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Dark Angel †+1
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me senté en la encimera de la cocina,observando a mi mama preparar la cena,miro el reloj y empezó a entrar ligeramente en pánico.Sabia porque lo hacia,mi papa debía estar en casa en exactamente 16 minutos y a el le gustaba que la cena estuviera en la mesa tan pronto como entrara.
shindou se acerco,jugando con su balón de soccer
shindou:Mama ¿puedo ir a casa de tsurugi a jugar?.-pregunto,lanzando le una mirada de cachorro.
ella miro el reloj de nuevo y sacudió la cabeza.
Mama:No ahora,Shindou,la cena no tardara mucho y necesitamos comer como familia.-se estremeció ligeramente mientras hablaba.
la cara de shindou cayo,pero asintió y vino a sentarse a mi lado,inmediatamente le arrebate el balón y me reí cuando jadeo y me lo arrebato de vuelta ,sonriendo.Mi hermano Mayor era muy lindo, cabello gris ondulado y ojos grandes y cafes.El era el mejor,Siempre me cuidaba en casa y en la escuela ,se aseguraba de que nadie me molestara.El único que podía hacerlo era el y en menor medida su amigo tsurugi,que vivía en la casa de al lado.
shindou: Dime Tenma ¿Necesitas ayuda con tu tarea ?.-dijo codeándome.Shindou tenia 10 años y yo 8,asi que siempre me ayudaba con los trabajos de la escuela
tenma:nop,no tengo tarea.-le sonrei
Mama: niños pongan la por mi,ya saben como ¿De acuerdo?.-pidio Mama
shindou y yo nos bajamos de la ensimera y agarramos las cosas,dirigiendonos a la sala comedor Mi papá era muy particular sobre todo, si todo no estaba exactamente bien, se enojaba y nadie quería eso. Mi mamá siempre decía que mi papá tenía un trabajo estresante. Siempre se enojaba con facilidad si hacíamos algo mal. Si has escuchado ese dicho: “Los niños deberían ser vistos y no oídos”, bueno, mi papá llevaba eso a otro extremo. En su lugar, le gustaba: “Los niños no deberían ser vistos u oídos”. A las cinco treinta llegaba a casa todos los días, comía la cena de inmediato, y luego Shindou y yo éramos enviados a nuestras habitaciones, en donde jugábamos en silencio hasta las siete y treinta cuando teníamos que ir a la cama.
Odiaba esta hora del día. Todo estaba bien hasta que él llegaba a casa, y luego todos cambiábamos. Shindou siempre se quedaba en silencio y no sonreía. Mi mamá tenía esa mirada es su cara, como de miedo o preocupación, y empezaba a correr de aquí para allá ahuecando los cojines sobre el sofá. Yo siempre me quedaba allí y deseaba silenciosamente que pudiera esconderme en mi habitación y nunca salir.
Shindou y yo pusimos la mesa y luego nos sentamos en silencio, esperando que el clic de la puerta señalara que él estaba en casa. Podía sentir mi estómago revoloteando, mis manos empezando a sudar mientras rezaba en mi cabeza que él hubiera tenido un buen día y estuviera normal esta noche. Algunas veces, en estaba en un humor realmente bueno y abrazaba. Me decía el niño tan especial que era, y lo mucho que me quería. Eso sucedía normalmente los domingos. Mi mamá y Shindou iban a la práctica de soccer y me quedaba en casa con mi padre por que era muy pequeño aun para el entrenamiento. Aquellos Domingos eran los peores, pero no le dije jamás a nadie de esos días, y lo mucho que me tocaba y me decía lo tierno que era. Odiaba esos días, y deseaba que los fines de semana nunca llegaran. Prefería mucho más que fuera un día de escuela cuando sólo lo veíamos para la hora de la cena. Definitivamente prefería cuando me miraba con ojos enojados, que cuando me mira con ojos suaves. No me gusta en absoluto, me hacía sentir incómodo, siempre hacía que me temblaran las manos. Afortunadamente, sin embargo, hoy apenas era lunes, así que tenía casi una semana antes de que tuviera que preocuparme por eso de nuevo.
Un par de minutos después, él entró. Shindou me lanzó una mirada que me decía que me comportara y sostuvo mi mano bajo la mesa. Mi padre tenía cabello gris, del mismo color del de Shindou. Tenía ojos marrones, y siempre tenía el ceño fruncido.
