Persianas - Sessh x Inu (Finalizado)

" Todo es según el cristal con que se mira " reza el conocido refrán. Pero... ¿ Y si lo miramos a través de las persianas, como atrevidos observadores ? Entrando en el íntimo mundo de alguie

« Older   Newer »
 
  Share  
.
  1. Hoshi no Hikari
        +1   -1
     
    .

    User deleted


    Aclaraciones del capitulo:

    ¡ Saludos a tod@s !

    Para todos mis queridos lectores que quieren saber que pasará en mi ff, les dejo la continuación.
    ¿ Quién le manda a Inu ser tan guapo y apetecible ?

    ¡ Ya ven, los admiradores lo persiguen ! (Lo siento por sus admiradoras, pero aquí, puros chicos pueden competir por él ) T_T

    Aunque no me parece que a él le cause mucha gracia… ¡ Ah, pero ahí está de curioso mirando a través de las persianas !
    Pero mejor léanlo por ustedes mismos. :)




    Capítulo 4

    “Obstáculos ”








    Lunes por la mañana, es inevitable sentir cierta pesadez al retomar la rutina diaria, al menos lo es para muchos después de un agradable fin de semana, pero no así para Inuyasha, quien aunque disfrutó los días de descanso aún a pesar de lo inusuales que hayan resultado, pues el siempre ha sido alguien sumamente responsable y entusiasta cuando de emprender algo se trata y más ahora que está realmente motivado con su “nueva vida” y su nuevo trabajo. Después de todo ama lo que hace, disfruta sobremanera su profesión y además está dispuesto a poner todo su empeño en ir logrando todas y cada una de sus metas que se ha trazado.

    Cuando dobla a la esquina para dirigirse al acceso del enorme edificio de Industrias no Taisho ve pasar a su lado un auto que enseguida disminuye la marcha, evidentemente para esperarlo…

    - ¡ Buen día Inuyasha ! – es la amable voz de Naraku que lo saluda tomándolo por sorpresa

    - ¡ Emmmh … buen día Naraku Sa… ! – saluda sin lograr terminar la frase, tratando a la vez de parecer calmado.

    - ¡ Sólo Naraku, recuerda ! de verdad deseo ser muy buen amigo tuyo - lo interrumpe el conductor del auto sin apartar la carmesí mirada del diseñador .


    Byakuya viaja a su lado, observa todo en silencio, con un sordo dolor interno que solo él conoce.


    - Ssí…claro Naraku – responde Inuyasha aparentando que no pasa nada, tratando de hacer caso ésta vez a la alarma interna que ya tiene rato sonando en su interior emprendiendo la retirada, se agacha para dirigirse a Byakuya a través de la ventanilla.

    - ¡ Te veo en la oficina Byaku ! debemos apurarnos con el diseño de la campaña para el lanzamiento de los productos de cerámica en la Ciudad de México, será la entrada de Industrias No Taisho a Latinoamérica - dice tratando de llevar la atención hacia otro sitio.

    - Te alcanzo enseguida Inu – la voz de Byakuya suena tímida.


    Sin esperar más, apresura el paso para ingresar cuanto antes a las oficinas, dejando atrás ese auto que se dirige entonces hacia el estacionamiento.


    - ¡ Vaya con el cachorrito asustado ! realmente es una presa muy tentadora – exclama Naraku al seguir con su penetrante mirada a Inuyasha mientras se aleja.


    Mientras estaciona el auto le dice a su hermano, quien precavido guarda silencio, no puede negar que la personalidad de Naraku siempre lo ha intimidado un poco.


    - No olvides lo que te he encargado Byakuya, debes investigar quién es el tal Kouga y qué clase se relación tiene con Inuyasha… ¡ Amigos, sí cómo no ! en base a eso será el siguiente movimiento a realizar –


    Al notar que Byakuya no le responde, además de permanecer con la vista baja, le dice con voz más enérgica y engañosamente amable:


    - ¿ Has entendido “ hermanito ”? - al decir esto levanta su mano y roza suavemente el rostro de su hermano menor , deslizándola lentamente por su mejilla, haciendo surgir un rosado color en ese delicado rostro - tal vez pueda “ recompensarte ” por ello Byaku – asoma ahora una retorcida sonrisa cínica en el atractivo rostro enmarcado por aquellos negros y largos rizos.

    - Entiendo- responde el delgado chico con un leve estremecimiento, esa es una oferta que no puede rechazar. Él hará lo que sea por darle gusto a su hermano y si además de ello también obtiene algo más… ¡ Bien vale la pena para él ! – veré que puedo averiguar, pero después de esto deberás de incluir un sustancioso aumento, ¿ne? - dice Byaku tomando su chamarra, baja del auto y se marcha a su trabajo y a cumplir su cometido.





    ----------------------------------------------------------







    - ¿Habla en serio Sesshoumaru Sama ? ¿De verdad planea hacer esto hoy? – preguntan sus colaboradores más cercanos del alto millonario, sus rostros lucen entre sorprendidos y preocupados.


    El imponente hombre los observa fijamente denotando molestia, prácticamente los traspasa con la mirada.


    - ¿Desde cuándo se cuestionan mis decisiones? ¿Acaso acostumbro bromear ? – su grave voz se deja escuchar en esa oficina, a pesar de que no eleva el volumen, ésta resuena imponente por el lugar.

    - ¡ No señor, desde luego que no, le ruego nos disculpe ! – dice el hombre de mediana edad a nombre de los que se encuentran en ese momento con Sesshoumaru Sama, al tiempo que todos hacen una respetuosa inclinación a modo de disculpa.



    Aunque después de todo, no sea muy común por parte de su jefe lo que acaba de comunicarles, pues él es muy dado a seguir cierto orden y protocolos con los asuntos del trabajo, sin embargo también es cierto que siempre acostumbra hacer las cosas a su manera obteniendo lo que desea sin réplica alguna.

