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•Alice Miu•
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Los sentimientos de Emerald- Parte Final
Miro de reojo a Misaki y empezó a dar unas vueltas por el supermercado, obviamente nadie se daba cuenta de su presencia, miraba de pasillo en pasillo, hasta que algo lo hizo gruñir. Ahí se encontraba una de las cosas que más odiaba, Ijuuin Kyo, el gran acosador de Misaki Takahashi ¿Lo peor? A Misaki le encantaban sus mangas. Lo único que faltaba para arruinar el día era que se vieran
— ¡Takahashi-kun!
—A la mierda. — Exclamo Emerald
Su mirada veía con gran molestia a ese hombre, con gran enojo le miraba de reojo hablar con Misaki, mientras que el universitario simplemente se dedicaba a tartamudear y estar sonrojado. Apareció a un lado de Misaki, mirando como este lo ignoraba por hablar con su ídolo…
Dolor
Sintió un fuerte dolor al verlos conversar y reír, pareciera que él no estaba en ese lugar. Emerald sabía perfectamente que Ijuuin no podía verlo, no, culpaba a Misaki por ignorarlo simplemente por aquel idiota, si, ese mangaka necesitaba una lección. Sonrió de lado al tener una idea.
Misaki conversaba con el Mangaka, cuando de pronto, sintió como un escalofrió cubría su espalda, nervioso empezó a llamar en pensamientos a Emerald, sin respuesta alguna, ahí se dio cuenta que tenía que actuar rápido o sino su ídolo sufriría, sufriría el enojo de Emerald
—Ijuuin- Sensei, me encanto conversar con usted pero temo que…— Miro con temor como las luces del supermercado empezaban a parpadear— ¡M-m-e tengo que retirar! — Sintió como Ijuuin tomaba su brazo — ¿Takahashi- kun? — Pregunto antes el Mangaka, con una de sus sonrisas coquetas
— ¿S-sí? — Misaki sentía como Emerald se estaba controlando, sentía una gran presión en su cabeza, junto a demasiadas palabras distorsionadas, provenientes del ya inestable de ojos negros
—Quisiera saber si irías conmigo a una si…— Las palabras de Ijuuin se cortaron, ya que una lata de sardinas golpeo fuertemente la cabeza de este— ¿Pero qué…?— Se pregunto desconcertado el Mangaka, pero antes de formular su pregunta, dos latas mas atacaron el cuerpo de Kyo
Misaki abrió los ojos al ver como la persona que tenia al frente era golpeada, llamando la atención de otras personas al ver como un objeto tras otro era lanzado, sin algún proveniente. Misaki miro como tras otro golpe en la cabeza, Kyo caía inconsciente al piso, Misaki sin saber qué hacer, abrazo al Mangaka, recibiendo los golpes
La gente estaba cubriéndose de los grandes y peligrosos objetos que venían de algo desconocido, solo se escuchaban los vidrios rotos y el intento de llamar a emergencias de algunos. Emerald, en su furia, volvió a ver el lugar donde estaban llegando todos los objetos, su sorpresa fue demasiado grande al notar que estaba golpeando a otra persona, miro como Misaki recibía los golpes, su gran enojo desapareció mientras que los objetos se detenían, al igual que los gritos de algunas personas
Miro como Misaki yacía inconsciente, al igual que su acompañante, escucho el sonido de las ambulancias y patrullas, volteo a ver todo el supermercado, los vidrio rotos y todos los víveres se encontraban destrozados, miro otras personas con heridas y trago saliva al darse cuenta que, él había sido el culpable de aquel desastre
Miro con terror como se llevaban las ambulancias a las dos personas las cuales había atacado violentamente, se tapo la cara con sus manos mientras que lentamente desaparecía más y mas.
Dos horas más tarde, un escritor al borde del colapso nervioso conducía hacia el hospital, hace quince minutos le habían llamado de aquel lugar, comunicando el hecho de que su amado había sido herido en el atentado que había pasado en el supermercado, hace dos horas ¡Dos horas, eso era demasiado tiempo!
