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.Capítulo 8
3ºB
- ¡Que os calléis!- Gritó Hiroki dando golpes a la mesa, todos los presentes callaron al instante.- Aquí no hemos venido a perder el tiempo.
- ¿Qué es eso tan importante que nos tenéis que decir?- Preguntó Hatori impaciente.
- Misaki, dilo tú que se te da mejor dar malas noticias.- Le pidió el presidente.
-Kamijou-sensei ha estado revisando las cuentas de la comunidad y estamos en números rojos.- Dijo Misaki tímidamente.
- ¿Cómo que estamos en números rojos?- Preguntó Shinobu sorprendido.
- Es imposible que estemos en números rojos, solamente llevamos un mes viviendo aquí.- Dijo Ritsu.
- Pues ya debemos dinero.- Dijo Hiroki.- Hemos tenido que rellenar los extintores y arreglar el ascensor.
-Pero lo de los extintores ha sido culpa de Usami.- Se quejó Shinobu.- ¡Que lo pague él!
- Para una vez que cocino...- Murmuró el escritor.
- ¡Nadie te pidió que lo hicieras!- Le gritó Misaki.
- Solo quería darte una sorpresa.- Se defendió Akihiko.
- La sorpresa nos la llevamos todos al ver las llamas.- Dijo Kisa.
- Da igual de quién haya sido la culpa, la cuestión es que estamos en números rojos.- Dijo Hiroki.
- ¿Vamos a tener que pagar una derrama?- Preguntó Takano.- Me niego, yo no pago nada. Nadie me avisó de que ibais a arreglar el ascensor, total solo son tres pisos, ha sido algo innecesario. Además, los extintores los debería pagar el culpable del incendio.
- ¿Pero qué incendio? Mira que os gusta exagerar.- Dijo Akihiko.- Se me fue la mano con el flambeado y salieron un par de chispitas, no fue un incendio.
- Nos estamos alejando del tema.- Dijo Hiroki comenzando a hartarse.- No vais a tener que pagar ninguna derrama.
- ¿Entonces cómo vamos a hacer para pagar lo que debemos?- Preguntó Ritsu.
- Yo no vendo ningún órgano.- Dijo Miyagi negando con la cabeza.- Nunca se sabe si vas a necesitar alguno.
- No es nada de eso.- Dijo Misaki.- Es algo legal.
- Vamos a participar en un concurso para ganar el dinero que necesitamos.- Dijo Hiroki emocionado.
-Me parece bien.- Dijo Yukina.- Y con lo que sobre podemos ir todos a un crucero gay.
- ¡Ya hablamos sobre ese tema y te dije que no!- Le gritó Kisa.
-No, lo que sobre lo guardaremos para la comunidad.- Dijo Misaki sonrojado por la idea de Yukina.
- ¿Y a qué concurso iréis, Hiro-san?- Preguntó Nowaki.
-" Atrévete si puedes".- Respondió el presidente.
- No me suena y yo me paso todo el día pegado a la tele.- Dijo Chiaki.
- ¡Menos tele y más trabajar, que eres más vago que un felpudo!- Le dijo Takano desde el otro lado de la sala.
- Sin faltar, que me desmoralizo y entonces sí que no rindo.
- Es que todavía no se ha estrenado el programa, nosotros seremos los primeros participantes.- Respondió Hiroki.
- ¿Por qué tenéis que participar vosotros dos?- Preguntó Shinobu frunciendo el ceño.- Deberíamos sortear quién va al concurso.
- No, vamos Misaki y yo.- Dijo Hiroki tajante.
- Sensei, yo no quiero ir.- Dijo Misaki con un hilo de voz.- No se me da bien lo de acertar preguntas.
-Lo siento, Misaki, pero ya les hemos dicho a los del programa que iríamos tú y yo.- Dijo Hiroki con una sonrisa triunfal.
- Pues no me parece justo.- Dijo Shinobu mirando mal al presidente.
- A mí tampoco.- Murmuró Misaki.
1ºA
- ¡YUKINA!- Gritó Kisa nada más entrar en la casa.- ¡Tu estúpido perro lo ha vuelto a hacer!
-Es normal que lo haga, Kisa-san, le están saliendo los dientes y necesita morder cosas.- Dijo Yukina mientras cogía al perro en brazos.
- ¿Y por qué tiene que destrozar mis zapatos?- Preguntó el editor enfadado.-¿Por qué no muerde los tuyos?
- Pobre Merri, no sabe lo que hace.- Dijo el menor acariciando al perro.
- ¿Por qué lo tienes que tener siempre en brazos?- Preguntó Kisa.
- Porque es muy suave y le gusta que lo lleve en brazos.- Respondió Yukina y se paró a pensar.- Kisa-san, no será que estás celoso...
- Vamos a ver, ¿cómo voy a estar celoso de un perro?
- No sé, me ha dado esa sensación.- Dijo el menor dejando a Merri en el suelo.- Pero no te preocupes, ahora tendrás toda mi atención.
- ¿De verdad?- Preguntó Kisa mirando hacia otro lado.
- De verdad.- Yukina se abalanzó sobre él tumbándolo en el sofá y comenzó a besarle mientras sus manos se colaban por debajo de la camiseta.
- Aagg, estás frío.- Se quejó Kisa con una sonrisa mientras con su rodilla rozaba la entrepierna de su pareja. Poco a poco se fueron deshaciendo de la ropa, hasta quedar completamente desnudos. El mayor se situó delante de la erección de Yukina y comenzó a masajearla con la mano, para después llevarla hasta su boca.
- Kisa-san...-Gimió Yukina pero fue interrumpido por unos ladridos.- ¿Q-qué le pasa?
- Da igual.- Dijo Kisa sacando de su boca el pene de su pareja.- No puedo esperar más, métela.
- Espera, te tengo que preparar un poco, ¿no?.- Dijo Yukina entrecortadamente.
- No es necesario, métela ya.- Ordenó el mayor empezando a impacientarse. Yukina situó su miembro delante de la entrada de su amante y comenzó a hacer presión pero un ruido de algo que acaba de romperse los interrumpió.- ¡Estúpido perro!
- ¿Dónde vas?- Preguntó Yukina al ver que el mayor se había levantado del sofá y comenzaba a vestirse.
- Tu asqueroso chucho me ha quitado las ganas de hacer nada.- Dijo Kisa acabando de ponerse la ropa.- Me voy a dar una vuelta.
- ¿Ahora?- Preguntó Yukina pero no obtuvo respuesta, ya que el editor había salido rápidamente del apartamento.
1ºB
- ¿Has visto?- Dijo Shinobu todavía enfadado.- Es un idiota, ¿por qué tiene que ir él? Se cree que por ser el presidente es mejor que todos, pues está muy equivocado. ¿Y por qué tiene que obligar al pobre Misaki a participar en el concurso? Está claro que no quiere hacerlo, podría concursar otro.- Continuó Shinobu hablando, pero se calló de repente al observar a su pareja.- ¡Miyagi, te estás durmiendo!
- ¿Qué?- Abrió los ojos el profesor.- No, no, estaba despierto.
- Mentira, te estoy hablando y no me estás escuchando.
- Shinobu, ¿tantas ganas tienes de participar en ese dichoso programa?- Preguntó Miyagi cansado.
- No, a mí el programa me da igual.- Dijo Shinobu.- A mí lo que me fastidia es que participe el idiota de tu compañero de trabajo.
- ¿Qué te pasa con el pobre Hiroki?- Preguntó el mayor cansado de la situación.
- ¡Esto es lo que me pasa!- Dijo el estudiante alzando la voz.-¡Tú siempre le defiendes, siempre te pones de su parte!
- Oye, ¿por qué no participas en el programa?- Preguntó Miyagi y se echó a reír.- Me gustaría ver la cara que se le queda al verte en el plató.
- Eso es una gran idea, Miyagi.- Dijo Shinobu sonriendo.- ¿Te gustaría ser mi pareja en el concurso?
- Ni por todo el oro del mundo.- Dijo Miyagi.- Búscate a otro.
- ¿Y quién querría ser mi pareja?
- Tengo entendido que Onodera, el del 2ºA, es bastante inteligente.- Le dijo Miyagi.
- ¿Si?
- Sí, tiene cara de listo.- Le contó Miyagi.- Ve y pregúntale.
- Pero todavía no sé si me cogerán para participar...- Dijo Shinobu.
- ¿Y a qué esperas? Corre y averigua qué hay que hacer para concursar.- Dijo Miyagi y Shinobu salió emocionado del apartamento.- Ahora que está entretenido, a dormir.
3ºA
- Sí, Takahiro, no te preocupes.- Dijo Misaki que estaba hablando por teléfono y en ese momento entró Akihiko en el apartamento.- No, no me está obligando a hacer cosas que no quiero...¡Takahiro, él no es de esos!...Sí, acaba de llegar, ahora te lo paso.
- Hola, Takahiro.- Dijo el escritor cogiendo el teléfono.- Me ofendes, soy un caballero...Ya hemos hablado de eso, Misaki sigue siendo virgen.
- Mentiroso...-Murmuró el menor sentándose en el sofá.
- ¿Y cómo estás tú?- Preguntó Akihiko que seguía hablando con Takahiro.- ¿Ya te han quitado los puntos?...Fue mala suerte que te desmayaras y te dieras contra la mesa...No, no te preocupes, Misaki ha conseguido limpiar la sangre, no han quedado restos.
- ¿Por qué habláis tanto?- Preguntó Misaki.- No molestes a mi nii-chan que tendrá cosas que hacer.
- Takahiro, hablaremos en otro momento que Misaki me pide atención.- Dijo Akihiko y colgó.
- No hacía falta que le dijeras a mi nii-chan que sigo siendo virgen.- Dijo el menor sonrojado.
- Pues se lo ha creído.- Dijo el escritor sonriendo.- Si supiera lo que te he hecho y lo que estoy por hacerte...
- ¡No te acerques a mí, pervertido!- Dijo Misaki alejándose del mayor.
- ¡BAKAHIKO!- Llamó Hiroki mientras llamaba al timbre.
- Será pesado...- Susurró Akihiko para luego alzar la voz.- ¡He muerto!
- ¡Ábreme que es importante!- Dijo el presidente y Misaki fue corriendo a abrirle.
- Sentimos molestaros.- Dijo Nowaki que venía acompañando a su pareja.
- No molestáis.- Dijo Misaki sonriendo.
- Misaki, no mientas.- Le dijo Akihiko.- Bueno, ¿a qué habéis venido?
- A entrenar.- Dijo Hiroki sentándose en el sofá y poniendo un tablero sobre la mesa.
- ¿A entrenar?- Preguntó Misaki confundido.
- Me has dicho que no eres bueno con estas cosas y yo quiero ganar.- Dijo Hiroki.- Así que vamos a estar jugando al trivial hasta el día del concurso.
-Pues yo me voy arriba y no os molesto.- Dijo el escritor levantándose.
- ¡Alto!- Le ordenó el profesor.- Jugaremos los cuatro, primero por separado y luego por parejas.
- Vale, pero me pido ser el verde.- Dijo Akihiko.
- ¡El verde me lo he pedido yo!- Protestó Hiroki.
- ¿Cuándo?- Preguntó el escritor arqueando una ceja.
- En mi casa.- Dijo el presidente tajante.
- Venga, comencemos a jugar o se hará tarde.- Dijo Nowaki y empezaron a jugar.
- Muy bien, Misaki, te pregunto.- Dijo Akihiko cogiendo una carta.- ¿A qué velocidad crece el pelo? 10 cm al año, 20 cm al año, 15 cm al año o 25 cm al año.
- ¿Esas son las respuestas posibles?- Preguntó Misaki arrugando el entrecejo y Akihiko asintió.- Pues...mmm...no sé...15 cm al año.
- ¿Es tu última respuesta?- Preguntó el escritor poniendo nervioso a su novio.
- ¡Sí!
- Pues has tenido suerte, es la respuesta correcta.- Dijo Akihiko.
- Esperemos que en el programa sigas teniendo suerte.- Comentó Hiroki.- Ahora te toca preguntarme a mí.
2ºA
-¿Te puedo ayudar en algo, Shinobu-chan?- Preguntó Takano nada más abrir la puerta.
- ¿Cómo que "chan"?- Se molestó el menor.- Bueno, no importa, venía a hablar con Onodera.
- Ahora mismo no está.- Dijo Takano.
- Qué lástima...- Murmuró Shinobu y de pronto tuvo una idea.- ¿Usted sacaba buenas notas, Takano?
- No me hables de usted.- Dijo Takano.- ¿A qué viene esa pregunta?
- Me gustaría hacer enfadar al idiota que tenemos por presidente, por eso voy a presentarme también al concurso.- Explicó Shinobu.- Pero necesito una pareja, había pensado en Onodera, pero tú también me sirves.
- Me gusta hacer enfadar a la gente, pero se supone que deben ganar ellos para conseguir el dinero.- Dijo Takano.
- Eso no importa, el dinero que ganemos nosotros será para la comunidad.- Dijo Shinobu.- Solo quiero que ese sujeto pierda y poder reírme en su cara.
- Supongo que sí puedo ser tu pareja.- Dijo Masamune.- Pero si Kamijou se vuelve loco no quiero saber nada.
- No te preocupes, será todo culpa de Miyagi.- Dijo Shinobu feliz.- Tenemos que estar en plató el jueves a las cinco.
- Allí estaré.
- Una cosa más, el presidente no se puede enterar de nada.- Dijo Shinobu sonriendo.- Quiero que sea sorpresa.
2ºA
- Hola.- Saludó Takano a Ritsu, quien acababa de llegar a casa.
- Hola, ¿qué has hecho durante mi ausencia?- Preguntó el menor.
- Trabajar y molestar a Chiaki por el agujero. Pero no hablemos de mí.- Dijo el editor jefe.- ¿Cómo te ha ido en la comida con tus padres?
- Bueno, esta vez solo me han intentado casar tres veces y mi padre ya lo está preparando todo para retirarse y dejarme la editorial a mí.- Dijo Ritsu mosqueado.- Supongo que no ha ido tan mal...
- Si te sirve de consuelo voy a participar en un concurso de la tele.- Le dijo Takano mientras leía un manga.
- No, no me sirve de consuelo.- Dijo el menor.- De hecho me altera la idea de que puedas hacer una idiotez delante de todo Japón.
- Parece mentira que no me conozcas, yo nunca hago idioteces.- Dijo el mayor.- Ritsu, ¿si me declaro durante el concurso cuánto te enfadarías?
- No volveríamos a tener sexo nunca.- Dijo Ritsu tajante.
-E so no te lo crees ni tú.- Rió Takano.- No aguantarías sin que te hiciera guarradas.
- ¡Ja! Yo aguanto muchísimo más que tú sin tener sexo.
- ¿Quieres que apostemos?- Preguntó el editor jefe.- Si yo aguanto más que tú sin sexo, tendrás que hacer en la cama lo que yo te pida.
- ¿Lo que tú me pidas?- Preguntó Ritsu desconfiado.- Bueno, está bien pero si yo gano no podrás molestar, insultar ni intimidar a las personas durante todo un día.
- Ese tipo de cosas son parte de mi encanto natural.- Dijo Masamune.- Un día se pasa rápido, así que acepto.
- Que gane el mejor.- Dijo Ritsu dándole un apretón de manos a su pareja.
- Ese soy yo.
2ºB
- ¡Tooooooori!- Gritó Chiaki desde el baño.
- ¿Qué pasa ahora?- Preguntó Hatori desde el otro lado de la puerta.
- Me he dejado la toalla en la habitación.
- Vale, ahora te la traigo.- Dijo Hatori para luego irse a por lo pedido. Mientras tanto Chiaki se fue desnudando rápidamente para poder recibir a su pareja. Le apetecía tener sexo y esa era la única forma que se le había ocurrido para proponérselo a su pareja.
- Aquí tien...- Comenzó a decir el editor nada más entrar al baño, pero se quedó mudo al ver a su amante parado delante de él y sin nada de ropa.
