¡....perdón por la tardanza pero había estado muy ocupada en la escuela...¡aún no se como pude terminarme de leer 3 libros en 4 días! Teniendo mas tarea que hacer¡¡¡ T.T, estaba realmente KO¡¡... pero en fin. Ahorita ya estoy masi menos desocupada y he podido traerles un intento de capitulo XD.... y pues bueno, muchas gracias por comentar...el encuentro con Aikawa está ya MUY cerca¡¡...espero les guste la conty, respondo sus comentarios...


    romantica_1 : hola gracias por comentar, me alegra que te vayya gustando como todo...jejeje si ya apareció Kisa... y pues bueno...esta parejita no es de las principales...pero me agrada bastante por eso hice mención de ella...je ya verás si acertaste o no al acertijo XD, pues Manami llegó para robarse a Takahiro XD... pronto sabrás que pasa con ellos jajaja... y con el resto de los personajes...espero te guste la conty...saayo¡¡ besos de fresa¡¡

    Melyoan; hola¡¡¡, como estás?, me alegra que te vaya gustando como va la historia...jajaja ya verás los avances de Haruhiko, jajajaja sabrás pronto que pasó con los acertijos y Yukina...por ahí ya creaste tu hipótesis XD...pronto sabrás que pasa con los egosit... y OBVIO que habrá mas drama XD.... a mi también me encanta¡¡¡...saludos querida Mely, espero te guste la conty, besos de sandía y varazos de oso panda para tu¡¡¡

    Anne onodera takano: hola ¡¡¡ gracias por comentar¡, que bien que te gustara la conty, verás que pasó detrás de losa certijos de Kisa y la conquista de Haruhiko...:D¡¡¡, espero te guste la conty, besos de piña para tu¡¡







    Capítulo 23: “Soy el futuro amor de tu vida”





    -¿y bien cuál es la respuesta…Misaki…?-


    -etto…yo creo que la respuesta es…-
    .
    .
    .

    -¿si?...- presionó con énfasis Kisa, sabiendo que probablemente era el acertijo más confuso. Misaki por otra parte, trataba de dejar de temblar… y concentrarse en su pregunta… si fallaba…no podrían pasar…¡no podría fallar!. Cerró sus ojos , recordando episodios agridulces de su niñez…cuando su madre aun esteba con él…cuando jugaban en la pequeña terraza de su casa, cuando la acompañaba a vender verduras al pueblo, cuando ocupada lavando ropa ajena le cantaba dulces canciones al compás del canto de las aves, cuando le contaba historias antes de dormir, cuando…¡un momento!

    -¡ya lo sé!...-exclamó con euforia el oji-verde abriendo sus ojos de sorpresa, sorprendiendo un poco también a los que esperaban con ansias la respuesta- creo…-

    -pues dilo cariño, se acaba el tiempo…- exclamó Kisa retando con la mirada al muchachito castaño.

    -aquel instrumento…que es de viento…que no puedes verlo u tocarlo…y que tiene más de un sonido…es- Misaki susurraba nervioso, mientras el resto escuchaba ansioso- es…la voz-

    -ja¡..la respuesta es…ES CORRECTA- exclamó Kisa contrariado …aunque después quitó su ceño fruncido y sonrió complacido…le habían ganado…bueno…casi. Volteó a ver a Yukina, quien no había despegado la vista de él, le guiñó el ojo con coquetería discreta, este rio suavemente. Mune volteó los ojos y Misaki se sonrojó ante el atrevimiento.

    -ejem…-dispersó las ideas Kisa tomando un ligero color carmín en sus mejillas , mientras quitaba su mirada de Yukina- …pues felicitaciones chicos…han ganado el derecho de cruzar el puente…sin embargo…solo podrán cruzar dos de ustedes…¿y bien?....¿quién se quedará?...- preguntó con una sonrisilla traviesa.

    Masamune fijó su mirada en Yukina quien sonreía como idiota…y identificó algo más en el. Takano frunció el ceño molesto- ¡maldita sea Yukina…si querías quedarte lo hubieras dicho!¡y no perder el maldito acertijo al propósito!...¡¿Qué tal si alguien no acertaba idiota!- exclamó alterado. Yukina rio largamente, seguido de la risilla de Kisa. Misaki apenas lograba entender lo que pasaba.

    -jejeje, no te enojes Masamune-san…de todos modos no pasó nada malo- exclamó despreocupado Yukina.

    -idiota…-susurró Mune

    -¿entonces aquí nos separaremos Yukina-san?- exclamó Misaki acercándose al peli-chocolate, este le sonrió.

    -pues parece que sí, pequeño Misaki- exclamó dándole una mirada fugas a Kisa- de cualquier forma eran ustedes los que tenían que llegar hasta el final- explicó con una sonrisa- …de todas maneras gracias por dejarme viajar a su lado por este tiempo…seguro que nos volveremos a ver- exclamó dando un paso hacia atrás. Mune relajó su ceño fruncido y sonrió de lado, Misaki le dio un abrazo.

    -está bien…- aceptó Misaki- ¿pero por qué estás tan seguro?...-preguntó con curiosidad Misaki.

    -por el simple hecho de que cumplirás la misión…completamente- respondió Kisa sonriendo de manera enigmática. No digo nada más, si decía algo el futuro podría cambiar…y hasta ahora todo iba bien…Mune comprendió el sentido de la frase…y agradeció que el testarudo mago no hablara de más. Misaki frunció el ceño más confundido que antes -¡pero bueno a lo que importa!- exclamó Kisa- ¡abriré el puente para ustedes!- anunció con una sonrisa.

    Muy pronto todos pudieron observar como el joven mago levantó un poco su bastoncillo mágico y lo golpeó contra el suelo 3 veces…justo en la orilla del acantilado…Misaki vio con sorpresa como pequeños hilillos de colores cruzaban en forma de arco de un lado a otro…hasta formar un pequeño arcoíris…con pasamano plateada…Con sorpresa y algo desconfiados Mune y Misaki cruzaron el puente…cuando estaba por alejarse el ojiverde se despidió con un movimiento de mano de los otros dos…quienes respondieron el saludo…sin embargó enarcó una ceja muy extrañado al ver como Kisa al parecer había susurrado algo…Misaki trató de leer en los labios del mago algo como:

    “-te veremos en tu boda…en Usami-“

    Misaki abrió muchos los ojos... ¡seguro que vio mal!...después de aquello solo se dedicó a seguir a Mune….eso fue extraño…

    Mientras tanto…Yukina no despegó la mirada de sus dos nuevos amigos hasta que los perdió de vista…después fijó su mirada en el hermoso mago doncel a lado suyo…sentado de nuevo en la extraña roca con las piernas cruzadas, dirigiéndole una sonrisa coqueta…él le regresó la sonrisa…

    -¿y bien?...teníamos tu y yo un asunto pendiente…chico lindo…-exclamó Kisa moviendo sus piernas de adelante hacia atrás sin despegar su vista del otro.

    -¿Qué propones?...-preguntó el ladrón…acercándose peligrosamente al mago respirando casi sobre sus labios…este abrió la boca un poco perdiéndose en el hermoso rostro de ese humano…

    -¿te…-susurró el menor tocando con su dedo índice el cuello del mayor- gustan las apuestas?- concluyó pasando el dedo por todo su pecho hasta su estómago con sonrisa ladina. Yukina sonrió.

    **********************************************************************

    Los ojos avellana se abrieron lentamente, parpadeando un poco al hacerlo. Hiroki se vio de inmediato en su habitación en Ayami, y por primera vez en mucho tiempo se sintió tan ligero y despejado de todos sus problemas…sonrió casi involuntariamente. Cerró sus ojos un momento más…hasta que recordó algo… ¡ayer Nowaki y él!...entonces su ojos se abrieron de par en par y sus mejillas se sonrojaron de inmediato, y volteó su mirada hacia un lado…sin saber si quería o no encontrar al joven oji-azul allí… a su lado…

    La decepción que sintió al ver el otro espacio vacío le hizo entender que si quería…

    Sacudió un poco su cabeza para alejar esos pensamientos vergonzosos…se sentó lentamente en la cama, notando hasta ese momento que se encontraba totalmente desnudo cubierto solo por una delgada sábana. Sonrió casi como idiota recordando todo o que había pasado hace apenas unas horas…la tranquilidad de su corazón era inigualable al descubrir cómo sus sentimientos era correspondidos con tanta pasión por su lindo tritón. Y el recordar todos esos besos y esas palabras bonitas dirigidas solo a él, no pudo evitar suspirar sonrojarse todavía un poco más, poniéndose lentamente de pie envolviendo en su cintura la sábana…se dirigió a un pequeño espejo en un tocador inclinando un poco su cuello, viendo allí una marca muy roja…

    -¡maldita sea Nowaki…esto es tan…visible!- exclamaba refunfuñado el castaño tocando con sus dedos la marca. Mas el oji-avellana , casi da un brinco del espanto al escuchar una divertida y discreta risita…reconociéndola de inmediato…

    -jejeje, no escuché esa queja anoche…Hiro-san…-

    Hiroki regresó a ver hacia la puerta encontrándose con su….¿novio?...mirándole divertido recargado en el marco de la puerta ataviado perfectamente con un traje de príncipe bastante elegante…que lo hacía ver más guapo. Hiroki se sonrojó de nuevo…recordando que estaba desnudo solo cubriéndole la sábana.

    -será porque no me dejaste ni hablar…tonto- exclamó enfurruñado Hiroki tomando asiento en la cama, en un claro intento por que Nowaki dejara de mirarlo tan atentamente.

    -¿debo tomarlo como un cumplido?-bromeó el azabache

    -¡idiota pervertido!..-le regañó sonrojado, Nowaki rio un poco mientras se arrodillaba para quedar a la altura de Hiroki -…me refería a…que dirán los demás al verlas…-exclamó avergonzado tratando de tapar las dichosas marcas con sus manos.

    -dirán… lo mucho que te amo…y del por qué ahora me perteneces…- respondió el tritón muy cerca del rostro del mayor…

    -yo no te pertenezco…baka- exclamó en un susurro y con su ceño fruncido Hiroki, sintiendo rozar los labios del menor con los suyos…muy pronto el beso apareció en toda su regla…acariciándose los labios mutuamente mientras mantenían sus ojos cerrados- Nowaki…no- habló el castaño al sentir como las manos de Nowaki habían tomado las suyas, que sostenían la sabana azul que cubría su cuerpo. El menor detuvo todo acto dejando un beso cortito en los labios ajenos.

