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xLili_Jaeger
.User deleted
Hola a Todas!
Lamento mucho no haber podido subir el fic cuando lo prometi
pero la tarea y blah,blahblah, fueron un gran impedimento
Pero ya estoyaqui con un nuevo cap que espero os guste
Advertencias:
Naruto es propiedad de Sasuke-teme!
Y todos sus personajes son propiedad de Masashi Kishimoto-san
Yo solo uso sus personajes para mis locura y para hacer feliz a las fans del Sasunaru
todo esto sin animo de lucro
Así que sin más a Leer'ttebayo!
Aquí esta Luu-chan el capiNo me mates!!
PD: Te prometo que mas adelante pondre lemon
Intentando arreglar el presente II
Donceles, hombres con la capacidad de engendrar vida en su interior. Ello fue un gran hallazgo para la ciencia, y en general, para el mundo entero. Muchos médicos de gran prestigio así como grandes científicos, unieron sus prestigiosas mentes para hallar el por qué a tan grandeza, que un hombre diera vida era inconcebible, casi irreal, pero ahí, frente sus narices un joven de veintitrés años tenía una prueba de embarazo, irrefutable muestra de que ello era posible.
Aquel hallazgo marco un momento inolvidable en la historia, y de ello ya hacía casi veinte años. En ese momento el joven –de nombre Hijiri- tampoco daba cabida a todo lo que le decían en su momento pero él y su pareja –Kenshi- fueron felices, ese echo les llevaba a que a pesar de ser hombres podrían estar juntos y ser una familia “normal”.
Pero a pesar de aquello, esa noticia no fue bien recibida. Cuando se hizo pública su existencia, las personas –aquellos con mentes tan irrisoriamente pequeñas como para aceptar algo como aquello- iniciaron una “caza” a los “seres” capaces de dar vida sin ser mujeres. En ese momento el mundo empezó una gran lucha en la cual los afectados eran aquellos hombres cuyo don –del cual realmente no hallaban procedencia alguna- era el de traer vida al mundo.
Los donceles fueron perseguidos y maltratados, por el simple hecho de crear vida, y esa tortura la vivieron durante casi diez años. Los grandes mandos al ver que aquello empezaba a salirse de control –y que generaría muchas pérdidas- decidieron interceder y crear la organización P.A.D. (Protección y Ayuda a Donceles). Este proyecto salió a flote siete años después del descubrimiento del primer doncel, y aún en la actualidad sigue vigente.
Con el paso del tiempo, se consiguió dar ayuda a los donceles y conseguir que si bien aún no eran del todo aceptados –por aquellas personas que seguían en contra de que a “esos seres” se les permitiera algo- aun así no tuvieron más remedio que callar y aceptar. Leyes se crearon a favor de ellos y con el paso del tiempo se aprendió a convivir junto a los donceles –así como también se legalizo el matrimonio entre hombres-donceles (cabe decir que si uno de ellos no era doncel tampoco importaba)- Y a pesar de que a la sociedad le seguía incomodando aquella idea, unos lo decían públicamente, otros lo callaban y a otros les daba igual.oOoOo
Naruto Uzumaki Namikaze, hijo de Kushina Uzumaki y Minato Namikaze,y hermano menor de Deidara Uzumaki Namikaze.
El nacimiento de Naruto fue algo inesperado, así como también el que el pequeño Naruto tuviera los “genes especiales” –dicho de esa manera por las personas que aún no asumían su existencia- y más conocido como donceles. Fue un niño con una vida tranquila, ya que si bien sus padres no eran una familia que se daba el lujo de “derrochar el dinero” si eran gente de posición estable, más conocida como la clase media.
Naruto tuvo infinidad de amigos en su pequeña infancia, hasta que a la edad de siete años las cosas empezaron a cambiar. Y el motivo era que sus amigos más cercanos se enteraron de “aquello”.
El saber que Naruto era doncel y no –como ellos pensaban- un varón. Y no era que sus amigos lo despreciaran por ese hecho, todo lo contrario, el pequeño Naruto paso a ser “la” pequeña Naruto, y eso, aunado a que el joven Uzumaki era alguien muy orgulloso no soporto ese trato.
