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SAYA KISHIMOTO
.User deleted
Hello, everbody
Aca presentandose Saya Kishimoto con su primer fic. Disfrutenlo, dejen comentario...sobre decir que me esforze (jajaja)
Les presento aca mi fic Inazuma Eleven Another World
Este fic sucede 12 años depués del final de Inazuma Eleven Go...cuál es el tan famoso cambio?
Que en vez de que el entrenador Hibiki quedara como Seitei (sigo diciendo que en vez de poner uno nuevo hubieran quitado al estupido sector V de una vez por todas, pero que se le va ha hacer) ....weno...en vez de Hibiki, sube al puesto otro cierto individuo que acontinuación descubriran.
Parejas (Seme x Uke)
Inazuma Eleven
GoenjixFubuki
EndoxKazemaru
HirotoxMidorikawa
TobitakaxToramaru
KogurexHaruna (la única hetero, no se preocupen es secundaria)
Inazuma Eleven Go
ShindouxKirino
KariyaxHikaru
YuuichixYukimura
AmagixMahoro
NishikixMidori (weno...esta también es hetero, i know...pero casi ni salen... no se alarmen)
KenmaxMitsuyoshi
MikadoxMiyabino
Ok...... Solo lean esto de abajo y todo estara bien
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V
Ultramegasuperhyperduperomegaimportante
Este fic contiene OCs como protagonistas (Original Character = ósea personajes creados por mi)
Este fic contiene spoilers de IE y IEGO…advertidos están!!! (jaja)
Muy, muy importante… Endo Mamoru es soltero
así es, nada de matrimonio con Natsumi
Glosario (alias, cosas aburridas que de seguro ni quieres saber pero tienes…por que sino vas a entender nada de nada… léelo!!)
Kohai* : lo contrario a senpai, alguien de grado menor a otro personaje.
Santo Emperador o Sacro Emperador* : es la traducción al español de “Seitei”
Gakuran: la chaqueta del uniforme que usan los chavos japoneses en secundaria.Tokkofuku: Esto es un tokkofuku…SPOILER (click to view)
SPOILER (click to view)
Básicamente, una chaqueta larga usada por los pandilleros japos.
y una instruccioncilla antes de leer: si ven una cosa escritan entre 2 asteriscos como asi *blahblah* ...quiere decir un recuerdo que tiene uno de los personajes.
Y ya no los aburro más…. Adelante!!! Disfruten!!!
Cap. 1 Un nuevo viento sopla en Raimon
Los laceres danzaban a lo largo y ancho del estadio Amano Mikado, iluminando el podio en el que pronto se haría un gran anuncio. La gente conglomerada en las gradas, las cámaras de televisión atentas a cualquier señal, los comentaristas estaban en sus puestos. El suspenso llenaba el lugar mientras se proyectaban las estadísticas de los 2 aspirantes al codiciado puesto que se disputaba en ese momento…
Todo estaba listo para la llegada del nuevo Seitei.
-El nuevo director general del Sector V y ganador del puesto de Santo Emperador*…ENDO MAMORU!!!-
***
Nuevas reglas del torneo Holy Road
-Los equipos participantes serán evaluados (através de las letras A, B, C Y D) según su rendimiento durante el torneo
-Toda escuela esta obligada a participar
-Los equipos que no cumplan estas reglas, SERAN ELIMINADOS
***
-4, 5, 6… 600 yenes?.- en la cara del joven se formo una mueca de berrinche al ver la cantidad de dinero que le habían enviado para cubrir sus gastos personales.- ¿qué no entiende que esto no me alcanza para la semana?- el joven de cabello negro tomó la tarjeta que venía junto al sobre en el que se encontraba el dinero hace unos minutos y leyéndola- “Buena suerte, Yayoi”-Yayoi Hisakata
14 años
Estudiante
Segundo grado
Delantero del club de soccerAl día siguiente
[Secundaria Raimon]
-Hola, Yayoi-senpai!!-saludaba enérgico, como siempre, un chico bajito de cabellos café claro a la altura de la barbilla, cara redonda, tez morena y vivaces ojos rojizos que respondía al nombre de Kensuke Sangoku-Nishizono.
-Hola- saludo con desgano total Hisakata.
-¿Comemos juntos?- dijo el más bajo mostrando frente a su senpai una caja de obento.
-Bueno- afirmo el pelinegro sin ningún ánimo.
Era la hora del almuerzo en la Secundaria Raimon. Cientos de jóvenes se juntaban en salones, pasillos y patios a disfrutar de su almuerzo.
El pequeño castaño estaba sentado junto a su superior en las escaleras que daban acceso al campo de futbol de la escuela.
-¿Qué trajiste para comer, senpai?- el entusiasmado chiquillo le mostraba una caja de obento exquisitamente preparada- Este es el mío-
-Una manzana-respondió el aludido mostrándole la pequeña manzana que cargaba en su mano.
-¡¿UNA MANZANA?! … senpai, debes comer más… una manzana no basta… si comes tan poco te vas a enfermar… además…- decía un argumento tras otro el alarmado kohai*.
“Ya ha estas alturas… comer tan poco, es lo que menos me importa” pensaba Yayoi.
-¿Senpai?... ¿senpai?- suspiro Kensuke al darse cuenta de que su compañero no le prestaba atención alguna-¿Otra ves pensando en la inmortalidad del cangrejo, eh?-murmuro para si mismo el moreno mientras miraba a su superior.
Yayoi Hisakata era un joven alto y sumamente delgado (vamos, larguirucho para acortar), su piel pálida parecía de papel, su cabello era negro lacio y largo, recogido en una cola de caballo, con algunas puntas que se le rizaban y un mechón de cabello cubriendo su ojo derecho, dejando visible solo su ojo izquierdo, el cual era de un azul intenso. Además que la delicadeza de sus facciones le hacían ver como una chica.
Un joven peculiar por donde quiera que lo vieran.Hora del entrenamiento
[Club de futbol]
-Muy bien, pasemos lista.- decía el joven capitán y portero del equipo Shinpei Goukai; un chico de cabellos cenizos alborotados y se caracterizaba por llevar siempre una banda roja en la cabeza.- Jonathan.- leyendo el primer nombre en su lista.Shinpei Goukai
15 años
Tercer grado
Portero
-No está.- informó Hisakata.
-Bien, sigamos… Kensuke.-
-Aquí, capitán!!!- respondió el de primer año más entusiasmado de lo normal.Kensuke Sangoku-Nishizono
13 años
Primer grado
Defensa
-Ok… Shinpei, ósea yo… presente.- pronunció entre rizas el joven portero al autonombrarse.
“Pero que bobo”, opino mentalmente el chico pálido ante el chiste tan malo.
-Yayoi…-
-Acá.-contestó el susodicho.
Un ruido estruendoso se escuchó por todo el lugar. La puerta se abrió de golpe dejando entrar a un joven pelirrojo de cabello en puntas, peinado de lado, y unos profundos ojos verde jade. Por su rostro bajaban gotas de sudor y venían jadeando, parecía muy agitado.
-L-lo siento… llegó tarde.- se disculpó el chico cuyo nombre era Jonathan Hiiro.Jonathan “Jonathan Scarlet” Hiiro
15 años
Tercer grado
Defensa
El capitán Shinpei se paró frente a sus compañeros de equipo con rostro serio, los había reunido allí con el propósito de informarles algo importante. Tomó un pequeño control remoto en sus manos, oprimió un par de botones y, como por arte de magia, las luces se apagaron y la pantalla del club comenzó a mostrar imágenes de anteriores partidos ocurridos en el Holy Road.
-Como saben…cada año estamos obligados a participar en el Holy Road y la situación del club depende de lo bien que juguemos ahí. El nivel del club bajo del A al C desde que los de tercer año se graduaron el año pasado. Solo quedamos nosotros ahora y sino conseguimos más jugadores antes de que empiece…- cada palabra dicha por el guardametas se escuchaba como una sentencia de muerte para su adorado club.
-Nos eliminan.- sentenció Jonathan cuyo animo terminó por los suelos al recordar la delicada situación de su equipo.
-Entonces…sino lo conseguimos… ¿será el fin del Raimon?-ahora el desanimo general había contagiado también al diminuto pelicastaño.
***
Ese mismo día, los chicos se dirigieron a los distintos clubs del Raimon, a fin de conseguir fichajes para el equipo.
Pero no eran muy bien recibidos en los clubes a los que llegaban: los tenistas les lanzaban pelotas, los basketbolistas les tiraban balonazos a matar, los basebolistas les decían amablemente que no les interesaba y los atletas les perseguían para darles de patadas. El Soccer no era un deporte muy popular.
Ya sólo faltaba por visitar un club: arquería. El capitán fue elegido para hablar con los arqueros.
-Y por eso necesitamos que nos eches una mano…Minatsuki- explicaba calmado el guardametas a un niño moreno de parpados caídos y cabello grisáceo.
-Claro, no veo por que no.- contesto mientras asentía.- ¿Y cuando será el torneo?-
-Empieza el próximo martes.- El arquero se veía muy contento con el nuevo miembro obtenido.
-QUE!!!! Imposible… no puedo el torneo nacional de arquería es el viernes próximo.- Minatsuki tenía los ojos como platos.
-Pero podrías apoyarnos en dos juegos… ayúdanos, ya no te pediremos más. Nos harías un gran favor.- le imploraba Shinpei con cara de cachorro moribundo.
-Esta bien, pero después me iré a mi torneo.- una gigantesca gota de sudor frío bajo por la cara del peligris. Sus compañeros lo matarían si se enteraban que iba a ayudar al club de futbol.
