Posts written by Tem-chan

  1. .

    Capítulo 4



    Habían llegado a la playa, Chiaki llevaba puesto un vestido playero, y el bañador de chico debajo. Le daba un poco de vergüenza que alguien pudiese verlo cuando se cambiara, pero Kai le había dicho que no tenía que preocuparse tanto por lo que pensase la gente. Si su novio lo decía él lo intentaría. Junto con sus padres instalaron los tres parasoles, y las toallas a su alrededor. Dejaron las cosas y empezaron a quitarse la ropa para quedar en bañador. Kai se quitó solamente la camiseta, y luego miró a Chiaki quien aún dudaba. Se acercó y le dio un golpecito en la cabeza.
    ―Chiaki, no te preocupes tanto, yo estoy contigo.
    El castaño asintió y se quitó el vestido. Lo dobló y lo guardó en la mochila, junto con la camiseta que Kai había doblado, antes de entregársela. Durante unos momentos se sintió algo extraño. Estaba como chico frente a alguien que no fuese su familia o su novio. Había mucha gente a su alrededor. Suspiró un poco nervioso. El moreno quien lo observaba lo cogió de la mano y lo intento animar un poco.
    ―Chicos, vamos al agua, ¿Queréis venir? ―preguntó la madre del castaño con una sonrisa.
    El padre de Kai se quedaría cuidando de las cosas, no era mucho de bañarse y no le apetecía. A él le gustaba tomar un poco el sol y descansar tumbado en la toalla. Las dos madres y el otro padre sí que estaban preparados ya. Kai miró a Chiaki para ver que pensaba él. Pero este aún seguía un poco nervioso.
    ―Id tirando ―fue la respuesta de Kai, y en cuanto estos se fueron, hablando de sus cosas, se giró hacia el castaño―. Chiaki, ¿Quieres que vayamos al agua un rato? ―le preguntó tranquilamente sin soltar su mano.
    ―No lo sé.
    ―¿Te sientes muy incómodo?
    ―Bastante, la verdad, es la primera vez que estoy como chico en publico, desde los 11 años.
    ―Si te agobias mucho, dilo.
    ―Vale
    ―Ahora vamos al agua, quizás así te distraigas un poco ¿te parece? ―el castaño asintió ante estas palabras y cogidos de la mano empezaron a andar hacia la orilla.
    De camino al agua, dos chicas se acercaron a ellos, y les sonrieron despreocupadamente. Chiaki un poco nervioso se soltó de la mano de su novio, pero se acercó más a él. Parecía querer esconderse detrás de él. Eso pareció sorprender un poco a las chicas aunque luego sonrieron con más dulzura. Kai estaba un poco sorprendido. Que raro era que las chicas tomaran la iniciativa de ese modo, al menos en su experiencia. En algunos mangas había leído que pasaba, pero pensaba que era ficción y realmente no pasaba.
    ―Hola, chicos, ¿Cómo os llamáis? Yo soy Hana y ella es Saki ―se presentó una de las chicas, que parecía ser más directa.
    ―Yo soy Kai y él es Chiaki, ¿En que podemos ayudaros? ―le respondió el moreno intentando no parecer muy amigable.
    ―Nos gustaría tomar algo con vosotros, si no os molesta.
    ―Lo siento, pero hemos venido con nuestras familias.
    ―Oh, que lástima.
    ―Tú eres Chiaki, ¿verdad? Tienes un cabello muy bonito y largo, ¿te gusta llevarlo así? Te queda bien ―habló por fin la otra chica, quien se estaba enfocando en Chiaki.
    ―Sí, me gusta ―respondió un poco dudoso el castaño, sintiendo un poco de nervios.
    ―Eres bastante tímido, por lo que parece, pero eso te hace bastante mono ―siguió insistiendo la chica morena, intentando acercarse un poco más al castaño.
    ―Chicas, en serio lo siento, pero nos esperan en el agua.
    Dicho esto, Kai volvió a coger a su novio de la mano y lo arrastró hacia el agua. Chiaki estaba un poco sonrojado y hasta cierto punto parecía que temblaba. Ese ataque por parte de esas chicas le había asustado un poco. Si ya le estaba costando acostumbrarse a ir como chico, más le iba a costar ahora que las chicas decidían acosarlo.
    ―¿Qué ha pasado con esas chicas? ―preguntó la madre de Kai, quien había visto la escena desde la orilla.
    ―Estaban ligando con Chiaki. Al parecer tiene tanto éxito como chico que, como chica, y ahora está en medio de un ataque de pánico.
    ―Vamos, hijo, que no es para tanto, es bueno que las chicas se fijen en ti. A mí de joven también me pasaba ―respondió su padre orgulloso.
    ―No me lo recuerdes, que cada vez que salíamos de casa no parabas de atraer miradas, aunque aún pasa. Ahora mismo tienes varias mujeres mirándote.
    ―¿En serio? No me había fijado, como solo tengo ojos para ti, no me he dado cuenta.
    ―Que pelota eres ―comentó la madre de Chiaki con un sonrojo, cogiéndose al brazo de su marido feliz.
    ―¿Y al final que les habéis dicho? ―intervino la madre de Kai, intentando desviar la conversación.
    ―Que habíamos venido con vosotros y nos esperabais.
    Los padres rieron disimuladamente. Finalmente, la madre del moreno se metió en el agua, y junto con los otros dos, se mojó todo el cuerpo. Kai pudo notar como su novio se había calmado durante la conversación y ahora estaba menos tenso. Sonrió un poco y lo miró. Chiaki suspiró y después sonrió también. Aunque él lo hizo de manera algo traviesa. Se separó de Kai y con la mano le tiró agua con fuerza, mojando su cuerpo y rostro.
    ―¿Qué haces? ―se quejó Kai en broma antes de seguir con su juego.
    Lo cogió en brazos y lo lanzó hacia el agua. Conocían esa playa y sabían que en seguida cubría suficiente para que no se hiciera daño el castaño. Chiaki salió a flote de nuevo con el pelo todo desorganizado. Se hundió y se lo recolocó un poco. Llevaba una goma del pelo en su muñeca así que se hizo un moño, para evitar que le volviese a pasar.
    ―Solo te he tirado un poco de agua y tu me has lanzado entero, no se vale eso.
    ―¿Cómo que no? A caso te has resistido en algún momento ¿eh? No me lo ha parecido.
    ―Sabes que nunca me resisto a nada de lo que me hagas…
    ―¿Pero como puedes ser tan adorable? ―preguntó al aire Kai, metiéndose en el agua para acercarse a su novio.
    ―He practicado mucho ―el castaño le respondió a esa pregunta con una sonrisa de superioridad antes de aprovechar un pequeño despiste de Kai para hundirlo.
    ―Eh ―se quejó este al salir a flote― no se vale seducirme para poder ahogarme.
    ―Tu te aprovechas de que no me resisto a ti, yo aprovecho mis poderes de seducción, estamos empate.
    ―No sé si estoy muy de acuerdo, pero quizás con un beso, podrías convencerme.
    ―¿Sólo con uno? Con que poco te contentas... Pero en modo chico me da vergüenza hacerlo.
    ―¿Por? Sigues siendo tú.
    ―Pero hay muchas personas… seguro que alguien nos verá.
    ―A mi no me importa.
    ―Pero a mí sí. Yo no puedo, lo siento Kai.
    Raras veces el castaño le decía que no a su novio, y eso le sorprendió mucho a este. Quizás estaba más incómodo de lo que parecía en un primer momento y él no se había dado cuenta. Tampoco había dicho nada Chiaki, así que no tenía muy claro que pensar. Algo en su interior le decía que el castaño no estaba para nada cómodo, y eso le preocupaba y le hacía sentirse algo mal.
    ―Chiaki, estás muy incómodo, ¿verdad? ―le preguntó, aunque más bien lo estaba afirmando.
    ―Bastante… No se me pasa…
    ―¿Quieres cambiarte?
    ―¿El vestido ahora?
    ―No, ven.
    El moreno empezó a salir del agua y Chiaki lo siguió. No entendía muy bien que pensaba su novio, pero tenía curiosidad. Se encogió un poco al notar algunas miradas sobre él. Se sentía raro y tenía la impresión de que todo el mundo lo miraba. En cierto modo, sí que lo miraban algunas chicas, pero había gente que no. Por la incomodidad que sentía su mente le estaba jugando una mala pasada, así que se pegó un poco más a Kai en busca de protección.
    ―¿Qué pasa chicos? ―preguntó el padre de Kai al verlos llegar tan rápido.
    ―Vamos un momento al baño ―el moreno cogió una bolsa y luego empezó a andar hacia los baños públicos de la playa.
    ―¿Al baño? ―preguntó Chiaki caminando muy pegado a Kai.
    ―Sí, ¿O quieres cambiarte aquí delante de todos?
    ―N-no.
    ―Lo suponía.
    Kai le sonrió le puso una de sus manos a su cintura para hacerlo caminar un poco hacia delante. El castaño había estado detrás de él toda la mañana y tenía ganas de que cogiese un poco más de iniciativa. Pero no funcionó, solo se quedó quieto unos momentos, paralizado y se cogió a su brazo en cuanto Kai lo alcanzó. Estaba más tímido y tembloroso que nunca. La transición a chico, sería más difícil que la de chica.
    ―No lo entiendo, no tuviste ningún problema en hacerte pasar por una chica, y ahora no puedes ser un chico.
    ―A los 11 es más fácil cambiar… ―se defendió Chiaki ante las palabras de su novio.
    ―Supongo.
    Una vez en los baños, se metieron en el de chicas, sin que nadie los viese. Allí entraron en uno y cerraron la puerta. De allí Kai sacó varias cosas. Primero el bañador femenino que habían comprado, con relleno en el sujetador. El castaño lo miró sorprendido, no se esperaba eso. Se sonrojó mientras cogía el bañador con sus manos. Realmente era demasiado provocativo para ir con eso por la playa, y más con su cuerpo. No le iba a quedar bien.
    ―Póntelo ―le dijo Kai.
    ―Pero…
    ―Chiaki.
    ―Vale.
    Al final el chico accedió. Se quitó el bañador de chico que llevaba y se lo cambió por el bikini provocativo. En cuanto se lo puso Kai lo miró. Realmente no le quedaba tan mal como este había dicho. Al menos no a ojos del moreno. Tragó saliva, pero pudo despegar sus ojos de él.
    ―Yo creo que te queda bien, sinceramente.
    ―¿De verdad? ―preguntó Chiaki emocionado ante eso.
    ―Por supuesto ―fue la respuesta de Kai, quien no iba a negar esa evidencia― pero, como te dará vergüenza ir con esto solo, te he traído también esta camiseta.
    De la bolsa sacó una camiseta blanca con un dibujo playero. Era un poco ancha, y lo suficientemente larga para tapar su entrepierna. Así nadie podría ver ese miembro y ese cuerpo un poco cuadrado para ser una chica. El castaño se puso la camiseta, y se miró a sí mismo. Se veía satisfecho con eso. El moreno suspiró aliviado de ver como Chiaki sonreía de verdad, por fin. No estaba siendo nada fácil para él, a decir verdad, necesitaba tiempo para el cambio y quizás la playa con tanta gente y tan poca ropa no había sido el mejor momento.
    ―¿Te sientes más cómodo así?
    ―Sí, la verdad, y me veo sexy, ¿verdad? ―preguntó emocionado este.
    ―Te ves precioso, aunque para mí siempre lo estás, hermoso y sexy.
    ―Gracias, Kai, eres el mejor novio del mundo ―Chiaki saltó encima del moreno y le besó.
    Rápidamente Kai aprovechó el momento para llevar sus manos a su trasero. Era tan sexy que no podía evitar meterle mano. Bueno, eso y que el moreno era un pervertido siempre dispuesto a jugar con su novio. Y si Chiaki quería él tenía un juguetito a mano en esos momentos. Después del mal momento que había pasado, no sabía si sería adecuado, pero a lo mejor lo ayudaba a olvidarlo.
    ―Chiaki, ¿Te gustaría jugar un poco?
    ―¿Aquí? No me podré bañar…
    ―No te preocupes, lo tengo todo pensado, no es de vibración.
    ―Oh ―respondió un poco desilusionado.
    ―Tranquilo, es un juguetito de bolitas.
    De la bolsa sacó una tira con 9 bolas de un tamaño algo pequeño, unidas por el cordón. Kai lo tenía agarrado por una anilla, que servía para sacar las bolitas de su trasero. El castaño se lo quedó mirando un poco antes de darse la vuelta y bajarse las bragas del bañador. Tampoco iba a decir que no. Quizás sería un poco incómodo estando con sus padres, pero bien que jugaban con otras cosas estando en clase. Parecía divertido.
    ―Esto imagino que es un sí.
    Kai cogió las bolitas, las había limpiado en casa antes de guardarlas, pero no estaban lubricadas. Así que sacó un bote de lubricante y las empapó un poco con ese líquido. No quería hacerle daño a su novio. Una vez hecho eso le dio una nalgada a Chiaki quien se mordió el labio para evitar gemir.
    ―Sepárate un poco las nalgas, voy a proceder a meterlo.
    Chiaki sin decir nada acercó sus manos y las separó. Sería la primera vez que notaría esas bolitas. Siempre lo habían hecho con un vibrador, al parecer este era un juguete nuevo que Kai había comprado en algún momento. Se estremeció al notar como la primera bolita entraba en su ano. El dedo de Kai le ayudó a entrar, y poco a poco entró la segunda y las siguientes.
    ―¿Crees que van a caber todas? ―preguntó con la voz entrecortada, notando como entraba otra bolita.
    ―Ya solo queda una y no han opuesto resistencia, creo que sí.
    ―¿Sólo una? ¿Ya? ―se sorprendió el castaño, ya que no se había dado cuenta de que habían entrado tantas.
    ―Ahora ya han entrado todas, tienes que ir con cuidado de que no se salga ninguna, ¿de acuerdo?
    ―Sí.
    ―Ahora vuelve a ponerte las bragas, vamos a jugar en el agua.
    Chiaki asintió y se puso el bañador nuevamente. Con cada movimiento de su cuerpo notaba como esas bolitas se movían para acomodarse y tocaban un punto en él que le daba placer. Se iba a poner duro en poco rato. Y tendría que aparentar que no pasaba nada. Bueno, eso solía hacerlo en el colegio a menudo. La única diferencia era que en la escuela no tenía que moverse tanto como aquí. Kai parecía interesado en hacerle jugar y moverse durante ese día.
    ―¿Cuánto tiempo lo llevaré puesto?
    ―Hasta que quieras sacártelo ―respondió Kai rápidamente― no te obligaré a llevarlo puesto, si no quieres.
    ―Bien.
    ―Entonces, ahora recoge el bañador que has dejado tirado en el suelo y lo guardaremos.
    Chiaki hizo lo que su novio le dijo. Al agacharse de nuevo notó el movimiento de las bolitas en su interior. Dejó escapar un pequeño gemidito y Kai rio por eso. Realmente era gracioso ver al castaño de ese modo, y también era muy excitante. Finalmente recogió el bañador y al erguirse tuvo que morderse el labio para no gemir de nuevo. Guardaron el bañador y Kai abrió la puerta.
    ―Me estoy poniendo duro, podría correrme solo por los movimientos de las bolitas, Kai ―le dijo Chiaki agarrándose a su espalda.
    ―No te puedes correr, Chiaki, ya lo sabes, es parte del juego.
    ―Entonces ayúdame a no hacerlo.
    ―¿Quieres que te lo ate como en la escuela? Pídelo adecuadamente.
    ―Por favor, amo, áteme el miembro, se lo suplico.
    ―Buen chico.
    Hecho esto, Kai sacó otro objeto más de la bolsa y procedió a ayudar a Chiaki con su problema. Ya sabía que pasaría eso, así que iba preparado, solo quería que su castaño se lo pidiera de esta forma tan sexy. Después de atarlo, le dio un beso y se levantó. Miró el rostro excitado de Chiaki y sonrió. Puso su mano en su trasero y lo atrajo hacia su cuerpo para darle un morreo antes de salir por la puerta.
    ―Vamos, amor, es hora de ir a jugar.
    Chiaki salió detrás de él, y Kai le tendió la mano a su novio quien se la cogió. De la mano regresaron a las toallas, para dejar la bolsa con el otro bañador mojado, dentro. El padre de Kai los miró sorprendido. Era algo un poco extraño. Chiaki se había ido vestido de chico, con expresión incómoda y de terror, y regresaba en modo de chica, con la cara sonrojada y una sonrisa en los labios.
    ―Menudo cambio, chicos.
    ―No me sentía cómodo y Kai me ha dado un cambio de ropa.
    ―Estás más cómodo ahora, se te nota.
    ―Sí ―fue la respuesta de Chiaki, quien seguía sonriendo.