- Gracias.- Dijo Chiaki como si nada mientras alargaba el brazo para coger la toalla.
- Yo también necesito un baño.- Dijo Hatori sin dejar de observarle y el mangaka sonrió para sus adentros.
- Pues entonces no tardaré en darme el baño, no quiero hacerte esperar.
- No es necesario, podemos bañarnos los dos juntos.- Dijo el seme comenzando a desvestirse.
- No sé yo...Seguro que si nos bañamos juntos acabaremos más sucios que antes.- Dijo Chiaki haciéndose de rogar.
- No te preocupes, nos daremos todos los baños que sean necesarios hasta que quedemos limpios.- Dijo Hatori acercándose a su pareja.
- Tori, eres un pervertido.- Dijo Chiaki dejándose tocar.
- Te gusta que lo sea.- Dijo Hatori mientras le quitaba lentamente la ropa al mangaka. Comenzó a besar su cuello mientras Chiaki pasaba los brazos por su cuello. Una vez estuvieron desnudos, el editor lo metió en la bañera y comenzó a lamer sus pezones. En aquel momento entró el perro en el baño.
- Míralo, qué perro más inteligente.- Dijo Chiaki.
- Solo ha abierto una puerta, eso lo hacen todos los perros.- Dijo Hatori riendo para luego comenzar a masturbar al otro.
- Tori, para.- Pidió el mangaka.
- ¿Ocurre algo?- Preguntó el editor.
- Sí, Pippin nos está mirando y se me baja.- Dijo Chiaki mientras miraba al perro.
- Pippin largo.- Le dijo Hatori pero el cachorro no obedeció.
- Yo así no puedo.- Dijo Chiaki saliendo de la bañera y poniéndose una toalla.
- Eres lo peor, Pippin.- Dijo Hatori mientras le acariciaba detrás de la oreja.
Plató de televisión.
- Misaki, tranquilo, actúa con normalidad.- Le aconsejó Kamijou.- Haz como si estuvieras acostumbrado a salir en la tele y ya verás como ganamos.
- Sensei, es la primera vez que estoy en un sitio así.- Dijo Misaki mirando a su alrededor.- No puedo evitarlo, me sudan las manos.
- Pues secate con un pañuelo, no sea que las tengas que utilizar.- Dijo Hiroki.- ¿Por qué tardan tanto en venir estos dos?
- Es mejor así, Usagi-san me pone aun más nervioso.- Dijo el menor para luego quedarse pensativo.- ¿Y si les ha pasado algo?
- ¡Como les haya pasado algo les mato!- Gritó el profesor.- Ya tengo bastante con salvar el edificio, no puedo ir preocupándome por ese par.
- Mire, sensei, ahí están Shinobu y Takano.- Dijo Misaki alegre.- Seguro que han venido a darnos ánimos.
- Pero no pueden estar aquí, deberían estar entre el público.- Dijo Hiroki arrugando el entrecejo.
- Se habrán colado entre los concursantes.- Comentó Misaki.- Con el carácter que tienen esos dos seguro que no se han atrevido a negarles la entrada...
- Pero si aquí están los héroes de la comunidad.- Dijo Shinobu sonriendo.
- ¿Habéis venido a apoyarnos?- Preguntó Misaki alegre.
- No, somos concursantes.- Dijo Takano riendo al ver la cara de confusión del presidente.- Vais a morder el polvo.
- ¿Cómo que sois concursantes?- Preguntó Hiroki comenzando a enfadarse.- Se supone que el dinero es para la comunidad.
- No te preocupes por el dinero, nosotros solo queremos ganaros.- Dijo Shinobu.
- Esto ha sido idea de Miyagi.- Se apresuró a decir Masamune.
- Kamijou y Takahashi sois el equipo azul.- Dijo una chica que trabajaba ahí mientras les colocaba en el pecho una pegatina con su nombre en azul.- Takano y Takatsuki sois el equipo rojo. Colocaos en vuestros sitios que vamos a empezar a grabar pronto.
- Empieza la guerra.- Dijo Shinobu mirando mal a Kamijou.
- No voy a permitir que ganéis.- Aseguró Hiroki.
- Eso ya lo veremos.- Dijo Takano y se fueron a sentarse en la mesa roja que había en el centro el plató.
- Misaki, no quiero presionarte ni ponerte más nervioso pero si perdemos me tiro de la azotea de la universidad.- Dijo el profesor.
- Oír eso no me tranquiliza, sensei.
Rellano del 3º
- Hola.- Saludó Nowaki entrando en el ascensor.- ¿Vas hacia el plató?
- Sí, ¿quieres que te lleve?- Preguntó Akihiko.
- Sí, gracias, así me ahorro tener que ir en metro.- Dijo Nowaki y de repente se paró el ascensor.
- ¡No puede ser!- Se quejó Akihiko.- No podemos tener tan mala suerte.
- No pasa nada, apretamos la campanita y solucionado.- Dijo el médico mientras pulsaba el botón.
- ¿Ocurre algo?- Preguntó Nibori por el interfono del ascensor.
- Sí, se ha parado el ascensor y nos hemos quedado atrapados.- Dijo Nowaki.
- Ahora llamo a los bomberos.- Dijo Nibori.
- ¡Ja! Seguro que tardan mucho en venir, si no llegamos a tiempo al programa Misaki se enfadará conmigo.- Dijo Akihiko preocupado.
- ¿Usami-san también está en el ascensor?- Preguntó el conserje.
- Sí, nos hemos quedado los dos.- Respondió Nowaki.
- Pues lo siento mucho pero no voy a poder llamar a los bomberos, pero no se preocupe Usami-san yo iré a ver a Misaki y le diré que no ha podido ir.- Dijo Nibori.
- ¡MALDITO HIJO DE LA GRAN P...!- Gritó el escritor.
- ¡Voy a hacer que Hiro-san te despida!- Dijo Nowaki enfadado.- ¡Has despertado la furia del demonio Kusama!
- ¡TE VOY A DESTRIPAR, DESGRACIA HUMANA!- Le gritó Akihiko rojo de ira.
1ºA
- Kisa, te considero una persona de confianza.- Dijo Ritsu entrando en la casa. Se sentó en el sofá junto a Yukina y Kisa se quedó de pie observándole confundido.- Necesito que me ayudes.
- ¿Has matado a alguien?- Preguntó Kisa.
- Yo tengo fuerza, creo que podría arrastrar un cadáver.- Dijo Yukina.
- No es nada de eso.- Dijo Onodera poniéndose rojo.- Necesito vuestra ayuda para poder seducir a Takano.
- ¿Para qué quieres seducirlo?- Preguntó Kisa.- Él ya va detrás de ti.
- Hemos apostado para ver quién aguanta más sin sexo, por eso necesito hacer que se me tire encima para ganar la apuesta.- Dijo Ritsu.
- Eso es fácil.- Dijo Kisa riendo.- Yukina, ¿cómo te pongo cachondo?
- Ya sabes que a mí me gusta mucho el sexo oral, Kisa-san.- Dijo el más joven guiñándole un ojo a su pareja.
- Solucionado, chúpale a Takano su colita.- Dijo el más mayor descaradamente.
- No, tiene que parecer que no le estoy provocando.- Dijo Ritsu.
- Paseate desnudo por la casa.- Dijo Yukina.
- Eso sigue siendo muy descarado.- Dijo Onodera.
- Pues mánchate con agua y quítate la camiseta delante de él.- Dijo Kisa.- Seguro que se vuelve loco.
- Si Kisa-san hiciera eso yo me lanzaría a por él.- Dijo Yukina y en ese momento entró Hatori en el apartamento.
- Hola a todos.- Saludó el recién llegado.- ¿Podemos hablar en privado, Yukina?
- Claro.- Dijo el menor y los dos semes salieron del apartamento.
- Sigo creyendo que estos dos tienen algo.- Refunfuñó Kisa.
Plató de televisión.
- Bienvenidos a "Atrévete si puedes".- Dijo el presentador.- En este primer programa tenemos a cuatros concursantes, todos hombres. En el equipo azul participarán Misaki Takahashi de 22 años, estudia en la universidad M y viene acompañado de Hiroki Kamijou de 32 años, que curiosamente es profesor y vecino de Takahashi.- Después de decir eso el público apludió.- Misaki eres un afortunado, siendo tan cercano a tu profesor seguro que tienes la asignatura aprobada.
- Bueno...- Dijo Misaki en un susurro avergonzado.
- ¡Ja!- Rió Hiroki.
- Y los concursantes del equipo rojo son Takano Masamune de 27 años, es editor de manga shoujo en la editorial Marukawa.- Dijo el presentador sonriendo.- Su compañero es Shinobu Takatuski de 18 años recién cumplidos y qué casualidad, estudia en la misma universidad que Misaki. ¿Os habéis visto alguna vez antes?
- Jamás he visto a ninguna de esas personas.- Dijo Shinobu.
- Genial, ahora que ya nos conocemos todos que empiece el juego.- Dijo el presentador y el público aplaudió de nuevo.- La primera prueba será una ronda de preguntas rápidas, un concursante de cada grupo tendrá que contestar a cuatro preguntas pero si falla la mitad su compañero será castigado. Muy bien, deberán responder a las preguntas Misaki y Masamune.- Más aplausos.- La primera pregunta es para Misaki, ¿quién compuso la ópera "Notre Dame"?
- Ay, dios, pero si eso no es una ópera, eso es una peli de Disney.- Dijo Misaki con cara de miedo.
- ¿Franz Schmidt o Peter Eötvos?- Dijo el presentador.- Esas son las dos posibles respuestas.
- No lo sé, no tengo ni idea...
- Tienes tiempo.- Dijo el presentador.
- Misaki, por el amor de Akihiko, responde algo que lo del castigo no me gusta como suena.- Dijo Hiroki nervioso.
- ¡Franz Schmidt!- Gritó Misaki.
- ¡Correcto!- Dijo el presentador y el público aplaudió.- El turno de Masamune ha llegado, ¿quién es un marinero tuerto y come espinacas?
- ¡TONGO!- Gritó Kamijou.-¡Esa es muy fácil!
- Cállese, señor Kamijou, cállese.- Le dijo Shinobu.
- ¿Superman o Popeye?
- Popeye.- Dijo Takano seguro.
- ¡Correcto!- Gritó el presentador.
- Muy bien, Misaki, el turno ha vuelto a ti.- Anunció el presentador.- ¿Qué deporte practica Harry Potter?
- ¡Tongo!- Gritó Shinobu y Hiroki le miró mal.
- ¿Sky o quidditch?- Preguntó el presentador.
- ¡Sky!- Dijo Misaki.
- ¡Incorrecto!- Gritó el presentador.
- ¡Te voy a hacer leer todos los libros de Harry Potter tres veces!- Le rugió Hiroki.
Rellano del 1º
- ¿Ha pasado algo?- Preguntó Yukina.
- Necesito que cuides de Pippin durante un par de horas.- Dijo Hatori.
- ¿Te vas a algún sitio?
- No, pero es la única forma de tener sexo con Chiaki.- Dijo Hatori.- El perrito se queda observando como lo hacemos y eso intimida a Chiaki.
- Estoy en la misma situación que tú.- Dijo Yukina.- Así que cada vez que quieras hacerlo con tu pareja me traerás a Pippin y cuando yo quiera hacerlo con Kisa-san, te subiré a Merri para que lo cuides.
- Me parece genial.- Dijo Hatori contento.- Así todos seremos felices y tendremos sexo.
- ¡SOCORRO!- Se oyó un gritó desde el ascensor.
- ¿Has oído eso?- Preguntó Yukina.
- Sí, viene del ascensor.- Dijo Hatori y se acercaron para ver qué ocurría.- ¿Hay alguien ahí?
- ¡Avisad a los bomberos!- Gritó Nowaki.- ¡Llevamos encerrados tres horas aquí!
- ¡Antes de llamar a los bomberos torturad a Nibori, pero no le matéis!- Gritó Akihiko.- ¡Quiero matarle yo con mis propias manos!
- Yo llamaré a los bomberos, tú tortura al conserje.- Le dijo Hatori a Yukina.
- No, le dejo ese honor a Akihiko.- Dijo Yukina mientras Hatori marcaba el número de emergencias.
Plató de televisión.
- Bueno, solo queda la última prueba del programa.- Anunció el presentador.- En esta prueba deben participar los dos concursantes de cada color. Es una carrera de relevos, el primer concursante deberá llevar una cuchara con un huevo en la boca mientras va metido en un saco. Al llegar a donde se encuentra su compañero para pasarle el huevo sin utilizar las manos. El concursante que lleve ahora el huevo deberá trepar por el rocódromo, no os preocupéis, solo mide dos metros. Después se volverá a reunir con su compañero y juntos deberán resolver un acertijo en 60 segundos.
- No parece tan complicado.- Comentó Shinobu.
- Eso espero, ya he tenido suficiente con meterme en una bañera llena de gusanos.- Dijo Hiroki mirando mal a Misaki, ese había sido su castigo por haber perdido la primera prueba.
- Muy bien, ¿qué concursantes se meterán en el saco?- Preguntó el presentador.
- Yo tengo vértigo, prefiero ir saltando dentro de un saco.- Dijo Hiroki.
- ¡Yo también quiero hacer la parte del saco!- Gritó Shinobu.
- Hiroki y Shinobu coged una cuchara y meteos en el saco.- Dijo el presentador y los nombrados obedecieron. Una azafata del programa les puso a cada uno huevo de plástico en la cuchara.- Misaki y Masamune situaros debajo del rocódromo. Cada vez que se cae el huevo se descuenta cinco puntos. ¿Estáis preparados? ¡Adelante!
Los dos comenzaron a dar pequeños saltos dentro del saco, avanzaban muy lentamente pero el que iba en cabeza era Hiroki. A Shinobu se le había caído el huevo dos veces y eso le había retrasado un poco. Kamijou llegó primero a donde estaba Misaki y con cuidado le puso el huevo en la cuchara. El joven Takahashi subió por el rocódromo pero cuando llevaba más de la mitad se le cayó el huevo y tuvo que volver a bajar a recogerlo. Eso le dio ventaja a Takano y se puso en cabeza.
- ¡Misaki, si ganamos te apruebo!- Le gritó Hiroki.
- ¡Tor la lizerazura!- Gritó Misaki con la cuchara en la boca mientras trepaba rápidamente, aunque no consiguió adelantar a Takano. El equipo rojo ya estaba con el presentador.
- Ha llegado antes el equipo rojo, pero para ganar deberá resolver el acertijo.- Dijo el presentador.- Antes de ayer Agapita tenía 17 años y el año que viene cumplirá 20. ¿Cómo es esto posible? Tiempo.
- ¿Brujería?- Le dijo Shinobu a Takano.
- No te preocupes, conozco este acertijo.- Dijo el editor muy seguro.- Cuando se dijo este acertijo fue un 1 de enero, así que el 31 de diciembre del año pasado cumplió 18, el 31 de diciembre de este año cumple 19 y el 31 de diciembre del año que viene cumplirá 20.
- ¡Correcto!- Dijo el presentador y el público aplaudió. Después se dirigió a Hiroki y a Misaki que ya habían llegado.- No es el fin para el equipo azul porque si resuelven el acertijo en menos de 60 segundos quedaran igualados los marcadores y deberán jugárselo en otra prueba.
- Perfecto.-Dijo Misaki pensando que aprobar literatura era posible.
- Dos personas estuvieron jugando a las damas. De cinco partidas cada una gano tres. ¿Cómo es posible? - Preguntó el presentador.
- Sensei, no tengo ni idea.
- Yo tampoco, Misaki.- Dijo Hiroki resoplando.- Di lo primero que se te ocurra.
- Uno de ellos hizo trampa, seguro.- Dijo Misaki sin pensar.
- ¿Es vuestra última respuesta?- Preguntó el presentador.
- Sí.- Dijo Hiroki resignado.
- ¡Incorrecto!- Dijo el presentador.- La respuesta correcta era que no jugaban entre ellos.