Al oír eso, el chico de la banda roja salio a dar la buenas nuevas a sus compinches.Primer fichaje
Minatsuki Aoki
14 años
Segundo grado
Defensa
Ahora solo quedaba la opción de salir a buscar miembros entre las personas que no pertenecían a algún club. Pero eso sería otro día, las clases terminaron hace mucho por lo que los únicos alumnos en la escuela eran lo que estaban en un club. Mañana seguirán la búsqueda.
***
El receso comenzaba apenas ese día Martes y los miembros del club de soccer ya se encontraban haciendo de las suyas en los distintos salones del segundo piso.
Kensuke sabía que en ese lugar encontrarían a un chico que seguramente se les uniría, el hijo de unos viejos amigos de sus padres. Sin más todos se dirigieron al salón 2-A.
Al abrir la puerta se toparon con un joven bastante bien parecido: cabello lacio corto color vino con un fleco que caía sobre la parte izquierda de su fino rostro y unos ojos dorados que los miraban con desaprobación. Ese era Ran Kurama-Minamisawa.
Lentamente, los futbolistas le contaron de su situación, y no era para más eso, ya que la mirada de Minamisawa era, de verdad, intimidante.
Ran comenzó a tocar con sus dedos las gafas de sol que coronaban su cabeza, cuál corona a un príncipe, meditando. Era tentador unirse a ese club, sin embargo, no era tan buena idea tomando en cuenta lo impopular que era.
Meditó un poco más y la decisión fue tomada.
-Me uniré a su club.- la sonrisa orgullosa de Ran era la señal de aprobación que habían esperado los jugadores.
-¿EN SERIO? ¿De verdad quieres jugar?- preguntaron al unísono los futbolistas.
-¿Jugar? Nada de eso… si me uno será como MANAGER.- eso si que era una golpe bajo.
El pobre equipo quedó de piedra ante las palabras del chico, a excepción de Yayoi, quien se limitó a ver feo al muchacho.
-Esta bien… ¿Cuándo quieres empezar?- preguntó Jonathan desanimado, otra vez.
-Ahora mismo.- definitivamente algo pasaba con la mente de Ran.
-¿EEEEEEEHHHH?- los pobres jugadores de soccer no podían estar más boquiabiertos que en ese momento.
-Como me acaban de decir que estaban buscando jugadores, mi primera tarea como manager será conseguir esos jugadores para antes de que finalice el día.- tomó una pequeña libreta de su bolsillo y escribió en ella una pequeña nota.- Muy bien. Ahora los cuatro se van a separar y a buscar en todo la escuela fichajes… y el que no consiga nada para el final del día, tendrá que limpiar el edificio del club por una semana… AHORA LARGENSE!!!!- Ran podía ser realmente terrible como manager.Segundo fichaje
Ran Kurama-Minamisawa
14 años
Segundo grado
Manager
Los cuatro salieron disparados hacia distintas direcciones.
El capitán de la banda roja decidió volver a probar suerte con los de baseball, con quienes se llevaba muy bien.
Jonathan bajo al primer piso y salió al patio a buscar “presas”.
El pequeño Nishizono se quedó en primer piso y, con un cartel improvisado con cartulinas y un plumón, se paseo por los pasillos en espera de que apareciera algún interesado.
Hisakata pensó en terminar rápido con eso. Fue a los salones de primer año y, como Pedro por su casa, iba abriendo las puertas de trancazo y gritaba que el club de soccer estaba reclutando nuevos miembros. Una estrategia muy bien pensaba, de verdad.
-Bueno, nadie se interesó… que remedio pero así es… la juventud de ahora.- Yayoi no podía oírse más actuado. Sacó de su bolsillo una monedas brillantes y las guardó en su palma.- BIEN! Hora de comprarme un almuerzo decente.- sonrió.
Estaba por dirigirse a la cafetería cuando paró en seco.
-¿Dijiste “Futbol”?- era una vocecilla que apenas se oía pero aun así la escuchó…claramente
Dirigió su vista hacia el frente… topándose con un pequeño de aspecto inquietante.
Frente a él estaba parado, a una pequeña distancia, un niño delgado y bajo, su piel clara parecía porcelana, su cabello corto borgoña le hacia verse tierno. El chico lo miraba fijamente con sus grandes ojos azul zafiro.
-Escuche que… estabas buscando gente para… el club de futbol.- a pesar de su imagen misteriosa, no parecía ser más que un típico niño tímido.
-Sí… ¿te quieres unir?-el delantero no sabía por que… pero ese niño ya le caía un poco mal.
El chico miró sus pies un momento y luego miró al pelilargo:
-Sí.- no había por que decir más.
El de cabello largo extrajo de la chaqueta de su gakuran* una libreta, que siempre cargaba para cualquier urgencia:
-Ok… firma con tu sangre aquí.-malos chistes como sólo Hisakata los logra.
El chico sólo se llevó un dedo a su mentón, por lo visto no comprendía aquella broma.
-Era una broma…escribe tu nombre aquí y ya estas en el club.- era un momento incomodo sin lugar a dudas.
-S-sí…déjame buscar una pluma…debo tenerla aquí.-el apenado ojiazul buscaba en todos sus bolsillos una pluma que le sirviera.
Una mano protectora se poso sobre su cabeza y el jovencito miró a la persona a la que partencia: era un joven alto de piel bronceada, cabellos verde manzana con algunas mechas azules, cabello recogido en un solo rulo detrás de la cabeza, brillantes ojos grises y una sonrisa que irradiaba confianza.
-Yuu…-le llamó.
-¿Todo bien?-Yuu miró con algo de receso al futbolista.
-Sí… es que yo quiero entrar al equipo soccer y ese chico esta reclutando para ese club así que…-con su mano libre, el joven de pelo verde tapó con delicadeza la boca del más bajo.
-No se diga más… me uniré contigo a ese club.- dijo con ese tono confianza que tenía siempre.
-Esta bien…sólo anótense.- la gota de sudor que bajaba de la frente de Hisakata se notaba a simple vista, esos tipos además de incómodos eran algo irritantes.
-Lo bueno es que siempre traigo una pluma por si me piden mi autógrafo.- dicho y hecho, el chico de piel bronceada saco un bolígrafo y escribió los nombres de ambos en la libreta.Tercer fichaje
Kei
12 años
Segundo grado
Delantero
Cuarto fichaje
Yuu Danji
14 años
Segundo grado
Mediocampista
Hiiro se encontraba caminando de un lado a otro del patio del Raimon hostigando a todo aquel que se le pasaba por enfrente y recibiendo a cambio insultos, gritos y una que otro puñetazo.
La cosa no pintaba bien para el chico de cabellos de fuego: pronto terminaría el día y no tenia ni un solo fichaje para el club.
Nishizono asomaba su cabeza por cada puerta y cada ventana de cada salón del primer piso, y solo conseguía ser ignorado por completo.
Kensuke tomó en sus manos el diminuto cartel y lo arrugó por completo, la frustración era demasiado grande, por que los demás chicos no podían entender la situación de él y sus amigos.
Estaba por rendirse y tirar su improvisado cartel a la basura pero algo lo detuvo, recordó todo lo que había pasado junto al equipo de soccer, las tardes entrenando y todas las atenciones que recibía siempre de su capitán.
No iba a abandonar, no era correcto. Abrió de nuevo las cartulinas y las aliso para que se vieran bien y continuó su tarea.
El pobre de Hiiro no tenía más suerte, el último chico al que intento convencer le dio un puntapié en la espinilla y ahora estaba cojeando, intentaba acercarse a la puerta del colegio, pero en eso escuchó unos trotes apresurados detrás de él, como los de un caballo desbocado.
No supo como paso ni en que momento, lo único claro era que un mastodonte le había pasado en cima, dejándolo completamente fuera de combate. Eso era el colmo de colmos, como se atrevía a maltratar a alguien que, tranquilo y sin echar ninguna bronca, buscaba reclutas para su grupo. Y en un asombroso acto de coraje, el joven de ojos jade se levanto del suelo y se dispuso a vengar su honor.
Vio al tipo que hace poco lo pisoteó sentado en una banca cercana y sin muestras de temor alguno, camino hacia él, aún cojeando.
El “mastodonte” que lo derribó y pisoteó era un adolescente de su misma estatura, de complexión atlética y piel morena. Sus ojos miel mostraban rudeza. Su pelo verde azulado estaba mal cortado y alborotado como si fuera la melena de un animal salvaje
Y a diferencia del resto del alumnado, llevaba un tokkofuku* en vez de la chaqueta del uniforme, de seguro era uno de esos delincuentes juveniles.
Al estar lo suficientemente cerca, logró ver que el sujeto tenía en sus manos una bolsa de supermercado y de ella sacaba con delicadeza una caja de obento, entregándosela a un niño que estaba sentado al lado suyo.
El niño volteo y vio como el cojo se le acercaba.
-Oye, ¿estas bien?- su voz era amable y sin un solo rastro de malicia en ella.
Con escuchar esa voz, al de cabello rojo se le fueron inmediatamente las ganas de pelear con el otro.
-¿Necesitas algo?- ahora Jonathan y sus ojos jade estaban frente a los redondos y amables ojos del niño.
El chiquillo era notablemente más bajo y su aspecto aniñado contrastaba bastante con el de su acompañante. Su piel era blanca y sin rastro alguno de heridas o trabajo bajo el sol. Tenía unos enormes ojos color almendra. Llevaba un corte que lo hacía lucir como un niño pequeño y sus cabellos era de un tono entre castaño y rubio.
-Sí- estaba nervioso, el impacto que provocaba ese chiquillo era bastante.- ¿Quieren entrar al equipo de futbol?-
Jonathan les explicó a ambos la situación actual del equipo Raimon y lo que les pasaría sino conseguían jugadores antes del Holy Road.