    Lo que Sesshoumaru ha decidido hacer ahora, es un recorrido sorpresa por ciertas áreas de las oficinas de la empresa, algo nada común en él, pues acostumbra moverse casi por completo en el amplio nivel que ocupa su oficina y la sala de consejo, es decir el área de mayor rango de todo el lugar, así que lo que pretende hacer es del todo inusual. Siempre ha dejado que sus subordinados se encarguen de todo lo referente a cada sección de la enorme empresa, así que hay lugares que jamás ha visitado.

    Ha decidido, tomando por sorpresa a sus allegados, que desea visitar y observar la actividad de uno de los departamentos más alejados y por decirlo así más aislados de la empresa, a pesar de la repercusión que llega a tener su trabajo en todas las áreas, el cual no es otro que el departamento de Diseño, Mercadotecnia y Publicidad.

    A el personal que labora ahí se le ve en ocasiones de forma extraña, “son raros” dicen algunos y como sucede en muchas ocasiones, la gente dedicada a la labor creativa y con un cierto grado de sensibilidad artística no siempre es comprendida del todo.
    No es difícil de entender el asombro mostrado ahora por los empleados de Sesshoumaru, aún si ellos saben que no cambiará de opinión. Además piensa realizarlo hoy sin previo aviso y solo acompañado de su secretaria y por si fuera poco les ha ordenado que no revelen su identidad.


    - Estaré por aquel departamento después del almuerzo- exclama tajante, tras lo cual todos asienten y al poco rato se retiran de la lujosa y amplia oficina.





    -----------------------------------------------------------







    Inuyasha camina con rumbo al comedor- cafetería acompañado por Byakuya hace rato que dio inicio la hora del receso para almorzar.


    - ¡ Me muero de hambre ! pero era importante entregar todo lo relacionado con esa campaña, teníamos la fecha de entrega encima – dice Inuyasha poniendo sus manos sobre su estómago, mientras caminan por los corredores.

    - En realidad yo pensaba que no lo lograríamos, pues a pesar de haber comenzado a trabajar en ella desde antes de tu llegada parecía que no avanzábamos, de no ser por ti, me parece que no hubiera estado a tiempo…¡ Eres bastante bueno en esto! – dice Byakuya sincero, pues a pesar de todo le está tomando aprecio a Inuyasha en el corto tiempo que llevan de conocerse.

    - ¡ Oh vamos no exageres, tú no te quedas atrás ! mejor vayamos a ver que hay para comer hoy, afortunadamente la comida aquí es bastante buena – dice Inuyasha relamiéndose al observar todo lo que se exhibe en las vitrinas.

    - En realidad ha mejorado bastante últimamente, no era mala, pero ahora es mejor, he escuchado rumores de que acaban de contratar a un nuevo chef encargado del comedor de nuestra área, es muy joven pero también muy bueno, según creo eso nos beneficiará. – responde Byakuya paciente, aún cuando lo único que espera ahora, es el momento para abordar el tema del que desea hablar con Inuyasha.



    Cuando ya se encuentran sentados a una de las mesas, contemplan satisfechos sus alimentos, Byakuya por cierto asombrado por la cantidad que ha ordenado Inuyasha quien sumamente contento exclama:


    - ¡ Pues esto luce y huele muy bien ! –

    - ¡ Sí que ha habido un cambio bastante notorio, es casi como comida de restaurant de lujo a un precio preferencial ! . Parece que al fin se han dado cuenta de la importancia de nuestro departamento en la empresa- comenta entusiasmado Byakuya que saborea un buen plato de tallarines con vegetales y camarones.


    La comida transcurre entre una ligera plática, bromas y risas, pero han comido rápido debido al enorme apetito que ya tenían, así que cuando terminan aún falta un poco para que vuelvan al trabajo, por lo cual se quedan un rato más charlando ante una excelente taza de té.


    - Y dime Inuyasha ¿ Qué te parece Tokio ? – pregunta Byakuya recargándose cómodamente en el respaldo de su silla.

    - Pues hasta el momento todo luce muy bien, es después de todo una ciudad imponente, no deja de sorprenderlo a uno, pareciera que me toparé con una sorpresa a la vuelta de la esquina – “ Sí, sobre todo con el atrevido de tu hermano y mi extraño vecino “ piensa Inuyasha distraído.

    - ¿ Y acerca del trabajo ?-

    - Pienso que éste es un lugar bastante agradable para trabajar y estoy más que satisfecho hasta el momento, sobre todo por estar rodeado de los mejores diseñadores de Japón, puedo aprender muchísimo y hay muy buenas expectativas para desarrollarse a nivel personal. Además tomando en cuenta que estoy casi recién egresado de la universidad, pienso que ha sido una excelente oportunidad el entrar a laborar aquí. Sin duda me parece un muy buen cambio en mi vida- responde Inuyasha convencido de que debe secar el mayor provecho de todo, dando así mismo su mayor esfuerzo.

    - Pues tú ya eres bastante bueno, profesionalmente hablando , eres alguien muy creativo y capaz. -

    - Aún hay mucho que aprender y mucho que dar, es un error el pensar que ya se sabe todo, pues pienso que en ése momento se deja de aprender y aprovechar la inmensidad de cosas que podríamos tener incluso al alcance de la mano. Además, debo decirte también que es bueno contar con nuevos amigos por aquí, como tú Byakuya, ya no me siento tan solo en ésta ajena ciudad. –


    Byakuya ve la oportunidad que esperaba y decide no dejarla ir.


    - Pero, Inuyasha… según pude darme cuenta el otro día, tú no estás por completo solo aquí en Tokio, pues está aquel chico con el que estabas aquella tarde en ese café, Kouga me parece que se llama, después de todo lo conoces de hace tiempo ¿ No es así ? –

    - Nos conocimos al ingresar en la universidad y desde entonces somos buenos amigos, de hecho el labora por fuera para Industrias no Taisho –

    - ¡ Ya decía yo que lo había visto antes ! aunque no he tratado con él, me parecía conocido de algún lado. –



    Ahora le brillan con sagacidad los ojos a Byakuya, así que no espera más para salir de dudas:


    - Pues se nota que ustedes dos son… “ muy buenos amigos” ¿ Ne Inuyasha? - le dice recalcando esas últimas palabras.