Sí, con todo el enfado que un niño de siete años puede tener –léase inflar sus sonrosadas mejillas, hacer puchero con sus labios y cruzarse de brazos- el pequeño Uzumaki no toleraba esas reacciones. Él era un hombre, lo sabía, tenía aquello que tenían los hombres-y lo decía porque había visto a su padre desnudo y comprobó que tenían los mismo, así como con Deidara, el cual también tenía lo mismo *aunque el de papa y Deidara era mucho más grande* pensaba el pequeño, así que no comprendía a que se debía es repentino cambio a que se hiciera daño, o mejor dicho tratarlo como una “damisela.” Sí, el sabia que era doncel, pero no por ello creía necesario recibir el trato de una chica, eso le molestaba y frustraba a partes iguales.
Cuando Naruto cumplió los doce años conoció a un joven de tez clara- muy blanca- y unos bonitos ojos negros –al igual que su pelo- le pareció alguien interesante y también guapo.
Cuando supo que irían al mismo salón se emocionó, ya que en su pequeña mente pensó que podría llegar a ser amigo de ese joven.
Pero la realidad era que el joven de ojos y pelo negro –muy bonitos al parecer de Naruto- era muy difícil de tratar, y la cosa se complicó cuando al cambiar de curso supo que Sasuke –nombre del chico- ya no iría a su salón.
Cuando Naruto tubo los catorce años, ya había conseguido “hablar” con Sasuke- claro, si a hablar, se le puede decir que se peleen como perro y gato cada dos por tres- Pero aún en medio de esa amistad/rivalidad consiguieron entablar un fuerte amistad, y es que Sasuke no lo trataba como la damisela en apuros, y eso a Naruto le gustaba, y le hacía sentir cositas “raras” en su estómago, por lo cual siempre pensó que debería decirle a Mama Kushina de ir al médico.
Con el paso del tiempo (y muchas más cosas) empezaron una relación, la cual no “acabo” como ellos pensó- aunque admitían que en su momento dudaron de que acabar.
Sasuke, se consideraba un hombre que sabía mantener la calma ante cualquier situación, pero realmente ni en sus más bizarros sueños –y tampoco en uno normal- hubiera pensado que se tendría hasta el punto de no saber qué decir, y todo, por ese diablillo al cual tenía el orgullo y emoción de llamar hijo.#Flash Back#
Una vez haber entrado en el departamento de Sasuke, Naruto sentía sus nervios a flor de piel, así que agradeció –y nadie se imagina cuanto- haber recibido una llamada de su primo, la cual atendió dejando a su pequeño junto a Sasuke. Y es ahí donde el pequeño calvario de Sasuke empezó.
Mientras él se sentó en un sofá individual, el pequeño opto por sentarse en un sofá de cuatro plazas frente suyo, y Sasuke, como buena persona –claro, era su hijo y ni en sus pesadillas trataría mal a su retoño- iba a ofrecerle algo a cuando el pequeño hablo.
-Tío Sasuke- Realmente odiaba que su hijo le llamara tío.- ¿No crees que papi Naru está muy guapo?- Sí. Eso realmente eso desconcentro a Sasuke, y es que esa pregunta no se la esperaba.
-¿Porque lo dices?- Estuvo (en su momento) tentado a decirle que sí, cuando en su mirada vio un brillo que él (como el auténtico padre) supo interpretar, y, como no hacerlo, si ese era el brillo que él tenia, y el cual significaba que intentaba leer las intenciones de la gente, así que determino que su “pequeño” niño intentaba saber que pretendía con Naruto. Ah! diablos, ese mocoso era una copia suya -era algo que no se cansaba de decir- con ese toque a Naruto, pero aun así sentía su piel enchinarse cuando veía al pequeño (en el poco tiempo que llevaba de verlo) tener reacciones que le caracterizaban solo a él. Fue, en ese momento, que en su corazón se instaló una pequeña (por no decir gran) espina de dolor ¿Que tanto se había perdido de ese pequeño que era algo tan idéntico a él? las ganas de decirle la verdad y abrazarlo se instalaron en su corazón, pero no podía, no aún.
