Amor Reberde [FINALIZADO]

(Harry x Draco) ¿Puede la guerra impedir que el amor nazca?

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  1. Lady Selandra
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    Capitulo 7 "El Nuevo"


    Habian pasado dos semanas desde la llegada de Draco a la Orden del Fenix, algo que no habia hecho feliz a todos. Severus estaba alegre de poder convivir con su ahijado, al que no veia desde que era un bebe, Sirius trataba de ser comprensivo con su pareja, pero el joven no dejaba de ser el hijo de un Mortifago, Lupin y Arthur no hicieron mucho escandalo por la llegada del niño, lo trataban bien, pero no como un miembro de la Orden. Molly no podia evitar comportarse como una madre con Malfoy, pero sus dos hijos menores no eran tan empaticos con el, seguia siendo un extraño, y sabian que los extraños representaban un riesgo; por su lado, para los gemelos, era solo una victima mas para sus bromas, no hacian diferencia con el, asi era su caracter. Neville y Luna no presteban mucha atencion, Luna parecia una extraña chica que vivia en una dimencion paralela, y Neville tenia una naturaleza demaciado amable. A Hermione le significo un agradable compañero de estudios, pues Draco era casi tan inteligente como ella, tenian charlas muy interesantes, y eso era suficiente para alguien como ella. Los demas adultos, solo se dedicaban a hacer su trabajo, preferian tomarlo como parte del entorno.

    El unico que no tenia una verdadera postura frente a presencia del rubio, era Harry, quien siempre habia sido desconfiado, asi lo educaron, pero Draco no parecia una amenaza, trataba de ser amable con todos, pero sin dejar de mostrar su caracter casi vanidoso; sin embargo, cada vez que Harry se acercaba a el, se sentia extraño, como si su respiracion se entre cortara, su corazon latia muy rapido, su rostro se ruborizaba, y casi no podia articular palabras. Esto lo confundia, siempre pudo lidear con casi cualquier cosa, pero esto era desconocido pare el, asi que no sabia como tratar con esto, por eso simplemente se alejaba de Draco.

    Esa tarde, en el cuartel solo estaban Sirius, Severus, Draco y Harry, los demas habian salido a hacer rondas, casi tenian todo Francia y España libre de magos oscuros, ademas de evitar que se propagaran por America, sus redes de aliados habian sido mas que utiles para hacer retroceder a los Mortifagos. Severus no era ajeno a la actitud de Harry, noto la distancia que este mantenia con su Dragon, por eso lo busco en su habitacion para charlar.

    - Hola cachorro, ¿Puedo pasar?- Dijo desde la puerta.

    - Claro, papá, pasa.- Respondio Harry, solo le decia asi cuando estaban solos o con Sirius, a quien todavia llamaba "papi".- ¿Que sucede?.- Harry sonreia.

    - Bueno...- Dijo Severus sentandose en la cama.- Queria hacerte unas preguntas, sobre... Draco.- Harry miro violentamente hacia otro lado, sentia como su rostro se llenaba de color. Severus le parecio extraña esta actidud, pero trato de no presionar al chico.- Dime ¿El te desagrada? o ¿Desconfias de el?- Severus siempre soño con verlos a ambos como amigos, por eso queria saber si podia hacer algo para arreglar la relacion.

    - Yo, er... No... digo... Si... es que.- Harry tartamudeaba, se sentia muy nervioso al pensar en Draco, Severus jamas lo habia visto asi, era muy seguro de si mismo, como buen lider.- El... no me desagrada, es solo que... yo...- No queria mentirle al hombre que consideraba su padre, pero no sabia como explicar lo que le pasaba.- No me gusta que... le prestes tanta atencion... supongo que me hace sentir celos... eso... a veces me pongo celoso, eso es todo.- Por dentro se sentia horrible, por primera vez le habia mentido a uno de sus protectores.

    - ¿Celoso? ¿De Draco?.- Severus sintio que su cachorro no era completamente sincero, pero trato de seguirle el juego.- Bueno, no tienes que sentir celos de el, es cierto, estoy muy feliz de que este aqui, cuando me converti en traidor de Voldemort, el apenas era un bebe, como tu, Lucius jamas me dejaria verlo. El no es mal chico, ha sufrido mucho. Me encantaria que mi Cachorro de Leon y mi Dragon se llavaran bien, a el lo vi nacer y a ti te vi crecer, ambos son muy importantes para mi.- Harry voltio para ver a Severus, su rostro aun estaba rojo, pero se sintio tan conmovido con sus parabras que olvido la vergüenza.

    - Bueno, yo quiero llevarme bien con el.- dijo Harry como un niño pequeño.- Pero, a veces me hace sentir incomodo... No se por que, pero supongo que es por ser un desconocido. Ya me acostumbrare.- El moreno sonrio, y el mayor se sintio mas tranquilo. Justo en ese momento Sirius abrio la puerta.

    - Lamento interrumpir, pero llego una lechuza con un mensaje de Bill, sera mejor que salgamos, creo hay un par de tontos moviendose en la ciudad de Dijon, al parecer son de los pocos que se resisten a dejar Francia.- Informo Black.- Vamos, amor.- Severus miro a Harry y es te le hizo una señal para que se fuera tranquilo, entonces ambos salieron de la habitacion rumbo a su mision.

    Al cabo de unos minutos, decidio ir a buscar algo de comer, la señora Weasley no estaba para prohibirselo. Al subir las escaleras, vio a Draco sentado en el sofa de la sala dormido con un libro en el pecho, se via tan angelical. A pesar de sus latidos y respiracion entre cortada, Harry se acerco, se sento al lado del rubio y lo miro casi perdido en la celestial imagen de su rostro. Sintio como un calor se apoderaba de su pecho, como su estomago se contraia.

    - "Que es esta sensacion... Por que cada vez que lo veo me siento asi, no lo entiendo".- Pensaba el moreno. Se asomo para ver mejor el rostro de Draco, hasta casi quedar encima de el.- "Es poco lo que recuerdo de nuestro primer encuentro, pero su rostro siempre me parecio hermoso. ¡¿Pero que estoy pensando?!... No se como interpretar esta sensacion...".- En ese momento Draco comenzo a despertar, Harry no pudo reaccionar y se quedo como estaba. Los brillantes ojos grises miraban fijamente los hermosos ojos esmeralda de Harry, ambos estaban hipnotizados por aquella vision, confundidos por el silencio.- "¿Por que no dice nada? ¿Por que no me hace a un lado?".- Penso el moreno.

    - "¿Estare soñando? Ha estado evitando desde que llegue, y ahora esta sobre mi. Tan vez no debi besarlo en aquella ocacion... pero no pude evitarlo, no he dejado de pensar en el desde que era un niño... Incluso a veces me pregunto si es que siento algo mas por el... Su rostro esta tan cerca, que casi puedo rozar sus labios".- Pensaba Draco. Un fuerte impulso se apodero de los dos, casi en una fraccion de segundo, ambos se dejaron llevar y se besaron, tan dulce y tiernamente, que perdieron toda nocion del mundo. Mientras seguien unidos por el beso, Draco paso sus brazos por el cuello de Harry, y este tomo su cintura, estaban tan inmersos en sentir el sabor del otro, tan fundidos, que muy pronto sus cuerpos se sintieron en llamas, cubiertos por calor extraño y nuevo, en el fondo ninguno estaba realmente conciente de lo que pasaba.

    De pronto escucharon el sonido de la puerta del sotano abrirse, y ambos se separon de un salto, sus cuerpos aun ardian, prueba de ello era tono rojo de sus mejillas. Antes de que cualquiera entrara en la sala Draco fingio tomar su libro de nuevo y Harry se sento en otro sillon. Justo Hermione y Ron pasaron por la puerta, el pelirrojo torcio la cara al ver rubio e hizo un leve gruñido, a lo que la castaña le dio un codazo en las costillas.

    - Hola chicos, ¿Como han estado?- Dijo una sonriente Hermione. Los dos se miraron, pero no esperaban encontrarse con los ojos del otro, asi que voltearon rapidamente, al parecer solo la castaña noto este gesto.

    - Bien. Severus y Sirius salieron de urgencia, parece que acorralaron unas cuantas 'ratas' en Dijon.- Dijo el moreno para desviar la atencion.- Ron ¿Que tal un partida de ajedres magico?- Inmediatamente el pelirrojo cambio el semblante y acepto gustoso, ambos amigos salieron de la habitacion, dejando a Draco solo con Hermione.

    - Muy bien, dime que paso...- Esta no perdio el tiempo y fue directo al grano.- Se que no nos conocemos desde hace mucho, pero Harry es un libro abierto, se cuando oculta algo, y por lo visto ese 'algo' tiene que ver contigo... Espero que me tengas un poco de confianza, no soy una chismosa, no los delatare si estuvieron peleando... "Aunque dudo que se trate de una pelea".- penso para si misma. Draco se sentia acorralado, esta chica era perspicaz, ademas que se habia convertido en lo mas cercano a una amiga dentro de la Orden.

