UNA NUEVA OPORTUNIDAD PARA AMARTE ^.^

Como reaccionarias cuando la persona que amas te deja por un tonto sueño? y si tu lo puedes cumplir? que pasaria si os reunis 5 años despues?.......Me llamo Naruto Uzumaki y esta es mi historia(mpreg)

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  1. Love-Yaoi
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    Como te quedarías después de saber que la persona a la que amas te ha dejado solo por un tonto sueño? Y si ese sueño se lo pudieras conceder? Qué pasaría si después de cinco años te vuelves a reunir con aquella persona a la que siempre amaste y mantuviste en el corazón? Pues eso me pasó a mi…
    Me llamo Naruto Uzumaki y esta es mi historia.


    Capitulo 1



    Una mirada al pasado.



    Aquellos ojos tan negros como la noche y aquel cabello tan negro como el carbón pertenecían a la persona de la que siempre estuve enamorado, como paso? Eso no lo sé pero…estoy profundamente colado hasta las trancas de ese chico…su nombre? Sasuke Uchiha, mi sempai. Su mirada intimidadora y fría me hipnotizó desde un primer momento, puede que sea porque fui el único capaz de ver a través de esos ojos…reflejaban dolor y deseo de venganza, dolía el mirarlo todos los días y que aquellos ojos tan hermosos demostraran la amargura y la soledad que sempai sentía, pensé que aquello nunca cambiaria sin embargo estuve tan equivocado todo este tiempo…

    Estaba en la biblioteca, tenía que coger unos libros para la próxima clase de biología si no lo mas probable que pasaría si no me ponía a estudiar era que suspendiera el trimestre y tendría que repetir el curso…en verdad los exámenes son difíciles y complicados, si yo fuera el director y no esa abuela rubia con grandes melones todo sería distinto, suspire derrotado sin darme cuenta de que estaba impidiendo el paso a algunas personas ya que no estaba ni de pie ni sentado…estaba tumbado en el suelo aburrido mientras comprobaba que aquellos libros eran los correctos.



    -Oye dobe apártate de mi camino…-esa voz…la conocía, me voltee a mirarlo y abrí los ojos con una expresión de sorpresa en mi rostro, era el… Uchiha-sempai!-




    -Uchiha-sempai?!? G-gomen…- me levante del suelo al mismo tiempo que note como el se me quedaba mirando con una cara de…sorpresa?.





    -Como…como sabes mi nombre?




    -Bu-bueno vera…es que usted es muy f-famoso en la escuela y…h-he oído mucho hablar de usted…me a-alegra conocerle en persona – aquellos ojos negros que tanto amaba me miraron con inexpresividad pero a mí no me importo, amaba a aquel pelinegro de tez blanca como la nieve y cabello negro como la noche.




    -Ah…interesante…y cuál es tu nombre dobe?




    -Mi nombre…me llamo Naruto Uzumaki y tengo 15 años




    -Genial…no te dije que dijeras tu edad pero no importa, bueno, tengo que irme, adiós- el cogió el libro que había buscado y tras esto desapareció por la puerta principal de la biblioteca, me quede allí parado, estuve así minutos sin darme cuenta de que iba anocheciendo y fue cuando volví a casa.

    El viaje fue largo como siempre, mis padres se empeñaron en llevarme al mejor colegio de todo Konoha y este se encontraba realmente lejos de mi casa, miraba por la ventana como las estrellas iban apareciendo en aquel negro cielo…tan parecido a los ojos de Sasuke-sempai…lo amaba y aunque sabía que el tenia novia podía sentir que solo me sonrió de aquella manera a mí. Llegue a casa y abrí la puerta encontrándome con mi madre la cual con una gran sonrisa me invito a pasar a la casa, sin duda entre y me dirigí hacia mi habitación para terminar la tarea, no me gustaban las matemáticas pero tengo que aprender rápido para ayudar a mi padre con su trabajo en las empresas.

    El ser hijo único no me daba todo los privilegios que yo quería, había más presión sobre mí, las lecciones eran demasiadas y quería llegar a ser adulto lo antes posible para acabar con aquella tortura que vivía día a día desde que tengo memoria.




    -Naru-chan a cenar! – aquella era la voz de mi madre llamándome desde la cocina, no dude en bajar y alegrarme al ver lo que había para cenar, Ramen casero y curry para cena…me encantaba la comida de mi madre!.




    -Itadakimasu~ -comente una vez sentando el mesa repitiendo a mis padres para servirme la cena y empezar a comer con tranquilidad.




    -Naruto, que has hecho hoy en la escuela? –pregunto mi padre, era la primera vez que hablaba desde que llegue a casa pero nunca cambiaba su gran sonrisa.




    -No mucho, hable con Sasuke-sempai en la biblioteca y cogí unos libros para los apuntes de Biología…si no me esfuerzo este trimestre reprobare la asignatura y no me gustaría eso…




    -Muy bien Naru-chan, mama está muy orgullosa de ti-comento mi progenitora abrazándome fuertemente a pesar de estar cenando…esas escenas eran comunes todos los días y aunque me molestara que me tratara como a un niño pequeño no me desagradaba ya que era mi madre y todo lo que hacía lo hacía por mi bien aunque…muy pronto cambiarían las cosas.




