Posts written by Kurama.

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    Capitulo V

    “Un pequeño pero transcendental progreso”

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    Aunque mi objetivo considerado ahora como mi principal prioridad aun estuviese en proceso de desarrollo, nunca creí que aquel inconcluso hecho se me fuese tan rápido hacia abajo, opacándose por un indebido y equivocado comentario de mí parte, referente al artículo de un acostumbrado periódico entregado por el mismo hombre.

    Y si bien así no he renunciado a mi anhelado término, aunque fuese desmembrado tan rápidamente, mi terquedad fue la triunfante de nuevo en mi mente gobernada por la incertidumbre, viéndose sumida en la ironía de querer arrancar aquella inseguridad que ya había pasado a formar parte de mí desde un tiempo incierto.

    Digamos que fue otro desagradable recuerdo, pero como aludía la positividad reino luego, viendo una oportunidad para aprender más del otro, y así encontrar un contenido más específico para mantener al fin una charla decente en donde pudiese encontrarse un compañerismo e intercambio factible de puntos de vista, ¡Oh! Cuanto daría porque en la lejana realidad estas conclusiones fuesen acertadas.

    Flash Back



    Me había despertado más temprano de lo normal, tanto así era esto que el habituado desayuno enfatizo este punto, pues no se encontraba situado en el acostumbrado y aburrido café en el remoto lugar de siempre. Lo más práctico era que el personal se le había mostrado tradicional mi característica rutina de la mañana, explicando esto el porqué de mi faltante alimento sobre la aburrida mesa de madera.
    Siendo el hambre una de las principales tareas por cumplir en mi inexistente lista, me dirigí hacia la campanilla y anuncie muy cortante que esperaba mi ración. Acto seguido tome un periódico de la mesa e intente distraer con el el tiempo mientras mi compañero terminaba en silencio su tostada.

    El encabezamiento de uno de los artículos estaba subrayado en rojo, y a él, naturalmente, le dirigí mi atención.

    Sobre la raya encarnada aparecían estas ampulosas palabras: EL LIBRO DE LA VIDA, y a ellas seguía una demostración de las innumerables cosas que a cualquiera le seria dado deducir no más que sometiendo a examen preciso y sistemático los acontecimientos de que al azar le hiciese testigo . El escrito se me antojo una extraña mezcolanza de agudeza y disparate. A sólidas y apretadas razones sucedían inferencias en exceso audaces o exageradas. Afirmaba el autor poder adentrarse, guiado de señales tan someras como un gesto, el estremecimiento de un musculo, o la mirada de unos ojos, en los más escondidos pensamientos de otro hombre. Según el, la simulación y el engaño resultaban impracticables delante de un individuo avezado al análisis y a la observación. Lo que este dedujera sería tan cierto como las proposiciones de Eulides. Tan sorprendentes concurrirían los resultados, que él no iniciado en las rutas por donde se llega de los principios a las conclusiones, habría por fuerza de creerse en presencia de un auténtico nigromante.

    Harto de tan insólitas palabras, grite diciendo lo que sería mi peor error- ¡valiente sarta de sandeces! – A la frase acompaño el golpe seco del periódico – jamás había leído en mi vida tanto disparate-

    -¿De qué se trata?- cuestiono Sasuke posando su atención en mí por un efímero momento.

    -De ese artículo- dije, apuntándole con mi cucharilla mientras me sentaba para dar cuenta de mi desayuno- Veo que lo ha leído, puesto que se ha tomado la libertad de subrayarlo. No niego la habilidad del autor, pero es pura teoría. ¡Quien lo viera encerrado en el metro, en un vagón de tercera clase, frente por frente de los pasajeros, y puesto a la tarea de ir adivinando las profesiones de cada uno! Apostaría uno a mil en contra suya.

    -Perdería usted su dinero, y considere bien su situación actual- repuso Holmes tranquilamente- En cuanto al artículo, es mío-

    -¡Suyo!-

    -Si-contesto cortante.

    -¿Cómo?- pregunte involuntariamente

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    Y es así, como puede encontrar la réplica a muchas de mis constantes interrogantes, al mismo tiempo averigüe el oficio de mí “amigo” Sasuke.
    Retrocediendo un poco, este hizo mención del cómo particular, incluso atribuyo que fuese único.