    - Bueno... Creo que... hice algo muy tonto.- Respondio el rubio, la chica estaba un poco confundida.- Antes que lo diga debes prometer que no se lo diras a nadie...- Hermione asintio de forma seria.- Pues entonces... Yo... bese a Harry, creo que eso lo molesto... pero... yo...-

    - Lo quieres ¿Verdad?- Se adelanto la castaña, Draco se veia sorprendido, la chica suspiro sonoramente.- El dia en que llegaste, yo volvia de revisar al grupo de Neville, cuando entre oi la conversacion que sostenias con Harry, escuche lo que decias de conocerlo de antes, y al final... vi cuando lo besaste. Se que fue imprudente de mi parte, pero no lo pude evitar. No se exactamente que es lo piensa Harry, pero si te odiara por eso, ya te lo habria dicho... No es de las personas que esconden lo que sienten, pero no sabe bien como expresarlo. Aun que pienso que tu tambien debes poner tus sentimientos en claro.- Draco se quedo pensativo, lo que decia la chica era cierto.- No quiero ser imprudente, pero me gustaria saber como conociste a Harry.- Draco bajo la mirada, dibujo una sonrisa en su rostro al ver esas imagenes nostalgicas en su mente.

    - Bueno, eso fue hace mucho...- Comenzo el oji-gris. La chica escucho atentamente la tierna historia del rubio, se sintio muy conmovida por la inocencia del pasado de ambos.

    Al cabo de una hora la curiosa casa se fue llenando de gente, que no solo se entregaban comunicaciones utiles, sino tambien, compartian amenas charlas, tomando el te, entre otras cosas. En un momento la puerta se abrio, y una jovial Tonks entro, con su cabello color cereza, se quitaba la capa y se sentaba junto a la castaña y al rubio.

    - Oye Malfoy, tienes varita ¿Verdad?- dijo Tonks tranquilamente, el chico solo asintio.- ¡Bien! Creo que ya es momento de ganarte un lugar aqui ¿Sabes luchar, digo, conoces hechizos de duelo?- Un poco perdido por la pregunta, Draco miro a Hermione, esta le sonrio para darle confianza, a lo que el chico miro nuevamente a Dora y asiento otra vez.- Bueno, se que estas aqui mas como un refugiado que como un aliado, pero la verdad, sera mejor que demuestre que puedes ayudar, pues, como has notado, la edad no es limitante aqui para combatir; por lo cual creo que esta noche deberias salir con Harry y Ginny en su patrullaje ¿Estas dispuesto?- El rubio la miro y levanto la cabeza como señal de arrogancia.

    - Por supuesto, no he venido solo para que cuiden de mi como si fuera un niño pequeño, estoy dispuesto a colaborar con todo lo que este a mi alcance. Ya es hora de mostrar mis abilidades.- Dijo orgulloso, las chicas se miraron complacidas.

    Despues de cenar, los chicos se prepararon para salir, a Draco le habian dado una vieja tunica negra, que le quedaba un poco grande, la suya de color plateado seria muy obvia en la oscuridad. Los otros dos se pusieron sus habituales tunicas con el fenix dorado, salieron seguidos por Draco, quien se veia un poco inseguro, para entonces ni Sirus ni Severus habian vuelto, por lo cual sintio que nadie se despedia de el.

    La noche estaba tranquila, nada se movia en los alrededores, solo unos gatos llamaban la atencion de los jovenes patrulleros. De pronto una fuerte rafaga de viento les quito las capuchas, dejando al descubierto sus cabellos, los de Draco eran los mas notorios en la penumbra. Sin previo aviso una luz de color roja, paso casi rozando la cara del rubio, lo que hiso que los tres se pusieran en guardia.

    - ¡Lo encontre! ¡Es el chico!- Grito una voz. Pronto un grupo de negros encapuchados con mascaras rodearon a los jovenes, quienes no dudaron en defenderse con hechizos de Expelliarmus y Desmaius. Draco se paralizo por un momento, pero pronto se unio a la batalla, tenia buena punteria y pronto habia desarmado a dos Mortifagos que se le acercaron. Luego, uno de los malditos se aparecio detras de la pelirroja, pero antes que la maldicion la alcanzara, Draco se le lanzo un hechizo aturdidor, a lo cual el encapuchado cayo al suelo haciendo un sonido seco. La chica miro hacia atras, con gran sorpresa, mientras Harry se dehacia de los tres que quedaban. Una vez que apilaron a los inconcientes Mortifagos, vieron que eran siete en total, un buen botin para una noche.

    - Venian por mi.- Dijo Draco, a lo que los otros dos voltearon sorprendidos.- Ese es Dolohov, uno de los que me perseguia el otra dia... Desde que la Orden se ha hecho tan fuerte, han estado reclutando a todo aquel que les pueda ser util. Y como soy hijo de un conocido Mortifago, estoy en la lista de los que deben ser iniciados ¡Pero no lo permitire! No despues de lo que le hicieron a mi madre...- Draco mostraba gran determinacion, mezclada con tristeza. Los dos miembros de la Orden, solo podian guardar silencio, no sabian que decir. Al cabo de un rato caminaban, con los cuerpos levitando tras ellos, hacia el cuartel de la Orden, pero pronto el silencio fue roto por la chica.

    - Yo...- Dijo dirigiendole una mirada al rubio.- queria agradecerte por salvarme, te debo mi vida...- Los dos chicos la miraron con sorpresa, cuando esta lo noto miro a otro lado.- Eres bueno... para ser EL NUEVO.- Eso era mas que suficiente, pues podia interpretarse como la aceptacion, de parte de Ginny, como un miembro mas del grupo.

    - Bien, ahora eres 'El Nuevo'... Coincido en que eres muy bueno...- Dijo divertido Harry con una sonrisa, Draco lo miro y pronto su rostro se lleno de un lindo rubor, cuando el moreno lo vio sintio como su cara tambien se enrojecia, y ambos miraron al frente rapidamente, Ginny los vio y solto una sutil risita, sintio que interrumpia un poco aquella improvisada complisidad.



    Capitulo 8 "La Mudanza"


    Poco a poco el verano se despedia de la mayor parte de Europa, ya habian pasado unos 3 meses desde la llegada del joven Malfoy a los cuarteles de la Orden del Fenix, en Paris, lo cual pronto cambiaria, pues, se decidio que ya era hora de moverse. Ya casi no habia peligro en Francia, ademas de los pocos Mortifagos que quedaban, los aliados a la Orden serian lo suficientemente fuertes para encargarse de ellos.

    Solo faltaban unos dias para el cumpleaños de Harry, por lo cual habian decidido celebrarlo antes de partir. El extraño sotano, tan grande como la misma casa en ruinas a la que pertenecia, estaba hecha un caos entre los preparativos para el dia de la partida y el cumpleaños de Harry, quien por fin cumpliria 15, edad que alguna vez significo la reunion de todos los miembros originales de la Orden. Las labores de todos se dividian entre cargar baules y maletas, ademas preparar y planear todo a espaldas de Harry.

    Esa mañana, los chicos salian a hacer sus rondas, pero por lo ocupados de todos, los grupos se redugeron a parejas. Por alguna razon, Ginny y Hermione se aseguraron de que el primer patrullaje lo hicieran Harry y Draco, al parecer ellas disfrutaban la extraña incomodidad que los chicos sentian al estar solos, conspiraban para crear momentos en que nadie los molestara, o los abandonaban en la sala con diferentes excusas. Ellos trataban de charlar nornalmente, pero siempre acaban en silencio mirando hacia otro lado, siempre venia a sus mentes el momento en que "accidentalmente" se besaron, Draco temia comentarlo y Harry preferia pensar que eso no tenia importancia. Otra persona comenzaba notar esta extraña actitud, los veia a la distancia, y se preguntaba si sus supocisiones eran correctas, pero no hacia muchos comentarios, Sirius preferia no inquietar a su pareja, quien solo los veia como niños que necesitaban conocerse mejor, pero Black, mas bien, los veia como jovenes que estaban en el inicio de descubrir lo que eran sus sentimientos. Luego de que los dos chico, Harry y Draco, salieran, quiso plantear sus inquietudes a Severus.

    - Amor.- Le dijo, mientras Snape empacaba unos frascos etiquetados.- Puedo hacerte una pregunta... Bueno, mas bien plantearte una duda que tengo.- Severus asintio sin ponerle mucha atencion.- ¿Has pensado en la posibilidad de que Harry y el chico Malfoy puedan ser... mas que amigos?- Severus lo miro curioso.

    - ¿A que te refieres?.- Pregunto el oji-negro. Sirius se mostro nervioso, no sabia como explicarse delicadamente para no ser malinterpretado, hasta se sonrojo un poco, pero Severus no necesito mas palabras.- ¡Estas diciendo que ellos...!-

    - Calma, calma.- Dijo Sirius de inmediato.- Solo pensaba en lo extraño de su actitud cuando estan juntos. Me recuerda a lo incomodo que nos sentiamos cuando estabamos en la escuela, ¿recuerdas? Solo sabiamos insultarnos y molestarnos, a pesar de la mucho que me gustabas, te hacia bromas y te humillaba, pero solo queria tu atencion... Pienso que quizas, solo quizas, ellos tampoco saben como expresar lo que... sienten.- Severus trato de ocultar un leve rubor en sus mejillas.