    ―Ahora, iremos al agua, antes Chiaki no estaba divirtiéndose y no tenía sentido.
    ―Bien, divertíos.
    De camino al agua se encontraron con los padres que ya regresaban del agua. Al igual que el otro padre se sorprendieron, pero solo les sonrieron y se fueron a las duchas. Esta vez Kai y Chiaki si pudieron jugar en el agua tranquilamente. El castaño se sentía mucho mejor vestido como chica, y aunque le estaban mirando algunos chicos, él no hacía ni caso. La diferencia de llevar una ropa u otra, era impresionante.
    El juguete también tenía su efecto. A Chiaki le encantaban este tipo de juegos, y a pesar de que no esperaba que fuese tan excitante, ese rosario de bolitas, estaba siendo increíble. Sentía dentro de él cada movimiento que hacía. Hasta el punto que mientras nadaba había tenido que parar varias veces por algún que otro espasmo de placer. Había perdido el ritmo y en una ocasión, la primera, había tragado algo de agua.
    Kai, por su parte, no se separaba mucho de Chiaki, si en algún momento veía que este no se sentía bien para nadar iba a ayudarlo y socorrerlo. Lo último que quería era que se ahogara o le pasara algo por el juego. Era demasiado protector con su novio, tal vez, pero así era él. No podía evitarlo. Por eso, no fueron muy lejos de la costa, la cuestión era pasarlo bien.
    ―¿Cómo estás? ―le preguntó a Chiaki quien estaba tumbado sobre las olas.
    ―Es asombroso, un día deberías de probarlo, Kai. Se siente genial.
    ―No sé, para mí se siente genial verte tan sexy. Pero en un futuro, podemos hablarlo.
    A Kai nunca se le había pasado por la cabeza probar esos juegos que usaba con Chiaki. Él los compraba solo para hacer disfrutar a su novio y pasarlo bien juntos. La verdad es que sí que parecía estar disfrutándolo, para que mentir. Quizás se sentía bien, pero él siempre había sido el seme hasta el momento y no se había planteado el hacer un cambio. A pesar de saber que Chiaki, era un chico, siempre había pensado que era algo afeminado y que era la chica de la relación. Ahora su cuerpo estaba cambiando, no era tan afeminado y su mente cambiaba también. ¿Sería que Chiaki quería ser el seme en alguna ocasión? ¿Estaría despertando el Alpha que llevaba dentro?
    ―Chiaki, ¿Quieres ser el seme? ―le preguntó Kai un poco nervioso.
    ―¿Yo? No sé… no quiero hacerte daño…
    ―¿Te duele cuando lo hacemos? No lo parece.
    ―No, no, no me duele, pero yo estoy acostumbrado, las primeras veces sí dolía un poco.
    ―Recuerdo que las primeras veces costaba un poco, sí.
    ―Ahora ya no, entre tu y los juguetes, ya estoy bastante acostumbrado.
    ―Entiendo, pero si un día quieres dímelo ―dijo con seguridad Kai.
    ―Tú… ¿Quieres que te lo haga?
    ―La verdad es que nunca lo había pensado, pero después de tu comentario, me ha venido a la mente que quizás tú querías serlo, y tampoco me ha parecido mala idea, si eres tú ―mientras decía eso Kai, pensó que también debía estar el factor de ser Alpha.
    ―Ooooh ―dejó escapar Chiaki emocionado― no te preocupes, si quieres un día podemos probar, pero yo me refería a que jugar con juguetes de estos se siente muy bien, son muy placenteros.
    ―Se te nota en el tono de voz. ¿Regresamos?
    ―Vale.
    Ambos empezaron a nadar de regreso, y Chiaki volvió a notar esos movimientos por parte de las bolitas que tenía en su trasero. Mientras estaba quieto en el agua, le había sido fácil relajarse un poco, y durante la conversación, había aprovechado por estar bastante quieto dejándose llevar por la corriente.
    Al llegar a la orilla, Chiaki suspiro un poco aliviado por eso, estaba bastante excitado y a pesar de que le daba vergüenza que alguien lo notara, se sentía más seguro en tierra firme. Fueron hacia su toalla, bebieron un poco de agua y se fueron a las duchas para sacarse la sal del cuerpo. Después regresaron y se sentaron en sus toallas.
    ―¿Queréis jugar? ―preguntó uno de los padres, con una baraja de cartas en la mano.
    ―¿A que jugáis? ―el castaño parecía un poco interesado.
    ―Al remigio.
    ―Vale, me apunto ―fue la respuesta del chico mientras juntaba su toalla con la de los padres.
    ―Comparte la toalla, que yo también vengo a jugar.
    Chiaki se sentó en la mitad de la toalla y estuvieron jugando un poco antes de comer un poco, la playa daba hambre. Fue entretenido y pasó rápido el tiempo. Cada vez que el castaño cambiaba de posición o hacía algún movimiento notaba esas bolitas en su interior. Se sentía bien, pero llegó un punto en el que necesitó ir a relajarse y dejó de jugar para ir a tumbarse. Se fue a la toalla de Kai ya que este estaba usando la suya y se tumbó allí, quieto. Se concentró en su respiración e intento calmarse.
    ―¿Estás bien? ¿Quieres que te las quite?
    ―No, estoy bien, solo necesitaba relajarme.
    ―Realmente te gusta, ¿eh?
    ―Sí, la verdad es que sí. Es divertido y excitante el tener esto dentro dándome placer, y a la vez tener que fingir que no, para que nadie me descubra.
    ―Eres un poco masoquista.
    ―¿Y de quien es la culpa? Tú me has hecho así.
    ―Me estás llamando sádico y dominante.
    ―Un poco, pero me gusta que seas así, también eres muy amable y tierno, y me gusta cómo te preocupas por mí.
    ―Gracias, supongo, como se dice, toma una de cal y una de arena, ¿no?
    ―Algo así ―respondió Chiaki riendo un poco y notando como esas bolitas se movían como si quisieran salirse.
    Dejó de reír ante eso y se sentó en la toalla, llevando su mano a su trasero. Sonrió al notar que no había salido ninguna. Kai se había acercado más a él con curiosidad, y Chiaki le hizo una seña para que se sentara detrás de él. Kai ya se imaginaba lo que su novio quería, no se resistió ni dijo que no. Lo hizo, se colocó detrás de él con las piernas abiertas una a cada lado del cuerpo del otro, y Chiaki se tumbó en su pecho. Kai con uno de sus brazos aguantó el peso de los dos, y con el otro abrazó a su novio por la cintura. El castaño estaba muy cómodo en estos momentos, tanto que cerró sus ojos con una sonrisa relajada. No pasó mucho rato cuando una sombra apareció enfrente de él, así que abrió los ojos, sorprendido.
    ―Hola, Chiaki, preciosa, cuanto tiempo ―saludó un chico que estaba mirándolos con una sonrisa― hola Kai.
    ―Hola Noah, ¿Qué haces tú por aquí?
    ―He venido a acompañar a Natsuki.
    De nuevo el castaño recién llegado les sonrió mirándolos fijamente. Se le veía feliz de haberlos encontrado en ese lugar. A pesar de lo que había dicho ninguno de los dos veía a la morena por los alrededores. Y ¿Porque Noah había acompañado a Natsuki a la playa? Nunca había comentado que le gustase la chica. Siempre hablaban de Naoki, junto con Michiru.
    ―¿Estáis en una cita?
    ―¿Eh? No, no, es que ella tiene que hacer una cosa por aquí, y de paso hemos aprovechado que estábamos cerca de la playa, en principio tenía que ir Michiru pero esta le ha dicho que no podía y me lo ha preguntado a mí ―contestó él alegremente, aunque luego cambió su mirada― pero más importante, ¿Porque está Chiaki vestida? Es tu culpa ¿Verdad, Kai? Como no quieres que nadie vea la belleza de tu novia, la tienes oculta. Pero eso no es justo ―empezó a delirar Noah pensando en cosas que no debía― déjanos al menos que disfrutemos de las vistas, cuando está en bañador, no seas egoísta.
    ―Noah, no tiene sentido nada de lo que dices, Chiaki es libre de enseñar lo que quiera, pero si no quiere no la voy a obligar.
    ―¿Es así?
    ―Sí ―respondió tímidamente Chiaki― me da vergüenza que me vean.
    ―Eres tan linda y tímida ―comentó Noah muy emocionado.
    ―Y… ¿Dónde está Natsuki? ―preguntó Kai intentando cambiar el ambiente.
    ―Oh, está en su toalla dibujando chicos guapos que ve por la playa.
    ―Ya veo…
    ―¿Queréis venir a saludarla?
    ―Iremos a comer en breves… No sé si tenemos tiempo.
    ―Está cerca.
    ―¿Chiaki quieres ir?
    ―Por mí está bien, si quieres ―respondió este con una sonrisa.
    Kai interpretó esto como un sí, y fue a hablar con sus padres, estos solo dijeron que tenían media hora, que si no se haría tarde para ir a comer. Kai asintió solo iban a saludar. Por si acaso cogió su móvil y se reunió con esos dos. Noah estaba coqueteando de nuevo con Chiaki.
    ―Es una pena que seas la novia de Kai, sino fuese así, iría por ti.
    ―Gracias, es todo un alago.
    ―Eres tan guapa, educada, tímida, adorable, tranquila, inteligente…
    ―Ya basta, ¿no? Tantos halagos hacia mi novia, es cierto que es todo esto y más, pero, ¿No te da vergüenza coquetear con la novia de tu mejor amigo?
    ―Tsk, aún no sé qué te ve.
    ―Celoso.
    ―¿Y qué? Tengo derecho a estar celoso de ti, por tener a esta magnífica novia.
    ―¿Vamos? Tenemos media hora, que luego tenemos que ir a comer.
    ―Está bien, vamos ―Noah estaba un poco disgustado.
    Se quedó un poco atrás para ver si podía aprovechar para ver un poco del trasero de Chiaki, pero Kai se lo impidió. Puso su mano en el culo de este haciendo que el castaño tuviese un pequeño sobresalto por eso. Se sonrojó, pero tampoco se quejó. Después de chistar una vez más, Noah paso delante de ellos y los guio hacia donde estaba Natsuki. Al llegar vieron que efectivamente estaba dibujando a toda prisa varios chicos que había por allí cerca. Chiaki se calmó un poco por la pequeña excitación que llevaba y se acercó a ella.
    ―Hola Natsuki ―la saludó Chiaki consiguiendo que dejase de mirar su blog de dibujo― que alegría verte por aquí.
    ―Hola Chiaki, no te esperaba.
    ―¿A qué no? Te la he traído como sorpresa, me la he encontrado por el camino. Toma tu bebida ―le dijo eso último mientras le daba una lata.
    ―Gracias ―le dijo a Noah antes de volver a centrar su vista en los dos recién llegados― hola, Kai, que raro verte con Chiaki.
    ―¿Verdad que sí? Hola Natsuki.
    Ellas dos se pusieron a hablar tranquilamente de sus cosas mientras Kai lidiaba con Noah. Este aún seguía echándole la bronca por no conseguir que Chiaki llevase menos ropa. Estaba decepcionado, pero ese no era el problema de Kai, solo le dejó que se desahogase y luego se llevó de nuevo al castaño con los padres. Tuvieron que correr para llegar a tiempo, así que al llegar a las toallas Chiaki estaba todo jadeante y rojo. Su excitación había llegado a un nivel un poco más alto de lo esperado y eso hacía reír un poco a Kai.
    ―Vamos al baño para que Chiaki se cambie de ropa ―dijo cuando ya habían recogido todo y estaban listos para irse.
    Sus padres asintieron y ellos se fueron a los baños nuevamente. Cuando llegaron, Chaki seguía jadeando bastante excitado. Parecía que quería correrse justo en ese momento. Kai no lo dudó. Lo cogió de la mano y lo metió en uno antes de cerrar la puerta. Lo acorraló contra una de las paredes y lo miró a los ojos muy serio. Los tenía algo llorosos por el placer, y junto con sus mejillas sonrojadas y ese pelo desordenado, le daban, a Kai, una visión demasiado tentadora.
    ―Quiero comerte.
    ―N-no tenemos tiempo ―respondió un poco jadeante Chiaki notando la mano de su novio en su trasero― aunque y-yo también qu-quiiero que m-me coma-as.
    ―¿Quieres que te lo quite? ¿O que al menos te de una pequeña ayuda?
    ―Una ayuda estaría bien, mi amo, por favor.
    ―¿Qué quieres?
    ―Lama mi miembro, por favor.
    ―Está bien.
    Dicho esto, Chiaki notó como subían su camiseta y como bajaban sus bragas del bañador dejando su miembro erecto y atado a la vista. Kai le acercó la parte de abajo de la camiseta a su boca y el castaño abrió la abrió. Entendía que era lo que quería Kai y sabía que sería lo mejor si no podía hacer demasiado ruido. No sería bueno que el resto de la gente los escuchara mientras estaban en eso.
    La mamada fue intensa, pero corta. Chiaki iba demasiado necesitado y estaba tan a punto de correrse que con casi nada dejó salir todo su semen en la boca de su novio. Kai tragó todo lo que había salido y limpió ese miembro con su lengua antes de separarse de él. Lo miró y después de quitarle esa camiseta de la boca le dio un beso que dejó al castaño sin aliento.
    ―¿Seguro que no quieres que te quite el juguete?
    ―No, aún, por favor.
    ―Bien, por mí no hay problema ―le dio un corto beso a Chiaki y empezó a buscar la ropa de este― desnúdate, voy a darte tu ropa.
    En cuanto se vistió ambos salieron. Sus padres ya estaban esperando allí, así que simplemente se fueron juntos al restaurante y comieron. El plan era que después de la comida irían a pasear un poco antes de regresar a casa. Así que antes de ir al restaurante dejaron las cosas en los coches. Así irían menos cargados. Durante todo el camino Chiaki fue excitándose de nuevo, al seguir llevando el juguete. Él mismo se había dicho que lo llevaría hasta que Kai pudiese hacerlo suyo.
    Después de comer fueron a dar el paseo. Y cuando pasaron por los baños públicos, disimuladamente, Kai secuestró a Chiaki hacia dentro. Había aguantado demasiado y no podía más. Estaba deseoso de hacerlo suyo y en estos momentos era la oportunidad perfecta. Sus padres no sabían dónde estaban y no se habían dado cuenta de su desaparición. Si no los encontraban después ya les llamaría para poder encontrarse. Volvió a acorralar a su novio contra la pared y lo beso con ansias.
    ―No puedo más Chiaki, necesito comerte ―le dijo entre besos.
    ―Hazlo.
    ―Entonces, buen provecho.
    Dicho esto, se lanzó hacia él besándolo con pasión. Sus manos bajaron al trasero de Chiaki y le quitaron ese juguete que había llevado el castaño durante tantas horas allí. No sabía hasta qué punto era saludable tener un juguete de esos dentro, pero el ano de su novio estaba ya dilatado. Sin más le dio la vuelta, le subió el vestido y, después de quitarle las bragas, se introdujo en él de una estocada. Al castaño no le dolió, al contrario, gimió de placer por ello.
    ―No tan fuerte o te escucharan.
    ―N-no puedo evitarlo.
    ―Entonces muerde esto ―le dijo Kai metiéndole las bragas, que le acababa de quitar, en la boca.
    Sin poder decir nada más Chiaki solamente hizo lo que le dijo, y mordió su ropa interior mientras Kai lo embestía cual bestia. Estaba muy ansioso y desesperado y los movimientos del castaño, acompañando sus movimientos, le incitaban a más. A Chiaki le gustaba cuando se lo hacía duro, así que no tenía quejas. Al contrario, su cuerpo se contraía con cada embestida y cada oleada de placer que sentía por esos rudos movimientos. Ninguno de los dos tardó en correrse. Estaban demasiado necesitados para ello.
    ―Espera que te limpio un poco ―dijo el castaño en cuanto se quitó las bragas de la boca.
    Chiaki cogió un poco de papel del baño y limpió el miembro de su novio antes de que este se vistiera. Salió del baño con el juguete en la mano y mientras Chiaki se limpiaba, él aprovecho para limpiar el juguete. Al llegar a casa lo desinfectaría adecuadamente. Lo envolvió con un poco de papel del baño y Chiaki lo guardo en su pequeño bolso.
    Después de eso se reunieron con sus padres y volvieron a casa. Había sido un día de playa bastante interesante y entretenido, aunque Chiaki no había avanzado mucho en su vuelta al modo chico. Quizás poco a poco, otro día harían un poco más, pero escogerían otro sitio donde no hubiese tanta gente y con tan poca ropa.