    Es un detective asesor…. Según me explico, en Londres eran muy frecuentes los detectives privados e incluso comisionados del gobierno. Cuando uno de ellos no sabía muy bien por donde andaban, acudían a él, colocándole este entonces en una pista. Se le presentaban todas las pistas, y con su conocimiento criminal se las arreglaba decentemente para enseñarles el camino.

    Ante su declaración, me vi envuelto en una pregunta nueva, que no dude en exponerle, esta era quienes eran los demás visitantes que venían a nuestro lugar, pues no era secreto para nadie estas constantes personas. Al parecer ellas también pertenecían a unas agencias privadas, algo que me sorprendía sin duda, puesto que Holmes no era una persona que le gustase socializar mucho, o lo viese como una ventaja en su vida.

    Sasuke no era ningún estúpido o mentalmente inestable, según me lo plantee en varias ocasiones, aunque sabía ya que estos desenlaces serian erróneos en cualquier momento, sin embargo, me permití el lujo de creerlos.

    Este día, había significado un gran avance en la tarea que me había propuesto.

    Conocía ahora más cosas sobre él, de las que hubiera conseguido utilizando el absurdo método de investigar a través de sus contactos con otras personas.

    Al fin, me había acercado más a él.

    Edited by Kurama… - 2/9/2016, 22:11
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    Oh, que bien.
    Y, tu dia..? como lo defines?
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    Pues, haciendo deberes, y tu?
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    Ambos: Pues en realidad nada, solo contestando a dos personas agradables. Y ustedes?
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    Que tal?
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    Hola.
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    Hola.
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    Hola (?)
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    Deadpool
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    ...

    Edited by Kurama. - 31/3/2019, 08:54
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    Capitulo IV
    "Mudanza, convivencia"
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    Mediante una conversación telefónica, unos días después de nuestro encuentro en aquel magnífico restaurante, que, no cabe duda de que sus 5 estrellas las tiene bien merecidas, acordamos inspeccionar las habitaciones de 221B de Baker Street a que se había hecho alusión en el momento en que nos presentamos. Consistían en dos confortables dormitorios y una única sala de estar, decorada minuciosamente por finas decoraciones traídas de diferentes lugares del mundo, pues, al parecer sus formas y matices variaban en muchos sentidos, delatando sus etiquetas el país del que fueron recolectadas. Esta era muy alegre y ventilada, con dos amplios ventanales adornados con bonitas cortinas coloridas, por ellos entraba la luz que iluminaba perfectamente el sitio. Tan conveniente en todos los aspectos nos pareció el apartamento y tan moderado su precio, una vez dividido entre los dos, que el trato se cerró de inmediato, sin ninguna replica por parte de ninguno de los presente, y sin más dilaciones, tomamos posesión de la vivienda. Esa misma tarde procedí a mudar mis pertenencias del hotel a la casa, siendo seguido por el señor Sasuke en el mismo trabajo. Durante uno o dos días nos entregamos completamente a la tarea de desembalar las cosas y colocarlas lo mejor posible.

    No resultaba Sasuke hombre difícil de convivencia, pese a los rumores circulantes sobre su persona u otros temas que estaría de más mencionar, que no reflejaban algo bueno de su personalidad. Desde mi punto de vista, el azabache solo era muy anti-social o simplemente prefería no estar expuesto a cosas sin relevancia alguna, ya que, las consideraba una pérdida de tiempo, que utilizaba mayormente en investigaciones que no tengo ni la menor idea cual es el núcleo de estas.
    Conforme pasaban las semanas, mi interés por él y la curiosidad que su proyecto de vida suscitaba en mí, fueron haciéndose cada vez más patentes y profundos.

    Aquel hombre que se había convertido en mi nuevo compañero de habitación, era de estatura promedio, su cuerpo no mostraba precisamente una complexión delgada, en cambio, musculosa y bien cuidada, de tez clara. Sus ojos eran agudos y penetrantes, de un color negro acentuado, dominante también en su cabello. Peinado peculiar lucía, consistía en mechones que llegaban hasta la altura de su barbilla, terminando en punta en su espalda; con un flequillo que colgaba sobre sus ojos.
    Tanto fue el grado de querer resolver las dudas sobre aquel hombre, que por tonto o infantil parezca, me dedique a analizarle, dando como resultado lo siguiente:

    1) No seguía la carrera médica. El mismo, respondiendo a unas cuantas preguntas, había confirmado el parecer de Stamford sobre semejante punto.

    2) Tampoco parecía empeñado en suerte alguna de estudio que pudiera auparle hasta un título científico, o abrirle otra cualquiera de las reconocidas puertas por donde se accede al mundo académico.