—Hola, niños —dijo en su ruidosa y profunda voz. Un estremecimiento se deslizó por mi columna cuando habló. Puso su maletín a un lado y tomó asiento a la cabeza de la mesa. Intenté no mostrar ninguna reacción; de hecho, intenté no moverme para nada. Siempre parecía que era yo el que metía a todos en problemas o hacía algo mal.
Siempre parecía que era yo el que empeoraba las cosas para todos. No solía ser así, solía ser el niño de papi, pero desde que empezó su trabajo, hace tres años, cambió. Nuestra relación con él cambió por completo. Él todavía me favorecía por encima de Shindou, pero cuando venía del trabajo, era como si quisiera pretender que Shindou y yo no estábamos allí. La forma en que miraba a Shindou algunas veces era como si estuviera deseando que no existiera, hacía que me doliera el estómago verlo mirar a mi hermano de esa forma.
—Hola, papá —respondimos ambos al mismo tiempo. Justo entonces, mi mamá vino cargando la pasta y un plato de pan con ajo.
—Esto se ve bien —dijo él, dándole una sonrisa. Todos empezamos a comer en silencio e intenté no moverme incómodamente en mi lugar—. Entonces, ¿cómo estuvo la escuela, Shindou? —le preguntó a mi hermano.
Shindou levantó la mirada nerviosamente.
—Estuvo bien, gracias. Tsurugi y yo entramos al equipo de soccer en Raimon—empezó a decir, pero mi papá asintió, sin escuchar.
—Eso es genial, hijo —interrumpió él—. ¿Qué hay de ti Tenma ? —preguntó, volviendo su mirada hacia mí.
¡Oh, Dios! De acuerdo, sé cortés, no divagues.
—Bien, gracias —respondí calladamente.
—¡Habla más alto, niño! —gritó.
Me estremecí con su tono, preguntándome si iba a pegarme, o quizá me enviaría a la cama sin cenar.
—Estuvo bien, gracias —repetí un poco más fuerte.
Él frunció el ceño y luego se volvió hacia mi mamá, que estaba estrujándose las
manos nerviosamente.
—Entonces, Querida, ¿qué has estado haciendo hoy? —preguntó, comiendo su cena.
—Bueno, fui al supermercado y conseguí ese shampoo que te gusta, y luego planché un poco —respondió mi mamá rápidamente. Sonaba como una respuesta preparada, siempre hacía eso, tenía sus respuestas listas de modo que no fuera a decir nada inapropiado que lo hiciera enojar.
Extendí la mano por mi bebida, pero no estaba observando apropiadamente y la volqué, derramando el contenido sobre la mesa. Los ojos de todos volaron hacia mi padre, que se levantó de un salto de su silla.
—¡Mi'erda!Pedazo de Idiota! —gruñó, agarrándome del brazo y empujándome bruscamente de la mesa. De repente mi espalda golpeó la pared, el dolor me atravesó y me mordí el labio para dejar de llorar. Llorar lo empeoraba todo, él odiaba que llorara, decía que solo los débiles lloraban. Lo vi apartar su mano; iba a golpearme. Sostuve el aliento esperando el golpe, sabiendo que no había nada que pudiera hacer más que soportarlo, igual que siempre.
Mi hermano se levantó de un salto de su silla y se abalanzó sobre mí, envolviendo con fuerza sus brazos a mí alrededor, cubriéndome. La suya estaba hacia mi padre mientras me protegía.
—¡Suéltalo, Shindou! ¡Necesita aprender a ser más cuidadoso! —gritó mi padre, agarrando a Shindou de su ropa y lanzándolo al piso. Me abofeteó, enviándome al piso, luego se volvió hacia Shindou y lo pateó en la pierna, haciéndolo gemir—. ¡No te metas en mi camino de nuevo, pequeño pedazo de ****! —le gritó ,
mientras estaba acurrucado en una bola en el piso.
Lágrimas silenciosas corrían por mi cara. No podía soportar ver herido a mi hermano mayor ; él sólo estaba intentando protegerme. Shindou siempre hacía eso.
Cuando me metía en problemas, él provocaba a mi padre de modo que la tomara contra él en su lugar.