-Y es por eso que necesito que entren.-dijo haciendo señal de suplica con las manos.
Los otros dos se miraron y después miraron a Jonathan.
-Entramos.- dijeron al mismo tiempo.
Hiiro no podía reaccionar, ya no sabía si estaba en la secundaria en un día normal o de plano había entrado a la dimensión desconocida. Dos chicos. Dos chicos habían aceptado entrar al club de futbol sin chistar ni un poco.
-¿E-es e-en serio?- la sorpresa era notable tanto en sus palabras como en su propia cara.
-Claro que es en serio. Lo que hacen con ustedes es una injusticia y nosotros no toleramos que traten así a la gente.- Respondió el peliazul haciendo una pose heroica y poniendo un puño firme junto a su pecho.
El chico de los ojos redondos asintió alegre, dándole la razón a su compañero.
-Y yo me uniré también para ver que no hagas algún desastre.- dijo con tono burlón.
-Hitomi! Era mi momento!!- los ojos del rebelde se había vuelto dos cascadas de lagrima mientras su camarada reía divertido. Esos dos eran un caso.
Unas lágrimas salieron de los ojos verdes del futbolista y acto seguido comenzó a reírse, estaba tan feliz que sería un crimen contenerlo.
-Muchas gracias.- Y dio una reverencia a los dos muchachos.Quinto fichaje
Hitomi Amai
13 años
Primer grado
Mediocampista
Sexto fichaje
Tessei Honnou
15 años
Segundo grado
Defensa
En otros lugares, en el primer piso-parte sur para ser más específicos, se encontraba deambulando Sangoku-Nishizono sin conseguir resultado alguno.
-Disculpen…estamos buscando…- era la última oportunidad, el 2-D era la única clase a lo que no había entrado.
-No nos interesa.- fue interrumpido por un chico que se encontraba junto a otros tres, quienes comenzaron a reírse burlones por la graciosaza dicha por su amigo.
-Oh, ya veo…gracias de todas maneras.- Los ojos del moreno se veía cansados y algo desalucinados, tanto esfuerzo y tanto animo que se dio a él mismo, reducidos a nada.
Se giro para salir por la puerta corrediza y comenzar su camino hacia el club. Se preguntaba si los otros habría conseguido algo, el supuesto castigo de Ran no le importaba en los más mínimo, sólo quería que el club de soccer volviera a ser como en la época de sus padres, como en la época de su antigua gloria
El sonido de unas suelas rechinando en el piso lo hizo voltearse y toparse con el recluta que tanto esperaba que se presentara.
Era un chico de aspecto débil, de piel clara, su cabello castaño rojizo estaba un poco ondulado en las puntas y llevaba un peinado bastante peculiar; corto con un fleco y dos rulitos cayéndole a los costados de la cara. Sus ojos eran turquesa y llevaba puestas unas gafas de lente bastante grueso.
El chaval se acercó con algo de nervios y dijo:
-Quiero unirme al club.- Sorprendente… a pesar de lo nervioso que se sentía, pudo pronunciar todo de corrido
-¿De verdad? ...quiero decir…claro que puedes…sólo preséntate en el club cuando se terminen tus clases.- decía asombrado el defensor. No era normal que alguien se apuntará a soccer de manera voluntaria.- Es bueno saber que todavía hay gente que le gusta el futbol.- una sonrisa se dibujo en la cara de Kensuke, iluminando su rostro.
*Deberías dejar de querer cambiar las cosas*
*Si tanto te gusta el futbol… pues juega y deja de estar soñando*
-Sí.- dijo sonriendo con algo de melancolía.Séptimo fichaje
Hayami Hayato
14 años
Segundo grado
MediocampistaHora del entrenamiento
Tanto los nuevos como los veteranos del club estaban reunidos en la sala de juntas.
[Club de futbol]
Todos, absolutamente todos, se miraban unos a otros con curiosidad. Los nuevos reclutas se miraban entre ellos y también a quienes los había fichado.
Yayoi no estaba muy cómodo ni muy satisfecho que digamos, ninguno de los fichajes parecía tener una buena condición física, exceptuando a Tessei. No podía apartar su mirada de los recientemente nombrados miembros del equipo Raimon. Simplemente, para él era como ver un freak show: un metrosexual engreído, un guaperas con aires de actor de Hollywood, un afeminado, dos shotas, un delincuente juvenil y un otaku.
-¿Y? ¿Qué están esperando? ¿Una invitación acaso?-el nuevo manager se levantó de su asiento y miró retadoramente a los otros miembros.- Salgan a jugar.-
-¿Jugar?- La sorpresa de los siete novatos se manifestó como enormes gotas de sudor que bajaban por su cabeza y ojos abiertos como dos platos.
La mirada del Ran pasó de reto a una de obvio disgusto.
-No me digan que se apuntaron al equipo de futbol sin saber jugar.-el tono en que Kurama hablaba mostraba cuan enfadado estaba.
-Esto…bueno… es que la verdad… se veía tan desesperados… no podía decir que no.-balbuceaban los fichados.
-Bien, entonces que el entrenador les enseñe a jugar mientras…-no puedo terminar antes de ser interrumpido por el capitán.
-Este…Ran…no tenemos entrenador.- ese si que era un momento incomodo.
-Bien.-el pelivioleta trataba con todas sus fuerzas de no perder la paciencia, y es que eso era inconcebible para alguien como él… ¿no le podía tocar un equipo más desorganizado?-Ustedes entrenen o hagan lo que quieran… tengo que hacer unas llamadas.- El tic en el ojo del manager era bastante evidente. Ya le tenía en su límite.
-Llamada…-una sonrisa maliciosa se formó en la cara de Hisakata.Día siguiente
[Club de futbol]
-Ah! Lo siento, chicos. Estuve toda la tarde y noche llamado a unos amigos de mi padre pero no he conseguido nada.-El manager tenía unas ojeras que ni con cien kilos de maquillaje lograrías disimularlas.
-No se preocupen por eso…ya mandaron a alguien.-finalizó el delantero de cabello azabache con una risita macabra.
El resto del equipo se alejó del larguirucho al escuchar esa tenebrosa risa.
-¿P-por q-qué dices e-eso?- dijo un tanto asustado el diminuto defensa pelimarrón.
-Je-je-je.-el chico peli largo comenzó a reírse como un loco.
-Flash back-
Al llegar a casa, luego del entrenamiento, lo primero que hizo el chico de cabello largo fue llamar por celular al hombre que le daba el dinero con el que se alimentaba y pagaba la renta del departamento donde se alojaba: su patrocinador.
-¿Bueno? ¿Quién llama?- contestaba la voz amable de un hombre adulto.
-¿Cómo que quien llama? Soy yo, Yayoi… o ya te olvidaste de mi.- de ese lado de la línea estaba el delantero de cabellos negros haciendo pucheros como un niño pequeño.
-Jajaja… perdona… es que he tenido mucho trabajo aquí, ya no se ni lo que hago.-le comentó entre risas.
-Ay, si!! Como sufre el señorito miembro de la liga profesional.-el tono burlesco de este hizo reírse al que estaba de otro lado de la línea.
-Bueno, ¿que necesitas? Me imagino que no me llamaste sólo para saber como estoy.-
-No como crees.-allí estaba el menor haciéndose el loco.- La verdad es que si necesito algo, no es para mí sino para mi equipo.-
Durante varios minutos, le relató a su protector la situación por la que pasaba el Raimon.
-Mira, te diré lo que vamos a hacer: conozco a alguien que aceptara gustoso ser tu entrenador y te prometo que mañana en la tarde lo tendrás en la escuela.- Fue la propuesta del jugador profesional.
-Esta bien… gracias…. Yuuichi.-
-No hay por que… suerte, Yayoi.- Fue lo último dicho por su tutor antes de colgar.
-Fin Flash Back-
-… y así es como conseguí un nuevo entrenador.-el delantero estaba bastante orgulloso de si mismo.
“No te des tantos aires” eso era lo pasaba por las cabezas del equipo entero al ver como Yayoi se daba el crédito por un esfuerzo que no hizo.
-Flash back-
Un teléfono sonaba dentro de la recamara de una acogedor apartamento de lujo. El propietario del departamento, al oír los timbrazos que pegaba el aparato, corrió a contestar la llamada.
-Sí, diga.- una voz cansada contesto por el auricular.
-Hola, Goenji-senpai.-saludó el mayor de los Tsurugi.
-Yuuichi!! Cuanto tiempo!!- Shuuya se escuchaba emocionado, y no era para menos, ya que el joven Tsurugi era su discípulo favorito.
-Si, ha pasado bastante tiempo… senpai, sabe que no me gusta incomodarlo pero necesito un favor.- con calma relató todo el asunto a su maestro.-... y por eso el Raimon necesita un entrenador urgente y no pude pensar en nadie mejor que usted para el puesto.-
-Yuuichi… NO SE DIGA MAS!!! AHORA MISMO PARTO A CIUDAD INAZUMA!!!- un arrebato como ese era extraño viniendo de Goenji.
-Gracias, senpai.- su plan había salido a la perfección.
-Fin Flash Back-
Unos pasos se escucharon detrás de los jóvenes que estaban reunidos en el club.
Lo primero que pasó por la puerta fueron unos finos zapatos deportivos de marca. Los chicos se quedaron mirando esos finos zapatos, que en su vida soñaría con comprárselos, para acto seguido voltear a ver al dueño de estos: era un hombre de treinta años aproximadamente, su piel era muy morena, su pelo era rubio; lo llevaba largo y atado en una cola caballo. Sus ojos negros brillaban por la emoción.
-Hola a todos. Soy Shuuya Goenji y a partir de ahora seré su entrenador.-dijo con una sonrisa en el rostro.