    -Ma-mama…suéltame…me aplastas…




    -Kushina…suelta al niño y termina de cenar…luego veremos una película los tres juntos, que os parece?-comentó mi padre con una gran sonrisa mientras nosotros asentíamos con la cabeza con emoción.

    Después de la cena toda la familia al completo recogimos la mesa y lavamos los trastes para después salir corriendo de la cocina hacia el sofá y encender la televisión. Mis padres me amaban y yo agradecía aquello, no quería ni cambiaría nada de ellos, eran perfectos tal como eran aunque a veces fueran algo…infantiles. Encendí la televisión mientras mi padre traía al salón un cuenco lleno de palomitas dulces, mis favoritas…amaba las cosas dulces tanto como las saladas pero en ese momento se me paso otra pregunta por la mente…a que sabrían los labios de Sasuke-sempai?. Al darme cuenta de lo que pensé no pude evitar sonrojarme y desvié la mirada solo para que mis padres no se dieran cuenta del color carmín que adornaba mis mejillas…estaba tan avergonzado por mis pensamientos, en verdad en ese momento quería morirme de la vergüenza.

    Las horas fueron pasando y aquella película parecía nunca acabar hasta el punto en que no lo aguante más y me quede profundamente dormido en el salón aunque, cuando fui al baño, me desperté en mi cama.
    Los días fueron pasando y con ellos los meses, yo había cumplido ya los dieciséis años y Sasuke-sempai y yo empezamos a salir pero en ese momento yo no sabía que él también estaba saliendo con otra muchacha de cabellos rosados y grandes ojos verdes llamada Sakura Haruno. Ella sería la persona que me destrozaría la vida por una razón realmente simple y dolorosa. Ella se iba a casar con Sasuke, el muy imbécil corto conmigo de la forma más dolorosa posible…me mandó un mensaje el cual nunca olvidare…quedara siempre en mi mente.




    “Naruto, soy Sasuke, me lo pase muy
    bien contigo estos meses, en verdad eres
    un buen juguete sexual aunque…ya no te necesito,
    voy a casarme con el amor de mi vida, una chica
    realmente linda llamada Sakura Haruno, nuestra boda
    será en dos meses a pesar de ser aun jóvenes, tu no eres
    digno de ser mi pareja y menos de tener herederos
    ya que no puedes.
    Hasta siempre dobe.
    Sasuke”




    Aquel mensaje tan doloroso siempre quedara en mi mente y será guardado para siempre en mi corazón destrozado debido a que el teme se equivocaba completamente, sí que podía tener herederos, en mi vientre, aunque yo en aquel momento no lo sabía, estaba creciendo un bebe, el fruto de aquellas noches alocadas de sexo y pasión que tuvimos Sasuke-sempai y yo. Desde ese momento mi vida daría un amargo giro inesperado y doloroso el cual tuve que enfrentar completamente solo.

    Llegue a casa tras salir de la consulta del médico, me había enterado de que estaba embarazado pero…cómo reaccionarían mis padres? Lo entenderían? Seguro que si…eso es lo que pensé pero pronto descubriría que estaba completamente equivocado.




    -Okaedi..-comente casi en un susurro cuando llegue a casa, mi madre y mi padre sentados en el sofá me miraban con cara de preocupación y no dudaron en llegar hacia mí y abrazarme con toda la fuerza que sus cuerpos les permitía, sentir esa acción de mis padres, el nudo en la garganta y las ganas de llorar hicieron que mi cuerpo se desplomara en el suelo y empezó a llorar como cual niño pequeño le quitan lo más preciado que ha tenido en su vida.




    -Naru-chan…cuéntale a mama que te pasa…no llores…-mi madre tan comprensiva se arrodillo a mi lado seguido de mi rubio progenitor mientras limpiaba mis lágrimas.




    -y-yo…yo lo siento…de verdad…no quería…s-se que odiáis a los homosexuales p-pero yo…lo siento…- con esas frases a mis padres se les vino el mundo encima, tan rápido como me abrazaron me soltaron y empezaron a mirarme con algo de repulsión,. Si, sabía que mis padres odiaban los homosexuales pero pensaba que al ser su hijo lo entendería pero fue completamente lo contrario…ahora entendía que aquello fue una mala idea cuando recibí aquella bofetada de mi padre, su mirada…nunca la quitare de mi mente y quisiera olvidarla…me miraba con todo el odio del mundo. No lo soporte más y cogí subí a mi habitación encerrándome en ella mientras mi llanto no cesaba y se intensificaba aún más. Primero el padre de él bebe que ahora llevaba dentro me abandonaba, luego mis padres…no me quedaba absolutamente nadie solo…podía ir a casa de mi padrino.