Mi padre levantó su plato y su bebida, caminó a zancadas hacía la sala para terminar su comida, murmurando algo sobre nosotros siendo “los peores niños en el mundo” y “cómo infiernos se pudo quedar atrapado en esta vida”.
Me arrastré hasta mi hermano y envolví mis brazos alrededor suyo con fuerza, aferrándome a él como si mi vida dependiera de ello. Él gimió y se levanto para sentarse, abrazándome de vuelta, frotando su mano por mi mejilla punzante.
Continuara...
Edited by Dark Angel † - 20/1/2015, 20:07
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Huruna-chan Nova .
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wauuuuu !!!!
q intrigante tu finc e interesante
espero conty !!!
pobre de tenma y shindou
eso es maltrato q lo demande !!!!!
ya lejos yo de la politica jejeje espero el conty con muchas ganas y animos jejej. -
kyouten:D .
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será hijo de su mama, que padre pegaría a su hijo por semejante tontería .!!!.....
nanami (yo): jeje donde estas papi~ ?- cara de psicópata y con un cuchillo carnicero en la mano*
Tsurugi: voy contigo .....nadie pega a MI TENMA!! - con la guadaña*
tenma: o.o !!??4
......espero conti muy rápido!! mucho animo!!
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Kyoma Tsurugi Matsukaze .
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Shindo y Tenma no se merecen ese trato seras hijo de fruta, q lo demanden
nadie le pega a Tenma,
Esta muy bueno esperó Conty. -
meyer sayestian99 .
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Hola
Que clase de padre es ese q puede maltratar así a sus hijos q horror...q carácterq ttiene ese padre es como si fuera un ánimal...encima abusa sexualmente de Tenma...
Pero xq es así q le pasa a ese tipo alguien debe enseñarle una buena lección.
Me gusta tu fic esta muy interesante.
Esperó con ancias la Conty.
Bye.. -
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que clase de padre hace eso pobre tenma y shidou
OJALA QUE PAGE
CONTINUA SE PONE Interesante. -
sweet kyouten † .
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MALASSSS NOTICIASSSSS DARK ANGEL ESTA EN DEPRECION Y NO LE DARA CONTY,pero Lo bueno es que yo le voy a dar conty ella me lo pidio
— Lo siento, Shindou. Lo siento — murmure en voz baja, llorando sobre su hombro.
El negó con la cabeza
— Esta bien Tenma. No es culpa tuya — dijo con voz ronca, me dio una pequeña sonrisa y tratando de ponerse de pie, gimiendo. Me puse de pie con un salto y le ayude a levantarse. Podía oír movimiento, así que levante la mirada para ver que mi madre estaba limpiando la mesa frenéticamente.
— Lleven su cena a sus cuartos y comen, ¿bien? — ordeno, besándonos a los dos en la mejilla. Ella tenía que ir donde mi padre y hacer control de daños, el estaría de mal humor por mi error y ella tenía que calmarlo antes de que pasase algo mas—. Los veré en la mañana. Los quiero a los dos. Por favor estén callados, y pase lo que pase, quédense en sus habitaciones. — ordeno, rápidamente besándonos otra vez y entregándonos nuestras cenas a medio comer, antes de empujarnos hacia el vestíbulo trasero.
Teníamos una buena casa, cuatro dormitorios y todo estaba en un nivel. Mi padre ganaba un buen dinero por lo que vivíamos en una bonita zona, pero preferiría que la casa fuera más pequeña así no tuviera que trabajar en ese empleo. Puede entonces que fuera como el viejo Papa, llevándonos al parque y comprándonos juguetes y dulces. Shindou vino a mi habitación y comimos en silencio, sentándonos en el suelo cerca de mi cama. Tomo mi mano con fuerza cuando oímos a mi padre gritar a mi madre desde el salón, algo se rompió y me estremecí. Esto era totalmente culpa mía.
Empecé a sollozar así que Shindou envolvió su brazo alrededor de mi hombro, apretando suavemente. El siempre parecía mucho mayor que yo; era más maduro que yo.
— Esta bien. Todo está bien. No te preocupes— susurro acariciándo mi cabeza. Una vez que me calme, y los gritos habían cesados, jugamos a las cartas por un rato.
