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Aulu+2
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"Me tienes en tus manos y me lees lo mismo que un libro. Sabes lo que yo ignoro y me dices las cosas que no me digo." (J.S)
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Los personajes de Junjou Romantica pertenecen a la gran Shungiku Nakamura. Capítulo 1
Actividades extraacadémicas
Los ojos de Misaki comenzaron a abrirse lentamente, ya debía de ser hora de alistarse para ir a la universidad. Le extrañó no haber escuchado la alarma del despertador por lo que pensó que quizá se había despertado antes de la hora. Intentó volver a dormir pero algo lo inquietaba. Aún somnoliento sintió la calidez de otro cuerpo junto al suyo. Abrió bien los ojos y se dio con la sorpresa de que estaba en un cuarto lleno de juguetes y osos de peluches. No había duda, estaba en el cuarto de su casero. Dio la vuelta lentamente y se encontró con el rostro Akihiko quien aún dormía plácidamente.
Maldito Usagi, nuevamente me has traído hasta tu cuarto mientras dormía – pensó Misaki mientras revisaba su cuerpo por encima del piyama para verificar que “todo estuviera en orden”
Al parecer no pasó nada…después de todo ayer era la entrega del manuscrito y ha dormido poco esta semana…¡Me salvé! –se dijo a si mismo Misaki.
Misaki, animado, pretendía salir de la cama para dirigirse a su habitación cuando unos brazos lo rodearon y lo volvieron a acomodar debajo de las sábanas.
¿A dónde crees que vas? –preguntó Akihiko aún con los ojos cerrados.
¡Usagi, ya te he dicho que no te hagas el dormido! Además, tengo que ir a la universidad, no sé ni qué hora es gracias a tu gran idea de traerme a tu cuarto –se quejó el menor.
Esta semana te he extrañado mucho…¿y tú? ¿cuánto me has extrañado? –interrogó Akihiko mientras comenzaba a levantar el polo de Misaki y a rozar con sus manos el pecho de su uke.
Usa…gi...no hagas esas preguntas…en verdad…me…tengo que ir…- Akihiko con sus acciones tornó el rostro de Misaki de un color carmín.
Misaki se movía inquieto. Por más que lo negara en verdad había extrañado el tener contacto con el escritor. El tiempo transcurrido había vuelto a Misaki más sensible a las caricias de su seme.
Ríndete –susurró Akihiko en la oreja de Misaki.
Akihiko se posicionó encima de Misaki y disfrutó de la vista que tenía: el rostro de Misaki coloreado de un tono carmín, sus ojos color esmeralda que reflejaban deseo y su pecho que se movía a un rápido compás producto de su agitada respiración.
Akihiko acercó su rostro al de Misaki y comenzó a besarlo. Esa mañana compensaría todos los besos y caricias que no había podido darle a su uke en esa odiosa semana de trabajo.
Ah…ah…-gemía Misaki al sentir la mano de Akihiko bajando por su vientre.
La mano de Akihiko no tardó en agarrar la hombría de Misaki. Empezó a masturbarlo con un vaivén lento para luego aumentar el ritmo.
Usagi…si sigues….yo… -avisó el menor
Akihiko procedió entonces bajar su rostro para saborear el miembro de Misaki lo que le arrancó un profundo gemido de placer.
Ahhhh…Usagi…no… -
Casi al momento Misaki dejó escapar toda su semilla en los labios de Akihiko quien bebió hasta la última gota.
Al parecer me habías extrañado más de lo que pensé –comentó Akihiko en un tono burlón pero a la vez seductor.
…- Misaki no contestó. El aire le faltaba debido al profundo orgasmo que acababa de experimentar. Ahora el turno de Akihiko.
Akihiko, primero, terminó de desvestir al menor para luego despojarse de sus prendas. Su mano se dirigió a la entrada de su uke y un dedo ingresó en el cálido interior de Misaki.
Ah…ah…ah…-gemía el menor rendido ante el placer que su seme le hacía experimentar.
Cuando al fin tres fueron los dedos que lograron ingresar al interior del menor el miembro de Akihiko reclamaba atención. El mayor entonces dirigió su erecto miembro a la entrada de Misaki y comenzó a empujarlo hacia el interior. Misaki sintió como el palpitante miembro de Usagi terminaba de crecer aún más dentro de él.
A los gemidos de Misaki se unieron las profundas respiraciones de Usagi. El vaivén de sus cuerpos unidos a la perfección había empezado. Primero, con un ritmo lento. Luego, las caderas de Akihiko aceleraron para que el contacto sea lo más profundo y placentero posible.
Te amo Misaki –
Usagi…yo…-
Misaki no pudo terminar de hablar. Nuevamente una oleada de placer recorrió su cuerpo. Terminó en la mano de Akihiko y este en el interior de Misaki.
Akihiko retiró su miembro de la cavidad de Misaki. Al ver que su uke aún no se recomponía de su segundo orgasmo lo acomodó en la cama y se sentó a su lado.