    Aquella noche cogí la bolsa de viaje que había preparado con ropa y demás cosas útiles a parte del dinero y la tarjeta de crédito que llevaba a mi nombre desde que era pequeño. Salí de la casa por la ventana de mi habitación y poco a poco fui desapareciendo entre la oscuridad de aquella noche de primavera, fría y gélida como mi corazón destrozado, pensé en todo lo que había pasado y decidí no decirle nada a nadie más. Cogí el primer tren que salía hacia fuera de Konoha hacia llegar a la ciudad de Tokyo, allí es donde viviría de allí en adelante, cuidaría a mi bebe y solos, el y yo, conseguiríamos salir adelante.

    Los meses fueron pasando con rapidez para mí y debido a mi condición no salí del pequeño departamento que logre alquilar desde que llegue a la gran ciudad, el tan esperado día , o inesperado para mí, había llegado, aproximadamente a las siete de la tarde desperté con un terrible dolor en la parte baja del vientre y este se intensifico poco a poco y tortuosamente hasta que sentí aquel liquido caliente y rojizo descender por mis piernas que flaqueaban…había llegado el momento, él bebe no tardaría en nacer y tenía que estar preparado. No llame a ningún hospital, tampoco tuve ayuda en el parto, yo solo me las arregle para traer a mi minúsculo bebe al mundo, solo con unas toallas y unas tijeras podría terminar con aquella tortura.

    Me arrodille enfrente del pequeño sofá que había en la sala, agarrándome fuerte de el para soltar el primer grito de dolor acompañado de un fuerte empujón provocado por la dolorosa contracción que se intensificaba en mi cadera y me desgarraba por dentro, y seguí así no se por cuantas horas hasta que la cabeza de la criatura empezó a asomar por mi entrada, con miedo coloque las manos en aquella zona notándola húmeda, no mire mis manos…sabía que estaban llenas de sangre y volví a empujar con todas las fuerzas que ya mi debilitado cuerpo podía dar. Solo hicieron falta unos cuantos empujones igual de fuertes para sentir como un peso muerto caía sobre mis manos y tras esto un débil llanto se hacía presente en la habitación, con temor acerque aquella criatura húmeda y rosada a mi pecho viendo que era realmente pequeña, lo que más resaltaba de su pequeño cuerpecito era que el cabello azabache…tan parecido al de su padre…No lloraría otra vez, tenía que olvidarme en el…nuestro amor, o al menos el mío, tenía que quedarse en el pasado. Corte aquel cordón molesto que unía mi cuerpo con el del bebe y tras esto adolorido me levante del suelo envolviendo a la criaturita en unas toallas y fui hacia la cama acostándome en ella.




    -Yuki…-fue lo único que pronuncie antes de caer en la cama inconsciente, oyendo como la tormenta de nieve que se hallaba afuera intensificaba su fiereza mientras yo, agotado, abrazaba al bebe en mis brazos, como si intentara protegerlo y así evitar que me lo quitaran.






    ~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~4 años despues~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~




    -Yuki! Vamos baja llegamos tarde!- grite esperando a que la menor bajara por las escaleras, ya habían pasado cuatro años desde que todo aquello ocurrió y ahora tenía a mi lado una linda niña, de largos cabellos azabaches amarrados siempre en dos coletas, piel blanca como la nieve y grandes ojos azules. La menor se llamaba Yuki Uzumaki y era la niñita de mis ojos, a pesar de ser la viva imagen del imbécil de su padre no me importaba, la amaba tal y com era y al menos compartíamos los mismos gustos y aficiones ya que a pesar de tener distinta apariencia coincidíamos en los gustos y las aficiones, era como tener una pequeña yo en la casa, corriendo de arriba abajo y riendo con alegría.

    Yo a mis veinte años no había cambiado mucho, era un poco más alto, más delgado y mi cuerpo se parecía más al de una mujer, deje crecer mi cabello levemente y ahora lo llevaba amarrado en una pequeña coleta. Por suerte logre terminar la universidad en Tokio y ahora trabajaba en un jardín de niños donde también asistía mi hija, por ahora todo era perfecto pero ese día…algo en mi vida iba a cambiar y dependía de mis decisiones el que fuera una cosa buena o se volviera mi pesadilla.




    -Ya voy mami! – aquella dulce vocecita logro sacarme de mis pensamientos y mire a la azabache con dulzura, le ayude a ponerse su abrigo junto a su bufanda, sus pequeños guantes para segundos después salir de nuestro departamento y dirigirnos, ella a su jardín y yo a mi trabajo.


    Tardamos quince minutos en ir andando hacia aquella guardería en donde trabajaba, deje a mi pequeña en su correspondiente clase antes de marcharme a mi aula…echaría mucho de menos a mi pequeña mientras estaba en el trabajo aunque la vería en los almuerzos. Hoy llegaba un niño nuevo a la guardería el cual recibí con una gran sonrisa sin embargo, al levantar la vista y ver al hombre que lo acompañaba me quede petrificado…era el…era el hombre del que estuve enamorado todo este tiempo, el que me abandono por casarse solo con una mujer para así tener herederos, el padre de mi hija…mi sempai de la secundaria, Sasuke Uchiha.
     
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20 replies since 19/10/2014, 19:34   1289 views
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