Relatos de un roto corazón [Wigetta].

« Older   Newer »
 
  Share  
.
  1. PinketDiana
        +1   +1   -1
     
    .

    User deleted


    Relatos de un roto corazón. (Wigetta).




    SPOILER (click to view)
    Sinopsis:


    ¿Qué hacer cuando te rompen el corazón?.

    Guillermo no puede dejar de preguntarse eso una y otra vez. Alex era su todo, él siempre lo había dado todo pro él, y ahora eso había terminado. PAra siempre. Había dejado todo por estar con Alex, había dejado a sus amigos de lado, y sin hablar de su familia. ¿Cuántas cenas familiares había dejado de lado?. ¿Cuántas veces había dejado a su hermana plantada por él?.

    Pero eso no le importaba, ya que Alex estaba para él.

    Pero ya no, Alex ha roto con él.

    Ahora él está solo. No puede contar con nadie.

    Guillermo quiere esconderse de todo, quiere desaparecer, pero sabe que eso no es posible. Debe sacar fuerzas de donde no las tiene, y luchar por recomponer su roto corazón.



    ----------------------------------------------------------------


    Capítulo 1.




    Capítulo 1: ¿Cómo...?



    Guillermo.




    ¿Cómo actuar después de que te rompan el corazón.?. ¿Cómo hacer frente a ello?. ¿Cómo pensar en seguir adelante después de que esto ocurra?. ¿Cómo evitar el dolor?. A todos nos han roto el corazón alguna vez, por lo que en algun punto de nuestra vida, hemos tenido que hacernos dichas preguntas. Sin embargo, en ese momento, las respuestas son imposibles de encontrar. Nos sentimos rotos, destruídos, hundidos, que nada de lo que hemos hecho tiene sentido, que no valemos nada, ya que hemos perdido a esa persona. Solo queremos llorar, dejar salir todo el dolor que tenemos dentro, queremos cobijarnos bajo las mantas y dormir hasta que todo eso pase. ¿Verdad?.

    A veces esto pasa, De un día para otro, todo parece acabar. Quizás no nos hemos dado cuenta de las señales que la otra persona nos manda, dando a entender que quiere fenalizar con esto. Como por ejemplo, que te deja de llamar todos los días, no busca tiempo para estar contigo, le importa más estar con sus amigos o familiares, no te suele llamar con esos apodos cariños con los que siempre te ha nombrado, no te toma de la mano cuando andas, no te abraza cada vez que te ve, no busca tus besos constantemente. Simplemente son pequeñas formas de decirte que esa relación, poco a poco, está acabando.

    O quizás si las ha dado, pero hemos estado tan ciegos que no las hemos querido ver.


    Y de nuevo, volvemos al principio. ¿Cómo luchar contra esto?. ¿Cómo conseguir estar 'bien' de nuevo?. ¿Cómo pensar si tan siquiera en amar de nuevo, después de esto?.

    Y te empiezas a arrepentir de todo. De los sentimientos, de todo lo que has hecho, de las palabras que has dicho, de la confianza que le has tenido. De todo. Empiezas a culparte y a decirte a ti mismo que no has dado todo lo que has tenido que dar. Simplemente... todo parece venirse a bajo.

    No sales de tu cama, sin embargo. Te quedas allí día tras día, donde pareces estar a salvo de todo, donde puedes sentirte algo más libre. No piensas en lo que puedan opinar los demás, o en lo preocupado que puedan estar. Solo quieres ocultarte del mundo.


    Otro punto importante, es que tu cabeza parece estar contra ti, ya que no puede parar de recordar momentos vividos a su lado una y otra y otra vez. En tu cabeza no para de sonar esa canción tan vuestra, esos momentos vividos que para ti suenan mágicos, o... el primer encuentro.


    Flasback.




    La primera vez que viste a Alex fue en una pequeña cafetería, donde tu madre te mandó a las, casi, siete de la mañana, porque se le había acabado el pan. No te había dado tiempo a asearte, ni a vestirte, si tan siquiera. Así que ahí estabas tú, frente al chico que te gustaba desde hacía más o menos tres años, con un pijama de tortugas azul y verde, sin peinar, muerto de la vergüenza, y esperando a que la señora te diese tu adorado dulce de chocolate, mientras que en tu mano derecha sostenías una bolsa con tres barras de pan. ¿Qué clase de día empezaba de esa manera?.

    Él en cambio, estaba con su típico gorro negro, una camiseta del “Call of Dutty” color gris, con las letras resaltando de blanco, y unos pantalones negros pegados. Sus zapatillas también eran negras.

    Te quedaste embobado mirándolo por varios minutos, hasta que la señora que tenías en frente llamó tu atención.

    -Oye... ¿Esto es para ti, verdad?- Te sonrojaste al instante, y tu cabeza gritaba una y otra vez un 'Eres tonto, chaval'. Pero eso ahora no importaba, querías coger tu maldito dulce y salir de allí lo antes posible.

    “Me cago en todo chaval”- Pensaste frustrado.

    Cuando cogiste lo que era tuyo y paguaste a la señora, salíste casi corriendo de aquella tienda, a la que tenías claro que no volverías en mucho tiempo. Sin embargo, antes de darte tiempo a correr, sentiste una mirada sobre ti. Te giraste lentamente, y cuando te diste cuenta de quién te miraba, tu cara se tiñó de rojo. Unos oscuros ojos te observaban fijamente, y él se acercaba a ti.

    “Creo que me voy a morir”- Pensaste como un idiota.

    Tu boca se trabó al intentar decir algo cuando cogió tu bolsa con el pan, y tampoco pudiste responder cuando hizo un pequeño comentario sarcástico.

    -Bonita camiseta- Tus nervios aumentaban con cada palabra que salía de su boca. Tu boca estaba seca y el dulce amenazaba con caer al suelo.

