Posts written by Shana A.

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    Titulo: Aventuras en el Sweet Amoris.

    Genero: Romance, cosas de la vida diaria, colegial, comedia.

    Resumen: Stuart se ha mudado a una nueva ciudad, su tía lo ha inscrito en el instituto sweet amoris, un instituto solo de chicos , allí conoce a todos los chicos con quienes pasara sus próximos años de estudio, además de eso Stuart tiene un secreto, el cual empieza a sospechar que tiene que ver con uno de los chicos del instituto.

    Advertencias: Faltas Ortográficas, si hay alguna advertencia correspondiente en el capitulo la pondré.


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    El Insituto Sweet Amoris, el nombre más gay jamás inventado para un centro educativo que solo tiene estudiantes varones, pero aquí estoy hoy, para inscribirme en este extraño instituto, empezaba a dudar sobre la capacidad de mi tía para conseguir información acerca del lugar en donde pasara su sobrino favorito estudiando por los próximos años, aunque de hecho siempre dude sobre su cordura, estar frente a este sospechoso instituto me hacía empezar a plantearme la idea de llevarla con un psicólogo. Entre al instituto, parecía demasiado normal para mi gusto, por lo cual me hace pensar que es más sospechoso, me diría tranquilamente a la dirección cuando vi al director por el pasillos.

    – Buenas joven, usted debe venir a inscribirse – me saludo con una alegre sonrisa el hombre mayor que usaba traje, me recordaba a un ancianito bonachón que vivía cerca de mi casa.
    – Así es – asentí tranquilamente.
    – Bueno eso tendrá que hablarlo con el delegado principal – explico aun con aquella sonrisa sacada de infomercial barato.
    – ¿Disculpe? – pregunte sin entender – Pensé que con usted debía hablar de eso.
    – No joven, eso se trata con el delegado principal Nathaniel – dijo antes de irse hacia el patio.

    Entonces el flojo del director dejara esos asuntos a un alumno, vaya pues al menos me pudo haber dicho dónde estaba la sala de delegados, ¡Todas las jodidas puertas se parecen!

    – Quizás pueda preguntar a alguien donde está la sala de delegados – susurre.
    Aunque tampoco es como que me pueda meter a cualquier salón y preguntar: “¿Alguien sabe dónde está el delegado principal?”, eso definitivamente me metería en problemas, pero, me ahorraría un largo día buscando como idiota desorientado a una persona.
    – Oye chico nuevo – aquella voz me saco de mi debate interno, vi de dónde provenía la voz, vi frente a mí a tres chicos, uno rubio con ropa extravagante, otro de cabello negro que por sus facciones se notaba que era chino, además la ropa lo delataba, el ultimo era un castaño, que curiosamente tenía un cuaderno rosa, otro rasgo notable eran los pircings que tenía en la cara, los tres se vestían a la moda, demasiado extravagante para mi gusto – ¡Ja! Pensé que sería diferente el chico nuevo, pero veo que es solo un perdedor más – se burló el rubio. No estaba de humor para soportar sus bromas, tampoco estaba de humor para responderle pero ganas no me faltaban.
    – Dejan tus inteligentes comentarios de lado… ¿Sabes dónde está la sala de delegados?
    – Ni que fuera a decírtelo – al parecer estaba ofendido por no seguirle su jueguito – Ni te acerques al delegado principal – me advirtió antes de hacer su salida de diva junto a sus amigos que ni dijeron “pio”, creo que solo son sus seguidores.
    – Como sea – rode los ojos, si así eran todos los estudiantes mi vida sería un infierno, pero no todos son divas, así que debía encontrar personas normales en algún lado.
    – Buenas, tú debes ser nuevo – me saludo un joven pelirojo de sonrisa encantadora y ropa interesante.
    – Así es, o algo así – me encogí de hombros – Aun tengo que verificar mi inscripción así que no sé si se me podría considerar alumno o no de aquí, quizás tuve suerte y mi tía se olvidó de transferir mis papeles.
    – Que gracioso eres – sonrió aún más ampliamente el joven – Mi nombre es Isaac.
    – Mi nombre es Stuart – salude con una ligera sonrisa, este chico se veía agradable, quizás pueda preguntar.
    – Un gusto conocerte, me gustaría seguir hablando pero se me hará tarde para mi clase, lo siento, que tengas un buen primer día – se despidió alegre, junto a su despedida se iban mis esperanzas para encontrar la sala de delegados.
    – Quizás solo debería atacar a alguien y preguntar dónde está – susurre para mí mismo, me gire para seguir buscando, fue cuando vi a otro chico, uno de cabello violeta y ropas grises, sostenía lo que a mi parecer era algún lugar donde dibujabas – ¡Oye! ¡Oye! – le intente llamar, sería más rápido si supiera su nombre. Al final no me hizo caso, parecía perdido en sus pensamientos así que no lo culpo.
    Termine caminando hacia el parque, me canse de buscar a los 15 minutos, así que decidí usar el dicho, si la montaña no va a Mahoma, Mahoma va a la montaña, por Mahoma me refería al delegado, y por la montaña a mí, así que quizás si tengo suerte, él me encuentre a mí.
    – ¡Quítate tapas el sol! – escuche una voz. Genial otra diva. Me gire a ver quién era, era un chico de cabello color rojo, un rojo extraño si me lo preguntan, usaba la típica ropa de chico malo y rebelde.
    – Winged Skull – dije al ver el logo de la banda en el polo del otro, de hecho yo tenía un llavero con ese logo, justo este iba colgando de uno de los cierres de mi mochila.
    – Así que los conoces, nada mal chico nuevo – su expresión de chico malo se suavizo, formando una sonrisa de lado, al parecer le agrado que supiera acerca de la banda.
    – Es una de mis bandas favoritas.
    – Al parecer no tienes tan mal gusto.
    – Lo mismo digo, soy Stuart – me presente tranquilo.
    – No te pregunte tu nombre, pero ya que, Mi nombre es Castiel.
    – Y se nota que eres un amor de persona – su expresión volvió a ser la misma que al principio – En todo caso, Castiel, ¿Sabes dónde está la sala de delegados?
    – ¿La sala de delegados? Ese lugar es para tontos – rodo los ojos.
    – Pero necesito ir allí.
    – Entonces eres un tonto – volvió a sonreír de lado, a este chico al parecer le gustaba jugarle bromas pesadas a otros, o quizás a otros con sus mismo gustos.
    – Quizás sea tonto, pero entonces tú lo serias más si sabes dónde está.
    – Entonces ya no te digo – se cruzó de brazos, volviendo a su mismo semblante de antes, clara señal de que no diría nada más.
    – Igual, muchas gracias por tu colaboración, siempre puedo preguntarle a otra persona – me gire para volver dentro del instituto – Ojala hubiera alguien normal aquí – susurre, vi a un chico con ropa estilo militar sacando sus cuadernos de uno de los casilleros – ¡Oye tú! El chico militar – le llame, él se volteo a verme, su expresión parecía neutral.
    – ¿Pasa algo? Tú… ¿Espera quién eres? – se dio cuenta que era nuevo, eso era bueno, porque parecía un poco molesto al principio.
    – Mi nombre es Stuart, soy el chico nuevo por así decirlo – me presente o algo así.
    – Si es así, bienvenido, mi nombre es Kentin – sonrió ligeramente, parecía un chico agradable.
    – Al fin encuentro a alguien normal – no pude evitar decir.
    – ¿Alguien normal? – ahora parecía un poco molesto por lo que dije.
    – Si un chico normal, no eres como ese chico a la moda e irritante que encontré, tampoco como el bromita pelirrojo, eres alguien agradable, ya sabes alguien genial – explique tranquilo. Kentin sonrío alegre.
    – Gracias – sonaba alegre, menos mal – Tú también me caes bien.
    – Tu igual, por cierto ¿por qué la ropa militar?
    – ¿Ah? ¿Te interesa? – parecia ahora más feliz.
    – Si, si no, no hubiera preguntado.
    – Estaba en una escuela militar, pero como ya me volví muy fuerte decidí volver al instituto.
    – ¿En serio? Suena duro.
    – ¡Fue muy duro! Pero gracias a todo ese entrenamiento me volví muy fuerte.
    – Eso suena bien… No es que quiera interrumpirte cuando hablas de eso pero, ¿Sabes dónde está la sala de delegados? – pregunte antes de que él también pudiera irse.
    – ¿Eh? Ah, cierto, eres nuevo, vamos yo te llevo – se ofreció aun alegre.
    – Gracias – asentí. La sala de delegados estaba, a solo cinco pasos de donde estábamos – No jodas –susurre, vio como Kentin me vio extrañado por lo que dije – Es que estaba tan cerca, y yo estuve vagando no sé por cuanto tiempo esperando a saber dónde está…
    – Bueno a veces pasan esas cosas – sonrió divertido – Ya me tengo que ir, nos vemos Stuart, quizás estemos en la misma clase.
    – Sería interesante eso, nos veremos – me despedí de él. Toque la puerta suavemente antes de pasar – Buenas, disculpen la interrupción, estoy buscando al delegado principal.

    Dentro había dos chicos, uno rubio con camisa blanca y pantalón color caqui, el otro chico se veía tan aplicado como el rubio, pero su cabello era color marrón, su camisa azul y pantalón blanco.

    – Yo soy el delegado principal, mi nombre es Nathaniel, ¿Puedo ayudarte en algo? – pregunto el rubio.
    – Sí, mi nombre es Stuart, estoy aquí para hablar sobre mi inscripción, la directora me informo que debía venir – explique tranquilo.
    – Ya veo, déjame buscar tu nombre por favor – pidió alegre, se giró y empezó a buscar en sus archivos, este lugar era realmente ordenado.
    – Hola – salude al otro chico, el cual sonreía pero me veía con cierta curiosidad.
    – Hola Stuart, soy Melvin el delegado de la clase A – se presentó con una sonrisa y tono alegre.
    – Stuart lo siento, al parecer se perdió mi registro – me informo Nathaniel.

    Me quede en silenció por unos segundo – Buena broma delegado – chasquee los dedos, no creía que eso pudiera ser posible. Nathaniel rio alegre.

    – Me descubriste.
    – ¿En serio? Menos mal adivine que era una broma, si fuera cierto no sé lo que haría – me encogí de hombros – Quizás correría en círculos por el pasillo – comente tranquilo.
    – Hubiera sido divertido verte hacer eso – sonrió alegre Nathaniel, creo que sonrió así porque lo dije sin rastro de sarcasmo, él se veía como un chico muy aplicado y amante de las reglas.
    – No lo veras hoy delegado, quizás cuando tengas más suerte.
    – Quizás, pero siguiendo con el tema de tu inscripción, falta la cuota de inscripción que son veinticinco dólares además de una foto tamaño carnet.
    – ¿Eso sería todo? – pregunte por si las dudas.
    – Si solo eso.
    – Esta bien, gracias delegado, volveré luego con eso – salí de la sala de delegados.
    Por suerte solo faltaban dos cosas, busque en mi bolsillo mi billetera, para buscar el dinero necesario para cuota de ingreso, en ese momento alguien me quito la billetera.
    – Gracias por el dinero perdedor – era de nuevo el rubio que se creía diva de antes.
    – Mira rubio oxigenado, antes no te respondí como se debía pero ahora traigo prisa, así que devuélveme mi billetera – pedí con cierto disgusto.
    – ¿Cómo me llamaste? – su tono sonaba enojado, pero no me echaría para atrás.
    – Dame mi billetera, rubio oxigenado – declare de nuevo.
    –Andrew te está insultando, chico nuevo pídele perdón – se metió en la conversación un joven de cabello color marrón claro, él parecía usar un uniforme o lo más cercano a ello, ya que usaba camisa rosa y saco azul.
    – Mi nombre es Stuart y te pediré que no te metas, esto comenzó porque él me quito la billetera – me defendí del más bajito.
    – Te estoy haciendo un favor, con este dinero no deberías comprarte ropa tan fea – se burló el rubio, que creo se llamaba Andrew por lo que dijo el más bajo.
    – Una casaca de cuero, una playera blanca, pantalones jean gris oscuro gastados, converse blanco con negro – describió mi ropa el de cabello castaño con pircings – Además del ridículo mechón color rojo en tu cabellera gris que no combina con tus ojos verde esmeralda, además de la mochila a tonos grises con el llavero de la banda Winged Skull.
    – ¿Para qué toda es descripción? – pregunte sin creer que me describiera tan al detalle.
    – Solo quería describirte, tu apariencia la considero normal.
    – Entonces por favor no lo vuelvas a hacer – suspire.
    – Te vistes como perdedor – se burló Andrew.
    – Al menos no me visto como diva barata – ataque directo, me estaba molestando.
    – ¡Eres un desgraciado! – no me di cuenta en que momento, Andrew tenía el puño levantado, no espere agresión física de parte de una diva, grave error.

    Esperaba el golpe, pues ni de chiste me iba a disculpar, y si él atacaba primero tenía una buena razón para partirle la cara. Antes de que Andrew me diera el puñetazo en la cara, vi como alguien de cabello blanco con puntas color negro, su estilo de ropa era muy inusual, lo que más llamaba la atención además de su ropa eran sus ojos, sus ojos bicolores, el derecho verde y el izquierdo ámbar, él fue quien sostuvo de la muñeca a Andrew para detenerle.

    – Le pido que se detenga – hablo él.
    – ¡Suéltame ya! ¡Lysandro! – grito Andrew forcejando con el más alto. Lysandro es realmente alto.
    – Andrew no deberías golpearlo – índico antes de soltarlo.
    – Yo hago lo que quiero – le respondió enojado, me miro antes de tirar la billetera al suelo. Me fulmino con la mirada antes de hacer su salida de diva junto a sus amigos.

    Lysandro se agacho para recoger mi billetera, me miro, no dijo nada más.

    – Esa es mi billetera – al decir esto, él me la entrego – Gracias.
    – No es nada, la violencia nunca trae consecuencias favorables para nadie.
    – Lo sé, quizás no debí provocarlo, pero no soporte que tratara de hacerme menos – solté un suspiro.
    – Tampoco es bueno que Andrew le haga sentir menos, pero sería mejor si lo ignorara la próxima vez.
    – Eso hice la primera vez, pero me quito mi billetera la segunda vez, supongo que no pude controlarme – me encogí de hombros.
    – En todo caso si llega a tener ese tipo de problemas puede pedirme ayuda – sonrió con ligereza.
    – Gracias… por cierto soy Stuart, el chico nuevo – sonreí con cierta diversión.
    – Mi nombre es Lysandro, un placer conocerlo Stuart – se presentó él con una ligera sonrisa.
    – El placer es mío, Lysandro sería interesante seguir hablando contigo pero debo ir a terminar mi inscripción.
    – En ese caso te dejo, pero por favor avísame si ves una libreta, debe ser mía.
    – Entiendo, si la encuentro te la daré – asentí para salir del instituto.

    Camine hasta el bazar en donde a los alumnos del instituto le toman la foto gratis, al menos no tenía que pagar esto, porque solo tenía exacto para pagar la cuota. Ya tenía la foto y la cuota de inscripción, así que regrese al instituto para poder terminar con el dichoso trámite.

    Camine hasta la sala de delegados, por suerte recordé la puerta, toque con suavidad antes de entrar, vi que solo estaba el delegado – Señor delegado tengo todo lo que me pidió – me acerque a él con un sobre manila, en el cual estaban la foto tamaño carnet, dos por si las dudas y los veinticinco dólares que pidió.

    – Es bueno oír eso – le di el sobre, él se dispuso a revisarlo todo – ¿Dos fotos?
    – Es mejor prevenir que lamentar, se puede perder una – sonreí algo divertido – Señor delegado, uno debe ser precavido.
    – Así es – sonrió el también, pego la foto en una ficha que tenía mis datos personales – Por cierto, ¿Podrías dejar de llamarme señor delegado? Me hace sentir algo incómodo.
    – Claro – me encogí de hombros – Entonces serás Nath.
    – ¿Nath?
    – Si Nath, Nathaniel es largo y seguro todos te llaman así, te llamare Nath, además me agradas, por eso lo hago – fui directo. Las mejillas de Nath se tiñeron de un ligero color carmín.
    – Gracias, tú también me agradas – respondió – Pero yo no puedo acortar tu nombre – su rostro volvió a su color normal.
    – Con que lo recuerdes está bien, después de todo soy el chico nuevo, pocos se acordaran de mi nombre, no destaco mucho.
    – Esta bien, Stuart – sonrió alegre al decir mi nombre – En todo caso ya termine, tu formulario está lleno, solo debes entregárselo al director ahora – me entrego un par de hojas, en la que estaba mi foto.
    – Gracias Nath – me despedí para buscar al director, por suerte me lo encontré caminando en el pasillo – Señor director, ya tengo listo mi formulario – le entregue las hojas para que lo revise.
    – Muy bien, muy bien, ahora solo le falta un clip.
    – ¿Qué? – aquello que dijo me desconcertó.
    – Sí, un clip, para poner todo junto y podremos dar su proceso por terminado.
    – ¿No puede ponerlo usted? – pregunte tranquilo, no creí que me exigirían un clip, ¿es decir? el instituto es tan pobre qué necesita que yo, un alumno de un clip, aunque quizás sea algún tipo de iniciación.
    – ¡Joven no me desobedezca! – levanto la voz de un momento a otro, ahora parecía enojado, al parecería tenía un humor muy variable.
    – Sí, señor, buscare un clip y luego le daré todo – tome las hojas antes de irme de allí. ¿Qué pasa con esta escuela? Es muy rara – Solo falta un gamer – dije con cierta burla.
    – ¿Me llamaste? – apareció frente a mí un chico de cabello negro, su ropa era solo un poco llamativa, lo más destacable era la consola portátil que sostenía.
    – ¿Eres un gamer? – fui directo.
    – Podrías llamarme así – sonrió alegre.
    – ¿Juegas la FIFA? – pregunte por las dudas, odiaba ese juego, no me gustan los juegos deportivos.
    – ¿Eh? No, no me gustan los juegos deportivos – me respondió él borrando su sonrisa.
    – Genial, entonces nos llevaremos bien – me encogí de hombros.
    – ¿Acaso no te gusta? ¿Entonces por qué me preguntaste?
    – Solo quería preguntarte porque no me gusta, si tu hubieras querido quedar bien conmigo hubieras dicho que si te gusta, porque lo más lógico sería pensar que me gusta ese juego ya que te pregunte por el – explique simple.
    – Eres raro – volvió a sonreír – Soy Armin.
    – Soy Stuart, el chico nuevo.
    – ¿Un chico nuevo? ¿En qué año estas?
    – Estoy en segundo año.
    – Yo también, ¿ya sabes en que salón te toca?
    – No, no lo sé.
    – Deberías meterte al salón A, allí enseña el profesor Farres – me aconsejo con una sonrisa.
    – ¿Acaso sus clases son fáciles?
    – ¿Eh? No, pero si es muy tolerante, si te olvidas la tarea puedes presentarla otro día – explico alegre.
    – Ya veo, entonces podría ser – no me gustaba tener profesores que te regalen la nota, pero si te daba un día más de plazo me parecía bien.
    – ¡Armin! – grito un chico similar con el que hablaba, pero él tenía el cabello color azul y su ropa era mucho más colorida, además de que llevaba unos cascos alrededor de su cuello – No olvides que hoy tenías que ir de compras conmigo – reclamo.
    – Alexy ya te he dicho que no quiero ir, además ahora estoy conversando – respondió el de cabello negro, por lo que dijo el de cabello azul, se llama Armin, y el de cabello azul se llama Alexy, deben ser gemelos, es decir, se parecen demasiado.
    Alexy me vio, sonrió alegre – Hola, lo siento pero me llevare a mi hermano.
    – Está bien.
    – ¿Eh? ¡Al menos no dejes que me lleve! – pidió Armin.
    – Pero ya tienen planes, además yo debo buscar un clip.
    – ¿Buscar un clip? – pregunto Alexy, soltó una risa alegre – Ya veo, así que tú eres un chico nuevo, mucho gusto soy Alexy.
    – Soy Stuart – me presente – Linda camiseta – me gustaba el estampado que tenía.
    – Gracias – sonrió él aún más alegre – Ves Armin, a él si le gusta mi ropa.
    – ¡Alexy!
    – Me voy – declare alejándome, ellos debían solucionar sus asuntos. Con lo que dijo Alexy debo suponer que a todos los nuevos les piden buscar un clip, que tonta iniciación. Seguí caminando por el pasillo, encontré una de las puertas abiertas, me asome allí por curiosidad, era un aula vacía, bueno, no estaba vacía, allí estaba mi tía con un traje de hada madrina.
    – ¿Qué carajos? – no pude evitar decir al ver a mi tía, una mujer mayor de cabello color rosa, con un traje de hada madrina, era un vestido pomposo de tonos azules y algunos lacitos rosas, tenía incluso alas falsas y una varita mágica.
    – Cariño no deberías decir esas cosas aquí – me aconsejo ella con una alegre sonrisa.
    – ¿Tía que haces aquí? ¿Y vestida así?
    – Pero que dices, si yo soy tu querida hada madrina, que viene a cumplir todos tus deseos realidad cariño.
    – No tía, en serio, ¿Cómo te dejaron entrar así? ¿Acaso nadie noto que una mujer mayor que viste un traje de hada entro a una institución solo de hombres?
    – No soy tan mayor – me jalo de mi mejilla – Ahora cariño, como dije vine a hacer todos tus deseos realidad.
    – ¿Puedo volver a mi antigua escuela?
    – No – respondió ella alegre.
    –… ¿Para qué dices que viniste?
    – Cariño, toma un hermoso collar – me entrego un collar de perlas.
    – ¿Para qué quiero esto? – pregunto mirando el collar, luego la mire a ella.
    – Podrías dárselo a una chica que te guste – sonrió ella alegre.
    – ¡En esta escuela hay puro macho peludo! – reclame.
    – De nada – siguió sonriendo ella. ¿Acaso me escucho algo de lo que dije? – Lo siento cariño, es hora de que me valla, seguiré cumpliendo los deseos de todos – salió de allí alegre.