Tenía, primero, que hablar con Naruto y luego, se encargaría de buscar una manera de hacerlo sin lastimar a nadie. Aunque también admitía que tenía ganas de llorar, no lo haría; ya no más; ahora tendría que reparar su error y buscar la manera de arreglarlo todo, ese era su propósito, y también el de comprobar a donde (y para que) quería llegar su pequeño hijo.
-Pero tío, estoy completamente seguro que piensas que papi está muy hermoso- Un escalofrío recorrió su espalda. El pequeño estaba usando una “táctica” de Naruto, esa vos tan “dulce” que lo único que buscaba era encandilarte i sacarte todas tus intenciones, eso y esa mirada calculadora que él conocía de memoria. Sí. Definitivamente ese pequeño era la mescla perfecta de Naruto y él. – Dime tío Sasuke ¿Qué opinas?
-Que llevas muchas razón, es más diría que con el paso del tiempo Naruto solo embellece más y más- Y ahí estaba, esa mueca tan suya de desagrado.
-Pero es una pena tío Sasuke, porque papi dijo que el único hombre que le interesa en su vida soy yo- Y si Sasuke no tuviera esa capacidad de no aparentar nada en su rostro, había (y estaba seguro que lo habría echo) mostrado la cara de estupefacción más grande e idiota de su repertorio. ¡El pequeño le restregaba en su cara que no tenía a Naruto! Y no solo eso ¡Le estaba echando en cara que no le iba a dejar tener su atención ni un minuto! (y obviamente lo sabía porque recordaba que en su juventud él le dijo esa misma frase a un idiota que pretendía quitarle a Naruto.)
-Por eso tío Sasuke, creo que es mejor que desistas de querer salir con mi papi, además de que no creo que seas su tipo…- Vale, si hasta hace un minuto quería abrazar a su hijo, ahora le quería enviar a la luna. ¿El mocoso le estaba llamando poca cosa? Y no solo eso, sino que le insinuaba que era ¿feo? Definitivamente en ese momento Sasuke no sabía si reír por la situación o en contra llorar por que su hijo le tratara así. -No tengo nada en contra tuya tío Sasuke, pero papi Naru es muy ingenuo, e incluso afirmaría que peca de ello, y por eso, yo como su hijo y buen Uchiha tengo el deber de proteger a papi de todo.- Recapitulando en pensamientos, se quedaba con la primera opción y por otro lado le daba un punto a su hijo por su reflexión, porque sí, era bien sabido por todos que el Uzumaki pecaba de ingenuo (a veces al grado de la idiotez) pero así amaba a su lindo rubio idiota.
Pero si bien la conversación le dejo descolocado el final, acabo con toda su capacidad de estoicismo, y dejo lucir su cara de asombro, al grado de abrir sus ojos al máximo e incluso su boca.
-Además, otro motivo es que alguien tan violable como lo es mi querido papi es un gran motivo para no dejarlo solo. Después de todo uno nunca sabe qué clase de pervertido quiera hacerle vete tú a saber que a alguien tan lindo y violable como papi Naru, así que expuesto estos puntos responde ¿Solo quieres sexo con papi o hay algo más?- Sí, Uchiha Sasuke de 25 años aún no estaba preparado para algo como eso.oOoOo
Cuando Naruto entro de vuelta al salón –cabe decir que él estuvo habalndo en la cocina- la cara de Sasuke le dio a entender que su “amadísimo” retoño había dicho algo, y él como su padre –eso y el conocerle demasiado bien- le dio a entender que su hijo había hecho de las suyas, y por la cara de Sasuke- el cual con poco y nada era muy difícil de sorprender- tenía en su rostro la mueca más expresiva (la cual aseguraba quizá no volvería a tener) de su vida.
Así que para ayuda psicológica de Sasuke -y la propia porque a saber que le había dicho Suzuki- decidió acudir al rescate de Sasuke.
