‘:•Encuentro del Destino•:’ - Endou x Kazemaru - Shindou x Kirino - Otras parejas.

Una tragedia sucedió hace 14 años, Kazemaru Ichirouta perdió a su hijo poco después de saber que lo tendría, y un impacto del destino lo cambiará todo...

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  1. Utatagi Odori
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    ¡Hola, mi querido público, fino y conoedor! aquí su nueva compañera, Odori. Pero llamenme Utatagi, Uta-chan, san, como quieran. Llevo algún tiempo echando vistazos aquí en Mundo Yaoi, y escribí mi primera historia antes de entrarle.

    Disfrutenla~



    ‘:•Encuentro del Destino•:’




    >Nombre: ‘:•Encuentro del Destino•:’ - Endou x Kazemaru - Shindou x Kirino - Otras parejas.

    >Clasificación: T(+13)

    >Advertencias: Muerte - Tragedias - M-Preg.

    >Parejas: Endou x Kazemaru - Shindou x Kirino - Otras parejas.

    >Anime: Inazuma Eleven Go!




    *Cap. 1: "Vida Perdida".

    Desde su juventud, Endou Mamoru y Kazemaru Ichirouta se gustaban, a pesar de que ambos eran hombres, nadie les molestaba, y no se acomplejaron. Salieron durante la universidad, Endou terminó optando por proponerle matrimonio, y Kazemaru muy feliz aceptó.

    A los 20 años de edad, recibieron la noticia de que Ichirouta estaba embarazado. Fue el dia más feliz para ambos.

    A los 6 meses y medio, Ichirouta fue a su revisión mensual. Hasta el mes anterior todo estaba iba perfecto; Tenía antojos, vómitos, algunos dolores, lo normal en el embarazo, pero los últimos dos días no había sentido nada, lo cual vio muy extraño.

    Endou esperó fuera del consultorio donde, quien revisaba a su esposo, era su mejor amigo, Gouenji Shuuya. Confiaba mucho en Gouenji. Endou estaba algo nervioso; Le preocupaba mucho esa intriga de entre esos dos días, cuando entonces algo los sacó de sus pensamientos; Un estruendoso grito resonó en toda la clínica, espantando a todos los que allí estaban, grito que venía del consultorio de Gouenji.

    -Shhh~ -Emitió Gouenji silenciando el grito, el cual provenía del mismo Ichirouta.

    -... Ah... No puede ser cierto, Gouenji... tiene que ser una broma... la peor de todas... -Decía Ichirouta temblando, y comenzando a soltar lágrimas.

    -Lo... lo siento, perdón, Kazemaru... No es una broma. -le dijo poniendo su mano derecha en el hombro del peli-azul.

    Kazemaru comenzó a soltar lágrimas desconsoladamente, y Gouenji lo abrazó. El peli-azul salió del consultorio de Gouenji muy quieto, Endou al verlo fue corriendo hasta él.

    -Ichirouta, ¿Qué pasó? ¿Qué fue ese grito? -Le preguntó preocupado, pero no obtuvo respuesta.- ... ¿Ichirouta?... ¿Te encuentra bien? -Le preguntó asustándose.

    Ichirouta intentaba hablar, pero no le salían las palabras. Cuando entonces, mirando a un lado y comenzando a soltar más lágrimas, tomó mucho aire, pero lo único que logró hacer fue caer al suelo de rodillas, cubrirse la cara con las manos y llorar muy fuerte, mientras Endou ponía sus manos en la espalda de Ichirouta.

    El castaño levantó la mirada, viendo en la entrada del consultorio a su mejor amigo.

    -Gouenji... -dijo Endou mirando al peli-crema con miedo; Le había llegado una idea de lo que eso podía ser, pero renegaba esa posibilidad. Gouenji le hizo una señal para que entrara con él de vuelta al consultorio. Endou ayudó a Ichirouta a levantarse, y fueron a dentro.- Gouenji, ¿Qué pasa; Por qué ichirouta está así? -le preguntó sentándose junto a su esposo.

    -Endou... el bebé que Kazemaru traía en su vientre... estaba... muerto... -Dijo Gouenji nervioso, pero lo ocultaba bien. Endou se sorprendió y asustó mucho, mientras Ichirouta lloraba más tras sus manos.