    - Eso puede ser por muchas razones, nuestro cachorro puede que sea un poco timido con el, recuerda que no se acerco de inmediato a los niños Weasley y a los demas cuando llegamos, le tomo unos dias acostumbrarse.- Explico Sev.

    - Pero ya han pasado mas de 3 meses, ademas no solo Harry, sino tambien Draco, el ya es amigo de Hermione y Ginny, ademas de llevarse bien con los gemelos y Tonks, solo Ron es un poco arizco con el; pero solo con Harry se comporta asi... Esto es solo una supocision, la verdad no pense jamas que a nuestro cachorro le gustaran los chicos, aunque no creo que ese sea el problema.-

    - No saque mas conjeturas, si tus sospechas son verdad, veremos que hacer... pero por ahora creo que hay muchas cosas mas de que preocuparse, hasta el traslado estaremos muy ocupados, y ellos tambien.- Termino diciendo Snape. Sirius se acerco y le paso los brazos por el cuello, le sonrio tiernamente, Severus lo abrazo por la cintura y le devolvio la sonrisa mientrs se unian en tierno beso, simbolo de que ambos amantes estaban de acuerdo, simbolo de que siempre las palabras estaban de mas cuando su corazon latia de esa manera.

    A pesar de los intentos de las chicas, ni uno de los dos muchamos parecia dispuesto a acortar la distancia, incluso Harry comenzaba a sentirse un poco molesto por la situacion tan incomoda a la que era empujado constantemente, se sentia frustrado por no entender que era exactamente lo que le pasaba, al punto que ese dia despues de la ronda de la mañana opto por tomar una simple decision, prefirio creer que el sentimiento que yacia en el, era odio o desagrado, tal vez por el echo de que Draco era hijo de un peligroso Mortifago, o por apartar a su querido padre Severus de su lado, o simplemente por ser un extraño, cualquiera que fuera la razon, se impuso a si mismo la idea de que era mejor estar completamente lejos de el, esa seria la mejor solucion a su "problema".

    Cuando el dia avanzo, Harry puso todo su esfurzo en pasar el menos tiempo posible junto al rubio, las circunstancias del traslado fueron muy favorables para lograr este cometido, y al dia siguiente fue lo mismo, pero esto no estuvo ajeno a la mirada analizante de cierta castaña a quien nada se le escapaba. Antes de la hora de la cena, lo encontro solo en una habitacion, que era usada para guardar libros y pergaminos, por lo cual se dio valor para encararlo y preguntar le que era exactamente lo que le pasaba.

    - Harry, quiero hablar contigo.- Dijo la chica en tono tranquilo.

    - Dime, Hermy.- El chico siempre estaba dispuesto a escuchar a su amiga, excepto cuando esta ponia su tono de regaño. La chica aspiro una bocanada de aire y miro calmadamente al moreno.

    - Has estado muy extraño con... Draco.- Dijo ella, al momento todos los musculos de Harry se contrajeron, su pecho dio un salto y sintio un calor creciente.- Se que el y tu no han sido muy cercanos desde que llego, aun asi estas muy distante de el, mas que cuando llego, aunque... siento que ustedes se conocian desde antes de su llegada al cuartel... para ser sincera oi su conversacion ese dia... Lo siento.- El chico la miro asombrado, era raro que Hermione se guardara ese tipo de cosas, en especial por 3 meses, a menos que alguien mas hubiera compartido esos detalles, conocia muy bien a su amiga.

    - Draco te lo conto ¿Verdad?- Dijo el moreno, ella asintio un poco avergonzada, pero tambien estaba un poco mosleta, sentia que siendo amigos tanto tiempo, Harry pudo haberselo contado.- No es que quisiera ocultarlo, solo que... que... er... Yo solo... digo... er... este...- La castaña solto una risita divertida.

    - Perdon, pero nunca crei ver a Harry Potter tan nervioso, creo que esto te 'pego' muy fuerte, debe gus...- Dijo ella, casi al instante se tapo la boca, como tratando de que algo no se escapara de ella. Harry la miro confundido, no sabia como interpretar esas palabras, comenzo a poner su mirada intimidante, la usaba como amenaza para los enemigos, como una forma de obtener respuestas en los interrogatorios, sus ojos se ensombrecian y sus cejas bajaban, como Severus, incluso a veces dibujaba una maliciosa sonrisa, como Sirius en sus travesuras; pero esta vez no sonrio, solo fijo los ojos en su asustada amiga para obtener una respuesta, Hermione palidecio un poco, la verdad esa mirada tenia efecto en ella.- Bueno, lo que quise decir es... que tu... talvez, solo talvez... te... te gusta... Draco.- El nombre del muchacho sono casi en un susurro, pero aun asi en ese silencio Harry fue capaz de oirlo. No era tan tonto como para no saber que significaba eso, la sola idea de que el nuevo objeto de su desprecio le gustase, era mas molesto que interpretar sus incomodas sensaciones.

    - ¡Gustarme! ¡Claro que no! Eso es ridiculo, ademas ambos somos chicos, es como...- Harry se detuvo en seco, por un momento habia olvidado el hecho de que sus padres adoptivos era una pareja del mismo sexo, dos hombre que el siempre habia visto como dos personas que se amaban mucho, y que habian compartido ese dulce amor con el, como tiernos y cariños padres.

    - Solo era una supocision.- Dijo ella recuperando la calma.- Pero tal vez deberias pensarlo mejor. Tu no eres una persona que huye de las cosas, es probable que no sepas como expresar lo que sientes por el- no sabia lo cierto de sus palabras-... pero si es amor, puede que el sienta lo mismo. Es solo una corazonada, pero seria muy cruel para ambos, alejarse e ignorarse si es que son la persona correcta para el otro. Piensalo Harry, puede que de toda esta horrible guerra, nazca algo bueno para ustedes, algo bello que jamas hubieras imaginado...- despues de decir esto, la castaña salio de la habitacion, dejando atras a un joven moreno muy confundido y pensativo.

    Mientras cenaban, Harry no podia evitar pensar y repasar las palabras de Hermione, no se hacia a la idea de que todo eso que lo atormentaba pudiera ser amor, pero tampoco era una locura del todo. Hace tiempo, Draco fue la primera persona que le hiso sentir un cariño diferente al que sentia por sus protectores, su primer a amigo, aunque haya sido por corto momento. Creia que habia sido injusto con el rubio, el trato de acercarse a Harry con el bello recuerdo de su infancia y el solo lo habia ignorado, se sintio realmente mal. Esa noche mientras todos se iban a dormir, el moreno espero pacientemente a que la sala quedara vacia, cuando vio que el rubio de dirigia a su habitacion, le hiso una señal para que lo acompañara, este dudo un momento, pero luego se sento al lado del oji-verde.

    - Perdon que te moleste tan tarde, pero necesito hablar un momento contigo.- Comenzo Harry, Draco asintio espectante.- Creo que te he tratado muy mal desde que llegaste, tal vez no te he insultado o molestado, pero te he ignorado como a un extraño.- Harry espero respuesta de parte del rubio, pero este solo miro en silencio, asi que el moreno continuo.- Al principio no recordaba mucho de nuestro primer encuentro en Suecia, pero poco a poco he ido encontrando mas memorias sobre aquel momento. Aun asi he sido muy distante contigo, pero esto tiene una razon... Hay veces en que me hesentido un poco raro a tu lado, no se exactamente como describirlo, pero es una sensacion un tanto incomoda, la cual no se como interpretar.- Harry miro a sus pies para no encontrarse con grises ojos que lo observaban, se sentia como niño confesando una travesura.

    - Bueno, para ser sincero... Yo tambien me sentido extraño cuando estoy junto a ti.- Respondio Draco, Harry solo miraba de reojo.- Ademas no eres el unico que debe disculparse. El dia en que llegue, fui muy imprudente cuando te... te bese.- El moreno volvio a sentir el calor llenando su rostro.- Por un momento olvide que ya no eramos niño, y sin pensarlo mucho hice eso tan vergonzoso. Ademas, despues cometi el mismo error cuando te vi al despertar aquella vez.- Por un momento el corazon de Harry se apreto violentamente al escuchar a Draco decir que ese beso fue un "error", pero no supo por que, se sintio un poco cabizbajo.- Harry, quiero que tu y yo seamos amigos, no quiero alejarme ti otra vez. Antes de llegar aqui tu eras mi unico amigo, siempre lo fuiste.

    - Entiendo.- Dijo Harry, suprimiendo el malestar en su pecho, se puso de pie y le extendio su mano a Draco con una amistosa sonrisa.- Draco Malfoy ¿Quieres ser mi amigo?- El rubio se sorprendo mucho por lo rapido del movimiento de Harry, pero pronto estuvo de pie tomando la mano del oji-verde, sonriendo de la misma manera.