    Guarde el collar de perlas en mi mochila, se lo regalaría a mi tía en su cumpleaños, al menos serviría de algo. Sobre una de las mesas vi un clip, lo tome para poner mis hojas en orden.

    – Al menos algo bueno salió de todo esto – susurre, antes de salir al pasillo.

    Este día estaba por acabar, el director estaba allí, caminando alegre por el pasillo, ¿Acaso no tiene nada más que hacer?

    – Señor director – me apresure a ir hacia él – Ahora sí, tengo todo, el clip, las hojas, el dinero – procedí a entregarle todo.
    – ¡Muy bien! ¡Muy bien! Pero las clases ya se han acabado, así que es hora de volver a casa – explico aun sonriendo.

    Eso explica porque el salón estaba vacío, al menos termine con todo hoy, mañana puedo seguir comenzar con mi vida escolar.

    – Espere, ¿en qué salón estaré? – pregunte al recordar esto.
    – Estas en el salón A, el salón del profesor Farres.
    – Muchas gracias – le dije antes de que se fuera, al menos ya sé que estaré en el mismo salón que Armin, quizás las otras personas que he conocido hoy estarán allí, solo espero que la diva no. Mi vista fue atraída hacia una libreta que estaba cerca a los casilleros, me agache a recogerla, esta decía: “Libreta de Lysandro”, así que en serio perdió su libreta, me pregunto cómo habrá llegado hasta aquí, note que en la parte final de la tapa con letra más pequeña decía, “Si encuentra la libreta favor de llevarla con Lysandro, si encuentra a Lysandro favor de llevarlo con la libreta”.

    Salí al patio por si encontraba a Lysandro allí, por suerte allí estaba, sentado en una banca con una expresión pensativa pero al mismo tiempo soñadora.

    – ¡Lysandro! – lo saque de su ensoñación.
    – ¿Pasa algo? – me pregunto con su tono tranquilo.
    – Toma – le devolví su libreta – Si esta libreta no es tuya, entonces hay dos Lysandros en la escuela.
    – Efectivamente esta mi libreta, pero no hay dos Lysandros en este lugar – me miro con cierto desconcierto, al parecer no capto la broma.
    – Gracias por la información, bueno espero que no vuelvas a perder tu libreta, ya me tengo que ir.
    – Gracias a ti por devolvérmela, me imagino que has terminado tu inscripción si es que ya te vas.
    – Así es, estaré en el salón A del segundo año – le avise antes de irme, quizás debí preguntar si estábamos en el mismo salón o mismo año.
    Al salir del instituto me encontré con Kentin, quien estaba saliendo también, me acerque a él.
    – Hola – salude.
    – Hola Stuart, ¿ya terminaste el proceso?
    – Sí, estoy en el salón A del segundo año – me miro con cierta sorpresa por lo que dije.
    – Yo también estoy en ese salón, al parecer estaremos en la misma clase durante un año – sonrió un poco al decir esto.
    – Sí, eso parece – me empezaba a dar hambre, ¿a quién no le daría luego de estar todo el día corriendo por el instituto?, así que saque un paquete de galletas de chocolate para empezar a comer – ¿Quieres? – le ofrecí a Kentin al notar como miraba las galletas.
    – No, ¿por qué crees que me gustan esas galletas? – desvió la mirada.
    –…Solo decía, si no quieres no comas, pero son ricas.
    – ¿A ti te gustan en serio?
    – Si no me gustara no me las comería – me encogí de hombros.
    – Entonces supongo que puedo tomar una – tomo una galleta para comerla, sonrió alegre por esto.
    – Si te gustan las cosas dulces solo cómelas, no tiene nada de malo – fui directo con eso.
    – No quiero que piensen que soy débil porque me gustan las cosas dulces – confeso él con una expresión algo molesta.
    – No te hace débil eso, eso te hace… lindo, sí, eso lindo, físicamente se ve que eres fuerte, pero no creo que nadie se meta contigo porque te gusten las cosas dulces… aunque ese chico Andrew parece capaz de molestar a cualquiera – suspire al recordarlo.
    – Andrew es un pesado, sería mejor si no te acercaras a él – me aconsejo con cierta molestia, vaya entonces no solo a mí me cae mal.

    Kentin me acompaño hasta el parque que estaba cerca al departamento donde vivo con mi tía, nos despedimos y cada quien se fue por su lado. La salida del parque te llevaba a las calles, allí había una casa de tres pisos, saque mi llavero, el cual tenía en total tres llaves plateadas, use una para abrir la puerta.

    Al entrar estaba la luz apagada, clara señal de que estaba solo, encendí la luz antes de cerrar la puerta, me dirigí a mi recamara en donde lo primero que hice fue tirar mi mochila y casaca de cuero a la cama. Me senté frente a mi escritorio, en donde use la segunda llave para abrir el último cajón de la derecha, saque de allí una carta de “Usagi-san”, quien era mi amigo por carta. Conocí a Usagi-san hace un año, encontré una vez paseando por el centro una libreta de notas nueva, esta tenía una dirección a donde debía ser enviada, quizás a alguien se le olvido, por lo cual la envié por correo a donde decía la dirección junto a una nota que decía: “No vuelvas a perder tu libreta, se nota que es nueva, no malgastes el dinero -.- “; días después me llego a mi antigua dirección una carta de agradecimiento, así fue como empecé a hablar con Usagi-san, el motivo por el cual usamos apodos es porque en la primera nota que le mande use un apodo: “Inugami-san”.
    En la carta que Usagi-san me mando, me contaba sobre su amigo, algunas cosas de donde estudiaba y algunas cosas más, era discreto hasta cierto punto, pero en ocasiones parecía que podía contarme todo porque me tenía confianza, de mi parte de era igual.

    > Querido Usagi-san
    He comenzado mi nueva jornada escolar de una manera muy peculiar, mi tia se ha convertido en un hada madrina dedicada a convertir mis deseos realidad, o eso parece, realmente le falta mucha practica para lograrlo, pero al menos lo intenta, eso me parece bueno.
    He conocido a muchas personas hoy, muchas me han sido agradables como otras no, sin duda siempre voy por el dicho, “No juzgues a un libro por la portada”, aun así hay veces en que este dicho no se cumple, solo espero poder mantenme alejado de los problemas, también alejado de aquellas personas que solo les interesa burlarse de mí o hacerme sentir menos, sería bueno si solo pudiera ignorarlos, pero mi orgullo puede ser a veces más fuerte.
    Espero que te todo este bien por tu parte.
    Saludos.
    Inugami-san.

    Termine de escribir la carta, la puse en un sobre, que ya estaba preparado, me daba flojera escribir la dirección, así que hice un sello para solo tener que ponerlo y no escribirlo cada vez que mandaba la carta, Usagi-san al parecer hizo lo mismo también, ya que las cartas que me enviaba, se notaba que la dirección fue puesta con un sello especial, de hecho fue Usagi-san quien primero hizo lo del sello, por eso se me ocurrió a mi esa idea, pero bueno ya le dije que me cambiaría de dirección, así que actualizo su sello.
    Deje la carta en el buzón como era costumbre, no sé en cuantos días recibiría respuesta de Usagi-san, ya que dependía de la distancia y de cuando viera mi carta. Regrese a mi habitación para preparar mis cuadernos para mañana, después de todo, sería mi primer día oficial en el Instituto Sweet Amoris.



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    Notas Aclaratorias: Los personajes de Corazón de melón no me pertenecen, le pertenecen a Chinomiko. La idea es esta, nuestra Su (Que ahora es hombre y se llama Stuart), ingresa al instituto Sweet amoris (hasta aquí todo bien, conocen la primera parte, salvo que ahora el insti es de puros hombres), además de eso tomare como referencia los capítulos para darle más similitud al juego, pero al mismo tiempo ya están incluidos desde el capitulo 1 todos los personajes, ya que Stuart ingresa al segundo año, otro punto a aclarar es que si bien tengo ya un chico con el que Stuart terminara quizás lo pueda cambiar, asi que no adelantare nada de eso por ahora uwu~~ espero que lo disfruten o3o~~
    Ya todas conocen como son los chicos, asi que dejare las imagenes de los otros chicos ewé! XD (el arte no es mio, solo les he puesto nombre, todo ha sido sacado de internet-sama, pero dire que las dos primeras son de Citgepo y el tercer dibujo es de The-Last-Teabag)

    SPOILER (click to view)
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    Carl:
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    Con respecto a mi personaje cuando haga un dibujo de este, lo subire lo juro xD lo tengo en chibi sireno y no creo que quieran verlo asiXD


    Con respecto a Stuart, en cuanto a su personalidad no hay mucho que decir, como ya se habran dado cuenta es un chico sincero, puede ser un poco bromista, es amable y al parecer es fácil llevarse bien si lo tratas bien, poco a poco se ira descubriendo más de su personalidad.
  2. .
    @Yamamoto_Yui: gracias, es que ese día tuve un ataque y me puse sentimentalista(?) y no soy de escribir cosas así por eso dije que estaba chafa (chafa= feo)
  3. .
    @Misa-chan: Pos eso parece XD jajajajaa por eso Luis es callado porque sabe que si es muy directo se iran contra él(?) y le aburre eso(?) pero si, con él podriamos traer más personas al lado shaoi C: ..... lel :v (?) okey, no habia pensando en eso, soy bastante sincera no me los planteo como pareja XD (lol) pero bueno quizas me has incentivado un poco ewe XD asdadsadas lemon, ya me dieron ganas de escribir D: pero ñooo debo ser fuerte(?)

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    Capítulo 8:



    – Ayer... no, primero comenzare diciéndote lo más importante, no soy humana, lo siento – se disculpó con cierta diversión.
    – ¿No lo eres?...
    – No, pero antes si lo era, veras yo crecí en un barrio muy pobre, eso fue antes del segundo ataque, hace mucho, mucho tiempo – sonrió con cierta diversión.
    – Pero según lo que conto Aoi el segundo ataque paso hace mucho… ¿Cómo es que tú dices haber nacido allí?
    – Ya sabes lo que dicen, nunca le preguntes a una mujer por su edad – rio ligeramente – Una vez que termine de contarte puede que resuelva todas tus dudas, así como que te origine más dudas.
    –… Está bien… por favor cuéntame – pedí con tono tranquilo.

    – Como te dije yo vivía en un barrio muy pobre, en ese momento todavía era humana, muchos sufrimos de carencias a pesar de que la humanidad había logrado salir adelante, en ese tiempo yo vivía con mi madre y hermana, mi madre trabajaba muy duro en un hospital como enfermera, mi hermana iba en primaria y no era consciente de lo que pasaba, yo iba en secundaria, pero por ser menor de edad no podía tener un trabajo ni siquiera de medio tiempo, tenía una vida tranquila aun si no tenía lujos o si a veces faltaba comida. Un día encontré un gato de raza balines, como sabrás en un lindo gato de pelaje color café claro con patitas de color chocolate al igual que la mascarita en su cara, de ojos azul intenso – suspiro – En fin, un gato muy agradable. Lo encontré cerca de la calle donde vivía, estaba parado allí mirándome, él quería la comida que traía, entonces le di un poco, pensando que no haría daño, grave error – soltó una ligera risita alegre pero sonaba muy falsa, me preguntaba que tendría que ver el gato en todo esto, pero por ahora solo le escucharía – Así fue como seguí viendo a ese gato durante todos los días, un día en la noche tuve que salir para comprar una pastilla, ya que mi hermana se encontraba mal, cuando regrese vi allí al gato, me disculpe por no tener comida conmigo en ese momento, avance apenas unos pasos luego cuando un tipo intento asaltarme, tenía mucho miedo, ese tipo parecía dispuesto a matarme y no tenía nada de valor para darle, cuando creí que ese sería mi fin apareció un joven, era alto, de tez blanca, cabello corto color chocolate, ojos azul intenso, lo más resaltante eran sus orejas y cola de gato – dijo riendo, como si hubiera recordado algo gracioso, ahora creía entender un poco, ese gato era una criatura mágica también – Él mato al otro sujeto, tarde en reconocer que era el gato, cuando me di cuenta él solo se fue, varios días pasaron y no volví a ver al gato, hasta una noche en donde estaba afuera esperando que llegara, parecía tonta realmente, ese chico vino, esa noche hablamos de varias cosas incluyendo sobre la verdad de este mundo, finamente me convenció para seguirle, así que se realizó un ritual en donde me convertí en un hibrido, una chica mitad gato por así decirlo – sonrió divertida. Esa era la explicación de porqué Marshall la molestaba diciendo eso, pero no entiendo que paso con el chico gato – Ahora, yo fui con ese chico… Tatsuya, yo fui con él, fui a su hogar, era un lugar muy diferente a todo lo que conocía, aun si me adapte allí el líder de ese grupo descubrió que era una humana y no un raza pura como ellos, me hicieron sufrir mucho, tanto física como psicológicamente, al final Tatsuya también me abandono, me dijo que me fuera al mundo humano y ya no volviera nunca, eso fue muy cruel para mí, yo había soportado tanto, y él me deshecho tan fácilmente, al principio me negué creer eso, pero finalmente cedí antes la presión y… me fui, pero antes de irme de allí… el líder de ese grupo me hizo sufrir aún más, me hizo ser partícipe de un experimento con alguien de quien ya no me acuerdo, como resultado termine obteniendo la inmortalidad, termine con esta apariencia, vague buscando la salida de ese mundo, vague allí por tantos años, que matar era parte de mi estilo de vida, solo pensaba en sobrevivir para poder vengarme de quien me hizo todo eso, pero realmente tenía miedo, tenía mucho de miedo de que me encontraran y pudieran hacerme más daño – Sachi se detuvo un momento, apretó los labios como si estuviera conteniéndose. Yo nunca pensé que detrás de su fachada alegre y despreocupada existiría una historia triste como la que me cuenta, pero algo me dice que eso solo es el comienzo – Finalmente logre escapar de ese mundo en el tercer ataque, para ese tiempo mi madre y hermana habían muerto, estaba sola en ese mundo, no tenía a nadie, no confiaba en nadie, me la pasaba peleando hasta desfallecer, eso fue hasta que un día una persona me brindó su apoyo, aun si tenía un carácter de mierda y era una persona insensible la mayor parte de tiempo, él fue la única persona en la que pude confiar, Yuma – aquel nombre salió como un susurro, pero al ver que se detuvo preferí no preguntar por él – Ahora, respondiendo a tu pregunta original… La razón de mi reacción…

