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fer-chan
.User deleted
T__T voy a matar a alguien, ¿por que no me llegan las actualisaciones? es muy triste u___u
me gusto el cap, claro a Scorpius ya le cae bien Albus pero a este no, valla par
espero el proximo, si es que me llega la notificacion .__.
matta ne
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AsUkI_HiNaKuRe .
User deleted
muy lindo muy lindo mi kerer conty~
Sayo¡¡. -
Loky-Kun .
User deleted
My dear... Kaname! te estamos esperando super ansiosos todos!
Te lo pido... actualiza tan pronto como puedas ;D. -
290589-kaname .
User deleted
sorry sorry si me tardo. Pero ahora si que se me ha complicado, mi compu esta muerta temporalmente, pero les prometo que antes del fin de semana subo el capi. . -
Narcisa Black .
User deleted
o.o ? y la conti? no lo puedes dejar ahi, sabes?
se que la tarea, el trabajo y cosas como esas son muyyyyyy feas que te quitan el tiempo... pero ... y la conty o.o?
bueno espero que pronto
bye. -
290589-kaname .
User deleted
Hola, mmmm como decirlo, soy un amiga de kaname, desafortunadamente ella tuvo un accidente y no estara en el foro por lo menos otra semana, esta en recuperacion. . -
Loky-Kun .
User deleted
Hola, mmmm como decirlo, soy un amiga de kaname, desafortunadamente ella tuvo un accidente y no estara en el foro por lo menos otra semana, esta en recuperacion.
OMG! como asi? como esta!? dale nuestros saludos y nuestros mejores deseos para su pronta recuperación...
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karigutis .
User deleted
oh dios, un saludo para ella deseando que su recuperacion sea muy favorable, se le extraña. . -
Narcisa Black .
User deleted
O.O ! Ojala que te recuperes pronto! y que no sea tan grave D: Te extrañare por aqui pero tomate tu tiempo para recuperarte como se debe
bye
y cuidate. -
Acheron_kattalakis .
User deleted
Oh Dios cuanto me he perdido, plis conti y sige mejorando, te mando un beso. . -
290589-kaname+1 .
User deleted
Hola, muchas gracias por espera la conti y esperarme a mi. De ahora en adelante se me dificultara un poco actualizar pero hare lo posible, lo prometo. Pero ahora si les dejo la conti.
Capitulo 14
-¡Albus! –llamó Scorpius, pero Albus no se despertaba. El rubio lo miro totalmente incrédulo. ¿Cómo alguien podía dormir tan profundamente?
Scorpius se acercó al moreno y lo zarandeo un poco.
- Cinco minutos más –pidió Albus con un profundo bostezo.
- ¡Albus! Despierta de una jodida ves, ya es tarde.
Albus se levanto de inmediato al descubrir que la vos que lo llamaba no era precisamente de su padre, pero el movimiento rápido hiso que se golpeara fuertemente la cabeza con la de Scorpius quien estaba ligeramente inclinado para despertarle.
- ¡Oh rayos! Tienes la cabeza muy dura –reprochó Scorpius sobándose la parte afectada de su frente.
- Pues tu tampoco eres muy suave que digamos –contra ataco el moreno.
Albus, que estaba acostumbrado a lo fuertes golpes, apenas si demostró algún signo de debilidad.
- Vamos –dijo Scorpius sobándose la frente –tienes que salir de aquí.
Scorpius abrió la puerta de su dormitorio para verificar que no hubiese nadie en los pasillos.
- Mas te vale que nadie te vea –amenazó el rubio, al mirar como muy lentamente Albus se acercaba también a la puerta.
- Yo también te deseo un feliz día- contesto Albus. Fue entonces cuando se dio cuenta que traía puesto el pijama de Scorpius.
La verdad no recordaba haber tenido esa sensación en su cuerpo jamás, su pijama era suave sobre su piel, como terciopelo. Su padre le había comprado cuando entro al colegio un par de pijamas, pero aquellas eran de franela, y aunque le encantaban, no se asemejaba en nada a lo que traía puesto.
- ¿Qué pasa? –pregunto Scorpius al ver que Albus se había quedado en su mismo sitio.
- Nada, es solo…que tu pijama es suave…
- ¿Ah si?, quédatela si tanto te gusto –dijo el rubio, de todas formas no quería nada que le recordara al cuerpo desnudo de Potter. -¿Cómo es que alguien puede dormir tan profundamente? Incluso te golpee y no reaccionaste.
