Amor Reberde [FINALIZADO]

(Harry x Draco) ¿Puede la guerra impedir que el amor nazca?

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  1. Lady Selandra
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    Capitulo 17 "Detras de las Mascaras"


    La fria tarde invernal, era acariciada por el viento que venia del norte. Las calles casi desierta de Londres eran testigos de la escena que se centraba en una conocida calle de la ciudad. Cuatro figuras rodeaban a cuatro mas que se encontraban en el suelo. Las cuatro fifura de pie eran los jovenes miembros de la Orden del Fenix, mientras que los cuatro que se encontraban paralizados en el piso, pertenecian a los Mortifagos, dos grupos rivales, que luchaban entre si por el mundo magico. Los Mortifagos, bajo las ordenes del maldito Lord Voldemort, actualmente controlaban todo Inglaterra, eran magos oscuros con deseos de poder, ambicion de un mundo de pura sangre, anelo de control de parte un solo hombre. Por su lado, la Orden del Fenix, se podian llamar Los Rebeldes, su mision era liberar al mundo de las manos de malvado Señor Oscuro, y luchaban, aun costa de su vida, por esta causa; por la cual, el triunfo de un lado, significaba la desparicion del otro.

    El lider del grupo de jovenes miembros de la Orden, Harry, estaba encima de uno de los Mortifagos, a punto de arrancarle la mascara, lo que Harry no sabia era que bajo ella estaba el rostro de la persona que mas amaba, quien habia sido su pareja hasta hace un año, a quien habia creido perder. Draco estaba asustado de la reaccion que su amado moreno podia tener al momento de verlo.

    - Harry.- Llamo Ron, a lo que el oji-verde se detuvo, Draco no podia controlar a su corazon desbocado.- ¿Donde estan tus modales? Deja que las chicas se diviertan un poco... Ginny, escoge alguno y quitale la mascara... Es bueno tener nocion, de vez en cuando, saber aquien estamos mandando al otro mundo...- Hermione miro a Harry, este se veia nervioso, no habian hablado de la posibilidad de que algunos de los Mortifagos fuera Draco.

    La pelirroja, divertida por las ocurrencias de su hermano, se acerco hasta Nott, estiro la mano y analizo su rostro, la castaña y el moreno se sintieron aliviados de que no fuera el rubio, aunque en el fondo Harry deseaba que fuera el. La expresion del joven mago oscuro, mostraba asombro a la hora de ser paralizado, miro a la chica frente a el, esta tenia una sonrisa maliciosa.

    - ¡Vaya! Eres guapo... Es una verdadera lastima que eso no te ayude mucho.- Decia Ginny en tono picaro.

    - A este lo conosco, es el hijo de Nott... Al parecer pronto acompañaras a tu padre al otro mundo.- Se burlo el pelirrojo.- Hermy, ahora es tu turno.- La castaña se veia bastante nerviosa, miro a Harry y este hizo un movimiento con su cabeza para que siguiera. Hemione se acerco a uno de los que aun permanecian encascarados, y le arranco la mascara, dejando a la vista a una chica de tez blanca y cabello negro.

    - ¿Quien es ella?- Pregunto harry, aun con la ansiedad latente.

    - No la conosco... Pero da igual, veamos quien es este giganton...- Dijo Ron, sacando le la mascara a Goyle.- ¡Goyle! ¿Como estas? Mi padre se divirtio mucho con el tuyo.-

    - ¡Ron! Basta, no juegues con eso...- Reclamo la castaña, el pelirrojo se aparto y puso una expresion de niño regañado.- Harry... es tu turno.- Dijo Hermione. El moreno volvio a agacharse, esta vez acerco su rostro tambien, el rubio lo miraba asustado, pero Harry no podia ver su expresion, cuando la distancia se acorto lo suficiento, un dulce y familiar aroma inundo los sentido de Harry, y se detuvo en seco. Pero antes que pudiera hacer cualquier otra cosa, la chica morena, se levanto de golpe y apunto su varita a Draco.

    - ¡Finite Encantem!- Grito Pansy, de inmediato Draco se levanto apartando al moreno. Repitio el hechizo en Nott, pero antes que lo realizara en Goyle, Ron apunto su varita y lo mato.

    - ¡Goyle!- Dijo Nott, no esperaba que los miembros de la Orden tuvieran tanta sangre fria, Apunto su varita al pelirrojo, pero Ginny se adelanto.

    - ¡Expelliarmus!- Dijo ella, la varita de Nott, volo por los aires, se acerco rapidamente al chico y puso la varita en el cuello.

    - ¿Donde crees que vas, guapo? Ahora tu eres mi trofeo... ¡Desmaius!.- Grito la pelirroja, y Nott callo nuevamente al piso. Mientras tanto, Hermione, Ron y Harry habian acorralado a Draco y Pansy. Harry apunto su varita al chico y Parkinson se interpuso, entonces Hermione invoco una soga invisible y los ato a los dos.

    - Ya no tienen escapatoria.- Dijo la castaña.

    - ¡Acepto la derrota, pero dejalo ir a el!- Grito ella, Draco no lo podia creer, ella se estaba arriesgando solo para protegerlo.

    - Lo siento, pero no negociamos con Motifagos.- Dijo Ron, miro al chico que seguia con la mascara.- Pero antes veamos la cara de tu novio, que al parecer es mudo.- El oji-azul se acerco lentamente hacia la mascara, pero rapidamente Harry lo aparto.- ¿Que sucede, Harry?- Harry ignoro a sus amigo y levanto un poco al chico, puso su mano en la capucha y la tiro hacia atras. Todos los presentes no podian creer lo que veian, esa lacia cabellera de un platino rubio, brillante, como no habia otro igual. La impotencia del rubio lo hiso derramar lagrimas, se sentia avergonzado de estar frente a sus amigos bajo esas sircustancias, pero lo que mas le dolia era que su amado Harry lo viera convertido en un sucio Mortifago.- No puede ser... no puede ser...- Decia el pelirrojo, miro rapidamente a su moreno amigo, a la vez que Draco se atrevia a mirarlo tambien, pero lo que vieron se asombro aun mas, Harry no estaba molesto ni triste, sino que miraba la mascara con una sutil sonrisa mientras sus brillantes esmeraldas se llenaban de lagrimas. Tomo la mascara entre sus mano y la retiro, despues de mucho tiempo las bellas orbes grises se encontraron sin ninguna barrera frente a los ojos de su amado.

    - Draco...- Dijo Harry, aun manteniendo la suave sonrisa. El rubio no fue capaz de soltar ni una sola palabra, aun lloraba, pero jamas creyo lo mucho que extrañaba escuchar su nombre en la voz del moreno. Harry aproximo su mano a la cara del oji-gris, este se estremecio y cerro los ojos, hasta que sintio la suave caricia en su mejilla.- De verdad... eres tu.- Draco no contuvo mas sus palabras.

    - Harry...- Dijo el rubio casi en un susurro. Hermione se llevo la mano a la boca para contener la emocion. Sin embargo los pelirrojos no podian ocultar su asombro, ni uno de los dos sabia como reaccionar, ante sus ojos estaba su amigo perdido, pero tambien estaba uno de sus enemigos. Ron se apresuro y tomo el brazo izquierdo de Draco, al retirar la manga vio claramente la Marca Tenebrosa.

    - De verdad eres un... Mortifago.- Dijo molesto el chico Weasley, miro a su hermana que no salia de so asombro.- ¡Nos has traicionado! ¡Eres uno de ellos!- El pelirrojo estaba desconsertado, confundido y molesto a la vez.

    - ¡No es lo que creen!- Grito Pansy, y la atencion de todos se enfoco en ella.- Potter, Draco jamas te traicionaria, el fue obligado... ¡Confia en el, por favor!- Harry volvio a mirar al rubio, aun sostenia su mejilla, la solto y se puso de pie, miro a sus compañeros y cambio su expresion a una muy seria, apunto su varita a los chicos que estaban atados, ante el temor de ambos.

    - ¡Finite Encantem!- Dijo el moreno, y ambos volvieron a moverse con libertad.- Ron, Ginny, sostenganlos.- Hermione lo miro sorprendida, los Weasley obedecieron, Ron tomo a draco y Ginny a Pansy.- Llevemoslos a un lugar menos abierto, tiene preguntas que responder.

    - ¡Espera, Harry, no nos lleves a la casa... hagas lo que hagas no nos lleves ahi!- Grito Darco, estaba muy desesperado. Harry volteo a verlo con una expresion muy fria, la cual dejo helado al rubio.

    - Claro que no los llevare alli, nunca pondria en riesgo a los mios llevando a dos Mortifagos concientes.- Dijo Harry, el rubio jamas habia visto una expresion tan dura, que fuera en su padre.- Hermione, tu llevate al que esta en el suelo, tambien puede ser de utilidad...- La castaña no comprendia el comportamiento de su amigo, pero prefirio no contradecirlo.

    Caminaron durante unos minutos, sin pronunciar ni media palabra, nadie se atrevia a decir nada, era un situacion muy incomoda. Draco estaba muy confudido, Harry no decia nada, hubiera deseado que al menos lo insultara, pero no que lo ignorara. Cuando llegaron a un callejon, el moreno ordeno atarlos de nuevo, pero esta vez por separado.

    - Hermione, pon hechizos protectores a nuestro alrededor.- Ordeno Harry, despues de eso no dijo nada hasta que Hermione termino su labor.- Bien... partamos del principio...- Saco de su bolsillo un pequeño frasquito con un liquido adentro, tomo la barbilla de la chica y la obligo a beber, luego se acerco a Draco e hizo lo mismo.- En unos segundos el Veritoserum hara su efecto.-

    - ¡¿Veritoserum?! Harry, no creo que eso sea necesario.- Dijo la castaña.- No creo que Draco...-

    - Hermy... Esta bien... Soy un enemigo al cual deben interrogar.- Dijo Draco con calma, a lo que la castaña dejo salir unas finas lagrimas.

    - Muy bien, comencemos, Primero responde la chica y luego tu.- Dijo harry apuntando a Draco con total indiferencia.- ¿Cual es su nombre?-

    - Pansy Parkinson.- Dijo ella con una dura expresion. Harry volteo a ver a Draco para que contestara.

    - Draco Malfoy.- Dijo un poco molesto. Harry bajo la mirada.

    - Bien... ¿Cual es mi nombre?- Dijo Harry, los demas lo miraron un poco extrañados.

    - Harry Potter.- Respondio Pansy.

    - Harry James Potter.- Respondio Draco con toda confianza.

    - Correcto... ¿Por que estan aqui?- Pregunto el moreno.

    - Por ordenes de Lord Voldemort, para hallar el escondite de la Orden del Fenix y acompañar a Draco.- Dijo ella mirando al rubio.

    - Porque el maldito Lord me lo ordeno... y porque deseaba verte.- dijo el rubio mirando a Harry a los ojos. El moreno se acerco rapidamente a Draco, casi rosando su nariz.

    - ¿Por que no volviste despues del incidente?- Le pregunto directamente, la chica morena se quedo atonita, al parecer ya no habia mas preguntas para ella.

    - Porque no podia.- Respondio Draco un poco nervioso.

    - ¿Por que?-

    - Porque era muy peligroso.- el rubio cada vez se alteraba mas.

    - ¿Para ti?- Harry subia cada vez mas la voz.

    - No.- dijo el oji-gris con la respiracion agitada.

    - ¿Entonces para quien?- Interrogo el moreno, Draco no se atrevia a contestar, pero Harry estaba muy molesto.- ¡Responde la pregunta!- Los demas miembros de la Orden estaban muy nerviosos, la actitud de Harry era atemorizante.

    - ¡Para ti!... Era un riesgo para ti.- Dijo Draco casi al borde de las lagrimas, los demas lo miraban con pesar.- Fui obligado a llevar la Marca Tenebrosa, ademas de eso Vodemort puso una condicion mas en ella, el puede localizarme sin importar el lugar donde este... Si me acercaba a ustedes, el vendria tras de mi para dar contigo... No podia permir que te hiciera daño... jamas lo dejaria acercarse a ti, Harry, primero moriria antes de dejar que te tocara...- El rubio ya no aguanto mas y dejo que las lagrimas brotaran de sus ojos, entonces Harry le lanzo los brazos al cuello y lo apreto contra su cuerpo, Draco sintio como su hombro se humedecia, Harry tambien estaba llorando.- ¿Harry?-

    - Lo siento, Draco, lamento hacerte pasar por esto... pero necesitaba que los demas confiaran en ti... Yo jamas dudaria de tus intenciones... Te amo.- Dijo Harry, se alejo un poco y lo miro a los ojos, para luego unir sus labios, era la primera vez en mas de un año que podian saborear el dulce sabor de sus labios, al momento en que se separaron, Ron se acerco a toda prisa hacia el rubio con una expresion de enojo, tanto Hermione como Ginny trataron de atajarlo, pero este fue mas rapido, saco su varita y lo apunto.- ¡Ron!- dijo el moreno.

    - ¡Finite Encantem!- Grito el pelirrojo, los demas se sintieron aliviados, Ron le tendio la mano a Draco y este dudo un momento antes de tomarla.- Bienvenido de nuevo... amigo.- Draco se alegro, incluso Ron jalo de su mano y lo abrazo fuertemente, las chicas corrieron y tambien abrazaron al rubio, era un momento muy emotivo.

    - De verdad me parece un momento muy lindo... pero me podrian decir ¿Que hay de mi?- Dijo Pancy un poco molesta.