-Sasuke…- En ese momento salió de su mundo de parálisis mental y le prestó atención a Naruto, pero pese a ello algo que no puedo evitar fue que sus mejillas enrojecieran un poco al recordar la palabras de su hijo, y por otro lado aquello a Naruto le dio mala espina.
-Papi, sabes estoy algo cansado, así que si a tío Sasuke no le molesta querría descasar en su habitación- Sí, el chiquillo era de armas tomar, y de ello Sasuke tubo la prueba, eso y que cuando le dio el permiso y paso por su lado, el pequeño le susurro un ~te vigilo tío Sasuke…~
¿Qué clase de genes le había heredado a su hijo?
Mientras que en la cabeza de Naruto el miedo a lo que su hijo le haya podido decir no le dejaba pensar con claridad, y la verdad le asustaba en cierta forma ya que si bien Suzuki, era pequeño, su niño era muy espabilado y también teniendo en cuenta los genes de quien –realmente- heredo… Ah, el rubio sentía que pronto lo daría dolor de cabeza, y profesaba que no iba a ser uno leve.
¿Qué clase de genes le había heredado a su hijo?
Mientras que en la cabeza de Naruto el miedo a lo que su hijo le haya podido decir no le dejaba pensar con claridad, y la verdad le asustaba en cierta forma ya que si bien Suzuki, era pequeño, su niño era muy espabilado y también teniendo en cuenta los genes de quien –realmente- heredo… Ah, el rubio sentía que pronto lo daría dolor de cabeza, y profesaba que no iba a ser uno leve.
Una vez los dos a solas en la habitación, Naruto se dedico a observar la habitación en un vago intento por olvidarse de los nervios que le atacaron, mientras que Sasuke por su marte intentaba pensar en una buena forma de abordar el tema que pretendía -y esperaba- arreglar en esos momentos.
En la mente de Naruto todo era un caos, es por ello que decidió empezar todo de una manera calma, realmente no quería armar un escándalo con el pequeño Suzuki tan cerca. Ni mucho menos que les oyera.
-Am... Sasuke, sea lo que sea que te haya dicho Ssuzuki, por favor no le hagas caso, aveces me pregunto de donde habrá sacado ese carácter... para su edad es muy direc-
-De su padre ¿no?- Aquello consiguió callar a Naruto, sí, saber que con ello Sasuke hacia referencia a Itachi dolía, pero el que podía hacer, no era su culpa que el moreno no le creyera, y ese precisamente era el motivo de su dolor saberse a los ojos de Sasuke un mentiroso.
-Sí, en eso llevas razón, es idéntico a su padre.- Sasuke noto con cuanta rabia y dolor arrastro su rubio aquellas palabras.- Pero dime ya de una vez para que me mandaste a llamar, no creo que sea para hablar de cosas del pasado ¿o si?- Ah.. su rubio con el tiempo había cambio y mucho, dejando de lado ese carácter inocente para pasar a tener una aura más madura, que si bien aun conservaba en su rostro ese toque infantil, ahora también se veían los rastros que dejaba el dolor mezclado con la madurez.
-Naruto, antes de morir Itachi...
-Mira Sasuke, da igual lo que te haya dicho o te haya escrito, pero eso a mi no me incumbe. Ya en su momento TÚ me dejaste en claro que no querías saber nada más de mi, y yo lo ice, así que ahora te pido por favor, olvida todo lo que el te haya dicho y déjame.. no mejor dicho déjanos en paz a los dos.
-¡Demonios Naruto déjame hablar!
-No Sasuke, solo deja...
-¡YA SE QUE SUZUKI ES MI HIJO, QUE REALMENTE ES MÍO!-No puedo evitar gritar aquello, pero el rubio no le dejo otra opción, se dio cuenta que se estaba alterando y de seguir así lo único que conseguiría sería que se chillaran y tener una discusión sin sentido.
-Que... -Los ojos de Naruto en aquel momento se habían abierto al máximo, sentía que todo eso tenía que ser una mala broma del destino, pero no... allí frente suyo estaba Sasuke diciéndole que su hermano, le había confesado que era su hijo, pero en ese momento lejos de tener paz porque el moreno supiera la verdad y quitarte el peso de la mentira de encima una rabia infinita creció en su interior, realmente sentía que odiaba a Sasuke.- Explícate.- Demando el Uzumaki con tono calmo.