Cuando estábamos a la mitad del juego, escuchamos pisadas fuertes viniendo por el vestíbulo. Shindou se puso rígido cuando los pasos pasaron por mi puerta. No se detuvieron sin embargo, gracias a Dios. Deje escapar el aliento que no me di cuenta que estaba aguantando y mire a Shindou, quien esbozo una pequeña sonrisa.
— Mejor me voy a mi habitación, son pasadas las siete — dijo mirando mi despertador —. Cierra con llave tu puerta— susurro, esperando ahí, observándome.
Cerré la puerta con llave rápidamente como me dijo. Poniendo mi oreja en la madera, escuché para asegurarme de que Shindou hiciera lo mismo con la suya. Volví corriendo a mi cama y me tiré sobre ella, llorando silenciosamente. No podía parar, estaba sollozando y sollozando. ¡Había sido *beep* esta noche e hice que hiriera a mi hermano otra vez! Y probablemente a mi madre también, por el sonido de los ruidos en el salón.
De repente, se produjo un rasguño, un ruido golpeando en mi ventana. Abrí mis ojos de golpe para ver a Tsurugi fuera, mirándome con tristeza. Me levanté y corrí hacia mi ventana la abrí y la deslicé hacia arriba silenciosamente preguntándome qué demonios estaba haciendo aquí. ¿No debería estar en su casa?
— ¿Tsurugi, qué estás haciendo aquí? ¡Tienes que irte, ahora!—le grité susurrando, sacudiendo mi cabeza con fuerza. Pero el solo trepó a mi habitación por la ventana, cerrándolo silenciosamente detrás de él.
Contuve la respiración, mirando a mi puerta con los ojos muy abiertos. Si mi padre lo atrapaba aquí se iba a volver loco, no le gustaba que Tsurugi viniera y jugara en nuestra casa, siempre decía que era muy ruidoso.
—¡ Tsurugi,sal ! —susurré, desesperadamente intentando empujarlo devuelta hacia la ventana. Me estremecí, preguntándome que haría mi padre si hubiera escuchado abrirse la ventana y supiera que Tsurugi, estaba aquí. Tsurugi no se movió; simplemente envolvió sus brazos alrededor mio con fuerza y me atrajo contra su pecho. Traté de empujarlo, pero él solo me sostuvo con más fuerza.
—Está bien —susurró, acariciando mi pelo. Empecé a llorar otra vez en su pecho; pensamientos de Shindou siendo herido antes inundaron mi cabeza.
Tsurugi era alto para su edad; tenía diez años, igual que Shindou. Ellos eran mejores amigos, y lo habían sido desde que nos mudamos hace cuatro años. Tenía el pelo azul y ojos color ámbar que eran como ventanas a su alma. Cuando Tsurugi te miraba te hacia sentir como si pudieras volar. Era muy lindo; todas las chicas estaban locas por el por alguna razón. Tsurugi y yo, sin embargo, no nos llevábamos del todo bien. Él se burlaba de mí todo el tiempo, me pone la zancadilla y tiene esta molesta costumbre de llamarme Bebe, me llamó así desde el momento en que me conoció y realmente me molesta.
¿Qué dem*onios estaba haciendo aquí ahora? ¿Y por qué estaba abrazándome? Tal vez pensó que esta era la habitación de Shindou, tal vez se acercó a la ventana equivocada —pero no podía estar en lo cierto porque la habitación de Shindou estaba en la otra parte del vestíbulo, su ventana daba al patio trasero.
Me eché hacia atrás para mirarlo. Por alguna razón él se veía tan triste; tenía lágrimas en sus ojos mientras se limitaba a seguir abrazándome. Él sabía sobre mi padre, Shindou había sido cubierto por moratones una vez y le soltó la verdad a él. Shindou y yo le rogamos que no dijera nada, sin embargo, nunca lo ha hecho.
—¿Qué estás haciendo aquí,Tsurugi? —susurré, limpiándome la cara, pero las lágrimas siguieron cayendo.
Me tiró sobre la cama, meciéndome suavemente, igual que Shindou siempre hacia cuando lloraba. Miré su pecho y me di cuenta que estaba usando shorts y camiseta roja. Fruncí el ceño, un poco confundida en cuanto ha por qué tendría puesto eso, hacía mucho frío fuera. Entonces me di cuenta de que estaba usando su pijama. Miré al reloj para ver que eran casi las ocho y media. Había estado llorando durante más de una hora.