    - ¿Es de confianza, Draco?- Dijo Ginny mirando a la encapuchada.

    - Si, Pancy es una vieja amiga, me ha ayudado mucho a soportar mi estancia en Hogwarts.- Dijo el oji-gris sonriendo.

    - Entonces era verdad que ese es el cuartel de los malditos.- Decia Hermione, mientras se acercaba a la chica y le quitaba el encantamiento a la morena.- La verdad, nunca confiaria en la palabra de un Mortifago, pero si Draco dice que eres de confianza, lo aceptare. Pero ¿Que hay de el?- Hermione apuntaba hacia el inconciente Nott.

    - Ese idiota, con el pueden hacer lo que quieran...- Dijo la chica morena y miro a Draco.- Lamento ser agua-fiestas, pero ¿Tiene en cuenta que Draco no se puede quedar aqui? El esta vigilado por esa marca, y, que yo sepa, no hay un hechizo conocido para quitarla, a menos que...-

    - A menos que matemos a Lord Voldemort.- Termino de decir Harry, todos los presentes bajaron la mirada con un son de tristeza, Harry vio a Draco con impotencia, pero el rubio le sonrio.

    - Tranquilo, amor, yo estare bien... He sido muy paciente para que llegara este momento, pero sabia que no duraria mucho. No los arriegare a ustedes volviendo, estoy seguro de que algun dia podremos estar juntos de nuevo, pero por ahora debo permaneser en ese lugar...- La palabra del rubio no aliviaban el pesar de Harry.

    - ¡No lo acepto! He esperado tanto para verte, como para ahora solo dejar que te alejes de mi lado otra vez...- Harry estaba desesperado, pero una mano se poso en su hombro.

    - Amigo, siento lo mismo que tu... Pero si el se queda con nosotros, no solo nos pondra en peligro a nosotros, es posible que el tambien sufra las consecuencias... Esto tambien es por su bien... Recuerda que eres nuestro lider, compadre, debes tomar una decision racional.- Las palabras de Ron eran muy sabias, incluso demaciado sabias para el. Harry no tuvo mas opcion que bajar la cabeza y asentir. Hermione miro al cielo y vio que pronto anocheceria, se acerco a Ginny y le dijo algo al oido, la pelirroja asintio se dirigio a su hermano.

    - Ron, sera mejor que nos adelantemos, toma al que esta tirado en el suelo y vamos.- dijo ella, el pelirrojo la miro con una expresion de pregunta y entonces la chica le apunto hacia Harry y Draco y le guiño el ojo, el chico asintio y la siguio, no sin antes despedirse de Draco con afectuoso apreton de manos.

    - Parkinson ¿Verdad? ¿Te molestaria acompañarme un momento? Tengo un par de dudas que me gustaria aclarar.- Dijo Hermione, la morena la miro con desconfianza, la castaña le puso una expresion de intimidante y le apunto hacia la pareja.

    - Como quieras, pero te advierto que no me llevo muy bien con los 'Sangre Sucia'.- Dijo ella en un todo bastate molesto, Hermione se aguanto de las ganas de torturala, y se alejo junto con la Mortifago.

    Casi al instante que quedaron solo, Harry y Draco se unieron en un beso tierno y apacionado a la vez, no tardaron a la hora de reconocerse con sus caricias, anelaban sentir la piel del otro, no sabian si esa podia ser la ultima vez que estaria juntos, por lo cual necesitaban sentir su calor.

    - Te extrañe demaciado, mi Angel, no se como pude vivir tanto tiempo lejos de ti...- Decia Harry entre besos y caricias, tiro de la tunica del Draco hasta dejar parte de sus hombros al descubierto, los cuales beso y saboreo con delicadeza, el cuerpo del rubio reacciono de inmediato ante las caricias de su dulce amante. La lamida de Harry subio hasta la oreja izquierda de Draco, encontrandose con pequeño arete econdido en el cabello, el cual mordio.

    - Yo tambien te extrañe, mi Heroe, no sabes lo solo que me sentia al no verte.- Dijo Draco, mientras pasaba sus manos por el alborotado cabellos de su moreno, pero este se aparto un poco y lo miro a los ojos.

    - ¿Heroe?- Dijo confundido, Draco le puso una sonrisa picara y Harry se la devolvio.- Me gusta.- Draco rio, pero pronto su risa se transformo en suspiros y gemidos, pues Harry metio la mano bajo la chaqueta que Draco vestia bajo la tunica, y acaricio cada espacio del pecho y el vientre de rubio, hasta quedarse masajeando las rosadas tetillas del chico.

    Draco tampoco se contuvo y metio las manos en el pantalos de Harry primero sobando sus caderas y luego paso a sus nalgas, Harry no pudo evitar soltar un gemido. El rubio volvio a capturar los labios de su amado, mientras Harry busca el entre piernas de su Angel por sobre el pantalon, donde sintio un bulto, bajo el cierre y lo libero, Draco se arqueo ante tal estimulo, pero no quiso quedarse atras e hizo lo mismo. En un rapido movimiento el oji-verde dio vuelta a Draco, dejandolo mirando hacia una pared, donde este apoyo las manos, asi Harry bajo sus pantalones y bajo hasta estar frente a la entrada del su deseoso amante, y la lamio con mucha lascibidad, a lo que Draco gemia sin vacilacion. La suavidad de las caricias y la ternura de los beso aumentaba cada vez mas la temperatura de ambos, cuando Draco estuvo listo, Harry lo volvio a dar vuelta y lo levanto en sus brazos, el oji-gris paso sus piernas por la cintura de su dulce pareja y este se introdujo lentamente en el, la total union de sus cuerpos, era un momento unico y totalmente sagrado para ambos.

    Harry subia y bajaba a Draco con mucha suavidad, deseaba sentir cada una de las fibras del cuerpo de su amante, anelando que esa conexion jamas acabara, no solo por su deseo carnal, sino mas bien porque ese era el momento en que realmente eran uno, sus corazones latian al mismo ritmo, su respiracion se sincronizaba y sus almas pertenecian al otro, todo en ellos era parte del otro. Sus lenguas registraban cada espacio de la boca de su acompañante, perdidos en la verdadera escencia de sus cuerpos. Harry aumento paulatinamente los movimientos, mientras Draco se aferraba cada vez mas fuerte con sus brazos al cuellos de su Heroe, profundisando cada vez mas el tierno beso. El rubio dejo salir unas lagrimas de felicidad, soño muchas veces estar nuevamente en los brazos de su amado Gryffindor, pero nunca penso que eso se realizaria, al igual que Harry.

    - Draco... Te Amo... Te Amo.- Dijo Harry entre suspiros, a la vez que tambien dejaba escapar unas cuantas lagrimas. El rubio se emociono, y sonrio entre suspiros y gemidos.

    - Yo tambien, Harry, Te Amo... Te Amo tanto.- Repitio Draco, su felicidad era infinita. Ambos aumentaron la velocidad, sus cuerpo se deseaban entre si, el calor de su pacion crecia, el frio de su alrededor era imperseptible para ellos. Pronto el extasis alcanzo su maximo limite, llevandolos a una explosion de sensaciones, que creyeron que jamas volverian a experimentar. Aun cansados, Harry bajo a Draco, limpiaron sus cuerpo, aunque en el fondo deseaban mantener la escencia del otro en ellos, arreglaron sus ropas y volvieron a unirse en un beso, saboreando lo mas que podian al otro, asi jamas olvidar ese sabor.

    Se tomaron de las manos y deshicieron los hechizos protectores, para encaminarse hacia el lugar donde las chicas los esperaban. Cuando las encontraron, pensaron que la verian matandose una a la otra, pero en vez de eso charlaban animadamente.

    - Veo que se llevan muy bien.- Dijo Draco con una sonrisa en su rostro, las chicas lo miraron y luego se miraron entre ellas con una expresion de complisidad.

    - Resulto que la sangre sucia es bastante inteligente, hace mucho no tenia una charla tan interesante.- Dijo Pansy con un poco de sovervia.

    - Asi es, quien diria que una asquerosa Mortifago pudiera ser tan culta.- Contraataco Hermione, las dos se miraban con una expresion de odio mientras se sonreian, lo cual causo un leve escalofrio en los chicos.

    - Ya es hora de irnos.- Dijo Draco, a la vez que miraba a Harry con sutil expresion de tristeza.

    - Comprendo... Me alegra saber que estas bien y esperare verte pronto, por favor, no te arriesgues... Te amo.- Dijo Harry besando en los labios.

    - Tambien te amo, Harry, se cuidadoso tu tambien...- Respondio Draco, abrazo a Hermione para despedirse, y Harry le tendio la mano a Pansy, esta la estrecho alegre.- Cuidate, Hermy, y por favor dile a mi padrino que estoy bien y que tambien lo extraño, al igual que a Sirius y los demas.-

    - Se lo dire... Tu tambien cuidate, Parkinson, no quisiera perder a una buena rival.- Comento la castaña.

    - Como si fueras rival para mi, Granger... De todas formas, cuidate tu tambien. Adios, Potter, te prometo cuidar de Draco.- Dicho esto, los jovenes Mortifagos desaparecieron en medio de la noche, mientras los miembros de Orden se encaminaban hacia su refugio y hogar.

    La noticia de que Draco estaba vivo, fue sinonimo de celebracion en el numero 12 de Grimmauld Place, aunque no pudieran estar con el, se sentian aliviados de saber que aun habia esperanza de traerlo de vuelta. Severus y Sirius no ocultaban su emocion, el chico que era como su hijo, su segundo hijo, seguia con vida, esperando el momento de volver a su resguardo.

    - Siento un gran alivio de saber que un vive y esta bien... aunque me preocupa que este bajo la mirada atenta de ese desgraciado.- Decia Severus, Sirius se acerco y lo abrazo.

    - Por ahora eso es algo irremedeable... Pero ya veras, amor, lo sacaremos de ahi... Nuestro Dragon volvera a esta a nuestro lado, lucharemos para recuperar a nuestra familia.- Alento Black, Severus lo tomo de la cintura y lo beso en señal de estar deacurdo.

    - Harry, debes estar muy feliz... aunque me hubiese gustado verlo tambien.- Dijo Luna sonriendo como de costumbre.

    - Estoy feliz, pero a la vez preocupado... De seguro pronto lo tendremos con nosotros.- Dijo el moreno. Ya era tarde y todos decidieron ir a dormir.

    Ya entrada la noche, mientras la mayoria de los habitantes del viejo castillo de Hogwarts dormia, unos bellos ojos grises miraba el cielo sin luna, pensando en el momento en que volveria a ver a esos amados ojos esmeralda, deseando que los besos y caricias de su dueño, guardando la esperanza de que no faltaria mucho para volverlos a ver y estar con su Heroici Gryffindor.

    - Harry... Te amo.- dijo en un susurro, mientras se dejaba llevar por el cansancio y las emociones que habia experimentado ese mismo dia.

    En la lejania, un joven moreno soñaba con esos ojos grises que, el sabia, pronto volveria a ver, o al menos lucharia por ello.



    Capitulo 18 "Mas alla del Leon y la Serpiente"


    Las emociones que inundaban los corazones de Draco y Harry, no podian ser aplacados por enorme lejania, no solo era una distancia fisica, sino tambien ideologica, pero aun asi su amor se negaba a sucumbir ante esto.

    Esa mañana, una semana despues del furtuito encuentro, Harry, Ron y Hermione, salieron como de costumbre a hacer sus rondas, aunque no habian vuelto a encontrarse con enemigos desde entonces, no debeian bajar la guardia. Sin embargo, uno de los Mortifagos de aquel encuentro habia sido capturado por la Orden, y, excepcionalmente, aun seguia con vida bajo su custodia. Era extraño que los mienbros de la Orden del Fenix, hubieran sido tan piadosos, pero debido al reciente encuentro con Draco, decidieron planear una futura invacion en el terretorio del malvado Lord Voldemort, y para eso necesitaban a alguien de adentro, ciendo insierto si volverian a ver a Draco, la presencia del Mortifago capturado era necesaria.

    El nombre del joven mago oscuro era Theodore Nott, piel clara y cabello oscuro, un chico guapo, fornido, si exagerar, pero sobre todo, con un caracter testarudo y molesto. En una parte aislada del sotano se habia adecuado una celda, para mantenerlo prisionero, las unicas personas que bajaban a verlo eran Sirius y Severus, para interrogarlo, y Neville, quien le daba sus alimentos, principalmente porque a los demas no le interesaba si se moria de hambre. Sin embargo, el caracter suave y amable de Neville, no le permitia dejarlo asi, menos si era tan util para la causa.

    La apariencia de Neville Longbotton, que originalmente era la de un niño regordete, habia cambiado mucho con los años, se habia vuelto mas alto que los demas de su edad, su cuerpo era mucho mas atletico, su piel era morena, aunque no tanto como la de Harry, sus ojos era cafes y su cabellos oscuro. Se podia decir que Neville era un chico muy atractivo, pero tambien muy timido. Esa mañana, bajo al sotano a darle de desyunar a Nott, no se molestaba en charlar mucho con el, pues era muy consiente de que era el enemigo, pero de todas formas trataba de se cordial.

    - Buenos dias, te traje el desayuno.- Dijo Neville con su timida voz, Not lo miro con desprecio y no le respondio.- ¿Dormiste bien? A pesar de todo, tienes una cama, Ron decia que te dieramos una manta y que te la arreglaras solo, pero a Luna y a mi nos parecio un poco incomodo.- Era casi imposible no ser amable y tierno para el, solo se olvida de eso cuando tenia la tunica de la Orden puesta, de esa forma era una persona diferente, un guerrero valiente y osado, pero sin ella solo el dulce Neville.- ¿Quieres algo mas?- Nott lo miro con furia.