- ¡Lo sabía!- Rugió Hiroki.
- ¿Tú qué ibas a saber?- Le dijo Shinobu riendo.
- Los ganadores son Shinobu y Masamune.- Dijo el presentador.- Pero eso no quiere decir que Misaki y Hiroki se vayan con las manos vacías, han ganado una cena en un restaurante de lujo.
- Qué suerte...- Murmuró Misaki.
- Y el equipo rojo ha ganado un viaje a los Fiordos Noruegos.- Anunció el presentador.
- ¿Y el dinero?- Preguntó Takano.
- ¿Qué dinero? Los premios eran una cena y un viaje.- Dijo el presentador sin dejar de sonreír.
- A la mierda la comunidad.- Suspiró Hiroki.
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+1 .
Me ha gustado el capítulo.
Al final no les fue tan mal al contarle su relación a su hermano Takahiro solo se desmayó, pobre Takahiro que se cree todo hasta que Misaki aún es virgen.
No veo la hora de ver como Ritsu provoca a Takano para ser él el ganador de la apuesta. Takano ante la seducción de Ritsu caerá en un segundo.
Jajaja Kisa celoso de un perro.
Esperaré con ansias la conti.. -
+1 .
Hay por dios estaba que me reía a cada rato cuando leía 😂🤣 . -
+1 .
Capítulo 9
1ºB
- Shinobu, ¿piensas ir a Noruega y dejarme solo?- Preguntó el profesor haciendo un puchero.- ¿Qué voy a hacer sin ti?
- ¿Qué quieres que haga? Me ha tocado, aunque no tengo ganas tendré que ir, digo yo.- Dijo el menor.- No conozco mucho a Takano así que resultará muy incómodo viajar con él.
- Pues dile que no vas y te quedas conmigo.- Propuso Miyagi.
- Me sabe mal decirle que no, puede que le haga ilusión.- Dijo Shinobu.
- Dudo mucho que le haga ilusión viajar con un mocoso.- Dijo Miyagi para provocarlo.
- ¡No soy ningún mocoso!- Le gritó el rubio a su pareja.- Además, debería estar saltando de la alegría, no todo el mundo tiene el honor de viajar conmigo.
- Claro, es un privilegio.- Bromeó el mayor mientras fumaba.- Porque tú todavía no habías nacido, sino mi sueño de la infancia hubiera sido ir de viaje contigo.
- No te burles, viejo.- Dijo Shinobu dándole un codazo en las costillas.- Te metes mucho conmigo y no entiendo por qué, soy lo mejor que te ha pasado.
- ¿Dónde estabas el día que repartieron la modestia?- Preguntó Miyagi riendo.
- En el mismo sitio en el que estabas tú el día que repartieron la gracia.- Le respondió Shinobu molesto.
- No te enfades, Shinobu-chin, que son bromitas que me gusta gastarte.- Le dijo Miyagi acariciando con una mano el pelo del menor y con la otra sujetando el cigarrillo.
- Pues no tienen gracia.
- No te entiendo, te enfadas porque le gasto bromitas a Hiroki y ahora también te enfadas porque te las gasto a ti.- Dijo Miyagi.- No hay quien te entienda.
- No se las gastes a nadie y yo no me enfadaré.- Dijo Shinobu tajante.
- Imposible, mi religión me lo prohíbe.- Dijo el profesor.
- Tú no eres creyente, Miyagi.- Dijo el estudiante comenzando a impacientarse.
- Cambiemos de tema.- Dijo el profesor dando una calada.- ¿Esos pantalones que llevas son nuevos?
- Sí, ¿te gustan?- Preguntó Shinobu inocentemente mientras se levantaba de sofá en el que estaban hablando y daba una vuelta sobre si mismo para que su pareja lo observara bien.
- Me encantan.- Dijo Miyagi y le dio una palmada en el trasero.- No quiero sonar pervertido pero esos pantalones te hacen muy buen culo, me dan ganas de morderlo.
- ¿Qué estás diciendo, viejo verde?- Preguntó Shinobu sorprendido.
- No, nada, no me hagas caso.- Dijo Miyagi riendo y se fue al balcón a terminar de fumar.
3ºB
- ¿Cómo se atreven a hacernos eso?- Preguntó Hiroki enfadado mientras daba vueltas por la sala. Nowaki lo observaba desde el sillón cruzado de brazos.- Se suponía que íbamos nosotros, no ellos. Han desobedecido al presidente, se van a enterar en las próximas juntas...
- No creo que lo hayan hecho con mala intención...- Se atrevió a decir el médico, pero se calló al ver la mirada que le había lanzado su novio.
- Lo han hecho con toda la mala intención del mundo.- Dijo el profesor.- Sobre todo ese endemoniado niño, él ha sido el cabecilla de todo esto. Takano solo ha sido su secuaz, él es el responsable de mi sufrimiento. ¡Ese crío no me conoce enfadado!
- ¿A no?- Se le escapó al menor.
- ¿Insinúas algo?- Preguntó Hiroki y Nowaki negó con la cabeza.- Ese chiquillo de mierda me odia, hasta ahora yo había pasado de él porque no merecía la pena entrar en el juego de un niñato infeliz pero esta vez se ha pasado. No voy a callarme y pienso amargarle la existencia, a la mínima que me diga yo le diré el doble. Ha comenzado una guerra que no puede ganar.
- Hiro-san, creo que te estás dejando llevar por el momento.- Dijo Nowaki.- Tienes muy reciente lo del programa, cuando te tranquilices un poco verás como no es para tanto. Además, no creo que Shinobu te odie.
- No estoy exagerando, Nowaki.- Le dijo muy serio.- Ese intento de persona me odia porque me tiene envidia.
- ¿Envidia?- Preguntó el Nowaki extrañado.
- Sí, me tiene envidia porque el imbécil de Miyagi me hace más caso a mí que a él.- Dijo Hiroki con una risa despectiva.
- No seas cruel con él, es el más pequeño del edificio y por eso deberíamos cuidarlo entre todos.- Dijo Nowaki.
- Para eso cuido a Misaki que es de los más pequeños y me cae mejor.- Dijo Hiroki sentándose junto a su pareja.
- ¿Qué te traes con Misaki?- Preguntó Nowaki alzando una ceja.- ¿Debería ponerme celoso?
- No tienes de qué preocuparte, aprecio a Misaki como si fuera un hermano pequeño.
- Vale, pero que no pase de eso.- Dijo Nowaki apuntándole con el dedo.
- No te pongas tonto que aún estoy enfadado contigo.- Dijo Hiroki haciendo que el pediatra tragara saliva.
- Ya te lo he explicado, es culpa de Nibori.- Dijo Nowaki.- Él fue el que nos dejó encerrados en el ascensor, deberías despedirlo antes de que Akihiko lo mate.
- No voy a despedirle, aunque no me gustó nada lo que le dijo a Misaki cuando Bakahiko y él se pelearon.- Dijo el profesor pensativo.- Pero no, no le voy a despedir.
- Como quieras, eres tú el que manda en el edificio.- Dijo Nowaki levantándose del sillón y acercándose para darle un beso a su pareja.- Me voy al hospital, no hagas locuras.
2ºA
- Esta noche ha sido muy calurosa, ¿no crees?- Preguntó Ritsu poniendo lo que él creía que era voz sexy.- He pasado mucho calor.
- ¿Te encuentras bien?- Preguntó Takano observándole extrañado.- Tu voz suena como la de un octogenario.
- De verdad, Takano, me dices cada cosa más bonita...- Dijo Ritsu rondando los ojos. Fue hacia la cocina y cogió un vaso de agua para tirárselo por encima de la camisa.- Oh, soy demasiado torpe...ahora tendré que quitarme la camiseta.
- Te lo digo enserio, ¿qué te pasa en la voz?- Preguntó el editor jefe observando como Ritsu se quitaba la camisa mientras movía sensualmente las caderas.- ¿Te estás meando?
- ¿A qué viene esa pregunta?
- No sé, creía que estabas bailando porque te estabas haciendo pis.- Dijo Masamune.
- ¿Sabes qué, Takano?- Le preguntó Ritsu sin dejar de poner esa voz.
- ¿Qué?
- Esta noche me he despertado excitado.- Dijo Ritsu sorprendiendo al mayor.- He tenido un sueño húmedo.
- ¡Voy a comprar el pan!- Gritó Takano y salió corriendo de la casa.
- Operación poner cachondo al gruñón fallada.- Dijo Ritsu suspirando y dejándose caer en el sofá.
3ºA
- Misaki, por favor, deja de poner esa cara de entierro.- Le dijo Akihiko mientras llevaba en brazos a Suzuki-san.
- Es que todo es tan injusto...- Suspiró Misaki.- ¡Tengo una idea, Usagi-san!
- No creo que funcione.- Le dijo el escritor.
- Pero si todavía no te he dicho de qué se trata.- Le reprochó Misaki.
- Viniendo de ti no debe funcionar.
- Oye, que yo también he tenido buenas ideas.- Dijo Misaki orgulloso.- La idea de concursar en un programa fue mía.
- Y así acabó la cosa...- Dijo Akihiko riendo.
- Bueno, mi idea es ponerme enfermo y así poder librarme del asunto.- Dijo Misaki sonriendo.- Pero como yo no sé mentir me tengo que poner enfermo de verdad.
- Misaki, lo más sencillo sería decir "Kamijou-sensei no me apetece cenar con usted porque me da un poco de miedo"- Dijo Akihiko imitando la voz de su pareja.
- No, nunca diría algo así.- Dijo el universitario.
- Pues no te queda otra, tendrás que pasar una agradable velada junto a tu querido sensei.- Dijo el mayor riendo.
- ¿Cómo me puedo poner enfermo?- Le preguntó Misaki.
- No soy Google, a mí no me preguntes.- Dijo Akihiko y Misaki salió corriendo a por el ordenador del escritor.- ¿Qué vas a hacer?
- Preguntarle a Google.- Le respondió Misaki desde el estudio.
- Misaki, no hagas lo que te diga Internet.- Le dijo el escritor mientras iba hacia donde se encontraba su pequeño.
- ¿Por qué?
- Porque acabaremos en urgencias como hagas lo que te recomiendan en esas webs.- Le previno Akihiko.
- Sí, vale, lo que tú digas...- Le dijo Misaki sin apartar los ojos de la pantalla.
- No me des la razón como a los tontos.
- No seas pesado, Usagi-san, no voy a hacer lo que me dicen aquí.- Le dijo el menor mientras apagaba el ordenador.- No voy a ponerme en peligro.
- Eso espero porque me tengo que ir a la editorial y no quiero que hagas idioteces, ¿me has entendido o me tengo que quedar a vigilarte?- Dijo el escritor mientras cogía sus cosas para irse.
- Ya te lo he dicho, no voy a hacer nada de esto así que no te preocupes.- Le aseguró Misaki.
2ºB
- Tori, ¿ya has dejado a Pippin con Yukina?- Le preguntó Chiaki sonriendo.
- Sí, ya estamos solos y podemos hacer lo que queramos.- Dijo Hatori felizmente.
- ¿Y a qué esperas?
Hatori no necesitó que le dijera nada más, lo cargó y lo llevó hasta la habitación. Tumbados en la cama comenzó a besarlo desenfrenadamente, primero por la cara para luego bajar poco a poco por su cuello. Cuando comenzó a impacientarse le quitó primero la camisa a Chiaki y después se quitó la suya. Dejaba marcas en el cuerpo del mangaka, mordía y succionada sus pezones haciéndole gemir.
- Tori...baja ya...- Le rogó Chiaki cuando ya no aguantaba más la tortura a la que le estaba sometiendo su amante.
Hatori obedeció y trazó un camino a besos desde el ombligo hasta el pantalón. Con un solo movimiento consiguió quitárselo, dejándole solo con la ropa interior. Lamió y acarició el miembro del mangaka por encima de la tela y cuando vio que eso no era suficiente, le despojó de ella dejándolo completamente desnudo.
- N-no es justo...Tori.- Le dijo Chiaki acariciando su espalda.
- ¿El qué?- Preguntó el editor mientras le masturbaba.
- Yo soy el único que está desnudo.- Le respondió Chiaki entrecortadamente.- Métela ya, por favor.
Hatori, sin dejar la tarea de darle placer a su novio, se quitó toda la ropa quedándose en las mismas condiciones que el otro. Aunque Chiaki le había pedido que lo hiciera suyo ya, él quería hacerle esperar y torturarlo un poco, por eso se llevó el miembro del mangaka a la boca. Lo lamió despacio para poder ver cómo se volvía loco de placer.
- Tori...por favor.
Esta vez Hatori sí que obedeció y, con cuidado, metió su miembro dentro de su pareja. Al notar la intromisión, Chiaki clavó sus uñas en la espalda del editor. Comenzaron con un ritmo bastante lento, pero poco a poco fueron adquiriendo velocidad hasta que uno se corrió dentro y el otro entre sus torsos.
- Le debo una muy grande a Yukina.- Dijo Hatori para luego darle un beso a Chiaki.
Rellano del 1º
- Hola, Miyagi.- Saludó Nowaki bajando las escaleras.- ¿Vas a algún sitio?
- Voy a comprar tabaco, se me están acabando las reservas.- Le respondió el profesor.
- Me alegra mucho haberme cruzado contigo, Miyagi, porque me gustaría que habláramos un poco.- Le dijo el pediatra.
- ¿Sobre qué?- Preguntó Miyagi mientras bajaban las escaleras.
- Sobre Hiro-san y Shinobu.- Le dijo Nowaki.- Parece ser que no se llevan muy bien.
- Son tonterías suyas, es mejor no hacerles caso.- Dijo el profesor riendo.
- Yo no me lo tomaría tan a la ligera, Hiro-san está muy enfadado y tiene ganas de pelearse con Shinobu.- Dijo Nowaki bastante serio.- Sinceramente, Hiro-san me da un poco de miedo cuando se pone así.
- Nowaki, tú ni caso.- Le dijo Miyagi tranquilamente.- Perro ladrador poco mordedor y estos dos lo único que saben es ladrar.
- Espero que tengas razón, pero yo no me confiaría.
- No va a pasar nada y en caso de que pase no es problema nuestro, si se quieren matar que se maten a mí no me importa.- Dijo Miyagi cuando llegaron al portal.
- ¿Cómo puedes decir eso?- Le preguntó Nowaki sorprendido.- ¿No te preocupa lo que se puedan hacer?
- Shinobu lo único que quiere es llamar mi atención, si ve que no le hago caso parará de molestar a my sweet honey.
- Muy bien, me fiaré de ti pero no vuelvas a llamar así a Hiro-san, da grima.- Dijo Nowaki.- Tengo un mal presentimiento de todo esto...
- Yo también lo tengo.- Dijo Nibori apareciendo con una fregona en la mano.- Esos dos tienen muy mal genio, sobre todo tu novio.
- ¿Quién te ha dado vela en este entierro?- Le dijo Nowaki con malas formas.- Tú aquí solo eres el portero, nada más, así que no vayas por ahí opinando de las cosas que pasan en el edificio. Sigue como hasta ahora y durarás poco entre nosotros, tienes un pie fuera de este edificio y ten muy seguro de que yo haré todo lo posible para que te echen.
- ¿Por qué?- Preguntó Nibori sorprendido.- Yo no te he hecho nada.
- Me dejaste encerrado en el ascensor.- Dijo el médico mirando muy mal al conserje.- Tú a mí no me conoces enfadado, de hecho casi nadie me conoce enfadado, pero tú dame tiempo y haré que desees no haber nacido.
- Lo que tú digas.- Le dijo Nibori para luego dar media vuelta.
- Espera un momento, hay otra cosa que me gustaría decirte.- Dijo Nowaki y Nibori se giró.
- ¿Qué quieres?
