Konoha High School Of The Dead [+18] Cap 10 (Ultima Actualización 07/01/2015)

e importe o no, Naruto su medio hermano, le protegerá hasta el final, pero… ¿Podrá hacerlo entre cadáveres vivientes? SasuNaru, JuGetsu, SaiGaa e ItaDei.

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  1. LeyiUzumaki
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    Konoha High School Of The Dead



    Advertencias: Lemon, Incesto, Gore y Muerte de personaje.
    Categorías: Romance, Angustia, Drama, Horror, Fantasía, AU y Humor.

    Kira_96_M : Me alegra que te parezca interesante =^-^= espero la disfrutes, la termine antes de lo esperado, logre mi objetivo, ademas del de , querer escribir algo de zombis.

    Asahina Konogame : Bueno, me parece que sera antes, asi que disfruta la continuación.

    925 : El otro día, pensando todavía si escribiría un fic como este, vi una película vieja de zombi, que se llama "La noche de los muertos vivientes" " Night of the living dead" (No vi el principio cuando dijeron el nombre, pero al final decía y lo traduci) ( Es de los 90' (Luego tiene una de los 68' en blanco y negro ) Había una nena, que tardaba mucho en convertirse, fue mordida y tiene fiebre, aparentemente esta enferma y luego de la nada desaparece de donde esta y definitivamente dejo de ser ella. Así que ya veremos que pasara con Naru, ya veremos.


    Notas del capitulo:

    Konnichiwa
    Solo disfrútenlo, y me alegro mucho de traérselos cuatro dias antes =^.^=





    Capitulo 2: Guerra.





    Konoha High School, allí fue donde les anoto luego de la muerte de sus padres. A diferencia de Sasuke el sí pudo conocer a su Padre biológico y cuando murió en parte agradeció que su hermano menor no recuerde, que no haya nacido, siempre estuvo agradecido porque Minato llego a la vida de todos. Su Padrastro y Madre murieron, era mayor de edad, y nadie más que él podría ocuparse de Sasuke y Naruto, asi fue que lo hizo. Puso en venta la casa, se encargó de encontrar otra, además de todo el papeleo para el traslado.

    Sasuke no estaba feliz, presentía que nada bueno sacaría de tener que mudarse e iniciar en una nueva secundaria. Dejaron la bella ciudad de Tokio para irse a vivir a un pequeño pueblo, en las afueras de la maravillosa ciudad. La casa tenía cuatro habitaciones, para Naruto, Sasuke, Itachi y la Niñera llamada Shizune que no tardo en contratar. En parte era por Naruto, quien a pesar de ingresar pronto a primero de Secundaria seguía comportándose como un niño, un niño del que Sasuke termino cuidando según él, contra su voluntad, mejor que la misma Shizune.

    Podría jurar que su hermano menor tuvo toda la razón, ahora “Konoha High School” se había vuelto en una trampa para sus dos hermanos y él no podría llegar a salvarlos. Conservaba la esperanza de que sigan vivos, pero llegando a creer que Sasuke en verdad siempre odio a Naruto, lo dudaba mucho, además de ser tan antisocial, como era, siendo incapaz de tener unos cuantos compañeros, para exterminar a “Ellos” y seguir vivos, para encontrar un lugar seguro, si es que aun, lo había.
    — ¡Mira Itachi el pequeño presente que me dieron, se siente muy bien tenerla entre mis manos!
    Alto, de cabello largo lacio y rubio atado en parte en un coleta, de ojos celestes y cubriendo uno con el flequillo; era la apariencia del chico, a simple vista que se acercó a Itachi.— Es una X-K 11 también llamado como un rifle coreano, tiene un telemetro laser y un ordenador de balística para mayor precisión. Queda agregar que posee la capacidad de disparar de 20 a 30 ondas de municiones.
    —Después de todo sirvió mucho contactar a mi primo, y más siendo un sub-oficial del ejército…—Se dio la vuelta y en sus manos aterrizo una X-K 11 como el de Deidara. —Aunque quede él y nosotros, es una lástima que la mayoría de los soldados bajo su mando se convirtieron en “Ellos”.
    —Aquí tienes municiones, podrías necesitarlas, Sai me las dio para ambos, —mira hacia todos lados—no lo eh visto desde entonces, ni a Gaara menos… ¿Dónde podrán estar…?
    —Yo Ire a buscarles, cualquier cosa tira a mansalva y por favor, en la cabeza, no desperdicies las municiones.
    — ¡Claro que no lo hare, no soy un idiota!—suspira y dando unos pasos se pierde por un pasillo, blanco y con tubos parpadeantes en el techo, dándole un escenario más escalofriante al lugar, fusionándolo con la sangre en el suelo y el momento en el cual se encontraban.