    - Emmh, sí… eso “ buenos amigos” - exclama confundido por un momento Inuyasha por la manera en que lo ha dicho Byakuya.

    - ¡ Lo siento Inu ! pero lo pude notar por la manera en que te miraba y tú le sostenías la mano. Deben… quererse mucho – la expresión de Byakuya muestra una sonrisa maliciosa.

    - ¿ Cómo dices? ¡¡ No espera Byaku !! – “Maldito Kouga , todo por sus ideas raras” - ¡ No es como tú piensas! -

    - ¡ Oh lo siento, no sabía que no lo aceptabas abiertamente, lamento haberme inmiscuido en tus asuntos personales ! – le dice Byakuya falsamente apenado.

    - ¡ Oye Byakuya, no sé qué estás pensando o que idea equivocada te has formado de mí ! pero no es cómo crees- se apresura a replicar el peli blanco – Kouga y yo no somos… -

    - ¿ Homosexuales? –

    - ¡ Pareja ! –


    Ambos han hablado casi al unísono, se miran un instante y sueltan a reír, rompiendo el bochornoso momento.


    - ¡ Perdóname Inuyasha, es que yo creí que…! –

    - ¿Qué soy homosexual y pareja de mi amigo Kouga? ¿ Es eso? – los dorados ojos del chico lucen húmedos a causa de la risa.

    - ¡ Pues sí, justo eso! No puedo negar que lo pensé al verlos así, ahí sentados –

    - ¡¡ Baaaka !! ¡ Pues ahora sabes que no es así !, aunque creo que será mejor aclararte las cosas ! – dice Inuyasha moviendo la cabeza convencido de que es lo mejor si desea dejar bien en claro su posición, sobre todo para el hermano mayor de Byakuya.- Verás, lo que sucede es que… -



    En poco tiempo ya le ha platicado la situación con su amigo, después de todo, según se lo ha dicho el mismo Kouga, su homosexualidad es algo que no tiene interés en ocultar, así como deja bien claro que él no tiene el más mínimo interés en su amigo ni en nadie más, tratándose de un hombre desde luego.


    - Es decir que Kouga es homosexual, pero tú no y aún así él quería ser más que un amigo para ti y tú solo lo rechazaste tratando de no herir sus sentimientos…¿ Entendí bien ?-

    - ¡ Correcto ! él es una excelente persona y un muy buen amigo, pero no hay nada más entre él y yo… ¡ Ni lo habrá ! no al menos como tú lo habías pensado- concluye Inuyasha sintiéndose más tranquilo al haber aclarado todo.

    - Te agradezco la confianza Inuyasha, seré discreto en nombre de la sincera amistad que ha surgido entre nosotros .–

    - ¡ Gracias Byakuya ! ahora será mejor volver al trabajo pues tenemos mucho por delante todavía. – Inuyasha ya se está poniendo de pie mientras mira la hora en su reloj.



    Cuando abordan el elevador y éste ya cierra las puertas, son alcanzados por alguien que mete un brazo y una pierna entre las puertas impidiendo que éstas cierren, es el encargado del departamento de adquisiciones, aquel joven con bellos ojos azules y oscuros cabellos atados en una pequeña coleta.


    - ¡ Esperen, yo también subo ! – grita al tiempo de que apresurado logra entrar al elevador.

    - ¡ Miroku, que sorpresa ! – dice Byakuya de forma amable.

    - ¡ Hola Byaku ! ¡Hola…Inuyasha! ¿Ese es tu nombre verdad? – saluda sonriendo el recién llegado.

    - ¡ Ese mismo ! – responde a su vez el aludido.

    - Y…¿ qué me cuentas, ya no te pierdes?-

    - No, ya no - exclama riendo Inuyasha – además tengo ahora a un excelente guía del lugar – dice al tiempo que voltea a ver a Byakuya y posa suavemente su mano en el hombro de éste.- Inuyasha vuelve su mirada a Miroku y entrecerrando los ojos le dice:

    - Por cierto ahora que te encuentro… ¿ Tú estás a cargo del departamento de Adquisiciones no es así ? –

    - Sí , así es… oye… ¡ Un momento ! ¿No estarás pensando ya tan pronto en solicitarme algo ?-

    - ¡ Vaya, veo que nos comenzamos a entender! – le dice de forma maliciosa Inuyasha.

    - Pues te advierto que mi lista de espera es larga… aunque dime... ¿ Qué necesitas? - pregunta Miroku picado por la curiosidad

    - No mucho en realidad, estaba pensando en que a nuestro departamento le vendrían bien unas mesas de luz, nos ayudarían mucho para ciertos trabajos, así como un mayor surtido de pinceles ingleses de todas las series, pelo natural y sintético y también unas… y unos... y... - le dicta una larga lista de materiales con los que no cuentan ahora y luego añade -¡ Ah… ¡ y una nueva lámpara para mi mesa de dibujo – dice como si nada Inuyasha con la sonrisa en la boca y ante el asombro de Byakuya.

    - ¿Algo más Inuyasha ? ¿ No se te ofrece un cafecito o un pastelito?-

    - Bueno, si no es mucho pedir – dice Inuyasha sonriendo burlón.

    - ¿ Hablas en serio? – pregunta Miroku al notar que el chico no se retracta de lo que ha dicho.

    - Estoy hablando en serio, realmente nos hacen falta esas cosas, aunque si gustas, el café y el pastel me lo puedes invitar después. –

    - Bueno, en ese caso veré que puedo hacer, habla con tu jefe de sección y me hacen llegar el pedido de forma oficial, una vez hecho eso espero poder cumplir sus peticiones … a no muy largo plazo –

    - Tú dime qué hacer, si necesito hablar con el mismísimo dueño, lo haré sin duda alguna –

    - ¿ Bromeas? ¿Hablar con No Taisho Sama ?- con decirte que ni yo he hablado nunca con él, es más ni lo conozco. Dicen que es una persona bastante misteriosa y que pocas, muy pocas veces se deja ver por ahí, así que…¡ Mejor canaliza las cosas con tu jefe y luego conmigo y deja de soñar. – le dice ya más serio Miroku.



