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~Akemi~+1
.Distracción.
Ángel no podía concentrarse en las clases de química.
Aún no entendía por qué tenía que ser tan difícil esa materia, sobre todo con la maestra que apenas abría la boca ponía a todos a dormir.
Pero tenía que aguantarlo. Vio a un lado a Alejandro, que usaba sus lentes de lectura y estaba concentrado en su libro y en tomar apuntes, él simplemente no podía hacer lo mismo.
Así que aprovechando que estaba en una esquina del salón tomo una de sus plumas y la mano de Alejandro.
—¿Qué crees que estás haciendo?
—Préstame tu brazo un segundo.
—Por supuesto que no.
Estuvieron discutiendo unos segundos en voz baja, al pendiente de que la maestra no los descubriera, hasta que Alejandro terminó cediendo, y dejando que Ángel escribirá sobre la palma de su mano y descubrió que tal vez Ángel era un poeta.
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Conversaciones. (Original) |