- Si, lo he notado, Jareth prácticamente me tira de la cama para despertarme. Solo me pasa cuando duermo en una cama. –Consiente de que había hablado de más, Albus serró su boca y salió apresuradamente del cuarto del rubio.
Al llegar a su cuarto, se saco el pijama y entro al cuarto de baño. ¡Demonios! Jamás había permitido que nadie se acercara a el demasiado y menos para curarlo. Se estaba ablandando y eso no le gustaba nada y menos por que Scorpius no era precisamente una persona de fiar.
Escucho que la puerta de su cuarto se habría.
- ¡Albus! –grito Jareth –se que estas aquí, no te escondas.
- Me estoy duchando –respondió Albus, escuchando como su amigo se acercaba a la puerta del baño.
- ¿En donde demonios estabas? La directora esta que hecha humo. Sobre todo por que… -Jareth se interrumpió de repente.
- ¿Jareth?
- ¿Pasaste la noche con Scorpius? –pregunto de repente Jareth, causando que Albus saliera de la ducha y apresuradamente entrara a la recamara.
- ¿De donde sacaste semejante tontería?
Albus vio como Jareth se ponía intensamente rojo de la cara y se tapaba los ojos con las manos. ¡Por Merlín! Se había olvidado de que estaba desnudo. El moreno entro nuevamente al cuarto de baño para envolver una toalla a sus caderas.
- ¡Lo siento!- se disculpo Albus.
- No te disculpes, fue un accidente, además, no tienes nada que envidiarle a nadie. ¿Cómo es que no había visto antes semejante cuerpecito?
- ¡Jareth!
- Ya, no te preocupes, ya guarde mi zorra interior. –Albus escucho como su amigo se estaba muriendo de la risa. –pero no me cambies el tema jovencito, tu estuviese en el cuarto de esa serpiente.
- ¿Cómo lo sabes? –Albus volvió a salir del cuarto de la ducha para enfrentar a Jareth.
- Esta pijama es de el.
¡Oh el pijama!
- Esa es mía.-trato de mentir.
- Si, y por eso en nombre de Scorpius esta bordada.
Genial, ahora había quedado como un mentiroso.
- Bien estuve es su cuarto, pero no te imagines cosas raras. Solo me estaba ayudando.
- ¿Ayudando? Entonces te debe de estar ayudando muy seguido ya que te escapas casi todas las noches.
- Te diste cuenta…
- Por supuesto. Albus, yo se que me contaras cuando estés listo, lo único que me enoja es que se lo dijeras primero a Scorpius.
- Yo no le he contado nada.
- Esta bien –Jareth no le creía –Termínate de bañar.
Albus entro nuevamente a la ducha. No le gustaba mentirle a Jareth pero tampoco podía decirle la verdad.
- Jareth, podrías pasarme el uniforme, esta en el baúl. –pidió Albus para tratar de romper un poco el hielo.
- Bien –soltó Jareth. Se escucho entonces un traqueteo seguido de una maldición.
- ¿Jareth?
El joven Potter salió nuevamente del cuarto de baño. Pero al ver lo que había pasado con su amigo, se le fueron los colores del rostro. Albus se había olvidado de serrar el compartimiento de su baúl donde tenia todo su equipamiento del jaguar negro y ahora Jareth sostenía su mascara y su espada. ¡Por Merlín! Estaba realmente jodido.
Cuando al fin Scorpius estuvo solo en su cuarto, no quiso ni siquiera pensar en lo que había pasado. Se baño y vistió como de costumbre. Tenia que llegar a su próxima clase. A pesar de lo que muchos decían, cuidado de las criaturas mágicas era una de sus favoritas. Aunque el guardabosque a veces era algo fofo, la mayor parte del tiempo se descubría disfrutando de sus ocurrencias.
Scorpius no pudo dejar de notar que la mayoría de los de su casa se le quedaban viendo extraño. ¡Por Dios! Se dijo, ¿Acaso no tengo derecho a saltarme una clase, al menos por una vez en mi vida? El rubio se había puesto de tal humor que ni siquiera quiso ir al pequeño grupo que formaban sus amigos habituales, mas se descubrió tratando de ver si un moreno de ojos verdes ya había llegado. Pero no fue así, y lo más extraño era que Jareth tampoco estaba.
La clase comenzó y Scorpius no pudo reprimir la curiosidad de saber donde estaban aquellos dos. Las explicaciones del profesor comenzaron a hacerse cada vez más tediosas. ¡Donde estaban esos dos! Mas le valía a Albus presentarse en la siguiente clase. Pero tampoco fue así.