    -¿A dónde vas?- Te preguntó tan normal, mientras tu te sentías morir de los nervios por dentro. ¿A dónde ibas?. Por un momento se te había olvidado.

    Intentaste contestar pero la voz no salía de ti. Tomaste una profunda respiración y lo volviste a intentar.

    -A... mi casa- Te parecía tonto contestar eso, ya que era algo visible dado tu aspecto. Además, lo dijiste con un muy fino hilo de voz, por lo que dudaste si te había escuchado.

    Él empezó a caminar como si se supiese el camino, con tu bolsa en su mano. Te quedaste allí, completamente paralizdo. Se giró para mirarte.

    -¿Vienes?- Te preguntó, y tú solo pudiste asentir.

    Empezasteís a caminar, y él se dejaba guiar por ti.

    -¿Tienes nombre?- Bromeó, y tú de nuevo te sentiste sonrojar.

    “Me cago en todo”.

    -Guillermo-Te felicistaste internamente al ver que tu voz no había temblado.

    -Me gusta tu nombre, yo soy Alex, por cierto- Ibas a decir algo muy tonto, algo como '¿quién no sabría tu nombre?', pero te reprimiste antes de hacerlo.

    El camino era corto, pero esta vez, ante tus ojos parecía no tener fin. Cuando estabaís a punto de llegar, él totalmente confiando, te tendió su móvil frente a ti. Lo miraste algo dudoso.

    -¿Qué...?- Pero el te interrumpió antes de permitirte formular la pregunta.

    -Dame tu número- Por un segundo, te preguntaste si no habrías muerto e ido al cielo, ya que aquello no parecía para nada normal. La idea de pellizcarte para ver si no estabas durmiendo también parecía buena. Sin embargo no hiciste nada, salvo coger el teléfono y tímidamente apuntar tu número. Mientras estabas concentrado, él dijo algo que te paralizó todo el cuerpo.- Si a tu novio no le importa, claro.- ¿Por qué daba por sentado que te gustaban los hombres?. ¿Con ese comentario intentaba ligar con tigo?. ¿¡Qué pretendía?!.

    -N-No tengo... pareja- Dudaste al contestar. Estabas seguro de que estabas temblando de los nervios y el color rojizo no había abandonado tu rostro ni por un segundo.

    -No sabes lo feliz que me hace escuchar eso- Te dió una última sonrisa para después poner la bolsa en tus manos, y marcharse por donde había venido.

    Tú te permitiste quedarte unos segundos más en completo shock, sin saber que hacer. Querías saltar, gritar, te sentías feliz, aunque también aterrado y confuso. ¿Qué había pasado?.


    Fin Flasback.



    ¿Por qué se todo esto?. Porque a mi me habían roto el corazón también. Sin razón aparente, la persona que era mi mundo, rompió conmigo.
     
    Top
    .
  2. PinketDiana
        +1   +1   -1
     
    .

    User deleted


    Capítulo 2: Recordando.





    Guillermo




    Recuerdo que después de eso, Alex no dió señales durante tres días. Tres días de puro sufrimiento y nervis a flor de piel para mi. Cuando mi móvil sonó advirtiéndome de que tenía un mensaje, casi salté por los aires al ver que se trataba de Alex.


    ¿Salimos juntos?.




    Eso era todo, no había un hola, la típica pregunta del qué tal, nada. Sólo un '¿quieres salir conmigo?. En ese momento no hice otra cosa, salvo saltar como si fuese una niña de trece años. Me sentía tan nervioso que no pude responderle nada. Mi móvil temblaba entre mis manos y temía por caerme al suelo. ¡El chico que me gustaba desde hace tres años, me estaba pidiendo salir!. Vale, quizás no de la forma más romántica ni nada de eso, ¿pero quién lo necesita al fin y al cabo?.

    “Chaval, esto no puede ser posible”.

    Ahora, cada vez que pienso eso me entran ganas de pegarme a mi mismo. ¿Cómo pude ser tan idiota de sentirme así por un simple mensaje?. Pero es que yo era solo una persona enamorada, que no sabía las consecuencias que esto traía. Claro que no, no sabía nada, finalmente.



    Flasback.





    Contestaste un rápido 'Por mi está bien', y al minuto te reprendiste por esto. ¿Qué sensación querías dar con un 'Por mi está bien'?. ¡Eras tonto, chaval!. Suspiraste pesadamente, pero ya no había vuelta atrás. Esperaste con móvil en mano todo el día hasta que él te dijese algo.


    Hoy a las 8 p.m. Te paso a recoger.




    De nuevo te quedaste anonadado, sin saber que responder, así que asentiste para ti y tecleaste un rápido 'Ok'. ¡En ese momento creías que tus manos se saldrían de tu cuerpo al ver como temblaban!.

    Segundos después, cuando te pusiste a pensar en todo esto, te preguntaste dónde iríais. Él no había dicho nada de nada. Los nervios empezaron a aumentar- si es que eso era posible-. Las manos te sudaban y te sentías algo mareado incluso. Respiraste hondo para poder tranquilizarte, no funcionó, claramente.

    Dentro de ti, algo gritaba que ojala fuese un sitio público, donde hubiese mucha gente. No para presumir ni nada de eso, si no porque una parte de ti no confiaba completamente en Alex, y aunque quisiste eliminar esa parte, era bastante fuerte.

    A la hora de arreglarte, tu habitación parecía un mercadillo de ropa. Tu armario parecía haber escupido todo lo que tenía en su interior, pero tú seguías sin encontrar nada.

    “¿Qué me pongo para estar guapo?”- Dios, te sentías tan idiota por preguntar cosas como esas. Pero era una cita, ¿estaba bien preocuparse tanto, verdad?. Además, ¿esto era una cita, no?.


