¿JUGAMOS A SER NOVIOS? (AKIHIKOXMISAKI) Pequeño mensaje

A pedido de sus padres, akihiko busca a una persona para tener una relacion sentimental. Y haya a la persona perfecta .. Misaki un chico "antisocial".

« Older   Newer »
 
  Share  
.
  1. UmikoYaoii
        +2   +1   -1
     
    .

    User deleted


    Muchas gracias por sus comentarios *-* Espero que me aya quedado bien... Aqui el Fanfic n.n

    Capitulo 2

    Después de lo sucedido en la escuela.. Usami invito a misaki a comer en un restaurante.

    -Gracias- Dijo Misaki amablemente al mesero que le acababab de entregar su plato de Lasaña, él observo al joven hasta que desaparecio detras del mostrador y nuevamente salió acercándose con una botella de algún tipo de vino caro-¿No crees que eso es demasiado?-susurró y dirigió a su mirada a Usami.

    El chico lo observó con sus cejas levantadas, para él eso era una comida normal.¿Qué era lo que supuestamente parecia demasiado caro?.

    -¿No te gusta este vino?- Preguntó Usami después de observar la mesa del restaurante de clase en donde se encontraban, todo parecía perfecto y aseado a excepción del plato de lasaña que había pedido Misaki que no se podía comparar a la fina selección de mariscos que había elegido el modelo.

    -Ni siquiera tengo edad para beber -dijo Misaki seriamente y en el rosto de Usami apareció una mueca. Misaki sabía que ambos vivían en mundos diferentes pero nunca se imaginó que la diferencia fuera tan extrema.

    -¿Qué edad tienes? -preguntó Akihiko de pronto curioso.

    -17, en un par de meses cumpliré los 18.

    El joven mesero llegó a su mesa y sirvió en ambas copas el vino tinto que salió de la botella de vidrio de color verdoso.

    Misaki tragó mientras el líquido era vertido en su copa, jamás había probado el vino y temía hacer alguna mueca extraña frente a todo el mundo en el restaurante.

    -Estás conmigo así que tu edad no importa -dijo usami atrayendo a mirada del chico que se había quedado observando el vino en su copa como si de sangre se tratara-. Pero en fin -suspiró Usami y con una señal de su mano le ordenó al joven mesero que se retirara-. Necesito que entiendas el propósito de esta petición.
    El castaño alejo la copa hacia un costado y clavó sus ojos en el modelo apuesto que estaba sentado frente a él, lo observó sin emitir ni un solo sonido y el peliplateado comprendió que el ojiverde le estaba dando la oportunidad de hablar.

    Usami de pronto estaba nervioso y era lógico que lo estuviera, jamás había tenido que confesar algo tan “vergonzoso” y mucho menos a un chico tan despreocupado como él que tenía en frente, sin embargo debía hacerlo, si no, el haberse humillado pidiéndole que accediera a salir con él y el besarlo en frente de todo el colegio no valdría la pena, así que respiró profundamente llenando sus pulmones de aire, apretó sus manos debajo de la mesa en puños, dejó salir el aire y conectó la mirada con Misaki.

    —Mis padres quieren conocer a mi "novio" —soltó rápidamente y rogó porque Misaki no le preguntara nada más. Aguardó el tiempo suficiente para ver la reacción de el castaño que en su rostro solo reflejaba la sorpresa y confusión y sin embargo siguió en silencio esperando a que el peliplateado le siguiera hablando para aclararle todo—. Bien… mis padres piensan que para mi edad y mi carrera que ahorita se encuentra en la cima —se permitió alardear, como si el ojiverde no supiera sobre su carrera—, debería de tener un novio lo cual ellos piensan que tengo…

    -El punto es que mis padres creen que tengo un novio en el colegio. Les conté que se parecía a ti…

    -Woow, espera -le volvió a interrumpir-. ¿Cómo que parecido a mí?

    -Sí -dijo Usami algo fastidiado-. Ya sabes, un chico completamente normal y común justo como tú -lo señaló moviendo su mano de arriba y abajo-. El problema es que un novio no está dentro de mi plan de vida en estos momentos y ya que sería un problema pedirle a cualquier persona el colegio y dado tu historial en la escuela de chico invisible -el castaño rodó los ojos-, pensé que serias perfecto para mi plan… y también -dejó volando esa última palabra.
    Misaki esperó a que se decidiera a terminar pero no lo hizo por lo que se vio obligado a preguntarle.

