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Dany Suarez+1
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Este fic ya lo había subido en otro lado pero apenas le agarre la onda a este forum por lo que subiere los primeros cinco capitulos que ya tenía, gracias. Espero sea de su agrado
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-Que sea negativo, que sea negativo- rogaba un castaño de 25 años en el baño de la editorial Marukawa.
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“Mierda si sigo con estas nauseas colapsare y ni hemos iniciado el ciclo… Nauseas” Se decía una vez más el novato de edición en magas Shoujo, el pavor se apodero del joven editor, porque si era lo que el estaba pensando seria terrible y no creería soportarlo. Llevaba más de dos semanas sintiéndose así por lo que inesperadamente fue a la farmacia a comprar un objeto que le ayudaría a despejar dudas y a aumentar sus miedos, pensaba hacerlo en casa y ahí comprobar que todo estuviera en orden pero la duda lo carcomia, por lo que inesperadamente agarro su bolso y se fue al baño. ¿Piensan en el tipo de prueba que se esta haciendo el joven Onodera? Si exacto una de embarazo, después de orinar en ella se sento en el excusado, claro con la tapa abajo y aguardo…
-Que sea negativo, que sea negativo- rogaba un castaño de 25 años en el baño de la editorial Marukawa y aquí se encontraba nuestro castaño con los ojos cerrados, puso su alarma en 5 minutos y con el miedo de la realidad, los abrió comprobó la respuesta del test y sus miedos fueron echos realidad el caos reino en su cabeza, la desesperación en el cuerpo y de sus ojos lagrimas salían se llevo una mano a la boca y si mis queridos lectores la prueba era “positiva” Se calmo un poco después de 10 minutos, enrrollo la prueba en demasiado papel, conteniendo los sollozos, salio del cubículo y se lavo la cara, se miro al espejo y suspiro tratando de acomodar sus ideas “No puede ser posible, no, no lo es” se decía pero no podía perder más el tiempo haci que saco su celular y marco el numero
-Con el doctor Takeshi, por favor- hablo roncamente Onodera- me gustaría hacer una cita por favor, lo más urgentemente posible.
-Espere unos minutos- hablo la recepcionista, Ritsu se recargo en el lavabo- si tenemos una libre en 30 minutos, dice el doctor que puede venir inmediatamente.
-Bien ire para alla- Salio disparado hacia la sección Esmeralda.
-Takano-san, le pido permiso para retirarme en estos momentos, tengo algo urgente que hacer.- Hablo rápido y mas que permiso era como un aviso.
-¿A dónde vas? – hablo seriamente el jefe en edición
-Es algo personal, de igual manera ya termine todo- se dispuso a irse y salio corriendo sin darle tiempo de responder a su jefe, quien estaba más que preocupado, primero se tarda una eternidad en regresar y cuando lo hace le dice que tiene que retirarse por una urgencia, todo lo que tuviera que ver con su castaño le preocupaba en sobremanera por lo que salio disparado, pero Onedera esta vez fue más rápido, Takano no se dio por vencido y lo siguió justo cuando llego a la salido vio como Onodera subia a un taxi, ya hablaría con el en la noche mientras cenaban deliciosamente y el trataría de persuadirlo una vez más para que vivieran juntos.
-Onodera Ritsu, puede pasar- hablo la recepcionista y el nombrado entro al consultorio con los nervios desbordándose el pavor a flote de piel y sudando terriblemente. Se asomó a la puerta y vio a su doctor de confianza.
-Ritsu-kun pasa- Hablo alegremente el doctor, eso ayudo a Onodera a no de morir de nervios- Y dime a que se debe tu vistita.
-Yo…-No sabía cómo iniciar o como decir- Me he estado sintiendo mal…
El doctor capto inmediatamente a lo que se refería y se mostró serio
-Bien te haremos un chequeo, pero primero te hare unas preguntas.
Onodera solo atino a asentir y contesto cada una de ellas con la vista baja.
-Bien pues haremos una ecografía para estar seguros- hablo el doctor, quien no lo decía y no aparentaba pero estaba tenso y nervioso.
-Papá ya llegaron los estudios de Hana-san- hablo un joven quizás dos años más grande que Onodera apuesto, de cabello rubio lacio y ojos azules un intenso azul claro- Ah lo siento no sabia que tenías… ¿Ricchan? Oh pero si eres tu mírate hablo el joven y entro al consultorio para abrazarlo efusivamente- Hace 10 años que no te veía.
-Kouro-sempai, hola…- hablo casi sin energía pero forzándose a reir Ritsu.
-Tu deja de molestar y deja los papeles y te puedes retirar.
-Estas bien Ricchan…- Ignoro a su padre por completo, es más se lo olvido que es lo que iba decirle.
-Yo… - Onodera empezó a sollozar y Kouro lo abrazo fuertemente como hace diez años, no necesito saber más él ya lo entendía.
-Justo le iba a ser una ecografía por que no se la haces iré por unos medicamentos- hablo el doctor especializado en obstetricia. No espero respuesta y salió.
-Acuéstate Ricchan- hablo tiernamente el joven doctor Kouro, este obedeció-Te desabrochare el pantalón- y así lo hizo y se lo bajo un poco dejando al descubierto la suave y tierna piel de Onodera, unto un poco gel y paso el aparato de ecografía en su zona pélvica, moviéndola en círculos hasta que encontró lo que buscaba.
-Ricchan mira aquí esta- le mostro Kauro con el dedo, Onodera se apoyó en codos para levantar su torso y mirar, sonrió, noto con dificultad una pequeña mancha- tiene aproximadamente seis semanas.-
-¿Cómo está?- pregunto con miedo Onodera
-Bien, está por el momento perfecto desarrollándose debidamente- volteo a ver a Ritsu y le sonrió dándole confianza.
-Gracias- sonrió con amor y sinceramente Onodera, suspiro y se dejó caer en la camilla, Kauro le limpio el gel y el mismo le abrocho el pantalón, Ritsu estaba tranquilo por el momento pero sus problemas aun no pasarían, no, estaba el cómo decirle al padre y todo lo que eso con llevaba.
-Hey despierta soñador, levántate anda- Ritsu obedeció, y el doctor Takeshi entro con una bolsa transparente llena de medicamentos.
-¿Cómo está?- pregunto casi inquieto el doctor.
-Perfecto- hablo Kauro
-Bien te daré unos medicamentos y te podrás retirar-
-Yo…- Onodera no sabía que decir.
-Hey por que no te quedas en mi casa hoy, como para mantenerte en observación ya que andas anémico- Onodera casi dudo por un momento pero por el momento no quería enfrentarse con nadie, así que asintío.
-Bien, espérame una media hora en mi consultorio y nos vamos- hablo alegremente Kauro.
Onodera salió del consultorio ni sin antes dar las gracias y una reverencia ambos doctores. Sonó su teléfono y contesto.
-¿Bueno?- hablo sin ganas
-Tu, Onodera ¿dónde estás? ¿Estás bien? ¿Voy por ti?- Hablo desesperadamente Takano.
-Yo…-
-Ricchan, vámonos iremos por comida y te alimentaras como es debido y después dormirás- hablo energéticamente Kauro- hoy disfrutaras como nunca Ricchan.
-¿Con quién mierda estas? Onodera- Hablo seriamente, esa persona quería hacer todo lo que a el le corresponde, alimentar a su niño, dormirlo y por supuesto llevarlo al paraíso cuando se trata de sexo.
-Lo lamento Takano-san luego hablamos ¿si?- hablo serio Onodera y al borde de las lágrimas, esto tenso a Takano ¿De que pudieran hablar? Se sintió mareado y después escucho solo la llamada cortada.
El resto del día paso, Onodera le platico todo a Kauro, escucho atentamente justo como hace diez años.
Kauro era el sempai de Onodera en la preparatoria se llevaban por 2 años se llevaban bien y platicaban, todo lo que le paso a Onodera.
Ritsu tenía a su propio acosador, Kauro, lo miraba a distancia, lo observaba, le llenaba de curiosidad verlo siempre en la biblioteca, poco tiempo después se dio cuenta de a quien miraba este era a Saga Masamune su compañero de clases un joven que salía con sin fin de mujeres, aspecto serio, a sus ojos incipiente, no como el niño que el observaba, siempre tierno y sonrojado, cuando se enteró de que ellos andabas, su corazón se quebró, pero veía una mirada diferente en su amor secreto, lo dejo pasar. Pero después lo encontró llorando en un banco del parque, sin poder contenerse se acercó a él y Ritsu lloro en su hombro sin conocerse siquiera.
Después se volvieron inseparables, cuando los primeros síntomas del embarazo se hicieron presentes sin saberlo, ni siquiera imaginarlo el cuido de él, cumpliendo antojos, dándole palmaditas cada vez que vomitaba.
A los 4 meses se dieron cuenta que el pequeño estaba esperando un hijo, su papá lo atendió después de que en su casa de Kaoro se desmayara. Valla sorpresa, el padre por un momento que su hijo era el padre, más no era así, cuido de él hasta que en los 5 meses empezaron sangrados, fiebres, vómitos, deshidratación. Todo un caso a los 6 meses la criatura no resistió, él estuvo presente en ese dolor y lo consoló sin igual, lloraron y desde ese día odio a Saga Masamune, de hecho él no quería que el apellido de ese tipo que dejo sufrir a su amor secreto, apareciera en la lápida pero respeto la decisión de su amado niño. Tiempo después se fue Ricchan de su vida. Decidió seguir con los pasos de su padre quien era medico obstrecta ¿Razón? El cuerpo de Ritsu Onodera, todo un enigma.
Pero esta vez no lo dejaría ir tan fácil a su amor en secreto… No
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Takano aguardo toda la noche la llegada de Onodera, más este nunca se apareció.
El día llego y todos a sus respectivas actividades, Kauro pasó a dejar a Onodera a su trabajo, alegando que tenía algo que hacer aunque obviamente eso no era cierto. Ritsu llego con la ropa del día anterior no sabía que sentir, no sabía qué hacer, pero él ya era un hombre y tenía que afrentar las consecuencias de sus actos, así que fue directo a el área de Esmeralda, se sentó en su lugar suspiro y empezó a trabajar, al menos eso podría ayudarle un momento.
Masamune llegó un momento después y se sorprendió de ver a Onodera ya, el también llego al trabajo temprano queriendo refugiarse en el trabajo y no en el alcohol.
-¿Por qué no llegaste anoche? Quedamos en que íbamos a cenar juntos-
-Yo lo lamento Takano-san, de verdad, perdóname por todo- rompió en llanto Onodera, Takano se alarmo ¿Qué paso? ¿Su niño se acostó con alguien más y le pedía perdón? ¿O no lo amaba y de eso quería pedirle perdón, de que nunca correspondería su amor? Se paró para abrazarlo.
-Ricchan, se te olvido esto en el carro- Hablo Kauro, enseñándole una bolsa Takano reconoció esa voz, porque estaba tan cerca de su niño, quería golpearlo, si él le hizo algo…- Hey porque lloras ¿Te duele algo? ¿Te sientes mal? Vamos contéstame Onodera- Kauro se sentía desesperado y lo levanto.
-Estoy bien, no me duele nada.- Hablo Ritsu ya con su llanto contenido.
-¿Por qué no pides una licencia? Te hará bien-
-Onodera tiene mucho trabajo como para andar pidiendo licencias- Hablo Takano harto de esta situación y especialmente del tipo de enfrente a quien deseaba patearle el trasero. Kauro no había sentido su presencia hasta ahorita.
-Kauro- sempai, estoy bien de verdad solo fue momentáneo, tienes cosas que hacer ¿no? Anda gracias por traerme el medicamento ahora solo dame tiempo- hablo dulcemente, esta situación lo estaba carcomiendo y como siempre Kauro adivino sus pensamientos y salió.
-Te hablare más tarde, Takano-san compermiso.-
-Onodera que mierda está sucediendo?- se desesperó Takano, el oji verde sabía que no podría ocultarlo más que importaba ya todo.
-Takano-san, si decides dejarme después de esto, odiarme, lo aceptare. Pero por lo que más quieras créeme, Takano agarro el asiento que le correspondía a Kisa, agarro la mano temblorosa de Ritsu y la apretó.
-Te amo- se limitó a decir el ojimiel.
Cap 2. Sorpresas y más sorpresas
-Yo estoy…- La hora de llegado del resto de los empleados empezó, las oficinas en 5 minutos de todas las secciones se empezaron a llenar, no permitiendo que la joven pareja discutieran sus asuntos, pero Takano estaba al borde de la desesperación, ¿estaba enfermo su amor? ¿Había estado con otro hombre? ¿Se había enamorado de alguien más?, lo agarro de la mano y se lo llevo arrastras al baño de hombres cerro con seguro.
-Tu estas ¿qué?- pregunto Takano esperando que le dijera.
-Yo voy hacer papá- soltó directo Onodera y como siempre Takano era sorprendido por eso de parte de su niño, las piernas le fallaron y se tuvo que recargar de la pared, su niño había estado con alguien más y de ahí la mujer se embarazo, sus esperanza se fueron, se llevó una mano a la boca para no gritar para no llorar. Onodera comprendió que Takano se estaba haciendo ideas erróneas.
-Y tú eres el padre- hablo de nuevo más calmado se estaba quitando 1/4 de carga pero había algo más, si le decía todo era TODO de principio a fin.
-¿Qué?- exclamo Takano volteando a ver incrédulamente al castaño.
-Estoy en cinta, embarazado si así le quieres decir y es obvio que eres tú el padre, créeme cuando te lo digo que es cierto- hablo serio y mirándolo a los ojos para que le creyera de esa realidad.
-¿Co…mo? Estas seguro, estas bien, tienes fiebre, Onodera no es la primera vez que nos acostamos así que porque apenas? Es ilógico-
Onodera no tenía cara para decir lo otro así que se voltio.
-Hace diez años, también lo estuve-
Takano flaqueo, tenía un hijo de Ritsu desde hace diez años y nunca se lo dijo, la garganta se le seco, los labios le temblaban, pero este asunto no era para resolverlo en el baño de la oficina así que lo volvió agarrar y salió de Marukawa corriendo, chocando con todos, tomo un taxi y le indico la dirección de sus departamentos.
-No, mejor al cementerio de la salida de Tokio- pidió Onodera, a Takano se le puso helada la piel pero no replico iban en silencio, Takano pago y se bajaron. Onodera lo agarro de la mano y lo guío por el cementerio, él se dejó guiar en silencio, llegaron a una de las lapidas más alejadas en el cementerio y Onodera le señalo con la cabeza que leyera.
Aquí descansa el pequeño ángel
Onodera
Takano busco con la mirada a Ritsu, queriendo una explicación y el a modo de respuesta, con su mano limpio la parte de en medio y la inscripción decía algo más. Takano se llevó una mano a la boca y dio un brinco hacia atrás una pequeña lágrima salió, casi imperceptible.
Aquí descansa el pequeño ángel
Saga
Onodera
Era la inscripción que decía volvió a ver a Ritsu quien lloraba, quería saber que más, se encontraba aturdido, molesto, impotente. Hace diez años tuvo un hijo con la persona que amaba quien después desapareció y con un hijo de él y encima de todo ese niño estaba ahí enfrente de él…
-¿Co…mo?- la voz era como un susurro, Onodera trago saliva.
-Después de que nos separamos, a los 3 meses empecé a sentirme mal, tenía fiebres, vómitos, mareos yo lo retribuía al shock de ese entonces, de pensar que tu te habías burlado de mi, luego cesaron y otros síntomas abrieron paso, con el tiempo empece aumentar de peso, el padre de Kauro-sempai era médico, así que el mismo me llevo con él, sorpresa la que nos llevamos al verificar que estaba yo en cinta, se los comente a mis padres, como todo padre reaccionaron exaltados al saber que su hijo que ni 16 años tenía sería padre, pero se calmaron y me apoyaron, pero…- rompió en llanto- mi cuerpo no lo soporto y a los 6 meses tuve un aborto, yo ya lo amaba, el era un ángel que venía a consolarme, me lo imagine en mis brazos, corriendo, llevándolo a la escuela, pero no pude tenerlo…-Tomo un respiro Takano estaba en completo shock- Pensé en decírtelo, pero no pude cuando tome el valor, me dijeron que te habías marchado poco después paso eso. Me guarde mis sentimientos, en ese entonces pensé que tu y el me habían dejado solo, ¿Para qué enamorarme de nuevo? Cambio mi personalidad y todo lo que era yo, lo que más amaba me iba dejando. Cuando te encontré de nuevo y me dijiste que todo era un mal entendido y todo lo que había pasado, te negué un conocimiento que por derecho te correspondía y encima de eso mi cuerpo no lo soporto y mi bebé se fue, decir que te seguía… amando, era contarte esto, arriesgarme a que me odiaras por no decírtelo, porque todo fue mi culpa, si yo no lo hubiera mal interpretado, no sé qué hubiera pasado, siempre me pregunto eso.
Me habían dicho que quedaría infértil, que no había forma de embarazarme de nuevo y que no podía yo embarazar, mi madre nunca ha perdido la esperanza de que yo tenga un hijo, cuando tuvimos sexo por primera vez en mi borrachera me espante tanto y después me hice una prueba de embarazo, salió negativa, supe que quizás podíamos estar juntos sin que tú supieras esto, pero de un tiempo para acá me empezó a sentir mal y diferente no me hice nada, hasta que termináramos el ciclo, hasta apenas ayer y volví a quedar en cinta, tenía, tengo miedo de nuevo no creo poder pasar de nuevo por eso, tenía que ordenar mis ideas y decírtelo… Yo de verdad te pido perdón, si no quieres estar de nuevo conmigo lo entenderé y en cuanto al niño yo podre, ya soy un adulto, así que si no quieres está…- Takano hizo un movimiento con la mano, lo que tenía que escuchar él ya lo escucho, con esa misma mano toco la lápida donde descansaba su pequeño, su primogénito. Onodera entendió que el necesitaba tiempo de asimilarlo de comprenderlo. Takano derramo lágrimas, no sabía que sentir, no sabía que decir… Pero de algo estaba seguro la vida le estaba dando un nuevo milagro de disfrutar la vida y de ser un padre de criar a una criatura que fue la fusión de dos cuerpos y almas. Onodera se marchaba pero Takano le sujeto la mano antes de que se fuera, sorprendido se volteo.