—Te vi a través de la ventana. Solo quería venir y asegurarme de que estabas bien —susurró a su vez, todavía abrazándome con fuerza.
Volvía mirar a la ventana. La habitación de Tsurugi estaba directamente en frente de la mía y podía ver en su habitación, lo que significaba que él podía ver en la mía. Me mordí el labio, oh Dios me había visto llorando, tengo que verme tan débil para él. Las únicas personas ante las que alguna vez había llorado eran mi madre y Shindou.
—Estoy bien. Tienes que irte —susurré empujándole otra vez, tratando de sacarlo de la cama.
Se limitó a negar con su cabeza.
—No me voy hasta que dejes de llorar —declaró, tirándome hacia abajo de manera que ahora estábamos tumbados en mi cama, uno enfrente del otro. Tenía sus brazos envueltos alrededor mío tan fuerte que ni siquiera podía retorcerme. Me sentí seguro y caliente. Me deslicé aún más cerca de él, presionando todo mi cuerpo con el suyo y sollocé en su pecho.
Me desperté a la mañana, todavía fuertemente envuelta en sus brazos; di un grito ahogado y miré al reloj 6:20 a.m.
—¡Tsurugi! —susurré, sacudiéndolo.
—Ahh, ¿qué, Mamá? —preguntó con sus ojos cerrados.
—¡Shhh! —siseé, rápidamente cubriendo su boca antes de que hablase otra vez. No puedo creer que nos quedásemos dormidos, esto está tan mal. Sus ojos se abrieron de golpe y me miró, sorprendido, luego miró alrededor de mi habitación.
—Oh no, ¿me quedé dormido? —susurró, sentándose y pasándose la mano por su pelo, que estaba levantado por todas partes pero en realidad se veía bien.
—Tienes que ir a casa, Tsurugi. ¡Rápido! —siseé, empujándolo hacía la ventana. La abrió y empezó a trepar fuera pero agarré su mano haciendo que se detuviera. Levantó la vista hacia mí una expresión confundida en su cara.
—Gracias —susurré, sonriéndole . Realmente necesitaba ese abrazo la otra noche, esa fue probablemente la cosa más bonita que Tsurugi alguna vez había hecho por mí. Él me devolvió la sonrisa.
—De nada, Bebe —respondió, sonriendo y saliendo.
Vi como pasaba por el agujero en la valla y volvió a subir a su propia ventana. La cerró y me saludó, le devolví el saludo y luego fui a vestirme. El pensamiento de Tsurugi viniendo a escondidas aquí y estando en la casa sin permiso, hizo que mi estómago doliera. Tuvimos mucha suerte de no ser atrapados. Me aterraba pensar que habría sucedido si sus padres hubieran ido a su habitación a la noche y hubieran visto su cama vacía, o que habría pasado si no me hubiera despertado temprano. Me estremecí al pensar en lo que mi padre haría si hubiera entrado aquí para encontrar a Tsurugi en la casa durante la noche.. -
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GRACIAS POR SUBIRLO
sweet kyouten 
ESPERO QUE SE ENCUNTRE BIEN DARK ANGEL Y QUE SE RECUPERE DE SU DEPRESION SABE
QUE LAS FUJOSHIS LA APOYAMOS...
CONTINUA...... -
sweet kyouten †+2 .
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VAYAA la razon por que le dio depre es que ya no puede acceder a su cuenta en mundo yaoi, olvido la contraseña y cuando intento recuperarla.siempre decia ERROR o surgía otro problema,luego lanzo el notebook por la ventana,maldijo un poco y mando todo a la mierda,ahora esta mejor pero se la pasa en un rincon con un aura oscura que me asusta y es por eso que yo deberé subir los conty. 
5 años después..
Me desperté con la familiar sensación de ser aplastado; me retorcí, empujando mi hombro hacia atrás. Tsurugi movió su peso ligeramente. Estaba abrazándome en cucharita por detrás, respirando profundamente. Su pesado brazo cubriéndome, sujetando mis brazos en mi pecho, sostenía mi mano apretadamente, nuestros dedos entrelazados, su pierna tirada casualmente sobre mí. Rápidamente silencié la alarma de mi teléfono y lo codeé en el estómago.
"Seis en punto " murmuré somnolientamente, cerrando los ojos.