    -También ¿Qué?

    -Me enteré de que eres o eras actor así que supongo que tus dotes como actor me ayudarían bastante —finalizó.

    -Solo estoy en el taller de teatro, no soy realmente un actor pero si soy un maestro del engaño –presumió-, lo que no entiendo es cómo tus padres te creyeron una historia de que un tipo como tú -lo señaló imitando la acción anterior de él al señalarlo-, saldría con un chico normal de colegio.

    -Soy un modelo y un ejemplo a seguir, debo de ser un chico normal también. Salir con un modelo no me haría exactamente un chico normal ¿entiendes? -le preguntó y el ojiverde solo se encogió de hombros-. Eso es lo que soy.

    -Es decir que tus padres piensan que yo soy tu caso de caridad -dijo elevando ambas cejas.

    -No. Mis padres piensan que eres lo que más amo en la vida -dijo entre dientes.

    -Decir la verdad también funciona ¿sabes?

    -¿Me ayudarás? -preguntó al borde de la desesperación algo que había escondido perfectamente según Misaki.

    -Dije que sí, yo nunca rompo mis promesas -además que el muy maldito le había robado su primer beso y no es como si eso significara mucho para él pero casi lo dejaba sin respiración-. ¿Qué se supone que debo hacer?

    Usami suspiró aliviado y se dejó caer en el respaldo de la silla, desvió su mirada hacia un lado en donde se encontraba una gran ventana y vio a un par de chicas que se encontraban fuera del restaurante con cámaras digitales y fotografiándolo. Él sabia que no eran del colegio.

    ¡Mierda! Estaban fotografiándolo y a Misaki con él.

    -Debemos salir de aquí -dijo poniéndose de pie mientras se quitaba el saco del uniforme escolar-. Ven -le extendió la mano y Misaki rápidamente se puso de pie sin entender lo que pasaba-, aun no deben vernos juntos -dijo colocándole el saco sobre su cabeza y rodeándolo con un brazo, lo de la escuela si lo sabian ... pero de otro lugar no-. Disculpe -gritó a los meseros que se encontraban detrás del mostrador y 4 de ellos de acercaron apresuradamente a ellos-. En donde está su puerta trasera, necesitamos salir de aquí.

    Sin decir nada los cuatro jóvenes se acercaron a ellos y los condujeron para que entraran por la cocina, a Misaki le resultaba un poco difícil caminar cuando su vista estaba siendo obstruida por ese pedazo de tela azul marino lo único agradable era que tenía un agradable olor a perfume masculino que le recordó a su padre. Hablando de sus padres, ni siquiera les había avisado que llegaría más tarde a su casa.

    El auto se detuvo frente a una casa digna de millonarios, tal vez Usami no era millonario pero definitivamente era de la alta sociedad.

    Cuando apenas iban de camino a casa, Usami había estado con sus ojos fijos en la pequeña computadora portátil entrando a internet y borrando el par de fotos en donde habían salido los dos en el restaurante, al parecer era algo como un genio de la computadora ya que había entrado a la blog de el par de chicas y borrado las dos fotos.

    Ambos salieron del auto y ahora sí tuvieron el cuidado de cubrir el rostro de Misaki antes de salir. Caminaron en silencio y rápidamente entraron a la casa de los padres de Usami.

    -Joven Usami-sama -dijo una voz femenina de edad avanzada mientras cerraba la puerta-. ¿Se encuentra bien joven?
    Akihiko descubrió la cabeza de el castaño y este parpadeo varias veces antes de sacudir su cabeza y empezar a alizar su cabello que seguramente había quedado desordenado gracias al saco del peliplateado.

    -Todo está bien -le habló a la mujer que portaba un uniforme de sirvienta, el típico negro con delantal blanco-. El es mi… mi novio -pasó una mano por la espalda de Misaki ayudándolo a dar un paso hacia adelante y que ambos quedaran a la misma distancia.

    -Mucho gusto -dijo amablemente a la mujer frente a él-. Soy Misaki Takahashi-

    -Un placer Misaki-sama-

    -Necesitamos hablar e iremos a la terraza -le avisó a la mujer y con su mano en el hombro de Misaki empezó a caminar.

    Después de unos minutos de quietud continuaron con su plática pendiente.