-No me dejes, no me dejen, no de nuevo- dijo con un hilo de voz apenas perceptible.- Aun no logro ser capaz de dirigir todo esto, pero por favor no te vayas, de eso estoy seguro.
Así permanecieron por un largo tiempo, el viento acariciaba sus rostros, se dirigieron a casa, tomaron un taxi y Takano recostó en su hombro a Ritsu mientras se entrelazaban sus manos. Juntos podrían ser más fuertes, hablarían acerca de su futuro y de su relación por supuesto. Takano pidío que lo llevaran a sus departamentos.
-Ammm Takano-san, tengo que regresar a la editorial.- hablo Onodera.
-No, tomémonos dos días ¿de acuerdo?
-Tengo que regresar por mis cosas, ahí tengo mi medicamento-
-¿Qué estás bien? ¿Te duele algo?-
-No, solo son por precaución-
-Bien regresaremos a la editorial.- después de regresar a la editorial y dejar todo en orden y con instrucciones, recogió el bolso y todo de Onodera y se marchó con él a sus departamentos. Encontrándose con la ecografía, sonrió.
-Onodera se fue a dormir, un día con muchas emociones y aparte que no había dormido cayo rendido. Takano lo arropo y salió a su bar favorito.
Solo por hoy.
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Cap 3
Yokozawa dormía plácidamente en el hogar de los Kirishima, un martes por la noche, después de que al estúpido de su novio se le ocurriera tener sexo, dejándolo rendido y cansado. Pero para nuestro gatioso ese bello sueño era interrumpido por el estruendo de su celular, perezosamente lo agarro y seguro que iba a matar al que llamara.
-Bueno… ¿Masamune? ¿Qué mierda quieres?... ¿Estas ebrio?... ¿Qué carajos dices?... Voy para allá y así es como Yokozawa se levantó y se vistió para salir a las 12:45 en busca de su estúpido amigo, tomo un papel y un lapicero y escribió
Siento no poder desayunar con ustedes, tuve una emergencia, por favor discúlpenme.
Con cariño Yokozawa
Antes de salir Kirishima lo intercepto.
-¿A dónde vas a estas horas?- hablo sensualmente, con la única intención de molestar y porque no una segunda ronda de sexo.
-Tengo una emergencia, así que quítate de mi camino- hablo seriamente y es que conocía a su amigo ebrio y si no llegaba quien sabe de qué sería capaz…
-Te llevo- hablo Kirishima yéndose a buscar las llaves de su carro…
-No, me tengo que ir por favor discúlpame con Hiyori, yo le llamare en la mañana- Y salió corriendo de los condominios, tomo taxi y se dirigió aquel bar que pensó que nunca más iba a pisar y menos con Takano, no al menos en mucho tiempo pero mucho…
Al llegar vio a su amigo en la barra, ebrio, se acercó con él.
-Hey tú, imbécil, deberías dejar ya de tomar y vamos te llevo a tu departamento- Yokozawa tenía planeado ir, buscar a su amigo, llevarlo a su departamento, asegurarse que no cometiera una estupidez y después ir al suyo y ¡Listo!. Pero no todo sale según lo planeado.
-No ven acércate, tomate una conmigo- insistió Takano- te llame para que vinieras y tomaras conmigo, no para que te comportaras como papá oso.
-Tsk, no vamos Takano, salgamos de aquí.-
-Anda, celebremos que voy a ser padre- soltó Takano
Yokozawa se quedó estático, deja de cuidar unos meses a su amigo y este ya se enrolló con una mujer y la embarazo, después de que lo rechazo porque “según” mucho amor a Onodera.
-Pero en que mierda te metiste y Onodera ¿como esta? ¿Ya lo sabe?
-Por supuesto papá oso, él está esperando un hijo mío- Yokozawa se sentó con él, tomo un trago para tranquilizarse y comprender las incoherencias de su amigo.
-Ordena tu cabeza, imbécil ¿A qué chica embarazaste?, la loca esa que te esperaba afuera de la editorial?
-NO! Te estoy diciendo que Onodera está embarazado de mí, bueno no de mí, está esperando un hijo mío.- hablo ebrio Takano, tomando de su cerveza Yokozawa se la quitó antes de que siquiera tocara sus labios.
-Imbecil, sabes que eso es imposible, estas demasiado ebrio…-
-No, veras hoy vi la tumba de mi hijo, Onodera me llevo ahí en la mañana, la lápida tenía mi apellido, me dijo que a los seis meses él lo perdió, su cuerpo no lo resistió, pero dime si yo hubiera corrido tras él, y ser parte de eso mi hijo hubiera muerto, si yo hubiera cuidado de Ritsu, no lo habría perdido, después me dijo que le habían dicho que quedaría infértil y PAM tiene 6 semanas de embarazo de nuevo. Estoy confundido Yokozawa, esto demasiado confundido, de verdad no quiero estar atado al pasado, pero Y SI…-
Yokozawa ya se había tomado toda la cerveza que le quito a Takano y ya había pedido otro, estaba en shock, también confundido…
-Y si qué? Qué? Eh ya estas mayorcito, si Onodera perdió al bebé pudo haber sido con o sin tu compañía, son cosas que pasan, así que deja de pensar en eso.-
Takano saco los estudios de Onodera y una ecografía y se la mostro a Yokozawa.
Este al verla tomo su 3ra cerveza de sopetón, estaba una ecografía con el nombre de Onodera y en otro papel decía: Onodera Ritsu prueba de embarazo positiva. Cuarta cerveza para adentro
-Masamune, ¿felicidades?, pero que mierda haces embriagándote, deberías estar con él.
-Lo sé, pero tengo demasiadas emociones, necesito esto aunque sea por última vez y que mejor que con mi mejor amigo Yokozawa Takafumi- y elevo su cerveza, Yokozawa entendió, estaba feliz su amigo compartía su dolor y su felicidad con el, era un nuevo inicio, todo estaba en el pasado, Takafumi lo imito y tomaron sus cervezas… Una tras otra…
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Siguiente día
-Ah pero que dolor de cabeza- mientras se reincorporaba Takano, desde la sala escucho una plática. Salió y se encontró con Yokozawa y Onodera hablando amenamente, ambos dejaron de hablar y lo miraron.
-Buenos días Takano-san- hablo Onodera y se levantó por una taza de café para su jefe, se la extendió.
-Masamune, menuda resaca ¿ne?- dijo demasiado burlón Yokozawa al tiempo que dejaba un frasco de los medicamentos de Onodera en la mesa. Fue el primero en despertar e inicio una conversación con Ritsu quien le explico todo y le mostro todo, desde los estudios que tenia de su primer embarazo hasta el último con la única finalidad de que no creyera que Takano o el estaban locos, Yokozawa le creyó absolutamente todo y no pude sentirse más feliz al saber que su mejor amigo estaría bien y misteriosamente se dieron cuenta que ambos podían llevarse bien, Yokozawa le decía que comida comer ya que el cocinaba saludable para Hiyori y cosas por el estilo.
-Sí, lamento lo de ayer, por si te desperté-
-Ah no está bien, bueno me retiro tengo trabajo hoy, así que adiós. Onodera cuídense- Yokozawa se levantó y se fue, dejando a la joven pareja cosas de que hablar antes de entrar en dos horas al trabajo.
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Yokozawa se fue a dar un baño a su casa, cambiarse y por unos lentes de sol, la resaca hoy la tenía o muy fuerte o el sol estaba jodiendolo. Calculando la hora de despertar Hiyo le envió un mensaje, pidiéndole disculpas y que en recompensa hoy llevaba su pastel favorito y hacia su comida favorita.
Hiyori sonrió a distancia.
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Yokozawa llego con lentes de sol un traje de color azul, camisa del mismo color y una corbata gris Oxford, demasiado sexy como para dejarlo pasar…
-¡ESPERA!- grito un una voz muy familiar y sus iodos no soportaron ese grito, hizo una clara mueca de disgusto.-
-Wow, mi gatioso, pretende seducirme en horas laborales.- Si, Kirishima era quien le hablo.
-Pero que mierda dices, deja de llamarme así- Excepcto el oso de Marukawa.
-¿Cómo te fue en tu urgencia?- pregunto ya más serio Kirishima
-Eh Ah bien, siento haberme ido así- Yokozawa se debatía en decirle o no a Kirishima acerca de que en realidad se fue a embriagar con Takano, no pensaba que volvería a suceder así que bajo su perspectiva no tenía nada que decir y no es como si fue a ponerlo el cuerno, solo fue por su amigo y haya pasado lo que haya pasado con Takano eso ya ni al caso venía, su presente y esperaba que su futuro fuera con Kirishima y la pequeña Hiyori. Después de haberse enterado de la noticia de su amigo ahora no quería separarse mucho menos de los Kirishima.
-¿Seguro?- pregunto Kirishima como esperando que Yokozawa le dijera más, pero no fue así el ascensor llego al piso 3 de ventas y se bajó.
-Sí, los veo en la noche- y le sonrió a Kirishima, este estaba por lanzarse hacia él y desnudarlo, pero su suerte no fue buena, por el momento… Aun le carcomía el hecho de que Yokozawa no le dijera que en verdad se fue con Takano a ese bar…
Confundido e inseguro estaba Zen Kirishima.
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-¿Mejor?-rompió el silencio Onodera
-Lo siento, no debí…
-No, está bien, necesitabas desahogarte a tu manera- Otra vez el momento incomodo…
-Yo…- hablaron al mismo tiempo
-Tu primero…- volvieron hablar al mismo tiempo.
-Te amo- dijo Takano después, Onodera se sonrojo y subió su mirada para encontrarse con la de Takano- Te amo y lo que haya pasado, está en el pasado, ahora estamos juntos ¿no?, haremos una familia, nuestra relación tiene un orden extraño, así que hagámoslo como adultos- dijo Takano.
-Takano-san yo…- Onodera quería decirle algo- Nuestra relación no ha ido funcional y ambos estamos aturdidos, pero quiero Takano-san, quiero ser feliz, y mi felicidad esta junto a ti y mi- se corrigio- nuestro hijo, pase lo que pase cuando tomo tu mano me siento más fuerte y capaz, pero aun así, este embarazo no sé cómo se desarrolle, tengo miedo, mucho miedo- rompió en llanto Onodera. Takano se levantó y lo abrazo.
-Lo haremos juntos, así que Onodera Ritsu, aceptas ser mi novio?- sonrió seductoramente el ojimiel. Y Onodera ante esa propuesta rio de felicidad entre su llanto, elevo la mirada y se abrazó a la cintura de su amado.
-Si- la respuesta obvia
-Vaya el embarazo te ha sentado, hace unos meses me hubieras gritado…- Takano sonrió
-No destruyas el momento.
-Jajajaja lo siento.- Se acercó Takano a los labios de Ritsu y los beso dulcemente, los lamio y los mordisqueo, Onodera correspondió y su lengua busco la contraria, la acepto gustosamente y se empezaron a acariciar entre ellas, Onodera paso sus brazos por el cuello de Takano y se acomodó mejor en el asiento, por su parte el pelinegro se agacho un poco más y seguía moviendo sus labios abrazando la cintura lo lavanto y lo froto contra si, la cosa se estaba poniendo caliente, literalmente, hasta que… Ritsu sintío que algo se contraía por la boca de su estómago y subía a su garganta, empujo a Takano y fue directo al baño y ahí va su desayuno. Takano sorprendido recupero la compostura y fue atrás de Onodera.
-Oi, ¿estás bien?- pregunto sumamente preocupado el pelinegro al momento que se ponía a su lado acariciando su espalda...
-Sí, es normal… no cesaran, hasta el primer trimestre…
-¿Seguro? Deberíamos quedarnos en casa, a celebrar- se acercó a los labios, pero Onodera le rehuyó poniendo su mano en la boca de Takano.
-Pero ¿qué demonios pretendes hacer? Acabo de vomitar, date un baño y larguémonos a la editorial!!- salió del baño Onodera bastante cabreado y avergonzado.
Takano pensó en seguirlo pero desistio, sonrió feliz, todo iría a su paso, por el momento se daría un baño.
En esta noche haría todo bien…
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Takano y Onodera caminaban directo al trabajo…
-Quisiera saber que va a ser- comento Takano
-Eh?-
-Si, es niña o niño, nombres, darte de baja, ¿Cuándo tienes tu próxima cita? Sin duda iremos los dos, comerás bien de acuerdo, distribuiremos el tiempo, te quitare unos autores…- Hablaba y hablaba Takano, sin dejarle a Ritsu contestara, el solo lo veía y escuchaba, rogaba a quien fuera dios que todo saliera bien, sus miedos no eran cesados, pero seguro con Takano sería más fuerte. Ritsu tomo su mano. Takano dejo de hablar sorprendido, pero la apretó fuertemente
-Ricchan!- Se escuchó el grito de Kauro, Takano suspiro- Ah estaba tan preocupado por ti- Corrió abrazarlo tan fuerte que hizo que el agarre entre Takano y Onodera se rompiera.
-Sempai, por favor detente- Exclamo el ojiverde.
-Ricchan, no me digas eso, porque no lo haré, ayer te estuve llamando para ver cómo estaban- Puso una mano en el vientre del castaño, Takano reacciono y lo jalo a su lado, ¿Qué mierda se creía este tipo? Kauro sonrió burlonamente.
-Ah, sempai él es Masamune Takano, aunque supongo ya lo percibías ¿no?, Takano-san él es Kauro Ken hijo del doctor Takeshi quien es mi doctor- Los presento amablemente.
-Mucho gusto- fue el primero Takano en el primero hablar y extendió su mano, su sensor de seme le decía que este tipo más que una amistad quería algo más. Kauro respondió el saludo, pero era tan fuerte ese saludo como probando su fuerza, Onodera percibió ese saludo y se tensó ¿Por qué se saludaban así? Deberían ya soltarse y había un ambiente tenso, por lo que opto por agarrarlo del pecho a Takano y atraerlo a su lado, funciono perfectamente, Kauro no era estúpido, sabía que pasaba, ¿Cómo era posible? ¿Después de todo el daño? Pero así era Onodera, tan sincero y puro ¡Ah que dicha tener alguien así como el a su lado! Él estaba tan seguro de que Onodera podría enamorarse de él, en sueños lo escuchaba decir “sempai, no es hermoso el sakura floreciendo” Claro que al único que le decía sempai, era él.
-Si, claro- volvío su vista a Ritsu y susemblante se endulzo- Ricchan te hablare mañana- y se encamino del lado contrario. Takano estaba tan feliz con su amado castaño que no montaría una escena de celos… por el momento…
Ambos entraron a Marukawa Shoten.
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El día transcurrio sin más.
-Ricchan antier me dijiste que se te antojaba un salmón en mandarina y hoy te traje, mira pruébalo.- Kisa Shouta le hablo con su semblante infantil.
-Kisa-san, tengo las manos ocupadas- hablo cansado Ritsu con una pila de hojas en las manos.
-Entonces te daré en la boca Ricchan- Kisa agarro los palillos y agarro un pedazo de salmón, se veía tan sabroso y olía increíblemente que el castaño no se negó, abrió la boca y saco un poco la lengua para recibir en su paladar ese sabroso alimento, Takano estaba observándolo a distancia, ¡¿Por qué todos los que tenían atenciones con Onodera le decían Ricchan?!
Realmente delicioso, hasta que lo trago y lo consumido subió por su esófago y garganta, Takano lo percibió así que se paró de su asiento y se dirigió a su amante, agarro sus papeles que tenía en mano Ritsu y se los paso a Hatori que iba pasando, todo a una velocidad increíble, Ritsu corrió al cesto de basura y lo vomito todo, Takano acariciaba su espalda y agarraba su frente.
-Deberías volver a casa-
-No, yo puedo seguir.
-Pero qué demonios dices, anda te llevare.
-Ricchan, perdóname, ya te enferme- decía al borde de la histeria Kisa.
-No te preocupes ya me sentía mal- hablo dulcemente Onodera.
-Espérame iré hablar con Yokozawa- Takano salió corriendo al piso 3 y rápidamente localizo a su amigo.
-Takafumi, necesito un favor- Se lo dijo lo más rápido posible sin darle tiempo de oponerse…
-Pero ¿qué demonios? ¡Eso es en poco tiempo!, además tengo muchas que hacer!- Takano se dirigió al ascensor ya más calmado, dejándole a su amigo una tarea importante- Hey escucha lo que los demás te dicen, Masamune regresa, no tengo tiempo, AHHHH MIERDA!!!!! ESTA BIEN PERO NO TARDES, no tengo mucho tiempo disponible, te veo en tu casa, procura que Onodera no este, seguro que le causarías un infarto y no quiero estar presente…
-Gracias Takafumi- se despidió
Regreso al departamento de Esmeralda Ritsu estaba trabajando tan concentrado, lo contemplo de lejos, se veía tan lindo, tan atractivo. Ritsu escombrando papeles y ocasionalmente acariciada su vientre, algo que el ojimiel nunca antes lo vio hacer, él siempre lo observaba y él sabía cuál era la causa de ese gesto. Una familia eso serían o eso lo son, el hecho de no haber compartido el dolor que sufrió Ritsu hace 10 años lo carcomía, en cierta manera se sentía el principal culpable, pero ahora pueden compartir juntos una vida y felicidad eso es lo importante, los cuidaría así fuera con su ultimo respiro. Nunca pensó en una familia, no creería que eso fuera posible ni mucho menos cuando se reencontró con su primer amor, pero no le importaba él estaba bien, pero de un día a otro se entera de que ya serían padres, sin duda a ese pequeño milagro le daría amor y lo consentiría, iría a sus reuniones de la escuela, le contaría cuentos antes de dormir, le daría esa calidez de hogar que él nunca tuvo, sin duda su amado castaño le proporcionaba siempre felicidad, primero al mostrarle que el amor existe y ahora le estaba dando una familia ¡Vaya dicha! No sabía que había hecho el para merecer tanta felicidad, pero sin duda no la desperdiciaría.
Camino y le dijo que en dos horas se hirían, Ritsu se sonrrojo por la proximidad, pero se limito a asentir.
Se amaban sin duda alguna…
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Mientras tanto que el piso 3 de Marukawa shoten estaban viviendo el mismísimo infierno y la furia del oso, quien gritaba, hacia llamadas, tenía que salir cuanto antes…
-Hey Yokozawa, necesito los informes de ventas de este mes del manga…- Decía tranquilamente Kirishima Zen
-Ya los envié debería de estar en tu escritorio- hablo rápidamente gatioso mientras metía todas sus cosas a su portafolio- ¿Ya te vas? ¿Por qué no me esperas y nos vamos juntos a casa?