    Cuando llegan al piso que han solicitado, bajan todos, pero Miroku parece apurado, pero se apresura aún más cuando ve a un grupo de guapas chicas que van por el pasillo con rumbo a alguna oficina.


    - Los veré luego y más valdría que se apresuren, pues hay rumores de una visita sorpresa por parte de un alto ejecutivo de la compañía por ésta sección, se supone que es un secreto, así que como comprenderán no todos están enterados – mientras se aleja exclama sonriente:

    - ¡ Disculpen señoritas ! ¿ Podrían ayudarme ? –

    - ¡ Ese Miroku, no cambiará nunca ! ¡ Mujeriego como siempre ! - dice Byakuya divertido, luego voleando a ver a Inuyasha le pregunta:

    - ¿ De verdad pedirás lo que le has dicho a Miroku? –

    - Sí, eso pienso hacer, lo necesitamos ya –

    - Pues espero que sepas esperar – dice irónico Byakuya.

    - ¡ Hola Inuyasha, qué tal Byakuya ! – una suave voz los saluda.


    Cuando se giran, Inuyasha ha reconocido ya ésa voz y no piensa permanecer ahí por más tiempo.


    - ¡ Buen día Naraku ! – lo saluda cortes - Byaku, me adelantaré pues ya escuchaste a Miroku… ¡ Hasta pronto Naraku ! – alejándose enseguida.

    - ¡Espera Inuyasha, me voy contigo! – le replica el delgado chico, decidido a seguirlo, pero no sin cruzar algunas palabras apresuradas con su hermano.

    - Ya tengo lo que querías Naraku –

    - Dímelo entonces –

    - No hay tiempo, parece que alguien vendrá por aquí hoy, según sé alguien importante y debo apresurarme, además prefiero que
    hablemos más tarde en casa…solos –

    - Comprendo, entonces nos veremos después – responde seco Naraku, resignado a esperar.



    Ambos hermanos se separan tomando cada quien el camino hacia sus respectivas obligaciones.


    Inuyasha ya se encuentra en su mesa de trabajo, quiere terminar hoy mismo el proyecto que está haciendo, así que no desea distraerse con nada y está metido de lleno en su computadora.
    Muy cerca de él, en la mesa contigua, Byakuya trabaja de igual forma, aunque en su mente desea que el día acabe pronto para reunirse con su hermano y comprobar si amerita aquello que éste le ha prometido.

    Los últimos toques están siendo dados a el diseño que desarrolla Inuyasha, está observando bastante satisfecho su trabajo casi terminado cuando escucha la apagada exclamación por parte de su amigo en la mesa cercana.


    - ¿ Pero qué rayos hace él aquí ?- su tono de voz deja traslucir la enorme molestia que siente.

    - ¡ Vamos Byakuya, no hagas corajes o te hará daño la deliciosa comida que hemos tenido !- le dice Inuyasha en son de burla sin levantar la vista de la pantalla que tiene enfrente, él es así dedicado en su trabajo y cuando se lo propone nada puede distraerlo, de modo que no le da demasiada importancia a lo que ha escuchado.

    - Eso es lo de menos Inuyasha, es que esto es por completo fuera de lo común- murmura el delgado diseñador.

    - Solo permíteme un momento y veré a que te refieres…solo…un poco más… un detalle más… ¡ Listo ! ¡ Terminé ! – exclama triunfal Inuyasha, decide entonces averiguar que sucede con su amigo que de golpe se ha quedado callado, pero al momento que levanta la vista para ver a que se refiere su amigo…


    Prácticamente se queda petrificado al encontrarse muy de cerca a una persona que se ha detenido un instante a un lado de su mesa observando su trabajo, luego lo mira a él con sus dorados ojos que le roban hasta el aliento al joven empleado, una intensa e inexpresiva mirada que no atina a interpretar. Luego éste hombre continúa su camino hacía una de las oficinas de los superiores del lugar, sin pronunciar una sola palabra y sin dar muestras de siquiera reconocerlo. Lo ve como se aleja entre las mesas con movimientos sumamente elegantes y una actitud altiva.

    Esa alta figura que ha dejado momentáneamente sin habla y sin movimiento al joven peli plata no es otro que… ¡ Su desconocido y extraño vecino que ha observado a través de las persianas de su apartamento !

    Cuando al fin reacciona, debido a la sorpresa Inuyasha vuelca un portalápices que se encontraba sobre su mesa, derramando su contenido que al caer en el suelo de madera hace tremendo escándalo.
    El atractivo ejecutivo voltea a medias hacia donde proviene le ruido, dirige su mirada de reojo a Inuyasha, quien juraría que por unos segundos le pareció que se sonreía levemente, pero enseguida observa como recobra enseguida su expresión fría e impasible, tal parece que traspasara a Inuyasha, no da muestras de nada, casi como si el chico fuera invisible y como si aquel sutil gesto hubiera sido solo producto de la imaginación de éste.

    Inuyasha se apresura a recoger lo que se le ha caído aprovechando que ése hombre ha seguido con su camino, cuando tiene todo nuevamente en el portalápices, se sienta en su lugar, volteando a ver a Byakuya le pregunta:


    - ¿Quién es él y por qué te molesta su presencia ? –


    Aunque Inuyasha intuye la respuesta a el fastidio mostrado por Byakuya, pues recuerda la mañana del domingo cuando regresaba de correr y vio salir a Naraku del edificio de enfrente al suyo, después de haber visto esa escena tan candente entre él y el hombre que acaba de pasar a su lado.