    - Si... ¡Sacame de aqui! Dile a ese estupido de Potter que me mate o que me deje libre...- Grito Theodore. El chico de la Orden se puso un poco nervioso, por lo que solo pudo mirarlo y sonrier, Nott lo miro extrañado y se sonrojo, no podia ignorar lo bello de ese gesto, aunque el moreno solo hacia para calmarse.

    - Lo... lo siento, pero... pero Harry no esta ahora.- Tartamudeo Neville, Nott se calmo de inmediato, penso que era inutil molestarse con la unicapersona que no trataba como un maldito en todo ese lugar.- Bueno, ya me voy, volvere a la hpra del almuerzo.- Nott miro su bandeja y vio que los alimentos se veian bastante bien, y se pregunto si el chico que tenia en frente se habia esmerado en prepararselo.

    - Oye, espera.- Dijo mientras tamaba una tostada.- No recuerdo tu nombre, ¿Cual es?- Demando el mago oscuro, Neville se detuvo y lo miro, la oscura habitacion era iluminada por un par de velas.

    - Longbotton, Neville Longbotton.- Dijo el moreno.- Tu eres Nott ¿Verdad?- Volvio a dibujar una sonrisa en su rostro, el joven Mortifago se sentia muy desconsertado por esta expresion, casi no recordaba haber visto una sonrisa como esa en su vida, la mayoria de las sonrisas que veia eran eran mas atemorizantes que amables.

    - Asi es, pero solo dime Theodore...- Dijo con molestia, ese apellido le recordaba a su padre, ese hombre serio y malvado que algunavez dejo que otros le hicieran cosas horribles, solo para ser mas aceptado.- Entonces, Longbotton, ¿Eres el mucamo de la Orden? Eres el unico que veo que hace esto.- Dijo mientras tomaba un sorbo de cafe.

    - No, tambien soy un miembro activo de la Orden, solo que me parece horrible que temueras de hambre.- Dijo un poco molesto, se acomodo la chaqueta que traia y le dio la espalda al prisionero.- Me voy.-

    - Espera.- Dijo Nott, no sabia por que, pero no deseaba que el chico se fuera, talvez porque llevaba un par de dias sin hablar con alguien, que no fuera en los interrogatorios, o tal vez porque en el fondo si apreciaba las cortas visitas de Neville, o tal vez esperaba verlo... ¿sonreir?- No te vayas... Lo siento, es que de verdad, no se como entablar un charla...- Dijo con dejo de humildad, en ese lugar no necesitaba fingir orgullo.

    - Bueno, puedes partir ciendo un poco mas amable.- dijo Neville conteniendo su nerviosismo.- Aunque para serte sincero, tampoco soy muy bueno charlando... Me cuesta hablar tranquilo, que no sea con Luna o... bueno no importa.- No quiso mensionar a Draco frente al Mortifago, ademas no sabia porque le estaba diciendo eso apenas lo conocia, y no era exactamente el tipo de persona con la entablaria una amistad, pero por alguna razon no era dificil decirle eso, aunque era la primera vez que intercambiaban mas de dos palabras.

    - Esa tal Luna ¿Es tu novia?.- Pregunto Nott, sin saber por que le importaba.

    - No, ella es mas bien como mi hermana, nos criamos juntos, sus padres murieron por culpa de los Mortifago, como los mios...- Narro el moreno de la Orden, Nott bajo la cabeza, de alguna manera se sentia culpable.

    - Lo siento... Para ser sincero nunca quise ser parte de los seguidores del Señor Oscuro, pero mi padre insistio en que debiamos luchar por la pureza de nuestra sangre, dijo que eso era lo mas importante.- Theodore volvio a tomar un sorbo de cafe, entonces Neville se sento en una silla cercana frente a los barrotes de la celda.- Desde que mi padre murio, he luchado por hacerme mas fuerte, tener un lugar en el circulo de Elite del Señor Oscuro, ser alguien importante...-

    - Pero para eso no es necesario seguir los pasos de tu padre...- Decia Neville.- Incluso si la guerra no existiera, no me gustaria haber sido Auror, se que no tengo madera para eso... Aunque quizas eso nunca lo sabre.- Neville rio sutilmente, Theodore no pudo evitar sonreir y el moreno lo noto.- Tienes una linda sonrisa.- Automaticamente Nott giro el rostro hacia otra direccion, pues un ligero rubor se asomaba en su rostro. Unos pasos se escucharon en la puerta que estaba escaleras arriba.

    - ¡Neville!- Llamo Severus.- Sube, necesito tu ayuda.- Neville dejo la silla a un lado.

    - Voy de inmediato.- Respondio el chico de la Orden, volvio a mirar al prisionero con una sonrisa.- Bueno, nos veremos despues.- El joven Mortifago se sinto un poco desepcionado.

    - Como sea... Me gusto tener alguien con quien charlar, Longbotton.- Dijo este finjiendo indiferencia.

    - Lamame Neville. te vere luego, Theo.- Dijo Neville y luego desaparecio escaleras arriba.

    - ¿Theo?- Una sonrisa se dibujo en el rostro de Nott, nunca lo habian llamado de una forma tan familiar.- Me agrada... Neville.

    Llegada la hora de del almuerzo, el trio dorado aun no llegaba, addemas que Sirius y Severus saliron para reunirse con Arthur y Remus, al parecer los nuevos planes ocupaban gran parte su tiempo. Cuando Neville bajo dejar el almuerzo del prisionero, Luna se encontraba sentada en la sala leyendo tranquilamente. Una pelirroja se acerco a la rubia lentamente por su espalda para que esta no la viera. Cuando se ubico a sus espaldas le puso las manos en los ojos.

    - Adivina quien soy.- Dijo Ginny, Luna bajo su libro y puso sus manos sobre las de la pelirroja con una expresion divertida.

    - ¿Quien podra ser?- Dijo la rubia siguiendole el juego. Luna jalo a Ginny hasta que esta cayo sobre las piernas de la rubia, cuando estuvieron frente a frente se sonrieron y unieron sus labios en un tierno beso, luego se separaron.- Creo que te descubri.- Ambas rieron, llevaban casi tres meses viendose a escondidas, nadie sabia de su relacion.

    - ¿Quieres que subamos a la habitacion? Los chicos no llegaran pronto, al igual que Sev y Sirius.- Susurro Ginny en el oido de la rubia, lo que la hiso estremecer.

    - Pero Neville esta abajo, puede subir en cualquier momento.- Dijo Luna, pero Ginny volvio a capturar sus labio con los suyos.

    - Sabes que despues se encerrara en invernadero, ni siquiera se percatara que desaparecimos un rato... Anda, vamos, ¿Quieres que te ruegue?- Dijo la pelirroja haciendo un pucherito, Luna solto una risita, adoraba verla asi.- Me encanta tu risa.- Se tomaron de las manos y se dirigieron escaleras arriba.

    Por su parte, Neville compartia una nueva conversacion con Theodore, cada vez era mas facil romper la tencion, Nott de verdad necesitaba confiar en alguien, al parecer nunca se habia relajado de esa forma frente a niguna persona, tal vez la dulce personalidad de Neville estaba causando algun efecto en caprichoso corazon del joven Mortifago.

    - Neville, tu me comentaste que no te considerabas bueno para ser Auror, entonces ¿Que te gusta?- Pregunto Nott, tratando de mantener la charla.

    - Pues, no es gran cosa, pero desde pequeño me han gustado las plantas, me gustaria dedicarme a la Herbologia, Severus dice que soy bueno y que tengo mucho futuro en eso... Aunque es probable que nunca suceda si...-Decia Neville.

    -... El Señor Oscuro sigue en el poder.- Dijo Theodore continuando la frase, ambos bajaron la cabeza, parecia muy pronto comenzar para sacar ese tema a discucion.- No creas que le soy fiel ciegamente.- Comenzoa decir Nott, a lo que Neville lo miro sorprendido.- Es solo que... es mas peligroso tratar de dejarlo, que solo estar en su contra... Los traidores son su presa favorita... Siempre le temido ¿Sabes? Aunque pienso que mi padre le temia mas que yo, fue por eso que le pidio al Lord que me iniciara a los 11 años.-

    - ¡¡11 años!!- El moreno no pudo esconder su asombro.- Apenas eras un niño, ni siquiera nosotros combatiamos a esa edad... Debio ser horrible.- Nott bajo la mirada, tratando de esconder las lagrimas que luchaba por retener.

    - Si... Lo fue. Es por esa razon que muchos de los chicos de mi edad me tenian respeto.- Asevero orgulloso el chico.- Algunos me seguian, como sirvientes, como el tonto de Goyle.- Poco a poco la expresion del chico se fue entristeciendo.- Pero tambien tuve que afrontar muchas otras cosas... Pero bueno.- Dijo camniando el tema.- Dijiste que te gustaba la Herbologia, me parece muy interesante. Cuando era pequeño, me facinaba la medicina magica, siempre pense que cuando tuviera mi varita, me dedicaria a aprender hechizos de ese tipo, soñaba con ser un Medimago... Que ironico, termine haciendo mas hechizos que dañan, que los que curan... Tal vez no sea tan mala idea que el regimen de Lord Voldemort se acabe, nunca habia pensado en ello, pero ahora lamento que mis sueños se hayan arruinado...- Neville se acerco a la reja que los dividia y tomo la mano del chico que estaba cerca de esta, este lo miro con asombro y un poco de sonrojo.

    - Tal vez aun tenemos una oportunidad... quiza no te interese por ahora, pero podrias unirte a nosotros y luchar para que el Lord Oscuro caiga... Asi, podriamos tener un futuro, uno que nosotros escojamos.- Neville lo miraba con una sonrisa muy amplia, pero el chico pronto le aparto la mano.

    - Eso es ridiculo, tu no sabes lo poderoso que es el, le he visto asesinar a tantos que han pensado como tu, torturarlos hasta demostrarles que no hay un mañana... Nadie es tan tonto como para creer en eso.- Gruño Nott.

    - Yo lo soy...- Dijo Neville casi en un susurro, a lo que Theodore lo miro rapidamente, Neville levanto la vista y lo miro a los ojos.- Se que ahora se ve dificil, y para ti, que has vivido bajo sus normas, se te haga imposible, pero yo creo que Harry y los demas lo lograran, yo mismo hare lo que pueda... tengo la confianza de algun dia podremos vivir sin temor, es por esa razon que yo lucho, incluso a costa de mi vida.- Neville se levanto la manga del jersey que vestia, para dejar al descubierto una enorme cicatriz que bajaba desde el hombro hasta unos centimetros por encima del codo. Nott quedo impresionado con la horrenda marca, se preguntaba como es que no perdio el brazo con una herida como esa.- Y seguire peleando hasta el final.- Ambos guardaron silencio, hasta que Nott hablo bajito.

    - Ojala sea sierto lo que dices... Tal vez no sea mala idea ayudarlos. De todas formas no tengo a donde ir, si regresara ahora, solo seria para morir en manos del Lord, ya que he fracasado en mi mision.- Theo miro nuevamente al moreno y le sonrio levemente.- Dile a ese tal Snape, que quiero hacer un trato con el... Tal vez con un poco de suerte, pueda seguir vivo.- Neville casi dio un salto de alegria, tomo nuevamente las manos del chico y las apreto.

    - ¿De verdad? Me alegra tanto escuchar eso. Prometo que hare todo lo que este a mi alcanse para que tu te quedes aqui, Theo, porque eres mi amigo.- Dijo el joven de la Orden.

    - ¿Amigo?- Pregunto el peli-negro, a lo que el moreno asintio, era la primera vez que escuchaba esa palabra sin sarcasmo, una nueva sensacion se apodero del pecho de Nott, como si un calor acogedor lo invadiera, una extraña y agradable emocion, casi al punto que deseo poder dejar salir sus lagrimas a la vista de Neville.- Yo... yo... te lo agradesco... ¡¿Pero que esperas?! Llama a ese tipo de una vez.- Dijo tratando de ocultar lo que sentia.

    - Tendras que esperar, el salio por un asunto, de seguro no llegara hasta mañana.- Dijo Neville.- Por ahora podemos charlar un rato mas.- El emocionado Mortifago asintio en silencio, sentia que no podria aguantar las lagrimas si abria la boca.

    Pronto la noche se hiso presente, los demas chico ya habian regresado, todos se preparaban para cenar juntos. Cuando estuvieron todos en la mesa, Neville llamo su atencion.

    - Tengo buenas noticias, Theo ha aceptado cooperar con la Orden, me ha dicho que quiere hacer un trato con Severus.- Neville se veia muy feliz, de pronto Ron lo miro con una ceja alzada.

    - ¿Theo?- Dijo el pelirrojo, los demas se percataron de este detalle y miraron curiosos a Neville.- ¿Desde cuando eres amigo de ese Mortifago? En lo que a mi respecta, no hago tratos con esos malditos.- La castaña que estaba sentada a su lado le lanzo una mirada de molestia.