-Esto que te voy a decir no es una advertencia, así que tómatelo como una amenaza.- Dijo Nowaki frunciendo el ceño.- Si te acercas a Misaki o le hablas, o si simplemente le miras me encargaré personalmente de que no te contraten en ningún sitio y haré que Hiro-san te despida, ¿lo has entendido?
- ¿A ti qué más te da?- Preguntó Nibori desafiante.
- Eso no es asunto tuyo.- Le dijo Nowaki y después se fue a trabajar.
2ºA
- Adelante, está abierto.- Dijo Ritsu cuando llamaron al timbre.- Hola, Shinobu, ¿qué te trae por aquí?
- Quería hablar con Takano sobre el viaje.- Le dijo el estudiante.
- Ahora mismo no está, se acaba de ir a por el pan.- Le explicó Onodera.- Pero si quieres esperarlo...
- Es que tengo un poco de prisa.- Le dijo Shinobu.- Quería decirle que yo ya he estado en Noruega y que no me apetece mucho ir, estoy de exámenes y tengo bastante que estudiar, pero que se quede mi billete del avión y que invite a alguien.
- Shinobu, tengo una idea.- Le dijo Ritsu.- Tú haz como si te fueras con él al viaje, que no se entere de que no quieres ir.
- ¿Por qué?- Preguntó el menor curioso.
- Quiero darle una sorpresa, iré yo en tu lugar.- Dijo Ritsu sonriendo. Sabía que de la emoción que tendría Takano de hacer un viaje con él, acabarían teniendo sexo y el idiota de Takano perdería la apuesta.- Si te comenta algo del viaje, tú dale la razón.
- Está bien, yo no le diré nada.- Dijo Shinobu.
- Muchas gracias por dejarme ir en tu lugar, te traeré algo de ahí.- Le dijo el editor sonriendo.
- No es necesario, no hace falta que te molestes.- Le dijo Shinobu y se marchó de nuevo a su casa.. -
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😆😆😆 takano lucha contra la tentación llamada ritsu ; miyagi debería estar más..... no encuentro la palabra exacta; hay tanto que decir,.. estuvo bueno. 🙋🏻♀️ hasta la próxima . -
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Siiii nuevo capítulo, extrañaba esta historia, la verdad que extraño todas tus historias, ojalá pronto puedas traernos la conti de las otras historias.
Por ahora Takano se ha salvado de la seducción de Ritsu pero no tardará mucho en sucumbir ante Ritsu y más si se van de viaje juntos.
Esperaré con ansias la conti.. -
+1 .
Capítulo 10
1ºB
- ¿Estás seguro?- Le preguntó Miyagi.- Te estás perdiendo un viaje muy caro.
- Me da igual el dinero y el viaje.- Dijo Shinobu sin apartar la vista de la tele.
- Claro, se me olvidaba que eres un niño rico.- Dijo el profesor para provocarle.
- Aunque fuera pobre me daría igual el dichoso viaje.
- Lo dudo. Si no tuvieras dinero aprovecharías el viaje y no se lo cederías a otro.- Dijo Miyagi quitándole el mando de la tele a su novio para cambiar de canal.- Este programa me aburre.
- Tú si que me aburres, viejo.- Le dijo Shinobu recuperando el mando.- Tengo mis motivos para no querer ir a Noruega.
- ¿Qué motivos?- Preguntó el mayor con curiosidad.
- No es asunto tuyo, abuelo.
- Creía que nuestra relación se basaba en la confianza.- Le dijo Miyagi para que se lo contara.
- ¿Confías en mí?- Le preguntó Shinobu y el profesor asintió.- Entonces no preguntes.
- Tengo derecho a saber tus motivos.- Insistió el profesor.
- ¿Por qué debería contártelo? Tú nunca me cuentas nada, Miyagi, soy el único que habla de los dos.- Dijo el estudiante provocando que Miyagi frunciera el ceño.- Además, tú no tienes derechos.
- Sí que te cuento cosas.
- Eso no es cierto, no sé casi nada de ti.- Dijo Shinobu y apagó la tele.- Es como si fueramos dos extraños y me molesta que a ti no te moleste eso.
- Nosotros sí que hablamos mucho.- Dijo Miyagi poco convencido.- A todas horas.
- No, Miyagi, yo hablo y tú escuchas.- Le corrigió el rubio.
- Escuchar es importante, no todo el mundo lo sabe hacer.
- ¿Sabes qué? A partir de ahora yo no te contaré nada hasta que tú me cuentes algo.- Dijo Shinobu decidido.
-Hoy me he cortado las uñas de los pies, las tenía tan largas que ya se me estaban rompiendo los calcetines.- Dijo Miyagi y el menor puso cara de asco.- ¿Y tú qué cuentas, Shinobu-chin?
- Miyagi, me refería a otro tipo de cosas.
- ¿Qué tipo de cosas?- Preguntó Miyagi.
- Cosas más profundas, como qué te gusta o qué te hace enfadar.- Le explicó Shinobu.
- Me hace enfadar esta situación y me gustas tú.
- Miyagi, me desesperas.- Le dijo Shinobu levantándose del sofá para ir a la habitación dando un portazo.
- No jodas que se ha enfadado...
1ºA
Yukina se acercó a él con semblante serio y el mayor le miró esperando a que dijera algo. Al ver que no abría la boca, Kisa desvió la vista ignorándole.
- Kisa-san, te quiero proponer algo.- Habló finalmente el menor.
- No vamos a ir a un crucero gay.- Dijo el editor tajante.
- No era eso lo que te iba a proponer.
- ¿Y qué es?- Quiso saber Kisa.
- Quiero pintarte desnudo.- Dijo Yukina con una sonrisa.
- Escúchame bien, ni por todo el oro del mundo me dejaría pintar desnudo.- Le dijo Kisa negando con la cabeza.- Nunca, en la vida, me pintarás como vine al mundo. ¿Lo has entendido?
- No lo verá nadie, lo quiero solo para mí.- Insistió el estudiante.- Será nuestro secreto.
- Te he dicho que no y no pienso cambiar de opinión.
- Kisa-san, yo necesito pintarte desnudo.- Le dijo Yukina poniendo cara de cachorrito.- Eres demasiado hermoso como para no hacerlo y te prometo que no dejaré que nadie lo vea.
- ¿Qué no entiendes de no?- Le dijo el editor.- Aunque solo lo vayas a ver tú me da mucha vergüenza.
- ¿Por qué te da vergüenza? Yo ya te he visto muchas veces desnudo.
- Eso da igual, no quiero estar mucho rato delante de ti sin nada de ropa.- Dijo Kisa sonrojado.
- No será mucho tiempo, lo haré rápido.- Insisitió el universitario.
- ¿Cuánto tiempo más o menos?
- Una o dos horas como mucho.- Le dijo Yukina sonriendo, ya casi le había convencido.
- ¿Seguro que solo lo vas a ver tú?- Preguntó Kisa mirando hacia otro lado.
- Nunca permitiré que nadie aparte de tú médico y yo te vea desnudo.- Le dijo el más joven.- Eres mi tesoro y solo yo merezco contemplarte.
- Esa es frase de novio psicópata.
- ¿Te dejarás pintar o no?
- Sí, pero solo lo podrás ver tú y nadie lo debe saber.- Dijo Kisa muy rojo.
- Kisa-san, eres el mejor.- Le dijo Yukina robándole un beso.
2ºA
- ¿Ya tienes la maleta hecha?- Preguntó Ritsu.- ¿Estás seguro de que no te dejas nada?
- Sí, no te preocupes.- Le dijo Takano.- Además, no me voy hasta mañana, tengo tiempo de recordar si me dejo algo.
- Es una suerte que te hayan dado vacaciones en la editorial.- Comentó Ritsu alegre.
- Me merecía esas vacaciones desde hace tiempo.
- Ya lo sé.
- ¿Me vas a echar de menos?- Preguntó Takano.
- Sabes perfectamente que no.- Le dijo Ritsu.- También me he cogido vacaciones esta semana para poder disfrutar de la tranquilidad, ni me voy a acordar de ti.
- No mientas, Ritsu, llorarás cuando me vaya.- Le dijo Takano rodeándole la cintura con un brazo para atraerlo hacia él.
- Tienes razón, lloraré pero de alegría.- Dijo Onodera y en ese momento llamaron a la puerta.
- Pasa, está abierto.- Dijo el editor jefe soltando a su amante.
- Hiro-san ha convocado una junta.- Dijo Nowaki asomándose un poco.
- ¿Y te ha mandado a ti?- Preguntó Takano riendo.- Eres un calzonazos.
- Yo cumplo con los favores que me pide Hiro-san y luego él cumple con los que yo le pido.- Dijo Nowaki con una de sus sonrisas.
- ¿De verdad? Hace tiempo que no se os oye.- Le dijo Takano mientras salían los tres del apartamento para subir a la casa del presidente.
- ¿Que no se nos oye qué?- Preguntó Nowaki sin entender.
- Que no se os oye cuando lo hacéis.- Dijo Masamune riendo.- Eso va a ser porque ya casi no lo hacéis.
- Takano, creo que tú eres el menos indicado para hablar.- Le dijo Ritsu.- ¿Hace falta que te recuerde en qué consiste nuestra apuesta?
- Hiro-san y yo tenemos una vida sexual muy activa.- Dijo Nowaki entrando en el 3ºB.
3ºB
- Sensei, ya estamos todos.- Dijo Misaki cuando entraron Ritsu, Takano y Nowaki.
- Perfecto, que comience la junta.- Dije el presidente.
- Hiroki, somos gente muy ocupada.- Le dijo Akihiko con voz cansada.- No puedes estar reuniéndonos todos los días, esto no es serio.
- Usagi-san, estabas jugando al Candy Crush en vez de hacer tu trabajo...
- Es muy importante lo que os tengo que decir.- Dijo Hiroki bastante emocionado.- Esta vez la idea ha sido mía y creo que es la única forma de sacar al edificio de la crisis.
- Dinos ya en qué consiste.- Le dijo Hatori impaciente.
- Que levante la mano quien sepa jugar a fútbol.- Dijo el presidente y todos se miraron desconcertados para luego comenzar a cuchichear entre ellos. -Callaos ya o no acabaremos con esto nunca.- Dijo el presidente alzando la voz pero los vecinos continuaron hablando.- ¡He dicho que os calléis!
- Sensei, comienza a tirar cosas como en clase.- Le aconsejó Misaki, quien estaba sentado a su lado.
- ¿Y si me denuncian por agresión?- Le dijo Hiroki a su alumno para luego coger un estuche que tenía cerca.- Mira que puntería tengo, esta va para Miyagi que sé que él nunca me denunciaría.
- ¡AU! Eso ha dolido, Hiroki.- Dijo Miyagi mientras se frotaba el sitio donde le había dado el estuche.
- Alguien tenía que pagar vuestra desobediencia.- Dijo Hiroki encogiéndose de hombros.
-¡ No vuelvas a hacerle daño a Miyagi!- Le gritó Shinobu enfadado haciendo que todos los que se encontraban en la reunión de vecinos callaran.
- Miyagi, permito que los niños vengan a las juntas pero solo si se comportan.- Le dijo Hiroki al profesor.- Controla al mocoso o me veré obligado a echarle.
- Hiro-san, por favor...- Comenzó a decir Nowaki sospechando que no iba a acabar nada bien la junta.
- ¿A quién llamas tú niño, viejo?- Le dijo Shinobu frunciendo el ceño.
- ¿Viejo?- Murmuró Hiroki y luego se dirigió a Misaki.- Por favor, acompaña a este delincuente juvenil hasta la salida.
- ¿Por qué yo?- Preguntó Misaki.
- Porque eres el vicepresidente.
- ¿Eso es lo único que sabes hacer?- Dijo Shinobu levantándose de la silla.- Solo sabes dar ordenes, haz algo por ti mismo y deja tranquilo al pobre Misaki.
- A mi no me metáis, por favor.- Pidió Misaki agobiado.
- Shinobu tienes prohibido volver a una junta.- Le dijo el profesor.
- Hiroki, tampoco te pases que Shinobu-chin no es el único que grita en las juntas.- Le defendió Miyagi.
- Nos estamos yendo del tema.- Dijo Chiaki.- ¿Qué pasa con el fútbol?
- Hay un torneo de fútbol y me gustaría que participáramos.- Dijo Hiroki.- Me he asegurado de que el premio sea dinero. ¿Qué os parece la idea?
- Muy tonta.- Dijo Akihiko.
- Bueno, no tenemos nada que perder por apuntarnos al torneo.- Dijo Yukina animado.
- Sí, podemos perder nuestra dignidad.- Dijo Kisa.
- Quien quiera jugar que se apunte en esta lista.- Dijo Misaki sacando un papel y un lápiz para dejarlo en la mesa.
- Yo seré el entrenador y Misaki mi ayudante.- Dijo Hiroki.
- ¿Por qué tienes que ser tú el entrenador?- Preguntó Shinobu enfadado.
- Shinobu, por favor, cállate.- Le susurró Miyagi.
- Porque yo soy el presidente y si no te gusta no haberme votado.- Le respondió Hiroki.
- Nadie te votó, saliste por sorteo.- Le dijo Shinobu.
- Pero si no jugáis vosotros nos falta gente en el equipo.- Dijo Ritsu.
- Si participáis todos nos faltará solo uno que será Nibori.- Explicó Hiroki.
- ¿Y los suplentes?- Preguntó Takano.
- No hay suplentes.- Dijo Hiroki a la vez que todos se levantaban a apuntarse en el papel.- Los entrenamientos empiezan mañana, no faltéis.
- Shinobu y yo nos vamos de viaje.- Le contó Takano.
- Pues necesitaremos dos jugadores para el primer partido.- Dijo Hiroki pensativo.
- Yo conozco alguien que querrá jugar seguro.- Dijo Kisa.
- Yo se lo puedo proponer a Sumi-sempai.- Dijo Misaki pensativo.
- Si juega imbécil-sempai yo no juego.- Dijo Akihiko tajante, ganándose una mirada de reproche de su novio.
- Bakahiko, no molestes.- Le dijo Hiroki.- Misaki, dije a tu amigo que venga.
- Si viene ese vamos a perder, es un inutil.- Dijo Akihiko mientras todos comenzaban a abandonar el apartamento.
- ¿La junta ya ha terminado?- Preguntó Nowaki.
- Sí, deja que se vayan.
- Sensei, le veo mañana en clase.- Dijo Misaki que ya se quería ir.
- En clase y en la cena, que no se te olvide.- Le dijo Hiroki.
- Sí, no se me olvidará...
- Akihiko, ¿qué harás mañana?- Le preguntó Nowaki sorprendiendo al escritor.
- Supongo que dormir y fumar.
- Si quieres podemos salir de fiesta por ahí.- Dijo el médico.
- Tentador...ya me lo pensaré.- Dijo Akihiko.- Misaki, vámonos.
- Mañana ya me dices si salimos o no.- Le dijo Nowaki emocionado mientras Akihiko salía corriendo arrastrando a Misaki del apartamento.
- ¿Desde cuándo eres tan amigo de Bakahiko?- Preguntó Hiroki.
- Estuvimos encerrados en un ascensor durante tres horas, eso es una experiencia que une.
- No te acerques mucho a él no sea que te contagie sus costumbres.- Le advirtió el profesor.
Aeropuerto de Narita
- ¿Dónde estará el niño este?- Murmuró Takano mientras buscaba a Shinobu entre la gente. Estaba de muy mal humor porque se había tenido que despedir de Onodera en casa y él quería que lo acompañara al aeropuerto. De repente alguien que estaba detrás de él le tapó los ojos con sus manos.- ¿Qué confianzas son esas, Shinobu-chan?
- ¿Shinobu-chan?- Dijo Ritsu riendo.- Me ofende que no reconozcas a la persona que dices que amas.
- ¿Qué haces aquí?- Preguntó Takano sorprendido.
- Me voy contigo porque Shinobu no quería ir.- Dijo el menor.- Nadie quiere viajar contigo.
- ¿De verdad vienes a Noruega?- Preguntó Masamune muy feliz.