    - Es comprensible que no lo conozcas, pues eres nuevo aquí, aunque a decir verdad pocos lo conocen, debido a que nunca se deja ver tan fácilmente a menos que sea en su oficina y ¡ Créeme, eso es casi imposible ! - le dice Byakuya en voz baja, aprovechando que no le alcanza a ver, aunque se encuentran de espaldas al sitio donde se ha ido – y sí tienes razón… ¡ No me agrada en lo absoluto !-

    - Pero, ¿ Quién es? No me lo has dicho, solo puedo imaginar que es alguien sumamente importante y que sin duda es la visita sorpresa que nos han dicho hace rato.- Inuyasha quiere averiguar más sobre ese misterioso personaje.

    - Pues resulta que él es nada más y nada menos que… -

    - ¡ Un asesor del Gerente General de la empresa ! – exclama una grave y seria voz a sus espaldas que los sorprende tanto que pegan un salto poniéndose de pie de inmediato e inclinándose respetuosamente para saludarle.

    - ¡ Buenas tardes ! –


    Los intensos ojos miran primero al de oscuro cabello de forma sumamente seria para luego clavarse en Inuyasha, su apariencia y actitud desconciertan al chico a tal grado que llega a pensar que no se trata del mismo hombre que ha observado a través de los ventanales.
    Tal vez se ha equivocado y se trata de otra persona, aunque lo duda pues tampoco le parece fácil pretender encontrar a alguien con esa peculiar apariencia en cualquier otro lado. De cualquier forma no piensa mencionar absolutamente nada al respecto.


    - ¿Asesor del Gerente General ? – pregunta confundido Byakuya, lo cual seguramente considera ese importante hombre como una osadía pues enseguida lo traspasa con la fría mirada.

    - ¡ Eso dije ! ¿ Acaso no me escuchaste bien ?- repite en tono helado.

    - ¡ Disculpe Señor ! ¡ Lamento mi atrevimiento ! – dice sumamente apenado el chico.


    El altivo hombre voltea a ver nuevamente a Inuyasha y de forma menos fría le pregunta:


    - ¿ Y tú eres…? –

    - Takahashi Inuyasha Señor – responde de inmediato inclinándose nuevamente como muestra de respeto.

    - ¿ Inuyasha San, eres nuevo aquí ? –

    - Sí Señor, es mi segunda semana laborando para ésta empresa.

    - Pude observar hace un momento que eres alguien muy dedicado en tu trabajo, me complace sobremanera el tenerte con nosotros, espero que hagas tu mejor esfuerzo… Inuyasha – le dice llamándolo solo por su nombre, mostrando mayor confianza con ese solo detalle, enseguida añade:

    - Bien, continúen con su trabajo, no deseo interrumpir sus labores- todos asienten y continúan en sus actividades como les han ordenado.


    El peli plateado mayor se aproxima más a la mesa de Inuyasha e inclinándose hacia él le dice en voz baja:


    - Por cierto… mi nombre es Sesshoumaru –

    - Sesshoumaru ... Sama - repite Inuyasha esperando le sea dicho el apellido según la costumbre japonesa.

    - Solo Sesshoumaru… tu puedes llamarme así – dice tajante con su muy agradable voz, luego se dirige a un lado de Byakuya quien al sentir la presencia voltea solo para escucharle decir:

    - Espero que haya quedado bastante claro quién soy –

    - Sssí…señor, bastante claro – responde nervioso el chico.


    Y con ese mismo andar distinguido se aleja entonces caminando silenciosamente entre las mesas, el mismo andar elegante que Inuyasha le conoció mientras curioseaba tras sus persianas.


    Inuyasha ha quedado sumamente nervioso sin que le quede bien claro por qué, aunque es bastante consciente de que ese hombre puede descontrolar a cualquiera, quiere suponer erróneamente que ha causado el mismo efecto en todos ahí, de cualquier forma continua trabajando tratando de que nadie note la tensión que tarda en alejarse de él.


    El resto de la tarde, la cabeza de Inuyasha le da vueltas y vueltas al mismo asunto, el lugar ha quedado en silencio después de esa inesperada visita y debido también a que tienen que apresurarse para terminar a tiempo una de las campañas publicitarias para lanzar el nuevo libro de un tal Usami Akihiko, que según le hicieron saber a Inuyasha, escribe novelas BL, las cuales son editadas y publicadas por una de las empresas propiedad reciente de Industrias No Taisho en su ramal de editoriales.

    Así que ahora sumido en el silencio, el chico tiene tiempo de sobra para atender a sus pensamientos, además Byakuya luce bastante molesto y concentrado en su trabajo, sin cruzar palabra alguna con nadie.


    “Estoy seguro que es el mismo hombre que he visto en ese apartamento, no me cabe la menor duda, después de todo tiene un rostro tan… inconfundiblemente atractivo ” – piensa ahora Inuyasha, quien cae en la cuenta que su mente está tomando un rumbo absurdamente extraño –


    “ ¡ Keh ! ¿ Pero qué diablos? ¿ Y eso a mí qué ? ¡ Por mi puede ser todo lo atractivo, elegante, distinguido… ¡ Assshhhh! ¡ Maldición ! ¡ Me viene dando igual, eso me pasa por andar criticando a Kouga y sus preferencias!
    Además su comportamiento es diferente a como luce a través de las persianas, el ambiente ahora a su alrededor era gélido y aquellas veces me pareció tan cálido. Y su nombre…
    Sesshoumaru… ¡ Sesshoumaru qué ! ¡ Vaya manía que tienen por aquí para no usar sus apellidos… ¡ Tokio es un lugar extraño ! ” – cierra los ojos un momento y se frota las sienes, cansado y tenso se recarga un momento en su mesa dejando que su blanquísimo cabello caiga como cascada sobre ésta.

    Aún agachado exclama de forma decidida:


    - ¡ Al diablo, yo vine aquí solo a trabajar, no a fijarme en idioteces o en gente rara! – suspira al fin más tranquilo.

    - ¿ Inuyasha ? – repite por tercera vez Byakuya que se encuentra ahora parado a su lado.


    El joven diseñador de ojos ámbar, no creía estar tan absorto en sus pensamientos, pero lo estaba, pues no había notado la presencia de su compañero de trabajo.