    - Por pensar de esa forma, es que casi matas a Draco cuando aun estaba con la mascara.- Regaño Hermione, Ron la miro y luego bajo la cabeza.- He estado pensando en eso ultimamente, que Draco nos ayude es normal, era nuestro aliado y amigo antes de estar bajo las ordenes del Señor Oscuro, pero Parkinson, quien fue criada para convertirse en parte de los magos oscuros, esta muy dispuesta a ayudarnos, no conosco sus motivos, pero al parecer estando con ellos ha perdido mas de lo que ha ganado... Tal vez haya mas Mortifagos como ella, que en el fondo solo siguen a VOldemort por miedo u obligacion.-

    - Desde ese punto de vista, es posible que muchos de estos deseen seguirnos, o crear movimiento propio en contra del maldito.- Dijo Harry pensativo, la idea podria ser muy conveniente.- Lo que necesitamos es alguien que se dedique a investigar desde adentro... Me gustaria que hubiese una forma de comunicarnos con Draco, de esa forma podria pasarnos informacion util... Tal vez hasta podria reclutar a los que quieran revelarse.- La idea cada vez sonaba mas tentadora.

    - Eso suena muy bien... Pero lo primero seria contactar a Draco, o a esa chica Parkinson... Tal vez el nuevo amigo de Neville nos pueda dar una pista.- Dijo Ginny.

    - Habra que esperar a que Sev y Sirius lleguen.- Dijo Luna, miro a Neville y le sonrio.- Esperemos que ellos entiendan que es tu amigo.- La amabilidad de Luna era encantadora, la chica pelirroja la miraba de reojo con una gran sonrisa, solo perseptible para la siempre atenta castaña que reia en silencio, se habia dado cuenta hace semanas, pero estaba dispuesta a espera a que su amiga se lo contara.

    A la mañana siguiente, luego del desayuno, Snape y Black hicieron su aparicion, a ninguno de los chicos les tocaba patrullar, asi que estuvieron todos presentes a la hora de explicarle la situacion. Severus parecia complacido con la idea de los chicos, aunque un poco dudoso de poner mas en riesgo la seguridad de Draco. Luego de descansar un par de minutos, el hombre bajo al sotano acompañado por Neville y Harry, era necesario confirmar que decia la verdad. Cuando Nott los vio en la escalera se sintio nervioso, aunque se calma bastate al ver a Neville, el cual le hacia un gesto de confianza.

    - Bien, he oido que quieres hacer un trato ¿Es verdad?.- Dijo seriamente Severus, el chico un poco asustado asintio.- Bueno, que quieres a cambio de tu informacion, te advierto que tu situacion no es la mas favorable, asi que piensa muy bien lo que vas a decir.- Nott miro a Neville y este asintio con la cabeza, luego miro a Harry que estaba con su expresion seria e intimidante.

    - Yo solo quiero... proteccion.- Dijo con la voz entrecontada, Harry alzo una ceja y miro al mayor.

    - ¿Proteccion? ¿Que clase de proteccion?- Pregunto Severus. El joven prisionero respiro ondamente y volvio a mirar al hombre.

    - Si regreso al castillo, mi vida estara en peligro, el Señor Oscuro esta harto de los inutiles, y si yo aparesco frente a el, despues de haber fallado la mision y ser capturado, solo me usara de ejemplo para que eso no se repita...- El chico miraba incesantemente hacia Neville, no para pedirle ayuda, sino para sentirse seguro.- Desearia quedarme aqui, aunque sea como prisionero, pero pase lo que pase, no deseo regresar, por favor, se que tu eres Severus Snape, el traidor, sabes muy bien de lo que te hablo.- Severus asintio, pero no se molesto en en mostrar su empatia.

    - De todas formas, tu subsistencia, solo dependera de lo util que pueda ser la informacion que nos des... y si esta es verdad.- Dijo el hombre, luego volteo a mirar a Harry y este saco el frasquito con pocion.- El Veritaserum ayudara saber si dices la verdad o no, y por ende si vives o no.- La expresion de miedo en el rostro de Theodore se hiso mas que evidante para todos. Una vez que el chico trago la dosis de pocion, los presentes guardaron silencio, esperando a que esta hiciera su efecto.- Comencemos. ¿Cual es tu nombre?.-

    - Theodore Nott.- Dijo el chico.

    - ¿Cual es tu ocupacion?.- Continuo Severus

    - Caballero de la Orden Oscura de los Mortifagos de Lord Vodemort.- Las palabras del joven asombraron a Severus, pero Harry parecia no entender.

    - ¿A que edad te iniciaron?.- Pregunto Severus, el joven bajo la cabeza, al igual que Neville.

    - A los 11 años, por insistencia de mi padre.- Dijo en voz baja, Severus solto una exclamacion de asombro y terror, como es posible que un hombre le hiciera eso a su propio hijo a tan corta edad, sabiendo que para lograrlo debia cometer un asesinato, Nott fue un padre peor que el mismo Lucius, la cara de su cachorro mostraba la misma sorpresa que la de el. Tratando de recuperar la compostura, prefirio guardarse sus comentarios.

    - Continuemos. ¿Que informacion conoces que puede ser util para la Orden del Fenix?- Pregunto Snape.

    - Conosco gran parte de la defensas del castillo y de Hosemade (Buscar en internet despues), incluso se de algunos puntos ciegos... Creo que sere capaz de recordar los nombres de las personas encargadas de algunas cosas, dependiendo lo que necesiten...- El chico estaba verdaderamente dispuestoa cooperar, lo cual parecia alegrar a Neville.

    - Bien, por ahora eso sera suficiente, seguiras prisionero mientras se considera tu situacion con el resto de la Orden... Señor Longbotton...- Llamo Severus, el moreno lo miro espectante.- Desde ahora el prisionero sera su responsabilidad, le suguiero que sea cuidadoso.- Al momento el y Harry subieron por las escaleras.

    - Estoy un poco mas aliviado.- Dijo Neville. Theo mantenia la cabeza gacha, mirando hacia el suelo de su celda.- ¿Que te pasa?.-

    - ¿Crees que tengo alguna pocibilidad de seguir con vida? Si tu querida Orden no me acepta, estare en medio de esta guerra, sin pertenecer a ningun lado, pero siendo perseguido por los dos.- Dijo Theo, Neville se acerco a la celda y estiro lamano para que Nott la tomara, este dudo un momento pero tambien estiro la mano poniendola sobre la del moreno.

    - Te prometi que te ayudaria, y eso es justo lo que voy a hacer... Solo prometeme que puedo confiar en ti.- Dijo Neville, el chico apreto la mano del moreno y, casi en un gesto inconsiente, le sonrio. Mantuvieron sus manos unidas y su vista fija en la del otro, por un tiempo casi incontable. Cuando Nott reacciono se alejo, Neville se sonrojo un poco y se alejo tambien.- Bueno, tengo que irme. Luego traere tu almuerzo.- Subio rapidamente por las escalera, sin entender porque su corazon latia tan fuerte. Theodore se quedo pensativo en su celda.

    - "¿Que esto que siento cuando el esta conmigo? Nunca habia sentido algo asi... Es extraño, pero no me desagrada... Como podria explicarlo, deseo verlo cuando se va, y cuando esta conmigo quiero que no se vaya jamas... ¿Sera esto lo que llaman... Amor?".- algo en el interior de Nott dio un salto, como una pequeña explosion en su corazon.- "¡¿Pero como una persona como yo podria amar?! No despues de lo que esos asquerosos me hicieron... Nunca podria tocar a alguien mas con estas manos tan sucias... Pero quiero que Neville este a mi lado... Como puedo vivir con esta contradiccion... ¡Madre, tu que estas en el cielo, ayudame! Dime ¿Meresco amar a alguien?".- Pronto las lagrimas que contuvo por mucho tiempo, salieron rodando por sus palidas mejillas.

    Varios dias y semanas pasaron antes que a Theodore Nott se le permitiera salir de la celda, aunque su habitacion seguia en el sotano; la mayoria lo miraba con recelo y desconfianza, a excepcion de Neville y Luna, esta ultima parecia ser solo ella misma, aunque una palirroja que miraba, segun creia, disimuladamente, no disfrutaba del exeso de confianza de la tierna rubia. Hermione se mantenia sin una opinion aparente, pues pensaba que que la situacion se parecia, aunque sea un poco, a la llegada de Draco, por lo cual esperaba tener mayor conocimiento del prisionero, antes de emitir un juicio. Por su parte Ron, mostraba su evidente desprecio por joven Mortifago, pues este, a difencia de Draco, habia sido capturado, no habia llegado por su cuenta. Las diferentes opiniones no afectaba a Harry, el solo se pasaba los dias pensando en el proximo encuentro con su amado Angel, haciendo la mayor cantidad de rondas de patrullaje, para ver si uno de esos dias coincidian.

    Una de esas tardes, Neville le mostraba a Nott el invernadero, que cuidaba con tanto ainco, Luna, Ron y Harry habian salido a patrullar las cercanias, y Ginny y Hermione estaban en la cocina charlando antes de comenzar a hacer la cena. La castaña se habia aburrido de esperar que su amiga le confesara su relacion con Luna, por lo cual se habia decidido afrontarla.

    - Oye, Ginny, ¿Has estado enamorada?- Dijo la castaña, la pelirroja no le puso mayor atencion a la pregunta, pero Hermione siguio.- Quiero decir... ¿Como es tu pareja ideal?- Ginny la miro y se puso a pensar tranquilamente.

    - Creo que... Debe ser tierno, amable, con gran sentido de justicia, risueño... con una enorme bondad, una linda sonrisa...- Ginny se habia dejado llevar por el recuerdo su linda rubia, que incluso dejo de describirla como un hombre.- Bella, un poco ingenua... Tiene que ser como un dulce angel loco...- Rio la pelirroja, Hermione rio por lo bajo.

    - Te das cuenta que acabas de describir a Luna Lovegood.- Dijo la castaña divertida, Ginny casi bota los platos que sostenia por la impresion, miro a su amiga un poco asustada, pero esta solo sonrio.- Por que todos creen que pueden poner a prueba mi capacidad de observacion, se puede decir que soy la que mejor conoce todas las cosas que pasan en esta casa...- Ginny bajo la cabeza un poco avergonzada.

    - No se lo digas a Ron, por favor, aun no se como lo tomara...- Dijo la pelirroja. Hermione le paso un brazo por el hombro y le sonrio amablemente.

    - No se lo dire, eso lo tienes que hacer tu, aunque no creo que Ron lo tome a mal, Luna es una chica muy linda, y sobre todo confiable, tu hermano no tendra objeciones.- Hermione le acaricio la cabeza.- Recuerdo cuando nos conocimos, te escondias detras de tu madre, eras muy timida, y mirate ahora.- Ginny la miro falsamente molesta.

    - Hablas como mi mama, solo soy un año menor que tu... Pero me alegra que lo sepas, Hermy, a Luna no le agrada mucho que sea en secreto, dice que es como mentir... Me molestaba mucho para que se lo dijiera a Ron, ella quieria contarselo a Neville.- Comentaba la chica Weasley.

    - No la puedes culpar, son como hermanos.- Hermione tomo una olla y la puso en la cocina.- Sera mejor que comencemos la cena.- Ambos rieron y comenzaron su labor.

    Mientras tanto, los dos chicos que se encontraban en el invernadero, charlaban de forma amena, mas bien, Neville no cerraba la boca, hablaba y hablaba sobre toda su variedad de curiosas planta, algunas se las habian dado Hagrid y Charley Weasley de sus viajes. POr su parte, Theo se encontraba inmerso en sus pansamientos, desde que planteo la idea de estar enamorado del moreno que estaba a su lado, en su mente se paseaban mil y un recuerdos de sus primeros años de adolecencia, pero tambien anelaba poder alejarlos para siempre, pues ahora solo desea conocer ese bello sentimiento llamado amor.

    - ... esta de aqui es una...- Decia Neville, pero entonces se percato de la triste mirada del chico a su lado.- ¿Estas bien?- Nott parpadeo varias veces antes de contestar, trato como pudo de dibujar una sonrisa, pero Neville no se conformo, se acerco a Theo, pero este en un acto involuntario, retrocedio ante tal cercania.- ¿Que sucede? ¿Estas molesto por algo?-

    - ¡No!... Nada de eso... Es solo que...- Comenzo Nott, tenia que encontrar la forma de explicarse, sin confesarce realmente.- Oye, Nev, tu... ¿te gusta alguien? Ya sabes, alguna chica que hayas conocido... o un chico.- Esto ultimo fue casi inadible. El rostro de Neville se enrojecio casi completamente, su corazon dio un salto y comenzo a tartamudear.

    - Bueno... yo... ya sabes... no se... digo, nunca...- Decia el moreno, sonreia tontamente y jugaba con sus dedos.- La verdad, si hay alguien que me gusta mucho, pero me da pena decirselo... Puede que no sienta lo mismo por mi.- Nott lo miro con confusion, se mordio el labio y trato de no parecer ansioso.

    - ¿Es una persona de la Orden?- En el fondo, Theo, deseaba que respuesta fuera negativa.

    - No... Pero, dime, ¿A ti te gusta alguien?- Dijo el chico Longbotton cambiando el tema, inmediatamente Nott desvio la mirada un poco ruborizado, lo que significo un "si" para Neville, haciendo que el moreno se desepcionara, pues penso automaticamente que esa persona que Theo queria no era el.- ¡Ah! Ya veo... Debe ser una persona muy afortunada.- Nott noto la desepcion en la voz del chico a su lado y, casi como un auto reflejo, le tomo la mano, acercando a el, no fue claro cuandto tiempo pasaron mirandose a los ojos, pero un suave movimiento sus labios fueron uniendose, dando paso a un tierno y primer beso, justo cuando comenzaban a abrirse paso para ingresar en la cavidad bucal, Theodore se aparto bruscamente, con las manos sobre su boca y temblando copiosamente.- Lo siento, no quise molestarte.- Mientras Neville, en su nerviosismo, se disculpaba, Nott nego con la cabeza.