Todos se quedaron anonadados, era Shuuya Goenji… famoso futbolista retirado y once veces ganador del premio al mejor jugador de la liga. Con él de entrenador, estaba garantizado que Raimon no perdería.Esa misma tarde
[Aeropuerto de Ciudad Inazuma]
Un joven de cabellos platinados y una triste mirada bajaba del vuelo de Hokkaido a Inazuma.
Ya con sus maletas a mano, camino hacia la puerta principal del edificio.
Al salir, notó como una suave brisa lo rozaba, era una sensación agradable.
***
Del otro lado de la ciudad, el entrenador de Raimon también podía sentir la misma brisa en su rostro.
-Ahora…un nuevo viento sopla en Raimon.-
¿Que les pareció? ....¿Bueno, malo, regular?
Si quieres decirme algo...adelante, gente!!!
Asi que ya saben...........alagos, quejas, criticas, dudas, propuestas indecorosas, peticones de matrimonio... en los comentarios!!!!
nos vemos gente... se cuidan un chorro... se despide... la loca histerica de internet..... SAYA KISHIMOTO!!!!!
Edited by SAYA KISHIMOTO - 14/8/2012, 15:42
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hana_1234 .
User deleted
me encanto saya-chan ¿(puedo)?
espero k allá conty
bn matta ne. -
SAYA KISHIMOTO .
User deleted
OK... CONESTO A HANA-CHAN
Hola Hana-chan
Claro q me puedes decir como tu quieras
la conti.... POR SUPUESTO!!!!
SE SUBE NUEVO CAP CADA 14 DIAS PERO, LOS CAPS 2 Y 3 LOS SUBIRE ANTES XDDDDD
gracias por el coment Hana. -
hana_1234 .
User deleted
gracias esperare conty con ansias saya-chan 
. -
hana_1234 .
User deleted
bueno tu tienes tus motivos pero voy a estar muy triste 
a mi me gustan todos los fic k leo y esta no es la excepcion
espero k si continue la historia
tu eres mejor escritoria k yo yo apenas estoy escribiendo y no creo k lo suba nunca pork yo no me inspiro como todos los k escriben aqui
bn matta ne. -
hana_1234 .
User deleted
no saya-chan este fic no es mediocre
pero tu tienes tus motivos para no continuarlo
bn matta ne. -
SAYA KISHIMOTO+1 .
User deleted
Hola
Aca Saya la hipocrita... decidi si subir la continuación de este fic....
En fin ya lo saben.... ya advetencias de siempre: Violencia, Lenguaje vulgar, Mpreg.
Y mi tan odiado Glosario.
Ryuku: es la región donde se encuentra la isla de Okinawa.
Ryukense: que viene de Ryuku.
Uchina: otra forma de llamar Okinawa
Si ven una cosa entre asteriscos como *blablabla* es el pensamiento de un personaje
Ahora disfruten..... INAZUMA ELEVEN ANOTHER WORLD....... REABIERTO!!!!
PARA EL DELEITE DE HANA-CHAN Y EL SUFRIMIENTO DEL RESTO DE LA HUMANIDAD
Cap. 2 El chico venido de Uchina*
Ese era un gran día para el equipo Raimon, no había tenido el tan acostumbrado entrenamiento mañanero y esa misma tarde comenzaría a trabajar junto a su nuevo entrenador, el famoso “Goleador de fuego”.
Así es señores, nada podía arruinar el día de nuestros jóvenes amigos… de no ser por un pequeño detalle que todos ignoraban.
Eran ya las 2 de la tarde, las actividades extracurriculares apenas empezaban. Un muy contento equipo Raimon se dirigió a las instalaciones de su club, más que ansiosos por saber como sería Goenji como entrenador; acaso sería uno muy estricto o uno comprensivo y conciliador, les enseñaría ya sus técnicas especiales o tendría que seguir con lo básico…
PUES NI LO UNO NI LO OTRO!!!
El entrenamiento de la tarde resulto un desastre monumental. No sólo tenían el problema de enseñarles a los nuevos como se patea un balón sino que pareciera que Shuuya había olvidado que estaba entrenando niños de secundaria, no un equipo profesional de la liga.
-Tú! Conecta un pase con el delantero pero debes hacerlo desde el aire, si alguien te derriba mientras lo pasas perderías tu oportunidad.- decía (casi a gritos) señalando a Hayami.
-P-pero yo soy nuevo… apenas s-se patear e-esta cosa.- Hayato nunca se habría apuntado a ese grupo si hubiera sabido que le tocaría un ser entrenado por un futbolmaniaco de lo más atemorizante.
-¿De verdad? Perdona, es que me emociono tanto que ya ni se lo que hago.-se sentía muy tonto en esos momentos… pero esa era la triste verdad.
La realidad es que Goenji Shuuya no sólo había sido un jugador estrella en su época sino que también desconocía todo sobre el manejo de un equipo de futbol. Tardó únicamente 2 segundos para aceptar la propuesta de Tsurugi y solo le tomo esa tarde darse cuenta que tal ves debió pensarlo un poco mejor. Los únicos a los que había entrenado eran los hermanos Tsurugi pero ellos eran solo dos, ahora tenía que lidiar con 10 niños. ¿En que estaba pensando?... sólo una cosa sabía con certeza… que ahora era el entrenador de Raimon… y que lo estaba haciendo pésimo.Esa misma tarde
[En otro lugar de ciudad Inazuma]
Un hombre de 36 años, alto y delgado, de cabellos platinados y una tez pálida miraba con tristeza a través del ventanal de un conocido restaurante. Esperaba a un viejo amigo.
-Hola, Fubuki… ¿cuánto tiempo ha pasado, no?- por estar hundido en sus pensamientos, Shirou no se percató de la presencia de Yuuto Kido.- Lamento la espera pero estaba en una junta y no me dejaban salir.-
-No hay problema.- sonrío sin mucho entusiasmo.
Los dos amigos estuvieron por un largo rato hablando de los asuntos más triviales que rondaban sus vidas: trabajo, familia, si tenían noticias de los otros miembros de Raimon 11, y una larga lista de cosas más. Y a pesar de que saber de los amigos siempre es interesante y agradable, la verdadera razón de esa reunión era otra.
-Fubuki, ¿sabes que las cosas en el futbol juvenil no están muy bien que digamos, verdad?-esa era la verdadera razón de la cita.
-Si, y también sé que eso es gracias a Endo.-era difícil de creer pero así eran las cosas.
-Muchas cosas en el Sector V cambiaron con la llegada de Endo… me gustaría decir que hizo cosas buenas pero sólo continuo lo que Senguuji Yamato dejo a medias.- la indignación llenaba por completo su aura, el saberse traicionado por el que fue su amigo y compañero de equipo, le hacía rabiar.
-¿Están formando un nuevo frente?… ¿como hace 12 años?-no podía ser otra cosa que uno de los planes hechos por Yuuto y compañía, no tenia nada contra sus ideas pero si ya la primera lucha no funcionó… ¿por que debería luchar de nuevo?
-Sí.-asintió discretamente con la cabeza el ahora dueño de la compañía Kido.-Te necesitamos, necesitamos a todos.-si formaban un grupo lo suficientemente numeroso, el Sector V no tendría manera de ignorarlos.
Parpadeo un par de veces. Vino de Hokkaido a pesar de que ya sospechaba la razón por la que el estratega le llamó tan urgentemente, pero no le pareció educado rechazar la invitación. Era su amigo, no quería decirle que no pero tampoco podía unirse a su “frente” así como así… el Fifth Sector ya no era lo de antes, ahora tenía más fuerza y poder, burlarlo no sería tan fácil como hace doce años.
-Déjame pensarlo, por favor.- tenia la mirada baja, quería ocultar su rostro de la mirada de su antiguo camarada.
-Adelante, y no te sientas obligado por mí, si vas ayudar que sea por que así lo deseas y no por compromiso.-allí estaba el viejo y comprensivo Yuuto Kido.
-Sí.-En un lugar muy lejano de allí… en Inazuma
[Departamento de Goenji Shuuya]
Shuuya no podía ni con su propia alma. Fueron casi dos horas de estar corriendo tras los chicos para que estos atendieran sus indicaciones. Ahora entraría en su departamento, se tiraría sobre su cama a ver televisión y se olvidaría de ese terrible día.
-Goenji-Kandoku!!*-era Yuu corriendo tras él, agitando algo que llevaba en la mano.
-Dime.-
-Se le olvido el móvil.- enseñándole el teléfono celular que llevaba en su mano.
Danji le pasó el teléfono y este lo tomó.
-Bueno, eso es todo…nos vemos mañana.- canturreó el jovenzuelo haciendo un saludo militar.-y no te preocupes por lo de hoy, entrenador…las cosas se pondrán peor.- y con una sonrisa en los labios se marchó de allí.
El ex seitei sintió un escalofrío recorrerle la espalda, era una mala señal.
***
Era el primer entrenamiento y de nuevo el caos reinaba en el campo de juego.
Ran veía a sus compañeros haciendo lo que les daba su regalada gana en el campo: Hayami trataba de controlar el balón sin ningún resultado, Tessei corría de un lado a otro para no ser golpeado por Hitomi, Minatsuki estaba en medio del campo mirando para todas direcciones, Shinpei en la portería donde parecía que era complemente ignorado por el resto, Kensuke hacía dominadas y de vez en cuando fallaba por voltear a ver a su capitán, Kei le daba pases a Yuu y este se los devolvía con gentileza, Jonathan seguía tirado boca abajo (tal vez desmayado) junto a la meta y Yayoi los miraba inmóvil desde el otro extremo del campo…haciendo nada.