    – Así es… quería saber… por qué reaccionaste así ayer – asentí suavemente con la cabeza.
    – El líder de la Legión Amarillo era Tatsuya, me entere por otras fuentes pero al parecer era cierto.
    – Pero Tatsuya debería tener la misma edad que tú… pero tú eres inmortal entonces… ¿Cómo es que él está vivo? – me atreví a preguntar aun si sabía que la respuesta no era agradable.
    – Efectivamente Tatsuya está muerto, pero su cuerpo sigue vivo, gracias a los experimentos que realizo el líder de ese grupo, descubrió el cuerpo que mejor se adaptaba para volverse inmortal, así que poseyó el cuerpo de Tatsuya, borrando su existencia e imponiéndose en él, logro tomar control de su cuerpo, y volverse inmortal – su explicación era con un tono de voz tan sereno, que de cierta manera me provocaba escalofríos.
    – Pero según lo que dijeron ayer… Koichi lo mato… ¿O no? – empezaba a tener esa duda, si el cuerpo de Tatsuya se volvió inmortal, ¿Cómo es posible que lo mataran?
    – Sabes ser inmortal no significa que no puedas morir, hay razas que son consideradas inmortales como los vampiros, pero no es porque no puedan morir, es porque viven un largo periodo de tiempo – eso tenía más sentido, un cuerpo que no puede morir sonaba ilógico y aterrador – En este caso seguro le debieron producir un gran daño a su cuerpo, atacando en zonas vitales antes de que pudiera recuperarse, así que seguramente eso fue lo que paso.
    – Pero pensé que el líder de cada Legión debía ser muy poderoso.
    – En efecto lo son, si no, no serían líderes, pero el nivel de poder de Koichi es bastante alto, odio admitirlo pero es verdad, está al nivel de cualquier miembro de Crime Scarlet, pero eso no es suficiente para vencer a un Líder de Legión, debió obtener un poder aun mayor.
    –… ¿Cómo convertirse en un contratista? – recordé que esto fue mencionado durante la conversación de hace poco.
    – Si, como ser un contratista – sonrió alegre.
    – Pero, ¿Qué es ser un contratista? – quise aprovechar para resolver esa duda, me sentía mal por seguirle preguntando, pero tenía que aprovechar cualquier oportunidad.
    – Vaya que preguntón eres – sonrió divertida, bueno al menos no estaba molesta por eso – Los contratistas con aquellos que hacen un contrato con un ser, estos les dan su poder a cambio de algo.
    – Suena muy simple – me atreví a decir.
    – Es porque es muy simple – al parecer no lo negaba, eso me hacía sentir un poco decepcionado – Bueno a pesar de ser simple, hay muchas veces en que el precio que piden es muy alto, algunos seres piden el alma, por ejemplo.
    – Eso suena a más lo que llamaríamos aquí, un pacto con el diablo – me di cuenta de esto, ahora es cuando me pregunto si el diablo existe.
    – Algo parecido, pero no todos piden lo mismo, algunos aceptan lo que les ofrecen mientras otros impiden su pedido, hay de diferentes tipos, no todos son iguales.
    – Vaya sabes mucho de eso – me quede un poco sorprendido – Quizás sea algo extraño que te pregunte pero – me pause por unos segundo, no estaba seguro de lo que preguntaría – ¿Tú eres una contratista?
    – ¡Eres más listo de lo que imagine! – Sonrió ella con sorpresa – ¿Cómo lo supiste? – pregunto con curiosidad.
    – Bueno… dijiste que los contratistas te dan un gran poder a cambio de un precio alto, no cualquiera aceptaría ese tipo de pacto, tampoco creo que cualquiera lo soportaría, además la razón para realizar un trato de ese tipo debe ser realmente importante para que la persona acepte… no quiero pensar que hiciste ese trato para vengarte… pero si paso esa posibilidad por mi mente – explique de la manera más clara que pude, porque a penas y yo me entendía.
    – Jum, jum – asintió ella varias veces con la cabeza – Ya entiendo, pero estas mal – sonrió alegre.
    – Al menos acerté en la parte de que eres contratista – sonreí alegre, pero me sentía algo nervioso, quizás pensaba que ella se molestaría por decir aquello, pero no lo ha hecho, sigue tan alegre como siempre, a pesar de todo lo que me conto que paso, ella sigue sonriendo, aquella persona que le ayudo, Yuma si no mal recuerdo, debe haber sido muy importante, no preguntare sobre él aun, porque no quisiera tocar una fibra sensible que la haga desmoronarse, ya que lo más probable es que esa persona haya muerto.
    – Pues sí, pero ese no es el motivo para hacerme contratista – negó con su dedo índice, moviéndolo de un lado a otro – Tuve otro motivo, pero ya me canse de hablar, así que ahora hablemos de otra cosa – sonrió alegre.
    – Bien, supongo que muchas preguntas un solo día es malo – le dije divertido – ¿De qué quieres hablar?
    – ¿Por qué no eres gay? – dale con el mismo tema, no entiendo como no se cansa – Tienes potencial, ¿Por qué no lo aprovechas? – no quería decir algo que no debía, pero ella ya no me dejaba opción.
    – Sachi – tome sus manos entre las mías – No puedo ser gay porque me gusta una chica – le mire a los ojos, tratando de ser lo más convincente que pude. Sachi me miro, a los pocos segundos estallo en risas, sabía que mi plan no funcionaria, pero al menos lo intente.
    – WUAJAJAJAJAJAJAJA – seguía riéndose de manera estruendosa, ahora me arrepiento de haber dicho eso, sabía que decir mentiras era malo – JAJAJAJA…. NO – dijo picando mi nariz con la punta de su dedo índice – Fue un buen chiste, pero oye bien niño, nadie interferirá con mi OTP, ¡nadie! – dijo totalmente seria. ¿OTP? ¿Qué es eso? Mejor ni pregunto – Y si yo digo que eres pasivo ¡Lo eres! Tengo buen ojo para esto – sonrió alegre.

    – Sabes también le dices pasivo a Marshall pero él sale con varias chicas – intente negar su argumento, que me parecía bastante pobre.
    – Pues por eso mismo lo hace – ella rodo los ojos aun sonriendo divertida – Porque está negando su homo o bisexualidad, sus relaciones duran muy poco, cosa menos de una semana, cuando dure más con alguien allí le creeré, mientras aun digo que es un pasivo muerde almohada – se cruzó de brazos, como diciendo que no podía darle la contra.
    – Ese es tu argumento contra Marshall… ¿Qué hay de mí? ¿Por qué dices que soy pasivo? – Siempre me ha dado curiosidad preguntar porque dice soy pasivo, pero al mismo tiempo me da miedo, ella sería capaz de decir que me parezco a uno de sus personajes BL y eso me aterra.
    – Porque tienes ojos rosas – fue directa, espere a que continuara pero no dijo nada más.
    ¿Qué?, ¿QUÉ?, ¡¿QUÉ?! ¿Ese era su argumento? ¿Qué tengo ojos color rosa? ¡Maldita Genética! Pero aun así ese no era un argumento válido, no lo era.
    – Debes estar de broma – sentí mi sonrisa forzarse, no quería mostrarme molesto porque seguro eso es lo que busca.
    – Por supuesto que bromeo, ese no es un argumento válido, solo me pareció interesante recordártelo, eres el único chico que conozco con ojos color rosa – explico ella alegre. Solo solté un suspiro, lo sé, que un chico tenga los ojos de color rosa, es muy raro.
    – Lo sé, lo sé, pero aun así no digas eso ni de broma.
    – ¿Odias el color de tus ojos?
    – mmm… No es odiar, es decir me parece normal para mí, solo es fastidioso cuando alguien me molesta – rodé los ojos – No tú, no tú – me apresuro a decir antes de que haya un malentendido – Es solo que se torna molesto que hagan la misma broma cada vez que ven el color de ojos, ¿acaso no se les puede ocurrir algo mejor? – bromeo con diversión, cuando era más pequeño muchos decían que mi ojos eran de niña, por ser color rosa, al principio me molestaba, pero luego ya me hartaba, escuchar lo mismo siempre, era como si no se les ocurriera otra cosa para decir, estaba cansado de escuchar lo mismo, por lo cual muchas veces ignoraba a ese tipo de personas.
    – Entiendo, creo que entiendo, normalmente Marshall me dice: “gata idiota”, así que estoy acostumbrada, pero a veces usa otros insultos como “Amante de porno gay” o “Viciosa del internet” – explico con una sonrisa alegre. Si yo estuviera en su lugar no estaría tan contenta, pero bueno, yo mejor no me meto en su relación, a saber también si un día se habrán molestado usando las armas de por medio. Aquello me hizo recordar algo, era otra pregunta.

    – Sí, aunque suena fascinante como se aman ustedes y todo eso… Tengo otra pregunta, ¿Cómo hago para volver allí? – pregunte antes de que ella pudiera decir algo sobre lo primero que dije.
    – Ahhh… ¿No sabes? – pregunto ella con una sonrisa alegre. Si lo supiera no le estaría preguntando.
    – No, no lo sé – me limite a contestar.
    – ¿Y cómo fue que llegaste allí?
    – ¿Acaso recuerdas algo de lo que dije ese día?
    – Recuerdo que ese día discutía de BL con el estúpido de Marshall – afirmo ella con una gran sonrisa.
    – Eso no… bueno sí, también recuerdo que dijeron algo sobre eso, pero no me refería a eso – suspire con cierto cansancio.
    – Sí, sí, ya sé tu sueño, el otro tú, el llamado de la sangre y eso – hizo un sonido con su boca, parecido a un resoplido, pero este sonaba como “prrr” – Todos pasamos por eso, o algo así, ya no recuerdo bien – movió su mano con ligereza, como si con eso quitara importancia al asunto, aunque yo creo que debería recordar cómo descubrió que era descendiente de la familia Scarlet.
    – Entonces… ¿Me dirás como ir allí? – insistí nuevamente con la pregunta.
    – Pero ya estas allí – respondió ella con total naturalidad.
    – ¿En serio? – pregunte si creer.
    – ¡Sí! ¡Duda resulta! – Levanto los brazos alegre – ¡Sachi resolvió tu problema!
    – No, no, no, no – me apresure a decir antes de que ella se pueda ir – No entendí.
    – ¿Qué no entendiste?
    – Todo – fui directo.
    Me vio por algunos segundos antes de abrazarme por el cuello y agarrarme a coscorrones, frotando sus nudillos en mi cabeza.
    – Lo siento, lo siento, ya basta – pedí intentando librarme, a pesar de ser tan bajita, ella tenía bastante fuerza. Finalmente Sachi me soltó luego de un par de segundos más.
    – Eso te pasa por decir que no entiendes nada – regaño con diversión – Comenzare desde el principio, yo era una hermosa joven llena de inocencia que vivía en un mundo gris y…
    La interrumpí antes de que continuara – No, alto – pedí – Si entendí eso – aclare, aunque no entendía porque ahora el comienzo es diferente, seguro solo lo hacía para molestarme, me pregunto si en realidad piensa que soy una mascota, pero eso mejor le pregunto después.
    – Pero dijiste que no entendiste todo.
    – Me refería a lo que dijiste, sobre estar allí, no entiendo eso.
    – Ahhh – dijo ella como si fuera lo más obvio del mundo, para mí no lo era aunque mejor no decir nada o causare que esto se prolongue más – Bueno pues una generación anterior a esta decidió hacer algo parecido a lo de hace mucho, aislar a las personas para que no fueran consientes de la guerra, pero como nadie tenía el mismo poder que poseía ya el fallecido antiguo líder de la familia Scarlet, optaron por mantener el cuerpo físico a salvo, mientras tanto a todos los mantienen en un sueño eterno colectivo, los cuerpos residen en La Torre, es allí donde están, permanecen a salvo de las criaturas y cualquier legión, está en una zona neutral por decirlo así, todos los líderes de Legión están de acuerdo que exista por lo cual hasta ahora el plan ha funcionado – explico tranquila – Creo que eso se nos olvidó decirte ese día – sonrió alegre como si no fuera la gran cosa.
    Empecé a recordar un poco lo sucedido aquel día que llegue a ese mundo, detrás de mí había una torre color blanco, no pensé que había estado allí, debo suponer que mientras ocurría ese sueño mi cuerpo se movió hasta llegar al final y cuando acepte ir por la otra puerta, debió significar que era salir de la seguridad de la torre, aunque esto es solo una suposición mía, no tengo recuerdos claros de ese día, quizás solo del sueño.
    – Eso quiere decir que cuando desperté allá, mi cuerpo verdadero fue el que sufrió daños y ahora estoy descansado en esa habitación a la que me guio Daniela – comente de repente al recordar lo que pase cuando llegue.
    – Si, al igual que los demás, pero no te preocupes seguro Kaze ya te curo, su magia es especial tiene habilidad curativa aun si su tipo de magia es de viento, es algo poco común que unos posea dos tipos de magia – explico alegre, no sabía si eso era poco común pero si ella lo decía debía ser cierto – Ahora que lo pienso, tu magia es de tipo mental, hace mucho conocí a alguien también con ese tipo de magia, pero no lo supo desarrollar a un máximo, tengo todavía mis notas de aquellos días en donde todo era aburrido – sonrió alegre mientras miraba el cielo, seguro aquello le traía buenos recuerdos.
    – Me serviría mucho, tengo varias dudas sobre mi poder, además me siento un poco emocionado por esto – sonreí alegre, la verdad tenía mucha curiosidad de saber más sobre mi poder, y quería poder aprender a usarlo lo antes posible.
    – Entonces comenzara el súper rudo macho ultra peligroso híper mega maniático entrenamiento del dolor – anuncio alegre. Es un nombre raro para un entrenamiento, espero que no sea tan raro como el nombre, aunque quien sabe y lo sea aún más – Lo iniciaremos hoy.
    – ¿Hoy? – pregunte sin creer.
    – Bueno Mañana – cambio con mucha facilidad.
    – Supongo que no hay problema, pero… ¿Qué se supone que hare? – me daba un poco de curiosidad saber sobre eso.
    – No lo sé – declaro aun alegre. Me detuve a pensar unos segundos, no había mucho que pensar, realmente nada.
    – ¿Disculpa?...
    – Estás disculpado – me dio suaves palmaditas en la cabeza, eso me hacía sentir como una mascota.
    – Deja de tratarme como una mascota – pedí, ella aparto su mano mientras me miraba alegre.
    – Ehh… pero es divertido ver cómo te molestas y enfunfurruñas cuando te molestamos, arrugas un poco tu nariz de manera adorable, y aun si te molestamos nunca te has quejado ni nada, siempre sigue todo igual.
    – ¿Cómo una mascota?
    – Como un perrito – declaro ella alegre – Ah, pero yo prefiero a los gatos, pero nunca serás tan lindo como un gato, así que sí, como un perrito.
    – ¿Perro? – susurre con cansancio – Cuando te acuerdes que debo hacer en el enteramiento me llamas, ya me voy – empecé a caminar, alejándome de ella.
    – ¿Eh? ¿Ya te vas? – escuche como preguntaba aun desde donde estaba sentada.
    – Sí – respondí con tono cansado, necesitaba un respiro.

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    Notas Finales: Nadie puede contra Sachi C:< nadie!! XD nadie interferira con su OTP (?) XD lol, la amo C: <3 por ser tan fujoshi y loca XD
  4. .
    @Misa-chan: puuu Sachi es amor~ u3u Sachi es vida!! xD

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    Capítulo 7:



    Mi mano de manera perezosa busco el despertador para apagarlo, el sonido incesante hacia que empezara a dolerme la cabeza, ayer tuve dificultades para poder dormir.

    – Ya cállate – le dije al despertador como si este me fuera a contestar, pero sabía que eso no pasaría. Finalmente logre apagarlo, bostece, aún tenía sueño – No fui – susurre mientras me tallaba los ojos, me levante de mi cama para ir al cuarto de baño, me moje el rostro antes de verme en el espejo – Al final no fui… aunque no sé cómo volver allí – suspire con cansancio.

    Decidí caminar hoy a la escuela, el clima no estaba ni muy frio ni muy caluroso, estaba templado, eso debía ser porque ya se acababa el verano, ya había pasado un mes desde que iniciamos las clases este año, quien pensaría que toda mi vida normal cambiaria en menos de una semana.

    Llegue a la escuela más rápido de lo que pensé, quizás tenía cierta prisa por llegar, quería ver si Aoi había venido, quería ver a Sachi y saber qué fue lo que le paso ayer; mi mirada se desplazó por todos lados apenas entre, estaba en el patio frontal, la mayoría estaba aquí antes de que las clases comiencen, además también porque por aquí está la puerta principal para entrar. Una persona capto mi atención, su cabello color morado, su tez morena, esos ojos ámbares que mostraban arrogancia y egocentrismo, él era Krawler Koichi, no sé en qué momento paso, pero nuestras miradas cruzaron, una sonrisa burla surco sus labios.

    – ¿Qué tanto me ves? ¿Te gusto? – dijo con su típico tono burlón y arrogante.

    Rodé los ojos ignorándolo, él se había detenido, estaba a unos pasos delante de mí, lo mejor hubiera sido alejarme por otro lado, pero si lo hacía quizás pensaría que escapaba de él, y me molestaba que llegara a pensar eso. Seguí caminando, pasando cerca de él sin mirarlo ni siquiera, sentí que me tomo del brazo.

    – Espera, tengo que hablar contigo – su tono era serio, quizás él estaba enterado de que yo sabía de ese otro mundo, no dudaba que pudiera atacarme, aun si estábamos en la escuela.
    – ¿Qué? – pregunte mirándolo fijamente, fruncí el entrecejo mostrando mi molestia, quería que soltara mi brazo.
    – Pero no aquí sería mejor en un lugar más privado.
    – No tengo nada que hablar contigo – me solté de su agarre, que él quisiera hablar en un lugar más privado me ponía nervioso, fue él quien le rompió el brazo de Aoi, y ahora es el líder de la Legión Amarilla, así que obviamente estaba en desventaja si me lograba llevar a un lugar donde estuviéramos solos.
    – Como sea – rodo los ojos – Solo iba a decirte que pareces idiota con la bragueta abierta – se burló para alejarse.

    Este quizás sea uno de los momentos más vergonzosos de toda mi vida, pero que me lo haya dicho un tipo como Koichi solo lo hace ser más vergonzoso.

    Salí del baño luego de arreglar mi problema, aún estaba algo apenado pero no tengo tiempo para eso, aún faltan quince minutos para que comiencen las clases debo buscar a Aoi o Sachi. Fui al salón donde tomaba las clases, entre tranquilamente hasta llegar a mi asiento, con la mirada busque a Aoi.

    – No esta – susurre cuando me senté.
    – ¿A quién buscas? – su voz me saco de mis pensamientos, gire a verlo, era Aoi.
    – A ti – respondí sin pensar, cuando me di cuenta sentí mis mejillas arder.
    – Esa es una respuesta muy descarada de tu parte, ¿acaso tienes más preguntas?
    – Bueno… sí, ¿Qué esperabas? Aun no me queda todo claro.
    – Debí imaginarlo.
    – Pero supongo que tengo límite hasta donde pueda preguntar…
    – Es correcto, hay cosas generales que se te pueden explicar, pero hay cosas personales que no puedes preguntar o si debes hacerlo sería en privado.
    –… ¿Como la razón de que Sachi reaccionara así ayer? – aun si preguntaba era más una afirmación.
    – Así es, si quieres saberlo deberás preguntarle a ella.
    – Esta bien – asentí, lo mire por un momento.
    – ¿Qué?
    – ¿Puedo preguntarte algo?
    – Sí – asintió ligeramente con la cabeza.
    – ¿Por qué ayer no viniste? – Susurre, Aoi señalo su brazo – No me refiero a eso… bueno… ayer cuando pregunte por ti, era como si no supieran quien eras tú – susurre.
    – Era eso – suspiro – Aun falta para que comiencen las clases, vamos afuera – dicho esto Aoi se dirigió a la puerta, yo lo seguí sin preguntar.

    Caminamos hasta llegar al patio exterior, en el cual no había nadie más, esto es algo normal, la mayoría está en el patio delantero.

    – Siéntate – Aoi estaba sentado en una de las bancas, yo solo asentí y me senté a su lado – El motivo por el cual se olvidaron de mí, es porque en ese momento mi existencia fue borrada de este lugar.
    – ¿Eh? ¿Tu existencia fue borrada de este lugar?... ¿Cómo… cómo si estuvieras muerto?
    – Algo parecido, veras cuando las personas mueren en el otro mundo, aquí su existencia se disminuye poco a poco hasta que finalmente son olvidados y es como si nunca hubieran existido, nadie los recuerda.
    – Pero eso es imposible – dije aun no creyéndolo.
    – Te lo demostrare de manera sencilla, tu sabes que yo tengo una madre, ¿recuerdas como era?
    Aquella pregunta me demostró lo equivocado que estaba nuevamente, yo no recordaba a la madre de Aoi, no recordaba cómo era.
    – Eso significa que tu madre, murió en el otro mundo – susurre aun si poder creerlo del otro.
    – Así es, ella era la anterior líder de Crime Scarlet, yo herede ese puesto, pero todos los miembros que pertenecían a esa generación ya han muerto, solo quedamos nosotros seis ahora, no, contigo seriamos siete.
    – Ya veo – fue lo único que pude decir, no sabía que más decir, la madre de Aoi murió cuando éramos niños, ahora no logro recordar cómo era, como era el color de su cabello, sus ojos, su expresión, me imagino que esto es aún más duro para Aoi y Sapphire –… Eso no explica porque ayer nadie te recordaba…
    – Eso lo provoco Koichi al parecer, él sabía que yo iría a verlo, hizo algún tipo de magia para borrar mi existencia, aun no sé cuál será el poder que obtuvo con su contratista, pero eso debe tener algo que ver, ya que solo afecto a las personas que no son conscientes, tú lo eres, por eso te diste cuenta de mi falta.
    – ¿Los que son conscientes recuerdan a las personas que han muerto en el otro mundo? – pregunte con cierta curiosidad, él solo se limitó a asentir.
    – Fue suficiente charla por hoy, volvamos a clases – la mirada de Aoi se cruzó con la mía, acerco su mano y acaricio mi cabello, eso me sorprendió – Una hoja – mostro el objeto color verde que había caído seguramente del árbol.
    –…Gracias – asentí – Si, volvamos no quiero llegar tarde a clases, además ayer no viniste tendré que prestarte mis apuntes luego – sonreí alegre.
    – No gracias, es lo mismo que no haber venido.
    – Solo por eso en verdad no te los prestare – me levante de la silla.
    – Era broma – revolvió mi cabello.
    – Me despeinas – me queje con cierta diversión.
    – ¿Acaso estabas peinado? – arqueo una ceja, en sus ojos pude ver un leve destello de diversión, lo cual me hizo sonreír aún más alegre.
    – Por supuesto que sí – respondí alegre.