- ¿No me escuchas o qué? Ya te he dicho que voy contigo.
- La apuesta queda anulada, ¿no?
- Ni hablar, aunque estemos de viaje la apuesta sigue en pie.- Dijo Ritsu sonriendo.
- No es justo, por un momento pensé que haría el amor en los Fiordos y ahora resulta que lo que haré es un solitario.- Dijo Takano suspirando.- Bueno, vamos que el avión va a despegar en unos minutos.
1ºB
El edificio estaba en completo silencio ya que los únicos que se encontraban en él eran ellos dos. Solo se podían oír los gemidos de Shinobu y la respiración agitada de Miyagi.
- Shinobu-chin, me encanta que hagas este tipo de cosas pero tenemos que ir con Hiroki.- Dijo el mayor mientras el estudiante rozaba con su pierna la erección ya notable de Miyagi.
- No pienses en él.- Le respondió Shinobu quitándole el pantalón y comenzando a depositar pequeños besos por encima de la tela del bóxer.- Me da igual ese y su estúpido equipo de fútbol.
- Eres un pervertido.- Dijo Miyagi a la vez que se situaba encima del menor y le quitaba la ropa. Cuando iba a quitarle la ropa interior Shinobu lo frenó.- ¿Ocurre algo?
- Puede que sea una locura pero tengo una fantasía que me gustaría cumplir.- Dijo Shinobu con la cara roja por la vergüenza, pero sabía que esa era su única oportunidad.
- ¿Una fantasía sexual?- Preguntó Miyagi sonriendo con picardía.- Dime qué es y yo te haré feliz.
- Me gustaría hacerlo en casa del demonio Kamijou.
- Estás fatal de la cabeza. No podemos hacer eso, Shinobu, está mal a muchos niveles.- Dijo el profesor sorprendido por lo que le había acabado de pedir su novio.
- Has dicho que me harías feliz.- Insistió Shinobu.- Además, no se van a enterar porque están todos entrenado para el partido.
- Imposible, si hacemos eso no podré volver a mirar a Hiroki a la cara.
- Venga, hazlo por mí.- Le susurró el pequeño al oído.- Piensa en que lo haremos en su cama, en su suelo o en su bañera.
- Shinobu, no insistas, he dicho que no y es que no.
Vestuarios del polideportivo de la calle de al lado.
- ¿Dónde está la gente que falta?- Preguntó Hiroki mientras los tres hombres se cambiaban.
- Misaki viene de camino.- Dijo Akihiko poniéndose las deportivas.
- Kisa-san me ha dicho que tienen mucho lío en el trabajo pero que ya vienen.
- Hiro-san, yo dentro de dos horas tengo que ir a trabajar.
- Ya lo sé, cuando tengas que irte te vas.- Dijo Hiroki mirando el reloj, habían quedado todos hacía más de quince minutos y solo habían aparecido tres personas.- Esto no es serio, debemos ganar sí o sí y si no entrenamos no lo conseguiremos. Acabaremos prostituyéndonos para pagar las deudas.
- Aquí no se prostituye nadie.- Le dijo Nowaki y en ese momento apareció Misaki seguido de su sempai.
- Sensei, sentimos llegar tan tarde.- Dijo Misaki haciendo una reverencia.
-No pasa nada, Misaki, aun falta medio equipo.- Le dijo Hiroki y luego se fijó en la persona que venía con él.- ¿Sumi serás el que juegue con nosotros?
- Sí, Kamijou-sensei, Misaki me lo propuso y me pareció divertido.- Dijo Sumi sonriendo.
- No, tú no juegas.- Le dijo Akihiko y Misaki le miró frunciendo el ceño.
-Akihiko, necesitamos gente y por mí como si viene el mismo diablo a jugar con nosotros.- Le dijo el presidente.- Hasta que vuelvan Takano y Ritsu, él formará parte del equipo, te guste o no.
- Si ese juega yo no juego.- Le dijo el escritor desafiante.
- Esta noche voy a salir a cenar con Misaki y te interesa que lo vigile porque nunca se sabe con quién puede acabar pasando la noche.
- Hiroki, confío plenamente en Misaki.- Le dijo Akihiko.
- ¿De verdad?- Se le escapó a Misaki preguntar.
- ¿Lo dudas?
- A veces un poco, Usagi-san.- Dijo el estudiante desviando la mirada.
- Más vale tarde que nunca.- Dijo Kisa entrando en el vestuario acompañado de Tori, Chiaki y Kanade.- Hiroki, este es Kanade Mino y nos ayudará con el equipo.
- ¡Perfecto!- Dijo Hiroki dando una palmada.- Cambiaros y salir al campo de fútbol, Misaki y yo os esperamos ahí.
- Nowaki, ¿lo que me propusiste ayer sigue en pie?- Preguntó Akihiko que aunque ya estaba cambiado no iba a salir.
- Claro, ¿a qué hora te viene bien?- Le preguntó el médico y sin esperar ninguna respuesta continuó hablando.- Mi sempai me ha hablado de un sitio cerca de aquí al que va mucha gente joven, podemos ir a ver qué tal.
- Muy bien, saldremos cuando las princesas del cuento se vayan a cenar.- Le dijo Akihiko.
- Yukina, ¿en qué posición vas a jugar?- Le preguntó Kisa mientras se quitaba los pantalones bajo la atenta mirada de su novio.
- No lo sé, en la que me ponga Kamijou. Sinceramente no sé muy bien cómo va esto del fútbol, pero no debe de ser muy difícil, ¿verdad?
- Seguro que lo haces bien, solo tienes que darle patadas a una pelota.- Dijo Kisa poniéndose la pantaloneta que se había comprado para la ocasión.- Yo quiero ser portero, se lo he dicho a Hiroki y me ha dicho que sí.
- ¿Dónde están Miyagi y Shinobu?- Preguntó Hiroki volviendo a entrar en el vestuario.- ¿Alguien los ha visto?
- No han llegado aún.- Dijo Chiaki.
- ¿Y Nibori?- Preguntó Hatori.- Él tampoco ha venido.
- Sí que ha venido, le tengo dando vueltas al campo.- Dijo Hiroki tranquilamente.
- ¿Sabes una cosa?- Le dijo Akihiko en voz baja a su amigo de la infancia.- Esta noche voy a salir de fiesta con Nowaki y no pienso vigilarle.
-¡Todos al campo ya!- Gritó Hiroki muy enfadado.- Quiero que corráis hasta que os desmayéis.
Hubieron protestas por parte de los vecinos pero todos obedecieron y comenzaron a correr. Hiroki se puso en la puerta de brazos cruzados, observándoles correr. Cada vez que Nowaki pasaba por delante de él le guiñaba un ojo, haciendo sonrojar al profesor.
- Ya creía que no venías. ¿Dónde está el niño?
- En casa, no se encontraba bien.- Le respondió Miyagi con mala cara. Después de rechazar su propuesta, Shinobu se había encerrado en el baño y no quería hablar con él.
- Entra al vestuario a cambiarte.- Le dijo Hiroki.
- Sensei, yo de esto no entiendo mucho pero creo que deberían hacer algo más a parte de correr.- Le dijo Misaki acercándose a él.- Además, creo que Usagi-san en cualquier momento va a vomitar.
- Pues que se fastidie y que haga más ejercicio.
- Hiro-san.- Dijo un Nowaki muy sudado separándose del grupo que corría dando vueltas.- Estamos muertos, déjanos descansar un rato.
- Debemos ganar y para eso debéis esforzaros.- Le dijo Hiroki sin titubear. Nowaki hizo un puchero y le cogió la mano.
- Venga, Hiro-san, por favor.- Le dijo con voz dulce, provocando que el presidente se sonrojara.- Hazlo por mí...
- Está bien.- Susurró Hiroki bajo la atenta mirada de su alumno, quien se encontraba muy sorprendido por la actitud del demonio.- ¡Descansad cinco minutos!
En un restaurante.
- ¿Desde cuándo vives con Bakahiko?- Preguntó Hiroki para romper el silencio que se había formado.
- Desde que mi hermano se casó y yo empecé en la universidad.- Respondió Misaki muy nervioso. No le gustaba la situación en la que se encontraba y, para colmo, no había conseguido enfermarse.
- De eso ya hace más de cuatro años.
- ¿Y usted desde cuándo es novio de Nowaki?- Preguntó Misaki sin darse cuenta, la curiosidad le había podido- Disculpe, no hace falta que me conteste.
- Llevamos juntos desde hace diez años.
- Eso es mucho tiempo, se deben de conocer muy bien.
- Por desgracia nos conocemos bien.- Suspiró Hiroki mientras le pedía vino al camarero.- Hoy en el entrenamiento ha sabido manipularme porque me conoce bien.
- No creo que lo haya manipulado, sensei, solamente lo ha convencido.- Se atrevió a decir Misaki.
- Misaki, deja de hablarme de usted.- Le dijo el presidente.- Fuera de clase quiero que me llames Hiroki.
- Vale, aunque será un poco extraño hablarle, perdón, hablarte con tanta confianza.
- Debemos tenernos confianza, somos algo así como familia.- Dijo Hiroki.
- ¿Familia?
- Yo soy hijo único y Akihiko me aprecia más a mí que a su hermano, así que es como si él y yo fuéramos hermanos.- Explicó el profesor, quien ya estaba un poco bebido.- Ser su pareja te convierte en mi cuñado o algo así.
- Hiroki, ¿tienes fotos de Akihiko de pequeño?- Preguntó Misaki un poco ruborizado y el profesor asintió.- Me gustaría verlas algún día.
1ºB
Shinobu despertó de su siesta y se encontró con una nota que decía "Sigue las gominolas".
- Ya está, Miyagi se me ha vuelto loco. Con lo joven que soy y la carga tan grande que tengo...- Dijo Shinobu para sí mismo y comenzó a seguir el rastro de ositos de gominola que le llevaron hasta el 3ºB. Iba a llamar al timbre pero se dio cuenta de que la puerta estaba abierta y la empujó con algo de miedo. Contuvo una carcajada al ver a Miyagi sin nada de ropa, de pie y encima del sofá.
- Te dije que te haría feliz.- Dijo Miyagi sin todavía creerse lo que estaba haciendo por su pequeño.- ¿Dónde quieres que lo hagamos?
- En la cama de Kamijou.- Dijo Shinobu y fueron besándose y desnudándose hasta la habitación de sus vecinos.
- Shinobu-chin, estás muy salvaje.- Dijo el profesor cuando ya estaban tumbados en la cama. El estudiante le tiraba del pelo y le mordía el cuerpo dejando marcas.
- Lo sé, me da mucho morbo hacerlo aquí.- Dijo Shinobu en la oreja del mayor.- No quiero que me prepares, métela ya.
- Pero te haré daño.
- Me da igual, haz lo que te he dicho.- Ordenó Shinobu poniéndose a cuatro patas sobre la cama. Miyagi obedeció sin insistir más y de una sola estocada metió su miembro dentro del menor. Shinobu se quejó un poco por el dolor pero decidió ignorarlo y comenzó a mover las caderas. El mayor, al ver que su niño le pedía más, se movió lento para ir aumentando la velocidad a medida que las estocadas se hacían más profundas.
- Eres genial, Shinobu.- Le dijo Miyagi para después lamer su espalda. Shinobu sentía que ya iba a correrse y el mayor también tenía ganas, lo embistió unas cuantas veces más tocando ese punto que hacía enloquecer al pequeño y después acabaron los dos a la vez.
- ¿Repetimos?
- Shinobu-chin, eres un pervertido.- Dijo Miyagi riendo.
2ºB
- Tori, he tenido una gran idea.- Dijo Chiaki apoyando su cabeza en el hombro de su editor.
- ¿Para el manga?
- No, nada de eso.- Dijo el mangaka.- ¿Kanade tiene pareja?
- ¿Para qué lo quieres saber?- Preguntó Hatori un poco celoso.
- Bueno, es que desde que rechacé a Yuu ha estado un poco resentido conmigo y no quiero que nos llevemos mal.- Le explicó Chiaki.- Por eso he pensado que lo mejor sería organizarle una cita a ciegas para buscarle un novio.
- Y has pensado en Kanade, ¿verdad?
- Exacto, ¿tú crees que se gustarán?- Preguntó Chiaki ilusionado.- Aunque publique manga shojo a mi estas cosas se me dan mal y lo sabes, por eso necesito que me ayudes.
- ¿Por qué haría yo de Celestino de ese?- Preguntó Hatori arqueando una ceja.- Dame un motivo.
- Te lo recompensaré con sexo oral.
- Me parece un buen motivo, mañana mismo hablaré con Kanade.
En un karaoke.
- ¿Por qué habéis tardado tanto en venir?- Les preguntó Misaki a Akihiko y a Nowaki que acababan de llegar corriendo.- Yo ya no sé qué hacer con él, está muy borracho.
- ¿Por qué le has dejado beber tanto, Misaki?- Le preguntó Akihiko mientras observaba como Hiroki bailaba y cantaba dándolo todo.
- Le he sugerido un par de veces que no bebiera más pero me ha ignorado.- Se defendió Misaki.
- Hiro-san, vámonos a casa.- Le dijo Nowaki.
- Nowaki-chan.- Dijo el presidente dejando el micrófono y abalanzándose en los brazos de su novio.- Te he echado muchiiiiiiiiisimo de menos...te quiero tanto.- Hiroki le pellizcó las mejillas y le dio un corto besó en la nariz.- ¡Tienes mofletitos!
- Te tendré que emborrachar más a menudo.- Le dijo Nowaki mientras lo cargaba en brazos.- Akihiko, me lo llevo a casa, siento mucho que no podamos seguir con nuestra noche de fiesta.
- No te preocupes por eso, seguiré de fiesta con Misaki.- Dijo el escritor a la vez que rodeaba con el brazo al nombrado.
- No me gusta salir de fiesta, Usagi-san.
- Pues con tu senpai has salido alguna vez.- Le reprochó Akihiko.
- Nowaki...tócame.- Le dijo Hiroki acariciando su pelo.- Quiero que lo hagamos y que me cabalgues.
- ¿Puedes decirle que lo repita?- Le preguntó Akihiko a Nowaki, quien se había quedado muy sorprendido.- Me gustaría grabarlo con el móvil para futuros chantajes, tú ya me entiendes.
- Nos vemos mañana.- Dijo Nowaki saliendo disparado para ir hasta su casa y cumplir con lo que su novio le pedía.
- Misaki, ¿cantamos La Macarena?- Preguntó Akihiko cogiendo el micrófono.
3ºB
- No-waki.- Gemía Hiroki entrecortadamente mientras Nowaki lo penetraba.
- Hiro-san, ¿has oído algo?- Le preguntó el médico parando, ya que le había parecido escuchar algún ruido dentro del armario.
- Calla y no pares.- Dijo el profesor enroscando sus piernas en la cintura de su novio.
- Estoy incómodo, Miyagi.- Dijo Shinobu en voz muy baja.
- Si no te hubieras empeñado en repetir no estaríamos encerrados en un armario.- Le contestó Miyagi con el mismo tono de voz. Estaban desnudos y solo podían escuchar como los otros dos lo hacían. Iba a ser una noche muy larga.- No vuelvo a cumplir una fantasía sexual tuya en la vida.. -
+1 .
Siii nuevo capítulo.
Me ha gustado el capítulo, disfruto mucho leyéndolo y sobre todo me hace divertirme en cada capítulo.
Jajajaja ese Shinobu pervertido, pero ahora tendrá que pasar todo el rato metido en el armario y escuchando los gemidos de Hiroki eso es el karma Shinobu.
Ahora en el viaje empieza lo bueno entre Takano y Ritsu para ver quien gana la apuesta, no veo la hora de leer que harán.
Esperaré con ansias la conti.. -
+1 .
Haaaaa no lo puedo creer, nowaki los va a descubrir, que bueno que hiroki está borracho y no se da cuenta.