Jareth se encontró con su hermana cerca del lago, Jaden vio el semblante agobiado y frustrado de su gemelo. Se avecinaban malas noticias.
- Dime, ¿Qué está pasando? –preguntó Jaden.
Jareth dudo, no sabía si hacia bien en contarle a su hermana que Albus era el temido jaguar negro. No, no podía. Por lo menos no por ahora.
- Albus esta hechizado –declaró entonces el muchacho.
- ¿A qué te refieres?
- Cada vez que alguien trata de hablarle sobre vampiros, el se paraliza y es incapaz de mantener esa información en su cabeza. Pero lo peor de todo es que él lo sabe y por ello trata de no pensar demasiado en eso.
- Espera, espera. ¿Le contaste sobre nosotros?
- Trate pero el hechizo no me dejo.
Jareth se recostó sobre la hierba y miró al cielo totalmente desanimado. Recordó el momento en que Albus salió del cuarto de baño y descubrió que él traía en sus manos su secreto. Su rostro se había puesto pálido, pero un estado de cautela cayó sobre sus ojos y ahora lo miraban con cuidado. Desconfianza. Esto le había dolido, pero de cierta forma lo comprendía.
- ¿Tú eres el jaguar Negro? –le había preguntado, no esperando realmente una respuesta, y en efecto, Albus se quedo callado mirándolo intensamente. –No lo puedo creer. –en esta ocasión sus palabras salieron más oscas de lo que esperaba.
- ¿Decepcionado? –preguntó, su voz parecía dolida.
- No, no es eso. Es solo que…eres joven.
- Si, ya me lo han dicho algunas veces.
- ¿Realmente eres tú el Jaguar Negro? –Era una estupidez preguntar de nuevo pero quería saber.
- ¿Qué quieres que te diga? ¿Que no?, que eso es solo un disfraz que uso como un fetiche.
- No exageres. Lo quiero saber porque soy tu amigo. Bueno, al menos eso creía.
El semblante de Albus había cambiado ahora a una de remordimiento.
- Lo eres, es solo que… esto no se lo puedes soltar a alguien tan fisilmente. Dudaba que alguien me creería. Además de que debo cuidar mi identidad, no sabes cuantos andan tras mi cabeza.
- Me imagino. Con razón eras pésimo en la magia. Definitivamente tus habilidades físicas son más impresionantes. ¿Era por esa razón que no estudiaste en esta escuela desde el principio? –se atrevió a preguntar.
- Si, ese fue un motivo. Pero solo me convertí en el líder de los Cainitas después de circunstancias especiales que en este momento no vienen al caso.
Jareth dudo, tenia mucho que preguntarle, pero tenia miedo que al saber la verdad de quien era el realmente, lo denunciara o peor, lo asesinara. Pero tenia que saber todo. Además, seria muy sospechoso la calma con la que manejaba la verdad sobre quien era el.
Jaden y Jareth, habían sido huérfanos de padres magos. Los únicos que vieron por ellos habían sido sus padres adoptivos que casualmente, eran vampiros. Los gemelos habían sido criados como cualquier otro mago, pero cuando llego la carta de Hogwarts a sus once años, todos habían decidido que lo mejor para los gemelos era que se dijera que eran hijos de padres muggles.
En el clan del norte, no había muchos niños, pero la mayoría eran huérfanos. Fue un bálsamo de frescura cuando un día, Rogan trajo al pequeño Sev en sus brazos. Nadie sabía nada de su pasado ni quien eran sus padres. Rogan jamás lo dijo, solo que él necesitaba de todos para sobrevivir. Sev en esos tiempos era muy tímido y reservado. Con el paso del tiempo, Jareth y Jaden se había hecho amigos del pequeño Severus. Le había enseñado a pelear, y si, también a matar a sus enemigos. Los tres siempre juntos, siempre unidos, como una familia.
Después todo cambio, Rogan se había interesado por Severus de una manera totalmente diferente y Severus…el se había enamorado de el Rey de los vampiros. Pero Jareth siempre había sabido que algo estaba mal en esa relación. Severus parecía como si lo idolatrara, Severus incluso seria capas de morir por su amor de una manera literalmente enfermiza. El hechizo del vampiro. Eso era lo que había pasado.