    Continuará...
  2. .

    Capítulo 3


    Había acabado la escuela, y Kai y Chiaki estaban pensando en la universidad. Pero en esos momentos tocaba ir a ver trajes de baño. Las familias de ambos chicos habían decidido ir juntas a la playa. El bañador de Kai, del año anterior, se había quedado pequeño; y Chiaki no tenía. Al parecer se le había roto el que llevaba la otra vez que fue a la playa.
    Habían llegado al centro comercial, ambos cogidos de la mano. Chiaki iba vestido como chica, así que llevaba un vestido azul, con un cinturón blanco, y unos zapatos casi planos, blancos. El vestido le llegaba hasta las rodillas, era de manga corta y no muy escotado. Se le marcaba bien dejando entre ver el tamaño de sus pechos, el cual no era muy grande, pero suficiente para que quedara bien con su figura. Obviamente era el relleno del sujetador que su madre le había cosido.
    Se acercaron a la zona de bañadores y miraron algunos trajes de baño y bikinis, para que se los pudiera probar. Entró en el vestidor y así lo hizo. Al verse en el espejo vio que no podía ir así. Con ambos bañadores se marcaba demasiado su miembro. Suspiró y volvió a vestirse antes de salir con la mirada baja. Kai se acercó en cuanto lo vio salir y se percató de esa mirada.
    ―¿Qué pasa Chiaki?
    ―No puedo ir con traje de chica, se me marca todo el miembro ―dijo apoyando su frente en el hombro de Kai― y con los pectorales me queda fatal…
    ―Hay cosas que puedes hacer y otras que no, tampoco es para tanto.
    ―Iré a la playa como chico… yo que quería ponerme un bañador bien bonito para ti…
    ―Siempre puedes ponértelos en privado.
    ―Pero no me quedan bien… Se ve asqueroso.
    ―Si eres tú, nada se verá asqueroso para mí ―dijo el Don Juan que llevaba Kai en su interior, consiguiendo un sonrojo por parte de Chiaki.
    ―Si quieres me puedo comprar uno solo para ti ―respondió felizmente después de escuchar esas palabras.
    Kai sonrió al ver a su novio tan feliz, y asintió con la cabeza. Con esta idea en mente siguieron buscando un bañador que le quedara bien al chico. Como era para uso privado no importaba tanto lo extremado que fuera, pero daría un poco de vergüenza a la hora de pagarlo, así que buscaron uno un poco más normal. Al final se decidieron por uno blanco. La parte de abajo era una braguita normal, con lazos largos a los lados, y la parte de arriba era una tira de tela que se unía en la espalda. En el centro había un lacito de color negro y una tira para atar detrás del cuello.
    ―Ahora vamos a la sección masculina, a ver que encontramos para ti.
    ―Vale ―respondió bastante alegre Chiaki abrazando el bañador que habían escogido.
    Al llegar a la zona de hombres, vieron cantidad de bañadores. Había tipo slip, tipo bóxer, tipo pantalón… variedades infinitas. Kai se quedó mirando los de pantalón, que para nadar eran lo peor del mundo, pero era lo que se estilaba y tampoco tenía pensado ir a hacer una competición. Chiaki tenía un debate interno. ¿Cuál le iba a quedar mejor? A pesar de tener que vestir como chico también quería verse bien para Kai. Miró varios tipos, los de tipo bóxer no le gustaron. Se debatía entre usar los pequeños slips o usar los mismos que su novio.
    ―Kai, ¿crees que estos me quedaran bien? ―preguntó Chiaki señalando los slips― ¿O prefieres que lleve uno como el tuyo?
    ―¿Cuál te gusta más a ti? ―Chiaki señaló los slips algo avergonzado.
    ―Pero…
    ―¿Pero qué?
    ―No sé si está muy de moda para la playa…
    ―No pienses en eso, solo piensa en si te gusta y te lo vas a querer poner.
    ―La gente se va a reír de ti por ir conmigo, si llevo esto.
    ―No te preocupes por esto, Chiaki, en serio… Solo viste como te sientas más cómodo, como siempre.
    ―Me lo voy a probar.
    Chiaki cogió un bañador slip de color azul, con los colores de la puesta de sol en la parte de arriba. Parecía como si estuvieses viendo una puesta de sol des del mar. Cuando fue al probador, un hombre lo miró algo mal, pero no le dijo nada. Después de escoger un bañador Kai se fue a otro probador. Este era negro por la parte de arriba, con unas rayas azules que iban de más oscuro a más claro y acababan en otras rayas de color rojo cada vez más claro hasta quedar en blanco.
    Después de las compras fueron a tomar algo, mientras hablaban de cosas varias, entre ellas el tema del bañador y de la playa. Chiaki no estaba muy contento con lo que había pasado. Se conformaba porque no había más opción y Kai le había dicho que estaba bien, pero no era feliz del todo por el resultado.
    ―Tendré que ir a la playa como chico. Quedará raro si voy con vestido y de repente me desnudo y quedo en bañador de hombre.
    ―A mí no me molestaría, si tú estás más cómodo en vestido…
    ―Es más fresco, la verdad, la ropa de hombre suele ser más cálida.
    ―Entonces, ve con vestido.
    ―¿Aún se me ve femenina como chica?
    ―Tú cuerpo es el de un chico, esbelto, pero un chico. Es verdad que al no hacer deporte tienes menos músculo y menos pectorales, pero cuando te quitas la ropa, se nota que eres un chico.
    ―¿Y mis piernas?
    ―A mi me gustan.
    ―No es esa la cuestión, pregunto si son femeninas o no.
    ―Pues… Están bien depiladas y no tienen mucho músculo, pueden pasar por las piernas de una chica, aunque les falta un algo femenino.
    ―Me estoy convirtiendo en un hombre, al menos mi voz sigue siendo suave.
    ―Eso sí. Tienes una voz que puede pasar por la voz de una chica algo afónica pero una mujer.
    Después de decir eso ambos se quedaron callados. Realmente la cosa era así, Chiaki tenía un cuerpo que con ropa podía pasar por el de una mujer alta y esbelta, pero desnudo era un cuerpo de chico. Él ya se preocupaba de que la ropa tapara lo suficiente para que no se viera que era un chico. Suspiró. Al ritmo que iba, la farsa de ser una chica tendría que acabar. En la universidad quizás sería mejor asistir como chico, quizás tendría que volver a hacer un cambio de sexo en el registro civil.
    ―Tendré que dejar de vestir como chica. Voy a vestir como chico en la universidad y empezaré mi nueva vida como tal.
    ―Si es lo que has decidido por mí está bien, eso no cambia que eres Chiaki, mi novio.
    ―Gracias ―el castaño le sonrió a su novio y acabó su bebida― pero, durante las citas contigo, podría continuar vistiendo como chica.
    Kai se echó a reír pero aceptó la propuesta, al final era evidente que su novio no podría dejar su costumbre de travestirse tan fácilmente. Realmente llevaba ya más de 7 años vistiendo como chica, tenía más ropa femenina que masculina. Eso ahora tendría que cambiar. Sus padres quizás estarían contentos con este cambio. Ahora volvería a ser un hombre ante los demás, en su mayoría del tiempo.
    ―¿Regresamos ya a casa o quieres dar una vuelta? ―le preguntó Kai a Chiaki.
    ―Me gustaría pasar un rato más contigo, así a solas.
    ―Ojalá pudiésemos hacer algo más, aprovechando que estamos solos…
    ―Mis padres están en casa.
    ―Los míos también ―dijo Kai antes de dar un suspiro.
    Les era más fácil encontrar un sitio donde tener sexo en la escuela que en casa. No era nada nuevo, pero eso frustraba un poco a Kai. Las vacaciones siempre se le hacían muy largas. Esperaba tener un momento durante el viaje a la playa o se volvería loco por la abstinencia. Chiaki era demasiado lindo para poder resistirse a él.
    ―¿Crees que mi rostro es el de una chica?
    ―¿Tú rostro? De momento no tienes unas facciones demasiado marcadas, así que sí, no queda mal con la ropa de chica.
    ―Tendré que empezar a ahorrar para poder operarme ―comentó Chiaki de la nada sorprendiendo a Kai.
    ―¿Operarte? ¿Para qué?
    ―Para tener los rasgos más femeninos, con este cuerpo parezco un travestido.
    ―Realmente eres un travestido, porque eres un chico y te vistes como chica.
    ―KAI ―le gritó Chiaki algo molesto.
    ―¿Qué?
    ―¿Porque me dices estas cosas de repente?
    ―¿Eh? Sólo he dicho la verdad, pero a mí no me molesta, yo te quiero tal y como eres ―se defendió Kai viendo como su novio tenía lágrimas en los ojos.
    En esos momentos miró hacia un lado para calmarse después de ver esas lágrimas y se dio cuenta de que la gente los miraba. Tragó saliva. Cogió las bolsas y a Chiaki de la mano y tiró de él. El castaño tuvo tiempo de coger su bolso y sus cosas, antes de ser arrastrado por Kai hacia saber Dios donde. Kai camino unas cuantas calles hasta que llegó a un pequeño solar abandonado, nunca mejor dicho ya que no había nadie en él.
    ―¿K-Kai?
    ―Aquí podremos hablar más tranquilos ―le dijo el moreno mirando esos ojos llorosos.
    Las esmeraldas que tenía Chiaki como ojos, estaban aguadas y algo rojas por los alrededores. Kai notaba como se le encogía el corazón cuando los veía así. Y más cuando se suponía que era por su culpa. Él no acababa de entender que había dicho de malo, pero al parecer el castaño se lo había tomado mal. A veces, realmente sentía que no acababa de conocer a su novio tan bien como él pensaba.
    ―Chiaki, ¿Que te pasa?
    ―Na-nada…
    ―Estás llorando y antes en la terraza del bar me has gritado, así que algo pasa.
    ―Lo siento.
    ―¿Por?
    ―Por gritarte, no quería hacerlo, lo siento.
    ―Está bien, no te preocupes por eso, solo quiero saber ¿Por qué? ¿Qué he hecho?
    ―No es nada, es solo que me ha dolido que me llamases travestido.
    ―Entiendo, pero…
    ―Yo no me siento como un chico plenamente, aunque tampoco me siento como una chica. Es por eso que me cuesta tanto saber que hacer… no puedo definirme.
    ―Tú eres tú.
    ―Para ti es así de fácil, pero piénsalo ―el castaño apoyó su frente en el hombro de su novio, las lágrimas volvían a fluir.
    Mientras Chiaki se calmaba en los brazos de Kai, este pensó un poco en lo que le decía su novio. Para él era fácil. Chiaki era Chiaki y eso era lo único que le importaba. No le preocupaba que vistiese como chico o como chica, para él se veía bien de las dos formas. Aunque era cierto que las ropas femeninas, ya no le quedaban como antes.
    En este último año, Chiaki había cambiado físicamente. Su cuerpo se había desarrollado. Hasta los 15 e inicios de los 16 se había mantenido bastante neutro, pero cuando estaba por cumplir los 17 su cuerpo había empezado a cambiar. Sus piernas eran más musculosas que antes, a pesar de que Chiaki intentaba hacer poco ejercicio para evitarlo. No lo eran tanto como las de los demás chicos, pero a sus piernas les faltaba algo más femenino. También sus pectorales estaban más formados y se había cuadrado un poco. Sus caderas seguían estando bien marcadas y, junto con el relleno del sujetador, le daba una forma algo femenina a su cuerpo, pero no tanto como antes. Su rostro no había cambiado tanto y aún podía pasar por el de una mujer, pero Chiaki estaba preocupado porque junto con la voz le ponían en una tesitura complicada. Aparentar ser una chica cada día le era más difícil.
    ―En la universidad y en el trabajo, tendré que vestir como chico. No puedo pasar como una chica y la gente no entenderá que sea un travestido. Me miraran mal ―volvió a hablar Chiaki en cuanto se calmó―. Aunque en mi día a día, fuera del trabajo, me vista como una chica, no será fácil si sigo teniendo este cuerpo.
    ―¿Lo dices en serio lo de operarte? ―el castaño asintió suavemente con la cabeza que aún mantenía apoyada en su novio―, ¿Realmente quieres seguir vistiendo como una chica?
    ―¿No quieres?
    ―A mí no me molesta, pero este tipo de operaciones son irreversibles, creo yo…
    ―¿Y? ¿No quieres que me opere?
    ―A mí me gustas tal cual estás ahora. Y me preocupa que te obsesiones con el tema ―Chiaki lo miró sin entender muy bien y Kai suspiró―, hay famosos que cuando empiezan a operarse ya no pueden parar y acaban destrozando su cuerpo. Solamente no quiero que te pase lo mismo, porqué te noto bastante preocupado por el tema de ser femenino o no serlo.
    ―No estoy obsesionado.
    ―¿Estás seguro? En todo el día solo hemos estado pendientes de este tema. Con el bañador, con las conversaciones, con las miradas de la gente… Te has estado preocupando mucho.
    ―¿Es eso cierto?
    ―Sí, lo es, me he fijado, en que últimamente te pasas más horas arreglándote, te preocupas más y ya no eres el Chiaki de siempre.
    Los ojos verdes de Chiaki se abrieron de par en par ante esas palabras por parte de Kai. ¿Era cierto que ya no era el de siempre? ¿Estaba cambiando, su manera de ser junto con sus cambios corporales? Pero a que se refería con eso, Kai, exactamente… ¿Que se había vuelto más masculino a la hora de pensar? ¿Le estaba dejando de gustar por esos cambios? Tuvo que detener sus pensamientos. Kai le había dicho que lo amaba por ser él. No podía volver a tener esos pensamientos inseguros, quería creer en Kai.
    ―¿He cambiado para mal? ―fue lo único que preguntó.
    ―No diría que sea malo, pero creo que te estás preocupando demasiado, no es necesario que seas femenino para ser una chica. He conocido chicas que son bastante poco femeninas. Las chicas hoy en día llevan muchos tipos de ropa y tienen comportamientos muy diferentes ―Kai hizo una pequeña pausa para pensar en lo que iba a decir― también he visto chicas que tienen un cuerpo algo musculoso y cuadrado. No es el tipo de chica que más guste a los chicos, pero eso no significa que no gusten a algunos chicos. Y a mí me gustas así.
    Chiaki pensó en las palabras del moreno. Dirigió sus ojos verdes hacia los castaños de su novio y se perdió en ellos. Veía la sinceridad con que Kai le decía esas cosas, y eso hacía que sus inseguridades desaparecieran de la nada. Sus palabras siempre le salvaban. No era necesario que se operara para tener la figura perfecta y ser la chica perfecta. Para Kai lo era tal cual estaba, independientemente de todo lo demás. A pesar de que Chiaki siempre había intentado ser lo más perfecta posible para que todos envidiaran a Kai, en estos momentos no era posible. Su cuerpo había cambiado. Quizás era momento de cambiar él también.
    ―Yo quería ser la chica perfecta para ti. Conseguir que todos los chicos te envidiasen por tener a una chica tan perfecta y que pudieses sentirte orgulloso de ser mi novio ―se sinceró Chiaki― por eso creo que me estaba obsesionando tanto, como dices tú, con ser más femenino. También pensaba que, al vestirme de chica, nuestra relación sería más fácilmente aceptada. Y no te mirarían mal por estar con otro chico.
    Cuando Chiaki se quedó callado, el moreno se acercó un poco más a él y le dio un tierno beso. El castaño se dejó besar y correspondió felizmente. Quizás no era el mejor momento para sentirse feliz, pero que Kai le besara siempre le alegraba los momentos tristes. Cuando se acabó el beso, los ojos marrones de Kai chocaron su mirada con los verdes de Chiaki, quien era casi de la misma altura.
    ―Te preocupas por demasiadas cosas. A mí no me importa si no aceptan nuestra relación por ser dos chicos o si no la aceptan porque eres un travestido, mientras tú estés de acuerdo en estar conmigo, lo demás no me importa.
    ―Claro que estoy de acuerdo, estoy muy feliz de ser tu novio ―declaró Chiaki en esos momentos.
    ―Entonces, no importa nada más, y tú deberías de pensar lo mismo. Disfruta más de la vida y no pienses tanto en los demás, sabes que me tienes a mí para apoyarte en lo que necesites. A mí me gustas más cuando estás feliz. A demás, yo estoy muy orgulloso de ser tu novio, y lo seguiré estando siempre.
    Chiaki se sonrojó ante esas palabras y cesó el contacto visual con su novio antes de lanzarse a sus brazos de nuevo. Por poco que fuera sus preocupaciones se iban ante las palabras de su novio. Kai era el mejor novio del mundo. Tan comprensivo y amable, no podía pedir nada más. Encima era un pervertido, algo que le gustaba mucho. Se sentía bien el que Kai tuviese ese control sobre él, durante esos momentos, pero que a la vez fuese muy cariñoso durante el resto del tiempo. Definitivamente Chiaki no podía pedir nada más en un novio, y por eso se sentía muy afortunado y quería devolvérselo a Kai de alguna forma.
    ―Te amo, Kai.
    ―Yo también te amo, Chiaki ―le respondió Kai antes de darle un beso― y bien ¿qué quieres hacer?
    ―Ir a un hotel a pasar un buen rato.
    ―No sé si podemos ahora mismo.
    ―Es una pena ―contestó Chiaki algo triste― quiero sentirte dentro de mí.
    Kai ante esas palabras tragó saliva, en serio que el castaño se estaba proponiendo seducirlo en ese solar, y aún estaban a plena luz del día. Finalmente se decidió por una apuesta arriesgada y cogió a Chiaki de la mano para volver a arrastrarlo por las calles. El castaño solo apretó el agarre y se dejó llevar, ya estaba acostumbrado a que su novio le llevara de esa forma. Y esta vez él había sido quien lo había provocado.
    ―¿Dónde me llevas?
    ―A mi casa, no puedo más, lo haremos sin hacer mucho ruido.
    ―No sé si podré…
    ―Podrás ―dijo Kai sin ningún tipo de dudas.
    Dicho esto, siguieron el camino en silencio, hasta que llegaron a la casa del moreno. Este abrió la puerta y después de saludar arrastró a Chiaki hasta su habitación. Soltó a su novio y cerró la puerta con llave. No quería que alguien le interrumpiera a mitad. Estaba demasiado necesitado. Esas palabras de Chiaki habían encendido una mecha en él que no podía apagarse de otro modo.
    Se lanzó a devorar a su presa, literalmente, y empezó a besarlo y morderlo por toda la zona visible del cuello. Chiaki gimió flojito, no quería hacer mucho ruido, así que se llevó una de sus manos a su boca intentando contenerse. Él estaba igual de necesitado que su novio. Se había acostumbrado a tener sexo con él regularmente y cuando eso faltaba se sentía algo solo.
    ―Kai… hmm… ―gimió suavemente en su oreja, consiguiendo que este se estremeciera.
    ―No me pongas más cachondo porqué será peor.
    ―Yo quiero que me des duro, ya.
    ―Que impaciente ―dijo Kai antes de sonreír travieso― pero primero…
    Kai fue hacia su cajonera y de entre la ropa sacó una bolsita. Chiaki miraba curioso eso, y cuando de allí salió una mordaza se sonrojó aún más. ¿Porque tenía eso Kai entre su ropa? ¿Lo usaría con él? No es que fuese a quejarse, pero sería la primera vez que le pondrían algo así. ¿Cómo se sentiría? En vez de miedo empezó a sentir curiosidad. ¿Realmente con eso evitarían que su voz se escuchara? Quizás sí. Ahora entendía porque Kai estaba tan seguro de que él podría contener su voz.
    ―Esto…
    ―Es una mordaza, te la voy a poner para evitar que hagas mucho ruido ―le explicó Kai― ven.
    Chiaki obedeció y se acercó a Kai. En cuanto le puso la mordaza cerca de la boca, la abrió y mordió la bolita que había justo delante de él. Kai, lo ató un poco fuerte, detrás de su cabeza, para evitar que esta se fuera. Luego miró al castaño. Sus ojos lo miraban fijamente. Le sonrió y le dio un beso en la mejilla.
    ―¿Te molesta o te duele? ―el castaño negó con la cabeza― si en algún momento te molesta solo házmelo saber ―esta vez asintió, aunque no estaba seguro de si lo haría― entonces, ponte en mi cama a 4 patas, Chiaki.
    De nuevo asintió y obedeció. Subió a 4 patas a la cama, intentando no pisar la falda. Su cabello cayó por los lados de su cabeza en cascada. Desde esa posición Chiaki podía ver por la ventana de la habitación de su novio. Se sonrojó al pensar que al igual que él podía ver por el cristal alguien más podría verlo a él. Pero eso de algún modo lo excitó.
    Kai le dio una pequeña nalgada al verlo así, a lo que Chiaki respondió con un movimiento y un gemido que quedó apagado en la mordaza. Luego le levantó la falda, y bajó sus bragas. Estaba bastante excitado de antes, así que no le costó mucho ponerse duro para poder jugar con su novio. Llevó su mano al miembro del castaño y lo tocó un poco notando como poco a poco se ponía más duro en su mano. También tocó un poco el suyo para acabar de ponerlo duro y poder meterlo.
    Eso hizo, lo metió dentro de su novio lentamente, sin preparación. No era virgen y tampoco hacía tanto que no lo hacían, así que a pesar de que costó un poquito fue bastante rápido, el entrar por completo en su interior. Chiaki siempre lo recibía sin demasiada dificultad. Siempre estaba preparado y dispuesto a ello. Era todo un pervertido, pero quizás, tal y como decía el castaño, era su culpa, por pervertirlo.
    Así estuvieron en un vaivén cada vez más rápido y más placentero. Ambos estaban disfrutando, y por algún motivo el saber que en cualquier momento los podían pillar les excitaba más. Los gemidos de Chiaki se escuchaban débiles gracias al efecto de la mordaza, y Kai estaba controlándose por no gemir demasiado fuerte. En vez de eso de vez en cuando dejaba escapar un sonido similar a un gruñido, que por algún motivo hacía que Chiaki apretara más su miembro en su interior.
    ―Te gusta cuando gruño, ¿eh? ―le dijo divertido con la voz un poco entrecortada por el placer y la excitación―, estoy casi, ya...
    No tardaron mucho en correrse, uno en el interior del otro, y el otro en la cama. Por suerte no había manchado el vestido. Kai salió del interior de Chiaki y fue hacia la cajonera de dónde sacó un paquete de toallitas húmedas. Mejor limpiar el semen de Chiaki cuanto antes. Por otro lado, el castaño se había sentado mientras aguantaba el vestido intentando que no tocara las partes sucias.
    ―¿Te ha gustado? ―le preguntó mirándolo para saber su respuesta.
    Chiaki asintió con la cabeza, aún tenía la mordaza puesta así que no podía hablar. Se la podría quitar, pero estaba intentando no ensuciar su ropa. Cuando Kai terminó de limpiar la cama, se acercó a él y se la quitó. Antes de que Chiaki tuviese tiempo de hacer nada más le lamió sus labios, y le dio un apasionado beso en estos.
    ―La única pega de la mordaza es que no puedo besarte.
    ―Puedes hacerlo ahora ―le respondió Chiaki con una sonrisa.
    ―Primero tengo que limpiarte y acabar de limpiar la cama, que está hecha un desastre ―el castaño asintió ante esas palabras y se dejó limpiar.
    Kai le pasó un pañuelo por su miembro y después le limpió el trasero que estaba lleno de semen. Al sentarse había ensuciado un poco la cama, así que también limpio esos restos. Si ponía las sábanas para limpiar iba a quedar muy sospechoso. Suspiró. Tendría que esperar unos días antes de hacerlo.
    ―Creo que habría sido más inteligente hacerlo en el suelo ―le dijo Chiaki viendo el trabajo que tenía su novio limpiando.
    ―Tal vez, pero no quiero que te hagas daño en las rodillas.
    ―También tú te preocupas demasiado.
    Chiaki rio un poco ante sus propias palabras. Kai sonrió al escucharlo reír y acabó de limpiarlo todo. El castaño se puso las bragas que llevaba antes, y se sentó en la cama a la espera de esos besos que su novio le había prometido, y los cuales no tardaron demasiado en llegar.

    Continuará...


    -------------------------------
    Si alguien lo lee, y le gusta el fic lo puede comentar, así actualizaré más rápido y si algo no encaja también lo podéis comentar, me ayudaría a poder mejorar la historia

    Muchas gracias!!
  3. .
    Ale, te comento dos capitulos y ya tengo dos más, madre mía... no me da la vida para ello, jajajajajajaja

    Bien, por parte de Yuki... también es un poco tonto no apoyarte más en la familia, para eso estan ¿no? y ellos te apoyan, aprovecha eso!! Al final como Nao pasa de ti, hablas con tu padre sobre el problema más serio que tienes, en estos momentos.
    no puedo decir que no te entiendo, porque... es normal que los problemas familiares afecten, nadie es un robot o un vulcaniano en este mundo, por desgracia, así que hay problemas que afectan. En el trabajo se debe intentar que no, pero puede pasar, lo que creo es que te falta buscar apoyo. Nao es tu prometido pero no la unica persona que hay en este mundo, recuerda eso.

    Yo es que siempre cuento las cosas a mucha gente, el apoyo que no recibo de un lado lo encuentro en otro y me va bien, no tengo problemas, me jode si mi pareja me ignora y no me apoya, pero... hay más gente en el mundo. Ánimos Yuki, tú puedes!

    Katsuo realmente se merece más que un monumento, creo que es quien mejor me cae de los 4, aunque Nao me encnata cuando esta en modo peluche, Katsuo es un amor, creo que Leiko escogió bien.

    Yo realmente quiero saber que piensa Nao, sobre la vida en general, porque dudo que esté satisfecho con la que tiene ahora, y quizás tendría que replantearse algunas cosas, está en juego su vida, tanto estrés no es bueno y hace daño a todos. Mi padre tuvo un tiempo así en su trabajo y mi madre estuvo a punto de divorciarse pero cambió de trabajo y llevan 31 años de casados, hay que hacer cambios a veces para que regrese la felicidad.

    Ahora, volvamos al capítulo de... LAS HIENAS! se podría haber llamado así tranquilamente, jajajajajaja, Yuki ha sufrido un montón, la verdad, y mira este capítulo en el que no ha salido Nao, me ha ido bien para relajarme un poco, seguiré leyendo un poco más en cuanto acabe de comentar. Suerte que al final solo ha salido con una falta en el expediente y poco más, porque sería jodido sino..

    Si se quedase sin trabajo, todo el día en casa amargado pensando en como lo está abandonando Nao... como mínimo de este modo aún puede pensar en otras cosas y tiene más problemas aparte de eso, puede centrarse en otras cosas, peeero que hable más con la familia que eso es la clave, como Nao no ayuda pues al menos... que vaya unos días a casa de los papas y hable con ellos, yo siempre lo veo todo más claro cuando hago eso, XD

    Bien, voy a seguir leyendo, chao!
  4. .
    Bueno, me he puesto al día con el fic, perdona, con todo lo que tengo que hacer se me hace imposible ir más rápida leyendo... y bueno, por algún motivo esta tercera parte me está costando más de leer, creo que es culpa de Nao, está muy denso... voy al comentario, será más corto de lo normal, pero será más que nada, perdona

    A ver, Nao se está portando como un gilipollas, entiendo que hay momentos de la vida y días que ayudan a eso, y quien no que lancé la primera piedra, pero no habrá nadie sin culpa alguna.
    De todas formas yo creo que lo que está haciendo de no explicarle nada a Yuki y solo abandonarlo no es lo mejor, y a parte, no escucha para nada a su pareja. Yo soy muy cabezota a veces, pero suelo escuchar aunque luego ignore.

    Sineramente como te he dicho por wats, Nao está haciendo lo mismo que le hizo Yuki anteriormente. Hacerle sentir mal por no decirle las cosas de buena manera y meterse demasiado en sus problemas sin contar con que Yuki forma parte de ella... No esperaba eso de Nao, la verdad, en parte me está decepcionando este peluche.

    Aunque diga que lo hace por Yuki, realmente creo que lo está haciendo más por orgullo, que habrá un trasfondo bueno, seguro pero creo que se va oscureciendo a medida que pasa el tiempo, y Yuki no quiere eso, pero a Nao le da igual.

    Comprendo perfectamente a Yuki, porque en realidad, yo no aguantaría eso, si realmente me estuviese haciendo daño habría dado un paso a mostrarle que no estoy de acuerdo pero no solo con palabras sino con acciones. Y lo hablaría con el padre de Nao, de paso, tener aliados es bueno, pero sin que Chinami se enterase para que no se meta, por su caracter más que nada... En mi casa yo confiaría más en mi madre y ella se ocuparía de ello, XD o hasta en mi suegra que tiene a mi novio más dominado que un domador de leones a sus leones, jajajajaja me rio para no llorar.

    Yo me iría de la casa unos días, a la espera de que Nao se diese cuenta, o pasaría de hacerle la comida y esas cosas... si él no me da lo que necesito yo no le daría lo que él necesita, fácil, aunque luego el sentido de culpa está allí, todo es distraerse.

    Y bueno hasta aquí, lo siento por Yuki y por el anillo, a ver como lo hacen para que esto cambie y todo mejore, XD

    Hasta pronto!!
  5. .