    - Por supuesto, Harry Potter, quiero ser tu amigo.- Una vez que estrecharon sus manos, Harry miro la hora y dijo que se iria a dormir, se despidio del oji-gris con movimiento de su mano y desaparecio escaleras abajo. Cuando Draco quedo totalmente solo en la sala, tomo su mano derecha con la otra y la acaricio suavemente, como si de verdad acariciara la mano que acababa de estrechar.- "Harry... es mejor asi... Creo que es imposible que tu sientas lo mismo que yo. Prefiero ocultarte lo que siento por ti y tenerte como un amigo, que confensarte mi amor y perderte para siempre... Mi pecho duele mucho, pero aguantare todo lo que sea posible, con tal de verte feliz y tranquilo, incluso si mi corazon explota, se que lo hago por ti... Mi Gryffindor".- Los tristes pensamientos de Draco, hacian que de sus ojos brotaran brillantes lagrimas, pero para el solo eran la representacion fisica del sentimiento que debia salir de su ser, aquel que habia cultivado desde hace muchos años atras, pero que solo hacia unas semanas, habia reconocido como tal. Metio la mano en su bolsillo y saco el parche bordado, lo apreto contra su pecho y se dirigio a su cuarto, con el punzante dolor en el corazon.



    Capitulo 9 "El regalo de Cumpleaños"


    Esa semana casi llegaba a su fin, con ella el mes de Octubre, pero antes de que este partiera del todo, el ultimo dia de ese mes marcaba una fecha memorable, pues recordaba el nacimiento del joven Harry Potter hace ya 15 años.

    Todos lo habitantes de la vieja casa que servia de cuartel de la Orden del Fenix, preparaban la celebracion de este evento. Harry finjia no saber que se haria una fiesta en su honor, cada año era lo mismo, lo sacarian de la casa antes de la cena, mientras todo era dejado en su lugar, y cuando este cruzara la puerta tratarian de sorprenderlo. Pero, aunque era conciente de todo, se dejaba llevar por el ambiente, y actuaba como si estuviera sorprendido de verdad. Solo Ron y Hermione sabian que lo sabia, por lo que le seguian el juego. Ese año una persona compartia tambien este secreto, un joven rubio, alto y con bellos ojos grises. Harry y Draco habian decidido ser amigos desde hace solo unos dias atras, pero parecian llevarse muy bien, esto alegraba mucho a Severus Snape, sus dos queridos niños eran por fin amigos.

    Esa tarde, Ron fue el encargado de sacar al moreno de la casa. Mientras caminaban, supuestamente patrullando, charlaban animadamente, cuando llegaron a un parque aparentemente vacio, se sentaron en una banca para conversar mas tranquilos y Ron decidio plantear una duda que le perseguia hace unos dias.

    - oye, compañero, ¿Desde cuando tu y el rubiesito son tan amigos?- El pelirrojo se mostraba desconfiado.

    - ¿Hmm? Desde hace tres o cuatro dias ¿Por que la pregunta?.- Respondio Harry.

    - Es que cuando lo tragiste, no te mostrabas tan amistoso con el, y ahora parece que se conocieran de toda la vida. Hermione me conto de su encuentro hace años.- Ron miraba a Harry con una ceja levantada.

    - Ronald Weasley ¡No me digas que estas celoso!- Rio Harry, mientes el pelirrojo se ponia rojo hasta la orejas, pero antes que levantara la voz para protestar, Harry se le adelanto- Lo siento, lo siento, no quise molestarte. Es solo que nos hemos empezado a conocer, y no es una mala persona, sabe muchas cosas, es abil con la varita, conoce las reglas del Quidditch, es interesante hablar con el, es casi tan tan bueno como tu en el ajedrez magico, tan vez deberias jugar un dia con el, puede que Draco te llegue a agradar.- Ron miro al suelo.

    - Bueno, tal vez uno de estos dias lo haga.- Dijo Ron, volvio a mirar a Harry con una expresion un poco dudosa.- Pero ustedes solo son amigos ¿Verdad?... Quiero decir, solo sientes eso por el.- El moreno lo miro con los ojos muy abiertos.- Bueno, es que... Hermione tiene la idea de que ustedes podrian ser algo mas... digo, mas que amigos.-

    - ¡Solo somos amigos!- Grito de pronto el oji-verde, lo que casi hace que Ron se caiga de su asiento. Cuando noto lo exaltado que estaba, trato de volver a la calma.- Quiero decir, que el y yo solo somos buenos amigos, Hermione puede pensar en muchas cosa, pero eso no quiere decir que este en lo correcto.-

    - Y Malfoy, ¿Piensa igual?.- La conversacion se volvia un poco incomoda para ambos, pero el oji-azul queria aclarar sus dudas.

    - El mismo fue quien me propuso ser amigos, es obvio que solo ESO siente por mi, amistad.- Respondio el moreno, tratando de aferrarse a sus propias palabras. Ron penso que esa respuesta era suficiente, no queria indagar mas en los pensamientos de su amigo, para el era igualmente incomodo enterarse de un posible sentimiento por descubrir, no le importaba si era un hombre o una mujer, pero su amigo podia estar enamorandose del hijo deun Mortifago, alguien que podia significar una traicion, o peor, ser una perdida, de cualquiera de las dos formas, el corazon de Harry sufriria.

    - Bueno, como sea, ya es hora de volver. Tu fiesta esta por empezar, recuerda finjir sorpresa.- Ambos se fueron riendo, mas para calmar los animos.

    Una vez que entraron al sotano, en medio de la oscuridad, todos salieron de sus escondites, y Harry hizo su abitual actuacion de sorpresa. Luego de un rato de risas y charlas amenas, Severus aparecio con un gran pastel, sobre el cual flotaban magicamente lucesita como luciernagas formando el numero 15. Cantaron animadamente el "Cumpleaños Feliz", luego Harry soplo las velas del pastel y todos aplaudieron. La cena fue tranquila y amena, todos le le dieron un regalo al festejado, cosas como: Un sweter y una bufanda tejida a mano de parte de la señora Weasley, un bolso nuevo de parte del señor Weasley, Ron le dio unos protectores nuevos para jugar Quidditch, algo que hacian cada vez que tenian tiempo libre, y Hermione le regalo un libro sobre Defensa contra las Artes Oscuras, algo muy util; Lupin le dio una bella capa de viaje. Cuando abrio el relalo de Severus, una caja larga, descubrio una escoba nueva, de las mas veloces y agiles, pero el regalo de Sirius fue el que mas le sorprendio, era un bello medallon dorado con la letra "P" grabada, cuando lo abrio vio las fotos de sus padres mirando, fue un momento muy emotivo, abrazo a ambos padres de una forma muy cariñosa y estos a su vez le devolvieron el abrazo. Los demas tambien le habiandado su regalo, pero el unico regalo que no estaba en la pila era el de Draco, aunque casi todos lo pasaron por alto.

    Las horas pasaron rapido, asi que pronto todos decidioeron ir a la cama, pues al dia siguiente partirian muy temprano. Cuando el comedor se fue vaciando solo Harry, Hermione, Ron y Draco quedaron oredando los regalos.

    - Es cierto, tu no le has dado nada a Harry, pense que ya eran amigos.- Dijo de pronto Ron a Draco, en tono muy desagradable. Hemione le dio un pisoton, a lo cual Ron solto un alarido.

    - Ron, acompañame a dejar estas cosas en el baul de la sala, ahora.- Dijo la castaña en tono autoritario, antes de que el pelirrojo se quejara, esta le dedico una mirada furiosa, a lo que Ron prefio seguirla sin protestar. Cuando estos estaban cerrando la puerta al salir, la chica le guiño un ojo a Draco.

    Cuando quedaron solos ordenando se quedaron en silencio, al menos por unos minutos. Draco metio la mano en su bolsillo y saco un paqueño paquetito, como una bolsita de papel de regalo.

    - Harry.- Dijo el rubio casi en un susurro, el moreno volteo y Draco le extendio el paquetito, Harry lo tomo con insertidumbre.- Es para ti, es tu regalo... Feliz Cumpleaños, Harry.- El de ojos esmeralda lo miro sonriente e inmediatamente lo abrio. Era un pequeño pendiente dorado en forma de serpiente, como un arete. Harry levanto la vista al chico de ojos grises, este levanto su cabello, que hasta entonces habia esta apegado al rostro casi al nivel del menton, dejando ver su oreja izquierda, de la cual colgaba uno muy paresido, pero era un leon de oro blanco.- Se que no es mucho, paro me esforce en transmutar las piezas de oro para que tuvieran esa forma... fue un poco dificil.- Harry aun lo miraba confundido.- Si no queres usarlo como arete, puedes sacarle la serpiente y colgarla en una cadena... pero pense que seria un poco estorvoso cuando luches... ¡No es que pensara que lo usarias todo el tiempo! Pero queria date algo igual de simbolico que el parche... Simbolo de nuestra amistad.- Draco comenzo a ponerse muy nervioso.

    - Gracias.- Dijo de pronto el moreno, tiro su cabello, un poco mas largo que el de Draco hacia atras de la oreja derecha.- ¿Me ayudas? No se como perforarla sin quedarme sin oreja.- dijo entre risas. Draco sonrio y apunto su varita a la cara de Harry, este sintio un aguda punzada que pronto desaparecio, toco el pequeño orificio y paso el pendiente.- ¿Como se ve?-

    - Bien... Se te ve muy bien.- Ambos sonrieron, la cabo de unas horas guardaron todo lo que faltaba y se fueron a dormir. Harry pensaba que habia sido un gran cumpleaños, acaricio su oreja con la mano derecha y con la izquierda apretaba el colgante de sus padres, mientras poco a poco era arrastrado a un profundo sueño.

