‘:•Encuentro del Destino•:’ - Endou x Kazemaru - Shindou x Kirino - Otras parejas.

Una tragedia sucedió hace 14 años, Kazemaru Ichirouta perdió a su hijo poco después de saber que lo tendría, y un impacto del destino lo cambiará todo...

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  1. Utatagi Odori
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    ¡Hola, mis nuevos amigos! Mi amadísimo y queridísimo público.

    Aquí traje la conty, pero antes...


    †«¥ushin ¥uko Goenji»†: ¡Aquí la continuación, amiga! Espero te guste. :)

    Rise_kujikawa: ¡¡Muchas gracias por comentarme!! Eres tú y todos los que se acerque, más que Bienvenidos. n.n

    pato359: ¡Muy buenas, Pato-sempai! Que bien que te gustara mi historia, que bueno. Y gracias por el halago, soy nueva, así que intento esforzarme en escribir lo mejor que se puede. n.nU Espero quye esta Conty también sea de tu agrado.


    ···



    En el capítulo anterior de Encuentro del Destino:
    Ichirouta tuvo que pasar una tragedia, perdió al bebé que llevaba en su vientre, y al caer en una profunda depresión, tres de sus viejos amigos, Fuyuka, Fubuki y Gouenji, lo ayudaron a superarlo, aunque no del todo. Vean el desarrollo de lo que le sucedió, hoy...


    ···


    *Cap. 2: "Conocido Desconocido"

    Pasaron algunos años, y la vida de Mamoru e Ichirouta fue mejorando. A los 24 años, a Endou le ofrecieron un trabajo como entrenador de Soccer en el instituto al que él asistió de niño; El instituto Raimon. A Ichirouta a los 26 le ofrecieron ser el entrenador de atletismo en el instituto Kidokawa Seishuu. Se podía decir que ellos eran una de las mejores parejas; Se apoyaban el uno a otro, se divertían como mejores amigos, se confiaban todo como hermanos, eran objeto de admiración para muchos.

    Sus noches de pasión sucedían de vez en cuando, y en esos escasos momentos, Ichirouta siempre estaba protegido. Endou en muchos casos le propuso intentar tener otro bebé, y rezar por que esta vez fuera saludable, pero siempre, antes de dejarlo siquiera terminar de hablar, se negaba rotundamente, no quería volver a pasar un trauma como el de aquella vez.

    Pasó el tiempo, en un parpadeo ya habían transcurrido 8 años, y Mamoru e Ichirouta ya habían cumplido 34 años.

    Un dia viernes, Ichirouta volvía de Kidokawa Seishuu en su auto, y pasó por Endou al Raimon. Endou salió por la entrada del instituto, viendo a su esposo recostado en su auto y el de él detrás.

    -Hola, cariño. -le saludó Endou dándole un beso en los labios.

    -Hola, Mamoru. ¿Listo?

    -Si. Vamos. -dijo yendo hacia su auto, e Ichirouta iba a subir al suyo.

    -¡Entrenador Endou! -le llamó alguien desde atrás. Al voltear, Endou vio a un muchacho con el cabello castaño grisáceo y ojos carmesí oscuro. Y junto a él, uno con el cabello rosa en dos coletas bajas y ojos color cyan. Endou fue hasta ellos diciéndole "Vuelvo en un momento, Ichirouta" al peli-azul.

    -Dime, Shindou. ¿Qué quieres? -le preguntó Endo.

    -Bueno, quería saber si el entrenador Kidou vendrá el lunes.

    -Si, eso creo.

    El peli-rosa solo acompañaba a Shindou, peri no pudo evitar mirar a ese hombre que estaba con su entrenador. La mirada de Ichirouta se encontró con la de ese chico, se quedaron mirando unos segundos, hasta que el peli-rosa reaccionó.

    -Oh... ¿Entrenador? -le llamó el peli-rosa.

    -¿Hum?

    -¿Quién es él? -le preguntó apuntando con la mirada al peli-azul.

    -Ah... él es mi esposo. -les dijo sonriendo.

    -¡¿Su esposo?! -preguntaron ambos a la vez. Ichirouta al oír el grito, los miró de reojo.