    Capítulo 2


    Como cada día Kai fue a casa de su novio Chiaki para ir juntos a la escuela. Al llegar le abrió la madre del castaño, como siempre, y le dijo que ese día no podrían ir juntos porqué Chiaki estaba enfermo. Eso sorprendió a Kai, su novio no solía ponerse enfermo a menudo. Preguntó si podía ir a verle antes de ir a la escuela a lo que la mujer asintió y le dejó pasar. Los padres ya sabían de su relación y no les parecía mal. Los padres del castaño pensaban que como mínimo este tendría a alguien, ya que siendo un chico que le gustaba vestir como una chica no tendría muchas personas dispuestas a quererle. Así que Kai les daba una esperanza de que no quedaría solo para siempre. Los padres de Kai lo vieron con peores ojos, pero no tuvieron más remedio que aceptarlo al ver que pasaban los años y todo seguía como antes. Con los dos chicos más unidos que nunca.
    ―Chiaki, ¿Cómo te encuentras?
    ―Hola, Kai, no es tan grave, pero tengo fiebre y mi madre me ha dicho que me quede en casa.
    ―Es mejor que descanses si no estás bien, amor.
    ―Eso me ha dicho mi madre, así que hoy me quedaré en la cama, pero será muy aburrido sin ti.
    ―Vendré a verte por la tarde y te traeré los deberes. ¿Tienes los deberes de hoy? Los entregaré por ti.
    ―Gracias Kai. Están en la mochila. Hay una carpeta allí está todo clasificado por materias y días. Es fácil.
    ―Bien, me llevaré la carpeta y luego te la devuelvo y te doy una clase particular para que no te atrases.
    Kai se acercó al castaño y le dio un pequeño beso en la frente. El chico cerró los ojos con una sonrisa y se despidieron. El moreno se fue a la escuela aburridamente, solo y preocupado. Sabía que no podría concentrarse en las clases, pero le había dicho que prestaría atención y le daría los apuntes. Chiaki era muy aplicado en las clases y a pesar de algunos jueguecitos que tenían siempre tomaba buenos apuntes. Realmente era un chico increíble. Y Kai se sentía muy afortunado de tenerlo como pareja.
    ―Ei, Kai, ¿Donde está Chiaki?
    ―Está enfermo.
    ―Pobrecita, está enferma ―contestó Noah algo triste.
    ―Sí, me voy aburrir hoy, sin él.
    ―¿Él? ―pregunta curiosa Michiru, quien iba con Noah.
    ―Sin ella, me he equivocado…
    ―También has dicho enfermo, ¿Estás bien? ―insistió Noah.
    ―No, no estoy bien, realmente estoy preocupado.
    ―Pero, ¿Solo es un resfriado, no? ―interviene Natsuki.
    ―Sí, solo tiene algo de fiebre.
    ―Entonces no es problema, ánimos ―le animó Michiru pasando su brazo por encima de sus hombros.
    ―Gracias ―Kai sólo siguió andando hasta que llegó a su asiento en clase y se sentó.
    Durante todo el día, los demás integrantes del grupo fueron los que se movieron para ir a hablar con él y distraerle. Cuando acabaron las clases se fue directo a la casa del otro muchacho para ver que tal se encontraba. Cuando llegó lo vio algo mejor. Estaba claro que al día siguiente podría ir a clases de nuevo. Y en ese momento le vino una idea a la cabeza. Quizás algo descabellada pero una idea al fin y al cabo.
    ―Chiaki, ¿Porqué no vistes como un chico durante estos días que estás resfriado? Creo que será mejor si vas en pantalón…
    ―Sería extraño… siempre he ido como chica, me da vergüenza ir como chico ahora.
    ―Nunca me lo había preguntado hasta ahora, pero… ¿A ti te gusta hacer el papel de chica? Ya hemos crecido y pronto tu voz cambiará, al igual que tu cuerpo… ¿Crees que podrás seguir siendo una chica a pesar de todo?
    En esos momentos vio como Chiaki lo miraba algo triste. Y Kai se sintió algo culpable, por hacerle sentir triste y mal, y más siendo que en estos momentos estaba algo enfermo. La culpa le apuñaló y se arrepintió más aún cuando vio que el castaño se daba la vuelta en la cama y probablemente estaba aguantándose las ganas de llorar. Se aproximó a la cama para ver a su novio cara a cara o al menos lo intentaría.
    ―¿Chiaki? Perdona no quería hacerte daño…
    ―Está bien…
    ―Chiaki, estás llorando, lo sé…
    ―N-n-no…
    ―Sí, y lo sabes, por favor, Chiaki, lo siento.
    ―¿Ya no te gusto? ―preguntó el castaño mirando hacia otro lado.
    ―¿Cómo? ¿Porqué piensas eso? ―preguntó extrañado Kai― no lo entiendo, claro que me gustas, pero ¿a que viene eso?
    ―Quieres que sea un chico porque ya no te gusto… ¿Verdad?
    ―¿Qué? No, claro que no, ¿porqué crees eso?
    Chiaki desvió la mirada nuevamente, durante unos segundos había mirado a su novio para ver si sus ojos eran realmente sinceros o no. Pero a pesar de todo, tenía miedo de la respuesta. Él había intentado durante años ser la persona perfecta que podría querer Kai a su lado. Cuando eran pequeños y vio lo mucho que le gustó a Kai que vistiese de chica pensó que eso era lo que él quería, por eso durante tantos años había trabajado para ser la chica perfecta. Y le gustaba, le había encontrado al gusto a hacer de chica, al igual que le gustaban los juegos con los juguetes que le proponía Kai. Su novio siempre había sido atento con él y se había preocupado por si estaba bien y esas cosas, y con eso Chiaki era feliz.
    ―Chiaki, respóndeme…
    A pesar de todo el castaño no dijo nada, no sabía que decir. Como empezar a explicar lo que sentía era algo muy difícil, y más en este momento. Estaban siendo unos momentos muy duros para él. Estaba enfermo y la persona por la cual había trabajado tanto y había cambiado tanto su forma de vivir estaba apunto de dejarlo. Al menos en su imaginación. ¿Pero que tenía que pensar? Kai le besó por primera vez cuando estaba travestido y le había dicho que estaba muy guapa y que le quedaba muy bien. Además estuvo de acuerdo en que vistiera de chica para él y mientras estaba travestido habían hecho de todo. Algo que había hecho muy feliz a Chiaki aunque su novio amara a su versión femenina y no a él, como tal. Al menos amaba alguna parte de él. Pero ahora, le estaba diciendo que dejara de ser una chica. En su mente eso significaba que ya quería ni a esa parte de él.
    ―Chiaki, yo te amo ―le aseguró Kai, intentando que el otro chico le mirara―. No entiendo porque crees lo contrario… ¿Porque se supone que voy a dejar de amarte solo porque te pregunte si a pesar de los cambios vas a intentar seguir intentando ser una chica?
    Kai no entendía nada. Su novio de repente dudaba de sus sentimientos y él no encontraba el sentido a sus palabras. Le había preguntado eso solo porque ya estaban en la edad de los cambios. Y realmente él ya los había hecho. Había crecido, su cuerpo había dejado de ser el de un niño para ser el de un adolescente y su voz otro tanto. Chiaki aún no lo había hecho, pero estaba seguro de que no tardaría mucho más en hacerlo. Sólo había expresado una duda que tenía. Pero Chiaki se lo había tomado muy mal. Suspiró y le dio un beso en la mejilla.
    ―Perdona, en serio no quería hacerte sentir mal ni deprimirte. ¿Sabes? Para mí, nunca has sido mi novia ―le empezó a decir consiguiendo que Chiaki lo mirara con los ojos muy abiertos― yo siempre te he considerado mi novio. De hecho hoy Michiru y Noah, me han cuestionado porque he hablado de ti en masculino.
    Kai le acarició la cabeza a Chiaki y jugó con sus largos cabellos. Realmente le gustaban esos largos cabellos castaños, que caían a ambos lados del rostro de su novio, y que combinaban tan bien con esos ojazos verdes tan hermosos. También le gustaba como le quedaban esas minifaldas, que mostraban todas sus piernas y les daban esa forma que no le daban los pantalones anchos del uniforme, pero eso solo se debía a que era un pervertido. Le gustaba demasiado el cuerpo del castaño para querer esconderlo debajo de la ropa. Si fuese por él le haría llevar menos ropa, pero solo en privado.
    El cuerpo de Chiaki aún no se había desarrollado, a diferencia de Kai que sí se veía muy masculino. Chiaki seguía teniendo unas piernas poco musculadas, aunque bien formadas, era esbelto y su pecho aún no mostraba unos pectorales muy marcados. Obviamente no tenía pecho, como sería de esperar en las chicas, pero la madre del castaño le había enseñado a coser el relleno de los sujetadores. De este modo parecía que tenía un pecho de tamaño medio. No muy grandes ni demasiado pequeños. Comparado con el pecho de algunas chicas eran pequeños, pero tampoco se necesitaba más. Y junto con su rostro que era bastante aniñado todavía, hacían una buena combinación para que Chiaki pudiese vestir y actuar como chica sin parecer un travestido. Al contrario, para algunos chicos el castaño se podía considerar guapo, que era lo que justamente pensaba Noah, el mejor amigo de Kai.
    ―No entiendo la relación entre que te diga que vistas como chico para que no pases tanto frío y el decirme que no te amo. Sinceramente, me parece una gran falta de confianza en mis sentimientos, y yo te he demostrado muchas veces que te amo… ―Kai aparte de confundido estaba algo decepcionado, pero no era el momento― no me voy a molestar por ello, porque no es el momento y lo que quiero es aclarar las cosas, aunque sé muy bien qué ya que no te dignarás a decirme nada en estos momentos ―suspiró una vez más y giró el rostro de Chiaki para quedar cara a cara―. Solo te diré una cosa más, ¿De acuerdo? Eres mi novio y te amo, te amo igual tanto si llevas falda como si llevas pantalón y eso no va a cambiar. Piensa en ello.
    Dicho esto Kai le dio un beso en los labios a Chiaki y se levantó de la cama. Se dirigió a la puerta de la habitación y abrió la puerta. Antes de salir lo miró y le dijo donde estaban los apuntes y deberes de ese día para que pudiese ponerse al día. Al cerrar la puerta Kai miró al suelo. No entendía del todo que pasaba, había intuido algo y había dicho lo que había pensado que sería lo adecuado pero quizás la había cagado rotundamente. Algo cabizbajo se dirigió a la puerta de la casa y se fue hacia la suya. Se encerró en la habitación y se puso a escuchar música mientras repasaba mentalmente lo que había dicho y lo que podría haber dicho. Estaba seguro de que la había cagado, y estaba buscando el donde y el cómo. El silencio de Chiaki no había ayudado mucho a entender las cosas ni a nada realmente. Y solo lo estaba torturando de una forma que jamás habría imaginado.
    En otra habitación estaba el castaño tapado con las sábanas, incluida su cabeza. Estaba recordando todo lo sucedido. No acababa de entender si Kai quería ser su novio o no. Al recordar las palabras de este, su cabeza decía que sí, pero su corazón le decía que ya no lo quería. Que se había cansado de ese juego que tenía con él y ahora quería buscarse una chica de verdad. Sus pensamientos negativos le quitaban la objetividad de su mente. Todo era muy confuso para él y lo único que hizo fue ponerse a llorar. Sabía que no arreglaría nada con ello, pero al menos se desahogaría.
    Era un momento tenso en la relación y, ambos estaban con sus dilemas internos. No sabían como acabaría eso pero ninguno de los dos quería terminar con la relación. Kai sabía que Chiaki opinaba lo mismo que él, pero también que estaba muy confundido y eso le preocupaba. Y de repente pasó algo que temía que pasara. Le llegó un mensaje. Era de Chiaki y le decía algo que imaginaba pero que no quería leer. Suspiró. ¿Qué debía hacer? ¿Rendirse o luchar? Él quería luchar, ¿Pero era eso lo que necesitaba Chiaki? Siempre había pensado que conocía a su novio mejor que nadie pero en estos momentos lo dudaba. Quizás no tendría que haber dicho nada.
    Salió de su habitación y volvió a la casa de su, ahora, exnovio, dispuesto a hablar con él, al menos una última vez. No quería que todo acabara con un mensaje de móvil. Esta vez le abrió el padre del castaño, quien ya había llegado a su casa y le dejó pasar. Saludó y fue directamente a la habitación de Chiaki donde lo encontró con unas tijeras en la mano, algo que lo asustó.
    ―Chiaki ¿Qué haces? ―le preguntó el moreno algo asustado.
    ―Voy a cortarme el pelo, si ya no quieres nada conmigo no tiene sentido seguir siendo una chica ―le gritó este con lágrimas en los ojos.
    ―Chiaki, por favor, cálmate ―Kai abrazó a Chiaki con fuerza para calmarlo.
    El castaño se removió un poco entre sus brazos pero Kai era más fuerte que él y no lo quería soltar. En cuanto se calmó cerró sus ojos y disfrutó del abrazo de Kai que se había relajado también. Siempre le había gustado el calor de esos brazos. Suspiró y se quedó quieto. Había algo en su interior que no entendía del todo ¿Que hacía Kai en su habitación? Le había mandado un mensaje diciéndole que todo había acabado. Entonces… ¿Porque estaba aquí?
    ―¿Qué haces aquí, Kai?
    ―He venido a decirte que no estoy de acuerdo con tu mensaje.
    ―¿No era eso lo que querías? Ya te has cansado de jugar a las parejas conmigo y ahora quieres buscarte una novia de verdad, ¿Cierto?
    ―Pero que tonterías estás diciendo, Chiaki…. ―exclamó Kai un poco enfadado― te piensas que si fueses un juego habría estado contigo tanto tiempo, ¿Realmente soy tan poco confiable para que pienses que mis sentimientos son tan etéreos?
    ―Kai… Tú dijiste…
    ―Sólo estaba preocupado por ti, Chiaki ―Kai estaba un poco desesperado por hacer entender sus sentimientos al castaño quien se negaba a creerlo― ¿Podrías confiar más en mi? Te lo he dicho antes yo te amo, porque eres MI NOVIO ―le dijo poniendo énfasis en sus últimas palabras― No me importa si eres un chico o una chica, yo te amo porque eres tú Chiaki, simplemente.
    ―¿De verdad? ―preguntó el castaño mirándolo fijamente con lágrimas en los ojos― ¿No me vas a dejar si empiezo a vestirme como un chico?
    ―Por supuesto que no, aunque si puede ser me gustaría que no te cortases este hermoso cabello que tienes ―le sonrió consiguiendo un pequeño sonrojo por parte de Chiaki― si quieres cortarte el cabello, eres libre de ello, sólo digo que me gusta lo suave y sedoso que lo tienes ―se autorectificó él mismo pensando que quizás no había dicho lo más adecuado.
    Chiaki al escuchar sus palabras se secó sus lágrimas y se separó de él para sentarse de nuevo en su cama. Kai lo miró y decidió sentarse a su lado. El castaño lo miró con los ojos rojos de tanto llorar pero sin más lágrimas. Era algo incómodo para ambos. Kai porqué se sentía mal por esos ojos rojos y Chiaki porqué aún estaba procesando la información. No sabían que decir hasta que finalmente el castaño decidió romper ese silencio que se había instalado entre los dos.
    ―Entonces… ¿Aunque no vista como chica me vas a querer igual?
    ―Por supuesto ―afirmó el moreno totalmente convencido de eso― sé que eres un chico des del principio.
    ―Pensé que te gustaba porqué me vestía como una chica… la primera vez que me besaste fue cuando iba vestido de Caperucita Roja.
    ―Lo recuerdo, el otro día soñé con ese momento, pero te besé porqué eras tú.
    ―Me dijiste que se me veía muy bien así.
    ―Te quedan muy bien las faldas, incluso ahora te quedan mejor a ti que a las chicas de la escuela ―Chiaki se sonrojó ante ese comentario y bajó la mirada.
    ―¿Estás seguro de que no te arrepentirás si empiezo a vestirme como un chico?
    ―Yo no me arrepentiré, pero ¿Qué es lo que quieres tú, Chiaki? ¿Cómo te sientes más cómodo como chico o como chica? ¿Sabes que si quieres ser chica hay tratamientos?
    ―Sí, lo sé, pero… nunca he pensado en eso realmente, sólo quería gustarte a ti, yo estoy bien de las dos formas.
    Kai le hizo levantar la cabeza al castaño y le sonrió antes de darle un beso. Después de esa confesión lo único que podía hacer era quererle más, pero tenían que aclarar ese importante tema. No podía quedar en el aire, y mientras pensaba en eso le vino a la cabeza un detalle que hasta ese momento había pasado por alto. Simplemente lo había atribuido a que era parte de la personalidad de Chiaki, pero quizás era un detalle más importante de lo que él había pensado, o incluso más importante de lo que Chiaki pensaba. Kai tenia la impresión de que el castaño ni siquiera se había dado cuenta de que lo hacía.
    ―Me parece curioso un detalle ―le dijo de repente consiguiendo toda la atención del castaño― si tenías miedo de que te dejase al verte como hombre… ¿Por qué conmigo no te mostrabas como la chica tímida y adorable que muestras en la escuela? Cuando estamos solos eres más atrevido, alegre y hablador, aunque no menos adorable, a mi parecer.
    ―Porqué eres tú… no tiene sentido mostrarme de una forma en la que no soy, ya que tú me conoces de antes y sabes como soy realmente.
    ―Entonces, también tendrías que haberte dado cuenta de que yo era consciente de que eres un chico des del principio.
    Chiaki lo pensó, realmente tenía mucha lógica lo que Kai estaba diciendo, quizás él se había precipitado al sacar las conclusiones. Ahora que lo había hablado con el moreno, veía que todos sus pensamientos eran erróneos. Este no le quería solo porqué se vistiera como una chica, sólo se habían dado los sucesos de esa forma y él se había confundido. Ahora le tocaba decidir que quería ser… Realmente no quería perder su miembro, le gustaba cuando Kai lo hacía sentir bien jugando con él. Era muy placentero. Se sonrojó al recordarlo.
    ―Kai, creo que seguiré vistiendo como una chica hasta que acabe la escuela ―dijo finalmente― si mi voz no cambia mucho, seguiré fingiendo que soy una chica, sería muy raro que de repente fuese como chico… me mirarían mal y me daría mucha vergüenza.
    ―Entiendo, por mí está bien, y luego ¿Qué harás?
    ―Me lo pensaré, supongo que depende de como vaya todo durante estos años de transición… ahora mismo a soy más alto que muchas chicas, y mi voz aunque no es tan aguda no es voz de chico, por el momento, puedo pasar por una chica alta…
    ―Es cierto, eres muy esbelto y podrías pasar por una modelo, realmente todos los chicos me tienen envidia por tener a una novia como tú, aunque ellos no saben que realmente eres mi novio, porque… aunque antes hayas cortado conmigo por móvil sigues siendo mi novio, ¿verdad?
    ―Sí ―le respondió Chiaki lanzándose encima de él para abrazarlo― yo te amo, Kai.
    ―Yo también te amo.
    Kai volvió a besar a Chiaki, le sorprendía que el chico no se hubiese resistido en ningún momento. Se había dejado besar las dos veces que lo había hecho, y había correspondido. Eso, en cierto modo, subía el ego de Kai, ya que le hacía pensar que el castaño no podía resistirse a él. A sus besos. A sus caricias. A su tacto. Tener el poder sobre el castaño le ponía mucho, era parte de su carácter. Y Chiaki nunca se había quejado. Obviamente Kai respetaba las opiniones y decisiones del castaño, pero en los momentos sexuales no podía negar que eso le gustaba.
    ―Chiaki ―lo nombró mientras lo iba tumbando suavemente contra la cama― quiero que sepas, que te apoyaré elijas lo que elijas.
    Lo volvió a besar cuando ya lo tuvo tumbado debajo de él, apresado entre sus brazos que estaban uno a cada lado de su cabeza. Chiaki solo pasó sus brazos por los hombros del moreno y correspondió a los besos que le daba el contrario. Ese día se habían besado muy poco, tanto por su resfriado como por su pelea, y estaba deseoso de más besos. A pesar de todo lo separó.
    ―Kai, estoy resfriado, te vas a contagiar.
    ―No te preocupes por mí, yo estoy bien ¿y tú?
    ―Caliente, pero bien ―Chiaki le sonrió a su novio y este le dio un suave beso en la frente.
    Con ese beso constató que Chiaki no tenía fiebre y que su calentura venía de otra parte. Acercó su mano a su miembro y al ver que estaba ya algo duro sonrió. Estaba seguro que a su novio le gustaba que él le dominara, por eso se dejaba hacer y se entregaba a los juegos que él proponía. Realmente no podría amar a nadie más, Chiaki tenía su corazón y lo tendría para siempre. Era algo que no se podía evitar, Kai pensaba que estaban hechos el uno para el otro, y él lucharía para que esta relación durara para siempre.
    Continuará...
  6. .
    Buenas Kai, aquí vengo con el último review de esta temporada, XD como pasan los días y los capítulos, jajajjaja no te das cuenta y ya se ha acabado una historia, XD

    Pues sí que es bueno tener hermanos en algunos momentos, pero en otros son un poco un fastidio, como todo tiene su lado bueno y su lado malo, XD

    Te lo dije por wats pero lo vuelvo a decir, para mí no ha sido forzado le ha dado un toque el cameo, y me ha gustado bastante la manera de decirlo, para que mentir, jajajajajaja creo que está bien yo esperaba el momento en que confesaran que estaban saliendo, XD

    Se le nota, Nao nunca se cansará de Yuki, nunca podrá saciarse de él, mucho sexo va a pedir el peuche, y no creo que Yuki tenga muchas quejas, jajajajajajajaja aunque veremos si puede seguirle el ritmo a Nao…

    Había entendido eso, pero, se me hace raro que diga que ha sido maravilloso si el único que se ha corrido es Yuki, por eso quería confirmar que había leído bien, jeje Suerte que está Yuki para pensar en acabar de satisfacer al peluche, que sino… este es capaz de decir que así está bien y tener que darse una ducha de agua fría, XD

    Ahora sí, me pongo con el review del último extra TT que penita me da que sea el último, XD La verdad es que me gustó cuando hiciste lo del Diario de Nao, porqué así pude saber un poco mejor como pensaba este y que sentía, me hizo ilusión, esta vez el extra es diferente pero seguro que estará guay también… aunque el título… Me da miedo

    Bufff…. Menudo inicio, en serio… Nao, tío, no nos hagas esto… no puedes decirle estas cosas a Yuki, tan frío… Casi dan ganas de llorar… la verdad… No puede ser que rechaces a Yuki, me niego… Yuki por lo que parece también se niega porque sigue insistiendo a pesar de todo…

    No empecemos con los sueños que a mí eso de que me acaben una historia hermosa con “Era un sueño y en realidad no pasó” me pone muy triste… No puede ser que Nao no ame a Yuki, y aunque sean solo amigos, de por si es raro que lo dejé allí sangrando y solo mire… Menudo amigo, ¿no? Para tener amigos así… mejor no tenerlos, XD

    Pobre Yuki y él allí con sus sentimientos de amor, por él… que triste… Este Nao tan frío no me gusta la verdad, me hace sentir mal, prefiero el Nao de siempre, el de toda la vida, porque ya es como de la familia, después de tantos capítulos… Naaaaooooo, regresa a la normalidad por favor!