    "Harry abrio los ojos y se encontro acostado en el suelo mirando el palido cielo. Noto que sobre lo estaba no era pasto, sino mas bien nieve, eran las blancas montañas de Suecia, en las que se crio. Ahi estaba, con 15 años, en las montañas que no veia hace 4 años. Se levanto del suelo, que curiosamente no estaba frio, camino un poco y vio el pueblo que se encontraba cerca de su antigua casa. Se sentia ligero, casi flotando en la nieve, pronto vio una silueta a lo lejos que se acercaba lentamente. El moreno no sabia por que, pero camino al encuentro del desconocido, se sentia ansioso de acortar la distancia, como si esperara su llegada.

    A cada paso, el extraño tomaba mas y mas una forma familiar. Poco a poco una sedosa cabellera rubia platinada fue facil de distinguir, unos ojos grises y brillantes se fijaban en los suyos verdes como esmeraldas, en el rostro, palido como la nieve, se dibujava una bella sonrisa. Harry estaba hipnotizado, esa figura tan perfecta apenas cubierta por un pantalon de tela negro y una delgada camisa blanca apenas abotonada en el vientre, era la vision mas angelical que Harry hubiese imaginado. Todo su cuerpo clamaba por tener contacto con aquel ser tan celestial, su piel morena le rogaba tocar esa tan palida, era un impulso incontenible. Una vez que estuvieron a menos de un metro de distancia, Harry ya no pudo avanzar mas, se paralizo; sin embargo, Draco dio unos pasos mas y estiro su mano, hasta tocar el pecho semi-desnudo de Harry, quien acababa de notar que vestia de la misma forma que el rubio. En tanto sintio el toque de la mano, ese extraño calor comenzo a invadirlo, agitando su respiracion y acelerando su pulso cardiaco, su cuerpo se libero, para luego lanzarse como una criatura hambrienta a los labios del rubio, ambos se besaron con apacionada locura, una pacion que no conocia, algo totalmente nuevo, que entre besos y caricias comenzaba a descubrir..."

    Harry desperto en su cama, agitado por aquel curioso sueño, sentia como en su pecho aun se mantenia ese calor abrumante, toco sus labios buscando el sabor y el roce de aquellos labios que probo no solo en su sueño, sino en su inocente infancia y luego en su reencuentro con alquel que era su amigo. Algo mas llamo su atencion, miro bajo las cobijas y comprobo que su cuerpo habia reaccionado ante ese momento creado en su subconciente, respiro profundo para recobrar la calma.

    - Somos amigo... solo eso... solo amigos.- Se repetia el moreno a si mismo, angustiado, confundido, tratando de alejar los recuerdos de ese sueño.- Espere mucho volverlo a ver, por un momento lo olvide... pero ahora por fin podemos estar juntos... No puedo dejar que esta extraña sensacion arruine todo... Es mi amigo, mi primer amigo.- Sin poder ignorar mas ese incendio en su interior, se levanto y se dirigio al baño, deseando que en agua fria lo volviera ala calma.

    A penas estaba amaneciendo, pero decidio vestirse de todas formas, fue a la sala y comenzo a preparar las cosas que faltaban para la partida. En una hora, aproximadamente, los demas miembros de la Orden fueron apareciendo, a nadie le llamo la atencion ver a Harry despierto tan temprano, pues era bueno madrugando. Luego de dejar todo listo para irse, Molly los llamo a desayunar. Arthur, Lupin, Tonks y Kingsley habian salido para poder ajustar los ultimos detalles antes de abandonar Paris; por lo cual solo Molly, Sirius, Severus y los mas jovenes se sentaron para desayunar. Sin darse cuenta, Draco tiro su cabellos hacia atras, dejando ver el peculiar accesorio en su oreja.

    - Que lindo arete, Draco, te hace ver muy cool.- Dijo Luna en voz alta con su abitual sonrisa, Draco parecio un poco avergonzado. Severus miro rapidamente.

    - ¡¿Un arete?! ¡¿Te pusiste un arete?!.- Dijo Snape molesto, pero su pareja miro al rubio con admiracion.

    - Genial. Yo tambien use uno cuando era joven, pero a Sev no le gustan, asi que me lo quite. El piensa que son de mal gusto, como los tatuajes...- Comento Sirius con una sonrisa, su amante lo fulmino con la mirada.

    - A mi tampoco me gustan, no son muy descentes.- Dijo la señora Weasley, a lo que Ron solto una risotada, Hermione lo miro muy molesta.

    - Esas cosa son para chicas... Ya decia yo que eras un poco delicado.- Dijo Ron en tono burlon. Antes que Hermine o Ginny dijieran algo para regañar al pelirrojo, Harry se aclaro la garganta para llamar la atencion.

    - Es una lastima que pienses eso, Ron...- Dijo el moreno, puso el cabello del lado derecho detras de la oreja, para que todos apreciaran el arete de oro con forma de una diminuta serpiente. A Severus parecia habersele ido el alma y Sirius trataba de hacerlo reaccionar, la señora Weasley nego con la cabeza en señal de desaprobacion, Ron lo observo con la boca abierta, Neville parecia mirar muy interesado, Luna le levanto el pulgar en señal de aprobacion, y tanto Ginny como Hermione parecian encantadas. Draco y Harry si miraron, y ambos compartieron una sonrisa, divertidos del efecto que causo aquel regalo de cumpleaños.



    Capitulo 10 "Grimmauld Place"


    El clima otoñal se volvia cada vez mas frio, el sol pasaba mas tiempo cubierto por las nube, y cuando se hacia presente, sus rayos producian un calor muy tenue. Londres parecia, a simple vista, una ciudad tranquila, o mejor dicho, casi desierta, Harry se preguntaba si antes de que Lord Voldemort se adueñara del pais, la capital de Inglaterra era tan agitada como Paris hace cuatro años, aunque el dia en que partieron, La Ciudad Luz, trataba de recuperarse, era cada vez mas comun ver algunos grupos de personas caminando por las calles, como tratando de perder el miedo. Aun asi miraba curioso, mientras el, sus protectores y un joven de cabellos rubios, se escabullian por viejas callejuelas, su destino solo lo sabian los mayores.

    Cuando la Orden tomo la decicion de volver a Inglaterra, concidero que permanecer todos juntos era peligroso, un grupo grande de personas seria muy obvio, por lo cual penso que seria mejor dividirse y vivir por separado. Los Weasley recostruyeron La Madrguera en un campo apartado, Lupin, Tonks y Hermione vivirian en un pueblo cercano a Londres, Neville y Luna volvieron con la abuela de Neville, quien tenia una casa en los limites de entre Inglaterra e Irlanda. Por su lado, la pareja de Sirius y Severus, se llevaron a Harry y Draco a un lugar que ellos desconocian.

    Por fin llegaron frente a un grupo de grandes y viejas casa. Curiosamente estaban en frente de la division de dos de esas casas, la numero 11 y la 13, es decir, faltaba la 12. Los mayores avanzaron hasta quedar muy pegados al muro divisorio, los jovenes los imitaron, un poco confundidos, una vaz ahi, las casas comenzaron a crujir y poco a poco se fueron separando para dejar visible el numero 12 de Grimmauld Place. Por dentro, la casa era grande, llena de tetricos y raros objetos. Harry y Draco miraban curiosos los alrededores, aunque por alguna razon de vez en cuando el moreno solo posaba sus ojos sobre el rubio, mientras Severus y Sirius se iban a la cocina para planear los pasos a seguir. Bill y Arthur habian creado una red para enviar y recibir correo por unos buzones encantados que cada grupo tenia, eran unicos e indetectablen, hasta donde ellos sabian.

    - Harry, Draco, vengan aqui, hay que organizarse.- Dijo Severus desde la cocina. Los chicos aparecieron y se sentaron junto a sus tutores.- Primero, designaremos las habitaciones.-

    - Bueno, tu y yo podemos usar la de mis padres.- Dijo Sirius, al momento los mas jovenes voltearon a verlo.

    - ¿Esta es tu casa, papa?- Comento Harry, sin notar que habia llamado Sirius "papa" frente a Draco, el rubio lo miro y este bajo la cabeza avergonzado.- Digo, padrino.-

    - Asi es, Harry... Y desde ahora viviremos aqui los 4, asi que me parece tonto que te averguencen frente a Draco.- Respondio Sirius con una linda sonrisa. Draco le sonrio a Harry, y este le devolvio una sonrisa nerviosa.- Los chicos pueden usar mi habitacion y la de mi hermano.-

    - Bien, tendremos que limpiar y ordenar un poco. Podemos usar el estudio como sala de archivos... y si es necesario, de interrogatorio.- Dijo Severus.- Por ahora solo nos enfocaremos en las habitaciones, cuando terminemos de instalarnos, veremos que hacer con el resto de la casa.- Con esto acordado, Sirius los guio escaleras arriba, mostrandole su habitacion a Harry, mientras que a Draco le toco la del hermano de este, Regulus.