"Diez minutos más, Bebe. Todavía estoy cansado "murmuró él, empujándome más fuerte contra su pecho.
"Nop, no diez minutos más. La última vez se convirtió en una hora y Shindou casi te atrapa aquí " murmuré, codeándolo en el estómago una vez más.
Movió su brazo e inmovilizó mis manos en la cama cerca de mi cabeza, en una posición de oración.
"¡Sólo diez minutos más, Bebe! "se quejó. Suspiré y cerré los ojos de nuevo. No había forma de discutir con él cuando estaba así, simplemente no tenía la energía a esta hora de la mañana para pelear con él. Ambos nos deslizamos de nuevo en el sueño, instantáneamente.
"¡Tenma, será mejor que ya estés listo!" gritó mi hermano, golpeando la puerta.
Me levanté de un salto y también Tsurugi, era más de las siete.
"Eh… sí, estoy listo " grité en respuesta, mirando a Tsurugi que estaba frotándose la cara, luciendo un poco aturdido.
"Bien. Voy a desayunar. Apúrate. llamó Shindou a través de la puerta, antes de caminar a zancadas por el pasillo.
"Caray, Tenma, ¿por qué no me despertaste?" acusó Tsurugi, frunciendo el ceño.
le di mi mejor mirada de muerte.
"¡Lo hice, ! ¡Dijiste “diez minutos más” y luego me inmovilizaste en la cama para evitar que te codeara!" gruñí sarcásticamente, haciendo una mala imitación de su voz.
Él sonrió burlonamente y me empujó de vuelta a la cama, sujetando mis manos sobre mi cabeza y rodando sobre mí.
"¿Te inmovilicé en la cama? ¿Estabas soñando conmigo otra vez, Tenma? Podría hacerte ese sueño realidad " se mofó, con su rostro a centímetros del mío.Me sonroje
"¡Ya quisieras! Ahora, apártate de mí y ve a alistarte" siseé, asintiendo hacia la ventana. Él suspiró y se levantó de mí, poniéndose sus jeans y camiseta. Trepó por la ventana, silenciosamente, cerrándola detrás de sí al irse. Caminé hacia ella y la aseguré antes de dirigirme a la ducha más rápida de todos los tiempos.
Exactamente veintiséis minutos después, caminé con dificultad hacia la cocina, con un ceño fruncido, Tsurugi ya estaba allí, apoyándose casualmente contra la encimera, comiéndose mi cereal. ¡Mal*dita sea, todas las mañanas!.
¿Retardado esta mañana, Bebe? ?preguntó con una sonrisa de suficiencia.
Le lancé una mirada de muerte, haciéndolo sonreír burlonamente.
"¿Por qué te estás comiendo mi cereal de nuevo? ¿No tienes comida en casa?" pregunté, arrebatando la taza de sus manos y comiéndome el contenido. Él sólo me observó con una sonrisa divertida.
Shindou me lanzó una caja de jugo.
"Si te ves un poco tenso esta mañana ¿Todo va bien?" preguntó, mirándome un poco preocupado. Miré a Tsurugi una vez más mientras él empezaba a reírse. Por supuesto que me veía tenso,¡CASI NOS DESCUBREN!
"Me quedé dormido" murmuré
Shindou no tenía idea que Tsurugi dormía en mi habitación conmigo cada noche, si fuera así, enloquecería. Shindou siempre era protector conmigo, siempre lo había sido, pero había empeorado desde que mi papá se fue . Bueno, dije se fue, pero la verdad era que Shindou y Tsurugi habían llegado a casa temprano del soccer un día para ver que mi padre me había dejado sin sentido, y estaba intentando violarme. Shindou finalmente caído en cuenta y él y Tsurugi le habían dado una paliza, casi matándolo en el proceso. Lo habían echado de la casa y le habían dicho que si alguna vez regresaba, lo matarían.. -
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aaaaaaaaa siento no comentar antes pero tuve problems y no puede
en fin me encanta y ese hijo de perr* como se le atreve a hacer a mi tenmi yo si lo mato a ese hijo de su mama
porque una daku con cuchillo es muy peligrosa...ejem.. si bueno
me encanto quiero conti... 
matta-nee
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jejej me encanta que duerman juntos (oshe si)
esi maldito como pudo hacer eso ya que bueno que vino shidou y tsurugi a tiempo...