    “Chaval, que no es tiempo para esto”.- Inspiras. Expiras. Intentas calmarte, ya que estabas demasiado nervioso. No porque fuese tu primera salida -sin mencionar que era con un chico- si no porque era con Alex.

    Al final, cansado de ver tanta ropa, cogiste una camisa que viste más o menos decente y unos baqueros pegados, con tus zapatillas favoritas.


    A las ocho, hora en la que tu corazón amenazaba con salir de tu pecho, tu timbre sonó, y diste gracias a Dios porque tus padres no estaban en casa.


    -¿Vamos?- Su tono era seco y duro. Y al igual que con el mensaje, no había un hola, no un '¿qué tal?'. Nada. Al parecer Alex siempre iría a lo central del tema. ¿Eso estaba bien, verdad?.

    -S-Si- Genial, empezabas a tartamudear. ¿Esto seguiría así durante toda la 'cita'?.

    -¿Tartamudeas mucho, no?- Querías pensar que estaba bromeando, pero él estaba serio, además en su tono de voz no había nada que te demostrara aquello.

    No contestaste nada, pero desesperadamente, tu mirada bajó hasta el suelo, sin tener valor de mirar a cualquier otro lugar.

    Fuisteís a un restaurante familiar -y ahora que lo piensas era bastante simple-, que en ese día te parecía maravilloso, fantástico. Tomásteis asiento y rápidamente una camarera -quién no dudó en hacerle ojitos a Alex- se acercó a vosotros.

    -¿Qué quieren pedir?- Seguía mirando a Alex, y este le seguía el juego.

    Suspiraste, e intentaste ver como si no te importase nada de nada.

    -Yo un... filete de pechu- Creíste ver como Alex te miraba mal por lo que pediste, así que rápidamente dejaste de hablar.

    -Ensalada para los dos- Odiabas las verduras, pero no dijiste nada. Al fin y al cabo, él quería verduras.

    Después de esto, la cita pasó rápida. Tú no solías hablar nada, solo lo escuchabas a él también veías como los tonteos entre él y la camarera aumentaban, mas no decías nada. Y a las 11 p.m estabas en tu casa. Solo de nuevo. La cita te había parecido mágina, aunque no hubo beso, aunque él no te prestó mucha atención, a pesar de que odiabas las verduras y tuviste que comerte una ensalada -que parecía no acabar nunca-. Eran cosas tontas, porque estabas con Alex.




    Fin Flasback.





    “Qué jugase con otras, ¿estaba bien, no?. Mientras no te engañase....”- Ahora que recordaba cosas como esas, me sentía tan completamente tonto. ¿Por qué había pensado eso en su momento, aún cuando estaba claro que estaba horrible?. Estaba tan cegado.

    Me enredé aún más en las mantas, ya que sentía las primeras lágrimas aparecer.

    “Wow, yo pensaba que ya me había quedado sin agua en el cuerpo”.

    A partir de ese momento, todo giraba en torno a Alex. ¿Qué él quería salir un día que había quedado con mis amigas?. Mis amigas no eran lo importante, así que ponía una tonta excusa y me iba con él. ¿Qué mi madre necesitaba ayuda con la compra o cualquiera de eesas cosas que solía hacer?. Me 'surgía' tener que ir a hacer un trabajo o cualquier cosa relacionada con los estudios, a lo que ella no podía poner objeción alguna. ¿Qué mi padre quería tener una cena familiar?. Decía que no podía, que ya había cenado fuera y me iba con Alex. ¿Qué mi hermana me pedía ayuda con los deberes, o qué me quedase con ella a jugar?. No, Alex me necesitaba. Pronto mi mundo era Alex, Alex, Alex.
    ¿Alex quería algo y yo no tenía dinero?. Lo conseguía de donde sea. -De hecho, acabé con mis ahorros que tanto me costó tener. Más de diez años guardando dinero, y todo eso desapareció.- ¿Qué Alex se quejaba de algo?. Yo rápidamente lo intentaba cambiar.


    “Alex, Alex, Alex”- Eso era mi todo.


    Al principio fue molesto y duro ya que mis padres siempre me reclamaban el no haber estado en no-se-que-lugar, no haber hecho no-se-que-cosa, no asistir a las cenas familiares o cualquiera de esas cosas. Mi hermana se solía enfadar conmigo por no jugar con ella, por no ayudarla, por no hacerle caso en general. Mis amigos dejaban de hablarme durante un tiempo por que no les hacía caso.... pero eso, a la larga, cambió completamente. Mis padres dejaron de preocuparse de si venía a cenar, de si tenía que ir a no se donde, ya ni siquieran me pedían nada. Mi hermana dejó de hablarme automáticamente, no me volvió a pedir más ayuda o que jugase con ella. Nada, simplemente me ignoraba, como si yo no existiese. Y... mis amigos, de un día para otro, dejaron de llamar para ver si podía salir, en clase ya no me hablaban, y terminaron por alejarse de mi.

    Ahora que lo miro desde fuera, tenían toda la razón del mundo.


    También, por eso, mis notas bajaron. Yo no era un estudiante de diez o algo parecido, pero si solía ser de sietes, ochos y nueves, pero cuando Alex se acabó convirtiendo en el centro de todo, descuidé las notas. Abandoné completamente a mi familia y dejé de lado a mis amigos.

    Y ahora que Alex ya no estaba en mi vida, estaba completamente solo. Sin familia, amigos... nada.

    ¿Su razón para haber terminado con todo eso?. Un simple:


    -Lo siento, pero ya no es lo mismo...- Y así, tan rápido como vino, se fue. Bajó del escalón de mi casa, se dió media vuelta y se marchó. Alex ya no estaba. Y yo, como un tonto, me quedé en la puerta de mi casa, sin saber qué hacer o como reaccionar, si tan siquiera. Estaba totalmente en estado de Shock.