    -lo sé…te amo Hiro-san…-exclamó el tritón abriendo sus ojos, juntando su frente con la de su hermoso castaño.

    -yo también…-susurró apenas con voz audible el oji-avellano, sintiendo como su cuerpo enterito temblaba-¿ a dónde fuiste hace un rato ?...- preguntó con tono enfurruñado-celoso pegando su rostro al hombro del menor para evitar su mirada. Nowaki sonrió con gracia por la indirecta pregunta “¡¿Por qué no estabas a mi lado?!”…

    -haa..fui a hablar con mi madre…-respondió con una sonrisa Nowaki. Hroki se sintió estúpido por eso.

    -ho….Hisa-san…- murmuró algo cohibido -¿y qué dice?- preguntó interesado.

    -nos había mandado llamar a ti y a mí para acordar cuando planeas regresar a la prueba de Aikawa…y también…asuntos más privados…-exclamó con un tierno pucherito…Hiroki abrió muchos lo ojos para después fruncir el ceño.

    -¡¿le dijiste lo que paso entre nosotros, Nowaki?!- exclamó casi aterrado el castaño, sin perder el color rojo de sus mejillas.

    -bueno…no exactamente…¡Hiro-san!...ella… se dio cuenta…y no sé cómo. Simplemente hizo que hablara…- dijo como niño regañado Nowaki. Hiroki solo suspiró…esa era el poder de las mamás…seguro notan cuando algo pasa…ahora el problema era Hisa-sama…seguro estará sobre los 2…exclamó todo sonrojado.

    -pues ni modo…déjalo…ya, tenemos que ir cuanto antes con tu mamá- exclamó Hiroki. Muy a pesar del azabache Hiroki lo sacó de su habitación para asearse y arreglarse para la visita a su “suegra”….

    ………………….

    La reina de Ayami miró con sus intensos ojos azules como sus dos tritones favoritos nadaban con cierta lentitud hasta donde estaba ella. Hisa se permitió sonreír un poco y hasta dejar escapar una risita…desde que los vio por primera vez juntos….supo que se quedarían así…

    -buenos días…Hiro-chan, hola otra vez cariño- saludó respectivamente a ambos la reina, viendo la vergüenza de su hijo y la cabeza gacha de Hiroki…seguramente sonrojado. Casi ríe –Hiro-chan…pero que cambio con tu chaleco…¿me preguntó por qué será?- exclamó con media sonrisa, observando como Hiroki vestía otro “modelito” de chaleco uno que tenía un pequeño y coqueto cuello.

    -hola madre ya traje a Hiro-san, como querías- respondió Nowaki.

    -buenos días Hisa-san…me alegra saludarle- exclamó el castaño al fin dirigiendo su mirada a la reina quien le sonreía abiertamente. Esta rio un poco sin poder evitarlo y se levantó de su trono a abrazar al castaño.

    -cariño…¿Qué dije de acerca de las formalidades?...me alegra que estén juntos…-murmuró la reina con infinita ternura- no hay mejor elección que tú para mi hijo…bienvenido a la familia- Hiroki sonrió abiertamente y le regresó el abrazo.

    -gracias Hisa-san…- exclamó el castaño separándose al fin de la peli-azul.

    -no hay porqué cariño…es verdad que me pone muy feliz que ustedes hayan resuelto sus asuntos…pero aun queda pendiente le asunto de la prueba…-

    -no se preocupe, por favor…yo espero que mañana podamos regresar al lugar….y si todo va bien terminar todo mañana mismo…-aseguró Hiroki. Hisa sonrió igual que Nowaki. El tiempo pasó entre pláticas algo vergonzosas y e incomodas y comentarios que Hiroki clasificaba como “fuera de lugar”…si todo esto funciona…pensaba Hiroki…no quería saber que sería de ellos si juntaba Hisa con su madre…

    Era más o menos medio día cuando tanto Hiroki y Nowaki se despidieron de la reina y pretendían salir de palacio cuando un pequeño personaje les detuvo a ambos…

    -¡hey Nowaki-niichan!- escucharon el chillón gritillo.

    -¿suki?... ¿no deberías estar en la academia?- preguntó acusadoramente Nowaki.

    -pues si…pero…¡Sali temprano!- exclamó el pequeñín de cabellos azabaches. La vista del pequeño doncel se fijó en Hiroki y sonriéndole de manera casi eufórico le habló -¿…puede decirte Hiro-niichan?...¡si, si!¿puedo?- Hiroki se sonrojó notablemente sorprendido.

    -esto… ¿por qué tendrías que llamarme así, Suki-chan?- preguntó el castaño, Nowaki reía bajito.

    -¡pues porque te casarás con mi hermano¡…¡¿no es así?!- gritó emocionado. Hiroki estaba prácticamente en color carmín y a mil de sorprendido mirando al pequeño.

    -pues… esto yo…-

    - debo decirte que aunque al principio no me agradaban la idea…ahora he podido pensarlo y me agradas mucho…Hiroki-san…por eso quiero empezar a familiarizarme contigo… ¡verdad que se casarán?... y vivirás aquí con nosotros…-Suki hablaba con emoción, mientras tanto Hiroki dejó de sonreír- ¡saldremos a pasear las mañanas a ver el cardume dorado!...¡será genial pasar todo el tiempo contigo!...¡y cuando sea tío!...¡waaa…. ya me imagino…hee Nowaki-nii-chan…te gustaría que fuera su primer hijo…niña o niño?...por qué te quedarás aquí…¿cierto Hiroki-san?…yo-

    -Suki…basta…-exclamó Nowaki serio. El doncito dejo de hablar sorprendido por el tono que utilizó su hermano…y después miró al castaño…Suki observó cómo los ojos de Hiroki se llenaban de lágrimas…Nowaki a un lado trataba de calmarlo… ¿Por qué lloraba?...¿había dicho algo malo?....

    **************************************************************************

    -… ¿a-amo?...- exclamó el muchachito, aprendiz de magia que se encargaba de resguardar la puerta de a entrada. Sus ojos perla se abrieron en demasía por la sorpresa. Otros cuatro de sus sirvientes se quedaban también parados en su lugar sin poderse mover del asombro.

    -buen día Kio- saludó Mason con una sonrisa, mientras caminaba con naturalidad, su vista turquesa a la izquierda, especialmente donde estaba una muchachita con una tetera de porcelana finísima- buen día chicas- saludó a las 3 mujeres- Niwa, disculpa las molestias pero no querré el té de la mañana por el día de hoy, si lo apetecen pueden tomarse la libertad de beber cuanto quieran, si me disculpan, debo continuar mi camino- exclamo despidiéndose de sus sirvientes. Estos seguían con la boca abierta...¿acaso...ese que les había tratado como personas ....era ¡Mason!?...¡JAMÁS! habían visto a su sensei tan sonriente , tranquilo y de buen humor...¿pues qué había pasado?...además ¡¿Por qué rayos caminaba solo por la misión cuando podía mandar a llamar a quien quisiera para que le diera informes de lo que pasaba?!....

    Los cinco sirvientes siguieron con la vista la figura elegante de Mason hasta que desapareció por el pasillo...

    ..............................................

    Mientras tanto en una enorme habitación con mesas por doquier, con un montón de “esferas de cristal”, los encargados de monitorear “el mundo mágico” se encontraban en investigar todo lo que pasaba en la actualidad, en especial, con el asunto de la prueba de Aikawa. Tsumori por su parte, como encargado de esa aula, permanecía en el centro del cuarto, concentrado en una esfera de cristal especialmente más grande y brillante que el resto, sin embargo en su rostro permanecía una sincera y enorme sonrisa...un peso que traía encima...ya no estaba ahí. Una felicidad en el pecho tan grande que temía por su débil corazón y el loco saliera corriendo de su lugar.

    El sonido de la manija de la puerta moviéndose para abrirse alarmó a todos los hechiceros ocupados allí. Tsumroi levantó mirada hacia el frente para después sonreír tontamente con los ojos brillantes.

    -buen día chicos...Tsumori...-

    El resto de los sirvientes allí se sorprendió con gran razón abriendo los ojos y deteniendo su trabajo de inmediato y se pusieron de pie agachando al cabeza en señal de respeto.

    -...sensei, que sorpresa verle por aquí- exclamó Tsumori casi de manera pícara con una sonrisa en el rostro. Mason levantó una ceja y sonrió de lado devolviendo “el cumplido”. El resto de los hechiceros los miraban curiosos y sorprendido... ¿qué pasaba...exactamente...allí?

    -muy buen día Tsumori-kun, me complace en demasía que mantengas el orden y el eficiente trabajo en esta aula, estaré esperando informes de los avances y de cualquier inconveniente que surja en el trayecto...si pasa algo háganmelo saber por favor...debo retirarme...hasta otro momento- se despedía el oji-turqueza, dejando a más de uno pasmados por el cambio tan....radical...-hoo...casi lo olvido...-exclamó dándose la vuelta mirando al rubio quien sintió un estremecimiento recorrerlo-...Tsumori kun...te espero esta tarde en mi oficina para discutir los... detalles de la visita al “palacio rojo”...-exclamó con media sonrisa...

    -claro sensei...-

    -de acuerdo, hasta entonces...-

    Fueron alrededor de 20 minutos en los que nadie hizo o dijo nada...tratando de asimilar que es lo que había pasado allí.

    -esto...Tsumori-san...-habló una muchachilla toda pasmada- me temo que fuiste el ultimo que vio sensei “normal”...así que dime...¡¿dónde está Mason-sama y que has hecho con el?!-

    Tsumori se permitió soltar una leve carcajada, y sus compañeros tenían toda la razón para preguntarle...pero la cosa era que la asunto solo les correspondía a ellos dos...aunque debía admitir que...de verdad que el cabio era para admirarse.

    -no importa chicos...regresemos al trabajo- exclamó...sus subordinados se miraron entre si , sin saber todavía que pasaba...y decidieron continuar...total...a lo mejor era pasajero...