Al llegar al hospital, fue llevado por una de las enfermeras a la habitación donde se encontraba su amado, el doctor le había informado que no había nada en que preocuparse, simplemente tendría que esperar a que despertara para otro chequeo mas. Al recibir las noticias, sintió como el aire volvía a sus pulmones.
Miro detenidamente a Misaki, tenía algunas cortadas en todo el cuerpo, junto a un moretón en el ojo derecho, volteo la mirada hacia otro lado, simplemente no quería ver a su amado en aquella condición. Agarro aire y lo soltó mientras que agarraba la mano de su pareja, levantándola hasta llevarla a sus labios y besarla
—Idiota, me has dado un gran susto— Susurro Akihiko mientras que acariciaba la mano de Misaki, haciendo que este susurrara algo— Emerald…
— ¿Ah? — Pregunto Akihiko al escuchar algo ¿Emerald? Confundido dejo la mano de Misaki y salió a fumar.
— ¡Emerald! — Grito Misaki mientras que despertaba, sintió unas fuertes punzadas de dolor en todo el cuerpo, abrió sus ojos mientras que sentía el aroma del hospital, miro de a un lado a otro y miro que a un lado de su mano se encontraba el reloj del escritor, cerró los ojos mientras que susurraba
—Emerald…— Este apareció, su semblante era indiferente, sus ojos reflejaban arrepentimiento, el universitario abrió sus verdosos ojos mientras que miraba a Emerald
— ¿Y bien? — Pregunto Misaki mientras que fruncía el ceño, miro como a quien le hablaba se encogía de hombros— ¿Estas feliz? — Volvió a preguntar, teniendo el mismo resultado del otro
—Yo, lo siento— Se disculpo Emerald mientras que miraba a Misaki a los ojos, el universitario iba a hablar pero el doctor entro, junto a unos policías
—Buenas tardes, quisiéramos hacerle algunas preguntas, después de que el doctor le haga su respectivo chequeo— Hablo uno de los policías, esperando alguna respuesta del menor, este asintió, asiendo que los policías se retiraran de la sala, dejando libre al doctor de revisarlo.
Minutos más tarde, los policías se encontraban haciéndole preguntas al menor
—Bien ¿Vio quien fue el causante del ataque? — Pregunto uno de los policías. Misaki miro hacia la ventana
—Yo simplemente mire las cosas volar— Susurro con dolor, Emerald escuchaba cada respuesta de Misaki, sintiendo como su pecho dolía con cada respuesta seca que daba, se sentía culpable, culpable de no poderse controlar, culpable de haber lastimado a aquella persona. Si tan solo no hubiese estallado en aquellos celos…
— ¿Volar? — Preguntaron los policías desconcertados
—Sí… ya saben, como levitando— Aclaro el menor, haciendo que los policías se miraran entre sí— ¿Se encuentra bien? — Preguntaron al no encontrarle sentido a la respuesta
—Claro, yo simplemente estoy diciendo lo que mire— Contesto el menor, mirando con molestia a los policías, estos, sin encontrarle coherencia alguna a las palabras del universitario, se retiraron sin respuestas, ya que todos los heridos recitaban las mismas palabras ‘’Como si los objetos volaran’’, no le hallaban el mínimo sentido
Aunque, las palabras tenían más que sentido para ellos, habían visto como los objetos atacaban a esas dos personas inconscientes, una gran incógnita para los noticieros de Japón
—‘’Hoy hubo un extraño atentado en el supermercado de la zona norte de Tokio, dejando a diecinueve heridos, ningún muerto. Las victimas recitaron que no vieron quien lanzo los objetos, ni quien fue el que destruyo los víveres…’’
Aquella noticia, se quedo con el gran nombre de ‘’El ataque fantasma’’
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Emerald MeurtrierAkihiko x Misaki - Romance, Misterio -Resumen adentro- |