    Las clases pasaron de manera normal, como si fuera cualquier otro día, pero esta vez no me sentía con una presión invisible como ayer, cada vez que pensaba en esto mi mirada buscaba a Aoi, cuando lo veía sentía un gran alivio en mi interior, quizás el hecho de desaparecer si mueres en el otro mundo me ha inquietado de cierta manera, pero cuando veo que no es verdad que el haya muerto, cuando lo veo aquí, toda esa inquietud se va, me siento feliz de poder verle.

    Al finalizar las clases decidí posponer mis preguntas a Aoi, me preocupaba la reacción que Sachi tuvo ayer, así que fui a su salón, ella parecía la misma de siempre, como si ayer no hubiera pasado nada.

    – Buu – dijo tranquilo Luis, quien no sé en qué momento se puso junto a mí, di un pequeño salto en reacción.
    – Por favor no vuelvas a hacer eso – pedí con cierta vergüenza.
    – Ya veo, así que es esa la razón por la cual Aoi te molesta.
    – ¿A qué te refieres? – pregunte con cierta curiosidad.
    – Es que das gracia cuando te asustas, es como si fueras un pequeño animalito, algo así como una mascota – explico él de manera simple.
    –…Mas…cota… – susurre, ahora tengo ganas de golpear a Aoi, aun si fue Luis quien me dijo eso – Solo ve a recoger a tu novio y deja de molestarme – me cruce de brazos.
    – ¿Mi novio? – pregunto él arqueando una ceja. Me di cuenta que dije algo muy imprudente – Explícate por favor, así sabré cuanto tengo que golpear a Sachi.

    De cierta manera sabía que inculparía a Sachi de que me contara su relación, aunque ella no tuvo nada que ver.

    – Bueno veras… el otro día yo… te vi a ti y a Kaze cuando iba de regreso a mi casa… así que…bueno…
    – Que chismoso eres, observaste cuando nos besamos.
    – ¡Tú eres demasiado directo! Y no soy ningún chismoso, ¿Por qué hacen eso en la calle?
    – ¿Por qué? Porque quise, además pensé que no había nadie… grave error, ahora tengo que cuidarme de otro tipo de chismosos además del tipo de Sachi.

    – Por favor no me compares con un amante del BL como ella.
    – Quizás seas también un amante del BL pero no te has dado cuenta hasta ahora.
    – ¡No lo soy! Me traume cuando me lo mostro, es decir, ¿Quién ve ese tipo de cosas?
    – Ella, y muchas personas más a quien les encanta pervertirse viendo como dos hombres se dan durísimo.
    – Por favor cállate, es incluso más vergonzoso cuando tú lo dices – pedí con cierta vergüenza, Luis es demasiado directo, no importa el tema que sea, además siempre dice lo que piensa sin tomar en cuenta como reaccionaran las demás personas que lo pudieran escucharle, como en este caso, un grupo de chicas paso cerca de nosotros y apresuro el paso al escuchar lo último que dijo Luis.

    – ¿Están hablando del BL? – pregunto Sachi alegre, en su mirada se notaba lo emocionada que estaba.
    – Sí – Luis toco el hombro a Sachi – Te alegrara saber que ahora tienes un compañero, Kaito es un amante del BL de closet, pero ya ha aceptado la naturaleza pervertida que tiene y ha admitido que ama ver a dos hombres como se dan duro contra el muro.
    – Dios, por favor ya cállate, es en serio – me cubrí el rostro con una de mis manos, sentía tanta vergüenza tanto ajena como propia – Y no soy un amante de BL quita esa mirada de felicidad Sachi – exigí.
    – No tengas vergüenza – sonrió alegre Sachi.
    – Quienes deberían tener un poco de vergüenza son ustedes – susurre.
    – Hacen mucho ruido – sonó de manera suave, casi como un susurro, era Kaze.
    – Hola Kaze – salude al otro, quien solo asintió en señal de saludo.
    – Kaze vámonos – indico Luis, Kaze solo asintió en señal de afirmación, así era Kaze, usaba pocas palabras, mejor dichas las necesarias, si había algo que tenía que decir lo decía, si no era así no decía nada, a las preguntas que se podían responder con un “si” o “no” simplemente movía la cabeza. Kaze siguió a Luis con quien se fue charlando o lo más parecido a eso.

    – Que bonito es el amor – sonrió alegre Sachi.
    – Si me lo preguntas son una pareja un tanto peculiar, ambos no son de hablar mucho.
    – Si pero nadie te pregunto.
    – Gracias – dije de manera sarcástica – Por cierto Sachi, ¿Puedo preguntarte algo?
    – ¿A mí? – pregunto con curiosidad, yo asentí con la cabeza – Esta bien, ¿Qué quieres saber?
    –…Antes vamos a otro lugar, la escuela no es el lugar más apropiado para lo que te preguntare – sonreí ligeramente.
    – mmm…. Está bien, vamos por una paleta de helado y luego al parque – propuso alegre.
    – Eso suena bien – sonreí alegre.

    Estábamos sentados en una banca del parque, Sachi estaba comiendo una paleta sabor chocolate cubierta de trozos de maní, yo comía una paleta de fresa con cubierta de chocolate sólida. Hoy no había mucha gente en el parque, quizás por la hora, quizás por el día de la semana que era, quizás porque había algún estreno en el cine, en fin, por muchas razones no había prácticamente nadie, solo unos niños jugando a lo lejos, ancianos sentados juntos a los pequeños animales como son las palomas o ardillas. Se sentía demasiada tranquilidad.

    – Entonces, ¿Qué es lo que querías preguntarme? – pregunto Sachi aun curiosa.
    – Así eso… – recordé, tanta tranquilidad me había distraído de mi objetivo original – Quería preguntarte… ¿Qué fue lo que te paso ayer?... ¿Por qué reaccionaste así?

    Sachi se quedó en silencio, solo me miraba; la tranquilidad se había ido, ahora el lugar estaba lleno de una presión invisible que me hacían arrepentir de haber preguntado eso.

    – Lo que paso ayer, ¿Eh?... por donde comienzo – suspiro con una ligera sonrisa en sus labios, aquella sonrisa era nostálgica pero al mismo tiempo triste, al igual que su mirada, quizás estaba preguntando de más, metiéndome en donde no debía, pero ya era muy tarde para retractarme, quizás no me lo diría si se lo vuelvo a preguntar de nuevo.
    – ¿Estás listo para escuchar la patética historia sobre mi vida? – pregunto aun manteniendo aquella sonrisa.
    – Sí, lo estoy – asentí ligeramente con la cabeza.
    – Ayer... no, primero comenzare diciéndote lo más importante, no soy humana, lo siento – se disculpó con cierta diversión.


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    Notas Finales: aun no revelare lo que pasa con Sachi XD, me gusto la comedia en este capi xD bueno o3o~~ creo que las actualizaciones se pasaran al viernes XD hasta la próxima semana o3o~~
  5. .
    Notas Iniciales: well~~ hoy tuve varios inconvenientes, desde mi mal día, que no hubiera corriente eléctrica en mi depa :T hasta mi estado de animo gracias a cosillas que pasaron hoy D: aun si ya es viernes - leyendo reloj que dice que son 1: 20 am - les traigo capi porque recién lo acabo de terminar, Gracias Paulina Gonzalez por comentar o3o~~ i love you xD

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    Capítulo 6:



    Llegue a la escuela sin ningún contratiempo, todo era como de costumbre, aun si miraba alrededor buscando alguna diferencia o algún indicio del otro mundo, no encontraba nada, solo lograba que las personas me vieran como si fuera algún tipo de paranoico, quizás empezaba a serlo.

    – Buenos días – saludo alegre Sachi dándome una palmada algo fuerte en la espalda.
    – ¡Sachi! – grite sin darme cuenta, me había dolido el golpe.
    – ¿Si? ¿Qué paso? – pregunto alegre mientras ladeaba la cabeza, su actitud era la de siempre, como si no hubiera pasado nada.
    – Yo… bueno… esto… sobre lo de… ¿ayer? ¿A noche? – me sentía confundido, empezaba a perder noción del tiempo, no sé cuánto tiempo pase allá, pero creo que toda la noche ya que cuando desperté aquí era de mañana.
    – Ohhh… sobre eso, Aoi dice que sería mejor hablarlo después de la escuela, así estaremos todos juntos y será más divertido que te lo explique – explico alegre – Ahora sería mejor que nos apresuremos o llegaremos tarde – dijo antes de empezar a correr, alejándose de mí.
    Fui a mi salón, todos allí conversaban como cualquier otro día, el profesor aun no llegaba, tampoco estaba Aoi, lo cual me parecía raro.
    – ¿No has visto si Aoi ha llegado? – me acerque a preguntar a uno de los que se sentaba cerca, él me miro con cierta extrañez.
    – ¿Quién? ¿Quizás te confundes de salón? – se encogió de hombros en señal de que no sabía de quien le hablaba.
    –…Quizás sí… lo siento – dije para sentarme en si asiento, esto era realmente raro, la mayoría conoce a Aoi, es extraño que me haya respondido de esa manera, quizás eso tenga que ver con el hecho de que no está aquí hoy.
    – Alumnos tomen asiento – puso orden el profesor al entrar, dio inicio a la clase como cualquier otro día. Aoi no apareció durante toda la clase, su asiento permaneció vacío.

    Las clases pasaron sin ningún contratiempo, como era usual, pero algo no se sentía como siempre, a pesar de que estuviera acostumbrado a esta rutina ahora la veía de otra manera, me daba cuenta de que era muy tranquila, muy pacifica, ficticia a comparación de ese otro mundo.

    Desde mi asiento podía ver a Daniela y a Luis, ambos van en el mismo año y salón que yo, ellos parecían tan tranquilos como siempre. Daniela y Luis Castillo, son medios hermanos, tiene solo a su padre en común, son de diferentes madres, no sé muy bien la historia que hay detrás de ello, pero según tengo entendido ahora su padre está casado con la madre de Daniela, por ende, Daniela y Luis viven con ellos. La verdad yo no encuentro parentesco en ellos dos, ambos son distintos tanto en físico como en personalidad, pero supongo que no todos los hermanos se parecen, es decir Aoi y Sapphire tampoco se parecen, son totalmente opuestos y si no fuera porque ambos tienen los ojos azules y el mismo apellido, jamás hubiera sabido que ambos eran hermanos. Me pregunto si ella estaría enterada de este tema, no la vi allí junto a los demás, pero no significa que no sea consciente de lo que pasa.

    La campana que indicaba la salida sonó por fin, me costó prestar atención a clase, incluso me costó tomar apuntes correctamente, no hable con nadie del salón durante todo la jornada de clases, solo podía pensar en la hora de salida, la hora de irme de aquí, la hora de poder ver a Aoi. Sacudí mi cabeza en señal de negación para borrar aquel pensamiento estúpido que tuve.

    – ¡Kaito! – la voz de Daniela me volvió a la realidad – Vámonos ya, si te quedas atrás te perderás.
    – Lo siento – me disculpe, quien sabe desde hace cuánto me estuvo llamando, ya que tuvo que gritar para que le hiciera caso – Espera… ¿A dónde vamos?
    – Ese es un secreto – me dijo con una sonrisa alegre.
    – Sí… si vamos al complejo de apartamentos, se dónde es – explique, ya que aquí fue donde me llevaron Sachi y Marshall aquella vez.
    –…Realmente no sé si pensar en que sabes mucho o eres un blanco muy fácil – a pesar de que esto fue dicho en voz baja por Luis, pude escucharlo perfectamente por la cercanía, pero no lo culpaba por pensar así, la verdad fue una serie de sucesos que no esperaban que sucedieran.
    – Quizás solo es alguien con mala suerte – esas palabras salieron con el mismo tono alegre, no sé si intentaba hacerme sentir mejor, pero no funcionaba.
    – Sería mejor solo ir, creo que Aoi se molestara si lo hacemos esperar mucho – comente encogiéndome de hombros.
    – Yo lo alcanzare luego, tengo otro pendiente – explico Luis con su usual tono tranquilo para salir del salón.
    – Entonces seremos solos tú y yo hoy – anuncio alegre Daniela para salir del salón, yo salí detrás de ella, no pude evitar mirar hacia donde iba Luis, ya que apenas iba unos pasos delante de nosotros. Bajamos la escalera al primer piso, en donde vi de reojo como Luis iba hacia los salones de segundo año de secundaria, quizás iba a buscar a Kaze, esta fue solo una idea que hice por el beso que vi aquel día y por como lo trato en el otro mundo, aunque estaba seguro que iba a verlo.
    – ¿No deberíamos esperar a los demás? – pregunto con cierta curiosidad.
    – ¿Eh? Pero si tú mismo dijiste que no debíamos hacer esperar a Aoi – Daniela puso sus manos en su cintura, como si fuera una jarra.
    – Sí, pero sería extraño no llegar todos juntos, además seguro no dirá nada a menos que estemos presente todos.
    – Tienes un buen punto – asintió ella con la cabeza – Vamos al salón de primero, Marshall esta en prepa pero seguro viene para molestar a Sachi.
    La seguí a los salones de segundo, al entrar al salón de Sachi confirme mis sospechas, Luis estaba junto a Kaze hablando.
    – ¡Luis! – llamó Daniela. Luis dirigió la mirada a su hermana, levanto la mano en señal de que la había escuchado.
    – ¿Qué hacen aquí? Luis dijo que ya se habían ido – intervino Sachi.
    – Eso planeábamos, pero luego Kaito dijo algo importante, y eso es que Aoi no hablara de nada a menos que estemos todos juntos, y por obvias razones nosotros tampoco podemos decir nada hasta que él nos autorice – explico Daniela.
    – Ya veo, hasta que por fin se le prendió el foco a Kaito, es una gran noticia – se animó Sachi, pero sabía que era solo porque me estaba molestando.
    – Lo sé, esto solo puede ser una buena señal – siguió el juego Daniela, al menos me gustaría que no lo hiciera.
    – En ese caso vámonos – esta vez hablo Luis, ambas asintieron para empezar a caminar a la salida.

    Salimos del centro educativo, caminando por la calle como cualquier grupo de chicos normales, pero claro esto no era cierto, en todo caso no del todo cierto.

    – ¿Y Marshall? – me doy cuenta que él no está.
    – Ah, cierto – se dio cuenta Sachi también – Ya decía yo que el ambiente estaba muy pacifico – saco su celular para marcar, debo suponer a Marshall.

    Mientras Sachi hacia la llamada telefónica me distraje al ver a alguien, era Sapphire, al parecer ya había salido de clases también, quise acercarme a saludar como siempre, pero la duda me entro, ¿Qué tal si Sapphire no sabe nada del otro mundo?, Si este era el caso yo podía ser lo suficientemente torpe como para decir algo que le resultara extraño en nuestra conversación, lo cual generaría duda o curiosidad en ella.

    – No lo hagas – la voz suave, casi susurrante, de Kaze me saco de mis pensamientos, pero como su voz era de tono tan bajo, me sorprendí más que pudiera oírla entre tanto barullo que realiza Sachi mientras llama pasivo a Marshall por el celular – No lo hagas – volvió a repetir con el mismo tono.
    –…Entiendo – asentí suavemente con la cabeza, sabía a qué se refería, era como si el pudiera saber lo que estaba a punto de hacer.
    – Aun si nosotros lo sabemos, eso no implica que personas cercanas a nosotros lo sepan – explico con tranquilidad. Solo asentí sin añadir ningún otro comentario más, no sabía que podía decir.
    Esperamos a Marshall frente a la estación de buses, el llego a los diez minutos.
    – Por fin llegué, ¿Dónde está? – empezó a preguntar, pero no tenía idea de lo que hablaba.
    – ¿Qué? – pregunto Daniela, al parecer no era el único que no entendía.
    – ¡¿Dónde esta?! – volvió a repetir Marshall, sonaba ansioso.
    –… ¿Qué? – pregunte ahora yo.
    – Tranquilo vampiro – hablo Sachi alegre – Te daré tu diario cuando lleguemos – se burló.
    – ¿Marshall tiene un diario? – pregunte sin creer eso.
    – Marica – Luis oculto lo que dijo fingiendo una tos.
    – ¡Te oí! No eres el más adecuado para decir aquello – le señalo Marshall un tanto irritado – Y no es mi diario – rodo los ojos.
    – ¿Entonces qué es? – pregunto curiosa Daniela, realmente a mí también empezaba a darme curiosidad.
    – Pues no es su diario pero es algo vergonzoso – empezó a reírse Sachi – Marshall eres pasivo and you know it.
    ¿And you know it? No entendí que significaba esto, pero si venía de Sachi y era hacia Marshall era obvio que lo estaba insultando.
    – Calla Bitch – respondió Marshall rodando los ojos. Tampoco sabía que significaba Bitch, supongo que también otro insulto.
    – Mira jodido vampiro, lo importante es que viniste – sonrió alegre Sachi.
    – ¿Dónde estabas? – pregunto tranquilo Luis a Marshall, quien sonrió de lado por su pregunta.
    – En una cita obvio – se jacto como si fuera un gran logro. Marshall es un mujeriego, no necesite que me lo dijeran para saberlo, uno se da cuenta de eso rápidamente.
    – ¿Con quién estas vez? ¿Lisa? ¿Mónica? ¿Yuki?
    – Creo que era con Jade – no parecía tomarle importancia al asunto – Vamos rápido, no quiero que Aoi se moleste si llegamos tarde.
    – Lo dices tú, quien estaba jugando al casanova – le saco en cara Luis pero siempre conservando su tono tranquilo.
    – Oye tu solito te pusiste la soga al cuello al tener pareja y…
    Marshall se había callado de repente, Kaze miraba a Marshall con su usual mirada neutral, pero incluso yo pude notar que esta mirada decía algo más, algo como: “Sí sigues hablando, te jodes”. Marshall carraspeo su garganta.
    – Sería mejor irnos – propuse para evitar que las cosas pudieran llegar a más, aunque no lo creía así, siempre es mejor prevenir.
    Llegamos al complejo de apartamentos sin que pase algún otro inconveniente. Estábamos parados frente a la puerta color rojo vino, que tenía la placa color dorado grabado en número “13”. Luis tomo el picaporte para girarlo, la puerta estaba sin seguro, abrió la puerta completamente para que todos pudiéramos pasar. Todo estaba oscuro igual que aquella vez.
    – ¿Por qué siempre tienen las luces apagadas? – pregunte con cierta curiosidad y cansancio.
    – Bueno, este es un depa abandonado, así que no lo usamos mucho, solo para reunirnos – explico Sachi – Ósea que es solo para vagar.
    No esperaba que ella misma dijera eso tan fácilmente. Tantee con mi mano la pared, buscando el interruptor de la luz, cuando finalmente lo encontré fuimos capaz de ver el apartamento.
    – Todo parece normal – susurre para mí mismo, era tal y como estaba la última vez.
    – Me pregunto si Aoi se habrá quedado dormido otra vez – hablo Sachi dirigiéndose al gran sofá blanco que había en la sala – No esta.
    – Claro que no, estoy aquí – Aoi salió del dormitorio. No pude evitar mostrar sorpresa al ver que tenía un brazo vendado, el brazo derecho, aun si usaba un polo de manga larga se notaban las ventas.
    – ¿Qué te paso? – pregunte con preocupación en mi tono, no pude evitarlo.
    – No tienes que preocuparte, habré sanado para mañana.
    – Claro que me preocupo, es la primera vez que te veo tan herido – replique con cierta irritación ahora, no podía creer que para Aoi fuera tan poca cosa.
    – Tranquilo esto es algo leve.
    – ¿Algo leve? – no pude creer que dijera él mismo esto.
    – Primero vamos a sentarnos, te contare todo así como también que me paso.