-No, te veo haya, de verdad tengo cosas que hacer- salió corriendo mientras hacía unas llamadas telefónicas.
Kirishima se sintió desplazado, porque no le decía que iría otra vez a casa de Takano, si él lo engañaba sin duda hoy lo atraparía así que salió atrás de él, ya tenía todo calculado, para seguirlo.
Lo vio ir y venir al supermercado, fue a la casa que parecía ser de Takano, regreso al super mercado, tardo en salir del departamento de Takano y después vio que se dirigía a una florería, donde minuciosamente escogía flores, un arreglo floral extremadamente hermoso y se dirigía a casa de nuevo de Takano, su corazón se oprimía, esto olía a una cena romántica… así que al final no pudo con el primer amor de Yokozawa.
Vio como Yokozawa se recargaba en la pared y así una llamada con demasiada felicidad, bueno al menos con él no era la llamada. Estaba roto.
Se desvío del camino, no quería llegar a casa aun.
+++++
Takano después de dos horas y recibir un mensaje de Yokozawa que estaba listo se dirigió a Ritsu.
-Bien es hora de irnos Onodera, siento que me hayas tenido que esperar- Onodera se sonrojo, estaban en la oficina y se atrevía hablarle así.
-Ah puedo ir solo, si quieres puedes retirarte.-
-No, estas muy equivocado, vámonos!- Lo agarro y lo arrastro
Mientras que los demás editores:
-Yo apuesto a que Ricchan y Takano-san traen algo…-hablo Kisa.
-Yo opino lo mismo, son tan buenos amigos- Dijo Mino Kanade
-No lo creo- hablo con su semblante Hatori- siempre le grita.
-Ah Hatori-san y Mino-san que mal están haremos una apuesta…- Propuso Kisa.
Los tres editores restantes apostaron
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Yokozawa llego a la casa de los Kirishimas y encontró a Hiyori con Sorata durmiendo en el sofá, al fin y al cabo era una niña una siesta no le caería mal, la acobijo y cumplio su promesa, preparar su comida favorita, al comprar unas flores compro un ramo extra para Hiyori.
El olor a comida despertó a la pequeña…
-Onni-chan- hablo somnolienta la pequeña Kirishima- Bienvenido a casa, perdón por quedarme dormida.
-Oh ya despertaste, no te preocupes, está bien, ya está la cena solo esperamos a tu papá, mira te traje estas flores- Yokozawa agarro el ramo y se arrodillo para dárselas, Hiyori sonrió complaciente, ¡Era la primera vez que alguien le regalaba flores! Se sentía una princesa, las agarro con un gran sonrojo y abrazo fuertemente a su onni-chan, él lo correspondió felizmente. Kirishima llego…
-Papá, bienvenido, mira Onni-chan me regalo un ramo de flores- Hiyori felizmente corrió por la casa en busca de un florero, lo encontró y fue a ponerlo a su cuarto.
-Sí, ya veo a todo mundo le andas regalando flores ¿no? O solo a los que te importa y amas- hablaba bruscamente Kirishima.
-¿Qué? Oye apestas a sake, vete a lavar la boca, Hiyori no debe de olerte así- Dijo Yokozawa mientras se disponía a preparar la mesa.
-También lo puedo hacer yo, no eres el único que puede hacerlo ¿sabes?... – iba a continuar hablando, pero Hiyori llego enseguida con un rostro demasiado feliz y se dispuso ayudar a Takafumi con la preparación de la mesa- Iré a ponerme algo más cómodo.
Yokozawa se quedó helado. En la cena nadie hablo, entre Yokozawa y Hiyori levantaron la mesa y la última se fue a dormir. Viendo el hermoso ramo de flores.
Kirishima se fue a su cuarto y el peli azul lo siguió.
-Se puede saber qué demonios te pasa?
-¿A mí? Nada lo dices por ti ¿no? Ayer te largaste a mitad de la noche, para irte a tomar con Takano ¿no? ¿A ti qué demonios te pasa? Tan alegre te la pasaste, abrazándose, y riendo como un par de imbéciles.
-¿Qué? ¿Me seguiste?- pregunto con un toque entre la incredulidad y enojo
-Oh perdóname por seguir a mi novio mientras él se ve con su amante mitad de la noche- contrataco demasiado enojado, puesto que no le negaba nada, estaba por quebrarse.- pensé que en verdad tenías una emergencia y no querías molestar, quería ofrecerte mi ayuda, pero bien que la encontraste con él.
-¿Amante? ¿Qué tanta mierda andas diciendo?, me encontré con el porque me hablo que queríamos que nos viéramos y el ebrio no sabes de lo que es capaz de hacer, quise ir por él, pero me dio una noticia que para él era importante y como su AMIGO, le ofrecí mi apoyo, imbécil, desconfías de mi…
-Así que también como su amigo le llevas un arreglo floral y le preparas la cena ¡Valla amistad! Dime ¿te gusta tanto estar abajo?.- No pudo continuar puesto que una bofetada lo interrumpió.
-Eres un imbécil, tú no sabes nada, esa cena y ese arreglo era porque Masamune le va a dar una sorpresa a su novio y me pidió que la hiciera yo! Idiota! Me seguiste, desconfías de mí, que bueno saberlo ahora, que al parecer no he hecho lo suficiente para decirte cuanto me importas TÚ y HIYORI! Me largo, te dije que si me herías no te lo perdonaría, gracias por tu desconfianza- salió azotando la puerta, sin quererlo, pero le dolía, lagrimas querían salir, pero se las limpio antes de que estas salieran, se fue a su casa demasiado cabreado.
Kirishima se quedó estático, todo él lo había mal interpretado y sin querer lo hirió, salió rápidamente queriéndolo detener, pedirle perdón de rodillas si era necesario, pero no lo encontró, sabía que con Yokozawa las cosas frías y calmadas se resolverían más fácil ahorita sería inútil, se fue a su cuarto con un sentimiento de culpa muy grande.
Vio un ramo de girasoles del lado se su cama…
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-Espera- Le dijo Takano a Onodera antes de abrir su departamento, saco una cinta y se la puso a su amante en los ojos.
-¿Qué haces Takano-san?- pregunto con una media sonrisa el castaño.
-Es una sorpresa- Le hablo al oído mordisqueándolo, recibiendo como respuesta un suspiro y un sonrojo lo que él quería. Abrió la puerta y guío a Ritsu por el pasillo hasta llegar a la sala del departamento y se la quitó.
-Takano-san…- Ritsu estaba sorprendido las luces estaban bajas y en la mesa había un bello mantel con un centro floral de rosas amarillas y blancas, los platos perfectamente puestos y en la cocina estaba la cena. Takano lo llevo a la mesa y jalo la silla para ofrecer el asiento, Ritsu sonrojado acepto la invitación, iba tan nervioso que creería que en cualquier momento las piernas le fallarían y caería al suelo, por fin se sentó.
-Cuando hiciste todo esto- pregunto para que los nervios se disiparan tantito.
-Secreto- dijo Takano volviendo con dos copas de color rojo.
-No puedo tomar- le recrimino Onodera.
-Lo sé, es jugo de arándano, tu favorito.- Ritsu se sonrojo, de hecho su sonrojo no había pasado desde que Takano le tapo los ojos.
Se sentaron a disfrutar la cena, exquisitamente preparada.
-¿A que se debe esta cena Takano-san?- Pregunto terminando casi terminando su cena.
-¿No es obvio? Es una celebración de que estamos juntos de nuevo como pareja, ya es oficial pero lo más importante es que vamos hacer una familia.
-¿Estás seguro… de todo esto?- Ritsu quería asegurarse, de que no quería ser abandonado. Takano no termino de llevarse el bocado a la boca.
-¡Por supuesto! Ritsu, te amo, los amo son mi vida, yo ya no podría vivir sin ustedes. O… es que ¿Tu no estás seguro?- Suspiro Takano ¿Y si su castaño no estaba seguro? Tener un hijo no garantizaba…
-¡Claro que lo estoy! ¡Yo te amo Takano-san!- soltó de repente Ritsu Onodera, levantando estrepitosamente de la mesa dejando boquiabierto al ojimiel y es que estaba este seguro de que si seguía así su castaño, dándole sorpresas acabaría con un infarto al corazón- Yo…- Ritsu estaba demasiado rojo, del mismo tono que se le declaro aquella vez a Saga Masamune.
-Como siempre tan directo, yo también te amo- Takano se levanto y abrazo a su amado- los amo, puso una mano en su vientre y acto seguido lo beso, tiernamente, casi se sentía como su primer beso, dulcemente, Takano lamio los labios de Onodera y ellos se abrieron las lenguas se rozaron, se chuparon y Takano guío a su novio a su lecho de amor, desnudándolo y dejando un camino de la ropa de ambos. Ritsu colaboraba desabotonando los botones de la camisa negra de Takano así como después su pantalón. Takano tumbo en la cama al castaño y lo beso de nuevo, lo desnudo lentamente, para cuando ambos ya no tenían ropas, el pelinegro empezó besando las piernas de Onodera besando los muslos, chupándolos, cuando llego a la ingle repitió el proceso.
-Ah..hhh- Gimió Onodera y agarro del cabello al pelinegro tirándolo levemente para que lo viera, y así lo hizo Takano, la mirada verde lo sedujo y subió a sus labios para besarlos de nuevo Onodera agarro ambos miembros y los froto con una mano.
-¿Qué te sucede?- Pregunto entre pequeños jadeos roncos Takano y como respuesta obtuvo un beso de parte del castaño lo recibió gustos y mientras Ritsu masturbaba ambos miembros Takano con una mano levanto las caderas e introdujo un dedo lo movió en círculos sintiendo como esa cavidad se abría, metió el segundo y para cuando estuvo el tercero dentro se sentía ya húmedo y caliente.
-Harás que me corra y aun no- hablo Takano mientras se incorporaba, levanto las piernas de Onodera las coloco en sus hombros y dirigió su miembro a la cavidad que lo volvía loco, metió la punta y respiro profundo, se correría en cualquier momento, por lo que se necesitaba calmar, tantas emociones que no creería resistir. Pero por el lado del castaño esperaba a que lo metiera todo, quería sentirlo, como ese miembro duro y caliente lo llenaba, pero este pareciera ido, por lo que se desesperó y empujo su cadera para auto penetrarse.
-Ahhh- gimió Takano y cerro fuertemente los ojos, por suerte no se corrió- Ahh casi haces que me corra- recuperándose Takano empezó las embestidas lentas, mientras besaba las pantorrillas y miraba a Ritsu gimiendo dulcemente, sonrojado y con lágrimas de placer, Takano con sus manos empezó acariciar los pezones de su amado. Después de esa estimulación volvió a besar los labios y bajo al cuello, marcándolo, succionándolo, los fuertes gemidos de Onodera lo alentaron a aumentar el ritmo de las penetraciones.
-Yo ya…- Ritsu estaba por llegar a su límite. Takano agarro el miembro húmedo y duro de Ritsu lo masturbo al ritmo de las mismas estocadas, Ritsu movía sus caderas de igual manera y por fin se liberó, esparciendo su semen en la mano de Takano y sus vientres, su ano se contrajo y Takano eyaculo dentro con un gran gemido ronco que escucho perfectamente Ritsu, jadeantes esperaron recuperar el aliento, después cuidadosamente salió Takano del interior.
-Eso fue maravilloso- Dijo Takano. Ritsu estaba aun con los efectos del orgasmo, por lo que solo asintió. El ego de Takano salió a flote, así que solo se posó a su lado y antes de dormir beso el vientre de Ritsu Onodera.
Ahora si ya eran una familia, Takano más dichoso no se pudo sentir y así durmieron ambos abrazados…
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Cap 4
El primero en despertar fue el pelinegro, al hacerlo se topó con el cabello castaño, alborotado, lo tenía fuertemente abrazado como si no quisiera dejarlos ir y eso es lo que quería NUNCA dejarlos que se apartara de su lado, sin embargo Takano no estaba más tranquilo que Ritsu, el solo hecho de pensar que algo les pudiera pasar, le estremecía de sobremanera, no sabía cómo manejar la situación, pero constantemente pensaba que el embarazo se pudiera desarrollar bien, sin ningún problema. Le habían dicho a Ritsu que quedaría infértil sin embargo ahí estaba abrazando a dos seres que él amaba con intensidad eso tenía de alguna manera tenía que significar algo.
Cuidadosamente salió de la cama para no perturbar a su amado castaño y se dirigió a la cocina, a preparar el desayuno ¡Tenía que alimentarlos bien! Y quizás este fin de semana pasar todas las cosas de Onodera a su departamento y más adelante conseguir el enganche de una casa para vivir, no podía tener a un niño en un departamento así, necesitaría más espacio.
Pero estaban otros problemas, enfrentar a la familia de Ritsu, el mismo le había dicho que sus padres aceptaron su primer embarazo pero y ¿este? ¿Sería lo mismo? ¿Lo aceptarían a él? Claro que él tenía que dar la cara y de ser necesario explicar que él era el padre del primer bebé, eso sería un lío pero Takano estaba seguro que podría enfrentarlo, con los nervios desbordándose, pero lo haría. En cuanto a la familia de él no estaba seguro o más bien no le importaba decirle a su madre que iba a ser abuela o a su padre adoptivo que sería abuelo no hablaba con ellos desde hace 1 o 2 años, si bien al enterarse que el Doctor Saga no era su padre biológico este no dejo de quererlo, se veían claro, pero sentía que no era suficiente, sin duda él se esforzaría en ser un buen padre.
Pero y si todo salía mal, si la historia de hace diez año se repetía, sacudió la cabeza queriendo quitar esos pensamientos de la cabeza y mejor se dedicó a preparar un desayuno nutriente para sus pequeños amores.
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Yokozawa estaba en su departamento, aun acostado en su cama, no quería ir a trabajar pero no podía escapar. Estaba demasiado enfurecido, él ya le había dejado en claro que ya no sentía nada por Takano, ¿tan desconfiable era?. Cuando volvió a ver a Takano y tomaron juntos una sensación de calidez le lleno, sentía que todo estaba ya en orden en su vida; Recupero a su mejor amigo, tenía a quien amar y también a quien cuidar como a la pequeña Hiyori.
Su corazón estaba roto de nuevo sentía como si no pudiera completar nada. Tenía amistad pero no amor, luego tenía amor pero la amistad con Masamune temía no recuperarla y ahora esto.
Kirishima le saco de ese abismo, para después volverlo a tirar y esta vez con más intensidad. ¿Quién demonios se creería ese tipo?
Se paró perezosamente y con esa misma actitud se bañó, cambio y se dirigió a la editorial pensando en evitar a toda costa a Kirishima, ¡Por Dios lo amaba! Pero el muy imbécil le había lastimado, lo hizo ver como la perra de la editorial y así se sentía. Yokozawa no se creía con la capacidad de herir a alguien a pesar de su carácter de oso gruñón, su noble corazón no le permitía traicionar ni como amigo ni como amante.
Iba llegando a la editorial cuando vio que Onodera y Takano venían de frente.
-¡Yokozowa-san!- saludo alegremente el castaño levanto su mano, correspondió el saludo y cuando ya estuvieron los tres se saludaron cordialmente.
-Ah! Takano-san necesito ir al baño inmediatamente- hablo rápidamente y salió disparado al baño ya le andaba de verdad, por lo que los dos mayores solos.
-¡No corras!- le advirtió Takano
-Se ve muy entusiasmado- observo Yokozawa al tiempo que lo seguía con la mirada.
-Y lo estamos, pero también tenemos los nervios de punta, no sé qué pueda pasar y de verdad espero que nada- comento Takano- ¿Pero a ti que demonios te pasa? Te ves como si no hubieras dormido en toda la noche-
-Tsk- bufo Yokozawa y se encamino a la entrada del edificio de la editorial.- No tengo nada
-Eh papá oso de verdad no está bien, como si no te conociera… ¿Todo bien?- pregunto Takano, temiendo que quizás haya forzado a Yokozawa de nuevo hablarle, pero lo conocía y sabía que el asunto no iba por ese camino, probablemente podría ser por otra cosa- Había rumores de que salías muy seguido con Kirishima…- Takano noto como el semblante de su amigo se ensombreció con la mención de ese nombre.
Y hablando del Rey de Roma, Kirishima venía atrás de ellos, no tenía mejor semblante que Yokozawa y quizás se veía peor.
Los tres estaban esperando el ascensor pero los amigos no se habían percatado de la presencia del tercero, uno tratando de analizar a su amigo y el otro fingiendo que no pasó nada.
-Ya veo…- comento Takano- sabes sigues siendo mi amigo y te seguiré apoyando.
Takafumi sintió su corazón acelerar y volteo a darle una sonrisa de completo cariño fraternal.
-Ahora déjate de estupideces y sube al ascensor- hablo Takano con voz grave, no solía mostrar esa faceta a nadie pero Yokozawa le conocía cada una de ella y viceversa fue cuando se dieron cuenta de Kirishima y Yokozawa dio un paso para atrás dentro del ascensor, Masamune y Zen se dieron cuenta de eso, pero si Takano no se perdonó el hecho de lastimar a su mejor amigo en aquellos días no permitiría que alguien lo hiciera por lo que se interpuso en medio, prohibiéndole prácticamente que el editor de Japun lo viera y este se puso al lado del oji-miel . Takano sabía que cualquier cosa que hubiera pasado su amigo se sentiría miserable y humillado, Yokozawa agradeció eso, no estaba preparado para verlo se sentía mal, la cabeza le daba vueltas.
Zen entendió prácticamente lo que pasaba y se preguntó en que momento ¿paso esto? Antes el hacia lo necesario para proteger a su “oso” de Takano y ahora era al revés estaba sintiendo que se partía y Hiyori le pregunto por su “onni-chan” que ahora ella quería darle una sorpresa, que lo llevara a casa y cenaran los tres juntos, eso lo hizo sentir más miserable. En qué momento ahora Takano lo protegía de él…
-Buenos días- saludo cortésmente Kirishima
-Buenos días- saludaron Takano y Yokozawa al mismo tiempo, pero se podía diferenciar el tono de voz del peli-azul. Las puertas del ascensor se cerraron y nadie pronuncio palabra alguna, el primero en bajar fue Yokozawa al llegar al piso tres, por lo que Takano se movió a la izquierda, obligando a Kirishima hacerlo también quien por sentido se movió y Yokozawa paso por el lado de Takano.