¿Seguirás negando lo mucho que me extrañaste? –dijo Akihiko
¡Lo niego rotundamente! –respondió un avergonzado Misaki que se tapaba la cara con una almohada.
Iré a darme un baño, ¿quieres venir? –preguntó pícaramente Akihiko
¡No! A esta hora debería estar en clase, no perderé más tiempo –dijo tercamente Misaki quien intentó levantarse de la cama pero el dolor en la parte baja que siempre le ocasionaba el tener relaciones se lo impidió.
Descansa un momento, iré a bañarme y luego haré el desayuno –Akihiko se levantó y salió de la habitación no sin antes darle un beso en la frente a Misaki.
¿Akihiko hará el desayuno? Hoy, definitivamente, no es un buen día –pensó Misaki.
La mañana transcurrió con calma en el departamento del escritor. Luego de bañarse Misaki desayunó con Akihiko quien, al parecer, había mejorado bastante en la cocina. Al menos la comida no estaba ni cruda ni quemada. Misaki preparó y dejó listo el almuerzo en el refrigerador y rápidamente se alistó para ir a la universidad. Había perdido las clases de la mañana pero podía hacer que el día fuera algo productivo si al menos iba a las clases de la tarde.
Usagi, ya me tengo que ir a la universidad. Dejé el almuerzo en la nevera así que sólo caliéntalo cuando tengas hambre –
Yo te llevo. Son sólo cinco minutos en mi… –
auto deportivo rojo –dijeron al unísono.
Misaki había escuchado esa frase salir mil veces de la boca del escritor. Y sabía que no aceptaría un no como respuesta.
Nos vemos para cenar –dijo Misaki mientras bajaba del carro de Akihiko cuando llegaron a la puerta de la universidad.
Que tengas un buen día –le contestó Akihiko con una sonrisa. El sol de la tarde iluminaba su rostro y acentuaba el contraste entre el color de sus ojos y su cabello.
Gra…gracias –respondió Misaki ruborizado ante tal escena. Akihiko era atractivo y si se le sumaba un gesto como ese era capaz de poner nervioso a su tímido Misaki.
Al ingresar a la universidad se dio con la sorpresa que había una especie de feria. Stands con diferentes nombres de lo que parecían ser talleres estaban colocados en la parte central de la universidad. Los alumnos iban y venían emocionados de un lado a otro.
Misaki, ¿cómo estás? Pensé que ya no vendrías –le dijo Sumi-sempai al verlo. Él, con un aire fresco y despreocupado, llevaba su maletín de la universidad sobre el hombro.
Hola, es que…tuve… un pequeño retraso –imágenes de lo que ocurrió en el cuarto de Akihiko llegaron a su mente.
Voy a matar a Usagi –pensó Misaki.
¿Qué…qué es todo esto? –preguntó nerviosamente Misaki, mirando el tumulto, tanto para cambiar de tema como para quitarse la curiosidad.
¿Lo olvidaste? Hoy es la inscripción a las actividades extraacadémicas. Ayer te mencioné algo al respecto –
…-Misaki quedó en shock.
Su memoria finalmente reaccionó. Por ello había dormido en su cuarto y puesto el despertador. Tenía que haber ido temprano a la universidad para inscribirse. Oscuros pensamientos hacía Akihiko invadieron su mente.
Bueno, si no pude inscribirme supongo que podrá ser para la siguiente ocasión ¿no? –preguntó Misaki simulando estar relajado.
Mmm…Tienes que llevar al menos 2 en toda tu carrera y este es tu último año. Si no ingresas este ciclo a al menos una eso quiere decir que el próximo tendrías que llevar dos. Lo cual es prácticamente imposible ya que casi siempre el horario en que todas las actividades se realizan es el mismo para que no existan quejas de los alumnos –
Misaki desesperado se dirigió al stand del taller de cocina. Si había un taller que podría pasar fácilmente era ese pero ya estaba lleno. También ya habían llenado sus vacantes los talleres de repostería, manga, pintura y todas las opciones que Misaki había tenido en mente. Sólo quedaba cupo en uno que otro taller.
¿Qué tal te fue? ¿Lograste encontrar algo? –preguntó Sumi-sempai al ver a Misaki regresar de su desesperada incursión.
Solo hay tres talleres que tienen cupos –contestó desanimado.
¿Cuáles son? -
El de hockey, el de oratoria y el de teatro…-Misaki no lograba imaginarse en ninguno de esos.
Pues escoge rápido porque ya están empezando a guardar sus cosas. Además, ya deberías estar en el salón –
Misaki volteó y con horror pudo comprobar que lo que decía Sumi-sempai era cierto. No sabía cuál decisión tomar pero tomando en cuenta las tres opciones creyó ver claramente cuál era la opción correcta. Sacó un lapicero y escribió
rápidamente su nombre en una de las fichas de inscripción.
Edited by Aulu - 9/7/2015, 20:36
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ConsecuenciasMisaki, involucrado en una obra de teatro de su universidad. Akihiko, siempre poniendo las cosas a su favor ¿Qué saldrá de todo esto? / Terminado / Advertencia: Lemon y Mpreg |