    3) Si sabía un número de cosas fuera de lo común, ignoraba otras tantas del mundo.

    4) De literatura contemporánea, filosofía y política, estaba casi completamente en ayunas.

    Flash Back



    Cierta vez, que saque yo a colación el tema de las pasadas guerras, no pudiendo evitar mencionar el nombre de Minato Namikaze, me preguntó, con la mayor "inocencia" quien era aquel y que había hecho. Mi estupefacción llegó sin embargo a su cenit ya que ignoraba la composición del sistema solar y la teoría copérnica y es que, ¿cómo alguien civilizado desconoce todo esto en nuestro siglo XIX? Apenas podía procesar todo.

    - Parece usted sorprendido -dijo recostándose en aquel cómodo sillón- ahora que me ha puesto usted al corriente, haré lo posible por olvidarlo-
    ¿¡Que!? ¡Quién es su sano juicio no le tomaría importancia a tan valioso conocimiento! Tanto fue mi asombro que no me di cuenta que había alzado la voz al expresar:

    -¡Olvidarlo!-

    -Entiéndame- explicó - considero que el cerebro solo debe ser "amueblado" con conocimientos a nuestra elección. Solo un necio echa mano de cuanto encuentra a su paso. A partir de cierto punto, cada nuevo dato añadido desplaza necesariamente a otros que ya poseíamos.-

    -¡Si pero el sistema solar...!- proteste.

    -¿Y que se me da a mí el sistema solar? - interrumpió molesto - dice usted que giramos en torno al sol... Que lo hiciéramos alrededor de la luna no afectaría un ápice a cuanto soy o hago -

    Fin flash back



    Me resultaba curiosa su forma de expresarse y pensar, era a mi opinión alguien enigmático, un misterio que yo quería comprender.
    He seguido la lista desde ese día de sus fuerzas y debilidades en el campo básico del conocimiento.

    En cuanto a Sakura, usualmente le veía con un hombre de cabellera roja, que, casualmente fue un amigo suyo en la universidad. Las miradas que nos dirigíamos siempre eran restantes e impregnadas de odio puro. A veces me cuestionaba el hecho de haber contestado un "lo pensaré" a mi compañera, pero, por razones que está de más saber, rechaze su ofrecimiento, es tan simple, pero doloroso a la vez... Me gustaría preguntarle al lector si... ¿Le gustaría saber que la persona que ama, se despierta con una sonrisa que no se ha dibujado a causa de su presencia? O ¿verle feliz hablando sonrojada y nerviosa con una persona que no eres tú? Suena masoquista, lo sé, pero no lo soy, y por ese pequeño e insignificante punto, decidí alejarme lo más posible de ella, pero el corazón uno no lo manda, es por eso que me enojo conmigo mismo por esos estúpidos celos que
    salen cuando le veo con otra persona.

    Y así es como, para distanciarme , al igual tiempo de olvidarme de esos hirientes sentimientos, me he centrado completamente en Sasuke, pero, sin embargo, nuestra relación no ha llegado a mas que dirigirnos un saludo o despedida, yo quería ~ser su amigo~
    Coincidí con ese pequeño susurro que fue obra de mi imaginación, pero muy apegado a lo que estaba pensando, no sería mala idea obtener su amistad, seria todo un reto que tomaría muy en cuenta, quiero ver su expresión alegre, yo quiero...

    SER SU AMIGO.

    Edited by Kurama… - 1/9/2016, 05:13
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    Bueno, interesante tema, jeje.
    Entre las parejas "raras" que me llamen la atención, esta el FudouxEndou no estoy seguro, si sera por que fue la primera pareja de la cual leí un fanfic u otro factor, pero, realmente, desde que empece a ver la serie, Endou me pareció muy mm... ¿uke? y no como el "activo" en una relación.
    Todavía no se con franqueza si se encuentra entre las parejas muy comunes, pero, siendo sincero, me gusta mucho.
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    Capitulo III
    "Conociéndonos mejor. Parte 2"
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    Me siento un completo estúpido, ¿la razón? Es simple, os he mencionado que no tenia conocidos en este país, mas sin embargo inmediatamente mis amigos hicieron aparición en mi relato.

    Quiero que las cosas en mi narración sean claras, y se entienda perfectamente las situaciones.

    Suena perfeccionista, aunque no lo soy, pero, quisiera que por lo menos en esto lo fuese.