    Quería gritarle un 'No, no lo se', e ir y exigirle mil y una explicaciones, pero claramente, eso para mi no era posible. Sólo me quedaba quedarme callado, estático, déjandome caer en la peurta de mi casa, mientras veía como todo a mi alrededor se desmoronaba, dejándome completamente devastado y destrozado.
    Las ganas de morir vinieron a mi, de forma dolorosa, al igual que la angustia, el miedo y otros miles de sentimientos que me atormentaron. Aún siguen aquí, haciéndome compañía, mientras me oculto debajo de la almohada.

    Las lágrimas empiezan a caer de nuevo, saladas y finas, y yo... por primera vez en mucho tiempo, me digo a mi mismo, que con el tiempo no dolerá tanto.
     
    Top
    .
  3. PinketDiana
        +1   +1   -1
     
    .

    User deleted


    Capítulo 3: Etapas.



    Guillermo.




    Claramente, ahora que estoy con el corazón roto en miles de pedazos, que me siento debastado y dejo de estar completamente cegado me he dado cuenta de cómo era la relación en realidad, y no puedo parar de reprocharme por esto. ¿Cómo pude estar tan ciego aún cuando podía palpar la realidad con mis manos?.

    Él y yo no nos teníamos el mismo nivel de amor, si es que él sentía algo por mi. Estábamos totalmente desequilibrados, y quizás fue ese el problema. El hecho de que a mi me gustase desde hacía tantísimo tiempo, y por el contrario, yo a él mínimamente le interesaba.

    En estos momentos era cuando yo recordaba los malos tratos, los 'no hagas esto', los 'no te dejaré', los 'he dicho que no', el que no me dejase hacer nada, el no poder tener opinión. Todo. Y ahora, aunque no me considero para nada buen partido y que por supuesto no volveré a creer en el amor, es cuando remotamente me pregunto si yo no merecía a alguien mejor. Posiblemente no, aunque tampoco lo iba a buscar.

    “El amor se ha acabado para mi.”- Realmente ahora si le tenía miedo a enamorarme.

    Por supuesto que nadie te avisa de esto. Te avisan de que no debes tocar un enchufe, de que no puedes acercarte mucho al fuego, de que no debes contestar, te advierten de muchas cosas, pero no del profundo dolor de cuando te hacen añicos poco a poco. Nadie te advierte del amor. Tampoco te imaginas que se podría sentir cuando alguien te lo cuenta de todas formas, no al menos hasta que no lo sientes en tu propia piel.

    Hablando con mis amigos y amigas -antes, cuando podía contar con ellos- me percaté de que había muchas formas de superar una ruptura. Bien hay personas que se sumergen en su propio mundo, otras que se salvan con música o escribiendo, otras que se autoculpan y otras miles de maneras más. Cada persona tiene su forma de expresar el dolor y de esto también depende las distintas etapas o formas de superarla.

    Para mi siempre existen tres etapas, y son las que yo ahora estoy pasando.

    1) Negación.

    Esta es la típica etapa donde te dices a ti mismo que la relación no ha podido acabar, le escribes o le llamas con la esperanza de que te diga que todo era una broma o un error. Pero, una parte muy dentro de ti te dice que esto es real.
    Y cuando todo tú lo acepta es cuando va la siguiente etapa.

    2) Lamentación.

    Te has dado cuenta de que esa persona ya no aparecerá más en tu vida, y entonces lloras, te rompes, te culpas, te odias. No quieres que nadie te vea ni ver a nadie. Solo quieres estar acompañado de la soledad, de triste música, de lágrimas, de oscuridad. Quieres cobijarte bajo las sábanas y llorar por aquello que has perdido. Recordar miles de veces momentos a su lado. No importa cuantas lágrimas caigan, no importa que pienses que ya no queda más agua dentro de ti, siempre va a haber algo que haga que esas gotitas saladas salga como cascadas por tus ojos.

    Puede durar días, semanas, meses o incluso años.


    Y cuando consigues superar esta etapa, viene la aceptación.


    3) Aceptación.


    Por fin te has dado cuenta de que todo ha acabado, pero te cuesta hacerte a la idea de que ya no tienes nadie al lado. Los primeros días son difíciles y duros, te da miedo volver a caer en aquel desastre al que muchos llaman amor. Simplemente es una etapa complicada.


    Pero debes tener algo en cuenta, si no consigues superar etapa tras etapa, te obligarán ha hacerlo, como sucede conmigo.

    ….

    ….

    ….



    ¿Que por qué?. Todo por una maldita carta. Por las calificaciones.

    Yo sabía que este año mis estudios habbían estado paralizados por Alex, no estudiaba nada, no hacía tareas ni trabajos ya que todo mi tiempo era para Alex. Cuando Alex quería saliamos sin importar nada, si él no estaba conmigo yo estaba pendiente del móvil hasta que este sonase. Todo era Alex. Por eso no me sorprendía que mis notas hubiesen bajado pero... ¡¡No que hubiese suspendido 4 asignaturas!!.


    Realmente esta mañana ha sido una de las peores últimamente.
     
    Top
    .
  4. Jeagger
        +1   -1
     
    .

    User deleted


    Kyfskykhkvcfdkhckbjhvjvcrcrjh chnjhjbnhk

    Menudo fanfic *-* pobre Guille :c ojala aparezca ya samu ah darle duro 7u7

    Conty pls

    Pd: el mejor fic wigetta del mundo *~*
     
    Top
    .
  5. PinketDiana
        +1   -1
     
    .

    User deleted


    Más tarde subiré un nuevo capítulo <3
     
    Top
    .
  6. PinketDiana
        +1   -1
     
    .

    User deleted


    Capítulo 4: Bendita mañana.





    Guillermo.







    Flasback.