    Uchiha Sai, 29 años, cabello corto y negro, ojos del mismo color. Piel pálida y dueño de un rostro sin expresiones la mayoría del dia. A simple vista parece un simple estudiante, por su aparente cuerpo flaco y sin trabajar, pero es nada más y nada menos que un sub-oficial del ejército hijo de un reconocido militar, Obito Uchiha y nieto de Madara Uchiha. Es el único pariente de Sasuke e Itachi, un primo que vive en los Estados Unidos y no concurre muy a menudo en las reuniones familiares.

    Uzumaki Gaara, hijo de la hermana de Uzumaki Minato, el padre de Naruto, por lo tanto es su primo. Ojos claros, piel clara, cabello rojo, tiene 17 años y es un estudiante de secundaria. A diferencia de Sai, su físico podría pasar como el de un militar, cuando si es un simple estudiante. Técnicamente ambos son primos y algo más que eso, luego de conocerse en la única reunión familiar donde el peli negro asistió. Un flechazo inmediato hubo entre ellos y pronto, Sai iba a buscarle a la salida de la secundaria.

    Itachi es el único que sabe de la relación de sus primos, aunque aparenta no saberlo y les deja disfrutar de lo que tienen, un amor verdadero y con bastante contacto físico. En esa hora donde “Ellos” emergieron del infierno, para hacer al mundo parte del mismo, Sai informado mejor que cualquiera sobre lo que estaba ocurriendo se encargó de ir por Gaara. La ciudad era un caos, apenas podía conducir y poco le importaba aumentar la velocidad, rescataría a su “Cerecita” cueste lo que cueste, no permitiría que le suceda cosa alguna.

    Durante su viaje y el de Itachi (Quien acaba de llegar de Estados Unidos) se comunicó con él, a pesar de que las líneas en tan solo minutos se saturaron. Quedaron en encontrarse en la base militar, gracias a un permiso especial que le dio Sai por ser quien es. La comunicación se vio interferida y obteniendo lo mas importante, saber que el uno y el otro estaban bien, pudieron respirar casi del todo bien. Como cualquiera estaba infectada, los amigos de Gaara fueron mordidos y él era la única presa disponible. Desde fuera Sai le vio con su rifle y con su refinada puntería acabo con cada uno, luego de muchos sucesos, logro sacarle de allí y asi, se lo llevo a la base militar, donde le refugio a él, a Itachi y el amigo Deidara.

    Sai perdió a su cuarteto de soldados, los únicos bajo su mando. Un grupo de otro batallón llego infectado en una Aero Nave de reconocimiento y asi la base se vio descontrolada en poco tiempo. El solo siguió protegiendo a sus primos y Deidara, quienes quisieron participar. Dándoles unas breves instrucciones fueron casi mejores como él y lograron subir al helicóptero; un AH-64 APACHE origen estadunidense. Asi pudieron aterrizar en el aeropuerto más cercano, donde se podía dar gracias, ya que había muy pocos de “Ellos” y fue fácil extermínalos.


    Sobre la pista se encontraba libre otra Aeronave de reconocimiento, luego de inspeccionarlo con Gaara, decidieron que era hora de descargar tensión. Cerro la puerta de la Aeronave, miro a su joven acompañante y se abalanzó contra él. Por un momento el peli rojo tembló, porque Sai parecía uno de “Ellos” pero a luz pudo comprobar que sus ojos no eran desorbitados y ni su piel era gris, como un cadáver en descomposición. Lo puso de espalda contra uno de los asientos, hecho su cabeza hacia atrás y empezó a deleitarse con el cuello de Gaara.