-Te veo luego Takafumi, no olvides revisar la propuesta, si no iré a tu casa y no me moveré hasta que la hayas analizado- Hablo con su tono usual de seriedad Takano, pero Yokozawa entendió lo que le quiso decir “Cambia de cara o si no iré a tu casa y no me moveré hasta que lo hagas”.
-Lo hare, deja de fastidiar, no es tan importante.- Las puertas del ascensor se cerraron y el ambiente se podía cortar pero es que ¿Quién no ha tenido a un amigo al que queremos tanto que lo protegemos de aquellos quienes los lastiman? Takano se sentía bastante mal por como el mismo lo hirío, no solo aquella noche lluviosa, si no por todo lo que paso en el pasado, por haberlo utilizado y obligado a cuidar de él. Pero no permitiría que a su amigo lo lastimaran.
Estaba dicho cuando a su hija o hijo le partieran el corazón o lo hicieran sufrir esa persona se podría ir despidiendo de este mundo.
Sin embargo tampoco se sentía con ese derecho.
-Yo estuve con él, tú no tienes ningún dere…- Kirishima estaba empezando hablar
-El no tuvo la misma intensidad de lo que sentía por mí a lo que siente por ti, es ahí la diferencia.- Interrumpió Takano, las puertas del elevador se cerraron y Kirishima Zen se quedo helado, era cierto y el lo sabía de sobra ¿Por qué dejo que sus celos actuaran? Nunca actuaba antes de analizar las cosas, sin embargo ahora y desde que llego Yokozawa a su vida todo era diferente…
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-Ufff… pór un momento pensé que… ¿Paso algo Takano-san?- Llego Onodera al lado de Takano
-No, anda entremos que ahorita pido tu baja…
-¿Qué? ¿PERO QUE DEMONIOS QUIEN TE CREES?- Grito colérico
-Tu novio y el padre de tus hijos- dijo tranquilamente, Onodera se sonrojó al máximo y se erizo como gato.
-¡Estamos en la oficina! ¡Idiota!- y se fue hecho una fiera a la sección de Esmeralda.
Takano suspiro… Como le fascinaba hacer rabiar a su ahora ya novio.
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Kirishima se encontraba en el piso tres observando al Oso de Marukawa, tenía que hacer que regresara a su lado a como diera lugar, recordó una cosa y eso hizo que su semblante cambiara.
Sin duda tenía que hacerlo regresar a su lado ¿qué haría sin ese terco y sexy oso? Cuando llego a su vida, esta cambio para bien y ahora pareciera que todo iba a terminar, sabía que Yokozawa no era persona de hablar fácilmente y que quizás le costaría trabajo tan siquiera que le dirigiera la palabra. Lo había herido, pero es que el solo hecho de pensar que alguien más se llevara a su pefecta “esposa” lo enfurecía, lo sacaba de quicio. No era justificación pero aun así… nunca se había sentido tan inseguro.
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-¿A dónde vas Takano-san?- pregunto curioso Onodera al ver que su jefe dejaba todo y salía, eso no olía bien.
-A hablar con Isaka-san de tu baja e ir por tu comida- contesto tranquilamente mientras salía de la sección a paso tranquilo.
-¿Pero qué? Ya te dije que está bien por lo menos dame 4 meses, la baja la voy a necesitar después, ¡ahorita no!- seguía alegando el oji-verde, siguiéndolo por el pasillo- No tiene caso, tendré que cuidar del bebé y es ahí donde me puedo dar de baja, utiliza la cabeza.-
-Tienes razón- se voltio el mayor para encararlo- No tiene caso.
Onodera suspiro aliviado al fin ganaba una con Takano.
-Así que pediré tu renuncia y como jefe puedo hacerlo-
-Si, eso sue… ¿¡PORQUE DICES TANTA MIERDA!? NO NO NO NO NO DEFINITIVAMENTE ¡NO! Estoy empezando apenas y ya quieres que deje de trabajar estas muy mal.- Grito demasiado enojado.
-Hey, calmate puede hacerle daño al bebé. Es lo mejor y no voy a declinar tantito.- De esa manera Takano se dirigio al elevador pero el oji-verde se puso en medio y con los brazo extendidos a ambos lados.
-Escúchame Takano Masamune si lo haces, no me mudare contigo- El castaño lo dijo firmemente, pero Takano no se inmuto, podría pasar sus cosas a su departamento, quitarle la llave y listo, lo que debio hacer hace mucho. El pequeño castaño al ver que su novio con eso no cedería y quizás ya tenía algo planeado fue a la siguiente opción- No habrá sexo en mucho tiempo y lo digo en serio- Takano ante esto reflexiono, podía “obligarlo” como otras veces pero esta vez no quería hacerle daño al bebé quizás en un movimiento brusco podría lastimarlo, no no no, pero el quería seguir teniendo a su castaño gimiendo de placer.
-Bien, ganas pero será solo dos meses- dijo con firmeza
-Cinco- Ya lo tenía, quizás podría sacarle algo más de tiempo, él tampoco quería salir de su casa cuando se notara su vientre más abultado, pero sabía que ese tiempo podría usarlo cuidando al bebé cuando este naciera –si todo salía bien-.
-Un mes- hablo Takano si a esas iban a jugar.
-Cuatro
-Tres, lo tomas o lo dejas- se puso acero más para ver de cerca el rostro del novato, le encantaban sus facciones tan inocentes, su piel tan delicada, sus ojos verdes y grandes un mar de esmeraldas en las cuales él le encantaba mirar.
-Bien, pero anda regresemos, el ciclo está por iniciar y no quiero atrasarme con el trabajo- Se encamino primero Ritsu, el pelinegro le siguió.
-Pero llegando a casa me las cobrare- y le apretó el trasero a su pequeño uke, este sonrojo a más no poder y se quedó mudo de vergüenza, estaba realmente agradecido de que estuvieran solos en el pasillo.
“Este idiota. Esto no es amor, no, no, no lo es. Son las hormonas, perdóname por conseguirte un padre tan estúpido y engreído” Gritaba mentalmente Onodera Ritsu.
Solo faltaban 34 semanas para que el pequeño milagro Takano-Onodera hiciera presencia en el hogar de los amantes.
EXTRA
-Usagi-san ¡Esto es tu culpa!- reclamaba por lo bajo el castaño Misaki
-Creo que ya se fueron- hablo el peli-plata.
-A ver quítate- Misaki empujo a su novio para entre abrir la puerta de intendencia donde estaban encerrados. Y vi la espalda de otro castaño irse farfullando - Si, ya se fueron- Suspiro aliviado el oji-verde.
-Entonces podemos seguir con lo nuestro- Sonrió lascivamente el afamado escritor.
-Pero… ¿De qué hablas? Pervertido, casi nos descubren.
-Es tu culpa por seducirme en el pasillo-
-¿QUÉ? CLARO QUE NO!!!- Grito el oji verde.
-Claro que sí, si no hubieras dicho “Ah Usagi-san creo que me pegue en la cadera” y te hubieras desabrochado el pantalón y subido de la camisa, todo hubiera estado bien.
-Agr eres un pervertido que se aprovecha de las situaciones- seguía discutiendo.- claro que me pegue en la cadera cuando choque con ese carrito que te pedí que acomodaras bien. ¡Es tu culpa!
-Si lo que sea, pero de verdad no piensas dejarme con este problema- llevo una mano del castaño a su miembro endurecido, Misaki se sonrojo, mientras el escritor besaba dulcemente a su niño como minutos atrás en el pasillo lo estaba haciendo y Misaki se dejaba llevar como lo hizo hace rato.
Olvidando por completo el lugar donde estaban y dejando que Usami rozara su miembro con la pierna deliciosamente y cuando ambos estaban a mil, escucharon gritos y no sabían para donde hacerse de un lado venían esas dos personas y verían a Misaki con la camisa desabrochada y su playera a medio quitarse y el pantalón desabrochado y del otro lado era pared así que para ocultarse se encerraron en el primer cuarto abierto que encontraron y se quedaron ahí, sin hacer ningún movimiento por la pequeñez del cuarto, no lograban escuchar, bueno eso era Usagi que pensaba en como devorar a su niño, pero Misaki escuchaba palabras como "bebé" "incapacidad" "nuestro hijo" no entendía absolutamente nada. Pero actualmente se encontraban teniendo sexo en el departamento del escritor en la entrada ya que no aguantaba más y no podían hacerlo en la editorial (insistencias del castaño).
-Te amo- fue lo que dijo el escritor en el oído del menor resonando dulcemente y acelerando su corazón. Aprisionandolo en sus brazos para nunaca dejarlo ir.
Cap 5
El sábado había llegado y con ello la mudanza de Onodera a la casa de Takano y como este no quería que su amor moviera ni un dedo, si iban a la editorial ya no tomaban el tren, no tenían que ir en el carro de Takano y a veces soportar la hora pico parados en el tráfico. A todo esto Takano contrato una mudanza para llevar las cosas de Onodera a su departamento.
-Takano-san iré al combini por algunas bebidas- y sin darle tiempo de responder el castaño salió corriendo, Takano era tan sobreprotector.
El oji-miel no dijo nada sabía que tenía que darle su espacio a Onodera, suficiente había sido por esta semana como para seguirlo presionándolo. Takano recogía las cosas de Ritsu de su cuarto y había una caja hasta arriba del ropero, estaba algo alejada incluso para su 183 cm. Intento alcanzarla y cuando estuvo a punto de agarrarla la dichosa caja se cae, pero sus excelentes reflejos le dieron la oportunidad de quitarse antes de ser golpeada por ella.
-Mierda- Exclamo y se puso de rodillas para levantar el contenido de la caja pero lo que vio no se esperaba.
Ropa de bebé unas cuantas prendas y fotos de un Ritsu más joven, pero lo que tenía era algo peculiar se podía observar su vientre abultado y una sonrisa espectacular, las fue viendo de una en una, grabándose en su mente los detalles, las sonrisas de Ritsu como iba creciendo su vientre. Pero llego a una que capto por completo su atención.
Ritsu estaba acostado bajo un árbol de cerezo, su cabeza estaba recostada en una mano y la otra estaba su vientre de unos 5 meses o quizás 6 y con una sonrisa tan encantadora, tan bella, tan única que estremecía cada fibra de Takano. El peli-negro la acaricio como si con eso sintiera el momento, tan bello que se podía apreciar en la fotografía. ¡El debió estar con Ritsu! Correr tras él, cuando lo golpeo aquella tarde pensó que aclararían todo al día siguiente pero no fue así, no lo volvió a ver hasta después de 10 años. Ese bebé también era de él, amaba a Ritsu él hubiera asumido la responsabilidad por supuesto que sí, pero todo eso era tan confuso. Claro que estaba bien con el pasado y no era momento de pensar en eso, Ritsu y su bebé que venía en el camino era lo más importante pero aun así no podía dejar ese hueco, claro que no al fin y al cabo había perdido a un hijo y eso no se supera tan fácilmente.
-Takano-san olvide mi car…te…ra- Ritsu vio que Takano veía las fotos y cosas que él había guardado desde hace 10 años y también vio como era que este estaba tan ensimismado con esa foto de aquel día, se acercó y se puso de rodillas frente a Takano.
-Ese día estaba tan cansado, había salido de día de campo y cargar con ese vientre me canso demasiado así que subí un poco más a la colina y me recosté en ese árbol, me recordaba tanto a nuestros días en la escuela, la primera vez que estuvimos juntos, las veces que lo hacíamos en la biblioteca, mi amor por ti. Me toque el vientre y pensé que ahí estaba una parte tuya creciendo en mí, que egoístamente me había quedado con eso y eso era suficiente para nunca olvidarte, pronto la tendría en mis brazos y sería sola mía- Ritsu paro un momento tratando de no llorar, pero las silenciosas lagrimas salían- pensaba en decírtelo pero estaba seguro que un rechazo más tuyo yo no podría con él, pero aun así quería que lo supieras y tome la decisión de decírtelo.- El castaño siguió con su relato, no podría olvidar esos días- Pocos días después empecé con sangrados, vómitos, deshidratación. Fui internado y a las dos semanas la perdí- Onodera estallo en llanto y Takano quien escuchaba atento el relato lo atrajo efusivamente a sus brazos.
-Perdóname, Ritsu, perdónenme- Esas palabras las repetía una y otra vez al oído del castaño, quien no pudo evitar sentirse conmovido, no había absolutamente nada que perdonar.
-Está bien Takano-san no hay nada que perdonar- Ritsu lo abrazo aprisionándolo contra él, se separaron unos momentos y se vieron a los ojos, lentamente acercaron sus rostros…
-Terminamos con la mudanza- Entro el encargado interrumpiendo a la joven pareja, Takano se levantó para despedirlos y cuando paso por el lado de Onodera acaricio su cabellera castaña, este sintió como su corazón estaba a punto de salir de su pecho, escuchaba sus propios latidos, una cálida sensación sintió por todo su cuerpo.
Para cuando Takano salió de la habitación Ritsu vio todo el contenido de esa caja regado y decidió volver a ponerlo en aquella caja, la última vez que la abrió fue cuando supo que Takano era Saga, lloro toda la noche abrazado a esa caja. Puso las cosas en la cama y fue guardándolas no sabía que hacer exactamente con esa caja…
Masamune despidió a los de la mudanza que iban diciendo algo como “Hace tiempo que no veía tantos libros después de la mudanza de aquel tipo que parecía demonio” “Si tienes razón que miedo”
Regreso a la habitación y vio a Ritsu acomodando las cosas en esa caja que tantas cosas nostálgicas guardaba, se acercó y lo abrazo por la espalda deslizando su mano por el delgado brazo de Ritsu hasta llegar a la muñeca y le dio la vuelta para acostarlo en la cama subió con cuidado quedando el encima del castaño.
-Te amo tanto- Pronuncio con devoción el pelinegro y hundió su cabeza en el cuello de Onodera.- Siento por no haber estado con ustedes, pero ahora quiero hacerlos más que feliz, son mi vida, mi respiración mi todo…
-Takano-san, ¿puedo pedirte algo?- El pelinegro asintió y se quiso incorporar para mirarlo mientras pero Onodera no se lo permitió poniendo una mano en la cabellera negra y haciendo presión para mantenerlo en esa posición- Si algo me llegara a pasar prométeme que cuidaras de él- Onodera necesitaba esa promesa. Takano sintió estremecer su propio cuerpo ante la solo idea de algo tan trágico como eso.
-¿Qué estás diciendo?- Pregunto algo asustado Takano y es que si perdía a uno de los dos simplemente no podría seguir viviendo.
-Te amo Takano, y se a pesar de que por el momento todo está bien, yo no sé qué podría pasar en el futuro, no quiero fiarme de él, necesito esa promesa.
-Onodera Ritsu, lo prometo pero eso no pasara yo estaré para ustedes siempre y no dejare que absolutamente nada les pase- Takano se incorporó lo necesario para mirarlo a los ojos- Te amo yo no tendría vida sin ninguno de ustedes, sé que no hay que confiar en el futuro y por eso hay que vivir el presente, los amo tanto.
-Gracias- Y como acto de agradecimiento Onodera beso los dulces labios del pelinegro este lo correspondió, lento, suave y profundo se besaban. Takano pasó una mano por debajo de la cadera de Ritsu y lo subió para acomodarlo mejor en la cama. Takano bajo a besar el cuello y frotaba su cadera contra la de Ritsu, suave, calentándolo poco a poco, seduciéndolo. Los gemidos de Ritsu empezaron a sonar en la habitación ya casi vacía y estaban a punto de pasar a la siguiente fase cuando el ruido del timbre empezó a sonar.
-Amm Ah Takano-san el timbre, déjame ir a ver quién es.-
-No, tú ya no vives aquí- contesto Takano sin dejar de besarlo, pero tal parece que la otra persona era tan insistente y si algo le molestaba de sobremanera era que lo interrumpieran cuando estaba a punto de tomar al castaño y hacerlo delirar de placer.
-Agr mierda ve a ver quién es.- contesto y se puso de pie, Ritsu algo incómodo fue abrir mientras se acomodaba la ropa. Y cuando abrió la puerta se sintió el ser más pequeño del mundo y palideció por completo, la sangre se le fue a los pies.
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Yokozawa Takafumi se la pasó toda la semana ignorando olímpicamente a Kirishima Zen, no quería nada con ese tipo. Pero Kiririshima se la pasaba enviándole regalitos todo el jodido día.
-Yokozawa-san buenos días, vinieron a dejarle esos chocolates ¿De su novia?- pregunto de un modo picarón Hemni.
-No, seguro se equivocaron, ten toma- Y Yokozawa se los aventó al escritorio de Hemni.
Y así pasaron el resto de la semana, rosas, peluches, chocolates y cursilería y media las tres veces al día recibía esas “tonterías” por llamarlas de una manera más decente a como él les decía. Pero todas y cada una de ellas paraban en el escritorio de Hemni quien no sabía ya como acomodarlas.
Sorata seguía siendo cuidado por Hiyori y Yokozawa sabía que estaba por lo menos en buenas manos. Kirishima lo esperaba en su departamento por lo que iba y se quedaba en el de Onodera ya que el de estaba solo y lo tenía prácticamente solo para él y ropa tenía en el departamento de Masumune por su costumbre de a veces dormir ahí, despertando celos de cierto castaño quien trato de ocultarlos pero no le sirvió de mucho ya que ambos mayores se dieron cuenta y fue la burla de Takano y Yokozawa se limitaba a presenciar esas escenas.
El sábado se fue a casa de sus padres pero sabía que ya no podía evitar más al editor de Japun por lo que el lunes definiría correctamente su relación.
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-Ma-ma-má ¿Qué haces aquí?- pregunto dudoso Ritsu y la Sra. Onodera se abrió paso, quitándose los zapatos.
-¿Qué hago? ¿Cuándo le pensabas decir a tu pobre madre que estabas en cinta?- pregunto la sra Onodera con un extra de dramatismo.
-¿Co-co-como es que te en-te-teraste?-
-Bueno como toda mujer me fui hacer mi chequeo y “accidentalmente” vi tu historial médico y ahí decía que estabas en cinta ¿Quién es el padre? Y no me vengas con eso de “No quiero hablar de ello” “No lo sé” “No me importa” “Déjenme en paz” o como cuando tenías tus cambios de humor decías “No tiene padre” y salías corriendo, en ese momento lo entendí pero quiero saberlo.