    Antes de continuar con el encuentro con el señor Sasuke, me gustaría contarles como fue que quedamos con Sakura en reunirnos en este lugar.

    La verdad, me tomo de improvisto, pues, su regreso no estaba anticipado específicamente para ese día.

    Si no te interesa, podrías andelantarte al punto en que he dejado mi historia.

    Flash back



    Me encontraba recostado en las bancas de aquel pequeño parque, mi mirada estaba posada en algún punto muerto del horizonte, el alarmante estado de mis finanzas me había mantenido pensativo durante un lapso muy grande de tiempo, divagando en mi mente, en busca de alguna solución, aunque fuese una total tontería lo que se me ocurriese.

    Tan concentrado estaba, que ignoraba todo el hermoso panorama que se pintaba a mi alrededor, los matices y tonos de aquel atardecer, el dominante del naranja y rojo, las hojas esparcidas por doquier, haciendo recordar que el otoño estaba presente, y ¿como no? El clásico personaje sentado dando de comer a las palomas, demasiado típico como para que no incluirlo.

    Pero, si hablamos de cosas así, debemos incluir lo otro ¿no? Bueno, acertaste, ¿que seria de mi vida si mis pensamientos o acciones no fuesen interrumpidas en el momento justo? Definitivamente no seria mi vida.

    Y, claro, Sakura era la indicada en ello.

    Justo había encontrado la idea que prometía solucionar mi enigma, cuando, el muy oportuno de mi celular comenzó a sonar. Maldije mil y una veces a aquel aparato, el miserable, el culpable de sacarme de mis cavilaciones. Desquite mi furia con lo primero que vi, pobre del que se me acercase... Lo mandaría a la muy mierda. Trate calmarme tan siquiera un poco, cosa que me fue imposible, así que deseche completamente la esperanza de recuperar la respuesta a mi incógnita.

    Cogí con rabia retenida aquella "cosa" que según para mi, sonaba despectivo y tranquilizaría las enormes ganas de partirlo a la mitad, "insultar" al celular me parecía lo mejor en ese momento.

    Respirando mas aliviado, leí el nombre de ella... Sakura. No se si su nombre fue el que me relajo o simplemente el hecho de que mi "diminuto", arranque de furia ya había llegado a su fin.

    Del otro lado de la línea escuche su chillona voz.

    - ¿Como has estado Naruto? Te he extrañado; oye, ¡adivina! Estoy en Inglaterra al igual que tu, supongo. Estas aquí igualmente, ¿verdad?-
    Vaya, si tenia energía. Rápidamente le afirme y luego, le mencione mi estado de salud, recalcando el hecho de que debía encontrar un lugar donde vivir de ahora en adelante.

    -Vaya, no lo sabia, ¿gustas vivir conmigo?-

    Mi respuesta fue un simple "lo pensaré".

    Conversamos por un buen rato, me comentaba mayormente de temas triviales.
    Hasta que nuestro diálogo término, no sin antes darme una invitación de su parte.

    Fin flash back



    Actualmente, me encontraba cenando con Sasuke y mi amiga peli-rosa.

    Notaba que el ambiente era un poco incomodo, pues, de alguna u otra manera a mi compañera le desagradaba la presencia de el azabache.
    Opte por romper ese silencio con un chiste tonto, si, estaba de acuerdo que no era uno de mis mejores planes, pero, mas vale arriesgarse.

    -Oe, Sakura, tu eres peli-grosa- (review por el mal chiste, si no lo entendiste yolo :v)

    Ella solo me miro de mala gana, mm.. Esto es serio. Note como suspiraba y luego me observaba atenta, como si me quisiera decir algo.

    -Bueno, ¿de donde se conocen?-

    -Pues, de ningún lugar en específico, a decir verdad, hoy nos hemos presentado-

    -Osea que, ¿vosotros os habéis conocido hace poco?-

    -Efectivamente.-

    -Entonces, por lo menos deberíais conocer muy bien vuestros gustos-

    -Sinceramente, creo que sería una buena idea-
    Le mire expectante ¿acaso no le había mencionado ya algunos de mis cosas favoritas? No le debería de importar, después de todo, solo conviviríamos durante aproximadamente 6 meses, tiempo que, nuevamente, pienso que es poco.

    Su repentino interés era de lo mas extraño, y, mi gesto de sorpresa me delataba.

    -¿No los sabéis? - cuestiono mi amiga.

    -No- respondí cortamente a su interrogante.