    Y regresa el Nao adorable, menos mal, todo fue una pesadilla de Yuki… madre mía estaba por llorar pensando en que todo era un sueño y Yuki en realidad no era correspondido… ¿Te imaginas volver a empezar pero esta vez al revés? Con Yuki siendo quien está enamorado y quiere conseguir que Nao también se enamore de él… sería como girar las tornas de repente, XD un poco extraño tal vez, pero bueno… me ha venido a la cabeza, XD

    Ai, Dios, Yuki, que llorón que eres a pesar de que pasan los años… sigues siendo igual, XD y Nao es tan tierno!! Me encanta! En serio si creas el club de fans de Nao yo quiero ser la número 1 en las listsa, XD Consolando a Yuki para que deje de dormir y diciendo esas cosas tan adorables… Aix, me muero de amor, jeje

    Así que Katsuo y Leiko, se han casado ya y tienen una hija, que bien, en serio me encanta Katsuo, me parece muy buen tío y tiene paciencia para aguantar a Leiko, que no es mala chica pero tiene un carácter… es cosa de hermanos supongo, jajajajaja pero ambos han encontrado la persona adecuada dispuesta a aguantarlos, eso es lo importante, XD Me alegro por ellos, jajajaja

    Jajajajajajjajajajajjjajaja, intentando darle a Yuki se copa de cava con sorpresa y él queriendo la tarta, XD Dios mío, eso es muy Yuki, al final hasta Nao se desespera y le dice que tome la copa. Pobre Nao, él allí currándoselo y Yuki empanado de la vida, como es él… en realidad no sé que esperaba Nao montando todo eso… Porque Yuki lo primero que piensa es que el anillo es de su madre, XD Ni siquiera pregunta, ¿y este anillo? Da por hecho que es de su madre… y esta con la gotita en la sien “no hijo, no es mio” jajajajajjajjaja en realidad es muy gracioso, pero me sabe mal por Nao XD

    Al final Yuki acaba un poco agobiado por no entender que pasa, XD hasta cierto punto es normal, y en eso quizás tenga una reacción más normal que la que tendría yo… Me imagino a mi misma pensando “si no es de nadie, pues, la dejo por aquí” y dejando el anillo en la mesa, ante la duda de saber que es, XD Sinceramente… como en mi caso fui yo quien pedí matrimonio y lo hice por wats así de la nada, un buen día… pues… no creo que me pase algo así y lo agradezco, XD

    Nao tiene que hacer un paso más, se lo debe al pobre Yuki que aún está desconcertado sin saber que pasa, y lo hace, se arrodilla ante él y le pide matrimonio como en las películas… si es que es todo un romántico por Dios… La cara que se le queda a Yuki debe de ser muy graciosa, XD Porque él no se espera eso para nada, jajajajajajajajaja pero es obvio que dirá que sí, más le vale, sino pobre peluche, XD

    Yuki tartamudo, los nervios hacen mella, allí están dando por saco, pero… es que… se lo dice delante de todos, yo me pondría nerviosa y a saber que tontería diría… cuando me pasa eso y me sonrojo me pongo bastante tsundere, así que… podría decir cualquier cosa de la que podría arrepentirme… Solo de imaginarlo ya me da miedo lo que pudiese pasar por mi cabeza, XD

    Al menos Yuki después de hacer algunas preguntas, flipar un poco, respirar para calmarse y coger valor, responde lo que toca, jejeje, se puede decir que lleva mejor la presión que yo, XD Bien hecho Yuki, el peluche se merece un !SÍ QUIERO! En mayúsculas y todo, jejeje, que no veas como se lo curra todo por ti, es un amor! Realmente es tan romántico y lo planifica todo tanto… Son muchos detalles, XD Es normal que Nao al final se lance a los labios de Yuki para besarlo, como no, de seguro también estaba nervioso ante tanta pregunta y tanto suspense por parte de Yuki, jejejeje, aunque dudo que pensara que el castaño podía decirle que no… Muy tonto tendría que ser para hacerlo, XD

    ¡Y TENEMOS BODA! Como dice el padre de Yuki, jajajajajajaja en tres meses en estados unidos, ¿Porque no? Y ya con la madrina y el padrino de bodas, que una se ha autoadjudicado el cargo y el otro era evidente Haru también se lo merece, el pobre, la verdad… también es un amor, y aún sigue soltero, increíble… XD

    Y un increíble final, que monos que son, que declaración final más bonita, Nao siempre tiene una respuesta tierna para Yuki, es increíble, jajajajajaja Me encantan, en serio, en realidad es una pena que acabe ya, pero bueno, tocará esperar por más, a ver que tal avanzan sus vidas, con la vida de casados, jejejeje

    Ánimos chicos aquí estaremos nosotros para apoyaros en lo que viene!
  7. .
    Ei, Kai, ayer no estaba apta para hacer review, XD Tuve muchas ideas ayer pero no escribí nada… que cosas tiene la vida… Al menos si apunté las ideas, jeje

    Del capítulo anterior solo diré, que si Shiho se lo toma tan bien, dejando de lado que es algo fujoshi, creo que es porque en realidad no estaba enamorada de ninguno de los dos y que a ella le gusta Hanako, yuri, XD como no, nadie es hetero en el grupo, pero como siempre se ha dicho, Dios los crea y ellos se juntan, jajajajajaja creo que hoy empezaré a escribir, pero no sé a quien darle voz si a Shiho o Hanako… Esa es mi duda…
    Pero esto no me impide envidiar a Shiho lo más grande, cabrona que tiene yaoi para ella en directo, tsk! Jolines necesito un poco de emociones de este tipo en mi vida, la verdad… que últimamente no tengo ninguna pareja gay para observar… aix… tiempos aquellos en los que sí, XD

    Haru ha venido a reconciliarse, aix, que bonito es el amor de hermanos, XD a veces es un poco complicado dependiendo del carácter de cada persona, pero en general, la mayoría de los casos, los hermanos se suelen querer mucho, a veces con un vínculo mayor que con los padres, ya que es con los hermanos con quien haces las travesuras y con quien juegas y te peleas de pequeño, XD Como se nota que soy la hermana mayor, jajajajaja por eso entiendo a Leiko bastante bien, molestar al hermano pequeño mientras lo observas y lo intentas ayudar es algo que yo también hago, jeje
    Lo mío es más hacerle enfadar diciéndole que no he hecho algo que me ha pedido, para que me diga para que quiere que haga esa cosa, porqué él es muy callado y no cuenta nunca nada, así que… si no lo hago así… Pero mira ahora él está preocupado porqué estoy lejos de casa con la familia de novio y me habla para saber como estoy, que mono!

    Bueno, a mi me alegra que se lleven bien todos, ya, Nao y Hideki, también Shiho, XD Y Kai y Kenta por fin dicen que tienen una relación, les ha costado en realidad, jeje Más de un año… Si ellos dos lo hubiesen dicho antes, Yuki no habría tenido miedo porqué ya sabría que lo aceptarían y no habría segunda temporada, así que es comprensible que no dijeran nada, y ninguno de los dos tuvo los problemas que tuvieron Yuki y Nao así que tampoco tenían prisa para decírselo a nadie, pero mira se inspiran ante las acciones de Yuki, algo comprensible en esos momentos, jeje

    Y hubo “Noche de Sexo” donde peluche jr quería un premio que para él no fue suficiente… Y quiso más… Y llega el premio de verdad, algo mucho mejor que una simple noche de sexo en casa de los padres donde se tiene que ir con cuidado… y ser silnciosos… y si hablo ya del extra, jeje

    Yuki aquí planeándolo todo para poder hacerlo en el vestuario con su peluche, pero primero…. Hay que macar territorio y traumar a una chica que ya quería ir detrás de Nao, XD Hay que decir que no parece que a Nao le moleste el hecho de que Yuki marque territorio y lo ayuda a hacerlo yendo a besarle, es más tierno el peluche…

    Nao al principio no quiere saltarse las clases, pero ante la idea de poder ver a Yuki en bañador dice: “a tomar por culo las clases” algo que es comprensible pero un poco irresponsable… de todos modos que lance la primera piedra quien no se haya saltado una sola clase en toda la carrera… ya digo que yo no tengo derecho a ello

    Y Dios, menudo Hard… como se nota que te motivaste en dar el regalo al peluche, un regalo bien merecido, hay que decir, XD muchas gracias por escribirlo, de veras te lo agradezco…

    Me hacía muchisima ilusión leerlo, y más saber que Nao tuvo el mejor premio del mundo, al final lo hizo en las bancas como seme y le dieron duro contra las taquillas, por mí que a Nao aunque le guste ser seme le gusta más que le den, jajajajaja, Obviamente todo el mundo tiene preferencias, XD Eso es normal, y si eso le da más placer, pues adelante, siempre me han dicho que siente más placer al que le dan, y sabiendo que Nao es un viciosillo, que nunca puede dejar de querer más de Yuki… que menos que serlo también en cuanto a querer más placer, jajajajajaja me encanta como Yuki siempre cumple con lo que le pide el peluche, porque le gusta complacerlo, dios, como pareja me encantan y el hard también me ha encantado, jeje

    Hay dios, aunque no me queda clara una cosa, ¿Nao se corre cuando Yuki se corre en su interior, antes de decir que ha sido maravilloso, o seguía allí empalmado hasta que Yuki se la ha mamado? Es solo curiosidad, porque no se especifica, jajajajaja, y siempre que lo leo, creo que lo he leído unas 3 o 4 veces… pues me quedo así… pensando en ese detalle, XD

    Nao quiere más otra ronda en las duchas, un buen sitio después de que te hayan empotrado contra unas taquillas, la verdad… así te ensucias y te limpias a la vez, por Dios, que monos y pasionales son, jejejeje Como Nao se entrega a Yuki con todo su alma, y sigo diciendo que me encanta como Yuki complace a Nao con todo lo que tiene y más si su peluche se lo pide, jeje, a pesar del carácter que tiene Yuki deja muy claro que ama a Nao con locura y eso me encanta, como fujoshi no puedo pedir más, XD

    Bien, hoy es corto el review, lo siento, es que la tablet me tiene hasta los huevos, se le ha jodido la pantalla tactil y me hace la vida imposible, no sé si podré escribir mucho durante este mes, si mi novio no me deja su portatil y me sabe mal porque es todo lo que tiene para no aburrirse, más o menos lo mismo que me pasa con la tablet a mí… pero yo al menos tengo mis novelas para leer, jeje

    Mañana toca el último extra antes de la tercera temporada, ¿no? Que ganas tengo ya, jejeje, yo veré si mi tablet me deja escribir que me quiero poner ya con el spin-off yuri, sinceramente, ahora que por fin se acabó la tortura de las imagenes ya me puedo centrar en la parte guai, que es escribir, XD

    Te dejo ya esto que me voy a comer, hablamos!!
  8. .
    Buenas Kai, pues sí, por eso el título, jeje, no sabía que poner pero luego... al acabar con el Extra me dije, pues no queda mal este título, y se lo puse, eso de pensar en títulos... se me da taaan mal como buscar imagenes y hacer portadas, XD

    Merci, tengo la segunda temporada con ideas, aunque la cosa es saber como escribirlas de manera que quede interesante, y diría que primero voy a escribir tú spin-off, y quizás el reto para Sofía, que tengo la mitad del oráculo listo... XD

    Me alegro mucho de que te haya gustado el fic, en realidad me lo pasé muy bien escribiéndolo, y como me han caído muy bien estos personajes tenía la idea de escribir más de ellos, pero hasta el momento no sabía como, esta segunda temporada ahora ya tiene sentido para mí, XD

    Y me quiero mirar la otra historia que tengo de Kai y Chiaki, para ver como les va en el futuro que todo queda muy en el aire, y acabar con otro fic.... si en el fondo, tengo trabajo para no dejar de escribir en meses, XD
  9. .
    Buenas Kai, pues casi iba a releer ya la escena del beso, XD bueno o más o menos creo que me queda aún algún capítulo pero como hoy no molestaré a mi novio y le dejaré hacer la siesta, creo que hoy llego ya a su primer beso de nuevo en mi relectura de la primera temporada, XD es que como no acabo de inspirarme con lo mío, pues me releo lo tuyo para ver si así tengo suerte y me inspiro, jajajajajjajaja

    Ai señor… Por fin pueden dormir como es debido, en el coche, juntitos… supongo que es como dormir con un peluche de verdad, en cuanto te acostumbras a abrazarlos ya cuesta dormir sin ellos… Pues cuando te acostumbras a tener un peso encima cuando no lo tienes no duermes bien… XD Porque eso es lo que pasaba a Yuki, al parecer, aunque también supongo que más que por el peso en sí, era por lo que representa este, tener a Nao junto a él…

    Pero los viajes de coche acaban, por suerte o por desgracia, por mi una suerte que lo paso fatal, pero para estos dos que estaban durmiendo tan felices… una completa desgracia, XD Pobre Peluche, como lo engañan para que se levante de las piernas de Yuki, le ponen a un Yuki con bañador slip <3 en su mente y luego no está cuando abre los ojos… eso es de ser mala gente, XD pero es muy adorable su reacción, jajajajaja

    Bueno, entiendo a Nao perfectamente, conociendo a esta extraña familia, pues… no sabes por donde te van a salir, la verdad… yo me perdería bastante pero supongo que como siempre mi análisis me guiaría un poco, XD Pero no sé si Nao estaba analizando a la familia de su pareja como hago yo con la de Mike, ya he encontrado puntos débiles por donde podría empezar con mis poderes de manipulación, pero no lo haré por el momento, XD

    Katsuo… ai, Dios, y se nos pone a llorar, es tan cuqui! En serio, me cae muy bien el chaval, no te mentiré, es una pena que salga tan poco, podría ser otro amor platónico del fic… pero dejado eso de lado, imagino que la escena es para llorar, si eres algo sensible y como dice Sofía, las personas sosas (como Leiko o yo) siempre acabamos juntándonos con personas sentimentales (como Katsuo o Mike) se supone que para equilibrar, XD

    Yuki a veces puede ser muy adorable y tierno con Nao, me encanta cuando es así y no se comporta como un gilipollas, yo creo que lo mejor que le ha podido pasar a Yuki, aunque haya sufrido es justamente que este lo haya dejado… porque como dije la buena ostia te hace madurar, pero también porque así ha aprendido a valorar lo que tiene, y eso es mucho más importante que todo lo demás, XD Me siento feliz por ellos, la verdad… así que a dormir juntitos los dos, bien abrazados <3

    Bueno, realmente Yuki tiene una cuenta pendiente con Hideki, tiene que explicarle lo que hay, así que es normal, aunque supongo que es lógico que después de saber que este se había declarado a Yuki, a Nao no le haga mucha gracia… lo bueno es que lo acepta y no dice nada, solo se alegra de que luego pasaran la tarde juntos, es taaan adorable! Me encanta la personalidad de Nao, y en muchas cosas lo acabo comparando con Mike, XD

    Aprender a amar, creo que es lo más complicado que existe en este mundo, yo aún no tengo claro que es el amor como tal o si me he enamorado alguna vez… Pero… supongo que en realidad tampoco importa, porque yo soy más de pensar en las cosas que de sentirlas, y siendo así normalmente pierdo mis sentimientos por el camino, los analizo demasiado, tengo un problema con esto… Pero luego me pongo a leer o escribir y los personajes me explican cosas sobre sus sentimientos, es muy extraño, porque entonces más o menos los entiendo… Yuki ha hecho un paso que no todo el mundo sabe hacer, lo dicho las ostias son lo mejor que te pueden pasar, al menos objetivamente hablando, XD

    Y ¡POR FIN! ¡POR FIN, JODER! Hideki ha dejado que Yuki hable y le expliqué las cosas, me molesta un poco la gente que no sabe escuchar y solo habla, aunque he tenido que aguantar a varios en el trabajo, la verdad es que me gusta que haya una conversación, XD Hideki parecía haber olvidado lo que era eso, hacía monólogos… aunque yo antes también los hacía solo era porque el otro chico no quería hablar, XD

    Y sorpresa, Kenji ha conquistado a Hideki, que vueltas da la vida no? Parecía interesado en Nao, y mira, al final a acabado interesado en Hideki, XD Y claro, tu vas llorando y viene un chico y te pregunta, ¿oye estás bien?… no respondes… y te abraza y te besa, lo normal… yo cada vez que lloro tengo un chico a mi lado para que me bese, y uno distinto, eh? Jajajajajajajajajajaja por suerte no, me gusta llorar sin nadie que me moleste, XD pero mira a ellos parece que les ha funcionado un poco después te stalkean un poco y te piden una cita, así es como surge el amor, vaya de lo más normal del mundo, XD

    Que bien por ti, Yuki, ahora ya no tienes que esconderte, que por cierto, no creo que sea necesario decir nada a la gente, yo creo que si simplemente te llevas de manera natural con él y haces eso de cogerle de la mano o besarlo delante de la gente, ya quedará claro que es tú novio… a veces todo es más fácil de lo que parece, jeje A mí con algunos amigos me pasa, que no sé quien es quien va con ellos cuando quedamos pero si veo que se dan mucho la mano o se besan pues ya tengo la respuesta, XD

    Venga, vaaaaa, momento de la carrera de natación, por Dios que ganas tengo ya de que llegue el momento, XD Soy algo impaciente, lo siento, solamente me pasa con el yaoi y la lectura, en general, en mi vida del día a día, en general no lo soy, me da un poco igual todo, pero cuando se trata de leer y más si es una escena bonita en un yaoi… me impaciento, XD

    “Nuestros chicos” by Hideki, me encanta como lo dice, su relación parece que también va viento en popa, que genial, jejeje pues nada habrá que ver quien gana, si el peluche motivado o Kenji, XD

    Bueno, las cazadoras… son un peligro en realidad, yo en mi universidad no sé si había un grupo como tal, pero como no hablé con mucha gente aparte de mi círculo, pues… tampoco podría estar segura de nada, lo que sé es que en la piscina solo había personas más bien mayores… con quien me llevé bastante bien, debo admitir, yo sí hacía piscina en la universidad, pero no como Nao, yo solo lo hacía porqué me gusta nadar y así mataba el tiempo muerto en el que no tenía clases que podían ser varias horas… eran mis momentos felices, llegaba a la piscina de malhumor o estresada y salía súper relajada, como hecho de menos ir a la piscina TT-TT

    Como pueden hablar así de alguien, madre mía… que poco valor le dan a las personas, estas cazadoras, solo miran el físico y les importa poco lo demás, dejando de lado que Nao es un ángel, ellas no pueden saberlo porqué no lo conocen a penas, y Shiho, aunque no me cae mal, creo que tiene muy asumido que es suyo… cuando hace poco no quería ni verlo por el desplante que le hizo, algo que me parece bastante irracional…

    Creo que Yuki tiene razón en algo, Kenji no es para ser cazado, Kenji es más bien del tipo cazador, así que esas chicas no tendrán mucho que hacer, al menos es en mi opinión por lo que ha salido que es más bien poco, pero bueno, jajajajaja Nao es más el tipo de chico con posibilidades de ser cazado, pero ya lo estaba así que tampoco se puede… es complicado cazar a un chico si ya está bien cazado, como es el caso de Nao, XD

    Bueno, como para no ganar con la motivación extra que llevaba el chico y todo el entrenamiento que había hecho… Cuando uno se esfuerza las cosas salen bien y cuando uno está motivado salen mejor, es así la cosa, XD Y Nao estaba muuuuuy motivado, quiere su premio, cosa que comprendo perfectamente, y yo también quiero que le premien, XD

    Joder, que bonito momento, Nao te lo mereces, aquí Yuki de la nada saca un valor que nunca le había visto nadie… que beso más espectacular… ¿Tío porque no pasan estas cosas en la vida real? Ojalá, pudiese ver escenas así en persona, tan emotivas y tiernas con yaoi incluido… pero bueno, más vale yaoi escrito que ciento volando… como dice el dicho, XD Eso sí, yo no tendría valor para besar así a alguien delante de tanta gente, ni en sueños, vaya… normalmente siempre miro que no haya mucha gente a mi alrededor antes de hacerlo o al menos que no estén muy pendientes de nosotros… Pero me siento orgullosa de Yuki, sinceramente, así se hace, demostrando al mundo entero que ese rubito ya tiene dueño y no se puede cazar, XD

    A ver, yo ante una escena así tendría mis ojitos en forma de corazón pero sin montar mucho jaleo, sí, de acuerdo que me emociono mucho y eso, pero no vitoreo ni grito, que me da mucha vergüenza… quizás mi hermano no diría lo mismo cuando él jugaba a fútbol y desde las gradas empezaba: “Defended, vamos!” o “Pásala, pásala”… de acuerdo, pero no iba casi nadie a ver esos cutres partidos de fútbol, eran la cosa más aburrida… y los chicos jugaban fatal… pero detalles, XD y tampoco iría a verles de cerca, pensaría que para qué, observaría de lejos e intentaría no perderme ningún detalle, jejeje simplemente, XD observar es lo mejor…

    Y que cursis, madre mía, pero que tiernos, se respira una de amor en estos momentos, en esa piscina… que normal que ya de paso Kenji se haya dejado llevar por el momento y haya demostrado que ya tiene pareja también, es que… es casi para hacerlo sí o sí, XD

    Que ganas tenía de leer esto, estos capítulos tan románticos, y Nao se ve tan feliz de haber conseguido que Yuki lo ame tanto y hasta lo demuestre en público que casi se podría morir ya de la felicidad, que tiernos que son, XD

    Venga que ya queda nada y menos, y nos vamos al maravilloso premio!! Me muero de las ganas de releerlo, XD

    Hasta mañana!