    Mordía y succionaba ese lugar como si fuera el último dulce sobre la tierra. Descendió su pálida mano hacia la entrepierna del chico, presionando allí, para arrancarle el primero, aunque inaudible, gemido al peli rojo. Aún conserva su uniforme y decidió que también era la hora de quitárselo, mas al estar impregnado con sangre, no propia, seca. Saco su mano del bóxer de Gaara, donde previamente la había introducido y con ambas manos pasadas por delante, lentamente desabrocho botón por botón. Hizo sus brazos hacia atrás y la camisa por fin fue hecha a un lado.
    —Sai… Ah…—pellizco uno de sus pezones, prosiguió con el otro y los dos al mismo tiempo, besando su espalda y dejando pequeñas marcas con sus labios en la misma. —Ah, ah, ah… Sai…
    —N-No te muevas tanto cerecita…—el rubio se sonrojo ante el apodo y gimió una vez más—Ah…
    — ¿Quieres que lo haga más rápido?
    —Si… Por favor…—tomo una vez más su miembro y aumento el ritmo de la masturbación, humedeciendo su mano lo suficiente, sin que Gaara se viniera aun, para prepararle.

    Su chaqueta y su camisa ya habían sido echadas también, a un lado. Su piel se rozaba sin medida con la otra, estremeciéndose cada una por su parte, ante el contacto. Bajo sus pantalones, sin quitárselos, abrió sus piernas, las acaricio y beso, para subir hasta sus muslos. Aparto dos de sus dedos y se abrió paso entre las nalgas, rozando su entrada, pasado sus húmedas yemas alrededor. Los gemidos de Gaara iban en aumento, los dedos de Sai se movían ya en su interior, sus piernas flaqueaban y con cada embestida temblaban, nada en comparación con el miembro del peli negro.

    Lo guio para sentarse en el mismo asiento, contra donde lo tenía, levanto sus piernas y ahora utilizaba su lengua, para recorrer y dejar lista aquella entrada que le llamaba a gritos, llegando a succionar la lengua.
    —Yo voy a… Ah, Sai…
    —Un poco más, cerecita, aguanta un poco más…
    —N-No puedo…—cerro sus ojos, trato de no correrse y lo logro. Era el momento, pero le haría esperar, quería disfrutar un poco más de ese joven cuerpo. Busco la boca de Gaara y se la devoro, mordiendo su labio inferior para adentrar ahí su lengua, encontrándose con la del pelirrojo. Cruzo sus brazos por detrás y profundizo el beso, mientras las manos de Sai recorrían su pecho, de arriba hacia abajo, deteniéndose antes de tocar su erección. —Hazlo, ya hazlo… N-No puedo más…
    —Como quieras…—sonrió de manera amable, le hizo levantarse y esta vez fue su turno de sentarse. Bajo la bragueta de sus pantalones, liberando su palpitante miembro, listo para entrar en Gaara. No evito mirarlo detenidamente y se sonrojo, el otro le volvió a sonreír, mientras poco a poco se sentaba en sus piernas, posicionado su miembro, para penetrarlo poco a poco. Fue lento y rápido, tomándolo de las caderas, mientras ambos inundaban la Aeronave de placer.

    Era cierto, no podía más. Tenerle de esa manera dentro le hizo perder el control y en una de las embestidas se corrió entre ambos, contrayendo asi su entrada, para que Sai pudiera liberarse dentro, no era la primera vez. Se dieron un beso, mientras trataban de recuperar el aliento y aunque no quisiesen, sabían que debían volver, no podían tomarse tanto tiempo libre. Mientras se arreglaban, escucharon los disparos, varios seguidos. Sai reconoció que la X-K 11 era dueña de la balacera que se daba dentro de una de las alas del Aero puerto. Deidara estaba solo, Itachi tenía sus propios problemas y Sai era el único que podría ayudarles en ese momento.




    Era su decisión ¿Qué podían hacer? De ninguna manera quiso que le disparara antes de que se convierta en uno de “Ellos”. Querían vivir y lo harían hasta lo que pudieran. Se fueron corriendo por el pasillo, sabían que sería difícil salir, estaban dentro del infierno y afuera no era la excepción. Aunque al menos podían correr con más libertad, o eso llegaban a creer. Caminaron hasta la puerta principal, pudieron ver el vidrio de la misma roto y ensangrentado. Por lo menos seis de “Ellos” aguardaban por la “Comida”.