    Aquel día en que Tsumori y Mason habían confesado su amor habían dejado claro bastantes cosas...y habían dejado “atrás” otras tantas...sin embargo el que más notario cambio tuvo fue Mason...y es que no era que fuera de alguna extraña manera más “influenciable”...si no todo lo contrario. Tsumori se dio cuenta de algo grande...algo ENORME...él era el único que tenía el privilegio de derribar las murallas del azabache cuantas veces quisiera... y Mason no se oponía en lo absoluto. Tsumori había prometido al oji-turqueza protegerlo...protegerlo con su propia vida y de el mismo si fuera necesario...pero había algo que aun ATERRABA a nuestro hermoso “sensei” y eso era la aceptación.

    Eso...era algo que Tsumori aun pensaba como “atacar”...y es que... ¿cómo podría borrar tan fácilmente toda una vida de dolor, de humillación, de traición y de abusos?...SI, Mason le había contado toda su historia...aquella que lo había orillado a ser como era...la historia de un huérfano que entrego absolutamente TODO lo que tenía para no morir, y sentirse por una vez en su vida...importante...

    **********************************************************

    Los rayos del sol anaranjados y rojizos iban despareciendo poco apoco dando lugar a la negrísima noche. Mientras tanto en una habitación de colores cremas dos chicos platicaban y reían muy animados, acostados en la cama, mientras dos cachorritos jugaban entre las sabanas sobre ellos. En el buró a lado de la cama permanecían dos charolas con platos de porcelana vacíos , que seguramente hace unos momentos estaban llenos de una exquisita merienda.

    -jajaja...¡¿entonces te dijo por que no podría asistir en medio de la cena?!- hablaba divertidísimo el oji-miel.

    -jejeje, pues si...creo que lo debía alterar mas de la cuenta jajajaja- contestaba Haruhiko.

    Habían pasado otro días más, los cuales el oji-gris había aprovechado muy bien...al parecer cada día le parecía más llevadero el ir a hacer su “trabajo” de conquistar a su lindo doncelito...solo bastaba con ver sus lindos ojos y su radiante sonrisa para olvidar todo su sufrimiento ¡y así estaba!...como cachorro tras todo lo que él decía o hacía...

    -haaa...-emitió un gran suspiro Keiichi, Haruhiko lo volteó a ver...el menor había cerrado sus ojos, mientras unos de los cachorros se había acomodado en su pecho tranquilamente...el castaño claro le acariciaba la cabecita...- no se Haruhiko...que será lo que pasa conmigo...siento...siento que tal vez nunca podre recordar nada de lo que pasó...como a ti - exclamó tristemente mirando también hacia un lado...ambas miradas se conectaron de manera especial sin ser capaces de separar...considerando que ambos estaban costados en la cama del “enfermo” no parecía buena idea que se acercaran más...- por alguna razón- continuó Keiichi- siento que ya te conozco...y que eres muy importante para mi...pero...¡dime la verdad Haruhiko!...siento que te estoy lastimando sin saberlo...¡¿es verdad?- preguntó casi con lágrimas en los ojos. Haruhiko lo miraba sorprendido y con una lagrima apunto de surcar sus ojos grises...con tremendas ganas de decirle que no importaba nada...que todo estaba bien ,que lo amaba con todo su corazón y de llenarle sus labios rosados de muchos besos...pero...las cosas no eran tan sencillas y solo desvió la mirada- ¡Haruhiko!... ¿porque siento esto?...- preguntó finalmente. Haruhiko ya se había sentado en la cama...separándose un poco de Keiichi y con el otro cachorro en las manos...sonrió a pesar de todo....no podía echar a perder sus planes...

    -quien sabe...-

    -¡¿cómo que quien sabe?!...esto es malo...yo...-intentaba refutarle Keiichi quien se había sentado también en la cama prestándole mucha atención al oji-gris.

    -quien sabe...-exclamó de nuevo Haruhiko, solo que esta vez Keiichi adivinó que seguiría hablando- tal vez...soy el futuro amor de tu vida...- exclamó con una sonrisa burlona. Keiichi atinó a sonrojarse al mismo tiempo que sonreía...quizás... ¿esperanzado?...

    -¡baka!...-
    .
    .
    .

    Continuará...
  12. .
    Hola Mely¡
    me alegra que estés bien...yo como ya tomo vitaminas tampoco tengo gripe xD¡

    Me encanta como va la historia¡, te quedó algo corta la actu, pero me ha fascinado...
    jaajajaja que risa cuando escupen sus bebidas por escuchar la edad de mi hermoso
    Shinobu XDDD.... espero con ansiasss la parte 2¡¡.

    Y a verás que recuperas tus lectores querida Mely, de verdad que es un fic muy bueno
    , esperaré la conty¡¡

    besitos de mango para tu¡¡, nos leemos luego¡

    Misagi * *
  13. .
    Hola hola¡¡¡, cómo están, yo algo cansada…llegué anoche con mi familia de ir a comprar a otra ciudad el vestido de XV años de mi hermanita :P, pues bueno, ya está la conty, muchas gracias por comentar, me hacen muy feliz¡¡¡ :D, les debo las respuestas a su comentarios, seguro los respondo para la próxima¡¡¡…veremos hoy la última prueba¡¡ y un personaje esperado por muchos XD¡….espero les guste¡, agradecimientos y besos de mandarina especiales para: Melyoan, romantica_1 , Anne onodera takano.






    Capítulo 22: "Quinta prueba: el acertijo del guardián del puente”





    La tarde ya había caído, y el reino Usami era un completo drama. En primer lugar estaba la ausencia de Akihiko y la esperanza próxima de su regreso. En segundo lugar se esperaba por parte de las autoridades pertinentes y miembros de los concejos de varios reinos la asistencia de Hiroki con motivo de un adelanto de su boda con Haruhiko. En tercer lugar el problema de Keiichi y su memoria, el cual no había mejorada ni un poco. En cuarto lugar Haruhiko, el cual había caído en una depresión tan extrema que había sido muy complicado el que siquiera le dirigiera la mirada a alguien, y no había parado de llorar en ningún momento. Y como por si no fuera suficiente hace dos días habían recibido Asuka y Hitomi una carta de un reino lejano, el cual “formalmente” le declaraban la guerra…Por alguna razón la información de que el capitán de la guardia de Usami no estaba en el reino llegó a varios oídos envidiosos y…aprovecharían la situación… Asuka pensó que la declaración había tardado un poco porque sabían que en el próspero reino se encontraban 3 príncipes presentes que podrían defender el reino…Keiichi, Haruhiko y Yura (los cuales por cierto, no sabían se encontraban de la peor manera). Sin embargo…la “tregua” no duraría demasiado…

    Estos y otros problemas aquejaban a la pobre Asuka y a su esposo, el rey, el cual no sabía ya cómo responder a tanta problemática. Al punto de las 7 de la tarde, como era costumbre desde hace 4 días que habían estado allí, tanto Kaede como Yura iban a visitar a Keiichi a su habitación. A pesar de que solo se había torcido un tobillo y prácticamente ya podía caminar, Asuka no le había dejado levantarse de la cama, por lo que el oji-miel no se había levantado de allí. Con tristeza Keade tuvo que resignarse a no llevar con ellos a Kioshi, primero para detener las constantes preguntas de su doncel mayor…pues Keiichi era inteligente y estaba segura que ya había descifrado el parecido que tenía con ellos. El médico que lo atendía les había hablado de una posible teoría de lo que él creía que sucedía con la memoria de Keiichi…y para la desgracia de todos era lo que pensaban…el castaño no recordaba nada de todo aquello que lo había hecho sufrir, en pocas palabras, no recordaba nada desde que conoció a Sousuke…al parecer la estancia en el bosque del recuerdo le había dejado bastante afectado… y hasta la fecha no tenían ni la mínima idea que fuera a tener mejora…

    La noche ya había entrado. Haruhiko miraba por la ventana totalmente absorto en sus pensamientos melancólicos la hermosa luna que brillaba con todo esplendor y belleza. Sin embargo su tranquilidad se vio interrumpida, no por un toque en la puerta de su habitación temporal, sino por el sonido que hace una manija al ser girada. Haruhiko vio con un poco de sorpresa como Yura entraba a su habitación. Su mirada gris se encontró con la idéntica del hermano de su amor…

    -¿Yura?- exclamó con cierto recato. El príncipe de Sumi lo miró con el ceño fruncido un rato, viendo lo mediocre que se veía todo desaliñad y tiste, bufó antes de responderle.

    -estoy harto Haruhiko…- exclamó cruzándose de brazos sin dejar de recriminar con su mirada al de Nakamura, quien le miró extrañado. Yura y el resto de los interesados habían escuchado de Haruhiko hace 3 días todo lo que había sucedido con el asunto de carta y de la maga Kaoruko. Y realmente había pensado todo lo que había sucedido, llegando a la conclusión más obvio, y a la que consideró era la mejor para todos…

    -perdón, no entiendo- exclamó Haruhiko, al fin levantándose de la silla en donde se encontraba sentado.

    -estoy harto de esta situación…tú no puedes seguir así…y no quiero que mi hermano sufra más- exclamó con una seriedad tal que Haruhiko sintió un estremecimiento.

    -no…-

    -déjame hablar- repuso mirando con el ceño fruncido al otro príncipe- mi hermano te ama- dijo con seguridad. Haruhiko lo miró con cara de súplica- alguna vez te dije que te arrepentirías si lo lastimabas…y hoy te lo recuerdo. Sin embargo, acepto que esto no fue culpa tuya- dijo con un media sonrisa al fin, sorprendiendo un poco a Haruhiko- pero ahora, necesito que me ayudes…sé que lo amas…y si consideras que es lo suficientemente importante…te lo pido…por favor…ayúdame a aligerar su desgracia- exclamó con vos suplicante.

    -Yura…yo no sé qué hacer- exclamó Haruhiko regresando a ver hacia la ventana al satélite albino que era a luna. Yura lo agarró del hombro captando su atención.


    -averígualo entonces…de nuevo- respondió yura. Haruhiko vio tan desesperado a Yura, que al fin analizó cual importante era para él su hermanito. El problema era que él, no sabía ya que hacer con la indiferencia de Keiichi en su persona…que no lo recordara era un golpe tan duro…sobre todo porque la culpa le caía como toneladas sobre la espalda…él sabía cuánto lo había hecho sufrir…

    -pero…él no me recuerda…-dijo con voz pastosa…sabía que si no se controlaba lloraría enfrente de Yura.