    Tras pasar toda la mañana sacando el polvo y las telarañas, deshaciendose de artefactos de oscura procedencia y sacar algunos cuadros de la casa, incluyendo el odioso cuadro de la madre de Sirius; se dispucieron a almorzar. Cuando Severus entro al comedor, traia una carta.

    - Parece que no tendremos mucho tiempo para descansar, Bill mando un comunicado diciendo que Hagrid y Charley, el hijo de Arthur, han tenido problemas para acercarse a la frontera.- Decia mientras tomaba un bocado de pastel de carne.

    - Eso significa que ya tenemos que movernos, ¡Que molesto!- Dijo Siruis, bebiendo de su vaso.

    - Si, pero los chicos se quedan aqui. Su deber sera proteger la casa, no olviden poner los hechizos protectores en la puerta y las ventanas.- Ambos asintieron, pero Harry tenia una expresion de no estar muy complacido.- Harry ¿Pasa algo?-

    - Esperaba participar, no me gusta eso de 'cubrite y escondete'... Saben que soy muy capaz de pelear en cualquier situacion.- respondio el moreno, en ese instante Sirius se puso de pie y avanzo hasta abrazar a Harry por los hombros.

    - Harry, nadie te esta menos preciando, este es un problema menor, desde ahora, habra tanto que hacer para hacer retroceder a los Mortifagos, que tendras mas accion de la que esperas. Recuerda que estamos en medio del campo de batalla, y que Voldemort ya sabe de tu existencia.- Decia Black, al momento que Draco casi se atora con la comida cuando escucho el nombre del maldito.- Draco ¿Estas bien?.-

    - Si, lo siento.- Dijo limpiandose la boca.- Es que, hace mucho no oia su nombre.- Una vez que terminaron de comer, los mayores se despidieron de los jovenes, se colocaron sus tunicas para salir, pero en la entrada Draco detuvo a Severus- ¡Espera!- este lo miro.- Yo queria decirte... bueno...- el rubio levanto la mirada y esboso una linda sonrisa- Que les vaya bien, cuidense, yo... los estare esperando.- Severus se sintio muy conmovido, al igual que Sirius, que estaba en la entrada, ambos se acercaron al chico y le acariciaron la cabeza.

    - Volveremos pronto.- Respondio Black, mientras se alejaba del oji-gris, Snape le dio un abrazo a su ahijado.

    - Me alegra que estes aqui, espero verte lo mas pronto posible... A ti, mi Dragon, y Harry, mi Cachorro de Leon.- Se separo de el y lo miro con ternura.- Cuidense, ambos, por favor.- Luego de esto ambos desaparecieron por la puerta. Draco se sentia muy feliz, por un momento penso que asi deberia sentirse estar en un verdadero hogar, no solo asustado y viendo a su madre llorar, sintiendo cariño, anciando el regreso de las personas que lo quieren y protegen, ademas compartiendo el mismo techo con la persona que ocupaba casi por completo su corazon, el ser que mas amaba en esta tierra, y de aquel que debia esconder sus sentimientos, su querido Gryffindor, su amado Harry Potter; todas estas cosas lo llenaban de una enorme felicidad y tranquilidad.

    Luego que los adultos se fueran, Harry y Draco continuaron con su labor de limpieza, debian de deshacerse de años de abandono. La tarde avanzaba lenta, los dos estaban muy cansados, pues habian ciertas protecciones anti-hechizos que los obligaba a hacer las cosas a mano, pero esto le permitia al oji-verde, concentrarce solo en el trabajo, y alejar de su mente un par de ojos grises que de vez en cuando lo seguian. Cerca de la hora de la cena, decidieron dejar lo que faltaba para mañana, lo cual era mucho aun, Harry tomo un baño primero, mientras Draco trataba de cocinar alguna de las recetas que la señora Weasley le habia enseñado; una vez que Harry salio del baño y se fue a su habitacion a cambiarse, fue el turno de Draco. El agua caliente relajaba todos sus musculos, el jabon le quitaba el polvo de su palida piel, y sus cabellos casi plateados brillaba con las pequeñas gotas de agua. Luego de salir de la tina seco su pelo con la varita y gran parte de su cuerpo, despues se dirigio a su cuarto, encontrandose con Harry en la escalera. Este miraba el estupendo cuerpo del rubio, quien solo llevaba una pequeña toalla sujeta en la cintura, con los ojos muy abiertos, casi de inmediato las imagenes del sueño que habia tenido dias atras, invadieron su cabeza, ante el creciente sonrojo, Harry se apresuro a bajar, diciendo entre tartamudeos que prepararia la mesa para cenar.

    Al cabo de unos minutos Draco entro al comedor vistiendo una sedosa pijama de color verde, de mangas y piernas largas, mientras que Harry traia uno de algodon, con pantalon corto y una camisa de mangas cortas, color escarlata con delgadas lineas doradas. Draco se sento y Harry le alcanzo un plato.

    - Hoy estuvo pesado, ademas aun faltan las habitaciones mas grandes.- Dijo Draco acomodando su cabello detras de la oreja izquierda, dejando ver su arete, Harry lo vio y toco el suyo, sobandolo un poco.

    - Si, espero que mañana Sev y Sirius esten aqui para ayudar... Espero que esten bien.- Ambos miraron sus platos preguntandose si sus padrinos estarian bien.- Pero no creo que haya que preocuparse, ellos son exelentes en combate, me enseñaron todo lo que se... Draco, a ti ¿Quien te enseño a luchar?- El rubio levanto la cabeza y miro menlancolicamente en direccion al candelabro que alumbraba la mesa.

    - Mi madre.- Dijo despacio, Harry se sintio incomodo, no quiso perturbar a su amigo, el oji-gris lo miro y dijo- Ella era muy buena con la varita, ademas muy inteligente, me enseño muchas cosas de magia y hechiceria, pociones, botanica, historia, entre otras cosas.- El chico se veia muy entuciasmado al recordar a su madre.- Siempre la admire mucho... Es por eso que vengare su muerte... Nunca perdonare a mi padre ni mi tia Belatrix, ellos solo son unos malditos asesinos.- dijo frunciendo el ceño.

    - Te entiendo, me hubiese gustado tener recuerdos, como los tuyos, de mi madre o de mi padre. Sirius siempre me cuenta lo grandiosos que eran y lo mucho que me querian, pero yo apenas era un bebe cuando fueron asesinados, me gustaria recordar sus rostros por mi mismo, no solo con las fotos.- Decia Harry cada vez mas cabizbajo, cuando los animos se vieron muy afectados, el moreno levanto la cabeza y miro al rubio con una animada expresion.- Pero el cariño de mis papas Sev y Canuto siempre lleno ese vacio en mi vida... ademas ahora tu y yo nos reencontramos, se que no estaremos solos, nunca mas.- Draco asintio mas tranquilo, luego terminaron de cenar.

    Aun era un poco temprano para irse a dormir, asi que Draco fue a la sala a medio organizar y se sento en un sofa a leer un libro, Harry, que acababa de terminar de lavar los platos, miraba al rubio desde la entrada de la sala, no sabia que hacer con respecto al sueño, cuyas imagenes venian a su cabeza cada vez que querian, recordo la extraña sensacion que se apodero de su cuerpo, el creciente calor que le quemaba por dentro y como cada fibra de su piel clamaba por al menos un roce de la piel del oji-gris. Todos eso recuerdos lo hicieron pensar en las palabras que Hemione le habia dicho hace unos dias atras, ¿Era posible que en el fondo si sintiera "amor" por Draco, y que su propio orgullo y terquedad lo hubieran empujado a pensar que debian ser solo amigos? En ese momento otra duda se apodero de su cabeza, ¿Que siente Draco? ¿Era posible que el tambien sintiera algo mas fuerte que amistad? Harry se llevo la mano a la oreja derecha para alcanzar el arete con forma de serpiente, aquel bello regalo que le dio el hermoso chico sentado en el sillon. Finalmente, Harry quiso apartar toda duda de su mente, y camino hasta sentarse junto a Draco.

    - Oye, Draco... mmmm... ¿Puedo hacerte una pregunta?- Dijo el moreno, el rubio medio lo miro y asintio, mientras daba vuelta la pagina.- Tu... ¿Alguna vez te ha gustado alguien? Digo, ¿Te has enamorado?- De pronto el cuerpo de Draco se contrajo de un solo golpe, ademas de un rubor que lleno sus mejillas, Harry miraba hacia el suelo para no mostror su propio sorojo, asi que casi no persivio el movimiento.

    - Yo... bueno... si, si me gusta alguien, es decir, si me he enamorado.- El rubio estaba tan nervioso, que no podia controlar su tartamudeo.- Pero... ¿Por que lo preguntas?-

    - Bueno, solo es curiocidad. Dime ¿Alguna vez te has fijado en un chico?.- Harry casi no razono esa pregunta, solo la dejo salir, por lo cual su reaccion tambien fue brusca cuando penso en lo que habia dicho. Ambos estaban en silencio, pero en el fondo el moreno deseaba escuchar la respuesta, por lo cual se atrevio a levantar la mirada y fijarla en la cara del rubio, este se volteo y miro directamente a los ojos esmeraldas que lo interrogaban.