    -Bien —habló el ojiverde atrayendo la atención de Akihiko—. No me dijiste que es lo que debo de hacer. Y creo que deberías de hacerlo antes de cubrirme con tu saco y arrastrarme a la casa de tus padres.

    El chico respiró y asintió.

    -Primeramente está es mi casa, la de mis padres está una calle más abajo y segundo “arrastrarte” a mi casa era necesario o ahorita ya estarías en las portadas de revistas y tu impopularidad habría cambiado drásticamente -se acomodó recto en la silla y apoyó un codo sobre la mesa redonda de cristal, quiso estirar sus pies pero si lo hacía chocarían con los de Misaki y se podría mal interpretar y después… como fuera, primero necesitaban aclarar muchos puntos antes de presentárselo a sus padres la próxima semana-. Como sea eso ya pasó. Ahora lo que debemos de hacer es hacerte pasar desapercibido durante esta semana. No hay problema que sepan de lo “nuestro” en el colegio pero debemos de tratar que ningún fotógrafo te fotografíe.

    -Eso es un problema. Yo viajo en metro para poder llegar al colegio y si alguien logró ver esas fotografías me reconocerán de inmediato -la voz de Misaki sonaba cansada y también lo estaba.

    -Por eso cada mañana iré a tu casa a recogerte…

    -¡Detente! No puedes hacer eso -dejó caer ambas palmas de sus manos de golpe sobre la mesa de cristal y sintió como estas hormiguearon debido al impacto-. Mis padres no se pueden enterar sobre esto.

    -¿No te dejan tener novio? -se vio obligado a preguntar.

    -No es eso, pero tendría que dar explicaciones de que esto no es en serio y habría reglas para llegar a mi casa a ciertas horas, prácticamente me controlarían –suspiró-, como lo sabrás esta no es la primera vez que hago un favor de este tamaño así que mis padres tiene experiencias como ir a la delegación a pagar la fianza de su hijo de en ese entonces 15 años.

    -¿Habías fingido ser novio de alguien anteriormente? -si eso era así todo sería más fácil para los dos.

    -En realidad fingí ser hermano de un chico que estaba involucrado con personas extrañas, pero el punto es que mis padres no se pueden enterar de esto. Tendrás que buscar otro medio -sugirió.

    -No, no lo hay, hablaré con tus padres sobre esto. Sé que podré convencerlos –dijo Usami muy confiado de sí mismo y es que solo hacía falta ver su rostro para que los adultos supieran que él era un chico de confianza.

    -Bien, suerte con eso -Misaki se cruzó de brazos consciente de que sería una difícil para Akihiko pero, ¿Qué importaba si él no iba a dar explicaciones a sus padres?, entonces que Usami lo intentara-. Dejando eso de lado, continúa con el tema.

    -Correcto. Mis padres están fuera y llegarán hasta la próxima semana y durante estos días te enseñaré a comportarte un poco más… —no sabía cómo decir aquella palabras sin que se escucharan mal—, elegante —dijo por fin.

    -Ya, entiendo que mi forma de caminar no suele ser muy correcta pero ¿Qué otra cosa puedo hacer mal?

    —Bien, aparte de tu manera de caminar mejoraremos tu postura al estar sentado, te haremos un ligero cambio de imagen -el rostro del joven dejó ver que estaba en contra de ese cambio en él y antes de que abriera la boca Usami lo interrumpió-, no será mucho, después de todo eres un chico normal del que me he “enamorado”, solo será un tratamiento. También te enseñaré baile de salón que en las fiestas de mi familia siempre se debe bailar.

    -¿Por qué debo aprender a bailar?

    -Porque te presentaré en la fiesta de aniversario de mis padres -la aclaró y continuó hablando-. También tendrás que beber vino durante el brindis -Misaki hizo una mueca de desagrado recordando el vino que habían servido en su copa en el restaurante y que no había querido probar-. Te enseñaré a beber sin que te provoque mareos o efectos secundarios. Y por último mejoraremos un poco de tu vocabulario, por suerte no eres un chico vulgar así que solo serán unas unas pequeñas palabras que tendremos que cambiar en ti.

    -Pero lo bueno es que te enamoraste de un chico normal -dijo Misaki rodando los ojos-. Entonces ¿A cuantas personar ya les has dicho que tienes novio?

    -Solo mi familia pero después de la próxima semana probablemente los medios de comunicación que estén presentes en la fiesta.

    Que cientos o miles de personas supieran sobre una "mentira" podría salirse de control y además si su relación era una mentira sería muy problemático terminar después. ¿Cuánto duraría su mentira?