    -entonces sabes la solución…-dijo el de Sumi. Haruhiko asintió mirando hacia un lado…claro…algo que le dolería hasta la última de su célula…hacer que nada había pasado…y comenzar de nuevo…solo sus sentimientos y él…- Haruhiko…sé que te estoy pidiendo algo muy doloroso…y no quiero reprocharte nada…pero…se lo debes- dijo con melancolía. Haruhiko solo se quedó mirando al piso- se fuerte por ambos…por favor-

    -no sé si funcione…- dijo algo deprimido.

    -si el amor sigue allí, funcionará- exclamó Yura, con medía sonrisa, aguando sus ojos…¡por Kami, jamás se había imaginado pedirle con todas sus fuerzas a un pretendiente de su hermano que lo conquistara!...-Haruhiko…además debes de contemplar el hecho de que tal vez no te recuerde jamás…-exclamó con un gesto lastimero…

    -¿q-que quieres… decir?-

    -¿Qué harás si…Keiichi nunca recupera su memoria?-

    *********************************************************************

    Al salir el sol entre las montañas, los 3 chicos se hicieron de algo de agua y comida y siguieron su camino. El bosque que recorrían en esos momentos estaba más frío que el anterior y los ligeros toques blancos de nieve se veían en algunos lugares. Tan solo trataban de llegar lo más rápido que pudieran a su última prueba…para así al fin terminar con todo aquello. Masamune miraba constantemente a Misaki, el cual estornudaba constantemente por el frío…aunque…aún tenía en la cabeza lo que le había dicho Misaki…¿y si algo malo les pasaba?...¿o qué tal si…a alguien más le estaba yendo mal?...El joven príncipe pensó un poco en Keiichi. Yanase les había dicho que Keiichi estaba bien…pero no dijo que tanto… o… ¿Qué tal si era Hiroki…había pasado algo con la prueba en Ayami?... ¿o Miyagi?...tal vez… ¡se lo había comido el dragón dorado!…Mune ya no sabía que más pensar… y si lo seguía haciendo quedaría loco…

    -¡Hey, príncipe!- llamó su atención Yukina , el cual también traía sus labios resecos por tanto viento helado, Mune hasta entonces le puso atención- ¿de aquí hacia dónde?- preguntó. Masamune regresó a ver hacia el frente, el camino volvía a dividirse en dos. Miró un poco el mapa en sus manos antes de comenzar…

    - izquierda…seguiremos ese camino hasta el “puente” para cruzar el acantilado...- informó recorriendo con su dedo tembloroso los trazos en el papel. Y efectivamente así se hizo. Caminaron aproximadamente unas 2 horas, hasta llegar a la orilla del acantilado. Misaki vio con algo de alivio y sorpresa que ese lugar extrañamente no era tan frío, podía ver incluso un poco de pasto y hierbas alrededor. Yukina y Mune se acercaron a la orilla del precipicio altísimo, mirando como un río enfurecido, seguramente con agua heladísima ,pasaba por abajo. Podría jurar que eran al menos unos 50 metros para pasar de un lado a otro. Yukina chasqueó la boca…

    -esto va a ser imposible… si caemos desde esta altura…si no nos mata le golpe…el agua fría lo hará- exclamó algo preocupado. Misaki casi tembló con el comentario.

    -eso…no puede ser…tenemos que pasar de alguna forma…¿Masamune?- exclamó el oji-verde mirando al príncipe…el cual revisaba el mapa.

    -esto dice que aquí hay un puente…o debe de haberlo- exclamó casi con vos enojada, frunciendo el ceño.

    -efectivamente…pero no los dejaré pasar por el tan fácilmente…-

    .

    .

    .

    Los 3 chicos se asustaron y sombraron un poco a escuchar una cuarta voz entre ellos, buscaron con avidez al “sujeto” hasta encontrarle justo tras de ellos…”¡que rayos…no estaba allí hace unos segundos!” pensó Misaki. El muchachillo de cabellos castaños muy oscuros casi negros y ojos almendrados mostraba una sonrisita de autosuficiencia, mientras permanecía con las piernas perfectamente cruzadas encima de una piedra que parecía precisamente un banquito…Yukina le miró de arriba abajo, reconociendo primeramente que era un “doncel” bastante atractivo…después se fijó un poco en su ropaje…portaba una vestimenta algo curiosa: unos shorts verdes que llegaban alguno centímetros arriba de la rodilla , una camisa de mangas largas blanca y holgada y un chalequito verde encima…un gorrito curioso, que se acomodaba coquetamente en su cabeza y un bastoncito de madera sujetaba en su mano…entonces de inmediato se dio cuenta que se trataba de un usuario de la magia…

    -¿Quién eres tú?...-preguntó Masamune algo irritado por la pose tan despreocupada del muchachito.

    -¡hey más respeto muchacho tonto!¡que si me haces enojar no te dejaré pasar, ni aunque lo hayas ganado!- exclamó el oji-almendra.

    -perdona nuestra falta de respeto, pero no sabemos cómo podemos dirigirnos a ti- exclamó Misaki algo avergonzado y asustado por que fueran a despertar la furia del chiquillo. Este conmovido por la honestidad y ternura del oji-verde dejó pasarlo un poco…

    -jumm…se han salvado…por ahora…y pues tendrán que dirigirse a mí con más respeto, ¡soy un usuario de la magia aunque no lo aparente!- exclamó con una rabieta que a Yukina le pareció graciosa y casi ríe – mi nombre es Kisa…- fijó sus ojos en los ojos de Yukina, quien no le quito tampoco la mirada con media sonrisa. El recién presentado hizo un gesto que Mune interpretó como de coquetería ante el ladrón- soy el guardián del puente…-

    ********************************************************************

    “-¿Qué harás si…Keiichi nunca recupera su memoria?-“

    La pregunta asaltó de nuevo en sus oídos. Haruhiko negó levemente con la cabeza para alejar esos pensamientos de él. La respuesta era sencilla y Yura se la había dado así de cruda, sin adornos ni nada más…”conquístalo”. Haruhiko se había convencido, claro con la ayuda de Yura, de que no perdía nada con intentarlo y ganaba mucho…necesitaba hacer todo lo que estuviera en sus manos para “hacerle recordar” o en su defecto…enamorarse de nuevo junto al oji-miel…solo esperaba que su sentimientos no lo traicionaran…

    Tomó la manija de la puerta con su mano izquierda, y mientras con la derecha daba unos ligeros golpeteos escuchó el permiso del que ocupaba la habitación, su mano vaciló un poco antes de abrir completamente la puerta…y poder entrar. Haruhiko entró por fin y cerró la puerta tras él. Acercándose paso a pasito al muchachito postrado en aquella cama, el cual le miraba con unos curiosos ojitos mieles y una emocionada sonrisa.

    -¡Hey, pensé que ya no vendrías, había preguntado por ti!- exclamó Keiichi con un puchero demasiado tierno. Mune se acercó la muchachillo sintiendo como el corazón le da vueltas, le regaló una sonrisa a su amor, mientras sacaba detrás de él, una linda rosa blanca del jardín de su tía Asuka y enseguida la ofreció a Keiichi, este la aceptó gustoso, sonrojándose levemente.

    -jejejeje, siento haberte preocupado de más Keiichi…pero había estado algo ocupado…- se excusó Haruhiko de la mejor manera- ¡¿hey….acaso ya has recordado mi nombre?!- preguntó con una sonrisa algo confiada…rozando a la coqueta, mientras Keiichi jugaba entre sus dedos con la rosa blanca…

    -¡nooo!...no he podido recordarlo…¡lo siento!...¡dime…por favor!- exclamó algo exaltado Keiichi, Haruhiko rio un poco…sintiéndose realmente feliz porque la energía que caracterizaba a Keiichi estaba totalmente intacta.

    -jajaja..Sabes que no puedo decírtelo, pero me gustaría que algún día lo recordarás- rio un poco. Keiichi hizo un puchero. Haruhiko había comprobado en propia piel lo que había dicho Yura…aun el inconsciente de Keiichi seguía respondiendo a “él” y hacía que el menor preguntara y se sintiera muy bien junto a él…sonrió…había muchas esperanzas de mejoría…

    Haruhiko pasó todo el resto de la tarde-noche hasta que fue la hora de dormir del menor, se despidió cortésmente y salió de la habitación, no sin antes prometer que lo visitaría cada vez que pudiera…”cómo si tuviera algo más que hacer”…pensaba con sarcasmo. Ya no podía aguantar las ganas que tenía de que su amor le recordara…que juntos rememoraran todas aquellas vivencias preciosas de sus días de más jóvenes… él solo quería que todo volviera a ser como antes…aunque tal parece que el destino no lo planeó así…una lagrima rodó por su mejilla…se recargó en la puerta recién cerrada de la habitación de su oji-miel…no podía ser débil…la situación ya estaba discutida…él quería recuperar a su amor…sin importar el precio….haría todo lo que estuviera en sus manos…

    De pronto un ruido algo estridente llamó su atención…”!¿que acaso hay carnaval en las escaleras del primer piso?!” se preguntó el príncipe…más apenas vio el rostro de esa mujer conocida para él descubrió el porqué de tanto relajo.

    -¡Haru-chan, amore mío!- exclamó la jovencita de algunos 20 años de cabellos castaños ondulados y ojos cafés, que apenas vio a Haruhiko se aventó encima de él -¡he venido tan pronto pude…mamá me ha mandado una carta diciendo todo lo que ha pasado por acá!... ¡¿cómo está mi lindo Keiichi?!...¡tienes que explicarme que ha sucedido! , ¡Madre no me ha contado nada!.. Aunque algo me dice que fue papá ¿verdad?...haaa…ese hombre…¡cualquiera pensaría que nuca fue joven!...ya me escuchará cuando le vea…- aseguró la jovencita hablando muy rápido pasando de un estado de animo a otro con facilidad…

    -Ma-manami… ¿Qué haces aquí?... ¿no estabas en América?- preguntó Haruhiko todavía medio ido, por ver a la chica allí.

    -¡pues claro que estaba allí, pero he tenido que trasbordar no sabes cuantos transportes para llegar apenas a tiempo!... ¡además… ¿que no puedo venir a dar apoyo a mi querido hermano?!- exclamó dramática abrazando al príncipe que parecía asfixiarse ante tan apretada bienvenida.