    -Bueno, que mal de tu parte Naru-chan-frunció el seño- haaa eres un asunto perdido; Sasuke-san, ya que mi despistado y dobe compañero no te ha contado sobre el, lo haré yo-

    ¡¿Que?! ¿No era ella la que miraba desconfiadamente a el oji-noche? Hay Sakura, quien te entiende.

    Suspire resignado.

    La oji-jade era toda un bipolar.

    Sasuke solo me miraba de reojo con una imperceptible sonrisa burlona.

    -"Dobe"- leí en sus labios.
    Ese detestable apodo me decía desde muy pequeño, aquella chica que había sido por un largo tiempo la dueña de mis sentimientos. Y se preguntaran, ¿porque precisamente mi sobrenombre era un insulto? Pues, ella me decía repetidamente que era despistado, inocente, tonto y sinónimos. Siempre se tiraba grandes monólogos explicándome el porque, aunque al final siempre terminaba mas confundido que antes.
    La tarde transcurrió entre risas, vergüenzas, y sobre todo bromas, pero, Sasuke siempre participaba poco en nuestras carcajadas, era muy serio, frío y en situaciones indiferente a los temas sobre los que hablábamos.

    Esa fue mi primera impresión de el.


    Gracias por sus comentarios, son los que me animan a seguir con este fanfic.
    Si hay problemas con los espacios, los corregiré luego, es que ahorita estoy en el móvil.
    Saludos!


    Edited by Kurama… - 1/9/2016, 05:15
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    Es que enserio me gusta la trama y la canción :)
    Wao, si, la verdad esta un poco abandonado, pero por favor, continualo :,D
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    Capitulo II

    "Conociéndonos mejor parte 1"

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    -¿A qué se debe su visita?- exclamo.


    -Hemos venido a tratar un negocio- dijo Kiba tomado asiento en un elevado taburete de tres patas, y empujando otro hacia mí con el pie – Este señor anda buscando donde acobijarse, y como se lamentaba usted de no encontrar nadie que quisiera ir a medias en la misma operación, he creído buena idea reunirlos a los dos.-

    A Sasuke parecía seducirle el proyecto de dividir su vivienda conmigo.

    -Tengo echado el ojo a unas habitaciones en Baker Street-dijo- , que nos vendrían de perlas. Espero no le repugne el olor a tabaco fuerte.-

    -No gasto otro- repuse.

    -Disculpen- hablo mi amigo- supongo que debo retirarme- miro de reojo su reloj- es hora ya de dar inicio a mis trabajos, les dejo para que hablen; con su permiso-

    -Cuídate Kiba, nos vemos luego- me despedí, je, le debo una, veré como se le pago después.

    -Hasta ahí vamos bien-suspiro y trato de volver a dar inicio nuestra conversación- Suelo trastear con sustancias químicas y de vez en cuando realizo algún experimento. ¿Le importa?-

    -En absoluto-

    -Veamos…, cuáles son mis otros inconvenientes. De tarde en tarde me pongo melancólico y no despego los labios durante días. No lo atribuya usted nunca a mal humor o resentimiento. Odio los escándalos y gritos, espero no sea usted de esas personas que les encanta hacer un espectáculo por todo.-arrugó el entrecejo - En fin, ¿Qué tiene usted a su vez que confesarme? Es aconsejable que dos individuos estén impuestos sobre sus peores aspectos antes que se decidan a vivir juntos.-

    Me hizo soltar una pequeña risilla semejante interrogatorio. –Pues…, por el momento no sé qué decirle, solamente que desapruebo completamente los animales con mucho pelo, soy muy alérgico a ellos.-

    -Magnifico – concluyo con su rostro circunspecto- creo que puede considerarse el trato casi zanjado.-

    -¿Casi?- pregunte.

    -Efectivamente, ¿Qué le parece si convivimos un corto periodo de tiempo este día? Ya que pronto nos la pasaremos mucho tiempo viéndonos, será mejor que hagamos una idea de cómo será nuestro intervalo de ahora en adelante.-

    Me pareció interesante su proposición, por ello acepte.

    -Está bien, ¿ha donde le gustaría ir? – cuestione.

    -No tengo un lugar en concreto, ¿le gustaría decidir usted?-

    -He estado muy poco aquí-

    -Mmm… ¿Qué le parecería el parque?-

    -¡Claro!-¡oh no! , la cita con Sakura, ¡Se me había olvidado por completo!- Lo siento, no podrá ser hoy- Me corregí rápidamente.