Lo que veo es que las peleas de shinobu y hiroki están cada vez más picantes. 🙊
Hasta cuanto podrán aguantar takano y ritsu 🤗 no creo que duren 😏
Hasta la próxima 🙋🏻♀️. -
+1 .
Capítulo 11
Noruega
- Estoy muerto.- Dijo Ritsu tirándose de un salto sobre la cama del hotel.- Demasiadas horas de avión.
- No han sido tantas.- Dijo Takano observando desde la ventana las vistas.- A mí se me ha pasado muy rápido.
- No me extraña, te has pasado todo el vuelo dormido. Ni las marmotas duermen tanto, ve al médico porque eso no es normal.
- No exageres y levanta de ahí que tenemos que empezar a hacer turismo.- Le dijo el editor jefe mientras le daba unos golpecitos en el pie.
- ¿Ya? Pero si acabamos de llegar. Déjame disfrutar de la habitación del hotel, Masamune.
- No seas amargado.- Le dijo Takano.- Para una vez que viajamos tenemos que aprovechar. Tienes media hora para descansar un poco. Te espero en recepción y si no bajas en ese tiempo me iré sin ti.
- Espera.- Dijo Ritsu levantándose de la cama.- Vámonos ya, pero tenemos que volver pronto, ¿vale?
- Está bien, pero mañana madrugaremos.
- ¿Quién te ha nombrado jefe de la excursión?- Le preguntó Ritsu frunciendo el ceño.
- Yo mismo.
- Solo de pensar que tenemos que caminar me canso.- Suspiró Onodera.
- En ocasiones me da la sensación de que estoy saliendo con un octogenario.
1ºA
- Kisa-san, quítate esa manta.- Le dijo Yukina con el pincel en la mano.- El retrato debe ser desnudo, si te tapas con eso no podré pintar tus encantos.
- Me da mucha vergüenza.- Dijo el editor muy sonrojado.- Lo he pensado mejor y no quiero hacerlo.
- No puedes hacer eso, ya me habías dicho que sí.- Le dijo Yukina.- Me he hecho ilusiones y no me las puedes quitar.
- De acuerdo.- Murmuró Kisa y se quitó la manta quedándose completamente desnudo.
- Eres perfecto, Kisa-san.- Dijo el universitario haciendo que las mejillas del mayor se pusieran aún más rojas.
- No digas esas cosas que me muero.
- Kisa-san, túmbate en el sofá.- Dijo Yukina y el uke le obedeció con torpeza.- Así estás perfecto y muy sexy.
- Te he dicho que no digas esas cosas.- Dijo Kisa desviando la vista.
- Ahora necesito que no te muevas.- Dijo Yukina y comenzó a pintar.
- ¿Tardarás mucho en acabar?- Preguntó el más mayor.
- Un poco, tú relájate y que no se te vaya el sonrojo.- Dijo el seme.
Noruega
- ¿Cuántas fotos has hecho?- Preguntó el menor entrando en la habitación del hotel.
- Tres mil.- Dijo Takano.- Que va, solo ciento cincuenta.
- ¿Solo? Eso es una barbaridad, son demasiadas fotos en una tarde.
- No importa, luego borraré las que hayan salido mal y con la cara de muerto que tienes hoy te puedo asegurar que serán la mayoría.
- Es normal que tenga cara de muerto si cuando iba a dormir el señorito ha querido que fuéramos a hacer turismo.- Dijo Ritsu sentándose en la cama.- Tú y tu dichosa cámara, ¿quién te has creído que eres? ¿Peter Parker?
- Yo soy más como Tony Stark.
- Pues ya me dirás dónde has escondido todo el dinero...
- No te quejes tanto que nos lo hemos pasado muy bien.- Dijo Takano sentándose junto a su novio.- Ya tengo ganas de que sea mañana para seguir explorando.
- Estoy tan cansado que no tengo ni ganas de sexo.- Dijo Ritsu muy cerca de la oreja de su jefe.
- No intentes provocarme que no lo vas a conseguir.- Le dijo Masamune para luego darle un beso en la frente.- Yo soy de acero, puedo con todo y ya sé qué es lo que quiero que hagas cuando gane la apuesta.
- No vas a ganar.
- Voy a ganar y lo sabes, culito bonito.- Dijo el mayor mientras observaba como su pareja se levantaba para ponerse el pijama.
- ¿Culito bonito? Eres idiota.
- Ojalá me pagaran por cada vez que me dicen eso.
- Tenía entendido que le sobraba el dinero, señor Stark.- Dijo Ritsu metiéndose en la cama.- ¿No te vas a cambiar?
- No, voy a dormir desnudo.
- Menos mal que Shinobu no ha venido contigo.
- ¿Celoso?
- Para nada.- Le respondió Ritsu cerrando los ojos para no tener que ver como se desnudaba el otro.
- Ya veo, estás evitando la tentación.- Dijo Takano riendo.- Estar sin sexo te está volviendo loco.
- Cállate, pervertido, quiero dormir.
1ºB
- ¿Sigues enfadado?- Se atrevió a preguntar Shinobu. Hubo unos segundos de silencio en los que Miyagi no contestó.- No seas infantil. Háblame, por favor.
- Shinobu, lo que pasó ayer no debe volver a pasar.- Dijo Miyagi demasiado tranquilo.- Fue un milagro que no nos pillaran y no debemos volver a tentar a la suerte. A partir de ahora solamente haremos el amor en nuestra cama.
- Lo entiendo, fue una estupidez.- Murmuró Shinobu y se hizo otro silencio.- Miyagi.
- ¿Qué?- Dijo el mayor arqueando una ceja.
- ¿Y el ascensor?
- ¿Qué le pasa al ascensor?- Preguntó Miyagi sin saber de qué hablaba su pequeño.
- ¿Podemos hacerlo en el ascensor?
- ¿De dónde has salido tú, engendro del mal?- Dijo el profesor muy sorprendido.- Y pensar que hubo una época en la que eras inocente…
- ¿Eso es un no?- Preguntó Shinobu con cara de niño bueno.
- Por supuesto que es un no.- Dijo Miyagi.
- Perfecto, hoy cenaremos repollo.
- ¿Es ese mi castigo?
- ¿Para ti es un castigo que yo te cocine?- Preguntó Shinobu comenzando a enfadarse.- Debí haberme ido a Noruega, fui idiota al preferir quedarme con un viejo.
- Mejor aguantar a un viejo que a un mocoso.- Murmuró Miyagi provocando que el estudiante se enfadara todavía más.
1ºA
- Ya está listo.- Dijo Yukina.- Has quedado perfecto. Es lo mejor que he pintado hasta ahora.
- No exageres, seguro que no es para tanto.- Dijo Kisa volviéndose a colocar la manta por encima.- ¿Puedo verlo?
- No.
- ¿Qué idiotez es esa?- Preguntó Kisa molesto.- Es mi retrato, tengo derecho a verlo.
- Quedamos en que solo lo vería yo, Kisa-san.
- Pero se suponía que yo también podía verlo.- Dijo el editor indignado.
- No, Kisa-san, este retrato solamente lo puedo ver yo. Es mi tesoro más preciado.
- No es justo para nada, eres una mala persona.
- Me apetece mucho hacer el amor.- Dijo Yukina acercándose peligrosamente a su novio.
- Pues a mí no.- Dijo Kisa cruzándose de brazos.
- ¿De verdad que no?- Dijo el universitario acariciando la mejilla del editor, pero Kisa le dio un manotazo.
- No haremos nada hasta que me enseñes el retrato.- Dijo Kisa rotundo.
- ¿Lo dices en serio? Vamos a acabar peor que Ritsu y Takano. Se les está quedando cara de acelgas por no hacerlo.
- Esto depende solo de ti, si me enseñas el retrato tendremos todo el sexo que quieras y si no me lo enseñas pues…te marcas un solitario que para algo tienes dos manos.
- Eres cruel, Kisa-san.
3ºB
- Tengo que hablar con Nibori.- Le comentó Hiroki mientras se tomaba una pastilla para la resaca.
- ¿Le vas a despedir? Ya era hora de que lo hicieras.- Le dijo Nowaki observando divertido el estado en el que se encontraba su pareja.
- No, ¿sabías que tenemos piscina en el edificio?- Le cuestionó el profesor.
- Sí, está en el patio de atrás. Se ve desde la ventana del baño, pero está vacía.
- Exacto, ya empieza a hacer calor y dentro de poco hará tiempo de bañarnos por eso he pensado que Nibori haga un curso de primeros auxilios para ponerlo de socorrista.- Le explicó el mayor.
- No deberías pensar en tu estado, será mejor que descanses hoy.- Dijo el médico y en ese momento tuvo una idea.- ¿Por qué no le dices a Misaki que vaya él a hablar con Nibori?
- Porque Nibori podría intentar algo con él.
- No creo y si ese es el caso acabaría de patitas en la calle.
- ¿Qué te pasa a ti con Misaki?- Preguntó Hiroki arqueando una ceja.
- Ya te lo dije, si Misaki es importante para ti también lo es para mí.- Dijo Nowaki y en ese momento llamaron al timbre.
- Shinobu me ha echado de casa.- Anunció Miyagi con cara de cachorrito cuando Nowaki abrió la puerta.
- Todos tenemos problemas.- Dijo Hiroki agarrándose la cabeza con las manos.- Ayer bebí de más y estoy resacoso así que te agradecería mucho que no molestaras.
- No seas así, Hiro-san.
- ¿Me puedo quedar con vosotros hasta que se le pase el cabreo a Shinobu?- Preguntó Miyagi.
- No.
- Sí.
- ¿Cómo que sí?- Le preguntó Hiroki sorprendido.
- Será solo un rato, seguro que esta tarde a Shinobu se le ha pasado el enfado.- Le dijo Nowaki.- Hay que ser buenas personas, no nos cuesta nada dejar que se quede unas horas.
- Claro, como tú tienes que ir a trabajar y no tendrás que aguantarle.- Dijo Hiroki.
- ¿Por qué habéis discutido?- Preguntó Nowaki ignorando a su novio.
- Por el sexo y esas cosas.
2ºB
- Ya está todo organizado, después del partido los presentaremos.- Dijo Chiaki muy emocionado.
- ¿Y si no se gustan?- Dudó Hatori.
- Tori, no te preocupes que seguro que se gustan.
- Creo que no deberíamos forzar el amor.- Dijo el editor.- Si están destinados a estar juntos ya se conocerán en alguna ocasión y si no se conocen es porque no estaban destinados. Es el destino.
- Bobadas, Tori.- Dijo Chiaki confiado.- Tendrán una cita genial organizada por nosotros mismos y acabaran en un hotel.
- No fuerces las cosas.- Le aconsejó Hatori.- De tanto jugar a los Sims te crees que eres Dios y no, no puedes controlarlo todo.
- No seas aguafiestas.- Dijo el mangaka.- Nunca he hecho de casamentero y me hace ilusión. Si todo sale bien seremos los padrinos de la boda.
- Ya sé que eres feliz viviendo en tu mundo de yupi pero los hombres no nos podemos casar.- Dijo Hatori.
- Pues no me parece nada bien que no nos podamos casar.
- Si quieres nos manifestamos.
- No, quita, que pereza.- Dijo Chiaki tumbándose en el sofá.- Hablando de pereza, ¿ya has sacado a pasear a Pippin?
- ¿Por qué siempre tengo que hacerlo yo?- Se quejó el editor.
- Porque fuiste tú el que lo trajo a esta casa.
Noruega
- Ritsu, despierta.- Lo zarandeó Takano.- Quiero ir a ver Oslo.
- ¿Por qué tanta prisa?- Dijo un Onodera somnoliento.- No se va a mover de ahí.
- Eso nunca se sabe.
- Vale, ya me levanto.- Dijo Ritsu bostezando.- Baja a desayunar y ahora te alcanzo.
- Ni hablar, yo no te dejo solo.- Se negó Masamune.- ¿Y si te seduce una noruega? O peor aún, ¿y si te seduce un noruego?
- Déjate de idioteces y vete.
- No, quieres sexo y alguien se puede aprovechar de eso.- Dijo el editor jefe tajante.- Yo no me muevo de aquí.
- Está bien, tú ganas, ya me levanto.- Dijo Ritsu poniéndose de pie.
- Que desilusión, creía que ibas a decir que yo ganaba la apuesta.- Murmuró Takano.- ¡A Oslo!
- No te entusiasmes tanto.- Le dijo Onodera metiéndose en el baño.
3ºA
- Ha pasado la noche fuera.- Se quejaba Shinobu mientras andaba en círculos por el salón. Misaki estaba sentado en el sofá escuchando atentamente a su amigo mientras Akihiko fingía leer para enterarse de lo que hablaban.- Lo peor es que está en casa de ese.
- ¿Por qué os habéis peleado?- Preguntó Misaki y Shinobu miró de reojo al escritor.- No te preocupes por él, cuando está leyendo no se entera de nada.
- ¿Seguro?- Preguntó el más joven algo inseguro.
- Por supuesto, cuando lee siempre hay que llamarlo más de una vez porque no se entera. Es como si estuviera en otro mundo.
- No sé si contártelo, es sobre sexo y con lo tímido que eres…
- Bueno, Shinobu, aunque me dé mucha vergüenza el tema eres mi amigo y tengo que escucharte.- Dijo Misaki un poco sonrojado.
- Desde hace casi una semana he estado teniendo sueños…húmedos.- Dijo Shinobu bajando el volumen de voz y desviando la mirada.
- ¿Húmedos?- Murmuró Misaki y cuando lo entendió se puso todavía más rojo.
-Venga ya, Misaki, no te pongas así.- Le dijo Shinobu.- ¿Tú nunca has tenido ese tipo de sueños?
- S-sí.- Susurró el vicepresidente después de mirar de reojo como Akihiko seguía leyendo.- ¿El sueño era con Miyagi?
- Claro que era con él, el problema es el escenario.- Dijo Shinobu.- En mis sueños lo hacíamos en casa del idiota de Kamijou.
- ¿En casa del sensei?- Preguntó Misaki sorprendido.- Eso es muy raro.
- Antes de ayer estábamos haciéndolo cuando le conté que mi fantasía sexual era hacerlo en casa de ese.- Siguió contando Shinobu.- Evidentemente Miyagi me dijo que no y yo me enfadé un poco.
- Yo también te hubiera dicho que no.
- Cuando volvió del entrenamiento lo preparó todo para que lo hiciéramos en casa de Kamijou, aprovechando que ese idiota había salido contigo. Lo hicimos tantas veces que no nos dimos cuenta de que ya era muy tarde y Nowaki y Kamijou habían entrado en su casa.
- ¿Os pillaron?
- Faltó poco para que nos pillaran.- Dijo Shinobu suspirando.- Miyagi fue rápido y me arrastró del brazo hasta un armario. Estuvimos ahí metidos hasta que se cansaron esos dos de hacerlo, cuando se quedaron dormidos salimos gateando de la habitación y recogimos nuestra ropa que se había quedado tirada por el comedor.
- ¿Y no vieron la ropa al entrar?
- No, estaban muy cachondos y no se dieron cuenta.- Explicó Shinobu.- Ayer por la mañana Miyagi se enfadó conmigo y me echó la culpa de que pasara todo eso, yo no le obligué.
- Bueno, te enfadaste con él porque te dijo que no…
- ¿De parte de quién estás, Misaki?
- De la tuya
- Cuando conseguí que me hablara me dijo que no lo volveríamos a hacer y yo le sugerí que el ascensor sería un buen lugar. No me acuerdo muy bien cómo pero acabamos gritándonos "viejo amargado" y "mocoso consentido". Por eso le eché de casa y ha pasado la noche en casa de Kamijou.
- Ve y habla con él.- Le dijo Misaki.
- Mi orgullo me lo impide.
- No seas así, con el orgullo no se va a ninguna parte.
- Tienes razón, Misaki, iré ahora mismo a hablar con él.- Dijo Shinobu y salió corriendo del apartamento.
- Tu amiguito es un pervertido.- Dijo Akihiko cerrando el libro mientras se reía.