    *************************************************************

    -debo entender que esta es la última prueba y no nos dejarás pasar a o ser que consigamos superarla, ¿no?- exclamó Masamune de brazos cruzados.

    -eso es lo que dije- exclamó Kisa, como quien no quiere, aun de piernas cruzadas mirándose el manicure de las manos desinteresadamente.

    -¡pues a que esperas, tenemos prisa!, dinos que tenemos que hacer- pidió Yukina, Kisa le volteó mientras le dedicó una sonrisa.

    -bueno, primero, tienen que saber que la “ofrenda” que pido para poder acceder a mi prueba no es tan sencilla de complacer…sin embargo ahora necesito algo que seguramente traen con ustedes- exclamó mirando con sus ojos entrecerrados – es una llave- especificó. Mune sacó el objeto de entre sus ropas mostrándola- es esa- ratificó el muchachito con una sonrisa.

    -¿y se puede saber para que necesitas una llave?- preguntó Yukina curioso.

    -pues para abrir algo, muchacho tonto- dijo con una sonrisa traviesa Kisa, mientras levantaba una sus piernas suavemente enseñando un grillete que mantenía al muchachito encadenado a la piedra en donde estaba sentado…los 3 chicos se sorprendieron en demasía…¡¿cómo no la habían visto antes?!...Misaki notó como casi era… ¡transparente!...seguramente por eso no la notaron…

    -¿por qué estás encadenado?...-preguntó Misaki mirando al oji-almendra…

    -verás…yo no hubiera participado en todo este relajo, pequeño…- comenzó Kisa con una sonrisa triste, Mune adivinó hacia donde iba todo aquello –Aikawa un día vino…”pidió por favor” que participara en su “juego”…como era obvio yo me negué… y entonces me gané esto- exclamó señalando el grillete en su pie- es cierto que yo soy el guardián del puente…y que es mi deber ver quien cruza y sus intenciones, sin embargo ¡no siempre pongo pruebas!. Solo lo hago cuando estoy aburrido…-exclamó con un puchero gracioso que hizo sonreír a los menores, Mune lo miró con incredulidad- pero ahora, resulta que necesito crear una prueba para ustedes…además, una vez me haya visto liberado mi magia volverá y podré crear el puente…- finalizó con una sonrisa…

    -pues bien…hay que empezar con esto…dinos de que trata…así sabremos quién “juega”- exclamó Masamune dándole la llave a Kisa, quien la recibió y abrió el grillete que aprisionaba su tobillo y después de hacerlo se acomodó mejor sobre la piedra y comenzó a hablar.

    -pues bien…originalmente me habían dicho que solo llegarían 2 aquí- exclamó Kisa algo dudoso, mirando a Yukina…-por lo tanto no es correcto que los deje pasar a los 3- finalizó con una sonrisita. Yukina miró curioso la sonrisa traviesa del muchacho…y sonrió el también- sin embargo…les daré una oportunidad-

    -¿a qué te refieres?-

    -escuchen las reglas…-insistió Kisa- este prueba es de inteligencia- aclaró, logrando poner nerviosos a los 3 chicos – tendrán que resolver 3 acertijos que yo mismo realicé…si responden los 3, entonces podrán pasar el puente todos ustedes- exclamó con unas sonrisita.

    -¿solo eso?- preguntó Mune, pensó que sería más difícil.

    -pues si, solo eso. Sin embargo cada uno de ustedes tendrán que resolver un acertijo, y si alguno se equivoca….uno de ustedes tendrá que quedarse. Si fallan dos veces… no podrán pasar- exclamó con cierto deje de burla.

    -¡¿qué?!- exclamó Masamune- eso es injusto… ¡si alguno no sabe la respuesta de su acertijo no podremos contestar!-

    -¡hey, son mis reglas! ¡si quieres jugar, bien, si no ya puedes irte!- exclamó el chiquillo poniéndose a la altura de Takano con las manitas a la cintura, este lo miraba igual con el ceño fruncido…
    *******************************************************************

    -¿Manami?- se escuchó una voz. La aludida regresó su vista al inicio del pasillo y pudo ver a la mujer de ojos violetas y cabellos platas ataviada en un hermoso vestido coral. Soltó a su hermano del mortal abrazo y corrió hasta esta.

    -¡tía Asuka!..¡Qué gusto verla después de tanto tiempo!- exclamó la muchacha abrazando a la mujer.

    -hola…me da gusto verte de nuevo también…¿acaso no estabas en América?...desde hace 2 años que no habías venido…¿cuál es la razón?- preguntó curiosa.

    -¡¿no considera tía, que mi lindo hermanito y Keiichi estén pasándola mal sea suficiente razón?, madre me ha mandado una carta con muy pocos detalles!... ¡por eso he venido en cuanto pude!- exclamó con desespero.

    -de acuerdo, cariño, eres bienvenida, lo sabes, sin embargo tengo que decirte que en el palacio ya hay suficiente movimiento y todo el mundo anda ocupado, por lo que no podré darte tanta atención- exclamó preocupada la peliplata.

    -¡no te preocupes tía, por favor!, ¡yo lo que menos quiero es causarte problemas! ¡No tienes por qué poner una escolta a mi servicio, puedo valerme por mi misma!- aseguró la castaña.

    -lo sé amor, sin embargo, quisiera poner a tu disposición a uno de mis chicos, a lo menos para que pueda acompañarte a recorrer los lugares del reino- repuso la reina. Manami sabía de sobre que no era una pregunta sino una aseveración, por lo que no se molestó en declinar la oferta…

    - de acuerdo tía…como lo dispongas- respondió dando una leve reverencia, mientras agarraba una pequeña maletita, en la que Haruhiko apenas y había reparado…Muy pronto Asuka salió del lugar y antes de que los hermanos pudieran entablar una conversación ya había regresado acompañado de un lindo muchacho , a los ojos de Manami. Era alto, de cabellos negros y ojos cafés, más lo que le llamó más atención de él, era la sincera y hermosa sonrisa del muchacho…

    -Manami, mira, este es Takahashi Takahiro, es uno de los chicos que trabajan a la par con el mayordomo y con el cocinero del castillo. Será el a quien he dispuesto para que te acompañe a donde dispongas, por favor siéntete libre de pedirle lo que necesites. Ya le he informado a él también el asunto- explicó la reina presentando a los chicos.

    -un placer Manami-san…puedo mostrarle su habitación ahora, si desea-exclamó el oji-café con una linda sonrisa en su rostro mientras quitaba suavemente el equipaje de las manos de la princesa. Manami aún seguía con la boca abierta mirando embobada al chico.

    -S-si-se limitó a responder cuánto más rápido reaccionó- gracias…-salieron las palabras como un susurró.

    -sígame, por favor- respondió Takahiro caminando hacia la habitación destinada para Manami… esta solo regresó a ver hacia atrás viendo a su hermano quien la miraba con un ceja levantada…ya la había descubierto. Su cara se sonrojó.

    -neee…¡te veo luego niii-chan!…- exclamó en un gritillo y se apresuró a seguir a su escolta personal…

    ************************************************************

    -hey…hay que tomar esto con calma Masamune-san…tenemos que cruzar de todas formas, ¿por qué no nos calmamos, si?- trató de calmar los ánimos Yukina , separando a los otros dos.

    -pues bien, solo porque el chico lindo lo ha dicho- exclamó kisa con un puchero cruzando se brazos- entonces… ¿aceptarán la prueba sí o no?-

    -sí, la haremos- exclamó Mune de mala gana… Misaki no comprendía por que tanto pleito, solo se dispuso a acercarse.

    -pues bien, ahora lo que sigue es acordar el orden… ¿Quién contestará el primer, el segundo y el tercer acertijo?- explicó el oji-almendra.

    -yo iré primero- opinó Yukina.

    -bien, pues yo iré después… ¿o…Misaki quieres ir después tú?-respondió Takano

    -no, está bien, yo iré al final…- exclamó Misaki.

    -pues bien…empezaré- exclamó Kisa, acomodándose de nuevo en su banquito improvisado con roca, mientras miraba a Yukina…-


    Llega cuando la luz se va
    Y por fin Diana se recuesta
    En su inmensa cama oscura
    Con pequeños y gigantes diamantes


    -ok, tienes que responderme ahora…chico lindo- exclamó kisa. Yukina lo miró con un puchero acusador…era una prueba difícil…

    -¡oye ni si quiera rima!- exigió Masamune.

    -¡nadie dijo que debería rimar, grandísimo tonto!- respondió el guardián enfurruñado. Mune solo se cruzó de brazos, pensando en el acertijo…él no podía contestar…además ni si quiera sabía la respuesta…era algo complejo…Misaki batallaba igual… ¿Qué tenía que ver Diana?...

    -¿no lo sabes?...- picó Kisa algo burlón. Haciendo como que mira un reloj inexistente- pasa el tiempo…-canturreó. Yukina frunció el ceño y tardó unos segundo en responder…

    -no lo sé…-

    -jejeje…ya han perdido la oportunidad de pasar los 3…uno tendrá que quedar fuera- exclamó fingiendo tristeza- ¡pero que sencilla era la respuesta chicos!...¿que llega cuando la luz se va, es oscura y hay diamantes chicos y grandes que brillan?…heee hee¡¡…¡¿no es obvio que la noche?!-

    -eres un tramposo…- susurró Mune, Kisa lo fulminó con la mirada.

    -¡no me provoques tonto!...¡que te convertiré en un renacuajo!- le gritó bien, te toca responder a ti…-

    -bien, estoy listo- respondió enfurruñado por la “advertencia” Takano.

    -aquí va…esta es realmente sencilla-


    Centenares de Soldados
    Van formados en hileras
    Y todos los días nublados
    Riegan bosques y praderas


    Masamune pensó unos segundos y después volteó a ver a Kisa con una sonrisa de autosuficiencia…

    -sé la respuesta.

    -pues dila- retó el guardián.

    -la lluvia-

    Kisa lo miró casi con descuido y frunciendo el ceño y chasqueando la lengua…

    -bien…esa era la respuesta correcta… ¡la próxima no será tan sencilla!-

    -lo que digas…-murmuró Mune.