    —¿Cuánto tiempo fingiremos ser novios? —preguntó casi en un susurro.
    Usami temido que él preguntara sobre eso. Dos meses era demasiado y sobre todo si tenía que soportar con las cámaras que ambos los estarían rodeando pero tarde o temprano se debía aclarar ese tema así que mientras más pronto mejor.
    —Aproximadamente dos meses -le contestó.

    Ambos permanecieron en silencio durante unos minutos analizando cuanto se podrían significar dos meses en la vida de una adolescente. Eso era mucho tiempo. Ambos lo sabían.

    -¿Y cómo se supone que terminaremos? -preguntó finalmente Misaki rompiendo el silencio entre ambos.

    -En dos meses y medio me marcharé a Europa para un trabajo de modelaje y esa es la oportunidad perfecta para que podamos dar a esta relación fin y será fácil explicarlo a las cámaras. Después de eso ya no te tendrás que esconderte de las cámaras. Por lo regular cuando un modelo termina con la persona que estuvo los medios pierden el interés en tal persona, sobre todo si es una persona común, y siguen la pista del modelo.

    -Tienes todo perfectamente planeado ¿verdad?

    Usami asintió orgulloso de poder planear una mentira tan grande pero también casi rezando de que todo resultara de acuerdo al plan.

    Después de pasar hablando durante horas de lo que sería su relación de noviazgo llegó la hora de que Misaki se tuviera que marchar. Desde luego Usami lo llevó a su casa pero ambos decidieron que decirles a sus padres sobre su pequeño gran juego debía esperar un par de días más.

    Por ahora había que concentrarse en ellos dos.

    Akihiko se levantó con el pie izquierdo a la siguiente mañana. La noche anterior había cambiado su alarma para poder levantarse más temprano y estar listo para pasar por Misaki a su casa y tener una charla con sus padres pero eso no pudo ser ya que su alarma no sonó. Entró a ducharse pero el shampoo le entró en los ojos irritándoselos y dejándoselos mortalmente rojos. Cuando bajó a desayunar completamente cambiado con el uniforme del colegio se le derramaron unas gotas de café sobre su camisa blanca por lo cual tuvo que volver a subir y cambiarse, por suerte siempre tenía un repuesto limpio en caso de ese tipo de accidentes.

    Cuando ya había subido al auto y revisó su mochila tipo maletín y se dio cuenta de que no llevaba el reporte de Ciencias Sociales que debía entregar ese día por lo que tuvo que regresar a su habitación y buscarlo. Por fin ya iba en camino hacia la casa de Misaki y deseaba que la plática con los padres del ojiverde fuera mejor de lo que había sido su mañana de 45 minutos.

    Su chófer estacionó frente a la casa pequeña de dos plantas en donde vivía su “novio” y después de un largo suspiro salió del auto para encaminarse a la puerta de la casa. Agradeció que ese lugar no estuviera lleno de cámaras fotográficas, si bien era solo un modelo las cámaras amaban seguirlo como si se tratara de una estrella pop o algo parecido.

    Llegó a la puerta y buscó el botón del comunicador pero no lo encontró por ningún lado, en su lugar a un lado de la puerta encontró un pequeño botón blanco sin cámara de video ni micrófono para hablar, confundido se aclaró la garganta y apretó el botón dejando escuchar un extraño sonido de campanillas en el interior de la casa, sus ojos se abrieron de la impresión al escuchar un grito proveniente de la casa. ¿Qué no podían usar el comunicador para avisarle que abrirían la puerta? Además ¿Cómo sabían que era él quien había presionado el botón blanco?

    La puerta se abrió solo un poco dejando ver una parte del interior de la casa y luego el rostro de una adolescente se dejó ver de atrás de la puerta.

    -¿Diga? -habló la pequeña mujercita que tenía un gran parecido a Misaki , era casi como una copia de él solo que con un par de años menos y en forma femenina.

    Usami abrió la boca para preguntar por Misaki pero algo se lo impidió, un golpe, un golpe en su espinilla que lo obligó a tragarse una maldición.

    -No, AKira -dijo la muchacha tomando en sus brazos a un pequeño de aproximadamente 4 años que tenía un avioncito de plástico en sus manos y señalaba al carrito que anteriormente había impactado en la espinilla de Usami-. Lo siento -se disculpó la chica mientras se inclinaba para tomar el carrito-. Perdone, ¿A quién busca?