Entonces Jareth había hecho algo que podría considerarse traición a su pueblo. Pero él no podía permitir que Severus se vinculara con Rogan. Ningún mago sobrevivía a ese lazo tan especial, no a menos que relámete hubiese amor de por medio. Pero realmente Severus no estaba enamorado de Rogan. La noche que Harry Potter se llevo a su hijo, el lo dejo marchar, incluso había distraído a los de su clan por salvar a su mejor amigo. Jareth pensó que Severus estaría a salvo, pero no fue así. Él había regresado por su propio pie años después. Y Jareth no había podido hacer nada, ya que él estaba en el colegio.
Después de que nuevamente Harry Potter regreso por su hijo. Rogan los había convencido de averiguar todo sobre Severus. Si estaba en el colegio y la manera de sacarlo de ahí sin que nadie lo viera. Afortunadamente el pequeño Potter no apareció…hasta ahora.
Pero, ¿como no la había pensado antes? Quien aparte de Severus era capas de dominar a las vestías mágicas de los bosques. Desde pequeño Severus había sido el mejor con la espada y cuchillos, no por nada Rogan le había enseñado personalmente.
- Albus…-comenzó Jareth, tenia que preguntarle, tenia que saber. – ¿Te acuerdas de nosotros cuando estábamos en el clan del norte?
En ese momento Albus desfiguro su cara en sorpresa y luego desconcierto.
- ¿Qué? –su voz parecía sofocada.
- ¿Recuerdas el pueblo del clan del norte? ¿las barracas donde todos lo niños humanos dormías? ¿Los entrenamientos? ¿El vinculo que hiciste con Rogan?
- ¿Tu que sabes de Rogan? –La voz de Albus se había puesto seria y afilada.
- Todo –contestó Jareth sinceramente. – ¿Recuerdas?
Albus estaba en shock, miro a Jareth nuevamente, como si fuese la primera vez.
- Tú sabes… -Antes de que Albus pudiese decir otra cosa, sus ojos se pusieron blancos y se desplomo en el piso.
- ¡Albus! –Jareth había corrido para sostenerlo.
Albus abrió los ojos y comenzó a mirar a su alrededor. Parecía frustrado y furioso al mismo tiempo.
- ¿Albus?
- ¿Qué paso? –El muchacho se levanto y mostro un seño cauto. - ¿Me hablaste sobre vampiros?
Jareth no comprendía, ¿Qué rayos estaba pasando?
- Si… -dijo vacilante.
- No lo hagas de nuevo –Ordeno Albus autoritariamente.
- ¿Qué? ¿Por qué?
- Estoy hechizado, nada de vampiros, nada que me recuerde el pasado. Si lo haces ellos me borran la memoria.
- ¿Ellos?
- No querrás saber… preferiría que no me hablaras más del tema, no quiero estar golpeándome la cabeza en el piso a cada rato.
Albus se quedo de repente de piedra.
- ¿Cómo es que salí del baño? –preguntó mientras se rascaba la cabeza.
Jareth puso los ojos en blanco, ¿acaso había olvidado también que él sabia su secreto?
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fer-chan .
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Hola kaname ^^ es una lastima que no puedas aparecer tan seguido, pero aun asi vale la pea seguir el fick, la trama me parese realmente original, aunque pobre Al, olvidar siempre... se lo que puede significar eso
espero la conti *se sienta pasientemente a ver cuando sale el proximo capitulo*
chiao!. -
Loky-Kun .
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OMG! pobre Albus! y yo crei que al final de todoa Jareth seria malo maloso :3
Kaname, me alegra que estes bien, ojala y te pases seguido por estos lares... yo me paso cada vez que actualizas xD
Sabes que me parece... que no le has dado un papel relevante Jaden... deberia tener novio... por lo menos xD
Bye, y nos leemos pronto
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lulublue .
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waaaa actulaizaste!!!!!! me alegro que que estes mejor y k hayas vuelto!!!!!!! se te exaba de menos....
como era de esperar me ha encantado este capi.....
no m podria imaginar que jareth lo descubria.... que interesante se esta poniendo estooooo
conty!!!!
cuando puedas jejeejejej xD
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290589-kaname+1 .
User deleted
lulublue---Gracias, fuero dias eternos jejeje. Espero que te siga gustando este fic, les dejo la conti. 
Loky-Kun---No Jareth no es maloso, el siempre tuvo sospechas de todo lo que pasaba con Rogan y Albus y el seguira buscando la verdad.
Sobre Jaden, mas adelante se sabra mas de ella y su papel en todo el asunto, jejejejej. Cuidate y nos leemos pronto.
fer-chen---Gracis por segur aqui, si pobre Al, pero todo lo malo acaba...ya veras. Les dejo la conti en unos momentos.