-Bueno mamá eso es algo ammm-
-Yo soy el padre- La potente figura de Masamune se hizo presente en la sala- de ambos bebés- agrego Takano y la Señora Onodera se quedó paralizada ante ese muchacho.
-Mamá siéntate por favor- Ritsu sentó a su madre en el sillón de la sala y se puso de rodillas ante ella- Él es Takano Masamune y si él es padre de ambos embarazos hace diez años nos conocimos en el instituto él era mi sempai y de ahí me embaracé, por un mal entendido nos separamos y cuando entre a trabajar a Marukawa el resulto se mi jefe, mamá ya nos arreglamos y… ¿mamá?- Ritsu paro su historia al ver que su madre no tenía expresión alguna y sabía que esa noticia no ayudaba en nada su gastritis crónica.
La señora Onodera se paró del asiento y señalo a ambos jóvenes gritándoles.
-SIENTENSE- y como si fuera una orden militar ellos obedecieron y al mismo tiempo se sentaron en el sillón.
-PERO ¿QUE SON? ¿ADOLESCENTES HORMONEADOS? EH ¿QUÉ HAY DE CUIDARSE? RITSU ¿HACE CUANTO QUE NO VAS A TUS CHEQUEOS?
-Cinco años… mamá- contesto bajo y viendo al suelo.
-AGR TE DEJO Y TE DESCUIDAS Y TU – se dirigió a Takano- YA TIENES PLAN DE VIDA ¿Dónde VAN A VIVIR? ¿Qué VAN HACER? ¿Cuándo ES LA BODA?
Takano vio la oportunidad perfecta.
-Señora Onodera eso no es problema alguno, gano bastante bien y podre con ambos el único detalle es que Ritsu no se deja, se enoja de todo, no entiende que eso le hace daño al bebé-
-¡Pero qué demonios! ¡DEJA DE DECIR ESO!- Grito Ritsu
-Ve, es eso a lo que me refiero-
Onodera estaba a punto de dejar a su hijo huérfano de padre, mira que acusarlo con su mamá
¡Que infantil!
-DE QUIEN ES LA MALDITA CULPA-
-RITSU- lo callo su madre- DEJA DE ENOJARTE POR TODO.- La señora Onodera respiro profundo para poder continuar- Estableceremos fecha para la boda y hablare con tu padre, tu compromiso con Ann-chan queda obviamente disuelto, nos reuniremos para hablar de la boda, ahora me voy tengo que hablar con tu padre- Y sin más se fue dejando paralizados a la pareja.
-Bueno, no es que no me quiera casar contigo pero pensaba pedírtelo yo y no que tu mamá nos lo pidiera a ambos- rompió el silencio Takano.
-¿Pero por que dices tanta mierda? Agr me largo- y curiosamente se dirigió a lo que era su habitación cuando era soltero.
-Ritsu, te amo- y se puso enfrente de el para poderlo besar como solo el lo sabía hacer, Onodera se agarro de los costados de la playera de Takano y este lo guio al cuarto desnudándolo lentamente.
-Bien ¿Dónde nos quedamos?- pregunto Takano haciendo que su pequeño castaño se ruborizara.
Esa tarde lo hicieron suave y lento…
Takano recostó a su amor cuidadosamente en la cama lo desvistió mientras lo acariciaba, lo beso con devoción comiéndose mutuamente los labios. Ritsu no se quedó atrás quito la playera de Takano y toco aquellos pectorales tan bien definidos. El pelinegro después de tener desnudo a Onodera bajo a su miembro para hacerlo un exquisito sexo oral al castaño, beso, lengüeteo e introdujo el pene de Ritsu en su boca, lo acariciaba con su lengua mientras hacia un mete y saca. Ritsu sin querer resistirlo eyaculo en la boca de Takano quien lo trago todo.
Onodera mientras se recuperaba de su orgasmo y para despertar de nuevo a su miembro semi erecto desvistió a Takano se puso de rodillas y quito desabrocho los pantalones de Takano y después ambos quedaron desnudos solo viéndose la piel del otro. Ritsu se acostó de nuevo y abrió sus piernas, invitando claramente a Takano, este obedeció y dilato con cuidado y adoración al ojiverde para cuando estuvo listo lo penetro suave, y así fueron las embestidas, delicadas Ritsu movía lenta su cadera, se sentía tan bien, podía sentir como Takano lo abría lentamente con cada penetración y después como lo masturbaba, doble placer para su cuerpo y mente.
Takano por su parte también disfrutaba hacerlo de esta manera, no había prisa, no había tiempo, solo ese momento.
Ritsu sentía el final y abrazo a Takano este ya no podía seguir masturbándolo así, pero Ritsu inconscientemente encontró una forma de atender su miembro pego su cadera al estómago de Takano y de esa manera con cada penetración su miembro se acariciaba con la piel de Takano y este al sentir el húmedo y duro miembro de Onodera se sobre éxito abrazo a Ritsu por la cintura y lo apego más, ahora si podían llegar exquisitamente a su orgasmo. El pelinegro solo aumento la profundidad de las embestidas, sacaba su miembro solo dejando la punta dentro y se volvía a meter, sus gemidos eran a ese mismo compas, profundos. Ritsu se estremecía y sin poder más se corrió y sus paredes anales se contrajeron una y otra vez, Takano lo disfruto y también se corrió, cayeron agotados. Takano salió y vio cómo su semen salía y se escurría por las finas piernas del castaño, Ritsu respiraba tan profundo ese fue un orgasmo abismal tan delicioso, sus piernas le temblaban y Takano se acostó a su lado, Ritsu ya más consiente se acercó a abrazarlo y dormir un poco.
El embarazo y el sexo le daban un sueño terrible.
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Despertaron como a eso de las 7 de la noche.
-Takano, amm creo que deberíamos comer algo realmente tengo hambre.
-No te preocupes ya pedí algo, en seguida lo traerán- Y como si fuera voz profeta del pelinegro el timbre sono y salio a recibir la comida.
Comieron en la cama, reían y Takano consentia a Ritsu dándole de comer en la boca, era tan vergonzoso eso que todo el tiempo tuvo sus mejillas rojas, le daba un aspecto adorable.
Estaban tan felices que nadie ni nada podría contra eso.
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Espero les guste
Edited by Dany Suarez - 16/7/2014, 19:05
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AngyÜFujoshi98>u< .
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ME ENCANTO!!!!!!!!!!!!!!!!!!! *¬* conty por favor, me hizo llorar lo del bebe de Onodera, mas bien TODO EL CAPITULO ME HIZO LLORAR TwT crei que Onodrea se quedaria callado y no le diria a Takano, pero todo salio bien, y sobre Yokozawa ¬_¬ pues no es mi favorito, pero Kirishima essss taannnnn shhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhh *¬¬¬¬* babeo por el (notantocomoOnoderaperobueno) XD ...y que se traeran los romanticos 7u7 hehe que emocionante~ XD sigue por favor!!!!!!!!!!!!!!!!!!! . -
Star black .
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Conty
Esta tan asdasdasda *-*
Que lindo y triste por el primer bebe de Ritsu ;-;
Espero conty!
Bye y Besos!!!. -
Saga Alondra .
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Quiero conty!!! Me encanto tu fic que triste lo del primer bebe pero que bueno que todo salio bien o eso espero y porfavor NO MATES AL OTRO BEBE o te juro que caeré en depresión y espero que yokosawa vuelva con kirishima esperare la conty con ansias . -
monochibi .
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que lindo solo espero que zen sepa como recuperar a su osos me dio lastima lo del primer niño de ritsu pobresito y lo de su madre me mato de risa XD . -
Dany Suarez .
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Cap 6
Gracias por sus reviews me hacen tan feliz!
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-De verdad que no sé qué hacer, sé que para una reconciliación no será nada fácil, pero de verdad que lo amo tanto.- Hablo Kirishima Zen acostado en un sillón negro y con una gran aura de depresión.
-Es tu culpa- Exclamo la persona que estaba sentado en un sillón individual del otro lado mientras sorbía un poco de té.
-Ah ya lo se, pero no es como si pudiera evitarlo. El estaba abrazando a Takano y Takano reía a su oído y después salieron al departamento de Takano y cuando Yokozawa se cayó…
-…El ayudo a levantarlo y luego se volvieron abrazar y se fueron felices al departamento de Takano y ahí ya no sabes que paso porque pensaste que podrías contra todos los hombres del mundo y mujeres que se le acercaran a tu lindo oso menos contra su primer amor… bla bla bla, ¿Cuántas veces ya escuche esa historia?- dijo con fastidio la otra persona y es que ya había escuchado esa historia en la comida, en la cena, en el baño, caminando para ir de compras que ya se la sabía de memoria, Kirishima no cambiaba las palabras tan siquiera era la misma oración siempre.
-Eres mi madre, podrías darme un poco más de apoyo.- Hablo dirigiéndose a una bella mujer que a pesar de su edad seguía conservando su belleza innata y un cuerpo envidiable.
-Y te lo doy ¿Quién más podría aguantarte en ese estado? Incluso Hiyo se fue a quedar con Yuki-chan, pero lo repito es tu culpa, conozco al muchacho y dudo que sea de esos, por eso me agrada su relación, porque una mujer estaría contigo y quien sabe cómo trataría a mi linda Hiyo en cambio el, los ama a ambos, cuida de Hiyo y sabe cuál es su posición, respetando el lugar que algún día perteneció a Sakura. Es algo de admirarse- La madre de Zen habló y no es como si desconociera la relación de su hijo y Takafumi, Zen se lo dijo incluso antes de que anduvieran con la única intensión de que no hubiera malos entendidos y que vieran que su noviazgo era formal, pero Yokozawa desconocía que su suegra tenía ese conocimiento.
-El muchacho dudo que te perdone fácil, no lo sé Zen, mira que desconfiar de él… bueno en algún momento de su vida regresarían a ser amigos…
Zen suspiro pesadamente, él lo sabía, sabía que algún día Takano y Yokozawa regresarían a ser esos amigos inseparables, pero bueno no que sería de esa manera. Es que si tu amante te dice que tiene una emergencia y conociendo a Takafumi el no diría ni haría nada que molestara a los demás pero aun así Zen quería estar para su novio así que siguió al taxi y cuando reconoció ese camino casi muere, pero pensó que sería una casualidad, pero no. Yokozawa bajo corriendo del taxi y entro al bar sin dudar, el estaciono su carro y bajo para ver de que se trataba toda esta situación y lo que vio no le agrado, Yokozawa bebía una y otra cerveza o cualquier licor y abrazaba a Takano, lo veía reír a carcajadas y a Takano como le hablaba al oído y las mejillas sonrrojadas quizás por el efecto del licor. Después vio como ambos se dirigieron al departamento de Masamune, quería arrebatarle de sus brazos a Yokozawa pero contra Takano no podría, ese era el primer amor de su querer y si …
Pensamientos venían uno tras otro, pensó que era una mala jugarreta de su mente, pero Yokozawa no le decía nada, si claro que él tenía que enfrentarlo pero y si Yokozawa ¿seguía enamorado de Takano? él se metió a la fuerza a su vida… ¡Ah! ¿Por qué tenía que ser tan complicado todo esto?
-¿Sigues pensando en lo mismo? Sabes pase por algo similar- Hablo la mamá de Zen que regresaba de la cocina.
-¿En serio? Desconfiaste de alguien así…-
-No, desconfiaron de mí. Tu padre y sus celos- La señora tenía que contarle eso a su hijo si de algo ayudaba su experiencia.- Yo estaba enamorada de un amigo de tu padre, lo seguía a donde fuera, pero claro yo no era la mujer en la que él estaba interesada si no que era mi amiga, mi mejor amiga y ella en él, para mí no fue fácil asimilar todo eso, ya que aquí entre nosotros solo he estado enamorada de dos hombres: Aquel amigo y tu padre. Pero fue cuando conocí a tu padre, teníamos a ese amigo en común. ¿Recuerdas cómo te dije que conocí a tu padre?- pregunto sonriente la mamá de Zen.
-Si, en la boda de… ¡Mamá!- exclamo Zen incorporándose por completo en el sillón.
-Si, a ese amigo me refiero, estaba llorando a mares ese día mis esperanzas eran pisoteadas una y otra vez, pero llego tu padre y me consoló, poco a poco me enamoro, pero cuando éramos novios, recibí la llamada de ese amigo, yo ya tenía claro que nada podría pasar entre nosotros y aparte estaba enamoradísima de tu papá, así que salí con él, nos divertimos como si nunca lo hubiéramos hecho y tu padre nos vio y me armo una escenita lo termine y más tarde en hacerlo que cuando ya estaba pidiéndome de nuevo que regresáramos, pero no lo hicimos inmediatamente, me enviaba rosas, iba a buscarme, a veces el amor le gana al orgullo y pues yo ya estaba embarazada de ti, amaba a tu padre, así que volvimos a ser la pareja del año.- termino la Señora Zen su relato- ¿Entiendes lo que quiero decir?
-¿Qué tengo que embarazar a Takafumi?- Contesto Zen, diciéndose que no sería mala idea…
-Idiota, lo que quiero decir es que vayas por él, le ruegues que regrese contigo, así que anda lárgate, que si sigues con tu depresión acabaras con la vajilla de tanto que rompes platos y vasos pensando en él.- Zen fue sacado de la casa de su mamá con el único fin de que fuera a rogarle cara a cara a Yokozawa, ese no era el problema, el problema es que él lo aceptara.
Domingo por la tarde y seguía pensando que hacer con su amor.
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Takano y Ritsu, ese par no se levantaba de la cama. Hacían el amor una y otra y otra vez, estaban pegajosos de semen y sudor. Pero hablaron como nunca, contaron sus historias, anécdotas y reían de ellas, toda una pareja melosa que empalagaba a quien estuviera cerca. Takano durmió con su cabeza apoyada en el vientre de Ritsu y este lo contemplaba ¿Cuántas veces no soñó con que Takano durmiera así? Claro que lo amaba pero su orgullo, el miedo, la inseguridad son cosas que no se toman a la ligera y menos cuando has perdido alguien que llevaba tu sangre que era fruto de la total y completa entrega que tuvo hacía Saga Masamune y ahora hacia Takano Masamune, bueno aun no era completa pero poco a poco lo lograría, viviría solo para darle amor al pequeñito milagro que cargaba en su vientre y aquel hombre que estaba acostado en ese sitio. Ese domingo lo conoció, supo más cosas de su querer por ejemplo que necesitaba dos tazas de café al día por lo menos, que amaba todo tipo de comida excepto el repollo ese lo odiaba y también averiguo que le encantaba ver dormido a Takano, nunca había prestado atención a eso por completo se veía realmente tierno y también descubrió que Takano solía roncar si dormía plácidamente.
Una fuerte punzada en el vientre le hizo estremecer, sudo frío y no pudo hacer más que abrazar a Takano y tratar de dormir ya había tomado su medicamento, quizás solo fue de cansancio…
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Lunes por la mañana y todo seguía normal, Takano memorizo todos los medicamentos que tomaba Ritsu, sus horas así como también los ingredientes activos. Se encontraban en la editorial trabajando, bueno Ritsu solo tenía un par de autores ya que Takano no quería que se esforzara de más y esa era una orden directa de el cómo su superior. Pero esta vez Ritsu no chisto ni se quejó solo obedeció.
-Masamune, maldita sea ¿Por qué no se imprimieron más copias de ese manga?- Entro colérico Yokozawa
-¿EH? FUE TU SUPERIOR, PREGUNTALE A ÉL
Y así iniciaron otra discusión que ya era tan conocida entre esos dos.
-Yokozawa ¿Qué demonios haces metido aquí? Necesito la propuesta de mi manga, deberías estar en tu oficina- Kirishima iba pasando y vio como esos dos discutían tan cerca, simplemente no lo pudo evitar, se supone que iba a arreglar las cosas pero es que esos dos ¿No se podrían separar? Discutir tan de cerca no es normal. Todos quedaron helados ante la presencia del editor en jefe de la sección de Japun.
-¿Qué propuesta? Todas ya fueron enviadas hace más de dos horas revise señor Kirishima su escritorio antes de interferir ¿Acaso es su costumbre atacar sin antes verificar los hechos?- Yokozawa estaba hecho una fiera, y los de edición Esmeralda estaban tensos. Takano más o menos entendió de que se trataba esto, celos, no había de otra pero bueno un poco más no harían daño además lo haría pagar por haber lastimado a su amigo del alma.
-Kirishima- habló Takano poniéndose a un lado de Yokozawa y abrazándolo por los hombros, Ritsu estaba a punto de estallar, pero algo en su mente le grito que se detuviera y confiara en Takano- ¿Qué te trae por aquí?
-Solo ando buscando al jefe de ventas- contesto Kirishima recargado contra el marco de la pared.
-Ya veo, pero ¿sabes? El ahorita está ocupado conmigo, te lo mandare cuando acabe con el- y se acercó al oído de Yokozawa diciéndole- ¿No es así Ta-ka-fu-mi?- Este se sonrojo de inmediato si aún estuviera enamorado de Takano no hubiera dudado en declararse y gritarle a los cuatro vientos “Takano violame”, Ritsu estaba colérico, pero recordó que ayer le dijo algo acerca de la relación que mantenía Yokozawa y Kirishima y que andaban peleados, sabía que era probablemente un estúpido juego de Takano pero en casa se las haría pagar. Kirishima estaba al borde de la histeria no aguanto más y se fue.
Cuando quedaron de nuevo solo los editores de Esmeralda y el jefe de ventas, gatioso estallo.
-¿QUÉ MIERDA FUE ESO? SABES QUE MASAMUNE ME LARGO, NO ME HABLES EN LO QUE RESTA DE TU MISCERABLE VIDA.
Takano solo reía internamente al ver a su amigo irse tan tsundare y ver la cara de Kirishima también le causo gracia. Takano era un maldito sádico.
Ritsu se lo tragaría vivo, confiaba en el claro, pero agrrrr, entendía que era una venganza contra Kirishima pero no podía evitar sentirse celoso…
Kirishima intercepto a Yokozawa antes de que este subiera al ascensor y lo arrastro a un pasillo (si el mismo en el que estaban Takano y Ritsu la semana pasada)
-¿Por qué mierda estas con él?- gruño el rubio
-Y a ti ¿qué te interesa? Déjame ir tengo asuntos que atender.