    - Lo... lo siento... No es tu culpa... Es que yo... yo...- Pronto las palabras entre cortadas del peli-negro, se fueron transformando en sollozos y unas gruesas lagrimas comenzaron a salir de sus ojos.- No soy capaz... capaz de olvidarlo.- Su cuerpo se agitaba cada vez con mas violencia. Neville se apresuro a abrazarlo, temia haber causado ese miedo en el chico.

    - ¿Que sucede? ¿Estas bien? ¿Que no has podido olvidar?- Preguntaba angustiado el joven de la Orden, el ex-Mortifago negaba con la cabeza y trataba de alejar a Neville, pero este lo apretaba cada vez mas a su cuerpo.- Por favor, confia en mi, estoy aqui para protegerte... Dime que te atormenta, y hare lo que este a mi alcanse para ayudarte... Solo... confia en mi.- Theodore trato de calmarse y miro a Neville, quien estaba muy preocupado, asintio levemente y seco sus lagrimas.

    - Solo... solo promete que... que no me odiaras... que no te alejaras de mi cuando escuches mi relato... Por favor, prometelo.- Decia el Theo con la respiracion agitada, a la vez que apretaba los brazos de Neville.

    - Lo prometo.- Respondio este, ansioso y preocupado a la vez. Nott se mordio el labio y apreto los ojos, deseaba estar lo mas tranquilo posible antes de comenzar a hablar.

    - Luego de mi iniciacion, era la persona mas joven que estaba entre los Mortifagos. Mi padre se vanagloriaba de que su hijo era todo un mago oscuro, aunque en el fondo yo seguia aprendiendo casi al mismo nivel que los demas de mi edad.- Nott hiso una pausa para respirar profundo.- Cuando cumpli los 14 años, mi padre aun no era muy reconocido, estaba lejos de ser un Mortifago de Elite, por lo cual comenzo a pedirle de favor a los demas que hablaran bien de el frente al Lord Oscuro, en especial a McNair, quien en ese tiempo era muy respetado...- Las manos de Theo comenzaron a temblar nuevamente, Neville las tomo entre las suyas y las acaricio suavemente.- Ese maldito le ofrecio a mi padre un trato: El dejaria bien puesto el nombre Nott ante el Señor Oscuro, solo si... si... si yo pasaba la noche con el...- Algo se estremecio en el interior de Neville, un terror horrible ante la idea de saber como terminaba esa historia. Nott volvio a derramar unas cuantas lagrimas mas, su rostro palidecia ante el recuerdo.- Mi... mi padre... acepto.- De pronto el corazon de Neville se detuvo, no podia creer lo que estaba escuchando.- Despues de eso... mi padre fue enviado a la mision, orgulloso de ser recomendado, en la que perderia la vida... Aun asi, ese... ese asqueroso siguio buscandome... usandome, disfrutando de mi dolor... Aun siento sus asquerosas y crueles manos en mi cuerpo... Y cada vez que quiero acercarme a alguien, no puedo evitar recordarlo a el sobre mi... recordarlo...- De pronto Neville jalo de Theo, hasta apretarlo contra su pecho, el moreno tambien lloraba, se sentia impotente, asustado, furioso, y tantas otras emociones que podia describir.

    - ¡Ya basta! No quiero oir mas.- Grito el Neville, sin soltalo en ningun momento.- Yo te protegere... prometo que no volveras a sufrir de esa manera otra vez.- Lo aparto un poco y lo miro directo alos ojos, trato como pudo de sonreir.- Yo... yo te quiero... Deseo estar a tu lado, ahora mas que nunca quiero que estes conmigo...- Nott sollozo aun mas, no podia creer lo que oia, a pesar de sentirse tan sucio, el chico que comenzaba a amar no lo repelia, sino mas bien le ofrecia su comprension y cariño.- Por favor, dime que tambien me quieres... Dimelo.- Theo volvio a sumergirse en los brazos de Neville.

    - Si... te quiero... quiero estar contigo... Deseo amar y ser amado, aunque sea una vez en mi vida.- Dijo Nott entre sollozos, Neville tomo su rostro y volvio a besarlo, con mas ternura y suavidad que antes, y cuando trato de abrirse paso entre los labios de Theo este ya puso resistencia, se sentia protegido, se sentia amado.

    - Te amo, Theo...- Dijo sobre sus labios.

    - Yo tambien... Te amo, Nev... No me dejes solo.- Rogo el peli-negro.

    - Jamas lo hare... Jamas...- Dijo antes de sumergirse nuevamente en esos suaves labios. Ambos rogaron al cielo para que pudieran estar juntos por el resto de su vida, ambos rogaron para que el dolor nunca volviera a apoderarse de sus corazones, y asi juntos romper cualquier barrera.

    Los dias que siguieron, parecian mas tranquilos, aunque el nerviosismo de Harry al no tener noticias de su rubio Angel, estaba alterando a todos los miembros de la casa, con excepcion de aun llamado "Extraño", que era Nott, a quien evitaban revelar mucha informacion, solo Neville y Luna lo trataban amablemente, pues esta ultima, era la unica que sabia de la relacion de estos dos. Esa tarde Harry, Ron, Hermione y Neville estaban charlando en el cocina.

    - Ya ha pasado mas de un mes desde que vimos a Draco por ultima vez... Estoy muy preocupado.- Decia Harry con una expresion cansada.

    - Harry, paso un año antes que lo vieras otra vez desde su captura, un mes es una minima parte de lo que ya esperaste...- Decia Hermione un poco cabriada de la actitud de su amigo.- Ademas, recuerda que lo Parkinson me dijo, Voldemort lo mantiene vivo para dar con tu ubicacion...- Ron floreo su varita para que un grupo de tasas y la tetera del te flotaran a la mesa.

    - Es cierto, compañero, el estara bien, por lo menos por un tiempo, asi que no te preocupes tanto, sabes que los demas estan ideando un plan con la informacion que obtuvimos de Nott.- Dijo el pelirrojo terminando de senvir el te, mientras Neville miraba hacia otro lado.- Asi que deja alterarte tanto... Draco esta bien...-

    - Yo no estaria tan seguro...- Dijo Nott, apareciendo en la entrada de la cocina con una manzana en la mano, Ron lo miro con mala cara, pero los demas parecian un poco asustados con el comentario.

    - ¿A que te refieres, Theo?- Dijo Neville sacando mediamente la voz. Nott se acerco a su secreta pareja y la puso la mano en el hombro, mientras que con la otra se llevaba la manzana a la boca con dejo de despreocupacion, aunque en el fondo, estar frente al resto de los miembros de la Orden, lo ponia nervioso.

    - Lord Voldemort no es una persona paciente, si es que se le puede llamar persona...- Decia mientras le daba otro mordida a la manzana y apretaba el hombro de su compañero.- Es verdad que a Malfoy le da un trato especial, sobre todo sabiendo que el tiene informacion valiosa... Pero en todo este tiempo no hapodido obtenerla, ni con torturas, ni con Legitimancia, ni con Veritaserum, lo cual, debo admitir, me parece admirable...- Jarry trago saliba al escuchar las palabras de Theo.- Sin embargo, la seguridad de los traidores siempre pende de un hilo muy delgado, en especial si este ha fallado una simple mision y ha llegado con aliados menos... Voldemort podria sospechar de que Malfoy ha entregado a los Mortifagos a la Orden del Felix, los cuales han disminuido su numero considerablemente en los ultimos años...- La expresion de Hermione era de suma preocupacion, los ojos de Harry parecian salir de sus orbitas, Neville se mordia la uña del dedo pulgar, como buscando una respuesta, y Ron apretaba los puños sobre la mesa.

    - ¡Ya callate!- Grito el pelirrojo bastante enojado.- ¡Ya tenemos suficiente preocupaciones como para caer en tus juegos, maldito Mortifago! ¡Deberias agradecer que aun te mantengamos con vida y fuera de esa celda, que es a donde perteneces!- De pronto Neville se levanto de su lugar con una evidente expresion de molestia.

    - ¡No es necesario que le hables asi!- Dijo en voz alta el molesto moreno, la sorpresa de todos se hiso evidente, en especial la de Ron.- A pesar de que lo tomamos prisionero, el a cooperado con nosotros, incluso sabiendo que su supervivencia no esta asegurada... ¡El ya no es un Mortifago! ¡Y no permitere ni que tu ni nadie lo trate de esa manera! ¡¿Entiendes?!- ROn solo fue capaz de asentir, era la primeravez que veia a su amigo tan furioso, y, la verdad, no queria indagar a que punto lo podia llevar su furia.

    - Tranquilo, Nev, no me molesta, es de lo mas normal...- Dijo Nott dando una mordida nerviosa a su manzana.- De todas formas, lo que les he dicho no es una mentira... No estoy diciendo que el este muerto, solo les digo que es probable que No este bien... Es para que lo consideren...- Volvio a pretar el hombro de Neville y salio de la cocina. Todos quedaron en silencio, pero Neville se puso de pie y salio tras Nott, a lo que Hermione los miro de reojo, suponia que lo que era ovbio para ella, pasaba desapersivido para sus amigos.

    - Bueno...- Dijo ella, atrayendo la atencion de sus amigos.- Considerando lo que Nott nos ha dicho, debemos concentrarnos en la planificacion que Severus, Remus y los demas tienen entre manos... Espero, Harry, que tengas un poco de paciencia, arriesgarnos ahora, seria arriesgar tambien la seguridad de Draco... Lo entiendes ¿Verdad?- El moreno levanto la vista a su amiga.

    - Lo entiendo... Me concentrare en cumplir mi deber... "Solo por el bien de Draco..."- Pensaba Harry. Su mente viajaba por la infinidad de posibilidades que respectaban a su amado Angel, se obligaba atener valor y paciencia, su amor era lo unico que le mantenia cuerdo al no tener conocimiento de la situacion en la que su amado se encontraba. Fe, era lo unico que le quedaba, fe...



    Capitulo 19 "La Sala de los Menesteres y El Cuadro del Director"


    El Invierno en el emisferio norte estaba en su maximo apogeo, pronto los dias de frio serian lentamente reemplazados por unos un poco mas calidos. Sin embargo, en las montañas del norte de Inglarreta, el frio parecia que nunca se iria, en especial en el alma de un joven que sufria los horrores de su reclucion en mano de la cruel dictadura regente. Se le permitia moverse libremente por todo el castillo de Hogwarts, pero eso se habia vuelto aun mas peligroso que antes. El dia en que volvio de su mision con Pansy, el Lord se enfurecio con ellos por su fracaso, sin contar que nuevamente habia perdido valioso apoyo, aunque sea de personas que el consideraba insignificante. Pansy fue torturada y manda a un calabozo hasta que Voldemort decidiera que la sacaran, mientras Draco, se le dijo que se mantendria libre en el castillo, si a eso se le podia llamar libertad, pero el Lord se le ocurrio un castigo digno para alguien que parecia estarlos traicionando, aun recluso, la palabras del maldito fueron claras: "Les permiro a todos ustedes, mis Mortifagos, hacer lo que quieran con el traidor, siempre y cuando no lo maten ni lo vuelvan loco, aun lo necesito...". Estas palabras atemorizaron el corazon del joven rubio.

    Desde aquella noche, Draco pasaba cada segundo del dia buscando un escondite de sus crueles perseguidores. En mas de una ocacion se habia visto acorralado, lo habian torturado y golpeado, prueba de eso era las evidentes marcas, moretones, y cortes en diferentes partes de su cuerpo, su labio aun estaba inflado por la ultima vez que habia sido atacado, incluso, en dos ocaciones, un pequeño grupo lo habia atrapado y tratado de violarlo, lo habian desnudado y tocado lascivamente, afortunadamente habia logrado escapar, sin embargo, en ese momento aun era perseguido por quienes deseaban terminar su labor. Corrio y corrio, temia por su seguridad, hubiese preferido que lo torturaran hasta la muerte, en vez de ser tocado y besado con tal brutalidad, se decia a si mismo que jamas dejaria que nadie, que no fuera su moreno amante, lo tocara o lo mirara si quiera de esa forma. Se creia perdido, sus fuerzas lo abandonaban, justo en el momento en que se dirigia un callejon sin salida, una puerta aparecio de en la pared a la que se dirigia, casi sin pensarlo se metio en esa habitacion, la cual no habia visto nunca, para buscar refugio, casi de inmediato la puerta desaparecio tras el. Fue asi como conocio la Sala de los Menesteres.

    Se setia solo, agobiado, asustado, rogaba a Merlin y a todos los Dioses que lo escucharan, que lo ayudaran, que lo salvaran de ese tormento. Deseaba, mas que nada en ese momento, estar en la seguridad de los brazos de su amado Harry, sentir su calor y saber que con el no volveria sufrir. Queria ver a su padrino, a Sirius y a su madre, el terror lo agobiaba, las lagrimas empapaban sus mejillas. Se arrincono en una esquina cercana de esa enorme habitacion, atestada de cosas, cubierto por lo jirones de su tunica, sentado en el suelo con los brazos rodeando sus piernas y la cara en las rodillas, sollozando sin consuelo, con su cuerpo y alma adoloridos.