Capitulo 15
Después de la muerte de Rogan, algo muy extraño había pasado dentro de la cabeza de Albus. Era como si su cerebro fuera una computadora que descargaba archivos de vampiros pero al siguiente instante alguien venia y los borraba. Causándole un dolor de cabeza infernal. Su extraño pasado a veces venia con tórridas imágenes para un segundo después ser borrosas y confusas. Algo estaba mal y Albus sabia perfectamente que alguien le había modificado parte de su ser.
El ministerio… había pensado eso en un principio. Si, ellos tenían parte de la culpa, pero tenía también que ser alguien muy cercano a él, alguien que pudiera entrar en su cabeza sin problemas para saber si Albus sabía algo sobre vampiros y así borrarla del sistema.
Albus trato de pensar un poco en su pasado con Rogan…Nada, era como si todo estuviera en blanco de repente. Podía recordarlo a él: Cabellos rubios, ojos azul intenso y… ¡Maldición! ¿Qué rayos le habían hecho?
Pero si no podía recordar con claridad a Rogan, ¿Cómo podía recordar claramente su traición?
Piensa Albus, piensa…
El muchacho rememoró el día, cuando tenía catorce años y había escapado de su casa para rencontrarse con Rogan. Ellos se habían abrazado y besado. Albus le había propuesto que se vincularan para que nadie nunca volviera a separarlos. Rogan había aceptado y ese mismo día se había hecho el ritual. El vínculo no lo había matado, confirmando así que su amor por Rogan era sincero.
Días después, su padre había regresado al clan de los vampiros y le había dicho la verdadera razón de que Rogan lo tuviera con el. Su padre le había contado que Rogan trataba de crear un conflicto entre los magos y los subterráneos para no firmar los tratados de paz. Rogan quería que los magos se alzaran en guerra para reclamar por su secuestro y así comenzar la guerra. Por supuesto él se había negado a creerlo. Pero una discusión de Rogan con el ministro de magia había hecho que su corazón se rompiera en mil pedazos. No podía creerlo…pero aún así, él lo había amado tanto que a pesar de su traición, jamás le hubiera lastimado. Era por eso que a estas alturas de su vida, todavía no podía recordar el motivo por el que lo había llevado a acecinar a su amado.
Lo más alarmante de todo era el hecho de que no podía recordar el momento en el que él mato a Rogan. Todo ese tiempo se había perdido. A pesar de que todos dijeran y le describieran como lo había matado, Albus siempre había creído que algo estaba mal. Incluso lo motivos que supuestamente lo habían orillado a terminar con la vida de Rogan.Pero la traición era otra cosa. En su corazón, Albus sabía que Rogan lo había traicionado de alguna manera.
El problema ahora esa saber quien o quienes eran los que se atrevían a violar de esa manera su mente. Tenia que ser alguien que supiera perfectamente Legeremencia y Oclumancia. Posiblemente algún profesor o la misma directora. De lo único de lo que si estaba seguro era que esa persona tenia que ser uno de los hermanos silenciosos.
Los hermanos silenciosos siempre estaban en el ministerio de magia, sobretodo en la cámara de las profecías. Ellos vestían con túnicas del color de la arena y se cubrían los rostros. Algunos decían que su nombre: “Los hermanos silenciosos” se debía a que ellos no hablaban, porque supuestamente, sus bocas estaban cosidas. ¿Horrible no?
Pero cuando tenían una misión, su rostro y actitud cambiaban. Eran los maestros del disfraz. Los hermanos silenciosos estaban por encima de la orden de Merlín, solo podrían compararse con los Morganos.
Albus se miró en el espejo con el uniforme puesto. Él, en un principio, había tenido toda la intención de presentarse a las clases que aun quedaban, pero lo que paso con Jareth lo había dejado desorientado. Lo que más le frustraba era el hecho de que no sabia que tanto le había contado sobre su vida pasada. No había ninguna duda de que Jareth sabía que él era el Jaguar Negro. Pero de lo que no estaba seguro es que tanto de su pasado le había contado. No se atrevió ni siquiera a preguntarle.
Unos ruidos en la ventana hicieron que saliera de sus deprimentes pensamientos. Al acercarse, se encontró con un pequeño gato negro que lo miraba con unos ojos inteligentes.