    -Ok, entonces, será mañana-

    -Sí, es que tengo un compromiso pendiente, nos vemos luego- dije con una sonrisa, soy muy despistado a veces.

    Sakura era una de las únicas personas que consideraba familia, aunque no compartíamos ningún vínculo sanguíneo.

    Era muy bella, su cabello rosa y ojos esmeralda, piel blanca y complexión delgada, carácter fuerte y a veces explosivo; sinceramente estaba perdidamente enamorado de ella, pero cuando me confesé fui rechazado, creo que no lo recuerda, puesto que fue en el momento que éramos unos niños, pero es mejor que no se acuerde, no quisiera abrumarla o que se sienta mal por ello, lo que menos deseo es arruinar esta amistad por ese simple amorío infantil.


    Salí de allí y me encamine donde me había dicho que se encontraría, un restaurante lujoso llamado “Vocaloid”. Había escuchado hablar mucho de él, entre esos rumores que la mayoría de veces se presentaban en este conciertos impresionantes; nunca puse mucha atención a esos chismes, les quitaba importancia.

    Ahora me encontraba al frente de este, me es imposible negar que no sea majestuoso, tiene mucha iluminación y posee toques dorados junto con un amarillo sutil, es muy grande; parece que aquí solo asisten personas de alto nivel económico, lo cual me hace pensar que mi amiga debe haber gastado mucho en reservarnos una mesa, eso me hace sentir culpable.

    -¡Naruto!- me gire en la dirección de dónde provenía esa melodiosa voz, allí estaba, siempre hermosa y alegre, no puedo evitar sentirme triste, esta tan lejos, pero a la vez tan cerca…-¡Naruto!- volvió a repetirme, me regañe mentalmente por pensar esas cosas y le salude con cortesía.

    -¡Sakura! , al fin llegas, ¿Cómo has estado?- expuse.

    -Bien- no pude evitar examinarla con la mirada, había crecido mucho desde la última vez que la vi.


    Iba vestida con una falda corta rosa, tacones rojos, un chaleco del mismo color y una camisa rayada combinando esos tonos, terminando aquel traje unas medias largas blancas.

    Se miraba un poco aniñada y sumamente inocente, si no la conociese pensaría que estaba en lo cierto, pero me equivoco mucho al deducir eso.

    -¡Oye! ¡No te quedes callado! – Me regaño- vamos, quiero contarte muchas de mis proezas, además quiero estar al tanto de lo que ha pasado en tu vida desde que te fuiste.-

    -Je,je,je, entremos, allí hablamos de todo lo que quieras- reí de nuevo, pase el tiempo que pase sigue igual, siempre tan expresiva y gritona, todo el que pasaba se nos quedaba viendo raro, ella ni se inmuto de eso, vaya, cuando se mete en su mundo no le toma interés a nada.

    Habíamos entrado ya, el mesero nos indicó donde sentarnos.


    Observe de reojo como era por dentro, pero mi total atención estaba centrada en el escenario, al final no eran mentiras, aquí dan conciertos.

    -Empieza tu- dijo Sakura sacándome devuelta de mis pensamientos, que chica más inoportuna.

    Me reprendí de nuevo, no se merece que le diga así, yo tengo la culpa de distraerme con cualquier cosa.

    -Que coincidencia señor Naruto, lo que menos me esperaba era encontrármelo aquí- esa voz se me hizo familiar, y vaya que lo era, correspondía al caballero con el que había hablado antes de partir para este lugar.

    -Mr. Sasuke Holmes, que sorpresa, ¿gusta acompañarnos a cenar?- le invite, a lo mejor podríamos charlar.

    -No encuentro el porqué de oponerme- dijo con indiferencia.

    -¿Quién es el?-cuestiono Sakura.

    -Oh, disculpe, no me había percatado que el joven estaba acompañado, como ya se me había nombrado el, soy Sasuke Holmes, un gusto el conocerla- expreso para besarle la mano.

    -Igualmente- tuve que contenerme para que no me diese un ataque de risa, jamás, desde que tengo memoria la había observado sonrojada.

    Al verme batallar por no echarme a carcajadas al piso, me dirigió una mirada cargada de ira, si las miradas matasen… estaría enterrado a 3 metros bajo tierra.

    Próximo capítulo: “Conociéndonos mejor parte 2”

    Edited by Kurama… - 2/9/2016, 22:12
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