    Abriste los ojos y te preguntaste cuanto habías podido dormir, seguramente no mucho ya que te sentías enormemente cansado. Te dolían mucho los ojos y la cabeza. Suspiraste pesadamente, buscando algo de respiración. Estabas seguro de que tu voz sonaba ronca, y no solo por dormir, si no por haber llorando durante la noche.


    Te dejaste caer de nuevo sobre la almohada, buscando algo de paz. Sin lágrimas. Sin lamenos. Sin remordimientos. Solo algo de paz.


    Claramente eso era imposible.


    Escuchaste un fuerte golpe en tu puerta, y no pudiste evitar asutarte. ¿Qué quería ella ahora?.


    -Guille...- Ahí estaba tu hermana, con su pequeño vestido blanco con pequeñas flores, con una gran carta en la mano.



    “Eso no será...”- Un escalofrío recorrió tu cuerpo.


    Eso-no-podía-ser-eso. ¿¡Realmente las cosas podían ir peor?!.


    -¿Esto es tuyo?- Continuó ella preguntándote mientras suavemente te tendía el enorme sobre.


    Dudaste unos minutos en contestar, sin estar seguro de lo que decir.


    -Si...- Tu voz seguía sonando insegura.


    Y una pequeña y malvada sonrisa apareció en su rostro. Apartó el sobre y saltó de tu cama.


    “Lo sabía”- Te reprochaste.


    -¿Me puedes dar el sobre, por favor?- Sonaste molesto, tal y como estabas.


    Ella te miró por un segundo, llena de ternura. Seguramente -y aunque era bastante pequeña- debió ver tus hinchados ojos, pero eso no le bastó para nada.


    -Nop- Soltó una dulce carcajada y se volvió a subir a tu cama.


    -Vale, enana, acabemos con esto rápido. ¿Qué quieres a cambio del sobre, Carol?.- Hacía mucho tiempo que no habías dicho eso. Bueno, realmente hacía mucho tiempo que no estabas con tu hermana. Una sensación de calidez invadió tu pecho, pero desapareció al ver como, de nuevo, su sonrisa malvada aparecía.


    -Juega conmigo.- ¿¡Qué?!. ¿Aquello era broma?. ¿Tú te sentías morir y ella quería jugar?.



    “Como no lo haga, le enseñará eso a mis padres. Como eso ocurra estaré muerto”.



    -Chaval, ¿de verdad me obligarás a hacer eso?.- Ella sacudió el sobre delante tuyo.


    -He visto el contenido, no estoy muy segura de que quieras que se lo de a papa y mama.


    Vale, ella jugaba bien sus cartas.



    “Maldita sea”.



    -Está bien.- Contestaste con pesar- Jugaré contigo.


    Tu hermana río de forma breve y sarcástica.


    -Nop, ahora no, me tengo que ir a casa de Lorena.- Te puso la carta sobre tu mesa y salió de la habitación sin parar de reir.


    “Mierda”- Pensaste luego de abrir el sobre.


    ¡¡Te habían quedado 2!!. Dios, te matarían. Estabas totalmente seguro de que estabas muerto. Jodida-y-totalmente-muerto.




    “¿Qué más puede ir mal, chaval?”.
     
    Top
    .
  7. Dero-Dero
        +1   -1
     
    .

    User deleted


    nueva lectora :3 lo amóh xD pobre Guille y.y es tan triste bueno no sé como estuve tanto tiempo sin leer esto ;u; bueno espero la conty con ansias... si es que hay conty :3 adiós
     
    Top
    .
  8. PinketDiana
        +1   -1
     
    .

    User deleted


    QUOTE (Dero-Dero @ 28/2/2015, 23:26) 
    nueva lectora :3 lo amóh xD pobre Guille y.y es tan triste bueno no sé como estuve tanto tiempo sin leer esto ;u; bueno espero la conty con ansias... si es que hay conty :3 adiós

    Gracias x///x

    Mañana subiré otro <3
     
    Top
    .
  9. Dero-Dero
        +1   -1
     
    .

    User deleted


    mi lo espera... mi lo espera con ansias... xD
     
    Top
    .
  10. PinketDiana
        +1   +1   -1
     
    .

    User deleted


    Capítulo 5: Escuela de verano.




    Guillermo.




    Es oficial, estoy muerto, y no emocionalmente -aunque desde que todo terminó con Alex me siento así- si no, muerto muerto, de la manera física. Asesinado a sangre fría por unos furiosos padres. Sobretodo por mi padre, quién siempre está ilusionado y exigente sobre lo de la Universidad.


    Vale, mi única y maldita opción es la escuela de verano para recuperarlas y así poder pasar al siguiente curso sin repetir y sin ser asesinado. Pero hay un problema, un enorme problema. Claro que lo hay.


    ¡No tengo nada de dinero!. Todo se fue en Alex y en todo lo que él quería. Todos mis ahorros desde que tenía siete años se han esfumado. ¿Cómo conseguiría dinero para poder pagarme la escuela de verano?. La opción de contarselo a mis padres se esfumó cuando escondí mis notas en un estante tras el armario. Posiblemente me matarían cuando lo descubrieran y estoy seguro de que eso será tarde o temprano, pero mejor tarde. Así que esta vez debo salir de mi cama, aún arrastrándome por el suelo con todo el dolor que siento y buscar una salida a todo esto.


    “¡Que bien todo, chaval!”- Pienso de forma sarcástica mientras me dirijo a mi armario para sacar la ropa.


    Cojo lo primero que veo, sin importarme como me vea realmente. Cojo las llaves de casa, la cartera y salgo de casa. Primero iría a la escuela de verano, a apuntarme y todas esas cosas, después vería como pagarla -mayormente, porque antes debía saber cuanto costaba-.