Eso ponía al manager en su limite, cada quien hacia su voluntad pero mínimo hacían algo (a excepción de Hiiro, quien si estaba inconsciente)… no como el idiota pelinegro parado al otro extremo de la cancha haciendo nada.
… y el entrenador que no se dignaba a aparecer.
-POR QUE NO TE DIGNAS A HACER ALGO!!!!!!- ese grito probablemente lo escucharon hasta en las Islas Malvinas.
-No.- y no había forma de cambiar su opinión.
Ese día no parecía que fuera a mejorar, así que el atacante se retiro del campo y se encamino hasta los vestidores, sin importarle los gritos histéricos de su manejador.
***
“¿Será que las cosas van a salir bien con este nuevo entrenador?”, la duda asaltaba la mente del azabache desde el momento en que vio pasar al goleador de fuego por las puertas del club.
Si el chico se hacia tantas preguntas era por que la clase era de lo más aburrida, sólo pensando en cosas como “¿por qué el pan cae siempre del lado de la mantequilla?” es como podía distraer su mente y evitar quedarse dormido.
-Ehem, ehem…silencio, por favor-el profesor calló a los estudiantes.
Se escuchó el sonido de la puerta del salón abriéndose y tras ella apareció un individuo.
Un extraño joven estaba de pie frente a ellos. Su piel clara tenia un tono medio grisáceo. Era menudo y algo bajo. Su pelo era de un azul espectro, además que parecía que se lo había cortado el mismo. Sus ojos eran marrón fuerte, tirando a rojo, y estos era medio cubiertos por un casco azul, lleno de stickers, que llevaba puesto sobre su cabeza.
-Él es el nuevo alumno transferido, Shiryou Heiishino.- anunció el profesor.-Se traslado aquí desde Okinawa, es nuevo en la ciudad así que ayúdenlo en todo lo que necesite.-
-Un gusto conocerlos.- dijo el de Ryukyu* haciendo una reverencia frente a todo el grupo.
Los murmullos y el chismerio empezaron a oírse entre los alumnos, en especial entre las niñas:
-Que chico tan raro.- dijo una de voz chillona.
-¿Por que usara casco?- preguntó burlona una vocecilla molesta en un extremo del salón.
El maestro golpeo fuerte su escritorio con la palma.
-Silencio, señores. Ustedes saben que yo no permito estas muestras de indisciplina en mi clase.- el educador miró a su alrededor, buscando algo.- Muy bien… te sentaras al fondo, al lado de Hisakata.-sentenció el profesor.
El susodicho hizo una mueca de disgusto pero aceptó su destino y dejó que el recién llegado tomara asiento junto a su banco.
-Sigamos, todos abran su libro.-
Shiryou levantó la mano.
-Profesor, yo no tengo el libro todavía.-canturreó el muchacho.
-Pues tendrás que compartir libro con Hisakata. Junten mesas.-
Esa era mala noticia para el de cabellos negros, no le gustaba la idea de tener que sentarse a sólo milímetros de otra persona y tener que estar los dos pegados leyendo un libro tan aburrido como todos los de segundo grado. Pero así es la vida, que se le puede hacer.
Fue sacado de sus pensamientos al sentir un escritorio chocar contra el suyo, era su nuevo compañero, quien alegre se acomodo a su lado. De mala gana, Hisakata abrió su libro y se lo extendió, dejando caer por accidente una revista que traía escondida dentro de sus cuadernos. Justo antes de que cayera al piso, el forastero alcanzó a agarrarla.
Yayoi se quedó inmóvil viendo como el ryukyuense examinaba su revista. Por su parte, su compañero de asiento estaba fascinado: era la Soccer Match #3000 con un reportaje especial sobre futbolistas japoneses jugando en equipos europeos y con su ídolo Kariya Masaki en portada.
-¿A ti también te gusta el futbol?- ¿qué era eso de “también”? ¿quería decir que era fanático del deporte rey como él?
-Sí, mucho.-
Los dos pasaron largo rato hablando de cosas como sus equipos favoritos, discutiendo quien era el mejor novato de la Liga Juvenil y largo etcétera. Heiishino parecía tener un nuevo amigo:
-Por cierto, no sé tu nombre.-
-Yayoi Hisakata.- pronunció con un leve sonrojo.
-Es un bonito nombre. Y-a-y-o-i-casi le susurraba en la oreja el okinawense.
El chico aparentemente frió e indiferente llamado Yayoi Hisakata estaba en una situación peligrosa, estaba súper nervioso y apenado. En su mente sólo quería gritarle al chico nuevo cosas como “cállate” o “no me digas lindo”, pero prefirió quedarse callado y hacerse el ofendido, no podía darse el lujo de bajar la guardia, menos con un extraño al que acababa de conocer.
Shiryou dobló su brazo y recargó su rostro sobre este, mirando a su vecino con fascinación.
-¿Qué?- haciendo cara de puchero.
-Nada -dijo con una expresión picara en su rostro.
Yayoi se volteo al frente, algo incomodó. Ese chico era muy extraño…pero le agradaba…mucho.
***
El entrenador Goenji estaba sentando en la salita del club de soccer revisando algo en su ordenador.
La puerta se abrió con lentitud, dejando pasar a alguien. El intruso caminó en silencio hacia el lugar donde se encontraba el distraído rubio.
-Oiga!-Goenji casi se cae del sillón por el susto. Respiro y volteó a ver al escandaloso que lo distrajo de sus asuntos.
-Dime.-girándose para ver al peculiar chico que estaba detrás; usaba un casco y tenía un aura rara alrededor.
-¿Es este el club de futbol?-preguntó canturreando su inoportunito invitado.
-Sí.- que sujeto tan extraño. Tal vez era un alumno de nuevo ingresó que anda de fisgón a ver en que club se queda.
-Quiero unirme.-la firmeza con la que dijo aquello lo impresiono.
-Muy bien. Estas dentro.- pensándolo bien, era un chiquillo simpático.
***
-Otro día, otra lucha.-Shuuya recordaba perfectamente por que le gustaba esa frase; era por el chico de lindos ojos grises que se le había dicho hace tantos años.
El equipo por su parte se encontraba haciendo el calentamiento de rutina y Ran veía que todos hubiesen venido. Ya estaba listo para ese día.
Y pensar que ese viernes había empezado terrible para el instructor: se levantó tarde y se le paso la practica matutina, sobra decir que no tenia nada de comida en la nevera y pasó casi una hora buscando un restaurante “decente” y que fue casi aplastado por una multitud en el metro, pero ahora nada eso parecía tan malo. Cada día sería una lucha y el estaba dispuesto a luchar.
Minamisawa sacó su confiable libreta de los bolsillos de su pantalón y prosiguió a tomar las asistencias:
-Jonathan Hiiro.-
-QUE NO ES “HIIRO”… ES “SCARLET”.-gritaba fúrico el veterano, odiaba que todos olvidaran que prefería usar el nombre “Scarlet” en ves de su apellido japonés.
-Aquí pone “Hiiro”, y así voy a nombrarte ¿quedo claro?- lo retó el bello gerente.
-Nop.- Scarlet se abalanzó sobre el sorprendido manager mientras los otros miraban la escena sin saber que hacer.
Por suerte, la verdaderas intenciones del cabellos de fuego no era lastimar al niño bonito, sino simplemente arrebatarle su libreta y su pluma para tachar el nombre “Hiiro” y poner su tan amado “Scarlet”.
-Listo, ya puedes empezar a llamarme Jonathan Scarlet.- devolviéndole el cuaderno.
-Así que te gusta que te llamen por Scarlet… bonito nombre.-dijo entre risas Danji.
-Gracias.- Sonrió orgulloso el pelirrojo.
-Voy a matarte.- Kurama ya estaba haciendo sus rabietas.
Afortunadamente, el pleito de niños chiquitos fue detenido por el sonido del silbato del entrenador.
-VENGAN TODOS!- llamó.-Les presentó a su nuevo compañero.-señalando a quien estaba a su lado.
-Hola, soy Shiryou Heiishino, es un gusto.- Se presentó el joven uchinanchu*.
-¿TÚ?!!- lanzó Yayoi a los cuatro vientos. No era posible…ese sujeto lo estaba siguiendo…o, pensándolo bien, le gustaba el soccer, tenía lógica que se uniera al equipo entonces…era oficial, se estaba volviendo paranoico.
-Ah, hola. No sabía que estabas en futbol.- el de casco se veía muy feliz por saber que estaría junto a su nuevo “amigo” (o al menos así lo consideraba él).
“Que genial. Ahora podré conocerlo más.” una leve pero inquietante risita salió de los labios del ryukense, cosa que llamó mucho la atención de cierto pelilargo.
“Loco.” Era el primer calificativo que se le ocurrió para el comportamiento de su peculiar nuevo compañero.
Uno a uno los integrantes del Raimon Eleven fueron acercándose al nuevo para saludarlo y darle la bienvenida entre risas y expresiones de amabilidad, no obstante fueron interrumpidos por el gerente pelivioláceo.
-Basta de presentaciones y comiencen a practicar antes de que los ponga a limpiar el club por un mes.- intervino irritado.
-H-hai.-todos corrieron al campo sólo con ver la furia que se asomaba por los ojos del manager.
“Que gente tan interesante” se dijo internamente el peliceleste.
-Que sujeto tan raro.-definitivamente ese tipo le llamaba mucho la atención.Octavo fichaje
Shiryou Heiishino
14 años
Segundo año
Mediocampista
Llevaban 35 minutos de acondicionamiento físico y el grupo entero ya estaba que se moría, todo gracias al plan de trabajo: 20 vueltas a la cancha, 50 flexiones y 60 abdominales. Los chicos no estaban acostumbrados a realizar esa cantidad de ejercicio, lo más obvio era que a los pocos minutos no podrían ni con sus propios huesos.