- ¿Cómo entraste aquí amiguito?- Albus abrió la ventana para dejar pasar la corriente fría mientras acariciaba la oreja del minino. Si no se hubiese acercado lo suficiente, no se abría dado cuenta que el gato traía una pequeña nota en su patita derecha.
Albus se la quito y al abrirla, se sorprendió al darse cuenta que era de Lady Selandra, la líder de los Morganos. En esta le pedía que se encontraran hoy en la noche en el club TheBabylon para entregarle formalmente a su demonio.
Scorpius confirmó la hora y se dio cuenta de que Albus estaba retrasado diez minutos para sus prácticas de Quidditch. ¿Dónde se había metido ese condenado renacuajo? Si se atrevía a faltar, iría a su cuarto y lo arrastraría de las orejas si fuese necesario. Cuando al fin se decidió a ir tras el moreno, vio que Potter ya venia caminando hacia el.
- ¿Dónde rayos estuviste todo el día? –fue lo primero que a Scorpius se le ocurrió preguntar.
- ¿Quieres todo mi itinerario…mamá? –preguntó Albus sarcásticamente.
- No empieces…
Albus tomó camino hacia los vestidores seguido muy de cerca por el rubio.
- ¿Por qué no asististe a las clases? –interrogó Scorpius.
- No tenia ganas.
- ¿No tenias ganas? –El rubio no le creyó ni por un instante, la vos de Albus parecía deprimente.
El moreno se detuvo en frente del estante donde guardaba su uniforme del equipo, estaba tan distraído que sin siquiera un poco de pudor, comenzó a quitarse la ropa.
Scorpius se le quedo mirando incrédulo, Albus jamás se quitaba la ropa en frente de nadie. Al principio creyó que era por timidez, pero ahora que lo vio desnudo la noche pasada, creía que era por que no quería que nadie viera sus cicatrices.
- ¿Cómo están tus heridas? –El rubio se acercó a tocar la cicatriz rosa que Albus tenia en su espalda baja. El contacto con la piel cálida le causo literalmente un escalofrió. Un extraño calor le recorrió la piel y sin pensarlo la quito como si algo lo quemara.
Albus lo miraba como si a él le hubiese pasado lo mismo, y entonces se dio al fin cuenta que prácticamente estaba desnudo ante la mirada del rubio.
Scorpius notó que las mejillas del moreno se encendían en un tono rosado. Había algo en aquella expresión que le causo algo en el estomago.
Potter no podía creer que se estuviera desnudando en frente de Malfoy, por Dios, ¿En que rayos pensaba? Oh, si, la cita con Lady Selandra. La emoción de saber que pronto estaría vinculado con su demonio hiso que prácticamente se le olvidara todo.Si al fin se convertía en un Morgano, nadie más se atrevería a meterse en su mente. Seria inmune a la magia del pasado, presente y futura.
Termino de vestirse rápidamente y tomo su saeta de fuego para dirigirse a la práctica con todos lo demás.
- Momento, -lo detuvo Scorpius – ¿A donde crees que vas?
Albus levanto una ceja ante el comentario absurdo.
- A la práctica, ya sabes, ese juego bobo en el que me metiste. –Albus simulo con las manos a un jugador de Quiddtch planeando sobre el campo.
Scorpius rodo los ojos. Pero no pudo suspirar de alivio al ver que Albus parecía más animado.
- Eres un completo idiota Albus, ¿Vas a practicar sin siquiera haber comido algo desde la mañana?
El moreno abrió los ojos totalmente sorprendido, era como si apenas se hubiese dado cuenta de que era cierto, que él no había comido nada desde la mañana.
- ¿Cómo lo supiste? –Si el moreno no se había acordado de alimentarse, ¿como era que Scorpius sabia que no tenia ni un alimento en su estomago?
- Pregunte a los elfos domésticos del castillo. –Scorpius desvió su mirada de Albus, como si le avergonzara la atención que estaba demostrando por la mala alimentación del moreno. –No deberías descuidarte de esta manera, te enfermaras.
- Como si te importara. De todas formas ya estoy acostumbrado. –la declaración de Albus causo un retorcijón en el pecho de Scorpius.
- Lo dices como si pasaras días sin comer.
Albus no le contesto.
- Toma.- Scorpius le tendió una pequeña canasta que saco de su casillero –He traído comida para ti.
El moreno tomo la canasta. Al principio parecía anonadado, después desconfiado y por ultimo sus ojos se iluminaron con el agradecimiento.
- Mmmm, ¿Quién diría que Malfoy tiene un buen corazón? –Declaró Albus con una enorme sonrisa.