    - ¡Oh, Harry, deseo tanto estar a tu lado!- Decia en medio de su llanto.- ¡Madre, ayudame, Madre... ayudame a volver a los brazos de mi amado... ayudame a estar en la seguridad de su calor, volver a ver sus hermosos ojos esmeralda...! ¡Alejame de mi Padre y de ese asqueroso ser que me mantiene cautivo en este horrible lugar... Por favor!- Su dolor corroia lo poco que le quedaba de cordura, sumiendolo en la desesperacion.

    - Calma, joven mago, no todo esta perdido...- Dijo una voz en aquella habitacion, la cual lo hiso dar un salto, alguien se encontraba con el en ese extraño lugar.- Acercate... Hablame de ese Harry...- Se sentia asustado, no sabia de donde venia esa voz, pero por alguna razon tambien le daba tranquilidad. Tomo un viejo mantel que habia sobre una polvorienta mesa y se cubrio con el, camino en direccion de donde suponia que venia la voz.

    - ¿Donde estas?- Dijo el rubio mirando a su alrededor, hasta que se encontro frente a unos ojos claros, aguamarina, que lo miraban con ternura, parpadeo varias veces hasta ver completamente la imagen del retrato en un marco dorado, era un hombre de edad, de cabello y barba larga de color plata, usaba unas gafas de media luna y una tunica morada.- ¿Un retrato?- El hombre del cuadro le sonrio de repente, y Draco abrio mucho los ojos.- ¿Quien es usted?-

    - Mi nombre es, mas bien fue, Albus Dumbledore, fui director de la escula Hogwarts de Magia y Hechiceria... Dime, jovencito, ¿Cual es tu nombre?- Draco estaba impactado, sabia muy bien quien era Albus Dumbledore.

    - Usted es el fundador de la Orden del Fenix... El profesor Dumbledore.- Dijo el rubio en tono de admiracion, el hombre en el cuadro sonrio y asintio.- Mi nombre es Draco Malfoy...-

    - Dime, joven Malfoy, la persona a la que te referias ¿Es Harry Potter?- pregunto Dumbledore, Draco asintio aun un poco sorprendido.- ¡Vaya! Me alegra saber que el aun esta bien, apenas era un bebe el dia en que Tom trato de matarlo, afortunadamente Lily fue una mujer muy sabia y utilizo su ultimo soplo de vida para proteger a su hijo... Lastima que yo no corri con la misma suerte.- El oji-gris aun miraba anonadado al hombre.- Cuentame, hijo, ¿Por que llorabas? No temas, no soy un chismoso.- Rio el anciano, Draco se sintio mas tranquilo, en compañia de ese hombre tan amable, quien sabia muy bien por las historias de los miembros de la Orden que el era muy bueno, ya no sintio temor. Le nerro todas las aventuras y desventuras que habia pasado desde que era niño, luego cuando lo acogieron en la Orden y por ultimo cuando fue capturado, sin olvidar su reencuentro con su fiel amado, el hombre escuchaba facinado las historias, no habia charlado con nadie en un largo tiempo, pues le conto a Draco, como su retrato habia sido confido a ese lugar por el mismisimo Lord Voldemort, luego de su muerte.

    - Entonces, el... ¿Sabe de este lugar?.- Dijo el rubio al sentir que el temor se volvia a apoderar de el.

    - Tranquilo, mi muchacho, desde aquel entonces le ha sido imposible volver a encontrarlo, yo mismo me he encargado de eso.- Dijo Dumbledore sonriendo, nuevamente la tranquilidad volvio a la mente de Draco, pero su cuerpo seguia temblando, esta vez debido al frio.- Veo que tienes frio y te ves un poco cansado tambien... Cierra los ojos...- Draco miro el retrato un poco indeciso, pero opto por obedecer.- Ahora abrelos.- Cuando abrio los ojos, la habitacion habia cambiado por completo, parecia mas pequeña, habia una gran cama en el medio, un armario, un escritorio, una chimenea encendida y arriba de esta el cuadro de Dumbledore, quien lo miraba sonriente.

    - ¡Guau! Es impresionante... ¿Como sucedio?- Dijo el rubio levantandose del piso y mirando a su alrededor.

    - Esta, joven Malfoy, es la Sala de los Menesteres, la cual tiene la cualidad de cambiar, segun las necesidades de las personas... Es uno de los tantos misterios de Hogwarts, mi querido muchacho...- La cara de Draco se ilumino, sus plegarias habian sido escuchadas, enviando el retrato de la persona que una vez sacrifico la vida por la de su amado Harry, ahora venia en su ayuda.

    Desde ese dia, la Sala de los Menesteres se convirtio en su refugio y Albus Dumbledore en su compañia, estaba seguro que cuando Pansy saliera de su encierro la llevaria ese lugar. Los dias pasaron, Draco pasaba casi todo el tiempo en la misteriosa sala, compartiendo agradables charlas con el que alguna vez fue el honorable director de Hogwarts, sientiendose aliviado, aunque bien sabia que esa paz no duraria para siempre, no mientras Voldemort tuviera a Mundo Magico bajo su cruel yugo. Una tarde, despues de haber evadido a un grupo de Mortifagos que lo perseguian, se encontro nuevamente en la tranquila habitacion, solo que habia una diferencia, una enorme cantidad de libros antiguos aparecieron, ocupando un gran librero y parte del escritorio.

    - Profesor, ¿Que es todo esto?- Dijo el rubio inspeccionando algunos de los escritos.

    - Son libros que contienes informacion de magia muy antigua y poderosa, pense que podrian serte de ayuda...- Dijo el hombre en el retrato.- Muchos de estos libros se mantenian ocultos en lo que alguna vez fue la biblioteca de esta escuela. Lamentablemente los Mortifagos los descartaron al ver que no poseian magia oscura, ignorando la importancia de estos antiguos conocimiento... Es tan triste ver que muchos de ellos fueron mis antiguos alumnos...- El anciano se veia demaciado desepcionado, pero esvoso una gran sonrisa para Draco.

    - No se preocupe, Profesor, 'No hay peor ciego que el que no quiere ver, peor sordo que el que no quiere oir, ni peor tonto que el que no quiere entender'... Mi Madre siempre decia eso... Yo estoy muy agradecido del conocimiento que me ofrece, y sabre utilizarlo correctamente.- dijo el chico tomando uno de los libros y sentandose en la cama.

    - Narsissa Black siempre fue una chica muy inteligente, fue una alumna estrella y muy hermosa... Su matrimonio fue arreglado cuando aun era muy joven. Me alegra que su hijo sea tan listo y encantador como ella... Ademas de ser quien mas ama al joven Harry Potter.- Dijo Dumbledore, Draco solo se escondio tras su libro para no mostrar el gran sonrojo que reinaba en sus mejillas.- Te ayudare en todo lo que pueda para sacarte esa maldicion que Tom ha puesto en ti. No dudo de tu capacidad, pero dos cabezas piensan mejor que una...- Ambos se miraron sonrientes.

    Los dias lentamente se fueron convirtiendo en semanas, Draco pasaba casi todo el dia y la noche estudiando y practicando hechizos muy antiguos y nivel muy avanzado, era dificil para el, pero los consejos de Dumbledore siempre estaban ahi para sacarlo de apuros, era la voz consoladora que necesitaba desde el dia que dejo Grimmauld Place involuntariamente. Todos su esfuersos y estudios estaban dando frutos, era capaz de invocar magia muy complicada, habia aprendido a leer runas para consultar ciertos libros, sabia preparar nuevas pociones que sabian le serian utiles en algun momento, y al parecer cada vez se acercaba mas a comprender el extraño hechizo que Voldemort habia lanzado sobre la marca en su brazo. Ademas del viejo director, un pequeño ratoncito blanco, que un dia se paseaba por la sala, se habia hecho amigo de Draco, siempre le guardaba restos de sus comidas para darsela, cuando el rubio estudiaba en el escritorio, se subia a el y casi siempre metia la naricita al tintero, manchandose el borde de esta, por lo que Draco lo llamaba Mustachy, por mustache (bigote). Estos compañeros reconfortaban mucho al chico, le permitian estar tranquilo y cuerdo.

    Al paso de unas semanas, pudo identificar el hechizo que el malvado Voldemort habia alterado para conseguir mantener vigilado al oji-gris, este era un poco extraño y dificil, requeria de sangre de la persona que se deseaba controlar y del controlador, se debia hacer una pocion de tinta con ella, y luego traspasarla con un hechizo, que era de los extraño, para realizar la marca, esto se consideraba magia oscura, pues se suponia que el control duraba para siempre. Tras muchos dias estudiando ese conjuro, se dio cuenta que necesitaria ponerlo sobre alguien para tratar de eliminar su efecto, por lo que decidio hacerlo sobre Mustachy, despues de todo sabia que no lo usaria con un mal fin. Una vez listo, traspaso con mucho cuidado la tinta a la cola de la ratita, dibujando una pequeña serpiente que enroscaba en la cola. El hechizo habia sido un exito, con tan solo decir su nombre mientras agitaba la varita, a su mente venia instantaneamente el lugar donde estaba, ahora su tarea consistiria en quitar ese control.

    - Estoy sorprendido, Draco, ese hechizo es muy complicado, tanto que no deben haber muchos magos que lo hayan logrado.- Decia el anciano del cuadro.- Tus habilidades son impresionantes... De haber sido un estudiante de Hogwarts, habrias sido uno de los mas ejemplares, te lo aseguro.- El rubio sonrio complacido, tenia hambre, pero no queria salir por los alimentos asi que cerro los ojos y deseo tener comida con todas sus fuerzas, cuando los abrio frente a el habian muchos ingredientes y al costado de la chimenea aparecio una pequeña cocina con horno.- Veo que tienes ganas de cocinar.- El anciano lo miraba divertido.

    - Eso parece... aunque preferiria la comida de la señora Weasley o lo que cocina Sirius... Bueno, veamos como resulta...- Dijo el rubio tomando un trozo de carne, lo raro era que la comida era suficiente para dos personas, tomando en cuenta a su pequeño amigo, seguia siendo demaciada. De pronto la puerta aparecio, lo cual atemerizo mucho a Draco, saco su varita y la apunto a la puerta, cualquiera que pudieras aparecer, sin duda seria un riesgo, pero su peor temor era que Voldemort por fin hubiese dado con el lugar. Cuando el picaporte comenzo a girar, una gota fria paso por la espalda del rubio, poniendole pa piel de gallina, sin darse cuenta una persona entro rapidamente y cerro tras ella, Draco apunto amenazadoramente su arma, hasta que pudo ver bien quien era.- ¿Pancy?.- Efectivamente, la chica se encontraba apoyada en la puerta respirando con dificultad y con gran parte de sus ropas rasgadas, cuando oyo su nombre saco su varita y la apunto, hasta que vio de quien se trataba.

    - ¡Draco!- Grito ella, mientras corria a los brazos de su amigo, quien no dudo en recibirla, la chica comenzo a llorar, se veia cansada, golpeada, evidentemente no habia comido bien en mucho tiempo.- ¡Por Merlin! Me tenias preocupada... Hace dos dias me dejaron salir y no habia podido dar contigo... Luego oi el castigo que te habian dado, y pense que alguno de inmundos te tenia prisionero, o quien sabe que.- Draco la pretaba fuerte contra el, se sentia tan aliviado de tener a su amiga junto a el. Despacio la llevo hasta la cama, para que esta se sentara un momento, le pidio a la habitacion que apareciera un ropero para Pancy y un vestidor, la chica estaba asombrada con lo sucedido, pero Draco le indico el baño y le paso un poco de ropa, para que se arreglara, mientras el terminaba de cocinar. Cuando esta volvio una mesa estaba en medio de la habitacion con la comida servida.- ¿Como has hecho eso?- El rubio la miro sonriente.

    - No fui yo, fue esta sala... Estamos en la Sala de los Menesteres, la cual es capaz de acomodarse, segun las necesidades de los que la ocupan...- Explico Draco sentandose a la mesa.

    - ¿Sala de los Menesteres?- Consulto Pancy.

    - Asi es, jovencita...- Dijo el hombre del retrato, a lo cual la morena lo miro con desconfiansa y algo sorprendida.

    - ¿Quien es usted?- Fue lo unico que se le ocurrio preguntar.

    - Tranquila , Pancy, el es el ex-Director de Hogwarts, el profesor Albus Dumbledore.- Dijo muy alegre el joven de ojos grises, la chica miro curiosa al hombre que le sonreia tan amablemente, se sintio calidamente tranquila, por lo que le devolvio la sonrisa y se sento en la mesa frente a Draco, ambos comenzaron a comer, la preparacion del rubio estaba deliciosa, habia aprendido muy bien a cocinar en la casa de Sirius.- Pancy, ¿Por que estabas tan maltratada cuando llegaste, dihiste que llevabas dos dias en libertad...- La chica lo miro triste.

    - El Señor Oscuro considero que seria mejor que yo compartiera tu castigo, pues mi encierro no le parecia suficiente ejemplo para lo demas... Era perseguida cuando vi la puerta.- Respondio Pansy, Draco se sintio muy molesto, no era suficiente torturarlo a el, sino que que osaban molestar a su amiga, eso era frustrante.- ¡Oh, Lo olvidaba! Escuche algo muy interesante mientras estaba en mi celda... Supe que la Orden a hecho grandes avances, Escocia e Irlanda estan libres del yugo del Lord, ademas que el este se ha empezadoa preocupar...- Miro el retrato y luego a Draco.- Escuche a algunos Mortifagos mencionar algo sobre un tesoro que Voldemort oculta, cuya ubicacion solo la saben el Señor oscuro y sus mas cercanos colaboradores, de los cuales solo queda uno...- Decia la chica casi en un susurro.