-Oiga, entrenador… ¿Por qué nos pone a hacer esto? ¿No deberíamos mejor practicar los tiros y las técnicas especiales?-se quejo el rebelde de Tessei.
-¿Técnicas especiales? ¿Tiros?... ¿CREES QUE PODRAS HACER UN HISSATSU SI NISIQUIERA AGUANTAS UNAS ABDOMINALES?-podía sonar duro pero era necesario presionar a los muchachos-Sólo nos quedan tres días antes del Holy Road. Sigan con el entrenamiento.-
***
Las luces de los arbotantes se prendían una por una. Empezaba a anochecer en Ciudad Inazuma y las personas regresaban a sus casas después de un largo día de actividades. Los miembros del equipo de soccer tomaron camino de regresó a sus hogares, todos menos cierto chico de pelo largo que se encontraba tirando balones a la portería.
-Sólo 3 días.-pronuncio entre dientes el atacante pateando el esférico en dirección a la meta.
El balón salió disparado hacia la red pero fue interceptado por una figura bastante familiar. El extraño tomó la bola entre sus manos y se dirigió con ella ha donde estaba el goleador.
-Hola.-la figura se acercó hacia él y pudo ver de quien se trataba, Shiryou.
-Hola.-de todas las personas que se pasaban por la zona en ese momento, tenía que toparse con el niñato anormal que no lo dejaba en paz.- ¿Qué haces aquí?-
-No es obvio, te veía entrenar.-ver a alguien entrenando no tenia nada de malo pero si hacia que quedara como un bicho raro a los ojos del delantero.-Y parece que tiras muy mal.-
-¿QUEEEEEEE?- no sólo le bastaba acosarlo, ahora también se metía con sus habilidades.
El de casco le lanzó la pelota mientras el se situaba en la portería, ¿Qué pretendía ese chico?
-Tirá.-ordenó.
-¿QUEEEEEE?-su cara de sorpresa era total.
-Quiero probar tu tiro, así que hazlo.- estaba muy seguro de lo que hacia y lo que deseaba lograr con eso.
-Como quieras.- miro el esférico que estaba en el suelo, respiro hondo y pateó el balón tan fuerte como pudo.
El tiro se dirigía con velocidad hacia el rostro el okinawense, en cualquier momento lo golpearía y entonces se lamentaría de haber tenido semejante idea.
El chico pálido sólo miraba como el forastero estaba parado tras la meta sin mover ni un músculo.
Hubo un sonido de choque. El centrocampista había logrado detener su disparo con una sola mano.
-Tira otra vez pero con más fuerza.-aconsejo el improvisado portero regresándole la pelota.-Adelante…parare todos tus tiros!!-Mientras tanto…en otro lugar
[Centro de la ciudad Inazuma]
Goenji caminaba sin tener ningún destino en específico, lo único que querría era caminar un rato y sentir el frescor de la noche. Estaba distraído mirando locales, cuando lo vio a lo lejos…el príncipe de los campos de nieve, Shirou Fubuki.
Sin más, corrió hacia su antiguo compañero de equipo:
-Fubuki!! Fubuki!!- gritaba desde el otro extremo de la calle.
El norteño escucho esa voz tan familiar llamándolo y se detuvo en el acto, se giró hacia donde provenían los gritos, llevándose la sorpresa de su vida: su viejo amigo y su más grande amor, Shuuya Goenji.
Corrieron uno hacia el otro. Al estar frente a frente, intercambiaron saludos y bromas, era un momento sumamente feliz para los dos hombres. Casi sentían que el corazón se les salía del pecho por la emoción.
-¿Qué haces aquí?-los ojos negros del antes delantero aun no creía lo que pasaba en ese momento; estaban juntos en el mismo lugar, a la misma hora. ¿Seria un golpe de suerte o el destino?
-Comprar mi cena.-mostrándole una bolsa de convini* que llevaba consigo. Esa había sido una respuesta tonta.
-No, me refería a que haces aquí en Inazuma.- corrigió rascándose la nuca.
-Ah, lo siento. Pues viene por unos asuntos personales.-se disculpo notablemente avergonzado. La primera vez que ve a su amigo y tenia que salir con una tontería.- ¿Y tú?-
-Yo estoy trabajando como entrenador en la escuela Raimon.-no quería demostrarlo pero estar junto al chico mata-osos lo ponía en extremo nervioso.
Siguieron hablando un largo rato, caminando por las iluminadas calles de la ciudad hasta que llegaron a ese lugar: La Torre Inazuma. La zona esta oscura, no como el resto de la ciudad que estaba bañada en luz.
Continuaron el paso hasta las bancas que se encontraban en el mirador de la torre. Todo parecía tan calmo, no como el ajetreo de la vida citadina que ambos llevaban en sus respectivos hogares.
-Todo esta tan tranquilo.-soltó sin pensar el chico del norte.
-Sí, es un paraíso.-lo miró esperando que le dijera algo más.-No es como la ciudad, que es muy ruidosa.-pero eso no era un paraíso solo por la quietud, también lo era por tener a su amor secreto junto a él.
El albino miro de reojo a su acompañante, quien al notar su mirada sobre él, le dedicó una amable sonrisa. Se sonrojo un poco y con vergüenza agacho su cabeza y pidiendo por que no se diera cuenta de su bochorno.
Una suave brisa comenzó a soplar a través de la plaza.
Los cabellos platinados de su amado eran suavemente mecidos por el viento que golpeaba su cara. Shuuya estaba simplemente extasiado por aquella visión, no recordaba otra ocasión en que el príncipe de hielo luciera tan bello.
Extendió su mano con timidez intentando tocar los finos cabellos de su “ángel de nieve”. Quería atrapar entre sus manos esos mechones grisáceos. Quería tocarlos con sus dedos.
PIIIIIIIIIIIIIIIII~!!!!
Fue frenado justo a tiempo por la alarma de su reloj digital de mano, de haber tocado a su amado de esa manera y tan de repente, hubiera conseguido muchos problemas con Fubuki y este seguramente se alejaría de el por desconfianza o miedo.
En un movimiento rápido, retiro su mano y se giro para mirar la pantalla del reloj. Eran ya las 9:40 de la noche…se le había hecho tarde!
Sentía que se lo llevaba el diablo. ¿Cómo rayos se le pudo haber olvidado? Esa misma noche era la fiesta pre-inauguración del Holy Road, tenia que estar allí para confirmar la participación del equipo y conocer los detalles del torneo de ese año.
Después de su facepalm mental, se levantó de la banca para sorpresa de su querido amigo.
-Tengo que irme, disculpa, pero ¿podemos vernos de nuevo, no?-Lo que más deseaba en es momento era un simple “si, esta bien”.
-Lo siento, mañana regresare a Hokkaido.- eso fue como echarle en cima un cubo de agua fría a nuestro enamorado. ¿Hokkaido? ¿Mañana? eso no era posible! Por fin se habían encontrado después de todos esos años y ese mismo día tenía que volver a separarse.
-Ya veo, entonces esta es la despedida.-Tomo la mano de antiguo delantero y la estrechó con una fuerza que parecía como sino quisiera soltarla.-Estoy seguro de que nos veremos de nuevo. Mucha suerte, Fubuki.-y finalmente le soltó.
El chico de piel blanca sintió esos dedos abandonarle. No quería que Goenji se fuera, quería tenerlo junto a él por más tiempo…pero dejarle ir era lo correcto, ¿o no lo era?
-Si, nos veremos de seguro. Cuídate. Mucha suerte.-mientras se empezaba a alejar él.-Por cierto, ¿A dónde vas?- se atrevió a preguntar, le provocaba curiosidad la razón de su apuro.
-A un evento del Sector V. Raimon va a entrar al Holy Road y yo soy su entrenador.-Dijo alzando un poco la voz para que le alcanzase a oír.
Fubuki quedó un momento en shock. Holy Road… ¿cómo? ¿En que momento accedió a participar en ese juego sucio del Fifth Sector?
-Nos vemos, Fubuki.-Se despidió haciendo un gesto con su mano y agarró camino.
El miedo surgió en el pecho del hombre. Nunca se había asustado tanto desde la muerte de su familia. Ese era un temor que le hacia sentir paralizado, lo conocía bien. Se sentía impotente, justo como aquella vez. Sólo una cosa recordaba…las palabras de un amigo…
*Si amas algo, tiene que protegerlo, con ambas manos*
-Endo…-sus ojos gris azulado se ensombrecieron al recordar a la persona que las había dicho. Era tan irónico, el hombre que ahora les hacia sufrir antes había sido el chico que tantas veces les animo a salir adelante.
Se abrazó a si mismo y acto seguido se incorporó. Había tomado una decisión… proteger a lo que más amaba en el mundo…protegería a Goenji… aun que le costase todo lo que tenia… aun que le costase la vida misma.
***
Los reflectores apuntaban a lo alto del edificio donde se llevaba a cabo el mayor evento del año: La Fiesta Pre-inaugural del Torneo Holy Road.
Goenji se abría paso entre los demás invitados para estar lo más cerca posible del podio. Una vez ya lo suficientemente cerca, observó como una proyección holográfica comenzaba a reproducirse. Simplemente no daba crédito de lo que estaba viendo: era el actual Seitei, Endo Mamoru, hablando frente al público, con una sonrisa enorme, moviéndose y hablando como si estuviera presente en la sala.
-…Bienvenidos sean al Holy Road. Vayan y jueguen junto a sus equipos! LUCHEN POR LA VICTORIA!!!-se despido el holograma de Endo cerrando el puño y colocándolo junto a su pecho.
En cuestión de segundos la proyección desapareció por completo, los asistentes del evento aplaudían el espectáculo.