    -Eh... Nunca nos dijo que estaba casado... -dijo Shindou entre riendo.

    -Nunca me preguntaron. -dijo retante Endou.

    -... touché... -dijeron los dos en rendición.

    -Jeje... bueno, me retiro. Hasta el Lunes.

    -Adiós, entrenador. -se despidieron ambos a la vez.

    Ahí Endou se fue a su auto, mientras que lis dos chicos se iban por el lado contrario.

    -¿Qué te preguntaron esos niños? -le preguntó Ichirouta.

    -Querían saber algo del entrenamiento del lunes, y luego me preguntaron quién eras; parece ser que les llamaste la atención.

    -Hum... pues, el de cabello rosado... me parece interesante. -dijo recordando a aquel muchacho.- Oye, dime loco pero, esos dos niños me recordaron a nosotros de pequeños. Solo faltaría que el de pelo castaño fuera el capitán del equipo.

    -¿A, si?... jeje... pues, por muy coincidente que suene, él si es el capitán. -Ichirouta se sorprendió mucho ante eso. Iba a preguntar algo más.- Antes de que preguntes, si, el de cabello rosa es un defensa.

    -A ver, adivino; También es el dorsal número 2.

    -No... El 3... Jajajaja... -dijo Endou ya sin poder aguantar la risa, mientras Ichirouta, dándose una palmada en la frente también reía.

    Ahí ambos se subieron a su auto cada uno y se fuero a casa.


    ···




    -No sabía que el entrenado era Gay. -le dijo Shindou al peli-rosa, pero él solo miraba al suelo pensativo.- ¿Kirino?

    -¿Eh?... ah, si... yo tampoco...

    -¿Estás bien? ¿Por qué tan distraído? -le preguntó preocupado.

    -Si, solo... el esposo del entrenador...

    -¿Qué pasa con él?

    -Bueno... la verdad no sé decirte, pero hay un rastro de tristeza en su mirada... siento que ha tenido un pasado difícil.

    Se quedaron pensando en eso unos momentos, pero luego decidieron dejar el tema de lado.


    ···




    Ya era lunes, y Endou e Ichirouta iban saliendo de casa, ese dia no había práctica de atletismo en Kidokawa Seishuu en la mañana, sino en la tarde, por lo que Endou le pidió a Ichirouta que lo acompañara al Raimon a conocer a los chicos.

    En el Raimon, los dos llegaron en su auto cada uno, y fueron a dentro. En las instalaciones, se encontraron con Kidou Yuuto y Ootonashi Haruna, viejos amigos, los cuales ayudaban a Endou en el equipo de fútbol.

    Fueron los primeros en llegar al club.

    -Oh, que olvidadiza; dejé el papel que mandaron de la dirección. Ya vuelvo. -dijo Haruna al recordarlo.

    -¿Te acompaño? -le preguntó Ichirouta. Haruna asintió y se fueron.

    Al rato, varios del equipo del Raimon comenzaron a llegar; Primero Sangoku, Amagi y Kuramada, luego Kurama, Hamano y Hayami, después Ichino, Aoyama, Kariya, Hikaru y Shinsuke, luego Tenma y Tsurugi y Nishiki y Shindou, y con ellos Midori, Akane y Aoi.

    -¿Ya están todos? -preguntó Endou.

    -Solo falta Kirino. -le respondió Sangoku.

    -Bien, -dijo Endou.- entonces...

    -Espere, entrenador. -le detuvo Shindou.- Kirino y yo estuvimos pensando y... lo pasa es que él me dijo que vio una profunda tristeza en los ojos de su esposo; y quiero que me diga qué es.

    -... Y ¿No quieres esperar a tu amigo para que escuche también?

    -No sé donde está, se distrajo en algún lado, y no podemos tardar tanto por que hay que entrenar. Yo se lo contaré después.

    -... Está bien, Shindou. -dijo sentándose en el sillón, y Shindou a su lado... y todos los demás al rededor. Endou los miró raro.

    -No sabía que estaba casado, entrenador. -le dijo Tenma detrás del sillón muy sonriente.