-Tan juntos se la pasan ¿Acaso a un no lo has olvidado? ¿aún lo amas? – Kirishima no podía con su rabia.
-¿EHH? QUITATE DE MI CAMINO- Gatioso trataba de quitárselo de encima
-¿Me amas? ¿Tan solo un poco?, se que no puedo competir con ese primer amor tuyo pero si me das más tiempo se que podre lograrlo- hablaba Kirishima recostado en su hombro
-¿Qué? ¿de donde sacaste tanta mierda?- Yokozawa no daba crédito después de todo Kirishima aún no lograba entender que el ya no amaba a Takano de esa forma o a menos que…
-Tu y el en verdad son solo amigos?, ¿sigues viéndolo como amigo? Yokozawa te amo, de verdad que te amo, quiero pasar el resto de mis días contigo, que me cuides cuando enferme, que me levantes, que te quedes a mi lado y veamos a Hiyori crecer juntos que cuando este anciano solo estar a tu lado y así morir, te amo tanto Takafumi que tengo miedo de que te alejen de mi lado ya perdí a alguien no quiero hacerlo de nuevo. Di que me amas aunque sea solo un poco-
Yokozawa estaba más que conmovido, amaba ese lado de Kirishima de verdad que lo amaba y tenía por seguro que a Takano solo lo tendría como su amigo y eso lo hacía inmensamente feliz, Yokozawa solo abrazo a Kirishima.
-Escúchame animal, quiero a Takano.- Kirishima se tensó, lo sabía siempre lo supo- como amigo, él es mi mejor amigo, nos hemos apoyado el uno al otro siempre y se que el me necesita en estos momentos y eso no cambiara estaré para el siempre, pero a ti grandísimo idiota te amo, te juro que te amo y es gracias a ti que puedo volver hacer amigo de Takano y apoyarlo sin ninguna restricción, sin sentirme mal ¿Entiendes lo que te quiero decir?
Kirishima sonrió
-Entonces ¿me perdonas?-
-No, tendrás que hacer algo grande para que eso suceda pero vas por buen camino, deja de hacerme tanta mierda cursi, tengo que irme, es la hora de comida de Takano y Onodera y traje sus bentos.
-¿Qué? ¿Por qué?- pregunto curioso Zen
-Porque no pude dormir y Takano no sabe mucho de comida nutritiva y Onodera, ese niño mimado, menos así que prepare unos para ellos en mi noche de vela, ¿Por qué mierda te estoy dando una explicación?
-Por que me amas, ah sí y quiero sexo de reconciliación, todo apasionado, mandare a Hiyo con mi mamá así que prepárate.- Zen se fue feliz dejando la ira y vergüenza en Yokozawa seguro se desquitaría con sus subordinados.
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Pasaron dos semanas y no Zen y Takafumi no tenían sexo de reconciliación el ciclo había iniciado y no les daba oportunidad de nada pero al menos se sentía aliviado de que Yokozawa se reconciliara con él y fuera todas las noches a cenar, solo faltaba hacer gemir de placer a gatioso, que se preparara porque ya había pasado mucho desde la última vez que lo hicieron y estaba ansioso, prepararía algo hermoso.
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En la sección de Esmeralda estaban todos callados concentrados en su trabajo, hasta que el llanto de un bebé interrumpió eso, Takano miro a Onodera y este lo miro como diciendo “Si, imbécil los bebes lloran desde el vientre ¡No soy yo, idiota!”
Después todos se miraron entre sí hasta que vieron que Hatori Yoshiyuki se levantaba y caminaba hacia la pared que le deba la espalda… y cargaba un bebé, un momento ¿desde cuándo Hatori tenía un bebé? No ¿Por qué nadie se dio cuenta que había un bebé en la oficina?
Hatori lo meció en sus brazos y justamente Chiaki se aparecía todo desalineado, despeinado y con una sonrisa nerviosa.
-Tori, perdóname de verdad perdóname, me quede dormido y y y dame al bebé- hablo Chiaki ignorando por completo a las personas a su alrededor y corriendo hacia Hatori.
-Si está bien, pero sabes no puedo hacerlo todo yo solo, debes también que poner de tu parte.
-Tori de verdad lo lamento es que estaba cansado y sé que dije que lo cuidaría yo en las mañanas pero pero ahh lo lamento-
-Sí, está bien, anda tómalo- Chiaki estiro sus brazos pero ni Hatori podía dárselo y Chiaki ya había movido en diferentes posiciones sus brazos para recibirlo pero en ninguna sentía que era apropiada.
-Ahhh Tori, espera si puedo.- pero no ninguno de ellos dos podía hacerlo.
-A ver ustedes, dénmelo- Takano se paró y tomo en sus brazos al bebe que se veía sumamente tierno.- sensei pondré al bebe recargando su cabecita en su hombre usted lo tomara de sus muslo y yo lo soltare- Chiaki obedeció y Takano deposito con sumo cuidado al bebe en sus brazos Chiaki lo tomo y de esa manera el bebé acostó su cabecita en el hombro y con su antebrazo lo sostuvo de sus pompis y Hatori coloco en su otro hombro la pañalera.
-Waaaahh gracias Takano-san de esta manera me acomodo mejor-
Todos absolutamente todos quedaron sorprendidos hasta los que iban pasando se detuvieron para ver esa escena épica en donde el Jefe en edición de Esmeralda supiera cargar un bebé. Ritsu se quedó sorprendido, él pensaba que cuando naciera su bebé el sería el más fraternal y Takano el inútil pero eso cambio su perspectiva.
-Bien Chiaki vete con cuidado, no andes distraído la comida la deje en el refrigerador solo tienes que calentarla, dale la mamila cada tres horas, prueba antes tu que no esté muy caliente pero tampoco debe de estar fría, revísale el pañal, no te quedes dormido- Hatori le daba instrucciones y Chiaki trataba de analizar una por una tratando de mantenerlas en su mente tenía una responsabilidad con el bebé, tenía el que ser el adulto y por unas horas arreglárselas sin Tori. ¡Qué difícil tarea!
Chiaki se fue y se despidió de todos.
-¿Hatori-san de quien es el bebé?- pregunto curioso Kisa y es que el sospechaba de la relación amorosa que sostenía el sub jefe y su mangaka a cargo, no él estaba seguro que había una relación pero y el bebé de ¿dónde salió?
-Bueno, es una larga historia…- comento eso Hatori y todos callaron
-¡PONGANSE A TRABAJAR! Luego hablan de eso- Takano interrumpió, ante todo tenía que ver que sus subordinaros no se distrajeran.
Pasaron unas horas y Ritsu se encontraba ansioso hoy tenía cita con el doctor para ver cómo se iba desarrollando el bebé haciendo cuentas ya cumpliría 9 semanas y seguro ya tendría mas forma de bebé, se estaba hinchando y eso no le agradaba pero ya empezaba a sentir un bello y ligero abultamiento, la comida que a veces le preparaba Takano y Yokozowa era ligera para no provocarle malestares intestinales.
-Onodera- interrumpio sus pensamientos Takano- Es hora de irnos y no quiero llegar tarde vete adelantando. Ritsu obedeció ciertamente estaba preocupado y ansioso, aun no olvidaba la punzada que tuvo la otra vez, quería ver si todo estaba en orden.
El oji-miel dejo ordenes y se fue con Ritsu estaba ansioso y nervioso ¡Por Dios sería la primera vez que vería a su bebé! ¡Que emoción! No veía la hora para verlo. Y también notaba preocupado a su querer por lo que el también estaba preocupado pero ya quería llegar con el doctor.
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Llegaron con el doctor y estaban esperando su turno, el doctor Takeshi Ken los hizo pasar.
-Doctor buenas tardes, le presento a … a … Takano Masamune- presento nervioso el castaño
-Mucho Gusto Doctor, gracias por cuidar de Ritsu y mi bebé- Dijo Takano con una bella sonrisa deslumbrante “¿Cómo se escucharía decir “Gracias por cuidar a mi esposo e hijo”? Ah que lindo suena” se dijo así mismo
-Si, bueno es mi trabajo y Ritsu-kun es muy querido. Bien iniciemos con la consulta. Sientense por favor- Y así lo hizo la pareja.- Dime Ritsu-kun ¿Cómo te has sentido?
-Bueno lo normal, me empezado a hinchar y malestares estomacales, pero… hace dos semanas sentí un fuerte dolor en el vientre- Takano casi se desmaya ¿Por qué no se lo dijo?
-Bueno, tomaste tus dos litros de agua antes devenir ¿no?- Pregunto el doctor
-Si-
-Bien en ese caso, recuéstate te haré la ecografía- Mientras el doctor preparaba los instrumentos Takano le susurro
-¿Por qué no me dijiste?
-Bueno no le tome importancia, lo lamento pero hoy en la mañana lo volvi a sentir- se disculpo apenado Ritsu, tenía que involucarlo más en el embarazo.
-Esta bien, solo dime todo de acuerdo ¿Lo prometes?- Ritsu se sonrojo y asintió. El pelinegro sonrio.
-Bien, Ritsu-kun acuéstate- Takano lo siguió – Vamos a ver que tal esta…
-Mmmm ¡Aquí esta! Exclamo el doctor y lo analizo, esta por el momento bien- Eso hizo que la pareja se relajara.- Bien límpiate y prosigamos con la consulta.
Takano estaba maravillado ahí estaba su bebé hubiera llorado de felicidad si no hubiera sido interrumpido
-Amm Doctor puedo ir al baño- Ritsu pregunto inocentemente y el doctor le contesto que si, fue casi corriendo los efectos de los 2 Litros de agua ya habían hecho efecto y casi choca con otro doctor en la puerta se disculpo y salio corriendo.
-Takeshi, te habla tu paciente de la camilla 213 al parecer ya va entrar en trabajo de parto-
-Saga, permíteme te puedes hacer cargo ahorita voy estoy en una consulta muy importante, te lo agradecería bastante- En ese momento Takano se dio la vuelta y lo reconoció ¡MIERDA! ¿Cómo había olvidado que ahí trabajaba su padre?
-¿Masamune? ¿Qué haces aquí? – pregunto casi fríamente “Vaya ni un ¿Cómo estas?”
-Vine a traer a mi pareja a consulta- Fue la simple y sencilla respuesta que dio.
-¿Qué? ¿Vas hacer papá? ¿Te casaste? No me dijiste a pesar de todo lo que hice por ti- Ciertamente el Doctor Saga estaba emocionado tendría un nieto, quería abrazar a su hijo, si no era su hijo biológico pero fue el único hijo que tuvo.
-Bueno supuse que no te importaría- Casi reía a carcajadas Takano ¿Todo lo que hizo por el? JA! Vaya chiste.
-Soy tu padre a pesar de todo y si no fui el mejor eso lo sé pero seré abuelo- “Abuelo, abuelo, abuelo, abuelo.” Esa palabra resonaba en la mente del doctor Saga se sentía a morir de felicidad- Quiero conocerla- dijo con firmeza se notaba que de ahí había sacado ese carácter firme y autoritario Masamune. El doctor Takeshi se sorprendió el mundo era tan pequeño, hablo por teléfono para que uno de sus internados se hiciera cargo del parto esto iba para largo…
++++
-Al fin viernes tu y yo solos en casa- hablo seductoramente Kirishima
-Idiota, no estoy cansado- contesto
-Vamos, solo unas tres rondas no más-
-No, tengo sueño, déjame dormir y después veremos, aun no te perdono.
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-Si eso es lo que quieres adelante, por mí no hay problema- Se voltio y se dirigió al doctor Takeshi- y bien entonces los cuidados ¿siguen siendo los mismos?
-Sí, bueno no hay que pasar por desapercibidas esas punzadas, pero está creciendo bien el bebé-
-¿Qué tiene mi nieto Takeshi?- pregunto el doctor Saga, indagado por la salud de su nietecito, Takano lo tomo desprevenido, pero no dijo nada. Ritsu entro-
-Bien ya estoy aquí prosigamos con la consulta de verdad lo lamento, pero ya me urgía- Saga se quedó con cara de WTF, no entendía nada ese era un hombre, muy lindo y con facciones muy finas sí, pero era hombre ¿no?
-Así como les decía bueno el embarazo va bien pero Ritsu-kun y Takano-kun no puedo mentirles aún estamos observando cómo pasa, por el historial médico no podemos confiarnos, Ritsu-kun tu sabes que el mayor riesgo no pasa aun- Ritsu asintió con la cabeza baja, Takano agarro la mano de su novio y la sostuvo, trago saliva, y una angustia se apodero de su corazón.
-¿Qué está pasando?-Pregunto Saga.
Takeshi miro a Takano y este asintió dándole permiso de contarle lo que fuera, Ritsu estaba perdido en sus pensamientos.
-Bueno Saga, este joven que tu hijo tiene como pareja es fértil a pesar de ser hombre y tener estructuras análogas de una mujer, en su totalidad es un hombre no es hermafrodita ni nada por el estilo, pero misteriosamente puede concebir hace unos 10 años también lo estuvo pero a los 6 meses lo perdió si bien él tenía 15 años casi 16 y aparte hombre no pudo, su cuerpo no estaba preparado para eso, esa fue la principal causa de su aborto y ahora ha vuelto a quedar en cinta.- Ritsu derramo unas cuantas lagrimas
- ¿Y quién era el padre hace 10 años?
-Yo- contesto Takano- hace diez años conocí al amor de mi vida, empezamos a salir pero por un muy mal entendido nos separamos hace poco nos reencontramos y lo solucionamos.
-¿Y no te hiciste cargo de ese niño?- pregunto colérico, esa información afectaba a todos.
-Si tú me hubieras dejado quedarme contigo, hubiera tenido más oportunidad de buscarlo pero dejaste que mi madre me llevara aun cuando te lo rogué que no lo hicieras.
-Tu madre te llevo, ella te separo de mí, yo quise pelear por ti, eras mi hijo, TE VI CRECER, TE VI NACER, TU MADRE TE LLEVO DE MI LADO ERES MI HIJO-
-Si, por eso pasaba ignorado por ustedes- Takano estaba muy molesto.
Ritsu por los gritos regreso a la realidad.
-¿Takano-san? ¿Qué sucede?
-Mi amor ¿estás bien?- Ritsu se sonrojo.
-Hey, Ritsu es tu nombre ¿no? Yo soy Yamato Saga- El castaño lo voltio a ver y se helo, esa persona se apellidaba Saga igual que Masamune…- Si soy el padre de Masamune- Ritsu abrió sus bellos ojos verdes y el papá de Masamune se quedó impregnado por la belleza de la pareja de su hijo, si él fuera joven y gay no dudaría en…
-Mis más sinceros respetos Saga-san, soy Onodera Ritsu me complace conocerlo- El joven castaño ya se había levantado, interrumpiendo los pensamientos de Yamato, mostraba una leve inclinación a su suegro y abuelo de su hijo.
Takano se enterneció su niño era tan bondadoso, quizás solo era gruñón pero era tan lindo.
-Bueno es un placer conocer al… al …al otra papá de mi nieto- contesto Yamato.
Sin más se despidieron y Yamato Saga hizo la promesa de visitarlos la próxima semana, quería estar con su bello nietecito o nietecita… Sin duda los abuelos son diferentes a como fueron con sus hijos.
31 semanas y el milagrito se acercaba pero aun faltaba un largo trayecto que afrentar.
EXTRA
-Wow ese fue el mejor sexo que hemos tenido- Exclamo Kirishima tumbado al otro lado de la cama, Yokozawa no pensaba igual.
-Dime que utilizaste condón- pregunto Takafumi y es que no es que estuviera paranoico pero pues más vale prevenir.
-¿Cómo para qué? Me encanta correrme dentro de ti y ver como mi semen se escurre por tu bellas piernas- Zen parecía que no tenía llevadera ya estaba de nuevo acariciando los muslos de gatioso.
-AGR VETE A LA MIERDA Y MUERETE!- sintió las manos de Kirishima envolver su miembro ya está gimiendo de nuevo- Déjame estoy cansado
-No te preocupe mañana es Sábado, hagamos cositas de adultos- Zen sabía que la debilidad de Takafumi eran sus besos así que lo beso ingreso su lengua y tocaba puntos clave que sabía que le encantaban a su sexy oso y pues este no se resistió, mierda otra ronda pero esta vez iría arriba, si montándolo pero iría arriba.. -
AngyÜFujoshi98>u< .
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QUE LINDO!!!!!!!!!!!!!! waaaa ojala este bien ritsu-chan (aunque si me gustaria un poco de drama 7u7) hehehe pero muy bien, me gusto mucho, sigue asi por favor
PD: que al paa no se le ocurra separarlos, claro si valora su vida.. -
Silvia Genesis Ramirez Tellez .
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Hola!!! Me encanto tu fic, espero con ansias tu actualizacion... espero todo salga bien y no le pase nada malo al bebe de Ritsu... u.u
P.D: Me uno a la amenaza de arriba espero valore su vida... XD. -
Musubi-chan .
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*o* ya quiero saber mas~ los nostalgicos son de mis parejas preferidas asi que quiero conti conti!!!! este fic me gustó mucho >.< . -
Nomi 7u7 .
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KYAAAAAAAAAAA!!! 
AME TU FIC!!!......muy bueno....casi lloro >.<
COOONTY......SHI???
. -
Saga Alondra .
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sinceramente no pensé que subieras conty tan pronto me has alegrado el día y si ponle un poco de drama pero NO MATES AL HIJO DE RITSU y pobre de yokosawa jaja ese kirishima es demaciado directo
Esperare la conty con ansias. -
Dany Suarez .
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Capitulo 7
Releyendo el manga el nombre del papá de Masamune es KOTOKO SAGA!
Gracias por sus reviews :3 Hare lo mejor
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Ritsu cumplió los tres meses y había quizás aumentado un kilo o más de peso, pero su carácter no ayudaba en nada a esta etapa del embarazo.
-¡RICCHAN!- Entro Kauro con una sonrisa deslumbrante- ¿Me extrañaron? ¿Mis consentidos me extraños? Sería malo si no hubiera sido así- Si así es Kauro había entrado a la sección de Esmeralda, solo porque él quería así nada más.
-¿Kauro-sempai? ¿Qué haces aquí?- pregunto Onodera realmente sorprendido, si su embarazo era delicado pero no al extremo de tener a un médico las 24 horas, suficiente tenía con Kotoko Saga, su suegro, que estaba al pendiente de su desarrollo y también con Takano que lo tenía a sol y sombra vigilándolo y ni se diga de sus padres.