    Edited by Tem-chan - 5/8/2020, 14:30
  10. .
    Bueeeeenas! Dios, el extra llega y se acaba la primera temporada, que era lo que tenía escrito, espero que os guste, XD

    Kai, sí, afecta en todos los ambitos de la vida, tanto en lo personal, como en los estudios y el trabajo, es como aquí el sexo... que aunque eso cada vez es menos frecuente sigue habiendo bastanta discriminación a la hora de contratar a alguien y para que se lo contrara... Tampoco es nada nuevo en realidad...

    Keita... No sé muy bien porqué tiene nombre, mi idea no era tan siquiera que saliera en el fic, se me coló... pero está estudiando a misma carrera que Kazuo así que tampoco sería raro que saliera más adelante en su vida...

    Sobre la pareja para Kana, me hace hasta ilusión pensar en una adecuada para ella, pero no me decido sobre quien podría ser... dado que está marcada lo suyo sería un/a beta... no sé si a algún/una alpha con lo orgullosos que son le gustaría estar con una omega marcada... Tengo que pensr un poco en eso, jejeje

    Y bueno, siempre que hay una oportunidad puede arder Troya jajajajajaja Es lo bonito de los fics, XD
    -------------------------------------

    Extra


    Dos años más tarde, me acababa de graduar del bachillerato y preparándome para ir a la universidad. Kazuo me había dicho que podía ir, que con su trabajo, ya llevaba unos meses trabajando después de haber acabado su carrera, podría pagarme la mía. Le debía mucho, sinceramente. Mi novio era el mejor del mundo, y me cuidaba como el que más. Y yo intentaba hacer todo lo posible para devolvérselo con todo mi amor y dándole lo que estaba en mi mano. Toqué el collar que aún llevaba puesto. Él no me había marcado todavía así que era mejor prevenir que curar. No sería bueno que me marcara otro alpha. No tendría mi amor, pero si mi celo, cosa que no me apetecía en lo más mínimo.
    Ya tenía 17 y haría los 18 a finales de año, así que en breves sería “mayor de edad”, y nuestra relación podría ser realmente aceptada. Estaba seguro de que Kana sabía de nuestra relación aunque no le hubiésemos contado nada tampoco lo ocultábamos. Ella no había dicho nada pero veía su sonrisa cómplice cuando teníamos algún detalle el uno con el otro. No parecía molesta ni contrariada. Algo que agradecía enormemente.
    En estos momentos me encontraba abriendo la puerta de casa, donde esperaría que llegasen de trabajar los dos mayores. Era sábado así que Kazuo probablemente llegaría antes o eso esperaba. Su madre los sábados a menudo no podía regresar porque había mucho trabajo y se quedaba en el bar. Al cerrar la puerta de la casa suspiré aliviado. Fui a mi habitación algo tembloroso, notando mis fuertes latidos y como empezaba a humedecerme. Había llegado mi celo mientras abría la puerta. Menos mal que no me había llegado momentos antes.
    Me senté en mi cama, cogí la llave de la cajita y me quité el collar. Después miré la caja con las pastillas para el celo. Las cogí pero decidí que era mejor esperar. Si llegaba Kazuo quizás podríamos aprovechar mi celo. No lo habíamos vuelto a hacer estando en celo, porqué su madre siempre estaba por casa y me hacía tomar la pastilla. Pero yo quería que lo hiciéramos y que, por fin, me marcara. Era mi alpha al fin y al cabo. Seguiría llevando ese collar por la calle, porqué era un regalo suyo, pero quería que completásemos el pacto.
    Me empecé a desvestir porque cada vez estaba más mojado y me molestaba. Era realmente incómodo llevar ropa apretando tus partes y más en un momento como este, en el cual la ropa se quedaba mojada y pegajosa. Era más cómodo ir sin nada. La parte de arriba no me molestaba así que me dejé la camiseta puesta. Era algo incómodo esperar en esta situación. Todas las sensaciones eran demasiado fuertes y mis deseos de ser follado iban en aumento. Mi mente empezaba a estar nublada y solo pedía que un alpha me follara. Uno cualquiera.
    El sonido de la puerta abrirse me llamó la atención y algo tembloroso me acerqué buscando a Kazuo. Cuando este cerró la puerta, ya había notado el olor que desprendía y había empezado a excitarse. Me lancé a su cuello antes de que pudiese dejar su bolso del trabajo y lo besé con deseo. Él respondió con la misma intensidad que yo y a medida que mis feromonas lo envolvían su celo también se incrementaba. Me llevó a la cama y tuvimos sexo como conejos durante minutos, horas… lo que fuesen, en esos momentos no me importaba.
    ―Mu-muérdeme… Kazuo… ―le dije casi en una súplica.
    ―¿Estás seguro?
    ―S-sí, te amo ―fue mi respuesta a su pregunta.
    Había notado las ganas que tenía de hacerlo, pero que se había reprimido un par de veces. Era admirable la fuerza de voluntad que tenía cuando se trataba de cuidar de mí, pero ante mis palabras cedió a sus impulsos y me mordió en la nuca, completando así nuestro pacto de por vida. Ahora mis feromonas solo tendrían efecto en él. Para los demás alphas sería una reacción similar a la de los betas. Y por eso mismo, si Kazuo me dejaba tendría problemas. A pesar de estar en celo, ningún otro alpha se giraría a mirarme y no querrían tener sexo conmigo. Estaría condenado a tener celos estando completamente solo. Pero teniendo en cuenta lo mucho que me cuidaba dudaba que me abandonase. En cierto modo su mordida era como una condena para ambos, una condena que nos haría permanecer siempre juntos. Algo que para mí, era una dulce condena.

    ---------------------------

    Unas horas más tarde, cuando todo había vuelto a la normalidad en la casa, Naoki dormía a mi lado. Observé mi mordida en su cuello. Estaba seguro de que mi madre se enfadaría, pero ambos estábamos felices por eso. Así que podría arriesgarme a que ella estuviese enfadada conmigo durante unos días. Le acaricié la cabeza, y cogí un mechón de cabellos negros. Me puse a jugar un poco con este, y sonreí. Para mí este chico era el único, así que no podría arrepentirme nunca de haberle mordido ni tampoco de haberme enamorado de él.
    ―Ya estoy en casa ―escuché que decía mi madre al entrar por la puerta.
    Naoki se removió un poco pero no despertó. Me levanté de la cama y me vestí un poco antes de salir de la habitación. Ella me miró con un signo de interrogación en la cabeza ya que Naoki no había respondido. Llegaba la hora de la verdad, cuando tendría que explicarle todo a mi madre. Era consciente de que ella ya sabía gran parte de la historia pero no todo así que quizás este era un buen momento.
    ―Mamá, tenemos que hablar.
    ―Dime.
    ―Hoy he marcado a Naoki ―lancé primero la bomba a la espera de su reacción.
    ―¿Qué has hecho qué? ―me preguntó con las manos tapando su boca de la impresión.
    ―Naoki y yo hace años que somos novios, y realmente des del primer momento supe que era mi alma predestinada ―empecé a decir ante su atenta mirada― hoy al llegar a casa Naoki me estaba esperando, estaba en celo, y lo hemos hecho, a mitad me ha dicho que quería que lo mordiese y no he podido decirle que no.
    ―Pero…
    ―Lo sé, esto va a ser para toda la vida, y sé lo mucho que sufres tu por la mordida de mi padre, pero yo lo amo y no voy a dejarlo, nunca, voy a estar siempre con él.
    ―¿Estás completamente seguro de lo que has hecho?
    ―Sí.
    Ella asintió con la cabeza y me dio un abrazo. Estaba casi seguro de que ella estaba pensando en que me habría condenado para toda la vida y que era demasiado joven. Quizás tenía razón pero yo sabía que eso no iba a ser realmente una condena porqué yo quería estar al lado de Naoki para siempre, no podía imaginarme mi vida sin él. Sonreí pensando en que si eso era una condena, estaba encantado de soportarla.
    FIN

    -----------------------------
    Y bueno, ahora sí, aquí acaba esta temporada, en unos días colgaré una segunda si encuentro la inspiración para saber como continuar lo que quiero escribir :D
  11. .
    Fuiste un poquito... MUY MALO... pero... se te perdona, XD que luego me diste un premio mejor, jajajajaja aquí vengo toda emocionada a por este capítulo que llevo esperando desde la cena de cumpleaños de Yuki, XD Ha habido muchos "Kyaaa" suprimidos para no agobiar a quien lea el comentario, XD

    Vamos, vamos, Yuki, vamos, vamos, Yuki!! Y-U-K-I!! Yuuuuukiiii!! Así me gusta que tomes una decisión y luches por ella! Lucha por Nao! Haz que regrese a casa contigo, FIGHT!! Después de estos ánimos por mi parte espero que lo hagas bien, XD YUKINA ESFUERZATE!

    Y llegaron a Osaka, donde Nao está “esperando” por ver a Yuki, es entre comillas porque él no sabe que este va para su casa, aunque en realidad lo que más desea es verle, jejeje Ai Dios, al fin viene el momento esperado…

    Los padres de Nao, todo preocupados también, aquí todo el mundo lo está… excepto si fuesen mis padres que me habrían echado ya la bronca y me hubiesen echado de la casa para que hiciera algo con mi vida… Pero en las historias todo es mejor, siempre, XD Venga que Yuki ha llegado y ya sube a la hacia la habitación, que emoción!!

    Tachán! Que presentación, allí todo altivo, aunque tienes cara de muerto viviente, XD Menuda estampa que das, pero con lo que te quiere Nao creo que eso es lo que menos le va a importar… Acabas de llegar como regalo de Navidad en su habitación, así de la nada, que sorpresa la suya, en realidad, al menos es una buena sorpresa ¿cierto, Yuki?

    ¡Un sueño…! Sí, la vida a veces parece un sueño o una pesadilla, según como se vea, según el momento y esas cosas, y según la persona que lo vea, XD Aquí no tengo experiencia en ello porqué nunca ha venido un novio a buscarme de improvisto en casa ni nada por el estilo, así que no sé que se siente, pero supongo que sí hay veces que cuesta creer lo que pasa a tu alrededor…

    Que varonil se nos ha vuelto Yuki con esta declaración repentina, Nao debe de estar aún más sorprendido que antes y, debería de estar emocionado, aunque creo que en estos momentos está más bien confundido, pero menuda declaración! Nao, siéntete afortunado, a mí nunca me han dicho algo así, aunque de nuevo me quedaría con un “Ah” si me lo dijeran, XD así que casi agradezco que no me lo digan, XD

    Aix, besos lentos… En eso tengo experiencia como vela, XD Y fue en plan, os besáis o no… fue una tarde de verano en casa de un amigo mío donde mi mejor amiga, que lo acababa de conocer estaba hablando con él y de repente… mientras yo leía un manga de Naruto, empezaron a acercarse… y no acababan de llegar nunca, estaba por decir “Pero os besáis de una vez o no, lentos” pero no dije nada para no despistarlos… Y luego tuve que explicarle a mi mejor amiga como había sido el beso porqué ella ni lo recordaba… Una experiencia muy rara, a decir verdad…
    Pero aquí no hay velas, son ellos dos, después de una declaración muy bonita y ambos lo estan deseando, tanto que Nao no puede resistirse tan siquiera a la espera y pequeña duda de Yuki… Entiendo que Yuki está en plan “quiere que me detenga o no?” Y Nao rompe la duda haciendo él el paso, que monos que son <3 Que llorones están hechos, han llorado más ellos dos en estos pocos días que yo en toda mi vida, y tampoco es que yo no llore nunca… pero eso es otro tema, XD

    Bien, bien, parece que han quedado de acuerdo en que se aman y que no hay dudas respeto a estos sentimientos y también en que no es un sueño… la conclusión a la que llega Nao sobre lo del sueño es un poco diferente a lo esperado en un momento así, pero supongo que tiene lógica, como peluche insaciable que es, querría tener a Yuki desnudo para él, XD

    Ooooh!!! Nao, que mono es, XD Pero es cierto que para él ver a Yuki es el mejor regalo, tan mono… Me parece súper adorable que piense así, jeje aunque el pendiente también es bonito, XD Como yo nunca llevo pendientes pues no es un buen regalo pero como Nao parece ser que sí, al igual que mi novio, es un detalle bonito, y me hace pensar que quizás algún día si encuentro uno bonito y tengo dinero podría ser un buen regalo para él también, XD

    Aix… como no, el peluche encima de Yuki, ambos extrañaban eso, al menos ahora ya no lloran, por fin! Ya tocaba, deben de haberse deshidratado de tanto llorar, y con lo que cansa llorar… necesitaran unos días de reposo como mínimo, XD Promesa de estar siempre juntos, ahora que Yuki declare por todo el mundo que su peluche es su novio y todos felices… Sobre todo después del premio jiji Nao aun merece recibir un buen premio, <3 <3 <3 <3

    Que mimoso, XD Hay que ver el amor lo que hace, jejeje y la paciencia que tiene que tener uno a veces, la verdad… Porqué… Eso de que cada dos por tres te abracen y te impidan hacer algo puede ser un poco agobiante, creo que soy demasiado alma libre como dicen siempre mis parejas… cosas de la vida, XD

    Aix, maleta, cena y de vuelta a casa los dos juntitos! Que maravillosa es la vida, y que bonito momento, en serio, los dos durmiendo en el coche, Nao, como no, encima de Yuki, al parecer no se puede evitar, pero a Yuki no le molesta con lo cual no es necesario evitar nada, jajajaja, después de leer esto me están dando ganas de leerme de nuevo la primera temporada, son tan adorables!! Tengo que guardar el fic en mis archivos del pc, lo raro es que aún no lo haya hecho, sinceramente, porque guardar fics yaoi es algo que siempre hago, jejeje

    Pues nada, voy a ver si copio los capítulos de la primera temporada y si arreglo los de la segunda que me mandaste, XD me gusta tenerlo separado por capítulos, jeje

    Nos leemos mañana, con el final, ¿ya? No recuerdo si quedan uno o dos capítulos o cuantos, jejeje pero bueno con ganas de más, jeje

    deeeew
  12. .
    Buenaaaas!!

    Pues sí Kai, es impresionante pero lo que se aprende de pequeño en general es lo que uno tiene más presente en su memoria, incluso cuando uno tiene una enfermedad de perdida de memoria en la vejez, lo ultimo que olvida es lo que aprendió durante la infancia, es lo más corriente... Y para desgracia de Naoki lo que aprendió es más bien traumático...

    Kana se solidariza con Naoki, y Kazuo lo ama... creo que es eso lo que les lleva ha quedarse al menor en la casa y adoptarlo como uno más de la familia, realmente Naoki es un suertudo porqué ha tenido un buen destino, dentro de lo que cabe... el inicio quizás no, pero creo que el futuro le será bueno, XD o eso espero, jajajajajaja

    Bueno, la madre ve cosas pero intenta no meterse de más, solo que se preocupa y quiere que las cosas vayan bien... no quiere que comentan errores que luego puedan pasar factura, en este fic la madre ha tenido un papel más importante del normal en mis fics, y le he cogido bastante cariño, la verdad... Y espero que en un futuro pueda encontrar también a alguien, que nunca es tarde para eso, XD
    -----------------------------------

    Capítulo 5


    Habían pasado unos meses y ya iba a la escuela con regularidad excepto durante el celo. Aunque me tomase el supresor era mejor que no fuese, y al tener el papel que decía que era omega se me permitía saltarme las clases en esos días. Habíamos hecho un papeleo impresionante para que pudiese formar parte de esta familia. No podía recurrir a mis padres así que habíamos tenido que hacer las mil y una pero habíamos logrado que Kana me adoptase y ahora era Naoki Yukimura. Mi otro apellido había desaparecido y en gran parte me alegraba por ello. Tanto Kazuo como Kana me trataban muy bien y me sentía muy a gusto con ellos dos.
    ―Naoki, ¿Vienes a jugar a fútbol? ―me preguntó uno de los chicos con quien había entablado amistad en la escuela.
    ―Sí, ahora voy.
    Había descubierto que aparte de estudiar había otras cosas en la vida y que jugar al fútbol y a otros deportes era bastante divertido. Y más si era con amigos. Había gente que me miraba mal por ser omega, pero en general había mucha más igualdad que en donde vivía al inicio, así que aunque me tratasen un poco diferente, para mí era casi como si me trataran de tú a tú. Había alguna excepción, pero como en la escuela la mayoría eran betas, no tenían tantos prejuicios. Me había dado cuenta que con los betas me llevaba bien, solo tenía algunos problemas con los pocos alphas que había en esa escuela.
    Salimos al patio para jugar y justo me encontré con uno de los dos alphas que había. Creo que había 2 alphas, 4 omegas y lo demás eran betas. Por lo que sabía. Todos mis amigos eran betas, así que no tenía muchos problemas. Los betas eran más tolerantes y también más inmunes al celo de los omegas, así que con ellos tampoco tenía que sufrir en ese aspecto. Al ver al alpha toqué mi cuello donde estaba un collar negro que me había regalado Kazuo antes de empezar las clases. Me dijo que era mejor que me lo pusiera siempre antes de ir a la escuela o salir a la calle. Nunca se sabía cuándo podía entrar en celo y así evitaría que un alpha me marcara por error en un caso como ese.
    Había hablado con Kazuo sobre todo. Él me había hecho algunas preguntas, que eran similares a la de Kana, pero también algunas un poco diferentes que respondí con la misma sinceridad. Pero todo quedó en eso, en una charla. No me había atrevido a decirle que quería ser su omega para siempre. Pero me hizo muy feliz cuando me regaló este collar. En cierta forma era un detalle, porque no quería que me atara a alguien a quien no quisiera, y realmente yo solo quería que me marcara Kazuo, si tenía que hacerlo alguien. Era un collar de llave, que solo podíamos quitar Kana y yo. Por si perdía una llave le había dado la otra a mi madre adoptiva. Nunca se sabía. Pero realmente no sacaba la llave de casa. La tenía guardada en una cajita, y solo cuando llegaba a casa la cogía y me quitaba el collar.
    ―Naoki ―volvió a llamarme Keita, mi amigo― vamos.
    Me había quedado parado al toparme con ese alpha. Me daba un poco de miedo, siempre me miraba con unos ojos que me hacían sudar frío. Y suponía que aunque hubiese hablado con Kana y Kazuo de todo eso y ellos me hubiesen dicho que no era lo normal, aún lo tenía interiorizado. Era cierto que lo había vivido des del bando de los alphas pero se me había quedado muy grabado, y tenía la impresión de que si él, como alpha, me decía de tener sexo, me sería complicado rechazarlo. Corrí detrás de Keita dejando esos pensamientos de lado acompañado de un suspiro.
    ―Me dan un poco de miedo los alphas… ―le comenté al llegar junto a él y ver su mirada extraña sobre mí.
    ―Supongo que es porque eres un omega, a mí me parecen gente normal…
    ―Yo también lo supongo.
    A mis compañeros no les había contado nada de mi pasado, así que no podían entender exactamente qué era lo que pasaba en mi mente. Pero yo sí lo sabía. Me daban miedo porque me recordaban a mis hermanos y a mi padre. Las personas que me habían tirado en un callejón para que el mundo no supiera de mi existencia como miembro de su familia. Y también a las personas que compraban a omegas para violarlos continuamente sin darles nada a cambio, para básicamente tenerlos esclavizados a su merced.
    Llegamos al campo y nos pusimos a jugar con el balón. No se me daba nada mal jugar al fútbol y era muy divertido, si no fuese por mi celo me apuntaría al club de fútbol. Por el celo habrían varios inconvenientes, uno, que los supresores eran considerados como una droga, dos, que tendría que hacer descansos en mis épocas de celo, tres, que el capitán era uno de esos alphas que tanto miedo me daban y, cuatro, había descubierto en estos meses que mi celo era bastante inestable. No sabía porqué, pero había leído que era algo que podía pasar en los omegas, sobre todo si convivían con un alpha y este era su alma predestinada. Qué en mi opinión era mi caso. Sabiendo todo esto, prefería no complicarme la vida, no estaba claro cuando podría bajarme el celo y no quería arriesgarme. Jugaba para pasar el rato en algunos descansos y el resto del tiempo lo pasaba con los amigos o estudiando.
    Algunas veces estaba con Kazuo en casa, y también era bastante agradable. Era otro de los motivos por los cuales no me apuntaba a ningún club, hacer eso me quitaría tiempo para estar con el mayor, y realmente no quería eso. Aunque podía ser un poco extraño porqué me costaba más reprimir mi celo y necesitaba tomar más supresores de la cuenta cuando quería pasar tiempo con él. Era un arma de doble filo, pero no quería dejar de pasar esos momentos con él. Según había leído todo eso pasaría cuando él me marcara, entonces mi celo sería solo para él y se normalizaría. En un principio el celo debía ser una vez al mes, pero al estar cerca del alpha especial para él, podía entrar en celo ne cualquier momento y varias veces al mes. Era una reacción física que no se podía controlar, y que solo podía pasar por la conexión de Alpha-Omega, en casos especiales. Eso me hacía feliz, porqué me daba a pensar que nosotros dos teníamos una relación especial y más fuerte que otras personas.
    Pensándolo bien, la primera vez que entré en celo estaba Kazuo cerca de mí. No habíamos interactuado físicamente o verbalmente. Pero se encontraba a la calle de al lado con sus amigos. Había sido poco después de escuchar ruidos que había empezado a notar esas sensaciones, que en ese momento me parecían extrañas. Gracias a eso, Kazuo se había sentido atraído por mí y me había rescatado de ese callejón. Quizás no había sido tanto una coincidencia como pensábamos. Sonreí ante ese pensamiento. Pensar que había entrado en celo, porqué él estaba cerca y que eso había llevado a lo que éramos hoy, me hacía sentir inmensamente feliz. Y todo gracias a que mi familia me había lanzado, no podía sentir rencor hacia ellos, porqué lo que tenía ahora era mucho mejor que lo que tenía anteriormente.
    Al acabar el recreo seguimos con las clases, todo lo que dábamos en clase, por el momento ya lo había estudiado en mis clases privadas, con lo cual no me preocupaba mucho el temario. Siempre había sido bastante inteligente así que estudiar se me daba bien. No sabía si como omega podría estudiar en la universidad pero me gustaría bastante poder hacerlo. Ojala pudiese, pero tenía la impresión de que Kana no tendría dinero suficiente para ello. Tampoco quería pedir demasiado, se estaban portando muy bien conmigo y no quería ser una carga, más de lo que ya debía de serlo, en mi opinión.
    La siguiente semana serían los exámenes de finales de semestre y después tendríamos una semana de descanso. Tenía ganas de ello, porque tenía la intención de pasar algo más de tiempo con el pelirrojo. Tenía muchas ganas de estar con él… No podía negarlo. Así que deseaba que ya llegase el fin de la semana siguiente. Kazuo me había dicho que él también acabaría los exámenes de la universidad y podría estar más conmigo. Estaba feliz ante la perspectiva.