    Nos sentamos en la sala los siete, había en total tres sofás, dos para dos personas y el que estaba en medio de estos, era para tres personas, los sofás estaban acomodados en forma de “U”, frente al sofá de tres personas estaba una televisión pantalla plana sobre una gran cómoda.

    – Siéntese – ofreció Aoi, aunque sentí esto más una orden, todos tomamos asiento. Kaze y Luis se sentaron en el sillón que estaba a la izquierda, mientras Marshall, Sachi y Daniela, en ese orden, se sentaron en el sillón para tres personas, yo por mi parte me quede sentado solo en el sillón para dos personas que estaba en la derecha, Aoi estaba parado, de tal manera que nos viera a todos.
    Tenía tantas preguntas por hacer, pero al mismo tiempo ninguna, es que había tanto que no sabía que por eso mismo no sabía que preguntar, además ahora lo que más curiosidad y preocupación me causaba era lo que paso a Aoi.
    – Comenzare haciendo una introducción – empezó a hablar Aoi, sacándome de mis pensamientos – El otro mundo, es el mundo real, es un mundo el cual está sumido en la guerra desde hace muchos años, el mundo no siempre fue así como lo conocemos, en un principio no estaban separados entre humano y no humanos, todos coexistían juntos, pero finalmente aquellos llamados humanos obligaron a las demás razas a retroceder y esconderse, mientras su dominio se extendía cubriendo casi todo el mundo, la humanidad siguió evolucionando hasta ganar más dominio, muchos de ellos poseían poderes, tal es el caso de la familia Scarlet, la cual fue una de las más poderosas familias en su tiempo. El mundo se convirtió así en total por tres sucesos que hubo, el primer desastre que hubo fue durante el apogeo de la familia Scarlet, que había declarado su dominio como la más poderosa familia, pero el desastre ocurrió allí mismo, el líder de la familia perdió el control de su poder, ocasionando un gran desastre, varios portales fueron abiertos en todo el mundo, de allí salieron las criaturas que antes fueron obligadas a ocultarse o incluso nueva, después de todo este no es el único mundo que existe. La humanidad fue reducida a su sexta parte luego de aquella tragedia, pero aun así logro salir adelante, la mayoría de las criaturas desaparecieron junto a aquellos portales, pero algunos aún se quedaron ocultos, debido a eso se crearon muchos mitos y leyendo, pero me estoy de desviando de esto, con la humanidad reducida a tan poca cantidad, el idioma se debió volver universal así como el cambio monetario, la humanidad fue unificada en ese aspecto, se desarrolló nuevamente hasta superar lo que había sido antes. La segunda tragedia se dio después, con el ataque sorpresa de criaturas contra la humanidad pero los atacantes se fueron sin buscar nada más que destrucción, sin saberlo esto despertó las antiguas habilidades que poseían antes del primer ataque los humanos, como es el caso los que poseían la sangre de la familia Scarlet, despertaron nuevamente, así como muchos otros de otras familias. La tercera tragedia, se tiene entendido como el choque entre las dos realidades, hasta ese momento los planos dimensionales estaban separados, para que aquellos con habilidades mágicas no pudieran perder el control, por lo tanto se crearon dos realidades, una donde todo es como debería ser, un mundo feliz y apacible, sin guerra, mientras la otra realidad es aquella donde no existe el límite para el poder que despertaron en su interior, algo parecido a este mundo, en todo caso, ya entendiste, la tercera tragedia se ocasiono cuando las realidades chocaron, las personas tuvieron que aprender a controlar sus poderes, pero no contaban con que las criaturas de otras dimensiones vinieran a este mundo, el cual estaba muy destruido. Hubo un tiempo en donde el mundo estuvo en paz, bueno lo más en paz que se pueda decir, ya que el aspecto del mundo era algo ideal, la mezcla entre la naturaleza y las infraestructuras, pero estaban en constante guerra, finalmente eso fue un tema más serio al punto de destruir el mundo tal como lo ves ahora.

    Nadie se atrevió a interrumpirle durante su explicación, yo solo podía concentrarme en asimilar todo lo que me había dicho, toda la información la soltó ahora, aun si no lo dijo rápido y fue su tono pausado, tanta información de un momento a otro te marea, por el momento solo había entendido algo importante, existen muchos mundos, la interacción entre esos es posible y no es raro que hayan diferentes tipos de criaturas.

    – Sobre las legiones – continuo la explicación luego de tomar una breve pausa, lo mire para volver a prestar atención – En total ahora hay seis, la Legión Blanco, su líder es una joven licántropo, la Legión Verde, la líder es un hada de elemento luz, la Legión Naranja, la líder es una maga que controla el elemento de arena, la Legión Roja, su líder es un joven demonio de tipo fuego, la legión Azul, que es controlada por mí, y por último la Legión Amarillo… el líder era un joven mitad gato… pero ahora ha cambiado, ahora el líder es un mago de elemento oscuridad… el nuevo líder de la Legión Amarillo es Krawler Koichi.

    Mi sorpresa fue evidente al escuchar el nombre del joven, Krawler Koichi asiste a nuestro centro de estudios, está en el mismo año que yo, tercero, pero va en un salón distinto, a decir verdad a mí no me cae bien, es alguien cínico y se mete en problemas fácilmente, así como también es alguien solitario, me pregunto si tendrá algún amigo ya que siempre que lo he visto ha sido solo. No fui el único que mostro sorpresa, el resto mostro también su desconcierto ante esta noticia.

    – ¿Koichi? – pregunto sin creer Sachi – Él es el nuevo líder de la Legión Amarillo… no puede ser… a menos que él haya…
    El cuerpo Sachi comenzó a temblar, la noticia parece haberle afectado más de lo que pensaba, me pregunto si ella tenía relación con el antiguo líder.
    – Sachi, por favor cálmate… tú sabes que el requerimiento para tener u nuevo líder sea que el actual muera o que este seda su lugar a otro, también está la opción de una usurpación de este cargo, pero eso es poco probable.
    –…Ese desgraciado nunca le daría su puesto a nadie – en el tono que usaba Sachi se tonaba un odio hacia aquella persona – En cierta parte está bien que lo haya matado, me ahorro muchas molestias, realmente… realmente… por fin hace algo bien Koichi – su tono empezaba a quebrarse a medida que hablaba, me daba pena verla así, ella siempre esta alegre no pensé llegar a verla de esa manera, que hable con odio de alguien o escuchar su tono quebrarse como si estuviera a punto de llorar.
    – Sachi – la voz de Marshall sonaba seria. Ella seguía allí con la mirada gacha sin prestar más atención – Oye, Aoi si el tema va seguir sobre la Legión Amarillo me la llevo de aquí – empezaba a sonar irritado.
    – Era necesario decirlo.
    – Espera – intervino Luis – Es una noticia reciente, así que incluso Aoi debió haberse sorprendido cuando fue a hablar ayer con el líder Amarillo por el ataque que hubo de parte de los miembros de su legión.
    – En efecto, me entere apenas ayer, pedí hablar con el líder Amarillo, quien acepto inmediatamente, al entrar al salón de su base, lo vi allí sentado esperándome, me dio la bienvenida y me informo que él era el nuevo líder, al principio no le creía pero lo que me mostro luego me saco de dudas.
    – ¿Qué te mostro? – no pude evitar preguntar.
    –…Koichi es un contratista…
    – ¿Contratista? – no pude evitar repetir esta palabra con duda.
    – Es muy pronto para contestarte aquello, confórmate con saber que un contratista es aquel que obtiene un gran poder.
    – Esta bien – asentí ligeramente con la cabeza, aun así me hubiera gustado saber más, lo mejor era en otra ocasión, podría llegar a confundirme con tantos datos.
    – Alto, alto, alto – la que hablo fue Daniela – Ya lo entiendo, Koichi fue el que te hizo eso en el brazo, ¿cierto? Es por haber roto el Pacto de Paz.
    – Sí, me pidió una compensación por haber matado a personas de su legión.
    – Por eso dije que yo aceptaría la responsabilidad – se puso seria Daniela.
    – No era necesario, le explique la situación y comprendió, por lo cual solo pidió romper mi brazo derecho, esa fue la mejor opción.
    – ¡Eso no es la mejor opción! – me atreví a levantar la voz – Aoi no entiendo las reglas de ese mundo, pero decir que eso no es nada me molesta.
    – Es porque no es nada, solo me rompió el brazo, pero mi efecto de curación es lo suficientemente rápido para terminar de sanarme esta noche, mañana todo volverá a la normalidad.
    – Esa no es excusa, están hablando y hablando desde ayer sobre un Pacto de Paz, ¿Cuál paz? Siguen matándose entre ustedes aun si existe ese dichoso pacto, eso no me parece paz, ¡Es algo absurdo!
    – Primero cálmate, te estas dejando llevar por tus emociones.
    – Es porque yo sí tengo emociones – me arrepentí apenas dije esto, sé que Aoi es inexpresivo y muchas veces lo tomo como insensible, pero no es alguien sin emociones – Aoi… yo… lo siento… es solo que… me da rabia… deberías preocuparte un poco más por ti.
    – No… está bien, quizás tengas razón, quizás yo no tenga emociones.
    – No, no es verdad, lo siento, no quise decir eso…
    – Marshall – llamo al otro quien solo asintió ligeramente con la cabeza.

    Marshall cargo a Sachi para sacarla de allí, ella aun parecía perdida en su propio mundo, ahora me siento peor, algo malo le está pasando a ella, y yo aquí peleándome por un tema que parece no tener importancia, aun si para mí lo es.

    – Nosotros también nos retiramos – índico Luis conservando su tono tranquilo, Kaze y Daniela se levantaron también.
    – Nos veremos en la escuela – se despidió alegre Daniela. Kaze solo hizo un movimiento con su mano en señal de despedida.
    – Nos veremos – me despedí sin mucho ánimo, ahora solo quedábamos los dos en el departamento – Yo… yo también debería irme ya, tú deberías descansar.
    – Lo tendré en cuenta.
    – No – replique rápido – Tienes que descansar… mañana tienes que ir a estudiar, tengo muchas preguntas aun – dicho esto me fui con paso rápido a mi morada, fui directamente a mi cuarto para tirarme a mi cama, era demasiada información y demasiadas emociones en un día, me gustaría dormir, pero cierta parte de mi tiene miedo a que cuando cierre los ojos, este en aquel mundo absurdo llamando realidad.

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    Notas finales: me c*go de sueño, me voy a dormir, hasta el próximo jueves o3o~~
  6. .
    Notas Iniciales: Pues aquí yo luego de mil años(?) la verdad en navidad fue imposible escribir, mejor dicho terminar el capi, apenas pude terminarlo ayer.... pero no tuve internet D: por lo que recién lo subo ahora ;A; pero creo que es más largo que los otros capis asi que es algo bueno eso :'D

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    Capítulo 5



    Las palabras del otro significaban un gran misterio para mí, ¿Descendiente de la familia Scarlet?, mi apellido es Houjo, incluso el origen de ambos apellidos era diferente.
    – ¿Scarlet? – dije aun dudoso de esto.
    – No es de extrañar que no lo creas, después de todo tu apellido, Houjo, tiene un origen diferente, pero este mundo está lleno de mezclas, obviamente no eres un descendiente de la rama superior de la familia, pero tu poder es el suficiente como para haber llegado aquí.
    – Scarlet… ¿Te refieres a Crime Scarlet?...
    –… ¿Dónde has oído ese nombre?
    –…Hace poco, antes de venir… una criatura me dijo que yo era de Crime Scarlet por mis ojos – señale mis ojos, aunque no sabía de color eran ahora.
    – Eso significa que pudiste activar tu poder, pero aun eres inestable, tus ojos son rosa en este momento, están de su color natural, pero cuando aquella criatura te vio, lo más probable es que tu iris era color rojos escarlata y tu esclerótica color negro, esta característica es señal clara de los que son descendiente de la familia Scarlet.
    – Así es como tenía los ojos mi otro yo… así que yo soy descendiente de la familia Scarlet… ¿Entonces que es Crime Scarlet? ¿Por qué me llamo así y no solo Scarlet?
    – Crime Scarlet si bien está conformado por miembros descendiente de la familia se encarga de otros asuntos… Crime viene de crimen, Crimen Escarlata, nosotros nos encargamos de matar a aquellos que son nuestros enemigos.
    Sus palabras salieron tan naturalmente como si estuviera hablando del clima, no era algo para sorprenderse aquí, pero ya había reconocido a esta persona, su voz ya estaba tan tranquila y neutral como de costumbre, su aura amenazante cambio a su usual aura fría, me daba cierta tristeza que sea esta persona quien me dice todo esto.
    –…Eso suena muy cruel… incluso si tú lo dices Aoi… suena cruel… hablas tan fácilmente de matar a otros… aun si son tus enemigos… tomar la vida de un ser tan fácilmente…no creo que sea lo correcto…

    Él se quitó la capucha, dejando ver su rostro, Aoi seguía con su expresión tan imperturbable de siempre.

    – Aun si te parece cruel o incorrecto, esa es la realidad aquí, después de todo… lo notaste cuando viniste, dijiste que una criatura te identifico como uno de los miembros de Crime Scarlet… ¿Cómo sobreviviste? Debió atacarte eso es seguro.
    –… ¿Eh?... Pero si tú fuiste quien me salvo – comente algo confundido – ¿No recuerdas? Ese ciempiés esquelético estaba a punto de aplastarme con su cola, pero se detuvo al verte allí, le dijiste: Lárgate, así esa criatura se fue rápido, aunque antes de irse te llamo: Líder Azul… por eso vine a este castillo, una niña me encontró mientras vagaba, me reconoció también como uno de Crime Scarlet, al parecer buscaba al líder azul para entregarle un mensaje… pero bueno eso fue una trampa, incluso yo lo supuse… aunque ella está muerta… Kazehaya la mato justo en el momento que revelo la niña su naturaleza malvada…

    Mire a uno de los encapuchados, hasta ahora solo había reconocido a cuatro personas, Aoi, Kazehaya, Sachi y Marshall, aunque aún me falta descubrir quiénes son los otros dos.

    –…Efectivamente yo la mate… detecte su presencia como la de un enemigo – explico Kazehaya con un tono neutral, tranquilo y suave – No te mate a ti… porque como te dije, te detecte como un miembro más de Crime Scarlet… lo siento, te ataque cuando no debía.
    –…No en parte fue mi culpa también, solo estabas cumpliendo con tu… con lo que se te fue ordenado, debo suponer, matar a todos sus enemigos…
    No supe cómo estas palabras salieron de mi boca, aun si he visto como es este mundo, se me hace tan difícil aun creer que la única solución para vivir aquí sea matar.
    – Así que eso fue lo que paso… pero debo decir que estas mal en un punto… Yo no fui a rescatarte, supe que estabas aquí porque Kaze me lo dijo, fue estúpido dar tu nombre pero por esta vez ha servido.
    Las palabras de Aoi me causaron confusión, estaba seguro que era él quien me rescato, no pudo haber sido otra persona – Pero yo te vi…
    – No dudo de tu palabra, pero el hecho es que yo no estaba allí cuando paso eso… Déjame hacerte una pregunta, ¿Qué fue lo que pensaste antes de que yo apareciera?

    Al escuchar aquella pregunta escondí mis manos detrás de la espalda, jugando algo nervioso con mis dedos, no podía decirle que estaba pensando en verlo, eso sería vergonzoso y patético, especialmente porque habían más personas, me daba vergüenza decirlo frente a ellos.

    – Contesta – pidió Aoi aun manteniéndose tranquilo.
    –… ¿No podemos hablar en privado?... Es decir aun no sé quiénes son ellos dos – dije mirando a los que no reconocía – Además seguro por lo que digo Sachi y Marshall se burlaran…
    – Uhh uhh esto me suena a romance en tiempos de desesperación – sonaba alegre y entusiasmada Sachi.
    – Si es amor gay como dice la gata idiota yo me voy – dijo simple Marshall. Aoi dio una mirada rápida hacia todos ellos – Ahh… pero tú te vienes conmigo que si no me aburro.
    Marshall saco a Sachi de allí jalándole de su brazo, casi arrastrándola para poder salir, pues ella no quería irse, parecía que hacia un berrinche para poder quedarse, pero esto no servía.
    – Vamos – sonó la voz de uno de los encapuchados, del chico, este se dirigía a Kaze mientras acariciaba su cabello, Kaze asintió, dejando que el otro tome su mano para irse junto a él.
    – Buena suerte – me dijo la otra persona encapuchada, la chica, quien paso cerca de mí antes de salir de allí.
    Al final solo quedamos Aoi y yo en el gran salón, el cual lucía más grande y algo aterrador ahora sin la presencia del resto.
    – Ahora puedes responder, ¿Qué era lo que pensabas?
    –… En ti – susurre desviando un poco la mirada, me sentía nervioso y no en vano, no sé cuál podría ser su reacción.
    – ¿En mí? – incluso él no parecía creerlo, Aoi arqueo una ceja, quizás en señal de duda.
    – Sí… en ti… pensé que en quería verte, recordé la primera vez que me salvaste… entonces pensé… Quiero verlo… aunque sentía que me dirías idiota por pensar algo así – finalmente termine por decirle la verdad sin rodeos, sin saber porque jugaba de manera nerviosa con mis dedos.
    – Eres un idiota.
    – Allí esta, sabía que me dirías idiota – suspire.
    – No digo que fueras un idiota por pensar esas cosas – explico con su usual tono frio.
    – ¿Entonces por qué me llamas idiota? – pregunte sin entender.
    – Es porque no tenías idea de tu poder, tienes suerte de que ese sea, de lo contrario estarías muerte, eres un imprudente e idiota.
    – ¿Mi poder? – trate de centrar el tema en esto, sabía que era un imprudente y un idiota.
    – Creo que está claro, posees la habilidad de crear ilusiones, lo que no estoy seguro es si es una habilidad óptica o si es una habilidad mental.
    –…No… no entiendo mucho…
    – Dijiste que pensaste en mí, en querer que te salvara, y aparecí justo como durante la primera vez que te atacaron, esa imagen de mí fue una ilusión creada por ti, pudo haber sido una ilusión de tipo mental, esto consiste en meterte en los pensamientos del otro para crear la ilusión, también pudo haber sido un engaño óptico, esto se produce al ver al oponente a los ojos.
    La forma en la que lo explico fue simple, así que pude entenderle, me puse a recordar un poco que fue exactamente lo que paso – Pero… yo no vi a los ojos de la criatura… estaba demasiado ocupado con mis pensamientos.
    – En ese caso tienes una habilidad mental, una habilidad para crear ilusiones con tu mente.
    –…Suena genial cuando tú lo dices…
    – Es un poder bastante conveniente, dependiendo de cómo se desarrolle puede hacer mucho más que solo crear ilusiones.
    – Más que crear ilusiones… ¿Te refieres a esa cosa de la telepatía?, es decir eso también es producto de la mente, ¿Cierto?
    – Es probable, depende de cómo te orientes puede a llegar a tener varias habilidades, ya que tu magia es de tipo mental, puedes llegar a hacer ilusiones, hablar con el pensamiento con otras personas, mover objetos con el pensamiento, imponer tus órdenes a otra persona controlando su mente… Creo que también se podría utilizar para borrar recuerdos.
    – Son muchas habilidades…
    – Creo que incluso pueden ser más, no puedo decirlas todas, ya que solo esas son las que sé, después de todo no es mi tipo de magia.
    – No es tu tipo de magia… pero aun así sabes mucho.
    – La magia de tipo mental no es muy común… pero que la tengas tú… es un poco decepcionante…
    –…Tratare de no sentirme ofendido – dije con cierta molestia – ¿Por qué es un poco decepcionante? – pregunte cruzándome de brazos.
    – Porque eres un idiota.
    – ¡Esa no es una respuesta!
    – Aunque de cierta manera es una ventaja ya que eres también un desentiende de la familia Scarlet.
    – Por favor decídete si soy una decepción o una ventaja – pedí con irritación, quizás no tenga experiencia en todo este asunto, quizás ni siquiera sé lo que sucede, no sé nada de la verdad, pero aun así me gustaría que dejara de tratar como a un idiota, aunque quizás lo sea al pensar que Aoi me trataría diferente solo por tener un poder poco común.
    – Si lo veo desde el cargo que ocupo, eres una ventaja.
    – ¿El cargo que ocupas?... ¿El líder azul?...
    – Exactamente… Además de eso soy el actual líder de Crime Scarlet.
    – Lo que te convierte básicamente en quien tiene las responsabilidades – susurre con cierta tristeza, no me gusta saber que Aoi está involucrado de manera tan seria con este lugar.
    – Exacto, sería una ventaja desarrollar tu poder para poder usarlo… Pero si tengo que hablar como la persona que soy, si tengo que hablar como Fujimoto Aoi, diría que no quisiera que tuvieras ese poder, que regresaras y te olvidaras de todo.
    –… ¿Por qué? – susurre viéndolo con sorpresa – Yo te podría ser de ayuda – dije sin darme cuenta. Es cierto, si llego a desarrollar mi poder podría llegar a ser una gran ventaja para él, pero si dice cosas como esas, cosas como que si tuviera que elegir como persona elegiría no involucrarme, me hacen sentir extraño, ¿está tratando de protegerme? No puedo entenderlo del todo.
    – Es cierto, podrías ser de gran ayuda, pero no quiero que te involucres, no la verdad de este mundo, no sabes el precio que tenemos que pagar aquellos somos conscientes de la verdad.