-Primero siéntate.- Respondió el Uchiha, a lo cual el Uzumaki accedió sin rechistar.- Bien, la verdad es que la carta de Itachi la recibí dos días después de su muerte, mama me la entrego en nombre de Itachi, me dijo que era muy importante que la leyera, así que un poco reticente lo ice, y...-Llegados a este punto, y al notar que el Uzumaki no entendía mucho, decidió preguntar algo que de verdad espera una respuesta negativa por parte del blondo.- Naruto... tú... ¿Itachi te dijo la verdad en algún momento?
-¿Verdad? ¿De que me estas hablando Sasuke?- La cara del Uzumaki era todo un poema de intriga y curiosidad. ¿Verdad? ¿Que era aquello que Itachi le había estado ocultando? Su mente empezaba a doler e intentaba recordar si Itachi le confeso algo de gran importancia pero el no recordaba que algo por el estilo sucediera, es más no entendía nada. De repente vio como el Uchiha se dirigía a hacia una pequeña estantería y de entre un libro sacaba una carta -la cual suponía era la famosa carta escrita por Itachi- y se la entregaba.
-Léela.- Le dijo el Uchiha, por lo cual abrió el sobre y de inmediato la letra de su difunto esposo apareció en aquel papel. Miro al moreno para luego devolver la vista al papel entre sus manos y proceder a leer.
Por su parte, Sasuke aguardaba la reacción del Uzumaki, el cual a momentos dejaba relucir en su rostro la sorpresa, el dolor, la rabia, pero sobretodo tristeza.
Una vez el Uzumaki acabo de leer la carta la habitación se sumió en un silencio, el cual parecía, no se iba a romper sin dejar salir nada bueno.
Naruto no sabia que pensar de aquello que acababa de leer. Itachi, la persona en la que más confió, en la que creía nunca le fallaría le traiciono, le engaño y no solo eso, si no que a pesar de saber del dolor que sentía nunca le dijo nada. Todo por el simple echo de que se enamoro de él.
Pero no lo entendía, decía amarle y le sumió por tanto tiempo en dolor y llanto, y su error fue el de creer que nunca le traicionaría.
Lagrimas empezaron a brotar de sus ojos color cielo, y los sollozos cada vez eran más fuertes. Una traición por parte de la única personas a la cual tienes de tu lado duele, y mucho. Al levantar su vista vio la misma tristeza el los ojos onix de Sasule, y en aquel momento en el cual los dos se sentían tan dolidos y traicionados por la persona que se suponía, estaba de su lado, no dudo en levantarse del sofá -en el cual antes se había sentado su hijo- para ir hacía el cual ocupaba Sasuke y abrazarle.
Era un abrazo que los dos necesitaban, sus vidas, todo aquello que podían haber tenido se había ido a la mierda, solo por la mentira de alguien el cual decía amarlos, pero que en realidad les había mentido de una forma vil y que logro su cometido separarles.
Después de haber estado un rato en aquella posición -Naruto sentado sobre las piernas de Sasuke y abrazados- El rubio intento levantarse cosa que se vio interrumpida ya que el moreno había afianzado el agarre a la cintura del ojiazul. En ese momento, en el cual la lucidez del rubio volvió a estar cien por ciento activa y sus sentidos alerta, se dio cuenta que aquella posición no era muy adecuada. Porque si bien al momento en que su pequeño le advirtió a Sasuke que se colocara debidamente la camiseta este solo se encargó de abrochar dos botones del centro, y desde esa posición Naruto tenía una buena vista del cuerpo del moreno. Ese pensamiento hizo arder las mejillas del rubio e intento - sin mucho esfuerzo cabe decir- levantarse de aquella posición por demás comprometedora.