    -Nunca me lo preguntaron. -dijo Endou. Todos sonrieron irónicos.- bueno; La razón por la que él estuvo tan triste tanto tiempo hace unos años; fue una tragedia que nos afectó a ambos. Antes de tener a nuestro bebé, ya estaba fallecido en su vientre, y... fue muy traumático para los dos... -contaba el acontecimiento de aquella vez, soltando una lágrima que cayó en su mano. Kidou, que estaba muy callado, ya conocía la historia, pero, incluso luego de esos años, seguía triste por sus amigos. Todos los demás lo miraban sorprendidos; No pensaban que alguien tan alegre como su entrenador hubiera pasado por algo tan triste... y eso que no conocen su infancia...

    -Yo... s-siento mucho haberlo hecho recordar eso... entrenador Endou. -dijo Shindou avergonzado. Sacó un pañuelo de su bolsillo y limpió las lágrimas de la mano y los ojos de Endou.

    -No, está bien. -dijo intentado sonreír un poco.- Recordar algo malo o triste, hace en un futuro duela menos. "Aunque a mí aun me duele..." -dijo y pensó.

    -Y... ¿Hace cuanto pasó? -preguntó Sangoku.

    -Hace 14 años. -dijo Endou. Shindou se sorprendió.- Y si, la misma edad que tu Shindou. -le dijo alborotándole el cabello.

    -Y ¿Cómo es? ¿Cómo se llama? -preguntó Aoi.

    -¿Es guapo? -preguntó Midori.

    -¡Midori-san! Compórtese, por favor. -le regañó Aoi. Varios rieron ante eso.

    -De hecho... -comenzó a decir Endou. Todos le dieron su atención.- Si, es muy lindo, la persona más hermosa a mi parecer. Que Shindou les diga, él ya lo vio. -todos miraron a Shindou.

    -Eh... si, es cierto, es una persona muy hermosa; Cabello largo y liso, de color azul como el cielo, ojos grandes, color chocolate claro, piel blanca y tersa, y era alto, un poco más que el entrenador, creo. -dijo recordándolo.

    -Ya veo; alguien de apariencia hermosa, un poco femenina, como Kirino, debo suponer. -dijo Sangoku con una mano en la barbilla.

    -Ahm... si, eso creo... de hecho, y ahora que lo pienso... -se parecía un poco a Kirino. -decía Shindou pensativo.

    En ese momento las puertas del club se abrieron. Todos voltearon a ver; vieron a Haruna que venía junto a una persona de cabello azul y largo.

    -En verdad, debería ser más responsable. -decía Haruna.

    -Vamos, le pasa a cualquiera; yo olvido cosas todo el tiempo. -le consoló su acompañante.

    Ellos voltearon su vista a adelante, viendo que todos los del equipo los miraban fijo.

    -Ah, es él. -dijo Shindou viendo a Ichirouta.

    -¿Ha? -emitió Ichirouta al ver eso.

    En eso, todos fueron corriendo hacia el peli-azul, quedando parados frente a él mirándolo, a excepción de Tsurugi que se quedó atrás. Todos los miraban sorprendidos, con mínimos sonrojos, mientras él los miraba raro.

    -Sus ojos son hermosos. -dijo Hikaru.

    -Su cabello luce tan suave. -dijo Aoyama.

    -Es muy lindo. -dijo sonriendo Hamano.

    -El entrenador tuvo mucha suerte. -dijo Shinsuke también muy sonriente.

    -Todos esos halagos hicieron que Ichirouta se sonrojara un poco, y riera algo nervioso, haciéndolo ver más tierno.

    -Parece un modelo de revistas. -dijo Kuramada.

    -¡Si! -asintió Amagi.

    -Tal vez lo sea... -dijo Midori abrazándose al brazo de Ichirouta y mirándolo de forma Sexy.

    -Ah... no. -negó Ichirouta mirando a Midori. Ahí sintió un flash de cámara, y miraron a Akane.

    -Seguro le han ofrecido serlo. -dijo con su dulce voz.

    -Bueno, si, pero me negué, por que me gusta mi trabajo como entrenador de atletismo en Kidokawa Seishuu. -dijo en ese momento Shinsuke levantó la mano.- ¿Si?