    No conozco este mundo, no sé la verdad, no sé lo que sufren ellos. Asesinar o ser asesinado, está la regla que hasta ahora he visto y escuchado, es demasiado cruel, pero incluso yo he experimentado y darme cuenta que esta es una de las realidades de las cuales no estaba consiente; matar está mal, esa es la realidad del mundo donde estuve viviendo hasta hace poco, aquellos que mataban eran criminales, personas malas, que solo merecen castigo por sus acciones, pero aquí es algo tan común, que llega a ser aterrador.

    El castillo empezó a temblar, con movimientos bruscos y constantes, parecía que la estructura se iba a caer en cualquier momento, incluso me caí al piso por las fuertes sacudidas.

    – Que molesto – mire hacia donde estaba Aoi, él estaba tranquilo, como si esto fuera algo común para él – Levantarte – estiro su mano hacia mí, la tome aun temblando, no sabía si era miedo o si era por el movimiento, pero deje de sentir las sacudidas cuando nuestras manos se tocaron, su agarre firme me daba confianza, me hacía protegido.
    – ¿Qué está pasando? – me atreví a preguntar, estaba de pie, aun sosteniendo la mano de Aoi.
    – Estamos bajo ataque, nadie es tan estúpido como atacar este lugar con un ataque directo.
    – Pero está pasando…
    – Lo más probable es que sea ese ser, el ciempiés.
    – ¿Acaso es tan fuerte como para provocar esto? – no podía creer que ese ser tuviera tan poder.
    – No, seguramente trajo refuerzo… debe tener un puesto moderadamente alto en alguna otra legión.
    –…Puesto en otra legión – dije empezando a divagar, como si aquellas palabras quisieran evocar un recuerdo – ¡Ya sé! Esa cosa dijo antes que era uno de los generales de la Legión Amarilla.
    – Pues entonces en la Legión Amarilla están peor de lo que creía para tener ese tipo de generales, quizás debería ir yo mismo, puesto que antes fue mi imagen la que lo hizo temblar y huir.
    – Pero si dices que trajo refuerzos… Es demasiado peligroso que vayas solo – me opuse con firmeza, apreté su mano un poco más, ahora con ambas manos.

    Su mirada azul claro se clavó en la mía, aquella mirada no transmitía miedo ni autoridad, era un sentimiento más agradable, un sentimiento de confianza, que confiara en él, un sentimiento de protección, como si pudiera a él entregarle mi vida sin dudar, aquella mirada azul claro me tenía hechizado, por un momento me olvide de todo, solo quería seguir viéndole.

    – Creo que interrumpo – se escuchó una voz alegre que me saco de aquel trance, era la mujer encapuchada.
    – Mi indicación fue de que se fueran – dijo con simpleza Aoi, ahora mirando a la joven.
    – Lo sé, lo sé, pero eso es mientras hablabas con él, ahora estamos bajo ataque – explico aun conservando su tono alegre.
    – ¿Acaso quieres ser tu quien se encargue esta vez?
    – Solo si me das el permiso para hacerlo.
    – En ese caso puedes hacerte cargo, no es necesario que tomes testigos, ya sabemos a que legión pertenecen.
    – Como ordene, líder~

    La joven salió, seguramente para dirigirse afuera, no creo que ella vaya a encargarse de todos los seres sola, aunque supongo que podría hacerlo si fuera un pequeño grupo; me acerque a la ventana para ver a los seres que causaban aquellas sacudidas al castillo, muy por el contrario a lo que esperaba, mi reacción al ver al grupo fue solo quedarme paralizado, con la vista fija en las criaturas de distintas especies, había muchos tipos, de los que podría distinguir eran Elfos, Hadas, Ninfas, Centauros, Minotauros, Gárgolas, también habían seres que tenían orejas y cola de distintos animales, como son: de gato, de perro, de zorro, el resto de criaturas no pude reconocerlas por mi poco conocimiento.

    – En total hay cincuenta – la voz de Aoi me hizo regresar a la realidad.
    – Cin-cincuenta… Esa chica… Esa chica va pelear acompañada de un grupo de la legión azul… ¿Cierto?...
    – No es necesario.
    – ¡Pero son cincuenta! Nadie sería capaz de pelear solo contra tantos.
    – Obviamente no la dejaría ir en contra de un grupo tan numeroso, pero estos que vez de aquí, son de un bajo nivel, será fácil para ella.
    – ¿Bajo nivel? ¡Están haciendo retumbar el castillo!
    – Tranquilízate, te estas exaltando mucho.
    – ¡Estoy tranquilo! – fue allí cuando me di cuenta que no lo estaba, inhale y exhale varias veces para poder calmarme – Lo siento…
    – No tienes porque, es algo normal reaccionar así.
    – Es que… decir que son de bajo nivel cuando el castillo esta así…
    – Es por eso mismo que dije que son de bajo nivel, estamos en el primer piso, solo pueden hacerlo temblar, si fueran más fuertes ya hubieran entrado, además este castillo fue construido durante el régimen del primer Líder Azul, está muy bien construido.
    –…Pero mandar a una sola persona…puede ser arriesgado, podrían hacer un ataque en conjunto o tener algún plan o estrategia.
    – No lo tienen.
    – ¿Por qué estás tan seguro?
    – Ese grupo está muy mal organizado, se puede ver a simple vista, además ha pasado poco tiempo desde que se alejó de ti para reunir ese grupo de gente, lo más seguro es que reunió a seres fáciles de convencer, creyó que un ataque en grupo serviría aun si no tenían una estrategia planeada.

    Lo que dijo Aoi tenía mucho sentido, pero aun así me sentía inseguro sobre esto, era un grupo numeroso, no creía que ella sola podría contra todos ellos.

    Me asome con cierto nerviosismo a la ventana, viendo a través de esta, la joven había salido, estaba parada sin compañía alguna mientras el grupo avanzaba cada vez más, parecía como si ella esperara a que se acercaran para hacer algo. Un muro hecho de fuego se levantó entre la joven y el grupo de criaturas, quemando en el proceso a los que iban en el frente, esto hizo retroceder a los demás, alcance a ver como algunos huyeron de allí.

    – ¡Es solo uno! ¡Podemos contra él! – se escuchó la voz firme del ciempiés.
    – ¡Como te atreves! – grito la joven – ¡Soy una chica!
    – ¡Una hembra! ¡No es nada contra nosotros! – declaro una de las voces del grupo, no supe de quien exactamente por la multitud.

    Un par de seres aparecieron chorros de agua, apuntando directamente al muro de fuego, lograron una abertura de este, no era muy grande como para que pasara el ciempiés, pero las criaturas pequeñas podían pasar sin problema.

    – No son tan tontos como creí – se escuchó como la joven se burlaba, sus manos se dirigieron a su capucha, la cual se bajó, dejando ver su larga cabellera marrón claro; verla desde atrás me dio una idea sobre quien se trataba.
    – ¡Ataquen! – se escuchó el grito de una de las criaturas, varias de ellas lanzaron diferentes ataques, algunos levantaban pedazos de tierra o roca para tirarlo, lanzaban fuego de sus manos o boca, otros usaban armas de larga distancia, pude llegar a ver una ballesta y un arco y flechas, el grupo que abrió camino usaron nuevamente los chorros de agua, el resto utilizaba armas de corta distancia, como espadas, dagas, cuchillas; algo curioso que notaba era que no utilizaban armas de fuego.

    La joven saco dos espadas de las fundas que estaban oculta bajo su capa, esquivo todos los ataques que le lanzaron sin dificultad alguna con movimientos llenos de gracia, su cabellera marrón claro bailaba en el viento, se podía aprecia su figura delgada y bien proporcionada, parecía danzar en medio del campo de batalla, a paso veloz pero fino se acercó hacia las criaturas, su rostro mostraba serenidad, una ligera sonrisa surcaba sus labios, su mirada color rojo escarlata transmitía cierta diversión y melancolía mezcladas, mientras sus manos manipulaban las espadas que degollaban a las criaturas que no podían hacer nada para evitar su muerte.

    – Maldita – gruño el ciempiés, que era el único que quedaba en medio de los cadáveres de sus compañeros caídos, ninguno se salvó, incluso aquellos que intentaron huir fueron asesinados.
    – Tú has venido aquí a perturbar a la Legión Azul, estas violando la regla del Pacto de Paz que fue firmado entre todas las legiones, le será informado al líder de la legión a la que perteneces sobre tu falta para que él o ella tomen medidas correspondientes al caso… pero… ya que incluso has tenido la osadía de reunir un grupo débil con el cual querías derrotarnos, te matare junto a tus compañeros – anuncio ella con voz llena de firmeza y severidad.
    – ¡Espera! Matar a alguien de otra legión esta contra el Pacto de Paz, estas rompiendo las reglas, serás castigada – amenazo el ciempiés, se le podía notar su nerviosismos y miedo a morir.
    – Estoy preparada para asumir las consecuencias – a pesar de las palabras del otro, ella permaneció firme.
    – ¡Te matarán también!
    – No lo harán – Aoi fue quien hablo, estaba parado junto a mí – No lo harán, porque fui yo quien dio la orden para que mataran al grupo, cualquier problema que quiera discutir tu líder, lo tendrá que discutir conmigo – sentencio con una voz llena de firmeza y frialdad – Tú has venido aquí con la ilusa idea de derrotar a la Legión Azul, has perturbado la paz de otra legión, eso es una grave falta contra el Pacto de Paz, no hay excepción a esta regla, no importa quien seas, por lo tanto el castigo por tal pecado que has cometido tú, es la muerte.
    Antes de que el ciempiés pudiera refutar fue congelado completamente, no estoy seguro de quien fue, pero si tuviera que adivinar, diría que fue Aoi; la figura de hielo se rompió segundos después en millones de pequeñas partículas de escarcha, dando fin a la vida de ese ser.

    La joven regreso al salón, nuestras miradas se cruzaron, ella sonrió alegre y se encogió de hombros.

    – Hola – saludo con voz tranquila, sus ojos aún seguían de color escarlata, aunque como los conocía, eran color marrón claro.
    – Hola, Daniela – salude con una ligera sonrisa. La ropa de la otra, aun si era color negro, se podía observar que estaba manchada de la sangre de aquellos seres, su sangre a pesar de lo que hubiera imaginado es color rojo.
    – Kaito – Aoi me llamo, por lo cual me voltee a verlo – Es hora de que regreses, luego hablaremos sobre el tema – indico con voz tranquila.
    – Esta bien – asentí, incluso yo quería irme, me empezaba a sentir extraño luego de ver la escena de matanza, pero no era porque me daba asco o miedo, era más bien que esta me parecía indiferente lo que me hacía sentir extraño. Recordé un detalle importante – Aoi – llame al otro con voz tímida – Olvide algo… ¿Cómo regreso?

    Ambos me vieron en silencio durante unos segundos, seguramente parezco tonto preguntando como regreso, cuando fui yo quien vino aquí; la risa de Daniela se escuchó con fuerza, mientras me señalaba.

    – No sabes cómo volver – decía aun riéndose – No puedo creerlo, ¿En serio nos vemos todos así de tontos la primera vez? – pregunto con diversión a Aoi.
    – Sí… pero él se ve más tonto – respondió aun con tono tranquilo, ella solo se rio aún más al escuchar su respuesta, mis mejillas se sentían un poco calientes por la situación, seguro estaba sonrojado.
    – Entendí para ti soy un tonto, pero podrías evitar esos comentarios, al menos ahora – pedí con cierta molestia.
    – No quiero – fue su simple respuesta, típico de él, solo hace lo que quiere – Daniela, por favor llévale de vuelta, yo iré a hablar con el líder de la Legión Amarillo.
    – No te preocupes, yo me hago cargo – asintió alegre mientras hacia un saludo estilo militar – Vamos Kaito, es mejor regresar ahora… Por cierto Aoi, ¿está bien si le damos una habitación?
    – Sí, desde ahora estará bajo el cargo de la Legión Azul – informo, su mirada color azul claro me miraba fijamente, esto me puso nervioso por lo que desvié la mirada, solo alcance a escuchar sus pasos cuando se fue.
    – Daniela… ¿A qué te refieres con darme una habitación? – pregunte con cierta curiosidad.
    – Es cierto tú no sabes nada… pero bueno, vayamos primero a escogerte una habitación, en el otro lado te explicare todo.

    Ella empezó a caminar hacia las escaleras, yo solo la seguí sin decir otra palabra, nos detuvimos frente a la puerta, ella susurro algo que no logre comprender, abrió la puerta para poder bajar por las escaleras. Ambos bajamos a la planta inferior, pensé que sería un sótano pero en lugar de eso, era un largo corredor con varias puertas.

    – Esta es la mía – señalo alegre una de las tantas puertas, no encontraba diferencia con las demás – La decoré – me hizo notar el pequeño detalle de una pegatina en forma de estrella color dorado en el picaporte.
    – Ohh… es muy linda – sonreí alegre – Entonces a esto se refería con una habitación…
    – Sí, todos los de Crime Scarlet tenemos una habitación aquí – explico alegre – La allá es la de Kaze – señalo otra puerta, tampoco encontré una diferencia con la de las demás – La de al lado es la de… Bueno, de la persona que aún no reconoces.
    – ¿Luis? – intente adivinar.
    – Bravo, bravo – dio pequeños aplausos alegre – ¿Cómo lo supiste?
    – Tú estás aquí, así que pensé que él también – me encogí de hombros para ya no darle importancia al tema, a decir verdad lo que le dije no es del todo cierto, primero pensé que era Luis por como actuó con Kaze en el gran salón, además el tono de su voz se me hizo familiar, luego el hecho de que Daniela estuviera aquí me ayudo a comprobar que era él.
    – Que listo. Allí está la habitación de Sachi, frente a ella la de Marshall, la de Aoi es la del fondo… Así que elige la tuya.
    –…Son tantas que no sé cuál elegir – me encogí de hombros.
    – No te preocupes, todas son iguales, si quieres luego ya personalizas la tuya – explico alegre.
    – Esta bien – fue lo único que respondí, dirigí mi mirada a las puertas – Esa – señale una que estaba a dos puertas a la derecha de la que dijo que era la de Aoi.
    – Bien, entonces entremos.

    Me tomo de la muñeca para llevarme hasta allí, hizo que pusiera mi mano en la perilla y la girara, al abrir la puerta vi que era una habitación sencilla pero iba de acuerdo a la decoración antigua que acompañaba el castillo.

    – Es más elegante de lo que esperaba – comente con cierta diversión.
    – Pues acostúmbrate, ahora es tuya – me dio una llave dorada – No la pierdas, será problemático si lo haces – soltó un suspiro.
    – La cuidare – asentí tranquilo – Por cierto… ¿Qué tiene que ver tener una habitación con volver?
    – Ya te dije que te explicaría todo en el otro lado, así que ve a dormir – indico señalando la cama.
    – ¿Por qué tengo que dormir?
    – Solo hazlo – sonrió alegre – Cuando despiertes estarás en el otro lado.
    –…Entonces ese lugar es…
    – Solo duerme, yo iré a mi habitación a dormir – indico alegre para salir de la habitación, seguro iba a la suya propia, pero aquello que dijo sobre dormir me causaba inquietud, podría ser que todo el mundo que conocí sea tan solo un sueño, de ser así despertar significaría estar en este horrible mundo donde es necesario matar para sobrevivir, ese mundo tan solo sería un dulce sueño que nos mantiene alejados de la realidad. Me senté sobre la cama, aun con la teoría del sueño en mi cabeza, me recosté sobre la cama mientras miraba al techo, la cama era realmente suave, cerré los ojos para poder dormir.

    El sonido de la alarma me despertó, perezosamente mi mano se movió de manera mecánica buscando el origen del ruido para apagarlo, tantee un par de veces antes de aplastar el botón para detener la alarma. Abrí un poco mis ojos, me sentía muy cansado, al darme cuenta un poco mejor de donde estaba, me di cuenta de que era mi cuarto, me levante de la cama con rapidez, causando que casi me caiga, fui directo hacia la puerta para abrirla, era el mismo corredor de siempre, estaba de vuelta, de nuevo había regresado a este posible sueño que hasta ahora pensaba era real.