pore dark angle eso si seria feo olvidar tu contraseña ojala la recuerde pronto
espero la continuacion me encanto
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Aceptar que la muerte está en todos lados, tranquiliza, porque sabes que tarde o temprano vas a morir
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SEEEE VEIAA VENIR QUE QUERIAA VIOLAAAAR AL UKE DE MI AMOR CABRON DE MIERDA!!!!!!! diossss le cortaria el cuello a ee cabron descerebrado :'') jajj recien leo el fic y me ha dustado muchísimo, tanto la intro de Dark angel, como tus capitulo sweet Kyoten enserio espero que se recupere de su depresión :3 dksljflasjflasjfl buenoo buenooo no se que decir, jaja na es broma jooo Shindou que monooo *-* esres un buen hermano protegiendo a Tenmita *-* y Kyousukeee ohh dios mioo *-* cada vez que te veo me corroo!! <3 ok no jajaja XD si que lo quiero al mi rebelde *-* Que cucki cuando se echaba con tenma por las noches ohhhh es como hago un yolo para verte*--* Litaralmente lo podria haber matado el padre si lo ubiera visto :'') bueno espero la conti ansiosaa tiaaaa ldkjfakdsljfajfj #SAYOO <3 . -
sweet kyouten †+1 .
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Nunca regresó, sin embargo, eso fue hace ya 2 años. Un poco después de eso, mi mamá consiguió un trabajo en una enorme firma electrónica, era la asistente personal del director, así que viajaba mucho. Se iba dos veces más de lo que estaba aquí, de modo que sólo la veíamos por cerca de una semana al mes, si algo. Shindou era mi única supervisión, aunque a veces era más como que yo estaba intentando cuidar de él.
Tsurugi también era muy protector conmigo, pero todavía no nos llevábamos bien, incluso aunque él literalmente pasó cada noche envuelto a mi alrededor en la cama por los últimos 5 años. Se había vuelto a escabullir en mi habitación la noche siguiente de verme llorar de nuevo y habíamos terminado durmiéndonos una vez más. Después de dos semanas se había vuelto una cosa normal. No era algo de lo que habláramos nunca, solo dejaba mi ventana sin seguro y él entraba una vez que sus padres revisaran que él estuviera dormido. Jamás nos habían atrapado. Habíamos estado cerca un par de veces, sin embargo. Hace un par de años, la mamá de Tsurugi había encontrado su cama vacía, pero él había mentido, diciendo que se había escapado a una fiesta y se había quedado en la casa de un amigo. Nadie sospechó que estaba al lado, conmigo.
Él todavía me molestaba como loco y me molestaba tanto como lo hacía cuando éramos niños, pero yo siempre supe que él estaría ahí para mí si lo necesitaba. Era como si él tuviera doble personalidad. De día, me molestaba, volviéndome loco y enojándome todo el tiempo, y de noche, era el chico más dulce en el mundo y me abrazaba, haciéndome sentir a salvo.
"Te ves sexy hoy" dijo Tsurugi, con su sonrisa patentada, mirándome de arriba abajo lentamente, haciéndome retorcer.
No me veía sexy. caminé hasta la entrada,dirigiendome a la escuela raimon,caminaba tranquilamente cuando senti que alguien corria tras de mi era Tsurugi.
-Tenma!!Esperame Bebe!!grito Tsurugi corriendo tras de mi.
No queria estar con el,siempre que vamos juntos al llegar me aplasta la horda de chicas que gustan de Tsurugi,ademas por su culpa las chicas me molestan en la escuela porque se la pasa pegado a mi y a ellas las ignora.Corri a toda velocidad tratando de que se quedara atrás,pero el es mas alto y veloz que yo asi que no tardo mucho en alcanzarme.intente acelerar pasamos por una calle y no vi que un auto venia a toda velociodad hacia mi.
-¡¡¡TENMAAAAA!!!grito tsurugi. -
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ese tsurugi loquillo
como lo dejas en la mejor parte
no quiero que le pase nada a tenma
continua porfavor. -
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esta bueno no bueno no bueniosimo pero muy corto 
pobre tenma a de sufrir un monton y no podria decir quese lo que se siente jejej xD pero en fin
me encanta
sayonara
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El-chico-que-se-escabulle-por-la-ventana-de-mi-habitacion(kyouten)no se describir bien XD |
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