    En definitiva el dueño del arma planeaba suicidarse para no convertirse en uno de “Ellos”, sabía algo y el muy maldito, como le creía Suigetsu, no dijo nada, tan solo se encargó de infestar toda la secundaria, fue el segundo desencadénate. Uno de los seis que ahora le rodeaban era quien ataco a los profesores en la puerta, a simple vista podía verse que era, eso mismo, era un ex policía. Pudo acabar solo a dos tirando directo a la cabeza, pero debía buscar la manera de poder hacerse con el arma del “Policía Zombi”.
    — ¿Cómo planeas hacerlo? ¡Nos comerán, idiota!
    —Tuviste siempre un aire de chico, seguro tienes la fuerza suficiente para patearles lejos y estampar la putrefacta cabeza contra la pared.
    — ¡Piensa en algo mejor, preferiría haber sido mordida por el hermano del Uchiha!—Se miraron entre sí, pronto se encontraron mas rodeados, habían sido percibidos por los cadáveres grises de ojos desorbitados. El policía fue hacia Karin, pero esta se defendió con una patada. No tuvo efectividad y en menos de segundos volvió a levantarse.

    Suigetsu tenía sus propios problemas, tres parecían babear por su carne humana. Cada vez estaba más convencido de que sin culpa alguna, podría exterminarlos. Lanzo la inservible arma hacia un lado, precisamente al fondo del pasillo, esta choco contra una puerta de metal, logrando asi un estruendoso ruido. Pareciendo parar la oreja, buscando el lugar sin verlo, de donde provenía y asi se libraron de “Ellos”.
    —Perfecto, bien hecho, por fin sirves de algo. —la miro extrañado—No pueden vernos, pero si oírnos. Cuando la lánzate choco contra esa puerta, el ruido sirvió de carnada.
    —Eh… Karin…
    — ¿Qué…?—la hizo a un lado y al fin pudo hacer estallar la cabeza del policía, viéndose obligado a quitarse su chaqueta. —la misma tenía la suficiente sangre para asquearle, tener encima y verla no era lo mismo.
    —G-Gracias…
    —Je… Fuera sigue lloviendo, debemos irnos antes de aparezcan más y… Sigamos el consejo de Sasuke, debemos tener algo mejor que un arma, algo que tenga duración infinita—quito el arma del cinturón policial, reviso que estuviera cargada y sonrió.
    —Él tenía un bate, deberíamos ir al jardín trasero y tomar prestado el equipo de béisbol.
    —Creo que con tu fuerza y las balas bien dirigidas, hacia los blancos más cercanos llegaremos vivos, sin mordidas, bañados en sangre, pero con suficiente tiempo para armarnos.
    — ¡Tu quedaras bañado en sangre si las desperdicias!
    —Bien, bien, andando.
    —Si… Idiota.


    Ya no supo en que momento, pero le llevaba sobre su espalda, al mismo tiempo que iba sin un rumbo especifico. Cada vez todo era desierto y teniendo un peso real sobre su espalda, aún era capaz de estampar la cabeza de “Ellos” con el bate. Su sangre empapaba su espalda y algo de ella caí hacia adelante por su hombro. Cada tanto se retorcía y escupía sangre, pero su transformación aun no llegaba, como si el tiempo se hubiera detenido. Tuvo la leve esperanza de que Naruto, fuera inmune, que su herida fuera capaz de curarse y que jamás, pudiera convertirse en un zombi, con el que tendría que acabar.

    La mañana se fue yendo, casi era la hora de cuando se suponía, terminaría la hora escolar de ese dia. Sasuke con Naruto a cuestas y casi convencido de que era inmune, logro llegar a su aula nuevamente, necesitaba su mochila, porque había cometido el error de dejar su celular dentro de la misma. Las ventanas tenían sangre salpicada, el alumno que vino infectado a la secundaria estaba sobre el piso, bañado en sangre, parecía como si en cualquier momento se fuera a levantar, lo mismo pasaba con parte de sus compañeros y su profesor.