    Akihiko sacudió su cabeza y aclaró su garganta.

    -¿Vive aquí Misaki Takahashi ? -preguntó dudando completamente de que el chico que iba a pretender a ser su novio viviera realmente en esa casa-. Sabes, creo que me he…

    -No, está bien, él vive aquí -abrió la puerta aún más-, pasa –cambió al niño de un brazo a otro y se movió de la puerta para dejarlo entrar-. Está en nuestra habitación, ahora le llamo.
    Usami asintió y dio un par de pasos para estar en el interior de la casa, la puesta se cerró detrás de él.

    -¡Hermano! -gritó la muchacha hacia las escaleras que estaban justamente enfrente de Akihiko-. ¡Un muchacho guapo te busca! -el pequeño se removió en los brazos de la chica y esta lo dejó en el suelo-. Vendrá en unos minutos.

    La chica desapareció rápidamente mientras seguía al pequeño hacia una habitación que quedaba del lado izquierdo de el peliplateado, lo que lograba distinguir era un pequeño televisor, un sillón aparentemente largo y juguetes esparcidos por todos lados.

    -¿Un muchacho? -preguntó en coro un par de voces masculina que salió del lado derecho de el ojivioleta.

    El modelo volteó y vio a dos hombres caminando hacia él, un hombre mayor que seguramente pasaba de los 40 años y a un joven que seguramente estaba entre los 20 años, ambos caminaban hacia él imponentes y con ceños fruncidos.

    Usami creyó que aún estaba dormido y estaba teniendo una pesadilla en donde una familia muy grande vivía en una casa tan pequeña y todos parecían ser una especie de gemelos sólo que de diferentes edades. Eran exageradamente parecidos, cabello castaño, tez blanca y ojos verdes.

    -¿Se te perdió algo? -la mirada del confundido modelo fue hacia su derecha para ver que el joven que estaba al lado del hombre mayor le hablaba esperando una respuesta impaciente.

    -¿Quién es? -preguntó otro niño de voz un poco gruesa para la edad que aparentaba, Usami supuso que le estaba cambiando la voz. Este salió de su lado izquierdo.

    -Yo… -empezó a hablar pero un grito chillón proveniente de su lado derecho captó su atención.

    Una pequeña de aparentemente 10 años se cubría la boca emocionada y lanzándole miradas eufóricas.

    -¡Eres Usami Akihiko! -exclamó la pequeña dando saltitos sin cruzar la línea imaginaria que ella había trazado a un par de metros de él.

    -¿Quién? -preguntó otra voz masculina. ¡Dios! ¿Cuántos eran en esa casa?

    -Es Usami-sama, el modelo -dijo la pequeña apuntándolo y ladeando su cabeza para ver al chico que había aparecido a un lado de ella y que el sí que era idéntico a la chica que lo había recibido en la puerta.

    AKihiko ya estaba mareado, nunca había visto a tantas personas juntas en un espacio tan comprimido y sentía que le empezaba a faltar el aire. No había tenido ataques desde los 7 años pero en ese momento no dudaba en que le fuera a dar uno.

    -¡Voy! -gritó una voz que en seguida reconoció y lo hizo suspirar aliviado. Unos pasos a toda prisa se escucharon por el piso superior de madera y en un dos por tres apareció Misaki bajando las escaleras de dos en dos. Cuando el castaño levantó su mirada y vio a AKihiko al final de la escalera pisó mal el siguiente escalón y se desequilibró.

    Él no se dio cuenta de que su cuerpo se había movido hacia adelante y sus brazos se habían extendido hacia Misaki hasta que lo tenía en sus brazos evitando el duro golpe que se hubiera dado contra el suelo.

    Todo se congeló a su alrededor, cada uno de los hombres y mujeres presentes en el lugar se quedaron en suspenso mientras Akihiko y Misaki estaban envueltos en un rápido y torpe abrazo, casi rosandose los labios...

    Continuara....

    Espero que les haya agradado c: Wa! Me alegra sus comentarios... en realidad casi no subo hoy porque estoy con resfrio y con fiebre leve... pero al ver sus comentarios me dieron animes de subirlo... espero que les haya agradado n.n

    Edited by UmikoYaoii - 18/5/2014, 17:06
     
    Top
    .
533 replies since 16/5/2014, 03:19   51692 views
  Share  
.