    - Harry, yo... yo...- Tartamudeo Draco, esos ojos no dejaban que articulara palabra alguna, su corazon se acelero, mientras un fogor quemaba su pecho. Ninguno pudo determinar realmente en que momento suscedio, pero antes de que de verdad se dieran cuenta, estaban unidos por sus labios. Harry fue el primero en reaccionar, se aparto rapidamente del rubio y lo vio respirar con dificultad, con una exitada expresion en el rostro. Cuando por fin el oji-gris pudo regular su respiracion dijo- Harry, yo... yo... Te Amo.- Harry parecia no comprender lo que le habian causado esas palabras, por un momento una desconocida felicidad se apodero de el, la cual solo pudo expresar lanzandose nuevamente a los labios del ribio.

    No se podia terminar cuanto tiempo habia pasado desde que comenzaron a besarse, pero para ese momento Draco estaba sentado a horcajada sobre las piernas de Harry, quien lo sostenia de la cintura, mientras el rubio tenia sus brazos al rededor del cuello del moreno. El beso habia evolucionado paulatinamente, de unir delicadamente los labios, hasta rozar sus lenguas, la pacion de ese beso, hizo que el calor creciente en sus cuerpos se transformara en un incendio. Pronto el mero contacto de sus labios no era suficiente para Harry, quien ansiaba sentir el calor del pecho de Draco, esperando igualar la sensacion de su sueño. Lentamente comenzo a desabotonar la sedosa pijama verde, hasta dejar el torso del rubio al descubierto, paso su manos sobre el formado pecho, dejando que el contacto transmitiera una calida sensacion a todo su cuerpo, pero no el moreno queria acceso a mas piel, pronto el rubio se deshiso de la camisa de algodon que cubria la parte superior del cuerpo de su compañero. Cuando las caricias comenzaro, sus bocas se besaban mas apacionadamente. Pero antes que pudieran seguir, una voz los saco de golpe su extasis.

    - ¡Draco, Harry!- Grito Severus, al momento ambos se separaron entre asustados y confundidos. La cara del Slytherin mayor estaba roja como tomate, tal vez mezcla de rabia y verguenza, ante la escena.- ¡¿Pero que deminios hacen?!- Tras Snape, Sirius observaba con leve sonrojo en sus mejillas y una expresion de sorpresa. Ninguno de los jovenes supo que responder, mientras trataban de vestirse lo mas rapido posible.- ¡Ustedes... estaban...!-

    - Amor, calmate... Sera mejor dejar que ellos se expliquen...- Sirius trataba de mantener la calma, no solo sobre su amante, sino tambien sobre el mismo.- Harry, Draco, por favor, expliquense...- Los chicos se miraron, pero al instante voltearon sus rostros, estaban un poco avergonzados.

    - Yo... lo siento... pero...- Tartamudo Draco, al instante Harry de puso de pie y miro fijamente a sus protectores.

    - A mi me gusta Draco...- El moreno no cambio su expresion de desafio, mientras que los demas presentes lo miraban estupefactos. Draco se levanto del sofa y tomo la mano de Harry, este volte para verlo a los ojos y encontrarse con una sutil sonrisa en los labios del rubio, el moreno apreto la mano del chico y ambos miraron a los mayores, Severus parecia perder la calma nuevamente.

    - A sus habitaciones, ¡Ahora!.- Grito el hombre. Los chicos se miraron y subieron rapidamente las escaleras.

    - A la de cada uno, por favor.- Dijo Sirius con poco de picardia, su pareja lo miro amenazante, pero Black lo abrazo por la cintura desde atras.- No me mires asi... Te dije que esto pasaria, por lo visto mis sospechas era ciertas.- Antes de que Severus pudiera reclamar, Sirius atrapo sus labios con los suyos, ahogando sus palabras con un poco de ternura, al momento el moreno Slytherin se calmo, mas o menos, para luego separarse.- No seas duro con ellos, como ves, el amor no tiene nada de malo.- Snape bajo la vista y apoyo su cabeza en el hombro de su amado, mientras este soltaba una risita por lo bajo.



    Capitulo 11 "El Corazon del chico tonto"


    Londres despertaba tranquilo esa mañana, aunque hace mucho que las calles casi no veian multitudes, que fueran las de encapuchados en busca de victimas. Tras unas semanas de haber llegado al numero 12 de Grimmauld Place, las cosas estaban un poco inquietas. El dia en que Harry habia aceptado parte de sus sentimientos hacia Draco, tambien fue el dia en que fueron descubiertos por sus propios tutores. Sirius parecia muy enternecido con esta situacion, pero Severus no parecia tan complacido, se ahabia asegurado de darles tareas que los mantuviera lejos uno de otro, pero no era por que odiara esta situacion, sino mas bien, en mismo no se sentia preparado para admitir que sus "pequeños" estaban experimentando algo que podia significar su primer paso a la adultez; aun asi los chicos de las arreglaban para encontrarse de vez en cuando y mostrarse su amor con tiernos besos y caricias.

    Esa mañana Severus habia salido para hacer una pequeña ronda en los alrededores, y Sirius se quedo al cuidado de la casa. Harry y Draco aprovecharon esta oportunidad para verse a escondidas en el estudio. Mientras se besaban tiernamente, Draco miro a Harry a los ojos, esos bellos ojos esmeralda que lo volvian loco.

    - Te Amo, Harry.- Dijo el rubio.

    - Draco, me gustas.- Respondio Harry, de pronto el rubio se alejo un poco, miro hacia abajo, no parecia molesto, sino mas bien desepcionado.- ¿Que pasa?- El moreno parecia confundido.

    - Harry, estamos juntos hace un tiempo, tal vez no sea mucho, pero... no me has dicho ni una vez que me quiere o me amas... solo que te gusto...- Dijo Draco, levanto la mirada y dijo- Sabes que yo te amo, mucho, asi que dime... ¿Que sientes exactamente por mi?- Harry se aparto un poco, al parecer incomodo.

    - Draco, tu me gustas mucho... pero me parece que... amor es una palabra muy grande, y no se si...- decia Harry.

    - ... si me amas, ¿Es eso?- Interrumpio el rubio, se alejo mucho mas, hasta casi un metro. Harry no hiso ni un movimiento para acercarse, lo cual alerto a Draco.- Sabes, ahora no tengo animos para esto... Tal vez ser mejor que averigues que es lo que quieres en verdad. Yo te amo, pero no deseo que juegues conmigo.- Al decir esto, el rubio salio de la habitacion, de pronto el moreno sintio que corazon se apretaba al ver salir al chico, como si eso fuera una despedida.

    El resto de la mañana, niguno se dirigio la palabra, no parecian enojados, pero el tema los afectaba. Harry trato de repasar la palabras del rubio en su cabeza, pero encontraba una respuesta clara a la pregunta que le hiso "¿Que sientes exactamente por mi?", tal vez debio darle una respuesta a eso antes de relacionarse con el, pues ahora sentia que lo estaba lastimando. Pero esto no se escapo a la mirada atenta de Sirius. Antes de la hora del almuerzo, tuvieron una visita inesperada, Hermione habia llegado, ya que Lupin y Tonks habian ido a realizar una mision en mundo magico. No paso mucho para que la perspicacia de la chica notara la extraña actitud. Luego de comer busco a Draco para que la pusiera al tanto.

    - Bien, ¿que paso esta vez?- Dijo ella, los rodeos no eran su especialidad.- Hace mas de una semana me enviaste una carta diciendo que estaban juntos, y ahora no se hablan... otra vez.- La chica tenia cara de poca paciencia, Draco la consideraba su amiga y confidente desde hace un tiempo, asi que no era extraño que estuviera tan involucrada.

    - Bueno, me moleste con el por... porque nunca me ha dicho... te amo.- Respondio, pero ahora que lo escuchaba sonaba un poco tonto.- Creo que lo presione demaciado...- Dijo en tono de culpabilidad.

    - Ufff... Pienso que ustedes son un problema...- Dijo molesta.- Pero no estuvo mal que se lo preguntaras, es obvio que el aun no es capaz de sincerarse consigo mismo, tal vez debas darle un poco de tiempo. Harry es un experto con la varita, es muy abil a la hora de luchar, y no teme a enfrentarse a aquellos que solo lo buscan para acabar con su vida; pero es todo un tonto a la hora de relacionarse con otras personas, cuando lo conoci apenas hablaba, si no era para planear o ejecutar una accion ofensiva, pero los chicos y yo logramos abrir un poco su corazon, eso fue un poco complicado... Ahora es tu turno de trabajar esa parte de Harry, su amor,eso es algo que solo tu puedes hacer, ¿Entiendes?- La castaña lo miro con una gentil sonrisa, haciendo que Draco se sintiera mejor.

    - Gracias, Hermy, siempre sabes que decir. Me alegra que seamos amigos.- Respondio Draco, con mas tranquilidad en su interior.