-Ricchan no me extrañaste es para que me digas “Sempai te extrañe” “Sempai estamos tan felices de verte” “Sempai vamos a una cita” no se cosas por el estilo. ¿Acaso no me extrañaron?- Pregunto en un tono demasiado sobre dramático.
-Minno ¿Por qué ese tipo habla en general? ¿Le seguimos el juego?-le susurro Kisa al oído a Kanade.
-No lo se- Respondió con una sonrisita.
-Si le extrañamos mucho amigo desconocido- Dijo Kisa asomando su cabecita por a lado de Ritsu.
-¿Eh? Ah si gracias- contesto algo desubicado Kauro.- Bueno Ricchan ya tienes tres meses ¿no? Ahhh de seguro tienes tus antojos de salmón.
-Cierto Ricchan te traje otro salmón preparado espero que no lo vomites esta vez- Otra vez Kisa se metía en la plática y le extendía el toper.
-No, Ricchan siempre los vomitara- Kauro lo agarro y se lo empezó a comer el- No importa cuantas veces lo quiera siempre le hará daño.
Era una clara indirecta para el jefe de edición Esmeralda, que observaba la escena de lejos ese tipo de verdad que lo exasperaba.
-Sempai ¿Pero que haces aquí?- pregunto Ritsu indagado por la presencia de Kauro que se paseaba por la sección como si fuera el lugar suyo.
-Vine a verte, si todo iba bien…-
-Si va bien gracias.
-Disculpe pero esta es una sección solo para empleados- hablo Takano
-Takano-san no te había visto, vamos no es como si fuera hacer algo malo, además soy el médico de Ricchan, tengo que verlo de cerca.- Una sonrisa surco por sus labios.
-Ah Takano-san quedamos en ir a comer con tu papá y ya se nos esta haciendo tarde, Sempai le parece si voy a comer mañana contigo y me dices que tal te fue en tu seminario- Hablo dulcemente Ritsu.
Kauro le acaricio la mejilla
-Lo que quieran mis consentidos-
-Gracias- contesto Kisa, aunque no tenía nada que ver con el. Kauro solo se confundió más.
+++
Takano y Ritsu caminaban hacia el restaurante que quedaba cerca de la editorial.
La relación con el Doctor Saga iba en aumento, Takano lo llevo a la tumba de su primer hijo y el doctor Saga no pudo evitar llorar ante tal situación, su apellido estaba también en la cripta y se le hacía tan bizarro a ver perdido a su nieticito que no tuvo nunca conocimiento, lloro y le pidió perdón a Ritsu y a Masamune pero más a su hijo por no haber sido el padre excepcional que Masamune esperaba, si él hubiera escuchado los ruegos de su hijo en aquel entonces y no dejarse vencer por el orgullo, otra historia hubiera sido, es lo que él pensaba y es por eso que todo eso él quería recompensarlo con el nieticito que venía en camino.
El castaño y el pelinegro llegaron al restaurante el cual estaba tranquilo y en un ambiente de tranquilad, pláticas entre socios o de parejas solo eso se podía apreciar. No tardaron en visualizar al Doctor Saga y se fueron a sentar con el.
-¿Cómo han estado? – pregunto con demasiada emoción y abrazo a Ritsu para después dirigir su mirada al vientre y tocarlo. Takano no le parecía muy cómodo que su padre le hiciera eso a Ritsu pero este no pareciera que pensara lo mismo solo se sonrojaba.
-Bien, ya no me dan punzadas Saga-san supongo que es el estrés- Contesto Ritsu.
-Bueno siéntense, Ritsu pedí por ti una ensalada rica en minerales, proteínas y calcio. Ahorita para el desarrollo del bebé eso esta excelente.-
“Pero si Takano-san y Saga-san son iguales ambos me dicen que comer y que no, son tan idénticos en personalidad que da escalofríos, por favor bebé saca otro cosa de tu padre menos la personalidad” Pensaba Ritsu mientras tomaba asiento. Masamune pidió también su orden y comieron en silencio.
-Masamune, ¿Ya le dijiste a tu madre que será abuela?- Rompió el silencio el padre de Takano.
-No, no es como si tuviera mucho contacto con ella, no creo que se lo tome a bien.
-Estoy de acuerdo pero ¿Sabes una cosa?...- El doctor Saga no termino de hablar.
-MA-SA-MU-NE- La voz de una mujer se escuchó a las espaldas del pelinegro y este voltio a ver ¿Por qué ahora a todos les daba por reencontrarse?
-Mamá ¿Qué haces aquí?
-Lo mismo te pregunto ¿Qué haces aquí? Y más con esa persona- refiriéndose a su ex esposo- No tienes tiempo para mí, pero si para el ¿no?.
-Nanami también me da gusto verte- Dijo Saga.
Y como en la mayoría de las discusiones que sostenía Masamune con su madre se quedó callado.
-No me hablas por teléfono ni nada por el estilo pero si vienes a comer con tu amiguito y esta persona que ni tu padre es-
-¡BASTA! Nanami ¿Sigues en las mismas? No cambias en absoluto, deja de ser tan fría y tus desplantes. Masamune es mi hijo incluso más de lo que es tuyo. Así que deja de decir tanta estupidez, como es tu costumbre y déjanos terminar tranquilos de comer.
-Kotoko no me hables así.-
-Basta, dejen de armar una escenita aquí y si estoy con mi padre porque a diferencia tuya él quiere que nos reconciliemos y él no es un “amiguito” es mi pareja.- Takano se levantó del asiento casi inconscientemente y Ritsu solo lo seguía con la mirada, si así era la situación en estos tiempos no se quiere ni imaginar cómo fue cuando el pelinegro aún era un adolescente.
-¿Qué? ¿Qué demonios dices? No te eduque de esa manera Masamune, no me salgas con estupideces de que mantienes una relación homesexual y tu- se dirigió a su ex esposo- te dices llamar su padre y permites semejante idiotez.
-No solo la permito, la defiendo, Nanami si no estás a gusto puedes desaparecerte justo como lo hiciste en el matrimonio y en el divorcio.- El doctor Saga también se había levantado no permitiría que se expresara de esa manera.
La señora Takano sonrió burlonamente y su mirada acusadora se dirigió a Ritsu.
-Tu deberías dejar a mi hijo, él puede conseguir cientos de mujeres y partidos mucho mejor que tu-
-Dije que basta, te puedes retirar si eso quieres, pero a mi pareja no le hables así.- Ritsu se levantó para tratar de controlar a Masamune que estaba realmente molesto pero su mirada también reflejaba tristeza.
-¿Qué le hiciste a mi hijo? Con que lo engatusaste, si solo quieres divertirte un rato ya lo has deber hecho entonces ya retírate- Nanami seguía atacando.
-Nanami, basta ya por favor déjalos en paz-
-Kotoko tu a mí no me dices que hacer ¿Cómo puedes soportar semejante aberración?- A Ritsu y su estado de ánimo junto con su embarazo delicado esas palabras no pudo soportarlas, su cuerpo se tensó y una fuerte punzada en el vientre le hizo estremecer.
-AH- grito Ritsu de dolor, la tristeza, la culpa, las palabras de Nanami todo se juntaba en su corazón y su bebé lo percibía, Ritsu cayo sentado en la silla tocándose el vientre.
-¡RITSU!- Gritaron al unisonido Masamune y Kotoko quienes inmediatamente se acercaron a ver que le sucedía, el pánico y la rabia se sentía en el ambiente.
-Mi amor ¿qué tienes?
-Ritsu ¿dónde te duele?- Pero Onodera no era capaz de articular palabra alguna, ese sentimiento y miedo que tuvo hace diez años más las emociones del momento le causaban un gran dolor físico y mental, solo podía abrazar su vientre.
-Masamune háblale a Takeshi dile que vamos para allá y pide un poco de agua y una toalla, está teniendo aumento de presión arterial.
-Así que con eso manipulas a todos- Dijo Nanami observando la escena.
-Una vez más y esta vez no te lo estoy pidiendo te lo estoy ordenando, retírate y no te quiero cerca de mi novio ni de mi hijo, así que vete.- Takano hablo bruscamente.
La señora Takano no entendía nada en absoluto pero el personal ya había llegado e hicieron que se retirara.
-Ritsu, vamos controla tus emociones, le puede hacer daño al bebé, respira e inhala- Hablaba el Doctor Saga- Bien eso es muchacho, te llevare a la clínica para revisar al bebé.
Ritsu asintió, Takano agarro en brazos a su amor y seguido de su padre tomaron un taxi y se dirigieron a la clínica del doctor Takeshi.
Después de tranquilizar a Onodera y checar que todo estaba bien con el bebé la alma regreso en padre y el abuelo que habían presenciado esa escena.
-No debe de tener emociones fuertes, debe controlarlas.- Takeshi hablaba con ellos, puesto que Ritsu aun dormía después de calmarlo.
-Masamune tienes que regresar a tu trabajo yo llevo a Ritsu a tu departamento y me quedo con él no te preocupes, después hablaremos que hacer con tu madre que seguro seguirá insistiendo.
-Bien, te los encargo por favor.
-Hijo tranquilo, lo hare, anda que también tienes cosas que hacer, ya te dijo Takeshi que están bien ambos no te preocupes yo estaré ahí, concéntrate en el trabajo ¿de acuerdo?
-Está bien, gracias- Takano como que no queriendo la cosa acepto pero de todas maneras regreso a la editorial. Mientras que su padre se llevaba a sus amores a casa.
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-Masamune tienes mucho trabajo, yo iré hacerle de cenar a Onodera, pero primero acaba con tu trabajo anda estate tranquilo.- Yokozawa le decía mientras terminaban de hablar acerca del suceso de esta tarde.
-Te lo agradecería bastante, mi padre tuvo una emergencia y no podrá quedarse más, de verdad muchas gracias!- Masamune se fue corriendo a la junta que tenía de último momento
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-Saga-san, no soy un niño- Se quejaba Ritsu.
-Pero si llevas uno a dentro así que pórtate bien. No le abras a nadie, no salgas solo, no te acerques a la cocina- Era la lista de instrucciones que dejaba Kotoko a Onodera quien solo las escuchaba.
El timbre del departamento sono y Saga fue abrir.
-Saga-san Buenas noches- Saludo cortezmente Yokozawa dudando que este lo reconociera.
-¿Tu eres …? Espera no me digas- Saga puso una expresión de pensar seriamente- Algo de oso… algo de gruñón… algo de gato ¡Claro! Eres Takafumi Yokozawa amigo de Masamune desde la universidad- El doctor paso a una expresión melancolica- Se quien eres y te agradezco por eso, fuiste más familia para Masamune que de lo que fui yo o su madre y eso realmente te lo agradezco, seguro que sin ti mi hijo nunca hubiera salido de ese hoyo.
-Bu..uueeno Masamune es un gran amigo- Contesto Yokozawa algo sonrojado por esas palabras.
-Luego te lo agradeceré como se debe, por el momento tengo que correr al hospital cuida a Ritsu a mi nieto- Se despidió Saga
“¿Qué cara tengo? ¿De niñero? No me gradué para andar cuidando”
-Onni-chan ¿Estas bien?- La pequeña Hiyori también lo acompañaba ya que Kirishima le dijo que hoy no podía estar con ella y como Yokozawa tenía que ir a supervisar a Onodera no le quedo de otra más que hacer que Hiyo le acompañara.
-Waahh es un departamento muy bonito- Exclamo Hiyo al entrar.
-¿Yokozawa-san? – Ritsu salio de la ercamara y vio que no venía solo una pequeña niña tan hermosa y con un bello semlante tan sonriente y sus mejillas rosaditas.
-Onodera ¿Cómo sigues? Masamune me envio hacerte la cena, ella es Hiyori hija de Kirishima-san.
-Oh vaya eres muy hermosa pequeña, me llamo Ritsu- El castaño se agacho a quedar a la altura de Hiyori y dedicarle una sonrisa fraternal y amable.
-Wahh Ricchan es muy lindo- Ritsu se sonrojo- Al igual que Onni-chan- Para los ukes fue demasiado vergonzoso ese comentario e incómodo.
-Porque no prendes la tele y ves lo que quieras, siéntete como en casa- dijo Ritsu – Mientras yo ayudo a tu “Onni-chan” con la cena.
-Gracias Ricchan- Hiyo se fue a prender la televisión.
-Yokozawa-san lamento que Takano le haga venir, no es necesario…
-No te preocupes, está bien es decir tu… ¡AUCH!- Yokozawa se cortó la palma de la mano con un cuchillo muy afilado, Ritsu alarmado fue al baño, pero iba tan nervioso ya que se veía una seria cortada que al momento de abrir la puerta se pegó en la cabeza haciéndose una cortada. Yokozawa corrió y puso por instinto su mano lastimada en la frente de Onodera, olvidando que se había lastimado ¡Demonios! Le había dicho que cuidaría de Onodera. Pero Yokozawa sintió unos calambres en el abdomen y de repente todo se puso negro y sintió su cuerpo pesado cayendo al suelo. Hiyo grito alarmada al ver a su onni-chan con sangre en la palma de su mano y tendido en el suelo y el castaño con sangre en el rostro y algo pálido.
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-¡Takano!- grito Yokozawa incorporándose, Kirishima estaba a su lado y Masamune con Onodera en la cocina terminando la cena que había dejado a medias Yokozawa.
-Onni-chan, me espantaste mucho, tú estabas y yo yo yo no sabía que hacer- Dijo Hiyori abalanzándose para abrazar a Takafumi entre sollozos.- Y después dijiste que te dolía mucho el estómago, hasta que llego Takano-san y te abrazo fue… fue como te calmaste Onni-chan.
A Onodera ni a Kirishima les gusto esa situación, Yokozawa se retorcía de dolor y llego Takano espantado por la escena y asegurándose que Onodera estuviera bien se acercó a su amigo y lo abrazo, diciéndole que se calmara, pero Yokozawa pataleaba y se retorcía de dolor hasta que Takano lo agarro con más fuerzas y diciéndole que se calmara después cayo inconsciente. Kirishima llego un poco después de Takano presenciando la escena y consolando a Hiyori sacándola de la habitación para que dejara de llorar, pero ella se resistía hasta que al fin cedió.
-Yokozawa sabía que eras fóbico a la sangre, en la universidad cuando me corte solo vomitaste, pero mira que desmayarte, digo tienes ya 27 años…
-Cállate, no se que demonios me paso.- Contesto fulminándolo con la mirada- Ya Hiyo, ya paso anda tranquilízate, discúlpame por haberte hecho preocupar.
-Yokozawa ¿Quieres que te lleve a casa? De todos modos en esa condición no puedes hacer mucho, anda.- Kirishima le hablo a Yokozawa casi él tenía que a ver consolado y tranquilizado al oso gruñón pero no fue así.
-¿No se quedaran a cenar?- pregunto Takano
-No, ya llegaste y tengo un fuerte dolor de cabeza ire acostarme a casa- contesto Yokozawa y es que era verdad.
-Bien entonces te llevare, pero creo que deberíamos ir al doctor- le dijo Zen con dulzura.
-No, solo vámonos por favor.
Se despidieron y cuando al fin estuvieron solos Ritsu se sento en el sillón, tenía solo un parche en la frente.
-¿Pasa algo?- pregunto el oji-miel.
-No- contesto el oji verde, pero esa respuesta no le pareció suficiente a Takano, llevo la cena a la mesa de centro y se sentó a su lado.
-¿Seguro? ¿Es por lo que te dijo mi madre? Ella siempre ha sido no te preocupes no dejare que se meta en nuestras vidas, yo te amo demasiado y al bebé- Takano puso una mano en el vientre levemente ya abultado- Ritsu se sonrojo y se golpe mentalmente por haber dudado de Takano y que lo dejaría.
-No solo es eso, Takano-san y si … y si Yokozawa-san te aparta de mi lado … y si aun sigue enamorado de ti… el dijo que si yo te hacía daño te apartaría de mi lado y yo no quier que te quedes con la idea de que si no estuviera esperando tu hijo yo nunca me ubiera declarado, hubiera tardado más pero lo habría hecho, el bebé solo fue un empujo para decirte cuanto te necestito a mi lado…- No pudo terminar de hablar los labios del azabache ya estaban tomando los suyos.
-Déjame de provocar, estoy en mi limite, pero siento que ahorita no es buen momento de hacer el amor- Takano lo miraba a los ojos- Yokozawa no hará nada, ni siente nada por mí que no sea amistad el ama con locura a Kirishima, solo que él es muy protector y yo sé que me amabas, no es como si te pudieras resistir a mí.
-AHHHH NO SEAS FANFARRÓN
-Hey, ya hablamos ¿no? Controla tus emociones, no quiero pasar otro susto como ese.- Takano lo miro con adoración- ¿Entonces estamos bien? ¿no?
Ritsu sonrio y asintió después de un día largo cenaron en la tranquilidad de su hogar.
++++
-Hiyori, te pasare a dejar con tu abuela, necesito cuidar de Yokozawa ¿Esta bien?- Le decía discretamente Zen a su hija.
-Si papi, está bien.-
Yokozawa se extrañó que el camino que tomaban era diferente, era rumbo a la casa de los padres de Kirishima.
La señora Kirishima ya los esperaba en la entrada. Se acercó al carro de su hijo tomo a Hiyo, saludo cortésmente a todos y por ultimo le guiño el ojo a su hijo. Para después irse todo lo hicieron rápido porque sabían que Takafumi podía empezar a refunfuñar.
-¿Qué demonios fue todo eso? Por qué dejaste a Hiyo ella tiene clases mañana.
-Está bien mi mamá la llevara.- Contesto y dirigiéndose al departamento de Yokozawa.
-No seas irresponsable.
-No lo soy solo quiero pasar tiempo contigo, estaba muy preocupado con lo que paso hace rato y solo te calmaste cuando Takano te consolo.
- A dónde vas con eso?- Pregunto Yokozawa cruzándose de brazos.
-No lo se- respondió con sinceridad y es que es cierto el no lo sabía, no sabía que pensar. Yokozawa suspiro sonoramente.
-Estaré con Takano y Onodera por el momento ¿Cómo decirte esto? Dirás que formamos parte de un grupo de locos pero Onodera espera un bebé de Takano- Zen se freno estrepitosamente y lo miro con los ojos abiertos.