    -bien…ahora es tu turno, niño- exclamó Kisa dirigiéndose a un nervioso Misaki que se acercaba a él con timidez marcada – ahora…suerte, esta es…-


    Es un instrumento musical
    De viento, debo aclararlo
    Y aunque tiene muchos sonidos
    No puedes verlo o tocarlo


    -¿y bien cuál es la respuesta…Misaki…?-

    -etto…yo creo que la respuesta es…-
    .

    .

    .

    Continuará




    Nee nee y ustedes cual creen que es la respuesta?¡¡ :P
    CREDITOS: créditos del acertijo de “La noche” a mi amigo Fer, de la uni…ni se nota que la literatura nos ha atrofiado la cabeza XDDD, esperemos que pronto se anime a publicar su fics por acá jeje…
    Nos leemos pronto¡¡¡¡
  14. .
    hola hola Mely, como estás?, yo con mucho frío T.T
    pero bien dentro de lo que cabe jejeje...

    jajaja...oye...haces que me sonroje XDDD¡¡¡, el placer es mio¡, me encanta leer tus
    fics, de verdad que son unos de los que espero con mas ansiasss¡ :P

    la historia va súper bien, me encantaa¡¡¡, será cierto lo que dice Tsumori?¡....hay...ya no
    se que pensar con esta intriga jajaja... houu...Hiroki se enteró de la boda de Akihiko ¡¡¡ haaa....

    jajaja, no es que tenga mucho tiempo para escribir jeje, es solo que me la paso soñando con que
    pondré en la sig conty...y en mis tiempos "libres" los escribo...ahí justo en la pasta del "Quijote de la Mancha"
    ajajajajajaja XD, no te creas....te deseo toda la inspiración del universo para el lemon¡¡¡ , mira que
    al menos para mi , es súper complicado -.-U.....pero estoy segura que te saldrá excelente¡¡¡

    espero con ansiasss la conty, querida Melyoan, besitos de cereza enchocolatada para tu¡¡¡ :)

    Misagi * *
  15. .
    Hola hola cómo están?¡¡, pues yo bien…estoy viendo Naruto de nuevo XD, pues estoy tomando ponche por que acá hace muchiooo frio *W*. Muchas gracias por sus comentarios, los amo mucho y créanme que depende muchoooo de ellos lo que y escriba en el siguiente capítulo¡ :D, así que a comentar XD….

    En fin muchas gracias por comentar, jejeje entiendo que logras identificarte luego con algunos personajes, yo lo hago todo el tiempo…espero causar más de una sonrisa con el cap, ajajaja…besos especiales de chocomenta para: Anne onodera takano , romantica_1 y melyoan¡¡¡¡¡

    Misagi * *








    Capítulo 21: “Suficiente resistencia”
    .
    .
    .

    -sensei…usted…usted…es…un…¡¡¿DONCEL?!!-


    Mason miró con una seriedad impresionante a Tsumori, observando como los ojos mieles estaban abiertos en su totalidad. El oji- turquesa frunció levemente le ceño, mirando casi con reproche al mayor…no pensaba que lo descubrirían…al menos no tan pronto.

    -…es un doncel…-exclamó todavía extasiado el rubio, mirando al hermoso y despiadado chico frente a él.

    -y ahora que lo sabes… ¿Qué vas a hacer?... ¿me vas a delatar?...¡¿vas a hacer eso, verdad?!...¡porque alguien como yo no podría haber llegado a ser alguien en este mundo!...-le gritó el azabache furioso, sonrojado y con lágrimas en los ojos. El otro se sorprendió mucho por las palabras.

    -¡por supuesto que no!- respondió inmediatamente, y se acercó casi de un brinco al menor, quien instintivamente intentó dar una paso atrás – sensei…jamás haría algo que le hiciera daño o lo perjudicara- exclamó quedito contra los labios rosas…Mason lo miró entre sorprendido y enternecido…¿cómo podría ser eso?...- sensei…lo amo…es enserio, y me encargaré de recordárselo cada día de su vida…-finalizó dando un beso en la frente del azabache…Tsumori se alarmó un poco al sentir como el otro temblaba, muy pronto se dio cuenta que el chico de ojos lindos estaba …llorando.

    -sensei…- le consoló acariciando casi con las yemas de los dedos la mejilla sonrojado del otro- no llores…-

    -no entiendo…por qué haces esto…- exclamó entre sollozos el menor. Tsumori lo miró con ternura y limpió con sus pulgares las lágrimas que ensuciaban las suaves y coloradas mejillas del menor.

    -por qué te amo…- le dijo sencillamente con una sonrisa.

    -amar a un idiota, te convierte en un idiota más grande….baka…- exclamó entre risas, bajando su mirada un poco, mas no pudo permanecer más tiempo así , pues el rubio le había levantado el rostro…

    -pues que así sea- puso fin a la discusión besando de nueva cuenta los suaves labios de su sensei…

    -yo…no sé por qué sigues a mi lado…te traté como basura…perdón…te necesito junto a mí-susurraba quedito el azabache. Tsumori atendió a abrazarlo con mucha fuerzas, por fin sentía que todo aquello que había pasado al fin había rendido frutos, sonrió.

    -es cierto que sufrí tu indiferencia sensei…pero lo tomaba como un reto para nunca dejar vencerme, quería a como diera lugar que al menos supieras mis sentimientos. Aunque jamás te culpé…y tampoco lo hago…tu solo intentaste ser fuerte e impotente ante todos- exclamaba el muchacho rubio al oído del otro-…pero ahora ya no debes ser tan fuerte…déjame ser tu fortaleza…nunca dejaré que te lastimen…y estaré siempre a tu lado…déjame acompañarte siempre…déjame amarte con todas mis fuerzas…Mason…-

    *********************************************************************

    //Flash-Back//

    -oye…Shinobu…dijiste que alguna vez saliste de esta cueva, ¿no?-

    -si…pero de hace, ya pasó un tiempo… ¿a qué viene eso Miyagi?- exclamó el rubio cepillándose sus cabellos rubios con sus dedos…

    -o sea que tu cadena…puede estirarse…-

    -pues sí, algo así…es mágica… ¿Por qué?- exclamaba el rubio con curiosidad por lo que decía el pelinegro.

    -¿no te gustaría ir al lago que está a algunos metros de aquí?...- preguntó con una sonrisa de lado, que de inmediato fue correspondida por el oji-gris.

    //Fin Flash-Back//

    Después de aquello, nuestra pareja, aun-no proclamada, se había dirigido hacía allí. Shinobu entre brincos y risas caminaba aferrado al brazo del pelinegro totalmente feliz. Miyagi no había podido borrar la sonrisa de sus labios pensando en lo tierno que se veía el hermoso rubio…aún conservaba rasgos de infantilidad…y eso le daba una ternura extrema…sentimiento que se contraponía…peligrosamente según él…con la creciente atracción y amor-no fraternal que estaba sintiendo por el bello doncel. Apenas llegaron al lugar el menor se sentó a la orilla del hermoso lago y metió sus pies moviéndolos y empezando a salpicar agua. Miyagi lo miró contento.

    -¿te gusta…Shinobu?...-preguntó el pelinegro al menor, detrás de él…casi susurrándole al oído. Shinobu se estremeció por la acción, sin embargo emitió un suspiró y regresó a ver hacia atrás con una sonrisa…quedando sus rostros muy cerca…

    -si…es hermoso- respondió con sus mejillas rojitas. Ahora el nervioso fue Miyagi, quien con prudencia se separó del hermoso doncel.

    -me alegra que te guste…- respondió corto. Shinobu le regresó la sonrisa-ahora vengo…traeré algo para que comas-

    En unos minutos Miyagi regresó a lado del rubio trayendo entre sus brazos una gran variedad de frutas que encontró en algunos árboles cercanos, algunas raíces y agua de un río que estaba algunos metros más adelante. Al general de Usami se le hacía increíble ver como el pequeño devoraba todo con ganas y con una felicidad que no había visto a nadie expresar tan solo con probar algo…el rubito estaba extasiado con los sabores que hace tanto que no probaba.

    -¡¿es que acaso no comías?!- exclamó alarmado Miyagi.

    -no, hace mucho que no lo hacía…no lo necesito…el hechizo me permite sobrevivir sin beber o comer nada…-exclamó con una carita despreocupada…

    -…- el mayor no supo que responder. Solo miró con cara de verdadero odio al grillete que apresaba el tobillo del menor que despreocupada y de piernas dobladas tenía en su mano izquierda un colorado durazno y con la otra una manzana verde. Miraba con deleite como los labios rosas y delgados se movían con dicha cada que masticaba…y como la lengua rosada limpiaba cualquier gota de néctar frutal que osara escapar…

    -¿Qué sucede…Miyagi?- preguntó extrañado el oji-gris al ver cómo le ponía demasiada atención.

    -esto…-y…el autocontrol de Miyagi se había ido formalmente de vacaciones…-…solo quería probar a qué sabe el durazno que estas comiendo…- exclamó con los ojos fijos en los del doncel…este inocente extendió la fruta hacia el pelinegro con una sonrisa. Sin embargo, el azabache lo sorprendió tomando su muñeca y apartando su brazo de su camino para acercarse directamente hasta el rubio y probar la dulce fruta directamente de la boca del rubio.