    - ¿ Eh ? ¡ Oh, lo siento Byakuya ! no te había escuchado. –

    - Pude notarlo, dime ¿ Te encuentras bien ? – le pregunta preocupado el chico frente a él.

    - Sí, sí, solo estoy cansado –

    - Pues ya es hora de irnos, ya tiene rato que todos se fueron –


    Cuando Inuyasha voltea a ver a su alrededor, nota que el lugar ya esta vacío.


    - ¡ Cielos, no me di cuenta !-

    - Eso es evidente…¿ Nos vamos?- Byakuya no se nota de muy buen humor e Inuyasha no quiere contrariarlo más.

    - Me parece que será lo mejor, afortunadamente logré un buen avance en ésta campaña, mañana haré la selección de color – dice Inuyasha mostrándole lo que ha hecho.

    - ¡ De verdad que eres bueno Inuyasha, tienes un talento excepcional – le dice Byakuya echando un vistazo al diseño.


    Salen juntos y como ya se va haciendo costumbre, Byakuya lo lleva en su auto a su apartamento. Byakuya ya luce más relajado así que su amigo se anima a preguntar:


    - ¿ Oye Byakuya? –

    - Dime –

    - Me preguntaba… ¿ Son frecuentes las visitas como la de hoy ? –

    - ¡ En lo absoluto ! – bufa molesto otra vez Byakuya – Afortunadamente no lo son, aunque formamos parte de la misma empresa, nuestro departamento ha gozado de un cierto grado de independencia, así que esto fue por así decirlo… ¡Algo nada común ! –

    - Además del desagrado que sientes por ese hombre ¿ Me equivoco ?-

    - ¡ En lo absoluto ! no es alguien que me simpatice mucho que digamos, además de lo engreído, antipático, pedante, sobrado de sí mismo que es y por si fuera poco se carga un genio de los mil diablos –

    - ¡ Sí creo que puedo notar que no te cae muy bien que digamos ! – dice sarcástico Inuyasha – sin embargo me parece que es alguien importante aquí –

    - ¡ Y que lo digas Inuyasha ! – el delgado chico está por contarle quién es ese hombre, cuando recuerda la condenada mirada de advertencia que recibió de Sesshoumaru y piensa dos veces lo que estaba a punto de decir, corrigiéndose a tiempo:

    - Él es… nada más y nada menos que… la mano derecha de quien es la cabeza de éste monstruo de empresa –


    Ahora viajan en el auto de Byakuya, están a punto de llegar al apartamento de Inuyasha, al conductor de hecho le urge llegar cuanto antes con su hermano, para comunicarle lo que ahora sabe.


    - Me pregunto a que habrá ido a nuestro departamento, quizás como tú dices ya se dieron cuenta de la enorme importancia de nuestra área – dice a modo de broma Inuyasha – seguramente fué a conocer al valioso personal que trabajamos ahí – agrega sonriendo, sin tener idea en lo absoluto sobre las posibles intenciones de ese serio hombre.

    - Yo me hago la misma pregunta – responde Byakuya pensativo.


    Llegan poco después al conjunto de departamentos en el que vive Inuyasha, quien desciende del auto de su amigo, subiendo enseguida con rumbo a su apartamento, pues no desea tener más encuentros inesperados como los que han ocurrido ultimamente.



    Entra a la sala, dejando su portafolio en uno de los sillones, después va de aquí para allá encargándose de el trabajo que le espera aún ahí, prepara algo de cenar y durante su tranquila cena, mira de vez en vez en dirección a los ventanales vecinos. Debajo de su aparente calma, no todo es tranquilidad, pues simplemente no puede terminar de comprender a los hombres que se han cruzado en su camino desde que llegó aquí, incluyendo ahora a su “amigo” Kouga.
    ¿ Es que acaso no les alcanzan las mujeres en ésta ciudad? ¿ O medio mundo se ha vuelto homosexual últimamente ?

    Le inquieta el solo recordar la mirada y la presencia de ése tal Sesshoumaru, siente escalofríos recorrerle la espalda, tan solo el hecho de descubrir que ése importante ejecutivo de la empresa es sin duda alguna su vecino… ¡ Eso es preocupante! La manera en que han coincidido sus miradas a través de las persianas, en situaciones incluso complicadas.
    Aunque durante su visita a sus oficinas del departamento al que pertenece Inuyasha, le pareció que su comportamiento era por mucho, bastante más serio y frío.


    - ¿ Y qué esperabas Inuyasha ? – reflexiona el chico en voz alta como acostumbra hacerlo algunas veces – que ése hombre llegara y dijera : Sí hola, soy asesor del Gerente General de ésta compañía, además de ser tú vecino que te vio bailando el otro día en ropa interior, por si fuera poco tengo un amante hombre cómo pudiste ver por la ventana… ¡ Sí claro, mucho gusto Sesshoumaru Sama! … ¡ Lo saludaría con una sonrisa y ya ! -

    – Suspiro-

    -Es más que obvio que no le interesan más que asuntos de trabajo como debe ser, pero sin embargo…

    ¿ A qué vino ese comentario que hizo solo para mí ?

    ¿ Por qué razón yo podría llamarlo “solo Sesshoumaru” a pesar del alto rango que se ve que posee ?

    ¿ Y por qué ese extraño comportamiento que muestra a través de las persianas ?

    ¡ Ay… solo espero que no se una a la fila de mis inesperados “admiradores” !

    ¡ Sería una molestia más que añadir a las otras dos llamadas Kouga y Naraku !

    ¡ Semejante idiotas !

    ¡ Ni homosexual soy ! – suspira molesto y mejor se ocupa de sus cosas para mantener la mente lejos de ese tema, aunque la imagen de unos dorados y penetrantes ojos le impide concentrarse por completo. – ¡Sí lo fuera, hasta diría que ese hombre es lindo de verdad y no lo dejaría ir vivo! – sonríe ante lo que considera una estupidez.