    --------------------------

    Los exámenes me estaban dando mucho dolor de cabeza estos días, no me dejaban tiempo para nada que no fuese estudiar. Quería aprobarlo todo a la primera y con buena nota. Al año siguiente estaría en el último año de la carrera y tenía una buena media, pero quería mejorarla. Quería ser capaz de cuidar de Naoki y para ello necesitaba sacar buenas notas y encontrar un buen trabajo. El ser alpha ayudaba a eso, pero no solo valía eso en el mundo y al no tener una familia poderosa, como mínimo, necesitaba unas buenas notas para poder entrar en la sociedad por la puerta grande.
    ―Kaaaazuooo ―dijo el pesado de mi amigo abrazándome por la espalda.
    ―Adiós ―fue lo que le respondí con un suspiro.
    ―Que frío eres… ―lloriqueó un poco.
    ―¿Sabes que es muy cargante que me sigas a todas partes?
    ―Oh, vamos, somos amigos…
    ―Sí, somos amigos, pero ese no es motivo para que te me lances encima cada vez que me ves.
    ―¿Qué pasa tu pareja se pondrá celosa si nos ve? ―me preguntó de repente cambiando su rostro y dejándome sin palabras.
    ―Pareja… ―pensé en Naoki inmediatamente pero aún no lo éramos, no sabía que pensaba él de mí― Aún no somos pareja ―esta vez mi voz sonó un poco más triste.
    ―¿Hay alguien te gusta? ―parecía que eso le molestaba un poco, lo miré sorprendido, ¿podía ser que yo le gustase?― oye, responde.
    ―Sí, hay alguien que me gusta ―fue mi respuesta sincera― pero aún no me he confesado.
    ―¿Y quién es si se puede saber?
    ―No lo conoces, es algo menor a nosotros y no estudia aquí.
    ―¿Te gusta un niño? ―preguntó más molesto, casi gritaba pero notaba que se estaba conteniendo.
    ―Eso no tiene nada que ver contigo, es cosa nuestra. Y no es tan pequeño.
    ―No me esperaba esto de ti... ―me dijo decepcionado antes de irse.
    No estaba entendiendo mucho esa conversación, pero me alegraba saber que ya casi acababan los exámenes y tendría un tiempo de descanso, para poder pasarlo relajadamente en casa con Naoki. El moreno se había visto más feliz en estos días y también más cariñoso. Aún se le veía tímido pero a veces me buscaba para hablar o ver una película. Y eso me hacía feliz. Ya no me trataba como si fuese alguien superior a él, y si quería algo lo pedía. Tartamudeaba un poco a veces, pero eso le hacía ver muy adorable en mis ojos. Con estos pensamientos me dirigí a casa sonriendo.
    ―Ya llegué ―fue lo que dije al entrar.
    Inmediatamente vi como el moreno venía corriendo a saludarme. Ya no cogía mi mochila por mí, pero venía a recibirme con una sonrisa en su rostro. Siempre que lo hacía le acariciaba la cabeza y él se sonrojaba. Que tierno se veía Naoki en esos momentos. Le pregunté qué tal le había ido la escuela y empezamos a hablar un poco. Había llegado algo tarde así que mi madre estaba por irse a trabajar. Era viernes por la tarde, así que tendríamos todo el fin de semana por delante. Para estudiar.
    ―¿Hay algo de las clases que no entiendas? ―le pregunté a Naoki quien se veía muy relajado.
    ―No, todo lo que estamos dando ya lo di con mi tutor privado ―me respondió con una sonrisa― repasaré un poco pero ya está.
    ―Qué suerte que tienes, yo sí tendré que estudiar para mis exámenes.
    ―¿Cuántos te quedan?
    ―Dos, uno el martes y otro el miércoles.
    En la universidad era diferente y en esta última semana, las asignaturas de las que ya habíamos hecho exámenes no eran obligatorias, así que tampoco se hacía mucho temario y en algunas el profesor había dicho que no las haría porque se dedicaría a corregir los cientos de exámenes que tenía que corregir, y que sería estudio libre. Con lo cual solo tendría que ir a hacer los exámenes y ya sería libre de la universidad por un par de semanas.
    ―¿Son muy difíciles? ―me preguntó curioso acercándose peligrosamente a mí.
    ―Bueno, tienen mucho que estudiar, aunque difícil no sería la palabra.
    ―Ya veo… ¿Entonces tendrías algo de tiempo para mí? ―me preguntó con la mirada un poco baja y un leve sonrojo en sus mejillas.
    ―Cla-claro ―tartamudeé viendo lo adorable que se veía en esos momentos― ¿Qué necesitas?
    Justamente en ese momento mi madre apareció en el comedor y se despidió de nosotros para salir de casa e ir a trabajar. Nosotros le dijimos adiós y después nos volvimos a mirar. Nuestros ojos se encontraron y pude ver como se sonrojaba aún más por ello. Por su comportamiento casi parecía que yo le gustara. ¿Sería cierto o era yo que me estaba haciendo ilusiones?
    ―Ka-Kazuo… me gustaría… hacer cosas contigo… ―me dijo al fin, algo dudoso y nervioso.
    ―¿Qué cosas?
    Por Dios, me estaba poniendo el corazón a mil por hora y mi cuerpo en estos momentos estaba empezando a calentarse ante la posibilidad de hacerle miles de cosas. No podía ser bueno para mí todo eso. Era demasiado tierno para poder evitar esos pensamientos. Yo sí quería hacer muchas cosas con él, pero ninguna de ellas era demasiado inocente. Tragué saliva intentando calmarme, esperando que él rompiera ese silencio.
    ―Muchas cosas… ―dicho esto se arrodilló ante mí y me desabrochó el pantalón con las manos temblando por los nervios.
    ―Na-Naoki, e-espera un momento ―le dije poniendo una de mis manos en su hombro.
    ―¿Qué pasa? ―me preguntó con los ojos algo brillosos por unas lágrimas― ¿N-no quieres? ―bajó un momento la mirada― lo siento…
    ―No es eso, Naoki ―me apresuré a decir al verle así de triste― pero primero tendríamos que hablar.
    Él asintió y se levantó del suelo para sentarse en la silla de delante de mí, esperando que yo hablara. Su mirada estaba fija en la mesa, pero podía ver que sus mejillas seguían tan rojas como un tomate. Llevé mi mano a su mejilla y le levanté el rostro para mirar sus ojos. Esas lágrimas traicioneras estaban ya en ellos, y parecía que pronto caerían por sus mejillas. Se las sequé y después me puse serio para iniciar la conversación.
    ―Yo sí quiero hacer estas cosas contigo, porque yo te amo, Naoki, pero quiero saber qué piensas tú, no quiero que te veas obligado a eso por ser omega y yo alpha…
    ―No es por eso ―respondió decidido mirándome fijamente― Yo de verdad quiero si es contigo. Yo también te amo ―su voz sonaba segura, y sus ojos aún me miraban decididos.
    ―Entonces, ¿Quieres ser mi novio? No mi esclavo, sino mi novio.
    ―Sí quiero, es lo que más quiero. Tú eres el único al que quiero.
    Ante esta confesión sonreí y le cogí de la mano para llevarlo a mi habitación, sería un mejor lugar para nuestra primera vez como pareja. Por el olor Naoki no estaba en celo en esos momentos así que quizás no sería tan fácil como la vez anterior, pero también sería mejor porque las feromonas no me llevarían a ser tan bruto con él. No quería que fuese como la última vez. Quería hacerlo siendo consciente de todo lo que le haría y sin prisas. Quería demostrarle que le amaba y no que solo lo quería usar para el sexo. No sabía hasta que punto Naoki había dejado de lado su aprendizaje anterior y no quería cometer ningún error. Por eso lo había hecho parar, quería que él supiera mis sentimientos antes de poder hacer algo más con él.

    ---------------------------

    Mientras esperaba que llegase Kazuo a casa, pensé que podría ser un buen día para intentar avanzar en nuestra relación. Mis exámenes eran fáciles y Kazuo ya había hecho algunos. Kana trabajaba por la tarde, se iría en breves, y sinceramente yo tenía muchas ganas de que él me tocara. No estaba en celo, pero me notaba algo necesitado. Hacía mucho de nuestra primera vez así que decidí lanzarme al ataque en cuanto su madre se fuera.
    Poco a poco me fui acercando a él mientras hablábamos de nuestros exámenes y nuestros deberes. Hasta que me quedé muy cerca de él y pude ver sus ojos verdes muy de cerca. Algo que me hizo sonrojar. Siempre me pasaba, tenían un poder hipnótico en mí que realmente no me molestaba. Su madre al fin nos dijo adiós y se fue así que yo ataqué. Pero antes de que pudiese tan siquiera ver su miembro, me hizo parar. Estaba al borde de las lágrimas, ¿Había malinterpretado sus acciones y realmente no quería nada conmigo? Me disculpé y él solo me dijo que hablásemos.
    Me senté en una silla frente a él y bajé la mirada, en realidad el mayor tenía razón, era mejor hablar primero. Pero tenía miedo de lo que pudiese decirme. ¿Y si en realidad yo no le gustaba y solo era amable conmigo porque era su manera de responsabilizarse? En mi opinión éramos almas predestinadas pero ¿y si él no lo sentía así? ¿Y si para él solo era un niño? Me daba miedo el saber las respuestas a estas preguntas pero mi cuerpo me pedía a Kazuo, y no sabía de que otra manera hacer las cosas. No tenía mucha experiencia en el tema y a pesar de que habíamos hablado más durante este tiempo y de algunas insinuaciones por parte de su madre, me sentía algo inseguro.
    La conversación empezó con unas palabras de su parte que me hicieron sentir mariposas en el estómago y un agradable calorcito en mi pecho. Había conseguido que mi inseguridad desapareciera con esas pocas palabras. Y ahora era mi turno. Kazuo esperaba por una respuesta de mi parte. Ahora me tocaba a mí dejar claros mis sentimientos así que con decisión dije lo que sentía, no quería que hubiese ningún tipo de duda al respeto. Las dudas sobraban en este momento, saber que Kazuo me amaba tanto como yo a él me había hecho tan feliz que quería compartir esa felicidad con él. En cuanto lo hice me cogió de la mano y me llevó a su cama donde me tumbó suavemente antes de tumbarse encima de mí y besarme en los labios.
    Me quedé quieto unos momentos ya que era mi primer beso, pero después decidí intentar imitarlo un poco y seguir el juego que él marcaba. Nuestras lenguas se tocaron y eso hizo que me sintiera como en una nube. Nunca había sentido algo así y agradecía que Kazuo quisiera compartirlo conmigo. Me centré en esos besos que se sentían tan bien, tanto que ni cuenta me di de cuando había metido su mano dentro de mis bóxeres. Pero de repente su caliente mano estaba acariciando esa zona tan sensible de mi cuerpo y que ya estaba dura desde el primer beso. Arqueé mi espalda al notar eso y un pequeño gemido murió en la boca de Kazuo.
    ―¿Te gusta? ―me preguntó cuándo nos separamos del beso.
    ―S-sí, me e-encanta ―le respondí notando como mi cuerpo temblaba un poco por el placer.
    En esos momentos retiró su mano de mi miembro y yo me quejé un poco por eso, pero él solo me retiró la ropa que llevaba puesta dejándome desnudo encima de la cama y con esa erección bien grande y húmeda. Noté su mirada en mí, cosa que hizo que me tapara el rostro con uno de mis brazos, algo tímido. Me ponía nervioso que me mirara tanto. Escuché una pequeña risita de él y luego mi mente quedó completamente en blanco. Mi miembro estaba dentro de su boca. Su lengua lamía toda la extensión de abajo hacia arriba, me lamía el glande y luego volvía a metérsela entera. Ante eso me dejó sin pensamientos. Sólo podía dedicarme a sentir todas esas sensaciones. No recordaba si en ese callejón también me lo había hecho, tenía el vago recuerdo de que sí, pero estaba borroso. Esta vez lo notaba todo nítidamente, y estaba dispuesto a no olvidarme de ello nunca.
    ―Aaaaah… Kazuo… ―gemí algo flojo pero audible.
    Él pareció satisfecho ya que empezó a moverse un poco más rápido por mi miembro. Su mano se movía un poco acorde con su boca. Y eso hizo que en poco rato ya sintiese mi orgasmo llegar. No podía más. Me corrí en su boca sin poder decir nada, solo sentí un par de espasmos de placer recorrer mi cuerpo y después, la boca de Kazuo se retiró de mi miembro dejándolo algo fláccido. Mi cuerpo se sentía muy relajado en esos momentos pero mi respiración estaba algo agitada. Era muy extraño.
    ―¿Qué tal? ¿Te ha gustado? ―me preguntó él consiguiendo un asentimiento de mi parte, aún no podía hablar― me alegro.
    Se tumbó a mi lado a la espera de que estuviese un poco más relajado y me acarició la mejilla por debajo de mi brazo. Lo moví un poco dejando que la luz de la habitación llegase a mis ojos. Me giré para mirarlo y me encontré con esos ojos verdes mirándome con deseo pero también con ternura. Me moví un poco hasta que llegué a sus labios. Le di un beso en ellos y al separarme le hablé.
    ―¿Pu-puedo hacértelo a ti? ―le pregunté esperando su respuesta algo impaciente.
    ―Por supuesto.
    Se quitó su propia ropa y se sentó en la cama dejando su miembro delante de mí. Tragué saliva al verlo. No sabía si podría hacerlo tan bien como él, era mi primera vez, pero intentaría imitar un poco lo que él me había hecho a mí. Tenía que tener confianza y hacerlo lo mejor posible. Así que con estos pensamientos empecé a hacer mi primera mamada. Debía admitir que era algo más difícil de lo que esperaba. Su miembro era bastante grueso y me cabía con dificultad en mi boca. Llegaba solo a la mitad de este a pesar de todos mis esfuerzos. Pero parecía que eso era suficiente para él. Al menos parecía disfrutarlo.
    Kazuo gemía ante mis acciones y su respiración se aceleraba. Llevó su mano a mi cabeza y la acarició un poco, parecía estar dándome ánimos así que me esforcé un poco más en lo que hacía. A veces lo sacaba de mi boca y aprovechaba para masturbarlo mientras intentaba recuperar el aire. Realmente era un poco más difícil de lo que había pensado en un primero momento. Él lo había hecho tan fácil… Finalmente volví a meterlo en mi boca y seguí con esos movimientos, que al parecer fueron suficientes para que él llegara en mi boca. Me sorprendí un poco pero al final decidí tragarlo como pude. Lo miré. Se veía un poco como debía verme yo antes. Sonreí pensando que había logrado lo que quería y me tumbé a su lado abrazándolo feliz.
    ―¿Quieres seguir? ―me preguntó cuándo recuperó su aliento.
    ―Sí ―respondí con el rostro un poco escondido en su pecho, sin dejar de abrazarlo, quizás así no notaría mi sonrojo.
    ―Bien.
    Entonces me giró y me puso de nuevo mirando hacia el techo. Me volví a tapar los ojos con mi brazo, en parte por la luz, en parte por la vergüenza. Me molestaba la luz en momentos así, prefería hacerlo en la oscuridad. La vergüenza influía bastante en esto, pero es que me sentía más tímido ante su mirada. Me levantó las piernas y vio que estaba un poco mojado en mi trasero. No era ni una cuarta parte de cuando estaba en celo, pero la excitación había llevado a que me mojara un poco. Metió un dedo y vio que cabía bien, luego lo intentó con un segundo, y al ver que también entraba fácilmente, simplemente puso su miembro en mi entrada. Entró lentamente, presionando solo un poco para que mis paredes anales se abrieran. Estas estaban más que dispuestas a ello, así que no hubo mucho problema. Tanto por eso como por nuestro lubricante. Yo estaba mojado y su miembro también lo estaba. Entró fácil y empezó a moverse casi al momento.
    ―Aaah… aaaah… más Kazuo… ―mis gemidos no se hicieron esperar, llegaron con sus primeros movimientos.
    ―Vo-voy ―me respondió él empezando a ir más rápido y fuerte.
    Sus embestidas eran algo que me encantaba. De nuevo no lo sentía del todo nítido de la primera vez pero esta vez se sentía en la gloria. Hacerlo con él estaba siendo grandioso. Poco a poco noté que iba tocando cada vez más frecuentemente mi punto de placer así que intenté indicarle donde estaba con la esperanza de que me entendiera. No siempre acertaba pero de todos modos se sentían muy bien sus movimientos. Notaba como llegaba profundo en mi ser y como mi cuerpo se iba calentando más y más a medida que eso pasaba. La temperatura de mi cuerpo subía y poco a poco empezaba a notar que me correría. Llevé mi mano a mi miembro y empecé a masturbarme para sentir más placer y ayudarme a correrme. Algo que no tardó en pasar. Me corrí en mi mano ensuciando parte mi pecho. Pocas embestidas después noté como él se corría en mi interior y salía de él dejando salir un poco de su semen que ensució las sábanas.
    Nuestras respiraciones eran muy rápidas, en esos momentos, pero poco a poco se fueron relajando al igual que nuestros cuerpos. Me sentía mejor que nunca. Debía admitir que había sido mucho mejor la realidad que mis propias fantasías. Esperaba que para Kazuo también hubiese sido así. Recordaba la vez que se había masturbado pensando en mí. ¿Habría disfrutado más conmigo que ese día con su mano? Aunque ninguno de los dos habíamos entrado en celo, para mí había sido maravilloso, ¿Habría sido igual de maravilloso para él? Quizás, él hubiese preferido que estuviese en celo para hacer más…
    ―Uau, Naoki, ha sido genial ―me dijo sacándome de mis pensamientos― mucho mejor que en mis sueños.
    Lo miré con la mirada iluminada y una gran sonrisa en mis labios. Entonces, lo había disfrutado tanto como yo. Me acerqué a él y lo besé de nuevo antes de acurrucarme en su pecho. Me sentía tan feliz en estos momentos. Habíamos hecho el amor, porque éramos novios y nos queríamos. No era solo sexo. No era una relación en la que él mandaba y yo debía obedecer, era una relación de igual a igual... y no podía estar más feliz por ello. Quizás ahora no tenía riquezas materiales como antes, cuando vivía con mi padre, pero me sentía más rico en amor, y eso me llenaba mucho más. Quizás ser omega no era tan malo, gracias a ello había encontrado a un alpha maravilloso. A mi alma predestinada, ni más ni menos. Y eso me hacía inmensamente más feliz que todo el oro del mundo.
    ¿FIN?

    -------------------------
    Bueno, para mañana cuelgo el mini extra que hay de este fic y en principio ya estaría hasta que me venga una idea para la segunda temporada, que tengo un poco de idea, pero no mucha... y necesito algo más para sacar la historia adelante, XD
  13. .
    Yey, Kai, aquí vengo con mi review, algo cortito hay que decir pero bueno.. cosas que pasan, XD

    Debo admitir que no sabía que se sentían todas estas cosas total porqué te hayan dejado… Tanto en el capítulo anterior como en este me sigue sorprendiendo… Tendré que preguntarle a mi novio si sintió todo eso cuando lo dejé hace años, la verdad… Es interesante para mi análisis, aunque quizás me sentiré algo culpable según lo que me diga… bueno, el análisis es más importante, XD cuando acabe de leer veré si le pregunto, según su estado de ánimo...