    -umm…-fue el pequeño suspiro que emitió el menor al sentir los labios del mayor sobre los suyos, y después la legua de este saboreando todo los rincones de su boca…lo que hizo que se sonrojara sin remedio. Muy pronto lo que quedaba del durazno y la manzana quedaron olvidados en el suelo…pues los brazos del rubio estaban muy ocupados rodeando el cuello del mayor-…Miya..gi- gimoteó el oji-gris en los brazos del otro…quien sonrió…ese niño le encantaba en un nivel inimaginable…

    -es delicioso…-exclamó el mayor…refiriéndose al durazno…el mayor sonrió con las mejillas sonrojadas aun…

    -es una lástima…se ha caído…- exclamó el rubio mirando la fruta tirada en el suelo y llena de tierra. Miyagi estiró un poco el labio inferior de Shinobu antes de volverlo a besar…esta vez con la simple intención de probar el sabor del rubio. Shinobu sentía como se derretía todito, él nunca había dado besos “de grandes”…y todo lo sentía tan nuevo, tan extraño y tan…rico…

    -Shinobu…-“me gustas mucho”…quiso decir el mayor casi con desesperación…pero no podía hacer eso

    -¿Qué será de mí, cuando tú te vayas?- “me he enamorado de ti...”quiso gritar el menor con desesperación…pero no podía hacer eso…y exclamó con un puchero aun sonrojado el rubio, recargando su frente en el hombro de Miyagi, mientras seguían sentado en el suelo. El azabache acarició el cabello del doncel…consolándose y consolando al niño bonito…

    -¿Qué pasará el día de la guerra con Aikawa?- preguntó el mayor

    -ella no tendrá el suficiente poder para retenerme con todas su fuerzas aquí…y escaparé por un momento en mi forma de dragón para ir a dejarte con tus amigos…- exclamó triste el rubio- después regresaré a mi puesto…como siempre…-dijo resignado- o…tal vez pueda dominar un poco el hechizo…pero una vez convertido en dragón…como seguiré atado a la maldición de Aikawa aunque ella muera, no podré irme de aquí, pues seguiré atado a la cadena…además no podré convertirme en humano en mucho tiempo…quizás pase otros 5 años…no lo sé…- finalizó soltando amargas lágrimas…se le hacía tanta desgracia su vida… por primera vez sentía que se había enamorado…y quería quitarse el corazón…dolía mucho…no faltaba demasiado para que se deshiciera en mil pedacitos…

    -…no…-susurró el mayor con tristeza y asombro…él no pensaba que las maldiciones perduraban aun después de la muerte de los brujos. Y lo intuía…se culpaba por eso…pero él sabía que los ojitos grises del doncelito lo miraban con un brillo tan especial que…que no quería lastimarlo- no puede ser- exclamó para sí…-

    -¡no te preocupes por eso Miyagi!- exclamó el rubio tomando las manos del mayor…y el azabache se sorprendió al ver que a pesar de que Shinobu estaba llorando le regalaba una hermosa sonrisa…-solo tienes que preocuparte por regresar con tus amigos a tu reino…solo prométeme algo, ¿sí?-

    -…-Miyagi lo miró expectante…

    -…no te olvides de mí…y prométeme que vendrás a visitarme al menos una vez más… ¿sí?...exclamó con sus ojitos llorosos y enamorados…-estar a aquí solo será muy aburrido…- dijo con un puchero algo forzado al igual que su sonrisa. Miyagi no pudo hacer más que soltar una lagrima…

    ************************************************************

    -¿cómo sigue?...-exclamó Misaki terminando de vendar con una tela improvisada uno de los brazos de Yukina, este hacía un gesto poco disimulado de dolor, pues había recibido una herida muy profunda en un descuido, y una flecha casi atravesaba su brazo.

    -estoy bien, no te preocupes tanto Misaki- le sonrió el oji-chocolate. Misaki asintió y se acercó esta vez a Mune, quien limpiaba cuidadosamente un poco de sangre que le escurría de una herida no tan profunda que tenía en la mejilla.

    -¿estás bien Masamune?- preguntó con un gesto preocupado.

    -excelente, hay que irnos, nos hemos tardado un poco ya- respondió el príncipe poniéndose al fin de pie con un llave dorada en la mano. El oji-verde asintió.

    La batalla se llevó a cabo de la manera más rápida que pudieron, pues tanto Mune como Yukina estaban conscientes de que ellos podrían cansarse, en cambio las armaduras no. Tan pronto Mune había alcanzado a rozar con su espada el hilo que mantenía la llave dorada en el cuello de la armadura y esta se desprendió, habían ganado la batalla. Pues tan solo pudieron observar como las figuras se desarmaron ante sus ojos. Todos habían suspirado de puro alivió, y prontamente Misaki había corrido a auxiliar a los heridos muchachos.

    Masamune guardia bien la llave entre sus ropas y sacando el mapa obtuvieron un nuevo sendero y se encaminaron con rapidez hacía allí. Caminaron el resto del día y cuando anocheció buscaron un lugar para quedarse a descansar…

    Misaki miraba atento el fuego que ardía con ímpetu en la fogata y que calentaba su cuerpo satisfactoriamente, pues le frío era ya casi insoportable…El oji-verde había adivinado que no estaban haciendo nada más que seguir “subiendo” , por ende el frío le congelaba hasta las ideas…

    -¿Qué pasa Misaki?- preguntó Mune curioso, que hace un rato había visto al lindo doncelito muy pensativo…casi preocupado. El oji-verde se permitió fruncir un poco el ceño y después mirar al príncipe con un intento muy vago de sonrisa…

    -…no sé si deba preocuparte…-respondió quedito…

    -me preocuparás más si no me lo dices- exclamó el otro con media sonrisa.

    -…no lo sé…solo…tengo un mal presentimiento…creo que algo…algo no saldrá bien…-exclamó abrazando sus piernas el oji-verde y perdiendo su mirada en el fuego rojo. Mune puso su rostro serio…

    -no pienses eso…ya verás que todo saldrá bien…solo nos falta una sola prueba…- trató de convencer el príncipe, aunque realmente el presentimiento de Misaki le había dejado muy preocupado…

    -…- el oji-verde asintió lentamente…de repente le habían venido a la mente los rostros de Miyagi, Keiichi y Hiroki…quería creer que no era algo que ver con ellos…

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    Hiroki tapó su rostro con sus manos con frustración y casi emite un grito ahogado de desesperación…sentado en el suelo, recargando su espalda en la base de la cama…sentía un desesperación enorme…¿había hecho lo correcto?...¿necesitaba alejarse realmente de Nowaki?...¿esa era la mejor opción?...quería decir abiertamente que deseaba que el oji-azul se enamorara de una buena mujer-sirena-doncel y que se casara…pero sabía que no era verdad…porque muy en el fondo…él quería al joven príncipe tritón para él.

    -no voy llorar…no por él...y no por esto…- se había dicho los dos días que había permanecido allí…”extrañamente” no había visto a Nowaki más que una sola vez…y después para nada…al parecer para él todo esta fue más fácil…pensó triste el castaño. A parecer esos “estúpidos” sentimientos nada más los sentía él. Maldita sea.

    Y tenía tan mala suerte, estaba seguro, que si en ese momento Nowaki se aparecía frente a él…no podría seguir con la farsa…y como el destino es tan cruel…sus pensamientos se materializaron y solo pudo alcanzar a ponerse de pie en un brinco…mirando hacia la puerta sintiendo que su corazón se saldría de su pecho…

    -Hiro-san…hola…-
    .
    .
    .

    -…H-hola…¿Q-que haces aquí?- exclamó el castaño nervioso mirando fijamente al príncipe poniéndose todo el autocontrol de su parte para no sonrojarse allí mismo, mientras sentía como pasito a pasito el oji-azul se acercaba a él, pues recordemos que cada vez que Nowak entra a la habitación de Hiroki, que es sin agua, toma su “forma” de humano.

    -solo…quería hablar contigo…-respondió el menor. Hiroki pudo identificar una mirada dolida en nowaki…y eso le desconcertó y sorprendió por igual.

    -pues…yo creo que no tenemos nada de qué hablar…-exclamó algo tranquilo el oji-avellana. Nowaki frunció el ceño y terminó de acercarse al mayor de un solo paso, encarándolo directamente y tomándolos de los hombros…por lo que sus rostros quedaban muy cerca….peligrosamente cerca. Hiroki abrió mucho los ojos por el rápido y brusco movimiento y sin remedio se sonrojó…¡maldita sea el mocoso de Nowaki y su estúpida altura!...se reprochaba el mayor.

    -¿te parece nada sobre nosotros?- exclamó con voz firme, pero profundamente triste el azabache…sintió al mayor temblar un poco bajando la mirada…

    -¿nosotros?... ¡¿nosotros qué Nowaki?!....no somos nada-respondió con toda su cordura puesta en su lengua que disparaba un discurso letal al corazoncito de nuestro tritón.

    -¡eso no es cierto!...- exclamó el menor con un reproche y levantando la voz, Hiroki nunca lo había visto así…y se sorprendió mas el observar que estaba a punto de llorar -¡Hiro-san…yo te amo!- casi lo gritó tomando entre sus manos las del otro. Hiroki perplejo y sorprendido no pudo moverse para nada…¿había escuchado bien?....

    -yo…-

    -…¡no intentes negarlo!...¡sé que no te soy indiferente!...al menos no del todo…- susurró contra los labios del sorprendido y sonrojado doncel…

    -no es cierto…¡estás mintiendo!...y además…¡¿quién te crees para asegurarte de que yo te amo?!...- respondió con saña, y lágrimas surcaba sus ojitos avellana…

    -solo… lo sé…¡y no te miento!...¡Hiro-san estoy enamorado de ti!...dime…dime que correspondes a mis sentimientos…-rogó el azabache mojando con sus lágrimas las manso sujetas de Hiroki. El castaño, en cambio, tenía un gran conflicto mental…¿lo que decía ese ser…era cierto…?.

    -yo…yo no- intentó decir Horoki, sin embargo fue demasiado tarde, pues el oji-azul ya lo estaba besando…después de 2 días sin haberlo hecho. Primero fue una tierna caricia, pidiendo permiso…tan pronto su corazón se fue calmando el beso se tornó furioso y salvaje…y eso era algo que pese a cualquier circunstancia Hiroki no iba a permitir…se sentía débil…y traicionado por su cuerpo y sus sentimientos…

    -¡te dije que no me besaras!- espetó totalmente avergonzado y con sus labios rojos, sus ojos llenos de lágrimas y empujando con toda la fuerza que pudo expulsar en ese momento a Nowaki, quien dio un tropezón hacía atrás…

    -…no te mientas Hiro-san…te haces daño…y me haces daño a mi… ¿a qué le tienes miedo?- preguntó con voz suave, mirando de frente al menor, quien desvió su mirada inmediatamente, cubriéndose la boca…suponía avergonzado todavía por el anterior beso….