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    Notas Finales: Pos eso seria todo, hasta el próximo jueves espero ;A;
  7. .
    Si ya lo leí y deje comentario XD
    Es comprensible la falta de tiempo D:

    Pues poner un segundo capi es facil, solo debes ponerlo como respuesta(?) no sé si me dejo entender, es decir como nueva respuesta, ya que todo esta dentro de un solo tema
  8. .
    Este one shot me ha gustado mucho, es bastante largo y se puede apreciar el punto de vista de ambas partes.
    Lo unico que podria decir que hay que corregir son pequeños errores de ortagrafía más que nada porque te comes en alguans palabras una letra (ñam ñam mi comer letras(?))
    El rumbo que ha tomado me parecio muy bueno C: despues de todo va muy bien con el titulo xD
    Un amor (ah re que es obsesión) sadomasoquista desde mi punto de vista es muy dificil escribir, ya que es un relación en donde se disfruta este tipo de maltratos o3oU Por eso me ha gustado como los describes tu, es tan claro y facil de interpretar, las imagenes vienen a mi mente owo!!
    Lo que más me gusto fue la parte final!! fue como un cambio, aunque debo decir que de cierta forma de lo esperaba, hay muchos sentimientos encontrados y todo se expresa muy bien!!
    Sin otra cosa más que decir~~ sigue asi C:
  9. .
    Te entiendo cuando es un momento de inspiración es mágico(?) ~~ - hace arcoiris con las manos - lo malo es que vienen cuando no deben o duran muy poco (la inspiración me llego ayer a las 2:30 am)
    Quizas puedas subir aquí tus otros escritos, claro siempre y cuando sean yaoi, porque estamos en un foro yaoi (fucklogic)
    En todo caso si llegas a subir un one shot o un fic seria interesante leerlo, me avisas ;9 ~~
  10. .
    Me ha gustado mucho, la forma de escribir, la forma de narrar, muy claro, expresas lo que siente, aquella soledad que solo el tiene, y que nadie más que él puede comprender, ojala fuera más largo ;w; aunque asi corto me ha gustado mucho, espero poder leer más de tus escritos C:
  11. .
    @†misa-chan†: Gracias :'D adsadas si quizás una semana esperar mucho, pero también tengo otro fic (del cual no hablare pues es hetero/comedia), además que estoy en exámenes finales (fuckvida) pero ya tenía este capi hecho C: asi que no les afecta a ustedes XD

    @Paulina Gonzalez: Aquí esta la conti~~~ owo espero te guste

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    Capítulo 4:



    Aun no podía creer el lugar en donde estaba, pero extrañamente no estaba asustado ni alterado, era como si a supiera de la existencia de este lugar, como si ya lo hubiera visto antes.

    Decidí empezar a caminar por el lugar, teniendo cuidado de no tropezar con los escombros, en el camino vi un cadáver, me cubrí la boca por el asco, el cuerpo aún seguía en descomposición, estaba partido completamente a la mitad, pero era un corte vertical, era un corte horizontal, por lo cual podía ver todos sus órganos, habían ratas pequeñas en su interior, lo estaban devorando. Corrí luego de haber visto aquella escena, inhale y exhale varias veces para tranquilizarme y evitar vomitar, aquella escena me provoco asco.

    – Debo tranquilizarme, no será lo peor que vea aquí, eso es seguro – me dije a mi mismo, recordé las dos veces en las que vi a aquellas criaturas – Este lugar es demasiado peligroso – susurre.
    – ¡Un humano! – escuche una voz grave provenir de algún lado.
    La tierra empezó a removerse con fuerza, me moví rápido del lugar de donde estaba, ya que este parecía ser el centro del movimiento. Caí torpemente apenas avance unos metros. La tierra se había levantado, mostrando un ciempiés enorme que salía de debajo de la tierra.
    – Un… ciempiés… – susurre para mí mismo, aun si tenía esta apariencia, era un esqueleto, sus huesos color gris daban una apariencia muy gastada y podrida, aun así brillaban intensamente sus ojos color negro, los cuales me miraban con intensidad y hambre.
    – ¡Que suerte tengo! ¡Un humano! ¡Justo tenía hambre!

    Me levante y empecé a correr, la tierra se movía ahora con más fuerza, pero no podía permitirme caer, si lo hacía era mi muerte segura.

    – ¡Aunque sería divertido seguir jugando contigo! ¡Tengo mucha hambre!

    Su cola rodeo mi cuerpo, impidiéndome moverme, aun así intentaba librarme, pero solo me apretaba más, cortando mi piel por la fricción.

    – ¡Suéltame! – grite aun moviéndome.
    – Estúpido humano, no importa cuánto te muevas, no lograras librarte.
    – ¡Aun así no puedo dejarme morir aquí por un estúpido esqueleto!

    En ese momento recordé cuando debía escoger entre esas dos puertas, si hubiera escogido la que en ese momento me mostro mi otro yo, no pasaría esto, pero, yo sabía que había algo más llamándome, algo más que morir a manos de un esqueleto, algo que no puedo explicar.

    – Cuida tu lenguaje, yo soy uno de los generales de la Legión Amarillo.
    – No me importa quien seas – susurre – No puedo dejar que me mates, ¡No vine hasta aquí por eso!

    Empezaba a sentir mi cuerpo caliente, como si estuviera en llamas.

    – Iris… escarlata… esclerótica color negro…. tú eres… Crime Scarlet…

    Me arrojo contra los escombros apenas dijo esto, el impacto fue doloroso, creo que me rompí mi brazo derecho.

    – No sé de qué estás hablando, pero no dejare que me mates – estaba decidido, aun si no podía hacer mucho, no me permitiría morir en este lugar.

    Vi la cola del ser, la cual estaba en llamas, esa era la zona la cual me rodeaba antes, no entiendo como paso eso.

    – Crime Scarlet… Crime Scarlet… ¡Crime Scarlet! ¡Si te mato seguro me elogiaran! ¡Mi suerte no pudo ser mejor! No hay duda, tú perteneces a Crime Scarlet.

    El ser se abalanzo hacia donde estaba, tuve que correr rápido para que el impacto no me diera directamente, aun así salí disparado hacia unos escombros.

    – Mierda – masculle, me levante como pude aun sí todo mi cuerpo me dolía, sentía que volvía a quemar, nuevamente como si estuviera en llamas. Mire mi cuerpo, dándome con la sorpresa de que si estaba cubierto de llamas, pero estas no quemaban ni dolían.
    – No caeré en el mismo truco de nuevo – advirtió con voz molesta – Si te entierro vivo tus llamas no servirán de nada – con su cola golpeo contra el suelo, levantando la tierra, rocas y escombros.

    Corrí nuevamente para que no me alcanzara el impacto de ese ataque, podía sentir mi cuerpo más ligero de alguna manera. Esa cosa era muy persistente, ya me estaba cansando, pronto me quedaría sin energía para escapar, debía hacer algo antes de que eso pase.

    – Aoi – susurre, recordé la primera vez que estuve cerca de la muerte, aquella noche Aoi fue quien vino a salvarme, pero esta vez no lo haría, estaba solo, aun así, quiero verlo, pero imagino que solo diría que soy un idiota – Quiero verlo – susurre.
    – Es tu fin – su cola iba a impactar contra mí, aplastándome pero se detuvo – Es… imposible…
    Mire con sorpresa a la persona que estaba frente a mí, era Aoi, tenía el mismo atuendo que uso el día que me salvo.
    – Imposible… el líder Azul…

    La criatura parecía aún más sorprendida que yo, aunque lo que me llamo la atención fue como llamo a Aoi, El líder Azul.

    La criatura no sé movió, como si el miedo se hubiera apoderado de su cuerpo, Aoi tampoco de movía, me pregunto si dirá algo.

    – Lárgate – su voz sonó severa, su mirada era fría, su expresión ya no era la misma tranquila, ahora parecía enojado.
    La criatura no necesito escuchar nada más para irse de allí, arrastrándose a toda velocidad lejos de nosotros dos.
    – Aoi…

    Cuando me di cuenta Aoi ya no estaba, no entiendo a donde pudo haber ido en un momento así, quizás estaba molesto conmigo por venir.

    Seguí caminando, en dirección contraria a donde se fue la criatura, esperando encontrar a Aoi nuevamente, quizás también podría encontrar a Sachi o Marshall.

    – ¿Un humano? – escuche una voz aguda, sonaba asustada.
    – ¿Quién está allí? – pregunte intentando distinguir de dónde provenía aquella voz.
    – Un… humano – se escuchó de nuevo aquella voz. Una niña pequeña con ropa andrajosa y de aspecto sucio se asomó entre los escombros – Tú… ¿Tú también estas perdido? – sonaba asustada.
    –…Posiblemente… – conteste simple. Quizás me estaba volviendo paranoico, quizás no, pero después de lo sucedido esta aparentemente inocente niña, no me resulta convincente.
    – Yo también estoy perdida… tengo que ir allí – señalo con su temblorosa mano hacia un mansión – Es allí donde vive el líder azul…
    – ¿Líder azul? – pregunte con cierta intriga. Así fue como el ciempiés llamo a Aoi.
    –… ¿no sabes quién es?...
    – No, no es eso – tenía que tener cuidado con las cosas que decía, ella podía ser peligrosa aun si no lo parecía – Me refería al porque quieres hablar con el líder azul.
    – Tengo un importante mensaje para él – sus manos temblorosas sostenían una carta
    – Entiendo… entonces te acompañare, también tengo un mensaje para el líder Azul – explique con tono tranquilo. Por ahora la única manera de encontrar a Aoi era seguir con esta niña.

    La niña me miro con curiosidad e intriga, sonrió ligeramente, una pequeña sonrisa alegre y llena de esperanza, me pregunto porque sonreía así.

    – ¡Sí! Tú eres de Crime Scarlet… que bueno, encontré a uno – sonaba aliviada, mientras apretaba la carta contra su pecho.
    Crime Scarlet, esa era otra de las palabras mencionadas por el ciempiés, la vuelvo a escuchar ahora, si la memoria no me falla, la noche que me ataco aquel monstruo, esa cosa también llamo así a Aoi.
    – Sera mejor apresurarnos a llegar allí, puede que algo nos ataque – comente tranquilo. No quería tener que enfrentar a otra cosa igual o quizás aún peor, además
    – Esta bien, si aparece alguna criatura tú me protegerás, los de Crime Scarlet son muy fuerte – sonrió alegre, como si yo fuera su esperanza, que niña tan inocente, me pregunto cómo reaccionaría al saber que soy un simple humano que acaba de llegar, aunque por lo que acaba de pasar con el ciempiés ni yo mismo creo ser un humano o no totalmente.

    Seguimos avanzando por el camino desolado, comenzaba a acostumbrarme a ver el paisaje muerto, los cuerpos inertes, las extremidades regadas, puedo decir con seguridad que no eran solo de humano, veía cuernos, colas, patas, alas, de diferentes seres, algunos con similitud animal otro no los lograba reconocer.

    No sé por cuánto tiempo estuvimos caminando, pero puedo asegurar que fue por más de algunas horas, después de todo el castillo estaba muy lejos de donde estábamos en un principio.

    – Ya casi llegamos – sonrió alegre la niña, parecía algo ansiosa.
    – Me da algo de curiosidad, porque mandar a una niña si el mensaje es tan importante como dices – decidí saber si esta inocente niña es lo que decía ser.
    – Eso… veras… creo que al final… pensé que… podría hacerlo… engañar a Crime Scarlet… pero, resulta que no son tan estúpidos como creía – una macabra sonrisa surco su rostro.

    Antes de que pudiera reacción escuche algo –…bang… – resonó una voz suave tranquila, aquella voz daba la impresión de una suave caricia del viento.

    La niña cayó al suelo, se podía observar cómo se formaba un charco de sangre a su alrededor, al fijarme mejor tenía un agujero en su cabeza, como si algo muy afilado le hubiera atravesado el cráneo, pero no había ningún objeto cerca de ella o incrustado en su cráneo.

    – Mal, mal – se volvió a escuchar aquella voz suave – No debes confiar tan fácilmente, eres de Crime Scarlet… pero tu energía se siente muy débil.
    – Es porque no soy de Crime Scarlet, no sé de qué están hablando ustedes.
    – ¿No lo eres? Tu energía es muy similar a la mía, pero quizás me equivoque, en ese caso, debo decirte adiós.

    Sentí venir hacia mí una inexplicable fuerza invisible, me hice a un lado para esquivarla pero esta rozo mi mejilla logrando un corte que empezó a sangrar por suerte solo fue un corte pequeño. Este debió ser el ataque que sufrió la niña, me toque la mejilla la cual me dolía y ardía mucho, pero el dolor era soportable.

    – Falle, no puedo fallar, no puedo fallar.

    Los ataques se incrementaron, no sé cómo pude pero logre esquivarlos todos, no podía verlos pero si sentirlos, tampoco tenían sonido, a menos que estuvieran demasiado cerca, se escuchaba con el silbido del viento.

    – ¿Quién eres? – volvió a preguntar la voz. No sabía si responder, ya que me trataba de matar con sus ataques, aunque algo en su voz se me hacía conocido.
    – Mi nombre es Houjo Kaito – respondí con firmeza, aun si tenía dudas de decirle mi nombre.
    – ¿Houjo…Kaito….?... ¡Kaito! – aquella persona sonaba muy sorprendida, al darme cuenta mejor ahora pude reconocer a quien le pertenecía la voz.
    – Esa voz es de… – susurre.

    El polvo se levantó en gran cantidad, me cubrí los ojos con los brazos para intentar ver si algo venia. El sonido del rechinar de las puertas se escuchó, vi hacia el castillo, sus enormes puertas se abrían de par en par, como invitándome a pasar.
    Parpadee un par de veces para quitarme el polvo que había entrado en mis ojos. Era verdad las puertas del castillo estaban abierta, sin decir nada más empecé a caminar hacia allí.

    Apenas puse un pie dentro del castillo, las enormes puertas se cerraron de golpe detrás de mí, a pesar de esto el sonido con que lo hicieron fue suave.

    Empecé a caminar con cuidado dentro de aquel castillo, solo la luz natural iluminaba dentro a través de las ventanas, me asome a una observando un hecho curioso del cual no me había percatado hasta ahora, en el cielo estaba una hermosa luna llena color sangre.

    – Este lugar es muy extraño – susurre para mí, este castillo tan antiguo me lo imaginaba más escalofriante por dentro, pero realmente tiene un diseño clásico normal, lo único que da escalofríos es que hasta ahora no he visto a nadie, tampoco hay cadáveres como afuera, además siento una pequeña brisa en aumento a medida que avanzo.

    Solté un pequeño estornudo al ya haber avanzado por varios minutos, el aire se empezó a sentir más frio, me abrace a mí mismo mientras avanzaba a lo que parecía ser un gran salón.

    Al llegar al gran salón vi a seis personas, todas usando capas color negro, aquella capa estaba rota y desgastada en la parte final, al darme cuenta mejor aquella capa tenía solo un botón, aquel botón de color plateado tenía el símbolo de la “S” color rojo escarlata.

    Parece que esas personas me esperaban, ya que voltearon a verme cuando entre, o eso creo, todas ocultan parte de su rostro con la capucha, reconozco que hay hombre y mujeres, si no me equivoco hay dos mujeres, el resto eran hombres.

    – Te hemos estado esperando – habló la persona que hace unos segundos me intentaba matar, al ver su estatura verifique completamente que era la persona que creía.
    – Yo… sé equivocan… no soy yo, así que me voy – dije para seguir avanzando, ya lo he visto en películas de terror, el extraño culto se reúne y sacrifica una víctima inocente.

    Una pared de hielo se formó frente a mí, evitando que siga avanzando, esto era muy malo, me gire para regresar por donde había venido pero también había una pared de hielo, el único camino que me quedaba era ir al gran salón.

    – Mierda – masculle para mí mismo, esto iba a terminar mal, de cierta forma pensaba eso, aunque ahora me daba más miedo pensar que uno tenía el poder de controlar el hielo y podría congelarme en cualquier momento si intentaba irme.

    A paso lento y quizás derrotista fui hacia el gran salón, no supe porque pero note una gran aura oscura alrededor de uno de ellos, era amenazante y aterrador, me daban ganas de salir corriendo.

    – Lo estás asustando – hablo una de las mujeres, la más baja de todo el grupo, reconocí esa voz fácilmente además su altura me ayudo a saber quién era.
    – A mí de cierta manera me parece divertido – habló uno de los hombres, era el más alto, también me fue fácil reconocerlo.
    – No digo que no haya sido divertido, es decir verlo tan dominante es tan genial y todo, pero me da pena ver al otro asustadito – respondió ella.
    – Deja de pensar en el tonto BL por un minuto, es decir es divertido verlo molesto – se burló él.
    – El BL no es tonto, tú eres tonto – sonaba algo ofendida, esa conversación sin sentido de siempre me calmaba.
    – Silencio – ordeno la persona del aura amenazante. Un muro de hielo se levantó entre aquellos que conversaban para que dejaran de hablar – Tú… ¿Cómo te atreves a entrar aquí? – juraría que con solo tu noto tan frio podría congelarme.
    – Bueno… abrieron las puertas y estaba buscando a alguien así que… – no sabía bien cómo explicarme, aunque si lo pienso bien nunca escuche que pudiera entrar aquí, solo las puertas se abrieron y supuse que estaba bien pasar.
    – No me refiero a que haces dentro del castillo, te dejamos pasar por eso dejamos la puerta abierta – respondió el otro, pude notar que estaba un poco más calmado – Lo que yo quiero saber es como llegaste a este mundo – ahora sonaba de nuevo amenazante.
    – La explicación… quizás no la creas, es extraña, confusa, como si fuera solo un sueño…
    – Solo dilo – juraría que esto fue una orden.
    – Fue más como un sueño, estaba en un paisaje estrellado, habían dos puertas iguales, en medio había una persona con una máscara, iba a elegir esta puerta, pero esa persona me dijo que eligiera otra, incluso me hizo ver que allí se encontraban mis amigos y familia, pero aun así yo elegí esta puerta, sentí que algo me estaba llamando aquí, algo muy fuerte…
    – ¿Viste quién era aquella persona?
    –… Sí… lo vi… aquella persona era mi otro yo…
    – ¿Tú otro yo?...
    – Es difícil explicarlo como ya he dicho, pero él es diferente a mí, pero aun así soy yo, es como una parte de mí que hasta ahora no sabía que existía.

    La habitación se quedó en silencio durante unos minutos, aquellos minutos me parecieron eternos.

    – Efectivamente, él es tu otro yo, él es parte de ti pero es una parte de la cual no sabías, de la cual no debiste saber, debiste quedarte aun en aquella ilusión, en aquella paz absurda… pero ya no se puede hacer nada para regresar, tú mismo elegiste este camino… este camino que está lleno de tristeza, dolor, sufrimiento y arrepentimiento… espero no llegue el día en donde te arrepientas de haber entrado a este lugar…
    – Él… yo… sabía que este lugar era así, aun así quise venir por aquello que me llamaba.
    – Aquello que te hizo venir aquí fue el llamado de la sangre… tú eres uno de los descendientes de la familia Scarlet.

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    Notas finales: Poco a poco(?) se ira revelando el secreto de Crime Scarlet y que tiene que ver con la familia Scarlet y blah blah blah Scarlet(?) XD
    Para los que no saben la esclerótica es la parte del ojo que normalmente esta blanca C: sdasdas no sé que más decir de este capi XD, asi que nos leemos la próxima semana owo!!
  12. .
    Y la conty? y la conty? D:< donde esta la conty?

    ADdsadsada tantas parejas, me gustan los triángulos amorosos o3o adsadas más si son entre estos personajes XD
    Pobre Lifty pero bien que le gusta ser sometido por Shifty o3o~ oie cy ewe
    Espero que mi lindo Flippy no tenga el corazón roto por ver a Splendid interesado en Lifty D: es que Lifty tiene feromonas vioables y de ternura D:<

    Espero conti o3o~~
  13. .
    Adsadsada pues que lindo fic me he encontrado hoy !! C:!!
    Te entiendo cuando tienes un fic en borrador es como muy preciado >W< más si lo has tenido todo ese tiempo.
    Pues me ha encantado la idea de este fic, tu forma de escribir es comprensible, aunque quizás algunos detallitos más la mejorarían, o eso opino yo o3o
    Me encanta esta pareja, ahora será un trio, sabes imaginaba que el pasivo seria nuestro super héroe xD y no Flippy pero de cierta manera también puedo imaginármelo a él pasivo de Fliqpy por que él es quien toma el control de su cuerpo - oie cy XD -
    Espero ansiosa el segundo capitulo o3o yo sé que Fliqpy solo necesita amor D: amor que Filppy le tiene que dar o3o~pero Spendid no creo que le guste mucho esa idea XD.....asi que Trio!! xD
  14. .
    Owww~ esto es lo más tierno que he leído, es la primera vez que leo de esta pareja pero realmente me ha gustado tu one shot, las personalidades de ambos las veo igual como a las del programa XD adsadsad me los imagine y todo con sus voces >W< fue hermoso o3o~~
  15. .
    @Arlhorn: Gracias o3o~~ trato de que se mantenga todo lo claro posible porque no tengo mucha experiencia escribiendo este tipo de generos(?), tratare de seguirme esforzando para que sea todo lo entendible posible owó.