Scorpius sintió que su cara ardía de la vergüenza.
- Cállate…renacuajo. –Antes de que Albus quisiera decir cualquier otra cosa, Scorpius salió de los vestidores.
Después de la práctica con todo el equipo de Quiddtch, Albus extrañamente se sentía relajado. El gesto que Scorpius había tenido con el, lo traía literalmente en las nubes. Sabia que no debía pensar cosas que no eran, Scorpius jamás se fijaría en el. Y el no debía fijarse en él tampoco. Lo único con lo que podía aspirar ser era amigos, bueno…tal vez no amigos, esa era una palabra mayor que no se la otorgaría a nadie tan fácilmente. Compañeros de clases. Si, esa era una buena palabra para su relación.
Mientras caminaba hacia el castillo, sintió como los ojos de los otros miembros del equipo estaban puestos en él. Desde que Scorpius lo había puesto como buscador, nadie del grupo le hablaba, a excepción del capitán, claro. La verdad no le importaba en lo mas mínimo, desde que era pequeño se había acostumbrado a estar solo. Toda su vida había cambiado a raíz de su secuestro por el clan de los vampiros. Él sabía que cuando su padre lo había traído de regreso, de una manera muy suave, el se había comportado como un bastardo. No culpaba a su familia por no quererlo, probablemente el tampoco se querría después de lo que les hiso pasar. Tal ves por eso no le recriminaban tanto su estilo de vida como el Jaguar Negro. Por que aceptémoslo, ¿Qué padres dejarían a un niño de diecisiete años jugar con la muerte todos los días?
No importaba lo que hiciera o lo que dijera, todo el clan Weasley le tenia miedo, por lo tanto, cuando se realizaban reuniones familiares a él simplemente lo ignoraban. Sus primos creían que él era una amenaza para la humanidad, su hermana lo odiaba y sus padres lo toleraban lo suficiente.
Una de las cosas que más detestaba de sus padres era el hecho de que siempre se comportaban amables con el. Desde que él era el jaguar negro, ellos jamás le alzaban la vos, jamás le prohibían salir de noche y no volver por varios días, jamás le preguntaban si había comido, si había dormido bien o si le faltaba ropa interior que ponerse. Que daría él por que solo una vez, una pequeña ves, su padre o madre lo castigaran por llegar tarde y que le dijeran lo preocupados que estaban por que él no volvía.
Sueñas Albus…ellos jamás volverán a ver en ti a su hijo pequeño. Ellos ven en ti a un asesino.
La verdad lo desgarraba por dentro. Pero tenia que seguir. Vive día por día Albus.
- ¿Preparándote para traicionar a nuestra familia? – Albus se quedo paralizado al escuchar la vos cortante de su hermana Lily.
- ¿Y tu cuidándote de no morderte y envenenarte, hermanita? –Albus ya estaba cansado de que siempre que se encontrara con su hermana ella lo insultara de alguna manera.
Todos los integrantes del equipo de Quiddtch de Slytherin, como buenas chismosas, se detuvieron a escuchar lo que los hermanos tenia que decirse.
La hermana pequeña de Albus, como siempre, estaba acompañada de Fred y Hugo. Este ultimo, Albus había pensado que estaría de su parte, pero como siempre, se había equivocado. Al parecer estaba de parte de Lily. Traidor…
- Albus, deja de hacer el tonto –dijo Fred.
- Y tú deja de meterte en lo que no te importa –contestó Albus. –esto es entre mi hermana y yo.
- ¿Hermana? –preguntó sarcásticamente Lily. –No tienes derecho a llamarme hermana, tú ya no eres mi familia. Tú no eres más mi hermano. Mi hermano murió el día en él que se fue con Rogan.
La declaración de Lily dejo a Albus en estado de shock. Fred y Hugo parecían igualmente sorprendidos.
Albus cerró con fuerza los puños al punto del dolor. El moreno sabía que desde que había regresado después de la muerte de Rogan, Lily ya no lo trataba igual. Desafortunadamente no podía recordar muy bien el tiempo que estuvo con ellos cuando su padre lo rescato la primera ves, pero debió haber echo algo muy malo para que su pequeña hermana lo odiase.
- Bien, -dijo Albus de la manera más fría –entonces ya no tienes hermano.
- Entonces vete de una ves, tu no perteneces a este lugar. –Lily parecía tan fría. ¿Cómo es que su corazón se había llenado de rencor?