    -Hola- Saludo cuando llego a la Oficina, y me siento tan pequeño y solo en este lugar que mi estado de ánimo decae un poco, si es que eso es posible.


    -Hola- Me saluda una anciana señora de vuelta.


    Tras un rato hablando, un formulario estaba frente mía. Un debate interno se abría en mi mente.


    “¿Debo hacerlo?”- Me pregunto una y otra vez. Tengo que hacerlo, pero no debo hacerlo. Jamás lo hice antes. ¿Falsificar la firma de mis padres cuando mis notas eran altas?. Nunca. Pero aquí estaba, sin saber qué hacer.


    He tomado la desición de desistir, darme la vuelta rápidamente y salir corriendo como si un monstruo me estuviese persiguiendo. Corriendo por mi vida.

    Sin embargo, antes de que pueda llevar a cabo esto, una mano me agarra.


    -¿Qué pasa contigo?- Es Rubén. Un chico moreno, alto y delgado. No es la primera vez que lo encuentro, ni tampoco la primera vez que hablo con él. Recuerdo una vez que me metí en no-se-que-lío me ayudó a salir de él. Es una de las personas más populares de todo nuestro instituto, pero él no se comporta como los típicos populares que se sienten superiores. Para nada. Él siempre ha sido amable conmigo y con todo el mundo en realidad, aunque no puedo llamarlo amigo por eso.


    Me doy cuenta de que todos los papeles que esa señora me ha dado se han caído al suelo y me agacho para recogerlos. Espero a que Rubén se de la vuelta y se marche pensando que estoy loco o que soy idiota, pero eso no pasa. Él me ayuda a recoger todo el desastre. Lo escucho suspirar y me vuelvo a sentir pequeño. Lo miro y me fijo en sus ojos tan verdes. Bajo aún más mi mirada y no puedo evitar fijarme en su sudadera. Es de varios colores y realmente me gusta. Me encanta esa sudadera, estoy seguro de que quedaría bien con cualquier cosa. Y entonces, siento vergüenza de mi mismo. Voy con cualquiero cosa que he encontrado en el armario...


    -Lo siento...- Susurro, e intento alzar mi voz.- Solo... me has asustado.- En realidad no es eso, son mil cosas, pero él no tiene porqué saberlo.


    -Sip- Sonríe y yo sigo mirando al suelo.- Lo he notado, pero...- Hace una pausa y siento como su mirada es intensa.- ¿Realmente estás bien?.


    Quiero decirle que no, quiero contarle todo, porque por alguna extraña razón algo me grita que puedo confiar en él.


    -Si, tranquilo.- Digo simplemente, y es que ¿para que molestar al mundo con mis problemas?.


    -Sinceramente no lo parece. Te ves pálido y bueno... no te ves exactamente bien.- Me vuelvo a sentir avergonzado, pero no quiero correr, porque se que él no me está juzgando si no... puede, y solo puede, que él se esté preocupando por mi. Y entonces, me encuentro a mi mismo llorando fuertemente, porque no tengo a nadie que se preocupe por mi, no tengo a nadie ya que lo perdí todo y es en este momento cuando todo ha colapsado dentro de mi.


    -¿Qué está mal?- Pregunta tras un rato, él aún me está abrazando y me siento bien. Pero no de una manera romántica -y entonces pienso que no quiero volver a caer en el amor otra vez- si no de una... manera de... amistad.


    -Yo...- Pero antes de poder volver a pronunciar palabra, vuelvo a llorar.


    -Hey, si es porque te gustan los chicos, tranquilo, creo que, aparte de que eso no importa, conozco a mucha, realmente mucha- remarcó la palabra 'mucha'- gente homosexual, de hecho en la escuela hay varias parejas y eso... Además, delante tuya estoy yo, un chico al que le gustan los chicos, así que no te precupes.- Mi boca se abrió tanto que creo que cayó al suelo, porque, primero no sabía que él era gay, segundo porque ¿tanta gente era homosexual?, por una parte eso me tranquilizó ya que muchas veces pensé que yo era el único... bueno..., él único al que le gustaban los chicos aquí, en este pequeño pueblo, y resulta que no, eso es un alivio, y tercero, porque él realmente está intentando animarme, aún si no tienen porque hacerlo...


    Realmente no sabía que decir, no era eso por lo que estaba así, claramente, pero me niego a decir algo así, ya que por una gran parte me he aliviado.


    -Yo... gracias- Es lo único que sale de mi.


    Entonces, él mira atentamente todos los papeles que sostengo entre mis manos y solo con mirarlo atentamente se que quiere preguntar, sus ojos parecen interesados.


    -¿Vienes a matricularte?.- Y tras esto, después de debatirme durante unos segundos, aunque para mi parecieron horas, sobre si debía contarle o no, lo hago. Le cuento todo. Le cuento lo de Alex, lo de mi dinero, lo de mis asignaturas, mi familia y amigos. Él escucha atentamente y no me interrumpe en ningún sentido.


    Siento como una carga abandona mis hombros con cada palabra que suelto y me siento algo más libre, pero la tristeza no ha desaparecido ni un poco.


    Estoy hablando de carrerilla y no estoy seguro de que Rubén me haya entendido todo, pero tampoco es que me importa. Es como si algo se hubiese activado en mi, algo que hacía que una vez que había empezado a habar no podía parar.


    -Wow- Fue todo lo que dijo cuando finalicé. Sus ojos estaban totalmente abiertos en una clara expreción de sorpresa.


    Yo sigo preguntándome qué fue lo que hice. Le conté todos mis secretos y cosas personales, incluídos sentimientos y destrozados problemas, a uno de los chicos más populares de todo el instituto, pero aún sigo sintiéndome algo más libre. Mi cabeza duele intensamente y estoy totalmente seguro de que mis ojos están completamente rojos.