    - Lucius...- Continuo el rubio, la chica asintio.- Pero ¿Que tiene de importante ese tesoro?- Pancy sonrio y miro al cuadro.

    - Al parecer, hace mucho tiempo, cuando el Lord aun era un estudiante, se dedico a buscar la manera de lograr la inmortalidad, la cual creyo encontra en una extraña y ancestral magia oscura.- Narraba la joven Parkinson, bebio de su baso y volvio a mirar a sus oyentes.- Trato de usar la magia de los Horrocruxes, lo cual no se muy bien lo que es, pero no pudo sacar obtener el resultado que queria, por lo cual volvio a reunir su alma...- Eso sono muy tetrico para el rubio.- Luego intento algo diferente, aprendio a separar su lado humano de su lado magico, lo cual lo convertiria en el monstruo que vemos hoy...- El chico miraba confundido.

    - Espera ¿Me estas diciendo de que Voldemort no tiene un lado humano?- Pregunto un poco asustado y la chica asintio.- Pero, eso quiere decir que es imposible matarlo, no estamos tratando con ser normal, sino con monstruo sin humanidad... Ademas ¿Que tiene que ver el tesoro en todo esto?- Dumbledore se aclaro la garganta y ambos chicos miraron en su direccion.

    - Es imposible vivir, para un humano, sin una pisca de humanidad...- Explicaba Dumbledore.- Por lo cual, es probable que Tom haya encerrado esa parte de el en un tesoro, algo significativo para el, lo que significa que el lado mortal y vulnerable de 'Lord Voldemort' esta en alguna parte de este mundo... Es indispensable encontrarlo y destruirlo, solo asi podran derrotar de una vez y para siempre a ese cruel dictador.- Draco se sentia anonadado, habia camino que los llevaria a derrotar al maldito, era la informacion mas valiosa que habia encontrado en todos su dias de reclucion. En ese momento anelo poder llegar al lado de su amado Harry y darle esta noticia, pero antes debia encontrar la solucion al problema de la marca y, mas importante, descubrir que era y donde se encontraba este tesoro. Draco se levanto de su silla y se dirigio al escritorio, Pansy lo miro curiosa.

    - Pansy, antes que cualquier cosa, debo liberme de esta maldicion.- Dijo Draco mostrandole la marca.- En estos libros esta la respuesta a este predicamento... ¿Te gustaria ayudarme?- La chica lo observo y poco a poco comenzo a sonreir.

    - Por supuesto, dime que tengo que hacer.- La joven Mortifaga corrio junto asu amigo, este le entrego un libro y comenzo a explicarle lo que habia descubierto hasta ese momento. Dumbledore los miraba sonriente, pero a la vez preocupado.

    - "Siento una gran culpa al dejar en las manos de estos jovenes el destino del mundo... Harry, has logrado encontrar un gran aliado, un gran amor... Draco es una persona sincera, lista y con gran sentido de justicia... Deseo de todo corazon, que puedan vivir para disfrutar del Amor que sienten el uno por el otro, porque no hay duda que debes amarlo mucho, para que el decida dar todo por ti... Definitivamente, AMBOS seran los Salvadores del Mundo, confio en que asi sera..."- Los pensamientos del amable anciano lo reconfortaban, miraba alos dos jovenes entuciasmados con su trabajo, y volvio a sonreir.



    Capitulo 20 "La Noble Pocion"


    La mañana era brillante, el frio poco a poco se alejaba, preparandose para recibir los primeros dias de primavera en Febrero. El castillo de Hogwarts estaba inquieto, los seguidores del Señor Oscuro sentian como el temor se apoderaba de sus almas, pues el territorio que algunavez habian conquistado y era extenso, se habia reducido considerablemente. La Orden del Fenix, enemigos directos de los mortigafos, habian logrado liberar una gran parte de los territorios, lo cual enfurecia abiertamente a Voldemort. Una de las personas que mas resentia su odio, era, a su vez, su seguidor mas fiel.

    Lucius Malfoy se encontraba en la enorme recamara del Lord, completamente desnudo, atado con cadenas que salian desde el techo, que lo mantenian de pie con los brazos extendidos hacia arriba, totalmente amordasado. Hacia años que se habia convertido en la "perra" de su amo, en mas de los sentidos que todos creian, y no por obligacion, sino por decision propia, pues solo asi se aseguraba un lugar privilegiado en el Orden del Oscuro Lord. Hacia mas de un año, desde la muerte de Bellatrix Lestrange, que el era el unico que calmaba los deseos de su amo, su cuerpo era victima de la cruel forma de Voldemort de saciar su livido, pero a el no le importaba mucho, pues sabia que su orgullo era alimentado de esa forma, en vez de sentirse humillado, muchos pensarian que estaba loco, como alguna vez lo penso su esposa, pero el mantenia su estatus de esa forma, su deseo de poder y gloria podian mas que el racionamiento normal. Su amo entro en la habitacion notoriamente enfadado, saco un latigo con la ayuda de su varita y golpeo la ya lastimada espalda del rubio mayor.

    - Sabes, mi querido Lucius, he estado pensando...- Dijo el Lord con su voz siseante.- Desde que tu hijo aparecio he tenido muy mala suerte... Debo recordarte que la idea de reclutarlo fue tuya, tengo la impresion que incluso algunos de mis Mortifagos han comenzado a dudar de mi poder.- Volvio a golpear el magullado cuerpo con el latigo, Lucius resistia lo que mas podia, le dolia, pero preferia eso a ser enviado a su muerte contra la Orden del Fenix.- Ese maldito niño... ese 'Harry Potter', cada dia es mas conocido, todos hablan de el, difunden su maldita leyenda, como una peste que comienza a afectarme...- Hiso desaparecer el latigo y se acerco hasta el patriarca de la familia Malfoy, le tomo el menton y le saco las mordasas, le enterro las garras en el rostro y lo beso con brutal fuerza. Lucius apenas podia respirar, pero no se aparto en ningun momento.- ¡Aaaah! Como sienpre tu cuerpo me reconforta.- Lucius sonrio.

    - Para eso estoy, Mi Lord... No se preocupe, ese niño caera... Y usted pronto recuperara todo lo que es suyo por derecho...- Dijo el rubio con algo de dificultad. Voldemort sonrio abiertamente, se movio lentamente alrededor del palido cuerpo del hombre atado sin quitar la mano del menton y se apoyo en su espalda.

    - Eres el unico, Lucius, el unico en que puedo confiar ciegamente... Querido...- Dijo Voldemort clavando sus uñas en el costado, lo cual hiso sangrar rubio mayor, el dolor agudo era la mejor señal que le daba su Señor para avisarle que lo tomaria, lo cual lo emocionaba, era un maldito masoquista.

    Lejos del cuarto de Lord Voldemort, un chica de cabellos oscuros corria por los pasillos, miraba constantemente sobre su hombro, habia perdido a sus perseguidores, pero no se sentiria segura hasta llegar a la Sala de los Menesteres, junto a su mejor amigo, Draco Malfoy. Corrio lo mas rapido que pudo por los pasillos del viejo castillo, hasta que alfin pudo divisar la gran puerta de madera antigua, se apresuro y entro, al momento que la puerta desaparecia tras ella. El bello joven rubio de ojos grisaseos, se apresuro a ella, para ver si estaba bien o lastimada.

    - Pancy ¿Estas bien, te hicieron algo?- Pregunto angustiado, la chica de cabellos oscuros nego con la cabeza mientras recuperaba el aliento, se acomodo mejor la tunica y camino hasta la mesa en medio de la acogedora habitacion.- ¿Lo conseguiste?.- Ella solo sonrio mientras sacaba un ponton de frasquitos con todo tipo de sustancias en su interior.

    - Señorita Parkinson, es bueno verla sin daño, comenzaba a sentirme preocupado por su bienestar.- Dijo el jovial anciano desde su retrato.

    - Gracias, Profesor Dumbledore, estoy bien... Comienzo a acostumbrarme al ejercicio matutino.- Rio Pancy, el hombre le dedico una alegre sonrisa. Se volteo a ver a su amigo y le entrego un troso de pergamino donde estaban todas los nombres de los ingredientes que traia.- Fue un poco dificil, muchos estaban ocultos en el almacen, pero los encontre todos, anote la descripcion de cada uno, como pediste... Solo habia una escama de Dragon Albino, deberias estar feliz...- Draco revisaba todos los frascos y sus etiquetas, se acerco a la chica y la abrazo.

    - Lo estoy... No solo me tragiste lo necesario, sino que volviste con bien.- El rubio se aparto y se fue a su escritorio, abrio el libro que tenia separado y reviso la pagina marcada.- Seria bueno releer las instrucciones, solo tengo los ingredientes para hacer la pocion una vez...- El anciano se aclaro la garganta y los chicos lo miraron.

    - Seria mejor, joven Malfoy, que hiciera eso despues de desayunar, un cuerpo saludable le dara una mente fuerte... Ademas a pasado toda la noche estudiando ese libro de pociones ancestrales, deberia descansar, si es que no quiere cometer un error.- Explico Dumbledore, su amiga lo miro asintio marcadamente, Malfoy junior levanto una ceja en señal de molestia, pero suspiro resignado.

    - Ustedes son peor que tener a la señora Weasley y a mi padrino juntos... Pero tienen razon, comeremos algo y descansare unos minutos.- Reprocho el rubio.- Pero luego me dejan trabajar ¿Esta bien?- El hombre y la chica asintieron con una sonrisa. Luego de comer su desayuno, Draco se rescosto en su cama, no se habia dado cuenta de lo cansado que estaba, pero su cuerpo poco a poco se relajo, su ojos se cerraban solos, no tardo mucho en irse al pais de los sueños. Pansy se acerco y lo cubrio con una manta, lo miro tranquilo y se dirijio a su cama, la cual estaba separada de la de Draco por un biombo, para luego dormirse tambien.

    "Draco desperto en un lugar que no pudo reconocer, era un valle verde, cubierto por algunas flores, casi todas rojas y amarillas, el sol brillaba calidamente, llenando el corazon del rubio de una paz que no sentia hace mucho. Se levanto del lugar donde estaba acostado y camino por el bello prado, se sentia ligero, como flotandon noto que sus pies estaban descalsos y su cuerpo estaba cubierto por una tunica blanca muy delgada. La brisa acariciaba su rostro, se sentia feliz, o al menos eso creia. Miro al horizonte y vio un bellos lago, sin saber por que, se dirigio a el en busca de al que lo llamaba. Camino lentamente, la hierba se sentia suave en sus pies, cuando estuvo cerca de las cristalinas aguas, vio un arbol cerca de la orilla, y debajo de este una silueta, apresuro el paso ansioso, poco a poco la silueta iba tomando una forma familiar, viento soplo levemente, meciendo unos cabellos azabaches, los cuales le pertenecian a la figura bajo el arbol, su corazon comenzo a latir rapidamente, sus mejillas se llenaban de un color rosa, sus ojos se llenaban de lagrimas de felicidad, bajo ese arbol estaba la persona que mas amaba en todo el mundo, Harry.

    El moreno volteo a ver al emociomado rubio con una sonrisa, este corrio para lanzarse a sus brazos, donde fue recibido con gran alegria, pronto las lagrimas empaparon su palido rostro, se sentia aliviado, seguro y amado por su querido Heroe. Harry lo aparto un momento y sostuvo gentilmente su cara, hasta apoderarse de sus labios en un tierno beso, que el rubio deseo que durara para siempre, ambos, aun unidos por sus labios, se sentaron bajo el enorme arbol, luego se apartaron un poco para analizar las bellas facciones del otro, para luego unirse en otro tierno beso lleno de amor. Se mantuvieron abrazados en silencio por un largo rato, el moreno acariciaba amorosamente la mejilla de su amado Angel, mientras este se apoyaba en el pecho del oji-verde, se volvieron a mirar, Draco no se habia dado cuenta de lo mucho que habia extrañado esos ojos, lo miraban con tanta dulsura, tanto deseo, que casi no se pudo contener a besar nuevamente a su dueño.

    Draco lentamente comenzo a quitar la delgada tunica negra que cubria el cuerpo de su amado, mientras este hacia lo mismo con la blanca del rubio, cuando se encontraron totalmente desnudos, Harry recosto con mucho cuidado al oji-gris en la hierba, para luego comenzar a depositar suaves besos en todo su cuerpo, haciendo que ambos cuerpos comenzaran a arder en deseo y pacion. A pesar de esto, cada caricia era tierna y calida, como si se tratara de algo muy fragil, volvieron a besar sus labios, y Harry comenzo a desender hasta el ercto miembro de su amante, lo tomo entre sus manos y lo masajeo con suavidad, Draco dejaba escapar todo tipo de gemidos y suspiros, pronto su cuerpo se sintio hambriento de mas, por lo abrio sus piernas pidiendole a su fiel moreno que lo hiciera suyo, que uniera su cuerpo con el de el en el, para poder ser uno en cuerpo y alma. El oji-verde rio sutilmente, probocando un agradable estremecimiento en Draco, se metio unos dedos a la boca y preparo a su ancioso Angel rubio, cuando estuvo listo se introdujo lentamente en el,haciendo que ambos gritaran de gozo. Comenzo a moverse lentamente, para luego ir aumentando el ritmo, sus cuerpos se perlaban con el sudor, sus gemidos se sincronizaban, al igual que sus movimentos, la pacion era tal, que no falto mucho para que ambos alcanzar el climax. Despues de un momento, se encontraban nuevamente apoyados en el troco, mientras se acariciaban tiernamente, disfrutando de su desnudez, Draco miro a su moreno, este sonreia.