-Tsk.-fue el sonido que salió de los labios del entrenador de Raimon. Eso era un fastidio, todos aplaudiendo y vitoreando a un gran farsante. Que bola de borregos.
Apenas vio a un mesero pasar cerca de él, pidió un vodka. El alcohol de seguro lograría quitarle las ganas de tener a Mamoru frente suyo para agarrarlo a trancazos. Ya con el vodka en mano, se lo bebió de un trago.
-Oye, calmado ¿o quieres acabar bien pedo?-Era una voz altanera y burlona, sólo conocía a una persona con una voz como esa.
-¿Kogure?-
-Mucho sin verte, colega.-En efecto, se trataba del geniecillo burlón que se unió al Raimon 22 años atrás.
-¿Tú que haces en esta fiesta?-
-Soy el entrenador del equipo del Instituto Manyuuji y viene por lo mismo que tú-
-Bien por ti.- en definitiva estaba muy apagado esa noche.
-¿Y tú?-
-Yo soy el entrenador del Raimon.-
-Vaya, pues, buena suerte.-¿qué había querido decir con ese “Buena suerte”? ¿se estaba burlando acaso?…siendo Kogure, lo más seguro.
El escenario frente a ellos se volvió a iluminar, dejando ver como una pantalla gigantesca bajaba del techo.
-Atención, invitados. Es hora de dar el rol de los primeros partidos.-se escuchaba a través de los altavoces.- Veamos quienes tendrá el honor del primer encuentro.-
¿Honor del primer encuentro? La verdad es que a nadie le gusta ser el primero.
La pantalla mostró a los dos retadores del primer encuentro del torneo:
-Y los dos primeros contrincantes son: la escuela Raimon y el instituto Manyuuji.-
“Joder.” Maldijo en su mente Shuuya, les tenía que tocar ser los primeros. El destino era un maldito hijo de perra.
-Vaya, parece que desearte suerte no sirvió de mucho.- dándole unas palmadas en la espalda.-Luchen con todo.-le susurró con una sonrisa cómplice.
-No necesitas decirlo, Kogure.- replicó el antiguo miembro del Raimon 11.
***
-¿Bueno?- era la voz cansada de un hombre la que contestaba.
-¿Hiroto? Soy Fudo.- el punk le estaba llamando desde una cabina telefónica cercana al parque.
-Fudo, ¿qué necesitas?-
-Necesito ver a Kido.-se estaba tragando su orgullo enterito diciendo eso.
-Y quieres que yo te lleve con él.- bufó Kira através del teléfono.
-No me contesta llamada ni mensajes, y cuando voy a verle no me abre la puerta.- Ese maldito niño rico haciéndose el chípil, no era el único que había sufrido tras la separación.
-Ve a verme mañana a mi oficina, te llevare con Kido.-eso era muy repentino pero si era la única manera de volver a ver a su chico de ojos rojos, lo aceptaba.
-De acuerdo. Nos vemos. Gracias por todo.- colgó el auricular y salió de la cabina a toda prisa.
*¿Cómo hubiera sido nuestra vida juntos, Fudo?*
-Mejor que esto, seguro.-Soltó en un suspiro.-Voy a reparar la tontería que hice y tendrás que regresar conmigo, Yuuto.-
Weno... ese fue el cap 2....espero q te haya gustado hana-chan....lo q quieras decir o opinar o quejarte.... en lo comentarios... si? porfaaa
Sayooooooo~!!!!!
Edited by SAYA KISHIMOTO - 16/6/2012, 15:32. -
hana_1234 .
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gracias saya-chan por continuarlo
lo siento tengo mucha prisa
espero conty
bn matta ne. -
SAYA KISHIMOTO .
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XDDDD.... hoya problema Hana-chan!!! 
aca te dejo el cap 2 ya completo.... es q el internet me estaba trolleando solo me subia la mitad del capitulo... si no lo has leido o si ya lo leiste pero no completo... adelante
Y espera conti
BYEEEE!!!
. -
Sarah_Casguel .
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kjwksjaksjakjs al Fin Puedo comentar!!!! .____. wn no se que paso contigo hija mia!!!! ;-; me tenias preocupada
espero no me odies por haberte dejado sola estos dias ;-; GOMENE!!! y...
JONATHAN!! CSM!!!! KYAAAA ME AMO WN ME AMO (?) oKO NOO xdDDDDDDD pero entre nos sabemos a que me refierooo~ wkajskajskajskajskajskajs
habersh que mas... no se po!.... ewé hemmmmm...... HAAAAA si ya sabes que me gusta mucho el fic po!!!! que mas quieres que te diga!!! ... TE AMO!!! como Hija claro esta
wkjaskjas <3
Continuación y que salga es sexy yo... digo... Jonathan xDDD. -
SAYA KISHIMOTO .
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KYAAAAAAAAAAAHHHHHHHHH!!!!!! 
MUCHAS GRACIAS, MADRE!!!!
que weno qte guste jonathan XDDDDD
y ya se viene el cap 3.... asi q preparate
prometo esforzarmeeee!!!!!
GANBARE JONATHAN!!!!!
. -
hana_1234 .
User deleted
claro esperare con ansias conty
matta ne. -
Miche-Kirkland+1 .
User deleted
Holi, aquí yo de nuevo X´D... Sorry por la demora, pero estaba cenando .__.
Okei comencemos...
Bueno, me gustó el capítulo, mi parte favorita fue cuando llegó Shiryou a Raimon xd creo que fue
un gran aporte para el capítulo...
La personalidad de Goenji... pues... puede ser más sexy... X´D
Fubuki es muy tierno *.* es un osito...
Sigo perdiéndome con los personajes .__. se me olvida quien es quien xd pero eso es un detalle...
Bueno, yo ya te lo dije, simplemente relajate que las ideas llegan solas... escribe cuando te nazca, y no cuando te sientas presionada, así, las cosas funcionan y salen bonitas.
Bueno, suerte con el siguiente capítulo, lo espero, y ánimo que tú puedes!~
Miche.Kirkland~. -
SAYA KISHIMOTO .
User deleted
Holis
aca Saya acutualizaando al fin el fic...se q no tengo excusas pero la verdad ando pasandeo por un mal rato...si les da curiosidad, estoy llendo con una psciologa, por un problema q implica obsesión por la limpiza ..JAJAJA
Nota: en este cap hay FUDOXKIDOU... Y LAS PARTES QUE ESTAN ENTRE * SON COMO UN PENSAMIENTO...ESWTA BIEN...AH! Y SON PARTES DE LAS CHARACTER SONG DE AMBOS PERSONAJES.... TODO EL CREDITO DE LA TRADUCCIÓPN ES PARA Lalichan94...visitenla en youtube
en fin, se han de imaginar que no ando en las mejores cndiciones para escribir así que esta capitulo será el único que tendre que dividir en 2 partes......asi que aca ñes va la primera parte del tercer capitulo ni INAZUMA ELEVEN : ANOTHER WORLD....talves la proxima parte tarde un poco mas...y esta parte será muy corta...en fin
ACA LES VA
INAZUMA ELEVEN ANOTHER WORLD...CAPITULO 3 PARTE 1
Y SI SE PUEDE...QUE NOS PONGAMOS MAS EN CONTACTO ..JEJJE....NECESITO AMIGUIS CON QUIENES HABLAR...PUUU
Y OTRA COSA ANTES....HANA-CHAN, hija mia, necesito que me mandes un correo lo antes posible...ya que *TANTAN!!!!* VOY A DAR UN REGALO POR LA ESPERA DEL CAPITULO TRES!!!!
MICHE, NICOLE ...EL REGALO YA ESTA EN SUS CORREOS...DISFRUTEN!!!!
HANA-CHAN MANDAME UN CORREO A [email protected] para darte tu regalito...si???
ADVERTENCIA: NO ES MI MEJOR CAP HASTA LA FECHA PERO NO SE DESEPEREN ESTE SÓLO ES UN CAPITULO TRANSITORIO..PESIMA EXCUSA, LO SE..PERO EN FIN.
em fin ahora, y den gracias por ello, no hay glosario.... asi que disfruten
Cap. 3 El trío fabuloso de Tengawara.
Los parpados de Kensuke comenzaban abrirse muy lentamente.
Sentía su cabeza rara y su cuerpo my pesado. Cuando abrió los ojos por completo, se percató de donde estaba: el Hospital General.
Se sentó y pasó su mirada por toda la habitación, sus compañeros estaban allí también.
-Pásame la laptop, no seas malo.-pedía un chico de pelo verde, cuyo hermosa tez estaba cubierta por curitas.
-Ni hablar.-la platica vía chat entre Yayoi y su padrino estaba de lo más interesante.
-Estoy hecho una ruina.- con 8 lesiones en brazos y piernas, Scarlet era el segundo más dañado.
-CALLENSE QUE NO DEJAN VER LA TELE!-a Ran lo que menos le preocupaba eran las quejas de esos pobres miserables.
-¿Y el capitán?-por que preguntar por los otros 9 miembros, si lo único que le importaba era el portero.
Todos en la sala señalaron la última cama del fondo junto a la ventana. Todavía medio atontado, el diminuto defensa saltaba de una cama otra para llegar hasta allá.
Cuando estaba por pasarse a la cama de Goukai, Hitomi lo detuvo.
-No te acerques mucho, déjalo dormir. Esta algo delicado ahora.-
Miró a su adorado capitán. El estado en el que estaba era horrible: acostado de lado, con las muñecas vendadas y una cicatriz que atravesaba toda su espalda. Estaba todo golpeado.
-Pero… ¿cómo…?-miraba horrorizado el estado en que se encontraba el senpai.