    -------------------------------------------------








    Más tarde cuando Byakuya llega a su propio apartamento, no le sorprende encontrar a Naraku en la sala leyendo el diario mientras le espera.


    - ¡ Ya llegué! – anuncia el menor en cuanto deja sus zapatos en la entrada y se dirige a él.

    - Tardaste demasiado Byakuya – le reprocha Naraku en cuanto lo ve.

    - ¡ Lo siento! Pero es que llevé a Inuyasha como siempre y nos entretuvimos charlando un poco en el auto. Quedé de pasar por él mañana temprano también. –

    - ¿ Sólo charlando? – Naraku lo mira entrecerrando los ojos – fue demasiado tiempo.

    - ¿ Estás celoso de mí? No seas tonto Naraku, al que le gusta Inuyasha es a ti no a mí, aunque… él es lindo, tal vez no sería mala idea darle una probadita para ver si es bueno para mi hermano mayor, al fin que parece que me está tomando bastante confianza, sería sencillo para mí – exclama Byakuya malicioso.


    La mirada de Naraku se oscurece de improviso y levantándose de golpe, toma a Byakuya por los hombros y sacudiéndolo molesto le dice en tono amenazador.


    - ¡ Mas te vale que ni se te ocurra tocarlo ! ¿ Me oyes bien? ¡ Ni lo pienses o atente a las consecuencias!-


    A Byakuya le atemoriza el aspecto y la actitud de su hermano, además de el dolor que le causa que incluso lo amenace a causa de otro hombre.


    - ¡ Tranquilo Naraku, solo bromeaba ! desde luego que no tengo interés en él, somos amigos y nada más…¡ No me interesa interponerme entre él y tú ! – le sonríe tímido tratando de calmar a su hermano, pero hace un enorme esfuerzo para que sus ojos no se llenen de lágrimas.


    Naraku reacciona ante lo que está haciendo y lo suelta poco a poco.


    - ¡ Tienes razón, lo siento, me dejé llevar Byaku, perdóname ! – lo toma de la mano y se sienta al lado del chico – mejor cuéntame… ¿ Qué es lo que averiguaste? –


    La mirada de Naraku luce ahora mucho más tranquila, aunque Byakuya puede notar que la mente de su hermano está trabajando, seguramente tramando algo. La voz del mayor se vuelve a escuchar interrumpiendo antes de que su hermano comience a hablar.


    - ¿Sabes Byaku? Estoy seguro de que pronto conseguiré lo que deseo, lo atraeré hacía mí y en menos de lo que se pueda imaginar y antes de que tenga tiempo de reaccionar, ya se encontrará comiendo de mi mano – dice sonriendo incluso.

    - ¿ A qué te refieres Naraku? –

    - A que pienso ocuparme personalmente de él, para empezar planeo pasar por él para llevarlo al trabajo, así mismo me ocuparé de regresarlo a su apartamento por l tarde, justo ahora tengo el pretexto perfecto para comenzar a partir de mañana.-

    - ¿ Sí y cuál es ése pretexto?- pregunta con genuina curiosidad su hermano menor.

    - Esto – exclama Naraku, mostrándole a Byakuya una tarjeta de identificación que sostiene entre sus dedos, la tarjeta de identificación e ingreso a las oficinas de Industrias No Taisho perteneciente a Inuyasha.

    - ¿ Por qué la tienes tú? –


    Naraku lo mira con una actitud de sobrada satisfacción.


    - Pues porque el distraído de tu amigo, olvidó pasar por ella a nuestras oficinas y la tarjeta provisional que él porta se ha vencido hoy, así que si desea ingresar a tiempo mañana, le daré la oportunidad de lograrlo… pero solo si acepta mi propuesta para llevarlo y traerlo conmigo en el auto… para empezar. Estoy seguro que ni siquiera se ha dado cuenta, pero lo haría mañana al llegar allá y pues yo quiero ayudarle a solucionarlo – dice con falsa voz de amabilidad.

    - ¡ Qué situación tan conveniente para ti ! –

    - Ya sabes que yo no dejo ir las oportunidades tan fácilmente – le sonríe satisfecho su hermano mayor, luego lo mira con atención y exclama – ahora sí quiero saber sobre ese tal Kouga ¿ Qué lograste averiguar sobre el “ amiguito ” de Inuyasha ? –



    A Byakuya le vuelve el ánimo que había perdido tras escuchar el enorme interés que tiene su hermano por lo que él quiere decirle.


    - Primero quiero saber que me darás a cambio – exclama posando suavemente su mano sobre la de Naraku.

    - Antes que nada debo ver la magnitud de lo que has averiguado y en base a eso… llegaremos a un acuerdo tú yo – le dice tajante, pero desliza su mano en una suave caricia sobre la de su ototo.

    - De acuerdo- dice ruborizado el chico, aunque no de muy buen grado, pero ha decidido luchar por lo que desea y le cuenta lo que el mismo Inuyasha le ha contado al respecto…

    - ¿Así que ése maldito Kouga desea ser pareja de mi Inuyasha? – dice molesto Naraku.


    Ese mi pronunciado por Naraku, le desagrada demasiado a Byakuya, por mucho que su hermano tenga el derecho de hacer su vida como mejor le plazca, no puede evitar los celos que siente por él. Siempre han sido solo ellos dos, el uno para el otro…como hermanos desde luego, pero sin nadie que se interponga. Cierto es que Naraku ha tenido amoríos en el pasado, pero el mismo Byakuya reconoce que eran relaciones sin futuro, sin trascendencia, sobre todo debido al amor casi platónico que su hermano mayor tiene por Sesshoumaru, un amor prácticamente imposible, pues el millonario no tiene el más mínimo interés en él; aunque ahora puede darse cuenta que va en serio por Inuyasha, tal vez ésta ocasión se trate de algo más que un capricho.

    De cualquier forma no le gusta en lo absoluto, pues él desearía ser mucho más que el hermano menor de Naraku. Quien en éste momento lo saca de sus pensamientos.