    Estamos sentados en uno de los sillones frente a la oficina de la secretaria, quién parece haberme escuchado y se está acercando. Ella se para enfrente de nsotros.


    -¿Está todo bien aquí, verdad?- Pregunta algo extrañada y preocupada. Ella está mirando a Rubén y de nuevo me siento como si no existiese, pero eso pasa cuando Rubén empieza a hablar de mi.


    Él me mira y siento que con su mirada me está pidiendo perdón de antemano y que colabore con él, ya que me está lanzando una mirada cómplice.


    -¡No!.- Dice.- Nada está bien...- Hace un mohín y me pregunto qué es lo que estará planeando.- ¡Mónica!- ¡Oh, claro, él se sabe el nombre de la secretaria!. ¿Cómo no?. Chaval...- Los padres de mi amigo se están divorciando.- Mi boca se vuelve a abrir de una manera que no es normal.


    ¿Cómo?.


    ¿Qué?.


    ¿Cúando?.


    ¿Acaso yo he dicho algo de eso?. Porque si es así realmente debo de ir a ver a un psiquiatra o algo, porque yo no lo recuerdo. Además, eso no es verdad.


    “Y yo que pensaba que él estaba escuchándome...”


    Niego con mi cabeza, pero Rubén me coge del brazo y me vuelve a sentar. Siento como me da un golpe con la pierna.


    -Debe ser duro... sobretodo para ti. ¿Verdad?.- Ella me mira con pena, y odio eso. No quiero que nadie tenga compasión de mi.


    -Eso no es ver...- Pero antes de que, de nuevo, pueda decir algo, Rubén me vuelve a patear.


    “¡¡¡Parezco su puching-ball personal!!!”.


    -Pues si...- Continúa Rubén, quién me quita los papeles de mis manos y yo sigo allí, totalmente atontado y aturdido.- ¡No le prestan atención!. Imagina, que lo han mandado aquí solo, para rellenar todos estos papeles.- Es increible, él parece que esta triste de verdad. Wow.- ¡Incluso lo van a hacer pagar por si solo todo esto!.- ¡Él está mintiendo por mi!. Aún cuando, de nuevo, no tiene que hacerlo, ahí esta, a mi lado, mintiéndole a Mónica, por salvarme el culo.


    Mónica me mira con pena y de nuevo pienso que no quiero lástima.


    -Y como sabrás, ella necesita un plan de pagos o algo parecido para poder afrontar esto.- Mi boca de nuevo se abre, y hoy temo perder la mitad inferior ya que mi boca se ha habierto hoy tantas veces para reflejar sorpresa, que no las puedo contar.


    -¡Claro que si!- Es increíble, yo sigo aquí, atónito ante todo esto.


    Un rato más tarde salgo de allí, ya inscrito en mis dos clases de verano, para poder reforzarlas y así poder recuperarlas. Todo gracias a Rubén. También con un plan de pagos que se reduce a pagar cada mes una pequeña cantidad -en realidad no es tan pequeña, pero me siento realmente agradecido- durante los próximos tres meses.


    -Gracias- Es todo lo que puedo decir, mientras sigo analizando qué es lo que ha pasado allí.


    -Esto todavía no ha acabado.- Y aún, sin recuperarme de mi sorpresa, él me está arrastrando a-saber-donde.

    “Chaval..."
     
    Top
    .
  11. Dero-Dero
        +1   -1
     
    .

    User deleted


    Uhhh :3 lo amó es tan audnsnjdnwd espero la conty con ansias :3
     
    Top
    .
  12.     +1   -1
     
    .
    Avatar

    "Deseo escribir algo tan misterioso como un gato"
    Image and video hosting by TinyPic

    Group
    Member
    Posts
    1,147
    Location
    In Wonderland

    Status
    Anonymous
    AAW pon conti! quiero que aparezca lo wigetta!! lml andale pon conti
     
    Top
    .
  13. PinketDiana
        +1   -1
     
    .

    User deleted


    Capítulo 6: Trabajo.





    Guillermo.




    Y ahí estaba yo, siendo arrastrado por Rubén a-dios-sabe-donde, tan conmocionado que no podía ni objetar. Este seguía arrastrándome -literalmente- mientras yo le seguía sin protestar. Intenté hablar, de verdad que lo hice, y más de una vez, pero Rubén iba a lo suyo, y en ocasiones dudaba que recordase que yo aún seguía aquí, y que me estaba arrastrándo.


    -R-Rubén, ¿dónde vamos?- Por fin encontré mi voz para hablar, pero de poco sirvió, ya que él me seguía ignorando.


    De nuevo iba a preguntarle, pero entonces él se paró frente a un local de recreativos. Era bastante 'famoso' en nuestro pueblo, ya que era el único. ¿Para qué me traía aquí?.


    Dudé en preguntar, pero me dije a mi mismo que ya que estaba aquí, quería saber qué estaba pasando.


    -¿Qué estamos haciendo aquí?.- Volví a insistir, esperándo una respuesta.


    “Quiero irme corriendo a casa, meterme bajo las sábanas y no salir de allí en años, o mejor, nunca”.


    -¡Pues....!












    Y si, ahora estaba aquí sentado, esperando a que Rubén terminara de hablar con Diana.


    Miré a mi alrededor, y me quedé algo embobado. Esto estaba lleno, completamente lleno. La parte de la bolera era la que tenía más fama.


    -¡Ven, Guille!- Gritó Rubén de nuevo.


    Me levanté pesadamente de aquel banco donde me había sentado para intentar analizar todo eso y caminé hasta posicionarme a su lado.


    -¿Si?- Pregunté algo confuso.


    No se porqué habíamos venido aquí, y sinceramente, lo único que quería era volver a cas.a


    -Este es- Rubén seguía hablando con la muchacha de antes.