    -¿De... De qué hablas, Gouenji? ¿Cómo? -preguntó aterrado.

    -Pues... recuerdan que, en su visita anterior, les dije que tú, Kazemaru, presentabas una ligera inestabilidad, por la que debías comer bajo en grasa y sales, ¿No? -les preguntó. Endou asintió por ambos; En esos momento Ichirouta no podía hacer ni decir nada.- bueno... en esos momentos no estaba seguro, pero el que en verdad estaba inestable era... el bebé.

    -P-Pero... pero ¿Cómo? ¿Por qué? - preguntaba Endou con una voz temblorosa. Una lágrima resbaló desde su ojo derecho.

    -Pues, es que... no había nada que se pudiese hacer... ha de ser que su sistema inmunológico era muy débil; no habría sobrevivido, hiciera lo que hiciera... -le dijo Gouenji intentado ser profesional, pero estaba tan triste como sus dos amigos. Endou abrazó a Ichirouta comenzando a llorar con él.- Solo queda... sacarlo de su vientre y... -decía, pero entonces el peli-azul reaccionó levantando la mirada repentinamente.

    -¡NO!¡¡No lo acepto; Mi hijo no está muerto!! -gritó levantándose de la silla.

    -¡Kazemaru, cálmate! -le dijo Gouenji también levantándose.

    -¡Tranquilo, Ichirouta! -le dijo Endou sujetándolo por los hombros.

    El peli-azul comenzó a hacer un escandalo en la consulta de Gouenji, la gente afuera disimulaba no escuchar nada, aunque otras mujeres ahí ya se imaginaban a qué se debía esa rabieta.

    Al final, Gouenji terminó poniéndole una inyección tranquilizante a Ichirouta, por lo que él terminó desmayado. Endou lo cargó y se fue con él en brazos, pero antes, Gouenji le entregó una constancia, con la orden de llevarlo a urgencias para que le retiraran al bebé del vientre. Sin ningún remedio ni tiempo para perder, Endou aprovechó que ya estaba en el hospital, así que lo llevó directo a urgencias, aprovechando que estaba inconsciente.

    Ese mismo dia fueron a urgencias, y Endou dejó a cargo de Ichirouta a las enfermera, dándoles el papel que mandó Gouenji. De inmediato una enfermera le puso la máscara de oxigeno, pero antes de llevarlo a la sala de operaciones, Endou puso su mano en su abultado vientre, pensando "Perdón... perdóname por hacer esto, mi amor...", mientras cerraba los ojos y saltaba algunas lágrimas más. Ahí las enfermeras llevaron a Ichirouta a la sala.

    Endou no pudo esperar ya que luego de la operación Ichirouta tendría que quedarse mínimo 3 días a descansar.

    ···



    A la mañana siguiente, Ichirouta abría un poco sus ojos despertando, miró a todos lados, viendo que estaba en una sala de descanso en el hospital, pensó extrañado unos segundos, hasta que oyó a alguien hablarle a un lado.

    -Kazemaru-kun, despertaste. -le habló una dulce voz, cuando volteó, se trataba de la enfermera Fuyuka Kudou.

    -Fuyuka-san... -dijo débilmente, casi no tenía fuerzas.- ¿Qué está pasando? -preguntó confundido, no sabía por qué estaba en una sala de hospital, recién despertado.

    -Bueno; Desde ayer retiramos de tu vientre... -decía algo nerviosa, ella también se sentía algo triste por sus amigos. Ichirouta al oírla, reaccionó de inmediato; Se quitó la sabana de encima y se encontró con... un vientre plano: Su hijo ya no estaba.

    No podía ni siquiera hablar, ni una palabra le salía.

    -... ¡¿Qué fue lo que pa-...?! -gritó levantándose de golpe, pero entonces sintió un agudo dolor en su vientre, lo cual hizo que callara.

    -Calma, Kazemaru-kun. -le dijo Fuyuka ayudándolo a que se volviera a recostar. Ya sobre su almohada, Ichirouta respiraba acelerado, mirando alterado a todos lados, para luego comenzar a llorar fuertemente, poniéndose las manos en la cara, mientras Fuyuka lo intentaba consolar.