    -Me quiero presentar. Me llamo Nishizono Shinsuke, mucho gusto, esposo del entrenador. -se presentó sonriendo.

    -Jhjhjh... El gusto es mío, Shinsuke-kun. Endou Ichirouta.

    -Yo soy Matsukaze Tenma. -se presentó de igual manera Tenma.

    Ahí todos se fueron presentando. Ichirouta se sorprendió mucho al oír el apellido de Hikaru; Kageyama, pero él le explicó los mismo que a Endou, Kidou y Haruna la primera vez. Cuando todos terminaron de presentarse, Ichirouta hizo una reverencia con una sonrisa. En ese momento, las puertas del lugar se abrieron.

    -¡Siento llegar tarde! -gritó disculpándose Kirino al entrar.- lamento la tardanza, entrenador; Me quedé en la biblioteca leyendo un libro y se me pasó el tiempo en un parpadeo.- explicó el motivo de su retraso. Ahí levantó la mirada y vio que todos lo miraban, pero entonces notó más bien la mirada de Ichirouta.

    -Pasa, Kirino. Aun no hemos revisado el cronograma de entrenamientos. -le dijo Kidou. Kirino lo oyó, pero lo pasó por alto por error.

    Él e Ichirouta se quedaron mirando durante unos segundos. Parecía que todo y todos a su alrededor se desaparecían, y solo quedaron ellos.

    -“¿Qué sucede?... ¿Quién es esa persona y... por qué siento como si...?” -pensaba Kirino muy confundido.

    -“¿Quién es él?... ¿Por qué me interesó tanto?” -se preguntó Ichirouta.

    Tardaron unos segundos más viéndose, hasta que alguien los interrumpió; Shindou se paró al lado de Kirino y movió su mano frente a él.

    -Ah... -Emitió Kirino saliendo de su trance.

    -Ven. -le dijo Shindou tomándole suavemente de la mano y guiándolo hacia el resto, mientras Kirino miraba su mano y la de Shindou, sujetas una con la otra, sonrojándose ligeramente.- Mira, Kirino. ¿Lo recuerdas, del viernes? Es el esposo del entrenador; Endou Ichirouta. -le dijo presentándole al peli-azul frente a él.

    -Ah... Si, pero... Shindou... -le llamó Kirino.

    -¿Hum?

    -... Necesito mi mano, para presentarme. - le dijo mirando a un lado apenado.

    -¡Ah, si! Lo siento... -Dijo, Soltó la mano de Kirino, pero con pesar.

    -Jhjm... -se rió bajo Ichirouta.

    -Ahm... Kirino Ranmaru. Es un placer.

    -Endou Ichirouta, El placer es mío. -se inclinó Ichirouta presentándose. Se dieron la mano, pero ambos algo... inexplicable, algo como un presentimiento.

    -Bueno, es hora del entrenamiento. Veamos el cronograma. -dijo Kidou para todos. Todos se fueron a sentar. Kirino reaccionó y soltó la mano de Ichirouta, yéndose a sentar junto a su amigo Shindou. Ichirouta solo fue y se sentó al lado de Tenma, quien sonrió.

    Vieron el cronograma e impusieron los entrenamientos del día. Endou les dijo que en una semana, tendrían un partido de práctica con el instituto Kidokawa Seishuu, lo cual, pues, sorprendió a Ichirouta, aunque el fútbol no era su zona en esos momentos.

    Después, todos comenzaron a salir. En el campo de fútbol, ya todos cambiados, comenzaron con los calentamientos, luego entrenamientos individuales, y por último un partido de práctica entre ellos. Ichirouta prestó mucha atención al entrenamiento de los chicos, sus entrenamientos de fútbol eran muy parecidos a los de Kidokawa Seishuu. Lo sabía por que él de vez en cuando, pasaba a ver el entrenamiento, y hasta se incluía a jugar de vez en cuando junto a su viejo amigo, Aphrodi.

    -¡Corre más rápido, Hayami!, ¡Hikaru, Pasa el balón a Tsurugi! -Gritaba Shindou indicando estrategias como capitán que era.