    Lo dejo sobre uno de los pupitres, junto con el bate y pasando por encima del cadáver del ex dueño del arma de la cual se apodero Suigetsu, fue hasta su pupitre. Naruto seguía cada uno de sus movimientos y una vez tomado su celular, supo que era momento de salir de allí y al menos intentar encontrar un lugar seguro.
    —Ten…—le extendió el bate con la mano, perteneciente a su brazo sano, Sasuke lo tomo dudoso y antes de preguntar—Hazlo, soy una carga, siempre lo fui… Teme.
    —Naruto… ¡No lo hare, se supone que ya tendrías que ser uno de “Ellos” y mírate, sigues siendo tu…!—exclamo, listo para cargarlo nuevamente.
    — ¡A tu izquierda!—abanico el bate hacia esa dirección, acabando con uno más. Volvió a decirle la misma dirección y sin fallar, la cabeza del zombi estallo. —No podrás escapar e irte, tienes que acabar conmigo… TE DIJE QUE SOY UNA CARGA, NO ACTUAS PARA NADA COMO UN ADULTO…
    — ¡Silencio o vendrás más, no digas masa nada!
    — ¡Teme! ¡De todas maneras seré uno de ellos y te atacare! Lo siento…—susurra, utilizando sus fuerzas para patear de atrás a Sasuke, mientras cae el suelo junto con el Bate. Durante su recuperación, Naruto aprovecha para golpear una puerta cercana y asi, ocasionar un estruendoso ruido que atrás a más de “Ellos”.

    Muy cerca se encontraban Karin y Suigetsu, los mismos decidieron tomar un atajo hasta el depósito del equipo de béisbol, ingresando en la secundaria. Fuera parecía estar tranquilo, pero nada era lo que parecía, estaba peor que adentro, el edificio completamente rodeado. El paso era lento y los gemidos pausados y escasos, el ruido provocado por rubio les hizo levantar su cabeza, para captar de donde provenía. Siendo realmente rápidos, se abalanzaron como animales salvajes sobre el alvino y la peli roja, quienes lograron escapar, pero quedaron separados.

    Sasuke intentaba carga nuevamente a Naruto y solo podía deshacer de los zombis más cercanos, que iban en aumento. Entro “Ellos” vio a Karin, por un momento reventaría su cabeza, pero freno el bate a tiempo, dándose cuenta de que aún era ella. En un pasillo completamente envuelto en la penumbra no fue capaz de reconocerlo, su físico era grande y de si desprendía una escalofriante sombra. Estaba perdido, perdió de vista a la pelirroja, por aquellas momentos la creía convertida en un zombi, que luego, si salía vivo, tendría que exterminar junto con Sasuke y Naruto; quien convirtió a su hermano mayor o seguramente le devoro.

    Un disparo al pecho no le haría nada, pero le sacaría de su camino, dándole segundos para escapar y tembloroso lo cometió. Se estampo contra la pared, en un rincón iluminado y allí le observo, era una persona viva, sus ojos estaban cerrados, su cabello era color naranja y si en ese momento no estuviera espantado, podía reconocer de quien se trataba. Lo más probable era que reviva como uno de “Ellos”, si es que estaba muerto, pero el espanto era tal, que no podía moverse de allí y se quedó observándolo, tartamudeando.
    —Y-Yo… E-Era uno… V-Vivo…—trago duro, dejo caer el arma al suelo, esta atrajo a más de “Ellos” con el ruido que hizo al caer, junto con el disparo, que llego tal vez, para su buena o mala suerte a los oídos de Karin, Sasuke y Naruto.



    Notas finales:

    Me encanta Sai como Sub-Oficial *-* y respecto al Lemon SaGaa, ya tenia ganas de repetir un Lemon entre esa pareja *-* espero les haya gustado, yo estoy enamorada de esa pareja y del ItaDei, asi como del JuGetsu *-* aparecerá muy pronto, espero también les guste esa pareja, a mi me encanta y jamas la vi en otro fic (Si en "Mi Amado Pirata" el fic que aun escribo *-* ) Jugo, el lindo Uke de Suigetsu *-*

    Ja Ne Mata

    Los personajes no me pertenecen, son propiedad de Masashi Sensei... Si fueran míos, no le hubiese dado el poder del sabio a Sasuke ¬.¬ prefiero en este momento, al Sasuke de mis fic's y el de los fic's de los demás.



    Pd: Las armas y aviones, existen realmente, estuve investigando bastante, y de paso, adquirí nuevos conocimientos jejeje. XD

    Edited by LeyiUzumaki - 16/6/2014, 12:30
     
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