- ¿Estabas escuchando?- Preguntó Misaki muy sorprendido.
- Sí, al principio pensé que la conversación sería muy aburrida pero se ha puesto muy interesante cuando te ha preguntado si tenías sueños húmedos y para mi sorpresa le has dicho que sí.- Dijo Akihiko sonriendo a la vez que palmeaba el sofá para que Misaki se acercará un poco más hacia donde él estaba.- Ven aquí y cuéntame detalladamente tus sueños, yo me encargaré de cumplirlos.
-¡Vete a la mierda, Usagi-san!- Dijo Misaki muerto de la vergüenza.. -
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Me ha gustado el capítulo.
Me encanta leerlo ya que cada capítulo me divierte mucho.
Jajaja Akihiko es todo un cotilla, pero ahora sabe que Misaki tiene sueños húmedos y no lo dejará descansar hasta que no le haya cumplido todos.
Ritsu y Takano ya están en Noruega veamos que hacen para ganar la apuesta y ver quien la ganará.
Esperaré con ansias la conti.. -
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Capítulo 12
1ºA
- Yukina.- Dijo Kisa sin poder creer lo que veían sus ojos.
- Dime, cariño.- Le dijo el estudiante desde el baño.
- ¿Qué te dije cuando adoptaste al perro?- Preguntó el editor sin despegar su vista de aquella cosa que se encontraba al lado de su tele.
- Que no lo querías en casa.
-Vale, ahora quiero que me expliques qué te ha hecho pensar que me gustaría tener una cabra.- Le dijo Kisa aparentando estar tranquilo.- ¿Por qué hay una cabra viendo mi tele?
- Me la ha regalado mi abuelo.- Dijo Yukina saliendo del baño.
- ¿Y si llega a ser un lobo o un avestruz? ¿También hubieras aceptado el regalo?
- Mi abuelo era pastor y ya está muy mayor para ir al monte a pasturar, además, esta era la única cabra que le quedaba.- Explicó el más joven.- Él no puede hacerse cargo de ella.
- ¿Y nosotros sí? No podemos tener una cabra en el piso.- Dijo Kisa negando con la cabeza.- ¿Tu abuelo no tiene más nietos? ¿Por qué te tiene que encargar la cabra a ti?
- Si no nos la quedamos la van a sacrificar.
- ¡Pues que la maten!- Exclamó el editor.- ¿Cuántas veces has visto una cabra en Tokio, Yukina?
- Me da pena que la maten.- Dijo Yukina poniendo cara de pena.
- No te pongas así que comes carne y no te dan ninguna lástima los animales.
- Sí, pero porque no les veo la cara.
- Yukina, lo siento mucho pero no se puede quedar aquí.- Dijo Kisa tajante.- No quiero problemas con el loco de Kamijou y como se entere de que hay una cabra en su edificio la vamos a tener.
- Al menos deja que pase aquí la noche y yo mañana veré que hacer con ella.
- Está bien, pero no le pongas nombre.
2ºA
- Por fin en casita.- Dijo Ritsu tirándose en plancha sobre el sofá.
- Oye, no dejes las maletas ahí.- Le riñó Takano señalando las cosas que había dejado Onodera en el recibidor.- Ese no es su sitio.
- A mí no me molestan ahí, pero no te preocupes que ahora las deshago y guardo la ropa en el armario.
- Ya veo como te pones manos a la obra.- Dijo Masamune al ver que el menor no se movía del sofá.
- Me estresas.- Se levantó del sofá y cogió las maletas.- Que sepas que no pienso guardar tu ropa.
- No te iba a pedir que lo hicieras.
- Eso faltaba.- Dijo Ritsu y sintió como una mano le sobaba el culo.- ¿Qué haces, pervertido?
- Tú ganas.- Le susurró el editor jefe en la oreja.- Voy a explotar como no follemos ahora mismo.
- ¿Te estás rindiendo?- Preguntó Ritsu sorprendido. Takano rodeó con sus brazos la cintura del menor y lo acercó más hacia él. Comenzó a besarle el cuello mientras lo conducía hasta la cama.
- Creo que lo he dejado bien claro.- Tumbó en la cama a Ritsu y se posicionó sobre él. Le iba desabrochando lentamente los botones de la camisa mientras dejaba un camino de besos en su pecho.- Es increíble lo mucho que he echado de menos esto. Te necesito.
- Takano…- Murmuró Ritsu entre gemido y gemido. Takano estaba atacando sus pezones y con su mano tocaba el miembro de su amante por encima de la ropa.
- ¿Tú también me has extrañado?- Preguntó el mayor deshaciéndose de su camiseta, dejando su torso desnudo a la vista. Onodera no pudo reprimirse y comenzó a acariciar la espalda del mayor.- Me tomaré eso como un sí.
Takano le quitó de un tirón el pantalón y la ropa interior. Observó unos segundos el cuerpo desnudo de su pareja para luego dirigirse a la entrepierna. Cogió el miembro de Ritsu y empezó a lamerlo haciendo que el menor se retorciera de placer.
- Para…no más ahí…- Gimió Onodera mientras apretaba la sábanas con sus manos.- Hazlo ya.
- ¿Quieres que entre?- Le preguntó Takano con una sonrisa dejando a un lado lo que estaba haciendo.- Te veo muy impaciente.
- Quiero ya.- Se limitó a decir Ritsu. Masamune lo cogió de las caderas y sin prepararlo lo penetró de una embestida.- ¡IDIOTA!- Le gritó Ritsu.
- Harás que se enteren los vecinos.- Le susurró Takano sin moverse. Esperó a que el menor se acostumbrara y comenzara a moverse él. Cuando lo hizo comenzó a penetrarlo cada vez más fuerte hasta que se corrieron los dos.
- Has perdido, tendrás que ser amable con todo el mundo.- Le dijo Ritsu mientras se abrazaban en la cama.
- Solo por un día, podré soportarlo.- Dijo Takano seguro de sí mismo.
- En la editorial también.
- Mierda.
3ºA- Habitación de Misaki.
- Cualquier día de estos te juro que lo mato.- Dijo Shinobu decidido.
- Tampoco es para tanto.- Intentó tranquilizarlo Misaki.
- Claro que lo es. ¿Te lo puedes creer? A su edad...- Suspiró el menor y se sentó en la cama junto a Misaki.- ¿Qué harías si Akihiko te dijera eso?
- No creo que a Usagi-san se le pase por la cabeza ese tipo de cosas.
- Yo tampoco lo creía y mira. Lo peor de todo es que se ha enfadado conmigo por decirle que era una idiotez.
- ¿Exactamente qué te ha dicho? Porque supongo que no te lo habrá soltado así sin más.- Le dijo Misaki pensativo.
- No han hecho falta las palabras, le he pillado mirando un catálogo.- Dijo Shinobu cruzándose de brazos.- Miyagi es imbécil.
- Puede que se sienta viejo y haga este tipo de cosas para sentirse joven.
- Pues que se haga unas mechas o algo, pero eso no.- Suspiró el menor.- Por dios, es profesor…Imagínate que Kamijou hiciera eso y se presentara así a clase.
- No tengo tanta imaginación.
- Misaki ya he llegado.- Se oyó la voz de Akihiko.
- Yo ya me voy que seguro que queréis tener sexo.- Dijo Shinobu poniéndose de pie.
- Oye, no estamos todo el día haciendo esas cosas.- Le dijo Misaki rojo por la vergüenza.
- Venga ya, pero si os oigo desde mi casa.- Rió el rubio.
- ¿Cómo sabes que somos nosotros?
- Usagi-san, más rápido.- Gimió Shinobu imitando la voz de Misaki.
- ¡IMBÉCIL!- Le dio con el cojín en la cara mientras se moría de la vergüenza.- No sé por qué me junto contigo.
- Tampoco es que nos juntemos mucho, casi siempre estás con Kamijou.- Dijo el menor cruzándose de brazos.- Tengo la sensación de que te lo pasas mejor con él que conmigo…
- Eso no es cierto.- Comenzó a decir Misaki pero fue interrumpido por su amante, que entró de golpe en la habitación.
- ¿Qué estáis tramando, chicos?- Preguntó Akihiko buscando con la mirada algo que pudiera ser sospechoso.
- Nada, solo hablábamos.- Respondió el castaño.
- ¿De qué hablabais?
- Le estaba contando a Misaki que el idiota de Miyagi quiere hacerse un piercing y que nos hemos peleado por eso.- Le explicó Shinobu.
- ¿Un piercing?- Preguntó sorprendido Akihiko.- Pues si él se hace un piercing yo me haré un tatuaje con la cara de Misaki.
- ¡No digas idioteces!- Le gritó Misaki.
- ¿Y dónde te lo harías, Akihiko?- Preguntó Shinobu provocando que su amigo le mirara con reproche.
- En la nalga izquierda.
- ¡Ya basta!- Gritó el de ojos verdes avergonzado.- Os habéis juntado el hambre con las ganas de comer.
- ¿No te gustaría que me hiciera un tatuaje?- Le preguntó el escritor.
- Por supuesto que no.
- Parejita, os dejo que tengo que ir a gritarle un poco más a Miyagi.- Dijo Shinobu.
- Recuerda que hoy tenemos entrenamiento.- Le dijo Misaki.
- No te preocupes, esta vez iré.- Comentó el rubio para después salir del apartamento.
Polideportivo de la calle de al lado.
- ¡Equipo!- Gritó Kamijou después de tocar el silbato.- Prestad atención que os tengo que dar una charla para motivaros.
- ¿Es necesario?- Preguntó Hatori cuando todos llegaron a donde estaba el entrenador/presidente.
- Por supuesto, todos los entrenadores lo hacen antes de un partido.- Dijo Hiroki y se llevó las manos detrás de la espalda.- Por culpa de nuestra agenda solo hemos podido entrenar dos días y algunas personas solo se han presentado hoy.
- Shinobu, eso va por ti.- Le dijo Miyagi.
- Cállate, viejo.
- No tenemos ni idea de futbol y somos bastante malos.- Continuó hablando el presidente sin hacer caso a los comentarios anteriores.- Las posibilidades de que ganemos este partido son prácticamente nulas, no os voy a engañar, lo tenemos bastante jodido.
- ¿Se supone que esto es para motivarnos?- Le preguntó en un susurro Kisa a Ritsu.
- Quiero que en el partido de mañana empecemos jugando bien, pero si la cosa se pusiera muy fea no me enfadaré si jugáis sucio.- Dijo Hiroki sorprendiendo a todo el mundo.- Ya no importa la deportividad, lo que importa es ganar para conseguir el dinero. Si para poder ganar hay que jugar sucio y hacer faltas pues se jugará sucio y se harán faltas o lo que sea necesario. ¿Lo habéis entendido?- Todo el mundo asintió.- Tenemos que ganar cueste lo que cueste.
- ¿Y si sobornamos a alguien?- Propuso Takano.
- El problema es que no tenemos dinero para sobornar a nadie, por eso necesitamos ganar.- Respondió Hiroki.- Una cosa más, nada de sexo esta noche.
- ¿Por qué?- Preguntó Yukina.
- Porque tenéis que estar descansados para mañana. Si oigo algún gemido en el edificio averiguaré de qué piso procede y haré que esas dos personas no duerman juntas esta noche.- Dijo Kamijou.- Espero que no me hagáis separar las parejitas.
- No nos moriremos por una noche sin sexo.- Opinó Chiaki.
- O sí, eso nunca se sabe.- Dijo Akihiko.
- Bueno, ya os podéis marchar. Mañana quiero que vengáis todos a las 11:30, no lleguéis tarde.- Dijo el presidente.- De todas formas a las 10:30 haré sonar el despertador del edificio, por si a alguien se le pegan las sábanas.
- ¿Despertador del edificio? ¿Qué es eso?- Le preguntó Misaki.
- Ya lo verás.
1ºA
- Estoy muy orgulloso de ti.- Le dijo Kisa sentándose sobre sus piernas.- Cuando me has dicho esta mañana que te desharías de la cabra no creí que lo cumplirías pero veo que me equivocaba.
- Espera, ¿no has sido tú el que se ha llevado a la cabra?- Preguntó Yukina empezando a preocuparse.
- ¿Yo? La cabra es tuya, no tengo porqué buscarle un lugar a ese bicho.
- Kisa-san, yo no he sacado a la cabra de aquí.- El editor se puso en pie y comenzó a buscar a la cabra por todo el piso.
-No está por ningún lado.- Dijo Kisa cada vez más angustiado.- ¿Cómo has podido perder una cabra?
- No sé, Kisa-san, se habrá escapado mientras estábamos entrenando.
- ¿Dejaste la puerta abierta?
- Fuiste tú el último en salir.- Dijo Yukina. El editor se paró a pensar y sí, había sido él el último en salir y no recordaba haber cerrado del todo la puerta.
- Ahora no es momento de buscar culpables, lo que debemos buscar es a la cabra antes de que la vea algún vecino.
- ¿Las cabras saben subir escalones?
- Yo qué sé, Yukina, no he estado en el campo en mi vida.- Dijo Kisa de los nervios.
- Creo que lo mejor es que se lo digamos a los vecinos.- Propuso el estudiante.- Si alguno se lo encuentra se puede llevar un buen susto.
- No, ni hablar, el loco de Kamijou nos mata.- Se negó el mayor.- Ya está nervioso por lo del partido de mañana, es mejor que no tentemos a la suerte.
- ¿Entonces qué hacemos?
- Buscarla por todo el edificio, incluso en la azotea.
- En menudo lío nos ha metido mi abuelo…
1ºB
- ¿No piensas hablarme nunca más?- Le preguntó Miyagi pero el otro siguió cocinando en silencio.- No me voy a hacer el piercing.
- Vale.- Se limitó a contestar Shinobu.
- ¿Por qué te molesta tanto este asunto?
- Porque es una estupidez y ni siquiera ibas a contármelo.- Explicó Shinobu.
- Quería que fuera una sorpresa.- Le dijo el profesor.- Creía que te iba a gustar.
- ¿Por qué querías hacerte uno? Ya no tienes edad para esas cosas.
- Por eso mismo me lo quería hacer, Shinobu-chin, muchas veces me haces sentir viejo y pensé que de esta forma me verías como alguien más cercano a ti.- Comenzó a explicar Miyagi bastante serio.- En ocasiones tengo la sensación de que en vez de ser tu novio soy tu padre o tu abuelo. No podemos hacer lo que hacen las parejas normales, cuando salimos juntos la gente nos mira raro y no podemos salir con más gente porque tus amigos son mis alumnos y eso sería muy incómodo.
- Miyagi, eso son idioteces.- Dijo el rubio acariciando la mejilla del mayor.- A mí no me importa nuestra diferencia de edad y tampoco me importa que la gente nos mire mal. Te quiero y eso hace que todo lo demás me dé completamente igual.
- ¿Lo dices de verdad?- Le preguntó Miyagi.
- Pues claro. No es necesario que vayamos al cine cogiditos de la mano o que salgamos a cenar en plan romántico, eso no me hace feliz. Lo que me hace feliz es que tú me quieras, viejo loco.- Le contó Shinobu.- No vuelvas a intentar hacer una idiotez o te mataré, ¿vale?
- No se me volverá a pasar por la cabeza.- Dijo Miyagi atrayendo hacia él.- Shinobu, me apetece hacerlo.
- ¿No has oído lo que ha dicho el demonio? No podemos tener sexo.
- Me da igual lo que diga Hiroki.- El mayor comenzó a besarlo apasionadamente, pero se detuvo cuando oyó un grito que procedía del rellano. Salieron los dos corriendo para ver qué pasaba. Se encontraron con una escena que no se esperaban. En el rellano se encontraba Hiroki junto a una cabra.
- ¿DE QUIÉN ES ESTA COSA?- Preguntó el presidente histérico.
- ¡Copito de nieve!- Exclamó Yukina subiendo los escalones de dos en dos, seguido por Kisa.
- Te dije que no le pusieras nombre.- Le riñó el editor.