    ···



    Esa tarde, Gouenji fue al cuarto de Ichirouta, lo saludó y le preguntó cómo estaba, pero no recibió respuesta; El peli-azul solo miraba al techo, respirando lentamente y temblando. Gouenji suspiró, tomó su teléfono y le marcó a Endou para avisarle algo.

    -¿Hola, Gouenji? ¿Ya lo revisaste? -se oyó la voz de Endou desde la otra línea.

    -Hola, Endou. Si, ya... y... creo que necesita a un psicólogo. -le dijo mirando de lado a Ichirouta, que seguía igual.

    -Hum... pues... ya me lo esperaba, haré un cheque ahora mismo.

    -De acuerdo, yo llamaré a alguien. -le dijo para luego colgar. Ahí llamó a alguien más.- ¿Hola, Shiro? ¿Puedes venir a la sala 16-G? Tengo un trabajo para ti.

    -Claro, Shuuya. -se oyó al otro lado. Ahí colgó.

    Esa tarde, hasta el medio día del día siguiente, Ichirouta recibió tratamientos de psicología de un viejo amigo suyo; Fubuki Shiro. Él era hasta ahora uno de los mejores. Por lo que pudo tratar el problema rápidamente. Al siguiente día, Shiro fue a visitar a Ichirouta, y él al menos esta vez reaccionó al momento, algo desanimado, pero si hablaba.

    Endou fue a ver cómo estaba su esposo. Al llegar, Ichirouta le recibió con un fuerte abrazo.

    -Ichirouta... -dijo Endou su nombre dulcemente.- ¿Todo está bien? -le preguntó preocupado. El peli-azul le dio un beso en los labios, el cual Endou aceptó.

    -Estoy bien... duele tener que dejar a mi hijo... pero... si así Dios lo quiso, tendré que dejarlo ir... -dijo sonriendo un poco, pero aun triste. Sus sabias palabras llegaron hasta el corazón de Endou.

    -Mi cielo... que bueno que estés bien... - le dijo Endou abrazándolo.- Te amo... te amo mucho.

    -Yo también te amo, más de lo que imaginas... Mamoru...

    Fubuki observaba con ternura esa escena, pensando en cuando llegaría el día en que Gouenji le propusiera matrimonio como hizo Endou con Kazemaru.

    -Gracias por todo, Fubuki. -le agradeció Endou, tomando ambas manos de Ichirouta.

    ···



    Ya en el estacionamiento, Endou guió con mucho cuidado a Ichirouta, ya que estaba delicado luego de la operación, lo sentó con cuidado en el asiento de copiloto, donde iba siempre, y luego se subió él. Ahí se fueron del hospital. En el camino, Endou miraba de vez en cuando de reojo a Ichirouta.

    -Me gustaría que te peinaras para el otro laso, para poder ver tu hermoso ojo cada vez que valla conduciendo. -le dijo.

    -Sigue soñando, Mamoru. Como me vez, seré siempre... además, si te me quedas viendo, causarás un accidente. -le dujo sonriendo un poco.

    -Jeje... esa es una de las razones por las que te amo; No importa quien te lo pida, tú nunca cambias... y así te adoro. -dijo Endou muy feliz de estar con Ichirouta.

    -Yo también te amo, Mamoru. -dijo acercándosele a darle un beso en la mejilla.

    Luego de eso siguieron charlando tranquilamente en el camino, aunque Ichirouta, inclusive pareciéndolo así, no estaba ni tranquilo ni feliz; La terapia que le hizo Fubuki si funcionó, lo hizo reaccionar, pero nadie, ni el mejor hipnotista, le quitaría de la cabeza la perdida de su anhelado hijo. Seguiría fingiendo que todo estaba bien, solo para que lo dejasen en paz.

    •Continuará•




    En el siguiente capítulo:

    No se olviden de que conoceremos a mucho nuevos y buenos amigos, y también que encontraremos a viejos amigos. Ichirouta está intrigado de saber quién era ese chico de cabello rosa, ¿Qué vio en sus ojos color cyan?

    No se pierdan el próximo capítulo de Encuentro del Destino: "Conocido Desconocido".



    By: Utatagi.
    To: My fans~

     
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