    - ¿ Y dices que Inuyasha asegura no ser homosexual? –

    - Así es y me parece que es verdad –

    - ¡ Eso lo veremos, de que lo sea me encargo yo! –


    Se quedan en silencio unos minutos, reflexionando cada uno acerca de sus sentimientos y deseos, hasta que Byakuya recuerda algo más.


    - Por cierto Naraku… ¿ Tú sabes a que se debió la visita sorpresa que realizó hoy a nuestras oficinas Sesshoumaru en persona ?-

    - ¡¿ Qué Sesshoumaru estuvo allá ?! – dice Naraku sorprendido ante lo que ha escuchado.

    - Sí y no solo eso, insistió en presentarse solamente como “Asesor del Director General ” , ¿Lo puedes creer? –

    - ¡¡ Queeeeé!! ¿ Asi que ese engreído quiso pasar desapercibido? – exclama sorprendido e intrigado Naraku.



    Byakuya lo mira esperando una respuesta, ante la interrogante en el rostro de su ototo, Naraku le responde:



    - ¡ Y yo que sé , no tengo la más mínima idea al respecto ! – responde exasperado Naraku – aunque no lo creas , Sesshoumaru es todo un misterio incluso para mí, la mayoría de las ocasiones yo no tengo ni la más mínima idea de lo que ronda por su cabeza. –

    - Entiendo… está bien Naraku, ahora a lo nuestro – le dice Byakuya aproximándose más a su hermano – yo ya cumplí con mi parte, ahora te toca a ti. –

    - ¡ Ah es verdad ! - dice en tono serio Naraku – pero antes quiero algo más de ti Byaku chan –

    - ¿ De qué se trata ahora Naraku? – exclama casi con fastidio su hermano menor.

    - ¡ Quiero que te ocupes del tal Kouga ! – dice con desprecio el mayor.

    - ¿ A qué te refieres exactamente? –

    - A que me lo quites de en medio, usa el método que te plazca, pero quiero que apartes su inoportuna atención de encima de Inuyasha –



    El chico se queda perplejo ante la petición de su hermano y no responde nada, ante lo cual Naraku le dice molesto.



    - ¡Promete que lo harás o no te daré ahora parte de tu recompensa! –



    Byakuya baja la cabeza y vencido accede.



    - Está bien… lo prometo Naraku –

    - ¡ Muy bien mi ototo, entonces ven conmigo! – le dice cariñosamente Naraku levantándose y jalándolo de la mano.

    - ¿ A dónde? – exclama curioso Byakuya.

    - Tomaremos un baño juntos… ¿ No te apetece hermanito ? – le dice con una atrevida mirada, fija en él, la cual lo ruboriza tremendamente.

    - ¡ Claro que sí oniisan ! – le responde entusiasmado.

    - Ese será mi pago por tu favor y tal vez lo volvamos a repetir si tú haces bien lo que te he encargado ahora – le dice sonriéndole tiernamente Naraku.



    Los ojos del menor brillan intensamente, siente como su hermano lo conduce en silencio tomándolo por la muñeca de forma posesiva y lo lleva hasta su alcoba.


    Cuando llegan y mientras la tina se llena, Naraku se dispone a darle gusto a su hermano, así que lo comienza a desnudar lentamente, sin apartar su rojiza mirada, recorriendo cada centímetro del esbelto cuerpo de su hermano, al contemplar el enorme sonrojo en el rostro de éste y el leve temblor del que es ahora presa , se acerca a su oído y le susurra:


    - Descuida Byaku chan, será solo un baño… y nada más. –


    Pero no deja de recorrer una y otra vez con sus suaves manos esa tersa y blanca piel, comenzando a lograr que escapen leves gemidos de los labios de su hermano.


    - Ahora es tú turno – le dice al tiempo que dirige las temblorosas manos del chico hacia los botones de su propia camisa, invitándolo con una intensa sonrisa a que lo despoje de todo lo que se interpone para permitir un intenso contacto entre sus cuerpos.


    El mayor ríe malicioso al contemplar el trabajo que le cuesta a su hermano el desabotonarle, así que posa sus manos sobre las de Byakuya para lentamente dirigirle.


    Al poco rato ya se encuentran desnudos, Byakuya con el rostro completamente encendido, no puede apartar la mirada de aquel cuerpo que lo hace arder en deseo, su hermano entonces lo toma de ambas manos y lo conduce a la amplia tina en la que ambos se sumergen, sin dejar de prodigarse caricias cada vez más intensas, entre los tímidos gemidos del menor, los cuales sin embargo se van volviendo cada vez más frecuentes y sonoros a la par de que el toque de las manos de su hermano se vuelve más y más atrevido.
    Unas expertas manos que ya han llegado a la parte más intima de Byakuya, subiendo y bajando, recorriendo toda su hombría, despertando su deseo.


    - ¡ Aaaaaaggh, Naraku, así, así, sigueeee!!!! –

    - Solo disfrútalo mi Byaku chan, gózalo –

    - ¡¡Aaaaaaah aniki, sigueee!!! –


    Las caricias de Naraku no se detienen hasta que logran su objetivo, hacer estallar de placer a su hermano, derramándose todo él en las tibias aguas que les rodean. Acompañándolo con intensos besos por aquí y por allá, recorriendo completamente con sus labios cada centímetro de la piel de su hermano.


    Sin embargo, la mente de Naraku no se encuentra ahí, está calculando cada uno de sus próximos movimientos, a la vez que la interrogante le revolotea en la cabeza:


    - ¿Qué planeas Sesshoumaru?

    ¿Qué maldita cosa te traes entre manos? –









    Continuará . . .





    Notas finales :

    ¡ Gracias a todos por leer y gracias a los que se toman su tiempo para hacerme saber su opinión ! la cual es muy importante para mí.
    Nos seguimos leyendo.
    Bye bye :D

    Edited by Hoshi no Hikari - 2/9/2014, 21:16
     
    Top
    .
31 replies since 21/2/2014, 04:48   2022 views
  Share  
.