-¿No te acuerdas? Fue cuando te salvó.- ahora podía recordar, fue durante el encuentro.
Claro, por supuesto, ¿cómo se le puedo haber olvidado?
-Flashback-
Era el minuto 30 de la contienda entre el Raimon y Manyuuji. El equipo estaba acabado, ya ninguno de los jugadores daba para más.
No era ningún secreto que sus contrincantes siempre derrotaban a los otros equipos con suma facilidad pero, a ojos de cualquiera, eso era más bien una masacre.
Nishizono junto a su líder eran los únicos que luchaban por mantenerse en pie. Estaba a unos metros de la portería cuando vio un enorme tornado dirigirse hacia él. Se trataba de un hissatsu de viento.
No puedo evitar ser tragado por el torbellino y comenzar a girar sin control dentro de este. Se sentía mareado y no podía escuchar los gritos desesperados de su superior.
No sabía que hacer, el remolino avanzaba y su kohai aun estaba dando vueltas adentro. Exasperado, se lanzó hacia el ciclón. Que se jodiera el encuentro, tenía que salvarlo como fuera.
En el interior, logró encontrar a su compañero y lo tomó entre sus brazos.
-Te tengo.-
El guardameta no supo más de sí. La técnica había arrastrado a ambos hasta la meta, haciendo que chocarán contra el poste superior. Kensuke salió con un leve golpe en la cabeza pero Shinpei recibió el impacto de lleno, quedando inconcientes.
-Fin flashback-
Kensuke miraba al suelo con ceño fruncido y apretando los dientes. Quería golpear el televisor, explotar el televisor, quemarlo…dejarlo inservible. Salió corriendo del cuarto. Quería estar solo.
***
Un deportivo azul corría por las calles de Inazuma. Dentro de él se encontraban dos hombres, uno conduciendo y otro de ellos llevaba los ojos cerrados.
-Hiroto, exactamente, ¿por qué tengo que cerrar los ojos todo el camino?- Fudo se sentía un idiota haciendo eso, pero tenia que obedecer a Kira si quería llegar hasta Yuuto.
-Ordenes de Kido.- si, era de esperarse.
-¿Cuánto más me tengo que quedar así?-
-Tranquilo, llegaremos en un segundo.- maldito “chico googles”, aun separado de él, le hacia participar en sus locas ideas.
***
-Y entonces él corrió hacia mi, se lanzó dentro de la técnica y me tomó en sus…-el pequeño Nishizono estaba oprimido por la pena que sentía.
-QUE ROMANTICO!!- chilló un niñito rubio de ojos claros sentado juntó a él.
-Eh?! NO DIGAS ESO, SORA!!!- su rostro se volvió rojo de vergüenza.
-Je je je, cálmate, nii-san-Sora Sata-Amemiya
Edad: 9 años
Cuarto de primaria
-Es que…todo es mi culpa…yo tengo la culpa…si yo no…senpai no estaría…- ya no quería recordar nada del accidente, aún así, no dejaba de pensar en eso.
-Tranquilo, tranquilo. No fue tu culpa, fue un accidente.- Sora le sobaba la espalda para tratar de calmarlo.
-Pero es que…yo no soporto verlo así!- Todo era su culpa.
-¿Lo quieres?-
-¿Qué?- no lo había oído decir eso ¿cierto?
-Que si te gusta, nii-san.- a veces los mayores eran tan exasperantes.
-Yo…yo…- tartamudeó, se sentía avergonzado.
-Estás enamorado.- Sora sonrió enternecido por la reacción de su “hermano mayor”.
-Es que…eso ya lo sabía.- No quería admitirlo. Prefería ignorar sus sentimientos y seguir siendo buenos compañeros…pero su corazón reclamaba más que esa simple amistad.
***
-Adelante.- habían llegado al fin.
La luz incandescente del cuarto molestaba bastante para los ojos de Hiroto, quien tenía que entrecerrarlos para que no le fastidiase la vista. Fudo apenas podía vislumbrar breves rastros de luz a través de la tela.
-Ya basta, Hiroto. ¿A qué viene tanto secretismo ahora?- ya le daban ganas de quitarse la venda el mismo.
-Como ya te dije, ordenes de Kido. No querrás ponerlo de malas.- “Yuuto Kido”, con oír eso el punk era capaz de obedecer hasta la regla más idiota.
-Por aquí.- retiró el pedazo de tela.-Ya puedes abrir los ojos.-
***
Kido caminaba a paso apresurado por el pasillo metálico que daba hacia su “guarida secreta”, esta vez acompañado por su amigo de cabellos albinos, que recientemente había decidido quedarse en la ciudad.
-Buenas noticias, Fubuki se nos uni…- las palabras se le atoraron en la garganta al ver quien estaba allí.
-Hola.- los ojos grises de Akio brillaron, como volviendo a la vida.
Sentado junto a él estaba el ahora dueño de empresas Kira. Shirou , por su parte, estaba de piedra. Después de lo sucedido hace 7 años, que esos dos se toparan así…era como una señal del Apocalipsis.
-Cuanto tiempo…- una lágrima salió por el ojo derecho del estratega.
-Flash Back-
Hace 7 años…
-Eres la razón de mi alegría. Siempre estarás en mi corazón… aún que no quieras- se lo dijo, no le importaba quedar como un tonto y ser humillado por el chico del mowhawk en el proceso. Después de tanto tormento, depuse de tanto imaginarse la peor de las situaciones…se había confesado a Akio Fudo.
Hace 2 años…
Era un día como cualquiera en la oficina. Los ojos rojos de Kidou destellaban de emoción. Hoy sería el día.
*Siempre…*
2 semanas antes…
-¿Te quedas conmigo?- la sonrisa bobalicona que tenía lo decía todo, eso era la felicidad.
-Depende de cuanto sea eso.- con una mano sostenía el rostro de su chico de ojos rojizos y con la otra acariciaba su melena castaña.
-¿Y si es para siempre?-
*…únicamente…*
*…para el que permanece pensando en mi*
*Siempre y cuando estés aquí, conocerás esta felicidad*
*El futuro que yo elija no tendrá ninguna tristeza*
*Definitivamente, de manera angustiante, voy a enseñarte como es*
*Sin problemas, te enseñare, que soy perfecto en este juego*
-Estoy harto!!!- la mano de Fudo tiro un recipiente de cristal al suelo, rompiéndolo.
*Me hace enojar, cada cosa*
Me hace hervir cualquier pequeña maldita cosa que tu viejo y tus supuestos amigos dicen sobre mi.
¿Qué putas les importa?
Yo no estoy contigo por tu dinero.
Poco me importa tu reputación.
Por que estaría contigo si no fuera por que eres el hombre ideal para mí.
Pero… tu también piensas lo mismo que ellos…lo veo en tus ojos.
*Eso es lo que tú piensas, eh?*
“Pobre Fudo, estando junto a un hombre al que nunca lograr alcanzar. Pobre Fudo, busca poder, no amor”.
*Estas pensando que soy de segunda clase*
-Me voy de aquí.- la maleta estaba hecha. Ya no había tiempo más que para despedirse.
-¿Cómo hubiera sido nuestra vida juntos, Fudo?- las lagrimas brotaban de los ojos carmín de su ahora expareja.
Fui un entupido. No quería darme la vuelta y dejarte llorando sólo en la entrada de la casa…pero lo hice…sólo quiero volver a ver tus ojos y ver tu sonrisa cuando me veas.
YIIIIIIIIIII!!!! YA SE!!! SALIO SUPER CORTO!!!!
soy la peor!!!! ...total...esperemos que salga ya de mi problemilla y poder finalizar el cap....estamos??? ok.
hana-chan, te encargo el correo si?..porfassss
eso es todo cuidanse...se porta bien... si se portan mal me avisan para acoplarme a la fiesta yo tambien..jajaja....disfruten su regalo...comenten, critiquen, mandenme a comnprar limones...lo q quieran poner..es bienvenido...se cuidan y nos estamos viendo...byeeeeee
Edited by SAYA KISHIMOTO - 5/9/2012, 13:52. -
Miche-Kirkland .
User deleted
;__; Yo... yo... me siento tan miserable... ok'no X'DD lloré weón, lloré... me ha encantado el pasado de Kidou y Fudou, sin duda alguna, creo que fue la mejor parte del capítulo. Por otro lado, Kensuke es un amorsh *--* es una cosita apretujable y estirable(?) jkasjdlaskd me gusto mucho el capítulo, de hecho, creo que es al mejor hasta ahora, adoré la parte cuando el capitán salva a Kensuke, un detalle muy romántico <3 ¿Será que pasará algo entre ellos? 1313 X'D -Pone cara de pervertida-
Siento no haberlo leído antes, pero mi situación en la escuela no es la mejor xd pero en fin... ¡Necesito el otro cap! no me dejes con la intriga !!!!!! X'DDD estúpido y sexi de Kidou...
Espero que estés mejor de tu ya sabes qué... intentaré estar conectada el mayor tiempo que me sea posible para hablar con tú y saber cómo ha andado todo... y en cuanto al correo ya lo resiví y los dibujos te han kedado muy tierno... seguiré insistiendo. Kensuke es un amor... X'D
Bueno ese fue mi aporte, espero que estés bien y subas en cuanto te sea posible el otro cap. Por otro lado, ya casí es el aniversario de Ninshin así que sería buena idea que te pasaras por el fic...
¡Nos vemos!!
Att: Miche Kirkland..
Inazuma Eleven: Another World(OCxOC)(GoenjixFubuki,EndoxKazemaru,etc) CAP 3 SUBIDOSi la historia de Inazuma Eleven Go fuera cambiada,como afectaria el futuro?Endo es el enemigo?Holy Road se convierte en reality sho |