Scorpius no sabia como sentirse, años atrás, siempre había deseado tener un hermano o hermana, pero ahora viendo lo fría y despiadada que era Lily con Albus, pensó que era mejor ser hijo único.
Las palabras de aquella chiquilla pelirroja estaban desgarrando el corazón de Albus, y a pesar que él tuviera esa pose tan fría y calmada, en su interior estaba muriendo. ¿Por qué no estaba aquí Jareth cuando lo necesitaba? En este momento, Albus necesitaba un apoyo.
Tal vez debería decirle a Albus que su hermano estaba en el castillo. De todas formas, dentro de un rato subiría a la oficina del profesor Nott.Sitenía suerte, James estaría ahí y podría decirle lo que estaba pasando.
Albus siguió derecho en dirección al castillo, si siquiera mirar atrás. Pero en vez de entrar al edificio, el moreno cambio de rumbo en dirección al lago.
Scorpius espero a que todos los del equipo entraran al castillo para entonces desviarse y seguir a Potter. Para su sorpresa, lo encontró arriba de un árbol. Parecía dormido pero en cuanto escucho pasos, abrió los ojos.
- ¿Qué quieres Malfoy? –Preguntó el moreno con vos cortante.
¡Por Merlín! Albus había vuelto a subir sus barreras.
- ¿Podrías bajar del árbol? Me pones nervioso.
Albus alzó una ceja, al parecer el comentario le había divertido. Con una destreza, como nunca antes había Scorpius visto, Albus se balanceo por las ramas y aterrizo en el suelo con suavidad.
- Dime… -incitó Albus.
- Siento que tu hermana dijera eso…
- Eso no es de tu incumbencia –El moreno le dio la espalda y comenzó a caminar hacia el castillo.
- ¡Albus! Maldita sea, ¡habla conmigo! –Scorpius se planto en frente de Potter. – Si quieres llorar o maldecir, hazlo, pero no te quedes callado como si no te importara.
- ¿Y tú que sabes? A mi no me importa si ella me odia o no, deje de sentirme en familia desde hace mucho tiempo. Yo no tengo a nadie, y nadie me importa.
Scorpius sintió pesar ante su declaración. Albus parecía siempre tan solo. Pero él no podía mentirle. A pesar de que solamente hubiera visto un poco de su verdadera personalidad, se había dado cuenta del frágil ser que era.
- ¿Ni siquiera Jareth? –se atrevió a preguntar.
Albus frunció el seño y quito de en medio al rubio para seguir su camino. Pero antes de dejarlo se volteo, lo miro a los ojos y dijo:
- Él es especial…
Scorpius se sintió realmente dolido.
¿A caso Jareth sabia lo que Albus hacia por las noches?
¿A caso sabía que a Albus no le gustaba estar solo?
¿A caso Jareth sabía que en realidad a Albus no le gustaba dormir tampoco solo?
¡Demonios Scorpius! ¿En que estabas pensando? ¿Realmente creíste que Albus te vería como un amigo?
El rubio estaba realmente confundido de sus propios pensamientos. ¿Por qué quería que Albus lo reconociera?
Porque Albus era reamente una persona honesta y trasparente. Por que el no actuaba bajo el agua como otros. Porque él seria de esos amigos que estarían contigo en las buenas y en las malas. Porque quería saber más de el y porque quería que cada ves que lo mirara le sonriera como si le importara.
Scorpius, eres relámete patético.
Jareth le platico a su hermana prácticamente todo lo que había pasado con Albus, omitiendo claro, el detalle de que él era el Jaguar Negro.
- Fueron ellos, -acusó Jaden –fueron esos, los de la Orden de Caín, los que le hicieron esto.
- Eso no lo sabemos, así que preferiría que no le dijeran nada a Sev.
- Lo más seguro es que ese tal Jaguar Negro esta involucrado. –parecía que su hermana no le estaba haciendo caso- Tal ves debería enviarle un mensaje a Rogan.
- ¡No! Espera. Deja que las cosas avancen un poco más. –Lo que Jareth realmente quería era saber toda la verdad de lo que paso con Rogan y Albus, no solo fragmentos. –Jaden, esta situación es muy extraña. Quiero saber la verdad.
- No rasques demasiado en el lodo Jareth. –Jaden se fue hacia el castillo dejando a un muchacho totalmente confundido. ¿Qué era lo que Jaden sabia que no le había contado aún?
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Mago por naturaleza (Scorpius/ Albus) +17Un mago que es un desastre en la magia, es odiado a muerte por él chico del que se enamoro a primera vista. |