    En ese momento, Ichirouta se fijó en Kirino; Estaba batallando por en balón contra Tenma, y logró quitárselo, corriendo con este hasta la zona de la defensa. Ichirouta se fijó muy bien en el movimiento de sus pies. Kirino llegó con Kariya. Batallaron por el balón, y Kirino lo pasó fácilmente.

    -¡Tsurugi! -Gritó lanzándole el balón.

    Kirino tenía un buen juego de pies, y eso lo notó Ichirouta.

    -¿Qué te parece el nuevo equipo del Raimon? -le preguntó Endou a Ichirouta.

    -Muy buenos; hábiles en cuanto a dribles y juegos de pies, y muy veloces también. -dijo mientras se levantaba de la banca.- y muy buen trabajo en equipo.

    -¿Verdad? -le sonrió Endou.- Todo fue gracias a Tenma; Él trajo consigo el viento de la victoria, haciendo que la alegría del fútbol volviese al Raimon. -Ahí le comenzó a contar como tenma hizo que la debilidad, el miedo y el desequilibrio desaparecieran, y dejaran solo buen trabajo del equipo.

    -Wao... -Emitió Ichirouta sonriendo.

    Pero ellos no se habían percatado que un miembro del equipo los observaba.

    -Tsurugi ¿Sucede algo? -le preguntó Tenma al que, respectivamente, estaba ahí para do mirando al entrenador y su esposo.

    -... No, nada. -dijo yéndose.

    -Tenma volteó a donde miraba Tsurugi anteriormente. Cuando entonces recordó algo sumamente importante de hace 20 años, y entonces tuvo una idea de lo que, probablemente, pensaba Tsurugi.

    -“¿Será eso?” -Pensó, y sin sopesarlo dos veces, fue con los dos adultos.- Entrenador. -le llamó. Endou volteó.-Usted e Ichirouta-sama eran del Legendario Inazuma Japan, ¿No?

    -Si, es cierto. - le dio la razón Endou.- ¿Por qué?

    -Queremos que jueguen un juego con nosotros. -les pidió Tenma. Endou e Ichirouta se miraron un momento, para que luego Ichirouta se inclinara un poco con las manos en las rodillas a la altura de Tenma.

    -¿Quieres que ambos juguemos? -le preguntó. Tenma asintió. -Bueno, ¿Qué piensas, Mamoru?

    -Pues, Claro, ¿Por qué no? -Aceptó Endou encogiéndose de hombros.- ¿Porqué no juegas, Kidou?

    -No jueguen ustedes. -Le dijo Kidou.

    Endou tomó unos guantes de Portero, e Ichirouta unos zapatos para jugar. Ahí cada uno fue a su lugar; Endou a la portería que siempre estaba sola, e Ichirouta a la Defensa del lado contrario.

    Se decidieron los equipos así: Endou, Tsurugi, Kirino, Shindou, Hayami, Hamano, Kuramada, Kurama y Shinsuke. Y del otro lado, Sangoku, Ichirouta, Tenma, Kariya, Hikaru, Amagi, Ichino, Aoyama y Nishiki. Ninguno se peleó por estar del lado de Ichirouta, ya que tanto enfrentarlo como estar de su lado sería increíble.

    -¡¿Listo, Mamoru?! -le gritó Ichirouta desde su lugar. Endou elevó su pulgar al aire sonriendo, indicando que estaba más que listo.- Bien, ¿Listos todos?

    -¡SI! -Gritaron todos.

    Ahí comenzaron su juego. Todos jugaban con gran pasión, a través del balón podían sentirse los sentimientos de todos por jugar juntos. Eso los sintieron tanto Endou como Ichirouta, lo cual los enorgulleció.

    Los pases se conectaban perfectamente, driblaban con rapidez, lanzaban con fuerza, y luchaban ferozmente por el balón.

    En un momento Kirino se encontró frente a frente con Ichirouta, trataron de quit6arse el balón entre sí, pero ninguno cedía.

    -Justo lo que esperaba de ti, Kirino-kun. -le dijo Ichirouta. Kirino se dio la vuelta, intentando que Ichirouta no le quitara el balón.