    Esta me analizó de arriba a abajo, y eso me hizo sentir muy incómodo. Odiaba eso, que me miraran tan detenidamente, me ponía tan nervioso...


    -Bueno....- Alejó a Rubén y yo me quedé solo de nuevo.


    Me quedé un rato mirándo al suelo y, en realidad a todos lados, pensando que hacía mucho tiempo que no venía aquí. Desde antes de haber empezado mi relación con Alex, mi familia y yo siempre solíamos pasar un 'día en familia' -como mi madre le decía- en los recreativos, y fue mi padre quién me enseñó a jugar a los bolos, y, cuando era invierno y traían la pista de patinaje, a patinar.


    “Pero... todo eso se esfumó”.


    -¡Bien!- Rubén, como si por arte de magia fuera, apareció de nuevo a mi lado.


    -Tendrá que cambiar un poco de pintas- De nuevo ambos estaban mirándome fijamente. Si, vale, estaba vestido con lo primero que había pillado... pero es que cuando te sientes muy -bastante- muerto, en lo que menos piensas es en que ropa te pondrás. ¿Es algo lógico, no?.


    Quería preguntar porque me estaban analizando de esa manera, pero entonces recordé las palabras que Rubén me había dicho antes de dirigirnos aquí, y en mi cabeza se escuchó algo así como un 'click'.


    ¡¡Rubén me había encontrado trabajo!!.


    “Wow”


    Él realmente no tenía porqué hacer eso, sin embargo, aquí estamos. Él no tendría ninguna responsabilidad sobre mi y...


    De pronto me sentí fatal. Solo sabía dar problemas, a mi familia, a mis amigos -si es que todavía tenía- e incluso a desconocidos. Soy un desastre...


    -Bien, pues entonces...- Ellos seguían hablando, y aunque sabía que era para mi, tenía la cabeza en cualquier otra parte.- Bueno, pero tiene que venir mejor vestido y arreglado, que aquí se interactuará con clientes... y tiene que estar presentable.- Eso fue lo último que escuché para después sentir como era sacado de aquel recinto.


    Atontando, le seguí.


    -Oye... yo... no tenías que haber hecho todo eso por mi.- Susurré.


    -Claro que si, lo necesitabas.- Me palmeó la espalda, pero yo aún no había terminado de hablar.


    -No, en serio, tú no tenías porqué hacerlo. Ni tan siquiera nos conocemos...- Él me interrumpió.


    -¡Claro que si!. Nos hemos visto varias veces en el instituto, tú siempre sueles estar leyendo o escuchando música.- Mostró una sonrisa y yo me sentí tremendamente avergonzado. ¿La gente me notaba?.


    Dejé eso de lado, por el momento.


    -Pero... ¿De todas formas, por qué lo has hecho?. Lo de mentir por mi, ayudarme a inscribirme y buscarme trabajo?.- Volví a insistir.


    -Lo de buscarte trabajo fue realmente fácil, además necesitamos ayuda allí dentro, ya que aunque no se note, es tremendamente estresante y una ayudita nunca viene mal.


    “Chaval....”


    -Y bueno... lo de mentir y eso...; mira, todos necesitamos ayuda en algún punto de nuestra vida, y solemos ser tan orgullosos, o también porque nos da miedo, que no podemos pedirla. Yo te vi mal, y quise ayudarte, ¿vale?- Me sentía tan idiota....


    -Yo... gracias, de verdad.- Las palabras casi no podían salir de mi.


    -¡Bueno, nos vemos en el trabajo!- Chaval... que eso suena muy extraño...


    -Adiós... y gracias, de nuevo- Me animo a decir, sintiéndome aún culpable.


    -¡Adiós!- Me sonrió una última vez, y entonces desapareció.


    Me doy la vuelta y comienzo a caminar aún preguntándome qué había pasado en el día de hoy, desde que me había levantado hasta este mismo instante, pero antes de que me de tiempo a eso, siento una mano en mi hombro.


    -Por cierto, mañana te espero a las diez en la puerta del centro comercial.- Me volvió a mirar de arriba a abajo, y aunque me sentí incómodo, se que no me estaba 'criticando', yo sabía mis pintas.... y estaba algo avergonzado.- Necesitamos cambiar tu vestuario ahora que trabajarás allí.- Y de nuevo, se dió la vuelta y desapareció corriendo.


    Y entonces, aún muy atóntado, anonadado y confundido, me doy la vuelta y camino, e intento pensar en cómo posiblemente voy a ir a la escuela de verano y trabajar por los siguientes meses cuando lo que realmente quiero hacer es estar en mi cama y no levantarme ni para ver la luz del día. ¿Cómo voy a enderezarme y seguir adelante, cuando todo lo que siento es tristeza y las ganas de llorar vienen a mi una y otra vez?.

    La desesperación vuelve a mi cuando llego a casa, y, sin pensarlo mucho, me encierro en mi cuarto y empiezo a llorar de nuevo.


    ---------------------

    ¡¡Muchas gracias por comentar :D

    Me alegro de que les guste >.< e intentaré actualizar más seguido n///n
     
    Top
    .
  14.     +1   -1
     
    .
    Avatar

    "Deseo escribir algo tan misterioso como un gato"
    Image and video hosting by TinyPic

    Group
    Member
    Posts
    1,147
    Location
    In Wonderland

    Status
    Anonymous
    Nuuu Guille anda emo!XC jaja conti espero que todo le salga bien XD esta muy chido jajaja ¿Agregaras lo de ser youtuber al fic?
     
    Top
    .
  15. Dero-Dero
        +1   -1
     
    .

    User deleted


    pobre Guille ;-; está muy triste, ay! Rubén es tan lindo :3 *////* bueno espero la continuación con ansias bye~ :3
     
    Top
    .
50 replies since 10/9/2014, 12:22   592 views
  Share  
.