    -¡no opines sobre mi!... ¡no sabes nada de mí!- espetó con crueldad…

    -¡pues dímelo…Hiro-san, quiero saber todo sobre ti!- respondió al borde de la desesperación

    -¡lo nuestro no puede ser ¿si?!....¡estoy comprometido!...soy un doncel que tiene a responsabilidad de dos reinos en sus manos…así…que aléjate, me haces daño…porque…t-te quiero…aléjate…por favor…por favor…- susurró lo último dejándose caer con cansancio en la cama…ya no podía gritar, ya no quería….ya no tenía fuerzas…había quedado lo más desprotegido que podía…se sentía vulnerable…ya no valía mucho la pena…sus mejillas seguían rojas…señal de la vergüenza que le ocasionó declararse “indirectamente”…puso sus manos sobre su rostro tapándolo y empezó a sollozar. Nowaki mantenía un poco la distancia…Hiroki había hablado más de lo que esperaba…a pesar de las sorpresas y de todo lo que esas palabras significaron…su corazón saltaba de emoción…”lo quería…su Hiro-san…lo quería”….sonrió casi tontamente. Y con pasos tambaleantes y cortos se arrodillo a la altura de la cama…donde Hiroki seguía sentado…

    -Hiro-san…sabes que el matrimonio se anulará cuando se encuentre a Akihiko-san…no dejes que tus responsabilidades opaquen tu felicidad- exclamó el menor descubriéndole el rostro y limpiándole las lágrimas con las manos…acercó sus rostro a los labios del menor…-Hiro-san te amo…-susurró antes de que tomará suavemente los labios tibios del Kamijou…Hiroki emitió un suspiro tan profundo que temió hubiera hecho eco en la habitación…sintiendo como sus penas era succionadas por el amor tan puro que descubrió en el azabache… sin embargo habían tanto pendientes…tantas contradicciones…tantos problemas…- Hiro-san…olvídate del resto…solo piensa en nosotros- susurró contra el oído ajeno el seme logrando que el castaño diera un ligero respingo…y sintiera como era tumbado hacia atrás…quedando totalmente recostado en la cama, con un Nowaki comenzando a besar esta vez su cuello…cerró los ojos muy fuerte por la sensación….

    -¡no!...para…para Nowaki…-gemía quedito el oji-avellana tratando inútilmente de resistirse…no se dio cuenta cuando exactamente…ya había sido arrastrado por el sentimiento…

    -te amo…-susurró el oji-azul en el oído de Hiroki, este atinó solamente a cerrar muy fuerte sus ojos tratando de tranquilizar el temblor que recorría todo su cuerpo…sentía como quemaban las manos de Nowaki que poco a poco seibana metiendo entre su camiseta, acariciando su vientre y sus costados…sin embargo ese abrazador calor no le molestaba…¡quería quemarse en ese momento!...y que no quedara nada de él. Nunca había sentido todo lo que Nowaki le hacía sentir…era cierto que los pocos pretendientes que tenía habían tratado de cortejarlo…sin embargo jamás había “estado” con nadie…¡kami lo librara de tal ultraje!...y sin embargo en ese preciso momento era lo último que le importaba.

    -Nowa…-los labios del menor dejaron al fin su cuello y volvieron a tomar sus labios, suaves y dulces… Hiroki ya no podía ni quería pensar, solo quería sentirse amado y correspondido por ese “tifón” que lo egoístamente lo había conquistado, volviéndolo loco a mas no poder hasta el último de sus cabellos. El castaño pasó lo brazos por encima del cuello del oji-azul, correspondiendo con mucha fuerza el beso que le era entregado…solo para él. Tomó una gran bocanada cuando al fin sus labios se separaron…y se limitó a sentir como las manos de Nowaki subían su camiseta, hasta quitarla completamente…- haa…ha…-cerró los ojos con fuerza sintiendo como los labios del menor recorrían su pecho y ocasionalmente daba una que otra mordida…lamiendo y jugando con sus pezones que ardían por el placer que estaba experimentando por primera vez. No pudo aquietar la curiosidad de ver a su apasionado tritón y levantó el rostro…observando con su rostro sonrojado como el azabache jugaba ahora con su ombligo introduciendo de manera lenta su lengua. Jugó un poco ahí, dándole olas de placer deliciosas al castaño, quien abrió con sorpresa y excitación sus ojos surcados de pequeñas lágrimas al sentir como la mano del oji-azul acariciaba por encima de la ropa su miembro…

    -aah…aah….espera…no toques ahí…- exclamaba con las mejillas sonrojadas, mirando al azabache, quien le regresó una sonrisa sin dejar de acariciarlo y le dio un besito en los labios…

    -tendrás que poner suficiente resistencia…amor- susurró con una sonrisa ladina, haciendo sonrojar y enfurruñar por igual al oji-avellana.

    -i-i-dio…ta¡- gimió en un tono para nada suave cuando la cálida mano del menor tocó su pene directamente, debajo de la ropa, para después quitarla definitivamente, dejándolo completamente desnudo…

    -cálmate un poco Hiro-san…voy a hacer que te sientas muy bien- exclamó con una sonrisita pícara. Hiroki se retorció en la cama soltando un gemido muy audible cuando sintió como los labios de su amado recorrieron el tronco de su pene…muy inmediatamente su miembro estaba completamente dentro de la cálida cavidad del menor.

    -aah, aah, ahhh…Nowa…haa…ki…para ¡para!- gritaba con desesperación mientras veía con excitación como la mata de cabellos negros azulados del príncipe bajaban y subían entorno a su pene. Extraños y delirantes corrientes eléctricas recorrían todo su cuerpo…y era imposible no tensar todas las partes de su cuerpo…y por inercia llevó sus manos a la cabeza de su amado tritón para indicarle un ritmo mucho más rápido…- haa.. haa…me..¡me vengo!- gritó con verdadero éxtasis, sintió como se corría como jamás lo había hecho en su vida…

    -¿cómo ha estado Hiro-san?...casi me asfixias…- exclamó con una sonrisa ladina haciendo avergonzar una vez a castaño, pero como este estaba tan cansado no le respondió nada, solo trataba de recuperar el aire, su cordura y tal vez el control de su propio cuerpo…Mas Nowaki no se detuvo sino que se posicionó a los pies de la cama y desde allí acarició casi superficialmente las piernas del oji-avellana, deleitándose por la suavidad y firmeza de estas…para después abrirlas… tan rápido que apenas Hiroki se enteró levantó la cabeza mirándolo.

    -¡¿QUÉ CREES QUE ESTAS HACIENDO?!- exclamó con las mejillas más que sonrojadas, tratando de cerrar las piernas, pero el azabache no se lo permitía, su vergüenza no disminuyó al observar como el oji-azul miraba fijamente su parte más íntima, con mucha atención…-¡n-no mires… pervertido!- reclamó con reproche…al fin tuvo la atención de Nowaki, pero este se limitó a dejar un pequeño besito a un lado de su rodilla…y después de regalarle un sincera sonrisa comenzó a trazar con besos una línea hasta sus muslos…y de ahí por fin bajó hasta su objetivo principal.

    -¡aahh…no…no hagas eso joder!...¡no¡..¡haa..haa!- Hiroki seguro que ya había perdió sus sentidos, más cuando sintió el húmedo y caliente musculo…invadir su entrada virgen, tratando de hacerse paso y dilatarla un poco- ¡HAAA!- enloqueciendo verdaderamente cada vez que Nowaki lograba entrar más en él- ¡basta!..ya…-

    -espera un poco…-respondió el oji-azul por saliendo de entre las piernas de su lindo castaño y regalándole al fin su mirad azulina- descuida…jamás te lastimaría, Hiro-san- susurró con tanta ternura, que Hiroki juró que le creería cualquier cosa. El mayor solo derramó unas lágrimas…no sabía ni por qué y asintió…recibiendo inmediatamente un apasionado beso que respondió de muy buena gana. Nowaki siguió besando a su lindo castaño poniéndose entre su piernas y acariciando todo ese cuerpo que le llamaba a adorarlo…mientras tanto una de sus manos se coló entre ellos hasta llegar a la entrada de su Hiro-san y metió fácilmente el primer dedo…dado que ese lugar seguía un poco húmedo…

    -hou¡…-exclamó Hiroki, sintiendo un dedo del menor jugando dentro de él…no le dolía, pero era una sensación extraña. Sin embargo, ni la entrada de los dos dedos, ni el movimiento de los tres dedos dilatando su entrada permitió que dejara de besar a su tifón…

    -Hiro-san…voy a entrar…-escuchó la voz lejana de su amor, solo asintió…y muy pronto sintió como la punta del gran miembro de Nowaki trataba de abrirse paso en ese angosto y virginal canal, que Hiroki había cuidado con tanto recelo de cualquiera que no fuera el “indicado”…

    -ahhh…ahhh…-gimió de manera entrecortada cuando sintió que su interior estaba totalmente lleno- haa.. Nowaki…ya -gimoteó presintiendo que terminaría muy pronto. El menor entendió y empezó a moverse muy despacio. Hiroki gemía con mucha fuerza cada vez que sentía como ese miembro se deslizaba hasta su interior tocando su punto. Las envestidas se tornaron muy rapidez, destrozando la cordura de ambos. Nowaki no cansaba de susúrrale al oído a su castaño tiernos “te amo”, mientras que Hiroki ya no sabía de donde agarrarse de tantas sensaciones y pasiones que estaba sintiendo en ese momento…y solo asintió a sujetarse hasta la muerte a la espalda de su azabache…

    -haa…ya…ya no puedo…-exclamó como podía totalmente inentendible Hiroki, sintiendo que estaba por terminar todo…

    -yo tampoco…Hiro-san…juntos- respondió el azabache…y con una estocada más profunda que el resto golpeó el centro de placer de su amor, gritando los dos al mismo tiempo, liberándose; Hiroki entre ambos y Nowaki dentro de su castaño.

    -Hiro-san…te amo…te amo demasiado…quiero estar por siempre junto a ti…-exclamó el azabache con demasiada ternura abrazando por la cintura a su lindo doncel, el cual estaba tan cansado que muy pronto caería presa del sueño…le miró con sus ojos avellana directamente y sus mejillas aun sonrojadas por la reciente acción…

    -yo…yo…también…te amo…no quiero alejarme de ti…- exclamó escondiendo sus rosto sonrojado en el pecho del menor. Nowaki sonrió…y sintió que su mundo estaba perfecto así como estaba…acunó entre sus brazos al amor de su vida, y después de darle un beso en los cabellos castaños se quedó dormido junto a su Hiro-san…Hiroki se durmió pensando que no le importaba nada el resto del universo…todos los problemas sin resolver, matrimonios y demás estupideces…solo quería permitirse sentirse así de pleno por ese momento…aunque todo cambiara…o incluso fuera un sueño…
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    Continuará…
1676 replies since 18/3/2012
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