    - Te amo, Harry, siempre te amare.- Dijo el rubio casi en un susurro, el moreno lo beso.

    - Yo tambien te amo, Draco... Te amo mas que a nada en este mundo.- Respondio el oji-verde con lagrimas en los ojos, lo que hiso que Draco se sorprendiera.- Pero... tienes que despertar...- El rubio se sorprendio aun mas.

    - ¿Que dijiste?.- Pregunto asustado.

    - Que tienes que despertar...- Respondio Harry."

    - Despierta, Draco...- Dijo Pancy. Draco miro a su alrededor con peresa, se dio cuenta que estaba el la sala, pero lo peor fue darse cuenta que su bello encuentro fue solo un sueño, se levanto y se sobo los ojos.- Hasta que despiertas... Estabas mas cansado de lo que creia.- Draco miro a su amiga con una expresion asesina, le hubiese gustado quedarse un poco mas en esa bella fantasia.- ¿Por... por que me miras asi?- Dijo ella con un poco de miedo.

    - No es nada...- Dijo el rubio levantandose de la cama, Pancy lo miraba un poco sonriente, el chicoc la miro extrañada y esta le extandio un periodico.- ¿Que es esto?... ¿El Profeta? Crei que este periodico estaba controlado por Voldemort.- Ella asintio.

    - Asi es... Lo encontre en uno de los pasillos mientras huia, pero se me habia olvidado mostrartelo... Lee la portada.- Ella aun sonreia, Draco lo tono y leyo el encabezado "El mito del Niño-que-vivio: ¿Fantasias para tontos o realidad desagradable?", bajo la vista vista a la imagen y con alegria un dibujo retratando casi a la perfeccion a su amado Harry.- Me da la impresion de que es esperanza camuflada... Pareciera como si quisieran comunicar los avances de la Orden y de tu 'Heroe', sin que paresca que lo apoyan...- Draco miro a la chica con los ojos muy abiertos, existia la posibilidad de saber algo de lo que estaba sucediendo con la Orden aun en su encierro. Sintio un ruidito al lado de su tintero y vio a la pequeña ratita.- Mustachy ¿Viniste a desayunar? Toma...- dijo la chica alargandole un pedaso de pan, que el pequeño roedor blanco tomo y comenzo a comer. Draco abrio el periodico y leyo en silencio. El periodico mencionaba vagamente testimonios de personas que aseguraban a ver visto a la Orden encabezados por el famoso chico, relatabas supuestas asañas y lo describia como poseedor de un poder fabuloso, cosa que Draco supo que eran imposibles; tambien contaba que algunos se habian dejado llevar por historias que lo mencionaba en Francia e Inglaterra, y como muchos negaban apoyarlo, pero de todas formas lo mencionaban con admiracion, esto alivio un poco al rubio.

    Dejo el periodico de lado y se dispuso a leer nuevamente el libro que lo habia ayudado a idear la preparacion de la pocion. Tenia muchas anotaciones en un pergamino, todas rebisadas mas de una vez, sabia que podia darse el lujo de equivocarse, Pancy se acerco asu lado y comenzo a repasar la instrucciones con el, sabia que pronto comenzarian la compleja e importante preparacion. Al paso de casi una hora revisando los apuntes y libros, Draco hiso aparecer un caldero y acomodo todos los viales en el orden en que ocuparia los ingredientes, miro a su amiga para saber si estaba lista, esta le asintio seriamente y comenzaron a realizar la ardua tarea.

    Pasaron casi toda la tarde en la cansadora labor de terminar la pocion, debian seguir un monton de pasos, dejarla reposar, subirle y bajarle la temperatura, cortar, aplastar y esprimir ingredientes, contar el tiempo entre cada paso, anotar cada reaccion y paso a seguir, sin dejar nada a la suerte. Las horas seguian pasando, se pasaron por alto el almuerzo, pero cuando empezaba a oscurecer, sus estomagos rugieron exigiendoles alimento, pero debieron ignorarlo un poco mas, ya faltaba poco, el ultimo paso era dejarla reposar toda una noche y al dia siguiente debian agragar el ultimo ingrediente, la extraña y muy dificil de conseguir, Escama de Dragon Albino. Cuando por fin apagaron el fuego, ambos chicos suspiraron cansados, se alejaron del escritorio y se estiraron peresosamente.

    - Esto ha sido muy cansado ¿Verdad?- Dijo Pancy, Draco bortezo y asintio.- Mas vale que esto resulte, Draco... Sabes que hemos arriesgado mucho para lograr esto.- El rubio se acerco a la mesa e hiso aparecer unos platos con carne, patatas y varios vegetales, ademas de una jarra de jugo de calabaza y un par de vasos.

    - Sera mejor que comamos... Mañana tendremos que probar la pocion, ademas... Tenemos que poner en accion el plan para obtener la informacion sobre el tesoro.- Dijo el rubio sentandose a comer, al igual que la peli-negro, su pequeña mascota se le aproximo en busca de un bocado, por lo que un platito pusiero diferentes trozos de comida y se lo dejaron el suelo.

    - Pedire a Merlin que todos sus esfurzos rindan frutos.- Dijo amablemente Albus Dumbledore, los chicos agradecieron con la cabeza, el hombre habia sido mas que de ayuda para llegar hasta ese punto.- Al mismo tiempo, debo pedirle que no se arriesguen demaciado, Lucius Malfoy no es una persona para subestimar... Desde que muy joven, se le considero una persona de cuidado, se obseciono con obtener los mas altos reconocimientos, busca a la mujer mas bella y de familia purasangre para desposarla, se codeaba con los chicos de familias tradicionales e influyentes... Es de las personas que jamas 'Da puntada sin hilo'.- Draco se puso a pensar en las palabras del anciano, en el fondo no sabia nada de su padre, apenas lo conocia, a lo largo de su niñez solo lo vio un par de veces, pues el y su madre viajaban mucho, ahora se preguntaba si era pa ra alejarlo de su progenitor. Debia estar muy atento a las acciones de Lucius, se habia propuesto a llevar a cabo su plan entanto supiera si su pocion era exitosa.

    - Tranquilo, yo te ayudare con eso... El señor Malfoy fue mi maestro cuando entre en Hogwarts, se algunas cosas sobre el... incluso algunas que el no sabe que se.- La chica se habia puesto un poco nerviosa, Draco la miraba preocupado, que era lo su amiga no le habia dicho.

    - ¿Como que?- Pregunto ansioso el oji-gris, temia escuchar la respuesta, pero era necesario para llevar a cabo su plan.

    - ¿Estas seguro que quieres saber?- La joven Parkinson se veia muy agobiada, las manos le temblaban y miraba constantemente al cuandro del ex-director. Draco respiro profundamente y asintio con determinacion.- Esta bien... Pero no es algo muy agradable...- El rubio se desespero.

    - ¡Habla de una vez, Parkinson, me estas matando de los nervios!- El chico respiraba agitado, miro a Dumbledore, quien estaba visiblemente molesto por su falta de caballerosidad.- Lo siento... continua, por favor.- La chica asintio y se aclaro la garganta.

    - Cuando tenia unos 13 o 14 años, no llevaba mucho de haber llegado al castillo, estaba buscando a mi maestro, Lucius, pero no estaba en su despacho...- Narraba Pancy.- Recuerdo que camina perdida por los muchos pasillos, hasta que lo divise dando vuelto en la esquina de un corredor... Sin dudarlo lo segui, y lo vi entrar en un cuarto que yo, en ese momento, no sabia a quien pertenecia... Antes que me pudiera acercar mi al Lord en trar en el mismo cuarto, lo cual llamo mucho mi atencion. Letamente me asome y note que la puerta estaba entre abierta, cuando me aproxime para ver lo que pasaba adentro, no lo pude creer...- hiso una pausa para beber de su vaso de jugo, respiro profundo, mientras una sombra cubria sus ojos.- Lucius Malfoy se encontraba desnudo atado a la cabecera de una enorme cama, con los ojos vendados y las piernas abiertas... El Lord lo golpeaba con una varilla de madera y... y tu padre gritaba con una sonrisa en su rostro... No sabia que pensar, me asuste mucho. Sin embargo, no pude dejar de mirar... Luego Voldemort se poso sobre el y... y... lo hiso suyo... No pude seguir ahi, corri con todas mis fuerzas para alejarme de ese lugar... me senti confundida, asqueada y muy molesta, el hombre que consideraba mi maestro, se regalaba al Lord para poder seguir siendo su mano derecha...- Pansy apretaba sus puños sobre la mesa, Draco no podia esconder su expresion de horror, su padre era la asquerosa "perra" de Lord Voldemort.

    - Siempre lo crei un ser cruel y despiadado, pero nunca pense que podia llegar a ser tan... repugnante.- Dijo apretando los dientes, Dumbledore negaba con la cabeza, nunca imagino hasta que nivel podia llegar Lucius por un poco de poder.

    - Lo peor es que eso lo ha seguido haciendo hasta hoy... De hecho, algunos de los demas Mortifagos han comenzado a sospechar de la rara actitud que tiene el señor Oscuro con tu padre, cuando estaba en mi celda muchas veces los escuche murmurar sobre eso...- Dijo Pancy.

    - Bueno... Es sufiente por hoy. Vamos a descansar, mañana tendremos que ajustar los ultimos detalles de nuestro plan.- Dijo levantando de golpe de su asiento, estaba cansado, lo que se habia esterado de su padre lo agobiaba, era horrible pensar que no solo acoso y mato a su madre, si no que tambien tuvo el descaro de engañarla tanto tiempo, ¡Y con Voldemort! Era una realidad muy perturbante, pero era algo que debia superar pronto, pues eso no debia ser un problema, sino algo que usar a su favor.

    No se dio cuenta cuando se durmio, la noche paso tranquila, la imagen de su dulce amor se presento en sus sueño, pero era como algo inalcanzable, por mas que corria asu encuentro, este no llegaba. Desperto en varias ocaciones, sintiendo como si Harry tratara de despedirse en sus sueños, sintio temor, uno enormemente avasallador, su corazon se apreto, debia salir de ahi lo antes posible para ver a su amado con sus propios ojos y alejar cualquier miedo que pudiera hacerlo desfallecer. Entre sueños y pesadillas, la noche termino, antes que los rayos del sol dominaran las montañas, Draco ya se habia bañado y vestido. Poco despues Pancy desperto, al ver a su amigo en el escritorio se acerco.

    - No estuviste despierto toda la noche ¿O si?- Dijo ella un poco preocupada, el rubio nego con la cabeza.

    - Acabo de levantarme... Solo falta una hora para que la pocion este lista, eso me tiene un poco ancioso.- Respondio Draco, por lo que la morena se sintio mas tranquila. Ella se encargo de preparar el desayuno, mientras el oji.gris hacia varias anotaciones en un pergamino sobre la pocion.- Espero que todo salga bien.- Dumbledore mirab intrigado a los dos jovenes, preferia mantenerse en al margen hasta ver los resultados, pues el tambien estaba nervioso.

    La hora paso muy lentamente, Draco se paseaba por la habitacion, Pancy tenia a Mustachy en sus piernas y le daba pequeños trozos de comida para entretenerse, ambos estaban en silencio, inmersos en sus propios pensamientos. Cuando el momento llego, la pocion paso de un color marron a uno mas parecido al rojo sangre, por lo que Draco trago saliva y tomo la escama, miro asu amiga y esta asintio, luego miro al cuadro y el hombre de este le sonrio, puso el extraño ingrediente sobre el caldero y lo dejo caer, al cabo de unos segundos la pocion de aclaro, eras hora de probarla. El aura del lugar era impocible de desifrar, el silencio era sepulgral, el rubio tomo un poco de la sustancia con una cuchara y le extrencio la manoa asu amiga para que le pasara a la pequeña ratita, la puso sobre el escritorio y dejo caer el contenido de la cuchara sobre la cola de la criatura, la cual. La dejo en el suelo y le dio un empujoncito para que se fuera por el agujero en la pared por el que siempre entraba y salia. Mientras se alejaba la marca en su cola se iba decolorando.

    - ¿Por que la dejar ir?- Pregunto Pancy conun poco de nerviosismo.

    - La magia de la Sala no deja que el rastreo funcione, si no el Lord ya me habia encontrado hace tiempo... Tendremos que esperar un poco y luego... veremos que pasa.- Respondio el chico totalmente serio. A cabo de un minuto saco su varita.- ¡Mustachy!- Nada, volvio a intentarlo, pero la imagen de la ubicacion del su pequeño amiguito no parecio, su corazon dio un salto, al parecer su pocion habia sido un exito.- Creo que...funciono.- Pancy solto el aire y le sonrio, Dumbledore asintio complasido y Draco se dejo caer pesadamente en la silla.

    - Me alegro... Solo falta una cosa por hacer...- Dijo ella mirando al lugar donde debia estar la puerta.

    - Si... y lo haremos esta noche...- Ambos chico se miraron con decision, al caer la noche pondrian sus vidas en peligro, usarian todos sus recurso para ayudar a acabar con esta cruenta guerra, y poder, asi, volver a ver a sus amados.
     
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