-Sasuke, suéltame.- Demando el rubio. ¿Soltarle? ¿Acaso creyó que dejaría escapar la oportunidad de -volver- a tenerlo acorralado entre sus brazos? No, eso ni en broma, por ello provoco más fuerza en su agarre disfrutando la cercanía de su cuerpo, y el olor tan delicioso que desprendía su rubio. Sabia,que estar de esa manera incomodaba al rubio, y eso le agradaba, sobretodo el ver ese sonrojo tan bello en sus mejillas.
-Dime, Naruto ¿porque debería hacer eso?- Pregunto el Uchiha con soberbia. Y a gusto de Naruto su voz sonó -demasiado- ronca y provocativa.
-Sasuke, no creas que el que me hayas enseñado este papel, cambia algo entre nosotros. Eso no quita que todo aquello que me dijiste cuando creíste que yo estaba con Itachi, y cuando tú no me creíste al decirte que este hijo era tuyo, este papel no va a borrar nada de eso y mucho menos va a hacer que te perdone. No Sasuke, si pensaste que eso iba a ocurrir te bajo de tu nube de fantasías y te digo que equivocas.-En aquel momento el moreno saco a relucir una de sus sonrisas de prepotencia y arrogancia -de aquellas que decían "lo se todo y eso también me lo veía venir así que no me sorprendes"- Como odiaba que el maldito bastardo siguiera igual de arrogante y presumido. Y sin saber como - porque entre oír la suave risilla del moreno, ver su torso blanquecino y bien formado y su sonrisa tan seductora- las defensas de Naruto quedaron al cero, y es por ello que el movimiento que hizo el moreno no lo vio venir.
En un abrir y cerrar de ojos, Naruto se encontraba sentado en el mullido sofá y Sasuke -y su magnifica pose de Dios griego- sobre él, y -por si eso le supiera a poco- entre sus piernas. Realmente era una pose muy indecorosa e imploraba -todo cualquier deidad posible- que su pequeño no apareciera en aquel momento y los pillara en una situación así (si bien no estaban haciendo nada malo, la posición en la que se encontraban no decía lo mismo). Mientras Naruto intentaba aparte con sus manos al moreno, este disfruta -y vaya que lo hacia- de tener a su rubia obsesión de aquella manera- por no decir (más bien afirmar) que amaba verle con la cara -y orejas- enrojecidas, sus labios en un puchero que a pesar de los años no desaparecía -el cual se le hacia sumamente encantador- y sus bellos zafiros con ese brillo tan encantador -nervios- y a pesar de los años su rubio no perdía el encanto y la facilidad de encandilarle con sus acciones.
-Lo se Naruto.- Aquella voz tan grabe provoco que los vellos de su nuca se erizaran al completo, y que una corriente de satisfacción sacudiera todo su cuerpo.- Es por ello que te lo digo, y escúchame bien porque te lo advierto.- Con firmeza agarro sus manos y empujo con delicadeza pero firmeza a la ves, el cuerpo del ojiazul hasta dejar que su espalda toque el respaldo del sofá y acercar su rostro al de Naruto, dejando sus labios a tan solo centímetros de los suyos y susurrarle:- Se que todo lo que te ice no tiene perdón, pero también se que te amo lo suficiente como para no dejarte ir, y es por ello que luchare por ti y si ase falta te volveré a enamorar; porque, escúchame bien Naruto Te amo y vas a volver a ser mío
El corazón de Naruto latía a una velocidad la cual sentía, que provocaría que su corazón saliera de su pecho. Aquellas palabras consiguieron -que si ya de por si sus defensas estaban bajas- no tuviera nada con que defenderse y por ello cuando Sasuke le dijo aquello sintió ganas de llorar de felicidad y abrazarle, pero no lo haría.
Aún no.
Al momento en el que el moreno hizo ademán de apartarse Naruto pensó que le dejaría libre. Error. En ese momento Sasuke aprovecho para cazar esos dulces labios y besarle con pasión y dulzura a la vez.
Y Naruto, él solo supo corresponder a aquel beso con la misma fuerza, anhelo y necesidad que el moreno.
Porque hay errores que quizá a pesar de pasar mucho tiempo aún tienen solución.
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ErroresErrores Tan común cometerlos Como también no darnos cuenta de ellos Hasta que es demasiado tarde. (SxN) |