    -Yo le digo lo mismo; Usted es muy hábil, pero no esperaba menos de un antiguo Inazuma Japan. -le dijo. Esta vez volteó hacia un lado con el balón, esquivando a Ichirouta, pero no fue tanto ya que él lo interceptó rápidamente.- Hum... y no para de sorprenderme. -dijo bajo.

    -Siguieron luchando, hasta que en un veloz movimiento, Ichirouta le quitó el balón, y fue corriendo hacia la portería de Endou. Esquivó a todo el que se interpusiera.

    -¡Tenma! -le gritó lanzándolo el balón. Tenma lo pateó. Endou lo pudo detener sin mucho esfuerzo, pero había que admitir que tenía fuerza.

    Un rato después finalizaron el juego, varios estaban exhaustos, así como otros aun tenían energía para seguir jugando.

    -Fue un gran juego. -Le dijo alguien desde atrás a Kirino, quien se secaba el sudor de la cara. Cuando volteó, se encontró con Ichirouta.

    -Pienso lo mismo, Ichirouta-sama. -le dijo Kirino ya mirándolo de frente.

    -No me llames por el “Sama”, me siento viejo... -dijo algo nervioso. Kirino rió ante eso. Ahí, nuevamente, conectaron miradas.

    -... ¿Qué será? -preguntó Ichirouta.

    -¿Qué será qué? -le preguntó Kirino.

    -Tus ojos.

    -¿Qué tienen?

    -No lo sé... hay algo en ellos que me traen... como una añoranza. No sé explicarlo.

    -¿No será que le recuerda a usted en su juventud? -le dijo Shindou detrás de Kirino. Ichirouta lo pensó un momento.

    -Tal vez... puede ser, no sé. -Dudaba Ichirouta.

    Al final, decidieron solo dejar de lado el tema.


    ···




    En la tarde, cuando el instituto se vaciaba, Endou e Ichirouta se fueron. Ichirouta tendría que explicar mañana por qué faltó al entrenamiento de la tarde de atletismo en Kidokawa Seishuu; Y fue por quedarse al de fútbol del Raimon.

    Todos se fueron cada uno en compañía o solo.

    Por el camino al lado del campo de fútbol, junto a la ribera del río, caminaban juntos, Tenma y Tsurugi. Llevaban un buen rato de estar hablando de lo genial que había sido el entrenamiento ese día, y de lo maravillosos que era el esposo del entrenador. Bueno, Tenma hablaba y Tsurugi escuchaba y asentía de vez en cuando.

    -¡... Y cuando me lanzó el balón! Pude sentir la pasión que tienen Ichirouta-sama y Endou-san por el fútbol. -decía Tenma emocionado recordando todo.

    -Si. -asintió Tsurugi. Ahí miró a Tenma unos segundos.- Oye, Tenma.

    -¿Hu?

    -... Tú supiste que yo quería jugar con ellos, ¿Verdad?, ¿Cómo supiste?

    -Pues... que los mirabas mucho y... lo vi en tus ojos... -dijo dulcemente.

    -¿Tan obvio soy?

    -No en realidad; Creo que lo deseabas tanto que fue la primera cosa que vi que querías. -le explicó. Eso hizo que Tsurugi estuviese más reconfortado.- Y ¿Te gustó?

    -Pues, Claro. Me divertí mucho. -le dijo sonriendo.

    -Me alegro. -le dijo tenma entre feliz y tranquilo.


    ···




    En el auto, Endou e Ichirouta iban charlando sobre lo maravilloso que había sido el día; Ichirouta había visitado el lugar enteramente. El Raimon había cambiado mucho para mejor desde que él estudiaba ahí con Endou.

    Esa tarde, llegaron a casa, se refrescaron, cenaron y descansaron. Pero Ichirouta no podía dejar de pensar en Kirino; Había sido un rival excepcional, pero no era eso lo que le intrigaba, si el por qué sintió una especie de conexión con él.

    En la noche, solo durmió intentado no pensar en ello.


    ·Continuará...·

    En el siguiente capítulo:

    ¡Comienza el entrenamiento contra Kidokawa Seishuu! Ichirouta no se lo quiere perder por nada... Eso, si algo no lo evita...

    No se pierdan el próximo capítulo de Encuentro del Destino; "Presentimientos y Emociones"



    By: Utatagi.
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