-Hey ten cuidado, puedes causar un accidente.
-¿Qué? ¿Cómo? ¿Es posible?- pregunto Zen haciéndose locas ideas.
-Bueno pues sí, yo lo vi, vi los estudios y no es la primera vez que Onodera está en cinta hace 10 años lo estuvo pero el bebé no pudo nacer, todo eso se entero Takano la vez que me fui a beber con él, por un momento pensé llevarlo a un psiquiatra pero no, ellos están esperando un bebé y para acabarla el embarazo es algo delicado, hoy se encontraron con la mamá de Takano e hizo comentarios nada agradables. La conozco una mujer sería y fría que no le importa nada más que ganar, ella se llevó a Takano a la fuerza y después se descuidó de él, como si el no existiera.
-Vaya, eso si es nuevo.- Kirishima acelero para llegar a un lugar desolado.
-Ten cuidado como manejas, idiota.
Cuando llegaron a un lugar en el cual ni una alma pasaba, Kirishima se desabrocho el cinturón de seguridad y se abalanzo contra Takafumi besándolo con pasión desmedida.
-Hagamos un bebé, vamos, démosle un hermanito a Hiyo- decía mientras besaba el cuello y le quitaba las prendas. Takafumi sentía una gran excitación como si no pudiera controlarse, su cuerpo le pedía que necesitaba a Kirishima dentro de él ¡ya! No puso nada de resistencia a pesar de ir contra su orgullo.
Cuando Kirishima le quito el pantalón y a pesar de estar algo incomodos en el estrecho lugar sus habilidades como maestro en la cama le facilitaban el trabajo.
Lo preparo y lentamente se internó en la cavidad de Yokozawa este se aferró por el cuello y lo atrajo para besarse, empezó a mover las caderas, el deseo no se calmaba necesitaba más de Kirishima, necesitaba más de el, más profundo.
Kirishima era contagiado por ese deseo y soltaba leves gemidos roncos que se volvían más fuertes, lo estab disfrutando maravillosamente, se movían al compás como si con eso se pudieran fundir en uno, no podían más necesitaban del uno y del otro y con eso Kirishima masturbo a Takafumi sin más eyacularon fuertemente. Yokozawa sentía como en su interior se llenaba sentía el semen de Kirishima llenarlo y como palpitaba su miembro e incluso el también sintió como se corrió violentamente.
Se relajaron y se acomodaron las prendas.
-Tu, idiota hacerlo aquí.-
-Bueno nopusiste nada de resistencia.
-Idiota
-¿Por qué Onodera puede tener bebés?- pregunto Zen de la nada
-Bueno, no se pero se supone que es parte de su cuerpo yo que se.- Takafumi pensó un poco más- Ni se te ocurra, idiota, yo no puedo ¿entiendes? – Contesto cuando iban llegando a su departamento.
-Bueno es que no entiendo que tiene Onodera que pueda quedar en cinta, ya lo sé que no puedes si no con tanta pasión que desbordamos ya te hubiera hecho muchos muchos hijos, un equipo de futbol con todo y directivos y los que están en banca- Se ruborizo al instante Yokozawa y se adelantó a su departamento.
-Pero sabes… quiero hacerlo de nuevo, en el carro fuiste apasionado pero quiero más-
A pesar de las protestas Takafumi Yokozawa termino en la cama desnudo y con Kirishima durmiendo en igual condiciones y muy pero muy satisfecho.
EXTRA
Takano y Onodera se besaban lentamente pero apasionadamente y ya llevaban un buen rato así.
Hasta que Onodera escucho en las noticias.
“El afamado escritor Usami Akihiko ha salido del closet, así como lo escuchan. Hoy mientras daba una conferencia acerca de un caso que llevo en Inglaterra de adopción gay él dijo:
-Amo a un hombre es el chico más especial en mi vida, lo amo y no dejare que nadie me lo quite, es lo mejor que me ha pasado y yo soy lo que soy por él, mis novelas son lo que son por él, lo amo -“
Era la declaración que salió y un lindo niño de ojos verdes y sumamente sonrojado estaba a su lado. Los periodistas se volvieron locos, las fans gritaban apoyándolos todo era un caos.
Después entre la multitud de periodistas y fans se abrieron paso, seguridad los acompañaba y la siguiente y última imagen que apareció fue de como el atractivo escritor subió a su novio a su deportivo y después irse a gran velocidad.
Onodera estaba boquiabierto
-Vaya que eso fue… wow, ya decía yo que sus novelas tenían algo diferente.- Dijo Takano quien estaba también en shock
Onodera solo lo vio y siguieron con lo suyo.
Su milagro se acercaba pero también sorpresas.. -
Nomi 7u7 .
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AAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAHHH!!!!!!!!!!!!!!!!.......QUIERO COMETER HOMICIDIO A LA MAMA DE TAKANO-SAN!!!
MALDITA VIEJAAA...COMO SE ATREVE A HABLAR ASI DE TAKANO Y RITSU?!?!?!??!?!?!?!
KYAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAA!!!!......que feo..que Yoko no se pueda embarazar
............esos dos...son unos traviesos 7u7
WOOOOOW.....no me esperaba esa confecion de Usagi-san....me quede igual que Ritsu xD
WAAAAAAAAAAAAAAAH!!!!......AMO TU FIC..ES TAN HERMOSO!!!.....SIGUE ASI!!
Espero la conty!!!
. -
Saga Alondra .
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[color=blue]jajaja pobre yokosawa siempre cae en las garras de kirishima (pero yo se que le gusta ) ewe, me dejaste e con la boca abierta en la declaración de usagi-san fue épico.
Sigue me gusta mucho tu fanfic espero la conty
~bye~/color]. -
Dany Suarez .
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Capitulo 8
Nomi: Me alegro tanto que te haya gustado, si esa señora pesada, pero siempre se me hizo así en el manga
Alo-chan: ¿Quien no caería en las garras sensuales de Kirishima? Grrrrrr
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Cinco meses, cinco maravillosos meses ya tenía Ritsu Onodera los padres de Ritsu los visitaban con frecuencia, Kotoko estaba al pendiente de todo, Nanami llamaba por teléfono para molestar y los de la editorial, si ya sabían de ese precioso ser, digamos que no se sorprendieron mucho. Kisa ganó la apuesta que consistía en 3000 yenes y que hicieran todo lo administrativo que a él le correspondía, por lo que salía más temprano y podía ver a Yukina y también a la bebe.
¿Cómo Yukina y Kisa acabaron con un bebé? Bueno el día que se confirmó la relación entre el jefe y el subordinado salió temprano, cuando iba pasando por la calle un llanto llamo su atención adentrándose al callejón encontró a una bebé de unos 3 meses nacida, miro a todos lados y se preguntó quién tendría el feo corazón de dejarla ahí, la sostuvo en brazos y lo primero que hizo fue ir con Yukina.
-Kisa-san, deberíamos llevarla al médico- Comento Yukina al verla, temiendo que estuviera enferma y así era tenía una fuerte infección estomacal por lo que la pareja se dedicó a cuidarla con sus nulos conocimientos en bebes.
Pasaron dos meses y el cariño por la niña aumentaba más y más incapaz de dejarla ir.
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-WAAAAAAHHHHAHHHHH- Grito Ritsu desde su asiento en la editorial inmediatamente Takano se levantó de su lugar y corrió a verlo.
-Ritsu ¿Qué te pasa? Ya saben que hacer, Hatori encargarte de todo…- estaba histérico Takano.
-Takano, cálmate.- le dijo Ritsu
-¿Qué me calme? Vámonos a la clínica anda, le llamare a mi padre… y
-Takano, solo se movió el bebé- Contesto Ritsu acariciando su vientre, sus ojos acuosos y sus mejillas rosaditas.
-¿Eh?- Takano se acercó a su novio – Se… se movió- Takano lo miraba sorprendido
-Si mira Wahh Ahí está de muevo- Ritsu hizo una pequeña mueca de dolor, pateaba fuerte el bebé.
Takano se acercó y se arrodillo ante él con nerviosismo dirigía su mano al ya bastante hinchado vientre de Ritsu. El castaño agarro la mano del azabache y la guio a donde podía sentir el movimiento del bebé y ahí estaba otra vez el movimiento que cercioraba que su pequeñito estaba ahí ¡Podía sentirlo!
Masamune estaba maravillado miro a Ritsu con fascinación y una estúpida sonrisa y después al vientre.
-Hola bebé, soy papá ¿Puedes escucharme?- Y como respuesta en la palma de su mano sintió el movimiento, se acomodó mejor y con ambas manos tomo la barriga de Onodera- ¿Estas feliz? Hey tienes que ser fuerte y venir conmigo y papi sano ¿De acuerdo? Yo estoy muy feliz de tenerte quiero abrazarte ya, pero no te apresures en venir yo soy muy paciente.
Ritsu lo veía conmovido y soltó unas pequeñas lagrimas se encontraba feliz, los del departamento Esmeralda los veían casi llorando dramáticamente (solo Kisa)
-Takano san ¿Por qué no se va con Onodera ahorita y nosotros nos quedamos a cargo? No hay mucho trabajo que hacer de todos modos.- propuso Hatori.
Takano por primera vez no negó a dejar su trabajo y en silencio tomo a Onodera y se lo llevo a su departamento donde podía sentir la calidez de su hijo y su amado primer amor.
++++++
Takano preparaba la cena como habitualmente lo hacía y Ritsu salía del baño.
-El bebé piensa que mi vejiga es un juguete- dijo Ritsu mientras con dificultad se sentaba en la silla del comedor.
-Bueno Ritsu es norma está creciendo tiene que hacerse espacio.
-Si lo sé, oye dile a tu papá que ya no envié más ropa ya no sé dónde acomodarla- dijo distraídamente Onodera.
-Ya le dije, pero dice que lo seguirá haciendo- Takano se acercó a la mesa a poner sus platos de comida- Creo que lo que falta es la cuna.
Ritsu aún no quería comprarla, no lo quería hacer y Takano sabía el por qué el hecho de comprar cosas para el bebé y que algo sucediera y después de eso deshacerse de eso sería algo realmente difícil, pero para Takano eso le traía esperanza y fe de que saliera bien, sin embargo y como siempre él no se opondría, no le quería hacer pasar un desagrado, lo amaba demasiado y estaría con él; además no sería mala idea de que el bebé durmiera en su cama con ellos los primeros días había leído que eso era recomendable.
-Pero lo haremos después ¿de acuerdo?- El castaño solo asintió.
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El sexto mes de Ritsu Onodera y Takano solo se lo llevaba a la editorial para checarlo a un 100%, no lo dejaba hacer nada de nada y Onodera se sentía avergonzado e inútil, por eso se ponía a corregir mangas pero sin estresarse solo para no verse mal.
-MASAMUNE ESA MALDITA PROPUESTA NO ES BUENA! YA VISTE LAS ENCUESTAS? ¿Por qué NO ME DAS DE UNA VEZ LOS PAPELES? NECESITO EL VOLUMEN ¿Dónde ESTA MI PUTO BOLIGRAFO? ¿Y MI PASTEL DE ZARZAMORA? ¿Por qué MIERDA NADIE ME PELA?- Iba maldiciendo Yokozawa desde su oficina hasta la sección de Esmeralda.
-Agr deja de gritar es molesto, una esa propuesta ni siquiera es de mi sección, dos esas encuestas son del año pasado, tres el volumen está programado para este viernes; cuatro tu bolígrafo lo tienes en tu mano y por ultimo tu odias la zarzamora.- Replico Takano más calmado y apretado sus finos dientes.
-¿Quién TE CREES PARA DECIRME ESO? SI ME VAS A DECIRME MIS ERRORES ADELANTE HAZLO, NO ES NECESARIO QUE TE PONGAS TAN PESADO.- Takafumi le decía y todo lo miraron con un “¿?”
-Takafumi aquí estas, lo sabía, toma aquí está el pastel de Kiwi que querías- Kirishima entro y le extendió el plato.
-¿Kiwi? Te pedí ZAR-ZA-MO-RA NO PUEDES TRAERME EL PASTEL QUE QUIERO. Pero a la de publicidad si te pide un lapicero se lo das y no lo confundes con un maldito saca-puntas.
-Pero dijiste que querías Kiwi y lo de…
-NO ME INTERESA- Yokozawa corto a Kirishima.
-Bueno solo pruébalo si no te gusta puedes dejarlo y ya solo pruébalo.
-No quiero y tu Takano tienes algún problema.- Dijo Yokozawa.
-No para nada, estas peor que Ritsu cuando tenía sus cambios de humor en el embarazo.
Hubo un silencio por un momento en la sección. Kirishima pensó las cosas ahora que lo analizaba bien Takafumi se parecía cuando Sakura estaba embarazada de Hiyori, no es que estuviera comparándoles para nada pero sus síntomas eran idénticos solo que Sakura se ponía a llorar Takafumi estaba de un humor muy pesado o a veces se tiraba al drama.
-¿QUÉ INSINUAS? ¡IMBECIL!
-Amm Yokozawa-san no es que no quiera crear en algo pero será mejor que se dé un chequeo.- comento Ritsu
-YO NO PUEDO TENER BEBÉS- Grito colérico gatioso
-Bueno eso puede ser cierto Tu y Kirishima no usan protección siempre ¿verdad?- Dijo Takano analizando la situación- Si pudieras tener bebés en la universidad yo………..
Yokozawa le tiro un manga en la cabeza y se fue con el rostro de mil colores.
Takano se fue a sentar a su lugar.
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Onodera estaba por cumplir los 7 meses y aquella noche fue de lo más normal, Takano había llegado a casa, hizo la cena, corrigió unos mangas pendientes que tenía y después se fue a dormir con el castaño, vio su hermoso vientre ya hinchado el bebé solía ser muy inquieto por las mañanas y se volvía más inquieto por lo que no lo quería arriesgar y lo dejaba en casa haciendo rondas entre el doctor Saga, el matrimonio Onodera y Kauro quien este último no pensaba hacer nada hasta que su amado castaño diera a luz y después manos a la obra conseguiría tener el amor del ojiverde no importaba si este tenía un hijo o no con ese sujeto que tanto odiaba.
Takano beso el vientre de Onodera antes de acostarse a su lado y dormir lo suficiente que su ajetreado día le permitía.
Ritsu sabía cuánto se esforzaba Takano y por eso no quería molestarlo a parte se sentía bien y feliz pero esa noche era diferente un dolor por debajo de la columna le molesto e hizo que despertara, respiro hondo esperando que se calmara el dolor más este no lo dejaba se incorporó en la cama y se quejó de dolor no quería despertar a Takano, sabía que este estaba algo cansado hoy se durmió hasta tarde, el lo esperaba en silencio en la cama, siempre, sintió un beso en su vientre y entonces por fin pudo el castaño cerrar los ojos y descanzar.
Se paró de la cama con dificultad por su hinchada barriga y se dirigió a tomar un vaso de agua.
-Vamos bebé estate quieto, no quiero que despertemos a papá el está cansado, por favor solo unos meses aguanta un poco más.- Onodera hablaba con su bebé como solía hacerlo
Cuando estaba a punto de darle un sorbo al vaso de agua el dolor de nuevo lo sintió pero esta vez con más intensidad tanto así que le hizo soltar el vaso y doblarse de dolor, sintió algo en sus piernas, un líquido y cuando lo vio se estremeció de sobremanera su pijama blanca con azul cielo estaba manchada de sangre, no podía articular palabra alguna, otra vez el dolor, se estaba insoportable de resistirlo se agarró del fregadero con una mano y con la otra sostenía su barriga y la abrazaba, empezó a soltar lágrimas de angustia y dolor.
Vio su mano manchada de sangre quería gritarle a Takano pero su garganta no le permitía dolor era intenso cada vez más.
Takano se despertó al escuchar el sonido de algo quebrarse en la sala y no ver a lado suyo a Ritsu le hizo levantarse e ir a ver si algo pasaba.
-Ritsu que haces despierto, vamos vuelve a la cama- Le hablo somnoliento el pelinegro. El castaño seguía en la cocina por lo que no se podía ver bien nada, pero lo miro con una expresión de dolor y miedo, entonces Takano reacciono y se fue hacía el.
-Oi ¿Qué pasa? ¿Estás bien?- cuando Takano llego a su lado y vio su pantalón ensangrentado sintió un temor demasiado grande.
-Ritsu…- Y la voz de su amante le hizo regresar la suya.
-Takano… el bebé- El llanto salió entonces de su garganta y gritos de dolor. Takano se apresuró a ir por él y sostenerlo antes de que cayera.
Lo cargo y lo puso en el sofá mientras llamaba a la ambulancia después de eso todo fue muy rápido.
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-Masamune, ten- Yokozawa le extendía un vaso de té calienta mientras aguardaban en la clínica.
“Amenaza de aborto” era lo que les habían dicho Takano estaba fatigado, demasiado angustiado y cansado.
Llevaban 3 días en el hospital y Onodera estaba demasiado mal. Takano iba a verlo. Pero no el dolor a un no se calmaba al quinto día después de haber ingresado enfermeras y médicos entraron con urgencia a la habitación que era de su amado castaño.
Estaba demasiado angustiado no le daban razón alguna de sus amores y el corazón lo tenía en los pies. Vio salir a Kauro ensagrentado, demasiado molesto y frustrado del cuarto de cirugía y se vieron Takano en silencio le rogo que hiciera lo posible para salvar a ambos y el enteniendo el mensaje entro de nuevo a cirugía a continuar luchando por salvar a esas vidas.
Despues de 4 horas, las más largas el doctor Takeshi salio y se dirigio a Takano quien estaba acompañado de Kirishima y Yokozawa, los tres se levantaron y Takafumi permaneció a lado de su amigo.
-Hicimos lo que pudimos, no nos quedó de otro más que sacar al bebé. Ambos se encuentran en terapia intensiva, lo lamento no sabemos que pueda suceder.-
Todas las emociones en ese momento se sumaron en Masamune, las pocas horas de dormir y de alimentación ya no pudo más, su cuerpo no pudo resistirmás y la tragica idea de perder a uno de ellos le golpeo el corazón. Cayo desmayado y Kirishima lo sostuvo en sus brazos, todos se alarmaron..
Un pequeño milagro Cap 11El pensó que al ser abandonado por dos personas que amo, no valía la pena volver a enamorarse. Su personalidad cambio y no había marcha atrás.Pero no sabía cuan tan equivocado estaba un milagro vendra |