    - Por supuesto que se que decir, soy muy lista.- Dijo Hermione muy autosatisfecha.- Y tambien estoy muy feliz de que seamos amigos, grandes amigos...- Ambos comenzaron a reir.

    En otra parte de la casa, Sirius se acerco a su ahijado, con el fin de ayudarlo con lo que lo estuviera preocupando, no queria que su Cachorro de Leon se guardara algo que podia estar lastimandolo.

    - Cachorro, ¿Podemos hablar?.- Comenzo diciendo. Harry intuia la razon, pero solo asintio.- Sabes que te conosco, y lo mucho que te quiero, por eso si algo te esta molestando, solo dimelo... ¿Paso algo entre Draco y tu?.- Harry no podia creer lo mucho que esto se parecia a la conversacion que sostuvo con Severus hace un tiempo.

    - No pasa nada, estamos bien.- Mintio el moreno, pero la mirada acusadora de su padrino le dejo claro que no le creia.- Es solo que... Bueno... ¿Como supiste que estabas enamorado de papá?- Sirius se sorprendio de la pregunta, pero penso que la duda de su cachorro estaba ligada a su problema.

    - Bueno, eso fue hace mucho... Pero creo que fue cuando estabamos en Hogwarts. En un comienzo el y yo no nos llevabamos muy bien, peleabamos, nos insultabamos, incluso le jugaba bromas pesadas, era el blanco principal de James, Remus y yo. Pero cuando crecimos un poco, me di cuenta que todo la atencion que le prestaba era porque en el fondo queria que el se fijara en mi, y poco a poco fui sintiendo que mi corazon me indicaba que el era la persona que amaba.- Contaba Sirius con una expresion nostalgica.

    - ¿Alguna vez dudaste que fuera amor? quiero decir ¿Pensaste que era solo un capricho, que el solo te atraia un poco?- Preguto Harry, un poco coibido.

    - Al principio ni siquiera lo queria aceptar, no me agradaba la idea de que me gustara un chico, mucho menos el, incluso cuando comenzamos a salir, me decia a mi mismo que esto solo era algo temporal, algo carnal.- Las mejilla del mayor de ruborizaron tenuemente.- Pero luego comprendi que la razon por la que no podia sacarlo de mis pensamiento, incluso de mis sueños, era porque realmente lo amaba, y afortunadamente el sentia lo mismo por mi. Desde entonces, ya nunca pudimos estar lejos uno del otro... Solo nos vimos distanciados cuando se unio a los Mortifagos por ordenes de Dumbledore, en ese tiempo temia mucho a la posibilidad de perderlo... Incluso ahora siento miedo de que algo le suceda.- Sirius miro a su ahijado, que se veia muy confundido.- Harry, cuando amas a una persona, es normal sentirse confundido, e incluso asustado, pero es peor saber que pudiste darle todo tu ser, y aun asi lo dejaste ir.-

    - Pero como se que es el indicado, que el dia de mañana no despertare arrepentido de darle falsas ilusiones... No quiero hacerle daño, el fue mi primer amigo.- Decia Harry casi al punto de ponerse a llorar. Sirius lo abrazo y lo acerco hasta apoyar la cabeza del chico en su pecho.

    - Eso solo tu lo sabes... Pero hay una forma de entenderlo mejor. Debes preguntarte '¿Que haria si el se fuera?' '¿Puedo vivir sin el?'. Puede que en ese momento obtengas tu respuesta, solo escucha lo que tu corazon te dice, el lo sabe mejor que tu...- El mayor acaricio la cabeza de Harry, este se sintio mucho mejor al escuchar el tierno concejo de su padrino y protector, asi que lo abrazo tambien.

    - Gracias, papá, me has ayudado mucho.- Dijo Harry.

    - Me alegra que estes mejor, solo recuerda que todo en esta vida requiere un esfuerzo, mas si es algo bueno... como el Amor.- Luego de decir esto, Sirius beso la frente de su cachorro y salio de la habitacion. Harry llevo a su manoa al pendiente en su oreja derecha, lo acaricio suavemente.

    - "¿Que haria si el se fuera, podria vivir sin el?".- Se pregunto Harry en su cabeza, pronto un dolor aprimio su pecho, como si su corazon se quisiera detener, entonces lo comprendio.- "De seguro moriria de dolor si lo perdiera... Nunca pense que podria enamorme tan rapido de una persona... No, no fue rapido, lo he amado desde hace 10 años, pero no me habia dado cuenta... En verdad soy un tonto... Debo verlo".- Con esta idea en su cabeza, salio rapidamente en busca de querido angel de Slytherin.

    Llegando a la sala, la cual ya estaba ordenada y aparentemente limpia, se encontro a Draco charlando con Hermione, esta lo vio y salio del lugar no sin antes detenerse al lado del moreno.

    - No lo arruines...- Le susurro, este la miro, pero la chica se habia ido. Se acerco a al rubio que su veia un poco avergonzado. Harry se sento al lado de Draco.

    - Harry, yo queria discul...- Antes de que el chico de ojos grise continuara, el moreno puso su dedo en los labios de este para silenciarlo delicadamente.

    - Draco, debes saber, antes que todo, que soy un grandisimo tonto...- Comenzo Harry, Draco parecia espectante.- ... pues, a pesar de todo el amor que has brindado, he seguido dudando de lo que siento por ti, al punto que te he estado haciendo daño.- En ese momento Draco intento hablar para corregir al moreno, pero este lo detuvo de nuevo.- Draco, yo... Te amo.- El corazon del rubio dio un salto tan fuerte, que por un momento penso que realmente saldria de su pecho, casi inmediatamente sus brillantes ojos grises se llenaron de lagrimas, estas corrian sin cesar por sus palidas mejillas, que poco a poco se prendian de un tenue rosado, y Harry comenzo a preocuparse- ¡Draco, ¿Estas bien?!-

    - ¿Bien? Estoy muy feliz.- Decia entre sollosos, el moreno se sintio mas aliviado, asi que tomo su nuca y lo beso tiernamente, Draco acaricio la mejilla de su amado moreno, mientras este deslizaba su mano por sus cabellos, el rubio se separo un momento en busca de aire.- No quise presionarte, pero me hace muy feliz que me digas que me amas... por favor, dilo otravez.- Harry lo miro divertido y le dio un topon en los labios.

    - Te amo, Draco, de verdad, te amo... y lamento no haberme dado cuenta antes, yo...- Antes que Harry continuara, el rubio lo callo con un beso. Los dos se abrazaron y siguieron unidos por sus labios, repitiendose uno al otro aquellas palabras que tanto anelaban sus corazones: TE AMO.

    Un par de ojos los miraba desde la puerta, con un mezcla de melancolia y encanto. Severus se aparto de ahi, y camino hasta la cocina donde Sirius preparaba la cena, con la ayuda de Hermione, se sento junto a la mesa y suspiro profundamente, la chica giro los ojos, penso que todos los problemas atraen a otros problemas. La castaña miro a Sirius y este le sonrio, como suplicando que los dejara solos, esta solo suspiro y dijo:

    - Quiero estudiar un poco, ya tuve suficiente un par de problematicos, este es todo tuyo, Sirius, suerte...- Cuando salia de la cocina, Severus la miraba con los ojos muy abiertos, asombrado de la perspicacia de la castaña. sirius se sento junto a su amado y le tomo la mano.

    - Al parecer, ella esta mas al dia que nosotros, nunca debemos subestimarla, es demaciado observadora...- Rio Black, luego miro a Severus con ternura.- Ellos se quieren mucho, tal vez tanto como tu y yo ¿Estas listo para aceptarlo?-

    - No soy un tonto, sabia que ellos sentian algo el uno por el otro desde hace mucho, en un comienzo temia que ellos se pudieran hacer daño, pero supongo que tambien temia que crecieran muy rapido, y perderlos antes de poder disfrutar del tiempo junto a ellos.- Respondio Severus, Sirius le tomo la mejilla y lo beso tiernamente mientras acariciaba su mano.

    - Ellos no se alejaran, pienso que ahora estaran mas cerca, mas cerca junto a nosotros.- Dijo Black. Amobos se abrazaron, parecia que por fin el sin fin de pensamientos que atormentabas a Snape se alejaban con aquella ternura que Sirius le entregaba.

    Luego de la cena, se decidio que Hermione dormiria en la habitacion de Draco, y los chicos compartirian la de Harry, con la solemne promesa de comportarse. Los mayores esperaron hasta que todos se fueran a dormir, pues Severus leia tranquilamente en la sala. De pronto Sirius le lanzo los brazos al cuello por atras y comenzo a besar el cuello de amante, Severus trato de mantener la calma ante la insinuantes caricias de su amado Gryffindor, pero este estaba siendo cada vez mas osado.

    - Esta bien, esta bien, ya entendi, vamos al cuarto...- Le dijo Severus, a lo que Sirius lo tomo de la mano y practicamente lo arrastro escaleras arriba.

    En el cuarto, que antiguamente pertenecio a la oveja negra de la familia Black, un par de jovenes dormia muy abrazados, pesnsando que el mañana seria mas brillante ahora que disfrutaban de la bella compañia del otro.
     
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