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    Capítulo 3:



    Sachi se giró completamente, aun sostenía aquella espada blanca cubierta de sangre. No podía creer que ella también estuviera involucrada en esto, realmente no sabía nada de este mundo, nada.

    En menos de un segundo vi cómo se desplazó hasta llegar frente a mí, me invadió el miedo, no pude moverme.

    – Nahema – escuche la voz de Sachi. Su espada pasó muy cerca de mi mejilla casi rozándola. Escuche un grito desgarrador provenir detrás de mí.

    Al girar para ver de quien había gritado, vi a una mujer, la cual estaba tendida en el piso cubriendo su rostro, mientras seguía gritando.

    – Ella está herida – me iba a acercar a ella para auxiliarla.
    – No te acerques – Sachi me tomo del brazo para detenerme.
    – Pero, ella está herida – repetí al ver como el suelo se cubría de sangre. Me logre zafar del agarre de Sachi para auxiliar a la mujer - Tranquilícese, la llevare a un hospital – le pedí.

    La mujer dejo de moverse, una siniestra sonrisa se formó en su rostro, empezó a reír a carcajadas. Sus manos se deslizaron rápidamente a mi cuello. Solo poseía un ojo, el cual me miraba con sed de sangre, sus manos apretaron mi cuello cada vez más.

    – Reacciona idiota – escuche ahora la voz de Marshall.

    La cabeza de la mujer rodo lejos de esta, al levantar la mirada, vi a Marshall, quien tenía una hacha de mango largo de doble filo.

    – Vaya que eres idiota – Marshall sonaba molesto.
    – Al menos intenta reaccionar – Sachi se agacho para retirar las manos de la mujer de mi cuello.
    – Joder, nos va a matar por esto – suspiro.
    – Es lo más probable, es decir, no podemos matarlo para mantenerlo callado.

    Escuchaba su conversación sin tener una reacción aun, todo esto me parecía mentira, pero era real, aun me dolía un poco el cuello por el agarre de la difunta mujer.

    – ¿Quién dice que no podemos matarle? – Marshall sonrió de forma macabra.
    – Y por eso eres estúpido vampiro – Sachi le pego con su zapato en el pecho – Si hacemos eso será mucho peor, mucho peor – estaba temblando mientras abrazaba su zapato.
    – Gata idiota sé lo que pasara si lo mato, solo quería asustarle – sonaba burloncito.
    – Pero no reacciono – Sachi me miro con curiosidad.
    – No, creo que esto es algo normal – respondí por fin – Porque ya me paso esto antes – sonreí ligeramente.

    Note la sorpresa en los ojos de ambos.

    – ¿Antes?... Explícate por favor – pidió Sachi.
    – Hazlo rápido, que tendremos que llevarte con él por esto – chasqueo la lengua molesto Marshall.
    – Paso apenas ayer, me ataco un criatura de la cual ni se su nombre, solo sé que la mató y me protegió…. Esperen, ¿llevarme? ¿Con quién? – pregunte con curiosidad, quizás ahora obtendría respuestas.
    – Con nuestro líder – sonrió alegre Sachi empezando a dar saltitos – Amo al líder.
    Marshall rodo los ojos por la reacción de Sachi, como si ya le harta que dijera eso. Ambos hicieron desaparecer sus armas.
    – Su… líder – debo admitir que estaba algo nervioso por conocer a alguien así, es decir, si es su líder debe ser alguien muy fuerte, realmente tenía curiosidad por saber cómo era una persona así, además que debía poder darme las respuesta que Aoi no me quiso dar.
    – Lo más seguro es que te mate – escuche la voz burlona de Marshall. Esa era una posibilidad también, mantenerme callado al matarme, pero debía ser positivo, en el peor de los casos siempre existe la posibilidad de correr.
    Caminamos hasta llegar al complejo de apartamentos donde ellos vivían. Hasta ahora no veo a nadie más aquí, quizás solo es una fachada el complejo de apartamentos, quizás aquí residan otras personas que sepan la verdad que busco saber.
    – Llegamos – por fin hablo Sachi, ninguno de los dos menciono algo durante el camino. Vi la puerta frente a mí, color rojo vino, la placa color dorado tenía grabado en número “13”.

    Sachi toco la puerta dos veces. Se escuchó el chirrido de la puerta abriéndose, apenas lo hizo lo suficiente como para que supiéramos que estaba abierta. Mi corazón empezaba a latir más rápido, sentía mis manos temblar ligeramente.
    Entramos a la habitación, la cual solo tenía oscuridad adentro, ni Sachi ni Marshall prendieron la luz, así que pensé que no debía hacerlo, los seguí como pude intentando no tropezar ni caer, aunque sentía que era un apartamento normal, estar a oscuras lo hacía ver misterioso.

    – ¿Líder?... ¿Líder?... un, dos, tres por el líder~ sal ya líder~ – canturreaba alegre Sachi. Empezaba ahora a tener mis dudas sobre este supuesto líder.
    – Gata idiota, no saldrá así – bufo Marshall.
    – Pues estúpido vampiro ilústrame en cómo debo hacer que salga – se cruzó de brazos.
    – Podríamos incendiar el lugar – propuso con tono malicioso.
    – Esa idea me gusta nyajajaja – el tono de Sachi era de broma. Aunque no sabía si podía tomarlo como una broma viniendo de ellos dos.

    Las luces se prendieron, mostrándome el departamento, el cual si parecía ser normal.

    – Son demasiado ruidosos – suspiro. La persona que acaba de aparecer era Aoi – ¿Qué hace eso aquí? – señalo hacia donde estaba, sin poder evitarlo baje la mirada.
    – ¿Quieres que lo bote a la basura? – pregunto Marshall con cierta satisfacción.

    ¿Votar a la basura? ¿Acaso estaban hablando de mí?, no, no, no, hasta para ser Aoi hacer eso sería demasiado, además debo suponer que él es el líder.

    – Sí vótalo – fue la respuesta de Aoi. Marshall se acercó a mí, sin poder evitarlo retrocedí, pero mire con sorpresa como Marshall tomaba un
    libro que estaba en la mesa.
    – ¡NOOOO! – Sachi se abalanzo contra Marshall.
    – ¡Condenada Gata! – grito Marshall molesto, Sachi lo había dejado tirado en el suelo, inevitablemente el libro voló por el aire, así que decidí atraparlo.

    “Ambos cuerpos se estremecían del placer, moviéndose en un vaivén excitante, XXX gemía hasta el punto en que pudiera quedarse afónico, el placer que le causaba YYY con sus salvajes, fuertes y profundas embestidas era demasiado, pronto llegaría al clímax…”
    Cerré el libro para tirarlo al bote de basura, había quedado lo suficientemente traumado con esa parte como para no dormir por una semana.

    – ¡NOOO! – Sachi tomo mi brazo – ¿Por qué lo hiciste?
    – Igual yo también lo iba a tirar así que fue el mismo resultado – se burló Marshall.

    Sachi soltó mi brazo para dirigirse hacia Marshall, poniéndose frente a él.

    – ¡Toma! Insensible – le dio una patada en las partes bajas, causando que él caiga al suelo adolorido.
    – Hay mis hijos – soltó como lamento, su tono sonaba a que le había dolido mucho.
    – Que hijo, ni que nada, tu ere pasivo – le señalo
    – ¿Para qué fue que vine? – susurre, ya estaba confundido, traumado y sentía pena por Marshall.
    – Creo que es suficiente por hoy – escuche que dijo Aoi, por fin involucrándose en este asunto.
    – No, vine hasta aquí para saber lo que pasaba – le dije decidido.
    – Seria mejor si vienes otro día, debes estar confundido, traumado y hasta yo siento pena por Marshall.

    Siempre hace lo mismo, siempre, él es el único que puede leerme como si fuera un libro abierto, pero yo no sé lo que está pensando, lo que siente, no sé nada.

    – No… no quiero… siempre haces lo mismo… incluso cuando éramos niños… siempre me estas ocultando cosas, cosas que te hacen daño…
    – Lo hago por tu bien.
    – Mentiroso… no lo haces por mí, lo haces por tu bien, siempre ha sido lo mismo, siempre que te ocurre algo que te hace daño mientes diciendo que no es nada, incluso me mentiste a mí, por eso nos distanciamos…

    Claro ahora lo recuerdo bien, el motivo de que ya no fuéramos amigos como lo fuimos cuando éramos niños, fue ese motivo, él se alejó, nunca me contó el motivo para su cambio, si la memoria no me falla, todo esto pasó, empezó desde la muerta de la madre de Aoi.

    – Kaito, realmente no necesitas saber nada.
    – Lo entiendo – intente sonar tranquilo – Lo entiendo – me dirigí a la puerta, ya no quería saber nada, pero nada de él, iba a conseguir una respuesta por mi cuenta.

    Salí del complejo de apartamentos para ir a mi casa. Apenas llegue y abrí puerta, fui tacleado por alguien, quedando en el suelo.

    – ¡Hermano! – la persona que estaba sobre mí es Alicia, una joven delgada, de tez blanca, cabello largo marrón oscuro, de ojos rosas al igual que los míos.
    – Hola Alicia, no sabía que volverías – le confesé, esperaba quedarme solo hasta que nuestros padres regresaran de su viaje.
    – Solo me quedare por dos días – explico alegre mostrando con su mano dos dedos.
    – Ya entiendo, que bueno – sonreí alegre, realmente era algo bueno, al menos así me distraería del tema anterior.
    – Sip, sip, muy bueno, ven vamos, te prepare algo – se levantó para dirigirse a la cocina rápido. Me levante también y le seguí.

    El resto del día paso muy tranquilo, quizás demasiado, me preguntaba si aún esas cosas seguían afuera.

    – ¿Alicia? – pregunte al verla abrir la puerta de mi habitación.
    – Iré a la tienda, ¿quieres que te traiga algo? – pregunto con tono curioso. Vi la hora en el reloj, era ya tarde.
    – No, está bien, pero mejor yo voy a la tienda, ¿qué querías comprar?

    Vi como Alicia desvió la mirada, jugaba con la parte final de su blusa rosa con estampado de corazones.

    – Es mejor si yo voy a la tienda… hermano son cosas femeninas – confeso con un poco de rubor en la mejillas.

    Me quede en silencio por unos segundos, esto era algo incómodo.

    – En… en ese caso… mejor te acompaño… ya sabes… es tarde – reí algo nervioso.
    – Sí… sí… mejor – sonrió ella algo nerviosa también.

    Sí algo sucedía camino a la tienda protegería a mi hermana, pasara lo que pasara, aunque lo más probable es que muera, al menos me gustaría que ella lograra escapar.

    El camino a la tienda fue tranquilo, vimos a varias personas de ida y de regreso, no pasó nada como me paso a mí. Sin poder evitarlo solté un suspiro de alivio por la noche tranquila, levante mi vista al cielo, la luna llena resplandecía, pero no era la única que iluminaba la calle, los farolas ayudaban a que el camino no se viera tan tétrico y sombrío.
    Alicia ya estaba en su cuarto, lo más probable es que estuviera durmiendo, sin embargo yo no podía lograrlo, seguía dando vueltas en mi cama, intentando cansarme para al menos así obligarme a dormir, pero no lograba nada más que marearme. Finalmente decidí cerrar los ojos, quizás así finalmente terminaría dormido.

    El paisaje parecía pintando por un niño de cinco años, estaba en medio de un cielo nocturno, lleno de estrellas grandes y amarillas, las cuales parecían ser estrellas fugaces.

    – ¿Dónde estoy? – fue la primera pregunta que se me vino a la mente, recordé vagamente mis intentos por dormir, así que deduje que este era un sueño.

    Frente a mí aparecieron dos puertas color blanco, en medio de estas apareció una persona con un traje elegante blanco, un sombrero de copa color blanco, no podía ver su rostro porque usaba una máscara, era aquella mascara que se usaba en el teatro, una color blanco en la cual solamente tenía pintado una sonrisa alegre y dos ojos.

    La persona señalo primero a la puerta de su derecha y luego a la de su izquierda, se encogió de hombros como si indicara que no sabía cuál elegir.

    – ¿Quién eres tú? – pregunte directo. Nuevamente se encogió de hombros, como si no lo supiera. Volvió a señalar las puertas.
    – ¿Quieres que elija una? – mire ahora con curiosidad las puertas. La persona asintió.

    Mire con curiosidad e intriga cada puerta, me preguntaba que habría al otro lado de estas, ambas eran completamente iguales, pero no creía que detrás de ambas hubiera lo mismo. Por algún motivo sentía la puerta que estaba a mi izquierda llamándome, como si hubiera algo allí supiera que estoy aquí, se agitara por mi presencia, me buscaba con insistencia, me llama con fuerza, era una atracción que no podía ignorar.

    Me dirigí hacia aquella puerta, estire mi brazo para tomar el pomo, pero cuando estaba a punto de tocarlo, la mano del sujeto toma mi muñeca, me guía hasta la otra puerta, haciéndome tomar el pomo de esa.

    – Pensé que no sabías que había detrás de aquellas puertas – me mostré serio.

    El sujeto hablo luego de unos segundos – A… amigos… fa… familia – sonaba su voz entrecortada, al parecer tenía dificultad para hablar, aunque el sonido de su voz se me hizo conocido.

    – ¿Amigos? ¿Familia? – pregunte sin entender. El sujeto soltó mi muñeca, así que aparte mi mano del pomo de la puerta, él tomo el pomo, lo giro y abrió la puerta. Me sorprendí al ver que había allí dentro.
    Dentro de la puerta estaba la ciudad, pero allí era de día, vi como muchos de mis conocidos y amigos estaban paseando allí.

    Aoi y Sapphire estaban preparando el almuerzo en su casa, mientras ambos hablaban, Aoi mantenía aun su expresión tranquila estando junto a su hermana, mientras ella parecía alegre.

    Sachi y Marshall estaban en una tienda de dulces, Sachi miraba todo con emoción, mientras Marshall tenía una expresión de “me va a doler la billetera”.

    Luis estaba junto a Kazehaya en el cuarto del menor, ambos estaban sentados frente a un escritorio, Luis le estaba explicando un problema al otro con mucho detalle.

    Rikkaru estaba en la biblioteca leyendo un libro, su mirada brillaba algunas veces mientras leía; sobre la mesa había muchos más libros.

    Midori, Daniela y Yukiko, estaban en la casa de la última, jugando juegos de mesa en la sala, riendo y divirtiéndose.

    Alicia estaba organizando su cuarto, pero se distraía muchas veces con las cosas que encontraba.

    Koichi estaba sentado al pie de un árbol, el cual le daba sombra, al parecer él se había quedado dormido allí.
    Alana estaba en su casa, sentada junto a la ventana de su cuarto mientras leía un libro pequeño, pero a veces su mirada se desviaba hacia afuera.

    Stella estaba dando un paseo por el centro, entrando a las tiendas de ropa, obligando a su hermano mayor Koji a cargar las bolsas de sus compras

    – A… amigos… fa… familia – volvió a repetir la persona – Te… te… están… es… esperando.

    Asentí por lo que dijo, pero aun así aquella otra puerta me seguía llamando, me empezaba a sentir algo agitado de solo verla, mi cuerpo comenzaba a calentarse, mi pulso se aceleraba, tenía ganas de correr allí y abrirla.

    – ¿Qué hay al otro lado de aquella puerta? – señale la otra, esperando respuesta.

    La persona permaneció en silencio otros segundos antes de responder – Muerte – respondió claramente – Tristeza, engaño, traición, dolor, sufrimiento, todos los sentimientos negativos, si dices abrirlas veras el verdadero color de este mundo retorcido– explico con todo firme, ese voz, esa voz me resultaba demasiado conocida.

    Mire la puerta una vez más, lo mire a él nuevamente, dándome cuenta de a quién le pertenecía aquella voz; le quite la máscara, él no se había opuesto a esto.

    – Lo sabía… tú eres yo – dije al ver su rostro aun si él estaba con los ojos cerrados, mi tono era el mismo, como si lo hubiera sabido desde el principio, quizás lo supe todo el tiempo pero no quise darme cuenta. Él abrió los ojos, mostrando que esa era su diferencia conmigo, él tenía la esclerótica color negro, su iris color rojo, un rojo brillante e intenso, un rojo escarlata.
    – Yo soy tú, pero al mismo tiempo no lo soy – explico con tono tranquilo.
    – Lo sé… de alguna manera lo sé – me puse la máscara – Entrare, porque a pesar de lo que me dijiste, hay algo que me está llamando.
    – Debes estar consiente… esa puerta… solo trae tristeza…
    – Ya me lo has dicho, aun así, sabes que no puedo evitar entrar – sonreí, aun si la máscara cubría mi rostro.
    – Sí, no sé puede evitar, es el destino, nuestro destino.

    De alguna forma sentí que él ya no estaba aquí, es como si su presencia hubiera desaparecido. Me dirigí a la otra puerta, estaba decidido, aun sí sabía que mis amigos y familia estaban esperándome al otro lado de la puerta ya abierta, sentía que todo aquello era falso, sentía que si habría esta puerta, por fin podría ver la realidad, pero algo en mi interior sabía que esto solo me traería sufrimiento.

    Tome el pomo de la puerta, lo gire lentamente para abrirla, atravesé la puerta notando que dentro estaba lleno de una luz blanca, esta era demasiado deslumbrante pues incluso usando la máscara puede darme cuenta de ella.

    La luz desapareció, sentía la fría y seca tierra debajo de mis pies, la brisa acariciando mi piel, pude detectar en esta el aroma a sangre y pólvora, todo estaba lleno de silencio. Me quite la máscara para observar cómo era el lugar. Un paisaje destruido y muerto, lleno de escombros de los edificios, no se podía ver ninguna planta o señal de color cerca. Me di una vuelta, detrás de mí estaba una gran torre color blanco. Al darme cuenta de la torre busque con la mirada otras construcciones que siguieran en pie, había en total seis más, parecían estar alrededor de la torre, separadas de manera equidistante a esta y entre ellas.

    – ¿Qué es este lugar? – susurre para mí mismo.

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    Notas Finales: Bueno aquí esta la otra parte, como siempre la publicación es los jueves o3o~~ aadsada aunque la próxima semana tengo exámenes y quizás no suba conti :'D
    Siguiendo con las notas finales, todo comienza con las pendejadas(?) de Sachi y Marshall, sho los amo porque juntos hacen un show de comedia adsadsa aunque si confieso algo seria, al principio la idea de cambiar a Sachi de genero rondaba por mi cabeza, quería hacerla chico para aumentar las posibilidades de shaoi(?) pero bueno en la vida me imaginaba un chico con la personalidad jodida de Sachi D: así que mejor se quedaba como niña o3o~ además es una hermosa fujoshi xD
1251 replies since 22/11/2012
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