- ¡Apartad esta cosa de mi vista si no queréis que os eche del edificio!- Amenazó el presidente.
- Hiroki, no te pongas así que la cabra no te ha hecho nada.- Le dijo Miyagi.
- Algún día de estos me dará un infarto por vuestra culpa.- Dijo Hiroki ya más tranquilo.
- No tendremos esa suerte.- Dijo Shinobu.
- Quiero que la cabra desaparezca de este edificio o acabará en mi barbacoa.- Dijo el presidente para luego irse hacia su piso.
- No se la podía haber encontrado otro…- Se lamentó Kisa.
- Está amargado, creo que Nowaki no le satisface lo suficiente.- Comentó Shinobu.
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Me ha gustado el capítulo.
Con cada capítulo no paro de reír.
Sabia que Takano sería el primero en caer, pero creía que no resistiría tanto y en el viaje se tiraría encima de Ritsu.
Jajajaja tenía que ser Hiroki quien encontrara la cabra.
Esperaré con ansias la conti.. -
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Capítulo 13
Vestuarios
- Ya han llegado los otros.- Dijo un Chiaki muy nervioso.- Dice Misaki que los ha visto y que son muy altos.
- Eso no tiene importancia.- Le dijo Kisa mientras se ponía los calcetines.- Vamos a jugar a fútbol, no a baloncesto. La altura no importa.
- Además, nosotros tenemos a Nowaki.- Comentó Ritsu.
- No, si a mí me da igual. El que tiene que parar los goles es Kisa, esos bigardos le van a dar un balonazo que se va a quedar tonto.- Dijo Chiaki consiguiendo que Kisa se pusiera nervioso.
- Pues como me den, Yukina les dará una paliza a todos.- Dijo Kisa alzando la voz.- Porque mi novio cuando se enfada es muy chungo.
- ¿Qué estás diciendo de mí, Kisa-san?- Preguntó Yukina entrando en los vestuarios junto a Nowaki y Akihiko.
- Chiaki está intentando meterme miedo.
- Eso no es cierto, solo te informo de lo que me ha dicho Misaki.- Dijo el mangaka encogiéndose de hombros.- Otra cosa es que a ti te asuste.
- Ahora no le eches la culpa a Misa-chan.- Le dijo Kisa.
- ¿Misa-chan? ¿Qué confianzas son esas?- Murmuró Akihiko pero nadie le hizo caso.
- ¿Y qué tiene que ver todo eso conmigo?- Preguntó Yukina.- Cuando hemos entrado estabais hablando de mi.
- Solamente he dicho que si me dan un balonazo tú me defenderías.- Dijo Kisa.
- Claro, pero intenta que no te den. Son muy grandes...
- ¿Sabéis donde está Takano?- Preguntó Ritsu.- Debería haber llegado ya.
- Se ha ido con Tori a gritarles a los de la imprenta.- Dijo Chiaki acabando de ponerse las deportivas.
- Menos mal que todavía no estamos al final del ciclo...- Suspiró Kisa.
- Imposible, Takano hoy no puede gritar.- Dijo Ritsu.
- Por eso se ha llevado a Tori.- Le dijo Chiaki.
- Espera un momento, ¿ya os habéis acostado?- Preguntó Yukina sonriendo.
-Pues claro, Yukina, ¿no notaste como nos temblaba el techo?- Le dijo Kisa riendo.- Y el que ha ganado la apuesta es Ritsu, aunque seguro que se moría de ganas porque Takano le metiera su...
- ¡CALLAOS, PERVERTIDOS!- Gritó Ritsu muerto de la vergüenza.
- No pasa nada, Ritsu, aquí hacemos cosas pervertidas todos.- Dijo Akihiko.
- ¿Por qué pasáis todo el día pensando en sexo?- Preguntó Nowaki hablando por primera vez.
- Ahora no te hagas el inocente que te he oído con Hiroki.- Le dijo el escritor.
- No digo que tener sexo sea malo, pero esto parece un edificio de salidos.- Comentó el médico.- El único inocente es Misaki y no durará mucho su inocencia.
- ¿Por qué lo dices?- Preguntó Akihiko.
- Porque vive contigo y sé que le haces de todo.
- ¿Ya estamos todos?- Preguntó Misaki entrando en el vestuario.
- No, todavía falta gente.- Dijo Chiaki.- Tori y Takano han ido un momento a la imprenta pero vendrán corriendo y Miyagi y Shinobu no han dado señales de vida.
- Espero que vengan antes de que Hiroki acabe de hablar con el árbitro.- Dijo Misaki suspirando.- Ya está bastante nervioso como para que no aparezcan estos dos.
- No hace falta que lo jures, está nervioso desde ayer.- Dijo Ritsu.- ¿No oísteis cómo gritó por la tarde?
- Sí, pero eso fue porque se encontró una cabra.- Dijo Nowaki.
- ¿Una cabra?- Preguntó Usami extrañado.- Ya es oficial, Hiroki se ha vuelto loco.
- Que no, que es cierto.- Dijo Kisa.- La cabra era del abuelo de Yukina.
- ¿Y qué habéis hecho con ella?- Preguntó Akihiko.
- Ahora está en un lugar mejor.
- ¿La habéis matado, desalmados?- Preguntó Chiaki con carita de pena.
- Claro que no, sería incapaz de matar a Copito de Nieve.- Dijo Yukina.- Se la hemos regalado a unos granjeros y ahora está en una granja junto a otras cabras. Lo que me preocupa es que no se adapte bien o que se metan con ellas las otras cabras...
- Es solo una cabra, Yukina, no le van a hacer bullying.- Le dijo Kisa rodando los ojos.
- Kisa-san, a veces eres tan insensible...
- Ya estamos aquí, sentimos llegar tarde.- Dijo Hatori entrando junto a Takano.
- ¿Cómo os ha ido?- Preguntó Ritsu.
- Sin los gritos de Takano hemos tardado el doble en solucionar el problema.- Suspiró Hatori.- Estoy demasiado cansado.
- Todo se ve mucho mejor con una sonrisa, Hatori.- Le dijo Takano dejando sorprendidos a todos.- Sonríe, que no sonríes ni aunque te maten.
- ¿Qué le pasa a este hoy?- Le preguntó Hatori a Ritsu.- Parece que se haya fumado un porro.
- ¿Estáis listos, chicos?- Preguntó el presidente entrando en el vestuario.
- ¡Sí, capitán!- Gritó Kisa.
- No, no lo están.- Dijo Misaki preocupado.- Shinobu y Miyagi todavía no han aparecido.
- ¡Lo mato!- Gritó el profesor muy enfadado.- ¡Se cree que por ser hijo de su padre puede hacer lo que le dé la gana! ¡Pues no, a mi ese mocoso no me torea!
- Sentimos llegar tarde pero a Shinobu le ha picado una araña y le he tenido que poner cremita.-Dijo Miyagi tranquilamente.
- ¡Por mí como si le pica un escorpión y hay que amputarle los dos brazos y una pierna!- Le gritó Kamijou.
- Qué bestia que es nuestro presidente.- Le susurró Chiaki a Kisa.
- Relájate y disfruta de la vida.- Le dijo Takano a Hiroki.- Pronto moriremos todos.
- Tu novio me está empezando a dar miedo.- Le dijo Yukina a Ritsu.
- La verdad es que cuando le propuse lo de ser simpático me imaginaba otra cosa, no esperaba que diera grima.
- Cambiaos rápido los que acabáis de llegar porque el partido va a empezar ya.- Dijo Hiroki más tranquilo.
- ¿No vamos a calentar?- Preguntó Nowaki.
- No hay tiempo.- Le respondió Hiroki.
25 minutos más tarde.
- No nos está yendo tan mal.- Se atrevió a decir Misaki.
- Misaki, vamos perdiendo 4-0.- Dijo Hiroki bastante deprimido.- Cuando se acabe este tiempo les diré que pueden hacer lo que quieran pero que ganen.
- ¿Y si perdemos, Hiroki? ¿Qué haremos?- Preguntó Misaki que estaba sentado en el banquillo junto a su profesor.
- No sé qué harás tú, pero yo me tiraré desde la Torre de Tokio.
- No seas tan pesimista, si no conseguimos el dinero de esta forma ya lo conseguiremos de otra.- Intentó animarlo.
- Sí, prostituyéndonos.
- No creo que eso sea buena idea.
- ¿Misaki, crees que el árbitro es gay?- Le preguntó de repente Kamijou.- Yo creo que si tonteas un poco con él ganaremos el partido.
- ¿Por qué yo?- Preguntó Misaki.
- Porque tú eres más joven que yo, yo ya no estoy para esos trotes.
- Si intento acercarme al árbitro dudo mucho que ganemos, Usagi-san lo mataría.
- Pues tendré que pensar otra cosa...
- Creo que lo del fútbol ha sido mala idea.- Dijo Misaki suspirando.- Además, hemos tenido muy poco tiempo para entrenar.
- ¿De dónde podemos sacar el dinero para pagar lo que debemos?- Preguntó el presidente mientras se frotaba la sien.
- Lo hemos intentado de todas las formas posibles, lo único que nos queda es organizar una junta para proponer una derrama.- Dijo Misaki pensativo.- Los vecinos se nos comerán vivos, pero no es culpa nuestra. Nada de lo que ha ocurrido ha sido nuestra culpa.
- En eso tienes razón, Misaki, nosotros no somos los culpables.
- Lo del enjambre no fue nuestra culpa y aun así lo solucionamos, aunque acabamos en el hospital.- Continuó hablando Misaki, ya sin hacer caso al partido.- Tampoco tuvimos nada que ver en lo del agua y conseguimos arreglarlo gracias a nuestras amenazas.
- Eso no ocurrió así.- Dijo Kamijou.- ¿Recuerdas cuando fuimos a la constructora a quejarnos y tú te pusiste a gritar como un loco?
- Sí, siento mucho haber hecho eso.- Dijo Misaki algo avergonzado.
- Pues al día siguiente Akihiko y Takano volvieron a ir, no sé muy bien qué pasó ahí pero cuando volvieron esos dos ya teníamos agua.- Explicó Hiroki.- Bakahiko no me ha querido contar qué hicieron para arreglarlo.
- ¿Por qué siempre está Usagi-san por medio?- Dijo Misaki suspirando.- Parece un mafioso.
1ºA
- No puedo creer que nos hayan descalificado en el primer partido.- Dijo Yukina acomodándose en el sofá.- Tampoco lo estábamos haciendo tan mal.
- Por un momento me ha parecido que Kamijou se iba a echar a llorar.- Comentó Kisa sentándose sobre las piernas de su novio.- Pobrecito, se le veía muy afligido.
- Seguro que la junta de mañana es para gritarnos.- Dijo Yukina y en ese momento llamaron al timbre.- ¿Esperas a alguien, Kisa-san?
- Yo no, seguro que es algún pesado de esos que nos quiere vender algo.- Dijo Kisa para luego besar los labios de su pareja.- No abras, quiero sexo.
- Pues no se hable más.- Dijo Yukina comenzando a besarle con pasión, pero fueron interrumpidos por un grito.
-¡Shou-chan, sé que estás ahí!
-No puede ser.- Murmuró Kisa apartándose del menor y poniéndose en pie.- ¿Por qué me pasan estas cosas a mí?
- ¿Quién es?- Preguntó Yukina al ver lo pálido que se había puesto el editor.
- Mi madre.- Dijo el mayor abriendo la puerta y encontrándose con dos mujeres. Una bastante más mayor que él y otra más joven.- Y mi hermana.
3ºB
- Nowaki, estoy cansado de ser presidente.- Le dijo Hiroki tumbándose en la cama junto a él.- Estoy pensando en dimitir.
- No, Hiro-san, debes ser fuerte.- Dijo el médico atrayéndole con una mano hacia él, para luego rodear la cintura del otro con su brazo.- Eres el único capaz de manejar los asuntos de la comunidad, ¿quién podría ser el presidente si no lo eres tú?
- Eso no es cierto, he fracasado como presidente y mañana cuando anuncie lo de la derrama seguro que alguien acaba matándome.
- No te deprimas, Hiro-san, que seguro que lo entienden.
- No lo harán, además, más de un vecino quiere darme un puñetazo.- Dijo el profesor apoyando su cabeza en el pecho de su novio.- Creo que deberíamos mudarnos.
- ¿Otra vez? Acabamos de mudarnos.- Le dijo Nowaki sorprendido.- No intentes huir solo porque temas que los vecinos puedan hacerte algo.
- ¡No estoy huyendo, idiota!- Le gritó.- Es solo que no me gusta este edificio y no estoy a gusto.
- ¿Estás seguro de que quieres que nos mudemos de casa?
- Sí y me gustaría hacerlo cuanto antes.- Le dijo Hiroki decidido.
- Pues vale, mañana dimites como presidente y comenzamos a buscar otra casa.
Portal del edificio
- Buenos días, señor vicepresidente.- Saludó Nibori al ver a Misaki junto a los buzones.- ¿Recogiendo el correo?
- ¿Qué haces aquí?- Preguntó Misaki sin mirarle.- Hoy no te toca trabajar.
- Quería hacer horas extras.- Dijo el portero acercándose demasiado a Misaki. El estudiante intentó ignorarlo pero tuvo que girarse cuando sintió que una mano comenzaba a tocarle el culo.
- ¿SE PUEDE SABER QUÉ HACES, IMBÉCIL?- Dijo Misaki empujándole pero el conserje tenía más fuerza que él.
- Me encantas, Misaki.- Dijo y comenzó a besarle bruscamente. Misaki intentaba librarse de él, pero lo único que conseguía era que Nibori ejerciera más fuerza.
- ¡Me das asco!- Consiguió gritar el universitario llamando la atención de la persona que acababa de entrar en el edificio.
- ¿Qué pasa aquí?- Preguntó Miyagi caminando hacia los buzones. Cuando vio la escena, sin pensárselo dos veces se abalanzó sobre Nibori haciendo que cayera al suelo junto a él.- ¡Te vas a enterar, desgraciado! ¡LOS NIÑOS NO SE TOCAN!
- ¿Por qué gritáis?- Preguntó Ritsu, quien venía junto a su novio. Al ver lo que ocurría, Takano fue corriendo a abrazar a Misaki para que parara de llorar.
- Ritsu, a avisar a Akihiko.- Le ordenó Takano sin soltar a Misaki, mientras que Miyagi continuaba forcejeando con Nibori. Onodera subió las escaleras de tres en tres, pero se detuvo en el segundo piso por culpa de Hatori.
- ¿Dónde vas con tanta prisa?- Le preguntó el editor.
- A avisar a Akihiko de que Nibori ha intentado abusar de Misaki.- Explicó Ritsu hablando muy rápido.
- ¿Qué?- Preguntó sorprendido Chiaki.
- ¿Dónde están?- Preguntó Hatori.
- Junto a los buzones.- Dijo Ritsu y continuó subiendo las escaleras.
- Voy a llamar a la policía.- Dijo Hatori sacando el móvil.
Ritsu aporreó la puerta del escritor pero por más golpes que daba nadie le abría. Insistió durante un minuto hasta que la puerta de enfrente y la de esa casa se abrieron de golpe.
- ¿Qué pasa?- Preguntaron Nowaki y Akihiko a la vez.
- Nibori ha intentado abusar de Misaki junto a los buzones.- Nada más decir eso, los dos bajaron corriendo las escaleras.
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Me ha gustado el capítulo.
Me divierto mucho leyéndolo, siempre me hace reír.
Nooo Hiroki y Nowaki no se pueden ir a vivir a otro lugar e Hiroki no puede dejar de ser presidente, no sería lo mismo sin ellos o sin alguno de los demás.
Ahora Nibori si recibirá su merecido por intentar abusar de Misaki.
Esperaré con ansias la conti..
Nuevos vecinos (Todas las parejas de Junjou y de Sekaiichi)Un edificio, seis viviendas y doce hombres. La convivencia de las seis parejas en un mismo edificio va a ser un poco locura. |