    Bueno, tanda de regalos, nada que decir, cada cual tiene lo que quiere o lo que le ha llegado, lo que me pregunto es de donde sacan tanto dinero, quizás en otro momento no le daría tanta importancia, pero hay rachas en la vida, en algunas el dinero es más bien escaso… como ahora… y no deja de sorprenderme el que puedan gastar tanto… Pero todos parecen felices, incluido Yuki que parece estar un poco más animado después de la agenda y de la play…

    Ooooooh!! El regalo de Nao, XD la pulsera, llegó!! Nao piensa en todo, madre mía, a mí ni se me ocurriría enviarlo, la verdad… me la quedaría yo… más que nada porque soy algo tonta para estas cosas y para no gastar el dinero en el envío, soy un poco rata, jejeje

    Y la carta… dios, que cursi pero bonita a la vez, aunque si a mi me mandan algo así me quedaría en plan “¿Ah?” para Yuki tiene que ser mucho más que eso, ya hemos notado que es bastante sentimental, en realidad, jeje Y el mensaje de la pulsera es muy “Kyaaaa” para cualquiera que lea el fic, creo que es la mejor descripción que puedo dar, XD

    Pero ei, que acaba de tener su momento de revelación, como diría mi mejor amiga, XD El momento en el que te das cuenta de algo y piensas en hacer algo para arreglar las cosas… ¡¡POR FIN, DIOS, MIRA QUE LE HA COSTADO!! Ahora solo queda reaccionar, vestirse e ir a buscar a su novio para que vuelva a su lado, tú puedes Yuki, estoy contigo, todos estamos contigo, todo sea por el bien de Nao, que se merece un final feliz después de todo el curro que se ha dado para ello… Y después toca anunciarlo a los 4 vientos, algo que sé que harás, porque lo he leído y porque sino es para matarte, XD

    Madres… siempre preocupadas por el tiempo, la hora… por todo… madre mía, tiene que ser muy estresante, XD no es que yo no me preocupe, y la entiendo, pero después de que el niño ha hecho el esfuerzo de levantarse de la cama y vestirse lo mínimo es alegrarse por él. Como dice el padre es lo mejor que puede hacer en estos momentos.

    Aix, los viajes largos en coche, los odio, se me hacen larguísimos, pero a veces son necesarios y se hacen por amor, sino que me digan a mí porque hice un viaje de 12 horas para venir a este pueblo perdido en medio de un desierto… tsk… Que morro que nieve, con el calor que hace aquí, ojala nevase e hiciese frío… Y claro ver la pulsera es lo más interesante, porque te la ha regalado Nao con todo su amor, que alegría se llevara cuando te vea entrar por la puerta, jeje….

    Pero cual es el problema… ¡CABRÓN, PERO CUELGA EL SIGUIENTE CAPÍTULO! Siempre cuelgas dos y esta vez solo uno… esto es ser mala gente, que conste… ¿DÓNDE ESTÁ MI CAPÍTULO 21? ¿DONDE? Lloro… yo quería que llegase ya… pero… me toca esperar a mañana… buaaaaaaaaah!! TT-TT
    Kai malo… buaaaaaaah… hacerme llorar así… no tienes corazón… yo quería leer de nuevo la reacción de Nao al ver como llega Yuki junto a él y le da el pendiente!!!

    Pues nada, toca esperar a mañana, me ha encantado esta resurrección, aunque quería más, me has animado un poco, es el fin a los capítulos tristes, y eso lo agradezco…

    Nos leemos mañana!!
  14. .

    Capítulo 4


    Por la noche cuando Kazuo ya estaba en su habitación de nuevo, Kana vino a buscarme para que comiésemos juntos. Era bastante tarde, pero lo agradecía. Me había pasado toda la tarde con unos dolores en el cuerpo que no había experimentado hasta ese momento. Estaba siendo una tarde horrible. Entre los dolores y los pensamientos que iban y venían... no había logrado descansar nada. Estaba bastante asustado por la conversación y un poco avergonzado. Había estado pensando durante toda la tarde en sus palabras y me sentía como si me fuesen a regañar por haber hecho una travesura que ni era consciente de que lo era. Algo asustado me senté en la silla que tocaba y miré la comida. Antes de probarla ella empezó a hablar. Por suerte mis dolores habían empezado a disminuir y me sentía algo mejor.
    —Creo que tienes una idea equivocada de lo que es un omega —no dije nada solo seguí mirando la comida sin siquiera tocarla— ¿Quien te ha dado esta falsa idea de que los omega solo sirven para que los violen?
    —Mi familia...
    —¿Tú familia? —me preguntó algo horrorizada— ¿Pero de que clase de familia vienes?
    No dije nada, no sabía hasta que punto debía hablar ni que contar. ¿Podría poner en peligro a mi familia si hablaba de más? Con la de dinero que tenía no creía que pudiesen hacerle nada ni aunque se lo propusieran. Deseché la idea enseguida. ¿Podría afectarme a mí lo que dijera? Después de la vergüenza que estaba pasando por mis acciones tenía la impresión de que nada podría ser peor, así que simplemente me decidí a hablar.
    —Vivía en una casa muy rica, junto con mi familia, todo estaba lleno de lujos. Lleno de alphas orgullosos. En ese ambiente los omega son esclavos de los alphas. Esclavos tanto de cuidado de la casa como sexuales —hice una pequeña pausa antes de continuar— me enseñaron que cuando creciera tenía que tratar de ese modo a los omega, ya que yo debía de ser un respetado alpha, al igual que mis padres y hermanos. Por eso no me habían hecho el test. Había estudiado en casa y me habían educado para ser alpha —suspiré llegados a este punto, era la parte más dolorosa— En nuestra familia es tradición que a les 15 años se presentan los hijos a la sociedad, pero antes, se les hace la prueba para confirmar su condición de alpha, a mi me salió que soy omega. Cuando mis padres se enteraron me lanzaron al callejón para borrarme del mapa. No se lo esperaban, pero en cierto modo se hacía justamente por eso, no querían que otras familias supiesen de la deshonra de tener a un hijo omega. Como pasó, tuvieron de deshacerse de mí. Nadie podía conocer de mi existencia y mantenerme en la casa no serviría para nada más que para traer problemas.
    Acabadas mis palabras Kana tenía los ojos más que abiertos por esas duras palabras. Yo no había dejado de mirar la comida hasta este momento, cuando había mirado a la mujer un poco de reojo con algo de miedo. No había hablado tanto en toda la semana. Pero después de la conversación de la tarde, había tomado la resolución de ser más yo mismo. Entendía su mirada. Yo miraría igual a alguien que me contara algo similar. Pero era lo que me habían enseñado y hasta este momento para mí era lo normal. Nunca me lo había cuestionado. Por eso mismo al saber que era omega me había resignado a ser un esclavo y había intentado cumplir con mi función.
    —Pobrecito —dijo Kana acercándose a mí para abrazarme.
    —Madre... —le dije por primera vez como ella me había dicho.
    —Está bien, aquí no tienes que preocuparte por estás cosas, aquí eres solo Naoki, un chico de 15 años que se ha convertido en mi hijo adoptivo.
    —Muchas gracias.
    —Y puedes estar seguro de que Kazuo piensa lo mismo, aunque creo que sus sentimientos no son los de hermano mayor, precisamente —Kana rió un poco de manera traviesa y yo me sonrojé un poco por ello—. Lo que debes saber es que aquí no tienes que hacer esas cosas, nada de esclavos sexuales o cosas por el estilo, por eso, deberías de estudiar al menos hasta acabar la secundaria obligatoria.
    —Me gustaría, pero no será una carga... cuesta dinero la escolarización...
    —Yo creo que podremos apañárnoslas y si no, Kazuo se ha ofrecido a trabajar para costear tus gastos.
    Al escuchar eso me sorprendí a la vez que mis mejillas se sonrojaron. Kazuo estaba dispuesto a trabajar para poder cuidar de mí, sin que yo tuviese que ser su esclavo. Ese era un bonito detalle y quizás el más bonito de toda mi vida. De acuerdo que anteriormente había tenido una infancia más o menos tranquila, pero mis padres no eran las personas más cariñosas del mundo, de hecho siempre estaban trabajando. Debería darle las gracias y disculparme por todos los problemas causados.
    —Me gustaría hablar con Kazuo-sa... digo, con Kazuo sobre esto —le comenté a mi nueva madre.
    —No puedes hasta que se te haya pasado el celo —me dijo ella acariciando mi cabeza— pronto se te pasará, los supresores ayudaran.
    —¿Es eso que me has inyectado antes?
    —Esos son los de emergencia, cuando un omega entra en celo en un momento peligroso se usa este, pero tiene efectos secundarios como dolor de cabeza y malestar, hay unos que se usan más comúnmente que no tienen esos efectos o son más leves.
    —Entonces esos dolores que he sentido durante la tarde eran culpa de los supresores —reflexioné un poco más tranquilo— nunca nos habían contado sobre esto, normalmente, en mi casa se usaban unos que eran para que los omegas entraran en celo fuera de ciclo...
    —Eso es malo para salud del pobre omega... Aunque hace más placentero el sexo porque durante el celo se siente mejor que normalmente, también es perjudicial por otros motivos.
    —En mi casa eso no importa mucho.
    —No puedo creer que haya gente así en el mundo —Kana parecía indignada por todo esto— ¿Cómo pueden tratar de esta manera a los omegas? ¿Es que no tienen corazón?
    No pude responder, eran mi familia al fin y al cabo. Sólo bajé la cabeza unos momentos y en eso Kana se dio cuenta de sus palabras. Volvió a abrazarme para darme a entender que todo estaba bien. Era algo incómodo para mí que dijera esas cosas de la gente con la que me había criado pero, tal y como me trataba Kana, me daba cuenta de que tenía razón. No era algo muy humano el tratar a las personas de esa manera por mucho que fuesen omegas.
    —Lo siento, Naoki —se disculpó al final— ¿Sabes? Mañana podríamos ir juntos a ver institutos, tengo mi segundo día de fiesta seguido y aún podemos ir.
    —¿De verdad? —pregunté casi emocionado— quiero ir.
    —Tendremos que vigilar que los supresores hagan efecto correctamente. Y de tener cuidado con los alphas de la ciudad, aunque la mayoría de la población es beta.
    —¿Será seguro? —por como lo decía no me lo parecía mucho y no me apetecía que nadie me violase, si no era Kazuo... Mis pensamientos me hicieron sonrojar.
    —Mañana le diremos a Kazuo que te vea y veremos su reacción, si dice que está bien saldremos si dice que hueles muy dulce y quiere comerte no saldremos de casa —asentí ya que parecía una buena idea, Kazuo parecía ser bastante débil a mis feromonas aunque probablemente todos los alpha lo serían.

    --------------------------------

    Mi madre me había comentado que iba a tener una conversación con Naoki sobre muchas cosas y que por eso, y por el celo de este, debía comer yo solo y antes que ellos. Eso me pareció solitario así que había esperado a que mi madre viniese, me hizo compañía ya que ella iba a comer más tarde con Naoki. Me dijo que estaba esperando a que pasaran los dolores posteriores a la inyección y que le había sabido mal hacerlo. Al parecer no le había dejado opción. Me sentí un tanto culpable, aunque mi madre me dijo que eso era normal, era el instinto alpha. Lo único por lo que me regañó fue porque no pude tan siquiera intentar resistirme que ya había caído en su embrujo. También se rió de mí por lo débil que era ante el encanto del menor. Eso me hizo sonrojar. Realmente tenía mucha razón. Pero no podía evitarlo. Me gustaba Naoki.
    Después de comer me había retirado a la habitación, aunque des del principio mi idea era escuchar la conversación que mantendrían los dos. Tenía mucha curiosidad por saber que era lo que pasaba por su cabeza. Quizás no era la mejor opción, pero mi curiosidad era muy fuerte en esos momentos. Si estaba suficientemente lejos, podría reprimir mis impulsos, y de todos modos el efecto de ese supresor seguía aún activo. Dejé estos pensamientos de lado cuando escuché sus voces y presté atención a la conversación.
    A medida que escuchaba me iba poniendo de malhumor y no podía evitarlo. ¿Qué clase de familia le enseñaba a su hijo a violar omegas? No podía creerlo. Pero gracias a las palabras de Naoki ahora podía entender más su comportamiento. Él lo hacía pensando que eso era lo normal. Que los omega servían para eso, para hacer las tareas y cumplir los caprichos de sus alphas fuesen los que fuesen. Por ese motivo había ido ese día a llevarme el paraguas a la estación, mojándose en el proceso. Ese día tuve que obligarlo a bañarse con agua caliente para que no se resfriara de nuevo. Pero el dócilmente me hizo caso y se metió en la bañera para entrar en calor. También por ese motivo siempre me arreglaba la habitación o me hacía la cena...
    Por un lado me molestaba el pensar que esa era la clase de educación que había recibido, ya que los omega, como mi madre son personas y no esclavos o mercancías... pero por otro lado me entristecía pensar que lo hacía solo porque era lo que le habían enseñado. No iba a mentir, por un lado estaba feliz de recibir esa clase de atenciones por parte de él. Con el tiempo conseguiría otro tipo de atenciones, y si todo iba bien lo haría por amor y no por obligación o miedo. Al menos esa era mi intención. Había notado que nuestros cuerpos habían reaccionado el uno con el otro.
    Me habían dicho que eso pasaba con tu alma predestinada y realmente esperaba que así fuera. También me habían dicho que al serlo los omegas tenían problemas con el celo al estar cerca de su alpha. Y realmente su celo había empezado ese día que estaba cerca y le había vuelto una semana más tarde cuando lo había tocado. Quizás me estaba dando falsas esperanzas pero realmente esperaba que así fuera. En este momento la voz de mi madre me sacó de mis pensamientos.
    —Una pregunta, ¿Entonces, en un momento como este, que un omega entra en celo, que deberías hacer cómo omega, según tu familia?
    —Ofrecerme a mi alpha, en este caso sería Kazuo, para que tuviera relaciones conmigo...
    —¿Y si el omega no quiere? ¿Si tu no quisieras?
    —Eso no importa, sería mi obligación.
    Al escuchar esas palabras y de solo imaginarlo, podía sentir como si fuese yo quien entrara en celo. Se me había puesto dura ante la perspectiva de que Naoki viniese a mí, todo mojado y caliente pidiendo por mi atención. Que desesperado estaba que ya ni siquiera pensaba con la cabeza. Sabía que lo que decía era algo horrible, pero la sola imagen de Naoki en esa escena me hacía sentir como todo un viejo verde pervertido. Me sentí el peor hombre del mundo así que dejé de escuchar la conversación y me fui a mi habitación para aligerar cierta carga que tenía en la zona de la entrepierna.
    Por lo que había escuchado si Naoki no desprendía mucho olor los dos saldrían para ir a ver escuelas, eso era una buena idea, porqué el chico necesitaba al menos la secundaria para poder encontrar un trabajo en un futuro. Algo como lo que hacía mi madre que tenía días de fiesta entre semana y durante el celo para evitar problemas. Los supresores iban bien pero era mejor que tuviesen días para descansar y poder tener el celo con tranquilidad en casa. Suponía que por eso era difícil encontrar trabajo para los omega. Aunque estos pensamientos se fueron en cuanto llegué a la cama y me centré en algunos un poco más pervertidos.
    En mi mente podía ver a Naoki haciéndome todo tipo de perversidades. Oh, Dios, iba más caliente que la punta de una plancha, a decir verdad, quería hacerle de todo a ese lindo omega que vivía en mi casa, pero no se podía. Tenía que respetarlo. Ahora entendía su comportamiento, por lo que no podría tocarle hasta que dejáramos claros nuestros sentimientos. Pero eso no quería decir que no pudiese pensar en él mientras me masturbaba imaginando que era él quien lo hacía o que estaba dentro de él en esos momentos. Mi imaginación volaba sola.
    —Aaaah.. Naoki... Hmmm... —gemí en voz alta sin poder evitarlo, ese moreno me volvía loco.

    -------------------------

    Fui un momento al lavabo después de esta conversación con Kana, estaba algo cansado. Entrar en celo, en serío era todo un cambio hormonal, agotador. Pero ese supresor que me habían inyectado me había producido algunos dolores y eso junto con la conversación que habíamos mantenido me había dejado casi para el arrastre. De camino al lavabo para prepararme para ir a dormir escuché algunos sonidos procedentes de la habitación de Kazuo. Con algo de curiosidad me acerqué a la puerta lentamente y escuché. Se escuchaban gemidos junto con mi nombre. Me sonrojé por eso. Había hecho entrar en celo a Kazuo como respuesta a mi celo y ahora estaba haciendo cosas en su habitación mientras pensaba en mí. En parte me hacía sentir feliz y alagado pero por otro lado me hacía sentir un poco culpable.
    —Kazuo... —dije en voz baja antes de irme de allí y encerrarme en el baño— de verdad estaba pensando en mí —ante mis propias palabras me sonrojé aún más y me apoyé en la puerta del baño.
    Apreté mi pecho con mis manos y sonreí. A medida que el sentimiento de culpa se iba la felicidad llenaba ese vacío. Nos conocíamos de hacía una semana solamente, pero él me había demostrado ser un buen chico. Sonaba raro decir eso cuando anteriormente me había violado. Pero no lo podía evitar, desde que en en ese momento había sentido la corriente eléctrica en mi cuerpo, solo por un pequeño roce suyo y una mirada, me había sentido atraído hacía él. Era algo extraño, pero en mi familia me habían dicho que eso era una conexión especial y que cuando eso pasaba el alpha y el omega quedaban unidos de por vida. ¿Sería él mi alma predestinada? Si realmente era así me alegraba por ello.
    —Cuando se me pase el celo hablaré con él —me dije decidido antes de acercarme al lavamanos para poder limpiarme los dientes.
    También intentaría que fuese un día que no estuviese su madre, porqué realmente sería algo incómodo con ella por casa. No tenía nada en contra de Kana, pero en estos momentos, a mí no me habría importado ir a la habitación de Kazuo y cumplir con alguno de sus deseos. En realidad, lo deseaba, al igual que deseaba que volviese a tener sexo conmigo. Pero simplemente no se podía estando allí la madre de este. Después de que ella me hubiese "protegido" de Kazuo antes, quedaría mal que yo mismo fuese a la boca del lobo, entendía que ella lo había hecho con buena intención.
    Al acabar salí del lavabo, antes de ir a mi habitación volví a escuchar un poco a escondidas en la habitación del alpha, no escuché nada. Quizás ya se había venido o se le había pasado el celo. Suspiré un poco triste y decepcionado y me dirigí a mi habitación. Al pasar por el comedor le di las buenas noches a Kana y entré cerrando la puerta detrás de mí. Aún no me había acostumbrado a dormir en la oscuridad y sólo, así que dejé las persianas subidas para que entrara la luz de la calle. Me abracé a mi mismo e intenté imaginar a Kazuo mientras se masturbaba pensando en mí. Me estaba excitando y no tenía nada que ver con el celo. Era él quien me excitaba. Lo sabía y lo deseaba. Solo esperaba poder tenerlo en breves junto a mí. Hice lo propio y empecé a masturbarme pensando en el mayor.
    —Ka-Kazuo... hmm... má-más... —gemí masturbándome más rápido hasta que me corrí en mi mano bastante agitado y sonrojado, me estaba volviendo un pervertido.
    Continuará...
  15. .
    Bueno, años más tarde he acabado este fic que empecé a leer hace tiempo, pero con el otro fic y escribir lo míos no me había dado tiempo, eso y el novio, sus padres, su abuela, la vida...

    Tengo pendiente escribir mi vida amorosa, como me dijiste que hiciera porque había cosas que contar, pero no me da a mi, que no me quedara bien, y seria super largo... Mi vida si tiene muchos cambios...

    Pero yendo a por el fic, realmente es una historia muy tierna, la verdad, joder con Daiko, no? Menuda manera de tratar a las parejas, luego soy yo la fría... A ver él se lo buscó, luego si te odió es cosa suya, porque tú no tuviste la culpa de que él echara a perder lo que tenía, tú sólo hiciste lo que debías hacer, era el destino y no se puede luchar contra él... Para Daiko había alguien más en su destino... Alguien a quien sí apoyaría y a quien sí amaría de verdad

    Una cosa que me sorprende es la velocidad a la que fuisteis, acabados de conocer y ya a besarse, maravilloso! Yo no soy capaz, tardo un poco en dar el paso del primer beso, y si es en la primera cita, normalmente es casi al final... pero el deseo que llevabais ambos me ha dejado anonadada XD yo nunca he sentido un deseo así, por nadie... En cierto modo me da envidia eso, pero tampoco me quita el sueño jeje

    Me alegro de que las cosas hayan funcionado, que sigáis juntos y os vaya bien, y también que Daiko ya lo haya superado, al final todo río vuelve a su cauce XD no se si se dice exactamente así, pero bueno, queda bien y ya jajajajajajajaajjaa

    Nos vemos mañana en el review del otro fic :D
1251 replies since 25/6/2012
.